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PRIMER CAPÍTULO: LA APARIENCIA

A) LO ESENCIAL Y LO INESENCIAL
Ser y esencia se hallan recíprocamente como otros, contrapuestos.
Cada uno tiene un ser, inmediación. En contraposición al esencia, el ser es lo inesencial, tiene la determinación de
lo superado.
B) LA APARIENCIA
1. El ser de la apariencia consiste en la eliminación de su ser, en su nulidad. El ser es la esencia aparecida como
inmediato.
Existe como inmediación reflejada -> existe sólo por medio de su negación (esencia).
Independientemente del contenido que tenga, este lo tiene de modo inmediato puesto por la esencia.
2. El ser es el no-ser de la esencia: el ser como momento de la esencia.
Es la esencia misma pero en la determinación del ser. Y la esencia es lo que está por sí y existe como lo que se
media consigo mismo mediante la propia negación.
C) LA REFLEXIÓN
La apariencia no es algo externo a la esencia, sino su apariencia. La reflexión es este “parece de la esencia en sí
misma”.
Esencia es movimiento de la nada a la nada:
ESENCIA: (es negación de sí misma -> APARIENCIA)
˪ es NEGACIÓN de NEGACIÓN (de la apariencia)
Antes, había una determinación del ser por el otro. Ahora, hay una autodeterminación.
En el devenir del ser, en la base de la determinación se halla el ser, y la determinación es relación con otro. En el
movimiento reflexivo, es el otro como relación en sí.

a) Reflexión que pone: aparece como inmediato.


b) Reflexión extrínseca: parte de “inmediato pre-supuesto”: reflexiona a partir de lo puesto.
c) Reflexión determinante: elimina esa presuposición, y al mismo tiempo presupone. La esencia que se pone en
el ser, y al ponerse, se presupone. Al negarse, da lugar al ser para luego negarse nuevamente y retornar a sí.

a. La reflexión que pone -> PONER ES: PONER Y PRESUPONER (esencia como simultaneidad del poner y
presuponer)
Reflexión es ponerse, y ponerse consiste en negarse (a sí mismo), desdoblarse y aparecer como inmediato.
El ser es lo que aparece como inmediato, teniendo atrás una mediación consistente en reflexión
poniendo-se.
Al ponerse como lo otro, la esencia se está presuponiendo a sí misma como lo que pone como lo otro, y al
ponerse como lo otro se confirma a sí misma.
“El movimiento como progreso movimiento que es un avanzar se vuelve de inmediato sobre sí mismo. Es
así automovimiento: movimiento que procede de sí mismo en cuanto la reflexión que pone es reflexión que
presupone, pero, en cuanto reflexión que presupone, es absolutamente reflexión que pone. La reflexión es
sí misma y su no ser, y es sí misma puesto que es lo negativo de sí, porque sólo así la eliminación de lo
negativo existe al mismo tiempo como una fusión consigo mismo”. Se funde, se recompone; lo que es dos,
inmediatamente es uno, porque lo que es uno, inmediatamente es dos. Ahora, esta inmediatez es
mediata, es movimiento, es negatividad.
p.e – La esencia que se pone como silla, se presupone como la sillidad que se está poniendo como silla.
“Que yo sea mi imagen en un espejo significa que estoy presuponiendo aquello de lo cual soy imagen,
soy lo puesto de esa imagen. Pero como inmediatamente de mí como imagen se vuelve a aquello de lo
cual soy imagen, también hay un ponerse de la imagen en la imagen en aquello de lo cual la imagen es
imagen. ¿Qué quiere decir que algo se refleje? Quiere decir que golpea contra una superficie y vuelve”.
b. La reflexión externa
La situación en que alguien desde afuera dice: este es el original y esta es la imagen (p.e.: espejo). Un
tercero que desde afuera compara. (ENTENDIMIENTO) Se queda en lo inmediato, lo toma como dado,
olvidándose que es MEDIATO.

c. La reflexión determinante

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SEGUNDO CAPÍTULO: LAS ESENCIALIDADES O DETERMINACIONES DE LA REFLEXIÓN
Uno a otro están concatenados. Es erróneo creer que están ontológicamente separados.
Hegel muestra el sentido profundo que tienen estos principios que el Entendimiento toma como principios.
A) LA IDENTIDAD:
Se puede expresar:
 Todo es igual a sí mismo, A = A. (fórmula vacía, mera tautología)
 A no puede al mismo tiempo ser A y no-A.

