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Educación y ciudad

políticas educativas
Revista del Instituto para la Investigación Educativa y el Desarrollo Pedagógico - IDEP

Bogotá, D. C., Colombia, N° 9, diciembre de 2005.

Directora (e)
Mireya González Lara
Tema monográfico revista N° 9
Educación y ciudad: políticas educativas

Consejo directivo
Abel Rodríguez Céspedes, Hernando Gómez Serrano,
Alberto Martínez Boom, Pedro Alfonso Luque Manrique, María Cristina Torrado

Comité editorial
Ruth Amanda Cortés Salcedo, Mercedes Boada,
Ramón Jimeno, Hernán Suárez y Juan Carlos Quintero

Árbitros para este número


Ruth Amanda Cortés Salcedo, Dora Lilia Marín, Pedro Lucas Gamba y Jorge Vargas

Coordinación editorial
Germán Gaviria Álvarez

Comité científico
Rocío Rueda Ortíz, José Ángel López, Federico Revilla, Gloria Pérez Serrano,
Jaume Trilla, Mariano Nadorowsky y Manuel Restrepo Domínguez

Colaboran en este número


Nohema Hernández Guevara, Esperanza Cerón Villaquirán, Manuel Igiñiz, Luis Carlos Alvellaneda, Francisco Cajiao,
Ramón Moncada, Ana María González Forero, Pablo Gentilli, Luis Eduardo Pérez Murcia, Luz Amparo Villegas, Germán Gaviria

Área de Comunicación Educadora, IDEP


Diana María Prada Romero

Traducciones
Ana María González

Publicación semestral del IDEP


Centro de Memoria Pedagógica
Correspondencia, información, canjes y suscripciones:
Avenida El Dorado N° 66-63. Piso 3. Bogotá, D. C., Colombia
Teléfono: 324 1268, e-mail: educacionyciudad@idep.edu.co
Precio por ejemplar: Colombia, $10.000. América Latina, U$15
Suscripciones: 2 números Colombia $15.000. América Latina: U$10

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y no comprometen la política institucional del IDEP

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giselleg@nomos.com.co

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Contenido

Presentación 4 Poder, política y políticas


modos de empoderamiento
La educación del maestro 59
Ana María González Forero
un asunto de interés público 7 Colombia
Nohema Hernández Guevara
Esperanza Cerón Villaquirán
Colombia El derecho a la educación 73
Pablo Gentilli
Brasil
La tendencia descentralizadora 23
y el derecho a la educación Derecho e indicadores
Manuel Iguiniz
una perspectiva 89
Perú
Luis eduardo Pérez Murcia
Colombia
Estado y derecho 41
educación en Colombia Pedagogía investigación
Luis Carlos Avellaneda y políticas educativas 111
Francisco Cajiao Luz Amparo Villegas
Ramón Moncada y otros Colombia
Colombia
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Presentación

u
na gran enseñanza de los trabajos publicados en la revista Educación
y ciudad Nº 8 sobre Ciudad Educadora es que las sociedades en gene-
ral tienden hacia modos de autocreación que se renuevan sin cesar,
hacia la construcción de acervos tangibles e intangibles –infraesctrura, conocimien-
to, tradiciones– que se llenan de sentido cuando los ciudadanos se nutren de sus con-
tenidos, cuando los transforman de manera creativa y fortalecen una de sus institu-
ciones primordiales: la escuela, hija de los sistemas educativos. Hoy la fuerte dinámi-
ca de las ciudades modernas no sólo demanda a sus habitantes tomar conciencia ple-
na del lugar que habitan, sino cuestionar el papel que desempeñan en cada una de
sus instituciones. De hecho, ya Protágoras había afirmado que todo ser humano dis-
pone de un mínimo de saber-hacer político que se refleja de distintas maneras en el
desarrollo de su vida personal y en el gobierno de la ciudad; saber-hacer político que
adquiere dimensiones insospechadas y trascendentales cuando está integrado con la
historicidad. Una de las causas más comunes de la decadencia y ruina de las socieda-
des es el bloqueo de los procesos históricos directamente relacionados con las institu-
ciones políticas, pues éstos no sólo crean la norma sino los mecanismos de autocrea-
ción simbólica. Teóricos de la filosofía política como Robert Redeker afirman que la
política, en su sentido fuerte, puede considerarse como una poética, pues de ella no
sólo manan la institucionalidades tangibles, sino las imaginarias, aquellas que, pensa-
das en términos históricos, son autopoiéticas y dotan de un futuro insospechado a la
sociedad. Es impensable el futuro de una sociedad que no ‘desbloquea’ los procesos
de desarrollo individual del ciudadano, que no potencia en él los principios de alte-
ridad, los únicos capaces, como plantea Castoriadis, de afirmar el ‘imaginario institu-
yente’; es decir, aquello que da origen a las instituciones y a las significaciones colec-
tivas que dan cohesión a las sociedades humanas y las mueven hacia la autocreación,
hacia la renovación sin cesar. Por ello el ser humano se puede convertir en ciudadano
y la sociedad puede constituirse en ciudad.

4
p r e s e n t a c i ó n

De manera equívoca, con demasiada frecuencia se asocia la producción de co-


nocimiento con la producción de riqueza y el crecimiento per cápita; pero en modo
alguno ello significa que haya un sistema educativo orientado hacia la construcción
del ‘imaginario instituyente’, hacia la calidad de vida, hacia la formación en la auto-
nomía como condición esencial de la formación sólida en la alteridad. Durante las
últimas tres décadas del siglo XX, tiempos afortunados de declive de las dictaduras
que basaron su ejercicio institucional en la negación de los procesos históricos, se
abrió el debate sobre el significado de la democracia. Los ciudadanos no sólo hemos
venido entendiendo que las ciudades han adquirido dimensiones distintas, sino que
somos dueños de un mínimo de saber-hacer político capaz de transformar los modos
de apropiarnos de un conocimiento que permite el cuestionamiento, la disensión y
la construcción de alianzas por encima incluso de las prácticas autoritarias.
Por otro lado, en muchos países de América Latina no existen sistemas educati-
vos sustentados en políticas públicas de equidad, no segmentados ni diferenciados en
la calidad, y el hecho de que exista cierta infraestrutura no significa que exista equidad
en el derecho a la educación. Los derechos a la educación, ganados a sangre y fuego des-
de la proclamación de los Derechos del Hombre, hoy siguen siendo defendidos en esta
región del mundo donde la educación continúa siendo el goce de pocos (hablo no sólo
de la educación en sus distintas modalidades, sino del derecho al libro y a la cultura, y
en Colombia, de manera extraña, el Ministerio de Cultura y el de Educación van por
caminos distintos). Hoy, la pelea por estos derechos ha puesto sobre el tapete las pro-
fundas consecuencias para la región el bloqueo de los procesos históricos y se ha con-
vertido en un lugar común afirmar que un país sin educación es un país sin futuro; afir-
mación que desgraciadamente ha perdido su potencia significativa por su uso reiterado,
pero no por ello podemos olvidar que debemos desarrollar esquemas de inclusión so-
cial como la gratuidad de una educación de calidad que apunte a la construcción del
ser humano moderno, diverso y complejo. Paradójicamente, a nuestros Estados no les

5
e d u c a c i ó n y c i u d a d

interesa formar personas autónomas, capaces de unirse y de arriesgarlo todo por la de-
fensa de esa autonomía y de sus derechos; al Estado le interesa formar seres que se tole-
ren antes que seres realmente solidarios; técnicos de bajo perfil antes que profesionales
capaces de dirigir investigaciones que tiendan a solucionar problemas de fondo; perso-
nas que crean ciegamente en sus discursos antes que seres pensantes capaces de crear
sus propios discursos. Al Estado hoy no le interesa gobernar seres que interroguen y
condenen la perversidad de ciertas prácticas, sino, como quería Aristóteles en los Ana-
líticos, ‘ser un pastor de rebaños’.
Pablo Gentilli afirma que Finlandia tiene un ‘excelente desempeño educativo’.
Y es verdad que allí la situación laboral y de prestigio profesional para el maestro es
envidiable: no sólo cuentan con respeto contractual, sino que sus estudiantes gozan
de una capacidad instalada propia de un país que piensa en su futuro. Pero algo anda
mal allí. Las tasas de suicidios en los llamados ‘países del primer mundo mundo’ son
alarmantes. En los sistemas educativos de Occidente no se está formando al indivi-
duo en la autonomía –principio clave de la felicidad humana–, y el atraso histórico
de muchos de estos sistemas no está en las prótesis tecnológicas ni en las lógicas,
como anotábamos, de mayor producción de saber – mayor riqueza.
En nuestro continente se ha idealizado la función de la escuela pública como
ese lugar donde es posible dar sentido a la vida democrática, donde se forma para el
ejercicio de los derechos y el cuestionamiento a lo instituido. No podemos perder de
vista que si bien la escuela está llamada a liderar procesos históricos de largo alcance,
es necesario que demande, más que calidad de educación en términos de cobertura,
calidad en los programas educativos y solidez política de las instancias donde estos
son elaborados. No podremos soslayar un futuro si la escuela no es capaz de cuestio-
nar el sistema educativo que la creó –y acaso su destino sea su descentralización-, si
las políticas que rigen el destino de un Estado no apuntan a la formación de seres au-
tónomos, capaces de buscar la felicidad antes que la riqueza.
Los artículos que conforman esta entrega de Educación y Ciudad Nº 9, son ejer-
cicios afortunados de estas búsquedas.

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La educación

Colombia
un asunto de interés público
Nohema Hernández Guevara
Psicóloga. Magistra en Psicología Comunitaria y Especialista en Género y Políticas Públicas (FLACSO, Ar-
gentina). Docente de larga trayectoria en distintos niveles del sistema educativo. Investigadora en temas de sub-
jetividad y política, procesos de formación ciudadana. En la actualidad directora nacional del programa de educa-
ción de la Corporación Viva la Ciudadanía.

Esperanza Cerón Villaquirán


Médica Cirujana (Universidad del Cauca) especializada en Medicinas Alternativas y temas de Género y de
Ordenamiento Territorial, Diseño y Gerencia de Políticas Públicas. Profesora de cátedra en Medicina Comunitaria
de la Universidad del Cauca; siendo Coordinadora de la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Ca-
ribe, dirigió el Proyecto “Universidad Itinerante realizado con sendas Universidades de Córdoba en Argentina, Re-
pública Dominicana, El Salvador y las Universidades del Cauca y el Valle en Colombia. Actualmente colabora con
el Programa de Educación de Viva la Ciudadanía.

Resumen
Este artículo desarrolla un balance académico - político del Foro Educativo Distrital 2005 analizando críti-
camente sus potencialidades, tensiones, tendencias, continuidades y discontinuidades. Para el análisis se refe-
rencian tres grandes retos asumidos en su edición 2005: trascender el marco disciplinar y docente, contar con la
participación de actores sociales y no solamente con el sector educativo, y entenderlo como proceso no como
evento. El encuentro entre ciudadanía e institucionalidad democrática es su potencialidad más notable, en tanto
escenario de deliberación sobre la política pública educativa que responda propositivamente al reto de la materia-
lización del derecho a la educación en la ciudad. La pedagogía se encuentra con las tensiones propias de su
ineludible dimensión política en el desafío de contribuir a construir mejor ciudad y mejores ciudadanías y en lograr
hacer de la educación un real asunto de interés público.

Palabras clave
Balance académico-político, Foro Educativo, políticas, experiencias, política pública.

Abstract
This article presents a critical analysis of the possibilities, tendencies, continuities, discontinuities, strengths
and weaknesses presented by the Bogotá Educational Forum 2005. The analysis is based on the three great cha-
llenges presented to the event in 2005: trascend disciplinary understanding of education, involve non educational
societal actors, and understand the challenge as a process not only as an event. The utmost accomplishment
would be the encounter between citizens and institutions for the materialization of the right to education through
public deliberation around educational public policy. In this sense, pedagogy, with its inevitable political dimension,
invites and pertains to accomplishing an idea where education is a question of public interest and where, collecti-
vely, better citizens and cities are built.

Key words
Educational Forum, policy, public policy, experiencies, socio political analysis.
e
l Foro Educativo Distrital, FED, 2005 invitó a sector educativo y al social desde escenarios y estrate-
una reflexión colectiva sobre los significados, gias de deliberación sobre política pública educativa,
sentidos y expresiones de las políticas públicas institucional, local y distrital, para hacer de la educa-
educativas en el Distrito Capital. Más de veinte mil ción un asunto de interés público1, y situar al Foro
personas de la Bogotá urbana y rural se reunieron en Educativo como proceso y no como evento.
diversos momentos, durante los meses previos al De esta deliberación fueron protagonistas do-
evento, para deliberar sobre la educación en sus ins- centes, directivos, estudiantes, padres y madres de fa-
tituciones y Localidades. milia, funcionarios de la administración distrital, or-
Este esfuerzo inédito culminó con la presencia ganizaciones sociales, sectores empresariales, univer-
de aproximadamente 2.500 personas, quienes durante sidades e investigadores sobre el tema.
tres días aportaron sus voces, experiencias, acuerdos, Cada uno de estos actores, y el conjunto, inter-
disensos y expectativas desde un punto de vista común: pelan y se interpelan a sí mismos sobre la política, sus
la materialización del derecho a la educación. proximidades y distancias con respecto a las realida-
El Observatorio de Pedagogía y Educación del des institucionales y locales, las formas de materiali-
IDEP, con la Corporación Viva la Ciudadanía, com- zación y las realidades que vulneran el derecho a la
parte con la comunidad académica, las organizacio- educación, su propia capacidad propositiva y de ges-
nes sociales y la ciudadanía un primer balance acadé- tión y, especialmente, sobre lo que están en disposi-
mico-político del FED 2005, que propone líneas de ción de hacer para darle continuidad al FED 2005,
reflexión y debate para reconocer y analizar crítica- clave del proceso.
mente los ejes centrales del proceso, sus tendencias,
continuidades y discontinuidades, así como las ten-
siones evidenciadas con respecto a la política educa-
tiva de la ciudad.
Se configuran para este fin cinco líneas temáti-
cas-analíticas, articuladas entre sí, que responden a
los tres grandes retos del FED 2005: superar el mar-
co disciplinar y docente que caracterizó las experien-
cias de los Foros Educativos anteriores; acercar al

Documento preparado como parte del proyecto de investigación


adelantado con el Observatorio de Pedagogía y Educación del 1 Tomado del documento preparatorio del Foro Educativo Distrital
IDEP 2005, elaborado por la Secretaría de Educación de Bogotá.

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

con formas de gestión puramente “tecnocráticas” y


El Foro: escenario de deliberación “eficientistas”.
pública La versión del Foro Educativo Distrital 2005,
la intensa fase de trabajo previa –preforo– y el inte-
La participación de la comunidad educa- rés demostrado por darle continuidad –posforo–, se
tiva, y de la sociedad civil en general, en la entienden desde la perspectiva de administrar con y
formulación y gestión de la política educativa para la ciudadanía. Según manifiesta el Secretario de
será un principio y una práctica fundamental Educación, sus esfuerzos están orientados a que la
del Plan Sectorial: Bogotá una Gran Escuela gestión administrativa esté al servicio de la gestión pe-
dagógica, no al contrario.
(Línea 5 de Política Educativa) Entendido como proceso, para dar cuenta del
FED 2005 se requiere un enfoque analítico-com-
Entendemos por deliberación pública el proce-
so mediante el cual ciudadanas y ciudadanos dia-
logan para aprender sobre asuntos de interés co-
mún, que han de traducirse en decisiones y accio-
nes públicas. La deliberación pública no es un
punto de llegada sino un camino democrático de
aprendizaje, comprensión y respeto por las diver-
sas opiniones.
Coherente con sus lineamientos, la actual admi-
nistración educativa distrital se caracteriza por intentar
imprimir a su gestión un estilo dialogante que interpre-
te el deseo de maestros y maestras por lograr acerca-
mientos fluidos y constructivos, y que supere las distan-
cias con que fueron tratados en pasadas administracio-
nes, con gran costo para el magisterio y para la calidad
de la educación. Suele afirmarse que dichas administra-
ciones se caracterizaron por sus prácticas de adminis-
trar la educación sin los educadores.
Para una administración con voluntad políti-
ca democrática, el diálogo y la deliberación pública
son ineludibles, si se quiere marcar la diferencia

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l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

prensivo, que permita desentrañar sus enormes com-


plejidades intrínsecas y extrínsecas, la multiplicidad
de factores que confluyen para hacerlo realidad, así
como los factores previstos y no previstos que van de-
finiendo su rumbo, en el entendido de que éste,
como cualquier otro proceso social, está marcado
por altos grados de incertidumbre, por lo cual no
puede ser visto solo como un conjunto de variables
preestablecidas y controladas.
Para los fines de este escrito, además del carác-
ter discursivo-deliberante de las políticas, destaca-
mos los contenidos que suscitan polémicas y perspec-
tivas diversas que se explican, en la mayor parte de educadoras a hacer presencia no solamente como inte-
casos, por sentidos y prácticas que conllevan intere- grantes de un gremio específico, sino también como
ses, relaciones y tradiciones de pensamiento en pug- ciudadanos y ciudadanas, lo cual requiere situarse res-
na, a las que nombraremos “tensiones”. pecto de la educación y de lo educativo no sólo como
asunto de interés del sector y sus gremios, o limitado a
Tensión 1: foro democrático, sobre los aconteceres de la institución educativa.
política democrática. Para la ciudadanía, las organizaciones sociales
Deliberación sobre asuntos educativos y para otros actores de la administración de la ciu-
dad, la invitación es a hacer de la educación un asun-
“Este es un Foro político, sobre política educativa”. to de interés propio, que les implica y afecta, defi-
No es posible saber a ciencia cierta qué tan inadver- niendo el futuro de su sociedad. Es decir, se trata de
tida pasó esta afirmación del Secretario de Educa- promover una ciudadanía interesada en el proyecto
ción, Abel Rodríguez Céspedes, durante su discurso educativo de su ciudad.
inaugural del FED. Pero si cada enunciado fue cui-
dadosamente escogido, dada la importancia política Tensión 2: ejecutores-receptores.
que la Secretaría de Educación Distrital, SED, le im- sujetos-actores de política pública
primió al proceso, hay que entenderla más bien educativa
como horizonte de sentido del Foro mismo y de la po-
lítica educativa en su conjunto. Tanto durante la fase de pre-foro, durante el
Para que tal horizonte no quede vacío de senti- Foro y para la fase de posforo, se invita al conjunto
do, debe leerse como una invitación a los educadores y de participantes a “… trascender de ser meros ejecu-
tores a sujetos de política pública”. Prefigurado por

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

La inequidad y la falta de auténtica democratiza-


ción, explícitas cuando no se ponen en acción ni se
otorga relevancia a mecanismos de inclusión de grupos
vulnerables en las escuelas, revela sistemas escolares
que reiteran relaciones excluyentes de poder de una mi-
noría que elitiza el acceso al conocimiento. Un ejemplo
de cómo opera este sistema de segregación-desigualdad
respecto a los logros educativos, es el caso de las muje-
res en América Latina, quienes han incrementado de
manera notable su participación en el sistema educati-
vo y en promedio obtienen mejores calificaciones que
los varones, sin que la distribución salarial y el mercado
de trabajo haya tenido para ellas cambios coherentes
con tales desempeños.
Las disputas sociales respecto al monopolio
del conocimiento parten de reconocer que conoci-
miento es poder y que las relaciones de poder están
los distintos actores que animaron la idea como es- siempre implicadas en las formas de construcción de
pacio de encuentro, se insiste en hacer explícito el conocimiento. Nuestras sociedades presentan for-
horizonte de sentido político democrático que con- mas de segmentación poderosas derivadas del siste-
voca la palabra y la pregunta sobre la educación, so- ma educativo, las cuales se evidencian en casos tan
bre lo educativo y sobre las acciones educativas en la específicos como la consecución de puestos de traba-
ciudad. Un marco conceptual más preciso sobre el jo, cuyo nivel y calidad tienen directa dependencia
sentido político del Foro se aclara con la conferencia con la institución educativa de la cual se egrese.
de Pablo Gentilli, invitado internacional e integran- Una mala calidad de la educación es secuela de
te del Observatorio Latinoamericano de Políticas la elitización, hecho que se distorsiona con el uso de
Educativas de Río de Janeiro. la evaluación para demeritar escuelas de cobertura in-
La educación se caracteriza por sus fines eman- clusiva en sectores de pobreza, marginándolas del apo-
cipatorios: no es posible construir sociedades demo- yo en recursos físicos y financieros. Es indispensable,
cráticas sin interpelar las posibilidades reales de ac- desde una perspectiva democrática, la puesta en prác-
ceso al conocimiento de los distintos sectores de la tica de pedagogías que contrarresten la injusticia, la
sociedad. La educación es un hecho político en sí
mismo cuando pone en cuestión las inequidades en
el acceso al conocimiento. En una sociedad demo-
crática, educación y emancipación son términos re-
dundantes, afirma este autor.

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l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

elitización y las relaciones de poder-sumisión; se abo-


ga por una pedagogía de la emancipación, similar a la
planteada por Paulo Freire hace unas décadas.

El derecho a la educación
Tensión 3: educación como servicio o
como derecho

La primera perspectiva se refleja en la limita-


ción de los presupuestos para la educación y la inver-
sión social y en la impertinencia de políticas y pro-
gramas educativos que no se compadecen con las ne-
cesidades explícitas de la población ni con los retos
del desarrollo de la sociedad. Participantes en el
Foro afirmaron, incluso, que el derecho a la educa-
ción acaba en el momento en que el acceso al siste- ducirse peyorativamente y, en segundo lugar, que la
ma depende de la capacidad de pago de las personas, alusión a “estándares de dignidad”, seguramente
reclamando entonces la gratuidad. cualitativos, implica comprometerse con un esfuerzo
En esta medida, para que la educación en rea- de construcción –hasta ahora inédito–, que requiere
lidad sea un derecho, es necesario modificar el es- un ejercicio pedagógico de elaboración, el cual, por
quema de subsidiar la demanda y promover el acce- lo pronto, queda como reto para ser puesto en ac-
so al sistema educativo teniendo en cuenta no sola- ción por quienes puedan interesarse y ofrecerlo
mente el estrato, sino las necesidades básicas insatis- como aporte de gran interés en las condiciones edu-
fechas de los grupos de población más vulnerables. cativas actuales.
En la mesa que deliberó sobre este campo te- Los postulados constitucionales que se refie-
mático, los participantes hicieron importantes ren al derecho a la educación tendrían que ser defen-
aproximaciones que intentan definir su materiali- didos por el Estado. Una localidad, municipio o go-
zación: “La educación como derecho precisa estándares bernación trabajando a contracorriente de la políti-
de dignidad, la educación como servicio reclama estánda- ca nacional, que a su vez va en contravía de lo consa-
res de calidad2”. grado en la Carta Magna, es una labor ardua y con
El enunciado anterior, que contó con gran alto riesgo de no lograr sostenibilidad en el tiempo.
acogida, debe ser analizado con mayor cuidado te- Los y las participantes en la mesa sobre el dere-
niendo en cuenta, en primer lugar, que el concepto cho a la educación del FED 2005, señalaron que ade-
de calidad de la educación no puede soslayarse ni re- más de los esfuerzos que vienen haciendo algunos go-
2 Intervención de una de las asistentes. biernos locales en defensa del derecho a la educación,

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

existen procesos internacionales y nacionales que van El derecho a la educación debería ser el centro y
en la misma dirección, como el Foro Social Mundial punto de partida de toda relación pedagógica: en el
Educativo y la movilización social por la educación. De aula, en el Programa Educativo Institucional, PEI, y en
la misma manera, es un derecho amenazado desde el la relación con el entorno de la escuela y la ciudad. La
nivel externo por las exigencias de la banca internacio- educación es un derecho en la medida en que institu-
nal o el Tratado de Libre Comercio, TLC, que obstacu- ciones educativas y diversos espacios de la educación
lizan seriamente las posibilidades de construcción de gubernamental establezcan relaciones donde medie la
un proyecto educativo nacional, atendiendo a nuestras participación antes que los servicios.
particularidades y diversidades, aspecto sin el cual no es Muchas personas vinculadas a la comunidad
posible desarrollar el derecho en cuestión. educativa, para no ampliar el espectro, desconocen
La privatización de la educación contribuye a sus derechos y deberes, incluidos las y los docentes.
empobrecer aún más a los pobres, afirman otros. Pa- No es cosa de enunciarlos, es preciso interiorizarlos
dres y madres “…empeñan su presente para responder por insistiendo en que todo derecho implica un deber;
esperanzas legítimas de un futuro mejor para sus hijos”. en principio bastaría con un mínimo de conoci-
En algunas localidades de la ciudad, predominan co- miento y exigencia de garantías en el marco jurídico
legios privados de mala calidad que consumen bue- dado por nuestra Constitución Política.
na proporción de los ingresos familiares. En contra- Otro indicador importante de cumplimiento –o
partida, a los estudiantes pobres se les entregan capa- no– del derecho estaría dado por el empoderamiento
cidades y habilidades instrumentales, mientras que personal y social, referido a la consolidación de lo que
las élites se apropian del conocimiento acumulado podríamos llamar “autoestima colectiva”, entendiendo
por la humanidad. por ello el sentimiento de grupos humanos involucra-
El derecho a la educación, para los jóvenes dos en el quehacer educativo que pueden y deben exi-
asistentes al FED, se concreta más en la calidad de gir lo mejor para sí y para el futuro.
las relaciones que tienen con sus docentes, en lo ade- Un indicador de impacto de la materialización
cuado –o no– de los espacios e instalaciones educa- positiva del derecho a la educación debe ser aquel
tivas o en el miedo que lleva a la autoexclusión al en- que se construya desde la capacidad de cuestionar
contrarse en el colegio con amenazas a la vida e inte- “…el poder autocrático de unos pocos sobre casi todo el res-
gridad personal. Un indicador del ejercicio del dere- to3”. Esto pasa por la deliberación pública de la de-
cho a la educación –al decir de los jóvenes– se mocratización, que se refiere tanto a democratizar la
comprobaría en el rendimiento académico placente- producción de los saberes diversos como a la demo-
ro, en una educación que les permitiera superar la cratización de la producción económica.
desesperanza y el sentimiento de inevitabilidad de la Un aspecto –por demás casi ausente–, de la ma-
vida marginal que es el único horizonte para mu- terialización del derecho a la educación, alude a la equi-
chos. Otro indicador estaría dado por la capacidad dad de género, sin la cual es imposible crear un marco
del sistema para contribuir a restablecer o recrear el
tejido social fragmentado.

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l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

de justicia y dignidad. Este aspecto, débil como eje Una primera mirada es la que podemos hacer
transversal en un sector fundamentalmente ocupado de la formulación de la política en sí misma, y otra
por mujeres y que produce un escenario de problemas, es aquella que nos posibilita vislumbrar cómo se
como el embarazo en adolescentes, muestra un vacío asienta entre los distintos actores posibles. En medio
que hace a cualquier política pública no sólo incomple- de las anteriores está el cómo; es decir, la participa-
ta, sino inadecuada e insostenible. ción como instrumento democrático por excelencia
En síntesis, puede decirse que materializar el para su construcción y, por supuesto, para su imple-
derecho a la educación es un proceso que no cesa. mentación.
Cualquier esfuerzo contribuye a avanzar y este es un Existe un reconocimiento expreso en torno a la
desafío para la escuela que no puede esperar que dinámica que generó el Plan Sectorial “Bogotá, una
todo venga de arriba, negándose a una tradición que Gran Escuela”, que sin duda movilizó gran cantidad
siempre ha existido desde lo local y que se refiere a la de personas interesadas en la educación, mas allá de
capacidad infinita de crear y recrear. He aquí el gran lo que conocemos como comunidad educativa.
desafío de la pedagogía. No obstante, las diversas intervenciones oscila-
ron durante todo el FED entre la duda y la esperanza
de que sus propuestas y opiniones fueran tenidas en
Derecho a la educación y planeación cuenta a la hora de tomar decisiones.
participativa de política pública He aquí uno de los desafíos para la SED: en-
contrar el mecanismo para devolver a la ciudadanía la
La democracia tiene que ver con la manera como prueba palmaria de la incorporación de sus propues-
se hacen las cosas. Este es el centro de la participación tas, de manera parcial o total. De no lograrse este pro-
como método, expresión, punto de llegada y partida pósito, aunque las propuestas sean incluidas, la sensa-
de cualquier proceso democrático que busque cons- ción final será de desencanto y frustración.
truir políticas públicas. Desde la anterior premisa, Quizá estaba previsto que las mesas, foros ins-
analizaremos los presupuestos que sirvieron de ante- titucionales y foros locales cubrirían la totalidad de
sala al FED, así como las ideas emergentes que apa- expresiones existentes de la problemática en Bogotá.
recieron como propuestas interesantes para ser reco- No obstante, el FED mostró también algunas caren-
gidas en el futuro. cias e imprevisiones al respecto.
Colombia se encuentra inmersa en un proceso Es el caso de los énfasis necesarios, incluso por
descentralizador a media marcha. Los gobiernos lo- estar mencionados en el Plan sectorial –temas de gé-
cales, como el gobierno distrital actual –que realiza nero, incluidas opciones sexuales diversas, etnias, ru-
esfuerzos ingentes tanto presupuestales como con- ralidad, discapacidad, etcétera–, que no contaron
ceptuales por reposicionar la educación como dere- con los espacios específicos ni suficientes para expre-
cho–, ofrecen una interesante ventana de lo que es sar con amplitud sus asuntos. Al respecto, emergie-
posible avanzar en medio de semejantes tensiones. ron algunos elementos:

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

• Los llamados de atención de las comunida- Proponer la deliberación pública sobre los
des indígenas, afro, raizales y gitanas para Planes Educativos Locales, es dar continuidad a
que se creen los escenarios donde puedan los procesos dialogantes adelantados antes, duran-
verse reflejadas de manera más clara. te y después del FED 2005. Algo evidente durante
• La demanda de la Bogotá rural, que expre- su desarrollo fue la riqueza de los procesos locales
só sentirse excluida de las alusiones a la previos, que constituyen un ejercicio de planea-
“ciudad” enunciadas en la convocatoria y ción local y de deliberación pública que no alcan-
demás aspectos organizativos del Foro. zó a reflejarse a plenitud, dadas las dificultades
• La participación de niñas, niños y jóvenes, derivadas de una agenda tan apretada para tan
quienes de manera fresca y participativa corto tiempo.
pusieron su nota de realidad, humor y Las deliberaciones sobre este tema recogen las
transparencia. distintas aproximaciones de los actores del FED 2005,
• La escuela y la pedagogía como elemento que se resumen en cómo retomar las lecciones aprendi-
para contribuir a construir Localidad. das desde otros ejercicios de planeación local participa-
• El aspecto emergente en términos de la tiva, evitando sus falencias y potenciando sus aciertos.
planificación participativa es sin duda el
referente a los Planes Educativos Locales. Tensión 4: sectorialidad-
intersectorialidad
Los Planes Educativos Locales
Quienes asistieron al FED 2005 abundaron
Una oportunidad para abordar el en ideas que señalan la utilidad eventual de los PEL,
desarrollo local4 que es otra manera de definirlos. Algunas de estas
expresiones apuntan con claridad a aspectos referen-
tes a la necesidad de planificar la educación desde
“El Foro se realiza en la perspectiva de los Planes
una visión intersectorial6, urgente en la medida en que
Educativos Locales, PEL, y de un Proyecto Educativo Es-
si bien hay un reconocimiento explícito a las realiza-
tratégico para la ciudad5”. La planeación educativa lo-
ciones de política social del actual gobierno distrital,
cal, uno de los hilos conductores del FED 2005, fue
muchas de las cuales pasan por las escuelas, al tiem-
tema reiterado y aceptado como horizonte de traba-
po es motivo de agobio y cuestionamiento entre edu-
jo por sus participantes, no obstante los claroscuros
cadores y educadoras, que se preguntan si la escuela
suscitados por esta experiencia inédita para el con-
junto de los participantes.
6 De intervenciones de los participantes: “Los PEL deben arti-
4 Para ampliación del tema, ver documento “Los Planes Lo-
cularse con el POT”; “Nos preguntamos cómo articular los
cales de Educación: otra oportunidad para abordar el desa-
PEL y el Plan Sectorial y Distrital de Desarrollo”; “Los PEL y
rrollo local”. Elementos para promover la Deliberación Públi-
el Plan sectorial son lo mismo, desde un enfoque de partici-
ca. Viva la Ciudadanía.
pación social”; “No veo cómo vamos a interactuar con los
5 Documento de convocatoria al FED 2005. concejos locales de política social”.

