La MUNDIALIZACION: Estado de Bienestar, Populismo y
Neoliberalismo (América Latina).
La mundialización es la tendencia en la cual los países buscan integrarse
y complementarse impulsados por el progreso tecnológico, las políticas de inversión y las reformas del comercio. También es conocida como la culminación del proceso histórico de expansión del capitalismo y el efecto de sus propias leyes económicas. Cuando se habla de Mundialización se piensa en el proceso a través del cual varios países se complementan impelidos, tanto, por el avance tecnológico como por el comedimiento de transformación y las reformas en la comercialización. En este sentido, la Mundialización podría considerarse como la experiencia cotidiana de la acción sin fronteras en el espectro de espacios vivenciales que transcienden las distancias en formas de vida transnacionales. El Estado de Bienestar fue el resultado concreto de unas circunstancias sociales, políticas y económicas muy singulares y de una correlación de fuerzas entre las clases sociales. Para Claus Offe, el Estado de Bienestar fue el resultado de distintos factores como el reformismo socialdemócrata, el socialismo cristiano, las elites políticas y económicas conservadoras ilustradas, los grandes sindicatos industriales que lucharon por derechos más amplios de seguro obligatorio, protección del trabajo, salario mínimo, ampliación de los servicios sanitarios y educativos, alojamiento subvencionado por el Estado y el reconocimiento de diversos representantes económicos y políticos. El Estado de bienestar realiza un conjunto de acciones a través del gobierno para mejorar la distribución de la riqueza y el bienestar de la población. Para Milton Friedman y Adam Smith, el mayor Bienestar Social resulta de la optimización del beneficio individual, bajo un entorno competitivo.
En este sentido, le Estado de Bienestar fue una consecuencia
determinada por situaciones políticas, económicas y sociales muy específicas y de una reciprocidad de potencia entre las distintas clases sociales. El Estado de Bienestar es un sistema económico en el cual el Estado debe asumir la responsabilidad de prestar una gran cantidad de servicios, sin costo, para los ciudadanos de su nación.
Siguiendo el orden de ideas, hay autores que llaman Populismo al
estado del buen vivir puestos en marcha a inicios del siglo XXI, en algunos países de América Latina. Desde una perspectiva auténticamente latinoamericana el Populismo es el proyecto de más largo alcance en la lucha contra la dominación extranjera. Para algunos, es una adulteración de la Democracia; el Populista busca establecer un vínculo directo con el pueblo, en contra de las libertades y las leyes.
En otras palabras, el Populismo es la intención de pugna frente a la
influencia foránea que para muchos se convirtió en una falsificación de la Democracia.
Con respecto al Neoliberalismo, también llamado Nuevo Liberalismo o
Liberalismo Tecnocrático, es aplicado a una serie de corrientes económicas y políticas capitalistas, inspirada y responsable del resurgimiento de las ideas asociadas al Liberalismo Clásico o Primer Liberalismo. Originalmente el Neoliberalismo era una filosofía económica que trataba de encontrar un camino en la disputa, para ese momento, entre el liberalismo clásico y la planificación económica; inspirado en el deseo de evitar nuevos fracasos económicos vividos y atribuidos en su mayoría al liberalismo clásico. En las décadas siguientes la teoría neoliberal tendió a promover una economía de mercado, más adelante conocida como la Economía Social de Mercado. El Neoliberalismo, en la década de mil novecientos sesenta significaba una filosofía más moderada que el liberalismo clásico y favoreció el uso de la política estatal para atenuar la desigualdad social y contrarrestar una tendencia al monopolio.
Por tanto, se puede considerar que el Neoliberalismo consiste en un grupo
de percepciones tanto políticas como económicas que fomenta la producción privada con su capital.
Participante:
Diomeda Maria Alvarez P.
C.I. No. 5.892.676
Informe General.
Globalización: La destrucción de las identidades Locales y Regionales.
Analizar el fenómeno de la Mundialización y la Globalización como efecto directo en el proceso político, económico, social y cultural de nuestra sociedad.
El presente Informe desarrolla brevemente, el tema de Globalización: La
destrucción de las Identidades Locales y Regionales. El Fenómeno de la Mundialización y la Globalización como efecto directo en el proceso político, económico, social y cultural de nuestra sociedad; cuyo contenido, se espera, cumpla con las expectativas, a pesar de la concisión de tan importante tema.
Retomando que la Globalización es un proceso económico, tecnológico,
político, social y cultural a escala mundial que consiste en la creciente comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo que une sus mercados sociales a través de una serie de transformaciones sociales y políticas, es importante destacar que las Identidades Locales son creadas en la memoria, experiencia y convivencia cotidiana, donde se fijan y se practican en diversas situaciones; mientras que las Identidades Regionales se notan en los diferentes elementos culturales, lugares turísticos y elementos sociales que hacen que una región sea diferente a otra.
Siguiendo el orden de ideas, algunos piensan que la Mundialización es el
proceso que acerca las culturas del mundo; otros, que es un fenómeno histórico en curso que consiste en un incremento acelerado de las relaciones de interdependencia entre actividades, estructuras y procesos de diferentes partes. Sin embargo, en sentido amplio, la Mundialización podría considerarse como la experiencia cotidiana de la acción sin fronteras en el espectro de espacios vivenciales que transcienden las distancias en formas de vida transnacionales; en ocasiones, la Mundialización también es llamada Globalización.
