Oremos:
El Espíritu que procede de Ti, Señor, ilumine nuestras almas y, según la promesa de
tu Hijo, nos dé a conocer toda la Verdad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Misterios Gozosos
“Al oír Isabel su saludo, el niño dio saltos en su Vientre. Isabel se llenó del Espíritu
Santo y exclamó En alta voz: “¡Bendita eres entre todas las ¡Mujeres!” (Lc 1, 41-42).
Misterios Luminosos
“Luego que fue bautizado, Jesús... vio al Espíritu De Dios descender sobre Él” (Mt
3,16).
“La Madre de Jesús dice a los sirvientes: ‘Hagan Lo que Él les ordene” (Jn 2,5).
“Los lleva a una alta montaña y se transfiguró a Vista de ellos” (Mc 9,2).
5. La Institución de la Eucaristía
Misterios Dolorosos
“Le quitaron sus vestidos, le pusieron una capa Roja, y le colocaron en la cabeza
una corona que Habían trenzado con espinas” (Mt 27, 28-29).
“Él mismo llevaba la cruz a cuestas y salió a un lugar llamado La Calavera” (Jn
19,17).
5. Crucifixión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo
“Jesús gritó muy fuerte: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (Jn 23,46).
Misterios Gloriosos
“El Señor Jesús después de hablar con ellos, fue llevado al Cielo y se sentó a la
derecha de Dios” (Mc 16,19).
“Apareció en el cielo una señal grandiosa: una Mujer, vestida del sol, con la luna
bajo los pies” (Ap12, 1).
5. La Coronación de María Santísima como Reina y Señora de toda la
Creación
“En su cabeza tenía una corona de doce estrellas: estaba embarazada” (Ap. 12,1-2).
Oremos: Señor Jesucristo, que dijiste: “Pidan y les darán, busquen y hallarán,
toquen a la puerta y les abrirán”, te pedimos nos enseñes a responder a tu divino
amor, para que amándote de todo corazón con hechos y palabras, no nos cansemos
nunca de alabarte. A Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
HIMNO OH SANTA MARÍA DE MARES ESTRELLA
1. Oh Santa María,
de Mares Estrella,
Virgen de Dios Madre
y del Cielo Puerta.
2. Retomando el Ave
que Gabriel te diera,
la paz corrobora,
cambia el nombre de Eva.
3. Al ciego ilumina
y libra al cautivo,
ahuyenta los males,
da bienes divinos.
5. Bendita Señora,
la más dulce y buena,
borrando el pecado,
endulza las penas.
MAGNÍFICAT