16
l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

soporta ser el escenario de resolución de los múlti- parciales, sobre las que vale la pena también revisar
ples problemas sociales locales. otras experiencias:
Con respecto a este último tema, es evidente
que la concepción de educación y de “lo educativo” • ¿El desafío de la intersectorialidad es el
requiere trascender lo escolar-institucional, como ha primer camino por transitar?
sido planteado reiteradamente, por cuanto el queha- • ¿Cómo se hará, con quiénes y sobre qué
cer intersectorial es elemento clave de cualquier ejerci- bases?
cio de planeación integral. Es aquí donde aparece • ¿De qué manera se tomarán las decisio-
como ineludible la armonización entre PEI, PEL, nes en materia presupuestal?
Planes de Desarrollo Local, Plan Sectorial de Educa-
ción, Plan Distrital de Desarrollo y Plan de Ordena- • ¿Solamente los recursos propios del sec-
miento Territorial, POT. tor educativo van a entrar en juego a cor-
Las implicaciones de esta meta presentan fac- to plazo?
tores, que por ahora son preguntas con respuestas

17
e d u c a c i ó n y c i u d a d

• ¿Realizar planeación participativa signi- empeñarse a fondo la Secretaría de Educación con el


fica hacer presupuestos participativos? fin de mantener credibilidad en el proceso.
• ¿Cómo hacer viables las negociaciones y La idea de relevar la participación frente a la
consensos a este nivel con los actores lo- realidad-contexto pone la mira en los significados de
cales que deciden sobre tales asuntos? “Bogotá sin Indiferencia”, “Bogotá, una Gran Escue-
• ¿Cómo abordar –o profundizar, pues ya la” y “Escuela-Ciudad-Escuela”, así como en el refe-
hay avances– la complementariedad con rente territorial como ámbito de realización de dere-
los sectores de la salud y bienestar social? chos y deberes, como escenario que lega valores para
vivir el presente, al tiempo que ofrece posibilidades
Tensión 5: realidad-contexto y saberes y barreras para proyectar un futuro que todos aspira-
técnicos mos sea mejor.
Se evidencian entonces las tensiones, nudos y
Otro aspecto propuesto por los y las partici- posibilidades inherentes a los procesos de participa-
pantes, señala la utilidad de los PEL desde las opor- ción en la vida local: ¿cómo construir común-unidad o
tunidades de participación y planeación de lo educativo, retomar los embriones de lo que eso signifique en
a partir del binomio realidad–contexto7. Este reconoci- cada espacio territorial, para potenciarlo desde una
miento, no menor, ubica la participación en las defi- propuesta pedagógica que apueste por la consolidación
niciones de “lo social”, tema que ocupa lugar central de identidades y por una planeación integral?
en la lucha contra la pobreza. Parte de ese ejercicio pedagógico implicará el de-
En este punto, la reflexión acerca del momento sarrollo de nuevos aprendizajes y habilidades para quie-
político cobra de nuevo fuerza. La democracia directa, nes participan en el proceso. No son sólo asuntos de
donde las personas se sienten ciudadanas de primera, buena voluntad. Fueron interesantes en este punto las
sólo es completa mientras sus propuestas sean incorpo- intervenciones de la mesa de instalación que hicieron
radas a las decisiones políticas, desafío en el cual debe referencia al ejercicio de la política como un acto peda-
gógico y a la pedagogía como un acto político.
El acompañamiento técnico a estos procesos
7 De intervenciones de los participantes: “La metodología que podría estar a cargo de la Subsecretaría de Planea-
seguimos en el pre-foro, nos ha permitido avanzar en la par-
ticipación de muchos”; “Para planificar la educación desde lo ción de la SED, en consulta permanente con las de-
local, nos preguntamos si las localidades son en verdad co- más Subsecretarías, la Alcaldía y la Junta Adminis-
munidades, o parte del trabajo es construir comunidad”; “El
PEL no tiene un desarrollo constante donde la representativi-
tradora Local, JAL, así como con el Coordinador
dad surja como eje democrático”; “La participación va a durar General de CADEL. Este acompañamiento debe pa-
lo que dure esta administración”; “Los temas de Bogotá rural sar por concertar la ruta de trabajo que, respetando
no han sido acogidos, se habla sólo de la ciudad, descono-
ciendo nuestra parte rural”; “Lo indígena, lo afro, las mujeres, la diversidad de dinámicas, guíe a quienes están en
los otros, no aparecemos”; “Dudamos si lo que hablamos los escenarios locales con otras entidades del Distri-
aquí va a ser tenido en cuenta”; “Aquí nos pusieron a soñar, to o de otro orden, lo cual implica reuniones perió-
nos pusieron a diseñar y eso cuesta plata, habría que ver de
dónde va a salir”. dicas de acuerdo y seguimiento.

18
l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

Igualmente, es importante para la SED y el


IDEP crear un grupo de trabajo en investigación
aplicada, con capacidad de apoyar y responder de
manera pronta a las distintas localidades en la reso-
lución de los problemas que se vayan presentando
en el desarrollo de los PEL. Este mismo equipo de-
berá acompañar el seguimiento, evaluación y retroa-
limentación del proceso en cada localidad a través
de los gerentes de CADEL.

Tensión 6: lo decidido, lo por decidir

Es clara la voluntad política de la SED por sa-


car adelante esta iniciativa, la cual tiene implicacio-
nes políticas y administrativas que trascienden la
propia institucionalidad, requiriendo tanto el apor-
te como la articulación de perspectivas y decisiones
de los demás sectores de la administración distrital y
de su alcalde mayor. Muchas decisiones dependen
del nivel central y de hasta qué punto se avance en la
descentralización.
El tema de los PEL implica momentos simultá-
neos para su posicionamiento:

• Momento participativo: tanto al interior


del sector educativo como de las comunida-
des locales, de manera que se entiendan los
PEL como mucho más que la sumatoria de
los PEI, primera representación que tienen
algunos docentes ante la propuesta. Ten-
drán que ponerse en limpio los diagnósti-
cos locales, de modo que las comunidades
dialoguen en forma interactiva en su for-
mulación y proyecciones, en cada una de
las etapas que deberán atravesar los PEL.

19
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Sin la participación activa y permanente Un cuello de botella es el de las definicio-


de las comunidades, entendidas más allá nes presupuestales. Las fuentes de financia-
del concepto de comunidad educativa, no miento actuales –recursos de transferencia
será posible garantizar la sostenibilidad. directa a los colegios, redireccionamiento
• Momento articulador: las decisiones que de los actuales presupuestos locales de desa-
permitan armonizar los componentes edu- rrollo, sujetos a aprobación de las JAL–, po-
cativos de los planes locales de desarrollo, drían aumentarse; con la condición de que
el plan sectorial, el plan de la ciudad y el se incremente en un 2 por ciento el actual
POT. Este momento, en realidad, es como 10 por ciento de los ingresos corrientes de
un telón de fondo que deberá operar en la ciudad que van a las localidades y que se
todos los demás. destinan a la educación.

• Momento descentralizador: el horizonte • Momento jurídico-administrativo: los PEL


deseado nos haría pensar en un momento van a precisar en algún momento la defini-

utópico donde la planeación local del de- ción y creación del marco normativo co-
sarrollo incluyera de manera fuerte y deci- rrespondiente, coherente con las normas
dida no sólo a los actores, sino al conjunto locales, distritales y nacionales.
de los asuntos educativos, entre otros. • Momento político: la toma de decisiones
Mientras tanto, precisamos un reposicio- de fondo, hasta dónde se puede ir, política-
namiento del sector, tendiendo siempre a mente hablando. Los PEL son un avance
empoderar las alcaldías locales, lo que ha en el escenario político de una administra-
llevado a planteamientos como, por ejem- ción que se la ha jugado por lo social, en
plo, que los CADEL actúen a manera de momentos donde todo parece justificarse
secretaría local. Secretarías como la de Sa- desde la oferta privada de los servicios y
lud y el Departamento Administrativo de donde el Estado, como representación de
Bienestar Social, DABS, han avanzado un lo público, es una abstracción obsoleta.
poco más en este sentido, de cuya expe- Los tiempos políticos, en estos casos, sue-
riencia seguramente habrá que aprender y len ser virtualmente más breves que si se
con quienes deberá coordinarse. tratara de una administración tradicional

20
l a e d u c a c i ó n u n a s u n t o

de la política, en su ejercicio clientelista. tos procesos, cómo se alimentan, cuál será


Aquí se juegan, para bien o para mal, las el papel de los CADEL, los CPL, las alcal-
ilusiones de ese otro mundo posible, así días locales y las JAL. Lo cierto es que los
sus límites sean un territorio más o menos grandes protagonistas son sin duda los CA-
pequeño. Cuando desde la banca mundial DEL y sus diversos equipos de trabajo, que
deberán salir fortalecidos y empoderados.
se exige gasto y no inversión social, presta-
ción de servicios y no ejercicio de dere- • Momento intersectorial: los acuerdos bási-
chos, un gobierno local en contravía es en cos para coordinar y ordenar acciones in-
sí mismo un acto emancipatorio. Qué tan- cluidos los temas de la financiación y pre-
to la sociedad en su conjunto, e incluso los supuesto participativo. Muchas entidades
sectores considerados a sí mismos como distritales como la de Salud y el DABS,
más democráticos están dispuestos a po-
ofrecen excelentes condiciones para esta-
ner su hombro por esta apuesta, es algo
que está aún por verse y probarse. blecer una coordinación inmediata.

Qué tanto podamos todas y todos enten- Conclusión


der críticamente las limitaciones de em-
prender este camino o qué tanto las dis- El FED, como espacio de empoderamiento de
tintas expresiones del gobierno local los actores que lo integraron, implicó no sólo ganar
mantengan idénticos niveles de conse-
cuencia, es algo que desde la observación poder para planear e imprimir un rumbo de proyec-
crítica y la participación misma deberá to educativo compartido a la ciudad. Se trató tam-
mantenerse en perspectiva. bién de empoderar lo que el magisterio sabe y quiere
Lo cierto, parafraseando a Gentilli, es hacer, en las mejores condiciones posibles.
que “…ni los funcionarios ni el alcalde Las formas propuestas para concretar lo peda-
son dueños de los planes”, máxime si és- gógico podrían identificarse en una amplia gama
tos han sido construidos en un esfuerzo que abarca desde el sentido de justicia de las políti-
participante. Frente a ellos, todas y todos cas públicas hasta un componente político que par-
tenemos derechos y obligaciones. te del reconocimiento de toda ciudadana o ciuda-
• Momento de liderazgos: armonizar las ten- dano como sujeto de lo educativo. En este sentido,
siones internas en torno a quién lidera es- se propuso la incorporación de recursos tangibles e

21
e d u c a c i ó n y c i u d a d

intangibles propios de las comunidades, como ex- Del Foro 2005 podemos hablar de balance posi-
presión de culturas y saberes que deberían ser voces tivo si pensamos más allá de un “todo o nada”. Espe-
dialogantes del proceso, pero que, al tiempo, le die- ramos que las lecciones aprendidas por las proximi-
ran mayor significación a la verdadera apropiación dades y diferencias arrojadas en los distintos deba-
ciudadana de las políticas públicas. tes, hayan permitido a todas y todos los actores invo-
La pedagogía se sitúa como uno de los com- lucrados en este proceso, independientemente de su
ponentes más políticos al aportar, desde el ma- lugar de procedencia, remar hacia el mismo lado. El
gisterio y otros sectores sociales, a la construc- lado que señala la materialización del derecho a la
ción de las políticas públicas y a la planeación de educación, entendida esta como escenario privilegia-
las mismas. do para la creación colectiva de un futuro común
compartido de justicia social y equidad.

FLUJO DE ASUNTOS POR DEFINIR


Corto plazo Mediano plazo Largo plazo
- Diagnósticos locales compartidos - ¿Presupuesto participativo? - ¿Plan indicativo?
- Capacitación y formación técnica de - ¿De dónde saldrían los recursos para - ¿Plan decenal?
agentes dinamizadores –líderes de CLF y financiación de los PEL? - ¿Cartas de navegación?
CPL, docentes, padres y madres, - ¿Cuáles serían los rubros comunes?
estudiantes.
Alcances del Proceso PEL: metas / temporalidades / interrogantes.

Bibliografía

Tomasevski, Katarina. El derecho a la educación en


Colombia, Plataforma Colombiana de
Derechos Humanos, Democracia y
Desarrollo, Bogotá, 2004.
Registros etnográficos y entrevistas tomadas por Viva
la Ciudadanía durante el Foro Educativo
Distrital 2005: “La ciudad y las políticas
educativas”, agosto de 2005.

22
Tendencia descentralizadora
y derecho a la educación
Perú
Manuel Iguiñiz Echeverría
Magíster en Sociología, Universidad de París VIII, Vincennes, Francia. Licenciado en Sociología, Universi-
dad Nacional Mayor de San Marcos. Ministerio de Educación, Asesor de la Alta Dirección, Viceministro de Gestión
Institucional. Presidente de la Asociación Nacional de Centros de Promoción y Desarrollo, ANC; Vicepresidente
del Consejo de Educación de Adultos para América Latina -CEAAL-. Actualmente es Presidente de Foro Educati-
vo y Miembro de TAREA, Catedrático de la Maestría de Sociología de la Educación, Facultad de Ciencias Sociales
de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima, Perú). Algunas publicaciones: Dos miradas a la Gestión
de la Escuela Pública (1998), en coautoría con Dueñas, Claudia. Materiales para pensar la descentralización edu-
cativa, en coautoría con Del Castillo, Daniel (ED. TAREA, Lima, 1995).

Resumen

Este artículo analiza las tendencias descentralizadoras en América Latina desde el punto de vista de lo que
las políticas internacionales significan tanto para los gobiernos nacionales como locales. Destaca la importancia
de las decisiones políticas de los ministerios de educación y hace un balance de lo que han significado estas ten-
dencias para algunos países del área. Se apoya en documentos de la Unesco, y señala que para desarrollar una
discusión de fondo sobre las cuestiones actuales del aprendizaje y la enseñanza, también hay que incluir el hecho
de que la mayor iniciativa en cuestiones curriculares y programas nacionales de mejoramiento han estado en mu-
chos casos ligados al financiamiento de la banca internacional.

Palabras clave

Descentralización, centralización, gobierno, educación, equidad, escuela, participación, políticas.

Abstract

This article analyzes the decentralization tendencies in Latin America from the point of view of the implica-
tions of international policies for both national and local governments. It underlines the importance of political de-
cisions of the Education Ministries and evaluates the tendencies of some of these decisions in the region. It is su-
pported on UNESCO documents and it points out that to develop a complete discussion about the questions of
learning and teaching, it is important to take into account that most curriculum reforms and improvement plans
have been related to international financing through multilateral banking.

Key words

Decentralization, centralization, government, education equiity, school, participation, policies.


La complejidad política de la búsqueda de una “legitimación compensatoria”
del Estado y del gobierno dictatorial.
descentralización1 A la descentralización política, y específica-

e
l carácter político de la redistribución del po- mente a la educativa, se la sustenta generalmente
der, inherente a la descentralización del Esta- con un discurso legitimador muy amplio. Discurso
do tiene –cuestión extraña– reconocimiento que, como lo indica L. Sime (1995), se nutre de un
casi unánime. El asunto de la descentralización es proceso histórico, dialoga con otros discursos y bus-
omnipresente en la política y es tema obligado aun ca legitimarse: el discurso de la descentralización
para quienes lo eluden. Cuando se discute sobre la educativa se presenta como “… creíble, imprescindible y
descentralización del Estado, son frecuentes los ar- viable” (L. Sime, 1995, 168). El Gráfico 1 es una ver-
gumentos a favor y los “deber ser”, como si se tratara sión basada en la de L. Sime sobre la educación en
de un proceso simple. Frente a la descentralización derechos humanos.
educativa ocurre algo parecido. Silvia Senén afirma Se plantean muchos argumentos convergen-
que en las últimas décadas ésta ha pasado de ser un tes, razón por la cual es importante recogerlos,
asunto controversial a obtener una aceptación casi discutirlos y evitar su mitificación, como lo señala
general en cuanto a la mejora de la gestión, “… pero Ricardo Cuenca (2005, 2), para quien cinco hay
con más reflexión sobre distintas variantes”. (1994, 24). razones que suelen sustentar la validez de la des-
En cuanto a las variantes descentralizadoras, centralización:
algunas resultan complementarias y otras entran
en tensión. En Perú, por ejemplo, el proyecto de • Es sinónimo de desarrollo, calidad y
“descentralización con privatización” de Alberto equidad.
Fujimori, desarrollado entre 1992 y 1993, generó • Permite conocer mejor los problemas.
confrontación la posición de muchas institucio- • Redistribuye poder.
nes del país. Hubo un segundo anuncio de des- • Favorece la identidad regional y local.
centralización administrativa a finales de su se- • Optimiza los recursos económicos.
gundo gobierno, claramente orientado hacia la
Ricardo Hevia señala la complejidad de moti-
1 Artículo basado en la ponencia presentada en el ‘Taller de al- vos y racionalidades que se entrecruzan, como pro-
fabetización económica en financiación y educación’, presen- ducto de los diferentes intereses que llevan a los ac-
tada por la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la
Educación. Bogotá, noviembre de 2005. tores a realizar determinadas transacciones. En un

25
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Gráfico 1

La descentralización de la educación se legitima como:

Creíble Imprescindible Viable

¿Por qué es necesario e


¿Por qué es bueno y impostergable realizar la
¿Es posible realizar hoy
deseable realizar la descentralización de la
la descentralización de la
descentralización de la educación?
educación?
educación? ¿Qué puede suceder si
no se realiza?

contexto de crisis del Estado –no obstante los posi- Cercana a esa racionalidad –y a veces entrela-
bles entrecruzamientos–, cabe sintetizar algunas ten- zada con ella– se puede distinguir una lógica
dencias. Según Hevia: de eficiencia administrativa. Se desconcentra
para controlar y hacer más eficiente el proce-
Es posible identificar una racionalidad so de toma de decisiones.
neoliberal que opera a través de una lógica Se delega la capacidad de ejecutar, pero sobre
economicista, cuando las propuestas de la base de criterios previamente establecidos
descentralización se fundamentan en la ne- por las autoridades del nivel central.
cesidad de un ahorro del gasto público, de Es posible distinguir también una lógica de
privatizar la contratación del personal do- inspiración democrático-participativa, cuya fi-
cente o de transferir al sector privado la nalidad es otorgar una mayor autonomía de
mayor cantidad de escuelas posibles. decisión, poder y recursos a las instancias co-
También es posible identificar argumen- munales y regionales para resolver los conflic-
tos en pro de la descentralización, inspi- tos que se dan en el ámbito educacional. Para
rados en una racionalidad geopolítica, la mirada desde el poder local, una adminis-
cuando se pretende desconcentrar la ad- tración más cercana a la comunidad permiti-
ministración del Estado para lograr una ría comprometerla para que asuma un mayor
plena ocupación del territorio, promover control sobre el tipo de formación que se im-
el desarrollo regional y lograr la integra- parte a los estudiantes y pueda, a su vez, apor-
ción de las regiones apartadas del conjun- tar al mejoramiento de la calidad educacional
to de la nación. de su comuna o región (Hevia 1991, 15-16)

26
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

Dada la influencia del Banco Mundial y del frentan por la carencia de un proyecto político de-
Banco Interamericano de Desarrollo en las denomi- mocrático de transformación nacional. De ahí, la
nadas “reformas de mejoramiento de la calidad”, es pertinencia de la formulación de Cáceres:
importante recordar que estas fueron acompañadas
con un discurso de descentralización. Sin embargo, En ese marco, la descentralización para ser
para los bancos este no fue el criterio central para legítima tiene que desarrollarse como un
otorgar préstamos, pues en general sus colocaciones proceso inclusivo. Lo cual implica que debe
preferenciales han sido dirigidas a los Estados cen- desarrollarse modificando relaciones de
trales, y para programas centralistas. Sin embargo poder y construyendo sujetos capaces de to-
existieron variantes en algunos países, en los que se mar en sus manos los instrumentos que les
dio énfasis a la aplicación del mejoramiento dirigido permitirán acceder por sí mismos a lo in-
hacia las escuelas de las regiones y localidades. dispensable para una vida digna. Lo cual
lleva al tema de la participación ciudadana
Descentralización y cruce de derechos –de los excluidos– desde una perspectiva
de derechos (2005, 12)
Si algo derivamos de las reflexiones anteriores,
es que la descentralización educativa debe ser pro- Desde la perspectiva de derechos, se articulan
puesta como un proceso político y pedagógico enfo- las concepciones sobre el desarrollo, la participación
cado a superar las desigualdades y exclusiones ante y la promoción de las capacidades de las personas,
el saber y la cultura, y a participar en un proceso de como las responsabilidades estatales y no estatales.
desarrollo social y económico que garantice los dere- La participación en un desarrollo integral es asumi-
chos fundamentales. En la calidad de la educación da como un derecho. El derecho a participar en el
–directamente condicionada por la calidad de vida– desarrollo social, económico y cultural mereció una
, operan múltiples factores. La desigualdad educati- declaración internacional en 1986.
va es parte de la desigualdad social. La causa princi- En la línea de la reflexión avanzada, E. Cá-
pal para no recibir una educación de calidad es la ceres da una idea concreta para presentar la des-
condición social y económica de pobreza, debilidad centralización:
de representación y poder político que no permiten
superar dicha situación implementando sólidas polí- Desde una óptica de derechos, la descen-
ticas sociales y económicas. tralización debe ser entendida como un
La educación es un derecho fundamental, está proceso en el que se amplía el ámbito don-
indivisiblemente unida a otros derechos. En esta lí- de se ejercen los derechos de las personas.
nea de reflexión, temas como el que nos ocupa de la Lo cual implica que debe ser vista también
descentralización educativa, tiene sentido en su vin- como un proceso de identificación y preci-
culación a los problemas básicos del país; es decir, la sión de las obligaciones que generan tales
pobreza, la desigualdad y la exclusión, que no se en- derechos”. (Pág. 15)

27
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Participación ciudadana cluidos y, en el caso de los gobiernos regionales, in-


corporarlos a la política nacional como actores insti-
En una perspectiva democrática participativa, tucionales. El cambio en la descentralización no
la descentralización educativa significa impulsar un consiste en la participación de grupos en general,
proceso político y pedagógico de ampliación del po- (Mc Gin, 1987, 177) sino en la de determinados gru-
der para actores excluidos o relegados en las decisio- pos bloqueados por poderes dominantes.
nes –autoridades regionales, comunidad educativa, La incorporación de los actores en la educa-
profesionales calificados, estudiantes–. Dicha des- ción adquiere sentido formando parte de un esfuer-
centralización implica la instauración de nuevas zo por aplicar estrategias de desarrollo humano inte-
competencias y funciones institucionales, como la gral, pues el desarrollo favorece la educación y ésta a
autonomía de la institución educativa. su vez lo impulsa. En tal desarrollo, la descentraliza-
Impulsar la descentralización es incorporar a ción deberá ser un ámbito favorable para iniciativas
nuevos actores al quehacer público, incluir a los ex- que mejoren la calidad y reduzcan las desigualdades
en la calidad de la educación.

Derecho a la
Derecho al
educación de Participación
Desarrollo
calidad, ciudadana
Humano
para todos

Descentralización

28
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

La participación tiene significados sociales,


políticos y culturales diversos. La propia perspecti-
va de derechos “… está inspirada por movimientos au-
tónomos tales como los de las mujeres, los campesinos sin
tierra, los pueblos indígenas (...) miríadas de luchas so-
ciales, culturales y políticas tanto del Norte como del
Sur” (Eyben, 2003, citado por Cáceres). La partici-
pación democrática puede asociarse a la formación
de ciudadanos autónomos, además de suponer una
metodología o estrategia; pero, “… hablar de la parti-
cipación en tanto derecho, le otorga algunas característi-
cas al término: valor intrínseco y prioridad, entre otras”
(Cáceres, 17).

Preocupación por la desigualdad


y la justicia
Con el avance de los diversos procesos des-
centralizadores, se confirma la existencia de difi-
cultades y cuestiones críticas que venían siendo es-
bozadas desde hace varios lustros. Juan Carlos Te-
desco (1987), por ejemplo, consideraba que en so-
ciedades con estructuras caracterizadas por fuertes
desequilibrios, era poco viable introducir dinamis-
mo y renovación en la esfera de la educación, vía el
incentivo de la competencia, pues el sector público
y el privado se dirigen a públicos diferentes.
La descentralización también está afectada
por las estructuras sociales: “En definitiva, como la
disponibilidad de recursos está desigualmente distribui-
da, la descentralización termina por provocar una mayor
correspondencia entre desigualdad social y desigualdad
educativa”. (Tedesco, 1987, 145). Por ello, la trans-
ferencia de responsabilidades requiere un conjun-
to de condiciones para favorecer mejores resulta-
dos educativos.