El fenómeno de la globalización afecta a todos los países del mundo y a
su lado se presenta la regionalización, que es el mismo fenómeno con una menor extensión geográfica. Entre los efectos más nocivos de la Globalización está la creciente contaminación del medio ambiente, por el manejo inadecuado e irresponsable de los recursos naturales como la deforestación por la tala indiscriminada de árboles, la emisión de gases que provoca cambios climáticos, el recalentamiento global aumenta el deshielo de los glaciares lo cual incrementa la temperatura del agua y el nivel del mar. Una de las mayores críticas a la globalización es que destruye las culturas locales para quienes consideran que todas las culturas son una mezcla continua de otras, piensan que no existe una cultura pura; pues solo se transforma y evoluciona.
Desde el punto de vista político, además de la redistribución geopolítica
de bloques emergentes, establece una nueva categoría de estado, el estado transnacional. No obstante, la globalización presente ciertas ventajas como la cooperación entre países para combatir problemas comunes como la pobreza, el calentamiento global, la desnutrición o buscar soluciones diplomáticas a conflictos entre ellos; las políticas proteccionistas y discriminatorias practicadas por las naciones opulentas, impiden que la mayoría de los países participe en los intercambios comerciales y financieros, no logran globalizarse y si lo hacen es solo a través de las transnacionales residentes en sus economías; por consiguiente la globalización presenta serias consecuencias como la perdida de la soberanía de los países más vulnerables; el retraimiento del nacionalismo productivo; el choque de corrientes de liderazgo; el fortalecimiento de muchas comunidades político-económicas entre otras.
Desde el punto de vista económico, la globalización reconfigura la forma
de abordar los procesos de producción, distribución y consumo de bienes y servicios en el mundo, permeando de esta manera todos los actos económicos internacionales. La globalización económica, tal como se designa hoy a la creciente interdependencia económica entre diferentes Estados, es la expresión de un fenómeno de mayor alcance que la simple interconexión entre Estados, representa la culminación a escala planetaria del proceso de expansión capitalista. El proceso de globalización se efectúa a través de los flujos comerciales de capital, información y conocimiento, que circulan alrededor del mundo y que involucran, en mayor o menor medida, a la mayoría de los países; sin embargo, este proceso favorece a un pequeño grupo de naciones altamente desarrolladas, quienes controlan la economía mundial, mientras la mayoría de países debe conformarse con el papel de actores pasivos y altamente vulnerables a los cambios internacionales, influenciados por las políticas aplicadas por los centros de poder económico, político, cultural y militar.
Desde el punto de vista social, la globalización es un instrumento de
desarrollo económico que provoca una mayor polarización en las relaciones sociales, y muestra evidencia de los efectos negativos, al redimensionar la categoría riesgo personal, local o regional inclusive en colectivo-global o mundial. A pesar de parecer que la comunicación muchas veces, es un aspecto positivo de la globalización por su rapidez y multiplicidad de informaciones, también posibilitan la comunicación entre redes mafiosas o terroristas y que estas pongan a disposición de criminales métodos de fabricación de armas y de venenos. La globalización considerada como instrumento, aunque puede, mediante la difusión de los derechos humanos, contribuir a que las personas gocen de mayores libertados y que los organismos que transmiten esos valores cooperen en mayor medida; también puede, mediante la imposición de modelos económicos y culturales, hacer desaparecer economías tradicionales originales, destruir culturas o facilitar la concertación entre organizaciones criminales.
Desde el punto de vista Cultural, existen ciertas características
psicosociales que conforman una base cultural cuyos orígenes residen en las herencias y tradiciones políticas, económicas, sociales, religiosas y ético- morales propias de cada nación; pero que en general las identifica a todas como sociedades. Algunos estudios realizados por el especialista Alfredo Keller, muestran un perfil cultural común en sus características psicosociales, tales como: tendencia generalizada a percibir el entorno como algo que no se puede controlar, por ello muestra una fuerte relación de dependencia hacia las estructuras dominantes; poca confianza en las instituciones, debido a las relaciones del individuo con la sociedad; el doble discurso que genera conflicto entre las costumbres y las normas que evita asumir responsabilidades colectivas; el dominio de lo emocional sobre lo racional que beneficia las relaciones basadas en la solidaridad, sobre las de productividad; entre otras que revelan sociedades dependientes, que, sin embargo, se nutren de un cuerpo de creencias intensamente enraizado que refuerza la necesidad del Estado.
De este intercambio de bienes y servicios, se han interrelacionado las
distintas culturas y como resultado, se está fundando una cultura globalizada que todos conocen; a pesar de esto, cada persona sabe reconocer sus diferencias culturales, por consiguiente se identifica como una persona que posee su propia identidad cultural; aunque puede apreciar las expresiones artísticas, gastronómicas, musicales, entre otras; de cualquier país.
Por consiguiente, se puede ultimar que la Globalización, en la actualidad
forma parte de la vida diaria de todas las sociedades del mundo, por el impacto que produjo en lo político, económico, social y cultural de todos los países beneficiando principalmente a los más desarrollados cuando debería estar al servicio de todos como la principal herramienta para su bienestar.