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MECHIALOGÍA .
MECHIALOGÍA .
TRATADO

DE LOS PECADOS CONTRA EL SESTO Y NOVENO


MANDAMIENTOS DEL DECALOGO ,

DE TODAS LAS CUESTIONES MATRIMONIALES


QUE CON ELLOS SE ROZAN DIRECTA O INDIRECTAMENTE ;
SEGUIDO

DE UN COMPENDIO DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA .


Obra puesta a la altura de las ciencias fisiológicas , naturales, médicas y de la
legislacion moderna

(DESTINADA ESCLUSIVAMENTE AL CLERO )

Por p . 3. C . Debreyne,
Doctor en medicina de la facultad de Paris, profesor particular demedicina práctica ,
sacerdote y religioso de la Gran Trupa (Orna) ;
Traducida de la segunda edicion , revisada , corregida , y
considerablemente aumentada .

Ecce hoc , ut investigavimus , ita est


quod auditum , mente pertracta .
(JOB V, 27.)
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Di

CON LICENCIA .

BARCELONA:
75
19

IMPRENTA DE PONC .*, Calle De Copons,


1854 * *

R . 36.763
i es cierlo , como no es lícito dudarlo , que todas las verdades
tienden y gravitan hácia su centro comun , que es Dios , es in
contestable que no hay ciencia alguna en que esa convergencia sea
tan' evidente y tan fácil de comprender a todos los espíritus justos
como en la ciencia que tiene á Dios y la religion por objeto , y que
certifica y arregla las relaciones del hombre con Dios .
Esta ciencia es la teologia , que es la ciencia mas necesaria al
hombre , puesto que le presenta la mayor suma de verdades nece
sarias á su existencia tanto física como moral , sin las cuales infali
blemente pereceria ; pues es evidente que sin Dios ó sin ningun sen
timiento divino , el hombre no podria vivir , ni aun físicamente.
Si fuese posible encontrar en el globo un pueblo enteramente ateo ,
sin ningun sentimiento religioso ó sin ninguna idea de la Divinidad ,
estos hombres , sin duda alguna , acabarian por destruirse com
pletamente unos a otros. ..
La teología , considerada á punto de vista de su objeto directo ,
es no solamente la ciencia vital y conservatriz de la humanidad , sí
que tambien el mas elevado poder social y civilizador que se puede
haber dado al hombre para realzarle , ennoblecerle y perfeccionarle.
- Probad el sustraer a ese rey decaido del dulce y benéfico impe
rio de la religion , y al momento le vereis , que presuntuoso , indi
ferenle y soberbio , traspasa todos los límites , y se precipita brutal
menle en el abismo de todos los vicios y de todos los desórdenes ,
- Vi -
para abrevarse de oprobio y de ignominia . Cùm in profundum venerit
peccatorum contemnit : sed sequitur cum ignominia el opprobrium .
(Prov . XVIII, 3 .)
Es pues necesario estudiar con cuidado los desvíos y las aberra
ciones morales de la humana paturaleza , á fin de que este estudio
analítico contribuya á rehabilitarla y á que vuelva a entrar en el
sendero de la verdad y del órden , esto es , de la virtud .
Elobjeto de este trabajo es tomar al hombre tan solo por su lado
carnal y animal; considerarle en el estado de servitud y abyec
cion en que le encadena inexorablemente el tiránico imperio de sus
sentidos; contemplarle en fin con un sentimiento de dolorosa compa
sion en el estado de degradacion moral á que le han reducido unas
pasiones viles y brutales .
Seguiremos pues à la humanidad en la cenagosa senda del vicio
vergonzoso de la carne ; andaremos por ese camino sombrío y me
fítico de la muerte, llevando siempre delante la antorcha de las cien
cias fisiológicas y médicas.
Cuando hayamos puesto el pié en el terrenomovedizo de las opi
niones humanas , nos veremos algunas veces obligados á apartarnos
del camino que trillaron nuestros antepasados ; es decir que , de un
lado, dejaremos todos los puntos contestables en el estado de opinion
libre, y con auxilio de las leyes fisiológicas elevaremos algunos al
rango de principio ; y de otra parte , algunas veces destruiremos
proposiciones erigidas en principio por una ciencia inexacta ó falsa y
contraria á las leyes del organismo humano ó á la observacion pa
tológica ( ) .
Tal vez este lenguaje podrá parecer algo estraño ó aun presun
luoso á algunos espíritus distraidos ó preocupados..... Léjos de mí
todo deseo de dogmatizar ó de innovar :mas sin embargo debo decir
aquello que creo es la verdad . Por otra parte únicamente escribo ba
jo el imperio de mis propias é íntimas convicciones , las que juzgo
( 1 ) Si he adquirido alguna esperiencia en esta materia , no la debo tanto al
confesionario (si bien hace ya mas de veinte y cinco años que ejerzo el minis .
terio de confesor) como a los muchos casos de conciencia y á las dificultades
de toda especie sobre que he sido consultado durante muchos años por muchi
simos eclesiásticos de varias diócesis .
- VII –
inalterables , porque, en los puntos que presento como nuevos , es
lán fundadas sobre dalos fisiológicos y patológicos , que tarde o tem
prano darán a esos nuevos principios su pleno y completo desarrollo .
Son unos principios que resistirán al poder destructor de los siglos ,
porque no dimanan de sí propios, sino de la ciencia misma del hom
bre ó de las leyes del organismo humano. De ahídeducirá ya el lec
lor que este nuevo libro no serámas que el complemento ó la entera
esplanacion de nuestro Ensayo sobre la teologia moral , ó por mejor
decir vendrá á ser su segundo tomo.
Ya dije en otra parte y aquí lo repito , que ha llegado ya el tiem
po de hacer entrar la enseñanza de la teologia moral en una nueva
senda , en una senda de luz y de progreso , á que nada puede opo
nerse en adelante ; esta es una necesidad de nuestra época y de nues
tras costumbres que es indispensablemente preciso aceptar ó sufrir .
La fuerza de las cosas y de la verdad nos impone, so pena de una
esterilidad mortal , esta imperiosa y precisa necesidad . En vano al
gunos ancianos del santuario querrán oponerse á ella (*) ; pueslu
charán inútilmente contra el movimiento progresivo de su siglo ; se
verán asediados por todas partes por una nueva generacion clerical
y por la fuerza irresistible de las ideas y de la opinion . No se enca
dena á las jóvenes y vivas inteligencias a la manera que se sujeta la
enseñanza de la escuela. Pormas que se diga y se haga , el espíritu
humano seguirá su marcha progresiva ; sacudirá todas las trabas
que estorben su camino , abriéndose paso a través de todos los obs
láculos que se le presenten .
En cuanto a los que tal vez contestaren la oportunidad de esta pu
blicacion , ó que pretestaren que para eso carecemos de título , de ca
rácter y de mision , los diremos : no reconozco en vosotros otro de
recho que elde leerme y refutarme. Refutadmepues , y os contes
taré. A eso queda reducida toda la cuestion .
Por otra parte siempre recibiré con placer y agradecimiento las ob
servaciones que se tenga á bien dirigirme , y me aprovecharé de
cllas por el interés de la verdad y de la ciencia .
Si algunos críticos voltairianos, fieles a la máxima de su maes
) Téngase presente que el autor escribe en Francia .
- VIII —

tro, me calumniasen , fiel tambien á la palabra del mio , les compa


deceré sin temerles , y rogaré por ellos : Orate pro calumniantibus
vos. No , no temeré la calumnia ; despreciaré los ataques de la im
piedad , del racionalismo y del materialismopanteístico . Miraré con
desden esas tristes producciones literarias , ese pasto inmundo que
cada dia se arroja á las inteligencias sedientas de cinismo y de es
cándalo (folletonismo), y donde , como dijo no ha mucho un sabio
obispo, todos los vicios tienen sus cuadros vivos, y todos los actosmas
vergonzosos su apologia . Esas deplorables ficciones de talentos deli
rantes , almenospreciar todo sentimiento de honestidad y de pudor ,
no hacen salir resplandores sino de la corrupcion misma, como aque
Hlas pálidas luces que , en una noche oscura , vemos desprenderse
de los cadáveres corrompidos : son los resplandores del sepulcro . Po
demos decir con un poeta aleman que la luz de la impiedad carece
de fuego , como la de la leña podrida; y que su fuego carece de luz,
como el de la fiebre : es pues una luz de muerte y un fuego de des
órden y de ruina .
Ultimamente pudisteis oir como esas voces burlonas , insultantes ,
blasfemas y sacrílegas, rugian como una tempestad contra la ense
ñanza católica , llamándola á la barra del pueblo. Sin duda el hecho
no es nuevo. Estranjera en este mundo , la Iglesia en todas épocas
estuvo espuesta a toda especie de insultos y de ultrajes . Pero lo que es
nuevo , lo que hay que estrañar entre todas las cosas estrañas de es
le siglo , es el que se encuentren hombres que han perdido el sentido
del pudor, y se venden por vigilantes de la castidad católica . Han
pasado su vida sumergidos en el cieno de los sentidos ; su talento
solo se ha dedicado á esplotar la materia... ¡ Y quién podrá creerlo !
esos hombres se atreven á acusar el episcopado francés de que aho
ga , con la enseñanza de los grandes seminarios, en el corazon de
los jóvenes levitas , lo que ha sido llamado la virginidad del senti
miento !
¿ Acaso esmatar la virtud en los jóvenes levitas el revelarles el
abatimiento moral, los infames misterios que hay en este mundo im
puro que ellos están llamados á devolver al reino de la verdad y
de la virtud ?
- IX –
- Luego tambien considerariais manchada la inteligencia y la virtud
de todos aquellos jóvenes dedicados á curar las enfermedades corpo
rales iniciándoles por muchos años en el triste y asqueroso espectá
culo de las dolencias humanas !¿ Por ventura los estudios delmédico
no tienen tambien su peligro ? Sin duda alguna ; y este peligro es in
contestablemente mas cierto , mas real, y mas presente ; porque en
los estudios médicos uno no se ejercita sobre ideas y principios pu
ramente especulativos , sino que trabaja sobre realidades, materiales
y vivas: todo pues puede convertirse en escollo , lazo y peligro en la
enseñanza médica , y sin embargo nada tienen que reprender en ella
aquellos hombres hostiles á la educacion del clero.
Mas yo pregunto į á quién , en general , convendrá mejor aplicar
el célebre dicho de S . Pablo , omnia munda miundis , á los discípulos
del santuario , ó á los discípulos de la medicina ? Sabido es que el
médico no vemas que los hechos materiales, y no busca sino los me
dios de prolongar por algunos dias esta vida pasajera , al paso que
el joven candidato del santuario estudia los hechos con un fin moral,
es decir, á punto de vista de la verdadera y perfecta moralizacion del
hombre : trabaja pues para que el espíritu triunfe de la materia , es
decir, para la conquista de la parte mas noble del hombre, mientras
que elmédico solo aspira a salvar la cubierta terrestre y animal del
hombre.
Así pues , en vez de vituperar los estudios del clero y de calum
niar la enseñanza teológica de los seminarios, todos esos nuevos Aris
tarcos que de repente se han lanzado sobre los libros de los teólogos
para desfigurarlos y desnaturalizarlos , sin comprender nisu doctri
na , ni su espíritu , ni aun su lenguaje , puesto que toman pensa
mientos por actos materiales o pecados de intencion por pecados de
accion ; esos escritores , digo , ignorantes ó de mala fe , en vez de
calumniar lo que saben ó de blasfemar de aquello que ignoran, pro
barian mejor su amor á la verdad , á la humanidad y á la dicha de
la sociedad , si clamasen contra el vicio y la corrupcion de las cos
lumbres, que han hecho de estos estudios una triste v deplorable ne
cesidad .
Pero , finalmente , ¿ de qué sirve el lamentarse ? ( Acaso el tiempo
- X
no vendrá en nuestra ayuda para condenar todas las malas pasiones
que con tanta impudencia se han desencadenado para atacar la en
señanza teológica del episcopado francés ? Las palabras de odio y de
mentira , los escritos de los sofistas y de los pamfletarios pasarán y
vendrán á estrellarse en la elevada y poderosa palabra de los depo
sitarios de la verdad ; esta palabra doctrinal de los pontífices del Se
ñor se ha dejado oir á lo lejos : In omnem terram exivit sonus eo
rum ..... (Ps. 18 ) ; y esta viva y sonora palabra permanecerá , por
que ha sido proferida en nombre de Aquel cuyas palabras jamás pa
sarán .
MECHIALOGÍA .

REFLEXIONES PRELIMINARES
SOBRE EL PECADO DE LUJURIA EN GENERAL.

TINTIÉNDESE por lajuria todo pecado contrario á la castidad : castitati


Lopponitur luxuria , quæ est inordinatus appetitus seu usus venereo
rum ; ó mas claro : appetitus inordinatus delectationis venerea . Así es ,
como la definen los teólogos.
SUS .

Todo pecado de lujuria o de deleite carnal es mortal por su natura


leza ; no admite parvedad de materia , á lo menos cuando se opone
directamente a la castidad ; cùm sit directè intentum vel volitum in se.
La lujuria , digo, es ex genere suo, como dicen los teólogos, un peca
do mortal. El apóstol S . Pablo , en su Epístola a los Gálatas , pone el
pecado de lujuria en el número de aquellos que escluyen del reino de
Dios . Todos los Padres de la Iglesia y todos los teólogos están confor
mes en este punto . Finalmente la razon misma sanciona esta verdad
inmutable : delectatio venerea ad solam generis humani propagationem
indulta est ; ergo ipsius inversio ex natura sud gravis est inordinatio ,
ac proindè peccatum mortale ; ergo , etc .
Hemos dicho que el pecado de lujuria no admite parvedad de ma
teria . Bastante se conoce que bajo este concepto , no tratamos aquí
de los pecados de lujuria consumada. Solo hablamos pues del deleite
carnal, libidinoso , quæ , segun el lenguaje de los teólogos , sentitur
circa partes venereas, et oritur ex commotione spirituum generationi
inservientium . Conservamos esta espresion aunque muy poco fisioló
gica , porque espresa suficientemente lo que pasa en los órganos. Este
deleite enteramente carnal , diferente del deleite natural y orgánico
de que luego hablaremos , no admite parvedad de materia , como se
ve en el decreto que condena la proposicion siguiente : « Est probabi
MOECHIALOGIA .
Jis opinio , quæ dicit esse tantùm veniale osculum habitum ob delec
tationem carnalem et sensibilem quæ ex osculo oritur , secluso peri
culo consensûs ulterioris et pollutionis.» (Decreto de Alejandro VII.)
El deleite natural y orgánico, como dicen los doctores , es aquel
que tiene lugar sin ningun movimiento desarreglado, quæe sine ulla
sensus genitalis commotione oritur , ex sola proportione objecti ad sen
sum , vel ex conformitate rei visæ auttactæ cum organo visus vel tactus.
«Unde— comodice Billuart — non peccat,nisivenialiter,qui aspicitpul
chram mulierem , aut tangit ejus manum seu faciem , præcisè propter
delectationem merè organicam seu sensualem . » El deleite orgánico
tambien puede tener lugar in osculo dato puero decoro , y en otras
muchas circunstancias. Admítese pues la parvedad de la materia en el
deleite puramente orgánico y natural, con tal que no haya peligro de
que pase á ser deleite carnal. A delectatione sensuali ad veneream ,
maximè in sensu tactus aut visus , facilis est progressus , dice Billuart.
Otros teólogos , entre ellos S. Ligorio , pretenden , si bien con al
guna modificacion , que no hay parvedad de materia en el deleite na
tural y sensible (orgánico). « Non datur parvitas materiæ in delecta
lione sensibili , sive naturali , nempè , si quis delectetur de contactu
manus feminæ , prout de contactu rei lenis , putà rosæ , panni seri-
cis , et similes .... Ratio , quia tactus, secundùm quod sunt delecta
biles juxta sensum tactûs puellæ , vel adolescentis , per se ad pollu
tionem ordinantur.. . quia ob corruptam naturam est nioraliter impos
sibile habere illam naturalem delectationem , quin delectatio carnalis
et venerea sentiatur , maximè à personis ad copulam aptis , et maxi
mè si actus isti habeantur cum aliquo affectu et morà ... Notandum
vero aliud esse — añade elmismo teólogo - agere propter delectationem
capiendam , aliud cum delectatione , quæ consurgit ex qualitatibus
corporibus annexis , in quâ benè potest dari parvitas materiæ , si de
lectatio sit merè sensibilis , sive naturalis; modò non sistas,in eâ , sed
in tactu delectationis detesteris , alias non ageres cum delectatione ,
sed propter delectationem ; quod non potest esse sejunctum à periculo
incidendi in delectationem veneream . » (Lib . II, n .° 416 .)
Pensamos, con Sanchez , Billuart , Collet ,monseñor Bouvier y otros
muchos teólogos, que puede admitirse la tenuidad de materia en el
deleite puramente natural y orgánico , porque un deleite de esta na
turaleza no es intrínsecamente malo en sí ; es el fin legítimo de los
sentidos, sensu genitali secluso . Sin embargo, el deleite orgánico, aun
que honesto y tolerable á punto de vista leórico, es muchas veces muy
peligroso en la práctica , á menos que sea de cortisima duracion .
A más de que rara vez se halla exento de todo pecado : propter ip
REFLEXIONES PRELIMINARES.
sius affinitatem cum delectatione carnali vel veneređ , et quandò moro -
sè fit , præsertim in taclu, eam à mortali non facilè excusant Billuart,
D . D. Bouvier et alii multi non rigidiores theologi, nisi fortè, in
quiunt , defectu advertentiæ vel consensus.
En cuanto á esto haremos observar que hay individuos de tal ma
nera organizados para quienes casi todo deleite orgánico voluntario
viene á ser un escollo muy peligroso en que tropieza y se estrella su
frágil virtud . Aun hay mas, hemos encontrado personas muy nervio
sas y de tal manera sensibles é impresionables que no solamente el
deleite orgánico ordinario , como la vista pulchræ mulieris , sino tam ·
bien la idea , el recuerdo , la voz de una mujer , un objeto femenino ,
menos que todo eso , una sombra, un fantasma , un nada les ponian
en tal perturbacion erótica que llegaba algunas veces hasta á la con
taminacion corporal. Esto se aplica igualmente y aun mas á las mu
jeres , puesto que , como es sabido , la mujer es por lo comun mas
nerviosa que el hombre , ó por mejor decir , hallándose toda ella ama
sada de pervios y de sensibilidad , es el ser mas sensible é impresio
nable de la naturaleza viviente . Con harta frecuencia en la mujer el
sentimiento erótico no se ciñe al sentido genital ; embarga todo su
cuerpo y domina todo su ser físico y moral. De ahí proviene á menu
do la erotomania , ó mas bien la nymfomanía ó el furor uterino. (Véa
se mi Ensayo sobre la teologia moral, 4 .a edicion. )
Finalmente puede referirse ó á lo menos añadirse á lo que acaba
mos de decir acerca del deleite natural ú orgánico , los abrazos amis
tosos, en clase de saludo , segun la costumbre y uso del pais. Ordi
nariamente esas especies de demostraciones de urbanidad o de afecto
escluyen toda falta hasta la venial. « Oscula , amplexus , tactus in
partibus honestis , si fiant tantùm officii moris aut consuetudinis pa
triæ , aut urbanitatis , amicitiæ , reconciliationis causâ , etiamsi sub
oriatur delectatio venerea , modò statim reprimatur , non sunt pec
cata . (S . Thomas, S . Antonin , S . Liguori , Sylvius , Billuart, etc.) In
iis tamen sedulò servanda est decentia statûs ; quod enim licitum est
laicis dedecet in clericis , et maximè religiosis.» — « Cavendum est
dice monseñor Gousset en su Teologia moral - ne aspectus , oscula ,
tactus , etiam ea quæ licita sunt, fiant cum nimiâ morâ aut nimio
ardore, propter periculum commotionis carnalis , quam vitare debe
mus in quantum potest.>>
CE

PARTE PRIMERA.
DE LA LUJURIA CONSUMADA Y NO CONSUMADA .

La lujuria se llama consumada cuando va hasta ad seminis effusio


nem ; no consumada cuando no llega á tal estremo.

CAPITULO 1.
DE LA LUJURIA CONSUMADA .
Los pecados de lujuria consumada se dividen en pecados contra la
naturaleza y en pecados segun la naturaleza, lo que dará materia á
dos artículos.
* ARTICULO I.
DEL PECADO DE LUJURIA CONTRA LA NATURALEZA .

A este pecado se le llama contra naturaleza , porque consiste in se


minis effusionemodo generationi contrario ; ó en otros términos, porque
es opuesto al fin á que semen humanum à naturâ destinatum est. Son
tres sus especies : la polucion , la sodomía y la bestialidad. De ellas
trataremos en tres párrafos distintos .
S . 1.
De la polucion en general.
Lo que los teólogos entienden por polucion , es la masturbacion , el
onanismo solitario , la incontinencia secreta , la mollities, etc ., es decir ,
voluntaria seminis effusio extra copulam .
El semen humanum ó el esperma humano es un humor viscoso , es
peso , de un olor especial, sui generis, bastante conocido. El esperma
normal , perfectamente elaborado , contiene unos animalillosmicros
cópicos llamados zoospermas por los naturalistas. Esos animalillos es
permáticos no aparecen antes de la pubertad , desaparecen durante el
estado de enfermedad y no se observan durante la vejez. El humor de
la destilacion , como dicen los teólogos , tampoco los contiene , puesto
PART. I. CAP. I.
que esa escrecion ureteral no es verdadero esperma, sino tan solo el
producto de la secrecion de la glándula prostática y de lasmembranas
mucosas de la urétera .
Aqui tan solo hablaremos de los desórdenes fisicos y morales que
produce la masturbacion , esta degradante y tiránica pasion , este azo
te destructor , este horroroso cáncer en fin que devora viva la juven
lud de uno y otro sexo. Para esos tristes y deplorables detalles referi
mos al lector á nuestro Ensayo sobre la teologia moral ( cuarta edi
cion ).
Aquí pues no trataremos de la polucion sino considerada como pe
cado, es decir , de la polucion voluntaria ó de la masturbacion , que es
un mal esencial, intrínseco , y de consiguiente prohibido por el dere
cho natural, jure naturali.
Esta criminal y vergonzosa práctica nunca puede ser autorizada ni
siquiera por los mas poderosos motivos , tales como el recobrar la sa
lud y aun el evitar la muerte .
Lamasturbacion , el onanismo solitario ó la polucion se divide 1.° en
polucion simple y calificada , como dicen los teólogos, ó por mejor de
-cir compuesta , puesto que encierra una doble malicia ; 2.° en polucion
voluntaria é involuntaria ; 3.° en polucion voluntaria directa ó en sí, y
en voluntaria indirecta ó voluntaria en su causa.
La polucion simple es aquella , que , en estilo teológico , aliam ma
litiam non habet adjunctam , ut si quis , nullo personali vinculo ligatus,
in propriâ delectatione suâ sistens , corpus suum polluat.
Llámase polucion calificada ó compuesta cuando encierra una doble
malicia : primero la de la polucion simple á la cual se añade otra ma
licia , ex parte objecti cogitati vel concupiti , vel ex parte polluti vel pol
luentis. 1 .° Ex parte objecti cogitati pollutio induit malitiam adulterii,
incestus , stupri, sacrilegii , etc. , prout se polluens cogitat de conjugata ,
de consanguineâ , de virgine , de persona Deo sacrâ , etc. ; 2.° ex parte
polluti autpolluentis , si nempè sit conjugatus, aut Deo per votum vel per
ordinis sacri susceptionem consecratus : nam explicando sunt conditio
nes personæ polluentis aut pollutæ , utpotè superaddentes malitias specie
diversas. Item omnes supradictæ circumstantiæ necessariò aperiendæ sunt
in confessione, quia speciem peccati mutant etmaliliam addunt. .
La polucion voluntaria es aquella que se hace con intencion directa ,
ó cuya causa se busca voluntariamente ; es involuntaria si tiene lugar
sin la cooperacion de la voluntad , ora sea en estado de vigilia , ora
sea durante el sueño.Nada diremos tocante á esta última , porque no
es pecado. Solamente hablaremos : 1 .° de la polucion voluntaria en si
ó directamente querida , ó sea la masturbacion ; 2 .° de la polucion vo
MOECATALOGIA .
luntaria en su causa , ó querida indirectamente ; 3.° de la polucion
nocturna ; 4 .° de la polucion diurna ; 5.° de los movimientos desorde
nados; 6 .° del comportamiento que ha de observar el confesor para con
los masturbadores : 7.º de la masturbacion considerada en el sexo fe
menino ; 8 .° de la polucion nocturna y diurna en la mujer .
SECCION I.
El onadismo solitario , la masturbacion o la polucion voluntaria en sí ó querida
directamente (mollilies).
Como ya hemos dicho , este es un pecado por su naturaleza mortal y
contrario a la naturaleza .
La santa Escritura declara que es detestable la accion de Onan , qui
semen fundebat in terram (Gen. 38). El apóstol S. Pablo dice : Neque
adulteri neque MOLLES regnum Dei possidebunt. (1. Cor. 6 .) Inocencio X
condenó la siguiente proposicion de Caramuel : Mollities jure naturæ
prohibita non est; undè si Deus eam non interdixisset , sæpè esset bona,
et aliquandoobligatoria submortali.
El onanismo es una especie de acto vergonzoso manual que podria
llamarse incompleto , pervioso , seco , enteramente parecido en cuanto
á la forma esterior , si así puede decirse, á la masturbacion propia
mente dicha , pero con la diferencia que el acto no llega á consumar
se. Ese estado de eretismo ó de agitacion mas o menos violenta esci
tada por la pasion es ya un gran desórden y una falta muy grave, aun
que menor que el crimen del onanismo consumado , en que la pasion
queda plenamente satisfecha. En este último caso , la falta es gravísi -
ma en su especie . Bueno será hacer observar que aquella especie de
masturbacion nerviosa é incompleta no deja de ejercer una influencia
muy funesta en todo el organismo, y por consiguiente en la salud en
general, como lo prueba la masturbacion en los impuberes ó mucha
chos todavía incapaces de secrecion seminal.
SECCION II.
De la polucion voluntaria en su causa ó querida indirectamente.
Esta es la polucion propiamente dicha que definimos por toda eva
cuacion espermática , sea pocturna ó diurna, material y actualmente
involuntaria. No es la masturbacion que se deriva de manustrupatio,
palabra cuyo significado todo el mundo comprende. Esta especie de
polucion reconoce dos causas : la una próxima y la otra remota . La
causa próxima es aquella que, por su naturaleza , induce directa y no
tablemente á la polucion , ut, v . g., organa genitalia propria vel alie
PART. I. CAP. I.
na conspicere, verba obscena proferre , cogitationes valdèturpes in mente
morosè pervolvere, etc.
La causa remota no produce directamente la polucion ; pues solo la
ocasiona por accidente y contra la intencion de las personas. Estas es
pecies de causas son por lo comun un esceso en el beber y en el comer ,
el estudio de materias eróticas , el oir confesiones , la equitacion ó el
ejercicio á caballo , etc .
Esas diversas causas pueden ser , como dicen los teólogos, ó lícitas,
ó venialmente malas, ó mortalmente malas. Tambien son relativamen
te mas ó menos próximas y mas ó menos remotas, como las mismas
causas próximnas, segun su intensidad , los temperamentos , el ca
rácter , las disposiciones, la sensibilidad y la impresionabilidad de las
personas.
Para apreciar mejor la aplicacion de lo que precede, es preciso ha
cer notar 1.° que cuanto menos licita sea una causa , mas grave será
la malicia de su efecto ó la falta cometida ; 2.º que cuanto mayor
fuere el peligro de consentir en el efecto que la causa produzca , mas
grave será la falta de aquel que tomeesta causa ; 3.° que cuanto mas
próximamente la causa obra sobre su efecto , mas razon debe tenerse
para ponerla ó no evitarla ; 4.° finalmente , que cuanto mas el buen
efecto supera al malo , menos razon se necesita para poner la causa , y
vice versa .
Sentados esos principios , es cierto que aquel que pone una causa
mortalmente inala et procimè aut ex natura suâ in pollutionem influen -
tem , v. g. propria velalterius verenda libidinosè tangendo,vel aspicien
do , sibi permittendo quasdam positiones vel corporis motus inhones
tos , etc. , ipsam pollutionem indè consequentem censeri velle , ac proindè
mortaliter peccare , quamvis pollutionem excitare non intendat vel istam
rejiciat.
Fáltanos ahora examinar si una polucion producida por una causa
licita , ó venialmente mala , es pecado y en qué grado lo es.
Es pecadomortal el hacer, sin necesidad ni utilidad , una cosa lici
ta en sí, pero que uno prevé debe ser próximamente seguida de una
contaminacion corporal; porque se ha cooperado eficazmente à un
efecto mortalmente malo , sin tener una razon de escusa legitima.
Se peca mortalmente haciendo , aunque sea en provecho propio ó de
otro, un acto licito en sí , pero que por una disposicion particular de
la persona que lo ejecuta , produce una polucion à consecuencia de su
fuerte y próximo influjo : en este caso ,decimos, hay pecado mortal, si
existe un peligro próximo de consentir en la contaminacion corporal ;
porque es una falta mortal el esponerse á tal peligro sin unagrave ne
MOECHIALOGÍA .
cesidad . - Si lal necesidad se presentáre, que sea urgente, no teniendo
otra intencion quehacer un bien y de no consentir en la contaminacion
corporal que de ello pueda seguirse , no habrá ningun pecado; por
que segun confiesan todos los teólogos, es lícito hacer , mediando una
razon grave , un acto que debe producir dos efectos, uno bueno y
otro malo , con tal que uno se proponga el bueno sufriendo el malo sin
consentir en este. Undèmedicus vel chirurgus, como dicen los teólogos,
qui ad curandam infirmitatem aut procurandum partum , pudenda mu
lieris tangit aut aspicit, et pollutionem hâc occasione experitur , non
peccat,modò ei non consentiat, etiamsi proximo periculo consentiendi se
exponat. No obstante , añaden los mismos teólogos , el médico ó el ci
rujano deberia renunciar á su profesion si con frecuencia se hallase
espuesto a ese género de peligro , si ejusmodi periculum frequenter in
currat, es decir , á lo que parece , si el accidente ó la contaminacion
corporal le aconteciese á menudo , porque , añaden , la necesidad de
su salvacion es antes que todo lo demás. Esta decision me parece al
go severa , es una palabra dura , durus est hic sermo, sobre todo cuan
do hay , como se supone , falta de todo consentimiento . Y esta falta de
consentimiento en un mal, que no debe casi nunca suceder , tampoco
tiene gran mérito . Hay un sentimiento profundo que ocupa y domina
enteramente al hombre del arte en el ejercicio de su terrible ministe
rio ; este sentimiento es el de un grave deber que cumplir y muchas
veces de una secreta inquietud en presencia de los peligros presentes
ó posibles; y este sentimiento es muy propio , como lo prueba la espe
riencia, para ahogar cualquiera otro sentimiento , aun tomando las
cosas en la generalidad de los médicos, de los cirujanos y de los co
madrones , que por cierto en su mayor parte están lejos de tomar las
santas precauciones de que se arman los médicos de las almas cuando
se hallan en el caso de tratar las enfermedades espirituales .
San Ligorio parece menos severo en este punto . Hé aquí como se es
presa acerca de esta cuestion : « Quid, si chirurgus in feminis meden
dis aliquoties miserè consenserit in pollutionem , an tenetur officium de
relinquere ? Probabile est quòd non teneatur, modò proponat debitis
mediis semunire... Idem dicitur de parocho , qui in eamdem miseriam
pluries lapsus fuerit in excipiendis confessionibus; secùs verò de sim
plici confessario , qui , sine gravi detrimento famæ vel facultatum ,
exercitium deserere possit audiendi confessiones ... At quid , si hujus
modi personæ semper , vel ferè semper, lapsæ fucrint, et nulla ratio
nabilis spes affulgeat emendationis ? tunc dicimus eos teneri cum
quâcumque jacturâ officium deserere .» (Lib . 3 , n. 483.)
Aquel que, en provecho suyo ó de otro , practica un acto previendo
PART. I. CAP. I.
que de él se seguirá una polucion , sin que biaya sin embargo peligro
próximo de consentimiento , no peca del lodo , porque tiene un motivo
suficiente para permitir un mal efecto que no se propone y que tam
poco aprueba. Esta es la opinion de Sto . Tomás y de la mayoría de los
teólogos. « Hinc - como ellos dicen - docendi vel discendi causâ licet re
bus venereis studere, confessiones audire mulierum , cum eis utiliter,
honestè et prudenter conversari, eas cum gravi decentiâ visitare et
propter urgentem convenientiam , vel etiam inter laicos decenter am
plecti eas juxta morem patriæ , equo utiliter insidere , certo modo cu
bare quando aliter dormire nequeat, moderatè uti potu ciboque calidis
aut alio modo ad sanitatem præscriptis , vel tantùm apponi solitis ,
servire infirmis , eos in balnea mittere, artem chirurgi aut obstetricis
exercere , etc. , quamvis prævideatur pollutionem indè secuturam ,
dummodò non intendatur et firmum existat propositum ei non consen
tiendi cum spe fundatâ in proposito perseverandi, quod in genere dig
noscitur ex his quæ quis jam expertus est, tùm ex defectu timoris
peccati , tùm fragilitate personali, tùm propensione ad malum , simili
busque circumstantiis . »
Si verò — como lo hace observar monseñor Bouvier - nulla aut le
vior utilitas suaderet actiones in pollutionem sic influentes, ab eis sub
peccati veniali aut mortali abstinendum esset , prout leviter aut gra
viter in pollutionem influeret , v. g . si usus cafæi, -aquæ -vitæ , vipi
puri, etc . , sanitati non inserviens , ut communiùs, pollutionem in te
excitet, ab illo abstinere teneris , sub veniali , si, influxus sit tamen
probabilis , et sub mortali , si, ob aliquas causas tibi personales , in
fluxus sit proximus , et effectus quasi moraliter certus.»
El poner una causa venialmente mala que influya próximamente en
la polucion es un pecado mortal. « Undè~ dice el célebre autor que
acabamos de citar - si quis , ratione imbecillitatis suæ , pollutionem ex
periri soleat mulierem in partes honestas morosè aspiciendo , manum
ejus tangendo , digitos torquendo , cum eâ fabulando , eam sine causâ
decenter amplexando, choreis assistendo, etc., ab his actibus sub pec
cato mortali abstinere tenetur.»
Como los pecados veniales de que acabamos de hablar , ordinaria
mente no influyen sino de unamanera remota y accidental en la polu
cion , la que de consiguiente no sobreviene sino rara vez, no ofenden
á la castidad sino de una manera leve, con tal que no haya consenti
miento ó peligro próximo de consentir . La razon de esto es que la causa
es leve y remota , y tan solo influye levemente y por accidente en la
polucion, y que finalmente tiene lugar , segun la hipótesis , sin consen
timiento y sin peligro próximo de consentir en ella . Por otra parte las
10 MOECHIALOGÍA .
causas remotas son reputadas moralmente como causas no suficientes:
esta es la doctrina comun de los teólogos y de Sto . Tomás.
No se peca mortalmente , dicen ellos, cuando se bace un acto leve
mente malo , como seria , por ejemplo , una mirada sobrado curiosa ,
una comida harto copiosa , si bien se hiciese previendo la consecuen
cia de movimientos carnales ó de polucion , con tal que uno no se los
haya propuesto , y sin que haya peligro de consentirlos. Se alega por
razon de esto que tales especies de causas no pueden evitarse sino con
dificultad , que no producen el efecto de una malicia consumada , y
que este efecto , en la especie , es tambien remoto , effectusremotus.
Empero si la causa de los movimientos carnales ó de la polucion , al
obrar de una manera remota , es mortal en sí, aunque no contra la
castidad , como la borrachera , entonces esta causa será pecado mor
lalen sí , pero podrá no ser mas que venial en su efecto , porque este
efecto es el resultado de una causa que no influyó sino de unamanera
leve , remota y accidental. Otra cosa seria si ese pecado , por circuns
tancias particulares , llevase tras sí con frecuencia la contaminacion
corporal: entonces seria considerado como que influyó próximamente
en la polucion . Así lo sienten S. Ligorio , Busembaum , Sanchez, Na
varre , Bonacina, Lessius, Layman y muchos otros autores que el San
to cita . Billuart y monseñor Bouvier son tambien de la misma opinion .
Sin embargo , en las Conférences d'Angers se encuentra uş dictámen
que parecese aparta de la opinion comun , escrito en estos términos:
Si causa ei (pollutioni) data sit per ebrietatem ... erit peccatum mortale .
· Estas palabras á lo que parece no deben aplicarse sino á la restriccion
que termina la proposicion y no á la proposicion misma.
A los principios que acabamos de formular y que, en cuanto al fon
do, son los de monseñor Bouvier, vamos á añadir un breve estracto de
la doctrina de Billuart , que podrá derramar una nueva luz en la os
cura y difícilmateria que nos ocupa , dejando no obstante á este céle
bre autor sus errores fisiológicos, que le son comunes con los teólogos
de su tiempo y aun con los que le subsiguieron .
Es lícito el hacer un acto previendo que de él se seguirá una polu
cion , cuando ese acto es lícito por su naturaleza y al mismo tiempo
necesario ó útil. La contaminacion corporal que podrá determinar está
exenta de pecado , mientras no haya consentimiento ni peligro próxi
mo de consentir en ella :'esto es conforme con la doctrina de Sto . To
más, quien deduce la malicia y la inculpabilidad de la polucion de la
causa que la ba producido : de suerte que , si la causa no es mala , la
polucion tampoco lo es; si es venial ó mortal , la polucion tambien
será venial ó mortal , ora la contaminacion corporal sobrevenga de
Part. I. CAP. I .
noche durante el sueño , ora de dia en el estado de vigilia. Cualquiera
que fuese la causa , la falta seria mortal si uno se la hubiese propuesto
ó querido : si peccatum intenderetur.
Nadie está obligado á abstenerse de una accion lícita en sí y al pro
pio tiempo necesaria ó útil, á causa de cualquier leve mal que pueda
producir contra su intencion , sobre todo si este mal po viene sino por
accidente y por la necesidad de la materia. Juzgase, en la especie ,
que el que la hizo no lo deseó . Así, pues, es lícito , para enseñar y
para aprender , rebus venereis studere, etc. etc . ( Véase mas arri
ba , p . 9.)
Hemos dicho : cuando la accion es lícita en sí y al mismotiempo ne
cesaria ó provechosa ; porque, si no mediase algun motivo de utilidad
ó de bonesta conveniencia , el acto lícito en si no podria hacerse sin
incurrir en pecado venial ómortal, segun su mayor o menor influen
cia en la polucion consecutiva ya prevista . Así, el viajar á caballo
cuando uno podria hacerlo con igual comodidad en carruaje , tomar
para dormir una posicion con preferencia á otra igualmente cómoda,
usar de tal alimento antes que de otro tan bueno y saludable cuando
es fácil escogerlo , etc . , es un pecado venial el no abstenerse, en razon
ó á causa de la prevision de una polucion consecutiva. La razon de
esto es que esa contaminacion corporal, que uno no se propuso , ni la
deseó , vi quiso , sino que es un mero efecto de la necesidad de la ma
teria y del impulso natural, no es un desórden grave. Mas sin embar
go es un cierto desarreglo , una especie de anormalidad moral , en el
concepto de que aquel accidente ocasiona cierta perturbacion al alma,
pone inquieto el espíritu y puede escitar al desórden al cual no debe
darse ninguna ocasion ni siquiera accidental , antes por el contrario
debe evitarse en cuanto fuere posible ; de otra manera el desarreglo
producido seria considerado como voluntario á lo menos imperfecta
mente ,
Nótese , una vez por todas, y bastante lo hemos repetido , que las
faltas dejan absolutamente de ser veniales si hay consentimiento ó pe
ligro próximode consentir en ellas; porque el consentir directamente
en una polucion es siempre un pecado mortal , y por consiguiente el
esponerse al peligro próximo de ese consentimiento es igualmente una
falta mortal. Cada cual puede conocer y apreciar este peligro próximo
con su propia esperiencia y con la disposicion actual de su voluntad;
ó en otros términos, la existencia del peligro próximo del consentimien
to se dará a conocer por la frecuencia de las faltas mortales en que se
caiga en semejante ocasion , y la no existencia cuando dichas faltas no
se cometen sino rara vez .
12 MOECHIALOGÍA .
Cuando una accion practicada con prevision de una polucion es pe
cado venial (sea en materia de lujuria ó en otra cualquiera ) y esta
causa venial no influye en la polucion sino levemente y de una manera
remota , la polucion misma que es su efecto no es mas que una falta
venial, y de consiguiente uno no está obligado a abstenerse de prac
ticar aquella accion sino so pena de pecado venial , sobreentendiendo
siempre la falta de consentimiento ó de peligro próximo de consentir .
Este punto es tambien conformeal principio de Sto . Tomás : demetien
da culpâ pollutionis ex causâ . UndèCajetanus dicit : «Actus materialiter
mortalis, quando non est voluntarius nisi indirectè et in causâ , judican
dus est secundùm illam causam ; et ided effusionem seminis'humani
extra matrimonii actum posse esse solùm veniale definitum est, quando
actus in causâ solùm fuit peccatum veniale , ut patet in pollutione noc
turnâ, ex delectatione veniali per diem habitâ , consequente.» La razon
deesto es queuna polucion no es pecado sino cuando es voluntaria : ahora
bien , en la especie , no es voluntaria sino en su causa venial, imper
fectamente y secundùm quid , segun el lenguaje escolástico ; luego no
es pecado sino iinperfectamente y secundùm quid , es decir, venialmen
te . A mas de que , en el caso sentado , uno no peca sino con motivo de
la polucion cuya causa no evito : pero no se halla uno obligado á
evitarla so pena de pecado mortal ; luego no se peca en este caso sino
venialmente .
De todo lo que precede resulta que la polucion no es mas que pecado
venial cuando proviene ex colloquio non diuturno cum puella , velex
tactibus, amplexibus , osculis quæ venialia sunt in materia luxuriæ , sive
ex imperfectione actús , sive quia fiunt ex levitate, joco , curiositate , alio
ve motivo non libidinoso, etsi ex his prævideatur secutura pollutio. Sien
do todas esas faltas veniales en sí y como causa de la polucion , en la
que no influyen sino de una manera leve y remota , hacen por con
siguiente que esta no sea mas que pecado venial , suponiendo siempre
que hay falta de consentimiento, etc. Con mayor razon debe discurrir
se del mismo modo tocante á las causas veniales en cualquiera otra
materia , que no influyan siño de una manera remota en la polucion ;
tales serian las faltas veniales cometidas por algun esceso en el beber
ó en el comer.
. Finalmente , cuando una accion es mortal en sí y es practicada con
prevision directa de una polucion en que ella influye notable y próxi
mamente , está uno obligado á abstenerse de ella , so pena de pecar
mortalmente , no tan solo por la razon de la causa mortal, sí que tam
bien por la de su efecto igualmente mortal y vuelto tal por la causa .
Hinc colligendum , diuturnas et intensas cogitationes , seu delecta
PART. I. CAP. 1. 13
liones impudicas, aspectus, tactus, amplexus,oscula , turpiloquia quæ
sunt peccata mortalia in genere luxuriæ , sive ex objecto secundùm se
obsceno , sive ex affectu libidinoso , si ex illis prævideatur pollutio
secutura, licèt non intendatur, esse peccata mortalia , non solùm in "
se , sed etiam ut causa pollutionis , ita ut pollutio secuta debeat ex
plicari in confessione , utpotè voluntaria et mortaliter mala ; quia hæc
omnia graviter et proximè influunt in pollutionem .
Para concluir citaremos dos palabras del testo de S . Ligorio : « Sen
tentia communis et probabilior docet pollutionem non esse mortalem ,
nisi proveniat ex causâ per se mortali, in genere luxuriæ ... Ratio cur
causa debeat esse per se mortalis, est quia , cùm pollutio non sit vo
lita in se , sed tantùm in causâ , eo gradu mala erit , quo mala est in
ipsâ causâ . Ratio autem cur debeat insuper esse mortalis in eodem
genere luxuriæ , est quia , cùm causa leviter ad pollutionem concur
rat, non est gravis obligatio causam illam vitandi , ob pollutionem ,
quæ præter intentionem accidit.» (Lib . 3, n . 484.)
SECCION III.
De la poluciou nocturna.
La polucion nocturna es aquella que sobreviene ordinariamente
durante el sueño de la noche. Seria mas exacto y conveniente darle el
nombre de activa , porque tiene lugar con eretismo; y entonces como
toda contaminacion seminal ofrece este carácter y sobreviniendo tam
bien en el estado de vigilia seria una polucion activa , en contraposi
cion a la polucion pasiva ó diurna . Esta última solo tiene lugar de dia
ó durante la vigilia y sin ningun eretismo, por lo comun en el mo
mento de la defecacion , y tambien algunas veces despues dela miccion
ó la emision de las orinas, muy a menudo sin causar la menor sen
sacion y aun sin que las personas lo adviertan. Es el origen demuchos
males y de una estenuacion constante é inevitable .
Como las distinciones que acabamos de indicar son mas útiles á los
patologistas y á los médicosde lo que convienen á nuestro objeto , que
esla conducta moral, conservaremos la antigua division de polucion
nocturna y diurna .
La polucion nocturna ó activa tiene ó puede tener lugar en cual
quier edad del hombre , desde la pubertad hasta la vejez mas ó me
nos avanzada. Como lo indica su nombre, sobreviene de noche ó du
rante el sueño. Si el sueño es imperfecto , la polucion puede ser semi
voluntaria , y por consiguiente pecado venial; si el sueño es perfecto,
será involuntaria y por lo tanto exenta de todo pecado. No podria ser
pecado sino en su causa .
A
14 MOECHIALOGÍ .
Es cierto que peca mortalmente aquel que pone una causa con in
tencion de que produzca una polucion durante el sueño , como, por
ejemplo , certo situ cubando, cogitationes valdè turpes in mente pervol-
vendo , ut subrepat turpe somnium , se impudicè tangendo , etc . Dejando
á parte este caso , nos es preciso examinar cuales son las causas de las
poluciones nocturnas y de qué modo sobre estas influyen .
Sto. Tomás, con todos los demás teólogos, distinguen tres especies
de causas; la primera corporal , la segunda espiritual intrínseca , y la
tercera espiritual estrínseca.
· La causa corporal no es otra cosa que un esceso de plenitud , una
plétora espermática que determina una deplecion exonerativa para ali
vio de los órganos y consuelo del cuerpo. Esa exuberancia seminal
producida por un sin número de causas de que hablamos largamente
en otra obra , se disminuye y queda reducida á una justa medida por
una multitud de circunstancias ó de causas tanto físicas comomorales,
que son otros tantos motivos determinantes de la polucion nocturna ,
como el decúbito dorsal, la blandura y el calor de la cama, el ejercicio
å caballo , un temperamento erótico ó ardiente, una escesiva sensibili
dad nerviosa y sobre todo largas y antiguas habitudes contraidas des
de mucho tiempo y actualmente revocadas y destruidas para siempre.
Las causas espirituales intrínsecas son todas aquellas que preceden
mas o menos de cerca al sueño , que por sí mismas inducen natural
mente al pecado de lujuria , y muchas de las cuales son verdaderas
faltas contra la castidad , como los pensamientos voluntarios de im
pureza , el deleite melancólico, los malos deseos , las conversaciones
prolongadas y demasiado libres con laspersonas del otro sexo , el leer
libros obscenos, el asistir á comedias y á bailes , etc .
La causa espiritual estrioseca es , segun Sto . Tomás y todos los de
más doctores, la influencia ó la obra del demonio , el cual, conforme
esa opinion universal y unánime, burlándose , como ellos dicen , de la
imaginacion del hombre y removiendo los espíritus genitales, escita
con eso la polucion , phantasiæ illudendo et spiritus genitales commo
vendo , pollutionem excitat. Estas últimas contaminaciones, añaden,
proviniendo de una causa estrínseca á la voluntad , como se dice ,
à causâ voluntati extrinseca , nopueden considerarse como pecado, sino
hay consentimiento actual. Síguese pues de ahí que estas últimas po
luciones deben asimilarse á las que son producidas por la primera cau
sa , ó sea la causa corporal, las cuales están igualmente exentas de
toda falta . Siguese pues en fin que puede hacerse entrar esta última
causa , ó la causa espiritual estrínseca , en la primera ó sea la corpo
ral, es decir, que puede suprimirse .
PART. I. CAP . 1. 15
En cuanto a las demás poluciones , es menester examinar cual es
su causa ; si es lícita , ó venialmente ó mortalmente mala , y si influ
ye en ellas de una manera próxima ó remota . Así es como se podrá
juzgar prudentemente si hay pecado y qué especie de pecado. Si la
cosa es lícita y hay un motivo razonable para ejecutarla , no habrá
pecado alguno , ó á lo menos el pecado no será mortal, á no ser que
la causa influya de una manera próxima en el efecto y que este sea
moralmente cierto. En este caso , la utilidad por sí sola no basta para
escusar el pecado ; es preciso que haya una verdadera necesidad. He
aquí lo que tocante á esto dice Billuart : « Pollutio nocturna est vel
non est peccatum , pro conditione causæ in quâ fuit prævisa aut po
tuit aut debuit prævideri. Si causa non sit culpabilis , nec ipsa erit
culpabilis ; si causa sit culpabilis venialiter , leviter et remotè influens
in illam , erit venialis ; si causa sit mortalis , graviter et proximè in
fluens in illam , erit mortalis. » (Dissert. 6 , art. 13.)
Ahora bien , ¿qué regla hay que seguir ó que es lo que debe hacer
se cuando uno despierta sin haberse consumado una polucion prepa
rada , inminente ó principiada durante el sueño ? Muchos son los teó
logos que sostienen que nadie está obligado á detenerla. Pero antes de
decidir nada sobre esta cuestion citaremos los testos de los mas céle
bres autores que han formulado su opinion sobre este punto . Hecho
eslo , con la lámpara de la fisiología y de la lógica en la mano , es
cudriñaremos , examinaremos la cuestion con cuidado á fin de derra
mar en ella una nueva luz y de apreciar en su justo valor las opinio
nes teológicas sobre esta materia . He aquí pues los testos originales.
« Non tenetur quis (modd tamen absit periculum consensûs in vo
luptatem , nec voluntariè promoveal) impedire pollutioném sponte suâ
evenientem , aut jam cæplam , v. g. in somno reprimere , sed potest
sanitatis causâ sinere ut natura se exoneret : quia id non est procura
re , sed pati ut effluat quod , aliàs corruptum , sanitatem Jæderet.»
(Comment. S. Ligorio in Busembaum , lib. 3 , núm . 479.) i
He aquí ahora el propio testo de S. Ligorio y los autores que el ci
ta : « Quando pollutio incipit in somno , et emissio contingit in vigi
liâ semiplenâ , tùni, si homo aliquam experitur delectationem , non
plenè deliberatam , non peccat quidem nisi venialiter , ut benè notant
S . Ant., p. 2 , n. 6 , c. 5 , in fin . ; Navarr ., c. 16 , n. 8 , v. non est ;
Salm . , de vi Præc. , c. 7 , n . 74 , ac Concina, n. 48. Quando verò
emissio incæpit in somno , sed posteà consummatur in plenâ vigilia ,
eo casu (modò absit coosensus in delectationem , vel proximum con
sensûs periculum ex præteritâ experientiâ, non tenetur homo illam
cohibere; tùm quia difficillimum est avertere exitum seminis jam è lum
16 MOECHIALOGÍA .
bis elapsi , ut communiter dicunt DD. cum Salm ., 1. c . ; Nav., Azor.,
Trull., etc ., tùm quia non tenetur persona cum periculo morbiex se
mine corrupto retento effusionem impedire , ut docent Sanch ., de
Matr., 1. 9 , d. 17 , n . 16 ; Conc. , l. c. ; Spor., de Matr. , n. 657 ;
Holzm ., de vi Præc., n. 688 ; Tam ., 1. 7 , c. 7 , S. 2 , n. 17 , et alii
communiter; tunc enim illa pollutionem non vult , sed merè patitur.»
(S . Ligorio, lib . 3 , n . 479.)
He aquí el testo de Sanchez que S . Ligorio no cita : «Licebit ta
men ubi est pollutio in naturali fluxu , in somnisque cæpit, illam non
impedire ob mortis periculum , cessante periculo consensûs in delec
tationem .... quia id non est procurare , sed pati emissionem seminis,
quæ non impeditur à patiente , de corruptus ille humor noceat.» (De
Matr., lib . 9, disp. 17 , n . 16.)
Billuart se espresa en estos términos : « Qui plenè expergefactus
complacet pollutioni in somno completæ , vel actu fluenti propter de
lectationem , peccat mortaliter , quia complacet rei mortaliter malæ :
ista tamen complacentia non facit pollutionem præteritam esse pecca
tum quia ipsius causa non est , sed ipsa in se est peccatum ' si sit tan
tùm semiexpergefactus, aut ex subreptione sit talis complacentia , pec
cat venialiter. Tandem si placeat,ut naturæ exoneratio, vel alleviatio ,
peccatum non creditur. Nec tenetur ejus fluxum actualem cobibere ,
quia ex quo in dormiendo excitatus est motus carnis , non subjacet
ulterius voluntati vigilantis , et quamvis subjaceret , cohiberi non pos
set absquenotabili gravamine corporis et periculo infirmitatum : qua
propter potest illum permittere tanquam effectum causæ naturalis quæ
ampliùs impediri non potest. » (Dissert. 6 , art. 13.)
Citemos tambien un autor mas moderno, un célebre teólogo fran
cés, Mons. Bouvier. « Quæritur ad quid teneatur homo qui evigilans
advertit se pollutionem experiri. R . Debet mentem ad Deum elevare ,
eum invocare , signo crucis se muoire , delectationi voluptatis renun -
tiare , et modò hæc faciat , securus esse potest , nec tenetur naturæ
impetum continere ; tunc enim secretio humorum jam facta est in va
sis spermaticis , necesse est ergo ut fluxus hîc et nunc vel posteà lo
cum babeat , alioquin semen è renibus excisum corrumperetur, et in
sanitatis detrimentum vergeret.» (Dissert. in seatum Decalogi pre
ceptum .)
Del contenido de esos varios testos resulta que los teólogos deciden
que el hombre , si se despierta en el momento de una polucion inmi
nente ó principiada , puede absolutamente constituirse en un estado
puramente pasivo y abandonar a la naturaleza,un accidente ó un efec
to en que ninguna parte tomó la voluntad, con tal que no haya el me
PART. I. CAP. I. 17
nor peligro de consentimiento . La razon en que apoyan esta decision
es que el flúido espermático mas o menos salido de sus receptaculos ,
debe necesariamente alterarse y corromperse con perjuicio de la sa
lud . Es preciso , dicen , en elmomento de la crisis , elevar su espíritu
y su corazon á Dios , invocar su auxilio , armarse con la señal de la
cruz y renunciar a todo pensamiento de deleite carnal, etc .; y despues
de eso se debe quedar tranquilo sin procurar contrariar elmovimien
to y el efecto de la naturaleza , cosa á la que por otra parte no está
uno obligado, porque, añaden, si la eyaculacion fuese detenida brus
camente y con violencia, el flúido espermático se corromperia, y ven
dria á ser un principio ó una causa de enfermedad ó de grave indis
posicion . He ahí el parecer de los mas célebres teólogos.
Esa opinion de la corrupcion seminal , por mas que sea general
mente admitida por los teólogos , no descansa sino en un fundamento
ruinoso , ó mas bien es un error manifiesto reconocido hoy dia por to
dos los fisiólogos.
Preténdese pues que el licor espermático , una vez ha salido mas ó
menos de sus receptáculos, debe corromperse y alterar la salud por
su estado de viciacion ó sus cualidades dañosas. Empero , esa preten
dida alteracion felizmente no tiene lugar sino en los libros y en los ga
binetes de los teólogos , y no en el laboratorio de la naturaleza.
Lo que hay de muy cierto é inatacable en buena fisiología , es que
la porcion del flúido seminal que ha llegado hasta el canal de la uré
tera debe necesariamente ser espulsada del cuerpo , ya sea inmediata -
mente , ya con ó por la escrecion Urinaria , y no puede tener tiempo
de sufrir alteracion alguna ; y que , por lo que hace al resto del licor
espermático que debia ser la materia de la polucion abortada , impedi
da ó evitada de un modo cualquiera, y que aun no salió de los cana
les eyaculadores, esta porcion vuelve a entrar ó permanece en sus re
ceptáculos con todas sus cualidades naturales y vivificantes . No sola
mente no causa enfermedades con su corrupcion, sino que es tambien
un manantial de fuerza y de vigor , tanto para el cuerpo como para el
espíritu . He ahí un hecho , una verdad fisiológica de una certitud
inalterable . No queremos aquí revelar un error grosero de anatomía
que cometen los teólogos , porque es cosa que nada tiene que ver con
la cuestion . Dicen ellos que el esperma ó el sémen es formado y se
gregado en los riñones , ė renibus excisum ; miramos eso comouna es
presion puramente metafórica sin consecuencia alguna. Los riñones
po forman otra cosa que la orina, y el licor seminal se elabora en los
testiculos, como nadie ignora . Tambien caen en otro error cuando
afirman que el esperma , una vez ha entrado en lo que ellos llaman
18 MOECHIALOG
ÍA .
los vasos espermáticos , debe necesariamente tarde o temprano ser es
pelido ; esto es lo que aquí arriba se ha demostrado ser falso.
Veamos ahora las consecuencias prácticas que pueden deducirse de
ese nuevo principio ó de esas verdades fisiológicas.
· Nuestra opinion es que cualquiera que esperimente una polucion
principiante ó muy inminente , si no puede detenerla sin que de esta
brusca supresion le resulte un grave incommodum , no está obligado
á violentarse , a menos que haya peligro próximo de consentimiento ;
porque no debe comprimir un movimiento , o impedir una escrecion
exonerativa que la naturaleza , en el estado actualde viciacion física
y moral del hombre , parece muchas veces suscitar para alivio del
cuerpo y reposo del espíritu ; sobre todo si se añade que no puso nin
guna causa ni fisica ni moral , ni próxima ni remota .
Este principio se aplica particularmente á los sugetos fuertes , ro
bustos, sanguineos, ardientes , de un temperamento erótico , que es
tán esperimentando todos los efectos deuna plétora espermática ; y aun
en algunos casos en que disposiciones estraordinarias ó idiosincrasias
especiales asimilan á los primeros ; pero estos últimos no son muy
frecuentes . Creemos que todos los demás sugetos deben , á lo menos
generalmente , tratar de evitar o detener una polucion inminente ,
porque esmenester no esponerse á un peligro ó á una ocasion próxima
de pecar cuando hay quizá probabilidad de poder evitarlo. Esta con
ducta tienen aun mas necesidad de observarla las personas fisicamente
mas o menos débiles , ó ya casi estenuadas por numerosas poluciones
ú otros antiguos escesos; y finalmente ciertas personas timoratas ó so
brado débiles para resistir al atractivo del placer carnal ó del pecado,
porque, independientemente de la pérdida de la salud y aun á veces
de la vida , establécese la habitud de las poluciones, y por consiguien
te , para algunos tal vez , el peligro ó las ocasiones de pecar se van
multiplicando á proporcion. Hemos visto á jóvenes , que conducidos
por repetidas poluciones nocturnas hasta el borde del sepulcro , lle
garon á recobrar la plenitud de la vida y de la salud con el uso del
medio que les indicamos , con el objeto de cortar de raiz y de repente
la habitud de las poluciones. Valiéndonos del mismo medio , que mas
adelante indicaremos , hemos curado á otros sugetos atormentados á
mas no poder de escrúpulos de conciencia sobrevenidoles con motivo
de contaminaciones corporales. Estos accidentes nocturnos , cuyo pe
ligro exageraban escesivamente su imaginacion , la debilidad de su
espíritu y sus vanos escrúpulos , tal vez les hubieran conducido a la
desesperacion ó á la locura .
En virtud de lo dicho puede verse que nuestro principio no tiene
PART . I . CAP . 1. 19 .
por consecuencia ó efecto constante la especie de quietismo ó el estado
de pasividad , que es la consecuencia ó el resultado del principio de
los teólogos. Se ha visto que su método absoluto es aplicado indis
tintamente á todos los individuos , á todos los temperamentos , á to
dos los caracteres y á todas las conciencias.
He aquí ahora el dictámen de un teólogo inuy docto y muy pruden
le , quien , si en su laconismo no siempre alcanza la verdad en estas
materias difíciles y abstrusas, es á lo menos uno de los que mas de
cerca á ella se aproximan. « Nec incepta in somno continuari potest
post evigilationem juxta multos , contra non paucos qui dicunt , ob
incommoda ex cohibitione forsan eventura , posse simpliciter permitti
continuationem , cor ad Deum elevando. Ita Gerson , Billuart, etc .,
quia , inquiunt, præter incommoda et corporis gravamen , pollutio
in somno inchoata ulteriùs non subjacet voluntati. Sed hæc ratio ad
assensum non rapit. His ergo theologis assentirer tantùm cùm , quod
rarum , verum adest sibi graviter pocendi periculum , sine periculo
consensûs in re tam lubricâ : aliundè non sat efficax fortè foret dis
plicentia , si pollutio non cobiberetur per aliquem saltem conatum ,
V. g. retinendo ejaculationem , quærendo locum lecti frigidum , è lec
lo prosiliendo : idem dic si accidat in vigiliâ . » (Vernier, Theol .
pract., t. 2 , p. 431.)
Parécemeque hay una contradiccion entre las citas de S. Ligorio y
las de Vernier. Estos dos autores, de opinion contraria en la cuestion,
citan ambos á Gerson como á un teólogo de opinion opuesta a la suya .
De abi necesariamente se sigue que uno de los dos citó mal, ó que el
mismoGerson se contradijo. No habiendo podido procurarnos el opus
culo de Gerson, de Pollutionediurnâ , para comprobar unos testos pro
ducidos en términos diferentes, los reproducimos literalmente sin de
tenernos en ponerlos acordes , porque esta concordancia nos importa
muy poco y en nada influye en la cuestion .
Bastará hacer observar que, en aquel pasaje de Vernier, se ve que
el autor abraza en parte la opinion que hemos emitido mas arriba , y
que se aleja de la doctrina de un gran número de teólogos célebres , co
mo Sanchez , Billuart, S . Ligorio , Bouvier, etc . Nótense estas pala
bras de su testo : His ergo theologis assentirer tantùm cùm , etc . , y
además las siguientes : Non sat efficax fortè foret displicentia , si pol
lutio non cohiberetur per aliquem sallem conatum , etc . Estas palabras
bastante dan á comprender por otra parte que el rechaza la opinion de
la pasividad ; que S . Ligorio apoya la opinion deGerson , aunque en el
fondo ia suya sea la de Sanchez, es decir , la pasividad.He aquí las pa
labras que á Gerson atribuye S. Ligorio diciendo : Benè tamen monet
20 MOECHTALOGÍA .
Gerson ; siguen las palabras de Gerson segun S . Ligorio : Pro execu
tione virtutis et evitatione periculi , videtur expediens ut homo conetur
prohibere quantùm et commodè fieri potest. En el mismo testo de Ger
son , que en otra parte hemos visto , leemos las palabras siguientes,
que S. Ligorio omitió : Quoniam etsi hæc retentio nocere debeatcorpori,
proderit animæ. Natura denique postmodùm , uno modo vel alio , talem
humorem à se ejicit. Patet in mulieribus puerperis , quibus siccantur
*mammæ dùm non elicitur lac, alioquin semper fluere paratum est.
De todo cuanto precede creemos puede deducirse que se debe ha
cer lo que moral y prudentemente se pueda para evitar una polucion
inminente , menos en los casos arriba indicados , p . 18. La esperiencia
nos ha probado que de esas medidas preventivas no resultan , en cir
cunstancias dadas , mas que ventajas reales y positivas tanto físicas
como morales , sobre todo sise adopta el método que ordinariamente
aconsejamos , que es infinitamente mas seguro y sobre todo menos
perturbador que todos losmedios mas o menos bruscospropuestos por
los teólogos , los cuales por otra parte muchas veces dejan de producir
su efecto.
Siconsigue uno evitar o detener las poluciones, solamente en cir
cunstancias dadas y apreciadas mas arriba , presérvase de su habitud,
que puede llevar tras sí los mas graves inconvenientes y arruinar el
físico y elmoraldel hombre. En segundo lugar, empujándolas en cier
to modo hạcia el interior , se las fuerza , por decirlo asi , á hacerse sor
das y latentes, esto es, á hacer bruscamente irrupcion sin interrumpir,
el sueño , lo que por cierto es preferible bajo todos conceptos.
Hemos indicadomas arriba que todo método de supresion brusca y
repentina podria incomodar á ciertas personas de plétora espermática ,
ó á sugetos muy nerviosos , ó en quienes existe una disposicion espe
cial, idiosincrasica ; pero la esperiencia tambien nos ha probado que
aquella molestia, aquel embarazo ó 'aquel penoso sentimiento no es mas
que momentáneo . Todavía no hemos visto que de él resultase ningun
inconveniente notorio para la salud ; es tambien quizás porque enton
ces las poluciones se vuelven latentes y se efectuan sin interrumpir el
sueño. Como quiera que sea , puede uno en tales casos ceñirse á algu
nas tentativas de esfuerzos físicos, para mejor acreditar que la volun
tad se opone y resiste á toda especie de desórden morál.
No pensamos sin embargo , conforme al principio que hemos esta
blecido en la pagina 18 , que , en esos diversos casos , esté uno estric
tamente obligado á observar esa conducta , mientras no haya peligro
próximo de consentimiento , porque entonces la polucion , en el estado
actual del hombre , viene a ser, como la escrecion nasal y otros flujos,
PART. I. CAP. I. 21 .
una especie de funcion depletiva y exonérativa establecida por una ley
fisiológica , es decir, por la naturaleza , con el objeto de arreglar , ali
viar y conservar el individuo.
La polucion cuya brusca supresion no es seguida del grave incom
modum arriba mencionado , no es una funcion que tenga un fin , sino
un accidente sin objeto determinado. Cualquier acto de la vida huma
na que no tenga un objeto fisiológico prudente y apreciable no es, pro
piamente hablando , una funcion : así que', el comer en un estado de
saciedad , por mera glotonería y sin necesidad alguna , no es ejercer
una funcion , sino abusar de una funcion ó de una facultad física. En
virtud deeso puede decirse , que loda polucion cuya brusca supresion
cause un grave incommodum cualquiera que sea , por causa espermá
lica ó nerviosa , es una evacuacion que puede respetarse y abando
parla á la naturaleza , porque es una funcion depletiva y exonerativa;
y que por el contrario cualquiera otra contaminacion corporal cuya
supresion no es seguida del grave incommodum no es considerada co
mo á funcion depletiva y exonerativa , y por consiguiente se debe ó se
puede , segun las circunstancias, suprimirla como que puede física y
moralmente hacerse importuna y aun peligrosa. Esta última especie
que no es detenida es, si se quiere , en el principio físicamente indi
ferente ;pero, abandonada á la naturaleza , puede fácilmente degene
rar en habitud , y producir por último consecuencias mas ó menos
graves, tanto en el moral como en el físico. En efecto , dejando á par
le el enflaquecimiento del cuerpo , seguiráse tambien una debilitacion
de las facultades intelectuales y morales , del alma , del carácter , elc .
Inútil es hablar de otro género de peligro inherente a la habitud de la
polucion , es decir , del peligro posible del consentimiento .
Lo que hemos dicho de la supresion de las poluciones nocturnas debe
Lambien , aunque por otra parte es enteramente lo mismo , aplicarse
mas estrechamente a las poluciones activas que sobrevienen en el es
tado de vigilia ó durante el dia : tales son las diurnas activas ó con
cretismo erótico ó libidinoso . Seria menester no persuadirse falsamen
te que, cuando sobreviene algun accidente erótico , deba esclusiva
mente atribuirse , ni siquiera en los individuos de plétora espermática,
á la retencion ó á un esceso de flúido seminal , cuyo supérfluo es siem -
pre eliminado en gran parte tarde o temprano ; sino mas bien, en par
te á lo menos , á la perturbacion ó á un esceso de exaltacion y decon
centracion nerviosa , unida á un aumento de sensibilidad ó á la cxal
Lacion del sentido genital; ó tambien á algun principio acre que
provenga de la falta de aseo , como una materia sebácea fijada en los
órganos genitales.
22 MOECHI .
ALOGÍA
· Preguntan los teólogos an liceat gazıdere de bono eſſectu pollutionis
inculpabilis , putà de sanitate aut cessatione tentationis ? Aquino pode
mos sino copiar lo que dicen los autores . Sto . Tomás en primer lugar
se espresa asi locante á eso : « Si pollutio placeat utnaturæ exoneratio
vel alleviatio , peccatum non creditur.)
Communissimè docent auctores licitum esse de bono effectu secuto
pollutionis involuntariæ gaudere , quia ille effectus in se spectatus bo
nus est ; et communiùs quoque et probabiliùs de bono effectu secuturo
propter eamdem rationem .
· Vamos á terminar esta cuestion con el estracto siguiente de Billuart.
Certum esi 1.º esse peccatum mortale gaudere de pollutione noctur
nâ propter voluptatem , aut eam sub eâ ratione desiderare, quia ob
jectum est moraliter malum , cùm delectatio venerea sit à naturâ or
dinata ad solam generationem in actu conjugali.
Certum est 2.° pollutionem sub quavis ratione desiderare efficaciter ,
ita ut desiderium eam causet aut vi illius adhibeantur media ad ejus
eventum , esse pariter peccatum mortale , quia tunc fit voluntaria et
non remanet ampliùsmerè naturalis.
Certum est 3.0 licitum esse gaudere de bono effectu pollutionis,
putà de sanitate aut cessatione tentationis per illam causalâ ; item li
cere pariter' illum effectum desiderare, quia utrobique hoc objectum
est bonum . Item eâdem ratione licet gaudere quòd absque peccato et
merè naturaliter evenerit pollutio . (Dissert. 6 , art. 13.)
De paso haremos observar que el flúido espermático de ninguna
manera puede ser asimilado á los otros varios flujos , ya sean sanguí
neos ó de otra especie . Estos pueden ser provocados para el alivio del
cuerpo ; pero el flúido seminal jamás , á causa de la lubricidad de la
materia , de la diferencia de destino y de la inmensa gravedad de las
consecuencias.
Los principios queacabamos de formular parecerán tal vez , á cier
tas personas, algo rígidos ó demasiado severos , sobre todo si se les
compara con los de los teólogos quietistas y pasivistas. Perdónesenos
este neologismo, que nos parece necesario. Creemos no obstante , ó
mas bien nos hallamos íntimamente convencidos de que esos princi
pios son ciertos, porque están fundados en la buena filosofía y en la
sana fisiología , es decir, en la naturaleza delhombre, y por consiguien
te se hallan en perfecta armonía con los principios de la higiene y de
la ética. Los teólogos pasivistas , á la verdad , apoyan su opinion en el
mismo género de fundamento , es decir, en la convicción íntima. Podrá
pues decirsenos que estaban convencidos de que el flúido espermático
detenido debia necesariamente corromperse , y engendrar enfermeda
PART. I. CAP. I. 23
des graves , putridas,por corrupcion ó por gérmen séptico , y de con
siguiente su dictámen era perfectamente fundado en razon ('), y su opi
nion de pasividad , legitima y aun necesaria en la práctica. Nada, sin
duda, seria mas verdadero pimas lógico que este argumento , sino des
cansase en convicciones falsas cuyos elementos fueron sacados de hi
pótesis inverosimiles , y aun reconocidas en el dia como vanas é ila
sorias por todos los fisiólogos modernos ; esto es lo que vamos á acla
rar por medio del examen de una cuestion singular promovida por los
teólogos masmodernos. La cuestion es la siguiente : « Quæritur - dice
»monseñor Bouvier-- an licet , ope medicamentorum à medico præs
» criptorum , dissolvere et expellere semen morbificum cum periculo
veræ pollutionis. P! !! : pport isofall that l , Tillsliitty
» R. Commupiùs affirmant doctores, modo solà intendatur sapitas, et
» pollutio directè non excitelur, nec desideretur, nec ei , præter in
»tentionem accidenti , assentiatur , et semen certò sit corruptum . Sic
»Sanchez , Layman , Billuart, Ligorio, etc., contra P. Concina , Bo
» pacina , Lacroix , De Lugo et plures alios.» ( Dissertatio in sextum
Decalogi præceptum .)
La misma cuestion habia sido ya propuesta y resuelta por Busem
baum en estos términos : «Si semen judicio medicorum trapsivit in
»materiam venenosam , licet eam medicamentis expellere, etsi præter
»intentionem sequatur aliqua veri semipis emissio.» Logistifying assifill
He aquí lo que dice S. Ligorio acerca de ese pasaje de Busembaum :
«Communiùs doctores hanc sententiam nostri P. Bus. amplectuntur.
» Ratio , quia medicamenta illa per se directè solùm tendunt ad expul
» sionem seminis corrupti ; effusio autem aliqualis veri seminis sequi
» tur per accidens, et præter intentionem , quod non potest dici illici
ptum , cùm omnes concedant licitum esse remediis alios expellere hu
»mores nocentes , quamvis per accidens sequatur pollutio , sicut etiam
rlicet pharmacum sumere ad morbum expellendum , etsi indirectè ex
> pellendus sit fætus inanimis . » (Lib . 3 , n . 478 .). ' n
En fin monseñor Gousset, en su Teologia moral, en el año 1846 ,
emite tambien su opinion sobre el famoso semen corruptum . A la ver
dad , él se adelanta muy poco a poco , bien apoyado en S. Ligorio, su
sosten ordinario. He aquí pues lo que dice : « Si judicio medicorum
► semen sit certò corruptum et sanitati nocivum , licitum est illud ex
pellere medicamentis , etsi præter intentionem sequatur aliqua semi
pis effusio. Ita Sanchez , Sporer et alij. Nunquàm tamen est lici
(1) ¡Qué distancia tan inmensa del grave incommodum á las enfermedades
graves ! y sin embargo , en algunos casos , soy pasivista . Que no se me acuse
pues de rigorismo.
24 MOECHIALOGIA .
» tum tactu semen corruptum expellere , etiam absit periculum con
» sensûs. » Eso quiere decir, en otros términos , que nunca es lícito
mancharse con el onanismo, lo que ciertamente nadie puede ignorar.
Aquí no hacemos mencion de estas estrañas cuestiones y pasajes
teológicos sino para indicarlasdepaso . Sin embargo ,dejamos al lector
el cuidado de apreciarlas en su justo valor científico y teológico . Sola
mente aprovecharemos la ocasion de invitar a los teólogos á que no
proclamen siempre su afirmacion como á dictámen comun de los doc
tores, antes bien entresaquen de sus libros, por otra parte muy reco -
mendables por la pureza y ortodoxia de las doctrinas, esas especies de
cuestiones , que no solamente son inútiles, inconvenientes, y sin ob
jeto práctico , sino que tambien pueden parecer marcadas con un ca
rácter de indecencia o aun de una aparente inmoralidad . Así pues,
por un sentimiento de conveniencia , nos guardaremosbien de insistir
en semejante materia por temor de incurrir en el justo reproche de
abusar de la benévola paciencia de nuestros lectores ; y á la verdad
les respetamos demasiado para esponernos á que nos lo echen en
rostro .
Ciñámonos pues á decir brevemente que la corrupcion del flúido es
permático es una hipótesis enteramente gratúita , que no descansa so
bre ningun dato fisiológico . He aquí, en dos palabras, lo que los úl -
timos progresos de las ciencias fisiológicaspermiten enunciar con res
pecto á este punto como la espresion perfecta de la verdad :
.- 1.° Estoy moralmente cierto de que no existe ningun hecho bien
confirmado que pueda probar la corrupcion del verdadero flúido es-
permático ;
2.° Y aun cuando esa corrupcion estuviese confirmada por la
inspeccion cadavérica , ninguna señal indicaria su existencia durante
la vida ; . :' .
- 3.º Admitiendo tambien , si se quiere ,que esa corrupción pueda
ser reconocida , durante la vida , por señales ciertas , no hay agente
alguno terapéutico ó medicamento conocido que posea la propiedad di
solvente y espulsiva supuesta en la cuestion ;
. 4 .° Y cuando en fin existiese un remedio semejante , seria menester
dotarlo tambien del discernimientonecesario para no espulsar precisa
mente sino la porcion de esperma corrompido sin tocar á la otra ; por
que de lo contrario seria una verdadera polucion.
M . Vernier pone por nota estas palabras : « Licitum est per medica
»menta semen corruptum ejicere, modò non ope ejaculationis , quia
» tunc vivum primùm ejiceretur. Continuator Tournely , post me
» dicos. »
PART. I. CAP. I. 25
Esos médicos no pueden ser ciertamente sino algunos antiguos au
tores humoristas de los tiempos de ignorancia fisiológica de la edad
media. Pero he aquíotro dicho muy razonable y verdadero del mismo
Vernier : Medicus mihi dixit non corrumpi semen , sed tantùm non ela
borari. Esto es muy cierto. He ahí el único género de alteracion que
sufre el esperma humano , y por desgracia es sobrado frecuente, mer
ced á los numerosos escesos venéreos y onánicos.
SECCION IV . . .

