6 Hisora de Ames Latin, 5 siedad mexicans. Las promesst de Iguls, en efoto, so orietan sobre todo en esa direccién: peninslaes (rotegids por ln unin), lero, me flsteturasy burocecl, casts iberadas de legislcion discriminate), fndiot libres ahora def tite), encuonian algo pare cada uno en un esquema de sociedad que, mir que exquema poliicodnstielonal, cea fen tno de una unanimided at sa momenténe, 1a explesn de alapria que sigue la entrada iiunfal do Turbo on su capital es entonces une expresién de confianza en que Ia sociedad mexican es eapaz de define yconservar por sf misma su propio equi bros qu el papel erbiral del Soberao een sum, ya innzewsrio.¥ en testo la lecture del proceso que acaba de culmingr se revela poeo pers faz si el viejo orden tenia un ébir, el quevo tiene un gerate: el ‘oft trgerantey ex ot scetn Ineutiulbe, Porque en efecto el nuevo orden no podria subs sin ? Mis bien porge no podria siguera Intentario: I larga guctra de Independencia he dejedo en herenei un protagoaista nuevo pare la historia de esa Nueva Hepa que so cambla 2 Mésieo: un efrito cays jees,relutados en las dies cxolas de provinci, deben su poscién dominant en la nucra coastleién politica fla que tienen ea a organizacin altar, y que, por lo tanto, no podtfan Scop que se In detmantelra, El tint Final I independonia mexie ana cs sin duda demasiado complejo para que pueda ser explicado ea ‘unt clave dole, Ninguna expleselén sei empero, completa a na tmase fen cuenta In gravitacion de'un elfreito improvisado pare salvar Is auto Fidad del rey de Bspaia, pero que difclimeate hubiva sobrevivido ala fective restaurscgn de et sutoride, 6. La herencia de la emancipacién hispanoamericana La Hispanosmésia continental (Amica Cental segulia, el emienz0| pesivaments, of camino de México, del que dependia formalient)alear- ‘aba fialmente Ie independenla, El camino habia sido tan largo, ta Shundante en voltae wba, en catisrofesiesperedasy en otras dem Sado esperadas, que parca interminable, Visa desde el momento en ‘que quedaba aids, Ia emancipeién, mis que una compleja revalucion, Drea una etmpa de calsmidades comparables a las debidas causis ma furals. La improvsbilidad propia de estos hechos vefa de que ls revo- Tcda habia levado al centro de la vida Bistérica a cantidades antes desconccidar; el dertino de varias rgiones era ora deidido con la prieipacién de gents y comarces antes escondiéas en los incones del Pelsaje social hispenoumericane; pores hubieran imaginado en 1810 Ia Eriticién que, por ejemplo sleanzaran los Vaqueros de les Llanos ve ‘ezolanos ode Renda Oriental del Uruguay. [Le sociedad hispanoumericana era In cantidad desconocida que a ‘bia arojad al proceso emncipador por rumbos a mento inprevisibles; al Dacero ae habia trsformado ella misma en tne medide quo, on le ‘écnda de 1820, no ve peribia adn con carded, pero que se suponis ‘muy sustncal ea eocidad cuya forma no habla sido posble svar fn I6t0, y quo la habla de todos modos perdido en el camino, aparece ‘cmd Is primera herencla del proceso emancipador; y esa erences ita como una de honda desinepraion: superari, y mlentees tio "prender «vivir con ell, apareve como la primera fare de quienes toman ‘ea cargo gobernar es ireconcible Hispancarérica,os isos de Ames Lain, 3 EL primer balance de la emancipaisn y su legados ex tata la vez fueremente nepativ y feetemeate deadibsjado: In emancipacisn pasos sobre todo un proceso en que no slo salié a az el caoe que oe eacondin ‘ojo l sumario orden colon, sno en que exe legudo fue eariquesida ‘on nueves dimensiones de confusion, Le sittcin requeie lav inde fueres constricsiones externss pora no caer en podatoe la elemental serra de todos conta todos ests contentemente al acecho, Es revelador ‘que exe pronéstico haya resultado tan feewontemente fl; pese a todos los eafueros ef orden politico conocer frecaentes quthret © inerrplo- ‘et, pero ésts silo exceplonalmente dan fuga a atta temidasrcaides ‘espontines en el eno primigenio. Esto sugire que en ln década de 1820, camo en ls de 1800, Hispancaméeica conoce in orden ae firme de lo que los observadores admin. Hoy