Está en la página 1de 13

TIJUANA, BAJACALIFORNIA, MEXICO.

UNIVERSIDAD DEL DESARROLLO PROFECIONAL

UNIDEP

EL PAPEL DE ENFERMERIA EN EL CUIDADO DEL PACIENTE TERMINAL Y EN EL


ACOMPAÑAMIENTO DEL FALLECIMIENTO

Autores: Mendivil Córdova David

Pérez Montiel Shantal

Tutor: Lic. Ceballos Sánchez Osiris Esmeralda

Baja california. / /2020


Capítulo 1

Planteamiento del problema.

1.1.- Antecedentes.

Desafortunadamente de acuerdo a las investigaciones realizadas son muy pocos los


profesionales de la salud que están completamente capacitados en el tema de los
cuidados paliativos en el paciente en fase terminal y el cómo saber lidiar con la familia y
esto afecta no solo al paciente y a la familia si no también al profesional de enfermería lo
cual los puede llevar a dificultades y emociones como malestar y angustia.

1.1.1 locales.

De acuerdo a las investigaciones realizadas actualmente existen líneas de cuidados


paliativos hacia el paciente al final de la vida, sin embargo, éste también contempla una
familia que sufre durante el doloroso proceso, del cual enfermería tiene un papel crucial
a desempeñar y trabajar, para abordar de forma correcta tal situación.

Desafortunadamente son muy pocos los profesionales de la salud que están


completamente capacitados en el tema de los cuidados paliativos en el paciente en fase
terminal y el cómo saber lidiar con la familia, lo que conlleva a que en las diferentes
instituciones de salud no cuenten con enfermeras(os) que se enfoquen solamente al área
de cuidados paliativos, teniendo así una gran sobre carga de trabajo en donde los
pacientes en fase terminal no pueden obtener los cuidados paliativos adecuados y esto
conlleva a un descuido tanto del paciente como de la familia. Desatendiendo la
obligación profesional que sienten las enfermeras de suplir las necesidades de los
pacientes en fase terminal, entre las cuales están la comunicación, compañía y el
cuidado integral.

Al buscar y no encontrar investigaciones referentes a este tema en el área local en la


que me encuentro al día de hoy confirma e intensifica la problemática que hay en el
sector salud, de que, desafortunadamente son muy pocos los profesionales de la salud
que están completamente capacitados en el tema de los cuidados paliativos en el
paciente en fase terminal y el cómo saber lidiar con la familia y esto afecta no solo al
paciente y a la familia si no también al profesional de enfermería lo cual los puede llevar
a dificultades y emociones como malestar y angustia.

1.1.2 Nacionales.

En 1858 Florence Nightingale escribió, que nuestro objeto fundamental como enfermeras
es, Situar al paciente en el mejor estado posible para que la naturaleza actúe en él.
Nuestra profesión es: Una ciencia, pero también un arte. Hay que aceptar la muerte con
humildad y humanidad, para pasar del curar al aliviar. Tenemos un compromiso ético con
cada uno de nuestros pacientes, el no abandonarlos y acompañarlos aliviando los
síntomas adversos durante el trayecto de su enfermedad, respetando su autonomía,
permitiéndoles partir rodeado de sus seres queridos en un ambiente cálido y de amor,
nosotros en su compañía. La enfermera debe brindar calidad y calidez a sus pacientes
permitiendo satisfacer sus necesidades físicas, emocionales, sociales y espirituales
como un ser humano que se encuentra en el lecho del dolor. (Velasco, 2000)

Nosotros podemos hacer que el paciente esté en un medio adecuado lleno de calidad,
calidez y amor. El tener a la vista objetivos conocidos pueden hacer que el paciente se
encuentre más cómodo y seguro, preguntar a él y a la familia qué es lo que lo motiva
más; pudiendo ser: imágenes, libros, fotos y objetos significativos; de esta forma se le
concede algún control sobre su medio ya que lo ha perdido en otros aspectos de la vida
diaria. Debemos aprender a escuchar, tener tacto y no evadir conversaciones por
dolorosas que sean, hay que estar ahí, escuchar al paciente, no debemos preocuparnos
por reconfortar con palabras correctas para consolar a nuestro paciente; sólo necesita la
presencia, hay que usar nuestro tacto; ésta es una manera significativa de comunicación.
Es vital estimular a la familia para que participe en las conversaciones, pasatiempos y
actividades del paciente. (Velasco, 2000)