De la polucion diurna.
Esta es una enfermedad , dice el profesor Lallemand , que degrada
ál hombre , envenena la flor de su edad y arruina sordamente la so
ciedad .
La polucion diurna es aquella que tiene lugar durante el dia , y mas
general y exactamente en el estado de vigilia. Así, segun esto , la po
lucion que sobreviniese en medio de la noche sin sueño deberia ser
asimilada á la poluciou diurna, y considera rsela como tal en la práctica.
Todo pues en mi concepto se reduce á esto : una polucion diurna es
aquella que sobreviene en el estado de vigilia completa ; es activa o
pasiva . La activa es aquella que tiene lugar con eretismo y sensacion ,
ó por estímulo físico ó mental, como por ejemplo el montar á caba
llo , etc., una imaginacion vivamente herida , la fuerte aplicacion
de los sentidos á ciertos objetos que alteren poderosamente el moral
del hombre , etc. Pueden ponerse en el rango de esta especie de polu
cion aquellasque algunas veces fueron determinadas por la fustigacion
ó por los purgantes drásticos.
En cuanto a la conducta que hay que observar en órden á esas es -
pecies de accidentes , síganse en general los principios que hemos for
mulado para las poluciones nocturnas ; pero portándose en tales casos
con mas severidad , porque el hombre es á la sazón del todo compos
sui, mas libre y mas dueño de su organismo.
No es muy raro encontrar individuos que, por la fuerza de la ten
tacion , por una imaginacion muy acalorada ó un vivo recuerdo de sus
antiguos desórdenes , parecen casi irresistiblemente movidos á tocarse
ya directa , ya indirectamente . Este estado merece mucha atencion ,
porque con bastante frecuencia esas especies de personas sucumben á la
violencia de la tentacion , y determinan ó favorecen la polucion , si no
con tocamientos directos ymanuales, á lo menos con ciertos movimien
tos instintivos ó semi-instintivos, ó aup completamente voluntarios,
impresos al cuerpo ó á los miembros. Sin duda estas especies de polu
26 MECHIALOGIA .
ciones tienen lugar contra la intencion de los que las sufren , pero á lo
que parecesu voluntad se encuentra fuertemente debilitada y como tra
bada por la fuerza de la pasion ó de la tentacion. iiftri e ogg?? SEMI)
En todos estos casos no debe escusarse completamente a dichos pe
nitentes cuando se hallan en un estadode vigilia perfecta , y para juz
garlos como corresponde y apreciar su grado de culpabilidad , es pre
ciso considerar su grado de piedad , de amor a Dios y de odio al peca
do , es decir , el conjunto de toda su conducta .
Tambien hemos visto muchos casos bien dificultosos , que habia
parecido burlaban toda la sagacidad de los mas hábiles confesores y
directoresde conciencia. Eran personas que estaban ó parecian estar
muy convertidas, piadosas é ilustradas, y que nos afirmaban con un
sentimiento de profunda conviccion que se veian irresistiblemente im
pelidas a hacer, en símismas y contra su voluntad , culpables toca
mientos seguidos siempre de una completa contaminacion corporal (-).
Dichos sugetos, despues de eso , nos decian con gran calmaque es
taban tranquilos y sin remordimiento , porque se hallaban persuadidos
que su voluntad era del todo estraña a aquellos actos, que ellos no
podian esplicarse . De ahí viene que unos les escusen y otros les con
denen (). 's 34 pik " Di

(1) No es menester admitir en la práctica lo que S. Ligorio y el P. Gravina


pretenden establecer , es a saber , que es probable quod domon , permittente
Deo , absque hominis culpâ manus illius possit admovere ad se tactibus polluen
dum . (Praxis confessarii, cap. vil , p. 70.)
(2 ) Viene al caso referir aquí un pasaje de un médico muy ilustrado y jui
cioso y sobre todo muy buen cristiano , cuya obra (Medecine des passions , por
M . Descaret) es con razon muy del gusto del clero , porque encierra cosas muy
buenas. Ahora bien , he aquí este pasaje , que sin embargo, no deberá aceptar
se sino con cierta reserva , como manifestaremos al momento : « Por lo demás
no se podria prevenir demasiado a los eclesiásticos que los pensamientos, los
deseos y auo los actos impúdicos no siempre dependen de la depravacion del
espíritu : que muchas veces tienen lugar á pesar de los esfuerzos de la voluntad ,
como se ve en ciertas irritaciones del cerebelo y de la médula espinal, así co
mo en las afecciones herpéticas 6 erisipelatosas de los órganos sexuales.»
(Cap . 6 , del libertinaje , p . 479 .)
El autor adelanta aquí una cosa muy grave al afirmar a secas que los actos
imprídicos muchas veces tienen lugar á pesar de los esfuerzos de la voluntad . Él
atribuye estos efectos á ciertas irritaciones del cerebelo y de la médula espi
nal , etc .
Empero , ante todo es bien cierto que el cerebelo y todavía menos la médula
espinal sean los Srganos de las propensiones eróticas 6 del amor fisico ? Sabido
es que Gall es el principal autor de esta opinion , y que , despues del famoso
cranioscopo , mucho se ha dicho y escrito en pro y en contra de ella . Lo que
hay de cierto es que el cerebelo ba sido alternativamente considerado como el
órgano de la música , de la memoria , de la sensibilidad ; y los mas célebres fi
siólogos de nuestros dias le han atribuido la estacion , los movimientos , o mas
bien los movimientos de progresion y de locomocion . Particularmente M . Flou
PART. I. CAP. 1.
¿ Qué bacer pues en esos casos complicados, difíciles y mas frecuen
tes de lo que se piensa? ¿Será menester escusar ó acusar a dichas per
sonas ? No debe hacerse ni lo uno ni lo otro de una manera absoluta ;
sino que es preciso tomar un prudente y justomedio, y decirles : Vd ,
es culpable y escusable á la vez . La fuerza de la pasion , al principio
mal combatida , le ha fascinado y cegado mas o menos acerca del ob
jeto de su tentacion . Esta ha escitado el deseo , el cual a su vez ha ar
rastrado mas o menos la voluntad , que en parte seducida , subyugada
y debilitada , de su lado ha reaccionado viciosamente sobre la razon ,
la ha aturdido y obcecado mas o menos. Así, segun eso , la voluntad
libre , moral, debilitada y mas o menos arrastrada por la concupis
cencia , no siendo ya contenida por la razon mas o menos obcecada y
turbada por la pasion , ha cedido á la voluntad animal; es decir, á los
impulsos instintivos y maquinales. He ahí de qué manera , hasta el
presente , hemos considerado ese estado particular en que se hallan
ciertas personas y que a menudo ponen en grande apuro á los confe
sores.

reps, secretario perpétuo de la Academia de las ciencias , es quien ha probado


esperimentalmente que el cerebelo es el órgano especial de losmovimientos de
locomocion y de su direccion . Esta multiplicidad de opiniones prueba ya que ,
hasta el presente , las funciones del cerebelo habian sido bastantemal conoci
das, y que aun lo son en el dia , puesto que bay animales que están privados
de cerebelo , como los reptiles y los peces, y con todo sienten , se mueven y se
reproducen. Richerand refiere que una muchacha , que murió en el hospital de
San Antonio de Paris , si bien carecia de cerebelo , entregábase con furor á la
masturbacion .
La opinion que atribuye las pasiones libidinosas o el amor físico al cerebelo
no es poes generalmente admitida. Y aun cuando universalmente lo fuese con
qué señales ciertas podria reconocerse que la accion del cerebelo es bastante
fuerte y tiene suficiente predominio para poner trabas á la libertad del hombre
é impelerle a cometer irresistiblemente actos impúdicos ?
Es verdad que M . Descuret añade mas abajo : « El libertinaje es provocado por
una irritacion del cerebelo , lo que se conoce por la pesadez y el calor perma
pentes que se sienten en la region occipital, etc.) (ibid .) Pero estas señales tan
vagas y tan fugaces s'acaso no pueden depender de otras muchas causas , como
do una congestion sanguínea en la cabeza , de un raptus cerebral, de cefalal
gias , de dolores de cabeza agudos 6 crónicos , de jaquecas , de nevralgias, etc .,
y finalmente de todo lo que puede aglomerar sangre en la cabeza ? ( A cuántas
personas no estamos viendo todos los dias que esperimentan pesadeces y calo
res cefálicos , occipitales o de otra clase , y que sin embargo conservan perfec
tamente el ejercicio de su libre albedrío y todo el imperio de su voluntad sobre
sus miembros ? Es preciso pues convenir en que razones tan vagas é inciertas y
un fundamento tan vacilante y tan difícil de conocer y apreciar no pueden su -
ministrar a los eclesiásticos pinguna base sólida bi segura para sus decisiones
morales en el foro interno . No se apresuren pues los eclesiásticos en hacer apli
caciones aventuradas y prematuras de una ciencia vaga , ilusoria y problema -
tica , 6 por mejor decir guardense bien de fundar su porvenir científico en la
mentirosa doctrina dela frenología .
28 MOECHIALOGÍA
La esperiencia nos ha probado que este método, en cierto modo mis
to, es el verdadero. Parécenos tambien el mas prudente . En efecto , si
condenais y desechais a dichas personas como enteramente culpables ,
quizás les ocasionareis una desesperacion funesta ; si , por el contrario ,
las escusais completamente, las mantendreis en un desórden de que
tal vez no se apartarán jamás. Escoged pues un medio justo y pru
dente ; no las escuseis ni condeneis de una manera absoluta , ó mas
bien escusadlas y acusadlas al mismo tiempo , y tal vez , con la ayu
da de Dios , muchas veces lograreis curarlas.
Aquella especie de tentacion puede algunas veces llegar á ser bas
tante fuerte , bastante imperiosa y tiránica que haga necesario el em
pleo de ciertos medios mecánicos , como el de atar las manos y el
aplicar ciertos aparatos ó máquinas que hagan absolutamente imposible
cualquier tocamiento . Esos medios, á la verdad , son singulares y
estremados ; pero á veces se hacen necesarios , y afortunadamente son
tan seguros en su efecto como indispensables en su uso . Es preciso,
continuar empleándolos durante cierto tiempo; y con esto , las polucio
nes, no teniendo ya lugar en el estado de vigilia , acabarán por tomar
otro curso y vendrán á ser puramente nocturnas; y así tambien se ,
amortiguará la vivacidad de la pasion y la tentacion quedará vencida.
La polucion diurna que hemos calificado de pasiva es aquella que
ordinariamente sobreviene durante el dia en el momento de la defeca
cion ó tambien inmediatamente despues del acto de la miccion ; tiene
lugar sin eretismo ni sensacion , y aun con mucha frecuencia de una
manera desapercibida ó sin que la persona lo advierta ; puede tambien
sobrevenir con los caracteres de pasividad latente durante el sueño,
pero esto esmuchomas raro. Se dirá tal vez : ¿ dónde está en este caso
el peligro moral , si la polucion es no solamente involuntaria , sino
tambien desapercibida y no sentida ? ¿dequé sirve pues el hablar de
ella ?
En primer lugar esta especie de polucion, siendo casi siempre la
consecuencia de grandes escesos anteriores y de largas habitudes ya
venéreas, ya onánicas , puede darla medida de su estension y de sus
resultados , sobre los cuales es bueno á veces volver la vista. En se
gundo lugar , es útil y quizás tambien esencial que el confesor sepa
que estas especies de poluciones cambian notablemente el carácter de
las personas, é imprimen un sello de tristeza , de melancolía y de hi
pocondría , hasta un término tal que los enfermos , porque es una ver
dadera enfermedad , pierden no solamente la salud por la abolicion
totalde las funcionesdigestivas y por elmarasmo, sí que tambien , per
seguidos como se hallan por un inmenso é inexorable tedio o disgusta
PART. I. CAP. I.
dos de vivir , pueden entregarse á la desesperacion y terminar su tris
te vida por medio de un horroroso suicidio . Es pues muy importante ,
tanto para el moralista como para el médico , el estar advertido sobre
este punto , y tanto mas que , una vez reconocido el mal, muchas ve
ces su curacion es casi segura .
Las poluciones diurnas , á vista delas bellas y numerosas observa
ciones del profesor Lallemand , pueden ser producidas por otras causas
á masde las arriba indicadas. Esas causas , diferentes de las de cul
pables escesos , pueden ser la presencia de las ascáridas en el colon
recto , la constipacion tenaz y perseverante, las almorranas , las fistu
las en el ano , la materia sebácea acumulada debajo del prepucio , un
prurigo , un herpes pruriginoso intenso fijado en los órganos genita
les , etc . etc .
Segun las observacionesdeWichmann, de Sainte - Marie y de M . La
llemand , hay muchas hipocondrias,.fiebres lentas héticas comonero
viosas , consunciones , tisis ó aparentes tisis pulmonares , que resis
ten á las medicaciones mas racionales , que se han mirado como in
.curables , y que sin embargoal no pson dproducidas
idos , po haysino por la Epolucion
gun erhipocondríacos
hay algunos
diurna. Quizá tambienen hay
m, aque
s qtomando
ue sto apa na
riencias por realidades , se creen perdidos , porque se figuran que es
perimentan pérdidas seminales allí donde no hay mas quedesperdi
cios mucosos ó nubéculas suspendidas en el líquido urinario . Esto na
turalmente nos conduce á decir algunas palabras acerca de aquello
que los teólogos llaman destilacion .
Esa destilacion es una escrecion ureteral que segun parece tiene
analogía con la polucion diurna ; es una especie de derrame pura
mente mucoso , una especie de blenorrea conocida por los antiguos
bajo el nombre impropio de gonorrea benigna. La materia de la desti
lacion es suministrada particularmente por la prostata y los folículos
mucosos de la uretera ; es del todo diversa del verdadero esperma, y
no contiene pingun animalillo microscópico. Esta materia mucosa .
mezclada con la que segregan las vejiguillas seminales, que es muy
diferente del licor espermático , es la materia que pueden dar los im
púberes y los eunucos , ya sea por el onanismo , ó por el estímulo
mental, á lo menos estos últimos. No creemos necesario el hacer ob
servar que cualquier acto violento , que tienda directamente á provo
car esta especie de falsa polucion no deja de ser una accion criminal
y una especie de masturbacion principiada ó consumada , segun la
inminencia ó la aparicion del derrame ; tambien puede muy fácilmen
te tener por resultado la polucion semipal, es decir, la masturbacion ó
el onanismo propiamente llamado , ó conducir poco á poco á la este
30 MOECHI
ALOGÍA
.
nuacion , mucho menos sin duda por la pérdida material que por el
sacudimiento nervioso , como se observa en los impuberes . Por lo de
más el derrame prostático no debe fijar nuestra atencion sino en cuan
to sea mas o menos abundante y mas o menos voluptuoso , y en cuan
to , por consiguiente, se aproxime á la polucion ya sea nocturna ó
diurna ; porque, si es puramente pasivo , poco abundante , sin eretis
mo ni sensacion , y sin que le preceda estimulo , mental ó erótico ,
no hay por qué inquietarse de ningun modo. En el caso contrario , es
preciso comportarse como con respecto á la polucion propiamente lla
mada .
Con estas últimas palabras no pretendemos insinuar otra cosa , sino
que es preciso tomar las mismas precauciones para evitar la destila -
cion grave. No entiendo decidir , cual casuista severo, que , si bien
en esos dos casos hay alguna apariencia de similitud en la forma este
rior , haya identidad de falta ó de culpabilidad . Creemos solamente
que , en la destilacion , habria una falta teológica mas o menos grave,
segun el grado de debilitacion que esa aberracion secretoria produje
se en la economía y segun el grado de deleite carnal igualmente ener
vante que ocasionase, suponiendo siempre un cierto grado de consen
timiento . El principio en que nos fundamos es, que en materia de im
pureza las acciones con pérdida física , consideradas en sí mismas, en
la naturaleza intrínseca y material y dejando aparte las causas, ó
siendo estas iguales, entrañan una malicia que está en razon directa
del grado de deleite , del grado de facilidad de consentimiento, del
grado de importancia de destino del flúido escretado , y del grado de
debilitacion física y moral que esta escrecion determina ; es decir , en
una palabra , que la falta es tanto mas grave cuanto mas tiende a des
truir la especie ó al individuo.
Por lo demás es bastante sabido que , bajo todos conceptos, hay una
diferencia inmensa entre la destilacion y la polucion .
He aquí lo que dice S. Ligorio en orden a esta cuestion :'« Si ipsa
(distillatio) contingat cum notabili commotione spirituum , procul du
bio est peccatum mortale ; quia talis notabilis commotio est pollutio
inchoata . Et idem dicendum si distillatio sit in magnâ quantitate ,
quia talis notabilis distillatio non potest esse sinenotabili carnis rebel
lione ; unde , sicut graviter peccat qui notabilem commotionem pro
curat , ita etiam qui magnam procurat distillationem ... Hinc tenemur
sub gravi obligatione, non solùm hujusmodi distillationem direcie
evitare , sed etiam indirectè , vitando omnes causas proximè in eam
influentes... Si verò distillatio sit in modicâ quantitate , et sine delec
tatione, et commotione , tunc sine peccato possumus illam permittere ,
PART. J. CAP. I. 31
ut dicunt Caj. et Marg. apud Sanch ., l. 9, d. 48 , n. 2 ; Salm ., de vi
præc., c. 7 , n . 35 , cum D . Thom . , Sayr., Bon. et aliis communi
ter ; quia de tali fluxu non est magis curandum quàm de emissione
cujuscumque alterius excrementi, de quo natura se exonerare so
let.» (Lib. 3 , n . 477.)
Mas aquí es preciso hacer observar ,como lo hace el mismo S. Li
gorio , que no seriamenester acongojarse mas de la destilacion ureteral
que del sudor si la primera no fuese acompañada de cierta rebeldía de
Ja carne : « Non estmagis curandum de hâc distillatione , nisi ipsam
carnis rebellio comitaretur, quàm de sudore; » ut aiunt Cajet. etMarg.,
apud Sanch. , lib . 9 , d . 45 , n. 2.
Finalmente S . Ligorio añade : Rectè verò advertit Sanch ., ap.
Salm ., d . n. 35 , et consentit Bon ., de Matr., q . 4 , p. 8 , n . 17 ,
quod directè et datâ operâ procurare quamcumque distillationem ,
etiam levem , nullo modo potest excusari à peccato mortali ; quia ,
reverà , quæcumque distillatio semper , vel ut plurimùm , secum fert
aliquam commotionem et aliquantuli seminis effusionem . (Ibid .)
En fin terminamos todo lo que es relativo á la destilacion con un
pasaje bastante notable de Sanchez : « Quoties est peccatum mortale
dare causam pollutioni prævisæ non removendo causas notabiliter in
fuentes , similiter estmortale dare causam notabili distillationi, aut
commotioni spirituum vitalium servientium generationi , per similes
causas ; quia hæc distillatio et commotio spirituum est notabiliter
turpis , et quasi inchoata pollutio.» ( Lib. 9 , d. 46 , n . 31.)
SECCION V.
De los movimientos desordenados.
Estos son, en ambos sexos , ciertas sensaciones ó movimientos des
ordenados en los órganos genitales y que disponen mas o menos a la
polucion. Cualquiera que sea el modo con que esos movimientos se
levanten , es pecado mortal el consentirlos y complacerse voluntaria
mente en ellos , porque en este caso siempre hay delectacion morosa ,
carnal ó libidinosa y peligro próximo de ir mas lėjos ó de caer en una
contaminacion esterior. Si esos movimientos desordenados no son vo
luntarios ni en sí pi en su causa , y de ninguna manera se consiente
en ellos , están exentos de todo pecado .
Cuando las causas de los movimientos desordenados han sido pues
las libremente , es menester juzgarlos como se hace con la polucion
querida indirectamente , es decir, en su causa voluntaria , próxima o
remota , con la diferencia sin embargo que la polucion siempre es
una materia grave , al paso que los movimientos desordenados pue
32 MOECHIALOGÍA .
den ser de tal manera leves y distantes de todo peligro o motivo de
polucion que es menester acongojarse muy poco por su causa , si por
otra parte ella es honesta en sí.
Mas ¿ qué es lo que deberá uno hacer cuando esperimente inculpa
biliter esas especies de movimientos ? Es cierto que no puede consen
tirlos sin pecar mortalmente. No obstante , como dice Bouvier, «Sæpè
non expedit positivo conatu eisdem obsislere : tunc quippe phantasia
(la imaginacion) ipsâmet contentione excandescit, et per sympathiam ,
spiritus genitales magis excitat : tutiùs est igitur Deum placidè invo
care , B. Virginem , angelum custodem , patronum aliosque sanctos
precari, ab objectis periculosis fugere , mentem ab imaginibus obsce
nis tranquillè avocare , alid convertere , et serâ applicatione diversis
et præsertim externis negotiis vacare.» ¡Dissert., in sextum Decalogi
præceptum .)
Mejor será copiar integro el testo que sigue inmediatamente , por
que nos parece redactado con una rara y profunda prudencia .
« Quæritur an manere indifferens circa motus concupiscentiæ invo
luntariè natos , eos neque approbando, neque improbando, sit pecca
tum et quale peccatum .
» R . 1 .° Omnes fatentur talem indifferentiam esse ad minùs pecca
tum veniale , quia mens inordinatis concupiscentiæ motibus saltem re
pugnare tenetur. :
» 2 .° Sanchez , S. Ligorio , 1. 5 , n . 6 , etmulti alii dicunt peccatum
istud , secluso proximo pollutionis periculo , esse duntaxat veniale:
nam , inquiunt, ideò repellendi suntmotus inordinati, quia timendum
est ne ad pollutionem deducant, vel consensum voluntatis in delecta
tionem veneream trahant : ergo si absit vel remotum sit periculum ,
levis est obligatio illud devitandi. Tenent verò dari obligationem sub
peccato mortali positivè resistendi saltem per actum displicentiæ , si
proximum existat periculum vel in pollutionem incidendi, vel in de
lectationem veneream consentiendi.
» Alii communiùs docent indifferentiam cum plenâ advertentiâ circa
motus inordinatos etiam leves esse peccatum mortale, tùm ob propriam
eorum inordinationem , tùm ob periculum eis assentiendi. Ita Valen
tina , Lessius, Vazquez , Concina , Billuart quoad praxim , Habert,
Collet , P . Antoine, Dens, etc .
»Ab eâ sententiâ periculosè recederetur in praxi , quamvis altera
speculativè sumpta probabilitate non careat : requiritur ergo ut posi
tiva displicentia saltem virtualis semper existat in mente circa motus
inordinatos præter voluntatem excitatos . Hæc autem displicentia suffi
cienter habetur quandò voluntas delectationi venereæ ex firmâ deter
PART. 1, CAP . I. 33
minatione opposita , motus concupiscentiæ contemnit et aliorsùm se
convertit.
» Hæc aliundè pro se dicta non arbitrentur nonnulli scrupulosi ad
torquendam propriam conscientiam nimis ingeniosi , qui, dùm anxii
sint an consenserint nec ne, stimulos carnis vehementiores et quasi
perpetuos efficiunt: firmum habeant propositum semper castè vivendi,
et tunc motus inordinatos contemnant , eos minimè curantes in con
suetå agendi ratione , in examine conscientiæ et in confessione ; expe
rientiâ enim constat hanc tutiorem et breviorem esse viam eorum ces
sationem obtinendi. o
SECCION VI.
De la conducta que hay que observar para con los masturbadores 6 los
onabistas.
Aquí no hablaremos de los caracteres y de las señales con que uno
fácilmente reconoce a los miserables esclavos y víctimas de la horrible
y voraz pasion del onanismo : el lector podrá ver lo que tocante á esto
dijimos en nuestro Ensayo sobre la teologia moral.
Antes de todo apliquense los confesores con el mayor abinco á pre
venir con anticipacion contra ese espantoso vicio a todos aquellos que
están confiados á su piadosa y vigilante solicitud , y á desarraigar y
destruir completamente las habitudes desgraciadamente contraidas .
«Caveant imprimis – dice mons. Bouvier - ne juvenes et præsertim
puellas interrogando phantasiam eorum imprudenter lædant et in cau
sâ sint , ut pluries accidit , quòd in turpia labantur. Longè satius esset
periculo integritatem confessionis non procurandi se exponere quàm
animas contaminare , vel in detrimentum religionis offendere.» Los
medios que hay que oponer a la polucion , ya sea voluntaria , ya invo
luntaria , suponiendo la oportunidad de la medida preventiva para la
última, son fisicos ó morales.
Los principales remedios físicos o higiénicos consisten en un género
de vida bien arreglado , una exacta templanza , abstenerse de alimen
tos escitantes, cálidos ; cargados de especies y flatosos , así como de
bebidas espirituosas, de la cerveza en particular , y en general de
todo licor alcohólico. Deberá pues seguirse un régimen suave, sóbrio ,
farináceo y lácteo ; la cena muy ligera . Cómase y bébase frio en cuan
to se pueda ; tómense bebidas enfriadas con hielo y aun hielo puro y
cuanto mas mejor. Convendrán mucho los baños frios de rio , de es
tanque y de mar sobre todo ; se harán aplicaciones refrigerantes loca
les por medio de una vejiga que contenga hielo machacado, nieve ó
aguamuy fria con sal comun . Se tendrá cuidado de evitar el acostarse
34 MOECHIALOGÍA .
boca arriba ; consérvese mientras se pueda eldecúbito sobre un costa
do y particularmente sobre el derecho, y siempre en la camamas dura
que se pueda soportar, ó á lo menos no servirse sino de un colchon de
clin , jamásde lana y aun menosde pluma: todo eso con el objeto de
evitar un esceso de calor durante el sueño , que, en general, debe ser
profundo y de corta duracion . Tambien se evitará con cuidado el cons
tiparse y que la vejiga se llene en demasía ; porque esto es considera
do como una causa que predispone notablemente á la polucion noc
turna.
En general, será bueno hacer un ejercicio moderado, dar frecuentes
paseos al aire libre y sobre todo por la campiña; mantener suavemente
las funciones de la piel , y guardarse del frio y de la humedad .
En cuanto á los niños , á los adolescentes y aun á todos los jóvenes
masturbadores, es preciso prescribirles los ejercicios de una fuerte y
casi incesante gimnástica , ó cuando menos tenerles constantemente
jadeando por una grande fatiga corporal. Este sentimiento de estremo
cansancio , á mas de ahogar y comprimir todo pensamiento libidinoso
ó erótico , les escitará una hambre capina , y producirá una viva ne
cesidad de alimentacion y de reposo físico. Se hará de manera que
coman ó cenen muy tarde, y que se acuesten lo mas tarde posible , es
decir, cuando estén vencidos y agobiados por la fuerza del sueño y por
las fatigas del dia . Se da por sentado que siempre se debe procurar que
los jóvenes, varones ó hembras,madruguen mucho , ó á lo menos se
levanten luego que despierten.
Por lo quemira á los medios morales que hay que oponer al deplo
rable vicio de la masturbacion , los principales consisten en apartarse
detodos los objetos peligrosos y capaces de llenar el espíritu de pen
samientos deshonestos y deinflamar vivamente la imaginacion ; en ve
lar sobre sí y sobre todos sus sentidos; en atormentar y macerar su
carne con penitencias y mortificaciones corporales ; en considerar los
males infinitos que acarrea la habitud del onanismo; en meditar sobre
la muerte, los juicios de Dios, el infierno y la eternidad ; en huir
del ocio y de la soledad , y en fin en confesarse a menudo y rezar
mucho .
En cuanto á admitirles á la santa comunion , la cosa es mas difícil.
Con todo es cierto que el uso de los sacramentos de la confesion y la
eucaristía puede por sí solo dar la voluntad , la fuerza y el valorne
cesario para triunfar completamente de la imperiosa y tiránica pasion
del onanismo. La esperiencia prueba que la razon y todos los motivos
naturales y humanos son muchas veces armas impotentes para domar
á ese monstruo que devora con furor á la juventud abandonada á si.
PAKT. I. CAP. I. 35
misma. Es preciso pues recurrir á remedios mas fuertes y eficaces pa
ra curar esa asquerosa , esa inmensa llaga del alma. Ahora bien , la
comunion es aquí sin duda alguna elmas heróico de los específicos .
Si uno trata con demasiada severidad á esas especies de penitentes, es
muy de temer que no vuelvan y se corrompan mas ; si , por el contra -
rio , es uno sobrado benigno é indulgente con ellos , nunca saldrán
del inmundo cenagal en que la inexorable habitud les retiene cau
tivos .
Es pues necesario que el confesor esté dotado de gran prudencia é
inflamado de gran celo de caridad para ganar á Dios esos pobres é
infelices penitentes . Oigales en confesion á lo menos una vez cada se
mana , escíteles en gran manera á que se arrepientan de todas sus fal
tas y sobre todo inspireles una firme é inalterable resolucion de no
volver á cometerlas y de renunciar enteramente á su funesta y deplo
rable habitud.
Es preciso que el confesor examine con mucha atencion si las re
caidas provienen de la malicia , de la corrupcion , de la inclinacion al i
pecado, de la pereza y de una falta de firme propósito , ó si tan solo
de la debilidad del penitente y de la violencia de la tentacion. En el
primer caso , es menester diferir la absolucion hasta tanto que uno vea
señales ciertas de enmienda y de conversion ; en el segundo caso , es
preciso apiadarse de estas pobres almas que están luchando penosa - '
mente contra su tiránica pasion y que parece se hallan verdaderamen - .
te coptritas y arrepentidas. Por otra parte , si esos jóvenes no tuvie
sen la fe y la esperanza del perdon ¿ acaso se presentarian cada se
mana al tribunal de la penitencia ? cierto que no, harian lo que la
gran mayoría ; rechazarian el remedio por demasiado amargo , y pre
feririan los encantos engañadores de un mal que en secreto les mata
acariciándoles voluptuosamente . Así pues cuando uno juzgáre pru
dentemente que sus buenas disposiciones y sus buenos sentimientos son
moralmente ciertos , podrá concederles la gracia de la absolucion y de
cuando en cuando admitirles á la santa mesa .
En cuanto al retardo no puede establecerse una regla fija é inva
riable : todo esto se deja á la discrecion y pradencia de los confesores,
quienes deben arreglar su conducta por la cualidad de las disposicio
nes y el fervor de sus penitentes. Nada hay absoluto en órden á esto :
todo es y debe ser necesariamente relativo a la individualidad y á la
especialidad . Lo que hay de seguro es que debe atenderse menos á la
medida del tiempo que á la del dolor. Non tam consideranda mensura
temporis quam doloris. Mons. Bouvier hace observar que un retardo
de dos meses sin recaida , como lo quieren Juenin, Collet y otros mu
36 MOECHIALOGIA .
chos, es escesivo y amenudo peligroso para esas especies de penitentes.
De otro lado , S. Ligorio (lib . 6 , n. 463) y otros varios autores que él
cita piensan que un plazo de un mes es aun demasiado largo y que no
debe diferirse la absolucion á mas de ocho , diez ó quince dias á lo
sumo , con tal que se noten verdaderas señales de contricion .
Si un confesor se cree obligado á basar su conducta en la precision
aritmética ó en cifras, deberá , en nuestro concepto, separarse de los
dos términos estremos y tomar elmedio entre una y ocho semanas , es
decir, cuatro semanas y media ó un mes largo. Situándose así en me
dio de los estremos o á una distancia conveniente y arreglada del mo
linismo y del jansenismo, es decir , de una condescendencia peligrosa y
de un rigor vituperable , queda uno entre los límites de la sabiduría
y de la prudencia ; y esto es lo que hace el sabio en todas las cosas
humanas en que hay division ó mucha divergencia de pareceres ó de
opiniones. In medio tutissimus ibis.
Mons. Bouvier tambien hace la observacion siguiente : «Aliquando
suadendum est matrimonium iis qui nubere possunt, tanquam uni
cum , aut saltem tanquam efficacius remedium . Ubi verò agitur de
juvenibus qui statum perpetuæ continentiæ amplexuri sunt, cum ma
ximâ cautione procedendum est . Quitali vitio inquinati sunt et in pol
lutiones sæpè labuntur communiter temerè et imprudenter castitatem
voverent : à professione religiosâ igitur et multò magis à statu cleri
cali repelli debent , nisi extraordinaria dent signa conversionis et lon
gâ experientiâ , nempè per plures annos, firmitatem propositi demons
trent ac pignus perseverantiæ exhibeant.»
Nada hay mas prudente que el seguir ese principio , con tal que
no se use de estremado rigor y no se prolongue demasiado el tiempo
de la prueba . Un año de continencia perfecta , en plena razon , el fin
y la vida regular y piadosa que se supone llevan las personas , en la
especie , debe ser generalmente , en nuestro concepto , una garantia
moral de una perfecta conversion ,
En otra obra , usé un lenguaje algo diferente de lo que acabo de
decir , pero sin embargo encerrado siempre en los límites de lo verda
dero , y que , en viniendo el caso , puede tener igualmente su aplica
cion. He aquí lo que dije :
«Los mejores medios deberian ser puramente espirituales y mora
les : el temor de Dios , las amenazas formidables , los santos terrores
de la religion , la vista de la enormidad del crimen y el terrible cas
tigo que le aguarda , etc.) He ahí sin duda los medios que son ó al
menos deberian ser los mas saludables y eficaces, si uno los conside
ra en sí mismos y en su aplicacion a las personas instruidas en la re
PART. I. CAP. I. 37
ligion y que aun no han perdido la fe ; pero desgraciadamente en es
los tiempos de decadencia general de la ſe, la esperiencia prueba har
to á menudo que no son suficientes. En el dia es pues necesario que
unos hombres enteramente sumidos en la materia , dominados por el
imperio de los sentidos y casi absolutamente incapaces de recibir im
presiones religiosas , es necesario , digo, que á hombres de ese carác
ter se les apliquen remedios sensibles , actuales y presentes , los re
medios de esta vida , y no de la otra ; es preciso amenazarles con el
deshonor , la infamia , la ignominia , con todos los horrores de las
enfermedades mas dolorosas , mas degradantes y mas vergonzosas , y
en fin con una muerte precoz seguida de un castigo eterno. Si , me
diante todo ese aparato de terror , no se logra enmienda alguna , se
procurará que lean la pequeña obra de Doussin -Dubreuil con preferen
cia a la de Tissot , ó tambien , si fuere posible, lo que acabamos de
decir sobre esta materia en nuestro Ensayo sobre la teologia moral.
Es verdad que la lectura del librito de Tissot ha corregido á muchos
jóvenes ; sin embargo es mas conveniente bajo todos conceptos que
lean el primero.
Terminamos indicando el medio propio para detener las poluciones
nocturnas enervantes , de que hemos hablado en nuestro Ensayo sobre
la teologia moral, aunque sin darlo a conocer. Hélo aquí descrito en
pocas palabras : .
Durante uno ó dos minutos, primis duobus digitis cujusvis manûs
sat fortis compressio facienda est ante et juxta anum , vel potiùs su
pra anteriorem ani marginem , id est ad ortum vel originem uretri si
ve urinæ canaliculum , ita ut ejusmeatus paulisper deleatur et perin
dè omnis seminis fluxus prohibeatur. Sed hunc in finem , et ut opus
istud rectè perficiatur subdifficilis conditio , scilicet evigilatio vel sal
tem semievigilatio requirenda est , quò compressio exerceatur tempo
re pollutionis imminentis vel quidem aliquandò jam inchoatæ .
Empero , el medio de despertarse á tiempo es el quererlo vivamente
al acostarse y el procurar dormirse bajo la fuerte impresion de esta
idea esclusiva o dominante. i
La esperiencia prueba que bastante a menudo este medio moral por
sí solo es suficiente para promover el desvelo necesario . Un primer
éxito facilita el segundo, y así sucesivamente hasta que uno logra ha
bituarse. Cuando se ha conseguido muchas veces oponerse al accidente
nocturno , recóbranse las fuerzas , y los órganos , que se hallaban re
lajados y como acostumbrados al derrame, van fortificándose por la
habitud contraria : puede uno llegar á hacerse del todo dueño de ese
vicio y curarlo radicalmente.
GIA .
38 MOECHIAALO
MOEDI

Fácilmente se conocerá que el medio propuesto es casi infalible en


los casos de polucion diurna ó en el estado de vigilia .
Observacion importante. Esmenester sobre todo aplicarse á ser cas
to de corazon y de espíritu ; es decir, á estar libre , en cuanto se pue
da , de deseos , de inclinaciones , de sensaciones y de pensamientos
eróticos, impuros y carnales, porqué, si bien todas esas cosas se con
sideren como involuntarias y exentasde pecado , no dejan de ocasio
nar con frecuencia ciertos ensueños que determinan muy a menudo,
como es sabido , los accidentes que uno procura prerenir.
Hay que dar otro consejo , que no carece de importancia , que es el
acostarse sin temor de lo que pueda acontecer durante el sueño. Esta .
preocupacion de espíritu , esta inquietud y zozobra solo sirven para
turbar la imaginacion y el sistema nervioso , y para producir el efec
to que trata uno de evitar.
SECCION VII.

De la polucion voluntaria o de la masturbacion considerada en el sexo


femenino .

Aquíno reproduciremos todos los detalles tocante á los desórdenes


físicos y morales quela vergonzosa y deplorable habitud dela mastur
bacion produce en el sexo ; el lector podrá verlos en nuestro Ensayo
sobre la teologia moral (4.a edic .).
La teologia nos enseña que, en el hombre, el onanismo ó la polucion
voluntaria es un mal intrínseco , porque tiende á la destruccion de la
especie y del individuo: primeramente de la especie , porque , å mas de
que inducirá al hombre á no casarse , la masturbacion continuada hará
por fin que el sémen sea improlífico ; en segundo lugar, del individuo,
destruyendo totalmente su salud , y conduciéndole así á la muerte.
Harto lo prueba la esperiencia diaria.
Aunque en la mujer no exista esperma propiamente dicho como en
el hombre , la masturbacion en el sexo femenino no deja de ser in
trínseca ó esencialmente mala ,porque, á mas de que tambien inspira
aversion almatrimonio , tiende a destruir el individuo , y por consi
guiente , la especie indirectamente. Sise nos objeta que la materia de
la polucion voluntaria , en la mujer , no es prolífica , sino una simple
escrecion mucosa , responderemos que esta contaminacion es , por si
misma y por la manera que se la produce , esencialmente libidinosa y
doblemente debilitante , primero por la pérdida material, y mas toda
vía por la perturbacion y el sacudimiento nervioso que determina , co
mo lo vemos claramente en los niños ó muchachos impuberes incapa
PART. 1. CAP. I. 39
ces aun de secrecion seminal, á quienes la masturbacion conduce nada
menos que al marasmo y tambien algunas veces à la muerte . Aquí
vemos evidentemente que el estímulo ó la perturbacion nerviosa es
por sí sola la causa de todos los desórdenes. Si, en los muchachos de
que hablamos , hay alguna vez una ligera evacuacion , esta es efecto
del estímulo local llevado al esceso , en virtud de este principio fisio
lógico : ubi stimulus ibi fluşus. A fin de evitar otra objecion , bueno se
rá hacer observar aquí que no hay que temer la 'habitud destructiva y
mortal de cualesquiera otra escrecion ya sea sanguínea ó mucosa ,
sea cual fuere su aparato.orgánico , porque este jamás puede conver
tirse en foco de una sepsibilidad electiva , erótica y por consiguiente
enervante . Elhombre muere por donde se reproduce.
Aunque la mujer no segregue verdadero esperma , la masturbacion
no obstante es tan funesta en este sexo como en el otro por las razones
arriba espuestas. Esta malbadada inclinacion, esta pasion tiránica, ha
ce , en las mujeres, 'casi tantas víctimas como en los hombres.
Merced á la mala educacion fisica y moral y á la corrupcion de
nuestra desgraciada época , èl onanismo, en ambos sexos, se ha he
cho en demasia frecuente . « Es constante , dice el doctor Deslandes,
que un gran número de muchachas y casi todos los adolescentes se
masturban ; así es que no hay jóven alguno queuno no deba conside
rar entregado al onanismo, ó como próximamente espuesto a entregarse
á semejante vicio .» (De l'Onanisme.)
Un cura de aldea me aseguró que , de doce niñas que debian hacer
su primera comunion , solo habia' una que no se habia entregado á
feas habitudes. Si esto sucede en las aldeas ¿ qué no será en las ciu
dades, donde la juventud es generalmentemas sensible y más precoz ,
es decir , mas inducida al vicio y á la corrupcion ?
La mayor parte de los teólogos , de los moralistas y de los casuis
tas apenas hacenímérito de la masturbacion en la mujer comoá des
órden posible. Hay una multitud de tratados ex professo sobre el ses
to mandamiento que ni una palabra dicen en orden a esto , ¿ Es de
admirar, en vista de eso , que haya tantos sacerdotes jóvenes muy ig
norantes en esta materia ? ..
Tres apud nos masturbationis species vel potiùs formæ in feminis
distinguuntur : 1.° masturbatio clitorina ; 2.º vaginalis ; 3. uterina.
Mas abajo se verá el motivo y fundamento de esta distincion , que, á
primera vista , no parece que pueda tener un grande objeto práctico ;
mas, ya que está fundada en la verdad, tarde o temprano podrá tener
su aplicacion . . .
1 .º Prima forma vel clitorismus, ut aiunt, est modus ordinarius
MOECHIALOGIA .
Hæc contaminatio manualis præsertim fit ope parvuli organi quod
clitoris nuncupatur et quod , juxta medicos, habetur venerei æstri
vel carpalis voluptatis sedes aut præcipuum organum . In superiori et
mediâ parte vulvæ , id est pudendi, collocatur. Id valdè exiguum or
ganum , sive erethismb frequenti vel ferè perenni , èmollitie orto, sive
dispositione nativâ , in tantum crescere potest , ut aliquando penem
virilem quodam modo simulet, Undè , temporibus ignorantiæ , nala
est falsa hermaphroditorum opinio, Undè rursùs quædam mulieres per
ditæ et moribus corruptis mersæ aliquandò usurpare vel potiùs imi
tari vices exclusivè viriles conantur. Antiguamente las mujeres roma
nas, segun cuentan Juvenal y Marcial, eran muy dadas á este género
de corrupcion , y Tissot asegura que este asqueroso desórden es fre
cuente en nuestros dias. Se ha visto muchas veces , añade , á mujeres
que amaban á muchachas con tanto ardor como los hombres mas apa
sionados y aun tenian la mayor envidia á los que parecia les profesa
ban algun afecto ó inclinacion . Mas arriba , habia ya dicho , al hablar
de esta estraña pasion en lasmujeres, que el peligro no es menor que
en los otros medios de contaminacion , ' que sus consecuencias son
igualmente terribles , y que todos esos diversos caminos conducen al
tedio , á la estenuacion , al dolor y á la muerte .
Segun las observaciones de Parent-du - Chatelet, quien escribió úl
timamente sobre las prostitutas de París , este desórden es muy fre
cuente entre esas desgraciadas jóvenes , si bien ordinariamente nada
se observa en ellas de anormal en la organizacion del aparato genital .
Porque el estraordinario desarrollo de que se acaba de hablar parece
ser bastante raro aun en esa clase de mujeres . Sin embargo esto no las
priva de entregarse á aquellos criminales desórdenes ó á aquellos abo
minables maridajes. Tales infamias son calificadas de atentado contra
las costumbres por las prostitutas que se reputan bastante púdicas pa
ra no entregarse à ellas : y el Bureau des maurs , especie de tribunal
correccional que rige y vela las casas toleradas , castiga muy severa
mente aquel atentado contra las costumbres. Todo lo demás á lo que.
parece es juzgado inocente , decente y moral. Es menester no olvidar
que aquel atentado contra las costumbres, lo mismo puede cometerse en -
las casas toleradas que en cualquiera otra parte .
Se ha preguntado si la ablacion del clítoris , hecha con el objeto
de curar la nimfomanía ó la pasion desenfrenada de la masturbacion ,
podria llegar á ser una causa de la esterilidad ; y si , en este caso ,
aquella operacion podria ser lícita en buena teologia. No cabe duda
que esta es una cuestion del todo nueva. Tenemos fundado motivo
para creer que aquella operacion , que por otra parte se,practica muy
PART . I . CAP . I. 41
rara vez, no puede volver estéril á la mujer, porque aquella débil par
te del aparato-genital no parece de ninguna manera esencial al acto de
la fecundacion . Parece que el clítoris no es mas que un órgano de de
leite ; pero el deleite po esto absolutamente necesario , como tenemos
probado en nuestro Ensayo sobre la teologia moral. Solo sirve para
determinar ó para invitar al acto , y no para convertirse en instru
mento esencial al acto de la generacion , á menos sin embargo que se
quiera suponer que sea quizás el órgano destinado á escitar simpática
mente la accion aspirante de la matſiz , ó á poner en juego el movi
miento de las trompas uterinas ; pero esto seria esplicar una hipótesis
por medio de otra hipótesis. A mas de que , esta opinion muy impro
bable , á lo menos que yo sepa , jamás ha sido emitida por ningun fi
siólogo. Desde luego pueden oponérseles los casos de concepcion con
oclusion casi completa ,. en que, de consiguiente , el coito no pudo
cumplirse normalmente , y entonces , con poco que uno reflexione,
comprenderá fácilmente la nulidad de la influencia del clítoris en la
fecundacion . Hasta que observaciones multiplicadas y bien aseveradas
prueben lo contrario , estaré persuadido de que la ablacion del clito
ris no debe causar la esterilidad , y que de consiguiente , es una ope
racion tan lícita como la amputacion de otra parte del cuerpo , como
de un pecho lastimado; etc . De nada serviria insistir mas sobre un pun
to casi puramente especulativo ; pero era necesario contestar á una
pregunta que se nos hizo. ! ;* !*4!2!!! ,
Debe incluirse en la primera especie o forma de contaminacion cor
poral aquella que por lo comun se hace non tactu manuali, sed quo
libet corporis motu voluntario , sive ipsius generali extensione , sive
tantùm 'membrorum , nempè tibiarųm , vel compressione femorum ad
invicem , etc . 0}},350$!!!3 ļ i
2 .° Secunda species vel vaginalis minùsfrequens quàm præcedens
generatim præ se fert majorem phantasiæ corruptelam et labem , quip
pè istud mollitiei genus semper fit quâlibet introductione , sive digi
torum , sive quorumlibet obviorum instrumentorum , quæ libidini sug
gestiones diabolicæ subministrare non desinunt.
· 3.° Tertia et ultima species vel uterina aliis modis velformismul
tò rarior ; sed gravissima , valdè sanitati nociva, maximè inordinata
ac proindè admodùm culpabilis, vel peccaminosa , ratione gradûs ma
litiæ circumstantiarum plùs minùsve aggravantium . Hic et talis est
modus: frequens titillatus vel irritatio exercetur ad collum uteri (id
est ad inferiorem matricis partem quæ in vaginæ summitate reperitur)
ope digitorum vel aliorum quorumdam instrumentorum . Bueno es que
esta circunstancia , que nos parece agravante , venga á conocimiento
M ECHIALOGÍA .
de los confesores , si con prudencia puede lograrse. En efecto , esa ir
ritacion uterina , indefinidamente reiterada, puede ser una causa di
recta de la esterilidad. Eos otros modos de contaminacion manual po
drian al cabo producirla tambien , conduciendo la mujer al último
grado de debilidad y de marasmo; pero esa esterilidad no seria deter
minada sipo de una manera indirecta y accidental y por causas gene
rales, al paso que la última especie ó la contaminacion uterina , inde
pendientemente de aquellos mismos accidentes , puede tambien causar
directamente la esterilidad , deformando y desorganizando el cuello
uterino, por el desarrollo de escirros, de úlcerasmuy graves, roedoras
ó verdaderamente cancerosas. Así pues , lo repito , la última espècie o
la uterina , á mas de que puede , como las otras, producir los efectos
generales y aun la muerte , es á mayor abundamiento capaz de deter
minar, con su accion local, una esterilidad directa é, incurable . Con
viene que los confesores tengan á la memoria este pasaje de S. Cesá --
reo : «Mulier autem quæcumque fecerit hoc per quod jam non possit
concipere, quantoscumque parere poterat, tantorum homicidiorum ream
se esse cognoscat. »
No nos cabe la menor duda de que una multitud de enfermedades
del aparato genital de la mujer son el resultado de la masturbacion .
¿ Acaso se vieron nunca én mayor número que hoy dia todas esas ul
ceras (1) , esos escirros , esos espantosos cánceres del cuello del útero,
que harto á menudo matan á las mujeres ó las hacen estériles ? Tal
mujer atribuye el principio deun mal horrible que la devora á conse
cuencias hereditarias , y su esterilidad á causas que hace derivar de
una naturaleza dura é ingrata , siendo así que tan solo deberia quejar
se de su funesta pasion , que la colocó en una posicion desesperada y
sin remedio .
Vimos , al hablar del onanismo en el sexo masculino , que la conta
minacion manual puede ser incompleta , nerviosa , seca y sin efusion .
Estos prodromos ó este eretismo preparatorio se observan igualmente
en el sexo femenino, es decir, que la contaminacion manual se verifica
muchas veces sin ninguna evacuacion , ni esterna ni interna , porque
la maniobra criminal no se ha llevado hasta el estremo de la consu
macion del acto. En este caso 'no hay masturbacion propiamente lla
mada por falta de efusion ; hay únicamente un movimiento congestio
nal ó fluxiopario , es decir , una fluxion , una congestion ó una afluen
cia de humores encerrados todavía en el tejido de los órganos. Esta con
gestion humoral es la materia , la causa ó al menos la ocasion de los
(1) Algunas veces las ulceraciones del cuello de la matriz determioan violen
tos deseos eróticos o libidinosos , al principio y al fin de su cicatrizacion.
PART. I. CAP. I. 43
movimientos desordenados , carpales, eróticos que acompañan la con
taminacion manual, y que producen quemdam delectationis venerece
sensum vel humoralis orgasmi. Así pues esta especie de contamina
cion manual incompleta , aunque no vaya acompañada mas que de
simples movimientos desordenados interiores , no por esto deja de ser
una falta muy grave , á causa del motivo desordenado y del fin crimi
nal que se propone la persona que se abandona á su pasion . Pero este
pecado , como es sabido , es evidentemente menor que el crimen del
onanismo consumado , en que la pasion queda plenamente satisfecha ;
en este último caso el pecado mortal está en el último grado de grave
dad en su especie. Bueno será hacer observar queesa especie demas
turbacion seca , nerviosa, incompleta y sin efusion humoral ni esterna
ni interna , no deja de ejercer , con el sacudimiento nervioso que la
acompaña , un fatal influjo sobre todo el organismo y de consiguiente
sobre la salud en general. . ; .: : ..
Si ahora se nos pregunta : ¿ De qué sirve y-á qué conduce el distin
guir ó dividir de ese modo la masturbacion en el sexo femenino ? pre
guntaremos tambien , á nuestra vez , si un hombre que , por una refi
nada corrupcion , se mutilase un órgano , haciéndose así inhábil para
el acto de la generacion '(testigo el pastor del Languedoc ) ¿ por ventu
ra no seria mas culpable que aquel que se hubiese entregado á la prác
tica de la masturbacion' ordinaria , sin haber sufrido la misma con
secuencia ? No puede caber en esto la menor duda . Ahora bien, lo que
sucedió en un hombre mucho mas fácilmente puede tener lugar en la
mujer . - Si los penitentes están obligados á manifestar al confesor las
circunstancias que agravan notablemente el pecado , y sobre todo
aquellas que cambian su especie y no deberian igualmente declarar en
confesion el acto criminal que les ha privado para siempre de la apti
lud generatriz ? Y volviendo a la especie del n . 3, página 41 , & por
ventura la mujer que destruye en su persona para siempre la facultad
de concebir no peca mucho mas gravemente que aquella que solo se'en
tregó á actos de la masturbacion ordinaria sin perder por eso su ap
titud para la concepcion ? ¿ Acaso son de una misma especie esas dos
faltas ? Y en no queriendo admitir la diferencia de la especie , forzoso
será reconocer en ellas algunas veces una circunstancia notable y ter
riblemente agravante : luego puede en ellas baber materia de acusa
cion , á lo menos cuando el desórden ó el acto criminal ha sido lleva
do al grado necesario para determinar la esterilidad , estado que , en
general , pueden fácilmente conocer los hombres del arte. Luego aque
lla distincion no es insignificante , inútil y puramente especulativa .
Si decis que , en la especie , las personas obran de buena fe , re
MOECHTALOGIA .
tuerzo el argumento en contra , y os contesto que los penitentes pue
den igualmente obrar de buena fe en una multitud de casos en que los
teólogos les obligan á declarar las circunstancias que agravan notable
mente el pecado ó que cambian-su especie , como, por ejemplo , la
fornicacion con la circunstancia de parentesco y de afinidad en el
grado más remoto (incesto ) (4) ó la percusion de un laico , de un cléri
go ó de un religioso ; ó el caso de levis ó atrox percussio , etc. (censu
ra ). Podria deciros tambien : de qué sirve aquí el declarar esas cir
cunstancias ? los penitentes confiesan de buena fe el hecho y no se ha
llan en estado de apreciar el valor ni el objeto de tales distinciones
teológicas. Resultaria pues de ahí que la doctrina de los teólogos
acerca de las circunstancias agravantes adoleceria del mismo vicio que
la nuestra . Pero como esta doctrina de los teólogos debe ser manteni
da , puesto que se funda en las decisiones del concilio de Trento , si
guese de ahí que la nuestra , que le es idéntica , debe serlo igual y
necesariamente , al menos siempre en la teoría y algunas veces en la
práctica.
Finalmente, cuando esa distincion ó ese conocimiento no sirviese
mas que para ayudar al confesor á juzgar mejor del estado ó del gra
do de pasion de su penitenta , seria ya una cosa muy útil. Pero para
eso no está obligado a hacer preguntas directas ; puede contentarse
con interrogar de una manera general é implicita , ó aun , segun las
circunstancias , ceñirse al papel de mero oyente .
Concluiremos lo que teníamos que decir acerca de la masturbacion
en las mujeres con algunas palabras sobre la conducta que debe ob
servar el confesor con respecto a las personas escesivamente tímidas ,
ó á quienes una falsa vergüenza impide esplicarse lo bastante sobre
esta materia . Este pequeño consejo no tanto va dirigido a recordar á
los confesores de esperiencia cosas que deben serles familiares como á
enseñar á los sacerdotes jóvenes , que entran á ejercer el santo minis
terio , aquello que quizá aun ignoran , ó que no lo saben de una ma
nera bastante perfecta y sobre todo bastante práctica.
El confesor debe desde luego mostrar un semblante tranquilo , afa
ble y benévolo . Invitará á las jóvenes penitentes á que digan con sen
cillez todo cuanto sepan sobre el punto en cuestion . Tomará un ade
man conveniente á fin de que no parezca que le admira lo que está
oyendo , ó que escucha la confesion con demasiado interés ó curiosi
dad ;mas vale , que en apariencia , se muestre como que oye con in
diferencia lo que se le dice . El confesor podria tambien decir que en

(1) Sabido es que el parentesco puede ser carnal, legal y espiritual.


PAKT. I. CAP. 1. 46
esto otras veces ha oido cosas mucho peores. Cuando juzgare necesa
rio hacer alguna pregunta , tendrá gran cuidado de tocar muy super
ficialmente esta materia lúbrica y peligrosa ; usará pues de suma re
serva y de gran prudencia ; para no esponerse , con un lenguaje poco
mesurado ó con preguntas inútiles ó peligrosas, 'á enseñar a las pe
nitentes el mal que tal vez afortunadamente ignoran : ' .,,
Para descubrir la mala habitud es menester no,hacer como quien
duda de ella . No pregunteis pues sobre el punto principal o el fondo
de la cosa , sino sobre lo accesorio o alguna de sus circunstancias.
En vez de iậterrogarlas sobre tal pecado que uno tema que ellas
oculten , se debe hacer que digan cuantas veces lo han cometido ;
si al responder titubean , se les preguntará un número considerable ,
inverosímil y superior al verdadero , á fin de animarlas á que al mo
mento confiesen un número menor. En general, antes que hayan aca
bado de decirlo todo , es precisoʻ hacer como quien las disculpa , ha
ciendo recaer todo lo odioso de las faltas sobre sus cómplices dicién
dolas que ellas probablemente no habrian hecho de por sí aquellos
actos deshonestos si alguna compañera corrompida no las hubiese en
señado á obrar mala pesar suyo, y que no duda que ahora se horro
rizan de haberlos cometido , etc. .
Pero otro punto que creemos importante , y la esperiencia lo ha
probado ya , es que el confesor tenga cuidado de dar á ciertas perso
nas del sexo , sean ó no casadas, pero groseras y mas o menos faltas
de educacion , una breve esplicacion acerca del origen de los conoci
mientos prácticos que él posee sobre lasmaterias del sestomandamien
to . Bueno será , por ejemplo , deciclas que él ha aprendido todas esas
cosas en los libros de medicina ó las sabe de los médicos mismos , á
fin de apartar de su imaginacion cualquiera idea de sorpresa ó de sos
pecha sobre el modo como ha llegado á saber aquellos pormenores ,
que ellas se figuran deben ser totalmente estraños á los sacerdotes,
Se ha visto que el olvido de esta precaucion ha dado lugar á habla
durias mas o menos indecentes, muchas veces estrañas, y siempre in
convenientes.
En cuanto a los medios que hay que oponer a la funesta habitud de
la masturbacion en el sexo femenino , véase lo que dejamos dicho , so
bre esta materia , tocante al otro sexo. .
GÍA
46 MOECHIALO .
.:
sección VIII.

De la polucion diurna y nocturna en el sexo femenino. .


Es una efusion esterpa ó interna mas o menos delectable , material
y actualmente involuntaria ; es determinada por un estímulo moral ó
físico , pero sin el concurso de la voluntad . Los caracteres siguientes
revelan esas especies de contamipaciones : efusion esterna ó interna ,
es decir, una escrecion ó á lo menos un t'rasudor de materia mucosa ,
que no es mas que el mero producto de las glándulas vaginales , con
una sensacion mas o menos viva de placer;carnal en el aparato geni
tal, convertido en asiento de un movimiento erectil ó espasmódico.
Esta sensacion va seguida inmediatamente de una cesacion mas o
menos prontą del movimiento desordenado interno ó del orgasmo
erótico , al cual sucede un estado de saciedad , de resolucion y de
reposo del sistema generador.
Por efusion esterna entendemos una evacuacion que sale al esterior
y es perceptible á los sentidos, y por efusion interna un mero trasudor
mucoso encerrado y detenido en el aparato uterino ó genital ; porque
es en cantidad demasiado pequeña para salirse afuera. En toda polu
cion verdadera bay necesariamente una de esas dos evacuaciones sen
sible ó latente , sin lo que no existe polucion propiamente dicha, sino
un simple orgasmo, ó unos movimientos que se llaman desordenados ,
los cuales , si no van seguidos de contaminacion corporal, se calman
poco a poco sin sensacion estraordinaria . La cantidad y la cualidad de
la materia éscretada son relativas a las disposiciones individuales, y
dependen de los temperamentos mas o menos linfáticos y flemáticos ,
ó mas o menos secos ó pituitosos , y sobre todo de la impresionabili
dad y de la susceptibilidad nerviosa de las personas : todo eso es su
mamente variable ; pero en todos los casos , déjase sentir el sacudi
miento nervioso , que ejerce ordinariamente , sobre toda la economía
física y moral, una influencia mas funesta que la evacuacion misma.
Así pues , en virtad de todo cuanto precede , cuando los teólogos di
cen que puede haber polucion sin efusion , es preciso necesariamen
te admitir la efusion interna y lalente .
Las poluciones, lo mismo en la mujer que en el hombre, son diurnas
ó nocturnas. Las primeras , que al parecer son mucho mas frecuentes
que las otras, son aquellas que tienen lugar solamente en el estado de
vigilia y contra la voluntad ; son determinadas por las mismas causas
ocasionales que en el hombre : pensamientos , recuerdos, ideas con
trarias á la pureza y seguidas de impresiones libidinosas , y en fin de
PART. I. CAP. I. 47
un eretismo genital y de la polucion. Con mucha frecuencia todo eso
se sucedemuy rápidamente y á veces de una manera brusca é instan
tánea .
Algunas veces las poluciones diurnas son promovidas por el simple
contacto de los objetos esteriores ambientes . Estas contaminaciones ,
determinadas por escitacion fisica y no manual , sobrevenidas por ac
cidente y contra la intencion ó la voluntad de las personas, así como
aquellas que son ocasionadas por stimulusmental , son absolutamente
parecidas , en cuanto a la forma y á la terminacion , á las que son
voluntarias, ó que son el resultado de la masturbacion. Se las reco
noce por los mismos caracteres , que son la efusion esterna ó interna
acompañada de la sensacion voluptuosa é inmediatamente seguida ,
como ya hemos dicho , de la cesacion del movimiento desordenado ó
del orgasmo erótico , al cual sucede en el instante mismo un estado
de saciedad , de resolucion y de reposo perfecto del aparato genital ;
y si faltasen estas señales, el eretismo ó el orgasmo mencionado no se
ria una verdadera polucion , sino simples movimientos desarreglados
6 desordenados.
Hay personas organizadas de tal manera y tan escesivamente sensi
bles , aunque por otra parte muy castas, que esperimentan polucio
nes à la menor escitacion física , ó á la mas ligera impresion carnal.
Muchas veces, en este caso , es lícito creer que esa estremada sus
ceptibilidad erótica ó carnal es una consecuencia de una larga ha
bitud de masturbarse , sobre todo en las personas muy nerviosas , ó
que no están aun convertidas ni han llegado á una castidad perfecta .
La misma observacion hicimos con respecto á los hombres , á los
cuales sobrevienen á veces poluciones nocturnas ó diurnas con moti
vo de alguna idea que les inquieta , de un asunto muy apremiante
que preocupe mucho y no pueda terminarse en el tiempo señalado ,
de un objeto que se busca con ansiedad , etc . Hemos confirmado
tambien poluciones diurnas determinadas por la simple rapadura de
la barba y por otras causas puramente mecánicas y simpáticas y de
naturaleza del todo indiferente.
En cuanto a la polucion nocturna , solo tiene lugar durante el sue
ño.Generalmente se la cree mucho mas rara que en el hombre; y son
pocos los autores que hacen mencion de ella . Tal vez esa rareza es
mas aparente que real; porque es posible y aun probable que , en las
mujeres , las poluciones nocturnas sobrevengan á poca diferencia como
en el hombre, y que generalmente sean desapercibidas y no sentidas.
Aunque todas esas poluciones nocturnas y diurnas sean ordinaria
mente involuntarias, pueden no obstante , comonadie ignora , llegar
48 MOECHIALOGÍA .
á ser materia de faltas muy graves si la persona que las esperimenta
las consiente , deteniéndose en ellas voluntariamente con complacen
cia y deleite, ó si por una imaginacion desordenada, quiere, desea ó
sufre su causa ya sea física ya sea moral : entonces vienen a ser vo
luntarias en su principio ó en su causa , y entran en la especie ó en
la naturaleza de la masturbacion , y toman toda su malicia .
Como en rigor es posible que personas escesivamente sencillas ó es
crupulosas se engañen acerca de la naturaleza de cierta enfermedad
peculiar de lasmujeres , y crean , al oir ciertas preguntas de su con
fesor , tener poluciones cuando en realidad lo que sufren no es mas que
una leucorea , ó aquello que vulgarmente se llama flores blancas ,
fluor albus, ó una blenorrea , consecuencia de un comercio impuro ,
bueno será decir algo en órden á sus caracteres diferenciales , á fin
de que el confesor no se equivoque sobre este punto, y que la peniten
ta no se cree falsos y erróneos escrúpulos. En la leucorea , que es un
estado enfermizo , el derrame es habitual, sin ninguna sensacion vo
luptuosa ó erótica , y además va ordinariamente acompañada de una
sensacion incómoda en el epigastrio , es decir, de aquello que las mu
jeres llaman desfallecimientos. En la blenorrea , que es continua , mu
chas veces se siente un ligero dolor ó ardor al orinar. La polucion ;
como se ha visto , es intermitente; además de esto se halla intimamen
te ligada á una sensacion de placer carnal, y termina cesando de pron
to toda sensacion voluptuosa y el eretismo ú orgasmo erótico ; final
mente no va acompañada de aquel sentimiento de estirazon en el es
tómago que se esperimenta en la leucorea.
Empero acontece con mucha mayor frecuencia quizás que ciertas
niñas toman poluciones involuntarias ó tambien voluntarias por flores
blancas, y así engañan mucho mas gravemente á sus confesores. Es
pues muy importante el distinguir con seguridad las poluciones de la
leucorea y de la blenorrea .
Terminaremos con una observacion que , á nuestros ojos, no deja
de tener algun valor. Hay cierta dolencia á la cual las mujeres se
hallan muy sujetas, y que constituye para ellas un verdadero tormen
to : consiste en una especie de afeccion herpética ó masbien una co
mezon violenta que se fija en la vulva (pudendum ). Esta circunstancia
es algunas veces la causa de poluciones , porque las personas afligidas
de este mal se ven casi irresistiblemente forzadas á aliviárselo. Los
confesores deben tratar á esta especie de mujeres con mucha indul
gencia , y tener consideracion a la dolencia que las aflige. Para ase
gurarse de antemano si aquella escesiva comezon es un estado enfer
mizo ó un impetu libidinoso estraordinario , es preciso preguntarles si
PART. I. CAP. I. 49
han esperimentado poluciones contra su intencion al procurar comba
tir la violencia de la comezon ; porque , şi esta es verdadera , es decir ,
una disposicion enfermiza , el tocamiento manual podrá calmar la in
tensidad de la dolencia sin disiparla del todo ; al paso que , si el sen
timiento de comezon no es mas que un orgasmo venéreo , cesa al mo
mento que sobreviene una polucion , y pronto se disipan todos losmo
vimientos desordenados.
Otro de los medios de probar la comezon morbífica y de distinguir
la de los movimientos puramente libidinosos es el usar de cierta locion
farmacéutica que rara vez deja de aliviar notablemente ó de curar en
muy pocos dias. He aquí su composicion : sublimado , cinco gramos,
que se deslien en cincuenta gramos de alcohol ; póngase una cuchara
da de las de café de esta solucion en un medio litro de agua caliente,
con la cual se harán lociones locales muchas veces al dia. Si estas la
vaduras alivian ó 'curan .prontamente , se está moralmente seguro de
que la comezon es real y morbífica ; si , por el contrario , no alivian
casi , y que , de otro lado , poluciones antecedentes hayan disipado
prontamente la comezon , podeis de ello deducir con certitud que la
pretendida comezon no es sino el efecto del orgasmo libidinoso ó vené
reo , y que de consiguiente la mujer debe abstenerse de cualquier to
camiento manual.
He ahí cual es nuestra opinion con respecto á este punto en gene
ral. Veamos ahora lo que en órden á él dicen los teólogos. Los unos
disculpan la polucion , sobre todo en las mujeres , cuando es el resul
tado de fricciones moderadas, hechas únicamente con el objeto de
disipar,una comezon casi intolerable , secluso consensus periculo , por
que , dicen ellos , el rascarse es en este caso un verdadero remedio ,
y la contaminacion corporal no es mas que su consecuencia indirecta ,
y no su consecuencia necesaria . Otros sostienen lo contrario , y pre
tenden que este medio de alivio es la causa directa de la polucion ;
pero claro está que no es mas que su causa indirecta , á menos que
la comezon no sea un prurito verdadero , es decir , un principio mor
bífico , herpético ó de otra especie , sino mas bien una fuerte picazon
libidinosa ó un vivo apetito venéreo . Entonces el tocamiento es verda
deramente la causa directa de la polucion , como sucede con bastante
frecuencia .
He aquíla opinion de Billuart : «Cùm ista fricatio ex se directè et
proximè tendatin pollutionem , nec istæ infirmitates mihi aded graves
videantur, censeo potiùs esse patienter tolerandas quàm tali remedio
curandas. Attamen si reverà esset in isto pruritu ingens dolor veren
dorum , ut quidem dicunt, aut ex semine corrupto immineret gravis
AL OGIA
50 MCECHI .
morbus , non damnarem illum qui, non habens aliud remedium , illud
adhiberet , secluso periculo"consensûs in delectationem aut pollutio
nem .» (Dissert. 6 , art. 12.) Esta opinion de Billuart nos parece bas
tante prudente y sabia , salvo“su forma dubitativa , que quizá revela
su .poca esperiencia , y escepto aquello de su semen corruptum , que in
dica evidentemente una falta de ciencia fisiológica que debe disimur
lársele . A mas de esto , él omite , lo mismo que hacen los otros , el
hacer la distincion de los dos pruritos , como la hemos indicado en la
página precedente. Él hubiera podido añadir tambien qué muy á me
nudo , en el curso fisiológico de la vida , uno se rascamaquinalmente
como en cualquiera otra parte , sin el menor peligro ni la mas leve
sensacion ó pensamiento erótico y carnal; al paso que , en bacién
dose una especie de violencia ó de esfuerzo para resistir al grito de
la necesidad , uno se preocupa, túrbase la imagiuacion, y de este modo
- tal vez se cae en la tentacion y en el peligro . Mientras estoy escri
biendo estas líneas recibo una carta de un cura quien me pregunta si
debe negar la absolucion á una mujer de unos cuarenta años de edad
que sufre una violenta comezon que la acomete por accesos y que ella
siempre hace cesar tactu manuali, sin que jamás esperimente en este
caso ninguna sensacion erótica ó libidinosa . Héle contestado negativa
mente , porque , en la especie , si no hay sensacion , tampoco hay po
lucion .
Finalmente , S. Ligorio dice : «Licet alicui qui magnum pruritum
patitur in verendis , illum tactu abigere, etiamsi pollutio sequatur. »
Para apoyar esta su opinion cita una multitud de autores, y conti
núa : « Fortè dices posse accidere. ut pruritus ille proveniat ex ipso
ardore libidinis , undè extinctio pruritûs, quæ per fornicationem fit ,
venerea delectatio potiùs censeri debeat . Sed respondetur rationabi
liùs judicandum quod talis pruritus, quandd est valdèmolestus, oria
tur potiùs ex acrimoniâ sanguinis quàm ex ardore luxuriæ . Saltem in
dubio prævalet libertas se liberandi ab hujusmodi molestiâ per tactum
de se licitum , dùm licitè quisque potest tactu pruritum corporis abi
gere ; et si accidit pollutio , absque periculo consensûs, per accidens,
et involuntariè , ac proindè inculpabiliter accidit : utautem iste ab eo
tactu abstinere teneretur , probandum pro certo esset pruritum illum
à libidine procedere. Cæterum sapienter monet Lacroix eos qui puri
tatem amant ut abstineant (intellige), quantùm moraliter est possibile ,
ab hujusmodi tactibus.) ( Lib . 3 , n . 483.)
San Ligorio admite las dos especies de pruritos ; mas no dice con
qué caracteres se reconocen , ó con qué señal ó indicio se distingue
el prurito herpético del prurito libidinoso . Al cabo, tambien es necesa
PART. I. CAP . I. 51
rio recurrir a los caracteres diferenciales que establecimos en la pá
gina 48 .
No hablamos de Mons. Gousset , el autor mas moderno, cuyo testo
está contenido en el de S . Ligorio. He aquí lo que dice : «Licet ei qui
valdè molestum pruritum patitur in verendis , illum tactu abigere ,
etiamsi pollutio sequatur.» (Théologie morale , t. 1, p. 254.)
Hemos encontrado con sorpresa , cuatro años despues de haber es
crito todo lo que acaba de leerse en órden á la polucion en el sexo fe
menino , un pasaje muy notable y de una perfecta exactitud fisiológi
ca , en un librito intitulado : Collationes practice in sextum et nonum
Decalogi præceptum . (De Saint-Flour.)
No podemos prescindir de copiar aquí literalmente este fragmento
verdaderamente admirable y que supera en exactitud y en ciencia á
lodo cuanto hasta el presente ban dicho , sobre esta materia , los mas
célebres teólogos antiguos y modernos. Tambien es muy probable, por
no decir cierto , que el autor , que es eclesiástico , escribió su artícu
lo con el concurso de un sabio y juicioso médico. Como quiera que sea,
be aquí lo que dice :
«Hodierni medici saltem sat generaliter nullum in feminis propriè
dictum semen vident in humore qui ad intrà vel ad extrà in eis effun
ditur, et recentes theologi sat unanimiter dicunt semen illud impropriè
dictum non esse ad generationem necessarium . Humor ille , ex glan
dulis internis manans , potest aliquatenùs comparari humori qui in
viris semen comitatur, et qui aliquandò sine semine distillat. Quid
quid sit , pollutæ cognoscuntur feminæ cùm , etiam sine ullâ effusio
ne , magnum (majorem minoremve ratione complexionis) experiuntur
sensum voluptatis, quâ complectâ satiantur et quiescunt. Sensus hic
qui incipit in partibus venereis est species spasmi, et collapsus corpo
ris majoris minorisve. Talis est seminatio in feminis aut ejus indicium ,
sed ad conceptionem non necessaria . In pluribus iteratur : sæpè mul
loties in eodem momento , iteratâ causâ .
» Quoad motus majores vel minores , sed non completos, et sacieta
lem et quietem non adducentes , videtur esse rationandum sicut de
motibus carnalibus qui in viris usque ad pollutionem non perveniunt.
Illos motus graviter malos , si non omninò pollutionem , sibinon rarò
procurant etiam juniores puellæ non solùm tactibus, sed variis corpo
ris positionibus, compressione femorum ad invicem , tibiarum extensio
ne , frictione pectoris infra mamillas.»
. 52 MOECHIALOGIA .

S. II.
De la sodomia .
«Hoc peccatum esse execrandum , patet 1.° ex ejus notione , quod
ita sit contra naturam , ut ipsamet bruta illud regulariter abhorreant;
2. ex igne quem Deus pluit in Sodomam et Gomorrham ; 3.° ex epist .
ad Rom . 1 . ubi apostolus dicit : Gentilium sapientes propter suam
idololatriam esse traditos in reprobum sensum et in hanc passionem ig -
nominiosam , ut feminæ mutarent naturalem usum et masculi in mas
culos exarserint ; 4.° ex pænis in illud statutis : jure civili plectitur
pænâ ignis , C . lib. 9 , tit. 7; jure canonicoʻántiquo , clericussodomi
ta , depositus , detrudebatur in monasterium ad pænitentiam agen
dam ,» etc . (Billuart, dissert. 6 , art. 10.)
Horrendum illud scelus à S. Thomâ definitur : Concubitus ad non
debitum sexum , putà masculi ad masculum , vel feminæ ad feminam .
Ex quo inferendum masculum coeuntem cum feminâ in vase inde
bito , nullatenùs esse sodomiam , quia est' debitus sexus; et è contra
feminam coeuntem cum feminâ in vase naturali esse veram sodo
miam , quia est indebitus sexus. Undè concludendum S. Thomam totam
malitiam sodomiæ deducere à sexu indebito , et non à vase indebito
sexûs debiti. Hoc ultimum crimen , secundùm S . Doctorem , non ve
rò est sodomia , sed tantùm modus innaturalis concumbendi.
At quia apud majorem theologorum partem usus prævaluit ut con
cubitus in vase indebito sexûs debiti existimetur sodomia imperfecta ,
in hoc et in aliis multis morem usui simpliciter geremus.
Idcircò coitus viri cum muliere in vase indebito est sodomia imper
ſecta , distincta à perfectâ , quæ est concubitus masculi cum ipasculo ,
vel feminæ cum feminâ.
Non refert in quo vase vel quâ corporis parte coeant masculi aut fe
minæ inter se , cùm malitia sodomiæ in affectu ad sexum indebitum
consistat et completa vel perfecta sit in genere suo , dùm applicatur
corpus ad quodvis vas vel quamlibet corporis partem ejusdem sexûs
per modum concubitûs; si autem fieret tantùm applicatio manûs, pe
dis, etc. , ad alterius organa , etiamsi ex utrâque parte pollutio seque
retur , non reputaretur sodomia , quia non esset verus concubitus, nec
physicus aut materialis , nec moralis vel affectivus.
Ad imperfectam sodomiam sufficit utmasculus et femina coeant non
servalis instrumentis naturalibus vel organis debitis , cum affectu ad
præposteras partes vel malum concubitûs finem .
PART. I. CAP. 1. 63
In confessioneaperiendum est cujus naturæ fuerit sodomia , an fue
rit perpetrata cum personâ conjugatâ , Deo dicatâ vel consanguineâ ;
tunc enim additur malitia adulterii, sacrilegii vel incestûs.
Multis theologis videtur declarandas esse in confessione circumstan
tias agentis vel patientis. Attamen , secundùm Billuart, Loth et alios,
acircumstantia agentis non mutat speciem , nec videtur notabiliter
aggravare.. Multò tutior videtur priorum sententia , et non dubitan
dum quin , si uterque vicissim agens et patiens fuerit scelus longè gra
vius sit.
« Dicunt Spor., Holz . et Tamb., n . 77 , cum Angel. ait S . Ligorio ,
quod confessarius, intelligens mulierem cognitam fuisse extra vas na
turale , vel præposterum , non debet quærere in quo loco et quomo
do.» (S. Ligorio , lib . 3 , n . 466 .) DD . Gousset idem affirmat juxta
B . Ligorio .
Apud eumdem S . Ligorio dicunt Ronc., Tamb. et Salem . contra
Graff. : «Non esse necessariò in confessione explicandum si pollutio
fuerit intra vel extra vas ; sufficit enim confiteri : peccavi cum puero ,
ut confessarius judicet adfuisse sodomiam cum pollutione. Si verònon
fuerit pollutio deberet explicari.» Istud peccavi cum puero nobis nimis
vagum et generale videtur.Intelligibiliùs diceretur : concubuicum pue
ro, cum additione circumstantiæ pollutionis vel non pollutionis. Si
seminatio intra vas possibilis esset , tunc foret sodomia perfecta , con
summata et completa ; et tantùm perfecta et non completa , si extra
vas , ut dicunt nonnulli.
Quod ad pueros attinet , quoniam de pueris loquimur , hodierno in
felici tempore istud scelus nefandum sæpissimè in pueros furens ir
ruit : undè nunc generaliter pederastia nuncupatur.
Terminamos.este triste párrafo advirtiendo que siempre es necesa
rio informarse de la autoridad superior si el crimen de que se trata es
reservado al obispo , y en qué casos lo es . A lo que parece en muchas
diócesis ambas especies , la perfecta y la imperfecta , son reservadas.
S. III .

De la bestialidad .

Bestialitas, juxta S. Thomam , est concubitus cum individuo alterius


speciei , vel cum bestiâ . Horrendum et gravissimum est hoc peccatum
et gravius quàm sodomia ; quia non solùm in bestialitate non serva
tur vas debitum , vel sexus , sed neque debita species . Undè super
illud Joseph accusavit fratres suos crimine pessimo , quia , ut dicit
54 MOECHIALOGÍA .
glossa , cum pecoribus miscebantur; istud abomipandum scelus in
levitico hisce verbis revelatum est : Qui cum jumento et pecore coierit ,
morte moriatur : pecus quoque occidite , etc . Quondam qui tam infan
dum crimen perpetrare non erubescebant cum ipså bestiâ flammis
plectebantur.
Juxta multos , Bonacinam , Billuart, Sylvium theologum pictavien
sem , Chapeauville , Collet, DD . Bouvier , etc ., species aut varietates
bestiarum non sunt necessariò declarandæ , quia talia non mutant spe
ciem in genere moris , nec multùm aggravant. Hîc malitia ex inordi
natâ et indebitâ specie deducitur. «Non necesse est , ut dicit novissi–
mè citatus theologus , igitur speciem , sexum aliasque bestiæ qualita
tes enuntiare , sed dicendum est an crimen per seminis effusionem
consummatum fuerit , an verò solummodò tentatum . Ita ferè omnes
theologi contra Lacroix , Elbel et Holzemann. « Ratio , inquit S. Ligo
rio , quia tota essentialis deformitas hujus facinoris consistit in accessu
ad diversam speciem ; undè circumstantia sexûs omninò accidentalis
est , nullamque in genere differentiam involvit. Tactus autem impudi
ci cum bestiâ , licet non sint propriè peccata bestialitatis , tamen ba
bent aliquam specialem turpitudinem , ut ait Elbel , saltem venia
lem .» (Lib. 3 , n . 474.) In talibus, datâ occasione, interrogandi sunt
quidam rusticani et præcipuè pastores vel pecora pascentes.
Quoad congressum cum dæmone in formâ viri aut mulieris dc quo
serid loquuntur omnes theologi et quem ad bestialitatem reducunt, is
tud coitûs genus mysticè et figuratè intelligendum est : uno verbo ta
lia in praxi imaginative et affectivè semper sumenda sunt (et non ma
terialiter et effective), ut proventus phantasiæ hallucinantis vel deli
rantis .
Nos habríamos abstenido de hacer mencion de esas especies de con
junciones, si todos los teólogos no hubiesen consagrado una página ,
en sus escritos , al examen de tan singular y estraña cuestion. Un si
lencio absoluto de nuestra parte en órden á ese parecer y unánime
acuerdo en una materia en que todos los teólogos no han hecho mas
que copiarse sucesivamente desdemuchos años á esta parte hubiera
podido hacer titubear el ánimo de algunos sacerdotes jóvenes, y tal
vez hacerles tomar algunas veces visiones por verdades , ó quimeras
por realidades. Porque finalmente ¿de qué no es capaz , en ciertos pe
nitentes , una imaginacion subyugada por un deseo erótico y lúbrico ?
Para reasumir en pocas palabras todo cuanto los teólogos han escri.
to sobre esta materia , citaremos un pasaje de la obra de Mons. Bou
vier sobre el sesto mandamiento. «Omnes theologi loquuntur de con
gressu cum dæmone in formâ mulieris aut alicujus bestiæ apparente ,
PART. I. CAP. I. . 65
vel ut præsente per imaginationem repræsentato , dicuntque tale pec
catum ad genus bestialitatis revocandum esse et specialem haberema
litiam in confessione declarandam , scilicet superstitionem in pacto
cum dæmone consistentem . In hoc igitur scelere duæ necessariò repe
riuntur malitiæ , una contra castitatem , et altera contra virtutem re
ligionis . Și quis ad dæmonem sub specie viri apparentem affectu so
domitico accedat, tertia est species peccati, ut patet. Item si sub spe
cie consanguineæ aut mulieris conjugatæ fingatur apparere , adest
species incestûs vel adulterii.» He aquí lo que hemos encontrado de
mas sabio y racionalen los libros de la teologia moral. Con eso podrá
juzgarse de los escritos de losdemás teólogos tocante á este punto.

ARTICULO II.

DE LOS PECADOS DE LUJORIA Ó DE IMPUREZA SEGUN LA NATURALEZA .

Estos pecados son la fornicacion simple , el estupro , el rapto , el


adulterio , el incesto y el sacrilegio , de cada uno de los cuales trata
rémos por separado en los seis párrafos que siguen.