por hoy no parece imposible colum- Der algunas lineas meedras que permiten exborar,« parr de lor cat bios aportados por la guere, la tadependencia, ls repdblice spertra mercantl, el nucwo passe econSmic, sclal y politico latine- smercano tal como emergie despa de alga tormenta, llega de a guerra Las dovauloescausdas por Ie gra ofrecan que el més fe- events ta de lamentucions, 2036 se dedgnsb cou lls? Hela Sve eotendeces Bxcepto em algnon cncones periulrsente catia. ds, Ton desuons cand por Ta hehe misma fron poco eon tables No oda sr de ora manera: la guerra oe lade coo medion de combate esas y rces, ea eng afortunedos en que au los ‘mis modeacs eran de ela & menudo moda, Negi la Clie font a neste bombard de lor me poder cone frances Iba ostentrsieatiseedemaiadoprofunds {nsec meos ds de agora fron de importants ella subtao mano de cbr y capil dea efera pods Mano de obra los avanzsa en eta dicen siden por a poder tletopropedvo de lov eclavs pot loses en luck, ue set ‘Sndades, plnaonesy cts ade Venerol bata eC pet Yr husta Buco Ais: et secaniento de lv elsvee ss ona fo, s6lo un apeco de un proces nds amir la drupelln de 1 ‘ia como conecvensia de nsabildad eel contol del tetoa, ‘ue te da en el Per, Alto Bel, ene-au cotapartiga en i dope, sin de In mano de bra le ene Ballo mexicano tocedo por el move rtnto de Hidel. La satrscia de mano de obra tine, emper, ef fos means duadees gue lasuntacsion ysetaclon dl call i Sequde pee, Discs de os inperion sion we ‘ponible pura le produesi agricola y miners. La exaecia dest (nea Tucién de fondos de fomento do corperacioaes como consuls y cb fos, bin pronto tambien de parolees, primero dsafctas 9 Ingo, tsando la nocsided apremis, mbién nevirales 0 adits) viene acon ‘he 00 prodoe tan aslo pra et mereado local, sipo pare ‘eas colonise cow la cules ol comerio ex ya menos facil, I pradencle scone limita Ia jveridn; la smoneze dal rtorno dele lucha inspira J mime prudencia en ls Zonas miness, con resultados an mas szrce ‘cuando vo Hega a destender los gastos de mero mntenimieno, que eo Js minas son muy allo (aepure le solider de vigns en las galevas y mantenerles libres de aga require, en efoto, una constants inversiéa de materiales y fuerza de wabaj); eo casi todas partes In mineria lege {la hora de [a pax con su capital productvo ten fueremente datsdo ‘gee a rebablitcin enge ahora inversiones custlosss. La retaccion, fied extendere y prlongar dela lucha, y sobre todo desde que el ‘esenlice se hace claro, va mds lejos: los tesovesprivades sobevivents ccomicnzan a emigrar; ea Méricoyel Per, el yolumen de sa fugealanza Jas devense de millones de pers; la expansion econdmica cabana y ‘economia metropolitans offesen destino & ese metlico fugitivo. Esto contribaye todavia aque Ia Hispancamirica independiente afon- te a postgueta con su sistem productive debiitado y sin resurees para rehsblitalorépidamente. La wansferenca de recursos de hombres y cap fale de In economin productiva al Fstado que los Yucca en la guerra 20 fupono la destuccién lisa y lana de esos recoros. Hay, més bien, una redistibucin,y Ia dole do la quera determina el seatido de esa rede fubuciéa, La'lucha —se bn indicado ya se Ubra con limitedisince Spores exteros de armas y petrchos; In metépol es demasiado pobre ‘ra prodigarlos, Tos patiotasluchan con andloga penutia y por aad ‘dura son efectdos por embargs impussios por Inglatewa y'—de modo rence efestive — por Estados Unidos, Ello inspira tnttivas do produc- i local de armas, que han ganado la entsiasta cuieidad de ls esto ‘loss de los ergenes de Is industilizaiénIntinoemericana. Estos tien den, sin embargo, a eragerar el sleance de ioe episodios; ceo fbrias Son sobre todo talleres do compostura de armas. La adaptacin a esa situ th se da por adopeién de un are de le guerra que se acomoda a un fmameato eso 7 artic, y lo tuple con abundancis de hombres. sto, sustraidos «la esfera productiva, deben ser manteidos por el fiso,y lor gases de quer tenminan pot sr, sobre too, gastos de con ‘sume cowiate, que eumenten su volumen sin modifier radeelmente au composi alimentos (compradoe u cbtendos mediante