29
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Indica Tedesco, además, que gún el lugar que ocupen en el conjunto de la políti-
ca educativa y social.
… el fortalecimiento de la participación, de Estas preocupaciones están expresadas en un
la capacidad de gestión institucional y, en pronunciamiento del Foro Educativo, que alerta res-
definitiva, de la responsabilidad por los re- pecto a que, junto con las medidas de descentraliza-
sultados del trabajo, exige, como condición ción, resulta de igual importancia asegurar la fuerza
necesaria, un activo rol de la administra- de las políticas universales y que ellas contengan me-
ción central en la asignación de recursos, canismos de compensación de desigualdades en con-
de acuerdo con prioridades que superen la textos de violencia política; justamente, para no con-
capacidad inicial de cada institución, re- tribuir a agudizarlas.
gión o ámbito educativo local para desarro- En este marco, son interesantes las observacio-
llar sus iniciativas. (Tedesco, 1987, 146) nes derivadas de la experiencia regional más recien-
te. En opinión de Graciela Messina:
Sin ello, la ampliación de la cobertura se rea-
liza a través de circuitos diferenciados de calidad, que La descentralización en América Latina,
produce una exclusión más sofisticada, consistente tuvo lugar en sistemas educativos que se ha-
en estar dentro de un sistema educativo desigual en bían expandido aceleradamente desde los
lugar de la antigua y directa exclusión para el acce- años cincuenta, sin resolver el problema de
so al sistema. Esta antigua exclusión subsiste tam- desigualdad y la exclusión. En este marco,
bién en la imposibilidad de concluir la educación si bien la descentralización contiene una
secundaria para un grupo importante de estudian- promesa de democratización y apertura de
tes. Las opciones de estrategia adquieren, según Te- los sistemas educativos hacia las culturas lo-
desco, un valor democrático o antidemocrático se- cales, no es menos cierto que también ha

30
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

generado nuevas desigualdades en sistemas En el caso de Chile, por el subsidio a la de-


educativos donde no reinaba la equidad. manda se estimula a cada institución para que atrai-
La descentralización se ha entrecruzado ga estudiantes apelando a mejores ofertas que lleva-
con procesos de recentralización y privati- rían a los padres a retirar a sus hijos de otras escue-
zación. En la mayoría de los países no han las. El Estado financia la educación privada directa-
existido mecanismos al nivel de los escalo- mente o a través del municipio, para que con los
nes centrales e intermedios de los sistemas voucher por alumno la institución decida su uso –in-
educativos, para garantizar la descentraliza- cluido el pago a los docentes–, sobre la base del mon-
ción en condiciones de equidad (Messina, to recibido. En esta perspectiva neoliberal, la igual-
2002, 146-147) dad de oportunidades no tiene centralidad. Por ello,
es bueno recordar ante los procesos de descentraliza-
En América Latina, luego de la reforma impul- ción, la dimensión pública de toda educación y de la
sada durante el gobierno de Augusto Pinochet, re- educación publica en particular:
aparece intermitente, aunque en forma débil, la pro-
puesta de implantar un sistema de competencia ba- Todo proyecto educativo, ya sea que se de-
sado en el subsidio a la demanda, consistente en en- sarrolle en un modelo de escuela pública,
tregar un monto de dinero por alumno matriculado privada o concertada, debe partir de unas
en la institución educativa. En Perú, también reapa- aspiraciones mínimas universales que han
rece cada cierto tiempo. de ser metas para todos, como son los obje-

31
e d u c a c i ó n y c i u d a d

tivos de respetar la dignidad de las personas,


que sea de calidad científica y pedagógica o
que posibilite y facilite el progreso de todos
desde las condiciones desiguales de partida
de cada uno. Para que estas aspiraciones
sean éticamente defendibles, debemos con-
siderarlas como buenas para todos. La aspi-
ración esencial, específica de la educación
pública, es la igualdad para aprovechar el
bien que representa la educación; una uto-
pía necesaria (Gimeno, 2001, 42-43)

La descentralización, de cara
al desarrollo
En Perú, por la velocidad con que se reem-
prendió la descentralización, estamos obligados a
pensar en los nuevos significados de la descentraliza-
ción comenzada en 2003, desde las cuestiones del
desarrollo integral, la participación, la globalización
y la sociedad del conocimiento. La globalización y la
sociedad del conocimiento tienen ya un carácter de
“mega tendencia”. A decir de Sergio Boisier (2002,
6-7), son causadas o empujadas por otras cuatro fuer-
zas: la revolución científica y tecnológica, que, me-
diante la microelectrónica, modifica la producción
industrial manufacturera y los sistemas de comuni-
cación y de transporte. La reforma del Estado en
América Latina, con las recuperaciones de la democra-
cia formal. Las demandas de autonomía de la sociedad

32
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

civil. Y, por último, las tendencias privatizadoras, que


amplían el número de decisores independientes.
Pertinente para la descentralización educativa
es que, frente a los enormes desafíos que presentan
los territorios, no hay una “… acumulación de prácticas
históricas, en parte debido a la rapidez del cambio en la
sociedad actual. Esta constatación coloca, en el contexto
de la actual sociedad del conocimiento, la cuestión del co-
nocimiento en el cruce de la descentralización y el desarro-
llo territorial”. (Boisier, 2002, 8-9).
Boisier percibe la exigencia de “crear un marco
cognitivo nuevo”, para investigar “… cómo se articula un
territorio con los procesos globales que están en marcha en
el mundo –el nuevo entorno– y (...) descubrir las causali-
dades contemporáneas del crecimiento y del desarrollo –el
nuevo interno–”. (Boisier, 2002, 8-9). El mismo autor
cita a Y. Dror (1996, 123): “... deben hacerse vigorosos
esfuerzos para elevar el nivel de entendimiento popular, en
relación a temas complejos”, a lo que agrega Boisier que
“… no hay tema social más complejo e importante que el
propio desarrollo”. Así mismo, cita a J. Stiglitz (2000, Diversidad en el diseño institucional
130) cuando señala que “… el éxito de una economía en América Latina
basada en el conocimiento, también requerirá una ciuda-
danía altamente educada, con fuertes habilidades cogniti- Como hemos referido, la descentralización,
vas, y una efectiva red descentralizada de comunicacio- extendida durante los últimos lustros del siglo pa-
nes”. Concluye Boisier, a partir de estas citas, que sado, tiene diversas formas. La transferencia del
ambos autores expresan la necesidad de lograr “… gobierno y la gestión de las escuelas desde el Esta-
cambios en los modelos mentales de los ‘operadores del de- do central a los niveles subnacionales, se muestra
sarrollo’, desde los agentes sociales de base, hasta las más en algunos grandes tipos. Así, las repúblicas fede-
altas autoridades políticas, y ello apunta a un ‘saber’ ac- rales del continente –casos de México, Venezuela
tualizado”. (Boisier, 2002, 13). y Argentina– ya transfirieron las escuelas a sus Es-

33
e d u c a c i ó n y c i u d a d

tados. En Brasil, hay una distribución de la educa- en varios países la definición relativamente orgánica de
ción escolar entre la Unión, los Estados y los mu- la descentralización educativa es parte de mayores o
nicipios. En las repúblicas unitarias –como Co- menores pasos de descentralización global de los Esta-
lombia, Chile y Bolivia– las municipalidades tie- dos, y de cambios políticos de pretensión más amplia,
nen mayor implicación en la gestión; en particular como el enfrentamiento a las crisis de legitimidad de
en la provisión del servicio y en la participación los Estados, en casos como la transición de régimen po-
social, y menos en el financiamiento, el currículo lítico en Perú, luego del año 2000.
y la política docente. Se han producido varias olas de descentraliza-
Durante la segunda mitad de la década pasada ción, con casos nacionales de claro conflicto, nego-
varios países de América del Sur aplicaron políticas ciaciones y estancamiento, y reversión en algunos as-
de transferencia de competencias de gestión o conti- pectos. Encontramos, pues, superposiciones de es-
nuaron las iniciadas años atrás. La tendencia general tructuras, con origen en racionalidades distintas, al
se registra en un estudio realizado por el Banco Inte- sucederse gobiernos de tendencia política diferente.
ramericano de Desarrollo. Los temas son la dirección de los sistemas, ubi-
Es preciso hacer intercambios dirigidos a un ba- cación de las competencias, la participación social,
lance del proceso en la Región Andina. Como dijimos, el financiamiento, para favorecer la comparación y

Cuadro 1
Nivel de Gobierno formalmente responsable por la provisión de educación primaria

Nacional Estatal Municipal


Argentina X
Bolivia
Brasil X X
Chile X
Colombia
Costa Rica X
Guatemala X
Honduras X
Jamaica X
México X
Nicaragua
Panamá X
Perú
Rep. Dominicana X
Uruguay X
Venezuela
Nota: las “X” indican que las principales funciones son responsabilidad de este nivel de gobierno, incluyendo el empleo,
gerencia, inversiones y mantenimiento. Las flechas indican que un proceso de descentralización está en progreso. En los
casos donde la responsabilidad está a nivel estatal o municipal, el gobierno nacional retiene algunas funciones en la pro-
visión de los servicios, tales como programas compensatorios.
Los gastos corrientes pasan a los departamentos mientras que los recursos de inversión se transfieren a las municipali-
dades.
Fuentes: varias publicaciones y entrevistas.
Tomado de: Cómo organizar con éxito los servicios sociales. BID, 1997, p. 71.

34
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

el análisis critico del proceso. Los procesos pedagógi-


cos merecen un tratamiento especial. Perfil de los gobiernos nacionales
En Perú y otros países, las leyes que afianzaron La descentralización, a pesar de la aspira-
el proceso de descentralización educativa tienen una ción de algunos de sus impulsores, como los ban-
clara afirmación de la educación como derecho fun-
cos de financiamiento, con una retórica de des-
damental. En Colombia, ese derecho se afirma en la
centralización poco real, fue requiriendo un Esta-
Constitución de 1991 y en la Ley General de Educa-
do central conductor, regulador y activo en pro-
ción 115 del año 1994 –que no cierran la posibilidad
de aranceles en el sector estatal–. En Bolivia, con la gramas y proyectos educativos; pero éste fue
Ley de Reforma Educativa, LRE, promulgada en ju- debilitado estructuralmente en su planificación,
lio de 1994. Y la Ley General de Educación del Perú con la privatizaron desbocada, la subordinación
(2003), que recupera el concepto de derecho funda- en las políticas y la desprofesionalización de la ad-
mental evitado en la Constitución de Fujimori, así ministración pública. Ese Estado es el que ahora
como afirma con más claridad el derecho a la gratui- fracasa, para amortiguar las desigualdades extre-
dad, cuando la imparte el Estado. mas en materia educativa.

35
e d u c a c i ó n y c i u d a d

La concreción de la transferencia y, luego, llamados “programas nacionales” o, luego, “estra-


la continuidad del sistema con algunas compe- tégicos”, como los de Huascarán –nuevas tecnolo-
tencias trasladadas a los niveles sub-nacionales – gías, alfabetización y educación rural–. Como se
algo más autónomos en sus competencias– hicie- ha dicho, los Estados en proceso de descentraliza-
ron necesario un Ministerio más calificado para ción inventan formas de mantener vínculos con
políticas de control y regulación; calificación las instituciones educativas.
El problema se produce cuando es casi nula
poco lograda, en general.
su capacidad de universalizar un servicio de cali-
En educación, es claro que ningún nivel de
dad y equidad; por ello, son débiles para enfren-
gestión maneja todos los factores de calidad y
tar las desigualdades; sus programas no promue-
equidad. Esa mira de la calidad implica que el es-
ven el desarrollo de capacidades locales e institu-
fuerzo del Estado y la sociedad debe conjugarse
cionales. Los programas de mejoramiento de la
con la descentralización para lograr un esquema
calidad, promovidos por los bancos de financia-
no de menos Estado, sino de mejor Estado. Es
miento, no han incluido la orientación hacia la
pertinente recordar que la descentralización y la
descentralización sino una mayor iniciativa sólo
centralización coexisten siempre; no hay un siste-
del nivel central y de organizaciones privadas.
ma político puramente centralista o puramente
La tendencia a resumir la descentralización
descentralista, si bien los regímenes políticos en-
en la autonomía escolar y a subvalorar el papel del
fatizan una u otra forma de distribución del po-
Ministerio de Educación y del sistema educativo
der. Por ello, es errado afirmar que, luego de las
adquirió mucha fuerza. Nos parece que el tema es
transferencias de los programas sociales, el desa-
de vieja data. Así opina Luis E. Valcárcel, indige-
rrollo local es responsabilidad de “las localida-
nista destacado, quien fuera Ministro de Educa-
des” y no una materia que incumba al conjunto
ción de Colombia entre 1945 y 1947. Él quería
del país y al Estado nacional.
transformar el Ministerio “… de organismo adminis-
En educación, el Ministerio adquiere una
trador de centros escolares, a agente impulsor del desarro-
mayor capacidad de iniciativa, de modo selectivo,
llo cultural”.
a través de la posibilidad de impulsar reformas
Bien merece transcribir la noción de siste-
con apoyo financiero internacional, como la pro-
ma educativo y su sentido, de J. Gimeno:
visión de importantes insumos –texto escolar, bi-
bliotecas de aula, capacitación de docentes en
Puesto que se ha hecho de este sistema el
ejercicio–, las evaluaciones nacionales y el plan-
instrumento por antonomasia para dar
teamiento de nuevas propuestas curriculares.
cumplimiento al derecho de todos a la
En el caso de Perú, la descentralización se
educación, debe ordenarse de modo que
reinició cuando el Ministerio de Educación ya ve-
los ciudadanos y ciudadanas tengan garan-
nía ampliando sus campos de intervención en los

36
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

tía de que ese derecho les será asegurado, y La dimensión pedagógica:


de que, en un Estado democrático, lo po- desigualdad, diversidad, estándares
drán disfrutar en igualdad de oportunida-
des, en el marco del territorio y de la pobla- En términos de calidad de la educación, parte de
ción que compone al Estado, que es la ins- la idea que descentralización es el impulso a una mayor
tancia política y jurídica que garantiza el de- diversidad educativa, integrando contenidos de las cul-
recho de las personas. El sistema escolar turas locales y favoreciendo su enriquecimiento. En
representa también una esfera importante este sentido, descentralizar es además una aspiración
en la cual desarrollar y ejercer el principio antigua en el pensamiento educativo, como lo es la
de solidaridad, a través de la distribución de idea de que el proceso formativo se produce también
recursos. (...) Se espera que satisfaga fines co- en ámbitos diferentes a la escuela, durante toda la vida.
munes (...). La lógica de la existencia del sis- La noción de sociedad educadora, retomada por ejem-
tema como tal, implica y necesita, pues, que plo en la Ley General de Educación peruana, es un en-
actúe de manera ordenada en una dirección foque que beneficia a la descentralización. En términos
y no en otras, que se obligue a subordinar al- de la reflexión pedagógica, la descentralización debe
gunos intereses de grupos y de personas a lo permitir una mayor fluidez en el diálogo entre los sabe-
que tiene valor para todos, a no poder satis- res escolares y otros aprendizajes, en los diferentes ámbitos
facer libertades ilimitadas de unos en detri- sociales y facilitar una mayor y mejor comunicación en-
mento de las de otros (2005, 88). tre ciudadanos diferentes.
Para el proceso de descentralización pedagógica
Entre los problemas de la experiencia descen- –en el caso boliviano y también en el peruano– ahora
tralizadora, resalta la reproducción del centralismo está más presente la propuesta de “interculturalidad”,
en los niveles subnacionales y la ausencia de funcio- incorporada a su legislación como rasgo del conjunto
narios calificados. En relación con esto, se espera la de la educación. Desde este concepto, podemos espe-
dinamización de los mecanismos propios de una ca- rar un mejor debate con dos polos: uno, las propuestas
rrera administrativa pública. de modernización con actores sin arraigo, y, a la vez,

37
e d u c a c i ó n y c i u d a d

otras con afirmaciones populistas que sostienen que en En los últimos años han seguido aumentando
las culturas populares locales se encuentran los elemen- los países que realizan pruebas nacionales estandari-
tos suficientes para su desarrollo y su emancipación. zadas. Es una política diferente a la de la diversidad.
En América Latina la mirada pedagógica tuvo ¿Es incompatible? ¿Es complementaria? Ambas
poca importancia en varios procesos de descentrali- orientaciones se sustentan en la equidad. Varios paí-
zación educativa; hubo, más bien, un énfasis en la ses de América Latina participan en pruebas interna-
racionalidad financiera y fiscal. Además, éstos se cionales, como la PISA. Todas han resaltado la des-
dieron con una casi nula participación de los do- igualdad de aprendizajes entre los países y, al inte-
centes en su condición de portadores de un saber rior de ellos, su estrecha relación con las característi-
propio. Durante la década de los noventa, la cues- cas socioeconómicas de los estudiantes.
tión pedagógica ingresó con fuerza al aplicarse las Para desarrollar una discusión de fondo sobre
mediciones de rendimiento en algunos aprendiza- las cuestiones actuales del aprendizaje y la enseñan-
jes importantes, como comunicación, razonamien- za, se debe también incluir el hecho de que la mayor
to matemático y equidad. iniciativa en cuestiones curriculares y programas na-

Cuadro 2
Exámenes de evaluación del sistema educativo, en los ciclos primario y secundario

Estudiantes Nivel al cual los Grados


Primer año Frecuencia Materias
evaluados resultados son públicos examinados
Argentina 1993 Anual M Estatal 3,7,9,12 L, M, N, S
Brasil 1990 Anual M Estatal 1,3,5,7 L, M, N, S
Chile 1982 Bianual U Escuela 4,8 L, M
Colombia 1991 Bianual M Departamento 3,5 L, M
Costa Rica 1988 Anual U n.d 6,11 L, M, N, S
Jamaica 1975 Anual U escuela 6,9,11,13 L, M, S
México 1993 Anual M estatal Prim. Sec. L, M, N, S
Rep. Dom. 1992 Anual U escuela 4,6,8 L, M, N, S
M: muestra L: lenguaje N: ciencias naturales
U: universo M: matemáticas S: ciencias sociales
a) Minas Gerais, en Brasil, comenzó un sistema paralelo en 1992 para monitorear el aprendizaje estudiantil. El universo de estudiantes es evaluado y los resulta-
dos son enviados a cada escuela.
b) Los exámenes en la República Dominicana son utilizados simultáneamente como mecanismos de evaluación del estudiante.
Fuentes: varias publicaciones y entrevistas.
Tomado de: BID, Cómo organizar con éxito los servicios sociales.

38
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

cionales de mejoramiento ha vos de fondo para secto-


estado en muchos casos li- res masivos sin realizar
gada al financiamiento de políticas que generen
la banca internacional, que bienestar y mayor equi-
amplió su presencia en el dad social a las familias,
sector de la educación en desde la economía y las
muchos países del Tercer políticas sociales.
Mundo, con un mismo pa- También se evi-
trón de reforma educativa dencia que la mayor y
impuesto, matizado en los más clara fuerza de pre-
países sólo por los ministe- sión por el cambio de la
rios de educación. educación tiene sentido.
Una importante ex- Estas mediciones permi-
presión de poder central está en la regulación peda- ten la denuncia de la desigualdad educativa y su rol
gógica que expresan las mediciones nacionales de de reproducción de la desigualdad social; y, a la vez,
rendimiento. Al inicio de la década pasada se tenía nos hacen concientes de que sin vigorosas políticas
el siguiente listado: nacionales de mejora, sin crear condiciones de
Desde mediados de la década pasada Perú tam- aprendizaje, sin análisis suficiente de la diversidad, y
bién viene realizando mediciones nacionales. La con la pretensión de que en el corto plazo se deben
cuarta (2004), cuyos resultados acaban de ser presen- alcanzar las mismas metas a nivel nacional, las medi-
tados, revela nuevamente bajos resultados de apren- ciones de rendimiento se pueden usar para despres-
dizaje, y no se ve mejoramiento en comparación con tigiar la escuela pública. Pero el desafío sigue ahí: es
la medición del año 2001. legitimar con resultados de equidad la escuela públi-
Entonces, hoy lo más destacado sigue siendo los ca, o aceptar que se impondrá su debilitamiento y las
niveles bajos de aprendizaje en el sector público y parte políticas de subsidio a la demanda.
del sector privado; así como las enormes desigualdades, Las buenas prácticas existentes, en general,
si se compara el área rural con la urbana y el número de pueden desarrollase con los apoyos específicos que
estudiantes no-pobres, pobres y pobres extremos. tienen fuera de los ministerios de educación; pero su
Se replantea con más fuerza, desde los rendi- expansión y sostenimiento requieren de otras políti-
mientos, la imposibilidad de mejoramientos educati- cas nacionales, regionales y locales.

39
e d u c a c i ó n y c i u d a d

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40
Estado y derecho
Colombia

la educación en Colombia
Comisión Nacional de Seguimiento a Recomendaciones de la Relatora Especial de Naciones
Unidas para el Derecho a la Educación

Luis Carlos Avellaneda, Senador de la República.


Francisco Cajiao, Asesor y consultor en educación.
Ramón Moncada, Coordinador Campaña por el Derecho a la Educación. Plataforma Colombiana de Derechos
Humanos, Democracia y Desarrollo.
Ana Cristina Portilla, Investigadora de la Comisión Colombiana de Juristas, Delegada por la Movilización
Social por la Educación.
William René Sánchez, Secretario Nacional CEID- FECODE. Delegado por FECODE.
José Luis Ruiz, Asistente, Comisión Nacional de Seguimiento El Derecho a la Educación en Colombia.

Resumen
En 2004, la Relatora Especial de Naciones Unidas para el Derecho a la Educación, Katarina Tomasesvki,
presentó al Gobierno colombiano el informe sobre el estado del derecho a la educación en Colombia con 20 reco-
mendaciones para que el Estado colombiano se ajustara a las obligaciones adquiridas en Pactos, Convenciones
y Conferencias internacionales sobre Derechos humanos y en particular sobre el Derecho a la educación. Entre
marzo y abril de 2005 se conformó la Comisión Nacional de Seguimiento con el único propósito de hacer segui-
miento a estas Recomendaciones y elaborar un informe nacional al respecto. Este artículo da cuenta de ello.

Palabras clave
Derecho a la educación, gratuidad, políticas públicas, Tomasevski, Estado colombiano, pactos, derechos
humanos, recomendaciones.

Abstract
In 2004, the United Nations Special Rapporteur on the right to education, Katarina Tomasevski, presented
the Colombian government her report about the state of fulfillment of the right to education including 20 recommen-
dations for the Colombian State to adjust to acquired obligations (through international Covenants, Conferences
and Conventions about human rights and particularly about the right to education). Between March and April 2005
the National Commission for Follow-up was created for the sole purpose of monitoring the fulfillment of the recom-
mendations and producing a national report about the topic.

Key words
Right to education, free education, public policy, Tomasevski, Colombian State, covenants, human rights,
recommendations.
Informe de la Comisión Nacional de Seguimiento a las
Recomendaciones de la Relatora Especial de Naciones Unidas
para el Derecho a la Educación

Presentación
“Un niño sin educación

e
es un niño sin futuro, n febrero de 2004, la Relatora Especial
si Colombia no invierte de Naciones Unidas para el Derecho a
la Educación, Katarina Tomasevski, como
en su futuro, no tiene futuro” resultado de una visita oficial a Colombia en octubre
de 2003, presentó al Gobierno colombiano el Informe
K. TOMASEVSKI, 2004 sobre el Estado del Derecho a la Educación en Colombia1,
el cual tiene veinte recomendaciones para que el Es-
tado se ajuste a las obligaciones adquiridas en pac-
tos, convenciones y conferencias internacionales so-
bre derechos humanos, y en particular, sobre el dere-
cho a la educación. Para la elaboración del Informe
y las Recomendaciones, Tomasevski partió del aná-
lisis de la Declaración Universal de Derechos Huma-
nos, la Convención Mundial de los Derechos de la
Niñez y del Pacto Internacional de Derechos Econó-

1 Naciones Unidas, Comisión de Derechos Humanos, “Los


derechos económicos sociales y culturales. El derecho a la
educación”. Informe de la Relatora Especial, Katarina Toma-
sevski. Adición: Misión a Colombia, 1 al 10 de octubre de
2003, 60º período de sesiones, doc. E/CN.4/2004/45/Add.2,
febrero de 2004.

43
e d u c a c i ó n y c i u d a d

micos, Sociales y Culturales, PIDESC, así como de 2. Se solicitó una reunión con la Ministra
otras convenciones y conferencias internacionales; de Educación.
instrumentos ratificados por el Estado colombiano 3. Se realizaron consultas y reuniones con
y en donde se estipulan obligaciones y responsabili- organizaciones sociales.
dades que deben ser asumidas en relación con la
educación como derecho humano. 4. Se consultaron algunos informes y resul-
En el marco de la Campaña por el Derecho a tados de seguimiento impresos y difun-
la Educación, promovida desde septiembre de 2003 didos en sitios Web de organismos oficia-
por la Plataforma Colombiana de Derechos Huma- les y de organizaciones no gubernamen-
nos, Democracia y Desarrollo, que reúne cerca de tales, y
noventa organizaciones de carácter nacional, regio- 5. Se solicitó información específica en el
nal y local, se conformó en 2005, la Comisión Na- departamento del Chocó.
cional de Seguimiento, CNS, a las Recomendacio-
nes de la Relatora para revisar después de un año de Derecho a la educación
su presentación al Gobierno, la atención y el cumpli-
miento de las veinte recomendaciones. Nadie responde
La CNS, de carácter provisional, se conformó
para hacer seguimiento a estas Recomendaciones y
La primera conclusión de la Comisión es que
elaborar un informe Nacional2. Se obtuvo informa-
el Gobierno colombiano no ha difundido el Infor-
ción de la siguiente manera:
me ni las Recomendaciones de la Relatora y se ha
desentendido de este documento adoptado por Na-
1. Se realizaron derechos de petición a dife-
ciones Unidas. Tampoco existe un plan específico
rentes entidades oficiales: Vicepresidencia
para hacer seguimiento al cumplimiento de las vein-
de la República, Ministerio de Educación,
te recomendaciones.
Fiscalía y Defensoría del Pueblo.
La Comisión sólo tuvo acceso a archivos de
2 Formaron parte de esta Comisión el senador de la Repúbli- prensa del año 2004, donde la Ministra de Educa-
ca Luis Carlos Avellaneda, el consultor y asesor en educa- ción responde a periodistas sobre el Informe de la
ción Francisco Cajiao; la delegada de la Movilización Social
por la Educación, Ana Cristina Portilla, investigadora de la
Relatora, restándole importancia. El Gobierno, par-
Comisión Colombiana de Juristas; el delegado de la Fede- ticularmente el Ministerio de Educación Nacional,
ración Colombiana de Educadores, William René Sánchez, MEN, debió elaborar un plan para la implementa-
Secretario Nacional de CEID-FECODE, y el Coordinador de
la Campaña por el Derecho a la Educación, Ramón Monca- ción de las Recomendaciones de la Relatora en el
da Cardona; con el apoyo de José Luis Ruiz, quien realizó cual se establecieran compromisos serios, conside-
la secretaría de esta Comisión. Para contacto con coordina-
ción de la Campaña e información sobre esta comisión e in- rando que el Estado tiene que cumplir las obligacio-
forme puede escribir a: derechoaeducacion@epm.net.co o nes internacionales de derechos humanos, incluidas
plataformaco@colomsat.net.co o llamar a los teléfonos Bo-
gotá: (1) 323 07 15 y Medellín: (4) 216 68 22 o escribir a la
las de los relatores especiales. Además, lo recomen-
dirección: Carrera 5 No. 33A - 08, Bogotá. dado en el Informe corresponde al trabajo de inves-

44
e s t a d o y d e r e c h o

tigación realizado de Seguimiento a Metas Presidenciales, SIGOB,


por la Relatora pero de conjunto existe alta fragilidad en el sistema
Especial –exper- de información nacional.
ta de Naciones A pesar de la poca información oficial, la Comi-
Unidas sobre el sión tuvo acceso a informes –algunos de carácter ofi-
tema– y respon- cial–, aprovechó información en análisis publicados y
de a evidencias en sitios Web de diferentes instituciones y realizó re-
que comprueban uniones con varias organizaciones sociales nacionales;
la grave situación con base en esta información agrupó las veinte reco-
del derecho a la edu- mendaciones en los siguientes bloques temáticos:
cación en Colombia.
La Comisión no • Gratuidad de la educación.
tuvo pronto acceso a información • Revolución y políticas educativas.
de los organismos oficiales, a pesar • Escuela en medio del conflicto.
de haberse presentado, inclusive, • Defensores de derechos humanos, estu-
derechos de petición de informa- diantes y maestros amenazados y asesi-
ción solicitados por un senador de nados.
la República. La reunión solicitada • Discriminación e inequidad, y
por la Comisión a la Ministra de • Recomendaciones y exigencias.
Educación no fue atendida y la carta
de solicitud estuvo extraviada y negada por la secre- Si quiere educación, ¡pague!
taría de ese Despacho.
En vista de la ausencia de información directa, La gratuidad para el acceso y permanencia en
se consultaron informes y sitios Web oficiales del Mi- el sistema escolar, por lo menos en la educación bá-
nisterio3 y de la Dirección de Planeación Nacional, sica –varios países latinoamericanos lo contemplan
DNP4. En la Web del Ministerio hay tan poca infor- en la educación superior–, debe mirarse como atri-
mación que no permite hacer un seguimiento; sólo buto del derecho a la educación y como un hecho
hay indicaciones y definiciones de lo que son los sis- decisivo de nivelación y equidad social. Una socie-
temas de información –sin datos de seguimiento–, y dad y un Estado que aseguran el acceso gratuito, uni-
en relación con estadísticas anuales se encuentra in- versal y obligatorio de sus niñas, niños y jóvenes,
formación sin actualizar. El sitio Web del Departa- está asegurando su futuro.
mento Nacional de Planeación, DNP, permite acce- Otra consideración que debe tenerse es la si-
der a mayor información en relación con el Sistema tuación de pobreza y de bajos ingresos que tiene la
mayoría de la población. Muchos niñas, niños y jó-
3 Información consultada en la página web www.mineducacion. venes no acceden, o no pueden permanecer en las
gov.co instituciones escolares debido a la situación econó-
4 Información consultada en la página web www.dnp.gov.co mica de sus familias.

45
e d u c a c i ó n y c i u d a d

En toda institución educativa oficial de Colom- Uno de los problemas más preocupantes del
bia se debe pagar el ingreso anual, y este cobro se en- derecho a la educación en Colombia es la no gratui-
cuentra orientado y reglamentado por el Ministerio de dad de la educación básica. Esto evidencia que el dis-
Educación Nacional y por la mayor parte de las Secreta- frute del derecho a la educación se ve vulnerado por
rías de Educación departamentales y municipales. el incumplimiento del Estado para implementar la
La política del Gobierno en materia de educa- gratuidad de la educación primaria obligatoria, y ga-
ción, concretada a través del programa denominado rantizar la accesibilidad a la educación de todas y to-
“Revolución Educativa5” y del Sistema General de dos, sin discriminación, especialmente de los grupos
Participaciones6, no sólo no plantea medidas que en condiciones de vulnerabilidad8.
mejoren de manera efectiva el sistema de educación El Gobierno, a través del Ministerio de Educa-
en Colombia, el cual se caracteriza por ser excluyen- ción Nacional, expidió en junio de 2004 una Direc-
te y discriminatorio7, sino que empeora la situación tiva ministerial con vigencia para 2004 y 2005, de-
del sistema educativo con la implementación de po- nominada “Guía para la administración de los re-
líticas públicas regresivas en materia de derechos cursos del sector educativo9”, en la cual establece las
económicos, sociales y culturales. pautas que deben orientar a las entidades territoria-
les en el manejo de los recursos para educación pro-
5 El programa “Revolución Educativa” está contenido en el Plan
Nacional de Desarrollo 2003-2006 “Hacia un Estado Comuni-
tario”, aprobado por el Congreso de la República mediante la 2003, manifestó que el modelo educativo en Colombia es
Ley 812 de 2003. Según el artículo 339 de la Constitución Po- “... un mecanismo reproductor tanto de pobreza como de in-
lítica, el Plan de Nacional de Desarrollo incide en el disfrute de equidad”. Comenta que a los estratos más pobres, 1 y 2,
los derechos humanos, particularmente en los derechos eco- pertenece menos del 5 por ciento del ingreso, mientras que
nómicos, sociales y culturales; sus lineamientos repercuten di- los estratos más ricos, 5 y 6, controlan el 60 por ciento. Con-
rectamente en las demás políticas públicas que se ejecuten en cluye que en Colombia los ingresos de la familia son una de-
el cuatrienio, e incide en las leyes anuales de presupuesto. terminante fundamental para el acceso a la educación de la
6 El Sistema General de Participaciones, SGP, fue creado por niñez y la juventud, en particular de la educación superior, y
el acto legislativo 01 de 2001 que modificó los artículos 347, que “menos del 6 por ciento de la juventud entre 18 y 24
356 y 357 de la Constitución Política de 1991, y está regula- años del estrato 1” se matricula. Un promedio de menos de
do por la Ley 715 de 2001. Con este nuevo sistema se trans- 5,7 años de educación para los estratos 1 y 2, y más de
fieren recursos de la Nación a las entidades territoriales con once años para el estrato 6, ejemplifica la brecha entre los
algunos fines específicos, como la financiación de la educa- pobres y los ricos, así como el hecho de que, en Bogotá, “...
ción y la salud. El SGP sustituyó el anterior sistema de fi- el 42,5 por ciento de los jóvenes de estratos bajos se en-
nanciación del sistema educativo –situado fiscal y transfe- cuentra vinculado al mercado laboral, mientras que esto
rencias–, modificando los criterios de asignación y de sólo sucede con el 3,7 por ciento de los jóvenes de estratos
distribución de los recursos, y reduciendo los montos de es- altos”, en: Naciones Unidas, Comisión de Derechos Huma-
tos, lo que ha tenido un impacto negativo sobre el disfrute nos, Los derechos económicos, sociales y culturales. Op.,
del derecho a la educación. cit., nota 1, párrafo 16.
8 Artículos 13 y 14 del Pacto Internacional de Derechos Económi-
7 En este aspecto, la Relatora para el derecho a la educación,
señora Katarina Tomasevski, en el informe elaborado con cos, Sociales y Culturales.
motivo de la misión a Colombia realizada en octubre de 9 Ministerio de Educación Nacional. Guía No. 8.