S . I.
De la fornicacion simple.
Fornicatio latè sumpta est quilibet concubitus extra matrimonium ;
sed strictiori sensu , seu potiùs fornicatio simplex est copula soluti
cum solutâ jam defloratâ , ex mutuo consensu . Dicitur , 1 .º soluti
cum soluta , id est , inquit Billuart , «personarum quæ sint liberæ non
solùm à vinculo matrimonii , sed etiam à mutuâ cognatione , vel affi
pitate in gradibus prohibitis, à voto continentiæ , ab ordine sacro et
violentiâ .» Dicitur, 2 .° defloratâ , ut simplex fornicatio à stupro distin .
Suatur. Itemque 3 .° ex mutuo consensu , ut à raptu secernatur.
Fornicatio simplex est peccatum mortale . Non eritmeretric de filia
bus Israel , nec scortator de filiis Israel. Non offeres mercedem prosti
buli, nec pretium carnis in domo Domini Dei tui... Quia abominatio
est utrumque apud Dominum Deum tuum . (Deuter., 23.) - Neque forni
carii , neque idolis servientes , neque adulteri, neque molles, nequemas
culorum concubitores , etc., regnum Dei possidebunt. (1. Cor., 6.) Ma
nifesta sunt opera carnis , quæ suntfornicatio, immunditia , impudicitia ,
luxuria , etc. Qui talia agunt regnum Dei non consequentur. (Galat.,5 ,
56 MOECHIALOGÍA .
similiter Ephes. , 5 , et Hebr. , 13 , et Apocalyp. , 21 ; item auctoritas
conciliorum , summorum pontificum et patrum .)
emial
e la esnecun mal,
y della
nicacion y que c que eesté
, esnosaporque bima
Por fin otra grave razon que prueba la profunda malicia de la for
ad sté pprohibida
ro , sino que es
prohibida porque es un mal , es sacada del fin y objeto de la union
de los sexos y de la necesidad social. Este objeto no es otra cosa que
la procreacion en el orden de la educacion de los hijos y del estableci
miento de la sociedad humana.
La fornicacion es un mal intrínseco ó esencial , porque es contraria
al objeto de esa șabia y doble economía . Este acto fisiológico , aunque
natural y en el orden físico de la generacion , es prohibido por la ley
de Dios como intrínsecamente malo y contrario a la conservacion y á
la propagacion del género humano y al establecimiento del órden so
cial.
En efecto la sociedad jamás habria podido establecerse sin el matri
monio (sea monogamo , sea poligamo) , que asegura la educacion de
los hijos por la perpétua union de los esposos ; al paso que en la forni
cacion que no es sino un acto puramente físico , animal, carnal y
transitorio entre dos individuos que la pasion ó el acaso reune por un
momento y que se dejan luego como los animales despues de la copula ,
el hijo que tal vez resultáre será abandonado, y su existencia física se
rá necesariamente muy precaria y de ningun modo asegurada...
De nada sirve objetar que la sociedad ó los forpicadores podrian
proveer suficientemente á la educacion de sus hijos , y que así des
aparecerian los inconvenientes indicados. A eso contestamos que seria
una cosa que sucederia por accidente y una escepcion que no debe ni
puede destruir el principio de la ley. Por otra parte una sola observa
cion decisiva pulveriza aquella objecion : no habeis podido hacer edu
car esos hijos de fornicacion sino valiéndoosde las leyes y de los be
neficios de la sociedad ya existente ; luego suponeis subsistente aquello
que sin elmatrimonio no hubiera podido existir. En efecto , sin el ma
trimonio instituido desde el principio con la creacion del hombre , la
sociedad jamás hubiera podido establecerse , y la especie humana se
habria estinguido en su cuna. Queda pues demostrado que la fornica
cion es del todo destructiva de la sociedad humana , y que de consi
guiente es un mal esencial, tanto en sí mismo como en sus consecuen
cias antisociales. Luego Dios debió necesariamente prohibirla .
Fornicatio tutoris cum pupillâ eum multò magis reum efficit cùm
patris vices gerat , cùmque igitur ex officio teneatur ipsius negotiâ
curare non solùm temporalia , sed etiam spiritualia : adest ergo cir
cumstantia notabiliter aggravans in confessione necessariò aperienda.
PART. I. CAP. I. 57
Copula cum alterius sponsâ non est ſornicatio simplex cùm non fiat
cum plenè solutâ et involvat aliquam injustitiæ malitiam , injuriam
ipferendo sponso cujus violatur jus ; indèque nascitur circumstantia in
confessione semper explicanda .
« Fornicatio fidelis cum infideli est , juxta omnes , longè gravior
quàm cum catholicâ , tùm propter indè nascentem nostræ religionis
despectum , tùm propter periculum malæ educationis prolis , et defec
tionis à verâ fide , quæ ex nimio erga infidelem amore facilè conse
quitur. Hinc , juxta quosdam , hæc circumstantia mutat speciem .D
(Bailly.) Copula habita cum eunucho specialem involvit malitiam ,
quia , cùm semen prolificum absit , adest vera finis,naturalis frustra
tio , et proindè non est simplex fornicatio , sed peccatum contra pa
turam .
Juxta Billuart aqui ex displicentiâ et odio peccati copulam fornica
riam abrumpit etiam cum seminatione extra vas benè facit et ad id
tenetur , quia nullum est instans in quo quis non teneatur cessare a
peccato actuali. Perditio autem seminis indè secuta est per accidens
et præter intentionem , subestque legitima causa eam permittendi.
Qui, in affectu peccati perseverans , inchoatam copulam abrumpit
cum seminatione extra vas metu infamiæ aut ex aliquo simili motivo
humano , peccat duplici peccato , scilicet fornicationis inchoatæ et
pollutionis.» (Dissert. 6 , art. 2.) Præfatus doctissimus auctor oblitus
est connumerare inter motiva humana , ut dicit : ex timore prolis.
Quoad meretricium , istud fornicationis genus est concubitus cum
prostitutâ, id est cum muliere omni viro occurrenti paralâ , publicâ
ef communiter venali. Mulier meretricium exercens graviùs peccat
quàm simpliciter fornicans , propter habitualem mentis dispositionem
peccandi, scandalum , conceptionem culpabiliter raram , vel abortum
frequentem , magnum prolis , si quæ nascatur, nocumentum et pes
simam educationem . Non sufficit ut meretrix dicat in confessione quo
tiès fornicata fuerit ; statum meretrecii declarare tenetur.
Quoad virum , juxta Sylvium et alios, inquit Billuart, non videtur
necesse explicare in confessione an fornicatus fuerit cum meretrice vel
cum aliâ , modò exprimatur numerus; quia, inquiunt, hæc circums
tantia non est notabiliter aggravans, fortè quia actus secundùm se est
generativus, et solùm per accidens ex conditione personæ impeditur
generatio , sicut si fornicaretur cum vetulå vel sterili. Quidam tamen
contendunt forpicatorem teneri declarare circumstantiam meretricii ,
quia , inquiunt, in tali fornicatione non impeditur tantùm bonum pro -.
lis nascituræ ,sed etiam de penitus nascatur. Tutior est posterior sen
tentia . .
58 MOECHIALOGÍA .
Hîc fortè abs re non fuerit perpaulùm dicere de quodam modo vel
medio quo utuntur nonnulli ad meretrices vel forsan ad alias acceden
tes , ne ab ipsis morbo syphilitico inficiantur. Hæc porrò adinventio
prorsùs confessariis ignota , à contagione morbidâ defendendo, simul
obex vel impedimentum conceptioni aut generationi necessario existit,
etiamsi specie et exteriùs copula normalis remanere videatur et fiat
sine ullâ retractione ab utrâque parte.-- Iste obex aliquando perhibe
tur à parte mulieris quæ solùm intendit impedimentum conceptionis ,
cùm ipsa hoc modo contagionem avertere nullatenùs possit.
Vir autem qui præcipuè devitationem contaminationis venereæ in
tendít et forsitan similiter quibusdam in casibus conceptionis impedi
mentum , hunc duplicem scopum certò consequitur.
Interrogari possunt fornicatores, saltem hi quí valdè corrupti viden
tur vel babentur , an nullo modo secreto conati fuerint conceptionem
impedire ; et præsertim vir an à contagione se liberare enixus sit et
quomodò ? Sciendum verd est quòd hîc non agatur de onanismo propriè
dicto , ut sæpissimè et miserrimèfit in actu conjugali , quoniam abest
retractio ante seminationem virilem .
Quod attinet ad alia diversa impedimenta mulieribus non ignota ,
utmictionem post coïtum , et varios conatus semen ejiciendi, generali
ter vana et inania repulanda sunt : attamen sunt graviter reæ , cùm
malum finem , id est conceptionis impedimentum intendant. Plura de
talibus dicere minimè expedit , ne doceatur quod generaliter ignora
tur. - Quoad confessarios , pauca quæ diximus ipsis sufficient ut ad
notitiam practicam paulatim perveniant.
Interrogandi sunt fornicarii an , priusquàm ad concubitum perve
nerint, de eo delectati fuerint et copulam desideraverint ; an compar
tem induxerint ad crimen ; an polliciti sint matrimonium ; an promis
sionem juramento firmaverint, an non idem pluribus promiserint; an
peccaverint ex habitu , cum scandalo ; quoties iteraverint scelus ; an
ei perpetrato alia turpia addiderint; an nihil fecerint ut conceptio im
pediretur; an fætum extinxerint , vel abortum procuraverint, vel pro
curare tentaverint , vel suaserint, vel proponenti consenserint; an pro
les nata sit, an eam neglexerint, an exposuerint, cùm ei alendæ pares
essent. Si pænitens, ut dicit Collet , copulam solam exprimit , interro
gandus est de suo et compartis statu ; an conjugatus sit , et ea conju
gata , an non ambo affinės sint vel consanguinei , etc.
· Quod spectat ad quæstionem tolerantiæ meretricum , S. Ligorio sen
tentiam hâc de re breviter exarabimus. Petit auctor an permitti pos- .
sint meretrices ? Respondet : «Prima sententia probabilis affirmat ,
eamque tenent S. Augustin ., S. Thom . et plures alii. Ratio quia ,
PART. I. CAP. 1. 59
demptis meretrecibus , majora peccata evenirent, nempè sodomiæ ,
bestialitatis , mollitierum , præter prævaricationem mulierum honesta
rum ; ideo S. Aug. ait : Aufer meretrices de rebus humanis , turbaveris
omnia libidinibus. Verùm secunda sententia practicè probabilior ne
gat ; et hanc tenent Nav., Ronc. et plures alji. Ratio , quia per me
retrices hæc mala graviora non evitantur , eo qudd in hominibus lu
xuriosis ex facili et frequenti cum meretricibus congressu libido al
tiores figit radices; et ided , cùm hoc vitium frequentiâ magis augeatur,
ipsi non desinunt committere pollutiones , et peccata nefanda , saltem
cum ipsis meretricibus, nec ideò se abstinent à sollicitandis feminis
honestis. E converso , permissione meretricum innumera alia mala
superaddunt, nempè plures puellæ prostituuntur , adolescentes paren
tes parviperdunt, bona dissipant, studia scientiarum negligunt, rixas
excitant, honestas nuptias respuunt. Cæterùm , benè advertit et pro
bat P . Sarnelli quod , licet in vastis urbibus meretrices permitti pos
sint, nullo tamen modo in aliis locis permittendæ sint.» (Lib . 3, n. 434.)
Hâc de re doctissimus episcopus cenomanensis sequentia notat :
«Quamvis posterior sententia probabilior nobis videatur , arbitramur
tamen absolvendos esse magistratus urbium qui bonâ fide asserunt se
malum istud tollere non posse : in dubiis ramque non confessarii est
decernere quid agere debeant ii quibus difficilia commissa sunt ne
gotia , ut sunt judices, magistratus, duces exercitûs , reges aut mi
nistri (1).»
Denique nobis loquendum superest de concubinatu , qui est concu
bitus consuetudinarius soluti cum solutâ .
Concubinatus gravius est peccatum quàm simplex fornicatio , ob
continuatum affectum vel habitualem mentis dispositionem hîc , nunc
et semper peccandi, vel , ut dicit Billuart, concubinatus est et for
nicatione et meretricio gravior quia superaddit statuin et permanen
tiam in peccato , si non ratione majoris gravitatis , saltem ratione
scandali : ideò circumstantia concubinatûs in confessione necessariò
aperienda est.
Juxta sententiam DD . Bouvier hîc breviter quædam excerpta cen
suimus depromenda , ut sequentia :
Si concubinalus sit publicus, nec concubinarius, nec concubina re
(1) Parece que , segun Parent - du -Chatelet , el mismo S. Luis , forzado por
la necesidad , acabo por tolerar las prostitutas, é bizo que las señalasen un bar
rio particular en París. Es pues en algun modo un mal necesario que á punto
de vista de la moral pública , es decir politica y administrativa , puede tolerar
se ; pero á punto de vista cristiano y teológico debe ser condenado y repro
bado , porque , cualesquiera que puedan ser las circunstancias y las exigencias
sociales , la prostitucion no deja de ser un mal verdadero y esencial.
LOGÍA
60 MOECHIA .
gulariter absolvi possunt , quantumvis appareant contriti , ante publi
cam separationem , quia , præter discrimen fugiendum , necessaria est
satisfactio scandalo proportionata ; porrò hæc satisfactio per solam se
parationem communiter obtineri potest. . . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Dictum est regulariter , quia si concubinarius, in extremis positus,
mulierem dimittere non possit , aut, si adeò sit derelictusut, eâ dimis
sâ , neminem habeat qui necessaria ipsi præstare velit , tunc absol
vendus et ultimis ecclesiæ sacramentis muniendus est,modò verè con
tritus judicetur, et coram astantibus promittat se ad sanitatem redi
tum eamdem mulierem ejecturum , nullumque cum ea societatis
vinculum habiturum ; in tali enim necessitate eo modo reparatur
scandalum quo reparari potest ; nemo quippe ad impossibile tenetur.
A fortiori ministranda sunt ecclesiæ sacramenta concubinæ , de vità
præteritâ dolenti cum firmo ,proposito non peccandi de cætero , quæ
domo concubinarii exire non potest, vel quia acerbiores sunt dolores,
vel quia imminens est periculum , vel quia nullum habet refugium .
Verùm , his casibus exceptis , semper exigenda est separatio , etiam
in extremis , et confessio moribundi non priùs audienda est quàm Deo
et hominibus data fuerit satisfactio per mulieris ejectionem vel per vo
luntarium ejus exitum .
Si verò concubinatus sit occultus, vel commercium jam cessavit, vel
non : si priùs, fortiter consulenda est separatio, quia moraliter impos
sibile est ne in cohabitatione aliquod non existat relapsûs periculum .
Sed arbitror illam sub denegatione absolutionis exigendam non esse ,
præsertim si prævideatur scandalum , infamiam aliudve grave detri -
mentum indè secuturum .
Suppono propositum ampliùs non peccandi judicari sincerum et
spem firmitatis affulgere. Ita Navarus, Billuart , S. Ligorio aliique
plures. Si autem , non obstante proposito, novi accidant relapsus, ab
solutio differri debet, et ordinariè præscribenda est separatio : tunc
enim perseverantia meritò judicatur improbabilis. '
At si commercium illicitum nondùm fuerit voluntariè revocatum ,
quid agendum est ? R . 1.° Si pænitens in extremis positus sit et pec
cata sua detestetur, absolvendus aliisque sacramentis muniendus est ,
juxta conditiones modd expressas , in explicatione verbi regulariter ,
seclusâ tamen promissione coram testibus. Si verò mors non immineat,
pænitens in concubinatu occultè vivens communiter absolvinon debet,
nisi priùs facta fuerit separatio ; versatur enim in occasione proximâ
peccandi : at grave existit præceptum naturale et divinum fugiendi
occasionem proximam peccandi.
PART. 1. CAP . 1. 61
Dictum est communiter : Sunt enim casus in quibus impertienda est
absolutio sub solâ promissione separationis vel etiam cum solo propo
sito non peccandi de cætero; nempè, 1 .º si poenitens ex regularibus
indiciis verè contritus judicetur , et primâ vice vel secundâ promittat
se monito cessurum . 2 .° Si ex denegatione absolutionis gravis seque
retur infamia vel grave scandalum , ut si puella in suspicionem cor
ruptelæ veniret , nisi ad sacram synaxim accederet , aut si sacerdos
populum offenderet, nisi missam parochialem celebraret. 3.° Non exi
genda est separatio quandò est impossibilis , ut si filiafamiliâs cum fa
mulo , vel filius cum ancillå domûs paternæ peccet. Qui sic constituti
sunt', dilatione absolutionis primò probentur, et si occasio ex proxi
mâ facta fuerit remota , atque sincera videatur peccati retractatio ,
danda erit absolutio. 4 .° Quandd duo concubinarii , occulti , vel de
impudicitiâ tantùm suspecti, separari non possunt sine gravi periculo
infamiæ aut scandali , fortè licet emendationem eorum tentare , pri
mùm absolutionem differendo , deindè eam concedendo si in proposito
perseverent. Dicit Billuart se , in eo casu , nec pænitentem nec con
fessarium damnare velle : nec ego rigidior essem . ( D . Bouvier.)
Quòd si concubinarius domi non retineat concubinam , non absol
vendus erit extra periculum mortis priusquàm de illius continentiâ
conſessarius , notabili absolutionis dilatione et aliis investigationibus
et rationibus moraliter certis , sufficientem experientiam adeptus fue
rit ; si verò in periculo mortis constituta sit , verum pænitendi propo
situm sufficiet.
«No debe darse la absolucion , segun el redactor de las Conférences
d'Angers, á los concubinarios antes que estén separados de sus concu
binas, y que haya cesado enteramente todo trato entre ellos. En estas
ocasiones el confesor debe mostrar gran firmeza , para no dejarse lle
var de las razones especiosas que los concubinarios tratan de alegar pa
ra no separarse de sus concubinas ; porque debe presumirse que con
servan inclinacion á su pecado , mientras no quieran renunciar su
ocasion próxima : por esta razon , no basta que , al confesarse , digan
cuantas veces cayeron en el pecado de fornicacion ó en otras impure
zas; es menester que declaren desde cuando están amancebados, sien
do verosímil que durante ese tiempo han conservado la voluntad de
pecar , y consentido en muchos malos deseos , de que deben acusarse
para dar a conocer su estado.
»Aquellos a quienes se da el nombre de Lenones, que corrompen á
los jóvenes y prostituyen á las muchachas , cometen un pecado muy
grande.... Participa de su crimen y del de las muchachas públicas
aquel que alquila á los unos y á las otras casas donde se sabe que con
GÍA
62 MOECHIÁLO .
tinuarán su comercio , porque en este caso el alquilador contribuye á
su pecado. La facultad de teologia de París censuró, en 3 de febre
ro de 1665, como falsa , escandalosa y perjudicial al estado, una pro
posicion que decia que es lícito alquilar casas á aquellas especies 'de
personas , no con el designio de que pequen en ellas , sino para que
las habiten .» (Conférences d'Angers , sobre los mandamientos de
Dios , t. 2 .)
Variæ in canonibus pænæ in concubinarios sancitæ sunt, quas re
novavit Concilium tridentinum , sess. 24 , cap . 8 , de reform . matr. ,
ubi statutum est eos cujuscumque sint conditionis , si, postquàm ab or
dinario , etiam ex officio , ter eâ de re admoniti fuerint, concubinas
non ejecerint, seque ab earum consuetudine non sejunxerint, excommu
nicatione feriendos esse , à quâ non absolvantur , donec reipsâ admoni
tioni paruerint .
Graves in eâdem synodo etiam decernuntur pænæ adversùs cleros
huic vitio turpiter deditos. Verùm omnes istæ pænæ sunt ferendæ
sententiæ et non latæ .
S . II.
Del estupro y de la violencia .
Stuprum est illicitus concubitus cum virgine. Quidam volunt ut
concubitus sit violentus, ita ut, si virgo consenserit , stuprum non
existat, neque sit species distincta luxuriæ et non distinguatur à sim
plici fornicatione. Ita Sanchez, Lessius, Malderus et plures alii : un
dè juxta illos stuprum semper est violenta virginis defloratio . (Viol.)
Istud crimen in foro civili reclusionis pæna plectitur. (1)
Plures alii , ut SS. Thomas, Bonavent., Antonin . et permulti re
centiores theologi , docent sufficere ut stuprum existat tanquam spe
cies distincta luxuriæ , concubitum cum virgine , sive violentia adsit,
(1) Cualquiera que hubiese cometido el crimen de violencia , o fuere reo de
cualquiera otro atentado al pudor , consumado 6 intentado con violencia , con
tra individuos del uno ó del otro sexo , será castigado con la pena de reclusion .
(Código penal , art. 331.)
Si el crímen se cometió en la persona de una criatura menor de quince años
cumplidos , el culpable sufrirá la pena de trabajos forzosos á tiempo . (Ibid . ,
art. 332.)
La pena será de trabajos forzososperpetuos si los reos fueren de la clase de
aquellos que tienen autoridad sobre la persona contra la cual hubieren cometido
el atentado , si fueren sus inaestros ó sus amos , o si fueren funcionarios públi
cos o ministros de un culto , ó si el reo, quien quiera que sea , ha sido ayuda
do , al cometer el crímen , por una ó muchas personas. (Ibid ., art . 335.)
PART. I. CAP . 1. 63
sive non ": undè ab ipsis stuprum definitur*: illicita virginis defloratio.
Nomine virginis hîc non intelligitur persona quæ contra castitatem
nunquam peccatum admissit, sed quæ necdùm .ullam cum alterâ co
púlam habuit. Ergo hîc virginitas supponitur non ut virtus, verùm ut
status integritatis. N ' h i ddel!
Quoad istam integritatem physicam , siç et non absurdè loquitur
Billuart : «Signaculum autem virginale quidam reponunt in quâdam
membranâ seu pelliculâ quæ hymen dicitur , et virili coitu lacerala
aboletur ; alii autem et præsertim recentiores volunt nihil aliud esse
quàm compressionem séu complicationem orificii vasis-feminei , quæ
congressu viri dilatatur, sicque vas aperitur: Idque veriùs videtur
quod , juxta medicos et anatomicos modernos , prædicta pellicula non
reperiatur in omnibus virginibus, maximè junioribus.» (Dis. 6, art . 3.)
He aquí un estracto de lo que sobre este punto dijimos en nuestro
Compendio 'de Fisiologia humana , 2 edic ?s: El bimen , cuya existen
cia muchas veces se ha puesto en duda , es sin embargo constante si
no se le ha destruido por una infinidad de causas estrañas al coito (ut
sæpè fit mollitie). Consiste en un pliegue membranoso , ordinariamen
te semicircular, que cierra mas o menos la entrada de la vagina. El
himen es mirado por el vulgo como el sello ó la señal de la virgini
dad física : antiguamente los magistrados y aun los médicos legistas
se habian formado la misma opinion tocante á eso ; de ahí nacian á me
nudo sentencias judiciales erróneas , falsas é inicuas.... Fabricio de
Hilden habla de una mujer que teniendo el bimen lleno de pequeños
agujeros, no fué este un obstáculo para hacerse preñada , si bien su
marido habia intentado divorciarse en razon de ser el coito imposible .
Peu refiere que en dos mujeres el himen no presentaba mas que un
agujero y sin embargo se hicieron preñadas, siendo así que eran in
hábiles para la cohabitacion normal. Puede pues asegurarse que no
existe señal absolutamente cierta de la virginidad física . He aquí lo
que sobre esto dice el célebre Cuvier, el grande naturalista : « La
presencia del himen no prueba ni la pureza ni siquiera absolutamente
la virginidad de la persona que lo posee , asi como su falta tampoco
prueba desórden en su conducta ; citanse mujeres que lo conservaron
aun. despues de haber parido , y doncellas que nunca lo tuvieron : en
efecto, fácilmente se concibe que una membrana tan delgada puede en
ciertos casos dilatarse , ceder á fuertes presiones y volver despues a
su primer estado , y en otros casos , desgarrarse á los mas leves mo -
vimientos , ó borrarse y confundirse con los pliegues menos aparentes
que tiene encima y debajo . No por esto es menos cierto que las vírge
nes por lo regular tienen un himen y lo conservan , y que se le ha
10
A
HTALOGI
64 MOEC .
encontrado en las jóvenes de cualquiera edad .» ( Dict. des Sciences mé
dicales .)
Certum est violentam virginis deflorationem seu stuprum virginis
invitæ , id est involuntarium , superaddere fornicationi simplicimali
tiam mortalem specie distinctam , non solùm propter violentiam quæ
æqualiter potest. inferri corruptæ , sed insuper ob integritatem natura
lem violenter raptam . Igitur circumstanția vịolentiæ necessariò in con
fessione aperienda est.
Hîc obiter dictum sit omnem mulierem semper teneri ad resistendom
turpi congressui omnibus quibus potest-modis , totis viribus claman
do , şese agitando , etc : In Deut. , 22 , puella in civitate oppressa la
pidari jubetur, quia non clamavit.
A clero gall.', 'an . 1708 , proscripta est hæc propositio : potuisset
Suzanna in tanto periculo infamiæ et mortis negativè se habere et per
mittere in se eorum libidinem , modò interno actu in eum non consensis
set , sed eum detestata et execrata fuisset , tanquàm temeraria scandalo
sa , piarum aurium offensiva , erronea et legi Dei contraria . Ergo mu
lieri nunquàm licet , etiam ob metum mortis , permissivè et passive
se habere; quia tali in casu quies et immobilitas quædam cooperatio
et quidam actus voluntarius reputari debent semper in praxi.
Nomine violentiæ non solùm intelligitur vis materialis vel pbysica ,
sed omnis vismoralis , ut sunt metus, terror, fraus , minæ graves ,
magna promissa etmunera , preces admodùm importunæ , blanditiæ ,
ošcula et omnia quæ juxta judicium viri prudentis in hâc materiâ vio -
lentia moraliter reputabuntur.
Stuprum virginis liberè consentientis est etiam vera species luxuriæ
à fornicatione distincta . Ita sentiunt S . Thomas , S. Bonaventura, Syl
vius, Collet , Billuart , Dens, contra Sánchez, Lessium , S . Ligorio et
plures alios ; fatentur tamen posteriores talem fornicationem aliquan
do speciale esse peccatum propter infamiam , mærorem parentum , ri
xas , odium , scandalum , etc .
Priores autem , scilicet S. Thomas, S . Bonaventura, etc . , senten
tiam suam sic probant : 1.° Injuria parentibus puellæ , sub quorum
custodiâ integritas virginalis ejus posita est , infertur ; 2.° ipsa virgo
evidenti se exponit periculo conveniensmatrimonium non inveniendi ,
et sic contra prudentiam peccat ; 3 .° ponitur in viâ meretricandi , à
quâ retrahebatur ne signaculum virginitatis amitteret , ut ait S. Tho - ,
mas ; 4 .° peccata per oppositionem ad virtutem specificantur : porrò
virginitas specialis est virtus , et carnis integritas-est bonum ad hanc
virtutem singulariter pertinens; ergo , etc. . .
Addit DD. Bouvier sequentia : « Ultimæ illæ rationes nec consensu
PART. I. CAP. 1. 65
puellæ , nec consensu parentum ejus destruuntur : undè ruit ratio -fun
damentalis defensoris alterius sententiæ , scilicet axiomaistud apud om
nes receptum , scienti et volenti non fit injuria : quippè necesse est ut
sciens et consentiens habeat facultatem juş suum cedendi; jus autem
istud puella non habet in ordine ad peccatum virginitati opositum . !
- aStuprum igitur etiam voluntarium speciale est luxuriæ ,peccatum :
cùm autem Concil. trid . definierit , sess . 14 , cap. 7 , necessarium es
se jure divino declarare in confessione circumstantias quæ peccati spe
ciem mutant, binc altera exsurgit quæstio ad praxim continuam perti
nens , an videlicet qui stupri voluntárii sunt rei , sive facto ; sive de
siderio, sive delectatione, circumstantiam virginitatis aperire tenean
tur. Communiùs affirmant theologi, hancque necessitatem habentvelut
consectarium principii semel admissi. its :
« Quia tamen , iuquit Sylvius, t. 3 , p. 835 , alia sententia non caret
probabilitate , idcircò non putamus damnandos eos qui à.puellæ,quid .
piam istorum conftente non quærunt an sit virgo, an corrupta .»
Collet eamdem sententiam tenet , nempè communem et malitiam
mortalem înferentem circumstantiæ virginitátis in stupro voluntario :
undè sic loquitur : «Probabiliùs· est puellam ..virginem quæ turpem
coſtum desiderat , aut in ejus cogitatione,morosè oblectatur , virgini
tatis suæ circumstàntiam confiteri debere ; idem diceņdum de eo qui
virginis copulam appetit. Quia circumstantia virginitatis mutat spe
ciem peccati. Efficit enim ut pravus animi affectus sit stuprum spiri
tuale ; sicut actus qui pro objecto habet conjugatam est spirituale adul
terium ; ergo,hæc conclusio est in praxi admodùm dura : quis enim ,
audito in confessione mali desiderit peccato , puellam jam grændævam
aut monialem facilè interroget an sit virgo ? Aliud tamen docere non
ausim .» Sic Bailly et alii multi.
Billuart et apud ipsum , ait DD. Bouvier, Wiggers, Boulart et
Daelman contendunt circumstanțiam virginitatis in voluntario stupro
specialem addere malitiain simplici fornicationi , sed duntaxat venia
lem , quæ igitur non necessarið aperienda est in confessione. « Etenim ,
inquit doctissimus theologus cenomanensis , juxta Billuart , si hæc ma
litia ex naturâ suâ mortalis esset , maximè quia puella sigilli virgini
tatis fractione in viâ meretricandi, ut ait S. Thomas , constitueretur ,
vel quia gravis injuria parentibus ejus inferretur. At puella hoc facto
non videtur constituta in proximo meretricandi periculo : et si , pa
rentibus consentientibus vel plenè,ignorantibus ("), in stuprum liberè
(1) Sic hac de re , quoad notitiam publicam , loquitur Billuart: « Non impe
ditur (matrimonium ) per stuprum , visi in quantum innotescit, quod rarò acci
dit , et quandò accidit est per,accidens stupro » (Dissert. 6 , art. 3.)
66 MOECHTALOGIA
consentiat, turc gravis injuria ipsiş non infertur; ergo , etc .
Oigamos ahora al mismo Billuart , å fin de poder apreciar mejor el
valor de sus razones y juzgar mas sanamente de la sabiduría de sus
principios y de-su doctripa. He aquí, pues , de qué manera se espre
sa este célebre y profundo teólogo : « Probabiliùs videtur stuprum vir
ginis ultrò consentientis non superaddere - fornicationi simplici mali
tiam mortalem , quæ sit necessario in confessione explicanda , sed ve
nialem duntaxat. Ita Joannes Wiggers, de justitiâ et jurè, tract. ,
cap. 4 , dụb. 1 , quem citat-et sequitur Boudart , tract. 6 , m . vi præ
cept. Deoalog . , q . 4 ; et novissiinè Carolus , Gilenus , Daelman , de
jure et justitiâ , q . 4 , observat. 17.
« Neque ideo putes nos à D . Th. dissentire. Statuit quidem S . Doc
tor et nos eum ipso stuprum virginis consentientis esse verè stuprum
et speciem distinctam luxuriæ : at non dicit esse mortalis malitiæ ;
non enim omnis circumstantia mutans speciem , semper addit malitiam
mortalem , quod fortè fallit minùs intelligentes, siquidem sint plures
peccatorum species quæ secundùm se non sunt mortales , v . g . ira ,
avaritia , gula , prodigalitas, vaņa gloria , etc . Item eæ quæ sunt se
cundùm se mortales sæpè fiant veniales ex levitate materiæ .)
Seria demasiado difuso si quisiese referir aquí todas las razones y
todas las pruebas à priori que aduce. Billuart én apoyo de la opinion
que adelanta ; pués las principales quedan ya resumidas de antemano:
nos contentaremos con citar su grande prueba à posteriori, es decir ,
su prueba práctica , que nos parece muy notable . Él la llama prueba
ex communi pravi et inconvenientibus. Héla aquí á la letra : «Si stu
prum virginis ultrò consentientis superadderet simplici fornicationi
malitiam mortalem , sequitur quòd puella aut vir se accusans de de
lectationibus aut desideriis in ordine ad copulam teneretur etiam ex
plicare an sit virgo vel non ; et si id taceant, debeat inquirere confes -
sarius: atqui hoc est contra praxim communem tam pænitentium
quàm confessariorum , idque' foret utrisque onus intolerabile ; quæ
enim puella , in pari casu , somniavit unquàm explicare sitne virgo
vel non ? Quis pariter vir id cogitavit inquirere aut exprimere ? Et si
id sciscitari ab eis tenet copfessarius, ingenuas puellas præsertim
moniales pudore maximo suffundet et elingues efficiet ; à viris autem
responsum habebit se id nescire , neque de eo cogitasse , et demùm ab
utrisque nimiæ et suspectæ curiositatis arguetur. Ingenuè fateor me
antequàm præsenti opinioni subscriberem , in his pudendis el impor
tunis interrogationibus faciendis, dùm menti occurrerent, graves'mo
lestias passum esse et aliis creasse , mihique rarò fuisse satisfactum .
Ergo.»
PART. 1. CAP. 1. NS
67
Mons. Bouvier confiesa y al terminar su artículo sobre el estupro ,
que esperimentó el mismo embarazo en los primeros años de su minis
terio sacerdotal. He aquí sus propias palabras : «Fateor et ego hoc ip
sum mihi non semel accidisse in primis sacerdotii mei anộis. Idcircò
à pudendis hujusmodi quæstionibus cautè abstineo , quoties importu
næ videntur , bis rationibus , innixus: 1.º probabilitate opinionis mo
do expositæ ; 2.º difficultate executionis alterius sententiæ ; 3.° peri
culo scandalizandi pænitentes eosque à tribunali sacro avertendi;
4.° bonâ fide in quâ communissimè versantur fideles circa obligationem
talem circumstantiam declarandi: integritas autem confessionis non
obligat eum tanto incommodo.»
Hay otra razon que puede hacerse valer en favor de la opinion de
Billuart ; que es la siguiente : los autores enseñan generalmente que
la circunstancia de la virginidad en el hombre que peċa libremente
no añade , como en la mujer, una malicia mortal á la simple fornica
çion . ¿ Por qué la circunstancia de la pérdida voluntaria de la virgi
nidad ha de ser mortal en un caso , y no en el otro ? ¿ Por ventura
hay una diferencia tan grande entre esas dos circunstancias ó esas dos
pérdidas ? ¿Guardan acašo proporcion ó son relativamente la una á la
otra como la malicia venial es á la malicia mortal? Nada lo prueba.
Ahora bien , por conclusion final ¿qué hay que pensar de una obli
gacion deducida de una circunstancia que ofrece taptas dificultades y
embarazo en la práctica , y que impone a los penitentes y á los confe- '
sores una carga intolerable , como dicen Billuart y Mons. Bouvier ,
utrisque onus intolerabile ; de una circunstancia en fin con respecto á
la cual los penitentes parece se hallan en una perfecta. buena fe y en
una ignorancia invencible ? ¿ No parece que hay algo de irregular ó
vicioso en un principio que conduce á semejantes consecuencias prác
ticas ? Salvad sin embargo este principio en cuanto al fondo no ha
ciendo las preguntas que él prescribe sino con suma reserva y cuando
la necesidad parezca evidente y cierta , es decir, cuando la naturaleza
de las cosas, de las circunstancias y el carácter de las personas pru
dentemente apreciados os autorizaren suficientemente á hacerlas; y
en fin , para decirlo todo en una palabra , es preciso abstenerse de ha
cer preguntas importunas ; intempestivas , imprudentes , indiscretas ,
inútiles y curiosas.
DE LA RESTITUCION POR CAUSA DE SEDUCCION Ó DE ESTUPRO Y DE
FORNICACION .

Si bien para tratar de este artículo se suele remitir a los lectores á


68 MOECHIALOGÍA .
las obras generales de leología ó á los tratados especiales sobre la jus
ticia , no podemos sin embargo prescindir de esponer aquí , á lo me
nos en general , los principios que deben seguirse en la apreciacion
de los casos en que hay obligacion de reparar el perjuicio material ó
temporal causado-por-el seductor.
Un hombre que , sin recurrir a la violencia , á las amenazas, al en
gaño ó al fraude, peca con una persona libre que consiente volunta
riamente en cometer el crímen y en deshonrarse , no está obligado pa
ra con ella á reparacion alguna ; la persona deshonrada debe imputar
se á sí misma las cansecuencias de su libertinaje ; scienti et volenti non
fit injuria .
Sin embargo , si el corruptor divulgase la falta de su cómplice , es
taria obligado a reparar el daño que en este caso resultaria á la mu
chacha ó á sus padres, quienes, en razon de su difamacion , deberian
aumentar su dote para asegurarla un establecimiento conveniente.
Empero , si la falta llegáre á hacerse públicà de otra manera ó por
culpa de la misma jóven , nos parece probable que él nada debe in
demnizar a los padres. Si una persona falta voluntariamente á sus de
beres , sus padres no están obligados á procurarle el establecimiento
que hubiera podido tener llevando una vida arreglada é irreprensible;
y si no halla un partido conveniente y adecuado á su condicion , no
debe quejarse sino de sí misma.
Aquel que seduce á una persona haciendo uso de la fuerza , de las
amenazas ó del engaño se hace responsable de todos los perjuieios que
ella sufre , ora en su fortuna , ora en su honor , si el crimen es di
vulgado. Luego* si , en razon de haber ella perdido su honor , no pue
de encontrar un partido segun su condicion , el seductor está obligado
á tomarla por esposa , ó á dotarla. convenientemente á fin de que
pueda casarse conforme á su clase y estado. Él es libre de escoger
entre esos dos medios . Sin embargo , si la muchacha no quisiere ca
sarse con él , no por esto dejará de estar obligado á dotarla ; si ella
rehusa la dote , no se le obligará á que la tome por mujer . Pero , en
el caso que los padres de la persona seducida hubiesen aumentado su
dote , á fin de poder casarla convenientemente , el corruptor estaria
obligado a abonårles ese aumento.
« Si el crímen , dice Mons. Gousset conforme con S . Ligorio , no ha
traido en pos de sí ningun perjuicio material , ya sea porque quedó
secreto , ya porque la persona que de él fué victima pudo procurarse
un establecimiento 'tan ventajoso , como si hubiese estado intacta , el
seductor no está obligado a reparacion alguna. Pero no podria recla
mar lo que hubiese pagado á consecuencia de una condena ở de una
PART . I. CAP. 1. 69
transaccion . Tampoco estaria dispensado de toda satisfaccion personal
ni para con la persona seducida pi para con sus padres. Haremos ob
servar que las súplicas reiteradas', las solicitaciones importunas , por
sí solas y sin ninguna amenaza , no bastan para constituir una injuria
grave , y originar ; en el que las emplea , la obligacion de restituir ;
á menos que , atendida la posicion del que solicita y la edad y el ca
rácter de la persona solicitada , no vengan a ser vejatorias, ó no im - .
priman un temor respetuoso , al que un inferior no cree poder resi:
tir sin graves inconvenientes.» (Theol. morale.)
El que seduce á una persona con promesa de matrimonio ¿ está obli
gado á casarse con ella ? Ciertamente está obligado , dice S . Ligorio ,
apoyado en el comun sentir de los teólogos y de los canonistas, tanto
si la promesa fue fingida , como si fué sincera . En el primer caso ,,há
llase á ello obligado , en general, no en virtud de su falsa promesa ,
sino en virtud de la injuria que hizo á la víctima de su falacia y de su
doblez. Parece que igualmente está obligado en el segundo caso, por
que , dicen , una vez cumplida la condicion", la promesa se hace obli
gatoria . Todos los teólogos están de acuerdo , con Lugo , en que el
corruptor está obligado en conciencia á casarse con la persona a quien
sedujo , ó á réparar el perjuicio que le causó . Empero , şi no puede
reparar este perjuicio , es preciso concluir , con Lugo, que está estre.
chamente obligado á casarse con ella , á menos sin embargo , como
hace observar el mismo teólogo , que la condicion del hombre sea muy
superior a la de la mujer , porque nadie está obligado á restituir en
su perjuicio mas de lo que debe . ; ! ! !
Pero volviendo a la promesa de matrimonio hecha con la única idea
de cometer el crímen , creemos , con Mons. Gousset, que esta cuestion
debe entrar en la de los contratos hechos bajo una condicion ilícita ,
y consideramos que tales promesas deberian mirarse como nulas , .co
mo que no pueden producir efecto alguno. Por otra parte las mucha
chas jamás deberian contar seriamente con semejảntes promesas ; an
tes bien deberian siempre mirarlas como ilusorias y falaces , porque ,
solo .son dictadas por la pasion . La prueba de que son ilusorias y.en
gañosas , es que muy rara vez van seguidas del matrimonio. El arti- ,
culo 1172 del Código civil dice formalmente : « Toda condicion de una
cosa imposible ó contraria á las buenas costumbres es nula , y hace
nulo el pacto que de ella depende.» Ahora bien , tal es evidentemente
la convencion de aquel que promete casarse con una persona si ella
consiente en pecar,con él. Es cierto que esta opinion es mas favorable
á las buenas costumbres que el parecer contrario . «Una causa es ili
cita cuando es contçária á las buenas costumbres, ó prohibida por las
70 MOECHIALOGIA .
leyes, sean divinas , eclesiásticas ó civiles (1). Asídebe mirarse como
nulo el compromiso de cometer un crímen , una accion contraria á la
moral evangélica .».(Mons. Gousset , t. 1 , de la Cause des contrats.)
Quæ contra jus fiunt debent utique pro infectis haberi. (Reg . juris.) Pac
tum turpe vel rei turpis aut impossibilis de jure vel de facto nullam obli
gationem inducit.(Greg. IX .).
Aunque S . Ligorio se adhiera al sentir comun de los teólogos re
lativamente a la promesa de matrimonio de que se trata , conviene
no obstante en que semejantes promesas son inmorales , y que bajo
este concepto los obispos deberian mirarlas como absolutamente nulas
en la práctica . He aquí sus palabras: « Adnotare juvat,cum Tournely ,
valdè utile fore ad hujusmodi flagitia vitanda quòd promissiones ma
trimonii ad obtinendam deflorationem , etiam fortè juramento firmatæ ;
invalidæ declarentur ab episcopis , prout fert auctor præfatus in pra
xi deductum in quâdam diæcesi gallicanâ cum magno profectu.
(Lib. 3, n . 641.) Esta es tambien la opinion de Collet , quien se es
presa así : «Si aliquo in loco puellæ sub promissionématrimonii facilè
seducerentur , meliùs futurum esse ut eæ promissiones , etiam jura
mento confirmatæ , nihil ducerentur ab episcopis utpotè totidem libi
dinis incentivæ .» ( T . 2 , de sexto Decalogi præcepto .) De la misma
manera piensan M . Carrière, Justitia , n .° 1361, y el autor del Exá
men raisonné sur les commandements de Dieu , t. 1 , cap. 7. Tal es
igualmente el sentir de: M . Lyonnet ( Tract. de justitiâ et jure ,
Lugd . , 1834) citado por M . Rousselot en el pasaje siguiente : « Vi pro .
missionis veræ deflorator ad nihil tenetur. Non enim tenetur ratione
fraudis , cùm nulla sit et bonâ fide intendebat stupratam ducere ; nec
tenetur ratione promissiónis, nam contractus sub conditione turpi ,
etiam adimpletâ conditione , non obligat. Cod. civ. , art. 1172 : Toda
condicion de una cosa imposible o contraria á las buenas costumbres ,
ó prohibida por la ley , es nula y anula el pacto que de ella depende.)
En efecto , como lo hace observar Mons. Gousset , si se reconoce que
la promesa de matrimonio , hecha bajo una condicion que conduzca
al libertinaje , es absolutamente nula , aun despues de cumplida dicha
condicion , no será tan fácil el dejarse seducir por una promesa se
mejante.
Hay quien objeta que está doctrina hará que los seductores sean mas
osados en hacer promesas de casamiento , sabiendo que no están obli
gados á cumplirlas. Pero puede uno contestarles que las muchachas
podrán igualmente aprovecharse de saber eso para no dejarse seducir
(1) Efectivamente es así, si la ley civil es una verdadera ley, es decir , si es
justa y fundada en la equidad y en la buena moral. .
PART. I. CAP . I. 71 .
por promesas vanas é ilusorias ; y de este modo habrá compensacion .
Por otra parle los hombres llegados ya ese grado de corrupcion po
se detienen apenas por escrúpulos de conciencia. Ei siis, it istowego
Sin embargo , dice Mons.Gousset , si puella quam seduxit indè con
ceperit , haya ó no habido promesa , el seductor deberá casarse con
ella ', a fin de evitar el escándalo , asegurar la suerte de la criatura ,
y reparar así , en lo posible , la falta de que él se hizo culpabte . No
estaria dispensado de esta obligación , que es puramente moral, sino
en tanto que ese matrimonio , por falta de simpatías entre los contra
yentes , pudiese tener consecuencias funèstas. En todo caso , si hay un
hijo , el padre y la madre están obligados igual y solidariamente , ca
da uno segun sus medios, à proveer a su educacion , hasta que él
pueda bastarse å si propio . En el caso que el, seductor hubiese re
currido a la violencia ó al fraude, la educacion del hijo quedará prin
cipalmente a su cargo.) 981; js .
En efecto , el hombre y 'la mujer , si no medio violencia'ni engaño,
están obligados solidariamente , por derecho natural, canónico ó ci
.vil , a criar y educar el hijo hasta que este pueda bastarse á sí pro -
pio , y esto.aun en los paises donde , como en Francia , está prohibido
el investigar la paternidad . Este es el sentir del autor del Code civil
commenté ; así espresado (art. 203 y 303) : El principio ipdicado en es
te artículo es igualmente aplioablë á los padres y madres de los hijos
naturales legalmente reconocidos. Ași es juzgado por muchos tribuna
les reales y por el tribunal de casacion: La misma regla debe seguirse
en órden a los hijos naturales que no están reconocidos. Elpadre y la
madre de;un hijo natural, aunque sea incestuoso ó adulterino , están
solidariamente obligados en conciencia , según sus facultades y me
dios , á proveer a su educacion desde el momento en que nace hasta
que pueda bastarse á sí mismo. El mismo autor todavía añade : La
distincion que hacen los antiguos teólogos entre los tres años primeros,
que ellos ponen a cargo de la madre , y los años siguientes , durante
los cuales quieren que el padre sea el único encargado de la educa
cion.del hijo , parece que ya no es admisible . En'vano se alegaria la
costambre en favor de esa opinion , puesto que los principios de juris
prudencia parecen contrarios. .
Otro comentador del Código,civil , M . Rogron , habla en el mismo
sentido : Esta obligacion pesa tambien sobre el padre y .la madre na
turales en favor del hijo que ellos 'han reconocido : el Código civil no
la espresa , pero está fundada en el derecho natural , y se deduce , à
fortiori , de los derechos alimenticios concedidos -á los hijos incestuosos
por el art. 762. (Code civil expliqué.)
11 . .
ALOGÍA
· 72 MOECHI . .
Siel hijo es colocado en la casa de espósitos, los autores de sus dias
están obligados á pagar todos los gastos que ocasione , á menos que
ellos fueren verdaderamente pobres. :1 ,
He aquí lo que con respecto á eso dice Mons. Bouvier : « Si, pro
lem in xenodochio exposuerint, ex commudi sententiâ lotum damnum
restitúere xenodochio tenentur , nisi verè sunt pauperes, quia xenodo
chia in favorem infantium , non verò parentum , fundata sunt. Utal
tem quantitás restituenda rectè determinetur , quærendum est an pro
les vixerit , an autem et quandd, sit mortua ; si vixerit , restituendi
suntomnes sumptus qui apud nutricem fieri debuerunt, et deindè in ip
so xenodochio usque ad annum duodecimum , quo sufficienter labora
re incipit infans ad ea lucranda quæ vitæ et vestitui absolutè sunt ne
cessaria , Omnes illi sumptus puno æstimantur moraliter, Cenomani ,
mille fr. Si, utcommunissimè contingit , proles mortua fuerit , sump
lus restituendi à die , expositionis ad diem mortis erunt computandi.
Si verò nullo modo deprebendi possit utrùm proles mortua sit an vi
vat;, restitutio erit facienda sècundùm communis mortis et vitæ pro
babilitates. Experientiâ constat quòd vix pars vigesima infantium à .
die nativitatis ad duodecimum annum perveniat , multò plures in pri:
mis annis et præsertim in primis mensibus.moriuntur quàm posteà ;
igitur in tali dubio , ompibus perpensis , centum et quinquaginta vel
ducentos fr circiter xenodochio restituere sufficit. Quandò infans ex
positus aliquo * charactere distinctivo fuit insignitus, semper facilè
cognosci potest an vivat necne ; omnes enim circumstantiæ expositionis
accuratè describuntur.» (Tractatus de jure .) Aliàs, etiam , omnibus
eventibus pensatis , 150° vel 200 fr. exiguntur. Sunt tamen xenodochia
quæ 400 fr : cxigunt ad susceptionem pueri educandi. Aded pårvæ pe
tuntur summæ pb magnas mortis probabilitates.
,. .
S . III .

Del rapto , ó del robo con violencia orpor seduccion irresistible. ' '

"Raptus, juxta quosdam recentiores , est vis illata cuicumque perso - .


næ aut parentibus ejus, explendæ.libidinis causâ , vel, ut nomen som
nat , cum cæteris theologis , raptus est violenta alicujus personæ ab
•ductio ab uno loco ad alium , libidinis explendæ causâ vel contraben
di cum eâ matrimonii. . . . . . . . :
Vis illata . Es la violencia . Esta es física . ,moral: la primera se
comprende fácilmente , es la violencia propiamente llamada ; la se
yunda , ó la violència moral, es un miedo grave muy intimidanle o
PART. I. CAP. 1. . 73
respetuoso é injustamente impreso . Por otra parte el influjo de la vio - .
lencia moral es relativo al carácter y á la edad de las personas. niat
Cuicumque persona . No se trata aquí de una persona simplemente
virgen , como en el estupro , sino de cualquiera persona , sive sit vir
go , sive corrupta , sive soluta , sive conjugata , sive laica , sive Deo
sacra , sive consanguinea , sive affinis , sive mas , sive femina. lo * *
Non omnis raptus ejusdem est gravitatis : sed is, ut loquitur Collet ,
inter feminarum raptus, ordo esse videtur , ut gravissimum peccatum
sit raptus monialis , deindè ejus quæ simplex castitatis votum fecit . .
Posteà consanguineæ vel affinis , vel demùm conjugalæ , virginis , vi
duæ et meretricis. Ita Sylvius , qui addit multò plùs peccatum iri si
masculus masculum , femina feminam nefariæ libidinis intuiti ra
peret. Ribeiros downon terens 93
Vet ejus parentibus. «Quia , inquit . Billuart , ad rationeni raptûs ut
est species,luxuriæ , non est necesse quòd violeņtia semper fiat perso - ,
næ raptæ , sufficit quod fiat ejus parentibus seu tutoribus , aut custo:
dibus ab jis constitutis sub quarum curã existit persona rapta , quia
tunc habetur violentia ; qualitercumque autem adsit violentia , salva
tur ratio raptûs ut est spécies luxuriæ : sive ergo rapta raptori con
sentiat reluctantibus parentibus, sive consentiant pareôles reluctante
raptâ , est raplus... . . . . . . . . .. . . . . ' ,
* Si rapta conseptiat pescientibus.parentibus , non est propriè raptus,
quia nulla est violentia ; sed est simplex fuga , quæ tamen , ut ait
Billuart , reduci potest ad raplum , quia licèt fiat'siñe violentiâ , non
fit tamen sipe injuriâ parentum . .
Causå explenda libidinis. Porque, si es otro . el motivo por que una
persona ha sido robada , como para venderla como á ' esclava ó para
· hacer de ella upa sirvienta , esto ya no es una especie de lujuria sino
un rapto á que se da el nombre de plagium , que es evidentemente una
mera iðjuria ó una injusticia que se hace à la persona robada .
Cuando un hombre que dio palabra de casarse con una joven con el
consentimiento de sus padres la roba: a despecho de estos para casarse.
con ella , no es réo de rapto si la muchacha consiente , aunque el pe =
ca al emplear la violencia . La razon de eso es que un desposado tienę,
en virtud de los esponsales , un derecho adquirido sobre la persona
de su prometida , y de consiguiente puede tomarla por esposa cuando
ella copsienta , si por otra parte no existe otro impedimento. (Sto . To
más y los papasGelasio y Lucio III.) ; .
Fornicatio cum dormiente vel ebriâ , vel cum puellâ usum rationis
nou habente , vel istius criminis ignarâ , reduci potest ad raptum , li
cèt non sit raptus propriè dictus, sed potiùs deceptio. Raptus igitur
74 MOECHIALOGIA .
ut præcedentibus patet est species luxurve distincta necessario in con
fessiône aperienda : 'nam præter malitiam contra castitatem adest
gravis injustitia, .
Nunc requirendum superest quomodo, se gerere debeat-mulier vi
oppressa , ut non peccet;coram Deo . Respondet Billuart hisce,verbis :
«1 .° Interiùs non consentire delectationi , sed ipsi positivè dissentire ;
2. exteriùs positive resistere oppressori toto corporis connisu ,motu ,
agitatione, pugnis ,'aląpis , etiam clamando , si sit spes-subsidii im
petrandi; uno yerho , in quantùm utiliter 'potest et rationabiliter de
bet , alioquin eo ipso quo quantùm potest et debet non impedit , cen
setur consentire : undè (Exod . , 22), domi stuprata jubetur fapidari ,
non stuprata in agro ; quia domi potuisset utiliter et debuisset clama
re , non in agro . Véase lo que tocante à este punto dijimos en la
página 64. : .
Insuper idem auctor petit an clamare debeat cum periculo vitæ aut'
famæ . Respondet : «Si speret se Deo opitulante non consensuram in
teriùs veñeri , quod difficile fateor , non puto, teneri ; modò tamen ex
teriùs semper quantùm potest résistat opprimenti.» . .. :
Aquí no debemos hablar del rapto considerado como a impedimen
to dirimente del matrimonio ; pues nuestro objeto.no lo exige. Para
eso remitimos el lector á •las obras de teología y á los tratados ,espe
ciales acerca del matrimonio . i . ! .
**El concilio de Trento fulmina escomunion contra los raptores , y
contra los que les aconsejen , ó les presten auxilio ó favor. Raptor
ipse ác omnes illi consilium , auxilium et favorem præbentes sint ipso
jure,excommunicati ac perpetuò infames. (Sess. 24; de Ref. matr ., c. 6 .),
« Insuper raptor tenetur jure naturali puellam loco tuto redditam
ducere', si velit vel decenter dotare , et nibilominùs ipsi ac parentia .
bus ejus convenientem satisfactionem exhibere. .
aQui autem ad raptum efficaciter cooperati sunt totam injustitiam ,
tum erga puellan ., tum erga parentes ejus', quantùin fieri potest, de
fectu raptoris reparare tenentur.) '(DD . Bouvier.) Para 'mas amplios
, detalles véanse los tratados especiales de la justicia en las obras de
teología , particularmente los de Mons. Bouvier , S . Ligorio , Collet ,
Billuart , les Conférences d 'Angers , etc .
: .:• . S.S . iv.
IV . . . .
: Del adulterio . .
Adulterium est'accessus ad alienum torum , yel fori alieni violatio".
Triplici modo committi potest : 1.° inter conjugatuin et solutam ;
pakt. 1. CAP. I. 75
2 .° inter solutum et conjugatam ; et 3 .°' inler conjugatum et alterius
uxorem .
: Adulterium est species luxuriæ ab aliis distincta et quidem pecca
tum mortale gravissimum . Patet ex Scripturà sacrâ . i
Si dormierit vir cum uxóre alterius , uterque morietur, id est adula
ter et adultera : et auferes malum de Israel." (Deút. xxu , 22.) Qui
adulter est , propter cordis inopiam , perdet animam suam . Turpitudi
nem et ignominiam congregat sibi, et opprobrium illius non delebitur .
•(Proverb. XXXII,- 33.) Adalterium vocatur.nefas et iniquitasmašima ,
ignisusquead perditionem devorans, etc . (Job xxxi , 11 et 12 .) Nolite,
errare ; neque fornicarii neque adulteri regnum Dei possidebunt. 41 ad
Cor. vi , 9 .) . vii . .. .:
Adulterium duplex , id est concubitus illicitus conjugati cum conju
gatâ , est gravius quàm simplex, càm priuş duo jura violet , et pos
leriús jus tantùm unum ; adulterium conjugatæ cum soluto graviùs
est quàm conjugati cum solutâ , propter rationes omnibus evidentes et
notas. Variæ igitur circumstantiæ adulterii necessariò in confessione
aperiendæ sunt. .. i . . ,
Adulterium consentiente marito perpetratuin,verum sempei remanet
adulterium , a pesar del famoso axioma:.Scienti et volenti non fit in
juria ; porque nadie tiene ni puede tener el derecho de renunciar, en
la especie , a su derecho. No tiene uno el derecho de renunciar á su
derecho sino cuando puede hacerlo lícitamente. Empero , aquella ce
siop no puede hacerse sin pecar contra la naturaleza y la esencia del
matrimonio : luego el consentimiento en cuestion no puede borrar la
malicia del adulterio. Inocencio XI condenó la proposicion siguiente :
Copula cum .conjugatâ consentiente -marito non est adulterium , adeòque
sufficit dicere^en _confessione se esse fornicatum . .
Concubilús cum personâ alteri desponsatâ , vel persona despoňsatæ .
cum soluto , non est verè adulterium cùm non sit accessus ad alie
num torum : attamen est speciale injustitiæ peccatum ' in çovfessione
explicandum , propter pactum in sponsalibus initum . ' ' . . "
· Billuart quærit an in foro conscientiæ liceat marito aut patri occi
dere filiam vel adulterum in actuali adulterio deprehensos? Respon
det: « Id licere non pauci opióantur propter leges civiles , quæ hanc
occisionem permittunt ; licitum est enim occidere malefactores aucto
ritate, legum 'et reipublicæ ., Sed statim addit : « Illicitum esse : videtur.
etiam certa et est communior. Ratio est quia ‘leges civiles non possunt
dare auctoritatem sic occidendi adulteros , ei si darent fórent injustæ ,
proindèque ipsa oocisio remaneret intrinsetè mala. 1.° Quia est con
tra jus gentium , imò contra jus naturale”, quod quis extra urgentem
76 MOECHIALOGIA .
necessitatem inauditus et indefensus puniatur , maximè poenâ mortis ;
item quòd quis constitqatur in eâdem causâ pars , accusator et judex,
sicque sub falso .prætextu aperiatur via occidendi innocentes. 2 .° Est
. contra charitatem quod quis', absque urgenlė necessitate , occida
tur cum evidenti et ferè certo periculo damnationis æternæ : hæc
autem acciderent si liceret occidere adulteros in flagranti crimine de
prehensos ; nec ulla est necessitas quæ ad id cogat", cùm peque bo
num publicum hîc periclitetur, et-reus possit capi et judicialiter puni
ri: secùs esset si ageretur, v. g . de hoste publico reipublicæ qui capi,
non possit , nec aliter,quàm ejus'occisione defendi respublicà . Di
cendum itaque leges civiles hanc occasionem duntaxat tolerare seu
permittere negativè, hoc est non prohibere , nec pụnire propter vehe
mentiam doloris et iræ quâ supponitur occidens permótus.» (Diss. vi,
art. 5 .1
* El Código penal francés dice : «La mujer convicta de adulterio su
frirá la pena de cárcel durante tres meses á lo menos y de dos años á
lo 'mas. (Art: 337.) - El*cómplice de la mujer adúlterà será castigado
con la pena de cárcel durante el mismo espacio de tiempo , y ademas ,
se le impondrá una multa de ciento á dos mil francos. (Art. 338.).
El asesinato cometido por el marido en la persona de su mujer, ó
por esta en su marido , no es disculpable , si la vida del marido ó de
la mujer que cometió el asesinato no estuvo puesta en peligro en el
momento mismo en que el asesiñato tuvo lugar.
« Sin embargo , en el caso de adulterio , el asesinato cometido por, el .
marido en la persona de su mujer, así como en la del cómplice , en el
instante en que les sorprende en fragante delito en la casa conyugal , .
es disculpable . (Código penal, art. 324 .) . .
« Cuando el hecho de disculpa fuere probado , si se trata de un crí
-men "que merezca la pena de muerte.... la pena será reducida a la de
uro á cinco años de cárcel.» "(Ibid . art. 326 .) a . ;; . .
Interrogandi'sunt adulteri , 1 .º an uterque fúerit conjugatus ? 2 .0 an
mariti innocentis bona dilapidaverint ? 3 .0 an sit adulterandi consue
tudo ? 4.° an adultera conceperit aut concipere potuerit? 5 . an nata
sit proles ? 6 .? an proles ex ipariti bonis putrialur ut legitima ? 7.0 an’
eadem proles cum legitimis filiis successerit hæreditati sibi indebitæ ?
8 .° an sìt successura ? 9. deniquè an certum vel dubiant sit cuinam
pertineat proles, etc. ?
Remitimos el lector , como en el artículo del estupro , á las obras
generales de teología ó á los tratados especiales acerca de la justicia .
Con todo no podemos prescindir de espoñer aquí, respecto a este pun
to , no sea sino algunos principios generales. '
PART: I. CAP. I. 77
Ya se supone que elpadre y.la madre del bijo adulterino están obli
gados, junta y solidariamente, a reparar el daño temporál que su cri
men ha causado al marido y á los hijos y herederos legitimos.
Sin embargo , segun dicen Billuart , Comet, ei Pi Antonio , etc . , si
el hombre hubiese arrastrado la mujer al crimen usando de violencia ,
temor; engaño , fraude ó amenaza , él estaria obligado , en primer lu
gar , å reparar todo el daño , como que seria su causante principal;
la mujer, solo estaria obligada en faltando él , y aun en este caso ella
Dada deheria indemnizar si tan solo hubiese cedido por violencia , ó
por una fuerza irresistible , porque entonces de pingupa manera seria
culpable ."Si el crimen no tuvo consecuencias , no hay que hacer resti
túcion , porque, dice Collet , «per, adulterium præcisè non infertur
damnum , sed solùm injuria pro quâ , sí tamen publịca sit , non làm
debetür restitutio quàin satisfactio honoraria per veniæ petitionem , et
signa doloris ac submissionis exhibenda. ) .
¿ Si ocurriese la duda de si el hijo es legitimo o no, hay obligacion
de restituir? Los unos, entre ellos S. Antonino, Sylvio , S . Ligorio y
otros muchos, inclínanse á la negativa , porque , dicen , 1.° in dubio
melior est conditio possidentis bona súa ; 2.° porque, para estar obli- .
gado á restituir , no basta poner una causa injusta y que acarree per
juicio ; sino que además necesita probarse que el daño causado es el
resultado de la causa injusta supuesta” : empero", en la especie , no es
cierto que el hijo sea ilegítimo. Otros , y en gran número, como He
bert, de Lugo , Sanchez , Laymann , Billuart, Collet, el P. Antonio ,
Mons. Bouvier , etc.', creen que hay obligacion de restituir á prorata
de la .duda. Esta opinion nos parece,mas probable que la primera.
Aquí se puede , en nuestro concepto ,'invocar esta máxima : pater est
quem nuptiæ demonstrant, que no mira ,mas que al foro esterno. A mas
de esto , 1.º los autores det adulterio son la causa injusta del peligro
apreciable que correel-marido de introducir en su familia un hijo es
traño ; 2 . .porque es injusto que , en la duda de un perjuicio , el ipo
cente sufra todo el daño , y que los que són su causa injusta queden li
. bres de loda indemnizacion ; 3 ., porque en fin este principio , in dubio
melior est conditio ‘possidentis, es mas favorable al marido que a los
adulteros, pues elmarido posee justamente sus bienes, de que no de
be ser despojado injustamente por una simple duda , etc.
« Es difícil y aun generalmente imposible el reparar lodo el daño
causado por el adúltero : generalmente no puede determinarse exacta
mente lo que es necesario restituir ; á veces , el padre o la madre de
la criatura puere antes que el crimen haya tenido todas sus conse
cuencias; ó bien ni el uno ni la ofra 'tienen medios para hacer la me
78 MOECATALOGÍA .
nor indemnizacion. En este último caso , se puede y aun se debe ab
solverles , augque no hayan restituido , si , siendo verdaderamente
penitentes , tienen el firme propósito de hacer lo que de ellos dependa
· para reparar la injusticia de que se hicieron culpables , in
» Si el hijo adulterino ha sobrevivido al padre putativo., si ha reco
-gido su herencia ó ha entrado a la parte de ella con uno ó muchos hijos
legítimos, es más fácil de estimar el daño y de fijar la suma que se
debe restituir : Entonces la restitucion se hace ó -á los hijos legitimos ,
ő á falta de hijoslegítimos , á los herederos ab intestato ,del padre pu
tativo, sean ó no forzosos . Si, por el contrario , el hijo-adulteriño ba
muerto, antes que el padre putativo , la restitucion será mucho menos
considerable . En este caso se hará,proporcionalmente á lo que el padre
putativo haya gạştado para criar y educar el hijo , déduciendo , si hu
biere,lugar , el importe de los servicios que este le hubiese prestado
con su trabajo o industria . . .
» Si'el padre putativo y el hijo viven todavía , como no se sabe. cual
de los dos deba sobrevivir al otro , la cosa se hace en este caso mas
árdua. En esta incertitud , el deudor puede ; ó indemnizar desde luego
el daño que hizo , y reservarse el reparar en seguida,el daño futuro, á
medida que se vaya haciendo, tomando con todo eso , para'el caso de
morir, las precauciones que juzgare necesarias para asegurar una re
paración conveniente ; ó restituir al presente cierta suma más o menos
fuerte , proporcionada al daño hecho y al daño hacedero mas ó'me
nos probable , segun la edad , la constitucion , la fuerza ó la debili
dad del padre putativo del hijo :adulterino. Una vez bechia esta in
demnizacion , él queda libre en adelante de toda obligacion , venga lo
que viņiere', aun cuando el hijo adulterino sobreviviese al padre pu - '
lativo. .
» Por lo que mira especialmente á la madre del hijo adulterino, si ella
tiene bienes propios, debe servirse de ellos en cuanto pueda para repa
rar la injusticia que cometió para con su marido: -Si no posee bienes
disponibles , ó si no puede disponer .de 'los que tiene sịn graves incon
venientes , sin difamarse ó con riesgo de sembrar, discordias en lå fa
milia , en este caso doblará su trabajo y sus cuidados para conservar
y aumentar los bienes de la casa , haciendo , sobre todo por lo que
personalmente la atañe , todos los ahorros que la prudencia le permi
ta , en provecho de su marido y de sus hijos legítimos. Tambien tiene
el deber de invitar al hijo adulterino á que guarde el celibato , si él no
liene inclinacion al estado del matrimopio , a fin de que los bienes que
haya recibido ó deba recibir sin tener derecho á ellos puedan algun
dia volver á mạnos de los herederos del padre putativo . Hará tambien
PART. I. CAP. I. 79
cuánto de ella dependiere para inducir á su marida, bajo un pretesto
cualquiera , á quedisponga de una parte de sus bienes a favor de sus
hijos ó herederos legítimos .» (Theologie morale , por, Mons. Gousset.)
Juxta librum cui titulus : Collationes practicæ in sextum et nonum De.
calogi præceptum (de Saint-Flour) , asi'verd proles certò est spuria ex
pluribus adulteris dubiis , partem patris ut certam inter se dividere de
bent; nec tamen videntur teneri solidariè defectu alterius, ut affirmat
theol. Pict. , quia etsi uterque adulter posuerit causam sufficientem
damni, ignoratur tamen quis fuerit causa efficax , nisi dicatur et pro
betur conceptionem non fieri unico actu .» Quod probari minimè po
test contra experientiam .
Ahora surge otra grave cuestion , á saber, si , ¿ cuando un hombre
adúltero no ha reparado el daño que causó , la mujer está obligada á
descubrir su crímen á sú marido, o á su hijo ilegítimo o á sus hijosle
gitimos? Cree S . Ligorio, con otros muchos teólogos, que la mujer debe
confesar su crímen si ei perjuicio que sufren su marido y sus hijos le
gítimos importa mas que el temor qué puede ella 'tener de perder su
reputacion; si la tuviese ya perdida , siipsa sit perditæ fáme , y lo que
S . Ligorio dice de una mujer malæ famæ , de Lugo y Lessius lo llaman
de femina vili ; si hay qưe temer un daño público , damnum publicum ,
como por ejemplo en el caso en que un hijo adulterino fuese el here
derö"de un trono y llevase una vida inmoral' y escandalosa , sispurius
sit perditis moribus imbutus, et succedere debeat regno aut principatui,
y muchos otroscasos casi metafísicos o şin aplicacion moralmente po
sible . (Lib . 3 , n . 653.) : : .
Nos parece, que es fácil que todo el mundo convenga en que , una
opinion tal , es decir ; la de S . Ligorio y de otros muchos teólogos, ofre
ce tan grandes dificultades en la práctica que parece mas prudente y
mas acertado el seguir el dictámen espresado y claramente formulado
en las Conférences d 'Angers en estos términos: « La madre del hijo
adulterino, para bacer la reparacion á que está obligada, debe redo
blar su trabajo y suscuidados para la conservacion y aumento de los
bienes de la casa , ahorrar lo que honestamente pudiere en su vestir y
otros gastos ; y si tiene bienes propios de que pueda disponer , debe
dejarlos á sus hijos legitimos , y aun aventajarlos en perjuicio de su hi
jo adulterino , si se lo permiten las costumbres del país. Si esa madre
no pudiese hacerlo asi para reparar el daño que ella causa á su mari
do , á sushijos legitimos ó á susherederos legitimos, no está de nin
guna manera obligada a descubrir su crímen ni á su marido, ni á su
hijo adulterino, ni á sus otros hijos ; jamás debe aconsejársele que ha
ga esa declaracion so pretesto 'de remediar el perjuicio que ella les
GÍA
80 MOECHIALO .
causa ; esto seria .esponerla á perder su honor y su vida quizá ; esto
seria turbar la paz del matrimonio y causar"un grande escándálo en
la parèntela. El padre natural del hijo ilegítimo debe, en este caso,
reparar todos los "perjuicios. Basta que la madre haga penitencia , y
no debe negársele la absolucion de su falta ; porque nadie tiene obli
gacion de descubrir su -torpeza , ni de castigarse á sí propio de otra
* manera que con la penitencia . Eso es conforme a la decision de Ino
cencio III, concebida en estos términos: Mulieri quæ , ignorante ma
rito , de adulterio prolem suscepit, quamvis.id viro suo timeat confiteri ,
* non est poenitentia deneganda... sed competens satisfactio per discretum
sacerdotem ei debet injungi. (Cap. off. 9 , de pæn . et rem .) » (Acerca de
Jos mandamientos de Dios .)
* Puede añadirse que la declaracion de que aquí se trata , á mas de
que estaria llena de peligros para la mujer, seria completamente in
útil; porque ni el marido , ni el bijo adulterino, ni los otros hijos esta
rian obligados á darle fe , segun esta máxima ó este principio de dere
cho : confitenti turpitudinem suam nulla debetur fides. Este es por otra
parte el comun,parecer de los teólogos, en el sentido que ordinaria
mente aquella declaracion no debe hacerse. Así lo creen Mons. Bou
vier , Mons.Gousset , Collet y una multitud de otros graves autores.
Decimos ordinariamente por las razones arriba referidas por S . Ligorio
y otros muchos autores, p. 79. A mayor abundamiento , y para mas
amplios detalles , puede verse lo que en orden á esto dicen los autores
de teologia moral y particularmente Billuart, S. Ligorio , Collet, Bai
lly , Mons. Bouvier, etc . .
Terminaremos este párrafo con algunas observaciones que tienen
por objeto establecer ciertas presunciones de paternidad , que quizá
no dejarán de tener alguna importancia en la apreciacion de los mo
tivos que deben determinar y fijar las decisiones de los confesores .
¿ La ciencia fisiológica puede suministrar señales que indiquen que
la paternidad es..cierta ó á lo menos probable? Esta á la verdad es una
cuestion cuya solucion nos parece de mucha importancia en la prácti
ca. Mas, es preciso confesar,desde luego , que la ciencia solo puede
conducirnos á algunas probabilidades , y no á la certitud absoluta .
Sea de esto, lo que fuere,, he aquí lo que uno puede adelantar sin
comprometerse demasiado: præsumptio paternitatis generatim ha
benda est viro qui prior cognovit mulierem statim 'post menses (las re
glas ó los menstruos), quia raro 'concipiuņi feminæ tempore menstruo
rum durante vel paulò præcedente .
Créese generalmente , como dijimos en nuestra Fisiologia , que el
momento mas favorable para concebir és el que sigue inmediatamente
PART. I. CAP. 1. . 81
despues del flujo menstruo, que parece dispone el útero á ser fecun
dado. Asíes como , siguiendo el consejo delmédico Fernel , la mujer
de Enrique II se hizo embarazada , y dió á luz a un niño despues de
once años de una aparente y aflictiva esterilidad .
Sunt nonnullæ , at aíunt, mulieres admodùm sensibiles, quæ ex
quâdam perturbatione insolitâ , vel voluptuosâ horripilatione, vel po
tiùs quodam spasmo uteri se concepisse cognoscunt : indè fortè mos
aquam frigidam projiciendi quibusdam jumentis domesticis tempore
congressûs cum mare , ùt spasmus uterinus indè oriatur et proindè se
minis retentio et femellæ prægnatio . - birtis 74 ::
Sea de esto lo que fuere , si los fenómenos arriba indicados se mani
fiestan en circunstancias dadas, es muy de presumir que hubo concep
cion , sobre todo si la mujer no tarda á esperimentar algunos de los
síntomas cuyó cuadro trazamos en nuestro ' Compendio de fisiologia
humana. He aquí pues ese agregado de fenómenos que anuncian la
concepcion ó el comienzo del preñado : « Los ojos pierden parte de su .
vivacidad, de su brillo, se ponen lánguidos y parece que se hunden en
la órbita . Los párpados se rodean de un círculo negruzco , livido ó
aplomado. La nariz se afila' y alarga. La boca se agranda. Todos los
lineamentos del rostro se contraen hacia atrás , lo que hace sobresalir
la barba hácia delante . La cara se pone pálida , se cubre de manchas
mas o menos notables , mas o menos numerosas , unas veces rojas ó de
un negro mas o menos subido , otras veces, pero mas raras, de un
blanco mate ó como de color de leche, se enmascara , en una pala
bra... El gusto y las digestiones se pervierten aun mas especialmente .
Sobrevienen anorexia, náuseas y vómitos que con frecuencia van se
guidos de una completa pérdida del apetito . Lamujer no desea , para
alimentarse , sino objetos estraños y algunas veces asquerosos. Ya
siente gran placer comiendo arcilla , ceniza , cal, mascando carbon ; ya
apetece carnes medio corrompidas, arañas'ú otros animalesinmundos .
En general le desagradan las cosas crasas, y las sustancias animales;
las frutas y las legumbres le sientan mejor. Algunas se procuran con
avidez las bebidas ácidas y solo quieren alimentos preparados con vi
nagre , tales como la ensalada , etc.) , dette
Con frecuencia tambien , pero en una época mas adelantada ; el es
tado moral de lamujer sufre numerosos cambios, y aun á veces se ha
lla espuesta á perturbaciones muy graves. Todo el mundo sabe en
efecto que el estado de preñèz cambia algunas veces el carácter de la
mujer ; lo vuelve estraño , caprichoso, fantástico; modifica sus afec
ciones , sus gustos , sus inclinaciones , etc. Tål mujer, de genio afable
y dulce , se vuelve violenta , colérica , iracunda , tal otra , tierna.es
82 • MOECHIALOGÍA .
posa y buena madre , detesta á su marido , rechaza á sus hijos ó basta
llega á cobrarles un odio implacable durante todo el tiempo de su
embarazo, etc . No insistiremos mas acerca de esos detalles secundarios,
que nos conducirian fuera denuestro objeto. Volviendo pues á la ma
teria que nos ocupa digo que , si los fenómenos primitivos y sobre to
do físicos que acabamos de indicar van unidos con las circunstan
cias anteriormente señaladas , establecen una fundada, presunción de
que hay preñado ; y esta presuncion se cambia en certitud moral si
en la próxima época de la 'menstruacion falta el flujo acostumbrado
sin mediar otra 'causa ó accidente,apreciable . Dejando aparte esos
datos, es preciso tener en consideracion la frecuencia respectiva de
los actos; porque, siendo por otra parte todas las cosas iguales , la
presuncion para la concepcion generalmente debe ir ligada con la ac
cion de una causa muchas veces renovada mas bien que con una cau
sa que tad sold ha obrado una vez , puesto que la esperiencia prueba
todos los dias que un solo acto puede quedar sin resultado.
- Juxta quosdam theologos, potiùs marito quàm adultero proles tri•
buenda est , quia , inquiunt, sine repuggantiâ et majori affectu fit con
cubitus. No cabe duda que eso puede sucéder 'en algunos casos; pero
tambien se puede sostener lo contrario , y tal vez con mas verosimili
tud , por el solo hecho de haber una fuerte pasion recíproca. Sobre
todo, siempre es preciso tener presente que , segun el comun sentir
de los, teólogos , una mujer adúltera puede siempre presumir que su
hijo es legitimo, á menos que ella tenga pruebas ciertas de lo con
trario .

. S. V. . .
.
Del incesto.

Incestus est concubitus •illicitus cum consanguineâ vel affipe intra


gradus prohibitos , quales sunt omnes gradus consanguinitatis et affini
tatis ex matrimonio sive rato , sive consummato , provenientis usque
ad quartum inclusive , affinitatis autem ex copulâ illicitâ usque ad se- .
cundam inclusivè, (Concil. trid .)
Juxta Billuart, sub concubitu tanquàm sub actu principali, intellio
genda sunt oscula , tactus, aspectus et alia cum consanguineâ ,vel af
fine , quæ ex se ad concubitum ordinantur , et ideò pertinent ad inces
tum , sicuti cum conjugatâ ad adulterium , cum solutâ ad fornicatio
nem .
Incestus semper habitus est ut luxuriæ peccatum speciale etquidem
PART. I. CAP. I. 83
gravissimum . Sic ( Levit . 20) pænâ mortis plectuntur incestuosi , quia
rem illicitam , rem nefariam operati sunt. — Auditur inter vos fornica
tio, ait B . Paulus (Cor. 5 ) , et talis fornicatio qualis nec inter gentes,
ita ut uxorem patris suialiquis habeat:
Los teólogos hacen derivar las razones de la malicia del incesto , de
una considerable falta de respeto debido á los parientes, de una repug
naocia especial, spécialis repugnantia usúi debito venereorum , y de la
gran familiaridad que se tiene con la parentela , y que parece muy
propia , dicen , para favorecer el desórden ý el libertipaje , etc. Tam
bien hubieran podido añadir otra razon -en la cual ninguno de ellos
atinó , y que sin embargo tiene su valor como las otras. Esta fazon,
que reprueba las uniones incestuosas, es la fuerte probabilidad ó por
decir mejor la certitud relativa de la degeneracion fisica y tambien
moral de la especie humana. Con el objeto de evitar esta grave per -,
turbacion de la naturaleza humana , la sabiduría de los legisladores,
enlazando , en provecho de la humanidad , la močal' con la fisiologia ,
ordenó la mezcla y el cruzamiento de las sangres y de las razas. Mer
ced á esa sabia legislacion todo fué prudentemente pesado y equilibra
do en el órden social . Los sugetos linfáticos contrajeron alianzas con
individuos sanguíneos ó biliosos; personas sobrado nerviosas se unie
ron con sugetos linfáticos sanguíneos , etc . De ahí dimana la conser
vacion del equilibrio humanitario y social, es decir, de la salud y del
vigor del individuo," de la familias de los pueblos, de las naciones y
de todo el género humano .
· Trastornad ese órden fisiológico e higiénico, y haced contraer alian
zas esclusiva y constantemente en las familias linfáticas sin mezcla de
sangre , y despues de algunas generaciones no tendreis mas que una
gente escrofulosa , raquítica , cacoquimia , desmedrada y tal vez re
ducida á un triste y,deplorable cretinismo, es decir, á una completa
degeneracion física y moral. - . :
Es cierto , y de observacion vulgar, que la degeneracion no tarda á
manifestarse en las familias cuando ellas se casan entre sí , ó cuando
se celebran matrimonios entre parientēs muy cercanos. '
Las instituciones canónicas, ó mejor dicho , el espíritu del cristia
nismo tan eminentemente civilizador, y del cual emana la moralidad de
una buena legislacion , ha dado la prueba de una previsora sabiduría
fundada en las leyes de la mas elevada fisiologia , al prohibir elma
trimonio en ciertos grados de parentesco . La perpetuidad de la espe
cie , su fuerza fisica , , intelectual, moral, social y nacional , halla en
esa prohibicion su .mas segura y sólida garantia ; porque , como ya
hemos dicho , las razas se deterioran y se vician cuando se niegan á
A
HIALOGÍ
81 MOEC .
alianzas estrañas. Sabido.es, sin pretender por esto una comparacion,
el modo de mejorar las razas en las especies de animales domésticos.
Algunos fisiólogos célebres han llegado hasta decir , hablando de
las leyes de la propagacion de la especie humana, que , si los hombres
fuesen bastante prudentes y razonables para seguir el voto de la na
turaleza sacrificando los bajos goces del amor propio en provecho de su
posteridad , seria posible perfeccionar mucho mas de lo que uno puede
figurarse ; no solamente individuos y familias , sino naciones enteras,
con respecto a la fuerza , al vigor , forma, estatura , salud , y también
bajo el punto de vista moral ; es decir, de la inteligencia y del senti
miento . Vólvamós á nuestra materia . .
· Licèt incestus sit, gravior cum consanguineâ quàm cum affine in
eodem gradu, uterque tamen probabiliter et communiter habetur ejus
dem speciei. Item videtur de omnibus incestibus consanguinitatis et
aflinitatis. Audiamus gravem auctorem : «Quamvis omnes incestus sint
ejusdem speciei , alii tamen aliis graviores sunt : sic gravior est inces
tuscum ,consanguineâ quàm cum affine; gravior in priori quàm in se
cundo gradu , sive consanguinitatis , sive affinitatis , et sic de cæte
ris. Item gravior et gçavissimus est'in liņeâ rectâ , sive consanguini
tatis , sive affinitatis, quàm in lineâ collaterali, putà cum matré quàm
cum sorore: undè, juxta communiorem sententiam de circumstantiis
notabiliter aggravantibus accusandis , non sufficit dicere in confessio
ne : commisi incestum ; sed debet exprimi' an cum consanguineâ vel
affine , an in primo vel in secundo gradu lineæ rectæ vel collateralis,
quia hæc circumstantiæ videntur notabiliter aggravare . De remotiori
bus autem gradibus lineæ collateralis censeo cum Ledesma , de la
Cruz , Sporer et pluribus aliis non debere esse sollicitum pænitentem ,
quia id non videtur notabiļiter aggravari. » (Billuart.) .
Collet se espresa á poca diferencia en los mismos términos : « In
confessione exprimendum est quo in gradu peccatum fuerit. Ra
tio est quia incestus cum matre gravior est quàm cum filià ; cum
filiâ gravior quàm cum sorore; cum sorore gravior quàm cum conso
brinâ ; cum novercâ gravior quàm cum uxore fratris : uno verbo gra
vior est incestus quo propinquior est consanguinitatis vel affinitatis
violatæ gradus, n.
Notandum hîc est cum theologis incestum cum affine privare inces
tuosum jure petendi debitum ab uxore cujus consanguineam in primo
vel secundo gradu cognovit. Ratio quia per hanc copulam cum uxore
affinitatem contrahit : si sine peccato mortali non potest petere debi
tum priusquàm ab episcopo dispensationem habuerit, ipsi tamen'licet
reddere uxori petenti.
PART. I. CAP. I. 85
Independientemente del incesto. carnal, hay otras dos especies de
incesto , á saber, el legal y el espiritual. . ..
El incesto legal tiene lugar entre personas ligadas por la adopcion
legal , es decir , cuando se adopta á un estraño por hijo , en virtud de
la autoridad del soberano ó de la ley . Así pues aquel que «peccat car
naliter - como dicé Billuart - cum cognatâ legali; committit incestum
à præcedentibus specie distinctum , et ided explicandum in confes
sione . » . ..
El incesto espiritual és aquel que se comete entre personas ligadas
por la cognacion espiritûal que proviene de los sacramentos del bau
tismo y de la confirmacion. Luego aquel que peca con su parienta es
piritual comete un incesto de una especie distinta , como en el caso
del parentesco legal , con la diferencia que en el espiritual hay ade
más la malicia especial del sacrilegio , en razon de la irreverencia he
cha al sacramento . Todo eso debe ser declarado en confesion .
Nonnulli theologi. contendunt peccatum confessarii cum pænitente
suâ ad incestum reducendum esse ; alii verd plures negant. Quidquid
sit, certum est hanc circumstantiam utmultùm aggravantem necessarið
in confessione aperiendam esse , præsertim si ex occasione sacramenti
peccatum ortum fuerit. Majus esset crimen et justitiæ oppositum si cum
parochianâ committeretur, quia pastor peccaret contra officium , cùm ,
ut inquit Billuart , ex officio teneatur etiam extra confessionem suas
'oves à peccato arcere et bonis moribus imbuere.
Sanchez enseña que necesariamente debe esplicarse en confesion la
circunstancia de la penitenta', no solo como una circunstancia que
agrava notablemente el pecado,'sí' que tambien porque cambia su es
pecie ; y que este es un sacrilegio especial en razon de la prohibicion
particular de la Iglesia y de la semejanza que tiene con el incesto es
piritual. « Censeo circumstantiam hanc esse pecessariò fatendam , non
solùm tanquàm notabiliter aggravantem , sed quia mutat speciem , et
est speciale sacrilegium ratione specialis prohibitionis Ecclesiæ , et
quodammodo incestus ratione vinculi similis cognationi, et ex sacra
mento contracti,» ( De Matr ., l. 7 , desp . 56 , n . 4 .)
Léese en las Conférences d 'Angers, sobre los mandamientos de Dips:
« Cuando una mujer ó una muchacha se acusáre de haber cometido
acciones impúdicas con su confesor, ó de haber sido solicitada por es
te á cometerlas, debe prohibirsele absolutamente que vuelva á confe
sar con él, y no se dará la absolucion a esta mujer á no ser que pro
meta que no se confesará mậs con aquel confesor, aun cuando hubiése
hecho voto y'prometido con juramento confesarse siempre con él. Es
preciso hacerle comprender que ese voto , como no es una promesa de .
86 . MOE CHJALOGÍA.
MORCE
un bien mayor y siendo además contrario a las buenas costumbres en
la circunstancia , és nulo y.no está obligada á cumplirlo.»
Deniquè actas impudici inter personas ejusdem sexûs consangui
nitate , affinitate vel alio modo conjunctas, malitiam incestûs invol
vunt: ideò hæc circumstantia in confessione declaranda est.
Será menester asegurarse de si el incesto es reservado y en qué gra
do. Ordinariamente no hay reserva sino en el incesto carpal ó el in
cesto propiamente llamado. .