exacrenes) de prodoocign Joel, mediins algunos matcrialesy sobre todo elas pre-0 Hisora de Amica Lain, 3 ominantementeimportados. Si se la contempla desde ext perspective, Ja guerra se revela sobre todo como un eatimulo para la amplisién de Jos gates de consumo, hacia los cuales se canlian tesoros aeumulados en Is etapa colonial, que bajo el antique réginen 20 podian empleese como capital en una empresa de expsnsién econsmiea que las liitaio: nes dl pacto colonial frenaban, pero que —graclas Ia iberacign met. anil veri abierio ese camino sl no foese que esta slendo azn: ‘dos por ato de impeio pas splicrios e consumes de guerra ae estimulo al consumo que ofrece ln gucira no es, sin embargo, el ‘inco que frusta para lis nuevas economia hispanoamerianas la po Dildsdde ylear sus recursos on amplisr uns producci ala gu lo ibe ‘alizacién mercantilesgura mereados me amplioey Iuerativos, Porque el Estado en desesperads lucha por le supervivencia no es el daico que ‘modifies en eta efap sus pautas de consumo y a ada de Ie eayuntire Dali intluye agar el hecho inesperado —y sin embargo eeperable~~ de que la apertura merentl reste mis eficez para smpliar ol consumo que Ia produccion , precisamente en cuanto ampiin el consumo, dsr te eutss de la prodaccién). La guerra sume aa{ sus efectos, los de la spertara mercantl, pero no ex wéla en ests eafera donde la primera pe rece destruyendo veriginesamente las barers poteocaes conta el evan ¢e avasallador de los agents de las nuevas metrSplisecondica Una situncién anoga ve adverte en cuanto los efectos scl de 1s gure, Esta, se ba sefalado ya, hace posible que figuras y sectors anfes marginals guneniaflujo deisivo en el proceso mits y politicos ‘ha setalado ala ver que esos combios no suponen un desqute de lot seatores més desfavorecidos por el entigvo orden, cuya rebelioneshabian, Sido sempre temidas —o eapradas-— como la ms segura consecuencia, dana quisbra del orden espaol. Lo golpes «Te eclvitd como insti én noe deberon a ineitvas de lo eelvos, sno ala necsidad de utlizros para In guerea, reseeydndole también en 52 nuevo teatro lana situacion riguosimente subordinade, y si blen era ote fonts interna que separaba a indios de espafoes ycxstat se hizo eee en el euro de Ta ers de indepeadencia, Ine tensiones que ls entztban no ® canlizaren en movimlentorsgnados clasiente por el predomino in digena, como todos habianespezao ( como habla ooareido en lps), Tos cambios en el equilib social fueron —como #2 ve— & la vee menos catastfios y mds amplios de lo previa, Afetaron al equibrio interepionsly al intepo de eada grupo socal y énieo, per so inc. ‘aron enfrentimientosfrontales entre propos en pocoe epsodioe lca, sos cambios no neesitston, por ota parts, aflorar através de nucros cataclsmos en una posguera que se tenia rica en ellog; ee habian dado 8, lo largo de la intrminable etapa de Tach, y estaben yu eeopios Sep pane, Dhclén de lo peri Séte Py en om rigoexenial del orden gue de ella emerga: In nueva dstbueisn {al poder politico y administativ, [No ea slo i distibucéa dei poder la que ha sido profundamente tmestocade: 98 be mma ha suelo une transformacign profunda. Los revelucionarios colin condenar en el Antiguo Régimen un orden basado 2 Falos prestigis, en las adeudan ‘ldo, y os acreodores del Estado. [Mis claro y universal es el golpe dado a le esclavitud como intita- cin por Ia cia de sldados do Toy poderes en guema: en el Perd Y Venezuela —en aim mayor medida qde en el Alto Cauca do Nueva Granada esa perpecia (aun sin aboliclén formal) va a rer difcliades ticonaler sn tentatva de reconstrur Ia agucultura del adcar, del god del ete del caco, Hsia ahora hemos eovsideado exe impacto dela guera ignorando ‘qu Gta hn dejado como logado la modiieacisn do los principios bsicos tanto dst orden socal com del politic legados por Ia colons. En efecto, ro ge trata tan aclo do quo los aniguos dominos dela coroaa de Cae. {ill sn shore sepablca; am orden basdo en el reconociniento de status sliferetes de acuerdo con cl origen ético y en el de orgsnismos corpo: ‘tiv dotados de personalidad lgalvigorose es tambiéa