Es importante recordar que los pacientes en fase terminal aparte de los cuidados de
enfermería correspondientes necesitan que el personal de enfermería que se encuentre
a su cuidado, de esa atención de compañía en los últimos momentos de su vida, para
que el paciente se sienta en pleno confort y con una calidad de vida agradable en sus
últimos momentos vida
Para la O.M.S., la asistencia paliativa busca mejorar la calidad de vida de los pacientes
y sus familiares, al afrontar los problemas asociados con padecimientos en situación
terminal. Dicho de otra manera, son los cuidados apropiados para el paciente con una
enfermedad avanzada y progresiva, donde el control del dolor y otros síntomas, así como
los aspectos psicosociales y espirituales cobran mayor importancia. Hoy en día, es cada
vez más común considerar que el enfermo terminal debe ser el principal protagonista de
sus cuidados. Desde este punto de vista, el trabajo profesional de enfermería consta de
procurarle a los pacientes una mayor calidad de vida en un marco de respeto hacia su
decisión; tal planteamiento requiere de un mayor compromiso personal y sobre todo de
una mayor preparación del profesional de enfermería en los terrenos asistencial y
humano. (Nayeli Merino López, 2010)

Según Collière: Desempeñando el rol de enfermería, ésta experimenta en el curso de su


formación y durante el ejercicio profesional, la influencia de corrientes predominantes
que contribuyen a orientar de forma determinante los imperativos de su rol. Si bien el
deber de cuidar es una constante en la naturaleza de la enfermería y en su desarrollo
profesional (que ha permanecido firme a pesar de los efectos que los diversos factores
socioeconómicos, culturales, políticos o sanitarios hayan podido influir sobre ella), existe
otra serie de factores que han transformado su concepción. Entre ellos se encuentran:
las creencias y valores de los profesionales de la enfermería y de las personas que
requieren de sus cuidados. (Nayeli Merino López, 2010)

Esto nos lleva a la constante de que los cuidados paliativos en el paciente terminal y sus
familiares no se debe ver perjudicado por ninguno de los ideales o creencias personales
ya sean del paciente familiares o del mismo personal de enfermería, si no que se debe
de ser profesional y racional teniendo como meta la calidad de sus últimos momentos de
vida del paciente.

La vivencia y significación del proceso de morir dependen de construcción sociocultural,


cosmovisión de la vida, conocimientos y experiencias personales. En México, como en
otros países, la muerte es algo contradictorio, temido, evadido y venerado. El personal
de enfermería está inmerso en esta cultura y desde ahí ejerce su profesión, pretendiendo
contribuir en la promoción, mantenimiento, recuperación de la salud y asistencia de
enfermos terminales. Existen múltiples investigaciones sobre actuación y actitudes ante
la muerte en enfermería, pero vacíos sobre impacto emocional ante el desempeño del
cuidado. (Pérez Vega & Cibanal, 2016)

La manera como en cada cultura se entiende la muerte, guarda relación con la


cosmovisión de la vida, lo natural, lo espiritual y lo divino En la sociedad occidental la
muerte es un tema tabú y como tal se evade, se disimula y se niega hasta el final. Se
teme no sólo a la muerte, sino al proceso que conduce a ella. En México, la manera de
ver la muerte proviene de una cultura que fusiona lo prehispánico y español, se llora y
teme y a la vez se le conmemora y trivializa, pero siempre suscita emociones intensas
aun cuando se le termina aceptando como algo natural y como una forma de transitar a
otro plano de existencia en otra dimensión. (Pérez Vega & Cibanal, 2016)

El lidiar con la muerte de un ser humano no es algo fácil, menos cuando es alguien
cercano, en el caso de un paciente terminal tanto para él, como para la familia y el
personal de enfermería encargado de estar proporcionando los cuidados paliativos
correspondientes deja emociones intensas de dolor, tristeza, pensamientos de reflexión
y sentimientos encontrados, ya que aun cuando se le a aceptado como algo natural que
debe de pasar es muy difícil ver partir a ese paciente ya que al convivir con ellos día a
día en el transcurso de su enfermedad el personal de enfermería llega a tener cierto
afecto hacia ellos.