(Sería la esencia en una fase inicial de la marcha de la reflexión, una fase en la que se simplifica la totalidad de sus
determinaciones y se la reduce a una determinación concreta)
Se abstrae la diferencia. Hegel lo que muestra que la identidad sin ningún tipo de diferencia, en realidad no es
verdaderamente lo primero. La identidad es unidad de la unidad y la diferencia. En la identidad ya está expresada
la diferencia
Hegel introdujo la alteridad porque, para superar la vacía identidad a=a, fue preciso otorgar al objeto alguna
determinación y cualquier determinación no sólo es diferente al objeto mismo (verde no es árbol), sino que es la
negación de otra determinación (lo verde no es lo castaño).
A = A’ -> para expresarlo tengo que desdoblar A. A’ se pone como otro a su lado. Adquirir identidad solo es posible
reconocimiento la diferencia.

Por ello Hegel critica a la metafísica ingenua que erige la identidad como un principio ontológico irrefutable. LA
IDENTIDAD ES LA DIFERENCIA MÍNIMA CONSIGO MISMA.

B) LA DIFERENCIA:
La identidad pura es mera tautología, pero al salir de ésta se hace surgir de manera necesaria la diferencia.
a. La diferencia absoluta: pura negatividad. Contiene sus lados como momentos.
Es la diferencia que se desprende de la identidad. “Es el momento esencial de la identidad misma”. Se
refuerza la idea de que identidad y diferencia son dos momentos inseparables de la misma actividad.
b. La diversidad: es la forma que adopta la diferencia en el momento que se despliega bajo la forma de
la identidad. Se separan sus lados como de modo indiferente, la diferencia entre uno y otro es
externa.
Diferencia e identidad se separan. Los diversos han reforzado la identidad consigo mismos “Si algo es
diverso, es idéntico a sí mismo, y por ende, diferente respecto a otro que es idéntico a sí mismo: entre
ellos son diversos”. La diferencia no es más pura negatividad, sino que posee una determinación
positiva: ser algo; es lo otro de la identidad.
c. La oposición: la diversidad mostraba separadas a lo idéntico y lo diferente. En la oposición esos
términos ya no pueden ser indiferentes uno al otro. SE OPONEN ENTRE SÍ: uno existe en la medida
en que otro existe. Los lados están determinados uno por medio del otro (pero aún son
determinaciones reflexivas independientes)
Positivo y negativo: La diferencia se ha agudizado en término de positivo y negativo. Al decir que
algo es distinto a la otra lo expresa desde alguna determinación, como una determinación es negación
de su opuesto, la cosa contiene en sí mismo a su opuesto. El otro de la cosa no es cualquier otro, sino
su otro, una determinación negativa. Cada lado tiene en si la relación con su otro momento.
Ahora la diferencia es interna a la cosa. En cada objeto coexisten los dos momentos absolutos, son
momento de una misma cosa: lo positivo y lo negativo son reflejados (cada uno el no-ser de su otro)
e idénticos a sí (cada uno es, por ser el no-ser del otro).
Como son momentos de una misma unidad, entonces se produce la contradicción: A es A y no A. La
identidad consiste en la máxima oposición con el opuesto. La unidad de esto es el fundamento.

C) LA CONTRADICCIÓN: es el momento en el cual la oposición se interioriza y hace de su otro una parte esencial
de su determinación. Se reconoce, mediante la contradicción, que para pensar la identidad de un objeto es
necesario insertarlo en una trama de relaciones con su otro, con sus otros, y que esta negatividad forma parte
de su definición esencial.
Unidad de ser y no-ser (máxima oposición conformando una unidad) = FUNDAMENTO
Con ello, la Lógica quiere indicar que todo objeto tiene un fundamento, una razón de ser, pero que no se
fundamenta a sí mismo, sino que descansa en la trama de relaciones que establece con sus otros.

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El poner la identidad consigo mismo por medio de la exclusión de lo negativo, se convierte a sí mismo en lo
negativo, es decir, en ese otro, que excluye de sí. (¿ser puesto? ¿ se relaciona?¿cómo?)

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