: . S. VI.
Del sacrilegio .
Şacrilegium carnale , vel quatenùs luxuriæ peccatum , est violatio
rei sacræ per actum venereùm vel carnalem . Sacrilegium carnale non
solùm est peccatum contra castitatem , verùm etiam contra Dei hono
rem ob pollutionem rei sacrà . -
Súb'nomine rei sacræ intelliguntur«persona sacra vel Deo consecra
ta , locus sacer , vel locưs divino cultui destinatus, ut ecclesia , coe
meterium , et objecta specialiter sanctificata , ut linteamina , vasa sa
cra, oleum sanctum , etc .
Las personas consagradas á Dios por las órdenes sagradas ó por un
voto , ya sea' solemne, ya simple , cometen un sacrilegio cuando caen
en algún pecado de impureza. Este pecado no solamente es contra la
castidad , sino tambien contra la religion , y hace un ultraje especial á
Dios manchando ó pròfanando una cosa que le está consagrada. El
crímen es mayor ó por mejor decir hay un doble crimen củando las
dos personas que lo cometen están consagradas á Dios. El pecado es
mas enorme todavía cuando el hombre está á -la vez revestido de las
órdenes sagradas y es religioso profeso ,porque viola dos votos , el de
las órdenes que recibió y el de su profesion en el claustro . El pecado
de impureza cometido por un, religioso profeso es mayor que el de una
persona que no ha prometido guardar la castidad sino por un voto
simple , porque el voto solemne es una especie de consagracion , y por
esto obliga mas estrechamente que el voto simple. Esa solemnidad del
voto es pues una circunstancia que si bien no cambia la especie del
pecado , á lo menos lo agrava notablemente , segun el parecer proba
ble de gran número de téółogos. Segun eso tambien nos parece proba- . ,
ble que una persona ligada por un voto doble , como por ejemplo un
religioso profeso que ha recibido las órdenes sagradas, está obligado
. . á declarar estas circunstancias en confesión , por mas que digan mu
PART. I. CAP. 1. 87
chos graves autores como Busembaum , Sanchez , etc . He aquí lo que
dice el primero : « Omnis actus luxuriosus, tàm interior quàm exte
rior, in personâ vel cum personâ-voto castitatis consecratâ ,circa quem
tamen probabile est non opus esse exprimere utrùm fuerit votum so
lemne an simplex : sicuti neque, siduplici titulo sit sacratá, v. g. quia
est sacerdos et religiosus: quia est moraliter una numero malitia .»
(Apud S . Ligorio , lib . 111 , n . 454.) Sanchez dice así : « Si sit sacerdos
professus, sàtisfacit dicens se sacerdotem esse... Sacerdos professus
fornicans satis fatetur se professum ,.tacito sacerdotio , dicens.d (Lib . 7,
d . 27 , n . 28 et 30.) Parece que Billuart es de la misma opinion .
« Puto ... nec requiri – dice - quòd pænitens (religiosus ) explicet se
ulteriùs esse sacerdotem aut episcopum .» (Dissert. 6 , art. 8.) El ca
llar una de estas circunstancias , es, en nuestro conceplo , atenuar
notablemente la falta . ¿ Quién será capaz de persuadirse que la falta
contra la castidad cometida por un religioso profeso y sacerdote no es
mas grave que la misma falta cometida por un simple sacerdote ? Ompe
sacrilegium tanto gravius est quantò fædior culpa , et quantò persona
peccans Deo sacratior est. Undè Collet dicit : « Censeo eum qui reli
giosus simul et sacerdos fornicatus est‘ad utriusque circumstantiæ
declarationem teneri; quia duplicem .violat consecrationem ratione suî
maximè diversam . Undè etiam ei qui contra castitatem deliquit expli
candum est an sit sacerdos , an diaconus.» ( De sexto Decalogi præ
cepto.)
Qui personam Deo consecratam directè vel indirectè , v . g . consilio ,
suasione , turpiloquiis aut perversis exemplis , ad peccandum contra
castitatem inducit, sacrilegii fit reus, licèt ipse luxuriosè circa eam non
peccet ; tunc enim violatio alterius ipsi tanquàm causæ scandalizandi
imputatur ; ait Dens, tom . 4 , pag. 418. (Cita de Mons. Bouvier.)
Quoad locum , sacrilegium carnale committitur per copulam aut
quamcumque voluntariam seminis humani effusionem in loco sacro .
Nomine loci sacri intelligitur et comprehenditur, juxta theologos, om
nis locus ab episcopo benedictus et ad officia divina destinatus, à tecto
interiori usque ad pavimentum : etiam comprehenduntur cæmeteria .
Non reputatur locus sacer sacristia , neque atrium , neque turris vel
campanile , neque tandem oratoria privata , nisi auctoritate episcopi
erecta sini, ut videtur in hospitalibus, in collegiis et seminariis , quia
tunc veræ censentur ecclesiæ . Rursùs non habetur ut locus sacer ora
lorium privatum non consecratnm aut benedictum , etsi episcopus in
eo missam celebrare permiserit , quia , hoc non obstante , potest ad
nutum domini ad usus profanos converti ; neque domus monasterii,
claustra , officinæ , cellæ monachorum , etc. . .
13
88 MOECHIÁLOGÍA
Attamen difficilè concipitur actus venereos in oratoriis privatis in
quibus sacrosanctum missæ sacrificium celebratur perpetratos non indè
specialem involvere malitiam . Ratio et fides talem circumstantiam in
confessione semper aperiendam sat omni christiano dictitant. Ita sen
tiunt Concina et DD. Bouvier.
« Omnis actus venereus , ait posterior theologus , in loco sacro vo
luntariè peractus , etiam occultè ,malitiam sacrilegii contrahit , quia ,
juxta communem hominum æstimationem , est irreverentiâ erga istum
locum , proindèque erga Deum . » .
· Şi acfus ille notus esset et per seminis effusionem consummatus,
pollueretur locus. Non tamen , ut ait Billuart, publica notitia locum
polluit , sed pollutum manifestat, et obligationem imponit eo abstinen -
di donec reconcilietur.
Actus conjugalis , etiam occultus , qui in loco sacro consummatur,
semper sacrilegium 'habendus est juxta mentem Ecclesiæ , quamvis
plures auctores contendant contrarium ,putà , ut dicunt, si conjuges
diù detineantur in ecclesiâ , ùt potest contingere tempore obsidionis
vel excursionis militaris: quia , ut ait Billuart, nulla in casu neces
sitas est ob quam Ecclesia censeatur relaxare legem suam ; huic enim
incontinentiæ periculo occurrere possunt conjuges oratione , jejupio et
aliis mediis, sicut facerent sidiù ab invicem abesse cogerentur, aut
alterdiuturno morbo detineretur.
Quidquid sit , quoad malitiam , de omnibus aliis peccatis luxuriæ in
loco sacro commissis , ut aspectus, turpiloquia , oscula , tactus, etiam
secluso proximo pollutionis periculo, arbitramur, propter reverentiam
loci , id est honorem Deò debitum , circumstantiam loci sacri in con
fessione aperiendam esse. In controversiâ doctorum et in dubio rerum
pars tutior eligenda est.
Insuper notat DD . Bouvier ferè omnes theologos fateri dictos actus
malitiam sacrilegii induere, si tales sint ut proximo pollutionis peri
culo exponant, quia lex ecclesiastica , pollutionem in loco sacro pro
hibens, vetat, eo ipso ne quis proximo periculo hujusmodi infamiæ se
exponat : porrò actus valdè turpes et voluntarii tali periculo evidenter
exponunt ; ergo , etc .
En cuanto a los pecados puramente internos , segun la opinion co
mun , no contraen la malicia especial del sacrilegio , deducida de la
circunstancia de la santidad del lugar , nisi persona habeat voluntatem
diabolicam in ipso loco peccatum consummandi, quia , seclusâ hâc
intentione , gravem injuriam loco sacro inferre non videtur. Ita
Dens, etc .
Quoad res sacras, vel omnia objecta à personis et locis sacris dis
PART. I. CAP. II. 89
tincta et divino cultui consecrata , ut vasa sacra , linteamina , etc .
certum est his rebusabuti in luxuriam , vel oleum sanctum , vel sanc
tissimam Eucharistiam sumere in superstitiones luxuriam spectantes,
horrenduin ,esse sacrilegium .
« Quidam theologi dixerunt sacerdotem divinam Eucharistiam su
per se gestantem sacrilegium non committere si internè aut externè
adversùs castitatem , non in contemptum sacramenti, peccet. Verùm
alii communissimè dicunt illum sacrilegii esse reum , nam sancta sanc
tè tractanda sunt : porrò sacerdos , in eo casu , non sanctè , sed hor
rendè sanctum sanctorum tractat ; ergo , etc ... A
« Plures adhuc volunt peccatum carnale malitiam sacrilegii ex cir
cumstantiâ diei dominicæ aut festi induere : at plerique banc speciem
negantaut dicunt eam non esse mortalem , ideoque non necessariò de
clarandam ; quia finis præcepli , scilicet vacatio actibus sanctis per
diem dominicam non cadit sub præcepto . » (DD. Bouvier.) : $32037 1.1

CAPITULO II .
DE LA LUJURIA 'NO CONSUMADA .

Luxuria non consummata est ea quæ usque ad mollitiem , pollutio


nem vel seminis effusionem non progreditur. Ad eam referuntur om
nes actus peccaminosi interni et externi in se , vel in alios exerciti
contra castitatem , sub nomine impudicitiæ quæ excludit à regno
Dei.
Hoc in capite sequentia exponentur :delectatio morosa ,cogitationes,
desiderium , gaudium , tactus, oscula , amplexus, aspectus, picturæ
et sculpturæ turpes vel indecentes; ornatus mulierum , turpiloquia ,
cantilenæ , lectiones , libri obsceni, choreæ seu saltationes, spectacula ,
Tudi sceneci, magnetismus animalis et alia siinilia .

ARTICULO I.
DE LOS PENSAMIENTOS , DE LOS DESEOS, DEL GOZO Ó DE LA COMPLACEN
: CIA , Y DE LA DELECTACION ,MOROSA EN MATERIA DE LUJURIA .
S . I.
De los pensamientos.
Un pensamiento no viene á ser moralmente malo sino por el placer
que en él se toma y por el consentimiento que se le da. Sabido es que
90 MOECHIALOG .
ÍA
el placer por si solo no basta ; se necesita además que haya adverten
cia y consentimiento de la voluntad . Luego un pensamiento malo ó
deshonesto no es pecado sino cuando es voluntario. Empero , para es
tar seguro de si un mal pensamiento es voluntario ó pecado , es preci.
so distinguir tres cosas: la sugestion , la delectacion y el consenti
miento . La sugestion es la idea del mal presentada al entendimiento;
ella aun no constituye el pecado. La delectacion es el placer carnal que
produce el mal pensamiento ; el pecado no existe todavía ; pero si no
se renuncia a esa delectacion , á esa sensacion de deleite, y por el
contrario uno se complace en él , con pleno conocimiento y propósito
deliberado ó voluntariamente , hay pecado mortal. Si la voluntad no se
adhiere y consiente sino á medias, el pecado no es mas que venial; si
ella no consiente absolutamente no hay pecado alguno.
En materia de lujuria ó de impureza , ordinariamente debe uno mi
rar como culpables de faltas graves á las personas que, sin motivo ni
necesidad , dan acceso á pensamientos ó á ideas deshonestas, porque
habida consideracion á lo propensa que es la naturaleza al mal , es
raro que no se espongan al peligro próximo de complacerse y consentir
en ellas. Perversce cogitationes separant à Deo . (Sap,) Abominatio Do .
mini cogitationes malæ . (Prov.)

S. II. .
De los deseos , del goce ó de la complacencia .

El deseo es un movimiento ó un acto de la voluntad que tiende di


rectamente al cumplimiento de una mala accion . Si uno busca los me
dios de cumplir la obra criminal , el deseo se llama eficaz ; si elde
eso versa sobre un objeto ó sobre una accion que uno no puede alcan
zaró cumplir , este deseo se llama y es realmente ineficaz.
Desiderium speciem suam sumit ab actu exteriori in quem tendit.
Undè si desideretur concubitus cum solutâ , desiderium istud induit
malitiam fornicationis ; si cum conjugatâ , adulterii; si cum Deo sa
cratâ , sacrilegii, etc. Si verò desiderium tendit in species luxuriæ
imperfectæ , earum etiam malitiam , involvet , putà tactûs , aspec
tûs , etc. : hæc omnia in confessione aperienda sunt. Porque el deseo y
la voluntad abrazan al objeto con todas sus cualidades y circunstan
cias, a pesar de toda abstraccion del espíritu. El deseo se aplica á lo
porvenir. - El goce por elcontrario recae sobre lo pasado ; compláce--
se voluntariamente en el recuerdo de un mal consumado ó de actos
graves contra la castidad . Puede ponerse en clase de este goce ó de esta
PART. I. CAP. II. 91
complacencia criminal el disgusto ó el pesar de no haber cometido el
mal cuando uno tenia fácil ocasion de hacerlo. Lo que acabamos de
decir en órden á los deseos, en cuanto a la cualidad de los objetos, de
be aplicarse con respecto al goce y la complacencia que se ha tenido de
las acciones pasadas.

, S . III.
• De la delectacion morosa .

« Delectatio morosa est libera complacentia in re malâ per imagina


tionem exhibitâ ut præsens , sine desiderio illam faciendi, v. g. , si
quis fingat se fornicari , et in eo actu sic repræsentato , illum perficere
non intendens, libero consensu sibi complaceat.
» Dicitur morosa , non à duratione complacentiæ , cùm unicum ins
tans ad consummandum peccatum internum sufficiat, sed quia vo
luntas in eâ delectatione, post advertentiam , quiescit et moratur.»
DD . Bouvier .)
Delectatio dicitur morosa non ex mora temporis , sed ex quod ratio
deliberans circa eam immoratur , nec tamen eam repellit. (S . Thom .)
Así, segun eso , el pensamiento ó la delectacion morosa no es otra
cosa que la complacencia voluntaria actual en el placer que da la idea
de una accion esterior, sin formar aun el deseo de cumplir el acto es
terior.
Estas delectaciones ó ideas morosas son pecados mortales por su na
turaleza . Lo único que puede escusarlas es la falta del consentimiento
de la voluntad. Las personas que las entretienen voluntariamente en
su imaginacion , aunque no quieran cometer el acto esterior cuya idea
les deleita , se complacen , se satisfacen sin embargo representándose
el placer que produce aquella mismaaccion esterior. Empero , el pla
cer que da el pensamiento del acto criminal no proviene sino de la in
clinacion que uno tiene á aquella misma accion , y es de la misma na
turaleza que ella : luego es evidentemente un pecado mortal. Nullus
delectatur in aliquo,nisi afficiatur ad illud , dice Sio. Tomás. El mis
mo doctor decide formalmente que no solo el deseo de cometer una
accion criminal es un pecado mortal, sino que tambien lo es el con
sentimiento que uno da libremente a la delectacion que dicha accion
produce. Consensus in delectationem peccati mortalis est peccatum mor
tale , et non solùm consensus in actum .
En cuanto a la dificultad de saber cuando lospensamientos morosos
son voluntarios, he aqui lo que se lee en las Conférences d'Angers
9% MOECHI .
ALOGIA
acerca de este punto : Ellos (los pensamientos morosos) causan algunas
veces un placer tani sensible que el espíritu casi no puede desecharlós,
ó si los rechaza , no es mas que por un momento ; porque vuelven á
presentarse incontinenti , y ocupan de tal manera la imaginacion que
viene á ser una necesidad el sufrirlos, y escitan en el apetito sensitivo
un placer tan sensible y tan vivo que parece penetrar hasta en la vo
luntad. De ahí es que las personas timoratas creen muchas veces ha
ber consentido en ellos , ó por lo menos lo dudan , y esto les da mucho
cuidado y pone en apuro á los confesores (1). Estos, para juzgar del
estado del penitente que ha sentido tal especie de placer, deben pre
guntarle si le enfadaba el sentirlo , si hizo esfuerzos, aunque inútiles ,
para ahogarlo desde el momento que empezó á esperimentarlo , y si se
sentia dispuesto a adoptar los medios eficaces para preservarse de di
cho placer. Si el confesor ve que el penitente estuvo en estas buenas
disposiciones, que es timorato , que no comete acciones impuras, que
por el contrario mas bien quisiera morir que consentir de propósito
deliberado en un pecado de impureza , puede juzgar á favor del peni
tente , porque el sentimiento del placer sensual no es una señal de que
en él se haya consentido; puede ser tan involuntario como el pensamien
to que lo causó , y no se considera voluntario , á menos que se haya
dado voluntariamente y sin necesidad ocasion al pensamiento desho
nesto que lo promovió , ó que uno no lo haya desaprobado luego que
lo echó de ver . El confesor formará un juicio contrario de su penitente
si nota que este lleva una vida corrompida.
. « Aunque un confesor tenga suficientes indicios para hacerle creer
que el penitente que teme á Dios no ha cometido un pecado mortal,
no debe sin embargo creerle por eso del todo inocente , puesto que
puede haber cometido un pecado venial; porque , aunque haya des
aprobado el placer cuandolo ha advertido, puede haber sido algo flojo
no resistiéndole fuertemente , ó algo negligente no desechándole con
bastante prontitud , y de este modo haberle dado un consentimiento im
perfecto. » (Sobre los mandamientos de Dios.)
He aquí de qué manera se espresa en órden á la misma materia san
Francisco de Sales en su Introduccion a la vida devota : « A veces se
ve uno sorprendido , dice este santo , por algun asomo de delectacion ,
que es seguida inmediatamente,de la tentacion , antes que uno lo eche
(1) Considérase que semejantes penitentes no consintieron en el mal, á lo
menos plenamente . Si hubiesen plenamente consentido , no dudarian de si lo
cometieron ó no. Al contrario , si los penitentes son de ancha conciencia y de
aquellos que con frecuencia caen en faltas esteriores, serán considerados como
que consintieron plenamente. Si no hubiesen consentido de esa manera , lo sa -
brian con certitud , y con respecto a eso no les cabria la menor duda .
PART. I. CAP. ll . 93
de ver : eso no puede ser mas que un pecado venial muy leve, el cual
va tomando creces si , despues que uno ha advertido el peligro en que
se encuentra , permanece por negligencia durante algun rato contem
porizando con la delectacion , vacilando sobre si debe aceptarla ó re
chazarla , y peor todavía si al echarlo de ver se mantiene uno perple
jo durante algun tiempo por verdadero descuido , sin ninguna suerte de
propósito derechazarla . Mas cuando , voluntariamente y de propósito
deliberado , nos hallamos resueltos á complacernos en tal deleite , este
mismo propósito es un gran pecado, si el objeto en que nos deleitamos
es notablemente malo .»
Los pensamientos impuros ó la delectacion morosa pueden ser tam
bien voluntarios indirectamente , como por ejemplo cuándo se habla
sin necesidad de ciertas cosas que en sí son inocentes , pero que uno
sabe por esperiencia que deben causar movimientos desordenados ; ó
cuando uno considera ó para la atencion , sin razon ni motivo , en
ciertos objetos indiferentes ó no malos en sí , pero que , por una dis
posicion particular é individual, conducen infaliblemente á movi
mientos desordenados , que uno se contenta con desecharlos fuera de
tiempo ó cuando son ya escitados. Hay lugar de creer que esos pensa
mientos ó esos movimientos impuros son voluntarios indirectamente y
en su causa ; y de consiguiente son mas o menos criminales.
Ahora surge otra cuestion vivamente controvertida por los teólogos,
y que versa siempre acerca de la delectacion morosa.
Muchos son los autores que pretenden que la delectacion morosa no ,
toma su especie del objeto esterior, sino solamente de la représenta
cion del objeto á la imaginacion , y que en eso difiere del deseo . La ra
zon que ellos dan de esta diferencia , es que el deseo va dirigido al
objeto esterior todo entero tal como es en sí, con todas sus cualidades
y circunstancias, y que de consiguiente , contrae necesariamente to
das sus malicias, a pesar de toda abstraccion del espíritu ( véase
p . 90 ); al paso que la simple delectacion morosa se detiene y des
cansa en la sola representacion del objeto , ó pormejor decir del placer
que este produce, esto es , de la accion esterior, sin deseo ni voluntad
de cumplirla . Undè qui liberè delectatur in copulâ cum conjugatâ ,
consanguineâ aut moniali, sed mente apprehensâ tantùm ut muliere
pulcrå vel conveniente , malitiam adulterii, incestûs, sacrilegii proha
biliter non contrabit. Tal es el dictámen de Lugo , Bonacina , Sporer ,
Layman y deotros muchos autores citados por S . Ligorio , quien afir
maque esta opinion esmuy probable. (Lib . 5 , n. 15.)
Por el contrario , las autoridades más eminentes y graves, como san
Antonino ; Cayetano , Sanchez , Suarez , Sylvius, Lessius, el P. Anto-
94 MOECATALOGIA .
nio , Collet, Dens, ,etc ., rechazan dicha opinion , y aseguran que es
mas probable la contraria , porque ellos no admiten diferencia entre el
deseo y la delectacion morosa. Esta , dicen , lo mismo que el deseo
abraza el objeto entero , tal cual es y como uno lo conoce con todas sus
cualidades , no obstante toda vana abstraccion del espíritu. .
Esasdos opiniones son igualmente probables , dice Mons. Bouvier.
Tales las consideramos tambien , pero solamente en teoría. Billuart
abraza la primera, ó la con abstraccion , en teoría , y adopta la segun
da en la práctica por considerarla mas segura , como mas abajo vere
mos. El mismo S . Ligorio , en el caso de delectacion de copulâ cum
nuptâ , cree que, en la práctica , se debe dar a conocer la circunstan
cia del adultério , á causa del peligro muy próximo que la delectacion
lleva tras sí. . ..
No podemos entrar en el detalle de todas las pruebas que aducen
los autores en apoyo de su opinion respectiva . Contentarémonos dicien
do , con Collet, quòd delectatio morosa speciem necessarid sumit tum
ab objecto proximo circa quod versatur , tum ab ejusdem objecti con
ditionibus : alioquin non plùs peccaret qui copulam sibi repræsentat
quàm qui simplex osculum , quod absurdum est. « Ergo , addit Collet,
delectatio ex hujusmodiobjectis speciem sumit ; et ut ab amplexu spe
cie differt coitus , sic et à complacentiâ in uno differt complacentiâ ab
altero . Hinc pænitentes sicut exprimere tenentur an ad desiderium us
que progressi sint, an autem in merâ delectatione steterint , sic etde-
bent exprimere an delectatio sua pro objecto habuerit tactum , an copu
lam , an hanc simpliciter , vel cum pessimis circumstantiis . Undè cùm
malè instituta confessio , saltem quâ parte malè instituta est , repeti de
beat, tuto sibi suisque pænitentibus providebit director , qui sataget
ut quod incautè omissum est cautè suppleatur. Communissima theolo
gorum opinia , à quâ in re tanti momenti et in quâ de valore sacra
menti agitur , sine periculo recedi non potest. » En apoyo de esta opi
nion pueden tambien citarse las siguientes palabras de Sto . Tomás:
Delectatio alicujus operationis et ipsa operatio ad idem genus peccati re
ducuntur.
A mas de eso é por ventura la delectacion morosa no espone al peli.
gro próximo del deseo ? Uno tantùm gradu desiderium et cogitatio luben
ter nutrita dividuntur, ut quotidiana docet experientia. (Collet.)
« Difficultas est , ait Billuart , utrùm delectatio morosa sioe desiderio
operis faciendi tot malitias contrahat quot habet objectum , si ab illis
præsciodat , seu eas non apprehendat, quamvis aliundè noverit ines
se : ut si quis delectetur de copulâ cum muliere quam quidem novit
conjugatam et consanguineam , non tamen quatenùs est conjugata et
PART. 1, CAP.- 11. 95
consanguinea , sed præcisè quatenùs est.mylier sibi conveniens ut re
gulariter fit ; difficultas est , inquam , utrùni talis sit reus non solùm
'fornicationis autmolliției , sed etiam adulterii et incestûs. Plures ne
gant et plures afirmant , et, ut iterùm fatear , utrinque probabiliter.»
(Disert.,6 ;-art. 15 .) ' . . on adopt esm s espre bili
e la sopinion
Ya hemos dicho que Billuarttadoptaa en oteoría o or,deet la abs
Traccion como mas probable, He aquí como se espresa en órden á esta
materia : «Hæc prima" senteộtia ihi videtur, probabilior, et in hoc
utilior quod , secundùm illam , meliùs et faciliùs 'intelligitur quomo
dò liceat delectari de iis quæ solâ ·lege positiva sunt,prohibita et va -
riis aliis.)
Mas abajo el mismo autor concluye ásí : . .
„Regulariter in praxi non est recedendum à secundå sententiâ , quia
qui hujusmodi tentationibus dediti sunt regulariter desiderant opus. à
quo non abstinent, nisi vel defectu opportunitatis , velmetu infamiæ
aut pænæ temporalis , vel ex alio similimotivo humano. .
» Hinc inferes regulariter interrogandos esse 'pænitentes de quali
tatibus objecti venerei circa quod morosè delectați sunt, nec suffire si
simpliciter dicant se delectatos fuisse in materiâ : venereâ , aut circa
aliquam mulierem ,sed explicare debent an malier sit conjugata ,aut
consanguinea , aut monialis , etc . .. . . .. :. ''
» Dixi regulariter , quia si probabiliùs constet non adfuisse consen
sum in opus, nec proximum illius periculum ut contingere potest pe
nitentibus timoratæ conscientiæ , qui cùm non soleanthis,obscepitati
bus voluntariè immorari , sæpè tamen dubitant an non irrepserit con
sensus in delectationem , aut si consenserint , certò tamen sciunt et
affirmant se non consensisse in opus externum , nec illud desiderasse ;
talibus, inquam , puto probabiliùs , juxta primam sententiam (cum
abstractione qualitatum objecti), sufficere si siinpliciter 'se accusent ,
vel sub dubio, vel certo de consensu iri delectationem , absque eo quod
cogantur explicare conditiones objecti , explicato tamen voto proprio,
si fortè eo teneantur.» (Ibid .) .
, Mons. Bouvier declara tambien que la segunda opinion (sin abstrac
cion) eş'la mas segura . He aquí sus palabras : « Posterior est tutior ,
sed sæpè difficile est obtinere à pænitentibus ut circumstantias objecti,
cogitati aperiant; tunc prudentes confessarii , priori opinioni (cum
abstractione qualitatum objecti) innixi, ab importunis quæstionibus
abstinent.) . . . "
En efecto , esa es muchas veces , en ocurriendo' tal dificultad , la
unica conducta que puede prudentemente observarse". Pero es menester
que la dificultad sea real y notable , y que haya mas inconvenientes
96 MOECHIALOGIA .
que ventajas en obligar a los penitentes á que declaren detalladamen
te todas las circunstancias del objeto ó de la accion esterior represen
tada en la imaginacion . El principal inconveniente seria hacer el yu
go de la confesion , yamuy oneroso para muchos , mas pesado todavía ,
y no solamente á-los penitentes, sino tambien á los mismos confesores .
Es preciso sin embargo , como ya dijimos al hablar del estupro , sino
salvar el principio, ya que no parece claramente establecido , á lo me
nos seguir las máximas generales ó aproximarse á ellas en cuanto sea
posible , es decir, que es preciso exhortar a los penitentes que de ello
parezcan capaces á esplicarse sumariamente acerca de las principales
circunstancias del objeto ó de la accion esterior , y hacerles si es ne
cesario las preguntas convenientes que la prudencia dictáre. Puede
tambien imitarse el proceder de Billuart arriba indicado por lo que
hace á las personas de conciencia timorata . En una palabra , en todas
las opiniones de los autores , igualmente ó mas ó menos probables, y
por lo mismo mas o menos controvertidas, nunca debe uno ser cons
tantemente esclusivo. La prudencia y la sabiduría quieren que se in
voque , segun las circunstancias , las necesidades , los casos , los ca
racteres y las disposiciones de los penitentes , á falta de principios fijos
é inmutables , el apoyo de las opiniones , ya de una , ya de otra , se
gun sea su grado de probabilidad y sobre todo su tendencia práctica á
las buenas costumbres y á la santa y sólida piedad. Por lo demás su
cede rara vez que las opiniones diversas y aun opuestas de los autores
ortodoxos no ofrezcan algo de bueno ó aplicable en la práctica ; esco -
ged pues ese lado favorable , ese punto práctico ; y muchas veces así ,
tomando un prudente y justo medio , os hallareis situado en el punto
de la verdad práctica. In medio tutissimus ibis. Véase lo que dijimos
en la página 67.
« Qui, advertens se delectari in re venereâ exhibitâ ut præsenti, ma
neret indifferens , probabiliùs mortaliter peccaret , etiamsi motus inor- -
dinatos non sentiret , quia rei malæ adhæreret , aut saltem gravi peri
culo ei adhærendi sese exponeret : sic ferè omnes theologi in praxi.»
(DD. Bouvier.) Billuartdice una cosa análoga á eso : « Se habere pe
gativè circa motus carnales naturaliter exortos , est regulariter pecca
tum mortale : si non præcisè ratione istorum motuum , saltem ratione
periculi consensûs in iis annexi.) w e w i ll also
Bueno será hacer observar ó a lo menos hacer recordar que hay una
gran diferencia entre el mal pensamiento , ó aun la simple complacen
cia en este pensamiento , y el deleitarse en el mismo mal. El simple
pensamiento del mal, aun siendo voluntario , ó de la delectaçion en el
mal no es pecado de sí , como tampoco lo es el conocimiento profundo,
PART. I. CAP. I . 97 .
el recuerdo, la prévision , es decir, el estudio , las meditaciones y las.
reflexiones acerca de las materias del sesto mandamiento : de otra ma
nera los teólogos, los confesores , los médicos , quienes , por su esta - .
do , se entregan a este género de estadio , necesariamente pecarian ; lo
que es inadmisible. Lo que'aquí solamente constituye el pecada , es la
delectaeion voluntaria en el mal mismo, es decir , en el objeto ó en la
accion esterior. . . ; ; : .
Tambien es necesario hacer observar que la sensacion del deleite es
muy diferente del consentimiento en el deleite, La primera muchas
veces es involuntaria , y por consiguiente exenta de toda falta ; el
segundo depende siempre de la voluntad ,;y por lo mismo siempre es
pecado. Una cosa es pues el sentir , y otra el consentir : no es el sen
timiento el que hace el pecado , sino el consentimiento . Non sentire ,
sed consentire peccatum est. ..
Sin embargo muchos penitentes confunden con frecuencia 'esas dos
cosas aunque muy distintas ; confunden igualmente el . pensar en el
mal con el deleitarse en el mal , lo que no es menos distinto. De ahí
nacen á menudo escrúpulos y molestás perplejidades. Véase lo que
dijimos en la página 92 para distinguir lo verdadero de lo falso :
Pregúntase ahora an liceat sponsis et yiduis delectari de copulâ
futurâ vel præteritâ . Busembaum respondet quòd liceat ipsis delecta
ri , modo delectentur appetitu raționali , fton autem .carnali. At"rectè
addit in praxi , ait S . Ligorio, vix hoc posse admitti , cùm delectatio
carnalis ut plurimùm rationali adnectatur.. .
Ese apetito ó esa delectacion razonable .no es otra cosa que el pen
samiento y la prevision de los actos conyugales y de las sensaciones
que los acompañan , ó su simple recuerdo. Todo eso no es ciertamep
te deleitarse en un acto erótico , y no podria ser pecado-sino por ra
zón del peligro de ir mas lejos y de pasar de la delectacion razonable
á la delectacion carnal. Como este peligro puede ser mayor o menor ,
ó tambien nulo, del mismo modo el pecado es mas o menos grave , ó
pulo tambien . . i
«Si, dicit D . Bouvier , sponsi aut vidui consentiant in delectatio
nem carnalem ex prævisione copulæ futuræ , vel ex recordatione co
pulæ præteritæ nascentem , mortaliter peccant : copulam enim sibi
exbibent ut præsentem , ac in eâ voluntariè delectantur: porrò 'copula
præsens respectu eorum est fornicatio , cùm non sint conjugati : er
go , etc .)
Ita etiam Billuart : Si, injuit , delectentur carnaliter de copulâ fu
turâ sibi per imaginationem præsente , peccant mortaliter. Possunt
gaudere quod suo iempore exercebunt legitimèactum conjugalem , si
98 MOECHTALOGIA ,
ve illud gaudium sit propter sanitatem recuperandam , sive propter
meliorem conditionem temporalem , sive etiam propter voluptatem
intra fines matrimonii percipiendam ; similiter viduus et vidua , quod
exercuerint, seclusâ tamen omni commotione voluntariâ . .
Rursus DD . Bouvier ait : «Conjux sibi delectans, in absentià com . '
partis suæ , de copulâ ut præsenti probabiliùs mortaliter peccat , ma
ximè si spiritus genitales graviter commoveantur , non præcisè quia
consentit in rem sibi vetitam , sed quia gravi periculo pollutionis ordi
nariè se exponit. Si autem in copulâ futurâ vel præteritâ liberê sibi
complaceat, non tantùm incurrit pollutionis periculum , et ideò multi
dicunt eum in eo casu venialiter tantùm peccare. Ita Sanchez , Bona
cina, Lessius , Cajetanus, Lacroix , Suarez , S . Ligorio , etc.
«Alii verò multi contendunt semper , moraliter loquendo , tunc
adesse peccatum lethale , tum propter periculum , tum propter com
· motionis spirituum inordinationem , quæ fine legitimo cohonestari non
potest. Sic Navarrus, Azor, Vasquez , Layman , Henno , P. Antoine ,
Collet, etc . Arguendi sunt,ergo conjuges ita sibi delectantes et hor
tandi ut partem tutiorem amplectantur. Non tamen pimià severitate
tractandi sunt, nec quæstionibus ipsis odiosis lacessendi. (Dissert. in
sest. Decal. præcep.) . ..
'Similiter Billuart qui dicit probabiliùs esse delectationem veneream
de copulâ in conjugeabsente esse peccatum mortale .
: : : S. IV. .
Terminaremos este artículo diciendo algo tocante á los medios de
que se puede echar miano para contrarestar los pensamientos desho
nestos.
Si estas especies de pensamientos llegasen á hacerse muy importu
nos , y fuesen el parto de una vinaginacion ligera é insustancial ó
producidos por ciertos recuerdos que se retratan vivamente en la me
moria , es preciso procurar desviarlos fijando el espíritu por medio de
un trabajo intelectual serio', ó de un cálculo difícil y complicado que
absorba toda la atencjon , etc.; ó por medio del rezo y de la meditación
para ciertas persopas , y de la ferviente, viva y frecuente plegaria pa
ra todos. Si los malos pensamientos provienen de un temperamento ,
erótico ó de una plėtora espermática ,'los mejores medios para contra
restarlos son los que nos suministra la higiene física y moral : la prác
tica de la tèmplanza , de una exacta sobriedad , el trabajo mapual , el
ejercicio corporal, una incesante ocupåcion material ó mecánica , la
fatiga , a veces tambien la caza , que en ciertos casos ha producido es
. PART. I. CAP. II. 99
celentes y paśmosos efectos. Sabido es que Diána es enemiga nata y
natural de Vénus. Un ejercicio violento ahoga los sentimientos eróticos,
promoviendo sensaciones mas imperiosas todavía , tales como una es
cesiva necesidad de alimento , es decir, una hambre insaciable, acom
pañada de unapropension irresistible al reposo 'físico.
Puédese tambien recurrir a algunas prácticas de penitencia esterior
que den lugar a algunos dolores corporales o sufrimientos físicos , así
como á los ayunos y vigilias. Empero , en cuanto a estos dos últimos
medios esmenester obrar con cautela , porque su esceso podria infla
mar la sangre , y entonces las tentaciones aumentarian en vez de dis - .
minuir. Por consiguiente no deben adoptarse sino cuando los demás
medios no hayan sido suficientes.
En fin el mejor de todos los remediosde que muy á menudo se púc
de echar mano para apartar losmalos pensamientos., es el despreciar
los, no disputar con ellos , no hacerles caso , con lal sin embargo que
haya una positiva repugnancia en sostenerlos. Esta conducta en cierto
modo negativa es preferible á aquellos violentos esfuerzos de cabeza , a
aquella tension viva y fatigosa del espiritu , mas propia muchas veces
pata perturbar el alma que para preservarla del mal que se teme. De
nada sirve y hasta llega á ser peligroso el fijar de nuevo la atencion
en esos pensamientos para asegurarse .de si en ellos hubo 6 'no consen
timiento . Es necesario temer el tener pensamientos impuros y mucho
mas aun el consentirlos ; pero es preciso que este temor sea tranquilo ,
sosegado y razonable , porque un temor escesivo es mas propio para
· producirlos que para precaverlos.
Cuando un penitente se acuse de pensamientos deshonestos , el con
fesor debe preguntarle si han sido voluntarios, á fin de conocer su es
pecie ; si fueron seguidos de deseos y de efectos; cuales fueron estos
deseos ó sus objetos , y cuales los efectos; cual fué la duracion de los
pensamientos ó de las delectaciones morosas , etc ... Si el penitente
desde luego responde que los pensamientos fueron involuntarios y que
no consintió en ellos, todo queda dicho , y no hay que preguntár mas.
De esto volveremos á tratar mas adelante.
MOECHIALOGÍA.

ARTICULO II.
i " , DE TACTIBUS, OSCULIS ET ÀMPLEXIBUS.
: .:. S. I. . i
: : De tactibus :
Omnes tactus inhonesti, vel ex intentione libidinosâ in se aut in
alios exerciti , sunt peccata mortalia , tàm pro tangente quàm volun
tariè et libidinosè patiente , præsertim si fiant in partibus venereis vel
pudendis. ei vicinis, licèt intersint vestes , etiam ex joco , levitate ,
curiositate , aut sine causâ justâ et rationabili , præcipuè inter perso
nas grandioses ; quia tales tactus sunt semper libidinosi, vel saltem
magoum libidinis aut pollutionis periculum involvunt.
Undè etiam tactus überum feminæ , præcipuè jam grandioris aut
puberis , mortales reputandi sunt, si directè et morosè fiant; veniales
verò,si leviter et obiter tantùm et 'sine affectu libidinoso . ,
Si tactus etiam in diverso sexu ex solâ necessitate fiant, v . g . , ad
curandas infirmitates, nullatenùs peccata sunt , etiamsi indè motus
inordinati oriantur , vel quidem polluțio , secluso omni consensu , ut
suprà fusiùs vidimus.
us . . ..
Juxta Billuart , ancillæ , nutrices, etc ., dùm infantes lavando, spo
liando , vestiendo eorum pudenda ex levitate aut curiositate tangunt ,
ordinariè non peccant mortaliter, quia id non influit graviter in ve
nerem ; nullo autem modo peccant si id ex necessitate faciant, seclu
so semper affectu libidinoso. Ita Lacroix .
· Sin embargo aquí es preciso notar que esas criadas y nodrizas se
hacen muchas veces mas culpables , ó por lo menos hacen mucho mas
mal de lo que se cree, si no á sí mismas , á las pobres criaturas, por
tiernas que sean . En nuestro Ensayo sobre la Teologia moral habla
mos de infantes de uno y otro sexo ya entregados a la masturbacion ,
siendo así que no pasaban de la edad de cuatro , tres , dos años y aun
de diez y ocho meses. Dijimos tambien que independientemente de los
tocamientos hechos al acaso ó por impulso instintivo ó maquinal de las
mismas criaturas , hay otros que ejercidos por seres apasionados , á
cuyos cuidados se confian inocentes infantes , con frecuencia revelan
á estos el fatal secreto del onanismo. Ahora bien , esos seres apasio
nados y corrompidos son a menudo las niñeras ó criadas jóvenes y
alguna vez las nodrizas. Algunas veces, á la verdad , ellas 'no ejercen
PART. I. Cap. II. 101
esos locamientos sobre las tiernas criaturas de uno y otro sexo (lo que
es ya muymalo ) sino con el objeto de hacerlas callar ó de calmar sa
Hanto importuno ; pero no por esto dejará de ser para el niño el gér
men de una terrible pasion ya buen seguro que no dejará de esplo
tar algun dia su horroroso descubrimiento. ..
El célebre teólogo ahora mismo citado, Billuart , escusa.de pecado
mortal á los muchachos impuberes del mišino sexo que se hacen lo
camientos deshonestos por inconsideración ó á manera de juego , ex
joco et lévitate. «Quia , inquit , tales tactus inter hujusmodi , ut plu
rimùm adhue veneris expertes , non videntar multùm influere in com - .
motionem carnis.» Sin embargo , la esperiencia de nuestros dias y de
siempre prueba á menudo lo contrario , in utroque sexu et præserlim
in teneris puellis. Non rąrd impuberes aliquam pollutionis speciem
experiri videntur,ruetm sibi lem inalem procurant
s simiperniciem
prorinsùsuam tamen vvee
, sed mi.nnonon tamen
ram pollutionem spermaticam aut seminalem , sed mucosam aut pros
talicam , eunuchorum prorsùs similem , hâc lege physiologica comple
lam : Ubi stimulus , ibi flutus. Sæpissimè etiam nullus est,fluxus , et
lamen non abest in .pueris voluptatis sensus: et idcircò organa.laces
sere ferè non desinunt. . . . .'
Juxta Billuart, mulier quæ etiam absque affectu libidinosó permittit
se tangi in partibus pudendis aut vicinis , item morosè in , mamillis ,
peccat mortaliter; quia non solùm şic tangere , sed etiam sic tangi
multùm influit in venerem . Si langatur femina in partibus inhonestis ,
debet omni modo moraliter possibili tangentem statim repellere , in
crepare , manum ejus violenter auferre , etc . Ita DD . Bouvier, qui sic
prosequitur : « Propria verenda sine causâ-morosè 'tangere est pecca -
tum veniale aut mortale , pro ratione periculi ulteriùs progrediendi :
periculum enim non est idem pro omnibus : in pluribus leves tactus
sensus commovent et in proximum pollutionis periculum conjiciunt ;
alii verò sunt insensibiles siçut ligna et lapides. Hi ergo tantam dili
gentiam adhibere non tenentur, quaptam alii qui ad'venérem procli
viores sunt.»
Tangere, propria verenda , ait Busémbåum cum multis aliis , ex
levitate aut curiositate , per se non est mortále , modò absit turpis de
lectatio aut ejus periculum , et fiat obitèr , et non repetitis vicibus ,
quia aliàs jam aderit periculum . Hinc non excusantur à mortali qui
commotione spirituum et sine justâ causà propria pudenda tangerent.
Nadie ignora que no hay pecado alguno en los tocamientos que se
hace uno á si propio cuando son forzados por los cuidados del aseo ,
que no siempre se olvidan impunemiente , ó cuando los justifica algun
otro motivo legitimo, como por ejemplo para hacer, cesar un prurilo
102 MOECDIALOGÍA .
muy incómodo, con tal que no sea de naturaleza venérea. Véase lo
que acerca de esto dijimos a la pág . 48. « Quiniind , dicit DD . Bou
vier, secluso consensûs periculo , seipsum taogere liceret cum prævi
sione motuum vel etiam pollutionis , præter voluptatem accidentis, si
gravis existeret causa , v. : , infirmitas curanda , vel, juxta multos,
pruritus intolerabilis , ut nonnunquàm in mulieribuş accidit , sedan
dus.» Tambien es preciso que este prurito sea puramente enfermizo ó
herpético , y no venéreo o libidinoso : esta distincion es muy impor
. tante y generalmente demasiado olvidada por la mayor parte de los
- teólogos. . . " ; ;. .
En órden á los tocamientos y á las miradas que la necesidad justi--
fica y la caridad para con los enfermos exige , Billuart hace una re
flexion muy discreta y juiciosa : Aspectus et tactus alieni corporis
diversi sexûs in partibus genitalibus aut vicinis, sive immediatè ,
site mediante solo indusio facta , etiamsi ex levitate, joco , curiositate ,
aut simili causâ , seclusâ urgente necessitate , sunt regulariter peccata
mortalia.» Mas abajo repite : « Seclusa urgente necessitate , ut est ne
cessitas medendiin partibus secretioribus,aut inserviendiægrotis, vel
in balneis (quamvis longè satiùs foret ad hæc ultima officia assumere
personas ejusdem sexûs) ; quia hi tactus aut aspectus apprehensi ut
media sanitatis aut necessitatis non ita phantasiam et carnem com -
movent; qudd si 'ex aliâ subrepente apprehensione delectabiligraviter
commoveant; hoc est per accidens ex miseriâ naturæ et præter inten
tionem agentis , cui, cùin habeat-justam causam illos actus ponendi ,
non imputatur effectus secutus.
« Insuper', dato etiam quòd bi actus per se influant in commotio
nem , habent nihilominùs alium effectum bonum atque immediatum
qui potest intendi, malo.permisso ..... intellige semper , modò absit
periculum consensûs in ipsam delectationem veneream inde ortam .»
· (Diss . 6 , art. 16 .) ;
Hîc tamen notandum est tactus factos ad subitd. sedandos accessus ,
hysteriæ vel passionis hysterică , quæ est morbus mulieres et præ
sertim puellas afficiens , illicitos et valdè peccaminosos esse.
Tactus partium honestarum , etiam inter personas ejusdem sexûs,
si ex affectu libidinoso exerceantur et cum consensu in libidinem ,
suņt. peccata mortalia , quia ordinantur et per se tendunt ad impudi
citiam , quæ excludit è regno cælorum , juxta B . Paulum , Gal. et
Ephes.
Attamen tactus ex levitate , joco , curiositate et aliâ simili causâ
in partes honestas alterius personæ , ejusdém vel alterius sexûs, sine
gravi periculo libidinis, non excedunt peccatum veniale. Ita Sanchez,
PART. I. CAP. II. 103
Bonacina , Billuart , DD . Bouvier, etc. Toda la malicia de esos actos
se saca del peligro a que esponen. Es así que este peligro se supone
leve; luego , etc . Estas especies de tocamientos no son malos por su
naturaleza , secundùm se, como se dice : si lo fuesen , jamás serian
lícitos ; tan solo son malos por ó segun su causa , ex causa , y no mas
que su causa , que es venial ; luego tampoco son mas que veniales .
Undè vir qui manum mulieris tenet vel comprimit , digitos aut
brachium contorquet , faciem ejus , collum , scapulas tangit et alia
similia , non peccat nisi venialiter ; similiter de feminâ respectu viri.
«Contrà verò juvenis , dicit DD . Bouvier , qui puellam in genua
sua trahit et ibi sedentem tenet , vel eam amplexando in "se compri
mit , saltem ordinariè mortaliter peccat, et mulier hæc voluntariè
patiens à mortali non magis excusari potest. Actiones hujus generis
inter personas ejusdem sexûs sæpè grave generant periculum ad tur
pia deveniendi , ut experientiâ nimis constat ; sedulò igitur fugiendæ
aut cavendæ sunt, nec facilè à peccato mortali excusandæ , maximè
quando ex affectu sensibili procedunt.»
Juxta Billuart , P . Thomas, P . Ant., Sanchez, tactus proprii cor
poris (in verendis) qui minùsmovent quàm alieni, si fiant ex levitate
vel curiositate , absque libidine et absque prævisâ delectatione vene
reâ , non sunt communiter mortales . Sed tamen multùm cavendum
est à morositate et frequentiori repetitione sine causâ ; sic enim facti
videntur non leviter venerem excitare : si autem fiant ex rationabili
causâ necessitatis , vel utilitatis , ut mundandi, medendi, vel sedandi
pruritum non venereu'm , sicut jam diximus, omni culpâ vacant. Ab
his tactibus valdè deterrendi sunt juvenes et infantes utriusque sexûs.
Juxta Billuart, tactus genitalium pecorum vel brutorum sunt pec
cata mortalia , licèt ex joco , levitate aut curiositate , etiam absque
affectu libidinoso ; quia tales tactus notabiliter commovent venerem .
Nullum est peccatum si adsit necessitas medendi, sive adjuvandi in
eorum copulatione , etiamsi motus libidinis exurgat , modò ei non
consentiatur. DD . Bouvier , qui hîc paululùm differt à Billuart , sic
habet : «Genitalia brutorum libidinosè tangere est peccatum mortale ,
ad bestialitatem pertinens ; ea ex curiositate , joco aut levitate usque :
ad effusionem seminis contrectare , est adhuc peccatum mortale , non
ratione deperditionis seminis belluæ , sed quia talis actio libidinem
tangentis vehementer excitat.» S. Ligorio , Lacroix , Sanchez conten
dunt ea genitalia tangere sine affectu libidinoso , sed non , usque ad
seminis effusionem , non esse peccatum mortale. Billuart , ut jam vi
dimus , oppositam tenet sententiam , et plures alii ,'ut Concina, Col
let , etc . , asserentes tales tactus graviter esse periculosos.
104 MOECHIAĽOGÍA .
Minoruin animalium , ait Billuart, ut catulorum , felium , etc ,
genitalia tangere ex levitate , joco , curiositate non videtur graviter
commotivum naturæ , ideòque non esse mortale.
Quidquid sit deniquè de his quibuscumque tactibus, ab ompibus
sedulò et cautè abstinendum est : saltem valdè tutior pars est , et id
circò eligenda. . : ' .

. . S. II.
De osculis et amplecibus (1).
Oscula et amplexus in partibus honestis et honestè habita , quando
dantur ef recipiuntur secundùm patriæ consuetudinem , officii , urba
nitatis, amicitiæ , benevolentiæ aut reconciliationis causâ , ante pro
fectum , ad reditum , etiamsi suboriatur quædam delectatio venerea ,
modò statim reprimatur , non sunt peccata . In his tamen decentia sta
tûs semper servanda est : quod enim licet laicis sæpissimè dedecet in
clericis, et præsertim in religiosis. Ita S. Thomas, S. Antonin . ,
S. Ligorio , Sylvius ,-Billaart, DD. Bouvier, Gousset, imò omnes.
Igitur hæc omnia oscula , conditionibus ponendis positis , data et
receptå , more solito , ad genam , ad frontem aut ad manum , non
sunt mala , etiam inter personas diversi sexûs. Item oscula ordinariò
inter infantes adhuc reputatos libidinis incapaces ; oscula matrum ,
nutricum , etc ., in infantes suos , vel' sibi commissos; oscula aliarum
personarum , saltem ordinariè , in infantulos tenerrimæ ætatis utrius
que sexûs: hæc omnia plerumque peccata non videntur.
Omnia oscula etiam exteriùs honesta , sed ex motivo libidinoso da
ta vel recepta , inter personás grandiores ejusdem vel diversi sexûs,
sunt peccata mortalia , præcipuè și fiant cum ardore et morâ. .
A mortali excusari non potest osculum oris ad os , si fiat more val
dè moroso , maximè si cum linguæ intromissione fiat , ut loquitur
Billyart : «Si fiat valdè morosè, aut sæpiùs in eodem temporis articulo
repetatur crispis el gustatis labris , aut sit columbinum ,'immissâ sci
licet linguâ unius in os alterius;, sic enim factum quamvis ex jocó aut
(1) · Para evitar el inconveniente en que cayó Billuart con los que le han co
piado literalmente , es necesario separar los oscula et amplexus de los toca'mien
tos y de las miradas , y no agruparlos como hace Billuart . (Dissert 6 , art . 6 )
. Por lo demás es imposible que un hombre sensato tome al pie de la letra lo
que el célebre y juicioso autor dijo ', contra su intencion y modo de pensar . A
mas de que lo que sigue prueba que la proposicion solo adolece de un yicio de
espresion . Por consiguiente este yerro del gran teólogo es preciso atribuirlo a
esa confusion y a un momento de sueño. Y cuál es elhombre, aun el mas gran .
de , que no sueña algunas veces ! Quandoque dormitat Homerus.
PART. I. CAP. II. 105
levitale , aut etiam ad contestandam amicitiam , videtur graviter in
fluere in commotionem carnalem , ideoque non excusandum à peccato
mortali.» 'Ita etiam S . Ligorio . Item si oscula habeantur ad partes in
solitas , ut pectus, etc . , ex libidine fieri reputanda sunt , vel saltem
magnum libidinis periculum .inducunt, et idcircò mortalia censenda
sunt .
«Certum est , dicit DD . Bouvier, oscula etiam honesta proximum
pollutionis vel motuum libidinis periculum inducentia 'reputanda esse
peccata mortalia , nisi fortè gravis existat ratio ea dandi vel in se per
mittendi, quia tali periculo se exponere , sine necessilale , peccatum
est mortale. Oscula in se honesta , more solito , sed ex levitate aut
joco habita , sine gravi libidinis periculo , peccatum veniale non ex
cedunt ; cùm enim supponantur honesta , mala esse non possunt pisi
ratione periculi : at supponitur , ex alterâ parte , periculuſ esse leve;
ergo , etc . )
Sin embargo es muy de lemer que , en todas esas circunstancias en
que no se justifica un motivo justo y razonable se deje uno seducir
por el perfido atractivo del deleite sensual ó cargal. «Los besos , di
cen las Conferencias de Angers , que se dan ó se reciben solo por el
placer sensual que se esperimenta al aplicar la boca á la cara , son ,
conforme á los principios que estableció Sto . Tomás , pecados morta
les, aunque con tales actos no haya desigvio alguno de caer en el cri
'men .» Recuérdese , con respecto á esto , que Alejandro VII condenó
en 1666 la proposicion siguiente : Est probabilis opinio quæ dicit esse
tantùm veniale osculum habitum ob delectationem carnalem et sensibilem
quæ ex osculo oritur, secluso periculo consensûs ulterioris et pollutionis.
« Ioferid de abí, añade el redactor de las mismas conferencias, lo que
debe pensarse de los besos que los mancebos dan por ligereza á las
muchachas.» Siempre es cierto que, sin" fundado motivo , se esponen
á un peligro grave y mas o menos próximo. .
Quævis femina quæ adverteret vel rationabiliter crederet sibi sub
honestatis specie affectu libidinoso oscula dari, tenetur'viri contactum
declinare el vehementer repellere ne ipsius peccato cooperétur. Alla -
men videtur mulier posse dissimulare coram præsentibus personis ,
modò non consentiat , ne fortè malum de viro suspicentur, cùm ipsa
aliunde omninò non sit certa de pravâ intentione.
Quoad amplexus morosos cum corporum compressione , sæpissimè .
valdè libidinosi sunt, et non rarò fiulcum vebementibus ,motibus
inordinatis , concubitûs cogitatione , desiderio vel fortè pollutione.
Qui ergo simpliciter amplexus in confessione declarant , ut fit or
dinariè , de his sæpè interrogandi sunt. Rectè animadvertit recentior
106 MOECHIALOGIA.
auctor sanfloranus, qui sic loquitur : « Adverte sæpè nescire juvenes
quo (ini osculis et amplexibus) spiritu moveantur; illa omnia plena
esse periculi , vixque certò à mortali excusari posse cùm crebrò fiant
inter personas jam libidinis capaces: Undè , ob hæc , et si nondùm ve
nérea, patiantur , non imprudenter differetur absolutio assuetis , præ
sertim cùm unus nesciat alterius fragilitatem .)
Quoties , juxta Collet, oscula veneream delectationem habent, ex
primenda est circumstantia personæ etiam innocentis cui datum est
osculum ; an voto ligată sit , an consanguinea , vel affinis , an alteri
desponsata , quia , ut dicit , «actus turpis imbibit malitiam coitùs ad
quem suâ paturâ tendit » Certum est tamen sæpissimè coitum non in
tendi.
Terminaremos este párrafo con un pasaje que tomamos de Mons.
Bouvier, y que todos los dias se ve aplicado en la práctica.
« Qui puellam in matrimonium requirens eam quandoque , v. g . , in
adventu et profectu , honestè amplexatur, sine periculo motuum libi
dinis , aut saltem sine periculo eis consentiendi, peccatimortalis non
est accusandus : imò si adsit ratio hunc actum cohonestans, V . g., li
mor fupdatus ne appareat scrupulosus aut singularis , ne in derisio
nem et ludibrium aliorum incidat, nullatenùs peccabit. 2.° Simili ra
tione excusatur puella quæ amplexus honestos declinare non potest ,
quin ludibrio exponatur, vel juveni eam requirenti displiceat . 3 .° Non
statim gravis peccati incusandi, sunt juvenes utriusque sexûs qui in
nonnullis jocis decenter et sine prava intentione se invicem amplexan -
tur : prudenter avocandi sunt quidem ab istis ludendi modis , propter
periculum eis sæpè annexum ; at salutis eorum multùm interest ut
peccati mortalis rei non leviter habeantur.»
ARTICULO III.
: DE LAS MIRADAS.

Casi todo cuanto hemos dicho : en órden á los tocamientos puede


aplicarse á las miradas. Sin embargo , como la vista es un sentido me
nos material que el del tacto ó del tocar, inclina menos que este a las
afecciones libidinosas. La esperiencia diaria prueba no obstante que
ella es el origen de un sin número de pecados .
Las miradas deshonestaş sốn mortales ó veniales, conforme sean
mas o menos peligrosas ó libidinosas ; segun esciten mas. ó menos la
pasion de la lujuria ; segun la naturaleza de los objetos á que se fijen ,
el motivo que las determine, la sensacion que las acompañe y los efec
tos de que van seguidas.
PAKT. I. CAP. 11 . 107
Aspectus libidinosi seu cum affeetu delectationis 'venereæ sive nos
tri , sive alteriús sexûs, sunt semper mortales. Omnis qui viderit mu
lierem ad concupiscendam eam , jam mæchatus est eam in corde suo.
(Matth . v, 28 .)
Libidinosi sunt semper et proindè lethales aspectusmorosi partium
valdè inhonestarum inter personas diversi sexûs, nisi excuset neces
sitas , ut vidimus in articulo de tactibus. Ita DD. Bouvier sequentia
proferens: «Si extra casum necessitatis aut gravis utilitatis , delibera
tè aspiciantur partes venereæ aut vicinæ grandioris personæ alterius
sexûs, sine affectu libidinoso , peccatur mortaliter ; nam illi aspectus
motus libidinis ipsamque pollutionem moraliter excitant ; ergo , etc .
Dixi 1.° deliberatè , quia oculos in verenda personæ alterius sexûs le
viter et casu conjicere , sine pravo -affectu , non est peccatum morta
le . - Dixi 2.° grandioris personæ ; aspectus enim hujusmodi in infantes
non ita libidinem excitant , et idcircò peccata mortalia non sunt. Un
dè ancillæ et nutrices quæ pueros sibi commissos sic aspiciunt morta
liter non peccant, nisi morosè id faciant, vel cúm libidine' aut cum
periculo sibi proprio . Similiter impuberes se invicem nudos conspi -
cientes fortè mortaliter non peccant propter eamdem rationem .»
Si ex sola curiositale aut levitate , secluso libidinis periculo , aspi
ciantur partes minùs honestæ sed non turpes mulieris , ut collum , hu
meri , brachia , crura , pectus, non est de se mortale. Dictum est ex
se , nam tales aspectus diuturni facilè mortales esse poterunt in mo
rosè aspiciente , et valdè ad venerem proclivi. Si enim , ut dicit. Bi
lluart , non sit mortale bæc tangere , à fortiori nec aspicere . Puto ta
men , addit idem auctor, aspectum morósum pectoris nudimulieris ,
cujus nec tactum simpliciter et absolutè eximemus à mortali, non ca®
rere periculo , et quem ided non facilè excusarem à mortali.
Aspectus partium inhonestarum ejusdem sexûs vel proprii corporis ,
si non fiantmorosè et studiosè , sed obiter et ex solâ curiositate vel
levitate , non repulandi sunt mortales , quia per se non multùm ad
luxuriam excitant. Attamen possunt'esse lethales propter labendi pe
riculum , vel propter specialem aspicientis fragilitatem : quæ circums
lantiæ non rarò in juvenibus reperiuntur ; ergo semper ab eis sedulò
delerrendi sunt. Ita etiam DD . Bouvier dicens : «Qui propria verenda
morosè conspicit mortaliter peccat, quia ferè impossibile est 'motus
libidinis indè non proventuros : secùs esset si ex merâ curiositate ea
leviter'aspiceret, maximè si locum haberet præsumendi se periculum
grave pon incursurum .»
Aspectus non valdè morosi , ex curiositale vel levitate , partium gc
pítalium ejusdem sexùs, ut contingit inter viros simul'salantes , vel
108 MOECHIALOGÍA .
inter feminas simul se lavantes , non videntur mortales, quia non ,
multùm ad libidinem excitant ; secùs verò si isti aspectus sint valde
morosi , vel adsit affectus libidinosus , aut speciale periculum . Ita
Billuart , B . Ligorio , Sylvjus, DD. Bouvier. Monendi sunt præcipuè
juvenes à confessariis ut non simul natent , nisi secretioribus partibus
coopértis feminalibus natatoriis (calzoncillos de baño) , proptermultas
spurcitias quæ in plenâ nuditate committi solent, et propter conşpec
tum adstántium et transeuntium et præsertim personarum alterius
sexûs.
Secluso speciali periculo , non mortaliter peccant, juxta DD . Bou -
vier, qui vident matres aut nutričes infantulos lactantes : hæ tamen
mulieres prudenter se.occultare debent, ne incautæ scandalum viris et
præsertim juvenibus præbeant : bonestè teganturmatres lactantes, ne
fortè propriæ familiæ oculos·lædant. Secùs qui similiter etmorosè as -
piciunt mulieres non lactantes.
- Genitalia brutorum eorúmque coitus ex solâ curiositate vel levitate
aspicere ', non est peccatum mortale., quia communiter indè non gra
ve nascitur periculum .» (DD. Bouvier.) '
Idem dicendum est , juxta eumdem auctorem ,de aspectu picturarum
et sculptilium parùm decentium , quæ 'spiritus graviter non commo
vent, ut imagines aut sculpturæ angelos vel pueros exbibenles nudos
aut quasi nudos, sicut in templis exponuntur.
Billoart circa eadem sic habet : « Aspicere obiter ex levitate aut cu
riositate imagines vel statuas exhibentes personas grandiores in par
libus pudendis nudas, non excedere probabiliùs peccatuoi veniale ;
quia artificialia minùs movent quàm naturalia .» Sed quid si artificia
la satis moveant , etiamsi minùs quàm naturalia , ut indè subito
exurgat vehemens motus inordinatus et fortè cum consensu. Reverà
dictum est : Obiter ex levitate aut curiositate. Sed in talibus aspectibus
nonne semper adest magnum labendi periculum ?
Eadem apud B . Ligorio exprimitur sententia , lib. 3 , n .° 424: «As
picere picturas obscenas, tantùm ex curiositate , non est mortale... si
delectatio turpis , et ejus periculum absit. Sed , in praxi, virum mo
rosè aspicientem pudenda mulieris depictæ difficulter puto excusari à
mortali , quia difficulter se liberare hîc poterit à delectatione, turpi,
vel ab ejus probabili periculo ... nisi aspiceret per brevissimum tem
pus et in magnâ distantiâ .»
· Et cur non loquuntur ferè omnes theologi de gravi periculo cui
exponitur mulier quæ morosè pudenda viri depicti vel alia similia as
picit ? An mulier plùs viro lapidea est ? Iinò , cùm multò sensibilior
viro șit , eo magis aptior est ad sentiendos molus carnales vel-ondes
PART. J. CAP. II. 109
voluptatis affectus,,etsi id non innotescat, quia semper mutier pudore
naturali talia magis celat vel minùs fatetur : verecundia verò feminæ
naluram et ejus systematis nerviosi vim non delet neque mutat.
· Notandum hîc à mortali non posse excusari sculptores vel piclores
qui statuas aut imagines et‘tabulas pictas obscenas conficiunt , nec și
qui ipsas exponunt et vendunt. Illis omnibus absolutio deneganda est ,
pisi illas deleverint.
Si tactus et oscula ex objecto specificentur, non ita consentiunt anc
tores quoad aspectus. Multi tamen contendunt aspectus etiam dedu
cere speciem objecti sui. Tutjùs est ergo ipsorum sententiæ adhærere
in praxi.

ARTICULO IY .
DEL ATAVIO Ó , DE LA COMPOSTURA DE LAS MUJERES .

Antes de abordar este punto difícil é importantísimo considerándolo


á punto de vista de las costumbres públicas y privadas , diremos con
Cayetano , citado por Billuart , y valiéndonos de las palabras de este
último: «Cultum corporis ad quatuor posse ordinari : 1.° ad fovendum
corpus contra injurias aeris; 2 .º ad tegenda verecunda naturæ ; 3.º ad
servandam decentiam statûs juxta consuetudinem patriæ , ad fover
dam et augendam pulchritudinem . Primum est nécessitatis ex parte
corporis. Secundum est necessitatis ex parte animæ . Tertium est con
veniens et rationi conforme ; dictat enim recta ratio ut quilibet, prout
eum decet secundùm moresc,patriæ , honorabiliter procedat in vitâ
politicâ et statum suum condecoret. Restat ergo difficultas de quarto .»
Id est de ornato muliebri , de quo hîc specialim est dicendum , tum
ob magnam mulierum proclivitatem ad id genus peccati vel gravis
inordinationis indè orientis , tum propter illarum magnam et quasi
naturalem vanitatem et futilitatem in fragilibus et superfluis ornamen
tis. Esto es lo que movió al redactor de las Conferencias de Angers á
espresarse en los siguientes términos que poco lisonjean á tan gran
número de mujeres vanas y frívolas: « No tenemos reparo en decir
que aun cuando no sean inmodestos los trajes de las mujeres, ellas pe
can a menudo ataviándose con demasiados adornos, porque no lo ha
cen sino para ser vistas , para parecer hermosas , para atraerse las
miradas de los hombres y para hechizarlos . Así es como muchas veces
escitan los requiebros de los hombres , y los requiebros escitan pensa
mientos deshonestos, que por lo comun producen funéstos efectos , Aun
cuando ellas no indujesen á los hombres á cometer actos de impureza ,
110 MOECHIALOGÍA.
no por esto dejarian de ser culpables de una vanidad manifiesta ; si no
estuviesen tan ,infatuadaspor su hermosura, cobocerian que con su va
vidad muy lejos de granjearse la verdadera estimacion de los hom
bres , se atraen su desprecio , por mas que las demuestren cariños) ,
(Sobre los mandamientos de la ley de Dios.) Nótese bien que aquí el
autor no habla de la inmodestia en el atavío de las mujeres ; él cen
sura únicamente la desmedida afectacion en sus adornos; ¿qué no di
remos pues de sus inmodestias y de lasmodas tan ridículas é insensa
tás como homicidas é iomorales ? ¡ Cuántas'mujereshan muerto tísicas
ó padeciendo del pecho por haberse indignamente sacrificado al ca
prícho de una moda asesina que aprieta con sus garfios de hierro á
aquellas a quienes las escarchas por sí solas no pueden matar bastan
te pronto (1)! No hablaremos de otro género de suicidio y de homici
dio que el discreto lector comprenderá fácilmente. Volvamos á entrar
en materia .
A una mujer casada le es lícito ataviarse y adornarse con decencia ,
y segan su condicion , con el objeto de agradar á su marido. Esto es
justo 'y puesto en razon , y conforme con lo que dice el apóstol S . Pa
blo (1 Cor., yni, 34) : Quæ 'nupta est cogitat quæ suntmundi, quomodò
placeat viro . Y en otra parte (1. Tim . , 11 , 9 ) : Mulieres in habitu or
nato , cum verecundiâ et sobrietate ornantes se .
* Tampoco pecan las solteras y las viudas que aspiran al matrimonio ,
á que por naturaleza tienen derecho , si se adornan con decencia y
según su estado y condicion , á fin de agradar castamente al hombre
que la Providencia las destina. No sucede lo mismo en cuanto a las
que no pretenden. casarse : estas pecan mortalmente si se engalanan
con la intencion de inspirar amor á los hombres. Este amor es nece
sariamente impuro y culpable , porque no tiene por objeto un matri
monio legítimo. Si con todo no hubiese en eso sino un motivo de li
gereza , de vanidad ó de frivolidad , ó si se quiere cierta jactancia de
vana gloria , no será ordinariamentemas que pecado venial. (S . Tho
mas , Sylvius , Billuart , Bouvier , etc .)
Segun Sto. Tomás, S. Francisco de Sales , S . Ligorio; Sylvio, etc .,
la mujer que usa de artificio para ocultar algun defecto natural y pa
ra agradar á su marido no comete con esto pecado alguno ; segun los
mismos autores, tampoco pecaria la joven que recurriese á igual medio
con el único objeto de agradár castamente al mancebo al cual está
destinada. Semejante accion es siempre pecado mortal si no tiene otro
fins que agradar a los hombres sin querer jamás casarse con ninguno ,
No seria 'mas que peçado venial , seguo dice Sto. Tomás, si la acción
(1) Corsés con acero 6 ballenas , etc.; frio y vicisitudes atmosféricas..
PART. I. CAP. II. 111
fuese únicamente motivada por la vanidad , pero fácilmente podria
llegar a ser mortal por razon de sus malas circunstancias, como el
peligro ó la ocasion de pecar, de dar escándalo , etc.
Por lo que hace al tocado , téngase presente lo que dicen S. Pablo
y S. Pedro con respecto a eso . Non in tortis crinibus, aut auro aut
margaritis , vel veste pretiosa . (1 ad Tim ., 11, 9.)— Quarum non sit
extrinsecùs capillatura , aut circumdatio auri, aut indumenti vestimen
lorum cultus. ( 1 Ep., NI, 3.).Circa hæc, DD. Bouvier dicit uti alienis
capillisad ornamentum , sicut lanâ et pellibus animalium utimur, «vel
nullum est peccatum , inquit Sylvius; vel solùm veniale, si nempè ille
ornatus, habità ratione conditionis, sit superfluus aut ex vanitate pro
cedat.- Similiter habere caput discoopertum et capillos intortos , juxta
morem introductum , vel nullum vel veniale tantùm est peccatum ,
propter easdem rationes : secùs dicendum esset de eis quæ morem in
troducerent , vel pravå intentionė sic agerent , et eo sensu accipi de
bent B . Pauli verba.» Vide superiùs citata .
Quoad mulieres quæ vestem virilem induunt, vel converso viros,
mortaliter peccant si talia agunt cum intentione vel gravi periculo li
bidinis , velcùm notabili scandalo. De se vitiosum est , ait S . Thomas ,
quòd mulier utatur veste virili aut è converso ; et præcipuè quia hoc
potest esse causa lasciviæ et spiritualiter prohibetur in lege. Potest
tamen quanddque hoc fieri sine peccato propter aliquam necessitatem ,
velcausâ se occultandiab hostibus, vel defectu alterius vestimenti,etc .
Attamen semper excluso scandalo et periculo .
Si hæc vestium mutatio fiat ex jocó , ex levitate vel vanitate , ut ait
Billuart, absque scandalo aut periculo proximo lasciviæ , erit pecca
tum tantùm veniale . Gravius erit peccatum si vestium mutationi ad
datur assumptio larvæ .
... Non semper, juxta DD. Bouvier,mortaliter peccant qui larvis utun
tur, « sinempè ex joco vel ex levitate , secluso scandalo et periculo,
sic agant, præsertim quandò vestes proprii sexûs non mutant, sed
tantùm conditionem , ut si servus in vestibus domini, aut puella in or
natu dominæ appareant. (Collet et Pontas aliter sentiunt.)
» Rarò tamen à mortali excusari possunt qui extraneis et singularibus
vestibus ac larvis in publicis congressibus utuntur, propter indecen
tiam , periculum ac scandalum . Nec pariter à mortali excusantur qui
ex professo tales vestes aut larvas ad hunc solum usum destinatas con
ficiunt aut vendunt. Secùs verò dicendum est de iis qui larvatos aspi
ciunt eosque derident', nisi sub aliquo prætextu scandalum præbeant,
ut, v. g , si sint clerici.)
Deniquè aliquid de pectoris nuditate dicendum superest.
16
112 MOECRTALOGIA .
Quæ ita immodicè nudant pectus ut media úbera:nuda appareant
nullatenùs sunt mexcusandæ , aait Billuart , cùm tam immodica nudatio
qnon tudinesit
uæ qitauidparùm vocativ , eetmagis
.provocativa, i pertineat ad lasciviàm quàm
ad;pulchritudinem . Idem fermè, dicendum , addit idem auctor, de iis
quæ quidem ubera habentcoopertạ, sed linteo tam tenui ut remaneant
intuentibus perspicua.Sylvius affirmat ubera denudare, aut veste adeò
tenui cooperire ut transluceant, peccatum esse mortale , quia grave
estlibidinis incentivum . Modicè verò denudare pectus juxta consue
tudinem introductam , inquit DD. Bouvier , pravâ intentione et peri
culo seclusis , non est peccatum mortale. Ita S . Antoninus, S ."Ligo
rio , Sylvius, Billuart, qui sic loquitur : «Muliermodicè nudans pec
tus pro consuetudine patriæ absque pravå intentione potest excusari,
juxta Sylvium , Cajet. , Navar. et alios, quia pectus est pars corporis
honesta quam nec natura nec pudor absolutè tegi jubent: hæc tamen
consuetudo , quantùm fieri potest , est extirpanda , et qui illam pri
mùm introduceret graviter peccaret , quia insolita magis movent.
(Diss. 7 , art. 4.)
Sed quid de ijs quæ aliquo medio artificiali vel aliquâ veste pecto
rali utuntur , ut formæ prorsùs ‘appareant et protuberent , aut quo
cúmque modo augeanțur vel simulentur? Nonnulli sunt confessarii qui
exigunt ut tales vestes pectorales amplo tegantur mamillari, ut ait
Martialis (pañuelo de cuello , pañoleta , chal) . Hoc remedium nobis
videtur malum potiùs fovere quàm delere. Etprætereà hoc modomu
Jièrum scopusnullatenùs obtinetur. Multò satiùs videtur.istud mamil
lare indesinenter 'adhibendum esse , rejectis omnibus mediis supposi
titiis , utpotè mulieribus christianis minimè consentaneis. Hoc modo
quod deest non animadvertetur, castitas non lædetur et hoc respectu
nullius animæ salus periclitabitur."
Alii contendunt puellas talia agentes sine intentione lasciviæ à gravi
peccato excusandas esse. Quidquid sit, certum est quotidianam adhi
bitionem hujusmodi mediorum pias et castas cogitationes minimè sug
gerere , sed contrà potiùs quotidianum peccati periculum . Plures re- .
verà hoc confitentur dùm ad pietatem redeunt. .
PART. I. CAP. II. 113

ARTICULO .V .
DE LAS PALABRAS Y DE LAS CONVERSACIONES 'DESHONESTAS , DE LAS
• · CANCIONES Y DE LOS LIBROS OBSCENOS.
S. I.
• De las palabras , discursos y canciones deshonestas ú obscenas.
Toda conversacion impura , loda palabra deshonesta ó tan solo de
sentido equivoco proferida con siniestro motivo , para incitar al liber
tipaje ó á la impureza , son ciertamente pecados mortales. Las conver
saciones que se tienen delante de jóvenes con intencion de enseñarles
el mal y de inclinarles al desórden son igualmente pecados mortales ,
Lo mismo vienen á ser los dichos licenciosos ó demasiado libres , las
palabras obscenas cuando son proferidas'con afecto libidinoso ó con
pasion , con próximo peligro de delectacion carnal , ora de la persona
que babla , ora de los que escuchanº; ó cuando hay peligro de notable
escándalo . Ordinariamente el escándalo existe cuando se tienen seme
jantes conversaciones en presencia de jóvenes. Finalmente las palabras
muy obscenas y que manifiestamente ofendan el pudor, aunque sean
proferidas por ligereza , para mover á risa , aun sin delectacion cår
nal, deben ser miradas como faltas mortales, porque incitan a la pa
sion libidinosa , tanto al que las profiere , como á los que las escuchan ,
sobre todo si son jóvenes ó personas no casadas. Los malos discursos
corrompen las buenas costumbres, dice S . Pablo. Corrumpunt mores
bonos colloquia mala. (1 Cor. xv, 33.) En una palabra , todos los que
sin motivo legitimo dicen palabras notablemente deshonestas ú obsce
nas son ordinariamente culpables de pecado mortal. Fornicatio etom
nis immunditia ... nec nominetur in vobis , sicut decet sanctos; aut turpi
tụdo , aut stultiloquium , aut scurrilitas quæ ad rem non pertinet.
(Eph . v, 3 y 4.)
Fuera de esos diferentes casos , las palabras ó las conversaciones li
bres ó menos deshonestas que uno se permite como cosa de broma, por
lo comun no son mas que pecados veniales , á no ser que escandalieen
ó muevan á pecar á los que las escuchan . « Loqui turpia ob vanum
solatium , sive jocum , de se non est mortale- dice S . Ligorio - nisi
audientes sint ita debiles spiritu ut scandalum patiantur, aut nisi ver
ba sint nimis lasciva.» Hinc notant auctores apud S. Ligorio «dicteria
turpia quæ proferuntur à messoribus , vindemiatoribus et mulionibus,
114 MOECATALOGÍA .
non esse mortalia ; quia lubricè dicuntur et audiuntur.) Mons. Bou
vier esplica ese pasaje y lo presenta mas claro en estos términos :
« Dicteria minùs honesta quæ à messoribus, vindemiatoribus , mulio
nibus aliisque operariis, proferri solent, non sunt peccata mortalia ,
quia ea proferentes et audientes ordinariè parùm commovențur. Ita
S . Antoninus, Sanchez , Lessius, Bonacina , Sylvius , Billuart , etc .
Secùs verò dicendum foret si grave periculum existeret , aut si præ
beretur scandalum .» .
Sylvius, juxta Billuart, rectè monet non statim peccati mortalis ac
cusandos' esse eos qui , dùm obscena audientes aut legentes rident et
gaudere videntur, si reverà non de ipsâ re turpi, sed solùm de artifi
cioso aut lepido modo vel rei, vel dictionis aut scriptionis rideant seu
delectantur, vel etiam ne ab aliis irrideantur aut conviciis lacessantur;
id enim non excedit culpam venialem : modd tamen per suum risum
nulli sint scandalo , neque, videantựr auctoritatem præbere verbis tur
pibus aut ea cohonestare , neque velint æstimari quòd talibus oblec
tentur ; nam si aliquid horum adsit , peçcabunt mortaliter. Facilè
scandalum oriri posset șiclerici et religiosi de verbis obscenis riderent.
Quod hactenùs dictum est de turpia loquentibus etiam intelligen
dum est de audientibus. Qui audiunt obscena loquentes cobibere te
nentur quantùm moraliter possunt, si in eos auctoritatem habent ; si
non , eos prudenter admonere , vel saltem silere debent præcipuè si
monitio judicetur inutilis , et à fortiori irritans. Mulieribus præsertim
cavendum est ne turpibus assentire videantur.
Lo que hemos dicho en órden á las palabras torpes ú obscenas debe
igualmente aplicarse á las canciones deshonestas . Componer versos ó
canciones obscenas, càntarlas, hacerlas cantar ó escucharlas 'con
complacencia son otros tantos pecados mortales. Tambien es difícil ,
dice el redactor de las Conferencias de Angers, el escusar de pecado
mortal á los que cantan canciones impúdicas tan solo por ligereza , si
lo hacen en presencia de personas frágiles... Por esta razon , añade,
es preciso declarar esta circunstancia al confesarse, y espresar el. nú
mero de las personas presentes . Tambien debe mirarse como culpa -
bles de pecado mortal á los que escriben cartas ó billetes amorosos sin
otro fin que escitar una afeccion desordenada ó una pasion libidinosa .
S. II.
De los libros obscenos.
No debemos tratar aquí de los escritos impíos ó contra la fe y la re
ligion , sino tan solo de los que son contrarios á las buenas costumbres,
PART. I. CAP . II. . . 115
de las producciones inmorales y obscenas y particularmente de las no
velaslicenciósas. Estos funestos partos de talentos falseados y descar
riados por lo comun no son sino tejidos de aventuras dramáticas y de
intrigas de culpables amores, es decir, de todo lo que es mas propio
para inflamar la imaginacion de la juventud ó para escitarla al liber
tinaje:, ó por lo menos para exaltar en sumo grado la sensibilidad
nerviosa y erótica , sembrando en los corazones. los gérmenes de las
pasiones mas deplorables. . . .
Es cierto que los que componen libros muy obscenos pecan mortal
mente : nada puede escusarles , porque son la causa ó la ocasion de
la pérdida de un sin número de almas; son igualmente muy culpables
los impresores , los tipógrafos , los litógrafos, los libreros , etc ., que se
ocupan en la impresion y venta de esa clase de libros.
Las personas que los leen por pasion o inclinacion libidinosa pecan
mortalmente . En cuanto a los que se entregan á ese género de lectura
por mero capricho , por curiosidad ó en clase de recreo, parecen menos
culpables. Heahí lo que con respecto á esto dice Mons. Bouvier : «Nolo
definire éos mortaliter peccare qui, ex solâ curiositate , tales libros
legunt, si ob ætatem provectam ," complexionem frigidam aut consue
Ludincm de rebus venereis tractandi, grave periculum non incurrant.»
- Como quiera que sea , no puede caber duda que los que leen las
malas novelas ó las novelas eróticas , por mas que crean tener un
motivo honesto para hacerlo , se esponen mucho , muchísimo al peli
gro de corromperse el corazon y de caer en pecado mortal. Conocida
es sobre este punto la opinion de Sta . Teresa , la cual hablaba por
esperiencia propia . Nada en efecto esmas perjudicial á las niñas y á
las mujeres jóvenes que el leer novelas eróticas y dramáticas. Téngase
por seguro que esas lectoras de novelas, que esas mujeres eruditas
nunca llegarán á ser las mejores madres de familia. Las letras no se
hicieron para las mujeres : eso echa á perder su espíritu , lo vuelve
inconstante , frívolo , disipado , veleidoso. La mujer no nació para filo
sòfar, sino para amar, pero con un amor casto y conservador , porque
es hijo del casto amor, es decir , de la caridad cristiana , que es el
amor del hombre teniendo á Dios por objeto , y no de la filantropia filo
sófica, que es el amor del hombre a la materia . De ahí vienen estos
magníficos epitetos dados á là mujer : Señoras de la caridad , herma
nas de la caridad , hijas de la caridad. . . .
Finalmente , es preciso decirlo ; las lecturas que hoy dia son sin
contradiccion las mas peligrosas para los jóvenes de ambos sexos y
aún para todas las personas de la clase acomodada , son las de los
folletines de los periódicos anti-religiosos, que penetran en todas par
116 MOECHIALOGIA ,
tes, en las familias, salones , retretes , gabinetes de lectura , etc .
Es cierto y demostrado por los hechos que el folletonismo es en la
actualidad un verdadero azóte, una verdadera plaga social. Con auxi
lio de esta nueva invencion satánica es como se dan á leer en detalle ,
á un número inmenso de lectores , las novelasmas licenciosas é ipmo
rales , ó artículos obscenos sazonados con frecuencia con una buena
dosis de impiedad y de blasfemia . He ahí poco mas o menos la única
tectura de los jóvenes del dia ; he ahí el noble pasto que se arroja á
las işleligencias hambrientas de la juventud francesa ! ô mores ! Ô
tempora ! Los confesores deben rehusar la absolucion a todos y á todas
las que habitualmente leen esas especies de folietines.
Terminaremos este párrafo copiando un pasaje del libro de mon
señor Bouvier locante á la lectura de las piezas teatrales , es decir , las
tragedias y las comedias solamente .
Alii sunt libri amores licitos et illicitos describentes qui ad libidi
nem graviter pon excitant, nec sènsus commovent, nec periculo nota
bili exponunt , ut suntmultæ tragediæ (u), comediæ aliaque poema
ta : qui, secluso gravi periculo et aliorum scandalo , ejusmodi libros
ex solâ curiositate legunt mortaliter non peccant; si verò ob causam
legitimam , v. g ., ad. discendum , ad requirendam aut perficiendam
eloquentiam id faciant, nullatenùs peccant , supposito quòd officia si
bit ratione statûs imposita proptereà non omittant nec negligånt. Rarò
clerici istiusmodi lectioni vacare possunt sine peccato , quia vel officia
sua communiter negligerent, vel scandalum aliis præberent: ad minùs
enim sequuntur, ut experientiâ constat , tædium pietatis , incapacitas
labori continuo incumbendi, extinctio spiritûs unctionis ac fervo
ris , etc . Undèmeritò notatur hos libros sæpè magis nocere fidelibus
quàm prorsùs obscenos qui horrorem excitarent; ab eorum igitur lec
tione avertendi sunt pænitentes.
« Qui prædictos libros , etiam non graviter obscenos , com popunt
sæpèmortaliter peccant , quia multis præbent occasionem ruinæ , sine
ratione sufficienti : non ita peccare videntur qui eos vendunt; cùm
enim , ex dictis ,multi absque peccato vel saltem absque peccalo mor
tali legere possint , eo ipso aut nullatenùs aut venialiter tantùm pec
cant eos emendo; ergo librarius qui eos in officinâ suâ habet et péten
tibus vendit inquietari non debet.»
(1 ) En hora buena por lo que hace á las tragedias de Racine y de Corneille ,
como la Athalia , Ester , etc. En cuanto a las comedias , examinese con mas
atencion y se verá que no debe leerse a Moliere como á Racine y Corneille .
PART. I. CAP. II. .