1.1.3 Internacionales.

En la revisión de la literatura se hace mención de que es necesario aprender a percibir


la muerte como algo natural; parte de nuestra vida cotidiana, ya que los estudiantes de
enfermería, interpretan el fenómeno de la muerte y la muerte misma bajo su propia óptica
y entendimiento. Por lo que la actitud y el miedo a la muerte en enfermería pueden
condicionar la calidad de cuidados en pacientes terminales, por ello, es importante
abordar esta formación, considerando que prácticamente todos los enfermeros en algún
momento de su vida profesional tendrán un contacto con la muerte, debiendo
proporcionar un cuidado sensible tanto a los pacientes terminales, así como a sus
familiares. Y la falta o escasa preparación en este campo puede llevar a producir ciertas
alteraciones en el nivel emocional de los próximos profesionales, como son la ansiedad,
el miedo y el estrés, por ello será de suma importancia que los estudiantes de enfermería
desarrollen estrategias eficaces de afrontamiento. (González-Juárez, 2014)

Por lo anterior se presenta la experiencia de un estudiante de enfermería en la ejecución


de un plan de intervenciones enfocado en la implementación de cuidados paliativos,
enfatizando algunos elementos sobre la importancia de la calidad de la atención
prestada. La literatura refiere que los cuidados paliativos son una modalidad de atención
total, activa y continua de pacientes y sus familiares por un equipo multidisciplinario; no
con la finalidad de alargar a toda costa la supervivencia del paciente terminal, -cayendo
en el encarnizamiento terapéutico- si no de mejorar su calidad de vida y cubrir todas sus
necesidades. (González-Juárez, 2014)

Un elemento imprescindible de los cuidados paliativos, es la calidad con la que se


brindan; entendiendo que la calidad es un principio rector del cuidado de enfermería, que
se define como una ayuda eficiente, en términos de oportunidad y uso adecuado de los
recursos. La literatura y la experiencia misma confirman que cuando la calidad y eficacia
de los cuidados brindados se valoran, se refleja en una satisfacción del paciente, familia
y del equipo multidisciplinario. Durante la atención se deben considerar diferentes
ámbitos y necesidades como son: 1. Aspectos orgánicos (aspectos médicos). 2.
Emocionales (aspectos psicológicos). 3. Familiares y laborales (sociales). 4.
Existenciales (espirituales-metafísicos). 5. Bienestar y calidad de vida, especialmente el
alivio del dolor; logrando esto mediante atención oportuna, personalizada, humanizada,
continua y eficiente brindada por el personal de enfermería, de acuerdo con estándares
definidos para una práctica profesional competente y responsable. (González-Juárez,
2014)

El miedo a la muerte por falta de formación académica puede llegar a ser un gran
obstáculo para el personal de enfermería en la eficacia para proporcionar los cuidados
paliativos correspondientes con calidad y eficacia, recordando que en algún momento de
su trayecto laboral todo el personal de enfermería tendrá que toparse con la triste realidad
de tener a un paciente en fase terminal, por eso es necesario que obtenga los
conocimientos adecuados y profesionales que requiere, dejando de lado los tabúes,
creencias, miedos y estrés sobre el tema de la muerte.
El concepto de dignidad humana, el sentido de la vida, de la libertad, afectan al sentido
de la muerte. Los cuidados paliativos manejan con escrupulosidad y de forma correcta
estas expresiones del final de vida, que definen situaciones muy concretas y acciones
bien determinadas, de las que depende la buena práctica médica, social y humana, con
quienes se hallan en sus últimos momentos. Todo ser humano se plantea alguna vez en
la vida como será su muerte. Cuando la finitud está cerca, lo que espera es vivirla y ser
tratado como persona hasta el último momento, independientemente de dónde se
produzca el óbito. La filosofía de la vida ante la muerte, entre el deseo y la imposición
social. (Sanz, 2014)

La intervención adecuada ante una situación de la trascendencia que tiene el acto de


morir, requiere una gran responsabilidad por parte de la persona que presta ayuda y
atención, sea profesional sanitario o familiar próximo. El planteamiento del tema de la
muerte, abre un amplio abanico de posibilidades de análisis, y viene determinado por
muchísimas variables vinculadas a lo que es la vida cotidiana, como el propio ser
humano; ya sea desde un determinado tiempo histórico, el lugar del fallecimiento, y en
todo su contexto. Por lo tanto, debido a la calidad de intrínseco y exclusivo que tiene el
fenómeno de la muerte, tendrá tantas facetas como las que tuviera la vida de la persona,
sea esta joven o anciana. Lo importante es brindar apoyo para que la situación de muerte
por la que debe pasar el ser humano sea óptima, aliviando sufrimientos y angustia
innecesarios para todos los implicados en el proceso. (Sanz, 2014)

El paciente en fase terminal, aunque este en sus últimos momentos de vida sigue siendo
un ser humano y debe tener un trato digno y de calidad, y todo esto dependerá del
personal de enfermería llevando a cabo las intervenciones y cuidados adecuados
teniendo en mente que lo importante es brindar apoyo para que la situación de muerte
por la que debe pasar el ser humano sea óptima, aliviando sufrimientos y angustia
innecesarios para todos los implicados en el proceso.