46
e s t a d o y d e r e c h o

venientes del Sistema General de Participaciones. El Esta medida es regresiva y desestimula con una
Gobierno, reiterando lo dispuesto en la Directiva severa sanción a las entidades territoriales que, dan-
ministerial número 4 de 200310, dispuso que: do cumplimento a las obligaciones constituciona-
Teniendo en cuenta las restricciones presu- les12 e internacionales13 que tiene Colombia en ma-
puestales que impone la Ley 715 de 2001, en el caso teria de derechos humanos, abogan por la imple-
en que las entidades territoriales establezcan gratui- mentación del principio de gratuidad universalizada
dad generalizada en la prestación del servicio públi- de la educación primaria.
co educativo sin tener en cuenta las condiciones so- Un grupo de organizaciones no gubernamen-
cioeconómicas de la población atendida, los recur- tales ejerció un derecho de petición14 ante el Minis-
sos que dejan de percibir los establecimientos educa- terio de Educación Nacional, y solicitó derogar aque-
tivos por concepto de derechos académicos y otros llos apartes de la Directiva ministerial N°. 4 de 2003,
cobros deben ser asumidos con recursos propios de en donde la Nación elude su obligación de impartir
la entidad territorial diferentes al Sistema General educación primaria universal y gratuita, y sanciona a
de Participaciones. En cualquier caso, la entidad te- las entidades territoriales que buscan implementar
rritorial deberá transferir a las instituciones o asumir el principio de gratuidad universal de la educación15.
directamente los costos básicos asociados con el fun- En respuesta, el Ministerio manifestó que tal dispo-
cionamiento del establecimiento educativo, subsa-
nando el efecto de los recursos que deja de percibir.
Mediante esta disposición, el Gobierno fijó 12 Constitución Política de Colombia, artículo 67.
una sanción económica a las entidades territoriales 13 Artículo 13 y 14 del Pacto Internacional de Derechos Eco-
nómicos, Sociales y Culturales, aprobado mediante la Ley
que establezcan la gratuidad de manera generalizada 74 de 1968 y vigente para el Estado colombiano desde
para la prestación del servicio educativo. La sanción 1976; artículo 28 de la Convención sobre Derechos del
consiste en dejar de transferir a las en- Niño, aprobada mediante la Ley 12 de 1991
y vigente para el Estado Colombiano desde
tidades territoriales recursos del Siste- 1991; artículo 13 del Protocolo adicional
ma General de Participaciones, los a la Convención Americana de Derechos
cuales representan el 90 por ciento del Humanos, aprobado mediante la Ley 319
de 1996.
total de recursos disponibles para la fi- 14 El derecho de petición es un derecho funda-
nanciación del sistema educativo11. mental, reconocido en el artículo 23 de la
Constitución Política de Colombia, en virtud
del cual “Toda persona tiene derecho a pre-
10 Véase también, En contravía de las reco- sentar peticiones respetuosas a las autori-
mendaciones internacionales, Comisión Co- dades por motivos de interés general o par-
lombiana de Juristas, Bogotá, 2004, p. 121. ticular y a obtener una pronta respuesta”.
11 15 Derecho de petición dirigido a la ministra
Guía No. 8, “Guía para la administración
de los recursos del sector educativo”, Mi- de Educación, Cecilia María Vélez White,
nisterio de Educación Nacional, junio de con fecha de radicación de 5 de noviem-
2004, p. 8. bre de 2004.

47
e d u c a c i ó n y c i u d a d

sición no sólo no viola el derecho a la educación,


sino que está acorde con el ordenamiento interno.
Agrega,

... las directrices impartidas, no contra-


vienen lo establecido en la Constitución
Política de Colombia, ni pretenden impe-
dir la gratuidad del servicio educativo, sien-
do lícito el cobro de los derechos académi-
cos a quienes estén en capacidad de sufra-
garlos, con lo que se pretende desde la ley
hacer equidad con relación a la población
económicamente menos pudiente16 .

La respuesta del Gobierno demuestra, por una


parte, que éste no reconoce la crítica situación de
inequidad y exclusión de muchísimas personas, y
que afecta seriamente la realización efectiva del dere-
cho a la educación en Colombia.
El Gobierno colombiano incumple las reco-
mendaciones que el Comité de Derechos Económi-
cos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas ha
hecho con relación a que éste debe situar el máxi-
mo de los recursos económicos disponibles para ga-
rantizar el derecho a la educación; tampoco acoge
la recomendación de la Relatora en el sentido de
efectuar un incremento de la asignación presupues-

16 República de Colombia, Ministerio de Educación Nacional,


Oficina Asesora Jurídica, noviembre 22 de 2004, radicado
ER 54738.
17 Naciones Unidas, Comisión de Derechos Humanos, “Los de-
rechos económicos sociales y culturales. El derecho a la edu-
cación”. Informe de la Relatora Especial, Katarina Tomasevs-
ki. Adición: Misión a Colombia, 1º al 10 de octubre de 2003,
60º período de sesiones, doc. E/CN.4/2004/45/Add.2, febrero
de 2004, p. 2.

48
e s t a d o y d e r e c h o

taria para la educación de 30 por ciento, del 4 al 6 ción en Quibdó. En Medellín, el Concejo Munici-
por ciento del PIB17. Se estima que Colombia desti- pal ha abordado este tema en un acuerdo munici-
na 4.1 por ciento de su Producto Interno Bruto a la pal. En Bogotá se decidió no cobrar por el ingreso
educación pública18. La obligación de garantizar de estudiantes de educación básica pertenecientes
educación primaria universal y gratuita está califi- a los estratos 1 y 2; además, está llevando a cabo un
cada de inmediato cumplimiento. programa que otorga un subsidio mensual a niñas,
Dotaciones de equipos y materiales didácticos niños y jóvenes que trabajan en la calle, con el fin
de muchas instituciones escolares dependen de la de que regresen a las instituciones y permanezcan
beneficencia y solidaridad de organizaciones y fun- en ellas hasta la culminación de los programas es-
daciones. Maestros y rectores señalan que existen po- colares. El Gobierno debe apoyar estas iniciativas
cos recursos para la financiación de los gastos de la económica y políticamente, así como propiciar y
cotidianidad escolar y la acción educativa regular. La garantizar la gratuidad de la educación en todo el
Nación y las entidades territoriales calculan los cos- territorio nacional.
tos de edificios, aulas, personal administrativo y pla-
zas docentes, pero asignan recursos insuficientes Sube cobertura, aumenta deserción
para la operación cotidiana y la actividad pedagógica
en las instituciones escolares. Esto incide en la cali- Según información extraída del sito Web ofi-
dad de la educación, porque no basta el edificio, el cial de la Dirección Nacional de Planeación, ... la
aula, el directivo –de institución educativa, de secre- magnitud y complejidad de la educación colombia-
taría o de ministerio– para asegurar la buena cali- na puede visualizarse dadas las cifras que se maneja-
dad, es necesario invertir en la calidad de la vida es- ban en el sector para el año 2004: alrededor de se-
colar en su totalidad. senta mil establecimientos escolares, cuatrocientos
Existen iniciativas de gobiernos locales para veinte mil docentes y diez millones de alumnas y
implantar la gratuidad que es necesario apoyar, for- alumnos. La educación superior tiene cerca de dos-
talecer y promover en otras ciudades y departamen- cientas setenta instituciones y un millón de estu-
tos. Citamos el caso del departamento del Chocó, diantes. A diferencia de otros países de la región, la
donde el gobernador emitió un decreto y el Conce- participación del sector privado en la oferta de edu-
jo Municipal está cercano a la aprobación de un cación es alta: aproximadamente 20 por ciento en
acuerdo para la gratuidad en el acceso a la educa- educación básica y media y 60 por ciento en educa-
ción superior
18
Esta magnitud es expuesta como argumento
Ver artículo: “No basta con tener más, hay que gastar mejor”.
Por Alberto Rodríguez, en: Al Tablero, periódico del programa para la dificultad de seguimiento y obtención de in-
de Revolución Educativa del Ministerio de Educación, marzo formación. Para responder a esta necesidad del siste-
de 2003. Alberto Rodríguez, Ph.D. es especialista en educa-
ción del Banco Mundial. http://www.mineducacion.gov.co/alta-
ma de información, se cuenta con el Sistema de Se-
blero/articulo.asp guimiento a las Metas Presidenciales 2004-2007, SI-

49
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Gobierno. Dijo que en dos años se ha logrado cum-


plir con la mitad de la meta de cobertura planteada
para educación preescolar, básica y media y mostró
los logros en educación superior.
En los datos que reporta el sistema de segui-
miento a metas presidenciales y en la valoración que
hace la ministra de Educación, se plantea un reporte
favorable y una satisfacción por el avance logrado en
términos de cobertura y calidad. Sin embargo, es im-
portante reiterar que la provisión de un cupo no ga-
rantiza el goce del derecho a la educación de las niñas,
los niños y los jóvenes, y que es necesario avanzar en
la implementación de una educación de calidad y de
políticas públicas que acaben con la deserción escolar.
GOB; en este caso para el sector educativo. De acuer- Adicionalmente, el aumento de cupos se ha llevado a
do con este sistema, se reportan los siguientes cabo en detrimento de otros componentes del dere-
avances en las metas19: cho a la educación, como el aumento del número de
En aumento de cobertura de nuevos cupos se niñas, niños y jóvenes por maestro. El Gobierno debe
tiene una meta para el cuatrienio de un millón qui- implementar una política de educación que cumpla
nientos mil nuevos cupos en educación básica y con los requisitos aceptados por Naciones Unidas y
media, y a 31 de diciembre de 2004 se reporta un que fueron desarrollados por la Relatora Tomasevski
logro de setecientos treinta y cuatro mil cuatrocien- en el “Sistema de las 4 A” que plantea un esquema de
tos trece nuevos cupos –477.989 en 2003 y 256.815 obligaciones y derechos, a la luz de las obligaciones
en 2004– lo que representa un avance del 49 por contenidas en el Pacto Internacional de Derechos
ciento frente a la meta para los cuatro años del pe- Económicos, Sociales y Culturales:
ríodo de Gobierno.
En el Foro sobre Calidad de la Educación20, • Asequibilidad: que se refiere a presupuesto
realizado en septiembre de 2004 en el marco del pro- suficiente, escuelas y maestros necesarios,
yecto Educación Compromiso de Todos, la Ministra de infraestructura y dotaciones pertinentes.
Educación, Cecilia María Vélez, presentó los resulta- • Accesibilidad: que incluye gratuidad, accesi-
dos de la política de “Revolución Educativa” de este bilidad económica, material y geográfica a
las instituciones escolares.
19 http://sigob.presidencia.gov.co/ciudadanos/menu/menu.asp • Adaptabilidad: que analiza la pertinencia
20 http://eltiempo.terra.com.co/PROYECTOS/RELCOM/RESE del currículo y la oferta educativa de acuer-
DU/COMTOD/noticias/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR- do a contextos y poblaciones específicas.
1916809.html

50
e s t a d o y d e r e c h o

• Aceptabilidad: que observa la calidad de la tión del Gobierno, aparece también la deserción es-
educación asociada a las necesidades, inte- colar entre las debilidades del período:
reses y expectativas de las diversas comuni- Entre los desaciertos están la falta de inversión
dades y poblaciones. en educación, la falta de implementos necesarios
para la enseñanza y las deficientes condiciones labo-
En relación con la cobertura, hay dos dificulta- rales de los educadores. También se considera que la
des que el Gobierno debe solucionar y que fueron deserción escolar es alta y que no se ha hecho nada
objeto de preocupación por parte de la Relatora: la para mejorar la precaria infraestructura física de las
primera es la relacionada con el seguimiento real y la instituciones educativas.
credibilidad de las estadísticas departamentales y na- Sobre esto, el vicepresidente de FECODE Ce-
cionales ante la fragilidad del Sistema Nacional de In- lio Nieves Herrera, informó que,
formación Educativa, asunto que es reconocido por
los mismos funcionarios del Estado. Como lo expresó ...entre 2003 y 2004 hubo una deser-
Blanca Lilia Caro, jefa de Planeación y Finanzas del ción de más de quinientos veinte mil estu-
Ministerio de Educación Nacional en un foro sobre diantes, según un estudio del profesor Fer-
financiación de la educación preescolar y básica, reali- nando Reimers realizado para la Funda-
zado en Bogotá en noviembre de 200421: ción Antonio Restrepo Barco. Los niños se
matriculan y luego se van de la escuela por
...persisten los cuestionamientos sobre varios factores, especialmente por las con-
la veracidad de la información sobre la ma- diciones económicas del país22
trícula que reportan las Secretarías de Edu-
cación. Falta mejorar mucho en la calidad De lo anterior se concluye que el aumento de
de la información, pero se están haciendo cobertura reportado por el Gobierno no es real por
auditorias y hay un comité interinstitucio- estar acompañado por lo menos de dos factores
nal de información que está trabajando desequilibrantes: desplazamiento de estudiantes de
para ajustar el Sistema de Información las instituciones privadas a las instituciones
educativas oficiales, y deserción producida dentro
La segunda dificultad es el desfase que se ha del sistema oficial por las condiciones económicas
presentado en el país entre cobertura y deserción, a de las familias o por la desmotivación de estudiantes
pesar de que sobre esta última no hay un registro sis- para permanecer en el sistema.
temático, pero que es expresado por organizaciones Otro hecho que preocupa en relación con la
e informes. Como resultado de la encuesta de per- cobertura educativa nacional, es el alto índice de co-
cepción ciudadana realizada en 2004 sobre la ges- bertura atendida por particulares, lo cual es señala-

21 http://eltiempo.terra.com.co /PROYECTOS/RELCOM/RESE- 22 http://eltiempo.terra.com.co/ PROYECTOS/RELCOM/RESE-


DU/COMTOD/ noticias /ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR- DU/COMTOD /noticias/ ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR-
1916809.html 1916809.html

51
e d u c a c i ó n y c i u d a d

do por el profesor Francisco Cajiao: en las ocho A pesar de que el Gobierno habla de
principales ciudades de Colombia el 50 por ciento cobertura, calidad y eficiencia, realmente no
de la educación es ofrecida por particulares y mues- se ataca de raíz la situación educativa de los
tra la diferencia de oportunidades entre institucio- chocoanos porque el diagnóstico no tiene
nes educativas pobres –que son la mayoría, en razón en cuenta la realidad social y económica de
de su presupuesto– e instituciones educativas privile- las familias. Se amplía la cobertura en cierto
giadas, como muchas de las privadas, que se eviden- sentido, pero con el transcurrir del tiempo
cia en la comparación de la asignación presupuestal los alumnos desertan de las instituciones
oficial promedio para un niño de educación básica por la falta de recursos económicos para sos-
correspondiente a US$324 dólares por año que se tenerse; para los que continúan –en su ma-
invierten en uno de los colegios privados más privi- yoría–, el nivel académico es bajo, en parte
legiados de Bogotá. Estamos hablando de niñas, ni- por desmotivación, porque al terminar sus
ños y jóvenes que no tienen la misma oportunidad estudios no encuentran qué hacer o no en-
de ser ciudadanas y ciudadanos con igualdad de con- cuentran una profesión que les permita su
diciones. La brecha tiene implicaciones en la calidad desarrollo personal. Igualmente, porque la
de la oferta escolar y con frecuencia se expresa tam- oferta educativa no llena sus aspiraciones.
bién en calidad de aprendizajes y en oportunidades
futuras para el mundo académico y/o laboral. Otro testimonio que muestra la precariedad
El derecho a la educación, en relación con la de la “Revolución Educativa”, es relatado por el
calidad, es analizado desde las dimensiones de adap- Concejo Comunitario Mayor Asociación Campesi-
tabilidad y aceptabilidad planteadas en el “Sistema na Integral del Atrato, COCOMACIA:
de las 4 A” desarrollado por la Relatora Tomasevski.
Se basa en el reconocimiento de necesidades, pro- Existen comunidades con escuelas que
blemas y contextos socioculturales particulares que desde el año 2003 no cuentan con maestros
las comunidades usuarias consideran pertinente in- que dicten clase. Varias comunidades han
corporar a las políticas y programas educativos. Esto tenido ciento veinte, ochenta, y setenta
ha sido expresado por Wilson Arboleda, director del alumnos y alumnas matriculados y sólo
CEID del Sindicato de Maestros del Chocó: cuentan con una maestra. De la misma for-

52
e s t a d o y d e r e c h o

ma, hay varias comunidades sin maestros: Otro problema asociado es la vinculación de
La Villa, La Peña, Pueblo Viejo; en el río Be- jóvenes a la “seguridad democrática”, como aconte-
baramá la comunidad del Playón, en el río ce con los soldados campesinos. Jóvenes en edad es-
Munguidó más de doscientos niños y niñas, colar a quienes se les debería ofrecer un aula para
y en el río Negua, San Francisco de Ichó continuar su formación y tener otras oportunidades
de empleo productivo. Muchos se han incorporado
La escuela al programa por presiones económicas y por falta de
opciones de vida. A esto se añade que, debido a que
el actual Gobierno ha decidido abiertamente involu-
Sitiada y entre fuegos crar a la población civil al conflicto25, se ha reforza-
do la idea de que quien no está con la Fuerza Pública
Los medios de comunicación del país se han
está contra ella.
ocupado de la afirmación del Gobierno que “en Co-
lombia no hay conflicto armado”, pese a las perma-
Violaciones, asesinatos y poca justicia
nentes confrontaciones entre el Ejército Nacional y
los grupos armados. Mantenerse en esta negación
En cuanto a maestros asesinados o víctimas de
ayuda poco; lo mejor que podría hacer el Gobierno
violaciones a los derechos humanos, los datos desfa-
es reconocer el hecho y enfrentarlo mediante la ne-
vorables encontrados por la Relatora en octubre de
gociación política, que es la vía deseable.
2003 continúan vigentes: el número de maestros
En Colombia los combatientes cometen múl-
asesinados en Colombia sigue siendo alto y hay poca
tiples infracciones al Derecho Internacional Huma-
investigación de los hechos, y cuando esta se lleva a
nitario, DIH. Las escuelas rurales dan cuenta de
cabo no llega a la judicialización y penalización de
ello, porque muchas se encuentran en territorios en
los responsables. Parece que al Estado no le preocu-
disputa o son aprovechadas como cuarteles y atala-
para el asesinato de sus maestros.
yas. La Relatora denunció los ataques contra las es-
Según la base de datos de la Escuela Nacional
cuelas y su utilización por los grupos armados como
Sindical, ENS, reconocida por organismos del Esta-
factores de “formación para la guerra23”. Así, el Go-
do y que triangula información con el observatorio
bierno no adopta medidas efectivas para la desvin-
culación de la escuela del conflicto armado y su pro-
tección como espacio de paz24. económicos, sociales y culturales, el derecho a la educa-
ción”, E/C.4/2004/45/Add.2, párrafo 48.

25 Varias iniciativas impulsadas


23 Naciones Unidas, Comisión de De-
por el Gobierno dan cuenta de
rechos Humanos, “Los derechos
esta situación, entre estas,
económicos, sociales y culturales,
además del reclutamiento de
el derecho a la educación”, E/
soldados campesinos, está la
C.4/2004/45/Add.2, párrafo 48.
conformación de redes de in-
24 Naciones Unidas, Comisión de De- formantes y del servicio militar
rechos Humanos, “Los derechos a sectores vulnerables.

53
e d u c a c i ó n y c i u d a d

de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la davía Colombia mantiene esta reserva, a


República y otras instituciones como la Federación pesar de las peticiones y presiones de carác-
Colombiana de Educadores, FECODE, y la Comi- ter nacional e internacional.
sión Colombiana de Juristas, en Colombia cada se-
mana es asesinado un maestro sindicalizado. Entre ...la discriminación racial en el campo de la
marzo 1º de 2004 y marzo 31 de 2005, fueron asesi- educación no solamente es exclusión o im-
nados cuarenta y ocho maestros y maestras sindicali- posibilidad para el acceso a ella, sino que se
zados; la Policía Nacional reportó para 2004, sesenta expresa en el maltrato y en la generación de
y tres casos de educadores asesinados. ambientes y relaciones hostiles en las insti-
tuciones educativas por parte de directivas,
Pocos avances en inclusión y no profesores, padres de familia, y también en-
discriminación tre los mismos compañeros y compañeras

La Comisión lamenta no tener mayor infor- Es decir que no se garantiza el disfrute del de-
mación de organismos gubernamentales y de organi- recho a la educación a las niñas y los niños desplaza-
zaciones sociales acerca de los temas de equidad y no dos, y que la política pública para la atención en edu-
discriminación que también fueron objeto de las Re- cación de la niñez desplazada se ha enfocado hacia la
comendaciones de la Relatora. apertura de cupos educativos. Sin embargo, los cu-
Sin embargo, resaltamos algunas informaciones pos creados no son suficientes26, y en muchos casos
y preocupaciones expresadas en las reuniones con el los establecimientos educativos no aplican la exen-
Movimiento Afrocolombiano Cimarrón, la Organiza- ción de los costos de matrículas y de pensiones a las
ción Indígena de Colombia, ONIC, y la Red de Edu- familias desplazadas.
cación Popular entre Mujeres, REPEM. Por el carác-
ter de las organizaciones participantes en la reunión, Recomendaciones de la Comisión
se hace especial énfasis en la equidad y no discrimina-
ción por motivos de raza, etnia y género. La Comisión Nacional de Seguimiento, CNS,
Para Juan de Dios Mosquera, perteneciente al solicita una respuesta del Gobierno colombiano sobre
Movimiento Nacional Cimarrón: el avance en relación con el Informe y las Recomenda-
ciones de la Relatora, y la formulación de un plan de
El Estado colombiano mantiene la reserva
en el artículo 14 de la Convención Interna- 26 Durante el primer semestre de 2004, 113.108 cupos fueron
cional para la Eliminación de todas las For- otorgados a niñas y niños desplazados; pero el déficit de cu-
pos, según la Red de Solidaridad Social es de 308.437 para
mas de Discriminación Racial, con lo cual la población entre cinco y quince años; en: Consejo Nacio-
no pueden presentarse denuncias al Esta- nal de Atención Integral a la Población Desplazada, Informe
do colombiano contra discriminación ra- a la Corte Constitucional, 17 de enero de 2005, AZ - 1, pág.
93; y Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Re-
cial; no se entiende la razón por la cual to- fugiados ACNUR, “Balance de la política pública de preven-

54
e s t a d o y d e r e c h o

acción nacional para atenderlas y transformar la situa- 5. Que el Gobierno rectifique la Directiva
ción actual del derecho a la educación en Colombia. ministerial No. 8 de 2004, la cual repre-
La CNS, recomienda: senta una medida regresiva para el cumpli-
miento de la obligación de carácter inme-
1. El trámite y aprobación en el Congreso diato de implementar la gratuidad de la
de la República de la Ley Estatutaria so- educación primaria obligatoria, y de ga-
bre el Derecho a la Educación, la cual debe rantizar la accesibilidad a la educación de
estar articulada con el proceso nacional de todas y todos, sin discriminación, especial-
la movilización social por la educación, de mente de los grupos en condiciones de
modo que éste sea deliberativo, participa- vulnerabilidad.
tivo y de movilización nacional. 6. Que el Gobierno adopte medidas para ga-
2. Cumplir con las obligaciones derivadas rantizar, de manera inmediata, la vida y la
del Pacto Internacional sobre Derechos integridad personal de toda la comuni-
Económicos, Sociales y Culturales, y en dad educativa, y que ponga a salvo los es-
particular, garantizar el derecho a una edu- tablecimientos educativos, reconociéndo-
cación primaria, universal y gratuita. los como espacios de paz y evitando cual-
3. Complementar el acceso gratuito a la edu- quier utilización de los mismos para el
cación primaria de la población vulnera- conflicto armado.
ble, y en particular de la población en si- 7. La invitación oficial por parte del Gobier-
tuación de desplazamiento, con otras me- no colombiano para que el señor Vernor
didas que favorezcan y aseguren su per- Muñoz, actual Relator de Naciones Uni-
manencia en el sistema educativo. das para el Derecho a la Educación, visite
4. Un estudio y un plan progresivo de exten- Colombia en 2006 con el fin de hacer se-
sión de la gratuidad a la educación básica, guimiento de la situación de la educación
con proyección a la educación media. y de las recomendaciones realizadas por
Naciones Unidas al Estado colombiano.
ción, protección y atención al desplazamiento forzado en
Colombia. Agosto de 2002 - agosto de 2004”, Bogotá, di-
ciembre de 2004, Conclusiones y Recomendaciones Gene-
rales, párrafo 37. Bogotá, abril 29 de 2005

55
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Recomendaciones de la Relatora 4. Una evaluación del impacto de “La Revo-


Especial de Naciones Unidas lución Educativa” sobre el derecho a la
educación.
Katarina Tomasevski1. 5. Aclaración anticipada al impacto sobre el
derecho a la educación de las políticas de
ampliación de educación privada conteni-
1. Inmediato y explícito compromiso del Go- das en “La Revolución Educativa,” y me-
bierno con la defensa y protección de los didas encaminadas a la eliminación –o,
defensores de los derechos humanos. por lo menos, reducción– de todo impac-
2. Afirmación inmediata y explícita de la ple- to negativo.
na vigencia de las obligaciones internacio- 6. Afirmación inmediata y explícita de la
nales en derechos humanos del Estado co- obligación internacional del Estado co-
lombiano y un compromiso con el fortale- lombiano de garantizar educación gra-
cimiento de la tutela en cuanto a derechos tuita para toda la niñez en edad de esco-
económicos, sociales y culturales. larización obligatoria. La implementa-
3. Análisis y valoración de la política gu- ción de la gratuidad necesita una identi-
bernamental a la luz de los criterios del ficación detallada de los costos pagados
derecho internacional de los derechos por los alumnos y alumnas por una edu-
humanos, con el propósito de la adecua- cación que debe ser gratuita pero no lo
ción de todas las estrategias y políticas es, y la Relatora Especial recomienda un
gubernamentales a dicho derecho. estudio de los costos actuales con el pro-
pósito de su eliminación.
7. Compromiso inmediato del Gobierno con
1 Profesora de derecho internacional y de relaciones interna-
la gratuidad de la educación y subsidios
cionales (Universidad de Lund) y conferenciante externa del
Centre for African Studies (Universidad de Copenhague). Sus del costo de toda la canasta educativa para
principales intereses en la investigación son las dimensiones todos los niños y niñas desplazados en
de las relaciones económicas internacionales en los dere-
chos humanos y la legislación no discriminatoria comparada.
edad escolar.
Entre sus publicaciones recientes destacan: Between Sanc- 8. Una “topografía” inmediata del perfil de la
tions and Elections: Human Rights Performance of Donor Go-
vernments (1997) y Thematic Guide to Human Rights of Wo- exclusión educativa con el propósito de
men (con G. Alfredsson, 1995). adoptar todas las medidas necesarias para al-

56
e s t a d o y d e r e c h o

canzar la inclusión comple- que tenga un eje transversal de


ta lo más pronto posible. derechos humanos.
9. Un estudio inmediato del 13. Le parece excelente el mo-
perfil y alcance de la discri- delo de una constituyente educa-
minación en la educación, tiva, propuesto por los chocoa-
con la participación de las víc- nos, con el propósito de diseñar el
timas, encaminado a asumir po- modelo educativo por medio de la
líticas y prácticas para su elimina- participación de los titulares, individuales
ción y un control público del cumpli- y colectivos, del derecho a la educación.
miento de éstas.
14. Recomienda al Gobierno colombiano, me-
10. Incremento de la asignación presupuesta- didas inmediatas encaminadas a la aclara-
ria para la educación de 30 por ciento, del ción de los asesinatos del personal docente.
4 por ciento al 6 por ciento del PIB.
15. No puede imaginarse la realización del de-
11. Compromiso inmediato del Gobierno recho a la educación sin la protección de
con la gratuidad de la educación y subsi- los derechos humanos, profesionales, sin-
dios del costo de toda la canasta educati- dicales y académicos de los educadores. La
va para todos los niños y niñas trabajado- Relatora Especial recomienda medidas in-
res en edad escolar y, además, la adapta- mediatas para remediar su desprotección
ción de la educación a estos niños y ni- en Colombia.
ñas, con la participación de los mismos
16. Recomienda al Gobierno que afirme enfá-
en su diseño y evaluación.
ticamente la legitimidad y necesidad de la
12. Las obligaciones internacionales del Estado enseñanza, aprendizaje y defensa de dere-
en derechos humanos comprometen a to- chos humanos.
das sus instancias a incorporar los derechos 17. Desvinculación de la escuela del conflicto
humanos en todas las estrategias, políticas y y su definición y protección como “espa-
acciones, y requieren del concurso de todas cio de paz” y para la reconstrucción de un
las ramas del poder público. La Relatora Es- proyecto de vida para la niñez y juventud
pecial subraya sus recomendaciones relacio- victimizadas por la violencia y el desplaza-
nadas con un diseño del Plan de Desarrollo miento forzado.