ARTICULO VI.

DE LAS DANZAS Y DE LOS 'BAILES.

Elbaile por su naturaleza no es criminal ni ilícito ; de consiguiente


no puede ser condenado absolutamente como si fuese malo por esen
cia . Tempus plangendi et tempus saltandi (Eccles . III , 4). David sal s
tabattotis viribus ante Dominum . (2 Reg. vi, 14 .) .
Santo Tomás dice : Istæ circumstantiæ videntur in loco choreali ob
servandæ : ut non sit persona indecens, sicut clericus vel religiosus; ut
sit tempore lætitiæ , ut in... nuptiis et hujusmodi; ut fiat cum honestis
personis et cum honesto cantù , et quòd gestus non sint nimis lascivi .
(In cap. 3 Isaiæ .) .
San Ligorio , por el estilo de S. Antonino y Bussembaum , se espre
sa en estos términos en órden al daozar : « Choreæ per se licitæ sunt ,
modò fiant à sæcularibus , cum personis honestis et honesto modo ,
scilicèt non gesticulationibus inhonestis .. Quandò verd sancti patres
eas interdům valdè reprehendunt, loquuntur de choreis turpibus aut
earum abusu.» (Testo de Busemb.) S. Francisco de Sales era de la
mis.pa opinion que esos tres teólogos.
Sin embargo , en el actual estado de nuestras costumbres, es raro
que el baile no sea malo y mas o menos peligroso , segun las circuns
tancias y disposiciones de las personas que á semejante diversion se
entregan .
« Pruebas demasiadas tenemos , decia S. Carlos Borromeo en el ter
cer concilio de Milan , de que , en este siglo tan corrompido', las re
uniones para bailes , danzas, bailetes y otras cosas de igual naturaleza
son manantiales fecundos de varios pecados, y aun de los mas gran
des y enormes; porque sus resultados casi inevitables no son otros que
pensamientos los mas torpes , acompañados de palabras y acciones des
honestas ; el corromperse las costumbres de los cristianos , y el encon
trar casi siempre en ellas todo aquello que puede arrastrar á los pla
ceres de la carne v á loda especie de sensualidades.)
No clamaron con menos vehemencia los antiguos,contra los bailes.
Veamos sino con qué fuerza de espresion los condena Origenes : Ali
quandò , dice, diabolus bellat cum homine per aspectum mulierum ,
aliquandò per auditum vocis mulierum , aliquandò per tactum ; in cho
reis per omnes istos modos simul bellat cum hominibus. Nam ibi viden
tur taliter cum suis ornatibus, ibi audiuntur in suis cantibus, et cachin
nis , et locutionibus, etmanu tanguntur , et ibi diabolus fortiter pugnat
et vincit .
118 MOECHIALOGÍA .
His tripudiis diabolus saltat, dice S . Crisóstomo. Mucho tiempo
anles que los padres de la Iglesia , el Espíritu Santo habia ya repro
bado el bailar: Cum saltatrice ne assiduus sis , nec audias illam , ne
fortè pereas in efficaciâ illius: (Eccli., ix , 4.)
De todo cuanto precede se sigue que no se puede , sin pecar mor
talinente , frecuentar los bailes notablemente indecentes, ya por razon
de las grandes inmodestias que en ellos se notan ; ya por razon de las
palabras obscenas que se permiten , ó á causa de la manera de ejecu
tarse el baile , contrariando las reglas de la modestia , independiente
mente de los trajes que se acostumbran usar , como por ejemplo en
los bailes de máscaras , donde el desórden es inevitable ; y del modo
particular de ciertas danzas , como la alemana conocida bajo el nom
bre de vals , hace poco llamada galop , polka , etc. Estas especies de
bailes , á mas de que son algo mas indecentes é inmorales que otros ,
pueden con sus largas y rápidas vueltas determinar graves vértigos y
aún á veces una apoplejía fulminante . Hace cosa de diez ó doce años
que en París , en un baile público , un hombre se vió atacado de una
apoplejía fulminante durante esa especie de baile , de suerte que su
pareja dió todavia algunas vueltas de vals con un cuerpo frio y 'lívi
do , es decir , con un verdadero cadáver . No pudo decirse en tal ca
so : prețiosa mors in conspectu Domini. i
No se puede generalmente absolver á los que persisten en querer
frecuentar los bailes de que acabamos de hablar, ni tampoco á los'
que no quieren renunciar a la costumbre de bailar mientras se están
celebrando los oficios divinos .
Por lo demás , de cualquier modo que tenga lugar el baile , que
sea decente ó no , no puede absolverse á las personas que , por fragi
lidad personal ó por una disposicion particular, encuentran en él una
ocasion próxima de pecar mortalmente , a menos que se hallen since
ramente dispuestas á renunciar para siempre semejante diversỉon. .
El asistir á ún baile honesto y decente por una especie de necesidad
ó de justa conveniencia , como en un baile de familia ó 'de sociedad ,
sin peligro probable de afeccion libidinosa ó de escándalo , es,gene
ralmente una cosa lícita y 'exenta de pecado. Así es que se disculpa
completamente á una persona que , no permitiéndose nada que sea
contrario a la modestia , toma parte en un baile únicamente para ham
cer la voluntad de su padre ó de su marido. Con arreglo á esos prin
cipios Mons. Bouvier dice lo siguiente : « Puella matrimonio destinata
quæ choreis in domo paternâ vel apud vicinos aut cognatos honestè
celebratis adesse tenetur, et saltationem sibi oblatam recusare non
potest quin derideatur , vel parentibus aut. juveni eam requirenti
pakt. I. CAP. II. 119
displiceat ; nullatenùs peccat decenteć et purâ intentione saltando.»
Por esto dijo con mucho donaire el amiable S . Francisco de Sales:
Por lo que hace á los bailes te diré, amigo Filoteo , lo que dicen los
médicos tocante á los hongos: losmejores nada valen , dicen ellos ; y
le digo yo tambien que los mejores bailes valen poca cosa . Si no obs
tante te ves en la precision de comer hongos, procura que estén bien
guisados. Si te hallarés en el caso de no poder escusarte de asistir al
baile , procura que este sea bien aderezado. Pero , ¿ qué se necesita
para estarlo ? que reinen en él la modestia , la dignidad y la buena
intencion . Comed pocos y,' rara vez , dicen los médicos hablando de
los hongos ; porque , aun cuando estén bien guisados, la cantidad les
sirve de veneno. Baila poco y rara vez ', Filoteo ; porque , si así no lo
haces , te pones en peligro de aficionarte a él. ( Introduccion a la vida
devota , parte 3 .a , cap. 23 .). I t
Como en tiempo de S. Francisco de Sales las costumbres eran mas
sencillas , el baile podia por lo mismo ofrecer menos peligro ; eso no
obstante , quiere el santo obispo que se baile rara vez , con modestia
é intencion pura , y tan solo en los casos en que uno no pueda escu
sarse sin inconveniente .?: ?
Pero en el dia , en el actual estado de puestras costumbres licen
ciosas y disolutas , casi siempre es muy peligroso el bailar de la ma
nera que se suele hacerlo . Por esto los confesores y los pastores de las ·
almas deben hacer todo cuanto su celo ilustrado y prudente les dicta :
re para impedir los bailes y para disuadir de la aficion á ellos á los
jóvenes de ambos sexos. Si á pesar de su vigilante solicitud y de sus
reiteradas exhortaciones , se estableciese en las parroquias la costüm
bre de bailar , deberán tolerarla como un mal que no se puede impe
dir , pero sin que por ningun estilo parezca que la aprueban. En este
*caso se ceñirán á vituperar los bailes como peligrosos y á,evitar o atė
nuar , en cuanto puedan, su peligro , sus consecuencias y efectos. Po
drán por lo menos exigir que no se hagan en lugares sospechosos ,
durante la celebracion de los divinos oficios , y que no se prolonguen
jamáshasta la noche. El discreto y prudente pastor reprobará pues
una obra á la cual nunca puede prestar su asentimiento. Empero, una
cosa es desaprobar los bailes , y otra el privar indistintameate de los
sacramentos a todos los que los frecuentan.
• He aquí finalmente algunos testos estractados del libro de mon
señor Bouvier , que podrán poner mas en claro todo cuanto sobre el
particular hasta el presente se ha escrito y especialmente lo que aca
bamos de decir ahora mismo.
« Interesse choreis 'honestis et , secluso gravi periculo et notabili
17
120 MECHIALOGÍA
MOECH .
scándalo , decenter in eis sine ratione sufficienti saltate est peccatum ,
sed tantùm veniale : quod sit peccatum à nullo in dubio revocari potest,
quòd sit duntaxat veniale sequitur ex ipsârnet ,hypothesi. Rigidiores
negant quidem hypothesim , el contendunt in omnibus choreis viro
rum et-mulierum promiscuè saltantium grave esse semper libidinis pe
riculum , nec audiendos qui dicunt se motus inordinatos non experiri
vel in eis non delectari. Verùm non ex præsumptione judicandi sunt:
pænitentes ,nec, credendum est éos prudenter interrogatos 'magis,reos
esse quàm ex eorum declaratione patet , nisi, evidenter constet eosdem ,
sibi illudere aut decipere velle. Si, adbibitâ sufficienti diligentiâ ,
confessarius decipiatur , et absolutionem indignis concedat , innocens
erit apud Deum ; contrà verd , si ex solâ præsumptione pænitentem
rectè dispositum à sacramentis repellat , gravis injustitiæ fit reus.
Non temerè ergo pronuntiandum est viros et mulieres eo ipso absolu
tione esse indignos quia saltavérunt, vel choreisadfuerunt, et sæpè ab
- jis prudenter non exigeretur sub denegatione absolutionis,ut promitle
rent se deinceps non saltaturos nec choreis adfuturos...
»... Qui prudenter judicat se, magnâ utendo severitate , choreas in
parochiâ suâ penilùs destructurum absolutionem cunctis saltantibus vel
ad saltationem conourrentibus differre vel etiam negare potest : si enim
aliqui mortaliter non peccent ratione saltationis , laqueos aliis parant,
saltationes introducendo , vel eas aboliri impediendo, et ideò sub hoc
respectu à gravi periculo non facilè excusåntur.
» Si verò nulla detur spes choreas de medio tollendi, ut frequentis
simècontingit , nimia severitas saluti animarum nocebit : multi enim ,
arbitrantes hæc oblectamenta esse licita , ab eis penitùs abštinere no
lunt; confessionem , eucharistiam , conciones sacras deserunt; nullo
freno ampliùs retenti , in leterrima omnis generis ruuntflagitia : igno
råntià , corruptione , perditorum hominum consuetudine; præjudiciis
adversùs religionem ejusque ministros simul concurrentibus , in per
versitate obdurescunt, et nunquàm corriguntur : sæpiùs indignè ma
trimonium ineunt, famulos scandalizant, liberos malè educant, sicque
impietas grassatur, et morum corruptio magis ac magis invalescens
nullam ferè relinquit viam bonum aliquod faciendi. . E
.» Quiè contrà , pænitentes choreis assistentes benignè tractans, sua
sione et precibus eos ab hujusmodi periculis avertit , salutaria eis
præstat .coộsilia ut discrimini se non objiciant; si lapsi fuerint, eos
.paternè redarguit , absolutionem eis differt, et tandem de graviter ad
missis:contritos , licèt ab omni peccato immunes eos non judicet , ab
solvit , ad communionem saltem in Paschate admittit, multò effică -
ciùs saluti eorum consulit et ad bonum religionis proficit.» Lamentán
PART. I. CAP . II. 121
dose S. Agustin deciertos desórdenes que existian en su tiempo , dice
así : Non ergo asperè, quantùm existimo , non duriter ,non modo impe
rioso ista tolluntur: magis docendo quàm jubendo; magismonendo quàm
minando. Sic enim agendum est cum multitudine: severitas autem exer
cenda est in peccata paucorumI . n tegritetspog beikonia .
Un confesor prudente no á todos debe aplicar la misma regla . Antes
pues de absolver o despedir a las personas que han frecuentado ó asis
tido á los bailes, tomará en consideracion las circunstancias, el lugar ,
el tiempo , la duracion , el carácter y la edad de los sugetos , los di
versos peligros a que los penitentes se han espuesto , su fragilidad , su
debilidad en dejarse arrastrar por la corriente general, etc. I
Negará constantemente la absolucion a todos aquellos que tengan
en sus casas bailes públicos en donde sin distincion alguna son la
madas y admitidas toda clase de personas y sobre todo los jóvenes de
uno y otro sexo , como por desgracia con harta frecuencia sucede en
mil parajes, en los bodegones, tabernas, figones, etc . , ya que es pre
ciso llamar las cosas con su nombre. Es cierto y evidente que seme
jantes lugares son focos de vicios de desórdenes y de corrupcion.
No se debe absolver tampoco a los músicos ó tocadores de violin que
por profesion dirigen y arreglan el baile . coli20
Segun el sabio teólogo que acabamos de citar ahora mismo, mon
señor Bouvier , no seria menester mostrarse tan severo con los que
frecuentasen el baile en ocasiones de algun regocijo estraordinario , in
extraordinariis oblectationibus auctoritate publicâ celebratis , ó que
prestasen su casa'ad hoc y alquilasen músicos , ó se encargasen de di
rigir los bailes, etc . Si en eso hay algun peligro , añaden , hay tam -
bien una razon suficiente para escusar de pecado mortal, sino de ye
nial. Los curas y los confesores deben cuando menos , en tales casos,
disimular con prudencia lo que no pueden absolutamente impedir. .
Elmismo autor tambien dice que él no quisiera mirar como culpa -
bles de pecado mortalá los que , tan solo algunas veces al año , como
por ejemplo en tiempo de la siega, del carnaval, elc ., diesen bailes bo
nestos a su familia , ó á sus trabajadores y vecinos. Yo se lo reprende
ria , dice, y sin embargo les admitiria á la comunion pascual, y con
mayor razon á las personas que tan solo hubiesen bailado en semejan
tes ocasiones ,salvo siempre cualquier peligro especial.
Mons. Bouvier continua diciendo que no quisiera severamente rehu
sar la absolucion a todos los que , en las reuniones públicas conocidas
bajo el nombre de asambleas, se permitiesen bailar de vez en cuando;
porque, dice , hay muchas razones que pueden escusarles , sino de pe
cado venial, á lo menos de pecado mortal: por ejemplo , un joven que
122 MOECHTALOGIA .
seria, el escarnio de sus camaradas , ó una muchacha que se veria
menospreciada si rehusase la oferta del que la sacase á bailar , etc . (“).
Por el contrario los directores de baile , los músicos-ó violinistas de
profesion no deben ser admitidos al beneficio de la absolucios, porque ,
sin causa suficiente , suministran habitualmente la ocasion de pecar á
un gran número de personas.
Los que de continuo frecuentan los bailes públicos , tanto de dia co
mo denoche , no deben recibir la absolucion , ni aun por la Pascua,
porque se esponen incesantemente a un peligro manifiesto ; y vemos
por esperiencia que los que tal hacen son casi todos corrompidos.
Lo que hemos dicho tocante al baile puede, á proporcion , aplicarse
igualmente á esas reuniones-nocturnas conocidas bajo el nombre de
tertulias .Generalmente hay en estasmenos peligros que en los bailes ,
porque , como es sabido , las circunstancias no son lasmismas. Por lo
demás la exacta apreciacion de los lugares , de los tiempos y de las
personas es lo que debe servir de base para juzgar el grado de mora
lidad ó de inmoralidad de semejantes reuniones que , además , pueden
ser muy poco peligrosas ó aun del todo, inocentes si se tienen por bue
nas y honestas razones y se componen de parientes, amigos , vecinos y
de personas de buenas costumbres .
ARTICULO VII. : . .
DE LOS ESPECTÁCULOS Ó DE LAS REPRESENTACIONES TEATRALES.

· Las representaciones teatrales abstractivamente consideradas no son


malas , ó si se quiere, no son malas por su naturaleza ó por sí mismas. "
Sin embargo, juzgadas tales como son en el estado actual de nuestras
costumbres y consideradas á punto de vista práctico con todas sus
circunstancias concomitantes , por lo mas comun se hallan llenas de
escollos y de peligros para la inocencia y la virtud.
Púrguese y depurése el teatro , despójesele de todo el prestigio de
las pasiones y de las intrigas eróticas, y redúzcasele á la pura espre
sion de lo bello , de lo grande, de lo sublime , de lo generoso ; desde
aquella hora los espectáculos , á los ojos de la multitud, perderán todo
sa interés , y el teatro quedará desierto : esto prueba que las represen :
taciones escénicas, tomadas en su conjunto tales como en el dia se ha
cen , son evidentemente vituperables y deben por consiguiente ser
(1) Es menester siempre tener presente esta condicion : que no haya oca
-siop de pecar ni motivo de escándalo . Pero en todos los casos bueno será dar
vivas reprensiones é imponer fuertes penitencias.
PART. I. Caf. 11. 123
generalmente prohibidas á los cristianos , quienes no encuentran en
ellas sino ocasiones de pecar y peligros evidentes y ciertos. ¿ Y por
ventura no se cobra aficion á esos peligros seductores y á las cosas que
son sus compañeras inseparables? Escrito está , como es sabido , que
el que llega á tomarles aficion , tarde o temprano 'hallará en ellos su
perdicion y ruina.
Todos los pådres de la Iglesia fulminaron anatemas contra la come
dia ó los espectáculos teatrales, siempre los miraron como á enemigos
de las buenas costumbres , como á una asamblea vergonzosa , el san
tuario de Vénus y el consistorio privado de la lascivia, como dice Ter
tuliano. Théatrum propriè sacrarium Veneris est... privatum consisto -
rium impudicitive (de Spect. , c . 10 ) ; como á una escuela de deshones
tidad y de libertinaje , como á una peste: que el demonio hizo suceder
á la idolatría ; en una palabra , ellos consideraron que el frecuentar los
espectáculos venia a ser una especie de apostasia , porque , segun di
' cen ellos, una accion tal es una de las pompas del demonio á las cua
les renuncian los cristianos al recibir el bautismo. In theatro risus,
turpitudo, pompa diabolica , effusio , insumptio temporis, concupis
centiæ absurdæ - præparatio , adulterii meditatio , scortationis gymna
sium . (S . Chrysost. , hom . 42, in act.) In spectaculis , dice Salviano,
quædam apostasia fidei'est , et à symbolis ipsius et cælestibus sacramen
tis lethalis prævaricatio. Quæ est enim in baptismo salutari christiano
rum prima confessio... nisi renuntiare se diabolo et pompis ejus atque
spectaculis et operibus" protestentur. (De Prov. , lib. 6 .)
San Cárlos Borromeo hizo decretar , en un concilio provincial, que
los predicadores reprendiesen agriamente el desarreglo de aquellos
placeres públicos que los hombres, seducidos por una costumbre de
pravada , ponian en el número de las bagatelas que no causan mal al
guno; que clamasen con vigor contra los espectáculos , los juegos y
las chànzas teatrales y otras diversiones semejantes que derivan de las
costumbres de los gentiles, y que son contrarias al espíritu del cris
tiapismo; que se sirviesen de todo lo mas apremiante que acerca de
este punto dijeron Tertuliano , S. Cipriano , S. Crisóstomo y Salyia
no (1) ; que pusiesen de manifiesto las consecuencias y los funestos
efectos de los espectáculos ; y qinc finalmente nada olvidasen para des
arraigar este mal y para hacer cesar esta corrupcion. '
« Es preciso no asistir a los espectáculos profanos, á las comedias...
dice el redactor de las Conferencias de Angers; porque semejantes di
versiones no son sino escuelas de coquetería y de libertinaje , donde
: (1) Hubiera podido añadir á s. Agustin , S.Clemente de Alejandría , S . Basi -
. lio , Lactancio , etc .
124 MCCATALOGIA .
no está segura la virtud mas deporada, y de donde siempre sale uno
menos puro que no entró. Un cristiano es en cierto modo apóstata de
su fe cuando se detiene en esas diversiones mundanås, á las cuales re
nunció en elbautismoal redunciar á Satanás y á sus“pompas.» (Sobre
los mandamientos de la ley de Dios.) ;
Elmismo S. Francisco de Sales, quien en su inmensa caridad parece
muchas veces lan complaciente , mira los espectáculos teatrales como
peligrosos. He aquí lo que acerca de ellos dice en su Introduccion á la
vida devota : « Los juegos , los bailes , los festines, las pompas, las co
medias en su sustancia no son de ninguna manera' cosas-malas, sino
indiferentes , pudiendo ser bien y mal ejercidas; con todo , esas cosas
siempre son peligrosas, y es todavía mas peligroso el aficionarse á
ellas. Digote pues , Filoteo , que aunque sea licilo el jugar , el bailar;
el engalanarse , asistir á comediás honestas, dar banquetes , el cobrar
aficion á todo eso , es cosa contraria á la devoción , y sumamente per
judicial y peligrosa .» (Parte 1 .* , cap . 23.)
En fin citaremos tambien el testimonio.no de un doctor , de un Pa
dre de la Iglesia ó de un santo obispo , sino el de un Par de Francia ,
de un hombre poco sospéchoso de ascetismo , de M . Carlos Dupio. He
aquí lo que dijo acerca de los espectáculos , hace ya algunos años , en
un discurso público : « Ved los teatros convertidos en escuela de cor
rupcion y de infamia ... hollando con los pies ląs virtudesmas santas
con la intencion patente de hacer amar , conservar y admirar el due
lo , el suicidio , el asesinato y el parricidio , el envenenamiento , la
violencia , el adulterio y el incesto ; preconizando estos crímenes como
fatalidad gloriosa de los espíritus superiores , como un progreso de
las grandes almas que descuellan sobre la virtud de los idiotas, la re
ligion de los sencillos y la humanidad de la gente volgar. Esa litera
tura envenenada nos hace retroceder por medio de la corrupcion a la
barbarie . »
Ya lo dijimos en otra obra al hablar del suicidio , « los espectáculos
teatrales son aun mås peligrosos (que las novelas)á los ojos del verda
dero sabio. Los teatros, á donde acude una multitud frívola y volup
luosa , no son en realidad sino escuelas de mentira y corrupcion ', don
de se le ponen de manifiesto vicios ciertos para desterrar ridiculeces
exageradas, ó en las cuales se agota su sensibilidad y piedad por me
dio.de desgracias imaginárias para que no se muestre sensible y pia
dosa” en las aflicciones reales , domésticas y sociales. Aqui no bablo de
olro'género de seduccion que es fácil de adivinar. En las representa
ciones dramáticas por lo mas comun no se ven mas que aventuras
trágicas , acontecimientos terribles , catástrofes sangrientas , escenas
PART. I. CAP. 11. 125
de horror , de desesperacion , de sangre , de asesinato y de suicidio ,
que van familiarizando a los hombres con las ideas de crimen y de
destruccion ,. y los entregan sin defensa al fogoso delirio de sus pa
siones ! Concíbese sin trabajo segun eso que , en ese estado de exal
tacion moral; los accidentes reales y ordinarios de la vida , y el.em
bate de las pasiones sociales pueden fácilmente inclinar á una triste y
funesta realizacion. Es preciso decirlo sin rodeos, el drama francés
moderno se ha convertido en una escuela de inmoralidad , de infamia
y de horrores , es decir , de asesinato , de suicidio y de prostitucion »
Objétase que el teatro francés, tal como lo tenemos hoy dia , nada
ofrece de contrario a las buenas costumbres ; que hasta llega á estar
tan depurado que nada ofrece que pueda ofender al oido mas casto .
A esto Bossuel contesta , porque la objecion no es de hoy : « Será pre
ciso pues que pasemos por honestas las impiedades y las infamias de
que están llenas las comedias de Moliere.» He ahí lo que dijo un
hombre , que en mi concepto , lenia algun conocimiento de los hom
bres y de las cosas. « Pensad, continua el sublime escritor , si os atre
veriais á sostener à la faz del cielo unas piezas en que la virtud y la
piedad son siempre ridiculizadas , la corrupcion siempre disculpada v
siempre festiva , y el pudor siempre ofendido ó siempre con temor de
ser violado por los últimos atentados, quiero decir, por las espresiones
mas impúdicas , á que no se da sino un ligero disfraz.» (Traité sur la
Comédie.)
¿ Cómo poder aprobar la corrupcion reducida á máximas en una
multitud de óperas y de óperas cómicas , con todas las engañosas y
pérfidas invitaciones a todos los placeres ? ¿ Cómo aprobar esos senti
mientos cuya naturaleza corrompida se ve tan deliciosa y peligrosa -
mente lisonjeada, y que son animados per una música encantadora
que no respira mas que molicie y deleite (1) ? Es inutil que se res
(1) El desmesurado y escesivo cultivo de las artes de recreo , y particular
mente de la música , cualquiera que esta sea , del baile y de todo cuanto se di.
ce y hace en el teatro puede ejercer en el moral de los jóvenes una influencia
funestísima , exaltando , perturbando ó pervirtiendo la sensibilidad y las fun
ciones del sistema nervioso. Este estado anormal, o esta perversion de la sensi
bilidad , imperceptiblemente producida por las conmociones mas violentas ,
por las inclinaciones mas variadas y opuestas de las almas ya marchitas y aja
das , puede ser llevada hasta un punto que altere el carácter , depravè el senti
miento , que abra la puerta a todas las enfermedades nerviosas, y produzca en
fin anas'anomalías 6 perturbaciones mentales ó afectivas que quizá envenena
rap para siempre la vida doméstica y social.
Véase sino cuanto la juventud de nuestras opulentas ciudades está enervada ,
floja , marchitada , saturada de placeres , de deleite , de música , de espeotacu
los , de bailes y aun de otra cosa : el manantial de los bellos sentimientos está
agotado , degenerado el carácter y seco el corazon . Ved lambien a las jóvenes
126 MOECHJALOGIA . .
ponda que uno no ha parado la atenciou sino en el capto y' en el apa
rålo escénico , sin ocuparse del sentido de las palabras ni del senti
miento que ellas espresan é inspiran ; porque, como dice tambien .Bos
suet', en eso precisamente está el peligro , pues mientras se halla uno
encantado por la dulzura de la melodía , ó hechizado por lo maravi
lloso del espectáculo , aquellos sentimientos se van insinuando sin que
uno lo piense y dan placer sin ser percibidos ; pero no se necesita dar
el auxilio del canto y de la música á unas inclinaciones ya de por si
demasiado poderosas. Si decís que en la sola representacion de las pa
siones agradables en las tragedias de un Corneille y de un Racine no
hay peligro para el pudor , desmentis á este último, quien , ocupado
de objetos mas dignos de él , renuncia á su Berenice , que nombro
porque es la primera que me viene á la memoria .
Otros afirman imperturbablemente que no ven en los espectáculos
ningun peligro para ellos, que salen del teatro tan puros como en
traron , y que su virtud no sufre alli ningun menoscabo ; estraña ilu
sion ! ceguedad funesta ! Eso es puro efecto de una dureza ó de una
grande insensibilidad de conciencia . Pero en fin ¿ qué especie de vir
tud es esa tan á prueba de todo ataque ? , no es de temer que sea de
aquellas de los sabios mundanos, que no saben si son cristianos o no ,
y que se figuran , comodice tambien Bossuet , haber llenado todos los
deberes de la virtud cuando viven comogente honrada , sin engañar á
nadie , mientras que se engañan á simismos, empleándolo todo en sus
placeres y en satisfacer sus pasiones ? Pero aun cuando esos hombres ,
que de virtuosos é invulnerables se jactan , no tuviesen realmente
que temer para sí mismos & acaso no deberian siempre temer el es
cándalo que dan á los demás ? Væ homini illi per quem scandalum
venit. (Mattb . xviii , 7.)
Si las pinturas y las imágenes inmodestas ú obscenas presentan na
turalmente al entendimiento lo que ellas espresan , & cuánto unas no
pálidas , flạcas , endebles , tristes , vaporosas , histéricas, melancólicas , raquí
ticas , clóróticas , minadas sordamente por un no se sabe qué.... . Si llega el caso
de que se quejen del pecho , recórrese entonces almagnetismo, á los sonámbu ,
los , a la homeopatía , á la ortopedia , a las divinidades veneradas hoy dia , á
Melpomene , á Talía y á Terpsícore , es decir , á los espectáculos y á los bailes ,
donde acaba de agotarse la poca sensibilidad que les resta y que aun hubiera
podido tal vez utilizarse para restablecer su salud mediante una larga perma
nencia en la campiña.
Si por acaso esas jóvenes no mueren , un triste y quizás fatal himeneo las
unirá á viejos de veinte y cinco años , ya del todo encorvados bajo el peso de
los placeres y de la molicie; pues así es como se suelen hacer las alianzas entre
las personas de clase elevada . Empero , no concluyó todo una vez hecba y
consumada la union : entonces es cuando empiezan nuevos dolores, initium do
lorum , cuyo sombrío y siniestro cuadro no queremos bosquejar en este lugar.
PART. I. CAP . 11. 127
han de conmover las representaciones teatrales , donde , como dice
Bossuet , « todo parece efectivo ; donde los que obran no son facciones
muertas y colores secos , sino personajes vivos ; verdaderos ojos, ó
ardientes, ó tiernos y sumidos en la pasion ; verdaderas lágrimas en
los actores , que las arrancan tambien verdaderas á los espectadores :
en fin , verdaderos movimientos que inflaman el patio y todos los pal
cos ; y todo eso , segun decís , no conmueve sino indirectamente , y
no escita sino por accidente las pasiones... Decís , continua el grave
Bossuet, que el pudor de una joven no queda ofendido sino por acci
dente , por todas las conversaciones en que una persona de su sexo es
tá hablando de sus luchas , en que confiesa su falta y la confiesa á su
mismo vencedor , como le llama ella . Lo que no se ve en el mundo ,
lo que las que sucumben á esa debilidad ocultan con tanto cuidado ,
una piña irá á aprenderlo á la comedia . Ella lo verá , no ya en los
hombres a quienes el mundo todo lo permite , sino en una joven que
se presenta como modesta , como púdica , como virtuosa , en una pa
labra en una heroina ; y aquella confesion de que se sonrojaria ba
ciéndola en secreto es juzgada digna de ser revelada al público , y de
arrancar como una nueva maravilla los aplausos de todos los espec
tadores.
No queremos aquíhablar del prestigio seductor y fascinador de las
cómicas ó de las actrices, aun admitiendo la modestia y la decencia
esterior de sus trajes. Uno se figura fácilmente todo el boato de la va
nidad y de los peligrosos atractivos de esas mujeres , semejantes á
aquellas sirenas de que habla el profeta Isaías que tienen su morada
en los templos del deleite . Sirenes in delubris voluptatis. (x111, 22.)
Los que componen ó representan piezas de teatro verdaderamente
obscenas pecan mortalmente sin duda algupa . Tal es la opinion de
los teólogos menos sospechosos de rigorismo en esta materia , tales co
mo S . Antonino , S . Ligorio , Sylvester , Sanchez , Mons. Bouvier ,
Mons.Gousset , etc.
Tambien se peca mortalmente concurriendo ó cooperando á una re
presentacion notablemente indecente , valdè turpis , ya sea por sus
cricion o abono , ya sea aplaudiéndola , ó aun por la simple asisten
cia a los espectáculos notablemente obscenos , ob turpem delectationem
ipdè consurgentem .
· « Comædias , tragediasve, ait DD . Bouvier, non multùm turpes
componere , vel in theatro repræsentare , à mortali tamen communiter
excusari non potest , propter periculum hujusmodi ludis annexum , et
ob scandalum exindè pro aliis exurgens. Undè actores et actrices , in
concilio arelatensi , anno 314 , cap . 6 , fuerunt excommunicati , et
18
128 MCCHIALOGÍA .
hùc usque velut excommunicati habiti sunt saltem in Galliâ : idcirco
sacramenta Ecclesiæ ipsis etiam in articulo mortis non administran
tur , nisi professioni suæ se renuntiaturos promittant.
«Dico saltem in Gallia , quia in Italiâ , in Germaniâ , in Poloniâ in
aliisque regionibus viri et mulieres ab Ecclesiæ sacramentis non ex
cluduntur præcisè ob scenas theatricas quibus inserviunt, sed libe
rum est confessariis eos admittere vel repellere , secundùm naturam
repræsentationum ad quas concurrunt.»
Segun el mismo autor, S . Ligorio , Sanchez y la generalidad de
los teólegos, los estranjeros por lo menos , no es, pecado 'mortal el
asistir a representaciones que no sean notablemente indecentes ni eje
cutadas de una manera indecente , salvo sin embargo todo peligro
especial y todo motivo de escándalo .
Pero he aquíotras opiniones que nos parecen harto graves ó dema
siado aventuradas para dejarlas pasar sin observacion . Tales son las
de Sanchez y de S . Ligorio , que hace poco han sido reproducidas
por Mons. Gousset en estos términos : « Pecarian mortalmente los me
ros espectadores que asistiesen á una representacion notablemente
obscena , por el vergonzoso placer que esta representacion puede oca -
sionar. Pero no sucederia lo mismo respecto de aquellos que solo
asistiesen por curiosidad ó por recreo ; estos solo pecan venialmente,
con tal que se propongan resistir á todo movimiento carnal que pueda
sobrevenirles , ó que no tengan motivo de temor de caer en algunas
faltas graves.
» Sin embargo seria difícil escusar de pecado mortal á un joven
que , sin necesidad , quisiese asistir al espectáculo en el caso de que
se trata ("); á menos que fuese de conciencia muy timorata y que
pudiese ir confiado en su propia esperiencia . Tambien seria menes
ter , en este último caso , que su ejemplo no fuese un motivo para
que otros jóvenes asistiesen á representaciones indecentes.» (T'héologie
morale, t. 1, parte 6.a, del sesto precepto del Decálogo.)
El autor, como acabamos de decir , se apoya en Sanchez y en san
Ligorio , á los cuales remite al lector sin continuar su testo que va
mos á citar ahora mismo.
De lo que acabamos de decir resulta que solo se peca venialmente
asistiendo , por via de curiosidad ó de recreo , á una representacion
notablemente obscena ; pero bastante sabido es que ordinariamente no
se va al teatro sino por semejantes motivos , es decir, por curiosidad ,
pasatiempo y recreo . Añádese , à la verdad , con tal que se propongan
( 1) Es decir, a un espectáculo notablemente obsceno .
PART. I. CAP. II. 129
resistir á lodomovimiento carpal que pueda sobrevenir ; pero este es
el propósilo que comunmente se hace en tales casos. En fin pónese to
davía otra condicion : con tal que no tengan lugar de temer que co
meterán algunas faltas graves ; pero tambien ordinariamente , por no
decir siempre, se estará en la persuasion de que nada hay que temer
de ese lado , y entre tanto va uno á esponerse voluntariamente , por
curiosidad ó por recreo , es decir , sin necesidad , á un peligro pró
ximo de pecar mortalmente que no puede dejar de haberlo en un es
pectáculo notablemente obsceno.
He aquí ahora el testo de Sanchez : Quamvis comediis interesse
non sit mortale ubi nec res turpes repræsentantur , nec modus re
præsentandi est turpis, vel si hæc concurrant, audiuntur ob solam
vanam curiositatem , absque periculo probabili lapsûs in aliquod pec
catum mortale.» (Lib . 9 , dis, 46 , n.° 40 .) Aquí es preciso notar que
Sanchez no se sirve de la espresion valdè lurpes, muy ó por lo menos
notablemente obscena , cuando sienta que no se peca mortalmente asis
tiendo á un espectáculo obsceno , turpis ob solam vanam curiosita
tem , etc . Segun esto , no debiera haberse aplicado la espresion notable--
mente obscena á ese último caso , ó á la representacion en que no se
hace pecar sino venialmente , y debiera haberse contentado con decir :
representacion indecente, que por cierto dice menos que notablemente
obscena ; sin que de esto se pretenda deducir que yo crea que sólo
se peca venialmente cuando se asiste sin necesidad à un espectáculo
indecente . He aquí la continuacion del testo de Sanchez que sirve.de
base á las primeras palabras de la cita de Mops. Gousset: « At quan
dd turpia repræsentantur , vel inodus est turpis, audiunturque ob de
lectắtionem ex ipsis rebus turpibus consurgentem , aut cum probabili
ruinæ periculo , esse lethale.»
En cuanto al joven á quien se permite asistir , sin necesidad , á
esas especies de espectáculos , es decir , notablemente obscenos , sin pe
car mortalmente , con tal que sea de conciencia muy timorata , pre
guntaremos & qué conciencia muy timorata es la de ese jóven que
asiste à espectáculos semejantes ? & acaso no hay una espécie de con
tradiccion práctica en que á un joven que tiene la conciencia muy ti
morata , se le vea frecuentar espectáculos notablemente obscenos ? A
mas de que, sobre el particular , ¿ por ventura no se halla toda la
gente poco mas o menos en el mismo caso que aquel jóven ? Qui se
existimat stare videat ne cadat.
El testo y el ejemplo del joven de conciencia timorata son toma-
dos de S. Ligorio , quien dice así : «Nullo autem modo à mortali ex
cusarem adolescentem . qui, absque necessitate , vellet curiositatis
130 MOECHIALOGÍA .
causâ hujusmodi comediis (notabiliter turpibus ut suprà dictuni est)
interesse , nisi quis esset valdè timoratus, et insuper pluries esset ex
pertus se, illas spectando , nunquàm lethaliter peceasse ; modò suo
exemplo aliis adolescentibus occasionem non præberet hujusmodi tur
pibus repræsentationibusassistendi.» (Lib. 3., n .° 427.)
Salvo el profundo respeto que profesamos á autoridades tan graves
como son S . Ligorio y Mons. Gousset, no podemos adoptar su opinion ,
por las razones que el lector ha debido ver y apreciar mas arriba .
Tambien se debe tener presente que los teólogos éştranjeros, sobre to
do los españoles é italianos (Sanchez y S. Ligorio ), son generalmen
te mas complacientes que los teólogos franceses por lo que hace a los
espectáculos. Por lo tanto , sus opiniones sobre este punto no deben
admitirse sino con medida y reserva. Mons. Bouvier habia hecho'ya
esta observacion , á lo menos de una manera implicita , diciendo :
« Scenis notabiliter turpibus interesse ob delectationem indè consur
gentem peccatum est mortale , ut patet: si verò ob solam curiositatem
aut vanum solatium id fiat , secluso periculo consensûs in rem vene
ream , quidam (") æstimant peccatum esse duntaxat veniale : verùm
laxior est ista decisio , et mortale reputandum est peccatum , lum prop
ter periculum , tum propter scandalum , tum propter cooperationem
ad actionem mortaliter malam . »
Si las piezas no son notablemente obscenas y no se representan de
una manera indecente , no peca mortalmente el que á ellas asiste, se
gun Sanchez, S. Ligorio , Mons. Bouvier ,Mons.Gousset y varios teó
logos estranjeros , salvo siempre todo peligro particular y todo escán :
dalo. Estos teólogos , contra la opinion de otros muchos, se fundan ,
en la especie, en que con la simple asistencia al teatro no se coopera
gravemente á sostener la profesion de los actores, Esto no nos parece
exacto , porque ¿ quién llama á los actores al teatro , quién les man
tiene en su estado , en su lujo , etc . , sino los espectadores ? Si no hay
oyentes, dice S. Crisóstomo, deja de haber actores. (Hom . in Matb.)
Collet habla en elmismosentido : « Comædiorum actioni, quæ grave
est peccatum , indubiè cooperantur (assistentes); tolle enim spectatores,
sustuleris et actores. » (De sexto Decalogi præcepto.)
Afirman los mismos autores que no se peca asistiendo á los 'especta
culos no obscenos , si para eso media alguna razon de necesidad , de
utilidad ó de decoro , decentia statûs, como ellos dicen , suponiendo
siempre que no haya ni peligro particular ni motivo de escándalo. Es
to lo fundan en que entonces hay una razon suficiente que permite
(1) Este quidam alude particularmente a Sanchez y a S. Ligorio .
PART. I . CAP . 11 . 131
cooperar de unamanera remota á que otros pequen , ó para esponerse
uno mismo á algun peligro. o Quia tunc daretur ratio sufficiens pecca
tis aliorum sic remote cooperandi et quidem periculo se exponendi.»
En virtud de eso , añaden , les es lícito asistir a los espectáculos no
obscenos , á lasmujeres casadas,para no contrariar á sus maridos que
exijan de ellas esa deferencia ; á los criados , para servir a sus amos ó
amas ; á los hijos , para obedecer á sus padres ; á los magistrados y á
los agentes de policía , para la conservacion del buen órden ; á los re
yes y á los principes, á fin de captarse el afecto de sus súbditos; á
los cortesanos, porque deben acompañar al príncipe, etc., con tal que
todas esas personas vayan con intencion pura y no consientan en nia
guna delectacion carnal. Esa es la doctrina de Mons. Bouvier , que no
queremos absolutamente reprobar. Mas para adherirnos enteramente á
ella nos detiene un pequeño escrúpulo , que es y será siempre el co
operar a la conservacion de una profesion que la Iglesia mira como un
obstáculo para la recepcion de los sacramentos , aún en el artículo de
la muerte , segun elmismo Mons. Bouvier , quien , como mas arriba
hemos visto , dice que los actores y las actrices han sido miradoshasta
ahora como escomulgados , á lo menos en Francia.- Ethùc usque velut
eccommunicati habiti sunt saltem in Gallid . Véase la página 135 . Lue
go , es una profesion incompatible con la salvacion ó la santificacion
cristiana, puesto que se está obligado á hacer que los actores y las
actrices la renuncien en el artículo de la muerte, que sean hoy dia es--
comulgados ó no . Aunque, á lo que parece , Mons, Gousset no les con
sidere como escomulgados , no por esto deja de obligarles á aquel acto
de renuncia en el artículo de la muerte.
He aquí lo que tocante á esto dice Bossuet: « Ella (la Iglesia ) conde
na á los comediantes , y cree que esto basta para prohibir la comedia ;
en los Rituales se ve terminantemente espresada esta decision , que se
observa siempre en la práctica ; prívase de los sacramentos , tanto en
vida como en la hora de la muerte, á los comediantes, si no renuncian
a su arte ; no sop admitidos á la santa mesa como á pecadores públicos;
se les escluye de los órdenes sagrados , como a personas infames ; y
por consecuencia infalible se les piega la sepultura eclesiástica. Por lo
que hace á los que frecuentan las comedias, como hay unos mas ino
centes que otros , y tal vez á algunos antes debe instruírseles que cen
surarles , no todos son reprensibles en el mismo grado , y no es ine
nester vituperar igualmente a todos. Sin embargo deahí no se sigue que
deban autorizarse los peligros públicos : si los hombres no los advier
ten , á los sacerdotes toca dárselos a conocer y no disimulárselos.»
Vamos ahora á esponer sumariamente las conclusiones prácticas
132 MOECHIALOGÍA .
que los confesores deben sacar de todo lo que precede , ó antes bien
presentaremos una breve esposicion de las reglas de conducta que
ofrecen a los confesores los teólogos mas prudentes é ilustrados . Cuan
do convenga las interpolaremos con algunas cortas reflexiones.
He aquí primeramente la regla que sigue Mons. Bouvier : copiámos
la testualmente .
« Non absolverem , 1.0 actores et actrices etiam in articulo mortis,
niši professioni suæ renuntiarent; 2.° poetas qui componunt fabulas
amoribus illicitis plenas , in theatro repræsentandas ; 3.° eos qui ad re
præsentationes theatricas proximè concurrunt, ut famulas quiactrices
vestiunt , aut qui vestes ad solum hunc usum destinatas ex professo
vendunt, locant vel conficiunt; 4 .° eos qui, scenis theatralibus assis
teodo , grave præbent scandalum , ut essent personæ virtutibus chris
tianis conspicuæ , nisi gravi necessitate premerentur; 5. eos qui prop
ter circumstantiam personalem grave subeunt periculum libidinis ;
6 .° nec eos qui sine causâ rationabiliter excusante frequentissimè is
tiusmodi ludis intersunt, etiamsi nec grave periculum incurrerent, nec
scandalum præberent, quia talis consuetudo cum vità christianâ con
ciliari non potest.
» Absolverem , è contrà , pro communione paschali , 1 .° omnes qui,
causam sufficienter excusantem habentes, non peccant; 2.° eos qui
aliquoties duntaxat , vel ex quibusdam circumstantiis tantùm specta
culis non per se notabiliter inhonestis assistunt, seclusis et periculo
et scandalo ; 3 .° eos qui ad repræsentationes theatrales non proximè,
aut solummodd leviter concurrunt , v. g ., aulam theatralem verren
do , ædificium instaurando , etc.» Vemos, segun eso , que Mons. Bou
vier no niega la absolucion sino á los consuetudinarios , es decir, á los
que habitualmente van al teatro por aficion y sin legítima escusa ,
porque tal conducta no puede conciliarse con la vida cristiana. Aqui
solo hablamos de las personas que asisten al espectáculo y no de los
actores, etc .
Segun Collet, Lamet cuenta que habiéndose consultado sobre esta
materia á seis doctores de la Sorbona , en 1694 , decidieron que debe
ria negarse la absolucion : « 1.° actoribus qui scenicos ludos exhi -
hent ; 2 .° auctoribus qui fabulas componunt in theatro recitandas ;
3.º artificibus qui ad theatrum proximè spectantia concinnant : nisi hi
omnes sufficienter moniti resipiscere velint, et prædictis nuntium re
mittere perpetuum . Idem et à fortiori de scenicis musicis , gallicè ope
ra dicendum . » (Collet. ) Ita etiam Bailly.
Hay que notar que los seis doctores de la Sorbona , ni Collet, ni
Bailly , ninguna mencion hacen de los espectadoresó de los que asis
. PART. 1. CAP. 11. ' 133
ten a los espectáculos teatrales ; será porque a lo que parece la con
sulta hecha á la Sorbona no era relativa á estos últimos. ¿Deberá de
ducirse de esto que no debe negárseles la absolucion ? No puede ad
mitirse sin distincion semejante consecuencia , y á la verdad el severo
Collet , y con mucha razon , no es posible que sea de parecer de ah
solverlos a todos en masa , in globo y sin distincion . . .
« El teatro en si no es malo , dice Mops. Gousset ; luego no puede
condenársele de uva manera absoluta : pero es mas o menos peligroso
seguo las circunstancias y el objeto de las piezas que se ponen en es
cena; luego no puede aprobarse la costumbre de frecuentarlo , y aun
deberia prohibirse á las personas para quienes viene á ser una ocasion
próxima de pecar mortalmente .»
Segun las Instrucciones sobre el Ritual de Tolon , muy conocidas y
de que por otra parte se hace grande aprecio , « debe mirarse como
ocasion próxima de pecar mortalmente el asistir a la comedia , á la
ópera y á todos los espectáculos que representan los comediantes y los
titiriteros y , sin distincion alguna , todos los de igual calaña que su
‘ben á las tablas para divertir al público .» (De la Comedia , t. 1 .) Es
probable que estas decisiones serán consideradas como algo rígidas.
Continuemos. Algunas páginasmas arriba, el autor habia dicho : « De
be negarse la absolucion a los que se hallan en ocasion próxima de
pecar mortalmente... Llámase ocasion próxima de pecado mortal todo
aquello que espone al peligro moral ó probable de pecar mortalmente .
Hay ocasiones próximas que por sí mismas y por su naturaleza indu
cen á pecar mortalmente , tales como las profesiones de comediantes ,
de farsantes, etc .)
Volvamos otra vez á los actores y á las actrices, ya que otro pa
saje de Mons. Gousset á ello nos conduce . Este sabio teólogo dice :
« Como el teatro no es malo por su naturaleza , la profesion de los ac
tores y de las actrices , aunque generalmente peligrosa para la salva
cion , no debe ser mirada como una profesion absolutamente mala.»
Mons. Gousset , segun S. Ligorio , se funda en el pasaje siguiente de
Sto. Tomás: « Ludus — dice el doctor angélico - est necessarius ad.con
servationem vitæ humanæ . Ad omnia autem quæ sunt utilia conser
vationi humanæ deputari possunt aliqua officia licita . Et ideò etiam
officium histrionum , quod ordinatur ad solatium hominibus exhiben
dum , non est secundùm se illicitum :nec sunt in statu peccati, dum
modò moderatè ludo utantur, id est non utendo aliquibus illicitis ver
bis vel factis ad ludum , et non adbibendo ludum negotiis et tempori
bus iodebitis... Undè illi qui moderatè eis subveniunt non peccant ;
sed justè faciuntmercedem ministerii eorum eis tribuendo. Si qui au
434" MOECHIALOGÍA .
tem superfluè sua in tales consumant, vel etiam sustentent illos his
· triones, qui illicitis ludis utuntur, peccant , quasi eos in peccato fo
ventes.» (Sum ., part . 2 , 2 , q . 168 , art. 3.) .
De ninguna manera es cierto que este famoso pasaje de Sto. Tomás
deba aplicarse á nuestros espectáculos teatrales y justificar su prác
tica ; él pues , no prueba sin réplica que la profesion de los actores y
de las actrices no sea mala . ¿ Acaso Bossuet po rechaza esa proeba en
favor de la comedia , sacada del testo de Sto . Tomás , cuando dice :
«Aun cuando fuese cierto , que no lo es, que Sto. Tomás , en el pasaje
que se produce de su Suma , hubiese querido hablar de la come
dia , etc.) ? Pontas es todavía mas esplícito sobre dicho pasaje del doc
tor angélico tantas veces invocado á favor de los espectáculos. He
aquí sus palabras: « Como los fautores de los comediantes sostienen
que Sto. Tomás está de su parte , en lo que al parecer dice que la
profesion de los comediantes no es mala por su naturaleza , y que has
ta se puede contribuir á su subsistencia con tal que sea de una ma
nera moderada..., es necesario que se sepa que aquel santo doctor no
entiende hablar de las comedias tales como las pintan los concilios y
los Padres , y tales como aun boy dia se representan , en las que no
se ven mas que intrigas matrimoniales o de amoríos, llenas de pala
bras equívocas, que solo tienden á escitar y sostener las pasiones mas
vergonzosas. Porque, ¿ cómo seria posible, sin injuriar atrozmente á
ese santo, imputarle una doctrina contraria a la de los concilios y los
Padres de todos los siglos ? Luego es una verdad el decir que no habla
sino de los juegos de teatro , que, como él dice , son en cierto modo
útiles o necesarios para alivio de las penalidades de la vida , entre los
cuales pone el de pelota ... Ese ángel de la escuela no piensa pues en
señar que sea lícito asistir a las comedias de que hablamos, ni que
pueda darse nada á los que las representan , antes al contrario él mis
mo los reprueba con S . Agustin , poco despues de haber dicho las pa
labras en que se apoyan los fautores de la comedia . Si qui autem su
perflua in tales consumunt, añade, vel etiam sustentant illos histriones ,
qui illicitis utuntur, peccant, quasi eos in peccato foventes . Undè Au
gustinus dicit , super Joannem , quòd donare res suas histrionibus (1) vi
tium est immane.» (Comedia .)
Se ve , segun eso , que el pasaje de Sto. Tomás prueba bastante mal
(1 ) Afirma Bossuet que es muy falso que Sto . Tomás entendiese hablar de los
comediantes bajo el nombre de histriones. Pretende que estos eran unos meros
jugadores , joculatores, titiriteros , farsantes , que daban ludrica jocosa , diver .
siones y juegos públicos ; o aun simples tocadores de flauta , etc . Luego , segun
S . Agustin , est vitium immane res suas donare histrionibus : scilicet histrioni
bus ludis illicitis et turpibusutentibus.
PART. I. CAP. 11. 135
lo que se pretende establecer, es á saber , que no debe ser considerada
como absolutamente mala la profesion de los actores y de las actrices :
Tomada abstractivamente y en teoria , ó como son los actores en los
colegios , no, no es absolutamente mala ; tomada positivamente y tal
cual es en la práctica en el actual estado de nuestras costumbres cor
rompidas , en el estado actual de los teatros de Europa y con todas las
circunstancias que le son inseparables y sin las cuales esa profesion
no existe , sí , es mala , malísima , sumamente mala . Han bleus 943
Mons. Gousset añade: aS. Antonino , S. Alfonso de Ligorio y S. Fran
cisco de Sales se espresan como Sto. Tomás. Se ve que esos santos doc
tores no creian que los actores ó comediantes fuesen escomulgados.)
A la verdad , esos santos doctores hablan , en órden a la comedia , co
mo Sto . Tomás , y en igual sentido y con lasmismas condiciones que
Sto . Tomás; pero ellos solo hablan de la comedia y no de los come
diantes , y de consiguiente no dicen si son escomulgados ó no ; ó si de
los comediantes hablan , es para declarar, con todos los teólogos y por
consiguiente con el mismo Mons. Gousset, que no se puede absolver á
un comediante ni siquiera en el artículo de la muerte si no renuncia á
su profesion. He aquí de qué manera se espresa Mons. Gousset acerca
de este punto : «Cuando un actor se halla en peligro de morir , el cura
debe ofrecerle su ministerio. Si el enfermo no pareciere dispuesto á
renunciar su profesion , es prudente , en nuestro concepto , no exigirle
mas que la simple declaracion de que , si llega á recobrar la salud ,
se conformará con lo que el obispo decida. Una vez hecha esta decla
racion , se le prestarán los religiosos auxilios. Dado caso que se obsti
nase en negarse á hacer la declaracion que se le pide , seria evidente
mente indigno de los sacramentos y de las bendiciones de la Iglesia .»
( Théologie morale , t. 1 , del sesto preceplo del Decálogo .) , mitte
Finalmente creemos deber continuar aquíla regla de conducta que
hay que guardar respecto á las personas que frecuentan los espectácu
los , que se encuentra trazada por el piadoso obispo Mons. Joly de
Choin , en el Ritual de Tolon . ....
Heaquí lo que ese sabio obispo escribió hace ya cosa de un siglo :
« Si un penitente que ba frecuentado los espectáculos no hubiese sido
instruido anticipadamente de lo inicuo de semejantes representaciones,
el confesor puede, despues de haberle hecho conocer los riesgos á que
se espuso , darle la absolucion , con tal que por otra parte no haya otro
impedimento , si promete sinceramenle abstenerse de estas especies de
diversiones , y si por la contricion y las disposiciones de que da mues
tras hay lugar de esperar que efectivamente se abstendrá.
Si despues
9
que el penitente ha sido instruido de las iniquidades que
1
136 MOECHIALOGÍA.
se aprenden en el teatro , si despues que prometió no frecuentarlo ya
mas, asiste otra vez á sus representaciones faltando a su palabra , el
confesor debe negarle la absolucion hasta haberlo puesto á prueba du
rante el tiempo necesario , siguiendo los principios señalados... para
la absolucion de aquellos que se hallan en ocasion próxima de pecar
mortalmente.
Si el penitente no quiere prometer renunciar para siempre estos
perniciosos pasatiempos, ó si el confesor tiene un justo motivo de juz
gar que , a pesar de su promesa , no se halla verdaderamente dis
puesto a dejar de asistir a los espectáculos, debe negarle la absolu
cion , hasta que con pruebas reales y nada equívocas quedemoralmente
seguro de la sinceridad desu conversion y de su total enmienda ; con
forme á las antiguas ordenanzas sinodales de esta diócesi , que res
pecto á este punto han sido renovadas y confirmadas.» (Instrucciones
sobre el Ritual de Tolon , t. 1, del sacramento de la Penitencia , pá -
gina 741.)
En virtud de todo cuanto hasta ahora bemos dicho en órden á los
espectáculos fácil es de ver que , despues de Bossuet, y sobre todo de
unos cien años á esta parte , se ha verificado algun cambio en la opi-
nion de los teólogos y en la conducta de los confesores sobre la cues
tion del teatro . ¿ De dónde dimana pues ese disentimiento ó esa diver
gencia de opiniones y de miras ? ¿ Será acaso el resultado de una me
jora ó de un progreso moral en el estado del teatro , ó de una feliz
reforma que en este se haya hecho ? No lo creemos: por otra parte una
reformacion moral es aquí imposible , y en el actual estado de las cos
tumbres y del espíritu de las naciones , el teatro es radicalmente irre
formable. El querer reformar y reducir los espectáculos , contra su
naturaleza , á las reglas severas de la honradez y de la virtud , seria
aniquilarlos y dejar el teatro sin espectadores. ¿ No debe mas bien
atribuirse á que las costumbres se han hecho mas licenciosas, y á que
la corrupcion es mas profunda y mas general ? Así lo creemos , y aun
estamos íntimamente convencidos de ello . Se nos dirá tal vez que en
Lodos tiempos las costumbres han sido corrompidas , y que la natura
leza humana es siempre la misma, como nos lo prueba la historia . No
cabe duda que la corrupcion existió en todos los siglos pasados , y exis
· tirá en los siglos futuros; pero no ha atravesado ni atravesará los si
glos sino con oscilaciones en mas y en menos , segun el grado de fe re
ligiosa de los pueblos. Es una verdad incontestada é incontestable ,
que , cuando la fe disminuye en un pueblo, sus costumbres se corrom
pen á proporcion : no se practica sinceramente sino aquello que se cree
firmemente , y deja de practicarse desde el momento en que se deja de
PART. I. CAP. II. 137
creer. Una vez roto el freno religioso, la moral pública y privada es
al instante mismo arrastrada al rápido y turbio torrente de las pasio
nes vergonzosas y brutales. Lo que se siembra en la corrupcion no pro
ducemas que frutos mortíferos y corrompidos , esto es, la desmorali
zacion , el imperioso dominio de los sentidos con pasiones insaciables.
Del cambio y de la diversidad de opiniones de los teólogos y aun
de la diferencia de conducta de los confesores y se deberá deducir por
ventura que los principios de moral y la doctrina de la Iglesia cam
bian tambien ? De ninguna manera. La sociedad puede sufrir ciertas
mutaciones en su constitucion , y los estilos y las pasiones de los hom
bres pueden seguir esas fases sociales y revestirse de nuevas formas ,
pero la doctrina ó las santas máximas de la Iglesia no varian ; única
mente puede variar su aplicacion y modificarse segun las circunstan
cias de las costumbres, de los tiempos y de los lugares . do slag
Terminamos todo este artículo indicando los principales autores que
han escrito sobre y contra los espectáculos. Bust Sido o
El principe de Conti , Traité de la Comédie et des Spectacles , selon
la tradition des Pères ; Nicole , Essais de Morale, tomos III y V, pen
sées sur les spectacles ; Bossuet, Maximes et réflexions sur la Comédie ;
se ha visto con qué energía clama Bossuet contra el teatro; Desprez
de Boissy , Lettres sur les Spectacles ; Concina, teólogo dominico , de
Spectaculis theatralibus ; Gerard , comte de Valmont; fipalmente una
multitud de teólogos franceses , como Fromageau , Pontas , etc . El
mismo Juan Jacobo Rousseau vituperó agriamente los espectáculos en
una larga y elocuente carta a d 'Alembert. Racine , Bayle , La Molte ,
Gresset , Riccoboni, que habian llegado a conocer los peligros de los
espectáculos , lamentábanse de haberse dedicado al servicio del teatro
v formaban votos para su supresion . 61919 7 . bis in Noel

ARTICULO VIII.

DE LAS PRÁCTICAS MAGNÉTICAS.

A punto de vista moral , el teólogo y el confesor deben asimilar la


práctica delmagnetismo animal á la frecuentacion de los bailes y de
los espectáculos. Aquí solo consideramos elmagnetismo animal bajo
este único concepto , y prescindimos enteramente de los motivos que
pudieron deteripipar á hacer una consulta á la sagrada Penitenciaría
acerca de esta materia .
Ante todo , debemos advertir que no admitimos mas que el sonam
138 MOECHIALOGIA . 19
bulismo magnético , y que rechazamos todo lo restante ó sea lo mara
villoso , es decir , todo lo que se halla fuera de las leyes conocidas de
la física , de la fisiología y de la patología , como la transposicion de
los sentidos , el ver sin auxilio de los ojos y sin luz , por la frente , el
occipucio, el epigastrio , la yema de los dedos, etc .; el comunicar
pensamientos sin ninguna especie de señales ; la prevision , la profeti
zacion, la adivinacion , el conocimiento intuitivo ó la vista de los pen
samientos íntimos de las personas ausentes , y del interior del cuerpo
de los enfermos ; el determinar la naturaleza , el asiento y el modo
de curar las enfermedades , etc . Todos esos pretendidos fenómenos
magnéticos deben , en nuestro concepto , ser atribuidos al artificio hu
mano , es decir, à la truhanería , á la colusion y al compadrazgo , y
no á la intervencion de un agente sobrenatural o del demonio . I l
En esta obra no podemos entrar en largos detalles tocante al mag
netismo. Si el lector desea esplicaciones mas amplias , vea nuestro
Ensayo sobre la Teologia moral (4.a edic.) y sobre todo nuestros Pen
samientos de un Creyente católico (3 .a edic.) , donde se trata del mag -
vetismo animal con todos los detalles convenientes. 1.20b stollini
Aquí no debemos esponer sino sumariamente ciertos detalles capa -
ces de hacer resaltar el carácter inmoral de que se hallan impresos
Jos procedimientos , los ardides y los prestigios magnéticos. 2108 ab
Peligros en los procedimientos. He aquí en primer lugar , segun
M . Rostan , profesor de la facultad de medicina de París, un resumen
de las principales calidades que debe poseer el magnetizador. « Es
preciso que el magnetizador no tenga nada de repugnante , que goce
de buena salud , que se halle en la fuerza de la edad ó en la edad ma
dura , que sea grave y afectuoso ; que sea superior , si es posible , á la
persona magnetizada... y ejerza sobre ella un ascendiente cualquie
ra.» En otra parte el mismo autor añade : « Entre las personas que
ejercen elmagnetismo, las que tienen un carácter vivo , entusiasta ,
son las que mas sobresalen .»
En cuanto á lys sugetos magnéticos , los mejores , segun dicen ,
para obtener grandes efectos, son muchachas muy nerviosas , sensi
bles , impresionables y sobre todo histéricas, es decir , mas o menos
ardientes, apasionadas y crotómanas.
He aquí en compendio las posturas ó actitudes del magnetizador
y de la magnetizada : están sentados uno en frente del otro , se tocan
con los pies, las rodillas , sobre todo por las manos y aun por los
ojos , es decir , por un largo y continuo cambio de miradas. Despues
de estos afectuosos preliminares vienen otros varios tocamientos , en
la cabeza, en las espaldas, en los brazos , que se prolongan hasta en
PART. I. CAP. II. 139
los pies , algunas veces en el epigastrio , etc . A la verdad no se ne
cesita ser gran moralista y tener un profundo conocimiento del co
razon humano para juzgar del efecto que esas misteriosas maniobras
podrán producir en una jóven impresionable , perturbada y conmovi
da , y aun tal vez en el grave y estoico magnetizador , quien nada
ofrece de repugnante , que está sano y se halla en el vigor de la edad ,
es decir , que es jóven , hermoso y goza de completa salud . ¿ Qué será
pues si la magnetizada es una histérica , como sucede muchas veces ?
Porque , como ya hemos dicho , las jóvenes histéricas son las mas
propias y capaces de grandes efectos magnéticos , y con razon .
- Peligros en los fenómenos ó accidentes nerviosos. No nos detendre
mos en este segundo estado , porque no es mas que el prodomo ó el
precursor del tercero , ó sea del sonambulismo magnético . Bastará
que digamos anticipadamente que es ya , en nuestro concepto , una
especie de inmoralidad el provocar esos varios accidentes , esa gran
perturbacion nerviosa , esos movimientos convulsivos , esos espasmos
histéricos; y sobre todo, repetimos, hay inmoralidad en hacer perder
los sentidos á una joven y en privarla de su libertad moral. btu 387
Peligros en el sonambulismo magnético . He aqui, con respecto a la
moral pública, el parecer de un sabio fisiólogo, M . el doctor Dupau :
« No cabe duda en que el magnetizador ejerce una grandísima influen
cia moral sobre la persona sonámbula. Su voluntad se halla en cierto
modo dormida , y no resiste a las órdenes del que la ba magnetizado .
¿ No se puede en tales casos conocer los secretos de las familias, pe
netrar en los intereses mas caros y sagrados , etc . ? A mas de que ,
de esas relaciones íntimas , de ese cambio de miradas animadas por
las sensaciones mas dulces , de esas estrañas y gratas impresiones , de
ese estado enteramente nuevo en que caen las sonámbulas , nace una
completa y absoluta adhesion hácia elmagnetizador. El reconocimien
to , llevado hasta al entusiasmo de la pasion , llega á exaltar todos los
sentimientos afectuosos . Júzguese ahora lo que debe suceder si la so
námbula es una joven y el magnetizador tiene las cualidades para
agradar. Segun espresion de M . Rostan « ella le seguiria como un
perro á su dueño. » Sin adoptar al pie de la letra esta comparacion
ridicula , concluyo con aquel médico que el magnetismo animal com
promete la salud de los individuos , la moral pública y la seguridad
de las familias.» (Letlres physiologiques et morales sur le Magnétisme
animal.) Elmismo autor , en la página 245 , nos dice aque M . Ré -
camier refirió varios casos de preñez sobrevenidos de resultas del
magnetismo animal , y que M . Magendie ha citado hechos de perso
nasmuertas bajo la influencia de este arte . »
MOECHIALOGIA .
Empero a fin de que no se diga que hablamos bajo la impresion de
ánimo muy preocupado , y que exageramos los peligros que van uni
dos á la práctica del magnetismo animal por un buen motivo ó sea el
deseo de evitar los desórdenes posibles , vamos á referir no los innu
merables anatemas que los moralistas y los sabios han lanzado contra
el magnetismo, sino la alta enseñanza que claramente formula acerca
de este punto elmismo M . Rostan , quien es sin contradiccion el mas
docto defensor del magnetismo animal. He aquí sus palabras solemnes
y sacramentales : « La persona magnetizada hállase en absoluta de
pendencia del magnetizador, y en general no tiene mas voluntad que
la de este ; á mas de que, aun cuando quisiese oponerse a su magne
tizador , este puede , cuando le place , quitarle la facultad de obrar,
y aun la de hablar. Este , como ya hemos dicho, es uno de los fenó
menos que se produce con la mayor facilidad. ¿ Qué consecuencias tan
terribles no puede tener esa omnipotencia ? ¿ Qué mujer , qué mucha
cha estará segura de salir sin menoscabo de las manos del magnetiza
dor , quien habrá obrado con tanta mayor seguridad por cuanto sabe
que al despertar la sonámbula le quedará enteramente borrado el re
cuerdo de cuanto él habrá practicado ? El magnetismo, es preciso de
cirlo en voz alta , compromete en gran manera el honor de las fami
lias, y bajo este concepto , debe señalarse á los gobiernos , para que lo
tomen en consideracion . Pero supongamos por un momento que elmag
netizador , que ordinariamente es jóven ó adulto y dotado de buena
salud , resista a la facilidad de abusar de su sonámbula ; que su virtud
le haga triunfar del atractivo del boca á boca y de la impunidad ; que
temiendo cometer una infamia , rechace con horror toda idea criminal,
lo que es exigir mucho de la humanidad , ¿ cuántos otros peligros no
existen todavía ?
» ¿ Acaso un magnetizador no puede robar secretos importantes y
aprovecharse de ellos ? ¿ Por ventura no se sabe que la dicha de las
familias a menudo se halla unida al secreto de ciertas circunstancias?
En la una se oculta su origen , en la otra su fortuna ; en esta la en
fermedad de uno de sus individuos , en aquella un proyecto ambicio
so , etc . El descubrimiento de alguno de estos secretos ¿ no puede
causar la desgracia de una familia entera ? No consiste todo en eso .
Se ha negado formalmente la influencia de los sexos ; se engañan los
que tal dicen : esta influencia es poderosísima. La sonámbula contrae
con su magnetizador un reconocimiento y una adhesion sin limites. De
abi á una pasion verdadera po es largo el camino. Creo que, si la vio
lencia es fácil , la seduccion , no tan odiosa, lo es mas todavía. ¿Cómo
resistir a tocamientos reiterados, à miradas tiernas, á estar juntos todos
PART. J . CAP. II. 141
los dias, à testimonios de interés de una parte y de reconocimiento de
la otra ? Eso no es posible. Se va estableciendo la.intimidad ... pueden
preverse sus consecuencias .
: ?» No pretendo que eso suceda asi con frecuencia ; sé muy bien que se
puede wagnetizar á mujeres que no son ni jóvenes ni lindas, con las
cuales ni para las cuales nada bay que temer, Hasta llegaré á decir
que eso tiene lugar en la mayor parte de los casos ("); únicamente in
tento decir que es una ocasion de corromperse las costumbres, y que
hay personas que deben sucumbir á la tentacion , etc. Así pues , el
magnetismo puede ser peligroso para la salud, como lo es tambien pa
ra la moral pública. Para evitar semejantes inconvenientes , el gobier
no deberia prohibir su ejercicio con severidad , y no permitirlo sino á
personas que ofreciesen todas las garantías deseables.» ( Dict. de Mè
decine, art, Magnetismo, p. 58 , y Cours d'Hygiéne , p. 245.)
Si un médico se espresa con tanta energia sobre los desórdenes ó los
males que puede producir la práctica delmagnetismo, no es de admi
rar que un obispo , depositario de la verdad , alce igualmente la voz
contra la ciencia mentirosa y corruptriz de Mesmer. He aquí lo que
dice Mons. el obispo de Moulins en su pastoral para el jubileo de 1836:
«Nos clamaremos siempre contra esas tenebrosas invenciones , esos
misteriosos descubrimientos de pretendidos sabios modernos, adeptos
del materialismo y corruptores de la moral , tan bien acogidos en la
época en que se estaba preparando nuestra malbadada revolucion, cu
yo escándalo se trata de renovar. Señalaremos particularmente esa
ciencia funesta del magnetismo animal, cuya sola denominacion carac
teriza tan bien la inmoralidad de los que la profesan, que la practican
y se esfuerzan en propagarla , ciencia perturbatriz cuyo efecto es po
ner el desórden en todas las facultades físicas y morales de los hom -
bres . »
He aquí el pasaje de una nota sobre elmagnetismo por M . el abate
conde de Robiano : « Aunque despreciado de las sociedades científicas
de Europa y generalmente desechado por las personas virtuosas, el
magnetismo animal continua , prometiendo maravillas , en hacerse
partidarios. Viéndose privado del asentimiento de los hombres ilustra
dos, busca captarse el favor de la multitud . A fuerza de perseverancia
y obstinacion se quisiera popularizarle , y para conseguirlo se ocultan
sus funestos efectos . El atractivo de la novedad y la ignorancia de los
peligros impiden por lo comun que se detengan los progresos del mag
netismo animal. Entre las personas que empiezan á practicarlo y las

(1) Aquí le falta la memoria á M . Rostan .


142 MOECHIALOGÍA .
que se hacen ó quieren hacerse magnetizar , las hay de buena fe y sin
desconfianza . Por no conocer los tristes resultados que la esperiencia
enseña , ellas favorecen los progresos del mal. En efecto , es constante
y formalmente confesado que el magnetismo animal escita y fomenta
habitualmente pasiones desordenadas , provoca á la licencia de las
costumbres y deprava las conciencias. Así lo dijeron los miembros de
la academia de medicina que, bajo el reinado de Luis XVI , observa
ron los fenómenos delmagnetismo animal, y en su relato añadieron
especialmente , que el tratamiento magnético no puede menos de ser
peligroso para las costumbres. » « Yo mismo tambien (añade otro aútor
citado por M . Robiano) puedo decir que sé que en Alemania y en
Francia el libertinaje sonambulico ha sido uno de los poderosos se
cretos del infierno para desmoralizar á los hombres, y nótese bien que
la inmoralidad de que hablo no es un accidente fortúito , ni tampoco
un accidente pasajero . Inherente al sonambulismo, deja manchadas ca
si todas sus víctimas , escitando en ellas culpables emociones y encen
diendo pasiones vergonzosas.» .
He aquí por fin un pasaje muy notable acerca de los peligros mora
les de la práctica del magnetismo, por M . el doctor Ferrand -de- Missol,
distinguido colaborador de la Revue médicale.
a ... Supongo que , como sucede casi siempre, la magnetizada es una
mujer , y que es un hombre el que magnetiza. El primer efecto que el
magnetismo produce , aunque se establezca la relacion sin contacto
alguno , que se hagan las pasas á cierta distancia y que la mujer ten
ga los ojos cerrados, es una sensacion llena de deleite . En efecto , la
imaginacion , concentrada sobre lo que va á producirse en el cuerpo,
atenta al menor latido , al mas leve movimiento orgánico , percibe mil
sensaciones desconocidas, no que salgan del magnetismo, sino de la
atencion que se pone por la primera vez quizá en movimientos que ya
existian sin ser sentidos. Aquellas sensaciones, tanto mas deliciosas
cuanto son mas nuevas , impresionan vivamente a la persona que las
esperimenta , escitan su imaginacion , ya muy exaltada por la sola
idea del magnetismo , y la vuelven mas y mas sensible almas mínimo
movimiento vital, como se observa en ciertos hipocondriacos. Sin em
bargo , como es un hombre quien magnetiza y la imaginacion de la
mujer siente su presencia con toda aquella exaltacion de sensi
bilidad que la sobrevino , la parte de su cuerpo que con mas fuerza
se impresiona es el sistema uterino. En estos órganos nacen primero
unos movimientos confusos, y luego inas determinados; en su prioci -
pio prodúcense sentimientos de vaga sensualidad y en seguida de vivo .
deleite . Si la mujer es pura , semejante estado la agita y la fatiga ; si
PART. I. CAP. ii. 143
no lo es., este estado despierta unos deseos á veces violentos y que se
manifiestan al esterior con movimientos eróticos. litt.Det finnes tienen
«Si esto sucede cuando se hacen las pasas á cierta distancia y no se
emplea la accion de la mirada , cuya influencia es tan grande que ha
podido dar lugar a la espresion de el veneno de la mirada , ¿ qué será
cuando el magnetizador tiene entre sus manos las de la mujer a quien ,
magnetiza ? cuando pasa y repasa sus dedos por todo su cuerpo, cuan
do oprime sus rodillas con sus rodillas, sus pies con sus pies ; cuan
do su mirada aprieta por decirlo así su mirada, cuando aplica las
manos en su estómago ó con ellas ciñe su talle como con un círculo ,
cuando aplica su boca en el centro de la region epigastrica (yo lo he
visto), donde hace insuflaciones ? Hagamos abstraccion del magnetis
mo, examinemos todos los medios en sí mismos , apreciemos su in
fluencia directa , y veremos que no hay uno solo , de esos medios tan
inconsideradamente empleados en el magnetismo, que no sea muy
grave y hasta moralmente peligroso ; porque cada uno de ellos tiende
á establecer una relacion intima entre el hombre que magnetiza y la
mujer que es magnelizada ; cada uno de ellos aumenta esa inclinacion
que impele al hombre hacia la mujer y á la mujer hacia el hombre ;
cada uno de ellos impresiona profundamente su sensualidad , y todos
juntos producen entre el magnetizador y la magnetizada tal comunidad
de impresiones , de movimientos , de deseos , de sentimientos y de
ideas, que la voluntad de la mujer se halla realmente anonadada y
absorbida por la del hombre , y este la posee plenamente en su cora
zon , que él modifica á su antojo , en sus sentidos , que escita su vo
Juntad , etc . s piti
» Se preguntará ahora si es peligroso el magnetismo ? ¿ Acaso no lo
dicen bastante susefectos ? x y estos no debian ser tales ? Un amigo mio
vió á una sonámbula esperimentar durante su sueño todos los movi
mientos eróticos y todos los efectos del coito . Aunque este hecho no
se hubiese producido mas que una vez , seria ya muy grave ; pero un
magnetizador ardiente me confesó que este hecho se habia producido
mas de una vez Por otra parte , hay un hecho constante , que es la
escitacion del sistema uterino ; ahora bien , ¿ no es esta una cosa bas
tapte grave para que se prohiban absolutamente unos medios que la
provocan ? (Estracto de la Revue médicale, julio de 1843.)
Fácil es de ver, en virtud de todo lo que precede, que el confesor
no debe generalmente permitir á sus penitentes el uso del inagnetismo ,
y que por lo menos debe traiarles como á los que frecuentan los bai
les y los espectáculos.
Aquí no hablaremos del magnetismo considerado á punto de vista
20
144 MOECAJALOGÍA .
de lo maravilloso ó mirado como el resultado de un principio ó de un
agente sobrenatural, porque, como ya hemos dicho , no le prestamos
fe alguna.
· Sin embargo no creemos poder dispensarios de referir una larga
consulta dirigida a la sagrada Penitenciaria por M . Fontana , canciller
del obispado de Lausana y deGinebra , en 19 demayo de 1841. Con
tinuaremos en seguida otra consulta que Mons. Gousset , arzobispo de :
Reims, dirigió a la Santa Sede en 1842 , sobre la misma cuestion , con
Ja respuesta dada á aquella.
Consulta dirigida a la sagrada Penitenciaria , por M . FONTANA , can
ciller del obispado de Lausana y deGinebra , en 19 de mayo de 1841.
«EMINENTISSIME D . D . :
» Cùm hactenùs responsa circamagnetismum animalem minimè suffi- '
cere videantur, sitque magnoperè optandum ut tutiùs magisque uni
formiter solvi queant casus non rarò incidentes, infrà signatus Emi
nentiæ vestræ humiliter sequentia exponit.
» Personamagnetisata , quæ plerumque sexûsest feminei , in eum sta
tum soporis ingreditur dictum somnambulismum magneticum , tam altè
ut nec maximus fragor ad ejus aures nec ferri ignisve ulla vehementia
illam suscitare valeant. A solo magnetisatore, cui consensum suum
dedit (consensus enim est necessarius) , ad illud extasis genus adduci
tur , sive variis palpationibus gesticulatibusve , quandò ille adest , sive
simplici mandalo eodemque interno , cùm vel pluribus leucis distat.
» Tunc vivå voce seu mentaliter de suo absentiumque penitùs igno
torum sibi morbo interrogata , hæc persona evidenter indocta illicò
medicos scientiâ longè superat ; res anatomicasaccuratissimè enuntiat,
morborum internorum in humano corpore , qui cognitu definituque
peritis difficillimi sunt , causam , sedem , naturam indigitat; eorum
dem progressus , variationes, complicationes evolvit , idque propriis
terminis ; sæpè etiam dictorum morborum diuturnitatem exactè præ
nuntiat , remediaque simplissima et efficacissima præcipit.
» Si adest persona de quâ magnetisata mulier consulitur, relationem
inter utramque per contactum instituit magnetisator . Cùm verò abest,
cincinnus ex ejus cæsarie eam supplet ac sufficit. Hoc enim cincinno
tantùm ad palmam magnetisatæ admoto , confestim declarare quid sit
(quin aspiciat oculis), cujussint capilli , ubipam versetur nunc perso
na ad quam pertinent, quid rerum agat, circaque ejusmorbum omnia
suprà dicta documenta ministrare haud aliter atque si , medicorum
more , corpus ipsa introspiceret.
PAKT. I . CAP. II. 145
» Postremò magnetisata non oculis cernit, ipsis velatis , quidquid
erit , illud leget legendi nescia , seu librum seu manuscriptum , vel
apertum , vel clausum , suo capiti vel ventri impositum . Etiam ex hâc
regione ejus verba egredi videntur. Hoc autem statu educta , vel ad
jussum etiam interdum magnetisantis , vel quasi sponte suà , ipso tem - :
poris puncto à se prænuntiato , nihil omninò de rebus in paroxysmo,
peractis sibi conscire videtur, quantumvis ille duraverit : quænam ab
ipsâ petita fuerint, quæ verò responderit , quæ pertulerit ; hæc omnia
nullam in ejus intellectu ideam , nec minimum in memoriâ vestigiumi
reliquerunt.
» Itaque orator 'infrà scriptus , tam validas cernens rationes dubi
landi an simpliciter naturales sint tales effectus , quorum occasionális
tam parùm cum eis proportionata demonstratur enixè vehementissi
mèque vestram Eminentiam rogat ut ipsa , pro suâ sapientiâ , ad ma- -
jorem Omnipotentis gloriam , nec non ad majus animarum bonum ,
quæ à Domino redemptæ tanti constiterunt , decernere velit an , positâ
præfatorum veritate , confessarjus parochusve tutò possit pænitentibus
aut parochianis suis permittere , .
» 1.° Utmagnetismum animalem illis characteribus aliisque simili
bus prædictum exerceant, tanquàm artem medicinæ auxiliatricem al
que suppletoriam .
» 2 .° Utsese illum in statum somnambulismimagnetici demittendos
consentiant.
» 3 .° Ut vel de se vel de aliis personas consulant illo modo magne
tisatas.
»4 .° Ut unum de tribus prædictis suscipiant habitâ priùs cautelâ
formaliter ex animo renuntiandi cuilibet diabolico pacto explicito vel
implicito , omni etiam satanicæ interventioni, quoniam , hâc non obs
tante cautione , à nonnullis ex magnetismo hujusmodi vel iidem vel
aliquot effectus obtenti jam fuerunt.
»Eminentissime D . D . , Eminentiæ vestræ , de mandato reverendis
simi episcopi lausanensis et genevensis, humillimus obsequentissimus
que servus.
» JAC. XAVERIUS FONTANA ,
can, cancell. ep
„Friburgi Helvetiæ , ex ædibus episcopalibus , die 19 maii 1841'»
146 MOECHTALOGIA .

