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1 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El hombre por naturaleza y a lo largo de la historia se ha dedicado a
la recolección, esto fue evolucionando con el tiempo y derivó en
el coleccionismo, que se considera la raíz de los museos, entendiendo por colección
aquel conjunto de objetos encontramos sujetos a una protección especial con la
finalidad de ser expuesto a la mirada del hombre. Los museos tienen la
responsabilidad de salvaguardar el testimonio del desarrollo de la humanidad y son
parte de la zapata de la identidad cultural de una nación. Cumplen con la misión de
servir a la sociedad a preservando el patrimonio cultural y natural a través de la
educación, y en consecuencia son instituciones de educación no formal.

Willy Wonka es un ícono dulcero, ingenioso pero excéntrico, creando todo un

fenómeno alrededor de caramelos y chocolates muy especiales, su fábrica resulta ser
un lugar de ensueño lleno de los dulces más apetecibles que uno pueda imaginar, por
consiguiente, sirve de elemento principal en el desarrollo de esta propuesta
arquitectónica. A raíz del éxito de la película, se creó una marca de dulces del mismo
nombre, pero ésta no tuvo el mismo reconocimiento y al pasar de los años, el dulce en
torno al cual gira el perenne éxito literario de Roald Dahl ha desaparecido, tras
esfumarse en una confusión de errores de mercadotecnia, estrategias cambiantes e
indiferencia corporativa. La marca Wonka pasó de una compañía a otra a fines del
siglo XX, y a lo largo del camino se dieron Barras Wonka, Crema de Oompas,
Caramelos Everlasting y otros dulces del mundo real. En 1993, la marca Nestlé,
adquirió la marca Wonka y, por un tiempo, nutrió a la marca que eventualmente
comprendió dulces que incluyeron SweeTarts, Nerds y Laffy Taffy. Pero desde
entonces ha sido descontinuada toda la línea Wonka.

Los museos de América Latina luchan en la actualidad para hacerse conocer

como algo más que un depósito de cosas viejas y Venezuela no es la diferencia.
Venezuela es un país con una amplia cultura, y los patrimonios culturales abarcan
todas aquellas costumbres, bailes, canciones, manifestaciones tradicionales, lugares
propios de la región o país y que forman parte de su identidad, cuenta con una Red
de Museos que está conformada por un conjunto de las instituciones venezolanas
que realizan actividades museísticas, en todo el territorio nacional.
Así mismo, un museo es un espacio que se crea con la intención de servir como
medio para la difusión de distintas expresiones artísticas, filosóficas, educativas,
recreativas etc. Estos pueden ser financiados por fondos públicos o privados y
suelen ofrecer enseñanzas en distintas artes. Tomando en cuenta, lo antes descrito
se hace oportuno plantearse la necesidad, de que en el estado Anzoátegui se
requiera de un museo para promover el esparcimiento de la comunidad, como
espacio idóneo para acercarse, expresar y disfrutar de la cultura recreación y las
artes.
1.1 JUSTIFICACIÓN
Actualmente la zona norte del Estado Anzoátegui, se encuentra desprovista
de suficientes espacios de desarrollo cultural y recreativo, la realización de la
Propuesta Arquitectónica del Museo de Chocolate de Willy Wonka beneficiará a la
población en general de manera en que existirá un mayor conocimiento del origen y
proceso del cacao, fruta que da origen al Chocolate, alimento en el cual gira en
torno el proyecto en sí, de manera que de la mano del mundo de Willy Wonka se
pueda recuperar el interés hacia esta marca de dulces y paralelamente proporcionar
la información requerida, y fomentar la interacción entre ciudadanos que
enriquezcan la cultura y el aprendizaje en el estado, mejorando de esta manera la
arquitectura del lugar con armonía con la vegetación ya existente, convirtiéndolo en
un lugar atractivo para la población en general y recuperar el turismo que ha ido
perdiendo fuerza con el pasar del tiempo.
El diseño de esta propuesta es relevante, oportuna y conveniente, por tal motivo,
tendrá la intención de sustentar la integración a la vida pública del área donde se
implantará, teniendo la posibilidad de estructurar el espacio a través de áreas
culturales y recreacionales, promoviendo la convivencia ciudadana y teniendo un
impacto positivo en la vida urbana y por ende en los valores fundamentales que
impulsarán el desarrollo integral de la ciudad.
 El origen de los museos se basa en el coleccionismo, entendiendo por colección
aquel conjunto de objetos que se encuentra sujeto a una protección especial con la
finalidad de ser expuesto a la mirada de los hombres. Se trata de objetos que han
sido reunidos por respeto al pasado, el instinto de propiedad, el amor al arte, el
prestigio social (unido en ocasiones al mecenazgo artístico), el afán de perpetuarse
en la memoria y el puro coleccionismo. Los impulsores de la creación de museos
configuraron desde la Antigüedad una élite que detentaba el saber y, como
consecuencia, el poder (la realeza, la aristocracia, la Iglesia, la burguesía). 
El hombre por naturaleza y a lo largo de la historia se ha dedicado a la recolección. Esto fue
evolucionando con el tiempo y derivó en el coleccionismo, que es la raíz de los museos.
Etimológicamente la palabra proviene del griego museion, que era un sitio dedicado a las
musas y divinidades inspiradoras. La humanidad pronto descubrió los bienes u objetos
culturales como fundamentales para comprender el pasado y vislumbrar el futuro.

Uno de los primeros recintos de este tipo surgió en Alejandría alrededor del 280 a. C. era
considerado como un centro de investigación y muestrario de distintas piezas. Babilonia hizo lo
propio al exhibir botines de guerra, en tanto Egipto dio los primeros pasos al reunir
propiedades materiales de faraones como preparación para el otro mundo. Grecia fue el
primero en mostrar en los templos distintos accesorios a los ciudadanos en general. Roma le
rindió tributo a la guerra al presentar al aire libre, herramientas utilizadas en batalla. Con la
irrupción de la religión también vino la compilación de cosas importantes para la iglesia. 
Durante las cruzadas los saqueos formaron parte del atesoramiento de distintos países. Fue en
el Renacimiento que se hizo costumbre el coleccionismo, es en ese momento que comienzan a
ser didácticos, educativos y científicos. Asimismo, fue en este periodo que recibieron
formalmente el nombre de museos. Italia fue un fuerte impulsor de las muestras de todo tipo,
en tanto, Francia mostró sus colecciones reales a visitantes distinguidos. Al principio solo la
burguesía se introdujo en este mundo, posteriormente se darían recintos privados o públicos
con la finalidad de un bien común.
El aliento a las distintas artes fue clave para el crecimiento de los mismos.

Los primeros en aparecer fueron el Museo Británico en (1759), Hermitage (1764), Vaticano
(1782) y el de Louvre (1793).

El resto, es historia. Ahora no podríamos concebir ningún sitio sin su presencia.