57
e d u c a c i ó n y c i u d a d

18. Recomienda una estrategia educativa con aprendizaje con plena participación de
enfoque de género, destinada al análisis de los defensores de derechos humanos, el
los procesos educativos desde el punto de personal docente, y los alumnos y alum-
vista de ambos sexos, y al diseño de una nas para adaptar el proceso educativo al
educación en contra del conflicto y la vio- contexto colombiano.
lencia, que eduque para un ideario de so- 20. Recomienda al Gobierno desarrollar in-
ciedad en paz, basada en derechos huma- mediatamente mecanismos que hagan
nos iguales para todos y todas. efectiva la eliminación de toda discrimi-
19. Subraya su recomendación al Gobierno nación de las niñas embarazadas y niñas-
de aclarar la legitimidad de los derechos madres, como lo postuló la Corte Cons-
humanos y de desarrollar su enseñanza y titucional.

58
Poder, política y políticas
modos de empoderamiento del maestro
Ana María González Forero

Politóloga de la Universidad Nacional, candidata a Magíster en Educación de la Universidad Pedagógica


Nacional, maestra cartógrafa del Observatorio de Pedagogía y Educación de Bogotá, y asesora de políticas pú-
blicas del IDEP.

Resumen

Este artículo explora algunas diferencias entre poder, política y políticas, nociones que se han convertido
en lugares comunes del sector educativo colombiano. El artículo sugiere los lugares naturales del quehacer do-
cente, como espacios políticos para los maestros, como antiguos y nuevos escenarios para el empoderamiento:
el aula, la investigación y la política pública educativa.

Palabras clave

Poder, política, políticas, pedagogía, educación, investigación, maestro, aula, empoderamiento.

Abstract

This article explores some differences between power, politics and policies, notions that have commonly
been confused in the Colombian educational systems. The article suggests that the classroom, public policy, and
research even though part of the natural environment of the teacher, can become an important political scenario
for his and her empowerment.

Key words

Power, policy, politics, pedagogy, education, investigation, teacher, classroom, empowerment.


d
e lo político, se habla mucho. Todos los días artículo producir una teoría del poder que dé cuenta
se nos recuerda, por diversos medios, que de lo que es. Para eso, gran parte de la filosofía de to-
somos actores políticos, que la política nos das las culturas ha destinado siglos de pensamiento.
determina en tanto miembros de una sociedad. Sin Simplemente, se busca plantear interrogantes. ¿El
embargo, la conceptualización acerca de los signifi- poder se tiene?, ¿se acumula?, ¿se ejerce?, ¿se pierde?,
cados de lo político rara vez trasciende las aulas de ¿se gana?, ¿habita en el Estado, en el Gobierno?
los politólogos y de los científicos sociales. Es como Es necesario aproximarnos, desde diferentes
si la política no fuera una parte de la vida que nos perspectivas teóricas, al concepto de poder. Este no
circula y ronda permanentemente. Por ello, el objeti- es sinónimo de Estado ni de Gobierno. Partamos de
vo de este artículo es ilustrar al lector sobre algunas un ejemplo: en alguna parte del discurso feminista
sutilezas conceptuales que pueden ser importantes a se nos dice que el poder puede estar entre las sába-
la hora de buscar y de ubicar el lugar político que nas. ¿Acaso el poder se halla en lo relacional o en lo
cada uno de nosotros como sujetos ocupa. La invita- comunicativo? El poder se oculta y se visibiliza en el
ción no es a leer este texto como si fuera un recuento disciplinamiento, en la autoridad, en el control. Se
exhaustivo y definitorio de los conceptos que plan- reactualiza en los discursos y constituye las prácticas
tea, sino a ubicarlo en su intención de precisar luga- en las instituciones y en la justicia. El poder fluctúa
res, frases y escenarios comunes que, de tanto repe- y circula en su relación perenne con la fuerza. Vive
tir, hemos olvidado. en la relación entre un médico y su paciente, entre
La política es una esfera, un universo de la co- un maestro y un estudiante. Todos estos son espa-
lisión. Como su objeto es el estudio del poder, se in- cios que se nutren de micro y macro poderes que es-
volucra en las luchas, los choques, las alianzas y las tán movilizándose en todo momento. El poder tal
estrategias. En este primer apartado, se pretende di- vez podría condensarse en una noción de movimien-
ferenciar poder, política y políticas, para lograr esta- to; siempre tiene dirección, aunque no siempre se
blecer sus correlaciones. Obviamente, esta diferen- sepa cuál es1.
ciación sólo se puede dar a nivel teórico, pues las tres Aunque algunos teóricos dirían que éstas se
cosas, en la realidad, se entrecruzan, se contradicen, constituyen en relaciones políticas, comparto la no-
se entrelazan y operan. Pero, a veces, un poco de di- ción de Fabián Acosta según la cual “no todas las rela-
sección nos ayuda a ver de modo más preciso lo que ciones de poder son relaciones políticas, (algunas) son rela-
parece evidente.
El espacio de lo político se refiere al espacio
donde habita el poder. Y no es objeto de este corto 1 Al respecto, se pueden consultar las obras de Gilles Deleuze y Félix Guattari.

61
e d u c a c i ó n y c i u d a d

de la vida comunitaria. La política parece ser la ma-


nera como los seres humanos adaptamos el entorno
social para obligarlo a convertirse en un ambiente
que esté de acuerdo con nuestras prioridades.
ciones de autoridad, de subordinación”2. Sin embargo, Podemos dar como ejemplo el caso de la mo-
caben preguntas de diversa índole sobre el origen narquía, en la cual el gobernante es enviado de Dios,
del poder, sobre su funcionamiento. Al crear pre- caso que para nuestro tiempo, en la cultura occiden-
guntas sobre el poder, lo que se pretende, funda- tal, puede sonar distante de la realidad.
mentalmente, es construir preguntas sobre el sujeto, Otro ejemplo puede ser el del mercado accio-
el empoderamiento y la gestión. nario, en el cual se negocia con acciones, opciones y
futuros, con base en cálculos sobre una producción
que no existe aún. Para nuestros ancestros, puede so-
La política nar ilógico que nuestra economía esté sustentada en
la realidad financiera y no en la productiva –otra de
La noción de política, como la de poder, es al-
las ficciones con la cual nos constituimos en sistema
tamente problemática y compleja. Entendámosla en
político–.
dos instancias: la que se relaciona con el poder ejer-
Entendiendo esto, es fácil deducir el papel que
cido, y aquella que refiere a la institucionalidad polí-
desempeña la norma, la regla, la disciplina, para ins-
tica moderna. De nuevo, es necesario advertir que la
titucionalizar estas ficciones. Por ello, la política apa-
intención no es de exhaustividad sino de visibiliza-
rece cuando se hace necesario controlar un colectivo
ción de diversas posturas conceptuales que proble-
para su aparente beneficio. La política nace con la
matizan el universo de lo político.
ciudad y se constituye en el modo de organización
En este sentido, es necesario partir de una idea
particular de la vida común5 a partir de una histori-
global en la cual la política se instala como ciencia
cidad dada.
de un estado humano que no es natural3, o como el
Sin embargo, esto no quiere decir que la polí-
conjunto de regulaciones ficticias4 de las relaciones
tica esté atada necesariamente a lo jurídico. En mu-
chos casos lo ha estado, pero debe entenderse que la
2 Acosta, Fabián. El universo de la política. Bogotá, Colegio de La Salle,
1995, p. 49.
3 Acosta, ibídem, p. 84. una historicidad determinada. Al respecto, ver la obra de Foucault y de Nie-
tzsche (especialmente, La arqueología del saber y La gaya ciencia).
4 No por ficticias se pretende decir que sean inexistentes. Más bien, que no
son naturales, que sus procesos de naturalización y normalización tienen
5 Acosta, ibídem, p. 51.

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p o d e r , p o l í t i c a y p o l í t i c a s

norma es, también, la construcción de una ética a deriva la gestión de los problemas públicos; es de-
través de la cual un sujeto se regula a sí mismo –no cir, la política pública.
necesariamente a sus semejantes–. En este sentido,
es interesante la percepción de Castoriadis según la La política pública
cual la política es “la actividad lúcida cuyo objeto es la
institución de una sociedad autónoma y las decisiones que Antes de entrar en materia, es necesario
conciernen a los emprendimientos colectivos”6. aclarar que “los problemas son elaboraciones de los
Pero dada su naturaleza ficticia, la política no hombres. “Siempre existen concepciones múltiples y no
está determinada de una sola forma y, por ende, no hay problemas definidos de manera única”8. Los pro-
está exenta de tensiones entre los objetivos, fines e blemas políticos son construcciones sociales que
intereses concretos7 de quienes administran la fic- reflejan concepciones específicas de la realidad. Y
ción. Quiénes sean estos actores depende de los sis- como siempre es posible que haya una multiplici-
temas políticos que se hayan institucionalizado. En dad de definiciones acerca de un problema, lo que
nuestro caso, algunas de las instituciones políticas
modernas son el Gobierno, el parlamento, los par- 8 Wildavsky (1979) citado en Elder, Charles y Cobb, Roger. “Formación de la
tidos y movimientos políticos, los sindicatos, el or- agenda”. En Aguilar Villanueva, Luis F. El estudio de las políticas públicas.
den jurídico, entre otros. Los modos de incorporar- México, 1992, p. 77.
se a estas luchas de fuerzas por el
posicionamiento, en la ficción,
pueden ser entendidos como las
instancias colectivas de empodera-
miento, a través de la cuales se ubi-
ca o se define un modo de movili-
zar la actuación política frente a
una problemática común. A esto se
le denomina la agenda, y de ella se

6 Castoriadis, Cornelius. Los dominios del hombre:


las encrucijadas del laberinto, Barcelona, Gedisa,
1988.
7 Acosta, Ibídem, p. 92.

63
e d u c a c i ó n y c i u d a d

está en juego en el proceso de Una vez establecida la agen-


formación de la agenda (públi- da, el análisis, diseño y estudio de
ca) no es sólo la selección de políticas determina cuáles son los
los problemas sino también su fines públicos que son posibles de
definición9. ser realizados –para los cuales los
Definir una situación recursos disponibles son suficien-
como un problema de políticas tes–, y a través de cuales instru-
significa aceptar que tiene solu- mentos y opciones de acción11 pue-
ción y delimitar sus soluciones den ser intervenidos –no necesa-
posibles. Se presume no sólo riamente resueltos–. Así, la políti-
que debe y se puede ‘hacer algo’, ca es pública en tanto resuelve
sino que la posible solución cae problemas públicos a través de de-
dentro de la competencia de las cisiones, legislaciones y reglamen-
autoridades legítimas del gobierno10. taciones que toma el Gobierno cuando está hacien-
Cabe esta aclaración porque hay que anotar do uso de la decisión del pueblo –y no necesaria-
que la política pública opera no sólo por acción sino mente con su participación–. Sin embargo, la cons-
también por omisión. Es decir, es tan político e inten- trucción de políticas públicas ha encontrado un
cional lo que se hace como lo que se deja de hacer. De importante mecanismo de colectivización de las de-
ahí que la movilización social tenga un valor impor- cisiones en la planeación participativa, dado que la
tante en la creación de los problemas públicos y su po- ciudadanía se convierte, a través de mecanismos or-
sicionamiento en la agenda. Sin la movilización, un ganizados, en órgano consultivo de las decisiones.
determinado gobierno puede definir sus prioridades Qué tan consultivo sea el órgano ciudadano depen-
sin resolver problemas sociales o colectivamente ‘con- derá de la voluntad política de determinado Gobier-
sensuados’. Por ello, el posicionamiento de proble- no y de qué tan importante sea la participación en
mas en la agenda pública es un ejercicio político en el su agenda pública. Una vez más, es la movilización la
cual las diversas fuerzas se miden y negocian el orden que puede o no contribuir a crear condiciones para
de prioridad de los asuntos públicos. que persista la voluntad política de permitir impor-
tantes niveles de participación.
9 Elder, Charles y Cobb, Roger. “Formación de la agenda”. En Aguilar Villa-
nueva, Luis F. El estudio de las políticas públicas, México, 1992, p. 77. 11 Aguilar, Luis F. “Estudio introductorio”. En Aguilar Villanueva, Luis F. El es-
10 Elder, ibídem., p. 93. tudio de las políticas públicas, México, 1992, pp. 15-67.

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p o d e r , p o l í t i c a y p o l í t i c a s

Ahora bien, la política puede contar con finen las normas generales, dan forma a
un diseño coherente, consistente, eficaz, eficien- sus problemas y esquemas de solución,
te y validado socialmente. Pero la ejecución de la perfilan y eligen a los líderes del Estado.
política se encuentra en el espacio social de las A decir verdad, constituyen al Estado y
tensiones políticas a todo nivel; además, existen ponen a la obra a los gobiernos12
otros niveles en los cuales sectores y actores socia-
les tensionan y moldean las decisiones –a partir Así es como las políticas públicas –aquí co-
de cómo las interpretan y ponen a funcionar, de menzamos a referirnos específicamente a las educa-
qué tan válidas son para resolver el problema tivas– como práctica ético - política y no como una
planteado, y de los recursos que tengan a disposi- actividad técnico administrativa pueden convertirse
ción para poner en práctica la política–. La suma- en un campo de alternativas de acción capaz de pro-
toria de estas variables, voluntades y sujetos, nor- ducir otras realidades. Es indispensable combatir la
malmente da como resultado que la política en escisión entre lo político y las políticas gestadas des-
su aplicación produzca no sólo los logros espera- de la internacionalización de la política educativa.
dos sino otros nuevos, e incluso nuevos proble- Así mismo, es importante recordar a Frigerio:
mas –por ejemplo, niveles de insatisfacción de
poblaciones no afectadas, problemas ambienta- La retirada de lo político, entendida
les, etc.– que requieran nuevos diseños; y así su- como la ausencia de preocupación por
cesivamente. Algo similar ocurre con lo que se la justicia, estaba enmascarada y encu-
planea y lo que finalmente se ejecuta; solo que, bierta por el despliegue de políticas que
en este caso, son los actores sociales, individuales producían lo injusto. Hoy podríamos
y organizados y sus voluntades políticas, los que precisar la hipótesis al constatar la perse-
determinan lo que efectivamente sucede. verancia de las políticas políticamente
En este orden de ideas, cabe citar a Aguilar correctas, preocupadas por la ‘goberna-
cuando dice que bilidad’, que se limitan a ser ‘gestiona-
rias’ de las desigualdades, con el único
el ámbito público es el campo de inter- propósito de volverlas tolerables13
ciones e interpelaciones en el que los
12 Aguilar, ibídem., pp. 15-67.
ciudadanos individuales, por sí mismos
o por los voceros de sus organizaciones,
13 Frigerio, Graciela. “En la cinta de Moebius”. En: Frigerio, Graciela, y Diker,
Graciela (comps.). Educar: ese acto político. Buenos Aires, Del Estante
hacen política y hacen las políticas: de- Editorial, 2005, p. 19.

65
65
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Si un mundo más justo es posible, “sólo se po-


drá edificar a través de la política, no de espaldas a
ella”14. Por ello, es importante introducir y posicio-
nar la noción de que la política es pública en tanto
que es construida socialmente (y no sólo en
tanto que afecta a la comunidad). Esta cons-
trucción social se puede dar a través de la inter-
pelación y del auto diagnóstico, ya que, por este
medio, las comunidades se leen a sí mismas y
escogen no sólo a sus gobernantes sino las for-
mas en que éstos desarrollan su acción de go-
bierno. Esta es una idea potente en el sentido
de la autodeterminación, la descentralización y
la autonomía.
En la educación, una noción como ésta pue-
de significar que la escuela se ‘resignifique’ desde lo
que la particulariza como actor social: sus condicio-
nes históricas, sus saberes incluidos, sus sujetos po-
líticos formados y en formación, y su espectro terri-
torial. En fin, explorar la noción de construcción
colectiva de las decisiones de gobierno implica re-
pensar a los sectores, la intersectorialidad, la comu-
nidad y al Estado. Es el poder constituyente perma-
nente y no instantáneo, no constituido.

Lugar político del maestro


En este espectro me gustaría ubicar al
maestro como sujeto. Y la preocupación por el
sujeto conlleva una preocupación por el carácter
político que lo define, por el espacio público en
el que debe tener parte y por las instituciones

14 Narodowski, Mariano. Educación escolar y crisis del Estado”. En Frigerio, Graciela, y


Diker, Graciela (comps.). Educar: ese acto político. Buenos Aires, Del Estante Editorial,
2005, p. 59.

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que, al ofrecer su hábitat formándolo, se dejan mol-


dear por el sujeto15. Es el momento de intentar darle
piso a un ‘lugar común’ donde el maestro es un suje-
to político que ejerce un poder. Sabiendo esto, y
aunque parece un sin sentido, se ve a los maes-
tros enfrascados en discusiones sobre la dignifi-
cación de la profesión y sobre la profesionaliza-
ción. ¿Y es que acaso son estas características –la
dignidad y la profesión–, externas al maestro? Por
sí mismo el maestro las defiende cuando com-
prende las implicaciones que tienen para la cul-
tura y para su quehacer, las posibilidades que se
abren en la enseñanza y la didáctica, las posicio-
nes de sujeto que le permiten ver el mundo des-
de una perspectiva particularmente valiosa.
Entonces, ¿qué es lo político de la educa-
ción? Está comprendido en por lo menos dos co-
sas: en primer lugar, en aquello que establece la
continuidad en el tiempo de las generaciones y
en la coexistencia de singularidades. En segundo
lugar, en la voluntad de regulación del cambio –
individual, individual-masivo y social–.
No hay educación sin transmisión cultural;
pero lo que se transmite no es un contenido sino
una relación. Esto implica la socialización –inten-
tando no ser reduccionista– de un estatus políti-
co, de un acervo cultural, de una historicidad, de
un proyecto colectivo de nación y de un tipo de
ciudadano. Es decir que el maestro, desde cómo se
concibe a sí mismo y concibe a su quehacer, cons-
truye mundos posibles, legitima y deslegitima pro-
yectos políticos, construye imaginarios y posiciona

15 Frigerio, Graciela. “En la cinta de Moebius”. En: Frigerio, Graciela y


Diker, Graciela (comps.). Educar: ese acto político. Buenos Aires, Del
Estante Editorial, 2005, p. 16.

67
e d u c a c i ó n y c i u d a d

a otros sujetos ante su realidad. De la manera como lítico de su ejercicio, la razón de ser de todo tipo de
interprete esta realidad y se pare ante ella, dependerá políticas que, por diversos medios —entre los cuales
también la posición que asuman los sujetos que lo es- se pueden nombrar el currículo, la evaluación estan-
cuchan y los modelos que se les brinda. Y me pregun- darizada, los discursos internacionales sobre educa-
to con Frigerio, “¿educar será entonces el acto político de ción–, pretenden reformar y moldear para no perder
reconocer, sin el cual el conocimiento no es posible?”16. control del escenario. Es ahí donde la pregunta para
el maestro sobre su dignidad se convierte en un cues-
Escenarios y empoderamiento tionamiento que no se le hace a su esquema valora-
Roles del maestro tivo (escalafón), a su nivel de formación profesional
ni a su situación laboral, sino a la ética que tenga
En esta parte haré un recorrido por tres de los frente a la vida y a su quehacer. Es allí donde se ins-
muchos escenarios políticos del maestro: el aula-es- tala la lógica del sistema educativo, donde se ha crea-
cuela, la investigación y la participación política. Los do la necesidad de mundializar la educación. Sin
tres son caminos complejos en los cuales el poder lle- embargo, tendemos a olvidar que los sistemas educa-
va a cabo juegos y redireccionamientos. Pero cada tivos estatales nacionales son un producto histórico
uno de ellos rescata una parte del maestro que daría reciente, propio de cierto grado de desarrollo de
sentido a un proyecto para su formación política. nuestras sociedades, y que, pese a las diferencias, son
Son tres escenarios que se describen brevemente con productos relativamente semejantes17 que no dan
unos roles que se ponen en consideración para el de- cuenta de ciertas particularidades que nos atañen y
bate sobre el lugar que ocupa el maestro en una so- nos liberan.
ciedad como la nuestra. Diciendo esto no pretendo desatender otras
Existen diversos escenarios que le exigen al facetas que constituyen al maestro. Busco ‘recentrar’
maestro una posición política trascendente para cons- el papel político que tiene en su lugar natural, en su
tituirse en una posición ética y estética ante la vida. Y ejercicio cotidiano. El Estado, desde que se dio cuen-
allí, aunque se legisle, se diseñe y se controle, el maes- ta que tenía poder para producir conocimiento y re-
tro tiene la potestad. Treinta niños sentados en sus producir cultura, buscó controlar al maestro a través
pupitres constituyen un nodo de poder: el aula. Ahí, de licencias y aprobaciones, buscó moldearlo para
la política tiene sentido en tanto que no sólo controla convertirlo en un ser ejemplar al cual se le pudiera
la percepción del mundo de esos treinta niños, sino obligar a ser compatible con sus necesidades18. Mu-
que convoca a sus familias, a los directivos, a la Uni- chos creen que este tipo de controles se iniciaron
versidad a pensar y ‘repensar’ las relaciones que se dan con el modelo curricular, pero este modelo viene
en la escuela.
De ahí que el aula sea un escenario político 17 Narodowski, Mariano. “Educación escolar y crisis del Estado”. En: Frigerio,
por naturaleza y la potestad del maestro, el valor po- Graciela y Diker, Graciela (comps.). Educar: ese acto político, Buenos Ai-
res, Del Estante Editorial, 2005, p. 41.
18 Al respecto, revisar Martínez B., Alberto, et. al. Crónica del desarraigo y es-
16 Frigerio, Ibídem, p. 15. cuela, maestro y método.

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desde la Colonia, cuando con prácticas de ‘licencia- bana curricular se convirtieron en rejillas para dar
ción’ a través de las cuales se buscaba legalizar el ofi- forma a las exigencias de control que se pretenden
cio para controlar los contenidos. Al parecer, el con- sobre la escuela. El maestro tiene que reducirse a lo
trol es inherente a la condición del maestro. que quepa en los espacios de esta ‘metacuadrícula’,
Pretendo llegar a que al maestro se le dan todo tiene que llevar a cabo su ejercicio por los intersti-
tipo de prescripciones sobre lo que hace: desde la cios que le permite el control. Simultáneamente, a la
ciencia, desde el currículo, desde el libro de texto, escuela cada vez se le exigen más tareas, se le impone
desde la política educativa. Pero lo que hace el maes- la resolución de mayores problemáticas, y se le con-
tro debe estar determinado interna y no externa- vierte en depositaria de políticas públicas de diversa
mente por quién es, por la posición que asume ante índole con el fin de resolver prioridades de todo ni-
la vida y la manera como se instala en el mundo. En vel. En este escenario de subordinación, se ha dis-
este sentido, varios esfuerzos del magisterio colom- persado y confundido al sujeto poderoso que ha per-
biano han demostrado el gran valor que ha tenido dido el valor de su ejercicio y recita monótonamente
para los maestros viajar por el país y reconocerse en mandatos ajenos.
sus pares, descubrirse y crearle una inteligibilidad a El maestro, paradójicamente, ha sido formado
su quehacer, lejos de particularidades internaciona- y comprendido para la obediencia con el objeto de
les, de exigencias de estandarización y de determi- hacer posible la emancipación. La pregunta sobre
nantes étnicas o regionales. cómo lograrlo en esta disyuntiva, tiene que ver con
Cuando leí por primera vez la máxima –intro- los otros escenarios políticos que ocupa.
ducida por el discurso ‘eficientista’ en la escuela para Cuando se oye que la educación no tiene que ver
mejorar su capacidad de medición– “el currículo es con transmisión de verdades sino con el planteamiento
tan sencillo que es a prueba de maestros”, pensé en lo in- de preguntas, el panorama descrito en el apartado ante-
controlable que era el ámbito del aula para el poder rior resulta inquietante. Es paradójico proponer a un
instituido. Por ello, la realidad del maestro aparece maestro que asuma la investigación como una opción.
cuadriculada: el parcelador, el libro de notas y la sá- El maestro es investigador en tanto que maestro, no

69
e d u c a c i ó n y c i u d a d

como accesorio de su ejercicio. definición de lo público para su


La investigación es un amplio defensa. Aquí es necesario acla-
escenario de empoderamiento rar que la competencia de de-
en el cual el maestro encuentra fender el ámbito público no es
su lugar, para sentar unas posi- sólo de los maestros oficiales
ciones frente a lo que pretende sino también de los maestros
dogmatizarle y obligarle. La po- del sector privado. La participa-
sición ética de los maestros de- ción del maestro en la construc-
termina el lugar político que ción de la sociedad es funda-
ocupa la ética, entendida como mental en la consolidación de
un ejercicio donde el sujeto re- un ámbito público concreto,
flexiona sobre quién es y cómo no determinado por la política
opera desde ese lugar. Investi- internacional.
gar es dar sentido a lo que se Sin embargo, el discurso
hace. Por eso la investigación de mundialización de la educa-
sobre educación y pedagogía ción ha deslindado la realidad
debe pensarse desde los proce- educativa del territorio y ha
sos de formación de maestros. buscado la homogenización de
Parece que el maestro requiere las políticas y la estandariza-
de intelectuales para pensar su quehacer, que le eviten ción de los procesos. En ese sentido, la política públi-
la ‘molestia’. Pero nadie como el maestro comprende y ca educativa, promovida a nivel internacional, ha des-
consigue interpelar la realidad del aula y de la escuela. politizado la educación. “Políticas que ignoran lo político,
Por ello, la implementación de modelos externos le ha insisten en poner a las instituciones en bancarrota simbóli-
hecho daño al desarrollo del maestro como investiga- ca, sin propiciar ninguna construcción de un nuevo orden
dor. No hay soluciones, sólo preguntas por resolver. simbólico que las habite y las vuelva otra cosa”20. El maes-
Finalmente, aparece el escenario de la política tro, desde su institucionalidad, debe mantener el
pública como espacio para el empoderamiento de los polo a tierra entre lo que exige la política internacio-
maestros. Dado que la función principal de la política nal y lo que efectivamente se relaciona con las parti-
será construir una nueva racionalidad de lo público, cularidades políticas del territorio y con las relacio-
que se independice de la lógica del mercado e impida nes fundamentadas en la realidad.
sus excesos y suplante sus limitaciones19, el maestro por Pero existe una grave escisión entre el saber de
sí mismo debe haber conceptualizado y construido su los maestros, la manera como reconocen y recons-
truyen la cultura y la realidad, y lo que se define en
19 Norbert Lechner (1995), citado por Narodowski en “Educación escolar y
crisis del Estado”. En Frigerio, Graciela y Diker, Graciela (comps.), Educar:
ese acto político, Buenos Aires, Del Estante Editorial, 2005.
20 Frigerio, ibídem, p. 20.

70
p o d e r , p o l í t i c a y p o l í t i c a s

la política. Cabe preguntarse si el Estado no ha dado Existen instancias, posiciones y retos aún por
espacios para la participación de los maestros en la asumir. Pero para hacer políticas que no renieguen de
construcción de las agendas públicas y si ha subido lo político, es necesario recordar que “la política del co-
el volumen a las exigencias hechas a nivel internacio- nocimiento debe incluir a la política de la justicia y a la po-
nal, o si el maestro se ha encerrado en su quehacer, lítica de la memoria”. La estética no es una teoría del
aislándose de un lugar político que lo convoca y lo arte sino una forma de vivir. La ética es una posición
requiere para reconocer una realidad. Igualmente ante el otro, reconocido como otro. Y la enseñanza de
nos preguntamos por qué el funcionamiento, mu- valores no reside en contenido alguno, sino en el co-
chas veces asertivo del saber, en el campo académico, raje que tengamos para convertir al mundo en un lu-
contrasta severamente con la declaración de insufi- gar justo, no sólo bueno para algunos22. Es allí donde
ciencia que nos vemos obligados a hacer cuando pre- se instala el empoderamiento. Y desde allí, ¿cómo hay
tendemos poner ese saber a jugar en la definición de que recrear la profesión? ¿Qué exigencias nos hace la
las políticas públicas en educación21. formación de los maestros en torno al ámbito de lo
público y lo político? Ojalá haya en este escrito algu-
nas pistas desde dónde partir.
21 Terigi, Flavia. Collected papers: sobre las decisiones en el gobierno de la edu-
cación. En Frigerio, Graciela y Diker, Graciela (comps.), Educar: ese acto polí-
tico, Buenos Aires, Del Estante Editorial, 2005. p. 59. 22 Frigerio, ibídem, p. 20.

71
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Bibliografía

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Editorial, 2005.
Nietzsche, Friederich. Sobre el porvenir de nuestras
escuelas. Barcelona, Tusquets, 1980.

72
Brasil

El derecho a la educación
Pablo Gentilli

Licenciado en Ciencias de la Educación, Universidad de Buenos Aires. Master en Ciencias Sociales con
Mención en Educación, Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO - Programa Argentina).
Doctor en Educación, Universidad de Buenos Aires. Profesor Regular en la Facultad de Educación y del
Posgrado en Educación de la Universidad del Estado de Río de Janeiro. Investigador del Laboratorio de Políticas
Públicas de la Universidad del Estado de Río de Janeiro (LPP/UERJ).
Coordinador del Observatorio Latinoamericano de Políticas Educativas (OLPED - LPP/UERJ).