Respuesta dela sagrada Penitenciaria , dada en 1.° de julio de 1844.


« Sacra Pænitentiaria , maturè perpensis expositis , respondendum
· censet prout respondet : Usum magnetismi, prout in casu exponitur,
non licere.
» Datum Romæ , in S . Pænitentiaria , die 1 julii 1841:
C . Card. CastraCANE , M . P .
» P . H . POMELLA , S. P., Secretarius.)
He aquí lo que dice , con motivo de esta consulta , Mons. Gousset,
arzobispo de Reims:
«No pareciéndome absoluta esta respuesta , en 1842 creídeber con
sultar á la Santa Sede sobre la misma cuestion , preguntando si , se
positis rei abusibus rejectoque omni cum dæmone fædere, era lícito
ejercer el magnetismo animal ó valerse de él , considerándolo como
un remedio que se cree útil para la salud . Esta consulta no ha tenido
hasta ahora otro resultado que la carta siguiente , que su Eminencia
el cardenal de Castracane , gran penitenciario , se dignó escribirnos
en francés , con fecha 2 de setiembre de 1843.

» MONSEÑOR :

» He sabido , por Mons. de Brimont, que vuestra Grandeza está es


» perando demíuna carta en que le diga sila santa Inquisicion ha de
» cidido la cuestion del magnetismo.
» Ruégoos, Monseñor , que observeis que la cuestion no es de aque
» llas que pueden decidirse de pronto , si llega á serlo , porque no se
» corre ningun riesgo en diferir su decision , y por otra parte una de
»cision prematura podria comprometer el honor de la Santa Sede ;
» que mientras ha sido cuestion del magnetismo y de su aplicacion à
» algunos casos particulares , la Santa Sede no ha titubeado en pro
»nunciarse , como se ha podido ver en las respuestas que se han he
» cho públicas por medio de los periódicos .
»Mas ahora no se trata de saber si, en tal ó cual caso , puede
»ser lícito el magnetismo; sino que se examine en general si el uso
» del magnetismo puede estar de acuerdo con la fe y las buenas cos
» tumbres.
» La importancia de esta cuestion no puede escapar ni á vuestra sa
» gacidad ni á vuestros vastos conocimientos.
PAKT. I. CAP. 11.
»Os agradezco , Monseñor, el haberme dado esta ocasion para reno
» varos la seguridad , etc.
» El cardenal CASTRACANE.)
La respuesta de la sagrada Penitenciaría á M . Fontana no puede ser
mas sabia ; pues es cierto que , si los hechos eran tales como se refe
rian en la esposicion , la práctica del magnetismo seria muy ilícita .
En cuanto á mí, que estoy persuadido de que los hechos enunciados
en el relato no son tales , digo , no prout exponitur , non licere , sed
prout exponitur, non esse .
Muchas son las razones que tenemos para usar ese lenguaje , y en -
tre otras la de un hecho curioso que se hallará en nuestro Ensayo so
bre la Teologia moral , 4.a edicion , y en la 3.a edicion de nuestros
Pensamientos de un Creyente católico , que por demasiado largo no lo
continuamos aqui. Era uno que se titulaba profesor de magnetismo
de París , quien vido á verme hará cosa de dos ó tres años , con un
sonámbulo , segun él , á toda prueba. Tenia el designio de imponerme
la creencia de sus sueños y locuras. Ante todo le predije que saldria
mal con su procedimiento insensato , del que no alcanzaria otra vic
toria que un completo desengaño , lo que en efecto sucedió a la prime
ra prueba ; porque el pobre sonámbulo no pudo leer, ni con los ojos
vendados , ni por la frente , ni por el occipucio , ni por el epigastrio
ó el estómago ; en una palabra , todo su cuerpo estaba tenebroso , y el
eclipse era total.
Tambien es muy sabia la respuesta que da el cardenal Castracane á
Mons. Gousset ; porque , en el sentido de la consulta tal como debió
entenderla el cardenal ,la cuestion tardará mucho tiempo a quedar re
suelta . En el sentido que yo la entiendo, lo será cuando se quiera , ó '
mas bien en cuanto á mí lo está ya hace mucho tiempo ipso facto.
En la consulta de Mons.Gousset parece que se desecha toda inter
vencion sobrenatural , esto es , diabólica , rejectoque omni cum dæmone
fædere; pero entonces por qué recurrir á Roma ? Mas bien era necesa
rio , en nuestro concepto , dirigirse á la ciencia , es decir, á los médi
cos , que vienen á ser en tales casos los únicos jueces competentes en
la materia . Por esto hemos dicho que la cuestion no se decidiria muy
pronto, porque se consulta siempre á la sagrada Penitenciaria ; lo que
supone que se ve en el magnetismo alguna cosa de sobrenatural, á
pesar de baber tomado la precaucion de decir , rejecto omni cum de
mone fædere.
Parece que en el dia (1846) se ha agitado denuevo entre el clero la
cuestion del magnetismo, sobre todo desde que apareció en el mundo
148 MOECHTALOGÍA
magnético el libro de M el abate J. B. L . que , seguo ,dicen , ha sido
favorablemente acogido por el clero de Francia .
He aquí , con motivo de esa obra , la respuesta que di últimamente
à un director de gran seminario , que me pedia mi parecer acerca de
dicha publicacion .
" SEÑOR ABATE :

Como me preguntais lo que pienso tocante al valor moral y científi


co del libro de M . el abate J. B. L ., intitulado: ElMagnetismo y el
Sonambulismo ante las corporaciones científicas , la corte de Roma y
los teólogos, os contesto que me faltà tiempo , valor y voluntad de ha
cer ninguna especie de análisis de semejante obra .' . .
Por otra parte debo deciros, ante todo , que és un escrito que no
me inspira bastante confianza para queme ocupe seriamente de él. En
efecto , el autor cita testos que no se encuentran en la fuente indica
da. Por ejemplo , en la pág. 424 , hace decir á S . Agustin , que hay
personas que pueden curar diversas llagas por medio de la mirada , to
cándolas ó soplándolas (solo tactu , afflatu , oculo). Y esto es porque sú
naturaleza , añade él (S. Agustin ) , es diferente de la de los demás
(cæteris dispares). De Civitate Dei , lib . XIV, cap. 24. En ese testo no
hay de exacto y verdadero sino las dos palabras cæteris dispares , lo
que prueba que no hay error de guarismo, ni en la cita del libro , ni
del capítulo Todo lo demás no existe en las diversas ediciones que he
examinado. M . el abate Maupied , que hace un pomposo elogio del li
bro de M . J. B . L . al hacermencion de él en los Anales de la Filoso
fía cristiana (julio 1844 , p. 42) , confiesa sin embargo que tampoco
pudo encontrar el testo de S. Agustin .
Pero admitamos por un instante que S . Agustin hubiese realmente
dicho aquellas estravagancias. Entonces yo diria : 0 la curacion de las
Hagas fué operada súbitamente por la mirada ó el soplo , y en tal caso
ya no hay medios de distinguir esas curaciones repentinas de las cura
ciones milagrosas , y por lo tanto serán miradas como verdaderos mi
lagros ; ó esas curaciones no tuvieron lugar sino de una manera lenta
y sucesiva , es decir, con el tiempo y naturalmente , porque el tiempo
y el reposo son ordinariamente elmejor remedio para curar las lla
gas , aun las mas rebeldes. En cuanto á esto establecemos como á
principio cierto é incontrastable que, por las leyes del organismo de
la economia animal , es manifiesta y fisiológicamente imposible una re
generacion repentina de las carnes (aquíentiendo hablar de las lagas
ó de las úlceras con pérdida de sustancia , porque una simple incision
PART. I. CAP . II . 149
sin pérdida de sustancia puede curarse en veinte y cuatro boras , en
razon de que no hay nada que reparar); porque la nutricion ó la asi -
milacion no puede ser, en el orden natural , sino lenta y sucesiva , lo
mismo que la digestion . Si pudiese verificarse de otra manera , ten
dríamos que la nutricion daria mucho mas de lo que recibió , es decir,
que daria lo que no tiene. Luego una regeneracion súbita de los órga
nos destruidos ó notablemente alterados en su tejido es un hecho con
trario a las leyes de la naturaleza animal, ó una derogacion en el or
ganismo de la economía ; luego es un hecho que procede del orden
sobrenatural , es decir , un verdadero milagro . widge
Así pues, si posible fuese, que S . Agustin hubiese adelantado lo
que M . J. B . L . le pone en boca , habria adelantado un error mani-
fiesto , y esta prueba probaria demasiado para elmagnetismo. com
M . J. B. L . tambien invoca a favor del poder magnético losmila
gros de Vespasiano y de Apolonio de Thyana. « Entonces , dice, Ves
» pasiano hace en medio de la multitud lo que pedian los enfermos, y
» de repente la mano del paralítico recobra su movimiento ordinario, y
vel ciego recibe la luz. » (P . 453.) Ahora bien , lo que el ciego habia
pedido era que Vespasiano le mojase con su saliva las mejillas y los
ojos. En cuanto al paralítico , habia rogado á Vespasiano que le tocase
solamente con el pié. « Sin duda , dice el autor , Vespasiano ignoraba
que posegese la virtud magnética. ) DES EM B ER
« Empero , continua M . J. B . L ., la cura mas maravillosa fué la de
» una joven que llevaban á enterrar, á la que Apolonio llamó de nuevo
» á la vida : era en el momento mismo en que ella iba a casarse , y las
» fiestas del himeneo acababan de trocarse en funerales. Apolonio ba
oce detener el cortejo fúnebre , toca á la jóven , inclínase sobre ella ,
»como si le dijese quedo alguna cosa , y la muchacha vaelve en si,
» levántase , habla , y vuelve curada á la casa paterna.
» Aquí no puede suponerse una escena concertada ; porque aquella
» jóven pertenecia á una familia rica , y sus padres quisieron dar en
»muestra de agradecimiento 15 ,000 dracmas á Apolonio , que él re
» husó . Aquella curacion tuvo lugar públicamente, en medio del cortejo
» y del pueblo. Apolonio no hizo mas que tocar á la enferma y sin duda
» dirigió su soplo sobre su cabeza , lo que hizo creer que la hablaba en
» Voz baja .
» Supérfluo es el decir queno creo que aquella jóven estuviese real
»mente muerta, sino que parecia tal por hallarse aletargada ó asfi
» xiada. » (P . 459.)
Mucho dudo que los magnetizadores de nuestros dias, sin esceptuar
al mismo M . J. B. L ., puedan hacer semejantes esfuerzos , y sean tan
GIA
180 MOECHIALO .
atrevidos como Apolonio para ir á hacer levantar de repente un difun- ·
to que van á enterrar con solo tocarle , soplándole en la cabeza ó ha - -
blándole quedito; porque en fin Apolonio debió creer que aquella jóven
estaba verdaderamente muerta , puesto que se asegura que no fué una
escena convenida.
¿ Acaso vemos en el dia muchos magnetizadores que hagan recobrar .
la vista á los ciegos y el movimiento a los paralíticos, no a la sombra ,
sino , como Vespasiano , en medio de la multitud ? à sæculo non est au
ditum ! Dignense esos señores hacerdos esos pequeñosmilagros y cree
remos en ellos : Secluso tamen omni dolo , sive humano , sive diabolico .
Porque finalmente es regular que al menos algunos de ellos deben te
ner la virtad magnética como Vespasiano y en el mismo grado que
Vespasiano, con la ventaja de que no la ignoran como él. Lo repito ,
que devuelvan de repente la vista á los ciegos mojándoles los ojos con
su saliva ; que curen tambien súbitamente a los paralíticos dignándo
se tocarles con el pié , como Vespasiano ; que hagan además , como
Apolonio , que vuelva å pié á su casa algun nuevo habitante del Pere
La-Chaise ó del Monte -Parnaso (y siempre salvo todo dolo ) , y al
momento nos convertimos almagnetismo, y aceptamos los principios
y la doctrina de los magnetizadores , sin restriccion ni reserva algu
na. Pero si no operan esas curaciones como Vespasiano y Apolonio , y .
no hacen mas que esplotar en su provecho la influencia moral, retiren
se y vuelvan á la sombra para ceder el sitio á losmédicos, que harán
la medicina moral de una manera mas conveniente , mas regular, mas
concienzuda , mas decente y mas moral.
Admitiendo seriamente los hechos maravillosos de que acabamos de
hablar, digo : 0 aquellas curaciones son naturales ó sobrenaturales.
Si son naturales, ¿ cómo se las distinguirá de las sobrenaturales ? El
modo operatorio ó la forma esterior y la instantaneidad de la curacion
son , en ambos casos, absolutamente idénticos. Si el poder humano
alcanza á tanto , ya no habrá medio de reconocer los milagros verda
deros, y por consiguiente dejará de haber criterium , hasta para la
autoridad que el autor invoca en la especie ; fuerza es pues concluir
que el poder humano ó magnético no puede operar semejantes prodi
gios. De otra suerte el órden natural podria fatalmente ser confundi
do con el órden sobrenatural , lo que es inadmisible ; y los incrédu
los se creerian con derecho de negar todos losmilagros. Esta es la con
secuencia inevitable de esas peligrosas teorías magnéticas.
Ahora , si aquellas curaciones son sobrenaturales y verdaderamente
milagrosas, ¿ en nombre de quién y por qué motivo se verificaron ? Los
que hicieron aquellos milagros eran paganos : aquellos paganos , por
PART. I. CAP . II . 151
lo menos Apolonio , eran filósofos, es decir, unos hombres que estable
cen y profesan opiniones humanas, y que se dan unamision ó de doc
trina ó de religion completamente fuera del cristianismo. Como ellos
apoyan su doctrina ó su mision en los milagros , seguiráse de ahí que
los milagros podrán autorizar y acreditar falsas doctrinas , y que por
consiguiente ya no bastarán en adelante para probar una doctrina 6
una mision verdaderamente divina. Luego es preciso concluir que
aquellas curaciones no eran sobrenaturales, esto es , verdaderos mila
gros. ¿ Qué eran pues ? El resultado necesario del artificio humano ó
del artificio diabólico . Si el artificio era humano , nada prueba ; si era
diabólico , prueba demasiado. Para elpartit fille
Finalmente , señor abate , ¿cómo quereis que yo crea en la ciencia
magnética de M . J. B . L ., cuando le veo afirmar con imperturbable
sangre fria que él magnetiza á algunas leguas de distancia ? Ved aqui
en lo que funda su estraño aserto. El solia magnetizar cada dia á una
señora muy cristiana , tal es su espresion . Esta persona no ofrecia otro
fenómeno que el sonambulismo, es decir, que ella tenia de costumbre
el hacer todos los dias su pequeña siesta magnética. Nada mas natural.
Un dia M . J. B. L. hace un viaje a algunas leguas de París , y no
queriendo dejar sin magnetizar aquel dia a su sonámbula , le dice que
á medio dia se coloque en su sillon acostumbrado, y que se abstenga
de toda ocupacion . Dicho y hecho. De su lado el hábil magnetizador
se representó , como él dice, la persona como presente , y se ocupó de ella ,
pero con tiento , para prevenir cualquier accidente . Tales son sus pro
pias palabras. En fin continua así: «Cuando juzgué que era menester
» terminar ( la magnetizacion ) , quise que el estado sonambulico , en
»caso de haber habido sonambulismo (1) , cesase segun de costumbre...
» Miré mi reloj, y era la una.) (P. 232.) En una palabra la señora
magnetizada á tuerto ó á derecho durmió aquel dia como tenia de cos
tumbre , y despertó a la una. Helo ahí todo.
Dejo á vuestra sagacidad , señor abate , la apreciacion del valor de
ese milagro magnético , y la conclusion de esta carta demasiado larga .
Una vez que nos hallamos en el capítulo del magnetismo, debo aña
dir á manera de post - scriptum que hace algunos dias me vino entre
manos un pequeño impreso intitulado: Asociacion de oraciones.
Entre otras cosas estrañas que contiene dicha pieza , léese lo que si
gue : « Estas oraciones tendrán por resultado atraer las bendiciones
» del buen Dios, 1 .º sobre el estudio , 2.° la práctica , 3 .° la propagacion
» delmagnetismo á punto de vista católico. 1.° El estudio...Pedir la luz
(1) Duda de precaucion que no es inútil en el asunto .
21
152 MOECHIALOGIA .
»para los que estudian . 2 .° La práctica ... Pedir la gracia de moralidad
» para los que practican. 3 .° La propagacion... Pedir la ortodoxia para
ulos que enseñan y escriben .»
Recomiéndase espresamente que no se dé al billete místico ninguna
especie de publicidad. Esta es la espresion. Finalmente , en el post
scriptum que termina el impreso , se dice que hay un crecido núme
ro de eclesiásticos y de laicos piadosos que se interesan ya en esta
obra...
Al ver esas cosas nuevas, singulares , incalificables, en que se invo
ca las oraciones de la Iglesia (un Ave Maria todos los dias para la
propagacion del magnetismo) ('), se pregunta uno , 1.º si no hay toda
vía bastantes charlatanes para esplotar la credulidad y la supersticion
de cierta gente ; 2 .0 xcómo es que esta obra, como se me ha asegurado,
emana de ciertos sacerdotes algo escéntricos , cuyo objeto declarado es
hacer rogar para el adelanto de la obra de los farsantes y comediantes
del magnetismo, y quizá tambien en provecho de alguna junta mística
y misteriosa ? 3.° e por qué en fin ciertos otros eclesiásticos han sido
bastante mal inspirados para asociarse á tal pensamiento , á tal con
cepcion ?
Con mucha razon pues me escribió , hace algun tiempo, un dis
tinguido miembro de la Academia de medicina : Es ciertamente deplo
rable , decia , el ver que el clero se deja gobernar por charlatanes (Ⓡ).
(Hablaba del magnetismo y de los magnetizadores.)
Algunas palabras sobre otro libro de M . el abate J. B . L . , intitulado : Defensa
teológica delmagnetismo humano , o ¿ El magnetismo es supersticion ó magia ?
¿ Es acaso condenado en Roma ? ¿ Tienen segura la conciencia los magnetizado
res y los sonámbulos? ¿ Pueden ser admitidos á participar de los sacramen .
tos ? (1846 )

Admitiendo la realidad de una modificacion favorable de la economía


ó del estado del sistema nervioso de un enfermo cualquiera , operada
por medio del flúido electro-nervioso ó electro-magnético , puesto en
juego por la magnetizacion ó la sonambulizacion magnética , ó tal vez
igualmente determinada por la influencia moral ó por un poder de do
minacion en cierto modo prestigioso , no veríamos en todas esas opera
ciones consideradas en sí mismas nada de ilícito ó de inmoral , porque
(1 ) Esto no podria ser sin duda sino para elmagnetismo considerado como
rama de la medicina , suponiendo con todo que con el tiempo pueda existir el
magnetismo bajo ese concepto. Pero para la propagacion de la niedicina mis
ma se hacen asociaciones de plegarias, siendo así que el arte de curar no ha
llegado por cierto todavía á su mas alto grado deperfeccion y de propagacion ?
(2) Bs preciso entender tan solo algunos miembros del clero.
PART. I. CAP. 11. 153
no vendrian á ser mas que una especie de terapéutica ó una simple
medicacion moral. Empero las condiciones sentadas por M . J. B . L . no
podríamos aceptarlas como suficientes a la moralidad de la operacion.
El autor propone , á la verdad , que un hombre magnetizará á un
hombre , que una mujer magnetizará á una persona de su sexo , y has
ta llega á pedir la intervencion de una tercera persona o de un testi
go . Sin duda eso es bueno y laudable en sí y en la práctica ordinaria ;
pero la identidad del sexo , en nuestro concepto , no da suficiente ga
rantía de moralidad ; seria menester añadir la identidad de la edad ,
es decir , que para sopámbulos ó sugetos de esperimentos magnéticos
siempre deberian escogerse personasde edad, cuando menos de treinta
á cuarenta años, y jamás jóvenes del uno ó del otro sexo , como de
quince á veinte años. Pero no se hace asi : los sonámbulos son casi
siempre muchachas o mas rara vez muchachos. Recuérdese , ó aprén
dase si se ignora , quemuchas veces hay casi tanto peligro moral en
magnetizar á mancebos como á doncellas , y que con frecuencia es tan
peligrosa la edad como el sexo mismo. Todos los confesores y direc
tores de conciencia que tengan esperiencia sabrán apreciar como con
viene el valor moral de esta observacion . ? ?
En un capítulo cuando menos muy singular (es el 17, p . 219) dice
el autor que uu sopámbulo puede recibir la absolucion de las faltas
gravesque hubiese cometido en el estado de sonambulismo magnético,
tanto si se acuerda como no de lo que le pasó . En ese estado , añade ,
el individuo conserva su libertad , su advertencia , etc. (p. 221); ade
más de esto , anda , bebe , come , habla , conversa familiarmente
(p . 196). ¿ Pues entonces, pregunto yo , en qué se diferenciara ese es--
tado de sonambulismo magnético del estado de vigilia ordinario y
fisiológico , sobre todo en el caso en que el sonámbulo conserve al des
pertarse el recuerdo de lo que dijo é hizo durante su estado magoéti -
co ? Como hemos visto mas arriba ; M . J. B . L . nos asegura que se
mejante estado puede existir. . Bir
Aun podríamos hacer algunas otras observaciones tocante á este úl
timo folleto , pero eso nos conduciria demasiado lejos y nos baria pe
netrar en el dominio de lo maravilloso , que es precisamente lo que
queremos evitar. Ya dijimos , al principiar este artículo , que no po
demos admitir la realidad intrínseca y positiva de los hechos estrafi
siológicos de que están atestadas las obras de M . J. B . L ., y en ge
neral de todos los autores que han escrito sobre el magnetismo ; por
que semejantes hechos son el producto de un órden de facultades
que se hallan enteramente fuera de las leyes psico- fisiológicas cono
cidas. Estas maravillosas facultades de que están dotados , segun di
154 MOECHIALOGÍA .
cen , los sonámbulos magnéticos lúcidos producen , al decir de los
magnetizadores , los efectos siguientes : la transposicion de los senti
dos , la vista sin auxilio de los ojos y sin luz por la frente, el occipu
cio , el epigastrio , la yema de los dedos, etc .; la comunicacion de los
pensamientos sin ninguna especie de señales , el presentimiento , la
presen sacion , la prevision , la profetizacion , la adivinacion , la re
trospeccion , el conocimiento intuitivo ó la vista de los pensamientos
intimos de las personas presentes y ausentes, del interior del cuerpo
de los enfermos , la determinacion de la naturaleza , asiento y mé
todo curativo de varias enfermedades, etc . Credat Judæus Apella ,
non ego.
Finalmente vamos a terminar con una cita muy poco lisonjera para
los cuerpos científicos. He aquí lo que dice el autor en la página 223 :
« En el dia tan solo los hombres de ideas muy atrasadas ó del todo
vestrañas á la ciencia y á toda reflexion séria son los que osan re
» petir que en el magnetismo y en el sonambulismo lúcido no hay mas
» que charlatanisino y trubanería... Esos hombres , que parecen per
» tenecer á otra época , tan retrógradas son sus ideas , no obtienen
»muchas veces mas que una sonrisa por única respuesta ; de tal ma
» nera están cambiados los papeles en todas partes. Hoy en dia muchos
o sabios y aun médicos piensan , hablan y escriben de un modo muy
» diferente que ciertos miembros de la Academia real de medicina , sin
» que les dé el menor cuidado el obtener ó no la aprobacion de esta
» ilustre mas no infalible corporacion ('), que , á ejemplo de sus her
»manas , jamás ha sancionado verdades nuevas sino cuando han lle
» gado á hacerse vulgares , universales y antiguas para todos , menos
>>para ella misma.
Salvo el respeto al aserto tan positivo de M . el abate J. B. L ., el
magnetismo, á ejemplo de su hermana la frenologia , no seria de es
trañar que tambien sufriese la misma suerte que esta , puesto que no
parece estar dotada de mayor facultad de vivir que ella .
Si el magnetismo es una ciencia tan verdadera y tan cierta , por
qué es rechazado por todas las corporaciones científicas de Europa , y
particularmente por las Academias de las ciencias y de medicina de
París y por todas las Sociedades de medicina de Francia ? ¿ Por qué los
magnetizadores, en sus grandes esperimentos, sus esperimentos deci
sivos , han dado al través delante de todas las comisiones científicas ?
Y no debia ser de otra manera. El magnetismo tiene el temperamento
y la mirada demasiado débiles para poder soportar la influencia y el
(1) He abipues ahora que los cierlos miembros de la Academia forman toda
la Academia .
PART. I. CAP. II. 155
deslumbrante resplandor del sol ; no vive á su comodidad sino á la
sombra y en una atmósfera espesa y nebulosa , es decir , magnética
mente hablando, en el ambiente en que viven la gente mundana y el
vulgo . Finalmente ¿ cómo es que Roma , que por cierto no es enemiga
de las ciencias humanas , no aprueba el magnetismo? ¿ Qué digo ?
Antes lo condena que lo acoge favorablemente ; á lo menos hasta el
presente siempre ha contestado á todas las consultas que se le han di
rigido con non licet prout exponitur .
Inútil es decir ahora que los verdaderos sabios y la inmensa mayo
ria de los médicos se consolarán fácilmente de las urbanidades magné .
ticas de M .J. B. L. ; en órden al magnetismo piensan como todas las
corporaciones científicas de Francia y como la corte de Roma; y si
padecen engaño alguna vez , será á lo menos en bastante buena com
pañía .
ARTICULO IX .

ALGUNAS PALABRAS SOBRE LA MANERA DE INTERROGAR Á LOS PENITENTES


ACERCA DEL SESTO MANDAMIENTO .

En esta materia delicada y lúbrica , el confesor debe servirse en


sus preguntas de palabras honestas y castas, teniendo cuidado de no
averiguar mas de lo que es necesario ; porque a veces queriendo des
cubrir elmal se corre ricsgo de enseñarlo a los que lo ignoran , como
dice S . Cárlos en sus lostrucciones sobre el sacramento de la Peni -
tencia .
Sin embargo , como el confesor es médico y juez á un tiempo , es
menester que conozca los pecados de su penitente para aplicar los re
medios convenientes á sus males , dar los consejos que son necesarios
para procurar la curacion de su alma , é imponerle una penitencia
proporcionada a la gravedad de sus faltas : por consiguiente , si los
penitentes no descubren sus pecados , el confesor debe preguntarles,
sobre todo cuando le parecen ignorantes y groseros , ó cuando les ve
tímidos, vergonzosos , turbados y embarazados, y todo eso sucedemuy
á menudo en esta dificil y vergonzosa materia . Es pues preciso en ta
les casos acudir á su socorro y ayudarles con paciencia , prudencia y
caridad .
Al hacer estas interrogaciones hay que evitar dos estremos, á saber,
el ser demasiado delicado y poco exacto , ó demasiado curioso. Ha ha
bido personas que pasaron toda su vida encenagados en pecados de
impureza que habian cometido en su temprana edad , de que no se
156 MOECA IALOGÍA .
confesaron hasta el artículo de la muerte , porque los confesores ha
bian descuidado por delicadeza de conciencia el hacerles preguntas
tocante al sesto mandamiento .Gerson , en el tratado de Arte audiendi
confessiones , dice que él lo conoció por esperiencia .
La ignorancia en que algunos dicen haber estado de que las accio
nes deshonestas que cometian en su tierna edad fuesen criminales no
es un pretesto suficiente para que los confesores dejen de interrogar a
los penitentes sobre dichos pecados, y para disimulárselos;no es presu
mible que ignorasen elmalsin haber habido negligencia de su parte en
hacerse instruir suficientemente . Debieron por lo menos sospechar que
los actos que hacian eran malos, puesto que se ocultaban para hacer
los, y se llenaban de vergüenza y confusion cuando eran descubiertos ,
lo que debia bastar para que comprendiesen que eran cosasmalas , y
que les hacian culpables.
La demasiada curiosidad de ciertos confesores , además de que
ofende los oidos castos de los penitentes, es capaz de perder a los jó
venes de uno y otro sexo . Algunos ha habido que , despues de haber
sido imprudentemente interrogados tocante al sesto mandamiento , en
sayaron hacer aquello que por indiscrecion les habia enseñado su con
fesor.
· Cuando un confesor prudente interrogue á un penitente sobre el ses
to mandamiento no empezará primero por las acciones, y aun menos le
designará alguna en particular ; sino que le preguntará en términos
generales acerca de los pecados mas comunes y que pocas personas ig
noran : le preguntará si ha tenido pensamientos deshonestos , y si es
perimentó movimientos ó placeres carnales. Si el penitente responde
que no , el confesor debe detenerse ahí por lo comun , á menos que el
penitente sea muy ignorante ó sumamente grosero . Si por el contrario
el penitente dice haber tenido pensamientos deshonestos ó haber espe
rimentado placeres carnales , el confesor le preguntará si esos pensa
mientos ó esos placeres le movieron á cometer alguna accion desho
nesta ; si confesase haber cometido alguna , el confesor, sin especificar
-ninguna , le preguntará cual fué semejante accion , de qué manera y
con quién la hizo .
El confesor debe enterarse de la condicion del penitente y de la de
la persona con quien pecó ; si una ú otra es casada ó ligada por votos
de castidad , ó por algun órden sagrado , si son parientes ó allegados;
porque estas son otras tantas circunstancias que cambian la especie de
pecado como ya hicimos ver anteriormente. El confesor tampoco debe
olvidar el preguntar alpenitente si vive con la persona con quien pecó ,
à fin de no darle la absolucion hasta que estén separados , si la cosa
fuere moralmente posible.
PART. 1. CAP. II. 157
Por lo que toca á la ocasion próxima de pecar mortalmente , todos
los teólogos convienen en que no es lícito esponerse á ella voluntaria
mente , ni á permanecer en el estado que se ha reconocido ser una
ocasion próxima de pecar , ya porque ese estado ó esa circunstancia
induce á ello por sí misma, ó porque el que se halla en tal estado , es
tanta la costumbre que tiene de pecar que con dificultad ó casi nunca
se abstiene de hacerlo. Si la esposicion es voluntaria , ó el penitente
permanece en ese estado pudiendo evitarlo , se considerará que con
siente suficientemente y sehace reo del pecado á que naturalmente in
duce semejante estado, etc. etc . ( Conférences d 'Angers.) Aquí no po
demos hacer mas que indicar los principios generales. Para mas am
plios detalles véase en Collet un artículo intitulado : De officio confes
sarii in materiâ luxuriæ . Véase además lo que sobre este punto dijimos
en la página 46 , á lo cual añadiremos tan solo algunas palabras que
nos ocurren ahora. No es raro encontrar á penitentes que no se acu
san de ninguna falta contra la castidad , ni aun de simple pensamien
to. En ese caso , si hubiere lugar de creer que hay mas de lo que ellos
dicen , lo que sucede con mucha frecuencia , es preciso , en las pre
guntas que se les hagan , proceder de lo general á lo particular , de
lo menor á lo mayor, de lo mas conocido á lo que lo es menos. Puede
decírseles por ejemplo : ¿ Acaso habeis tenido algunos pensamientos
deshonestos ó contrarios á la castidad ? Sí. Pero si el penitente responde
no, ordinariamente no se pasa mas adelante , como hemos dicho mas
arriba. ¿ Esos pensamientos os ocuparon mucho rato ? ¿ Os detuvisteis
en ellos voluntariamente y con complacencia ? ¿ Sobre qué objeto ver
saban ? No tuvisteis entonces algun mal deseo , dehacer por ejemplo
aquello en que estabais pensando , ya fuese en vos mismo , ó con res
pecto á otra persona ? ¿ Esta persona era delotro sexo ó no , casada ó
no , pariente , allegada , etc. ? ¿ Visteis acaso á esta persona, la ha
blasteis , etc . ? - ¿ Vuestros pensamientos fueron por ventura seguidos
de miradas , de movimientos , de tocamientos deshonestos ? ¿ siguióse
á todo eso algun efecto sensible ? ¿Cuál fué ese efecto ? , fué acaso mo
lesto ? ¿ Os pesó de él, etc. etc. ?
Ad cognoscendum an adolescentes plùs minùsve puberes usque ad
pollutionem se tetigerint , quin , feliciter mali nescii , illud suspicen
tur vel addiscant, quæri potest quanto tempore et quo fine se tetige
rint ; an tunc quosdam motus in corpore experti fuerint , et per quan
tum temporis spatium ; an cessantibus tactibus nihil insolitum et tur
pe acciderit ; an non longè majorem in corpore voluptatem perceperint
in fine tactuum quàm in eorum principio ; an tunc, in fine quandò mag
nam delectationem carnalem senserunt , omnes motus corporis cum
168 MOECATALOGÍA .
tactibus cessaverint; an non madefacti fuerint, etc ., etc . Quærendum
est à puellis quæ sese tetigisse fatenturan non aliquem pruritum extia
guere tentaverint, et utrùm pruritus ille cessaverit cùm magnam sen
serint voluptatem ; an tunc ipsimet tactus cessaverint, etc .
De otro lado, á veceshay penitentes que solo se acusan de las fal
tas mas graves sin hablar de las que son mas leves. En tal caso , es
menester seguir un proceder opuesto, es decir, que debe preguntárse
les empezando por lo mayor y siguiendo por lo menor , porque ellos
prescinden de los pensamientos deshonestos voluntarios, de las .mira
das obscenas igualmente culpables , que son sin embargo otros tantos
pecados distintos que es necesario hacer declarar en confesion . It is the last
Terminaremos citando un pasaje muy notable estractado del libro
de Mons. Bouvier, cuya gravísima importancia hicimos ya vislumbrar
en nuestro Ensayo sobre la Teologia moral. Dice así : « Summopere
etiam caveant jupiores confessarii ne puellæ aliæque mulieres sensi
bili modo sibi adhæreant, quod frequenter in ruinam animarum et
in religionis detrimentum accidit : ubi prima inordinatæ hujus affec
tionis specimina advertunt, asperis verbis eas repellere non timeant,
et si hoc non sufficiat, ad alios confessarios eas statim remittant ; alio
quin incauti eas perdent et cum eis peribunt.
»Per gloriam Dei æternamque eorum salutem , cunctos adjuramus,
clericos ut , conciliorum statutis semper obtemperantes , juniores mu
lieres apud se nunquàm detineant, eas non visitent, cum eis familia
riter non loquantur, » etc . .
PARTE SEGUNDA .
DE LOS DEBERES DE LOS ESPOSOS .

Esta segunda parte se dividirá en dos capítulos : el primero será


los mo; el segundo entes detalles tos dirimentes 20 debemos ocupusa de
consagrado al exámen del impedimento de matrimonio por causa de
impotencia ; pues , es bastante claro que aquí no debemos ocuparnos
de los trece ó catorce impedimentos dirimentes que se hallan espues
tos con los convenientes detalles en los tratados generales del matri -
monio; el segundo capítulo tratará de las obligaciones especiales de

CAPITULO I.
S. I.
Del impedimento de matrimonio por impotencia .
La impotencia es la incapacidad de consumar el matrimonio , id est
habendi copulam quæ per se sufficiat ad generationem (). La impoten
cia es tambien llamada impotentia coeundi, et differt ab impotentiâ ge
nerandi ó de la esterilidad. Por sí solo este último estado , sin impo -
tencia , no puede ser un impedimento almatrimonio.
La impotencia es 1.º anterior ó posterior almatrimonio ; 2 .° perpé
lua ó temporal , es decir, transitoria ; 3.º natural ó accidental ; 4 .0 ab
soluta ó respectiva.
La impotencia anterior es aquella que precede al matrimonio ; la
posterior ó la subsecuente sobreviene despues de contraido el matri
monio . La impotencia perpétua es aquella que jamás puede destruirse
(1) Preferimos esta definicion a la de los teólogos , que no es rigorosamente
exacta , como va á verse por la respuesta que dí á un teólogo que queria sos
tenerme que el acto conyugal era lícito en todos los casos de esterilidad cual
quiera , modò fiat penetratio cum seminatione intra vas (esta es la definicion de
los teólogos). Pero luego veremos que , en la mujer , puede encontrarse una
causa de impotencia latente la falta completa del útero ) fisicamente justifica
ble à priori, en que el coito seria muy posible y muy conforme a la definicion
ahora mismo espuesta , penetratio et seminatio intra vas ; y sin embargo aquel
acto conyugal , muy normal al parecer , puesto que existe la vagina (vas mulie
bre) , seria un acto necesariamente estéril , puesto que habria impotencia ab
soluta y perpétua , y por consiguiente esterilidad necesaria y eterna .
22
160 MOECHIALOGIA .
valiéndose de medios lícitos ; la temporal por el contrario puede ceder
empleando algun remedio conveniente , ya sea físico , ya moral. La
impotencia natural proviene de un vicio corporal congenital ú orgáni
co cualquiera ; la impotencia accidental depende de una causa extra
corporal física , ó de una causa puramente moral. La impotencia ab
soluta es la que tiene lugar con respecto a todas las personas; la im
potencia respectiva no existe sino para una persona determinada.
Examinemos ahora esas varias causas, y entremos en algunos de -
talles .
Toda impotencia antecedente y perpétua , sea natural , sea acciden
tal , sea absoluta , sea respectiva, es un impedimento dirimente del
matrimonio . Es tambien la única que puede admitirse . Así, segun eso ,
si se contrajo un matrimonio con un impedimento de semejante natu
raleza , es por lo mismo nulo , porque no puede llenarse el objeto de
la union conyugal. Nadie puede obligarse á hacer lo que no puede ;
por consiguiente el tal matrimonio debe romperse . Este es un punto
no solamente de derecho positivo ó eclesiástico , sí que tambien de
derecho natural. Si la impotencia perpétua es al mismo tiempo abso
luta , la parte que la ofrece no puede contraer nuevo matrimonio ; si
por el contrario la impotencia perpétua no es mas que respectiva , y
el hombre que la sufre es juzgado por los médicos como capaz de con
sumar el acto conyugal con una viuda , cuando no puede con una
doncella , como dice el redactor de las Conférences d 'Angers et de
Paris , el juez eclesiástico rompe el matrimonio contraido con la don
cella . Mas es preciso hacer observar que este aserto del redactor es
inexacto ó por lo menos muy vago. Aquí la impotencia respectiva no
tiene lugar en concepto del redactor sino por un vicio de angustia ó
de coartacion (arctitudine). Pero este mismo vicio tambien puede fácil
mente encontrarse en una viuda que no haya tenido hijos : luego era
necesario añadir á lo menos la circunstancia contraria , y no permitir
la union sino con una viuda quehubiese parido normalmente , esto es,
á término. En este momento no puede hacerse una perfecta y exacta
apreciacion del valor ó del alcance de este lenguaje fisiológico ; pero
se hará mas adelante , en tiempo y lugar convenientes. Entretanto ,
por lo que hace á las distinciones , sigamos á los teólogos.
Empero antes de ir mas lėjos , haremos la esposicion de los princi
pales vicios orgánicos que constituyen causas de impotencia perpétua
y absoluta .
PART. II. CAP. I. 161

Impotencia perpétua y temporal , natural y accidental en el hombre.


No hay mas que tres causas que produzcan necesaria y evidente
mente la impotencia perpétua en el hombre ; que son 1 .° la falta
complela y absoluta del pene , ita ut non quidem remaneat parvula
membri virilis extrema pars quæ possit tantùm in exteriores mulieris
partes genitales semen inferrè, puesto que se citan bastante número
de casos en que pudo efectuarse la fecundacion con oclusion vaginal
casi completa , y en que por consiguiente era casi imposible el coito
normal (véase nuestro.Compendio de Fisiologia y nuestro Ensayo so
bre la Teologia moral) ; 2 .° la extrofía de la vejiga , que es el vicio
de conformacion en que la vejiga se presenta al esterior un poco mas
arriba del pubis , y muestra dos pequeños orificios que son las estre
midades de las ureteras ; el pene en tales casos es por lo comun muy
corto é imperforado , ó si ofrece una abertura esta no va a dar á nin
guna cavidad ; 3 .° la falta delos dos testículos , ó lo que viene á ser lo
mismo, su perfecta atrofía ó completa escirrosidad.
Empero , aquí hay que hacer una observacion importante , y es que
la falta de los testículos en el escroto ó en las bolsas no es una prueba
cierta ó suficiente de que no existen ; porque los testículos bajan al
gunas veces bastante tarde al escroto , y á veces tambien permanecen
durante toda la vida en el vientre , ocultos detrás del anillo inguinal,
de lo que hemos visto ejemplos.
Se han observado algunos casos raros en que los testículos faltaban
del todo. Aquellos sugetos no tenian pelo de barba , su voz era aguda
é infantil como la de las mujeres ; tenian los pechos mas desarrolla -
dos de lo que suelen tener los hombres ; en una palabra , toda su orga
nizacion se asemejaba a la del sexo femenino.
« Los castrados, dice Richerand , tienen la laringe y por consiguien
te la voz poco desarrolladas ; son de corta estatura y casi lampiños ; su
musculatura es débil , y en ellos domina el sistema graso. Tanto el
moral como el físico se debilita y parece que tienen comprimidas las
facultades intelectuales y afectivas. Los eunucos tienen pocas pasiones,
ninguna concepcion , y son límidos y estólidos . La castracion ejerce la
misma influencia sobre los animales ; produce la atrofia de los cuer
nos ó los hace salir encorvados, y se opone a su caida y á su regene
racion anual; detiene el desarrollo de la cresta de las gallináceas;
quitales la facultad de cantar, y les engorda estraordinariamente . Por
el contrario los garañones y los toros se distinguen por su vigor é im
petuosidad. La carne de los animales obligados a la continencia des
162 MOECHIALOGIA .
pide un humillo particular, que es tambien bastante desagradable .
» Los escesos amorosos tienen la misma accion debilitante que la
castracion. Con el esperma se agotan a la vez las fuerzas y las facul
tades intelectuales y morales . El esperma, segun espresion de Haller,
es una especie de virus animal que duplica las fuerzas y la inteligen
cia : vitale virus maximè ad sanilatem et robur animæ et corporis con
fert.» Esa degradacion física y moral que se observa en los castrados
no se manifiesta completamente sino en los individuos á quienes se
hizo eunucos en su tierna edad ó antes del desarrollo de la pubertad .
Los adultos que imitan la conducta de Orígenes no sufren ordinaria
mente todas las fatales consecuencias de que acabamos de hablar. Aun
no hace dos años que vi en el mundo á dos individuos adultos que se
mutilaron cruelmente por ese estilo : el uno , como Orígenes, con el
objeto de librarse de las tentaciones de la carne : el otro , lo que es
mucho mas raro , para hacer cesar las poluciones nocturnas, y pre
venir asi con seguridad elmenoscabo y la degradacion de las faculta
des intelectuales de que se veia próximamente amenazado. Sin embar
go , nos parece que esos dos hombres no han esperimentado pingun
cambio funesto , tanto en el físico como en el moral, y aun el último,
libre de sus poluciones , parece haber alcanzado completamente su ob
jeto ; resultado que es preciso atribuir no á la misma castracion , sino
al haber cesado las poluciones ó las pérdidas espermáticas.
En un viaje que hice al mediodía hará cosa de dos años , un mé
dico muy digno de fe me comunicó un hecho bastante estraordinario .
Un matrimonio no habia tenido hijosdespues de diez años de realizado.
Fastidiado el marido , no de aquella aparente esterilidad , sino de lo
que probablemente la determinaba , resuelve emplear un remedio que
cree decisivo , y en efecto debia serlo necesariamente. Con una nava
ja de afeitar se hace la doble castracion. Al cabo de un mes , curado
ya de su enorme castracion , entrégase sin reparo ni temor al uso del
matrimonio , y pasados nueve meses, es decir , diez meses despues de
la terrible operacion , su mujer, con grande asombro suyo , da á luz
un niño lleno de vida y de salud. Esta aventura singular, como es de
creer, no dejó de ocupar la crónica escandalosa del país , y de escitar
el natural chancero y sarcástico de los que conocian la historia del
marido ; porque este se habia jactado públicamente de no poder ya
procrear en adelante . (Todo eso no causa admiracion a las personas
que conocen un poco las costumbres de los aldeanos.) Pero ahora ¿qué
será de la mujer ante el tribunal de la opinion pública ? Muchos sin
duda la creerán culpable y quizás tambien algunos eclesiásticos pen -
sarán otro tanto ; será , pues , necesario que aquí intervenga la ciencia
PART. II. CAP. I. 163
para lavar å la esposa de la sospecha de adulterio. Ahora bien , la
ciencia establece que es muy posible y aun muy probable que la cria -
tura sea fruto de la cohabitacion marital que tuvo lugar uo mes des
pues dehecha la castracion , y que este último acto conyugal llegó á
ser fecundo por el esperma que se hallaba en las vesículas seminales
en el momento mismo que se operó la castracion. Cuenta Richerand
que habiéndose quitado los dos testículos á unos animales , «conserva
ron durante algun tiempo la facultad de engendrar: Es preciso notar
que esto no puede tener lugar en los perros, porque se hallan priva
dos de vesículas seminales ; así es que permanecen largo rato acopla
dos á fin de favorecer la preparacion del flúido espermático , que no se
opera en ellos sino en el mismo instante de la copula . Volvamos otra
vez alasunto .
Con independencia de aquellas tres causas perpétuas de impotencia ,
ja naturales, ya accidentales, de que hemos hablado , hay otras que
no determinan esa incapacidad absoluta , manifiesta é indudable , y
que de consiguiente no pueden ser motivos de nulidad de matrimonio
ó impedimentos dirimentes.
En el dia queda demostrado por una multitud de hechos que los
hypospados y los epispados, es decir , aquellos en quienes la uretera
se abre debajo y encima del pene, no son ni impotentes ni estériles,
á menos , sin embargo , que la abertura ureteral se halle escesiva -.
mente retirada bácia atrás, lo que jamás hemos visto : concíbese no
obstante que un accidente podria dar lugar á semejante causa de im
potencia , y esta entonces deberia ser considerada à priori como per
pétua , a no ser que por la esperiencia se probase lo contrario. Elca -
so equivaldria entonces al de la falta completa de pene.
Las descomunales dimensiones orgánicas , sean cuales fueren , no
pueden admitirse como á motivos de impotencia á lo menos perpétua .
Esos inconvenientes desaparecen poco a poco y para siempre valién
dose de los medios y precauciones que indica la ciencia médica y aun
muchas veces el simple buen sentido. Luego tenemos que no son mas
quecausas de impotencia temporal y pasajera .
La bifurcacion , la oblicuidad , la tortuosidad delpene , la estrechez
del canal de la uretera , el fimosis ó la angostura del agujero del pre
pucio , etc ., tampoco deben ser miradas como causas de impotencia
perpétua, puesto que el arte puede casi siempre remediar semejantes
defectos .
La sarcocela , esto es , el escirro de uno de los testículos no puede
ser una causa de impotencia , puesto que basta el otro que subsiste
sano para producir la secrecion espermática. Con todo , si el volúmen
164 MOECHTALOGÍA .
del tumor hubiese llegado al punto de poner obstáculo al coito , ha -
bria en este caso una especie de impotencia temporal que se podria
hacer cesar operando ó sacando el tumor. Si ambos testículos se ha
llasen gravemente afectados, es decir , heridos de un doble escirro ,
este caso entra entonces en el de la falta de esos órganos, porque los
verdaderos escirros no pueden desaparecer sino quitando los testículos .
Las hidrocelas enormes tambien pueden ser un obstáculo temporal
para la union sexual , de lo que no hace mucho vimos un ejemplo ;
pero el arte puede con facilidad quitar semejante obstáculo , sin nece.
sidad de mutilacion alguna.
Las bernias escrotales son á veces bastante voluminosas para cubrir
mas o menos el pene y para hacer impracticable el acto generador ; sin
embargo , siempre se las puede reducir mas o menos, de manera que
no sea imposible el coito . Nos apartaríamos de nuestro objeto si mul
tiplicásemos mas esas citas de causas de impotencia orgánica. Lo que
acabamos de decir bastará para prevenir á los confesores sobre este
punto difícil , invitándoles á que , cuando sea ocasion , consulten á los
hombres del arte , y sobre todo, si fuese posible , en los casos graves,
à los médicos legistas , y casi diria á los medicos canonistas , los Zac
chias modernos, si es que los hay.
Impotencia perpétua y temporal, natural y accidental en la mujer .
Las causas ciertas de impotencia perpétua en la mujer son : 4.0 la
falta de útero , de vagina, la debilitacion natural , congenital y com
pleta de esta última ó su escesiva estrechez dimanada de un vicio de
conformacion de los huesos de la pelvis ; la falta de vagina y aun de
útero es siempre físicamente comprobable à priori. Aquí se puede aña
dir que la obliteracion accidental de la vagina puede considerarse co
mo causa de impotencia perpétua.
Se han visto casos en que el canal vaginal iba á dar á otra cavi.
dad , al recto , por ejemplo , como sucede en las gallináceas. Aun
hay mas : cítanse varios hechos muy bien probados de falta de aber
tura natural esterior (sine vulva), porque la vagina iba á dar al in
testino recto. El célebre Luis , secretario perpétuo de la antigua Aca
demia de cirugía , hace mérito de una observacion de esa naturaleza
en una tesis cuya publicacion prohibió la Sorbona , como á contraria
å las buenas costumbres. Su título era : Deficiente vagina , possuntne
per rectum concipere mulieres ? Otra version dice : An ucore sic dis
posită uti fas sit , vel non , judicent theologi morales. La posibilidad de
semejante concepcion se fundaba en el ejemplo de una mujer que ha
PART. II. CAP. I. 165
bia Hegado a hacerse preñada por aquella via , y que parió una cria
tura , no sin operacion y enormes rasgaduras. Claro está que seinejan
te vicio de conformacion debe siempre considerarse como causa de
impotencia absoluta y perpétua. Una union por ese estilo , aunque no
sea necesariamente estéril , como lo prueban varios hechos desgracia
dos , debe ser constantemente reprobada y aborrecida , porque repug
na muy manifiestamente a las leyes de la moral y de la naturaleza , y
por otra parte espone la vida de la mujer á los mayores peligros.
Tambien lo decidió así el tribunal real de Tréveris en sentencia dada
en 1808 á consecuencia de una visita y de un relato hechos por hom
bres del arte. El tribunal decretó la nulidad de un matrimonio , en
atencion á que el estado físico y la conformacion de la señora N . se
oponian al fin natural y legal del matrimonio , á que ese impedimento
existia ya antes del matrimonio y á que no era posible remediarlo. .
7. Aunque esa decision sea opuesta al tenor y á los términos del ca
pítulo 4 del título del Matrimonio del Código civil , que no contiene
ninguna disposicion espresa relativa á la impotencia , MM . Delvin
court ( Cours du Code civil , t. 1, p . 405 ), y Merlin (Repert. de Juris.
prud. , 4 .a edicion , palabra impotencia , n . 2 ) , la aprobaron por con
siderarla perfectamente fundada en derecho. El primero se apoya en
que el capítulo 4 precitado no encierra esplicitamente todas las cau
sas de nulidad ; y el segundo invoca el artículo 146 del Código civil ,
que dice que, cuando no hay consentimiento , no hay matrimonio ;
ahora bien , segun M . Merlin , deja de haber consentimiento cuando
hay error sobre la calidad de semejante naturaleza . A eso tambien
puede añadirse que el artículo 313 del Código civil enunciado en es
tos términos : « El marido no podrá negar la paternidad , alegando su
impotencia natural...) no escluye el desconocimiento del hijo sino por
impotencia natural; luego aprueba , por lo menos insplicitamente , el
negar la paternidad por impotencia accidental. Esto es lo que en efec
to resulta del artículo 312 del Código : «El hijo concebido durante el
matrimonio tiene por padre al marido. Sin embargo , este podrá negar
la paternidad si llega á probar que , durante el tiempo transcurrido
desde los trescientos dias hasta el centésimo octogesimo antes de pacer
aquella criatura , hallábase , ya sea por causa de ausencia , ya sea
por efecto de algun accidente , en la imposibilidad física de cohabitar
con su mujer.»
¿ No se podria por fin aducir otra razon á favor del decreto del tri
bunal real de Tréveris y de cuantos tribunales civiles que , como la
autoridad eclesiástica , pronunciarán probablemente la nulidad de los
matrimonios en que hay impotencia perpétua , natural , absoluta , in
166 MCCHIALOGIA .
destructible y anterior al matrimonio i Esta razon , seria un error ÉS
TRAÑO en la persona. Si por ejemplo una mujer se hubiese casado con
un individuo mirado hasta entonces como perteneciente al sexo .mas -
culino , pero que en realidad fuese mera mujer como ella , ó por lo
menos , si se quiere, un verdadero eunuco, ¿ podria razonablemente
sostenerse que semejante union deba ser válida , por la razon de que
no deja de ser la misma persona á cuya mano aspiró la primera ó la
contratante ? No , sin duda. Ahora bien , ese caso ha sucedido , y dió
lugar á una sentencia del Parlamento , de "fecha 18 enero de 1765 , en
que se decretó la nulidad del matrimonio de la joven Grand - Jean ,
pretendida hermafrodita , la cual tenia los órganos sexuales femeninos
de tal manera ocultos , mezclados y confundidos con simulacros ú ór
ganos rudimentarios de virilidad que ella misma se creia hombre. La
mujer que se unió con la joven Grand - Jean creyó haberse casado con
un hombre, mientras que en realidad no se había casado sino con una
apariencia ó fantasma de tal.
¿ Por ventura no hay en semejantes casos un doble impedimento
dirimente ? ¿ Si no hay error en la persona , deja de haber por lo me
nos una causa de impotencia natural , perpétua , absoluta y antece
dente , y por cierto completamente decisiva ? Es bien seguro que ,
contra el testo del Código , que no admite causas de impotencia natu
ral , todos los tribunales de Europa imitarán siempre el proceder del
parlamento de 1765.
En cuanto a la estrechez escesiva (arctitudo), á la oclusion y la
obliteracion imperfecta de la vagina, nopuede admitirselas como causa
de impotencia absoluta y perpétua , puesto que es cierto que la fecun
dacion puede tener lugar sin que esté destruida la membrana delbi
men . El célebre Baudelocque cuenta que en unamuchacha que se hizo
embarazada , se observó en el momento de parir , que aun tenia la va
gina cerrada por una membrana espesa con un solo agujero , en tal
manera estrecho que con dificultad se le hubiera podido introducir la
cabeza de un alfiler , de suerte que fué necesario sajarla para termi
nar el parto. Nysten vió una preñez del ovario en una niña de trece
años, no arreglada todavía , cuyos órganos genitales estaban poco
desarrollados , el himen intacto (véase , para esta última circunstan
cia , nuestro Compendio de Fisiologia), y la vagina de tal manera es
trecha que no se le pudo introducir un cañon de pluma, (Diario de
Corvisart y Leroux , brumario , año XI ) - Una señora jóven , casada
á la edad de diez y seis años , ofrecia la misma conformacion : los
hombres del arte habian declarado que el coito era imposible ; sin
embargo , al cabo de once meses de matrimonio , hízose embarazada
PART. II. CAP. I. 167
sin haberse dilatado la vagina , la que no se desarrolló sino hacia el
quinto mes del embarazo . Tenemos pues que la estrechez ó la angostu
ra vaginal no es siempre una causa de impotencia. Por otra parte
puede ser remediada por el arte , como veremos masadelante. .
El trastrueque de la vagina ó del útero , ó su prolapso , la hernia
de, este último órgåno , la direccion viciosa de su cuello , etc ., no pue
den ser causas de impotencia perpétua , puesto que son casos patoló
gicos que el arte 'puede igualmente remediar á lo menos de manera
que llegue á ser posible el coito. .
.. En resumen : las causas de impotencia físicas, perpétuas, absolutas,
indestructibles y confirmables à priori son : la falta completa del pe
ne , la de los dos testículos y la extrofía de la vejiga en el hombre;
la falta de la vagina ó del útero y la obliteracion del canal vaginal en
· la mujer .
De los hermafroditas. ¿ Los bay por ventura ? No, el hermafrodismo
ó la androgivia no existe en la especie humana, ni tampoco en los
mamíferos , las aves , los reptiles , los peces, los gusanos y los insec
tos ; no se encuentra mas que en diversos moluscos , tales como la os
tra y el caracol-, en los zoofitos y en las plantasmonoicas.
Los varios casos de pretendido hermafrodismo no son mas que mons
truosidades ó vicios de organizacion que por lo mas comun dimanan
de una detencion en el desarrollo natural de los órganos ó de una
aberracion nutritiva durante la época de la vida intra -uterina.
Tenemos pues que el hermafrodismo no es sino aparente , y hay un
sexo determinado y mas ó menos disfrazado por un vicio de conforma
cion . El hermafrodismo aparente , en elsexo masculino, no es muchas
veces sino una especie de hypospadias, y en el otro sexo un desarrollo
escesivo del clítoris , que ha llegado a tomar la formade pene. He aquí
un ejemplo del primer caso , que se halla consignado en los Boletines
de la sociedad de la Facultad demedicina de París , en el Diario de
medicina , cirugía y farmacia , y en el Diccionario de ciencias mé
dicas.
En 19 de enero de 1792 , el cura de la parroquia de Bu , distrito de
Dreux , dió fe de haber nacido una piña que fue bautizada bajo los
nombres de María Margarita . A la edad de catorce años poco mas ó
menos quejóse Margarita de un tumor que se le habia manifestado en
la ingle derecha, y luego despues de otro semejante en el lado opuesto .
Llamóse á un cirujano para reconocerla , quien creyó ver dos bernias
en aquellos supuestos tumores. Algunos años despues, pensando Mar
garita en casarse , sus padres la hicieron examinar por el doctor Wor
be , á fio de cerciorarse de si dichas herpias y la falta de la menstrua
. : 23
168 MOECHIALOGIA .
cion serian un obstáculo al matrimonio . El doctor Worbe reconoció
que los tumores tomados por hernias eran los dos testículos , conteni
dos cada cualen una de las dos celdillas de un escroto bilobulado , y
que en la division escrotal existia un glande imperforado con la aber
lurå ureteral situada debajo. Declaró finalmente que Margarita perte
necia al sexo masculino. El tribunal de Dreux , en virtud de pedi
mento que le fué presentado, decretó en 5 de octubre de 1813 que Mar
garita fuese reconocida por tres médicos ó cirujanos; y en vista del
relato de los espertos, cuyas conclusiones adoptó el ministerio públi
co, se falló que Margarita dejase de vestir el traje de mujer, y que se
rectificase el acta de su nacimiento .
Ahora bien , los individuos llamados hermafroditas ¿pueden contraer
matrimonio ? Si, con tal que presenten todos los órganos necesarios
para la cohabitacion marital, y por lo mismo no sean impotentes :
porque poco importa que tengan algunos de los órganos genitales del
otro sexo , ó por lo menos algunas partes que los simulen ; no se les
puede reputar impotentes , puesto que , repetimos, semuestran aptos
para el coito .
Es preciso notar de paso que, en todos los pretendidos hermafrodi
tas; jamás existe sino un sexo bien determinado , ó no existe absoluta
mente ninguno ; en este últimocaso , como se ve claramente, elmatri
monio es imposible . Tal era el caso de un ser humano llamado Hubert,
que murió en 1767, el cual, por una aberracion ó un juego estra
ño de la naturaleza , tenia los órganos esenciales de ambos sexos,
y sin embargo no podia ser apto para llenar las funciones ni del uno
ni del otro ; tenia un pene imperforado , un testículo normal que se
gregaba un sémen prolífico sin salida posible ; una trompa con un
ovario y una matriz encerrada en un saco sin abertura , y por consi
guientetambien sin salida posible . No era pues primitiva y orgánica
mente ni hombre nimujer, à lo menos juzgando por la sola inspeccion
de los órganos genitales. Fué pues necesario , para señalarle su órden
de sexo en la sociedad , juzgarle por sus atributos generales tanto fi
sicos como morales , sacados de la conformacion del cuerpo , de la
pelvis , de las formas, de la barba , de la voz , del carácter , de las in
clipaciones, de los gustos , etc . . .
En virtud de lo que precede, el lector inteligente podrá con facilidad
juzgar y apreciar en su justo valor los asertos ó conclusiones siguien
tes de Sanchez y de los teólogos que le han copiado. « Quandò uterque
sexus æqualis est, in optione ejus est juxta alterutrum sexum matr .
jungi. Quare si virili deservire eligat, ducet feminam : quòd si femineo,
nubet viro ... Parochus autem non debet interesse tali matr. donec her
PART. II . CAP . 1. 169
maphroditus coram judice ecclesiastico protestetur quosexu uti velit...
Exigendum est sub jurejurando quo sexu uti velit et se alio sexu præ
ter semel electum non usurum .» (Lib . 7, disp. 106.)
Sanchez , en el mismo pasaje , hače observar con mas razon que,
mientras el sexo de los individuos llamados hermafroditas fuere dudo
so , son incapaces de recibir los órdenes eclesiásticos y de la profesion
religiosa . :

S. II.

Consecuencias y aplicaciones de los principios aqui arriba establecidos .


Hemos visto que, cuando es cierto que la impotencia perpétua, na
tural ó accidental , absoluta ó respectiva , es anterior al matrimonio,
este es absolutamente nulo , y que las partes deben separarse inmedia
tamente ; ó bien , si quieren continuar, viviendo juntas, deberán en
adelante vivir como hermano y hermana. Entiéndese por eso « que las
personas deben abstenerse no solo ab actu conjugali , sí que tambien
ab eodem thoro , à tactibus, amplexibus et osculis.» ( Conférences
d'Angers.) Fundado en este principio un obispo de Arras condenó , co
mo falsa y contraria á la pureza, esta proposicion de Taberna : Si actus
conjugalis sit conjugibus illicitus ob aliquam circumstantiam extrinse
cam , verbi gratiâ , ob morbum , periculum abortûs , et non ideò sunt
illiciti alii actus venerei , secluso periculo pollutionis, idemque dicendum
in casu impotentiæ supervenientis matrimonio . La parte no impotente
puede volverse á casar ; pero la otra jamás, si su impotencia es per
pétua y absoluta . Las partes no podrán separarse , en cuanto á babi-
tacion , sino despues que el juez eclesiástico haya pronunciado la diso
lucion delmatrimonio .
Si la impotencia sobrevino durante el matrimonio , no puede ser una
razon para romperlo , porque fué válido al contraerse : no podria di -
solverse sino por la profesion religiosa , si aun no fuese consumado,
lo que por otra parte debe suceder muy rara vez ó antes bien nunca .
Los esposos deberán pues vivir entonces como hermano y hermana, si
la impotencia accidental es cierta y conocida de las dos partes. Tal
es la decision del papa Nicolás I , que ha venido á ser la regla ó prin
cipio cierto en el foro iplerno.
« Sio embargo, en las Conférences de Paris se dice que, un confesor
no debe molestar á dos esposos cuando á causa de una enfermedad ó
de una caida se hallan solamente en duda de si uno de los dos se ha
vuelto impotente ; su derecho está fundado en un verdadero y le
170 . MOECHIALOGÍA .
gitimo matrimonio. La Iglesia , que á veces permite a un marido y
mujer el vivir juntos durante tres años, cuando uno de los dos se que
ja de la impotencia del otro , no juzga que pequen 'dos esposos que
usan del matrimonio , cuando nó les parezca evidentemente que uno
de los dos se haya vuelto impotente; hállanse en legitima posesion de su
derecho , y la Iglesia no trata de desazonarles sino en el caso de im
potencia evidente : possessio valet, et melior conditio possidentis.» (T . 3,
sobre elmatrimonio .)
Sin embargo , cuando se duda si la impotencia precedió al matrimo
nio , ó no , es preciso atenerse , en el foro interno , á la declaracion del
penitente . Si afirma positivamente que su impotencia es muy real y
que siempre existió , es preciso manifestarle que siendo así, su matri
monio es radicalmente nulo . En tal ocurrencia es necesario remitir el
penitenté á un hombre del arte , y si es posible , à un médico legista ;
porque puede suceder que la impotencia no sea 'mas que temporal , y
por consiguiente curable. Si la parte sana no se queja hasta despues de
mucho tiempo de contraido el matrimonio, es de presumir que la im
potencia sobrevino despues de casados , á no ser que pruebe física y
perentoriamente que es perpétua y congenital.
En el foro esterno siempre se debe presumir que la impotencia so --
brevino despues de contraido el matrimonio , hasta tanto que se prue
be lo contrario . .
Como ya hemos insinuadomas arriba , la libertad ó la licencia , in
ordine ad actum conjugalem , cuando una de las partes sea herida de
impotencia , ya sea precedente, ya subsecuente , es cosa prohibida en
razon de que no puede conseguir su fin . Será mortal ó venialDU
segun
las circunstancias ó los casos que esplicaremos en el capítulo si -
guiente .
La impotencią temporal no puede invalidar el matrimonio , puesto
que fué válido al contraerse , tanto si esa especie de impotencia fué an
terior como si fué posterior al contrato ; porque no es de la esencia del
matrimonio el que sea consumado , sino tan solo el que lo pueda ser en
condiciones y circunstancias dadas. '
La impotencia temporal , como ya hemos dicho , puede cesar bajo la
influencia de medios convenientes , sean físicos ó morales , y que puè
dan emplearse lícitamente.
Ya espusimos mas arriba, página 163 y siguientes , cuales eran las
causas físicas de la impotencia temporal. En cuanto a las causas mo
rales , nerviosas, ó si se quiere inmateriales , son bastante numerosas
y muy variables . Sabido es que los teólogos ordinariamente atribuyen
Ja impotencia moral ó puramente nerviosa , es decir, la impotencia in
PART. II . CAP. I. 171
dependiente de toda lesion ó vicio físico y orgánico , á un maleficio ó
á la operacion del demonio ; á eso se llama vulgar y supersticiosamente
sortilegio . Empero muchísimas veces se ba tomado por maleficio lo que
no era sino efecto de una imaginacion fuertemente aturdida , exaltada,
perturbada ó intimidada, paralizada por el miedo de quedar súbita
mente impotente ; ó en los hombres sin 'malicia , por predicciones ó
amenazas anteriores de impotencia ó de sortilegio . A veces se han vis
to sobrevenir impotencias repentinas producidas por una idea súbita de
vergüenza , de timidez ó de miedo respetuoso, determinado por ciertos
descubrimientos inoportunos que hacen algunas veces los recien casa
dos ; otras veces tambien por un esceso erótico , por una pasion esce
siva ó por demasiada preocupacion ó precipitacion .
Un autor de teologia moral , á quien nos gusta citar porque lo con
sideramos en general menos atrasado .que otros muchos en el camino
de la verdad o de la ciencia del hombre , M . Vernier , casi fisiólogo ,
se espresa en estos términos : «Impotentia ab extrinseco veniens ordi
•» nariè est ex maleficio , cui tamen rarò credendum , si forsan nunc ali
» quandò.» (Teología práctica , t. 2 , p. 564.)
El célebre Pablo Zacchias ,médico de Inocencio X , en 1688 , y ade
más médico legista y canonista , invocado por todos los teólogos, hace
observar muy juiciosamente que muchas veces es atribuida á malefi
cio la impotencia que proviene «vel ex verecundiâ et pudore , vel ex
nimio amore, vel ex ipfenso odio sponsæ quam vir invitus duxit.)
(Quæst. medico -legal. lib . 3 , tit. 4, 9. 5.) Elmismo autor añade que
el provisor debe examinar el caso con atencion , porque entonces no
hay causa para disolver el matrimonio , en razon de que todo aquello
podrá disiparse con el tiempo. Por esto la Iglesia , siguiendo el dictá
men de todos los teólogos y de todos los canonistas , concede la prue
ba de la cohabitacion trienal á todos los casados que se hallan en los
casos arriba mencionados , y aun en todos aquellos en que la impo
tencia es dudosa , ora recaiga la duda en su duracion temporal o per
pétua , ora estribe en su anterioridad ó posterioridad al matrimonio , ó
en fin en su naturaleza física ó moral. En el foro interno aquel espa
cio de tres años comienza a correr desde el momento en que se con
trajo el matrimonio . Tal es el parecer mas comun y mas proba
ble.
Si antes de espirar los tres años reconociesen las partes con certi
tud que la impotencia es verdadera é irremediable, deben desde luego
abstenerse de todo acto venéreo'y de toda libertad conyogal. Si la im
potencia , dudosa al principio , es reconocida no solamente como cier
ta , si que tambien como anterior , perpétua é indestructible , deben
172 MOECHIALOGÍA . .
mirar su matrimonio como completamente nulo , y conducirse aun
con mas severidad que en el primer caso (“).
· Volviendo almédico Zacchias , estamos enteramente de acuerdo con .
su dictámen arriba espuesto , y:creemos , con los teólogos mas moder
nos., que el maleficio , en la especie , es hoy en dia cuando menos
sumamente raro , dado caso que exista en los tiempos que corren . Por
lo demás el demonio por desgracia nada pierde en ello; pues ha halla
do medio de indemnizarse sobradamente , y bastante sabido es de qué
manera esplota el matrimonio en deplorable é inmenso provecho su
yo. ¿ Quereis saber sobre cuales esposos el demonio ejerce mas su po
der y su malicia infernal ? el ángel Rafael os lo enseñará con estas
palabras dirigidas al jóven Tobías : Audi me, et ostendam tibi qui
sunt quibus prævalere potest dæmonium . Hi namque.qui conjugium ita
suscipiunt, ut Deum à se et à sua mente excludant , et suæ libidini ita
vacent sicut equus et mulus , quibus non est intellectus; habet potestatem
dæmonium super eos. (Tob ., vi, 16 et 17.) He abi por cierto el malefi -
cio mas terrible , y tan incontestable como frecuente . Parece que al:
demonio en el dia le tiene mas cuenta inducir á los hombres á las pa- .
siones brutales en el uso del matrimonio que no el hacerles enteramen
te įnaptos. Si ahora no mata á los maridos , como hizo en otro tiempo
con los siete maridos de Sara , será porque prefiere arrastrar consigo
up número infinito de almas á los eternos abismos.
Finalmente si es preciso reconocer las frecuentes impotencias inde
pendientes de las lesiones ó de los vicios orgánicos ó físicos, que con
fesamos reconocer formalmente , es menester atribuirlas por lo co
mun á grandes y largos escesos venéreos y sobre todo onánicos , y
á la enervacion ó antes bien á la eviracion precoz de la juventud .
He ahí, en nuestro concepto , el mayor y mas frecuente maleficio
(1) He aquí el sabio consejo que Mons. Bouvier invita a los confesores a dar á
los esposos durante la prueba trienal: «Præcavere debet (confessarius) ne im
potentia , quæ causæ naturali tribuitur , ab excessu libidinis , vel ab aliis cau
sis saðabilibus oriatur , quia tunc ad remedia naturalia recurrendum esset ;
medici enim quædam hujus generis remedia indicant et præscribunt. Plures
sunt causæ naturales virum à coitu impedientes, quæ sine ope medicorum
tolli possunt , v. g., difformitas in uxore , halitus tetrum spirans , negligentia in
ornatu etmunditie , odium , contemptus , etc. ; pulchritudo enim aliæque quali
tates quæ mulierem reddunt amabilem ad consummationem matrimonii mul
tùm excitant. Tunc prudens confessarius debet imprimis consulere sponsis ut
in re tantimomenti , ad æternam utriusque salutem pertinenti , rem toto tem
pore experimenti cum bona fide et ex purà intentione agant, sine libidine inor
dinatà , sine odio , tædio , inimicitiâ et fastidio , ut corpora sibi invicem com
municentmodo ad perficiendam copulam aptiori, ut mulier munditiei plùs so
litò studeat, blanditiis et ornamentis licitis amabiliorem viro se præbeat , et
tandem quærat quomodò ei placeat: sunt verba ipsius apostoli.»
PART, II. CAP . 1. 173
que hoy en dia anuda , encadena y paraliza á la potencia . viril.
Ahora , por lo que hace al estado de estrechez (arctitudo) y á la in - .
cision que son el objeto de tan grandes y largas discusiones entre los
teólogos , debemos'confesar aquí nuestra ignorancia , porque no pode
mos comprender su idea acerca de esa operacion ó de esa cuestion lan
vivamente controvertida en teologia moral ; ó antes bien debemos de
. cir que esa famosa operacion , incisio vaginae vel vasis muliebris , co -,
mo dicen ellos, no se halla indicada , en cuanto a la especie , en nin
gun libro de medicina ó de cirugía ; encuéntrase tan solo en las obras
de los teólogos . Y sobre todo, dado caso que se hiciese semejante ope
racion (siempre muy grave) en el grado necesario para conseguir el
objeto propuesto , seria inútil , puesto que la cicatrizacion de la llaga
reproduciria la estrechez y, aun probablemente la aumentaria .
Así , pues, no hay que espantarse por una operacion que jamás
vendrá el caso de hacerse , porque es moralmente impracticable , muy
peligrosa y por otra parte no tiene objeto alguno de utilidad real. A
mas de que, en un caso de grande estrechez , el acto conyugal no es
completo ni normal , si se quiere , pero no por esto es necesariamente
estéril , como mas arriba hemos visto ; luego no hay impotencia com
pleta , sino tan solo dificultad , que no puede ser un impedimento di
rimente . Sobre todo , en tales casos tenemos siempre la prueba trienal ;
y si al cabo de tres años, y despues de haber empleado los medios ar
riba indicados , no pudo tener lugar la fecundacion , se, considerará la
impotencia como perpétua y anterior al matrimonio , y por consiguien
te como un verdadero impedimento dirimente. Luego no es siempre
necesario que el acto conyugal sea completo , con tal que pueda ser
fecundante :semen ad vaginæ orificium projectum fecundare potest;
minima enim seminis quantitas ad generationem sufficere potest .
Vimos en la pág.161, que la obliteracion por sí sola es una causa de
impotencia perpétua , y por consiguiente un impedimento dirimente .
La incision seria en tal caso inútil y muy peligrosa : luego es una ope
racion impracticable y quimérica , que puede dejarse en los libros de
los teólogos , donde únicamente se lå halla y donde nunca podrá hacer
mal á nadie .
Es pues mas razonable y mas racional á la vez el recurrir a los
cuerpos y á los remedios dilatantes. En la obra de Boyer se cita un
hecho muy notable suministrado por un cirujano italiano , Benevoli :
habia una mujer cuya vagina era tan estrecha en toda su longitud ,
que apenas se le podia introducir el cañon de una pluma de escribir
medianamente gruesa . Las paredes del canal vaginal eran duras y ca
llosas. Hacia ya tres meses que se habia casado , y aun no habia po
174 MOECHIALOGIA .
dido consumarse el matrimonio. Benevoli empleó la raiz, de gentiana
como á medio dilatante ; fué aumentando progresivamente su volúmen ,
sirvióse despues de la medula de un tallo de maiz , Ÿ por fin aplicó la
esponja preparada. Esas diversas sustancias al hincharse dilataron
poco a poco'el canal, y le hicieron apto para llenar sus funciones. En
casos semejantes deberia imitarse el procedimiento de Beneyoli. En al
gunas circunstancias particulares se puede, tambien echår mano á .
ciertas unciones ab utrâque parte. .
Si la incision vaginal es y debe ser proscrita , no sucede lo mismo
con otra pequeña operacion que a menudo llega á hacerse necesaria , y
quedebe practicarse siempre que la cohabitacion marital sea imposible .
Esta operacion , que no es nada grave y perfectamente inofensiva, con
siste tan solo en la incision de la membrana himen , que no es raro
verla más o menos carnuda , fibrosa , dura y resistente hasta el punto
de poder obstáculo al coito normal ó de hacerlo completamente impo
sible (véase la página 63). Los confesores deben hacer presente á la
mujer que está obligada á practicar todo cuanto de ella dependa para
hacerse apta á llenar sus mas esenciales deberes para con su marido ;
que sometiéndose á lo que el deber exige de ella no corre ningun ries
go su vida niaun su salud , etc .
Todo lo que acabamos de decir acerca de la famosa cuestion de la
incision vaginal , tan debatida hace siglos por todos los teólogos, debe
ahorrarnos una multitud de páginas que de nada servirian en vista del
nuevo principio que hemos establecido. Desde ahora nos abstendremos
pues de discutir las diversas y contradictorias opiniones emitidas so
bre un punto que, en nuestro concepto , se halla de aqui en adelante
perfecta é irrevocablemente resuelto , porque el principio que hemos
admitido está fundado en la naturaleza de las cosas , en el organismo
humano y en la esperiencia de los hombres del arte mas ilustrados del
siglo xix .
Nos contentaremos con hacer una breve observacion acerca de las
consecuencias prácticas de lo que hemos dicho con respecto a la inci
sion , no vaginal, sino del himen :'es que de hacerse esta leve é ino
cente operacion se podrá concluir la inexistencia de la impotencia
anterior y perpétua , y de consiguiente el negarse la renovacion matri
monial ó por lo menos su ratificacion por un nuevo consentimiento ,
puesto que el matrimonio se contrajo válidamente . Segun eso fácil será
conocer que Pontas se engañó en el segundo y tercer casos de impedi
mento por impotencia , y que sus decisiones son erróneas ó por lo me
nos inexactísimas ó muy incompletas : así debia ser, puesto que son
la consecuencia de principios erróneos ; y sin embargo, estos son los
PART. II . CAP . 1, 178
· principios de la mayoría de los teólogos, aun los de nuestros dias .
Volvamos á lą prueba trienal. Si despues de este espacio de tiempo,
la impotencia subsistiese y fuese perpétua , el confesor debe exigir de
los esposos que vivan `como hermano y hermana , y que se abstengan
severamente de toda libertad ó licencia conyugal, que ya no puede
tener ningun objeto', como mas arriba dijimos.
¿Puede dejarse a los esposos perpétuamente impotentes y que igno
ran de buena fe la nulidad de su matrimonio ; puede permitirse á esos
esposos prolongar en esta buena fe el tiempo de prueba mas allá de tres
años ? . . ,
He aquí lo que responde á eso Mons. Bouvier : « Si constaret eos in
bonâ fide versari , et admonitos pon emendatum iri, fortè liceret eos
in ignorantiâ relinquere, quia tunc minus malum , videlicet,peccatum
materiale , permitteretur, ad vitandum majus , nempè peccatum for
male. At improbabile mihi videtur sponsos bonâ fine semper, arbitrari
sibi licitum esse tentare actum quem nunquàm perficiunt , nec perfi
cere possunt; censeo igitur eos admonendos esse , saltem ordinariè.»
Los teólogos tambien proponen ciertas cuestiones prácticas, que en
el dia entre nosotros, en Francia , casi no pueden ser aplicables. Pre
guntan, por ejemplo , qué deberia hacerse si despues de una disolucion ·
de matrimonio por causa de impotencia , el esposo , declarado prime
ramente impotente , se reconociese mas adelante que posee todas las
cualidades viriles necesarias para cumplir los deberes conyugales ?
Todoś los teólogos, segun Sto . Tomás , contestan que, si la impo
tencia fué curada por un medio ilícito , sobrenaturalió con peligro de
la vida, el impedimento es perpétuo y la disolucion del matrimonio
justa y legitima: transeat, siendo así que se podrian hacer algunas ob
servaciones sobre esta respuesta antes de dejarla pasar , no sea sino
bacer suprimir hoy dia .la circunstancia del gran peligro de la vida
que jamás debe ni puede tener lugar en adelante , en virtud de lo que
mas arriba bemos dicho.
Añádese : Si la impotencia cesó por viás ó medios naturales, la opi
nion de los teólogos y,de los canoniştas'no es unánime en este caso.
Pretenden unos que la parte que en un principio fué declarada im
potente no está obligada,á volverse á juntar con la otra parte, á lo
menos en Francia : 1.° porque , dicen , es difícil probar que un hom
bre baya dejado de ser impotente ; pues en rigor es posible que no sea
padre de los hijos que sin embargo cree suyos; 2.0 porque , añade
tambien , la Iglesia de Francia ha podido hacer (“) que semejante im
(1) No reconocemos en ninguna Iglesia particular el derecho de poner ni
quitar impedimentos.
24
-176 MOECHIALOGÍA .
potencia ,aunque no perpétua, sea ,poſ derecho positivo , un impedi
mento dirimente ; 3 .0 en fin , porque es de presumir que esa impoten
cia no era mas que respectiva. Elslector podrá fácilmente apreciar por
sí mismo el valor de las dos razones priméras. En cuanto a la tercera ,
debe saberse en el dia que la impotencia respectiva muchas veces
puede cesar por medios naturalesapropiados , y dejar de ser por con - .
siguiente un impedimento dirimente .
Otros, especialmente los estranjeros, afirman , desde Sto. Tomás,
que la parte sana , separada por la autoridad eclesiástica y empeñada
ya en un segundomatrimonio , debe upirse otra vez con la parte que .
ha dejado de ser impotente. Así lo decidieron."Inocencio IIl y Hồno
rio III , dice Mons. Bouvier. La grande, la verdadera razon , la ha
visto ya el lector; es que, no siendo perpétua y antecedente aquella
impotencia , el primer matrimonio es válido y debe subsistir. Sin em
bargo , repetimos , en el dia ya no suceden semejantes casos en Fran
cia ; y, una vez por todas, en sobreviniendo casos estraordinarios ó
alguna dificultad 'imprevista , siempre es preciso dirigirse al ordina
rio , al obispo ó á sus vicarios generalés.
Propónese otra dificultad que es la siguiente : Mons. Bouvier , con
. . otros teólogos , pregunta aquid agere debeat mulier quæ certò, novit
maritum esse impotentem , et prolem ex facto alteriùs habuit , sima
ritus, arbitratus se prolis esse patrem , licentiâ conjugali uti velit.Mons ..
Bouvier responde : « Cavendum est ne mulier certò judicet impotentem
virum cujus impotentia ad summum est dubia . Verùm supposito quod
impotentia ejus sit certa , nullam permittere potest licentiam , licèt
grave ex repulsu sibi immineat detrimentum , quia rem intrinsecè
malam faceret ; in molestissimâ ergo hâc hypothesi debet suadere ma
rito, meliori quo poterit modo , utin continentiâ deinceps vivat, v. g.,
sub prætextu quòd sit senex , quòd unicus infans ipsis sufficiat; quod
ipsa ab actu conjugali nunc abhorreat , etc. Sí quâdam die videretur
plenè assentire , sic eum alloqui posset: Ne fortè , tentationibus victi ,
à proposito nostro 'avertamur; simul, quæso , perpetuam voveamus con
tinentiam . Si yotum semel emittat , in tuto erit .mulier : votum utrius
que obtendendo , illum conjugali licentiâ uti volentem sine ullo sus
picionis loco semper repellere poterit.Memor.sit obligationis reparandi
damnum marito et hæredibus per introductionem spurii inferendum .».
Segun Sanchez (lib . 7 , disp. 97 , núm . 13) y otros muchos á quie
nes él cita , un hombre y una mujer que saben de cierto que uno de
ellos es impotente de impotència perpétuả pueden contraer válidamente
matrimonio con objeto de ayudarse mutuamente y de vivir por lo de
más como hermano y hermana , secluso 'omni periculo peccandi. Si
PAHT. II. CAP. I. 177
estos , dice, que contrajeron matrimonio con impotencia perpétua pue
den vivir juntos, como hermano y hermana , a pesar de la nulidad de
sů matrimonio , ¿ por qué no ha de poder hacerse desde el princi
pio ? El caso será materialmente el mismo sin mas peligro de un lado
que de otro. Esta razon de Sanchez es mas especiosa que sólida . Es
cierto que en ambos casos el matrimonio es nulo , porque se contrajo
contra el derecho natural y eclesiástico ; pero en el uno hubo profana
cion ó sacrilegio , y no en el otro , en que los esposos se hallan exentos
de toda falta , bajo el amparo tutelarde su buena fe ; mientras que en
la hipótesi de Sanchez los dos falsos esposos pecan y profanan á sa
biendas el sacramento delmatrimonio , al cual falta en tal caso la con
dicion esencial , la potencia virtual: en una palabra , el caso que pro
pone Sanchez , es exactamente el matrimonio de un eunuco. Por res
peto y por conveniencia, nos abstendremos de hablar del matrimonio
de la Virgen santísima y de S . José, que él cita en apoyo. Inútil es ha
cer observar que aquí hay falta de paridad , y que el matrimonio de
María y de José era muy válido.
Tal vez se nos objetará con el matrimonio de los viejos que la Igle
sia bendice , aunque sean de edad muy avanzada , y por consiguiente,
añaden , radicalmente estériles y perpétuamente impotentes. to
Sabido es en efecto que tal es el proceder de la Iglesia. Bolo
Cítase un gran número de esas especies dematrimonios incongruen
tes,aunque muy válidos , como lo fué por cierto el quemenciona Pon
tas segun el Mercurio del mes de febrero de 1708. Timoteo Blanche ,
mercader de la ciudad deMontheurt , junto á Tonneins , en Guyena ,
fué admitido á contraer matrimonio a la edad de ciento diez y siete
años y tres meses con una joven llamada Vignian de Droine, que aun
no habia cumplido diez y ocho. Nada se dice de las consecuencias que
tuvo este casamiento . He aquí otros de que no podia esperarse resul
tado alguno. Un tal Larcher, jardinero en el arrabal de S. Marcelo ,
á la edad de ciento y tres años , casó con una mujer de setenta y seis
en 1713 , en la iglesia parroquial de S . Hipólito . Eduardo Korkain ca
só eu 1711 con Juana Şerimphaw , que tenia ciento veinté y siete años
de edad . (Journal de Verdun de Set. 1713 , art. 10.)
He aquí finalmente , entre otros muchos que Portas refiere , un
hecho que por cierto no fue sin resultado. Lo citaremos testualmente.
« Un boticario de Chateaubriand en Bretaña , babiéndose 'casado à la
edad de cincuenta años, y habiendo tenido diez y seis hijos de su mu
jer , contrajo segundas nupcias á los ochenta años , y tuvo de este
segundo matrimonio 'igual número de hijos, dos de los cuales nacie
ron gemelos , teniendo entonces el padre ciento y tres años » (Jour
178 MOECATALOGIA . "
nal de Verdun , 1709.) Caton el censor tuvo ,un hijo a la edad de
ochenta y ocho años. Uladislao , rey de Polonia , tuvo,dos a la edad
de noventa años. (Conf. de París.) :
No cabe duda que todos esos.hechos son muy estraordinarios , mas .
sin embargo creibles. He aquíahora otros mucho mas maravillosos y
no menos .creibles , aunque infinitamente mas raros ; son de muje
res que concibieron en edad muy avanzada y aun siendo muy viejas.
Nadie puede con certitud absoluta fijar, límites à la facultad genera
triz del hombre y de la mujer. Plinio dice que Cornelia , de la familia
de los Escipiones, parió á Valerio Saturnino á la edad de sésenta y
dos años. Valesco de Tarento asistió al parto de una mujer dé seseni
ta y siete años. El célebre fisiólogo Haller hace mencion de una mu
jer que parió a la edad de sesenta y tres años y de otra a la de setenta .
Cangiamila habla lambien de una mujer que parió felizmente á la
edad de setenta años. Si esasmujeres en edad tan avanzada estaban
aun menstruadas , todo es normal y fisiológico ; si no lo estaban , los
hechos deben subsistir , pues no salen del orden natural posible ; por
que se citan algunas que concibieron y parieron sin haber estado
nonca sujetas al flujo ménstruo.
Continuemos el examen de algunos casos prácticos sentados por los
teólogos.
Pregúntase si pueden casarse aquellos que dudan si son impotentes .
Pueden , si su impotencia no es mas que pasajera .y. curable , des -
pues de haber consultado sin embargo con hombres del arte á fin de
salir de duda. Şi se tratase de una impotencia perpétựa y la duda so
b.re este punto no pudiese disiparse por una decision de ' hombres
competentes , no se podria contraer matrimonio . Seria preciso abs
tenerse y tomar el partido mạs seguro : in dubiis pars tutior eligenda
est. Tal es la regla del derecho, Jamás es lícito obrar cuando hay
duda de si,se pecara obrando , sobre todo cuando no se está obligado
á obrar. :
En virtud de todo cuanto hemos dicho anteriormente, fácil es con
cluir que una persona que , conociéndose perpetuamente impotente ,
se casa , comète un 'sacrilegio , aun cáando dé á conocer su estado de
impotencia á : là parte con quien contrae ; porque profana, el-sacra
mento de que es incapaz por el derecho natural y eclesiástico. Añadi
ria la injusticia al sacrilegio si no declarase sú impotencia á la otra
parte , privándola, del derecho que tiene a un honesto y legitimo ma
trimonio , y comprometiendo gravemente su honor , si el matrimo
nio llega á disolverse .
«Un hombre que, dice el redactor de las Conférences d 'Angers,
PART. II. CAP. I. 179
despues de haber consultado a los médicos, queda seguro de ser im
potente con impotencia perpétua anterior á su matrimonio y se opone
á la disolucion de este , que su mujer pide cor razon en justicia, es
indigno de absolucion si no desiste de sus ardides. Sainte -Beuve , t. 2 ,
car. 8 , es de opinion que él debe facilitar el juicio en ventaja de su
mujer ; de otra suerte seria reo de una vejacion tanto mas criminal
cuanto en ello iria contra no solo del interés temporal y la tranquili
dad de su mujer , sino tambien quizás de su propia salvacion. *
: » Si una mujer fuese condenada en justicia á habitar durante el res-
to de sus dias con un marido realmente impotente , estando ella per
suadida de su impotencia , antes deberia sufrir toda especie de censu - .
ras que esponerse á "la pasion de su marido , como espresa el can.
Inquisitioni , de sententiâ excommunicationis .
: » Si despues de decretada 'una separacion , un hombre á quien se i ,
hubiese prohibido casarse se volviese á casar ý se hallase en estado
de consumar este segundo'matrimonio , está mandado por el can. Re
quisisti , cap. 33 , quæst. 1 , por el can . Laudabilem , y por el can.
Fraternitatis , que despues de haber hecho penitencia de su crimen
vuelva á babitar con su mujer primera : peractâ pænitentiâ , cogantur
ad' connubia priora redire, porque , cuando el juez manda por causa
de impotencia la separacion de dos casados , no pronuncia propiamen
te una disolucion de matrimonio , sino que declara que no hubo matri
monio á causa del impedimento de impotencia: si el motivo de la de
claracion no es verdadero , las partes deben reunirse , porque el hom -
bre no puede separar lo que Dios ha unido.)
Hemos referido este pasaje de las Conférences d 'Angers no tanto
con objeto de utilidad práctica , puesto que nuestra legislacion ha
cambiado mucho desde entonces , como para hacer ver cuanto se atie
ne la Iglesia al gran principio moral de la indisolubilidad del matri
monio .
Tambien se pregunta si un hombre que se casó de buena fe sin ha
ber tenido la menor duda acerca de su estado de impotencia puede en
conciencia disfrutar de las rentas de su mujer?' Lo puede si hay lugar
de creer que su impotencia no será mas que pasajera y que podrá cu
rarse con el tiempo ó con ayuda de algunos medios adecuados y con
venientes. Parece que la Iglesia le autoriza á ello al permitirle la co
habitacion trienal. Presúmese pưes que el derecho éstá en favor de
ese hombre , que ya se hallå en posesion de dichas rentas . Sin em -
bargo , si despues de la prueba trienal no hubiese 'cesado la impoten
cia y fuese reconocida como á perpétua é incurable , él-no tendria én
el foro interno derecho alguno á los bienes de su mujer en calidad de
180 . MECHIALOGÍA
marido, puesto que le faltaria este título y de consiguiente el matri
monio seria nulo .
Empero si ese hombre convencido de su impotencia perpétua la hù
biese puesto en conocimiento de la otra parte antes de casarse; po
dria en este caso disfrutar de las rentas de su mujer , porque esta
consintió y cedió-á su pretendido esposo el derecho de disfrutarlas.
Scienti et consentienti nulla fit injuria . Es inútil hacer observar que el
· hombre de que se trata no tieneotro derecho a este goce que el con
' sentimiento ő la voluntad de la mujer. Si antes de celebrarse ese apa -
rente matrimonio él no hubiese declarado a su mujer su impotencia
perpétvã , no tendria derecho alguno á gozar de sus rentas. En otro
tiempo los parlamentos adjudicaban daños é intereses á una esposa
cuando rompian su matrimonio por causa de impotencia de su ma
rido . Para mayores detalles sobre esta materia , včanselas Conférences
de Paris.
Para concluir todo este artículo , referiremos'un caso muy singular,
estraordinario y áun estraño si se quiere , pero que tal vez no és ab
solutamente irrealizable , al menos bajo otra forma, porque las dispo
siciones legales no son ya las mismas hoy en dia : sabido es que el
Código civil ha prohibido ó por lo menos modificado ,las sustituciodes
fideicomisarias. Por otra parte , si muchas veces un ' caso no ofrece
interés ó.importància por,sí mismo , puede servir para resolver otros
mas o menos análogos, y siempre da alguna luz al lector.: El caso en
cuestión es estractado fielmente de las Conférences de Paris. ..
« Un hombre impotente posee cuantiosos bienes que se hallansus
tituidos á sus futuros y legitimos hijos , ó en falta de estos , á sus pa -
rientes colaterales ; cásase', y por vias criminales de que su pretendida
mujer es cómplice , se procura un hijo ; ¿de qué manera , él ó eså mu
jer , deberá reparar el daño que causó ó sus colaterales ?
» Aquella criatura , que es bastarda, pero que nació bajo el velo de
un matrimonio legítimo , tiene derecho a los bienes sustituidos á un
hijo legitimo , y hasta puede poseerlos en conciencia segun la ley y los
decretos de los parlamentos. Pater is est quem nuptiæ demonstrant. Eso
es justo y necesario para la tranquilidad de las familias. La injusticia
que los quita á los colaterales no procede mas que de tres perso
nas : aquel hombre impotente , su supuesta mujer, y el verdadero pa
dre de la criatura . . . .
. . » 1 .° Por lo que bắce á aquel hombre impotente , si posee bienes
que no sean sustituidos ó si acaso llega á adquirirlos , debe , para
reparar el robo que hizo á sus colaterales, 'hacer de manera que va
yan á parar en poder de ellos en igual cantidad y valor en que son es
PART. M . CAP: 1. 181
timados los bienes sustituidos de que les priva por una via tan cri
minal ; y si la sustitucion debiese pasar.mas lejos, deberá dárselos á
cuenta de semejante sustitucion: Eso se funda en ļas reglas de las sus
tituciones, que no le constituyen propietario , sino únicamente usu
fructuario de sus bienes, y no permiten que pasen á otros que á hijos
legitimos en perjuicio de sus colaterales ; dado caso de no poseer mas
que bienes sustituidos , deberá procurar hacer ahorros á fin de in
demnizar á sus colaterales ; no está obligado á semejante indemniza
cion si su pretendida mujer hubiese cometido el crimen sin saber
lo él.
» 2,º Tocante å las otras dos personas que contribuyeron á ese robo de
una manera tan indigna , están solidariamente obligadas á indemnizar
con sus propios bienes á los colaterales del hombre impotente , porque
fueron los principales ministros de semejante injusticia”; y por esta
misma razon , si el hombre impotente no quisiese indemnizarles en na
da , ellos deberian hacerlo totalmente , aunque no disfruten de aquellos
bienes sustituidos ; su crímen priva á los colaterales de una herencia
que de derecho les pertenecia . Estarian aun mas obligados á dicha
indemnizacion si hubiesen cometido el crímen sin saberlo aquel hombre
impotente , y tampoco les dispensaria de hacerla el ignorar que hubie
se tal sustitucion , porque la ignorancia de las fatales consecuencias
que puede tener un crimen no puede escusar á los que lo cometen y
dispensarles de reparar el perjuicio que puede causar á otras personas;
tales son los principios del derecho canónico .y civil.» . . .
No hablaremos de la impotencia por impubertad , puesto que esta
clase de matrimonios casi no puede tener lugar en nuestra nueva le
gislacion , en virtud de la cual « el hombre antesde los diez y ocho
años cumplidos , y la mujer antes de los quince cumplidos no pueden
contraer matrimonio. » (Art. 144 del Código'civil.) Antiguamente los
hombres podian casarse á la edad de catorce años cumplidos , y las mu
jeres á la de doce cumplidos; pero semejantes uniones precoces eran
á menudo funestas á los esposos y al Estado , no dándolesmás que hi
jos enfermizos y débiles. . '
182 MOE
. CHA

