Está en la página 1de 2

CASO: EL VIAJE SIN REGRESO

El día 08 julio de 2016 el autobús de la Institución Educativa Distrital de


Barranquilla “Ronald Dworkin” en el que viajaban un grupo de estudiantes, se
accidentó en la vía que conduce de Barranquilla a Santa marta, a la altura del
municipio de ciénaga- Magdalena. Dicen los ocupantes del bus, que el
accidente ocurrió en una curva que el vehículo no pudo tomar porque perdió los
frenos y la dirección, saliéndose de la vía a un barranco.

El accidente dejo como resultado como saldo 2 personas muertas. E.J.J. joven
de 13 años y Fabricio Bustamante de 47 años de edad quien era conductor del
bus y estaba vinculado como empleado público del Distrito de Barranquilla
adscrito a la institución educativa, este último falleció 8 días después de estar
en la UCI del hospital de ciénaga.

Del menor E.J.J. solo quedaron como herederos sus padres Andrés y Mónica
quienes piensan interponer una demanda por lo sucedido.

Del conductor quedaron como herederos, sus dos hijos menores de edad Juan
y Pedro y su esposa María quienes también piensan demandar.

De los hechos anteriores absuelva las siguientes preguntas, argumentando su


respuesta con fundamentos jurídicos (norma, jurisprudencia o doctrina):

4. Indique cuales perjuicios podría pedir los posibles demandantes en


ejercicio de la acción “ex iure hereditatis” (petición para la herencia) y
cuáles deberían pedir en ejercicio “ex iure propio” (petición para si)
discrimínelos demandante por demandante.

En cuanto a estas dos acciones, hay que aclarar que los perjuicios que buscan
reparar son distintos. La “ex iure hereditatis” se centra en el daño sufrido por el
causante, y en la “ex iure propio” el accionante busca satisfacer un perjuicio
propio que causo el fallecimiento la persona.

En la sentencia SC-11347 menciona unos requisitos para saber quiénes son


legítimos para emprender estas dos acciones:

Iure hereditatis: El derecho conferido a los accionantes que la legítima por


activa para esta acción no depende de un vínculo de parentesco o familiar, sino
de que se den las condiciones para esto. La Corte menciona que son:
La dependencia económica que tenía el reclamante de quien falleció o quedó
en imposibilidad de prestarle ayuda; un daño cierto, esto es, que no haya
certeza que de no haber ocurrido el suceso habría continuado la contribución
económica; y que la pretensión indemnizatoria no implique obtener un
provecho contrario a la moral o al derecho. (SC-11347/2004)

Por otra parte, los perjuicios que se reclaman entran directamente en la sucesión y no
le reciben los accionantes, aunque también pueda acumularse esta acción con el
resarcimiento de daños personales sufridos por ellos a razón del fallecimiento del
causante.

Iure proprio: Respecto a esta acción, la misa sentencia afirma que,


independientemente de si es familiar o no, la persona que reciba un perjuicio por la
muerte de otro tiene la facultar para pedir una indemnización económica.

En este sentido la sentencia precisa que cualquier persona puede legítimamente pedir
el resarcimiento de un daño, siempre que se demuestre que el accionante ha recibido
un daño afectándose patrimonial o moralmente.

Así pues, en el caso concreto, los demandantes que pueden ejercer la acción iure
hereditatis Juan, Pedro y María, hijos y esposa de Fabricio Bustamante que era
el conductor, ya que son sus herederos. Aunque también pueden presentar la
acción iure proprio alegando daños directos a nivel patrimonial o moral. De otra
manera, Andrés y Mónica, padres del joven E.J.J. pueden pedir resarcir
perjuicios por medio de la acción iure proprio.

Finalmente, hay que tener en cuenta que estas acciones son formas de ejercer
la indemnización por el daño causado. Corresponderá luego determinar si se
pide resarcir un perjuicio patrimonial o extrapatrimonial.

También podría gustarte