Resumen

Este trabajo desarrolla el tema de las políticas educativas en América Latina, se detiene en Brasil e inpec-
ciona la voluntad de cambio cuantitativo de los gobiertos en esta materia en la región. Plantea que el desafío de
la educación pública en nuestros países es construir dignidad y construir derechos, es luchar contra la humilla-
ción, y hacerlo dentro del sistema escolar significa contribuir a la lucha contra otras formas de humillación que es-
tán fuera de la institución educativa y que, muchas veces, son la principal causa de la violación sistemática del
derecho a la educación.

Palabras clave

Derecho a la educación, matrícula educativa, política pública, derechos humanos, escuela pública.

Abstract

This paper is about educational public policy in Latin America. It specifically attains to the Brazilian case by
researching the political will to change this matter (qualitatively) in the region. It defends that the challenge of pu-
blic education is to build dignity and rights, struggle against humiliation, and that doing so in the school system im-
plies contributing to the struggle against all other forms of humiliation outside the school, which usually end up
contributing to the systematic violation of the right to education.

Key words

Right to education, eductional registration, public policy, human rights, public schools.
c
uando discutimos acerca del derecho a la do– quienes durante mucho tiempo estuvieron en el
educación, enfrentamos una paradoja. Difí- proceso y que formaban parte del primer grupo de
cilmente se encuentra hoy una persona que adultos que recibiría su diploma del primer ciclo de la
se manifieste contraria al derecho a la educación; escuela primaria. El acto se realizó en un lugar muy
pero tampoco encontramos indicios sólidos que per- humilde, pero con la pompa de los grandes actos de
mitan demostrar que, a lo largo de los últimos años, entrega de diplomas: la mesa con mantel rojo, los di-
el derecho efectivo a la educación se haya consolida- plomas enrollados con una cinta de la bandera brasi-
do. Parece haber una escisión entre la capacidad que lera, las personas estaban vestidas como para un casa-
ha tenido la idea del derecho a la educación para miento; todo preparado para la gran fiesta de entrega
transformarse en un gran consenso nacional, y la in- de diplomas.
capacidad que han tenido nuestros países para que En ese momento tan importante para esa co-
el derecho a la educación sea una realidad efectiva. munidad, en la misma mesa donde se entregaban,
Sin embargo, esa paradoja no es tan “parado- había una caja de cartón que guardaba los documen-
jal”. No hay un consenso definido y estructurado tos de identidad de muchas de las personas que iban
acerca de lo que quiere decir el derecho a la educa- a recibir su diploma. En Brasil, de 167 millones de
ción y cómo debe construirse. Por ello, la idea convi- habitantes, cerca de treinta millones no tienen docu-
ve con situaciones desiguales, en donde ese derecho mento de identidad; muchos de los graduandos no
–al menos en la representación que tiene para las lo tenían: se trataba de entregarles la cédula de iden-
fuerzas y los movimientos progresistas– está siempre tidad firmada por primera vez por ellos mismos.
más allá de lo que debería realizarse. La mayoría de esos adultos tenía más de cin-
Sobre el derecho a la educación, se debe tratar cuenta años, y algunas mujeres más de setenta. La
de definir qué es, qué puede ser o cuál puede ser una fiesta fue muy emotiva, se hizo también un humilde
de las interpretaciones acerca del sentido del derecho coctel, donde la gente festejaba con sus familiares y
a la educación en nuestro medio, y a partir de ello, agradecía el trabajo realizado por el Laboratorio de
realizar algunas observaciones acerca de ciertas condi- Políticas Públicas. Había una mujer de más de seten-
ciones políticas necesarias para que este derecho se ta años cuyo nombre era Felicidad. Llamarse Felici-
cumpla y realice en nuestros pueblos. dad en una de las regiones más injustas del mundo
El Laboratorio de políticas públicas, con sede en puede parecer un verdadero contrasentido. Sin em-
Río de Janeiro, participó en un programa de forma- bargo, doña Felicidad le hacía honor a su nombre,
ción de alfabetizadores y alfabetizadoras en Piaui pues estaba radiante de alegría. Ella no mostraba el
–una de las regiones más pobres e injustas del mun- diploma, sino la cédula de identidad y decía: “… no

75
e d u c a c i ó n y c i u d a d

dad dijo, resulta interesante entender algunas de


las razones por las cuales la idea del derecho a la
educación se ha tornado tan popular en América
Latina. De cierta forma América Latina experimen-
tó a lo largo de los últimos veinte años un proceso
de explosión de su matrícula educativa, especial-
mente en los países que tenían niveles de exclusión
y de marginalidad educativa muy altos, como Bra-
sil, Bolivia y buena parte de los países centroameri-
canos con altas tasas de exclusión o segregación. La
profesora Maria Do Pilar Lacerda señala que Brasil
años atrás tenía entre un 60 y un 70% de escolari-
dad entre niños y jóvenes en edad escolar. Sin em-
bargo, a partir de los años setenta y, particularmen-
te, de los ochenta y noventa tendió a cambiar in-
tensamente, y llevó a que algunos países tuvieran
un porcentaje grande de crecimiento de sus niveles
educativos; es el caso de Brasil, en donde las tasas
brutas de escolarización alcanzan hoy, para los ni-
saben lo importante que es tener esto, no saben la ños y niñas entre siete y catorce años, el 95, 96 y
conquista que es esto. Ustedes no saben cómo se hasta el 97 por ciento. La forma de censar a los ni-
siente una persona que tiene la cédula de identidad ños y niñas que están en nuestros sistemas educati-
firmada con el pulgar. Yo me sentía profundamente vos es muy precaria. En Brasil existe disparidad en
humillada”. las cifras: se presenta el caso de municipios con 117
Cualquier discusión acerca del derecho a la por ciento de niños en la escuela, o sea que tienen
educación debe al menos considerar lo que doña más niños “matriculados” en el sistema educativo
Felicidad dijo a partir de su experiencia de vida, y que niños realmente existentes.
que seguramente resume mucho mejor que cual- Esto ocurre porque hay corrupción e inexactitud
quier teoría el sentido que tiene o debe tener la en la recolección de datos. De cualquier forma, lo úni-
educación en una sociedad genuinamente demo- co cierto es que el número de alumnos y alumnas en las
crática. Pero antes de analizar lo que doña Felici- escuelas ha aumentado sistemáticamente a lo largo de

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e l d e r e c h o a l a e d u c a c i ó n

los últimos años. Esto ha llevado a varios autores y a al-


gunos dirigentes políticos a anunciar, de forma precipi-
tada, que ha habido una verdadera revolución demo-
crática de la escolaridad en América Latina y que, en
rigor, el derecho a la educación se ha democratizado.
Esta generalización en las oportunidades de acce-
so permitiría reconocer que el derecho a la educación
es una realidad existente que debemos defender. Lo
cierto es que la tasa de escolarización creció. Sin embar-
go, debemos comprender que en América Latina, el au-
mento en la tasa de escolarización no ha estado necesa-
riamente asociada a una democratización efectiva de la
educación. Afirmar esto presupone partir de una con-
cepción del derecho a la educación que no se limita a
entender que una persona tiene derecho a la educación
una vez que está dentro del sistema escolar, o cuando
aparece como un número o un dato que cuantifica la
cantidad de alumnos existentes en un país.
Resulta curioso que, al mismo tiempo en que
se produjo el proceso de universalización en las opor-
tunidades de acceso y permanencia en la institución
escolar de los sectores sociales más pobres, también
se produjo –durante los años ochenta y noventa– un
proceso de intensificación de las condiciones de po-
breza y exclusión vividas por las grandes mayorías.
Este proceso continúa en estos primeros años de la
primera década de dos mil.
En América Latina vivimos durante los últi-
mos años, un proceso profundamente perturbador,
al menos en términos sociológicos. De un lado, un
aumento sistemático de los índices de escolaridad, y,

77
e d u c a c i ó n y c i u d a d

del otro, un aumento sistemático de los índices de niños, niñas y jóvenes de menos de dieciocho años.
pobreza. Históricamente hemos estado acostumbra- Es decir que un gran contingente de pobres son jóve-
dos, tanto en la izquierda como en la derecha, a de- nes y niños, y ese gran contingente está, al menos for-
fender la idea de que la educación es un factor de malmente, matriculado en una institución educativa.
movilidad social que permite la inclusión de las per- Durante estos últimos años de masificación de
sonas a la sociedad. las oportunidades de acceso y permanencia en las ins-
La derecha acostumbra llamar a la sociedad tituciones educativas, ocurrió un proceso intenso de
“mercado”; afirman que “… la gente puede incorpo- tendencias que ha marcado el desarrollo histórico de
rarse al mercado y, mediante dicha incorporación, los sistemas educativos latinoamericanos: la segmen-
aumentar su renta individual, su ingreso individual tación y la diferenciación. Los sistemas educativos
y su riqueza social; y el país progresa”. Más educa- crecieron enormemente; en algunos países durante
ción significa más progreso. En nuestro continente, los últimos cincuenta años, y en otros durante los úl-
al menos en lo que se refiere al bienestar de las gran- timos veinte, en un contexto de segmentación y de
des mayorías, más educación no ha significado en es- diferenciación profunda.
tos últimos años más bienestar; al menos, no más En rigor, hoy no existe en ninguno de nues-
bienestar económico. Por el contrario, parece haber tros países un sistema nacional de educación. Exis-
una tendencia opuesta. Las tasas de escolaridad en ten segmentos heterogéneos en el tipo de presta-
crecimiento contrastan con la situación de precarie- ción del servicio educativo, en los recursos que uti-
dad o de vulnerabilidad social que viven sectores lizan, en el tipo de recursos humanos que poseen
cada vez más escolarizados. los trabajadores y trabaja-
Tenemos hoy el mayor doras que por ellos son
número de pobres de toda su contratados, y en el tipo
historia y también el mayor nú- de alumnos y alumnas o
mero de niños y niñas escolari- de familias que atienden.
zadas de toda su historia. Más Lo que se conoce nor-
de la mitad de los latinoameri- malmente como “sistema
canos –casi 230 millones de educativo”, es un conglome-
personas–, están hoy por deba- rado institucional con me-
jo de la línea de la pobreza; un canismos de segmentación
tercio de ellos está por debajo y de diferenciación profun-
de la línea de la indigencia, y dos. La segmentación y la
más de la mitad de los pobres, diferenciación operan en
que constituyen la mitad de la un sentido vertical y hori-
población latinoamericana, son zontal, de forma tal que no

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es fácil establecer ese rompecabezas del sistema educa- Derecho a la educación y acceso a la escuela
tivo nacional en nuestros países. No sería falso decir han sido, históricamente, afirmaciones redundan-
hoy que la educación se divide en pública y privada: la tes. En este contexto de segmentación y de diferen-
pública para los pobres y la privada para los ricos. Esto ciación exacerbada de los sistemas educativos que no
es real. Sin embargo, cuando analizamos la realidad inventan las políticas neoliberales pero sí refuerzan y
del sistema educativo a nivel micro, dentro de regio- cristalizan las políticas neoliberales, estas dos posibi-
nes, provincias o municipios encontramos que las lidades han tendido a escindirse cada vez más, espe-
fronteras entre lo público y lo privado en la educación cialmente para los más pobres.
se han transformado en fronteras tenues; y que hay, Muchos niños y niñas permanecen durante
de hecho, en algunos de nuestros países, una red de años dentro del sistema escolar. Pero no necesaria-
escuelas públicas pobres para pobres y un segmento mente la permanencia dentro del sistema escolar sig-
en general cerrado y “elitizado” de instituciones priva- nifica la oportunidad efectiva de vivencias de un dere-
das que no son de alta calidad y que no atienden a la cho social, de un derecho humano, de un derecho in-
población más pobre. violable en la construcción de su condición de ciuda-
Estos procesos de segmentación y de diferen-
danos y ciudadanas. No quiere decir esto que no sea
ciación no sólo han operado a lo largo de la historia
importante que un niño o una niña pobre esté en la
de nuestros sistemas educativos, sino que, en el con-
escuela. Claro que sí. Y ello no ha sido una dádiva de
texto de las políticas neoliberales, se han ido profun-
los gobiernos sino una conquista de esos sectores.
dizando y se han ido tornando más intensos, cristali-
Sin embargo, parece que los sectores del po-
zando un sistema educativo que funciona a diferen-
der, de forma muy cínica y habilidosa, se las ingenia-
tes velocidades y con diferentes ritmos, y, fundamen-
talmente, con diferentes oportunidades. ron para reproducir un patrón de dominación o de
Estas afirmaciones pueden sintetizarse en el segregación que antes operaba fuera de la escuela,
eslogan “escuelas pobres para los pobres y ricas para transfiriéndolo ahora hacia el interior del propio sis-
los ricos”, lo cual quiere decir que más allá de la fuer- tema educativo.
za que tiene este argumento como síntesis de un sis- Las formas de exclusión y de segregación de la
tema, las oportunidades educativas para los más po- educación se han trasladado hacia el interior del sis-
bres han aumentado, en un proceso de degradación tema escolar, de forma que muchos niños y niñas po-
del concepto de derecho a la educación. Es decir que bres permanecen años en el sistema educativo y du-
se han incrementado las oportunidades de acceso a rante todos esos años no hay una oportunidad efec-
un sistema que ha tornado cada vez más cerrada y de tiva de un derecho. Parece que las administraciones
más difícil acceso la posibilidad de usufructuar aque- neoliberales han tenido una capacidad extraordina-
llo que ofrece, o debería ofrecer, como es el derecho ria para escindir aquello que en el pasado estaba in-
a una educación de calidad. disolublemente unido.

79
e d u c a c i ó n y c i u d a d

trones de monopolización de saberes, que normal-


Tal ruptura entre derecho a la escolaridad mente permiten que ciertas élites se apropien de los
y derecho a la educación puede ser analizada conocimientos acumulados. Se asegura que el cono-
desde diversas maneras. Para comprenderlas cimiento es poder. Con esta afirmación se hace refe-
mejor, es necesario definir cuál es el concepto rencia a un aspecto instrumental del poder que tiene
de derecho a la educación. que ver con el ejercicio de las profesiones y las com-
El derecho a la educación, desde la interpre- petencias. En algunos ámbitos esto significa domi-
tación de algunos autores, debe ser entendido en nar contenidos curriculares que remiten a ciertos
toda sociedad democrática como el derecho que contenidos cognitivos que les permiten a las perso-
esta tiene de cuestionar uno de los elementos so- nas intervenir en la vida social de una forma más ca-
bre los cuales se instituye el poder dominante, el lificada.
poder autoritario, el poder autocrático, el poder De manera general, la palabra “competencia”
discrecional de algunos pocos sobre la vida de casi remite al mundo del trabajo; pero también al mundo
todo el resto. El derecho a la educación es una de la política; “competencia ciudadana”, se dice aho-
oportunidad que en la sociedad democrática to- ra. Entonces, el conocimiento es poder, no en térmi-
dos deben tener para cuestionar la estructura de nos absolutamente instrumentales; el conocimiento
poder. Esto significa que en todas las sociedades, es poder no sólo porque los contenidos del conoci-
el conocimiento ha sido un factor de poder que ha miento y los saberes y los productos del conocimiento
permitido la consolidación de grupos que domina- se traducen en tecnologías que permiten producir y
ron su destino y la subyugación de grupos que no reproducir determinadas formas de construcción de
tuvieron acceso a esos saberes y conocimientos. La una sociedad, sino también porque en la forma como
lucha contra el monopolio del conocimiento pasó se construye el conocimiento está involucrada una re-
a formar parte de uno de los elementos constituti- lación de poder.
vos de la lucha por Cuando se ha-
la libertad, por la bla de “democratiza-
igualdad y la justi- ción del conoci-
cia social. miento”, no se pue-
No hay po- de hablar solamente
sibilidad de cons- de la democratiza-
truir una sociedad ción de los benefi-
realmente demo- cios que genera el
crática, si en ella conocimiento trans-
se mantienen in- formado en tecnolo-
alterados los pa- gía, sino que debe

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e l d e r e c h o a l a e d u c a c i ó n

defenderse la democratización en las formas de pro-


ducción de ese poder; en las formas de producción democráticas de producción y de socialización
de ese conocimiento. de saberes continúan restringidas a pequeños
Nuestros países no sólo son cada vez más po- grupos que se apropian de esos conocimientos;
bres y tienen cada vez el mayor número de pobres; y, apropiándose de estos conocimientos y sabe-
América Latina es la región en donde la distancia en- res socialmente significativos, reproducen una
tre ricos y pobres se ha hecho más profunda. África es estructura de poder profundamente desigual.
la región más pobre del mundo, América Latina es la Es necesario entender que el derecho a la
región más injusta del mundo. Esto significa que una educación es la lucha contra ese monopolio. El
cantidad extraordinaria de riqueza económica se con- derecho a la educación es el derecho social y hu-
centra en poquísimas manos. Brasil fue uno de los mano que cada uno de nosotros tenemos de vi-
países del mundo con mayor crecimiento económico vir en una sociedad en donde el conocimiento
durante el siglo XX; el producto interno bruto creció no se monopolice de forma privada, en donde
cien veces. Pero, ¿cuánto creció la renta per cápita du- los frutos del conocimiento se utilicen en benefi-
rante el mismo siglo? Sólo doce veces. Esto quiere de- cio del conjunto de la comunidad y en donde la
cir que los pobres en Brasil son cada vez más pobres y comunidad tenga derecho de pensar e imaginar
los ricos son cada vez más ricos en un proceso de con- formas de producción de saberes alternativas a
centración intensiva de la riqueza. las que históricamente han sido desarrolladas.
Para democratizar es necesario cambiar la for- En la modernidad se inventó una institu-
ma de producción de riqueza. Con el conocimiento ción para que todo esto fuera posible: la escuela
ocurre lo mismo. No sólo es necesario democratizar el pública. Ésta se transformó y es fundamental en
resultado; esto es, los conocimientos transformados la estructuración de una vida republicana y demo-
en libros, en teorías, en crática, porque es la
tecnologías, sino que es institución a la cual la
necesario democratizar, sociedad le otorga el
en una sociedad demo- mandato de ser, du-
crática –valga la redun- rante un período muy
dancia– las formas de significativo en la vida
producción de saberes, de las personas, la que
las formas de produc- se encarga de darle
ción de conocimiento. sentido a la vida de-
A pesar de que se mocrática; de ser un
universaliza el acceso a espacio en donde no
la escuela, las formas sólo se democratizan

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

saberes, sino que también se generan formas demo- Es importante reconocer que el derecho a la
cráticas de construcción de saberes y de sentidos. Esto educación es un elemento político fundamental en
es, valores democráticos vinculados a la necesidad de la construcción de nuestras sociedades; político,
luchar contra toda de forma de opresión, contra toda mas no partidario, ya que no es necesario pertene-
forma de “subalternización” y de dominación. cer a uno o a otro partido para darle sentido políti-
En una sociedad moderna, capitalista y re- co al derecho a la educación. Y es político
publicana, las personas tienen derecho a porque la educación es, en sí misma,
no ser dominadas por aquello que no una sociedad democrática, un acto
saben o por las relaciones socia- desestabilizador de verdades, de po-
les que se derivan de aquello deres de las estructuras sobre los
que ellas supuestamente no sa- cuales se sustenta la dominación
ben. Por ejemplo, en nuestras so- de unos sobre los otros. Es un
ciedades se estructura la distribu- acto desestabilizador porque es
ción de bienes y beneficios en democratizador, y la democracia
muchos lugares, como en el mer- es un proceso desestabilizador.
cado laboral, en función de las Lo que no es desestabilizador es
credenciales educativas que las la democracia que se reduce a vo-
personas tienen. Y obtener una, tar una vez cada dos, cuatro o
no un título cualquiera sino un seis años por algún candidato, y
título de ciertas instituciones, dejar en las manos de esos can-
es un privilegio de pocos. Es de- didatos la administración del
cir que hay una forma de seg- futuro de nuestros países.
mentación y de diferenciación Democracia sustantiva,
social muy poderosa derivada democracia ciudadana, demo-
de la educación y de la institu- cracia real; lamentablemente le
cionalización de la educación en el tenemos que poner adjetivos para
sistema educativo. saber de qué democracia hablamos. Esa demo-
La escuela pública es una institución funda- cracia es ciertamente un elemento desestabilizador,
mental en la vida democrática. Por ello, es una exce- porque es una forma de organización de nuestra
lente noticia el hecho de que en Brasil, como en mu- vida que sistemáticamente nos está poniendo ante
chos países del continente, el 95 por ciento de los la necesidad de construir colectivamente, común-
niños y las niñas estén dentro de las instituciones. mente, nuestro destino y nuestra historia.
Ahora, bien, ese dato no alcanza para hacer de él un Por esto la educación es un elemento funda-
emblema de la construcción de derecho en socieda- mental. Educación y emancipación son, en una so-
des que continúan negándolo sistemáticamente. ciedad democrática, redundancia. No puede haber

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e l d e r e c h o a l a e d u c a c i ó n

educación que no sea emancipadora y no puede ha-


ber emancipación sin un proceso educativo. Pode-
mos llamar educación a muchos procesos que se vi-
ven vinculados a los conocimientos en nuestras so-
ciedades. Por ejemplo, podemos llamar educación a
los procesos de capacitación técnica laboral imparti-
dos en algunas instituciones formativas. Son, sin
duda, elementos constitutivos de la formación de los
sujetos, pero no necesariamente tienen que ver con
el proceso fundamental en la formación
humana, que es el proceso educativo. Tal
proceso educativo está vinculado con el de-
recho a la educación. Es ese proceso el que
debe ocurrir en nuestras escuelas. Pero,
normalmente, no ocurre.
Prueba de ello, en los últimos años, son
los indicios que tienen que ver con el aprendi-
zaje de los alumnos. Es el tema que hoy circu-
la en América Latina en medios de comunica-
ción, escuelas, ministerios y secretarias de
educación: el de la calidad de la educación y
la evaluación de los aprendizajes.
Se reconoce que la escuela no cumplió
su papel o lo cumplió de forma precaria, a
partir de la observación de que nuestros alumnos
aprendieron poco o casi nada. Los indicios que usa-
mos para observar esa “falta de aprendizaje”, son re-
sultados obtenidos de procesos de evaluación que,
aunque aportan algunos indicadores relevantes, son
en su gran mayoría insuficientes para evaluar no sólo
lo que se hace en el sistema educativo, sino las diferen-
tes formas que existen de violación del derecho a la
educación.
El problema del derecho a la educación está re-
ducido a que supuestamente los niños y las niñas no

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

aprenden en las escuelas, que no es otra cosa sino la experiencias. Y Cuba es el único país de América La-
evidencia de que los pobres aprenden menos que los tina en donde la calidad del aprendizaje de los niños
ricos en las escuelas. Lo muestran las pruebas aplica- y niñas se aproxima al de los países del Primer mun-
das en nuestros países, y fuera de ellos. Colombia ya do; de hecho supera a muchos de estos países, como
debe haber participado en más de una de estas prue- por ejemplo a España. Cuba es medida por el labora-
bas internacionales en las cuales solemos salir prime- torio de calidad de la UNESCO, que no ha tenido
ros, comenzando de abajo para arriba. Los resulta- otra alternativa que reconocer la superioridad de la
dos se convierten en una disputa para ver cuál país Isla con relación al resto de América Latina.
es el peor. Independientemente de que estas pruebas Normalmente los países que ocupan el primer
nos ofrezcan algunos datos que deben ser considera- lugar son naciones capitalistas desarrolladas como
dos –ciertamente son datos relevantes–, son profun- Finlandia. Quisimos saber por qué Finlandia tiene
damente insuficientes para dar cuenta de los proce- tan excelente desempeño educativo. Ofrece los más
sos realizados en nuestros países. altos salarios para docentes de Europa; y los salarios
Cuando se producen los resultados de estas europeos son los más altos del mundo. Sin embargo,
mediciones que evalúan la calidad de la educación, pagando los salarios del Primer mundo en Colom-
normalmente todo el mundo se fija en los que salie- bia o en cualquier otro país, no vamos a mejorar la
ron en el último lugar. O los países del ‘primer mun- calidad de la educación. Lo cierto es que con los sa-
do’ se fijan si se ubicaron un poco más abajo. Re- larios miserables de América Latina para los trabaja-
cientemente España entró en una especie de colapso dores de la educación difícilmente vamos a poder ge-
porque descubrió que en materia educativa estaba nerar la revolución finlandesa o coreana.
más cerca del Tercer que del Primer mundo. Estar Por otra parte, Finlandia tiene altas tasas de in-
abajo llama la atención, no estar arriba. versión en infraestructura escolar. Por ejemplo, la de-
Revisemos las razones que permitieron a los preciación de un computador en una escuela finlan-
que están arriba llegar hasta ese punto. Encontramos desa es de tres años. Hay recursos de infraestructura
que ningún cubano es invitado a participar de estas básicos. En toda América Latina, la gran parte de la

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e l d e r e c h o a l a e d u c a c i ó n

inversión educativa es destinada a salarios que, como mucha atención. De manera general, todos los paí-
mencionamos, son muy bajos. Es curioso que en Fin- ses no ricos le prestan atención a la equidad de géne-
landia los salarios sean muy altos pero no todo el pre- ro. No sabremos a ciencia cierta si dicha equidad tie-
supuesto se destina a ellos. También hay inversión en ne directamente que ver con la calidad de los apren-
capital, en infraestructura y en bibliotecas. dizajes, pero buena parte del déficit de aprendizaje
Los finlandeses tienen programas integrados presente en nuestras escuelas tiene que ver también
de formación y de capacitación de docentes. No con- con una estructura no sólo profundamente desigual
sideran que un docente se forma cuando hace su de acceso a la información, sino también de acceso
curso inicial y recibe su diploma; saben que entra a desigual al poder.
una carrera de formación acompañada con estrate- Hace algunos meses, el rector de la Universi-
gias que permiten no sólo el acceso a una oferta edu- dad de Harvard dijo que las mujeres tenían serias
cativa muy importante por la que no tienen que pa- limitaciones intelectuales para responder a cierto
gar –aquí cuando los docentes se quieren formar, de- tipo de pensamiento lógico matemático, funda-
ben pagarlo; gastan buena parte de su salario para mental para la vida moderna. Eso en América Lati-
hacer cursos, en su gran mayoría de pésima calidad– na le costaría el cargo a un director de escuela; pero
sino que existe tiempo para dedicar a la investiga- en Estados Unidos le merece una medalla al rector
ción. Para ellos, el trabajo docente significa dar cla- de esa Universidad.
ses, pero se asisten de otros elementos vinculados al En nuestro continente las mujeres fueron las
ejercicio de la docencia. más beneficiadas del proceso de democratización
Hay varios indicadores en la realidad finlande- de acceso a la escuela. El grupo que más creció, al
sa que resultan interesantes. Finlandia no sólo tiene menos cuantitativamente dentro de la sociedad,
una primera ministra mujer, sino que hay una distri- fueron las mujeres, porque eran las más discrimina-
bución equilibrada de los espacios de poder entre das en este proceso de masificación sin derecho.
hombres y mujeres dentro del sistema escolar. Esta Brasil tenía un millón ciento treinta mil mujeres en
es una cuestión a la cual los finlandeses le prestan la enseñanza superior en 1996. En 2003 esa cifra se

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e d u c a c i ó n y c i u d a d

transformó en dos millones doscientos mil. grandes mayorías, aunque las grandes mayo-
Hubo un aumento de un poco más del 110% rías estén dentro del sistema escolar.
en el número de mujeres que ingresaron a la Si existe una correlación entre pobreza
universidad. Sin embargo, en este mismo pe- y oportunidades educativas, también parece
ríodo no disminuyó en nada –por el contrario, haberla entre oportunidades educativas y per-
se intensificó– la diferencia salarial dentro del sistencia de la desigualdad en algunos secto-
mercado de trabajo entre hombres y mujeres. A res dentro de nuestra sociedad. Por ejemplo,
pesar de que las mujeres tienen muchas más las comunidades indígenas también aumen-
oportunidades hoy dentro del sistema universi- taron, aun cuando gran parte de los pueblos
tario en Brasil, la desigual distribución de ven- indígenas permanecen sin tener derecho a la
tajas y beneficios dentro del mercado de traba- educación.
jo no ha cambiado. En algunos países andinos se quintuplicó
La distribución de cargos jerárquicos en en los últimos años la relación del poder dentro
las empresas nacionales y multinacionales conti- del mercado de trabajo, en el sistema político, en
núa. Lo único que ha cambiado relativamente el sistema cultural, en el mismo sistema educativo,
en Brasil a lo largo de estos últimos años es la re- pero dentro de sus sociedades no pasó absoluta-
presentación que han conquistado las mujeres mente nada.
en algunos cargos de poder dentro del gobierno El caso de la población negra también es
federal, y de algunos gobiernos municipales y es- significativo. En Brasil, ha habido grandes
tatales donde sí hubo un cambio significativo. avances en los espacios que ocupa la pobla-
Pero estadísticamente, es insignificante. ción negra dentro del sistema escolar. Hay una
No sabemos si en Finlandia la igualdad de disputa por las cuotas en las universidades pú-
género tiene que ver con la calidad de la educa- blicas, y todo un debate acerca de las acciones
ción, pero tampoco sabemos si no es acaso la afirmativas. No obstante, ha habido avances y
profunda desigualdad de género existente en cambios significativos; pero no dentro de la es-
nuestras sociedades, y particularmente en el tructura social.
mercado de trabajo, una de las causas que obsta- Colombia es uno de los países de Amé-
culizan la posibilidad de una verdadera igualdad rica Latina con mayor número de población
de oportunidades. De manera general, los datos afrodescendiente. Hay datos no muy alenta-
sobre calidad de la educación esconden más de dores sobre la persistencia de mecanismos de
lo que muestran acerca de las razones por las discriminación y segregación racial en nues-
cuales en nuestros sistemas educativos se viola tros países, y en Brasil, particularmente, a pe-
cotidianamente el derecho a la educación de las sar del avance educativo que ha habido.