CAPÍTULO 1.
DE LOS DEBERES CONYUG ACES. Ó DE LAS OBLIGACIONES DE LOS
ESPOSÓS RELATIVAS Á NUESTRO OBJETO.

Este capitulo se dividirá en tres articulos: el primero tendrá por


objeto la peticion y el pago del débito cónyugal (") ; el segundo será
consagrado al exámen del uso del matrimonio , de las circunstancias
del acto conyugal y de los pecados que en tal acto cometen los espo
şos ; finalmente , el tercer artículo tratará de la conducta del confesor
en órden å las personas casadas y á las qụe se disponen a entrar en
el estado de matrimonio .

ARTICULO I.
DE LA PETICION Y DEL PAGO DEL DÉBITO CONYUGAL,

Reflexiones preliminares.
La fidelidad y la fe que se prometieron los esposos delaạte de Dios
y de su Iglesia les obliga , dice el apostol S. Pablo , á pågarse mutua
mente el débito conyugal: Uxori vir debitum reddat, similiter autem et
uxor viro :"mulier sui corporis potestatem non habet , sed vir ; similiter
autem et vir sui corporis potestatem non habet , sed mulier . (1 Cor , 7.)
Los derechos del marido y de la mujer son iguales en este caso , se
gun Sto . Tomás, æqualės sunt in reddendo et petendo debitum . Esta es
una consecuencia que se deduce de las palabras de S . Pablo. Cuando
los esposos se niegan uno a otro este débito sin justa y legítima causa ,
como veremos luego , cometen un pecado mortal. Nolite fraudare in
vicem , dice el santo apóstol. .
Por esto dice S . Agustin que este pecado , que es una verdadera
injusticia , puede tener consecuencias muy fatales ... Non sibi alteru
trum negent, ne per hoc incidant in damnabiles corruptelas , tentante
Satanà , propter incontinentiam amborum vel cujusque eorum . (De bono
conjug.) De ahí se sigue , como hace observar muy discretamente el
redactor de las Conférences de Paris , que un confesor ilustrado no
debe dar la absolucion á las mujeres casadas, que por capricho ó por
(1) Si bien desviamos aquí estas dos palabras subrayadas de su significa
cion ordinaria , el lector no dejará de comprenderlas , y esto basta .
PART. II. CAP. 11. 183
mal humor, ó por espíritu de yenganza , cuando han recibido algun
motivo de descontento o de disgusto de parte de sus maridos se niegan
à pagarles el débito . .
De otro lado, el confesor debe igualmente negar la absolucion á
los maridos que obran por los mismosmotivos , ó que, conociendo o
previendo las intenciones de sus esposas , que él pudor de su sexo im
pide de.esplicar abiertamente , las esponen , con una negativa injusta,
desdeñosa ó despreciativa , á caer en pecado o á faltar á la fidelidad
conyugal:
Si bien los esposos no están ordiņariamente obligadosá pedir el de
bilo,conyugal, porque cada uno,puede renunciar á su derecho , hay
un gran número de causas que les prohiben ejercer este derecho ó la
peticion conyugal , unas veces so pena de pecado mortal y otras so
lamente bajo la de pecado venial. Entremos en algunos detalles sobre
esta materia . .

S . I.
De la peticion ilícita del débito o de los que pecan mortalmente exi
giéndolo.
1. Un esposo que sabe con certitud que su matrimonio es nulo
por un impedimento dirimente cualquiera , como , por ejemplo , un im
pedimento de afinidad que provenga de un tralo .criminal , no puede,
por diogun motivo ,'ni pedir ni pagar el débito, porque cometeria una
verdadera fornicacion mortal. (Decretal. I, 5 , lit . 39 , cap . 44.) Debe
ria en este caso , ex Innoc. III , cap. inquisitioni, de sent. excom .,
potiùs mortem et excommunicationem humiliter sustinere quàm per car
nale commercium peccatum operari mortale. Entonces debe pedirse sin
dilacion la dispensa necesaria .
El esposo que prudente y razonablemente duda de la validez de su
matrimonio no puede pedir el débito hasta que , despues de un madu
ro exámen , haya aclarado su duda y tranquilizado su conciencia : de
otra suerte se espondria al peligro de cometer una fornicacion mortal.
Si por el contrario la duda no tuviese fundamento y fuese desnuda de
toda especie de razon ,'es menester desecharla como á vano escrúpulo
y pasar adelante. A pesar de su duda verdadera y fundada , el esposo
está obligado a pagar el débito á su parte que no duda , porque esta
posee el derecho de peticion conyugal, de que no puede privársela
mientras no se confirme la nulidad del matrimonio. Mons. Bouvier adu
ce tambien otra razon en apoyo de este dictámen, y es que, en presencia
184 MÕECAJALOGIA,
de dos,males que no se puedan evitar á un mismo tiempo , es preciso
escoger el menor': pues bien , dice , menos mal es el esponerse al peli
gro de una fornicacion material que el cometer una injusticia contra la
otra parte. ..
Si ambos esposos participasen de la duda, ni uno ni otro podrian
pedir ni pagar el débito .
2 .° Segun .Mons. Bouvier y todoslos teólogoso, un esposo peca mor
talmente exigiendo el débilo si , antes ó despues delmatrimonio , hizo
voto de castidad ; porque', en virtud ó por la fuerza de su votó , está
obligado á abstenerse de todo acto venéreo no. debido justa y legiti
mamente : solamente debe pagar el débito a su parte cuando ésta se lo
pida . La razon de esto es que , si hizo el voto despues del matrimonio ,
no pudo anular el derecho de la otra parte ; si lo hizo antes de casar
se , no cabe duda que pecó gravemente , pero cumplió .con su contra
yente lo que habia prometido á Dios : la parte que ignoraba que se hu
biese hecho el voto antes delmatrimonio adquirió , por la fuerza de
este contrato, un derecho de que puede usar y que jamás puede anular
la otra parte . Tal es el dictámen de todos los teólogos.
Si la otra parte hubiese tenido conocimiento del voto hecho antes de
la celebracion del matrimonio , se consideraria que consintió en él , y
por lo mismo no podria exigir el débito á su parte .
Lo mismo seria para el esposo que , durante el matrimonio , hiciese
voto.de castidad con el consentimiento del otro , y con mayor razon
si , con consentimiento mutuo, hiciesen ambos el mismo volo : es
evidente que ni uno ni otro podrian pedir el débito conyugal. En este
caso , dice Mons. Bouvier , « post matrimonii consummationem , ordi
nariè sufficiens ratio existit postulandi dispensationem hujusmodi voti,
scilicèt ne sponsi secum habitantes , tentationibus carpis victi , contra
obligationem sibi impositam peccent.)
Aquí es preciso hacer notar que un voto hecho por uno de. Tos es
posos sin saberlo el otro no es de aquellos cuya dispensa está reser -
vada al Papa. Para que esta reserva tenga lugar, es menester que la
castidad pueda ser perfecta : ahora bien , en el caso en cuestion no lo
es , porque siempre subsişte la obligacion de pagar el débito. Tampoco
es de los reservados el voto hecho antes de contraer matrimonio , por
que , de perfecto que era antes del matrimonio ; este lo ha vuelto im
perfecto. Luego el obispo puede dispensarlo : otra cosa seria si ambos
esposos hubiesen hecho el voto ó bien uno de ellos con el consenti
miento del otro . (Mons. Bouvier .)
« Votum non nubendi - añadeMops. Bouvier - vel sacros ordines sus
cipiendi, póst matrimonium contractum , et votum religionem ingre
PART. II. CAP. JI. *185
diendi, post matrimonii consummationem emissum , nec redditionem ,
nec petitionem debiti impediunt, nec igitur in his casibus dispensa
tione opus est ; hæc enim vota non nisi post matrimonii dissolutionem
obligant.»
Parece que la opinion de Bailly es algo diferepte de la de Mons.
Bouvier; he aquí de qué modo se espresa : « Qui post matrimonium
consummatum vovit religionem aut sacros ordines potest petere et red
dere , quia per hoc votum contraxit solùm . obligationem suscipiendi
ordines vel profitendi si supervixerit. Sed statim post mortem conju
gis tenetur impleré votum . Hæc verè și voverit ante matrimonii con
summationem tenetur votum implere ante consummationem , cùm illud
licitè possit ex dictis. Si verò consummet, peccat quidem mortaliter
primâ vice , sed deinceps potest reddere et petere propter rationes modò
allatas." (Theolog . dog. et mor., deMatr .) Mas por desgracia aqui bạ
llamos á Bailly en contradiccion con la constitucion de Juan XXII ,
hecha , segun refiere Pontas , el año 1322 en Avíñon , de fecha 30 de
diciembre . He aquí por lo demás de qué manera se espresa este últi
mo, en el caso 25.º del débito conyugal: « Si antes delmatrimonio hi
zo voto (Argyrophilo ) de recibir los órdenes sagrados, pecó gravemen
te contrayéndolo , y aun formando el designio de contraerlo , y con
mayor razon contrayéndolo . Sin embargo , una vez contraido , no está
obligado á cumplir su voto , y tampoco habria podido ponerlo en ejecu
cion antes de consumar el matrimonio , puesto que ratificado este por
la Iglesia", no puede ser disuelto por la recepcion de los órdenes , asi
como lo declaró Juan XXII...)
Ahora bien , ¿de qué lado está la verdad ? ¿ Quid juris ? En mi con
cepto , y creo que en el de todo el mundo , del lado de la autoridad .
Præsumptió stat pro auctoritate. Nótese además que aqui no se trata
sino de órdenes sagrados .
«Notandum est , ait DD . Bouvier, etiam votum perpetuæ castitatis
ante vel post matrimonium emissum , licèt redditionem debiti non im
pediat, per mortem conjugis fieri perfectum , et à solo Pontifice ro
mapo relaxari posse , eo fine ut novum ipeatur matrimonium .» .
Elque contrae matrimonio despues de haber hecho voto de no ca -
sarse peca mortalmente : no obstante puede sin dispensa pedir y con
vayor razon pagar el débito ; pero , una vez disuelto el matrimonio ,
no puede contraer otro sin dispensa .
3.° Un esposo que ba pecado con una persona pariente de su parte
en primero ó segundo grado pierde el derecho de peticion conyugal,
y pecaria mortalmente exigiéndolo , porque contrajo afinidad con su
parte . El obispo, por sí ó por sus vicarios generales , puede levantar
186 • MECHIALOGÍA .
este impedimento ó puede conceder a los copfesores la facultad de dis
pensarlo ,
Como ese impedimento de afinidad que sobreviene en elmatrimonio
válidamente contraido es una especie de reserva penal , no afecta a la
parte inocente , que puede pedir el débito á la otra , que está obligada
á pagarselo . Esta es la opinion 'mas comun y mas probable : sin em
bargo , no es universal.· Véase mas adelante , 'párrafo 4 , núm . 5. EI
ignorar la circunstancia del parentesco ó de la violencià becha á una
mujer debe escluir la pena de este impedimento. En cuanto a la ig
norancia de la ley o de la probibicion , la cosa ,parece menos cierta , y
en caso de duda lo mas seguro es , dice Collet , pedir su dispensa co
mo se suele .
4.° El esposo que durante el matrimonio bautiza ó es padrino de su
propio bijo ó del de su parte contraé con esta la cognacion ó el pared
tescó espiritual , y por lo mismo pierde el derecho a la peticion con
yugal, á no ser que lo haga por necesidad. Con todo, estaría obligado
á pagar el débito á su parte , á menos que esta tambien hubiese per
dido el suyo consintiendo en la conducta del primero , o que hubiese :
sido con mayor rạzon la primera causa . Hemos dicho que la necesidad ,
como es de razon , lo escusaria todo. El derecho canónico tambien
viene en apoyo del Ritual romano en estos términos: Pater aut'mater
propriam prolem baptizare non debet, præterquàm in mortis periculo ,
quandò alius non reperitur qui baptizet, neque tunc ullam contrahunt
cognationem quæ matrimonii usum impediat.
5 .° Es bastante sabido que el esposo pierde su derecho de peticion
conyugal por el crimen de adulterio.
En todos esos casos que acabamos de esponer brevemente en este
primer párrafo, no se puede , sin dispensa , „ pedir el débito conyugal
sin cometer una falta mortal. .

S . II.

De los que pecan venialmente exigiendo el debito conyugal. .

1. Sabido es que varios teólogos , en virtud de la autoridad de san


to Tomás,miran como á falta mortal el usar delmatrimonio en tiem
po de la funcion menstrual , porque, segun ellos , esta circunstancia
grave espone al peligro de engendrar hijos leprosos ó monstruosos.
Sanchez y otros muchos teólogos afirman que la ley del Levitico : qui
coierit cum muliere in flucu menstruo... interficientur ambo (XX , 18) ,
PART. 11. CAP. 11. 187
no es mas que una prohibicion meramente ceremonial que ya no es
obligatoria bajo la ley evangélica. 15 , in
Creo ; ó mas bien estoy convencido de que este precepto tanto es
moral como ceremonial, porque el acto conyugal ejercido durante la
época catamenial lleva consigo una malicia teológica , en el sentido
de que es mas o menos dañoso ó desfavorable á su fin principal ó'à 1a
geperacion : no porque haya de producir hijos leprosos ó monstruosos ,
lo que no creo absolutamente., sino porque muchísimas veces no los
producirá , ni normales, ni anormales. Y eso ¿ por qué? porque la
menstruacion no es mas que una funcion preparatoria , una escrecion
depletiva y espulsiva , y por consiguiente muy poco propia para en
gendrar ; de ahí se sigue naturalmente que el tiempo que la sigue' in -
mediatamente es el mas favorable à la concepcion , y así en efecto nos
lo está demostrando la esperiencia todos los dias. Véase lo que sobre
esta materia dijimos en la página 81 . .
Ya se ve , segun eso , que tampoco tenemos necesidad de apoyar
nos en el pasaje de Ezequiel : qui ad menstruatam non acceserit , et
uxorem proximinon violaverit (xviu , 6 ), en que se veque la cohabita
cion durante la crisis menstrual se cuenta en el número de los precep
los del derecho natural; y se halla puesto en la línea del adulterio .
S . Agustin , al hablar de ese testo de Ezequiel , dice eštaš notables pa
labras : Nam hoc Ezechiel inter illa præcepta ponit, quæ non figuratè
accipienda sunt.'
No podemos creer sin embargo , á pesar de la grande autoridad de
Sto . Tomás , que el acto conyugal ejercido durante la época catame
nial sea un pecado mortal. Para eso seria menester que estuviese pro
bado esperimental, fisica y fisiológicamente que semejante acto es esen
cialmente infecundo o contrario a la concepcion , lo que no es ni pue
de ser , puesto que hace ya mucho tiempo que la esperiencia ba pro
bado ser posible la concepcion en la circunstancia precitada. Luego la
falta no es mas que venial ; pero su gravedad se halla en razon direc
ta del grado de oposicion a la concepcion . Si no hubiese ninguna razon
fisiológica de esa oposicion , tampoco habria ninguna falta moral. Luego
es cierto que , segun las reglas de la sana moral, fundadas en las leyes
dela fisiologia (y así es como opina la generalidad de los teólogos) , no
se peca sino venialmente al usar del matrimonio durante la época de la
menstruacion ; aun hay circunstancias en que no se comete falta al
guna en tales casos, como cuando es necesario evitar la incontinencia
de uno de los esposos ó:disensiones , riñas domésticas y otras cosas
semejantes. .
Lo que acabamos de dećir acerca del tiempo del flujo menstrual
188 MOECHIALOGÍA .
debe en parte aplicarse á la época del flujo loquial que sigue inmedia
tamente al puerperio ó al parto. Hemos dicho en parte , porque , si el
coito tuviese lugar luego despues del parto , es decir, á los primeros
dias de baber parido , la falta seria necesariamente mas grave que la
cometida durante la época menstrual, por las razones quemas adelaạte
esplicaremos. .
2.° La gran mayoría de los teólogos afirma que la peticion conyu
gal en el estado de preñez no es mas que una falta venial , mientras
no haya peligro de aborto . Pero , como debe suponerse , este peligro
es a menudo muy difícil de conocer y de apreciar , tanto por lo que
hace á su presencia ó realidad , como por lo que toca á su magnitud
ó á su inminència . He aquí por lo demás el sentir general de la cien
cia acerca de este punto .
El aborto puede sobrevenir en todas las épocas del embarazo indis
tintamente ; cuando es espontáneo , se le observa por lo mas comun en
los dos ó tres primeros meses de la gestacion . Desormeaux , dice el
profesor Velpeau , deacuerdo con la opinion de los autores antiguos y
con el raciocinio , cree que el malparto es tanto mas comun cuanto me
nos adelantado es el embarazo . Mercatus se adelanta mas y dice que el
aborto es mas frecuente que el parto á término. Segun otros ,elaborto
tiene lugar las mas de las veces en los primeros dias que siguen des
poes de la concepcion , á últimos del tercermes y al acercarse eltér
mino del preñado ; por eso dijo Galeno , que la fruta se desprende mas
fácilmente del árbol củando es muy tierna ó cuando está casimadura.
De ahí vino tambien sin duda este precepto de S . Ambrosio , de san
Jerónimo, de S . Agustio y de otros varios Padres : Parentes primis
septem à conceptione diebus ac tempore partui proximo ad abstinendum
à maritali congressu obligantur propter abortus limorem .
Los médicos y los comadrones modernos no desmienten los testimo
nios de los antiguos. Elcélebre comadron Levret atribuia al coito la
mayor parte de los abortos cuya causa no se podia determinar: Zim
mermann , Gardien , Murat, Dugès , etc. , tambien miraron aquel acto
como á causa frecuente de los abortos. Cuéntase en general , dice
Marc , que doscientas prostitutas no producen mas de dos á tres cria
turas al año. Este resaltado se halla conforme còn las observaciones
de Parent -du Châtelet. Los partos laboriosos y desesperados , en los
cuales la madre sucumbe con su fruto , dice Cangiamila , a menudo
tienen por causa el desarreglo de la pasion io moderada con que se usa
delmatrimonio . . . . . .
Como quiera que sea , en cuanto al valor real de todos esos graves
testimonios, un confesor discreto y prudente se abstendrá en general de
PART: 11. CAP. 11. 189
hacer , sobre esta materia , preguntas importunas é intempestivas , y
dejará á los esposos en la buena fe, por temor de que tratandode des
viarles de un mal no se les dé ocasion de caer en desórdenes mas gra
ves. Atendráse pues ordinariamente a las advertencias generales que
podrá deducir de lo que acabamos de manifestar ahora mismo en órden
á los abortos. Aquí no hablamos sioo de los casos en que el embara
zo es cuarido menos moralmente cierto . Por otra parte la naturaleza , el
instinto , la razon , el sentimiento moral ó por lo menos el interés bien
entendido deben , en época adelantada , decir algo y servir gene
ralmente de consejero . ó'de amonestador. Con todo , bưeno seria que
el confesor ó el pastor estuviese instruido del peligro de aborto , á fin
de que en ocasion favorable pudiese dar los consejos útiles ó necesa
rios.
Sanchez opinia con algunos otros á quienes cita , que no se peca ab
solutamente pidiendo el débito conyugal estando la mujer en cinta .
Empero ese'parecer de una débil minoría jamás prevaldra contra la
opinion comun de los teólogos. Elmismo S. Ligorio parece que desecha
elsentir de Sanchez cuando dice, despues de haberlo referido : «Mihi
årridet sententia quam tenent Pontius, Azor , Bossius , etc . , nempè
quod coitus cum prægnante non possit excusari à culpâ veniali , nisi
adsit periculum incontinentiæ , vel alia honesta causa .» (Lib . 6 ,
n . 924. )
Más aun en seinejante caso un gran número de los autores mas gra
ves , como S . Agustin , S . Gregorio ' el Grande , S . Fulgencio , santo
Tomás , S . Buenaventura , Sylvio , Collet , Billuart , Dens, etc . , pien
san', y con razon , que la peticion deldebito no deja de ser pecado ve
nial, porque si bien se ejerce el acto conyugal con el objeto de evitar
la incontinencia , hálase privado de su fin principal y primordial, que
es la procreacion : el objeto de evitar la incontinencia no es mas que
accesorio y secundario ; por otra parte este último puede conseguirse
valiéndose de otros medios , tales como la oracion, el ayuno , macera
viones y mortificaciones corporales , prácticas higiénicas, etc .
3 .° ' Pregúntase si es licita la peticion conyugal en los dias festivos,
en domingo y un dia de comunion . Sto. Tomás responde á eso , segun
S ; Pablo , con estas palabras : «Actusmatrimonialis , quamvis culpâ
careat, tamen quia ratiònem deprimit propter carnalem delectatio
nem , hominem reddit ineptụm ad spiritualia : et in diebus in quibus
præcipuè spiritualibus est vacandum non licetpetere debitum .»
Un poco mas abajo el santo doctor añade lo siguiente : « Tempore
illo possunt alia adhiberi ad concupiscentiam reprimendam , sicut ora
tio et multa alia hujusmodi, quæ etiam illi adhibent quiperpetuò con
190 MOECHIALOGÍA .
tinent. » (In 4 ,dict. 32 , q . 1 ,art. 5 , Quæstiunc., c . 1 , in corp:)
. Esa doctrina fundada en las palabras,de S . Pablo : 'Abstinete vos,ad
tempus, ut vacetis, orationi, es conforme con la de S . Ambrosio y de
S . Agustin . He aquide qué manera se espresa sobre este punto el mas
grande de los doctores y de los Padres de la Iglesia : « Quotiescumque
aut dies natalis Domini aut reliquæ festivitates adveniunt, sicut fre
quenter admonui...etiam propriis uxoribus'abstinere.» (S Aug. in can .
Quotiescumque.)
Sanchez es de opinión contraria , lo mismo que otros muchos autores
que cita , porque, dice, no hay derecho alguno , ni divino ni eclesiás
tico , que prohiba la peticion conyugal en los dias* espresados. Este
célebre autor , despues de haber compulsado los concilios y los cáno
nęs , nada halló que se opusiese , y concluye así : Cùm ergo nulla exi
gendi debiti his temporibus prohibitio reperiatur , nulld erit culpa exci
gere , (Lib. 9 , disp. 12 , n . 5.) Por lo que hace á S. Ligorio , cita el
pro y el contra , á los unos y á los otros, y comosuele hacer con fre
cuencia , no abraza ninguna opinion ni se decide en favor de nadie .
Algunas veces obra así por necesidad , y á menudo por sabiduría y
prudencia . Aquí por lo menos no hay necesidad alguna , puesto que
en el dia aquella continencia no parece ser mas que de puro consejo ;
así por lomenos lo declara Benedicto XIV , segun refiere Mons. Bou
vier , quien dice lo siguiente : « Notat tamen Benedictus XIV, in syno -
do diæcesanâ , l. 5 , cap. 1 , n . 8 , id nunc meri esse consilii, licèt
olim ab Ecclesiâ sub gravi præscriptum fuerit. » ¿ Cómo , pues, se han
de conciliar estas palabras subrayadas con el aserto de Sanchez aquí
arriba referido? Luego será menester decir ó que han sido abolidas las
prescripciones antiguas, ó que no eran mas que meros consejos de pér
feccion , y no reglas prohibitivas; luego no es mas que un consejo en
la Iglesia latina , mientras que, como dice Balsamon , es un precepto
para los cristianos de Oriente .
Con ese motivo preguntan los teólogos si aquel que ha esperi
mentado una contaminacion nocturna puede comulgar el dia siguien
te. Responden ellos con S . Gregorio el Grande en su carta á S. Agus
tin , el åpóstol de Inglaterra . He aquí lo que le escribió aquel gran
Papa , sègun Mons. Bouvier : «Vel illa pollutio provenit ex superfluita
te paturæ autex infirmitate, et mioimè est culpabilis ; vel ex quodam
excessu in usu alimentorum , et est peccatum veniale ; vel ex præce
denti cogitatione , et mortalis esse potest : in primo casu , hæc illusio
non est timenda ; in secundo , à susceptione sacramenti et celebratione
mysterii non impedit si quædam ratio excusans id suadet, v . g. , cir
cumstantia diei festi aut dominicæ ; in tertio autem casu , propter ta
PART. II. CAP. I. 191
lem pollutionem à sacro mysterio eâ die abstinere oportet , inquit sanc -
tùsGregorius ; aitamen , si pollutio non fuerit mortalis in causâ , aut
si sacerdos , verè pænitens, ab eâ absoluţus fuerit, et aliqua ratio id
suadeat , celebrare poterit. »
Desde el tiempo de S. Gregorio , estos principios han servido de ba- .
se á la enseñanza teológica y á la práctica de los confesores.

S . III.

Del pago del debito conyugal y de las razones legítimas quedispensan de


pagarlo .
El débito , como es sabido, ha de pagarse so pena de pecado mortal
siempre que sea pedidoʻrazonable, séria y legítimamente , sive expres
sivè , sive tacitè , quia nihil refert, ait S . Thomas , an verbis vel sig
nis petatur. Undè , si pars cognoscat aut videat compartem suam tacitè
petere , vel esse in periculo incontinentiæ , illam prævenire tenetur.
He aquí las razones que impiden ó que escusan de pagarlo .
1 . El esposo que está moralmente cierto de la nulidad de su ma
trimonio no puede pagar el débito á su parte , aun cuando esta la ig
nore y en cuanto á esto obre de buena fe . Véase mas arriba , p . 183.
Empero si solamente dudase de la validez del matrimonio, estaria obli
gado a pagarlo á su parte , que no participa de semejante duda. Si
ambos esposos dudasen , ninguno puede pagar y menos aun pedir el
débito conyugal , etc. Para evitar repeticiones, vea el lector el pár
rafo 1 .º , p . 183.
2.° Si el esposo que pide el débito conyugal se halla demente ó en
estado de enajenacion mental , no hay obligacion de pagárselo , por
que semejante peticion no es un acto humano. Si la locura presentase
intervalos lúcidos , entonces deberia pagarse el débito , a no ser que
el uso del matrimonio aumentase la enfermedad. En cuanto al esposo
que la perdido el uso de la razon por embriaguez , no hay obligacion
alguna de obedecerle mientras se halláre en este estado de degrada
cion , porque entonces la peticion no se hace humano modo , como di
ce Sylvio , quien compara el borracho á un hombre que duerme : «Si--
dice - vir dormiendo et somniando requireret debitum , uxor non tene--
retur acquiescere : ebrius autem non est melioris conditionis quàm
dormiens et somnians.» Sanchez se espresa en el mismo sentido y casi
en iguales términos . Sin embargo esceptua el caso en que la negativa
espusiese al marido á caer en pecado de incontinencia , y pueden aña
dirse aquellos en que este se abandonase á otros escesos contra su mu
26
192 MOECHIALOGÍA .
jer, á malos tratamientos, sevicias, brutalidades, palabras obscenas
ó blasfemias delante de los hijos ó de los criados, etc . En todas estas
circunstancias habria obligacion de pagar el débito , sino de justicia ,
á lo menos de caridad .
Sanchez dice que por lo regular no debe pagarse el débito á una
mujer demente y furiosa , á causa de que siempre es de temer el abor
to ; á menos, añade, que sea reconocida como á estéril. Regulariter
illicitus est concubitus ubi uxor amens est et vir mentis compos : quia
probabilissimum subest periculum fore utmulier , ipsaniæ furore cor
repta ; fætum in utero necet. Cessante autem tali periculo , sive quia
ita sterilis est utnulla subsit spes concipiendi, sive quia mitis adıno
dùm est, nec furiosa , licitus est congressus. (Lib . 9 , disp . 23 , n . 8.)
Bueno serà hacer observar aquí que la esterilidad , sin ninguna señal
de impotencia apreciable , jamás debe ser considerada como absoluta
y perpétua : una mujer podrá ser estéril durante quince y veinte años,
y ser fecunda despues. Así, pues, no hay señales absolutamente cier
tas de esterilidad perpétua , como las hay de impotencia perpétua. Por
lo que hace á la mujer demente quæ mitis admodum est , desde el mo
mento que es demente , puede volverse repentinamente furiosa , porque
las locuras cambian å veces súbitamente de forma ; y bastante claro es
que este cambio es mas probable que el de esterilidad en fecundidad.
Así pues , segun eso , lo que dice Sanchez no debe aceptarse en sentido
absoluto , porque , como se ve , su proposicion no és evidente y abso
lutamente incontestable .
3.° El esposo que no puede pagar el débito sin esponer gravemente
su salud no está obligado á pagarlo , pues , como se suele decir , priùs
estvivere et sanum esse quàm , etc . Sto . Tomás dice : « Vir tenetur
uxori debitum reddere in his quæ ad generationem prolis spectant;
salvâ tamen priùs personæ incolumitate.» (Sum . suppl. , quæst. 64,
art. 1.) Aquí es preciso decir , que es muy singular que los teólogos no
hagan mencion sino de la lepra y de la peste como razon de dispensa
de la obligacion de pagar el débito conyugal, por causa de enfermeda
des contagiosas , como sino tuviésemos mas cerca ötras enfermedades
contagiosas y subre todo mas frecuentes que la lepra y la peste , que
afortunadamente ya casino reinan en Europa. A mas de que no es de
creer que en la peste , que de repente postra y entorpece profundamen
te y con frecuencia mata en uno ó dos dias , no es de creer, repito, que
el enfermo se halle en elcaso ... Non est hic locus nec morbus.
Antes que de esas enfermedades deberia hablarse de la sífilis . A la
verdad , algunos teólogos hacen mepcion de ella , como Sanchez , san
Ligorio , Mons. Bouvier , etc . Pero tambien hay otras enfermedades
PART. II. CAP . II . 193
contagiosas que se pegan por la cohabitacion conyugal, y que matan
infectando ; al paso que por lo menos la sífilis ó la enfermedad vene
rea , si bien infecta y vicia todo el organismo , le deja no obstante
funcionar y vivir, aunque mas o menos pobremente. La tisis pulmo
nar, por ejemplo , cuando se balla caracterizada , debe ser muy cier
tamente un motivo de escusa ó mas bien una razon prohibitiva. La ti
sis que hace siempre rápidos progresos durante el matrimonio , tanto
mas cuanto los tísicos se ven con frecuencia impulsados por sentimien
tos eróticos ó libidinosos, la tisis , repito , se transmite muy cierta
mente al otro esposo si es el mas jóven y si ofrece la menor predispo
sicion. A mas de que, sabido es que esta terrible y frecuente enferme
dad de los pulmones tảmbien á menudo se transmite á los hijos. No
hablamos de la epilepsia esencial ó nerviosa , que el coito exaspera
casi siempre, y que el otro esposo , la mujer sobre todo , puede tam -
bien contraer por una especie de contagio nervioso ó de imitacion au
tomática ; tampoco hablaremos de las escrófulas graves é inveteradas
que por lo comun son hereditarias , y que muchas veces hacen dege
nerar las familias ó las razas ; lo que es inevitable si ambos esposos
son escrofulosos. Una legislacion previsora y sabia deberia tomar en
consideracion esos datos y hechos , y sobre todo proveer el oportuno
correctivo ; é y no habria tanta y mas razon para eso que para ciertos
grados de parentesco ? Segun el doctor Lugol , que escribió un libro
ex professo sobre las enfermedades escrofulosas despues de treinta años
de práctica en un vasto hospital de escrofulosos (San Luis) y en la
capital, las familias que contraen matrimonios entre ellas mismas
pronto se vuelven escrofulosas por la falta de cruzamiento de las ra
zas. Sin duda que por respeto á la libertad individual, respeto que
uno desearia algo mas ilustrado y previsor , nuestro Código ó el dere
cho francés no admite como motivo de oposicion al matrimonio otra
enfermedad que la demencia ó locura , que, como se sabe, inhabilita
al hombre para todo contrato en razon de la falta de libertad moral y
de libre consentimiento.
Finalmente tampoco hablaremos de la raquitis , de aquellos vicios
de conformacion de la pelvis que matan á las mujeres con sus hijos
en el mismo momento que esperaban 'ser madres . En otra parte exa
* 'minaremos estas cuestiones.
Bastante conocido es que en todas esas enfermedades , cuando son
ciertas, graves y adelantadas , no debe pagarse el débito conyugal, y
en la sífilis jamás, hasta que esté curada completamente . En una pa
labra , todo esposo enfermo , achacoso , valetudinario , débil , decai
do, etc., que no puede pagar el débito sin grave y notable perjuicio
194 MOECHIALOGÍA .
de su salud , debe estar dispensado de pagarlo mientras dure su debi
lidad ó su enfermedad. Así lo decide la razon y él puro buen sentido.
La mujer no podria negarse á pagar el débito alegando por causa los
grandes dolores ó las dificultades que se esperimentan al parir; por
que esas son las inevitables consecuencias del matrimonio. Sin embar
go ', si despues del juicio ó de la decision de los hombres del arte , o
en virtud de propia esperiencia de la mujer , no pudiese efectuarse el
parto sin riesgo de su vida , en este caso grave está dispensada de pa
gar el débito conyugal. Los abortos muy frecuentes tampoco la eximen
de la obligacion de pagarlo .
4 .° La mujer no está obligada á pagar el débito durante la época
del flujo menstrual, y aun mucho menos durante el tiempo del flujo
loquial ó puerperal (tempore puerperii) , como ya dijimos en la pági
na 188. Pero aquí daremos las razones de eso ; estas razones , por lo
que hace al último punto , son los grandes peligros que un coito tan
intempestivo é inoportuno puede ocasionar a la mujer recien parida. En
efecto , en los primeros dias despues del parto , las causas físicas y
morales , siquiera sean de ordinaria intensidad , muchas veces deter
minan metro -peritonitis ó fiebres puerperales , es decir , inflamaciones
muy a menudo mortales del bajo vientre y del útero. La falta será pues
tanto más grave cuanto mas probable fuere el peligro . He aquí lo que
dice Sanchez tocante á esta materia : « Tunc de culpâ judicandum es
sel juxta morbi gravitatem ejusque probabilitatem . Atque ita cùm no
tabilis morbi aggravatio timeretur esset mortale , ut benè docent...
(varios autores que cita ), sive petat, sive reddat conjux.» (Lib . 9 ,
disp . 22 , núm . 15.)
Se ve, segun eso , que Sanchez se aproxima aquí á lo cierto . En
igual sentido habla S. Ligorio . He aquí sus palabras , que son mas
esplícitas que el testo de Sanchez : « Poterit aliquandò esse mortale si
ex concubitu grayis morbus vel notabilis aggravatio morbi immineret ,
ut dicunt S. Anton . et Sanch . , cum Palud. Sylvest. , Aug. , etc . Hu
jusmodi periculum etiam prudenter timeri potest, ut ait Ronc., si
coitus habeatur stalim post partum ; nempè eodem die vel sequenti, ut i
medicus valdè peritus mihi asseruit.» (Lib . 6 , núm . 926 .) .
Nada sin duda hay'de mas cierto que lo que dice S . Ligorio , ó por
lo menos los autores de quienes es órgano , si con todo puede creerse
que se cometan tales escesos ó semejantes enormidades , aunque no son
por cierto imposibles. Desde entonces se concibe que el pecado no de
he ser mínimo.
Para hacer resaltar mejor todos los peligros de una cohabitacion
prematura y la gravedad de la falta que de ella se seguiria , vamos á
PART. II. CAP. I. 195
referir en compendio las principales causas físicas y morales de la ter
rible enfermedad que ocasiona la muerte á tantas mujeres recien pa
ridas.
He aquieste compendio etiológico: las causas determinantes ú oca
sionales de la peritonitis puerperal son principalmente todas las emo
ciones y conmociones del alma vivas y súbitas, sean cuales fueren ,
de gozo , de placer, de dicha , de pena , de terror, de espanto ; en una
palabra todas las afecciones morales , sobre todo las que por su natura
leza son tristes y aflictivas , y que por lo tanto debilitan siempre mas ó
menos el sistema nervioso , ó por lo menos encadenan su poder ó el sa
ludable influjo que ejerce sobre toda la economía . Añádanse á estas
algunas causas físicas , como las vicisitudes atmosféricas , las bruscas
transiciones del calor al frio , etc .
He aquí como acerca de esto se espresa un nosógrafo moderno , el
doctor Authenac , al hablar de las causas de las peritonitis puerpera
les : « 1.° Durante el embarazo , los repetidos desbarros de régimen ,
una constitucion irritable y pletórica, la vida sedentaria y la habitud
ó de una buena mesa ó bien de un malalimento , la falta de limpieza ,
los disgustos domésticos ; 2.º durante el parto , un trabajo largo y pe
noso , ó una confianza escesiva inspirada por un parto muy feliz ;
3.° despues del parto , un libre acceso y repetidas conversaciones, con
parientes y amigos ; las conmociones de alegría ó una entera seguri -
dad ; contrariedades ó afecciones morales tristes , que una gran sus
ceptibilidad bace mucho mas peligrosas; desbarros en el régimen ; la
imprudencia de salir demasiado pronto de la cama, de esponerse a un
aire frio y húmedo , etc .)
Segun eso se podrá apreciar fácilmente el efecto que pueden produ
cir los escesos que hemos tomado en consideracion . Volvamos otra vez
al asunto .
Los teólogos suelen asimilar y confundir , equivocadamente segun
creo , estos dos estados de la mujer, es á saber, la circunstancia mens
trual y la circunstancia puerperal , y de ambas sacan la misma cone
clusion práctica . He aquí como se espresa Mons.'Bouvier acerca de
este punto : «Uxor debitum reddere non tenetur tempore fluxûs mens
trui vel puerperii , nisi meritò timeat ne vir incontinentiæ periculum
incurrat ; si tamen precibus illi persuadere non possit ut ab actu de
sistat , finaliter reddere debet, quia semper timendum est periculum
incontinentiæ , vel jurgium , vel aliud incommodum . Ita S. Bonaven -
tura et mulli alii apud Sanchez.)
Debe saberse abora que es menester ser mucho mas severo sobre
el segundo punto , ó tener razones mas fuertes que para el primero , so
196 MOECHIALOGÍA .
bre todo en época poco lejana del parto . El piadoso y sabio médico
Zacchias , de quien ya hemos hablado , calcula á un mes poco mas ó
menos el tiempo que la mujer necesita para restablecerse y hacerse
apta para llenar los deberes conyugales.
En cuanto al tiempo de la lactancia hay infinitamente menos incon
veniente en pagar el débito , y en cuanto á esto podemos adherirnos al
parecer de Mons. Bouvier, quien formula así la opinion teológica :
«Communissimè docent theologi licere debitum reddere et petere tem
pore lactationis, quia experientiâ constat qudd rarissimèlac bậc ac
tione inficiatur.» (Sanchez, 1. 9 , disp . 22 , núm . 14 , et S. Ligorio ,
1. 6 , núm . 911.)
Sanchez, sin embargo , añade estas palabras : «Fateor..... excusari
à reddendi debiti obligatione matrem lactantem prolem et ita paupe
rem 'ut non sit solvendo nutrici lactaturæ , expertamque ubera exiccari
si concipiat, aut lac esse valdè perniciosum proli.» (Ibid .) Podemos
dejar pasar eso .
Las nodrizas que crian criaturas de otros las perjudican usando del
matrimonio , sobre todo si se hacen embarazadas y llegan a perder la
leche , ó no conservan la suficiente para criarlas como conviene . En
tales casos los confesores deben obligar á las nodrizas á devolver las
criaturasi á sus madres. Aun podria haber casos en que las nodrizas
estuviesen obligadas á hacer alguna restitucion , por razon del daño
que la falta de leche puede haber causado a la salud delas criaturas.
5 .° El esposo no está obligado á pagar el débito a su parte que ,
por el hecho de un adulterio , perdió el derecho de pedirlo . No obs
tante estaria obligado á pagarlo si él mismo fuese culpable de adulte
rio , ó que hubiese sido la causa del adulterio de su parte por haberse
negado á pagarla el débito pedido : entonceshabria una especie de com
pensacion ; como dice Inocencio III : Paria delicta mutuâ compensatio
ne tolluntur , (De adulteriis.)
6 .° 'Una de las partes no está obligada á pagar el débito cuando es
pedido de una manera contraria á la honesta exigencia de la razon ,
« quandò - como dice Sanchez - conjux nimius esset in petendo , ratio -
nisque limites excederet , non semper teneretur alter reddere, sèd mo
deratè .»
7.0 No es lícito negar el débito ob metum numerosioris prolis, co
mo dice Bouvier . Los esposos cristianos deben confiar en Dios, quien
bendice á las familias numerosas cuando esperan de su bondad provi
dencial lo que no pueden lograr con su trabajo y honesta industria .
El Padre celestial , dice S . Jerónimo , mira con indignacion a los es
posos que no confian en su providencia . Sin embargo Sanchez , con
PART. I . CAP. II. 197
otros varios que cila , pretende que en el caso de que se trata puede
establecerse lo contrario . He aquí sus palabras : « Id tamen fatebor ,
nimirùm non esse mortale debitum ob eam causam negare , quando
non est incontinentiæ periculum in altero conjuge, et parentes non suot
satis tot filios alendo. Quia ab aliis justitiæ debitis persolvendis excn
satmagna incommoditas, non enim cum magno suo incommodo tene
tur quisquam restituere . Prætereà quia non tenetur conjux reddere ,
si timor probabilis adsit periculi aut detrimenti prolis jam genitæ :
quod tamen verisimile est aliis filiis jam natis, si adhuc proles multi
plicetur parentibus destitutis facultatibus quibus eos alant... imd nec
venialís culpa erit in hoc eventu debitum negare .» (Lib . 9 , disp. 25 ,
núm . 3.)
Creemos que esta opinion de Sanchez y de aquellos que él cita no
es segura en la práctica , tanto mascuanto dichos autores á lo que pa
rece fundan su parecer en una condicion cuyo perfecto cumplimiento
no es facil obtener , es decir, la falta del peligro de incontinencia. En
efecto ¿ cómo podrá el confesor contar con la seguridad que le dé su
penitenta de la continencia perpétua de su marido ? En este caso debe
ra siempre exigir que la continencia tenga lugar con libre y mútuo
consentimiento , y que a pesar de esta resolucion.cada parte esté siem
pre dispuesta á pagar el débito cuando la otra se lo pida .
.: S. IV .

Delos esposos que pecan mortalmente pagando el débito conyugal.'


1 .° Se peca mortalmente pagando el débito cuando este es exigido
en circunstancias que hacen esta peticion mortalmente mala ó escan
dalosa , cuando por ejemplo , como dicen los teólogos, petitio fit in lo
co sacro vel publico , vel coram liberis et domesticis (lo que sucede ra
ra vez ), vel cum periculo abortûs aut gravi periculo petentis , vel
alterius sanitatis , vel cum evidenti discrimine semen extra vas effun
dendi , cùm aliter possent coire ; aut coeundo modo innaturali , sodo
mico , etc. Todo eso es mucho mas frecuente. Certum est , in omnibus
bis casibus , reddentem etiam mortaliter peccare , quia in ipsomet
crimine participat et malitiam ejus assumit.
2.' Seria igualmente una falta mortal , como vimos ya en otra par
le , el pagar el debito á la parte perpetuamente impotente.
3. «Si vir aded sit decrepitus vel debilis, ait DD. Bouvier, ut ac
tum perficere nequeat, nec spem illùm perficiendi habeat , mortaliter
peccaret'debitum exigendo , quia esset actus contra naturam , et uxor
• 198 MOECHIALOGIA .
eâdem ratione mortaliter peccaret reddendo. Si verò identidem vir ac
tum perficeret quamvis sæpè non consummaret , uxor reddere potest,
imd et tenetur , quia ob dubium de felici exitu maritum jure suo pri
vare non posset : ipsemet maritus in illo casu debitum licitè petit, dùm
aliqua est ratio sperandi fore ut ad consummationem perveniat, et si
contingant semen extra vas effundi, id per accidens evenire censetur,
nec ad peccatum imputatur. At ubinulla remanet spes ad consụmma.
tionem actûs perveniendi, certum est ab illo sub mortali abstinendum
esse . Ita Sanchez , 1. 9 , disp . 17 , n. 24 ; S . Ligorio , 1. 6 , n. 954 ,
dub. 2 , et multi apud eos. )
4 .° Se preguntà si se puede, sin pecar mortalmente , pagar el dé
bito al que lo pide, aunque haya hecho voto de castidad ó que se pro
ponga un fin criminal. Nótese que en este caso la circunstancia no
pertenece ya al acto , sino a la persona que pide el acto .
Pretenden unos que en semejante caso se peca mortalmente pagan
do, eldébito , a menos que una causa grave lo escuse , porque, dicen ,
la parte que pide no tiene poder sobre la otra , y que siendo criminal
el acto en la persona que lo pidió , por razon del voto y del fin crimi
nal , no puede la otra parte participar del crímen .
Otros , y no pocos , dicen por el contrario que no solamente la par
te puede pagar el débito , sino que está obligada á pagarlo , porque,
segun ellos, la parte que lo pide no perdió su derecho por su voto ; es
verdad que lo pide ilícitamente , pero no injustamente . Para probarlo
mejor hacen esta comparacion : Elque hubiese hecho voto de no pe
diros.el dinero que le estais debiendo , si contra este voto viniese á
exigiroslo , ipodriais acaso negárselo ? cierto que no ; luego tambien ,
concluyen , la parte libre no puede negar el débito á la otra que lo pide
á pesar de su voto y de pecar mortalmente. Tal es la opinion de San
chez , de S . Ligorio , de Mons. Bouvier y de otros muchos.
No obstante es preciso hacer observar que el esposo å quien se exige
así el débito está obligado , en virtud del precepto de la caridad , á ad
vertir al otro esposo á fin de impedir que peque mortalmente , con tal
que esta advertencia no sea una ocasion de incontinencia , de discor
dia ó de un violento arrebato de cólera , inconvenientes graves que á
menudo son de temer y que , entonces y desde que se vea que no que
da esperanza de enmienda , dispensan de hacer la correccion fraternal.
Hay que hacer otra observacion : todos convienen en que la parte
libre ó no ligada por voto puede licitamente pedir el débito ; y enton
ces se le aconseja que lo haga cuando viere á la otra dispuesta á pe
dirlo : de este modo se evita que esta cometa un pecado mortal.
· 5° Hemos dicho en la página 185 que un esposo que ha cometido
PART. II. CAP . II. 199
un incesto con una persona pariente de su parte en primero ó segundo
grado pierde su derecho de peticion conyugal, y que no puede exigirlo
sip pecar mortalmente. Siendo esto así , se propone à la parte inocen
te , que conserva todo su derecho , que haga lo que acabamos de acon
sejár ahora mismo , es decir , que pida el débito , puesto que puede , á :
fin de impedir que la otra parte peque 'mortalmente pidiéndolo ella
misma.
* Sin embargo , varios autores citados por Sanchez, uno de tantos
Sto . Tomás, pretenden que seria pecado mortal el pagar el débito en
semejante caso , porque , segun ellos, .se tomaria parte en una accion
mortalmente mala , como lº seria entonces el pedir el débito conyugal.
Empero la opinion de Sanchez, de S. Ligorio y otros muchísimos teó
logos es mucho mas comun y mas probable . Estos doctores afirman
que en tal caso no se comete falta alguna pagando el débito , si pruden
lemente no se puede desviar de su pecado al esposo incestuoso ; por
que la parte inocente , al ejercer un acto conyugal, hace una cosa
buena en sí , á la cual tiene derecho , del que no puede desposeerla el
crimen de la otra . Ya sea pues que pida , ya sea que pague el débito,
usa licitamente de su derecbo ; luego no peca , sobre todo si de negarse
á pagarlo le ha de resultar alguna incomodidad , algun inconveniente
grave , y que no pueda impedir el pecado de la otra parte.
sv.
De los que pecan venjalmente pagando eldébito.
1.• Cưando el usar del matrimonio es pecado venial para el espo
so que pide el débito , por ejemplo , como dice Mons. Bouvier , « quia
ob soļam voluptatem petit , aliqua esse videtur culpa in reddendo , si
nulla ratio'excuset; quia est subministratio materiæ peccati venialis:
„sed absoluta petitio est ratio sufficiens redditionem cohonestans ; nam
timendum est ne ex denegatione nascantur rixæ , odia , scandala , pe
ricula graviùs peccandi, etc.)
Mas si la falla es jöherente al acto mismo, ó en estilo teológico , si
culpá se tenet ex parte actús , como, por ejemplo , si el débito fuese pe
dido y exigido en lugares y circunstancias indebidas, es cierto queno
podria pagarse aun con pecado venial, porque nadie puede estar obli
gado, á pecar , ó á concurrir á un acto que es malo en sí ó vuelto tal
por circunstancias malas. Si la falta viene del lado de la persona que
pide el débito , se tenet ex parte petentis , lo mismo que cuando la par
te se halla ligada por un voto de castidad ó por un impedimento de
75C
102
200 MOECHIALOGÍA.
afinidad dimanado de incesto , etc . , la mujer puede pagar el débito , ..
en caso de no poder resistirse sin inconveniente mas o menos grave.
Empero , si pudiese resistirse sin inconveniente alguno, la caridad exi
ge que lo haga para impedir que su marido peque. .
2.° Si el acto conyugal es venialmente ilícito por alguna circuns
tancia particular , como por ejemplo la de la época menstrual ú otra ,
el débito no deberá pagarse sin justa razon . Mas si la mujer tuviese
motivo de temer que su negativa ha de acarrear inconvenientes mas
ó menos graves, será esta una razon suficiente para hacerlo sin temor
de pecar. Sin embargo ella no peca sino venialmente en caso de pagar
lo pura y simplemente sin motivo alguno , puesto que el mismo mari- .
do que pide el débito no comete mas que una falta venial. . .
3.° Los teólogos preguntan 'si una mujer que hasta ahora no ha
dado á luz sino criaturas muertas puede sin embargo pagar el débito o
tambien pedirlo . Sanchez , S . Ligorio y muchísimos otros teólogos lo
afirman y con razon , porque ella hace en ese caso una cosa lícita en
sí y á la cual tiene un derecho incontestable. La muerte de las criatu
ras no sucede sino por accidente , y no puede imputársela . Por otra
parte todos los dias estamos viendo mujeres que , despues de haber
abortado varias veces, dan á luz criaturas vivas. En cuanto a este pun
to no puede caber la menor duda.
Mas he aquí que se nos presenta una dificultad mas séria, sino real,
á lo menos aparentė. Mons. Bouvier afirma que Sylvius, Billuart y
Bailly dicen que la mujer no puede ni pedir ni pagar el débito cùando
está moralmente cierta de que la criatura ņo puedenacer viva , por
que entonces , se dice , no puede conseguirse el fin legítimo del matri-
monio. Esta opinion , añadeMons. Bouvier , así restringida , és la mas
probable y la única que debe sostenerse. No cabe duda que deberia
ser sostenida y seguida si el hecho fuese tal como lo sientan los teó
logos. Pero debe desaparecer delante dela esperanza moralmente cier
ta de hacer nacer vivas, en la hipótesi sentada , de cuatro criaturas.
dos , es decir , la mitad. El arte posee hoy en dia este nuevo secreto ,
este nuevo y precioso método , practicado con buen éxito por la prime- -
ra vez en Francia , en 1831 , por el profesor Velpeau. Este puevo.pro -
cedimiento del arte obstetricio , es el parto provocado ó el parto pre
maturo practicado despues de los siete meses del embarazo , es decir ,
cuando la criatura es vividora.Mas adelante volveremos á tratar de
este punto y lo examinaremos al hablar de la embriología sagrada. En
virtud de lo dicho , es evidente que toda la dificultad queda resuelta,
y que la mujer puede pedir y pagar el débito sin pecar absolutamente,
porque en este caso puede conseguirse el objeto de matrimonio , y por
. PART. 11. CAP. II . 201
otra parte la vida de la mujer no corre ningun riesgo , si á veces se
presenta algun peligro , es muy leve. Si el peligro fuese notable , ma
nifiesto , evidente , como ya hemos dicho anteriormente , claro está
que nunca podria pedirse ni pagarse el débito sin pecar mortalmente .

o ARTICULO II.' ' .


DEL USO DEL MATRIMONIO , DE LAS CIRCONSTANCIAS DÈL ACTO CONYUGAL
Y DE LOS PECADOS QUE EN ESTE ACTO COMETEN LOS ESPOSOS.
• S. I.
Del uso del matrimonio y delos pecados que usándolo cometen los espo
sos, en cuanto á losmotivos.
El acto conyugal , ejercido con un fin legítimo, con espiritù cris
tiano y por un motivo sobrenatural, es no solamente bueno y honesto ,
sino que tambien llega á sermeritorio para la salvacion , si se ofrece
á Dios y se practica con la mira dehacer la voluntad de Dios y de
llenar los deberes de esposos cristianos y castos como Tobías y Sara.
Empero, desde el momento que el acto conyugal se aparta de este
órden 'establecido por el Criador y de la línea trazada por la Iglesia ,
se convierte , por el ánimo dañado del hombre, en una accion mas ó
menos defectuosa , viciosa y.mala , actuspeccaminosus, como dicen los
teólogos, en una palabra , viene a ser una transgresion de la ley ó un
pecado .
1. En primer lugar todo acto conyugal ejercido ob solam volup
tátem , como dicen los doctores, es pecado, aunque venial solamen
te. Esto se prueba por la autoridad de Inocencio XI, quien condenó
en 1679 la proposicion siguiente : Opus conjugii ob solam voluptatem
exercitum omni penitùs caret culpâ ac defectu veniali. La razon tambien
apoya y sanciona esta verdad : el deleite no es sino un medio y no un
fin . Siese 'medio se separa ó está privado de su fin natural, que es la
procreación , viene a ser ilícito porque se convierte en fin , lo que es
un trastorno del orden y veñialmente malo.
Decimos venialmente malo , porque el deleite en un acto bueno en sí
no esmalo por sí mismo ó en sí , sino que tan solo lo es por una falta
de relacion con su fin legítimo : tal es el placer que uno esperimenta
bebiendo y comiendo. El comer, por ejemplo , únicamente por placer
es un pecado, pero venial solamente : en este caso se peca porque se
trastorna el orden y se toma el medio por el fin ; éste pecado es tan so
202 MOECHTA’LOGÍA.
lo venial, porque aquel placer disfrutado en un acto bueno en si , no es
malo por sí mismo, sino únicamente por la falta de relacion con su fin
legítimo , que es el sustepto y la conservacion del cuerpo. Esta es la
doctrina de S. Agustin , de S. Ambrosio., de Sto . Tomás, de S. Bue
naventura y de la gran mayoría de los teólogos , contra algunos que
pretenden que el deleite tomado como á fin en el acto conyugai es pe
cado mortal, y contra algunos que sostienen que no es ninguna espe
cie de pecado. El término medio es tambien aquí, como en muchos
otros puntos, el partido mas prudente y seguro que se debe tomar.
Podemos repetir lo que ya dijimos en otra parte : in medio tutissimus
ibis , ó mejoraun citaremos siempre eloráculo del Espíritu Santo :"Ne
declines ad dexteram neque ad sinistram . (Prov . iv , 27.) Luego es pre
ciso seguir la línea recta , sin inclinarse ni á derecha ni å izquierda.
Conocido es el dicho de Tertuliano : La verdad católica ordinariamente
se encuentra entre dos errores opuestos , como Jesucristo crucificado
entre dos ladrones.
2 . ¿ Es lícito usar del matrimonio para evitar la incontinencia ?
Todos los teólogos convienen en que es lícito pagar el débito al esposo
que lo pida sin otra razon que la de evitar la incontinencia . La dif
cultad consiste ahora en saber si es lícito pedirlo por este solo y único
motivo. En cuanto á esto hay division de pareceres. Los unos, y no
son pocos , aseguran que no se comete ningun pecado pidiendo el dé
bito , y apoyan su opinion en estas palabras de S . Pablo : Propter for
nicationem unusquisque uxorem suam habeat , et unaquæque suum virum
habeat .. Nolite fraudare invicem , nisi forte ex consensu ad tempus ut
vacetis orationi, et iterùm revertimini in idipsum , ne tentetvos Šatanas,
propter incontinentiam vestram ; hoc autem dico secundùm indulgên
tiam , non secundùm imperium ; volo enim omnes vos esse sicutmeipsum .
(1 Cor. , 7.) A lo que parece , S . Pablo no considera aquí la inconti
nencia como solo y único motivo de su indulgencia con respecto al
uso del matrimonio ; de lo contrario podria deducirse que el apóstol
concede la facultad de pecar. Apóyanse tambien en la autoridad del
catecismo del concilio de Trento , qué da por razon de contraer ma- .
trimonio , utqui sibi imbecillitalis suæ conscius, est nec carnis pugnam
vult ferre , matrimonii remedio ad vitanda libidinis peccata utatur, de
quo ita apostolus scribit : propter fornicationem , etc. Es preciso potar
que S. Pablo y el concilio de Trento no escluyen el fin primario ó la
procreacion , antes al contrario , la suponen ; pues el sentido de sus
palabras,debe entenderse así : es lícito úsar del matrimonio para evi
tar la incontinencia (fin secundario), pero en el orden de la procrea
cion , in ordine ad prolem . A mas de que , un acto honesto en sí , re
PART. II. CAP. 11. 203
ferido á un fin honesto , do puede ser malo. Ahora bien , el actó con
yugal es honesto en sí , y el evitar la incontinencia es igualmente un
fin honesto ; luego , etc . Así opipan S . Antonino , Paludano , Soto ,
Sylvestre, Roncius , Lacroix , S. Ligorio y otros varios que cita este
último. . o
De otro lado otros muchos teólogos y de los mas autorizados, tales
como S . Agustin , $ . Gregorio el®Grande , S . Fulgencio , Sto . Tomás,
S. Buenaventura , Sylvio , Collet , Billuart,'Dens, etc., afirman muy
positivamente que el acto conyugal ejercido con el objeto de evitar la
incontinencia es pecado venial. Las poderosas razones que aducen en
apoyo de su opinión son las siguientes : Todo acto que no se refiere á
su fin legítimo adolece de falta moral ó de pecado ; el fin del acto ma
trimonial es la procreacion ; luego , sieste acto se“realiza con otro fin ,
como por ejemplo el de evitar la incontinencia ó el de estinguir la
concupiscencia carnal, fin laudable sin duda , pero que no es mas
que secundario ,' y que por otra parte ordinariamente puede conseguir
se por otros medios ; si el acto conyugal, decimos, en vez de ir diri
gido á su fin principal ó a su fin primario , se dirige únicamente á su
fin secundario , es evidentemente pecado , pero no puede ser mas que
venial. Por otra parte e no es pecado el obedecer sin justa razon á los
movimientos eróticos ó libidinosos que se esperimentan cuando podrian
calmarse de otra manera ? sí pór cierto . Sylvio , Billuart y Dens sos
tienen que , aun cuando se tenga la mira de la procreacion , se pęca
sin embargo. venialmente si al propio tiempo se propone el deleite
inberente al acto conyugal, porque , en fin , se obedece siempre a la
pasion . Sylvio todavía se adelanta mas , pues quiere , pero ciertamente
va muy errado , que en el acto ejercido con el fin genésico el consen
timiento en el deleite inherente á este acto sea tambien una falta ve
nial, puesto que , dice él , aquel placer dimana de la naturaleza cor
rompida , y por lo tanto es vergonzoso y oscurece la luz de la razon .
Esta opinion es inaceptable , porque desconoce el fin fisiológico , el
derecho natural. Ya lo hemos dicho varias veces en otras obras, la
naturaleza siempre une una sensacion de placer a todas las funciones
voluntarias de la economía animal que tienen por objeto la conserva
cion de los individuos ó de las especies; pues á no ser así , los indivi
duos y las especies olvidarian ú omitirian aquellos actos á los cuales
nada les moveria ni les impeleria , y muy pronto la muerte vendria á
ser el resultado de su inaccion y reposo . Si cuando uno se ve apurado
por el bambre ó por la sed , no esperimentase mas placer en el comer
ó en el beber que en tomar una medicina muy amarga é ingrata ; ó si
la union sexual no ofreciese mas atractivo sensitivo á las especies ani
204 . MOECHIA LOGIA .
males que unas incisiones cutáneas ó unas operaciones sangrientas ,
& por ventura semejante órden natural ó-fisiológico no seria subversivo
y destructor de su naturaleza y no acarrearia muy pronto una muerte
cierta y universal ? .
Finalmente otros teólogos, Sanchez uno de tantos, admiten una ter
cera opinion , y no reconocen que deje de pecarse venialmente , en el
acto conyugal ejercido como á remedio contra la incontinencia , sino
cuando se han empleado en vano todos los medios ordinarios.
Segun Sto . Tomás y la generalidad de los teólogos , no es lícito el .
contraer matrimonio ó usar de él precisamente para conservar ó reco
brar la salud ; porque , dicen , semejantę fin es estraño al matrimonio ;
el acto conyugal por consiguiente, hallándose,privado de su fin legíti -
mo, es pecado venial. No obstante , si la salud no es mas que el fin
secundario , y se propone la procreacion: ante todo , no se cometerá
en este caso falta ninguna; eso es evidente . (Mons. Bouvier.) . .
· Poş otra parte puede sostenerse que la conservacion de la salud es,
lomismo que el evitar la incontinencia , un fin secundario delmatri
monio , puesto que, siendo este instituido para la propagacion de la
especie , esta propagacion no puede cumplirse si los individuos carecen
de la salud y fuerza convenientes. .
El esposo que desea que el acto 'conyugal sea estéril peca , segun
opióan todos los teólogos, pero solamente de una manera venial ,-por
que el fin del precepto no cae bajo el precepto. Tal es el sentir de San
chez , de Mons. Bouvier y de otros muchos teólogos , contra una débil
minoría , por mas que diga Sættler, quien se espresa así : « Quòd si
quis desideret non habere prolem , juxta multos peccat mortaliter, quia
hoc desideriu'm graviter repugnat fini matrimonii.» El comentador de
Sættier, M . Rousselot, añade esta nota : « Juxta alios longè plures ,
desiderium illud , si hîc sistàt , si sit mere speculativum , nihilque
agatur quo generatio impediatur,.est tantùm veniale , sed periculo
sum , ait Vernier, ut ducens ad mortale. Ita Dens, Sanchez , Syl
vius , etc., et DD. Bouvier .»
Todo puede pues resumirse en estas pocas palabras de Collet : « Co
pula alio quocumque quàm in generationis aut justitiæ fine exercita
semper est peccatum .» Esta proposicion está fundada en el siguiente
pasaje de S. Agustin : «Concubitus necessarius causâ generandi , in
culpabilis... ille autem qui ultra istam necessitatem progreditur , jam
non rationi, sed libidini obsequitur. Et 'hunc tamen non exigere , sed
reddere conjugi, ne fornicando damnabiliter peccet, ad personam per
tinet conjugalem .» (Lib . de bono Conj.) En otra parte delmismo libro,
S . Agustin aun añade esto : « Reddere debitum conjugale nullius est
PART. II. CAP. II. 205
criminis ; exigere autem uſtra generandirecessitatem culpæ venialis:)
Sto. Tomás se espresa sobre este punto de la mismamanera y todavía
es mas esplícito . He aquí sus palabras : «Duobus solis modis conjuges
absque omni peccato conveniunt , scilicet causå prolis procreandæ et
debiti reddendi ; aliàs autem semper est ibi.peccatum ad minùs ve
niale.» (In 4 , dist. 31.) . .
Fuera de esto no insistiremos mas acerca de estos diversos puntos ,
que no deben ser de grande importancia práctica para los confesores,
en el concepto de que no pueden hallar en ellos ni dificultades ni em
barazos graves y serios. i .
S . II.