La Organización Mundial de la Salud definió estos cuidados como el enfoque que mejora
la calidad de vida de pacientes y familias que se enfrentan a los problemas asociados
con enfermedades amenazantes para la vida, a través de la prevención y alivio del
sufrimiento por medio de la identificación temprana e impecable evaluación y tratamiento
del dolor y otros problemas físicos, psicológicos y espirituales. (diario del enfermero,
2014)

La calidad de las intervenciones enfermeras exige profundizar en los cuidados


individualizados definidos en los términos propios del enfermo, especialmente cuando la
enfermedad es persistente, irreversible y que conducirá en un tiempo determinado a la
muerte», afirma Eulalia Alburquerque, coordinadora del trabajo. (diario del enfermero,
2014)

La investigación, realizada por un grupo de enfermeros de la Universidad de San Jorge


(Zaragoza) y la Universidad Europea (Madrid), pone de manifiesto más de 50
actuaciones que los enfermeros deben enseñar a los cuidadores principales de los
enfermos para paliar el final de la vida. Los investigadores subrayan que “estos cuidados
no aceleran ni retrasan el momento del fallecimiento, sino que ofrecen un sistema de
soporte para ayudar a los pacientes a vivir tan activamente como sea posible hasta la
muerte”. Los profesionales de enfermería son los referentes principales de los
cuidadores, por lo que tienen que asegurarlos para que el enfermo alcance un cierto nivel
de bienestar. (diario del enfermero, 2014)

La intervención enfermera con los cuidadores se centra en potenciar sus capacidades,


ayudarles a organizar su vida cotidiana de la mejor manera posible respetando la forma
de hacer de cada núcleo familiar. La enfermera debe evitar dar listados de consejos
estandarizados. Su primer objetivo es conocer al grupo familiar, sus características, sus
aspectos más sanos para, a partir de ahí, construir conjuntamente el primer plan de
cuidados», destaca Alburquerque. (diario del enfermero, 2014)

La actuación de enfermería ante el cuidado físico en el paciente terminal, resalta la


importancia de la enfermería para que esta atención se realice de la mejor manera
posible. Los cuidados paliativos son por completo necesarios con pacientes que
presentan una enfermedad en situación terminal. Esto no quiere decir que solamente se
deban practicar a personas geriátricas, sino también a personas que padecen una
enfermedad avanzada, progresiva e incurable. En este sentido, los cuidados paliativos
no sólo van encaminados al paciente, sino que incluyen a todo su entorno y le aportan
un mayor grado de confort durante el transcurso de la enfermedad.
1.2 Problemas de la investigación

El problema que notamos en esta investigación son, las dificultades y emociones como
malestar y angustia tanto para el paciente como para la familia y entra aquí la obligación
profesional que sienten las enfermeras de suplir las necesidades de los pacientes en
fase terminal, ya sea la compañía, cuidados esenciales, aplicar medicamentos, pero
sobre todo la compañía a el paciente y sus familiares en este proceso.

Este trabajo pretende contribuir acerca de las condiciones en las cuales se desarrolla la
práctica del cuidado y al mejoramiento del acompañamiento al paciente en la etapa final
de la vida, haciendo actos altruistas que fundamentan y promueven el cuidado humano,
así como la calidad del mismo. Haciendo un poco menos dolorosa y angustiante la
muerte de paciente ya que ocurre en un hospital y el paciente se encuentra lejos de su
familia, ya que es un derecho del paciente morir acompañado de sus seres queridos,
pero en un hospital existen normas y horarios con el número de personas que pueden
estar acompañándolo, también encontramos como problema la falta de confort e
intimidad y falta de preparación del personal para acompañar a el paciente en la etapa
terminal.

