Pregunta 2 ¿Qué ventajas y desventajas considera usted que tienen los productos mínimamente

procesados que se comercializan en Cuba?

Entre las ventajas de los productos mínimamente procesados figuran la reducción del espacio
durante el transporte y almacenamiento pues la superficie es mucho menor que cuando se cosecha
el alimento. Están listos para ser consumidos crudos sin ningún tipo de operación adicional y en
caso de querer emplearlos en alguna preparación culinaria facilita el trabajo, además de disminuir el
tiempo de elaboración. Este método posibilita a los consumidores la inspección de la calidad de los
productos en la recepción y antes del consumo. Brindan la posibilidad de ser comercializados en
volúmenes mayores para abastecer a establecimientos como hoteles, restaurantes o comedores.
Muchos de estos productos suelen ser ricos en fitoquímicos que pueden ser de protección al
organismo, pudiendo actuar como antioxidantes, anticancerígenos, antiinflamatorios, antitumorales,
antidiabéticos, entre otros, brindando más beneficios de los que ya brindan al ser fuentes de
vitaminas, minerales y fibra dietética. Otro aspecto importante es que generalmente no son ricos en
calorías y por lo tanto se adecuan a las tendencias actuales en cuanto a las dietas.

Pero, por otro lado, la conservación de los productos mínimamente procesados es crítica debido a la
rotura del tejido por el corte, esto supone un incremento de la intensidad respiratoria y transpiración
además de favorecer determinadas reacciones enzimáticas (polifenoloxidasa, peroxidasa,
pectinasas, ascorbato oxidasa) que conducen a un rápido deterioro del producto, con posible pérdida
de algunas de sus características sensoriales, nutricionales y propiedades beneficiosas para la salud.
Además, el corte aumenta la superficie de tejido susceptible a alteraciones microbianas que llevan a
un rápido decaimiento de la calidad y acortamiento de la vida de estante, por lo que la seguridad de
los frutos mínimamente procesados cortados en fresco es una de las principales preocupaciones de
investigadores y productores. Son más caros que el producto a granel, por lo que requieren una gran
rotación, una logística muy especializada, y un sector de población con un poder adquisitivo medio.
Se requiere mantener el producto a temperatura de refrigeración en todas las etapas del proceso,
almacenamiento, comercialización y distribución. Otra desventaja significativa es que la mayoría de
las materias primas tienen producción estacional, por lo que no todo el año se puede disfrutar de
algunas frutas y hortalizas.