86
l a t e n d e n c i a d e s c e n t r a l i z a d o r a

En una ciudad como Sao Paulo, la princi- cio democrático que se desdemocratizó”, y la
pal ciudad brasilera, el producto interno bruto permanencia de un sistema de poder profun-
es superior al de prácticamente todos los países damente desigual y concentrado, como el que
de América Latina, con excepción de México y vivimos y que no ha cambiado significativa-
Argentina. En esta ciudad, en la misma edad, mente en los últimos años.
con la misma profesión y la misma formación El gran desafío es, sin lugar a dudas, conti-
educativa, si un hombre en el mercado de traba- nuar avanzando con políticas educativas demo-
jo gana cien, una mujer gana setenta; un hom- cráticas como las discutidas en el Foro Educativo
bre negro gana sesenta, y una mujer negra gana de Bogotá. Nuevas formas de pensar la educa-
cuarenta y cinco. En Bahía, con 70 por ciento ción y de organización del trabajo escolar, nuevas
de población negra, la relación es de cien para formas de pensar la pedagogía, sin abandonar la
el hombre blanco, setenta para la mujer blanca, lucha por tratar de cambiar otras estructuras de
cincuenta y cinco para el hombre negro y trein- poder que interfieren en nuestras sociedades –
ta y siete para la mujer negra; mucho menor to- dentro de la institución educativa–, y que no se
davía que en Sao Paulo. pueden cambiar desde ella misma.
Las mujeres negras, en relación con los El gran desafío de la educación continúa
hombres blancos, quintuplicaron sus oportu- siendo el construir los sentidos de aquello que
doña Felicidad decía en su emocionante rela-
nidades educativas en la última década. Una
to. El desafío de la educación pública en nues-
mujer negra tiene hoy cinco veces más oportu-
tros países es construir dignidad y construir
nidades educativas en Brasil que las que tenía
derechos, es luchar contra la humillación; y lu-
diez años atrás. Para las mujeres blancas, en re-
char contra la humillación dentro del sistema
lación con los hombres blancos, las oportuni-
escolar significa contribuir a la lucha contra
dades también aumentaron. otras formas de humillación que están fuera
El problema de la educación no está de la institución educativa y que, muchas ve-
sólo asociado al resultado de los aprendizajes, ces, son la principal causa de la violación siste-
sino a la configuración de una estructura de mática del derecho a la educación.
poder profundamente desigual, que cotidia- Debemos continuar con el trabajo en la
namente viola dentro de nuestras institucio- escuela, y seguir nuestro trabajo es trabajar para
nes educativas, el derecho inalienable a la aquello para lo cual la escuela fue creada: ser la
educación que deberían tener todos los ciu- institución capaz de luchar contra el monopo-
dadanos y ciudadanas. lio de los saberes socialmente significativos, de-
Esto ocurre porque se produjo la com- mocratizando el acceso al conocimiento y las
binación de la “democratización de un espa- formas de producción del conocimiento.

87
e d u c a c i ó n y c i u d a d

En la escuela, se aprende a mirar la realidad, “Hay que pintarla”, dijo una niña; “hay que
a observarla, a tener amor por la realidad que vivi- pintarla con diversos colores, con los colores de cada
mos y a detestar la realidad que vivimos; a sustentar bandera”. La maestra dijo: “Sí, pero no todo paño
nuestras afirmaciones en las verdades que esa reali- pintado con los colores de nuestra bandera es necesa-
dad ha creado, pero también nos enseña a descon- riamente una bandera. ¿Qué más necesito para que
fiar de las verdades sobre las cuales se sustenta nues- eso sea una bandera?”.
tra realidad. “Una varilla”, dijo otro alumno, “para pegar ese
En Chiapas, los campesinos y los indígenas paño a la bandera y poder tenerla”, la maestra dijo:
chiapanecos cuentan una historia que se ha conver- “Sí, pero no todo paño pintado con una varilla es una
tido en una de las predilectas del Movimiento Zapa- bandera”, y así siguieron y siguieron diciendo cosas,
tista. Una historia que representa el sentido del de- hasta que la maestra les dijo: “Pensemos juntos. Para
recho a la educación. que exista una bandera, es necesario que exista una
Cuenta la historia que una maestra llega a su mano, sin una mano no existen las banderas, la mano
escuela, debajo de un árbol en la selva lacandona; y es la que levanta la bandera”. Los que hacen la bande-
le pregunta a sus alumnos: “¿Podrían decirme uste- ra son siempre los que la cargan, los que la llevan,
des qué es una bandera?”. Los alumnos ya estaban aquellos y aquellas que la hacen flamear.
acostumbrados a esas preguntas extravagantes de sus La construcción de la escuela pública tiene
profesores, pero se miraron sorprendidos ante una mucho que ver con eso. La escuela pública y el dere-
pregunta tan boba; ¿cómo que qué es cho a la educación son nuestra bandera, y
una bandera? Nadie respondía, porque para que esos derechos y para que esa ins-
imaginaban que detrás de la pregunta titución continúen existiendo, o se pro-
había una respuesta oculta que habían duzcan para algunos, por primera vez en
de saber, y que ellos desconocían. Has- nuestra historia, es necesario que conti-
ta que alguien se animó y dijo: “Una nuemos caminando y fortaleciendo inicia-
bandera es un paño, es un pedazo de tivas, como el Foro Educativo Distrital,
tela”. La maestra dijo: “Sí, pero no para que el día de mañana todos podamos
todo pedazo de tela es una bandera; afirmar que la educación nos ha dignifica-
¿qué es necesario para que un pedazo do, y nadie más tenga que decir que alguna
de tela sea una bandera?”. vez se sintió humillado por la falta de ella.

88
Derecho e indicadores
una perspectiva
Luis Eduardo Pérez Murcia

El autor es economista de la Universidad Nacional de Colombia y magíster en Economía y especialista en


Estadística de la misma Universidad. Parte de su experiencia profesional la ha dedicado al estudio de las políticas
educativas y al diseño de indicadores para monitorear el nivel de disfrute del derecho a la educación. Se desem-
peña actualmente como investigador del Centro de Estudios Derecho, Justicia y Sociedad.

Resumen

El artículo expone la necesidad de fortalecer los vínculos entre el diseño de indicadores educativos y el con-
tenido del derecho a la educación, al tiempo que presenta un modelo de indicadores para monitorear y evaluar el
nivel de disfrute de este derecho. Tomando como base el sistema de la 4A propuesto por K. Tomasevski, se pro-
pone un sistema de indicadores que permita dar cuenta del nivel de cumplimiento del Estado frente a las princi-
pales obligaciones en materia de asequibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y adaptabilidad de la educación.

Palabras clave

Indicadores, derecho a la educación, monitoreo, disfrute, asequibilidad, accesibilidad, aceptabilidad, adap-


tabilidad.

Abstract

The article exposes the need to enhance the relationship between the construction of educational indicators
and the right to education. At the same time, it presents a new model of policy indicators that act as safeguards to
monitor and asses the fulfillment of the right to education. Based on the 4A scheme proposed by Katarina Toma-
sevski, the set of indicators proposed pretends to evaluate the level of commitment of the Colombian State to the
fulfillment of this right in terms of availability, accessibility, acceptability and adaptability.

Key words

Indicators, right to education, monitoring, enjoyment, availability, accessibility, acceptability and adaptability.
p
ese a que existe un importante volumen de es-
tadísticas educativas en Colombia1, y a que
periódicamente se presentan análisis que dan
cuenta de algunos aspectos de las problemáticas del
sector, el país no dispone de informes sobre el nivel
de realización del derecho a la educación Puntual-
mente, los estudios sobre educación tienden a con-
centrarse en aspectos como la cobertura, calidad y
eficiencia y deserción del sistema educativo, sin que
se tenga una mirada de conjunto que vincule las
obligaciones del Estado frente al derecho a la educa-
ción y los logros alcanzados mediante la implemen-
tación de las políticas públicas educativas.
Por lo anterior, y considerando que con base llama la atención sobre la importancia de fortalecer
en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, el vínculo entre las obligaciones del Estado en mate-
Sociales y Culturales es deber del Estado informar ria de derechos humanos y el diseño de indicadores.
sobre el nivel de avance en el disfrute del derecho a El segundo explica las características especiales de
la educación, el presente artículo se ocupa de desa- los indicadores elaborados desde la perspectiva de
rrollar una propuesta de indicadores que permita los derechos humanos. La última sección presenta
dar cuenta del nivel de disfrute de este derecho. El un modelo de indicadores para monitorear y evaluar
artículo está organizado en tres acápites. El primero el nivel de disfrute del derecho a la educación.

Derecho e indicadores: el ejercicio de


1 Este artículo sintetiza algunas de las reflexiones presentadas en el docu-
mento titulado “Modelo de indicadores para monitorear y evaluar las políti-
fortalecer un vínculo natural
cas educativas desde la perspectiva del derecho a la educación”, elabora-
do por Luis Eduardo Pérez Murcia en el marco de la investigación Análisis Los sistemas de indicadores de educación exis-
comparado de las políticas educativas en Bogotá, dos ciudades colombia-
nas y tres ciudades latinoamericanas: una mirada desde la perspectiva del tentes enfrentan limitaciones para establecer el nivel
derecho a la educación; contratada por el Instituto de Investigación Educa- en que las políticas públicas educativas aportan a la
tiva y Desarrollo Pedagógico. El artículo recoge los aportes realizados por realización del derecho a la educación de todos y to-
el equipo de investigación del Centro de Estudios Derecho, Justicia y So-
ciedad integrado por Rodrigo Uprimny, César Rodríguez, Mauricio García, das, sin discriminación alguna; en especial, de los su-
Camilo Castillo y Miquel Jordana, a quienes agradece el autor. jetos y grupos poblacionales tradicionalmente ex-

91
e d u c a c i ó n y c i u d a d

cluidos y marginados de los procesos de de-


sarrollo. Por lo mismo, y adoptando como
punto de partida un enfoque de políticas
públicas cuyo diseño, implementación y
evaluación estén guiadas por el contenido
de los derechos humanos y las obligaciones
del Estado, es posible argumentar que,
dado que el objetivo último de toda política
pública educativa deberá ser la promoción
del derecho a la educación, es indispensa-
ble reenfocar los indicadores educativos
desde una perspectiva de derechos huma-
nos. Expresado en otros términos, es nece-
sario fortalecer el vínculo natural existente
entre las obligaciones del Estado en materia cos, Sociales y Culturales, relativa al carácter de las
de derechos humanos y el diseño de indicadores, obligaciones de los Estados Parte en materia de dere-
para dar cuenta de su cumplimiento2. chos económicos, sociales y culturales, es menester
Puntualmente, es imperativo que los indicado- que los indicadores permitan establecer de qué ma-
res para el seguimiento y monitoreo de la política nera el Estado adopta todas las medidas posibles,
educativa permitan evidenciar en qué medida el Es- hasta el máximo de los recursos disponibles, para ha-
tado cumple con sus obligaciones de respeto, protec- cer efectiva la realización del derecho a la educación
ción y promoción del derecho a la educación. En de todos y todas.
este sentido, y conforme lo dispone la Observación A propósito, cabe recordar que con respecto al
General No. 3 del Comité de Derechos Económi- Pacto Internacional de Derechos Económicos, Socia-
les y Culturales, la Observación General No. 3 esta-
2 Esta postura es coherente con el enfoque de desarrollo humano, en el sen- blece que los Estados deben disponer del máximo de
tido de que, desde sus planteamientos generales, es posible deducir que los recursos necesarios para adoptar medidas legislati-
el objetivo de toda política pública es contribuir al ejercicio de los derechos
humanos de todos y todas, en especial de los sujetos y grupos más des-
vas, administrativas, judiciales, económicas, sociales y
protegidos. Véase Informe sobre Desarrollo Humano 2005. La coopera- educacionales, para asegurar, de forma progresiva, y
ción internacional ante una encrucijada: ayuda al desarrollo, comercio y sin discriminación alguna, el pleno ejercicio del dere-
seguridad en un mundo desigual. Programa de las Naciones Unidas para
el Desarrollo. Ediciones Mundi-Prensa. 2005. cho a la educación. Tales providencias comprenden el

92
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

respeto por el derecho a la educación


de todos y todas; la adopción de medi-
das positivas para facilitar y proveer el
ejercicio del derecho a la educación, y
la garantía de mecanismos para prote-
ger el ejercicio de este derecho, de ma-
nera que se evite que terceros puedan
obstaculizarlo.
En armonía con las disposicio-
nes prescritas en la Observación Gene-
ral citada, se requiere que los indicado-
res para el monitoreo de las políticas
educativas permitan evidenciar los si-
guientes aspectos relacionados directa-
mente con el derecho a la educación3: • Establecer la efectividad de las medidas
legislativas, presupuestales, económicas
• Determinar si el Estado está cumplien- y de política pública adoptadas por el Es-
do, y el grado en que lo está haciendo, tado para proteger y promover la efecti-
sus obligaciones de respeto, protección y vidad del derecho a la educación.
promoción del derecho a la educación. • Identificar aciertos y posibles vacíos de
• Determinar si el diseño e implementación las políticas públicas educativas para ha-
de las políticas públicas educativas es cohe- cer efectiva la realización del derecho a
rente con el sentido de las obligaciones del la educación.
Estado: no discriminación, no “regresivi- • Identificar problemáticas concretas que li-
dad”, y adopción de medidas concretas, miten la realización del derecho a la educa-
con recursos suficientes para la realización ción, con especial atención en los sujetos y
del derecho a la educación4. grupos poblacionales vulnerables.

3 Defensoría del Pueblo. Sistema de seguimiento y evaluación de la política 4 Al respecto puede consultarse Comité de Derechos Económicos, Sociales
educativa a la luz del derecho a la educación. Investigación realizada por y Culturales, Observación General No. 3, relativa a la índole de las obliga-
Luis Eduardo Pérez Murcia. Bogotá, Colombia. 2004. Pág. 64. ciones de los Estados Parte.

93
e d u c a c i ó n y c i u d a d

• Disponer de información que oriente el realización de los derechos económicos, sociales y


diseño y ejecución de políticas públicas culturales en el país, es posible concluir que existen,
educativas, fundamentadas en la realiza- por lo menos, tres criterios centrales de diferencia-
ción del derecho a la educación. ción entre los indicadores educativos tradicionales y
los indicadores elaborados en perspectiva de dere-
Especificidad de los chos humanos. Estos son el fundamento de la medi-
indicadores con perspectiva da, la no discriminación y la no “regresividad”5.
En cuanto al primer criterio de diferenciación,
de derechos humanos el fundamento de la medida, cabe resaltar que, en tanto
los indicadores educativos convencionales tienen, ge-
A tono con experiencias nacionales e interna-
neralmente, como referente fundamental o razón de
cionales de investigación en materia de indicadores
medida una meta establecida en un plan de desarro-
educativos desde la perspectiva de los derechos hu-
llo, el control del gasto público o la evolución del sec-
manos –en especial, el trabajo adelantado por la Co-
tor, los indicadores en perspectiva de derechos huma-
misión de Derechos Humanos de Sudáfrica, que,
nos responden, de manera estricta, al contenido del
por mandato constitucional, diseñó en 1996 un sis-
tema de indicadores para monitorear y evaluar la
realización de los derechos sociales–, con el sistema 5 Sobre las experiencias de investigación citadas, puede consultarse: Comi-
de las 4-A, propuesto por la profesora Katarina To- sión de Derechos Humanos de Sudáfrica. Recuperado el 23 de octubre de
2005, de http://www.sahrc.org.za/4th_esr_chap_7.pdf; Tomasevski Katari-
masevski, relatora especial de las Naciones Unidas na. Human Rights Obligations: Making Education Available, Accessible,
para el Derecho a la Educación 1998- 2004, y con el Acceptable and Adaptable. Education Primers No. 3., Novum Grafiska AB,
Sistema de Seguimiento y Evaluación de Políticas Gothernburg, Suecia, 2001; y, Defensoría del Pueblo. Sistema de segui-
miento y evaluación de la política educativa a la luz del derecho a la edu-
Públicas desarrollado por la Defensoría del Pueblo cación. Investigación realizada por Luis Eduardo Pérez Murcia. Bogotá,
de Colombia, con el fin de determinar el nivel de Colombia. 2004.

94
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

derecho a la educación y a las correlativas obligacio-


nes del Estado derivadas de la Constitución Política,
a los instrumentos internacionales de derechos
humanos, a la jurisprudencia y doctrina de los
órganos internacionales de protección, a la juris-
prudencia de la Corte Constitucional y a las
normas locales.
Conforme a estas normas, y en espe-
cial al esquema de organización del dere-
cho a la educación en un sistema de 4-A,
propuesto por la profesora Tomasevski y
adoptado por el Comité de Derechos Eco-
nómicos, Sociales y Culturales en la Obser-
vación General No. 13, el derecho a la edu-
cación comprende tres dimensiones, cuatro
componentes y cuatro conjuntos de obliga-
ciones, de los cuales se espera que los indica-
dores den cuenta.
Las tres dimensiones son: dimensión del dere-
cho a la educación, que obedece a la naturaleza y al-
cance del derecho derivado de las normas nacionales
e internacionales de protección y que envuelve tanto
al derecho a la disponibilidad de educación –obliga-
ción aceptable como el derecho a permanecer en el
ción de asequibilidad– como al derecho de acceso a la
sistema educativo obligación de adaptabilidad6.
educación –obligación de accesibilidad–. La dimensión
Finalmente, en torno a este primer criterio de
de los derechos en la educación, que hace referencia a la
diferenciación de los indicadores de derechos huma-
promoción y garantía de todos los derechos huma-
nos, es oportuno mencionar que el hecho de que los
nos en el ámbito de la escuela y que contempla el de-
indicadores elaborados desde la perspectiva de los de-
recho a una educación aceptable obligación de acepta-
rechos humanos contribuyan a monitorear el cumpli-
bilidad–. Y, finalmente, la dimensión de los derechos
miento de obligaciones del Estado frente al derecho a
por la educación, que se refiere al papel de la educa-
ción como multiplicadora de los demás derechos hu- 6 Una explicación detallada de los diferentes componentes del derecho,
manos y que incluye tanto el derecho a una educa- puede consultarse en Defensoría del Pueblo. Op. Cit., Págs. 34-38.

95
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Tabla 1: Sistema de las 4-A, propuesto por Katarina Tomasevski7


- Disponibilidad de escuelas.
- Libertad de fundar establecimientos educativos.
Escuelas
- Disponer de fondos para escuelas públicas.
- Disponer de fondos para escuelas privadas.
- Criterios de selección.
Asequibilidad
- Aptitudes para la enseñanza.
- Derechos laborales.
Profesores
- Libertades sindicales.
- Responsabilidades profesionales.
- Libertades académicas.
- Acceso para todos y todas.
- Gratuidad.
Obligatoria - Asistencia escolar garantizada.
- Libertad de los padres y madres a elegir la educación de los
Accesibilidad niños y las niñas.
- Acceso sin discriminación.
- Acceso preferencial para los grupos vulnerables.
Post-obligatoria
- Admisión basada en criterios académicos.
- Reconocimiento de diplomas extranjeros.
- Estándares mínimos de calidad.
- Respeto de la diversidad.
- Lenguaje de instrucción.
Aceptabilidad Regulación y supervisión
- Orientación y contenidos curriculares.
- Disciplina escolar.
- Derechos de los estudiantes.

Necesidades especiales - Niños y niñas con discapacidad.

Adaptabilidad - Niños y niñas trabajadores.


Niños y niñas por fuera
- Niños y niñas refugiados.
del sistema educativo
- Niños y niñas privados de la libertad.

7 Traducción libre del sistema presentado por Katarina Tomasevski . Op. Cit., P. 12.

96
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

la educación, les permite gozar de En cuanto al segundo


cierto carácter de exigibilidad. criterio de diferenciación de
Al respecto, el Informe so- los indicadores convenciona-
bre Desarrollo Humano les y los indicadores elabora-
2000 destacó que los indica- dos en perspectiva de dere-
dores pensados desde los de- chos, es oportuno señalar
rechos humanos se convierten en primer lugar que la no
en instrumentos para alcanzar discriminación es uno de los
los siguientes objetivos8: principios fundamentales de
los derechos humanos. Según
• Formular mejores po- el párrafo 7º de la Observación
líticas y vigilar los pro- General No. 18 del Comité de
gresos realizados. Derechos Humanos, el término
“discriminación” se debe entender como:
• Determinar los efectos no
deseados de leyes, políticas y prácticas.
“... toda distinción, exclusión, restricción o
• Determinar qué actores están influyen- preferencia que se basen en determina-
do en la realización de los derechos. dos motivos, tales como la raza, el color,
• Poner de relieve si esos actores están el sexo, el idioma, la religión, la opinión
cumpliendo sus obligaciones. política o de otra índole, el origen nacio-
nal o social, la posición económica, el
• Advertir de antemano posibles violaciones nacimiento o cualquier otra condición
y poder adoptar medidas preventivas. social, y que tengan por objeto o por re-
• Fortalecer el consenso social respecto a sultado anular o menoscabar el recono-
decisiones difíciles que deban adoptarse cimiento, goce o ejercicio, en condicio-
frente a la limitación de recursos. nes de igualdad, de los derechos huma-
• Sacar a la luz cuestiones que han sido des- nos y libertades fundamentales de todas
atendidas o silenciadas. las personas”
8 Informe sobre Desarrollo Humano 2000. Derechos humanos y desarrollo En segundo término, es preciso aclarar que,
humano, capítulo 5, Uso de indicadores para exigir responsabilidad en ma-
teria de derechos humanos, Nueva York, 2001. conforme al derecho internacional de los derechos

97
e d u c a c i ó n y c i u d a d

variable aproximada de la discriminación, un elemen-


to de diferenciación, según grupos poblacionales.
Esto permitirá realizar una primera aproximación al
impacto diferencial de las políticas públicas educati-
vas en los distintos grupos poblacionales e identifi-
car cuáles de estos grupos se encuentran excluidos a
causa, posiblemente, de políticas que, aunque no
son abiertamente discriminatorias, producen impac-
tos que pueden inducir a perpetuar las formas de
discriminación existentes.
En este sentido, es importante que indica-
dores educativos como, por ejemplo, los indicado-
res de acceso, tipo, tasas brutas y netas de cobertu-
humanos, la no discriminación sólo se hace efectiva ra; los indicadores de calidad, como resultados de
cuando se asegura el derecho al trato preferente a los su- pruebas de saber e ICFES, y los indicadores de
jetos y grupos poblacionales discriminados. En estric- permanencia, como tasas de deserción y de reten-
to sentido, negar el derecho al trato preferente –discri- ción, se desagreguen según los siguientes grupos
minación positiva– a un sujeto o grupo poblacional dis- poblacionales: población con discapacidad, pobla-
criminado determina una conducta discriminatoria. ción desplazada, población negra e indígena, mi-
No obstante el carácter perentorio de la obliga- norías religiosas y personas con diferente orienta-
ción a la no discriminación –lo cual exige valorar sus ción sexual. Además, al interior de estos grupos
diferentes modalidades, impactos y efectos sobre la deben clasificarse los indicadores según género y
realización del derecho a la educación–, el diseño de grupos de edad.
metodologías para medir discriminación en los dere- A pesar de que este tipo de desagregaciones
chos sociales, en general, y en el derecho a la educa- no permiten concluir, en rigor, si una política es
ción, en particular, tienen un desarrollo incipiente. discriminatoria o no, constituyen un primer paso
Sólo es posible captar la discriminación, en cual- para evidenciar fenómenos de discriminación. Así,
quiera de sus formas u expresiones, si se investigan por ejemplo, si se encontrara que la tasa de matrí-
sus causas más profundas y las formas en que se ma- cula de un grupo poblacional es tres veces menor
terializa. Por lo mismo, es necesario que los indica- que la de otro, no se podría concluir que existe un
dores de derechos humanos incorporen, como una fenómeno de discriminación en contra de este últi-

98
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

mo. Sin embargo, se dispondría de infor-


mación que permitiría aportar evidencias
empíricas para una hipótesis de investiga-
ción en este sentido. De todas maneras, re-
sulta claro que la validación rigurosa de la
hipótesis requeriría elaborar, por lo menos,
un estudio de caso en el que se indague has-
ta qué punto los diferenciales en la tasa de
matrícula entre diferentes grupos poblacio-
nales obedecen a un fenómeno discrimina-
torio.
Finalmente, en torno al tercer princi-
más representativos, para cada dimensión del dere-
pio de diferenciación de los indicadores –la no “regre-
cho y las correlativas obligaciones del Estado.
sividad”–, el Comité de Derechos Económicos, So-
ciales y Culturales estableció que los Estados no pue-
den adoptar medidas que conduzcan a niveles de Modelo de indicadores educativos
realización del derecho a la educación menores que para monitorear y evaluar el nivel de
los niveles alcanzados, independientemente de que realización del derecho a la educación
los mismos estén por encima de los mínimos prote-
gidos en las normas del Derecho Internacional de Conforme a los principios que guían los in-
los Derechos Humanos. Para efectos de identificar el dicadores de derechos humanos expresados en el
nivel de progreso y la no “regresividad”, los indica- acápite anterior, se propone a continuación un
dores educativos elaborados desde la perspectiva del sistema de indicadores que permita dar cuenta del
derecho a la educación deben medir la evolución de nivel de cumplimiento del Estado frente a las prin-
las políticas, con especial atención en los progresos o cipales obligaciones en materia de asequibilidad,
retrocesos de los sujetos y grupos poblacionales tra- accesibilidad, aceptabilidad y adaptabilidad de la
dicionalmente discriminados. Sobre el particular, educación.
cabe señalar que el nivel de progreso o “regresivi- Para la selección de los indicadores convencio-
dad” sólo es factible de evaluar al captar los indica- nales del sector educativo a ser incorporados en el
dores de manera periódica, mediante, por ejemplo, sistema, y el desarrollo de nuevos indicadores para
la construcción de series anuales con los indicadores las obligaciones que no tienen indicadores asocia-

99
e d u c a c i ó n y c i u d a d

dos, se establecieron tres criterios básicos: la relación


entre el indicador y las obligaciones inmediatas del
Estado; que los indicadores aporten información so-
bre políticas públicas educativas en operación, o so-
bre la ausencia de políticas que sea necesario diseñar
e implementar, con el fin de avanzar en la plena vi-
gencia del derecho a la educación; y, finalmente, la
posibilidad de obtener, en el corto y mediano plazo,
información para su cálculo9.
En cuanto al primer criterio, se trata de identi-
ficar las principales obligaciones de carácter inme-
diato del Estado frente al derecho a la educación.
Una vez identificadas, se eligen las que, de acuerdo
con las Observaciones Generales 3ª, 11 y 13 del Co-
mité de Derechos Económicos, Sociales y Cultura-
les, y las observaciones de la relatora especial de las
Naciones Unidas para el Derecho a la Educación en
sus informes 1998-2004, puedan ser entendidas
como obligaciones que sin cumplimiento no se en-
tienden, dadas las condiciones para el pleno disfrute
al derecho a la educación. Tales obligaciones po-
drían ser comprendidas, en el ámbito de la política
educativa, como las obligaciones básicas; es decir, el
mínimo que las políticas educativas deberían garan-
tizar. Lo anterior, sin desmedro de que para las obli-
gaciones consideradas no básicas –como las de cum-
plimiento progresivo– el Estado adelante medidas
de política pública para su cumplimiento.

9 Algunos de los indicadores propuestos se elaboran tomando como refe-


rencia la investigación titulada Sistema de seguimiento y evaluación de la
política educativa a la luz del derecho a la educación. Defensoría del Pue-
blo. Investigación realizada por Luis Eduardo Pérez Murcia. Bogotá, Co-
lombia. 2004. pp. 40-44 y 78-128.

100
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

Con relación al segundo criterio, los indica- planeación –Departamento Nacional de Planea-
dores serán elegidos en función de las principales ción y secretarías de planeación, en Colombia–.
metas que, conforme al contenido del derecho a la Es oportuno mencionar que existen obligacio-
educación, las políticas públicas deben garantizar. nes básicas para las que estas fuentes no reportan in-
Esto, tomando como modelo de referencia el siste- formación con el nivel de desagregación necesaria
ma de las 4-A, propuesto por la profesora Tomase- para evidenciar posibles fenómenos de discrimina-
vski, presentado en el acápite tercero. ción. En tal caso, es necesario que las entidades com-
Por último, en cuanto tiene que ver con la petentes incorporen los criterios según motivos de
disponibilidad de información, se seleccionarán in- discriminación prohibidos para las variables pertinen-
dicadores para los que existan fuentes de informa- tes, así como se establece en el siguiente modelo:
ción de validez y confiabilidad reconocida, como
las estadísticas producidas por las oficinas na-
cionales de estadística –para el caso de Co-
lombia, el DANE–; las estadísticas de
centros de investigación en educa-
ción, nacionales e internacionales;
las estadísticas de centros especiali-
zados en información estadística,
como el Instituto de Estadísticas de
la UNESCO; las estadísticas pro-
ducidas por organismos mul-
tilaterales, como el Banco
Mundial, Banco Interameri-
cano de Desarrollo y Comi-
sión Económica para Amé-
rica Latina y el Caribe,
CEPAL; las estadísticas
oficiales presentadas por el
Ministerio de Educación y
las entidades territoriales com-
petentes –las Secretarías de Edu-
cación para el caso de Colombia–,
y, finalmente, la información reportada
por los organismos centrales y regionales de

101
c i u d a d e d u c a d o r a

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación
Derecho a la Disponibilidad de Educación. Obligación de Asequibilidad

Asegurar el número de Niños y niñas en edad - Déficit de cupos escolares. Localidad10. Sistema de información
cupos equivalentes al escolar que no disponen - Nuevos cupos escolares Zona. del Ministerio de
número de niños y niñas de cupos escolares en el creados en el sector oficial. Nivel educativo. Educación Nacional,
en edad de enseñanza sistema público y que no - Cupos contratados con el Motivos de MEN, y de las
primaria. disponen de recursos sector privado. discriminación Secretarías de
para ingresar en el prohibidos 11. Educación (SE).
sistema privado

Asegurar adecuadas Las inadecuadas - Establecimientos educati- Localidad. DANE C-100.


condiciones de condiciones de vos que no disponen de Zona.
infraestructura física y infraestructura de servicios públicos domici- Tipo de servicio del Sistemas de
ambiental de las algunos establecimientos liarios completos. que no se dispone. información de MEN
instituciones educativas y educativos ponen en - Establecimientos educati- y SE.
los centros de riesgo la salud y la vos con infraestructura que Localidad.
enseñanza. integridad física de los amenaza ruina –paredes y Zona. Sistemas de
niños y las niñas. techos en riesgo de desplo- información de MEN
marse–. Localidad. y SE.
Zona.
Tipo de riesgo.
- Establecimientos educati-
vos ubicados en zonas del
alto riesgo ambiental.