Juzzadoinacep- {able La lated poltn al principio de iualdad Ta jraica al de ina. Habla fides deabuciad, 2 propo sear agudera a confca esgic qe los acon de nie dvtceerado iradctemente, peo te par elo imgonar un inponble torn al eniguo one, A ot Guo- tage intron xl euro dela esehnza supe ha i motive de ercindnlo (ent en Bop, Condi ea Buenos Air) fom limi, y opines que chcan de frente con principio de xt- itano como la eget de Ia imortalldad del lng no tn toereda, pero In eneSaza no retorts ou caus eatlotadonl,Tanpos od eumdo se exnnan It testimonio de scree dee rearin Eis weaver ht i pt ns cl artspn den more "Hy otra rindn mls esrictamente pati para gue I dro Herel to sipongs Ie vetoia del mevo eaacane allan 7 uleemonsce Tey mucho ea te quel hae ain menor stactiv Que el lberlama imate cnr, dea ho dea ee en cnt bse ont sends de geo depo de saga en Ia visa socdbd-~ através de una eplactn dicela © lt elnino de as maa. He glue seta qu despisesms ison de Andee Latin, 5 recelosen una élite politica que cre estar pando todavia el precio de ies movilizclones populares que dsbié deseacadenar en los momentos ins dessperados de In luc por Ie emsneipaién, y no qulee ots ne: tes, contolndas por afudidura por un poder rival. Un nuevo orden polica? Si la década de 1820 fue en csi toda Hispenoumtica de feb expe- rimentieién poli, en le eguinte se impone une aetitud menos abiert, fg se express en un conseni retopectivamente caracterzado como onservadr, y que ln dada fo et, en cuanto que lo inspira una preoce pecign por ie frgilidad del orden postrevoluconaro, al que nuevos in- Tents reformadores podsfan obiterar ebriendo la via una rezada en Ja tnargul, Este convervadutiema —en medio de matics reponales que ana. Iizarenos al seguir In tayectra de los naientes Estados hispanoancrce for conserva, ta embargo, més do un motivo trado al debate polio por al ibeeatsno,y ello no s6lo euando sus objecones al esuerzo de r- Forma liberal previ fon mds de oportunidad que de principio (ee caso de Chile, Nueva Granada, Venersls) o son mas fesoaos que ideoégios (esel de Bacnos Aires y luego el resto de las provncas ergeatinas bajo Cinfljo de Roses), sino aun cusndo Ia reewsaléa de puntos centrale ‘El programa liberal ex abeolut (ston México). Con el berlin coin- ‘ide este coneervadurismo en dar por definivamente agotado el orden olnial en lganos de sus aspoctos esencials. Silas fonteras ene los ‘nuevos Estados no han adqurido an la ea que Tuego tend, 18 sor Tucidn dela unided hispunosmercana es t6bda Por todos pr ives fd mismo moda lo es In apertura mercanil yel orden sccloceanémico Ge sobne lin se ests eonstrupendo reversible aparece el cambio inttaclonal que tansformado a ls reincs de Indes en repblieas cay principio de Iegitimdad es el de sobe nla popular, En Mérico lego de une déeade de hegemonia conserve ora, su improdente manerquim ibe a dear durante aos « Guikrex do Estrada el rargen del consenso police dominane; en 1848, en una Noe- ya Granada gobernada oon erteros rigdamente consrvadors, el ido Jogo del réginen, Mariano Ospina hacia echar al yoo las eampanas = ‘ogo para celebrar ol retoro de 12 Repdblice Francia... Eee conervaduriano, se presente com solucdn de emergencls 0 més permanent, se carectriza como un exfverzo por utiliza todos los clemen ‘Be de orden que ban sobrevivido Ia formeata rvoluconsrs (radicio- tals religleo, deferencia sell, pasivided de las mayoras limen. {de por embas) pera extender al méximo las posibilidads eutortatas 2 “Ter prt Hn Bucs de un ovo ore Mgpacoameiane ™ una orgeniscién pola que ni puede i desa supertr el marco de 12 repiblica repreentatva, y-dotala at dela fuerza suficente para con telidar un orden sociooconémico basado en la spectra meant ste etupa, como la anterior, esté mareada —se ha sugerido ye— por iorenciae notables entre las trayectoris de los disintes Estados en los ‘que an vido e dividne It Indias epafols, Ambas tapas chondan Tt idenidad nacional en entdadeepoltiess que al nacer no podian conar con ella, Este proce, y ls tan eterogéness eveluciones que lo scompa- ‘an, silo poded sepulse ea cade Esta, listo a eneuadrar una natn