Son muy pocos los profesionales de la salud que están completamente capacitados en
el tema de los cuidados paliativos en el paciente en fase terminal, lo que conlleva a que
en las diferentes instituciones de salud no cuenten con personal que se enfoquen
solamente al área de cuidados paliativos, teniendo así una gran sobrecarga de trabajo
en donde los pacientes en fase terminal no pueden obtener los cuidados paliativos
adecuados y esto conlleva a un descuido tanto del paciente como de la familia.
Desatendiendo la obligación profesional que sienten las enfermeras de suplir las
necesidades de los pacientes en fase terminal, entre las cuales están la comunicación,
compañía y el cuidado integral.

1.3 objetivos.
1.3.1 Objetivo general.

Garantizar una muerte digna de las personas con enfermedad avanzada en fase
terminal, preferiblemente junto a su familia y en su entorno.

1.3.2. Objetivos específicos.

 Invitar y concientizar a las instituciones de salud y escuelas de enfermería a


instruir y capacitar a todo el personal de enfermería en el área de los cuidados
paliativos.

 acompañar al paciente con enfermedad en fase terminal para el afrontamiento y


asimilación a él bien morir, a medida que se acerca el momento de la muerte.
 Orientar a las familias y acompañarlas en el proceso de la enfermedad y muerte.
 Propiciar un ambiente de confort al alcance de lo permitido en el área hospitalaria
de acuerdo a la voluntad del paciente.
 Contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los pacientes con enfermedad
terminal avanzada y sus familias, de manera racional, planificada y eficiente,
garantizando los cuidados paliativos según los principios rectores del Sistema
Nacional de Salud.
 Que el personal de enfermería. Comprenda el significado e importancia del
acompañamiento al paciente con enfermedad en fase terminal y la
responsabilidad profesional con la que tratan con el paciente. Que entiendan que
el cuidarlo y acompañarlo va más allá del diagnóstico médico.
 Instruir al profesional de enfermería a que debe tener siempre una actitud de
respeto y apoyo de las creencias espirituales personales del paciente (incluso si
parecen inusuales o son desconocidas.
1.4 preguntas de investigación.

1.4.1 Pregunta general.

¿Como garantizar una muerte digna de las personas con enfermedad avanzada en fase
terminal?

1.4.2 Preguntas específicas.

¿Como Invitar y concientizar a las instituciones de salud y escuelas de enfermería a


instruir y capacitar a todo el personal de enfermería en el área de los cuidados paliativos?

¿Como acompañar al paciente con enfermedad en fase terminal para el afrontamiento y


asimilación a él bien morir, a medida que se acerca el momento de la muerte?

¿Como orientar a las familias y acompañarlas en el proceso de la enfermedad y muerte?

¿Como propiciar un ambiente de confort al alcance de lo permitido en el área hospitalaria


de acuerdo a la voluntad del paciente?

¿Como contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los pacientes con enfermedad


terminal avanzada y sus familias, de manera racional, planificada y eficiente,
garantizando los cuidados paliativos según los principios rectores del Sistema Nacional
de Salud?

¿Como hacer que el personal de enfermería? Comprenda el significado e importancia


del acompañamiento al paciente con enfermedad en fase terminal y la responsabilidad
profesional con la que tratan con el paciente. Que entiendan que el cuidarlo y
acompañarlo va más allá del diagnóstico médico.?

¿Como instruir al profesional de enfermería a que debe tener siempre una actitud de
respeto y apoyo de las creencias espirituales personales del paciente (incluso si parecen
inusuales o son desconocidas)?
Capítulo 2.

Marco teórico.

EL PAPEL DE ENFERMERIA EN EL CUIDADO DEL PACIENTE TERMINAL Y EN EL


ACOMPAÑAMIENTO DEL FALLECIMIENTO.

1.- la enfermería y los cuidados paliativos.

2.- La compañía y la soledad: características del acompañamiento.

3.- El cuidado en el final de la vida

4.- Necesidades físicas del enfermo en el final de la vida.

5.- Necesidades psicosociales del enfermo en el final de la vida

6.- Nivel de conocimientos del personal de salud sobre cuidados paliativos

7.- La carga del cuidador.

8.- Acceso insuficiente a los cuidados paliativos.

 ¿Qué pueden hacer los países?


 Respuesta de la OMS.
Bibliografía:

Buisán, R., & Delgado, J. C. (2017). El cuidado del paciente terminal. In Anales del
Sistema Sanitario de Navarra

Burgos, A. M., & Simarro, D. M. (2009). Enfermería y el paciente en situación


terminal. Enfermería global.

Maza Cabrera, M., Zavala Gutiérrez, M., & Merino Escobar, J. M. (2009). Actitud del
profesional de enfermería ante la muerte de pacientes.

También podría gustarte