Asegurar la disponibilidad La falta de docentes - Déficit de docentes en Localidad. DANE C-600.


de docentes y la impide que los niños y establecimientos oficiales. Nivel educativo. Sistemas de
existencia de programas niñas dispongan, en - Total de docentes que información de MEN
de instrucción académica forma permanente, de recibieron cursos de forma- Localidad. y SE.
y formación para los profesionales a cargo de ción y actualización en un Nivel educativo. Sistemas de
mismos. su proceso de período de referencia. información de MEN
aprendizaje. Como - Relación alumno- docente. Sector. y SE.
consecuencia de la falta Nivel educativo.
de docentes, en DANE.
ocasiones se amplía la
relación alumno-
docente, a niveles que
pueden afectar la calidad
de la enseñanza.

10 Si las estadísticas son tomadas a nivel nacional, en lugar de localidad es pertinente desagregarlas para departamentos y municipios.
11 Discapacidad auditiva, discapacidad visual, retraso mental,síndrome de down, trastornos .

102
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación

Derecho de Acceso a la Educación. Obligación de Accesibilidad

Velar por el derecho de Los grupos poblacionales - Tasa de cobertura bruta. Sector. C-600, Encuesta
acceso a las instituciones discriminados, en - Tasa de cobertura neta. Nivel educativo. Nacional de Hogares
y programas de especial, población con - Tasa de asistencia bruta. Localidad. (ENH) y sistema de
enseñanza públicos, sin discapacidad, negra, - Tasa de asistencia neta. Motivos de información del MEN y
discriminación alguna. indígena y desplazada, discriminación las SE.
presentan niveles de prohibidos.
matrícula y asistencia
escolar por debajo del
promedio del resto de la
población.

Proporcionar educación La educación primaria no - Porcentaje de estudiantes Sector. Sistema de información


básica, pública, es universal, y no se matriculados en primaria, Localidad. de las SE.
obligatoria y gratuita para cumple con el principio que reciben educación Estrato
todos los niños y las de gratuidad. gratuita. socioeconómico.
niñas, y asegurar el Motivos de ENH y Encuesta de
acceso a la educación Los grupos poblacionales - Porcentaje de la población discriminación Calidad de Vida (ECV).
primaria, a toda la de menores recursos, o mayor de 11 años que tiene prohibidos.
población. en situación de pobreza, nivel educativo la primaria Motivos de
enfrentan la dualidad completa o un nivel educa- discriminación
entre llevar a los niños y tivo mayor. prohibidos.
niñas a estudiar o
satisfacer otras
necesidades.

Asegurar accesibilidad Los grupos poblacionales - Valor promedio de la ca- Sector. ECV.
económica a la discriminados enfrentan nasta educativa financiada
enseñanza básica, barreras económicas, por los padres. Estrato DNP – Misión Social.
mediante la aplicación geográficas, sociales y - Porcentaje de los gastos socioeconómico.
inmediata de su culturales para acceder familiares destinados a la Sistema de información
gratuidad y asegurar la al sistema educativo. educación de los niños y Nivel educativo. del MEN.
accesibilidad física y las niñas. Sector. Sistema de información
geográfica. - Inversión anual del Estado Localidad. de las SE.
por habitante en educación. Nivel educativo.
- Porcentaje de la población Sistema de información
estudiantil que estudia en de las SE.
una localidad distinta a la
de residencia.
- Distancia a la escuela
expresada en minutos.

103
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación

Derecho de Acceso a la Educación. Obligación de Accesibilidad

Implantar un sistema Los sistemas de - Porcentaje de estudiantes Estrato DANE-ECV.


adecuado de becas para subsidios y becas son que disponen de becas de socioeconómico.
las poblaciones más insuficientes frente a la estudios. Sistema de información
vulnerables. magnitud de población Sector. del MEN y las SE.
que no tiene cómo pagar - Inversión del Estado en Motivos de
la educación de los niños subsidios educativos. discriminación Sistema de información
y las niñas y tiene que prohibidos. del MEN y las SE.
retirarlos del sistema Nivel educativo.
educativo. - Inversión promedio en Sistema de información
educación por contratación del MEN y las SE.
de cupos educativos en el
sistema no oficial.
- Total niños y niñas benefi-
ciarios de los programas de
becas contratadas con el
sistema educativo no oficial.

Erradicar el Colombia no ha - Tasa de analfabetismo. Zona DANE - ENH y ECV.


analfabetismo. alcanzado las metas de - Años promedio de escola- Motivos de
alfabetización universal y ridad. discriminación
existen diferencias prohibidos.
notables entre las tasas
de analfabetismo urbano
y rural.

104
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación
Derecho a una Educación Aceptable. Obligación de Aceptabilidad

Establecer y garantizar Los resultados de - Tasa de promoción escolar. Sector. C-600.


que se cumplan normas pruebas nacionales e Localidad.
mínimas de enseñanza internacionales de - Años promedio de escolari- Nivel educativo. Sistema información
en las escuelas públicas calidad de la educación dad para cursar primaria. MEN y SE.
y privadas, y ejercer la evidencian que los niños Sector.
Estrato Sistema información
inspección y vigilancia y las niñas no alcanzan - Años promedio de escolari-
socioeconómico. MEN y SE.
del sistema educativo en niveles mínimos de dad para cursar secundaria.
todo el territorio y en competencia en áreas Sector. Sistema información
todos los niveles básicas del conocimiento, - Tasa de estudiantes gra- Estrato MEN y SE.
educativos, con el fin de como lenguaje, duados, con relación al socioeconómico.
velar por su calidad. matemáticas y sociales. total de estudiantes matri- ICFES.
culados en un período Sector.
académico. Estrato ICFES.
- Resultados de pruebas de socioeconómico.
competencias básicas. Sistema información
Sector. MEN y SE.
Nivel educativo.
- Resultados de pruebas del Estrato
ICFES. socioeconómico.

- Tamaño promedio de los Sector.


grupos. Nivel educativo.
Estrato
socioeconómico.
Sector.
Nivel educativo

Vigilar y garantizar que la Persisten formas de - Quejas interpuestas por Sector. Sistema información
disciplina escolar sea castigo corporal y estudiantes y/o padres de Nivel educativo. MEN y SE.
compatible con la psicológico, como familia ante MEN o SE, Estrato
dignidad humana. mecanismo para relacionadas con maltrato socioeconómico.
promover el orden y la físico o psicológico en los
disciplina escolar.
establecimientos educati-
vos, durante un período de
referencia.

105
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación
Derecho a una Educación Aceptable. Obligación de Aceptabilidad

Velar por que el principio Existen notables - Resultados de pruebas del Estrato Icfes.
de libertad no genere diferencias en el nivel de Icfes. socioeconómico.
desigualdades en la competencia que se - Estudiantes admitidos a las Sector. ICFES y Sistema de
calidad de la educación adquiere en el sistema universidades públicas. Estrato Información del MEN.
que reciben los grupos educativo público y socioeconómico.
poblacionales más privado de alto nivel; en
vulnerables. especial, los colegios
internacionales.

Mejorar de manera Docentes sin título - Porcentaje de docentes que Sector. Sistema de información
continua la capacidad profesional y, lo que es tienen título profesional. Zona. del MEN y SE.
intelectual del cuerpo más preocupante, sin
docente. bachillerato completo, - Porcentaje de docentes Sistema de información
imparten enseñanza. Lo que tienen como máximo Sector. del MEN y SE.
anterior, sin que exista nivel educativo la secunda- Zona.
una estrategia de ria completa. Sistema de información
alcance nacional y local, Sector. del MEN y SE.
para mejorar el nivel - Porcentaje de docentes Zona.
educativo de los que tienen como máximo Sistema de información
docentes. nivel educativo la primaria Sector. del MEN y SE.
completa. Zona.
Sistema de información
- Total docentes que recibie- Sector. del MEN y SE.
ron cursos de formación y Zona.
actualización en un período
de referencia.

- Resultados de pruebas de
evaluación docente.

106
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación

Derecho a Permanecer en el Sistema Educativo. Obligación de Adaptabilidad

Asegurar la permanencia Existen altas tasas de - Tasa de deserción escolar. Sector. C-600.
de los niños y niñas en la deserción escolar y es - Tasa de asistencia escolar. Zona. Sistemas de
educación pública, evidente la ausencia de Nivel educativo. información del MEN
básica, obligatoria y medidas orientadas a - Tasa de supervivencia Motivos de y SE.
gratuita, y adoptar fomentar la permanencia escolar a quinto grado. discriminación
medidas para fomentar la de los niños y las niñas prohibidos. UNESCO.
- Tasa de supervivencia
asistencia regular a las en la escuela. Sector.
escuelas. escolar a once grado. Zona. Sistema de información
- Esperanza de vida escolar. Nivel educativo. del MEN y SE.
- Subsidios educativos para Motivos de
promover la permanencia discriminación
escolar. prohibidos.

Velar por la prestación Existen múltiples motivos - Días de suspensión de Sector. Sistema de información
eficiente y continua del por los que no se clases al año. Causas de del MEN y SE.
servicio público asegura la prestación suspensión.
educativo (CPC, Art. 365; continua del servicio
CC, Sentencia T-516- público educativo; entre
1996, Sentencia T-571- ellos, cabe mencionar el
1999). paro de docentes, la falta
de servicios públicos y
las expresiones del
conflicto armado interno.

Prohibir y eliminar toda Coexisten múltiples - Existe un proyecto o pro- Localidad. Sistema de información
forma de discriminación formas de discriminación grama orientado a asegu- del MEN y SE.
que atente contra la en la escuela, que rar la permanencia de los Localidad.
permanencia de los niños provocan la deserción niños y las niñas en el Nivel educativo. Sistema de información
y las niñas en el sistema escolar de ciertos sujetos sistema educativo. Motivos de del MEN y SE.
escolar. Asegurar que la y grupos poblacionales, discriminación
- Número de niños y niñas
disciplina escolar sea en especial niñas prohibidos.
compatible con la gestantes, personas con que desertaron del sistema
dignidad humana, la discapacidad, personas educativo y que se reintegra-
igualdad de trato y el libre con tradición lingüística ron en un período de refe-
desarrollo de la propia, entre otros rencia, como resultado del
personalidad, y asegurar grupos. proyecto o programa orienta-
el debido proceso en la do a asegurar la permanen-
imposición de sanciones. cia de los niños y las niñas
en el sistema educativo.

107
e d u c a c i ó n y c i u d a d

Niveles de
Obligación Problema de Política Pública Indicador Fuente de Información
Desagregación

Derecho a Permanecer en el Sistema Educativo. Obligación de Adaptabilidad

Asegurar que en los Las escuelas no se - Establecimientos educati- Sector. Sistema de información
centros educativos adaptan, ni en lo vos especializados en la Nivel educativo. del MEN y SE.
públicos y privados se pedagógico ni en lo atención de niños y niñas Tipo de
imparta la enseñanza físico, a las necesidades con discapacidad. discapacidad.
que mejor se adapte a especiales de - Establecimientos educati-
los niños y las niñas. aprendizaje de los
vos que integran niños y
grupos poblacionales Sector.
vulnerables; en especial, niñas con discapacidad. Nivel educativo.
personas con - Establecimientos educati- Tipo de discapacidad.
discapacidad, personas vos que integran niños y
con tradición lingüística niñas con discapacidad, Sector.
propia; personas que disponen de docentes Nivel educativo.
privadas de la libertad. especializados. Tipo de discapacidad.
- Establecimientos educati-
vos que integran niños y Sector.
niñas con discapacidad, Nivel educativo.
Tipo de discapacidad.
que disponen de apoyos
especializados. Sector.
- Establecimientos educati- Nivel educativo.
vos que ofrecen programas
etnoeducativos.

108
d e r e c h o e i n d i c a d o r e s

Tabla 2: modelo de indicadores Dicho indicador puede ser llevado a una es-
desagregados, según obligaciones y cala entre cero y cien puntos, de tal manera que, a
problemáticas del sector educativo mayor puntaje, mayor nivel de realización del de-
recho a la educación. El indicador tendrá la virtud
Es importante mencionar que, una vez se dis- de evidenciar en cuál de los componentes del dere-
ponga de la información para los diferentes indica- cho a la educación se ha avanzado menos, calcular
dores que integran los componentes del derecho, es el déficit para alcanzar las metas por componente
posible elaborar un indicador compuesto para cada –distancia entre el puntaje obtenido y cien– y, ade-
uno de éstos y, posteriormente, un indicador que más, arrojar información sobre la magnitud del dé-
combine los diferentes componentes, con el fin de ficit a nivel global, para alcanzar la meta de realiza-
tener un único valor que dé cuenta del grado de ción del derecho a la educación de todos y todas,
avance en el nivel de satisfacción del derecho a la sin discriminación.
educación preescolar, básica y media.

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110
Pedagogía e investigación
políticas educativas
Luz Amparo Villegas

Licenciada en Educación Lenguas Modernas de la Universidad del Valle. Especialista en Psicopedagogía de


la Universidad Complutense de Madrid. Magíster en Administración de la Universidad del Valle. Candidata a Docto-
rado en Educación de la Universidad del Valle. Profesora Titular del Área de Educación, del Programa de Maestría
en Educación y Desarrollo Humano, CINDE-Universidad de Manizales. Docente en la Maestría de Educación y Do-
cencia en el Area de Pedagogía Francesa. Vicerrectora Académica de la Universidad de Caldas (2001 – 2003).

Resumen

Este artículo expone la importancia de la investigación de los procesos educativos vinculados con las polí-
ticas educativas y plantea la importancia de que ésta se ubique en el lugar que le corresponde. Afirma que de su
institucionalidad estatal, implica tres elementos: el diseño de una acción colectiva intencional y el curso que efec-
tivamente toma la acción como resultado de las decisiones que comporta, y los hechos reales que esa acción co-
lectiva produce en una sociedad verdaderamente democrática. Concluye que la sociedad civil debe participar ac-
tivamente en la definición y acompañamiento de la implementación de políticas públicas.

Palabras clave

Investigación, acción colectiva, políticas públicas, democracia, acompañamiento, portadores de intereses.

Abstract
This article pertains to the importance of research in the area of educational policy and its relationship to
educational processes. It refers to three elements: the design of intentional collective action, the course the action
takes as a consequence of the decisions compromised by it, and the real events that this collective action produ-
ces in a truly democratic society. It concludes that the civil society must actively aprticipate in the definition and fo-
llow-up of the implementation of public policy.

Key words

Research, collective action, public policy, democracy, follow-up, interest groups


a
continuación disertaré sobre el lugar que parte constitutiva integral de las políticas públicas en
ocupa la pedagogía y la investigación en educación y del currículo del Gobierno.
las políticas públicas, pues un estudio de La política, como un comportamiento propo-
la política educativa es un referente principal no sitivo, intencional, planeado, no siempre reactivo,
sólo para comprender la historia de los procesos de casual, que se pone en movimiento con la decisión
intervención educativa, sino para entender la edu- de alcanzar ciertos objetivos a través de ciertos me-
cación como un asunto público y como un sector dios, es una acción con sentido. Además de su insti-
concreto de la política social, como un espacio de tucionalidad estatal, implica tres elementos: el dise-
interacción actual que en Colombia regula la rela- ño de una acción colectiva intencional, el curso que
ción sociedad-Estado. efectivamente toma la acción como resultado de las
La compleja y profunda crisis que afecta nues- decisiones que comporta, y los hechos reales que esa
tro país, inevitablemente ha impactado el desarrollo acción colectiva produce en una sociedad verdadera-
de las políticas educativas. El nuevo contexto político, mente democrática. La sociedad civil participa acti-
social, cultural y económico ha traído cambios que vamente de la definición y acompañamiento de la
afectan de manera profunda la ubicación de la educa- implementación de políticas públicas.
ción en la sociedad. El tema de la educación se ve obli- Según de lo que se trate, se supone, entre co-
gado, así, a superar el carácter meramente sectorial y millas, que detrás de una política adoptada por un
se ha incorporado como un vector estratégico y trans- gobierno ha habido un proceso de negociación con
versal al conjunto de las políticas públicas. las fuerzas y los actores afectados; pero ese proceso,
La educación contribuye al logro de unos obje- al menos en el caso de la educación, muy rara vez lle-
tivos que convocan a la mayoría de colombianos; en- ga a conocerse. Hoy predomina la tesis de que en las
tre éstos se sitúan, en el plano general, el crecimiento sociedades modernas y democráticas las decisiones
económico, la construcción democrática, la supera- sobre políticas públicas deben tener en cuenta el co-
ción de la pobreza y la integración social. En el ámbito nocimiento derivado de la investigación, pues así lo
de la política educativa, se ubican metas como ofrecer requiere la solución de los problemas sociales. En
igualdad de oportunidades y educación equitativa de cambio, en las sociedades premodernas, esas decisio-
calidad, realizar acciones positivas a los grupos más nes son tomadas por personajes políticos en quienes
vulnerables, descentralizar las decisiones educativas, los ciudadanos han depositado su confianza.
atender la diversidad social y cultural, y generar una Los gobiernos de algunos países avanzados
educación pluralista y democrática. Estos han sido han propuesto que sus políticas sociales sean “ilus-

113
e d u c a c i ó n y c i u d a d

resultados de las investigaciones.


En sus estudios, los investigadores
tienden a detectar problemas, a
identificar sus causas y a proponer
soluciones e intentan abordar ob-
jetivamente las deficiencias de de-
sarrollo educativo, consideradas
generalmente desde una visión
normativa o ética, supuestamente
aceptada por todos.
Los agentes de decisión, si
bien reconocen los problemas, los
tradas”; es decir, que estén fundamentadas en inves- abordan desde otras perspectivas
tigaciones sólidas que den cuenta de la realidad. epistemológicas. En ambos grupos falta mayor
Pero es probable que se trate de una tendencia que, información sobre los condicionamientos epis-
en la práctica, se compagine con otros requerimien- temológicos del otro. Los investigadores no
tos de la política real y con un conocimiento cientí- suelen ponderar las dificultades pragmáticas
fico de los asuntos sociales. Por otra parte, no deben de las decisiones de los funcionarios y estos, a
asumirse como desarticuladas de la base social que su vez, no encuentran convincentes ni claros
apoya sus apreciaciones y que demanda el debate los análisis de los primeros, aunque conozcan,
teórico sobre las relaciones entre el conocimiento en términos generales, las conclusiones de las
producido por los investigadores de la educación y investigaciones.
los agentes de decisión política. No es fácil acercar a ambos grupos; uno
No es nuevo comprobar que en Colombia hay tiene prejuicios sobre el otro. Los funcionarios
un impacto escaso de las políticas educativas. Una no leen revistas especializadas ni encuentran re-
hipótesis que trató de explicar este fenómeno, fue levantes los hallazgos de los investigadores; ade-
aquella que planteó la disociación que existe entre el más, encuentran “molestos” algunos de esos re-
mundo de los investigadores y el de los funcionarios. sultados. Los investigadores tienden a asumir
Son dos culturas separadas, sin vínculos suficientes que los agentes de decisión son presa de com-
entre ellos y cada grupo tiene sus propios referentes; promisos con el establecimiento que impiden
de ahí que los funcionarios ignoren o no valoren los abrir innovaciones que rompan con los progra-

114
p e d a g o g í a , i n v e s t i g a c i ó n y p o l í t i c a s

tos como la viabilidad política de


una innovación, los costos de las
coyunturas o la oportunidad.
El escaso impacto de las in-
vestigaciones se explicaría no sólo
por el desconocimiento recíproco
sino por la falta de convergencia
de ambas racionalidades. A esta
hipótesis, que recuerda la incom-
patibilidad localista entre el políti-
co y el científico, se le concede
hoy validez parcial cuando se da el
mas establecidos. Esta primera hipótesis se considera
caso de que la racionalidad pragmática de los fun-
hoy como simplista y poco fundamentada. Sin embar-
cionarios considera viables y convenientes las pro-
go, en ambos grupos hay sujetos que tienen conoci-
puestas de los investigadores y abre la puerta a su
miento, experiencia y sentido de pertenencia desarro-
aplicación. Entonces puede aprovecharse el acer-
llados hacia el otro grupo. Las identidades profesiona-
vo de conocimientos acumulados por la comuni-
les de investigadores o funcionarios no son inmuta-
dad educativa, pero la hipótesis no explica el pro-
bles ni impermeables a los puntos de vista del otro
blema.
grupo. De hecho, existe evidencia de que quienes to-
La búsqueda de explicaciones más convin-
man decisiones conocen, en lo sustancial y respecto a
centes en el debate de hoy, dirige su atención a los
los principales problemas que manejan, los resultados
escenarios relacionados con las características de
de las investigaciones.
los regímenes políticos. Se sostiene que hay mayor
Una segunda hipótesis postuló que la razón del
probabilidad de que el conocimiento especializa-
escaso impacto del conocimiento especializado sobre
do sea tomado en cuenta en las políticas públicas,
las políticas radicaba en las diferentes racionalidades
cuando existe un régimen democrático en el que
de ambos grupos. En este sentido, los investigadores,
las decisiones gubernamentales proceden de pro-
siguiendo una lógica científica, abordan las situacio-
cesos participativos en los que la sociedad, y, en
nes críticas del desarrollo educativo como problema,
ella, los investigadores, expresan sus posiciones.
identifican sus causas, aducen evidencias empíricas
Este es el sentido de los diálogos informales que
de estas y, con base en ello, formulan propuestas de
hoy se promueven entre investigadores y políticos
reforma, mientras que los funcionarios valoran aspec-

115
e d u c a c i ó n y c i u d a d

de la educación. Asimismo se señala


que, según las características de cada
régimen político, los resultados de
la investigación educativa pueden
ser incómodos al estatus quo guber-
namental, y tener consecuencias po-
tencialmente destructivas en el pla-
no electoral. La identificación de
esta barrera a los usos de la investi-
gación educativa podría abonar ex-
plicaciones más completas a la natu-
raleza del problema.
Tradicionalmente, se ha soste-
nido que el impacto de la investiga-
ción educativa depende de que se
den componentes como la genera-
ción adecuada de conocimiento, el
proceso de plantación educativa, el
desarrollo de los métodos y sistemas educativos y de validación o corrección de sus paradigmas, y el del
las tecnologías, y la intervención de los agentes de apoyo que brinden los agentes de decisión a los re-
decisión con actitudes favorables hacia la investiga- sultados de la investigación educativa.
ción educativa. Pero no se trata de un problema téc- Este sería un esquema teórico más completo y
nico; el proceso es bastante más complejo, toda vez adecuado para explorar la repercusión de la investiga-
que existe una retroalimentación entre varios de es- ción de políticas desde la perspectiva de la participa-
tos componentes. Lo más importante corresponde a ción. Podría pensarse que una política gubernamental
las actitudes, valores y motivaciones de los actores ideal en una sociedad democrática sería aquella que
que intervienen. tuviera en cuenta los intereses de todos los segmentos
Pero el impacto de la investigación depende de de la sociedad y los satisficiera, así respondería a esos
tres procesos: el político, o sea de la convergencia en- intereses identificados. Hoy se denominan stell golders,
tre los valores de los investigadores y los juicios de o portadores de intereses, a los sujetos sociales que tie-
oportunidad de los funcionarios; el científico, como nen legítimo interés en la educación nacional.

116
p e d a g o g í a , i n v e s t i g a c i ó n y p o l í t i c a s

La tarea de un gobierno democrático consistiría


en negociar con ellos y conciliar sus puntos de vista.
Pero este sería considerado más como un agente inter-
mediario, que como una autoridad que se ajuste a un
programa propio. Sin embargo, como ya se anotó, los
intereses de los stell golders deben conciliarse con el
propósito del Estado, en el supuesto de que éste obe-
dece a valores éticos de equidad y justicia social.
Ahora bien, pensemos que toda experiencia
nos hace volver la mirada hacia los lugares donde se
genera la educación y la enseñanza, así como hacia
los intentos de reforma escolar orientados a mejorar
la equidad, la calidad y la participación profesional
de los docentes, lo cual nos hace pensar que los cam-
bios tienen que emerger de una cotidianidad cultu-
ralmente ‘repensada’.
Allí se pueden encontrar pistas para ‘refun-
dar’, con un sentido de largo aliento histórico, una
recuperación innovadora de las tradiciones y, al mis-
mo tiempo, para tener la oportunidad de acercarnos
con más apertura y humildad a los procesos escola-
res y educativos. En ese peregrinar, la recuperación
del saber pedagógico y la pedagogía nos pueden ayu-
dar a comprender cómo los intentos de reforma, in-
novación y cambio se dan en el contexto del campo
intelectual de la pedagogía. Este se entiende como
un espacio epistemológico, como un estudio de la
naturaleza del saber pedagógico; mientras que la pe-
dagogía, se entiende como ciencia y como disciplina.
En estos tiempos, caracterizados por los encuentros
disciplinarios, se despliegan las más diversas forma-

117
e d u c a c i ó n y c i u d a d

ciones del saber, paradig- quiere un trabajo de investi-


mas, teorías y políticas; es gación y de reflexión cuyo
decir, es el terreno en don- eje fundamental sería la Ex-
de se juegan las reformas, pedición Pedagógica.
los estilos de lecturas y los Los rasgos básicos
campos de experimenta- que le han dado vida a este
ción y de aplicación. movimiento se pueden re-
El campo permite el coger como aportes que fe-
‘interjuego’ de conceptos cundan el trabajo pedagó-
y su reconceptualización gico en el mundo. Esta ex-
de acuerdo con los contex- periencia demostró las po-
tos, y abre caminos para la sibilidades de la aparición
interdisciplinariedad, es- de un horizonte cultural,
pecialmente en disciplinas pedagógico, social y cientí-
como la psicología, la so- fico que dio lugar la con-
ciología y la antropología junción de un espacio de
simbólica, que de una u encuentro para recuperar
otra manera trabajan con la naturaleza del pensa-
conceptos como la forma- miento pedagógico.
ción, la enseñanza y el aprendizaje. Esto facilita rea- La pedagogía, el saber pedagógico y el encuen-
lizar programas integrados de investigación. tro de la intelectualidad colombiana ligada a la edu-
Una reforma con sentido histórico arraigada en cación con los actores de la experiencia cotidiana:
la cotidianidad se caracteriza por la emergencia del los maestros –a manera de organización gremial que
campo intelectual de la pedagogía, y por la formación recoge las reivindicaciones dignificadoras del docen-
de un nuevo horizonte que sirve de trasfondo para mi- te– generaron un abanico de formaciones discursi-
rar y leer la tradición y su renovación. vas que permitió socializar saberes y enfrentar una
Mi visión se nutre de los aportes y reflexiones reforma educativa que, para la época, deslegitimiza-
para recuperar la pedagogía y el saber pedagógico que ba la creación pedagógica como cultural y disciplina-
se produjo en Colombia a partir del año 1980, con el ria, rica en posibilidades. Esto, en relación con la
surgimiento del Movimiento Pedagógico. Podemos tecnología educativa conductista, en el currículo,
sostener que, en América Latina, la aparición de una como dispositivo discursivo dispuesto desde organis-
fuerza cultural y pedagógica desde la entraña de la co- mos internacionales, que han generado, en las dis-
tidianidad constituye una experiencia inédita, que re- tintas reformas latinoamericanas, una suerte de eu-

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p e d a g o g í a , i n v e s t i g a c i ó n y p o l í t i c a s

femismo que niega la palabra y la experiencia peda- intelectual de la pedagogía, abierto a lo plural y a la
gógica en su polifonía, en el campo intelectual de la diferencia, sea capaz de fecundar la vida cotidiana en
educación y la pedagogía. Este es un campo plural, todas sus dimensiones, conjugando la capacidad
abierto y diverso, formado a través de múltiples ten- ‘logo-mítica’ conceptual, para trabajar con las contin-
dencias, orientaciones y paradigmas. De ahí, su na- gencias que emerjan en el proceso; que sea capaz de
turaleza compleja, las exigencias del diálogo y, espe- situarse en el mundo, en estos tiempos donde los ac-
cialmente, la búsqueda de espacios de encuentros que tores se mueven en direcciones inéditas.
permiten acuerdos, por transitorios que sean. En este contexto, y para provocar un cambio
Esa es la historia de los nuevos tiempos en la profundo en la educación del país, es fundamental
educación, en la enseñanza, en los tiempos actuales tener constancia en el terreno de la investigación y
de Colombia donde se vive una crisis histórica que, en el seguimiento de los problemas y de las políticas
como vivencia, es inédita para muchos de nosotros. que surgen en el ámbito local, regional, nacional e
La educación se ha convertido en un espacio de internacional.
grandes crispaciones, donde la naturaleza socio polí-
tica de los sistemas escolares ha reco-
gido y condensado las honduras del
despliegue de un proceso que mueve
incontables fuerzas e intereses.
Una mirada a los conceptos
del campo intelectual de la pedago-
gía de hoy nos permitiría reconocer
que existen puntos para acuerdos mí-
nimos en el sistema escolar. Me atre-
vo a decir que estamos débiles en una
política de gran alcance que respon-
da por los niños y jóvenes incorpora-
dos en el sistema, y éticamente por
aquellos que están excluidos del acce-
so a cualquier bien cultural.
La responsabilidad comparti-
da hoy es la construcción de una po-
lítica educativa que, sustentada en
un horizonte cultural y en un campo

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