De las circunstancias en que el usar del matrimonio es generalmente pe


cado mortal, en cuanto al acto , conforme á la opinion de todos los
teólogos.
1 :9 Juxta omnes theologóspeccatum est mortale si quoad situm con
cubitus non sit naturalis et adsit grave periculum effusionis extra vas,
sive in petendo , sive in reddendo debitum . « At], inquit DD : Bouvier,
secluso tali periculo , debitum sic petere aut reddere absque necessi
tate peccatum est duntaxat veniale , quia talis inversio non est essen
tialis , nec generationi obstat. Severè tamen increpanda est. *Positâ
verò necessitate sic agendi , v. g . , ob graviditatem vel quia corpus
ndacopericulum
iadsit
alium Mortalnon
situm usionis nnullum
in efpatitur,
feffusionis ullum erit peccatum ,modd probabile non
extra vas.)
2.° Mortaliter peccant conjuges qui , ut infrà latiùs videbitur , de
industriâ talem effusionem concitant, vel etiam qui coitum sodomitice
inchoant cum intentione ritè et adamussim illum consummandi : talis
enim actus inordinatus , cùm ex se ad effusionem extra vas .multùm
inducat, nihil aliud reputandus et habendus est quàm incæpta sodo
mia . Ita Sanchez, S. Ligorio, D. Bouvier et alii multi. Addendum est
generatim cònjuges lethaliter peccare si actus valdè turpes et naturæ et
honestati graviter repugnantes et adversantes , et hîc .non nominandos
exercere non erubescant.
3.° Rúrsùs peccant mortaliter . conjuges qui quovis modo genera
tionem impediunt , vel prolis , ut ait Collet , .per abortum ejiciendæ ,
vel graviter lædendæ periculo se exponunt.
· 4 .° Mortaliter iterùm peccatur, inquit idem doctus Collet, « cùm
vir retrahit se , vel completè non seminat in vase. Idem est cùm mu
lier susceptum semen de industriâ ejicit , aut ejicere conatur , aut se
206 MOECHIALOGIA .
men proprium de industriâ privatim effundît.» Es preciso hacer obser
var , de paso , que 'esas precauciones de la mujer , aunque criminales
por la intencion , son vanas-é ilusorias ; y por consiguiente incapaces
de alcanzar el objeto que ella se propone , desde el momento en que
el acto queda consumado debida y normalmente. Es tambien con mas
motivo una precaucion bien fútil y vana la que toman ciertas mujeres,
segun algunos teólogos', dùm statim post copulam surgunt.
San Antonino, S . Ligorio , Sanchez , Pontius, Bonacina , Layman ,
Sporer y otros varios citados por S. Ligorio (lib . 6 , n . 918) asserunt
peccatum non esse mortale si , incæptâ copulâ , conjuges cohibeant se
minationem , id est si , ante seminationem , vir de consensu mulieris
se retrahat ,modò absitpericulum seminandiextra vas., vel periculum
pollutionis in utroque conjuge. Plures alii meritò , ut Navarrus, Le
desma, Azor , etc . , peccatum mortale esse autumąnt , quia impeditur
generatio ad quam copula naturâ suâ ordinatur, et proindè actus con
jugalis fine suo primario frustratur , qui generatio est. Appositè addit
D . Bouvier : « Tum quia semper est periculum pollutionis in viro, tum
quia graviter est contra naturam copulam sic relinquere imperfec- '.
tam .... hæc opinio sola sequenda est in praxi.» . .
Tambien hay otras ciertas cụestiones que me parecen de poca im
portancia , y que por consiguiente no merecen que nos ocupemosmu
cho en examinarlas. Por ejemplo , S. Ligorio (lib. 6 , n. 918) pregun
ità : « Si autem vir jam seminayerit , dubíum fit, an femina lethaliter
peccet si se retrahat à seminando ? aut peccet lethaliter vir non ex
pectando seminationem uxoris ? » He aquí mi respuesta á esas dudas :
la casi espermatizacion de la mujer ó seminatio feminea , como dicen
los teólogos , no pareciendo ņecesaria á la generacion , po vemos que
sean muy sólidas las razones que aducen en favor del pecado mortal
en l'as especies , porque la materia que forma la espermatizacion de la
mujer no es un verdadero sémen , sino meras mucosidades vaginales y
uterioas. La razon, en que se fundan los teólogos para admitir hanc se
minationem femineam es sacada de los escritos de Hipócrates , de Ga
lepo , de Velasco , etc . ; mas estos autores, aunque médicos , en el dia
son universalmente mirados como autoridades del todo nulás é incom
petentes en la cuestion . Para echar por tierra todo ese fárrago de opi
niones erróneas de los antiguos debe bastar una sola observacion fisio
lógica : la mujer , segun todos los fisiólogos modernos de Europa y
del mundo entero , es incapaz de una verdadera secrecion seminal ó
espermática , porque carece de órgano especial para eso . Ella sumi
nistra únicamente el óvulo ó el gérmen que viene del ovario , mas or
dinariamente cierta cantidad de mucosidades ó de humores lubrificos ,
PART. II. CAP. 11. 207
que son efecto del orgasmo erótico ; y propios para facilitar y comple
tar el acto conyugal , pero que al parecer no son del todo esenciales á
la fecundacion , como probaremos mas adelante .
Respondemos pues á las cụestiones de S . Ligorio, y afirmamos posi -
tivamente y con completa seguridad que, en los dos casos propuestos,
no hay pecado mortal, porque el proceder de ainbos- esposos no opone
ningun obstáculo esencial a la fecundacion , en razon de que la semi
nacion femenina no parece ser de ninguna mapera necesaria . Mas esto
es lo que aquí es necesario probar, ó por lo menos debemos aducir una
nueva prueba en apoyo de nuestra afirmacion , si bien el hecho de los
óvulos suministrados por la mujer podria servir en vez de otra prueba
cualquiera. La que prueba que la seminación femenina'no es necesaria,
es que la concepcion puede efectuarse sin ella , puesto que hay muje
res que conciben no solo sio esperimentar ninguna sensacion volup
tuosa , sino también con repugnancia , mal estar y sufrimiento . Aun
puede adelantarse que en generallasmujeres mas ardientes y lascivas
son menos fecụndas que las que tienen repugnància al coito . Una mu
jer puede concebir sin saberlo ó estando profundamente dormida : de
esto no faitan ejemplos. '
Del hecho de la union sexual cumplido del lado de la mujer con dis
gusto , repugnancia , una especie de horror , mal estar y sufrimiento
físico , se sigue que, en aquellos casos de cohabitaciones frias é insen
sibles , no hay seminacion prolífica en el sentido que la entienden los
teplogos , porque en un acto semejante es fisiológicamente imposible
que se verifique una efusion seminalsin sensacion erótica ó voluptuosa
de la parte dela mujer como del lado del hombre . Luego la seminacion
femenina no es necesaria para la concepción , puesto que esta puede
cumplirse sin ella , por el solo hecho de la seminacion viril. Ahora será
fácil apreciar en su justo valor la opinion « quorumdam juxta quos po
lést uxor præ timore prolis in actu conjogáli animum alid convertere,
seu se permissivè habere tantùm ne excitetur ad seminationem , vel
semioationem suam retinere, ne unà cum viro seminet ,» como si el
sistema uterino estuviese bajo el imperio de la voluntad . No lo está mas
que el corazon ; y no le es mas posible a la mujer el detener la accion
de su matriz que el detener los latidos de su corazon .
Finalmente los teólogos preguntan : « Utrùm feminæ licitum sit,
post retractionem et seminationem viri , statim sese tactibus excitare
ad propriam seminationem ut sibị levamen necessarium procuret? »
Respuesta : creemos que esto no le es licito a la mujer , porque seme
jante accion solitaria po tiene ya ninguo fin fisiológico en el orden de
la procreación , ni relacion alguna con el actó conyugal, y que seria
28
208 MOECHIALÓGIA .
por consiguiente una verdadera polucion . En cuanlo al alivio ó á la
necesidad que satisfacer, no vemos otro remedio,que la prolongacion
del acto ó un nuevo acio mas completo y mas normal. Los teólogos que
así lo piensan alegan por razon : « Quia semen mulieris non est neces
sarium ad generationem , et quia effusio ista mulieris , utpotè separata ,
non fit una caro cum viro.» S. Ligorio añade: « Si hoc permitteretur :
u.coribus", deberet permitti etiam viris , casu quomulier post suam semi–
nationem se retraheret i et vir maneret irritatus.» (Lib . 6 ; : 919. ). Yo
daré otra razon de mucho peso : es que tales acciones solitarias y post
coitales pueden inspirar a la mujer la pasion del onanisino solitario ,
como hace poco hemos sabido por esperiencia . . "
En virtud de todo cuanto acabamos de decir , el lector podrá fácil
mente juzgar la estraña opinion de Sanchez , quien pretende, contra el
parecer geğeral ó mas bien universal de los teólogos , que el matri
monio no queda consumado simülier non seminet , ya que la generacion
no puede tener Jugar nisi femina seminet. ( Lib . 2 , disp . 24 , n . 11.)
Así pues, segun esta opinion ,. se veria uno conducido á concluir ab
absurdo que las mujeres que concibieron con repůgoancia y sufri
miento, y parieron con trabajo y dolor , nunca consumaron elmatri
monio . Si bien Sanchez no saca esta conclusion , por lo menos saca la
siguiente , por el estilo de Sto . Tomás y S . Buenaventura , á saber , que
el coito normal y formal segun lo definen los teólogos, penetratio et sé .
minatio virilis , no puede ser , si fiat 'sine seminatione muliebri, una
verdaderà causa de afinidad.. . ! !
Si, a pesar de todas esas razones, quisiese alguno sostener la opi –
nion de Sanchez , que nos diga de qué manera y con qué carácter ó
señal cierta se podrá reconocer la seminacion en lasmujeres que en el
acto del coito no esperimentan sino repugpaņcia y sufrimiento , y sin
embargo conciben ,perfectamente. Se nos figura que tendremos que
aguardar mucho tiempo la respuesta , y .por una buena razon, porque
no es posible contestar . Empero hay una cosa bastante singular en es
ta cuestion , y es que Sanchez , olvidando lo que habia dicho en el li
bro segundo , disp. 21 , n. 11 , dice todo lo contrario en el libro novo,
disp . 17 , n . 8 y 9 . He aquí sus propias palabras : « Licèt semen mu
Jieris non sit ad generationem necessarium , multùm tamen confert ad
faciliùs generandum ... Non est necesse utrumque conjugem seminare
simul. Quare dùm vir 'semen effudit , minimè tenetur feminæ effusio
nem expectare: Probatur , quia femineum semeni nec esse necessarium ,
nec activè ad generationem concurrere, docent Galenus , etc . (Aquí cita
un gran número de autores que enseñan todo lo que Sanchez acaba de
establecer , nempè semen femineum non esse necessarium ad genera
Pakt. it. CAP. II. 209
tionem .) Despues de haber citado á -aquellas autoridades, Sanchez'áña
de : « ęt multi alii ; et universa theologorum schola, (si Scoti sectatores
excipias)... Quod indè constat, quia experientiâ teste ſeminæ omnino
invitæ ; in balneisque semen virile recipientes concipiunt ( lo que es
fabuloso y falso ) ; tunc autem minimè seminant, aliàs veneream ,de
lectationem maximam non possent non sentire lo que es conformea lo
que hemos dicho a la página 20.7). Ergo cùni absque eo semine , ne
dùm ubi non simul , sed post éffuáditur , generatio sequatur , nullum
præceptum constringitad pariter effundendum . Nec obstat id genera
tioni convenientius esse. Quoniam non tenentur conjuges convenien
tiorem ac faciliorem generandi viam eligere, sed satis illis est si gene
rationinon obstent.» * .
Casi me pesa haber escrito estas dos páginas, pues tenia resuelto no
refutar ninguna opinion de los teólogos que careciese de algun objeto
práctico . Necesitaria casi un tomo si quisiese examinar con alguna
severidad y refutar todas las opiniones ó por mejor decir todos los er
rores fisiológicos de Sanchez y de los que le han copiado.Me guarda
ré , por cierto , de acometer, tal empresa , porque semejante trabajo
seria tan fastidioso para mícomo inútil y sin objeto para mis lectores.
: 4 .0 - Mortaliter peccant conjuges si coeunt oum affectu adulterino
vel fornicario , id est si vir uxorem cognoscens oplet et intendat coire
cum aliâ quam sibi repræsentat ; et similiter de oxore , cùm in alium
animum figat. Uterque mechatur in corde suo. Nihil est fæèdius , ait
S . Hieronymus, quàm uxorem amare quasi adulteram . Item mortaliter
peccant sicopulam ex fine graviter malò exerceant; putà ut uxor mo
riatur in partu .
5.° Peccant adhuc 'mortaliter conjuges si copulam coram aliis
exerceant, ob grave scandalum : caveant igitur ne in eodem cubiculo
alii lectum suum habeant. Pauperes et "rustici quibus sæpè unicum
suppetit ćubiculum pro ipsis , pueris et famulis , cautè sibi diù noctu
que invigilent, ne, juribus suis utendo, occasionem ruinæ aliis præ
beant. Heu ! quot famulæ , quot pueri in tenerâ ætate moribus jam
sunt perditi , et depravationem suam incautis 'debent conjugibus !
(D ) . Bouvier.)
S . III. . '

De tantibus
De tactibus inter conjuges. .
1. Toda la doctrina teológica sobre este punto puede resumirse en
este pasaje de Billuart : « Quæcumque oscula , tactus, amplexus , as
210 MCECHIALOGÍA
pectus , turpiloquia libidinosa inter conjuges præsentes , citra peri
culum pollutionis et inter terminos honestatis naturalis , sunt licita si
fiant in ordine et ex.intentione copulæ ; sunt autem peccata duntaxat
venialia si in eis sistatur , nec ordinentur ad copulam .. . Dixi intra
terminos honestatis naturalis , quia tota illa indulgentia ,non est data
conjugibus nisi quatenùs prædicta secundùm naturam et rectam ratio
nem ordinantur ad naturalem et humanum concubitum : updè magis
vel minùs peccant quo magis vel minùs hos limites transgrediụntur.
Tunc autem solùm censentur conjuges graviter transgredi hos limites
quandd attentant aút admittunt aliquid sodomiticum , vel agunt cum
periculo pollutionis : extra hos duos casus , quantumvis actus sint tur
pes , non videntur excedere peccatum veniale.» (De Luxuriâ, dissert. 6 ,
art, 17.)
He ahí unos principios sahtos y que parecen seguros en la práctica .
Con todo puede preguntarse ¿cómose podrá conciliar, el quantumvis ac
tus sont turpes , que no deben ser mirados sino como à veniales, con los
que se hicieren cum periculo pollutionis ? ¿ Cuáles serán pues esos actos
mortales que ocasionan este peligro , y que son distintos de los del quan
tumvis turpes ? estos, segun la significacion gramátical de la palabra
quantumnis ; - podrian abrazar , en nuestro concepto , aunque se les
supone meramente veniales , toda la enormidad de los que se reputan
necesarios para acarrear el periculum pollutionis. ¿ Cuáles serán fipal
mente estos últimos , que deben ser de una malicia mortal , y en què
se diferenciarán de los actos désignados bajo la denominacion de quan
tumvis turpes, que no son mas que veniales ? Parécenos que Billuart
aclara muy poco todo eso .
Mi opinion es que mas valdria: suprimir el quantumvis , y leer así:
extra hos' dùos casus, oinnes actus turpes non videntur excedere pec
catum 'veniäle: Entonces quedarian eliminados aquellos actos admo
dùm turpes, aquellas enormidades que , como dice 'Billyart , salen de
los límites de la honestidad natural , queme'abstendré de nombrar
aquí , porque semejantes actos y otrosmuchos se hallan bastante y so
bradamente designados. en todas las obras de teologia moral. Final
•mente el lector , armado 'no de sutilezas y distinciones escolásticas,
sino del simple buen sentido natural.y de algun conocimiento del co
razon humano, sabrá distinguir y reconocer muy bien los casos y los
actos que traen consigo el periculum pollutionis de que habla Bi -
lluart.
Paréceme quc Mons. Bouvier, aunquemas lacónico , es mas claro,
mas esplicito y menos vago en el modo de espresarse ; porque en fin en
todasestasespecies de cuestiones fluctua uno casi siempre en ese vago ,
PART. II. CAP. 11. .. 211
por mas que se haga ; estas son dificultades inherentes a la materia y
con frecuencia inevitables . : . . .
He aquí como se espresa el piadoso y sabio obispo de Mans: « Tac
lus ad legitimam copulam , ordinati , sécluso periculo pollutionis exer
citi, proculdubio suntliciti; sunt enim velut accessoria copulæ : licita
igitur copulâ , illiciti esse non debent. Si tamen ob majorein delecta :
tionem fierent, licet ad copulam tenderent, peccata essent venialia
propter finem venialiter. malum . Si vero graviter forent rectæ rationi
repugnantes, quamvis ad copulam directi,péccata essentmortalia ; con
juges enim christiani agere non debent sicut equus et mulus quibus non
est intellectus (Ps. xxxi, 11) : sed sciat unusquisque vas suum possidere in
sanctificatione et honore , non in passione desiderii , sicut et gentes que
ignorant Deum . (I ad Tess ., 1v , 4 .:) ». San Ligorio enseña la misma
doctrina: Sententia communior eť verior negát esse mortales tactus et
aspectus inhonestos inter conjuges propter solam voluptatem , sine or
dine ad copulam , si pon adsit periculum pollutionis . « Ratio , quia sta
lus conjugalis, sicut cohonestàt copulam , ita etiam bujusmodiactus et
aspectus; aliàs enim , cùm sit tanta inter conjuges societas , et ipsi
mulloties,non possent coire , jugibus periculis essent expositi si tales
actus essent eis graviter illiciti, Sicut autem delectatio quæsita in co
pulâ culpam venialem non excedit , ita etiam in his actibus et aspec
tibus... Secùs verò dicendum si conjux esset ligata voto castitatis; quia
tale votum excludit omnem voluptatem veneream voluntariè captam .»
( Lib . 6 , n . 933.) Billuart dice : « Cùm Ecclesiæ lex (in incestu ) sit
pænalis prohibenstantùm copulam , non debet extendi ultra copulam ,
sed potiùs restringi.» :
Resulta de todo 'cuanto precede, que los tocamientos ejercidos en
tre esposos son pecado mortal si van acompañados de peligro próximo
de polucion ; porque esta contaminacion corporal po es menos criminal
en los casados que en las personas libres . :
2.0** Abora toda la cuęštion controvertida por los teólogos queda
reducida á 'esto : ¿ las acciones deshonestas , sin peligro próximo de
contaminaciou corporal y sin intento ni relacion al acto conyugal, son
entre esposos pecadomortal ó venial ? Varios autores, entre otros san
Antonino , Sylvester y algunos otros tambien citados por Sanchez ,
afirman que son pecado mortal, porque tienden . esencialmente a la
polucion , por el mero hecho de no referirse al acto conyugal ; pues,
añaden , todo acto venéreo que no tienda al acto conyugal es pecado
mortal.'
Segon Sanchez , Busembaum , S. Ligorio , Layman , Bonacina , Les
sius, Sporer , Diana y otros muchos autores citados por S. Ligorio y
212 MOECHIALOGÍA
Sanchez ; en fin , segun la opinion comun , las acciones deshonestas ,
tales como tocamientos , miradas , etc. , entre esposos ," siņ relacion al
acto conyugal y tambien sin peligro próximo. de polucion , no son mas
que faltas veniales, porque, pudiendo estar exentas de pecado si ten
diesen á su, fin legitimno , que es el acto conyugal , no se hacen pecado
venial sino por la falta de este fin legitimo.
Sin embargo , aqui es necesario hacer una distincion , y es que ge
neralmente es preciso mirar como causa del peligro próximo de polu
cion , ó aun como una polucion principiada , aquellos actos conside
rable y enormemente deshonestoß ó infames arriba menciopados. « Tum
- como dice Sættler - quia tales actus ordinariè comitari solet pericu
lum pollutionis ; tum quia naturam rationalem . singulariter dedecent ,
néc ex sé ad copulam ordinari non possunt, ideoque nec videntur pos
se d culpâ gravi-excusari propter conjugium .» '
El comeniador de Sættler, M . Rousselot, bace acerca de eso la ob
servacion siguiente : « Experientiâ teste , conjuges qui illos ( tactus)
admiserunt conscientiæ remorsibus valdè excruciantur, illos ægerrimè
confitentur, et si præ verecundiâ reticent , longè magis torquentur.
Ergo çonjuges tactus illos solâ naturâ duce apprehendunt ut valdè
creaturám rationalem deturpagtes.) .
deturpapiesconoche
Mons. Bouvier termina sì articulo de rictine inte conjuges con
Tactibus inter
este pasaje : « Non hąbendi sunt ut rei peccati mortalis dùm asserunt
bonâ fide sensus suos non commoveri, aut probabile periculum pollu
tionis . abesse, quod non rarò accidit in conjugibus yenereis à longo
tempore assuetis. Šaltem damnare nollem . piam uxorém qùæ ex timi
ditate , ex metu alicujus mali , vel ex causâ servandæ pacis , tales in
se permittit tactus , asserens non exurgere motus in se , vel illos esse
leves.) :
· Como quiera que sea , en todos los casos prácticos se ha de repren
der fuertemente á los'.esposos toda accion deshonesta que no tienda á
su fin legítimo ó al acto conyugal , á menos que se crea deber adoptár
la máxima de la Teologia moral de Perigueux : « Vexandæ interroga
tionibus non sunt uxores , utrùm tactum aliquem impudicum viris suis
permiserint.»
Todo cuanto hemos dicho acerca de esta materia puede reasumirse
en este solo pasaje de S . Ligorio : «Puto probabiliùs dicendum qudd
actus turpes inter conjuges cum periculo pollutionis tam in petente
quàm in reddente sint mortalia ; nisi habeantur ut conjuges se exci
tent ad copulam proximè secuturam , quia cùm ipsi ad-copulam jus
habeaạt , habent etiam jus ad tales actus, tametsi pollutio per acci
dens copulam præveniat, Taetus verd pudicos etiam censeo esse mor
PART. II. CAP. II. 213
talia si fiant i e s periculo -pollutionis
cticum m in se yel in allero , casu quo ha
i c i
sob pcausam
beantur o n d ob solàm
r e P ueblate , vel etiam ob devem causam : secùs si .
to :voluptatem
gravem , putà si aliquando adsit urgens, onușa ostendendi
indicia affectûs ad 'fovendum mutuum amorem , vel ut conjux' avertat
suspicionem ab altero , quod ipse sit erga aliam personam propensus.»
(Lib . 6 , p. 934.) , .
3 .0. Quoad tactus et aspectus proprii corporis , in honestos vel libi
dinosè exercitos , sine periculo pollutionis , absente conjuge ; vel tem
pore et loco quo copula haberi non potest , juxta Sanchez et quosdam
apud ipsum , lantùm venialià surt peccata : quia hi actus', inquiunt,
sont secundarii et tendunt ad copulam per se licitam , et tantummodd
debito fine carent; quod falsum videtur ; quia tales non tenduntſac
tus, utpatet , ad finem .principalem vel copulam , sed solummodd ad
pollutionem manifestè vergunt, et proximè cum ejus periculo connec
luntur. Idemi censendum esse de delectatione perceptâ in actu conju
gali sibi exbibito ut præsenti præfatiauctores arbitrantur. : )
En la práctica debe seguirse la opinion contraria , que es muchomas
comun y sobre todo mucho mas segura. Por otra parte es la que pro
fesan unos teólogos poco sospechosos de rigorismo, tales como S . Li
gorio, Layman', Diana , Sporer, Vazquez y otros varios citados por el
santo. He aquí las razones en que la fundan : ' Tuin quia conjux non
habet jus per se in proprium corpus , sed tantùm per, accidens, nempè
tantùm ut possit se disponere ad copulam ; undè , cùm . copula tunc
non sit possibilis , tactus çum seipso omninò ei sunt,illiciti ; tum quia
lactus pudendorum , quandò fiunt. morosè et cum commotione spiri -
tuum , per se tendunt ad pollutionem , suntque proximè connexi cum
ejus periculo.» (S . Ligorio , lib . 6 , núm . 936.) :
Mons. Bouvier añade á ese testo , estractado de la obra de S . Ligo
rio , las palabras siguientes : « Semper igitur prohibendi sunt velut
mortales, quando sensus notabiliter commovent: secùs verò solum -
modò veniales mihi videntur.)
4.° Finalmente preguntan los teólogos si un esposo , hallándose
ausente la otra parte , peca. mortalmente consintiendo en la delecta
cion morosa promovida por la idea de uc acto conyugal pasado ó futu
· ro ? Algunos lo pretenden , alegando que semejante delectacion viene
å ser una polucion principiada. Esta es una razon muy débil, muy
caduca . Los que siguen la opinion 'contraria ó la opinion comun lo
niegan formalmente , y afirman que la tal delectacion no es pecado
mortalmientras no haya peligro de polucion. Entonces es meramente
venial, añaden , porque se halla privada de su fin legitimo, puesto.
que no puede referirse á un coilo actual. Añaden tambien que seme
214 MOËCHIALOGIA .
jante delectácion no puede ser mortal porque "sata su bondad ó sú mą
licia de su objeto , y como este objeto ó el acto conyugal es lícito á
los esposos , la detectacion de este acto no puede serles gravemente
ilícito. Esto es del todo conforme con lo que dice Sto . Tomas en estos
términos : Sicut carnalis commictio'non est peccatum mortale conjugato ,
non potest esse gravius peccatum consensus in delectationem quàm con
sensus in actum . (Be malo .) « Id'est -- añade Mons. Bouvier - sicut exer
cere actum conjugalem ob solam delectationem .esset solummodd pec
catum veniale , ita et in eo repræsentato sibi delectari. Peccatum igi
turmortale esse non potest nisi ratione periculi , quod, quidem adesse
censetur si delectatio habeatur non solüm cum commotione spirituum ,
sed etiam cum titillatione. seu voluptate -venereâ ;. inquit S. Ligorio ,
lib . 6 , núm : 937.» Semejante delectacion , dice S . Ligorio , no puede
ser escusada de pecado mortal, « quia talis delectatio est proximè con
juncta cum periculo pollutionis. Secùs verò puto dicendum si absit illa
voluptuosa titillatio , quia tunc non est delectationi proximè annexum
periculum pollutionis , etiamsi adsit commotio spirituum :» (Ibid .) San
Ligorio , como hemos visto mas arriba á la página 213 , parece dar
por causa de pecado mortal de los tactus cum commotione spirituum ; y
aquíparece afirmar lo contrario con esta espresion : etiamsi adsit com
motio'spirituum , que én tal caso no produciria sino una falta venial.
Luego es preciso reconocer qne. S. Ligorio hace mal en no definir cla
ramente la espresion. commotio spirituum y no diferenciarla de la de
titillatio voluptuosa seu venerea. Era importante el dar a conocer esa
diferencia , puesto que , segun el santo' y sabio teólogo , ella es la que
hace que el pecado sea mortal o venial. Mientras no se establezca cla
ramente esta diferencia , el testo de S . Alfonso , acerca de este punto ,
quedará oscuro é incomprensible para muchos de sus lectores.

:. S. IV .
Del pecado de Onan , ó del onanismo conyugal. : .

Aquí vamos á presentar un estracio de lo que ya heinos publicado


acerca de esta materia en nuestro Ensayo sobre la Teologia moral,
pero sin embargo modificado y adaptado como corresponde a la natu
raleza del asunto que en el dia tralamos mas eâ professo .
Nadie ignora que el onanismo conyugal, hoy en dia el escollo , el
ažote y la desolacion del matrimonio ,,es el crimen de Onan. Semen
fundebat in terram , ne liberi...Nascerentur. (Gen . XXXVIII, 9.):
PART. 11. CAP. 11. . : 215
Sentemos ante todo algunas proposiciones ciertas y admitidas por
todos los teólogos.
1 . Un hombre que imita la conducta de Onan , sea por el motivo
que fuere , comete un crimen enorme, y no debe dársele la abso --
lucion mientras persevere en su detestable habitud : Et idcircò per
cussit eum (Onam ) Dominus, quòd rem detestabileni faceret. (Genes .
XXXVIII, 10.) :
2.° La mujer que induce a su marido á obrar así , ó que consiente
en esta accion injuriosa á la naturaleza y contraria al fin delmatrimo
nio, o que en fin , con mayor inotivo , se opone ella misma al cum
plimiento del acto conyugal, comete igualmente un pecado mortal , y
lo mismo que su marido , es indigna de recibir la absolucion mientras
persevere en esta habitud criminal. .
3. La ley de la caridad impone á la mujer el deber de hacer lodo
cuanto de ella dependa para impedir que su marido , que ella sabe
està dispuesto a obrar mal, no haga la accion detestable de Onan ,
rem detestabilem . .
4 .° La mujer tiene obligacion de pagar el débito si su marido , de
bidamente avisado, promete consumar el acto conyugal de la manera
que está obligado , con tal que haga esta promesa seriamente y de mo
do que la mujer pueda juzgar que todo se hará de la manera ordinaria
y normal.
Mas ahora la dificultad está en saber si la mujer puede, en con
ciencia , pagar el débito cuando está segura , por esperiencia , de que,
á pesar de sus advertencias, ruegos é instancias posibles , su marido
hará el acto á la manera de Onan. .
En cuanto á eso hay cuatro opiniones : la primera es la de los teó
logos que sostienen que la mujer no puede pagar el débito , aunque
sea á riesgo de perder la vida : 1.° porque , dicen ellos , siendo la ac
cion del marido esencialmente mala , lamujer participará de su peca
do, del cual eļla suministra la ocasion próxima; 2.º porque el marido
no se propone efectuar un acto conyugal', sino servirse del ministerio
de su mujer para escitarse voluntariamente a una polucion ó á una
coplaminacion criminal; 3 .° porque, si el marido pidiese á su mujer su
concurso para un acto sodomitico, ella deberia resistirse , hasta con
riesgo de su vida. Mas en la hipótesis , dicen , la accion del,marido do
es , en realidad , sino un acto casi semejante , puesto que es contrario
al fin del inatrimonio ; 4 .° finalmente porque la mujer coopera lan di
rectamente al crimen de su marido como un hombre participa del
hurto de un ladron abriendo el saco para meter los objetos robados .
Asi piensan Habert , los redactores de las Conférences d 'Angers y de las
29
216 MÉCHIALOGÍA .
Conférences de Paris , Collet , con varios doctores de la Sorbona , Bai
lly , Vernier , etc. , i
Esmenester confesar que esta opinion á lo que parece está fundada
en razones ipuy fuertes y sólidąs; que es muy grave, y de aquellas
que por su naturaleza hacen mucha impresion en los ánimos. Los
confesores que la siguen rehusan constantemente la absolucion á 10
das las mujeres que , en tales casos , pagan el débito á sus maridos (“).
Sin embargo , he aquí las razones que se la pueden oponer.
1.° La mujer , dicen , obedeciendo à su marido , participa de su
pecado , de que ella le suministra la ocasion próxima , etc. A esto pue
de responderse que la mujer hace una cosa lícita ; que usa de su de
recho , del que no puede privarla la depravacion y la corrupcion de su
marido'; que ella no hace ningun acto malo en si ni contra la natura
leza ; que solamente sufre y permite un mal que ella no puede impe
dir ; que sin consentir en la accion detestable de su marido , de la
cual no participa sino materialmente , ella no hace mas que prestarse
pasivamente , por deber y por obediencia conyugal, á un acto que de
su parte está en el orden natural y conyugal, y que sobre todo , eo ra
zon* de ciertas circunstancias concomitantes , no es siempre absoluta
y necesariamente estéril; y que en fin la mujer hace esteriormente to
do lo que de ella depende para alcanzar el fin del matrimonio . La espe
riencia prueba en efecto que a veces se logra ese fin à despecho de la
voluntad siniestra y de los esfuerzos criminales del marido. Mientras
estoy escribiendo esto acabo de saber que dos esposos que se pusieron
de acuerdo,para no procrear jamás , en el dia ya tienen ocho hijos , de
los cuales solo el primero fue voluntario y de su pleno consentimiento .
Al propio tiempo me citan otro hecho de un onanista que tuvo siete hi
jos, y tambien otro caso análogo en que hubo cuatro , de los cuales
dos gemelos . Podrian citarse millares de hechos,semejantes (9). . .
2 .0 Dícese tambien que el marido', en la hipótesi, no pide un acto
conyugal , sino solamente la cooperacion de su mujer á una accion cri
(1) `Aquí es preciso decir, sin rodeos que las mujeres muchas veces tampoco
quieren sinceramente el fin del matrimonio , y que barto favorecen las miras o
las acciones criminales de susmaridos por más que aparenten no consentirias
ó no tomar en ellas parte alguna Esmenester pues que el confesor esté alerta
para no dejarse sorprender .
(2) ¿Quién sabe si las criaturas , tan a menudo débiles y enfermịzas , son el
fruto de tales actos incompletos y anormales, en que la naturaleza , ultrajada
y mas o menos contrariada , parece haberse vuelto impotente para formar se
res perfectos , y quién sabe tambien si , momentaneamente privada de su fuer
za plástica y creatriz , la naturaleza podria crear á veces anomalías ó mons
truosidades por defecto ? Esta consideracion o esla duda , vivamente espresada,
quizá no dejaria de lener alguna fuerza para apartar a los onanistas de su in
tento criminal,
PART, 1 CAP. II. 217
minal. A eso se puede contestar que no es rigorosainente exacto ; por
que la polucion, tal como se entiende en la especie, no es lo que se lla
ma en medicina una verdadera masturbacion , palabra que, como ya
dijimos en otra parte , deriva de manustrupatio (contaminacion ina
nual) (1) , que es siempre y necesariamente,un acto estéril é improlífico
por su naturaleza , al paso que la espermatizacion esterna puede , por
una circunstancia feliz , producir algun dichosò efecto en el sentido de
que no será tal vez completamente estravaginal , como lo prueban los
bechos'arriba referidos. A mąs de que , los anales de la medicina citan
hechos de mujeres que', con oclusion casi perfecta , y absolutamente
incapaces del coito normal ó de la cohabitacion conyugal ordinaria ,
se hicieron sin embargo ein barazadas y parieron felizmeņte á término.
En este caso la espermąlizacion debió tener lugar necesariamente en
el orificio obturado de la vagina , y la accion aspirante del útero hizo
el resto . Véanse los hechos de esa obturacion y esa estrechez ó coarc
tacion vaginales que referimos en el artioulo impotencia . . .
3.° Preténdese que el caso de que se trata no es en realidad mas
que un acto sodomítico , y que de consiguiente la mujerno puede con
sentirlo , ni aún para evitar la muerte . A eso se puede responder que
un acto sodomítico és siempre y necesariamente estéril , tanto en la
forma como en el fondo y en el fin ; y que el querer confundir una ac
cion natural y lícita de parte de la mujer con un acto de sodomía , es
confundir los términos , cambiar la acepcion de las palabras y el me
dio -seguro de po entenderse. Por otra parte , si el caso en cuestion
fuese realmente un acto sodomítico , nunca habria presentado dificul
tad ni division de opiniones. .
4.° Dícese finalmente que la mujer coopera tan directamente al
crimen de su marido como participa un bombre del hurto de un la
dron teniendo abierto el saco para meter. los objetos robados. Empero
es evidente que aqui no hay ninguna especie de paridad ; porque la
mujer usa con justicia de su derecho , al paso que el que favorece el
burto no tiene ningun titulo legitimo para ello : él hace una accion
ilícita que nada , ninguna circunstancia puede legitimar jamás. Luego
esta comparacion'es inexacta bajo todos conceptos y en nada puede
apoyarse .
Ahora examinemos la cuestion bajo otro punto de vista.
• La mujer , en el acto supuesto , es meuester confesar que coopera á
(1 ) Esta sola palabra designa bastante una causa , una accion contra nalu
raleza . Es muy diferente del acto de cooperacion material de la mujer , que ,
sobre todo , es de su .parte una accion del todo natural y conforme a las leyes
del organismo humano .
218 MOECHIALOGIA .
un acto esencialmente malo , y que suministra á su marido el instru -
mento y la ocasion próxima de cometer un pecado mortal, del cual
parece evidente que ella participa. He ahí ciertamente la objecion en
toda su fuerza ; tratemos sin embargo de contestarla . .
Todos los teólogos están conformes acerca de un punto , á saber ,
que un hombre en teniendo gravesmotivos puede, sin pecar, pedir los
sacramcntos á su párroeo que él sabe de fijo que se halla en pecado
mortal y en disposicion de po querer salir actualmente de semejante
estado. Tenemos pues que aquel hombre suministra á su pastor la
ocasion próximă de pecar mortalmente . Pues bien , esto . es precisa -
mente lo que hace la mujer , o mas bien lo que no hace , pues hace
menos; no pide ella misma la cosa que forma la materia del pecado ;
ella no induce , no solicita á su marido á hacer una accion en que el
pecará mortalmente , ella no hace otra cosa que obedecerle simple y
pasivamente y á su despecho, como mas arriba hemos visto . Si se nos
objeta que, en caso de grave necesidad , se piden bienes espirituales ,
como los sacramentos , y que este caso difiere esencialmente del de la
mujer, entonces cambiaremos el ejemplo , v diremos que un hombre
puede , sin pecar, pedir á un usurero dinero á crecido interés , lo que.
no es mas que un bien temporal y material ; todos los teólogos tam
bien están conformes en este punto . Si bien en este caso no se pide
una cosa espiritual , con todo es cierto que se suministra la ocasion
próxima de cometer un pecado mortal. Si aun se insiste', diciendo que
no hay paridad en los ejemplos, que el acto del marido es malo por
esencia , y que la adıninistracion de los sacramentos es una cosa lícita
como buena en si misma , opondré de nuevo 'el ejemplo de la usura
exorbitante ; porque el usurero hace un acto malo por su naturaleza ,
puesto que su avaricia le hace cometer ùn robo manifiesto: Sin em
bargo, todos los teólogos autorizan y justifican la conducta del que
tomó prestado .
Consideremos en fin la primera opinion en sus consecuencias,
La mòral está instituida para arreglar las acciones y las costumbres
de los hombres , y para procurarles en este mundo la mayor suma de
felicidad posible .
Cuanto mas' un principio de moral es fecundo en buenos resultados
y en consecuencias dichosas y útiles al hombre y á -la sociedad , tanto
mas cierto será este principio , y tanto mas será preciso adoptarlo , y,
vice versa .
Pues bien , ¿ no puede sostenerse que el principio de semejante opi
nion conduce al desórden ? En primer lugar no se logra el objeto del
matrimonio , puesto que no se efectua la procreacion ; en segundo lu
PART. II. CAP. 11. 219
gar, elmarido , y un marido de tal carácter y en tal disposicion mo
ral, se entregará necesariamente a la incontinencia , al onanišmo soli
tario ó al adulterio ; en tercer lugar, sobrevendrán desórdenes y disen
siones domésticas; malos tratamientos á la mujer, desunion y perpetuo
desacuerdo con todas sus deplorables consecuencias ; mal ejemplo ,
inmoralidad puesta şin cesar ante la vista de los hijos , si los hubiese
ya ; escándalo esterior, y en fin , turbacion y desórden en la sociedad .
He ahí lo que harto nos prueba la esperiencia todos los dias: & Luego
no podrá decirse que es menester desconfiar muchísimo de ese prin
cipio , por no decir que es falso y de consiguiente pernicioso ?
• La segunda opinion es la de S . Ligorio'; quien pretende que la mu
jer no solamente puede pagar el débito , sino que tambien está obli
gada á pagarlo , por la razon de que toda la falta recae en el que lo
pide , y que no depende del acto conyugal permitido á los esposos ,
á cuyo acto la mujer solamente coopera sin tomar parte en la accion
onanica de su marido. «Probabiliùs videtur uxor non solùm posse red
dere... sed etiam teneri. Ratio , quia... quando culpa se tenet ex parte
personæ petentis , cùm ipsė habeat jus ad copulam , nequit alter sine
injustitiâ debitum negare , si non possit monendo à tali culpâ illum
avertere: et tunc patet quòd reddens ne materialiter quidem coopera
tur peccato illius , cùm non cooperetur seminationi extra vas, sed tan
tùm copulæ inceptæ , quæ per se utrique est licita.» (Lib . 6 , n .º 947.)
La tercera opinion establece que la mujer , á la verdad , no está
obligada á pagar eľ débito , pero que no obstante puede pagarlo sin
pecar , con tal que no consienta en la accion criminal de su marido ;
porque ella hace una cosa que le es lícita , y usa de su derecho , de
que no debe verse privada á causa de la inmoralidad de su marido , y
no hace nada que 'no sea permitido por el matrimonio . El marido ,
usando el matrimonio de la manera ordinaria , no peca por este méro
hecho ; solamente hace mal conduciéndose como Onan . Luego si la
mujer no consiente en esta accion detestable, no peca. Así es como ar -
guyen Sanchez , lib . 9', disp. 17 , n .° 3 ; Pontio , lib . 10 , cap . 14 ;
Tamburinus, lib . 7 ,.cap. 4 , S . 5 , n .° 4 ; Sporer , p . 356 , n .° 490 ;
Pontas, Devoir conjugal, cas. 55.
Ahora bien , segun esa opinion absoluta y sin restriccion , siempre
se podrá absolver a la mujer. Sin embargo , á dichos autores puede
oponérseles que siguiendo su opinion parece que no se toma en conside
racion la ley de la caridad . Esta , en efecto , debe obligar a la mujer á
impedir el pecado de su marido cuando ella 'puede, en vez de suminis
trarle la ocasion próxima prestándose á satisfacer su intento . "
Finalmente ,adoptando la cuarta opinion , la mujer no puede pagar
220 MOECHIALOGÍA .
el débito á no mediar una razon grave y bastante poderosa para equi
librar en cierto modo la malicia del pecado cometido y justificar su co
operacion material. Así opinan Roncaglius, de Elbel y Mons. Bouvier .
Entretanto , asegura el último, este es el parecer que siguen los con
fesores doctos y piadosos, docti et pii , y añade : hæc sententia sola
admittenda mihi videtur ("). Además de esto es tambien la opinion de
la corte de Roma. Es menester confesar que siguiéndola se evitan to
dos los inconvenientes y todos los malès que causa la práctica de las
otras opiniones ; pues todo se efectua esteriormente con un órden per
fecto ; bay buena inteligencia entre los esposos, no se altera la paz de
la familia , no hay inmoralidad patente , en una palabra se evita el
trastorno social. :
Habiéndose consultado á la sagrada Penitenciaría la cuestion si -
guiente :
Potestne pia uxor ulmaritus suus ad eam accedat , postquàm expe
rientiâ ipsi constiterit eum more nefando Onan se gerere... præsertim
si uxor denegando se exponat periculo, sævitiarum , aut timeat ne mari –
tus ad meretrices accedat , en 23 abril de 1822 respondió lo que si
gue : Cùm in proposito casu mulier , è suâ quidem ,parte , nihil contra
naturam agat, detque operam rei licitæ , tota autem actús inordinatio
et virimalitid procedat, qui , loco consummandi , retrahat se et.estra
vas effundit , ideò si mulier , post debitas admonitiones, nihil proficiat,
vir autem instet , minando verbera , aut mortem , aut alias graves sævi
tias , poterit ipsa (ut probati theologi docent) citra peccatum passivè se
præbere ; cùm in his rerum adjunctis ipsa viri sui peccatum simpliciter
permittat, idque ex gravi causâ quæ eam excuset ; quoniam charitas ,
quâ illud impedire teneretur, cum tanto incommodo non obligat. .
Los profesores del seminario de Besançon •dirigieron igualmente á
la sagrada Penitenciaria la misma cuestion bajo otra forma ó en es -
tos términos : Bertha virum habet quem constanti experientiâ cognoscit
esse onanistam . In vanum omnia tentavitmedia ut illum à tam nefando
crimine retraheret; quin imò gravissima aut saltem gravia mala ei im
minent nunc probabiliter , ita ut vel hæcmala incurrere debeat, vel fu
gere et domo mariti , nisi permittat saltem aliquandò abusum ,matri
monii , etc. La respuesta , con data de 1.0 febrero de 1823 , fué la
(1 ) Hemos consultado con muchos confesores ilustrados y piadosos de diſe
rentes diócesis , y todos , sin escepcion , nos han manifestado que seguian el
plan de conducta trazado por la decision de Roma ; sin embargo , debe creerse
que será cop maticesmas o menos y necesariamente diversos , por lo que hace
á la gravedad de losmotivos ó de las causas determinantes ; porque , en último
análisis , loda la dificultad parece en el dia reducida á este punto. Véase el co
mentario de ese testo , por Mons. Bouvier.
PART. II. CAP. 11. · 221. .
misma de arriba. Ya en 15 noviembre de 1816, el mismo tribunal ha
bia contestado a la consulta de M . Blain con la decision siguiente :
Probati castigatique morales theologi in hoe consentiunt ut liceatuxo
ri debitum reddere si ex ejus denegatione malè habenda sit à viro suo ,
et grave indè incommodum sibi timere possit; neque enim , aiunt , hoc
in casu , censetur uxor viri sui peccato formaliter cooperari , sed illud
tantummodò ex justá et rationabili causâ permittere. Moneat tamen
orator hujusmodi uxorem ut non cesset prudenter commonere virum
suum ut ab hâc turpitudine desistat. .
He aquí el comentario de esas respuestas hecho por Mons. Bouvier
y copiado testualmente en su obra.
« Uxor igitur. debitum in his circumstantiis reddendo non peccat
dummodò gravi causâ 'excusetur : causa autem reputetur gravis.
• » 1 .0 Si mors , verbera , aut graves sævitiæ timeantur : patet ex
responso sacræ Pænitentiariæ et ex ratione. .
. 2 .° Si detur locus timendi ne maritus concubinam in domo conju
gali habeat et cum illâ maritaliter vivat , quia nulla est uxor sensata
quæ sævitias , vel etiam verbera ', non mallet sufferre quàm commer
cium adeò sibi injuriosum in propriâ domo videre.
03.° Etiamsi maritus concubinam in domo non habiturus esset , si
timeretur ne illam alibi frequentaret, vel ad meretrices accederet ,
quainvis sacra Pænitentiaria ad hoc quæsitum non respondeat, mihi
videtur adesse causam sufficientem ut mulier excusetur , quia certè
hoe valdè molestum est illi , ratione jurgii , dissentionis , dissipationis
rei domesticæ , scandali , etc.
. » 4.° Notandum est autem ,gravitatem molestiarum ex circumstantiis
personarum judicandam esse , quod enim respectu vnius reputatur le
ve, gravissimum esse potest respectu alterius : sic rixæ , transitoriæ
dissentiones et etiam quædam verbera non multùm ponderantur inter
rusticos , et prorsùs intolerabilia forent mulieri timidæ , exquisitâ dis
ciplinâ instructæ et urbanitati assuefactæ . Metus autem notabilium
jurgiorum in his conditionibus esset causa sufficiens debitum reddendi.
» 5.° Pariter , si mulier, certo sciat virum , ex repulsu irratum ,
blasphemias in Deum et in religionem , injurias erga confessarium et
sacerdotes in genere , verba scandalosa coram familiâ aut liberis pro
nuntiaturum , tunc debitum reddere potest , quia , unum peccatum
impedire volens, in causâ esset quòd alia æquè gravia vel gravio
ra patrarentur; nihil ergo proficeret, et grave incommodoni frustrà
subiret.
» 6.0. A fortiori metus divortii , aut separationis , aut infamiæ , aut
gravis scandali esset causa 'sufficiens ,
. 222 - MOECHIALOGÍA . .
-„ 7.0 Non necesse est quòd mulier virum repellat donec sævitias,
molestias , aliave incommoda superiùs memorata experta ſuerit ; tunc
enim debitum reddendo vel offerendo malum jam existens sæpè non
averteret , et aliundè illud subire non tenetur ad peccatum mariti im -
pediendum : sufficit ergo ut illud-rationabiliter timeat. .
18.° Similiter, virum debitum cum intentione se retrahendi peten
tem singulis vicibus'monere non tenetur, quandò ex adjunctis certò
cognoscit se ab illo nihil obtenturam : debet tamen , saltem aliquoties,
ostendere se crimini ejus non assentire.
» Verùm seduld cavendum est ne illa , metu prolis , molestiarum
graviditatis aliove motivo sibi illudens, interiùs peccato mariti assen
tiat, vel in illo sibi complaceat, ita sit disposita necesse est ut mallet
mori quam generationem impedire, si hoc ab ipsâ penderet.
» In cunctis autem his casibus, ea mulieri licent quæ licerent si ac - .
tus mariti rectè perficeretur. '
» Nostra hîc descripta principia nunc communissimè admittuntur.
At nibilominùs multæ adhuc existunt anxietates, quas anno nuper
elapso summo Pontifici sic exposuimus :
» Beatissime Pater ,
» Episcopus cenomanensis , ad pedes Sanctitatis Vestræ summa cum
reverentiâ prævolutus , eu quæ sequuntur humillimè repræsentat.
» Ferè omnes juniores sponsi numerosiorem prolem habere nolunt; et
tamen ab actu conjugali abstinere moraliter nequeunt.
» A confessariis interrogali circa modum quo juribus matrimoniä
utuntur , graviter communiùs offendi solent, et moniti , nec ab actu con
jugali temperantur , nec ad nimiam prolis multiplicationem determina
ri queunt. .
». Tunc adversus confessarios mussitantes , sacramenta pænitentiæ et
eucharistic derelinquunt, malum præbent exemplum liberis , famulis.
aliisque Christi fidelibus. Lugendum inde oritur religionis detrimentum .
» Numerus eorum qui ad sacrum tribunal accedunt, multis in locis ,
ab anno in annum decrescit , præsertim ob hanc causam , fatentibus ple
risque parochis , pietate ,.scientia etexperientiâ magis conspicuis .
» Quomodò ergo olim agebant confessarii , aiunt multi ? Non plures
quàm hodiè communiler nascebantur liberi ex singulis-matrimoniis.
Conjugati non erant castiores , et nihilominùs præceptis annuoe confes --
sionis ac communionis paschalis non deerant.
» Omnes libenter admittunt infidelitatem erga compartem et abortis
intentionem maxima esse peccata . At vix quidam persuaderi possunt se
PART, II. CAP. 11. 223
teneri sub peccato mortali aut perfectam in matrimonio servarecastita
tem , aut incurrere periculum innumeram generandi prolem .
» Præfalus cenomanensis episcopus , ingentia hinc obventurà esse'ma
la prævidens, et anxietate turbatus, à Beatitudine Vestra sollicitè ex
quirit : . . ..
o 1.º An conjuges , quimatrimonio eo utuntur modo , ut conceptioneni
præcaveant, actum per se mortaliter malum , exerceant?
»2.° Si actus habendus sit ut per se mortaliter malus, an conjuges de
illo se non accusantes considerari possint tanquàm in eâ constituti bona
fide quæ eos à gravi culpâ excuset ?
03.° An probanda sit agendi ratio confessariorum qui, ne conjugatos.
offendant , illos circa modum quomatrimonii juribus utuntur non inter
rogant ?

RESPONSIO .
. '» Sacra Pænitentiaria ,maturè perpensis propositis quæstionibus, ad
4 am respondet : cùm tota actus inordinatio ex viri malitiâ procedat , qui,
loco consummandi , retrahit se et extra vas effundit , ideò , si mulier ,
post debitas admonitiones , nihil proficiat, vir autem 'instet «minando
verbera autmortem , poterit ipsa (utprobati theologi docent) citra pecca -
tum passivè se præbere , cùm in iis rerum adjunctis ipsu viri syi pecca
tum simpliciter permittat , idque ex gravi causa quæ eam excusat, quo -
niam charitas , quâ illud impedire teneatur , cum tanto incommodo non
obligat.
oAd 2am autem et 3am respondet : quòd præfatus confessarius in men
tem revocet adagium illud , sancta sanctè esse tractanda , atque etiam
perpendatverba S . Alphonsi de Ligorio , viri docti etharum rerum pe·
ritissimi, qui in praxi confessarii , S 4 , núm . 7 , inquit : Circa autem
peccata conjugum respectu ad debitum maritale , ordioariè loquendo ,
confessarius non tenetur, nec decet interrogare , nisi uxorem ,an illud
reddiderit , modestiori modo quo possit... De aliis taceat , nisi inter
rogalus fuerit : nec non alios probatos auctores consulere non omittet.
* » Datum Romæ ,'die 8 junii 1842.» (")
(1) Hay confesores que se contentan con ilustrar a la mujer , dándola a co
nocer lo que hay sobre la materia que pos ocupa. Hecho esto , las prohiben -to
da cooperacion activa en el acto , toda, peticion del débito , toda manifestacion
que a ello lienda mas o menos, y en fin toda espécie de conversacion dirigida
al cumplimiento de un acto desordenado. Despues no las hacen preguntas sipo
tocante á si estas últimas condiciones se han guardado o refrenado , y no sobre
el opacismo, de que ya no se trata . Las que suelen observar dichas condiciones
son absuellas ; las que no , se espera a , etc.
30
224. MOECHIALOGIA .
Las palabras de S. Ligorio que se citan se encuentran en la 14.
edicion en 4 .°, en el párrafo indicado , pero eu el n. 41. Hállaselas
tambien en el mismo número en la edicion de 1832 hecha por M . Re
ceyear. .
Las palabras omitidas en el testo de S. Ligorio , indicadas por los
puntos que siguen a la palabra possit , son las siguientes : an fue.
rint (uxores ) obedientes viris in omnibus. En el testo están subra
yadas, .
Mons. Bouvier 'hace las siguientes observaciones sobre la decision
de la sagrada Penitenciaría : « Advertendum est sacram Penitentia
riam , 1.° supponére actum viri matrimonio abutentis,per se mortali
ter esse malum ; 2 .º admittere praxim à S . Alphonso de Ligorio indi
catam , esse prudentem , et confessarium eam tutò sequi posse .
» Cauté abstineant confessarii , præsertim juniores, ab indiscretis
interrogationibus quæ gravem inferuntmolestiam conjugibus; pruden
ter admodùm agant et loquantur , nec tamen in suis responsis verita -
tem lædant, nec habentes conscientiam peccati mortalis indebitè ab -
solvant;sed promptiùs non judicent eos carere eâ bonâ fide quæ saltem
à mortali peccato excusat.
»Nihilominùs seduld inducendi sunt conjuges ad sanctè vivendum
io suo matrimonio. :
Studeat uxor pro viribusmaritum blanditiis, omnibus amores indi-
ciis , precibus, hortationibusque ad actum rectè perficiendum , vel ab
eo prorsùs abstinendum et christianè vivendum adducere :' experien
tiâ constat plurimasmulieres , viros sic allicientes , eos lucralas fuis--
se .» (Dissert. in sextum Decalogi præceptum , etc., decima editio, 1843.)
En mi concepto , por toda observacion tocante á lo que se acaba de
leer , referimos el lector a la página 226 y siguientes. . . .
De todo cuanto precede concluimos que es preciso ó permitir que la
mujer pağue el débito conyugal con las condiciones y motivos que exi
ge la decision de Roma , de fecha 23 de abril de 1822 , ó es menester
renunciar los 'principios de teologia moral arriba espuestos y univer
salmente admitidos como verdaderos por todos los teólogos; y.desde en
tonces todo el edificio teológico empezará á desmoronarse y se bambo
leará sobre su base como un hombre ébrio ;, se argumentará tocante al
precepto , como dice. Bossuet , y se dudará de la fe.
Medítese esto con séria atencion ; no se aturda á la mujer con im
prudentes rigores , porque la cosa es sumamente grave. La generacion
naciente está entre manos de la mujer, de' ella es el porvenir ; ella es
la depositaria y la conservadora de las esperanzas de la patria . La mu
jer aup puede salvarlo todo , y hoy en dia quizá es ella el único lazo
PAKT. II. CAP. 11. 225.
que todavía nos une á la religion , á la fe , á la moral; romped ese la
zo y entonces adios tal vez la religion , adios fe , adios moral. Si la
mujer llega á escaparnos , todopuede desaparecer con ella y abismarse
en la sima del ateismo , creencia, moral y toda nuestra civilizacion ,
porque desde entonces dejará de haber priņcipios de moral, freno
religioso , qué digo ? quizá tambien el þautismo... Y entonces el mal
quedará consumado y sin remedio. .
¿ Puede la mujer pedir el débito á su marido , cuando sabe que es
te abusará de él ? Varios teólogos lo afirman , porque , dicen , ella
tiene derecho de pedirlo , y ușa de su derecho. Otros teólogos, y con
mucha mas razon , dice Mons. Bouvier, exigen para eso un motivo gra
ve, porque no siendo así, añade elmismo autor, ella 'suministraria á
su marido una ocasion próximade pecar mortalmente . Y yo , á mi vez
pregunto ¿qué motivo puede tener la mujer para pedir el débito ,sa
biendo de cierto que su marido abusará de él? ¿ Acaso no es otra ra
zon grave', la ley de la caridad , para obligar a la mujer á no hacer
caer á su marido en pecado mortal? Admitamos sin embargo, en la es -
pecie , una razon grave, por ejemplo la de una tentacion muy difícil de
vencer. En este caso , segun el célebre autor que acabamos de citar,
la mujer de ninguna manera pecaria pidiendo el débito , porque, dice,
es lícito pedir ,.con intencion recta y por graves razones, una cosa
buena en sí á aquel que puede darla sin pecar , por mas que por el
abuso de la cosa no la diere sin pecado; de la misma manera que se
pueden pedir los sacramentos á un sacerdote indigno , tomar dinero á
crecido interés de un usurero , el juramento á un pagano , con tal que
para todo eso haya motivos sųficientes.
San Ligorio dice : «Si agatur de petitione debiti , dico... uxorem
non posse petere si non adsit justa et gravis causa ; tunc enim reverà
tenetur ex charitate impedire peccatum viri. Justam autem causam ha
bebit petendi si ipsa esset in periculo incontinentiæ , vel si deberet
aliàs privari suo jure petendi plusquàm semel vel bis , cum perpetuo
scrupulo an ei sit satis grave incommodum , vel ne , tunc se contine
re . » (Lib . 6 , n . 947.) . .
Pregúntase si un marido puede imitar la conducta de Onan cuando
esté seguro , por declaracion de los médicos, que la mujer no podrá pa
rir sia riesgo evidente de perder la vida. Todos los teólogos responden
negativamente , porque nunca puede ser lícito un acto esencialmente,
malo y contra la naturaleza, « Vel perficiendus est actus, ait DD . Bou
vier , si periculum mortis non sit multùm probabile ; vel ab eo totali
ter abstinendum si periculum sit moraliter certum . In eo casu alia via
salutis non relinquitur sponsis præter continentiam : lugenda est illo -
226 MOECHIALOGÍA.
ſuin conditio ; atque tamen mutarinon potest , nec admittenda est bo
na fides in conceptionem voluntariè impedientibus. Tunc miserabiles
hujusmodi spopsi separari debent quoad torum , ut faciliùs se conti
neant et castè vivant. »
El onanismo es igualmente criminal en los foroicadores y en los
adúlteros, quienes necesariamente deben declararlo en confesion.
En cuanto á la cuestion de si'el onanismo conyugales compatible con
la buena fe , no lo creemos así. Por el contrario estoy persuadido que
escluye esa buena fe , tanto y aun mas que el onanismo solitario ; por
que los casados, en elmomento de celebrar su matrimonio , recibieron ó
debieron recibir las instrucciones necesarias en órden al objeto de la
union conyugal. Por otra parte tanto lo uno como lo otro es contra
naturaleza , y por consiguiente intrínsecamente malo. Empero , sabido
es que no hay ignorancia invencible de los primeros principios de la
ley natural ni conclusiones próximas ó inmediatamente deducidas de
estos principios. Si la ley de la propagacion , que es la ley fundamental
en el órden material de la naturaleza , pudiese ser violada de buena fe
y por una ignorancia invencible , podria seguirse de ahí, por la ma
licia de los hombres que se entregasen á sus pasiones sin freno ni re
mordimientos , que la especie humana tenderia å destruirse y aụn á
estinguirse , lo que no es posible . Luego la buena fe ó la ignorancia
invencible de la malicia del onanismo es imposible en el hombre nor
mal, es decir, en el hombre moral y social; ó si á veces , por rara ca
sualidad , parece que existen esa buena fe y esa ignorancia invencible ,
jamás podrán ser duraderas y permanentes.
Deben pues los confesores instruir á sus penitentes sobre este pun
to , y revelar á los culpables toda la malicia de sus prácticas detesta
bles é infames.
ARTICULO III
DE LA CONDUCTA DEL CONFESOR CON RESPECTO A LAS PERSONAS CASADAS
Y Á LAS QUE SE DISPONEN Á ENTRAR EN EL ESTADO DE MATRIMONIO .

Un confesor jamás se penetrará demasiado de las muchas y difíciles


obligaciones de los esposos , que hemos esplicado en el curso de esta
obra . Es preciso sobre todo que se las manifieste é inculque segun la
ocasion y la necesidad. Deben tener presente que las faltas mas graves
y mas comunes que cometen los casados son las injustas negativas del
débito conyugal , el impedimento ó el obstáculo que voluntariamente
oponen a la generacion por medio de actos onánicos, sodomíticos y al
PART. II. CAP. 11. 227
gunas otras prácticas secreiasmas raras y conocidas tan solo de algu
pas mujeres o de algunos hombres sumamente corrompidos; maniobras
satánicas tanto mas difíciles de descubrir por cuanto todo se hace es
teriormente como en el estado ordinario y normal. La poco que nos
ha sido posible decir acerca de esas invenciones infernales debe bas-,
tar a los confesores para ponerles en camino de hacer las investiga -
ciones necesarias . No podemos esplicarnos mas , ni siquiera en latin .
Véase el artículo Fornicacion. ..
No debe tampoco olvidar las faltas graves que a menudo se cometen
en el estado de preñez , en perjuicio del fruto ya concebido , y á veces
de la mujer misma; las criminales tentativas de aborto , el uso de
remedios reputados abortivos , las prácticas feticidas y todos los abo
minables artificios de nuestras Aspasias modernas.
Los confesores deberán recordar tambien que las personas casadas
de ambos sexos pecan con mas frecuencia de lo que se piensa de la ma
pera què pecan las personas libres; no siempre desconocen el onapis
mo solitario , ó no lo han olvidado completamente . Debe pues un con
fesor prudente é ilustrado tratar de descubrir las numerosas y horri-
bles:llagas de las almas enteramente sumidas en la materia y muchas
veces tambien en la mas infecta corrupcion. A este efecto á menudo le
será necesario , aunque tan solo en materias graves , el hacer pregun
tas indispensables, pero siempre prudenter , cautè et castè. Que no se
ocupe mucho de los pecados veniales tan frecuentes en el estado de
matrimonio . Vale mas , dice Billuart , ocultar á los casados un mal
menor que esponerles con consejos imprudentes é intempestivos á caer
en desórdenes mas graves. Que los confesores , añade el mismo teólogo,
no reprendan el uso del matrimonio a aquellos que solo buscan en él
un remedio a la concupiscencia , por temor de que queriendo ser mas
ilustrados y prudentes que S . Pablo , y tratando imprudentemente de
hacerles evitar faltas veniales , no les conduzcan hacia el abismo de los
pecadosmortales. . .
Cualesquiera que sea vuestra opinion acerca del uso del matrimonio
en los diferentes estados ó condiciones de la vida , como por ejemplo
en la vejez , en el estado de embarazo mas ó menos adelantado , nun
ca' hableis de ella en presencia de personas casadas. Si decis que tal
cosa es lícita , no dejarán de ensanchar demasiado sus límites o de tras
pasarlos ; si afirmais que es ilícita , les tendeis un lazo ô les suminis
trais una ocasion que les hará caer en faltas mas graves. Esta es tam
bien la idea de M . Rousselot.
La esperiencia nos está probando todos los dias que un gran número
de personas casadas , figurándose que todo les es licito en el matrimo
ÍA
228 - , MOECAIALOG .
nio , no se acusan de las faltas que en su estado cometen á no ser que
se las interrogue sobre este punto . Por esta razon , cuando el confesor
tuviere justos motivos para creer que así sucede, hará , prudenter ,
cautè etcastè ,,las preguntas convenientes y necesarias. « Confessarius
eos sic interrogare potest – dice M . Bouvier - circa ea quæ inter conju -
ges permittuntur: Habesne aliquid contra conscientiam tuam ? Si dicat
se nihil habere , et satis instructus et timoratus appareat, non necesse
erit ulteriùs progredi. Si verò sit rudis aut sinceritas ejus suspecta vi-
deatur, insistere debet confessarius'; inquiret an debitum comparti
suæ denegaverit. Si has voces non intelligeret, dicere posset confessa
rius : Denegasti actum qui fit ad prolem habendam ? Si respondeat se
denegasse , sciendum est ob quam rationem , et tunc judicabitur ex
dictis an peccatum sit mortale , veniale , vel nullum .)
Quoad infandum onanismi scelus hisce miserrimis temporibus ubi
què grassans , et quo se turpissimè contaminant conjuges , præcipuè
juniores, interroget eos confessarius an circa actum conjugalem nihil
ipsos remordeat: nùm prolem numerosiorem habere timeant; nùm
coeundo nihil fecerint intendentes generationis impedimentum ; nùm
extra actum nihil turpe admiserint, etc. Addatque sibi molestum es
se talia quærere et talem materiam pertractare , sed necessarium esse
ut cognoscant quid in hâc re licitum vel illicitum sit; alioquin con
lingeret ipsis sæpissimè gravissimas culpas per ignorantiam inexcusa
bilem commiltere . Multi reverà , ut jam diximus, omnia in matrimo
nio licita esse falsò arbitrantur ; et etiam multi qui ob peccata in con
jugio perpetrata , quæ fortè levia reputant , æternæ dampationi addi
cendi sunt. , -
»Detecto onanismi vitio , confessarius non potest reum absolvere ,
nisi de peccato doleat , et firmiter proponat se,'non ampliùs peccatu
rum . Si sit inemendabilis , confessarius illuin sine absolutíone dimittat.
»Mulierem quæ virum ad sic agendum inducit , aut nefandæ ejus
actioni consentil, aut quæ se ipsam retrahit invito marito , confessa -
rius non potest absolvere nisi in casu veri doloris et firmi propositi.
Si sit consuetudinaria , nullo pacto absolvi potest. Hinc de hoc inter
rogandæ mulieres quæ sæpiùs in causà sunt cur viri onanismo se con
taminant ; seridque sunt admonendæ eas lege charitatis teneri ad ma.
ritum ab hâc nequitiâ deterrendum . In dubio tamen an maritus præ
monitus benè an malè acturus sil, mulier debitum reddere potest , imo
tenetur ; nam in dubio jus certum denegari nequit.» (M . Rousselot.)
Eso es perfectamente conforme a lo que hemos dicho en orden al ona
nismo'conyugal. . ..
Para con ciertas mujeres , se puede hacer el interrogatorio del mo
• PART. 11. CAP. II. 229
do siguiente , es decir, de una manera mas encubierta y mas delicada ;
se aparenta entrar en algunos detalles relativos á los hijos de la peni
tenta ; porque muchas veces son las mujeres mismas las que ponen
obstáculo al cumplimiento del fin del matrimonio ; se la pregunta de
qué manera los cria , si lo hace muy cristianamente , etc: Luego se
añade:Muy dichosa seria Vd. si Dios le concediese algunos mas para
criarlos de la misma manera , á fin de que le procurasen nuevos, y
abundantes consuelos . A menudo al oir estas últimas palabras se les
escapa esta confesion : ¡Ay ! Dios mio , bastantes hetenido ya. Esta res
puesta os instruye suficientemente y os dispensa de decir mas sobre
esto .
Si los hijos son mal criados , por lo comun son un motivo de pena y
afliccion para la madre', de lo que ella suele lamentarse . Entonces se
la podrá decir : Si Dios'le da á Vd . otros , será menester criarles mejor
y aprovecharse de las faltas pasadas para reparar el mal presente. La
respuesta será probablemente la misma si es que usa maldel malri
monio . Preguntando de esta manera se han conseguido á veces buenos
resultados y conversiones inesperadas. .
Se ha escrito últimamente que , en la familia , se interponia un ser
invisible entre el marido y la mujer... Efectivamente , ese ser invisible
es Dios : ¡ay !de los esposos que no respetan esa divina presencia , y
no se respetan á símismos ! ¡ay ! de la mujer, sobre todo , que olvida
su sublime calidad de esposa y de madre ! Si ella bace traicion á sus
deberes mas'sagrados , si al usar del matrimonio pierde á Dios de vis
ta , si Deum à se et à suâ mente excludat(Tob . 6 ), pronto se verá des
preciada , envilecida , y dejará de ser una verdadera esposa y aun
una persona ; no será mas que un instrumento , una cosa , res , esplota
ble á gusto de las pasiones .
Es deber de los confesores el hacer presente a las personas que se ha
llan en vísperas de contraer matrimonio las graves obligaciones del
nuevo estado que van a abrazar. Bueno será el decirles que elmatri
monio no fué instituido en provecho de la pasion grosera de la carne ,
sino para dar a Dios y á la Iglesia hijos que algun dia'lleguen á ser
santos y habitantes del cielo .·A esto se puede añadir quemuchos son
los esposos que se engañan , que se ilusionan tocante al estado del ma
trimonio , y persuadiéndose falsamente que todo les es lícito , se con
ducen como seres privados de razon , y se abandonan sin freno ni me
dida al impetu de sus pasiones ; y que si así lo hicieren cometerán un
sin número de pecados y muy probablemente se perderán .
Para evitarles lamaña desdicha en la otra vida , y primeramente lo -
dos los males de la presente que á aquella conducen , es menester que
230 MOECHIALOGIA .
el confesor ponga grandísimo cuidado en inculcarles esta verdad grave
y capital , á saber, que todo lo que conduce al fin delmatrimonio , to
do lo que está en el orden de la procreacion ó de la generacion de los
hijos es lícito ; lodo lo que es contra este fin ó la generacion , es ilícito
y prohibido so pena depecado mortal; finalmente todo lo que no es ni
segun ni contra este fin , ut oscula , amplexus et aliæ familiaritates
copjugalės vel sunt peccatum veniale si unicè fiant ob voluptatem ,
vel nullum peccatum si fiant ex casto affectu ad mutuum amorem fo
vendum inter conjugés , si tamen periculum pollutionis non adsit.
Todo puede pues reasumirse bajo esta breve fórmula : lo que se hace
para el fin es lícito ; contra el fin es pecado mortal; ni en pro ni en . .
contra del fin . es ó pecado venial·ó no es pecado.
A la verdad , es lícito usar del matrimonio como á remedio contra
la concupiscencia , y para estinguir ó moderar'el ardor de la pasion
erộtica ; pero su fin principal , primario , que nunca debe perderse
de vista , es, repetimos , la procreacion ó la generacion de los hijos.
«Confessarius, inquit D . Bouvier , debet adhuc interrogare conju
gatos circa tactus impudicos . et alias infamias quas inter se frequenter
exercent. Sic incipere potest : Nonne aliquid fecisti cum conjuge tuo
præter ea quæ in matrimonio permissa sunt , id est præter ea quæ ad
habendam prolem necessaria sunt ? Si dicat aliquid tale extitisse ,
quærendum est.in quo consistat , et conandum ut ipse hoc aperiat. Si
tactus vel turpes exerciti fuerint , inquirendum est an pollutio- conti ;
gerit , an periculum illa'm patiendi vel procurandi extiterit, etc.)
Aquí daremos fin á todo este trabajo relativo al matrimonio y á las
obligaciones de los esposos , que de semejante estado derivan ; ý ro
gamos encarecidamente a los confesores que se penetren vivamente de
la celestial doctrina del apóstol S . Pablo sobre esta materia tan difi
cil y tan eminentemente práctica a la vez. Que recuerden estas pala
bras de Concina : Plus scientiæ ex Pauli doctrinâ comparabunt pro
conjugatorum instructione quàm si omres disputationes excogitatas à
Sanchezio , à Diana , à Gobatio aliisque memoriâ tenerent. 'Invitamos
tambien á los'confesores á que lean y hagan leec. à sus penitentes
unidos por los vinculos del matrimonio los capítulos 38 v 39 de la
parte tercera de la Introduccion a la vida devota , por S. Francisco
de Sales.
TRATADO PRÁCTICO
DE EMBRIOLOGÍA, SAGRADA Ó. TEOLÓGICA.

CAPITULO 1.
DE LA ANIMACION DEL EMBRION Ó DEL FETO .- - EMBRIOGENIA :
BAUTIZO DE LOS EMBRIONES.
S. I:
De la animacion del embrion ó del feto.
Platon , Asclepiades , Protágoras y varios estoicos pretendieron que
el alma racional no existia antes del nacimiento . La criatura, decian,
recibe el alma por infusion en:el momento que sale á luz (4). Es evi
(1) Dos sabios , francés el uno y el otro americano , ambos eminentemente
católicos, me objetaron que habia adelantado una proposicion errónea al decir
que el embrion queda animado en el instapte mismo de la concepcion ; que so
lamente se debia admitir que el alma no se une al cuerpo sino al nacer, es decir,
cuando la criatura ha respirado y ha visto la luz , ó ha entrado en posesion de
la vida verdadera propiamente dicha y del todo independiente de la de su
madre
He aquíla respuesta que dí á mis dos honorables adversarios.
En filosofia cristiana , loda opinion o toda doctrina que se halla en oposicion
con la Santa Escritura y la enseñanza de la Iglesia , bajo el punto de vista dog
mático y moral , debe ser à priori constantemente rechazada. Con auxilio de
este criterium ès couno juzgo , admito y desecho todas las teorías y todas las
opiniones humanas. Apliquémoslo al caso presente .
- Una vez que , señor mio , tratais siempre , y con razon , de apoyaros princi
palmente en la revelacion divina , no quiero oponeros sino una palabra sacada
: igualmente de la revelacion , es decir, del tesoro de las verdades que la Iglesia
posee desde su origen o desde su fundacion divina. He aquí cual es esa palabra :
La Iglesia enseña que una criatura puede salvarse sin haber nacido , esto es,
como vos decís, sin haber visto la luz material, puesto que aplica el sacra
mento del bautismo a los que no pueden nacer (dejando a parte los ſetos estrai
dos del seno de su madre despues de la muerte de esta , y que la Iglesia man
da bautizar) ; y como decide que este bautismo es válido , síguese de ahí que
aquellas criaturas se salvan . Luego , etc . He aquí le que dice el Ritual romano
con respecto albaqtizo de una criatura que aun se halla retenida en la cavidad
31
232 TRATADO PRACTICO
dente que ellos tomaron el soplo , spiritus, el pneuma de los griegos ,
por el alma humana. Aristóteles fué el primero que fijó là animacion
á los cuarenta dias para los niños y á los ochenta ó noventa para lasni-
ñas. S. Agustin , Sto. Tómás y los teólogos que vinieron despues adop
taron la opinion deAristóteles, quereinó en la escuela hastamediados
del siglo décimo séptimo. Mons. Bouvier hace observar que la Peni
tenciaría de Roma sigue la opinión de Aristóteles , sin examinarla ni
garantirla 'cuando se trata de la irregularidad fulminada contra los
homicidas.
uterina :«No debe bautizarse á ninguna criatura encerrada en el seno de su ma
dre ; con todo, si presenta la cabeza y su vida corre peligro , se la bautiza so
bre la cabeza , y en caso de salir viva , no se la vuelve á bautizar. Si despues
que recibió el bautismo de esta suerte , se la saca muerta del serio de la madre ,
se la enterrará en tierra sagrada.» Luego los fetos intra -uterinos , incapaces de
nacer física y materialmente , tienen una alma inmortal; luego vuestra opinion
es heterodoxa y anticatólica . Habia ya sido condenada , pues no es nueva , por
Inocencio XI en 1679. El clero de Francia y la Facultad de Teología de Lovaina
la condenaron igualmente. «Hæc propositio - dice el clero francés - est scanda
Josa , erronea , infandis homicidiis et parricidiis procurandis apta » (1700 .) Re
aquí cual era la proposicion condenada : « Videtur probabile omnem fætum ,
quandiù in utero est, carere animâ rationali , et tunc primùm incipere eamdem
habere cùm paritur : ac consequenter dicendum in nullo abortu homicidium
committi.»
Si bien esa respuesta deberia bastar para quedar refutada aquella estraña ob
jecion , con todo, añadiré aun algunas palabras como superabundancia de prue
bas, Tened la bondad de decirme, señor mio , qué es lo que quiere decir este
pasaje de la Escritura : in iniquitatibus conceptus sum . (Ps 50.) Sin duda no es la
materia la que fué concebida en la iniquidad , sino el alma. Si vuestra opinion
fuese cierta, y el alma no se uniese al cuerpo sino al momento de nacer la cria
tura , como suponeis , el profeta debiera haber dicho, en mi concepto , in ini
quitalibusnatus sum , en vez de conceptus sum . No podreis negar eso , á menos
que violenteis el testo , lo que no es lícito ni á vos ni 'á mí. A mas de que bien
sabeis que Jeremías y Juan Bautista fueron santificados en el seno de sus ma
dres : Antequàm exires de vulvå sanctificavi te (Jer.); replebitur Spiritu sancto ex
utero matris suæ . (Luc.) No os opongo sino pruebas sacadas de la Escritura , ya
que vos mismo invocais la autoridad de los libros santos. Tenemos, pues , que
su alma existia ya , puesto que no se santifica á lo que no es. Tal vez me direis
que esos hechos atañen al orden sobrenatural : pase ; pero aquí lo sobrenatural
no versa sino sobre el cambio de estado del alma, y no sobre su misma existen
cia. La Escritura no dice que las almas de Juan Bautista y de Jeremías hubie .
sen sido creadas , sino solamente santificadas, porque existian ya . Esto es de tal
manera cierto que Juan Bautista se estremeció en el seno de Elisabet al aproxi
marge Jesucristo encerrado todavía en las entrañas virginales de María. Si el al
wano se uniese al cuerpo hasta que la criatura sale á luz & qué viene a ser la ·
inmaculada concepcion de la Santísima Virgen ? No cabe duda que la inmacu
lada no es la materia , sino el alma; luego existia antes del pacimiento . Si vues.
tra opinion fuese cierta , la Iglesia se habria engañado diciendo : inmaculada
concepcion ; debiera haber dicho inmaculado nacimiento ó natividad (1). Luego
el feto es animado , tiene un alma inmortal antes de haber visto la luz , esto
es , antes denacer ,
(1) Lo que creen los fieles , es la santificacion de María en el seno de su madre:
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 233
Tenemos un gran número de hechos recientes, dice el mismo autor,
que prueban que aquella distincion entre los dos sexos no tiene funda
mento ninguno.; yo añadiré que es absurda y ridicula . A mas de esto
es sumamente probable , por no decir cierto , que el feto queda ani
mnado mucho antes de lo que comunmente se cree , como luego vere
mos .
Variosautores no admitieron la animacion sino hasta tanto que es
tán formados los principales miembros del cuerpo. Zaccbias cree que
liene lugar en el mismo momento de la concepcion . S: Basilio no que
ria que se hiciese la distincion de feto animado é inanimado , porque
estaba persuadido de que el alma es creada al instante mismo de la
concepcion. S. Gregorio de Nicea añade que el buen sentido no pue
de admitir el que una cosa inanimada crezca y tenga fuerza para mo.
verse : « Enim verò posteriorem esse originem animarum ipsasque recen
tiores esse corporum compositione nemo sand mente præditus in ani
mum induxerit , cùm manifestum et perspicuum sit quòd nihil exanimis
habeatin se vim movendi pariter atque crescendi. » Esto es sin embargo
lo que se observa en la criatura desde los primeros tiempos del emba
razo ; luego es preciso que tenga vida. S . Cesáreo era de la misma
opinion . Florentini dice que es probable que el embrion es animado
inmediatamente despues de la concepcion . Enseña en consecuencia
que se debe, so pena de pecado mortal, bautizar el gérmen ó el em
brion aun cuando no sea demayor tamaño que un grano de cebada y
que no de ninguna señal de vida , con tal que no esté corrompido ó
evidentemente muerto ; fúndalo en que cree que el embrion está ani
mado , es decir, unido ya á una alma racional. « Los teólogos célebres
y algunos hábiles médicos recibieron esta obra con señaladas mues
tras de aprobacion . Las facultades de teologia de Paris , de Viena y de
Praga aprobaron dicha opinion : la de París dice que la doctrina de
Florentini es segura, indubita doctrina ; que es muy útil para impedir
los abortos que las mujeres sin religion se procuran sin escrúpulo so
pretesto de que el gérmen aun no está animado. Esta doctrina tambien
mereció los elogios del rector de la universidad de Reims, de la de Sa
lamanca , de varios obispos y de las facultades de medicina de Viena
y de Praga. En esta última se sostuvo una tesis sobre esta proposicion :
En el momento de la concepcion el gérmen tiene un alma racional. »
(Cangiamila .)
El célebre autor de la Grande Embriologia sagrada enseña igual
mente que es probable que el gérmen del feto es animado inmediata -
mente despues de la concepcion .
Yo adopto la opinion de S. Basilio y de Zacchias, es decir, que creo
234 TRATADO PRACTICO

que la animacion tiene lugar en el mismo momento de la concepcion ,


y he aqui las razones en que me fundo.: si la vida del hombre cesa
luego que el alma se separa del cuerpo, es de creer que comienza lue
go que el alma se une al cuerpo por diminuta que sea su forma rudi
mentaria. Pues bien,desde el instante en que el óvulo es fecundado, lo
que no tiene lugar sino en elmismomomento de consumarse el acto de
la generacion, crece; y no crece sino porque vive, y no vive sino por
que está animado ; luego el gérmen ó el huevo humano queda animado
en el instante mismo de la concepcion .
Además de esto , en mi concepto , comola vida material se halla ba
jo la dependencia inmediata de la facultad sensitiva del alma , y no
pudiendo esta facultad sensitiva del alma estar separada de la facultad
inteligente del alma , síguese de ahí que el alma racional se halla
unida al embrion en el momento mismo de la concepcion .
Finalmente no se sabe por ventura que el alma permanece unida
al cuerpo hasta el último suspiro del hombre agonizante , siendo así
que entonces casi todos sus órganos están ya paralizados y como heri
dos de muerte ? Aquel soplo ligero , aquel débil resto de vida material
que va a estinguirse dentro de algunos minutos y es acaso una vitalidad
muy superior a la delembrion fecundado ? Este á lo menos es una vi
da formatriz, plástica y creciente. Quenuestra razon no se asombre al
considerar el estado informe y diminuto en que nos parece se halla esa
débil porcion de materia animada. No veremos órganos en el gérmen
amorfo del huevo de una gallina ; pero si armamos nuestro ojo con un
microscopio al momento observaremos todos los lineamentosde la or
ganizacion . Nuestra débil razon , repito , no debe asombrarse de la pe
queñez material. Dios es siempre grande é infinito lo mismo en las
cosas pequeñas que en las grandes, ó por mejor decir en el órden ma
terial no hay á los ojos de Dios nada que sea grande ni pequeño : estas,
cualidades relativas de grandeza y pequeñez son parto de nuestra de
bil imaginacion , necesario en este mundo para ponernos en relacion
con las cosas materiales y para juzgar y apreciar el orden y la ar
monía .

S. II.

De las causas del aborto .

Como es bueno que los señores párrocos y los confesores conozcan


las causas principales de los abortos , a fin de poder dar los consejos
necesarios á las mujeres y á lasmuchachas que están en cinta , segun
· DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 235
se lo permitan la ocasion y la prudencia , vamos á esponerlas sucin =
tamente. No repetiremos lo que ya hemos dicho acerca de las épocas
mas frecuentes en que sobrevienen los abortos , que el lector habrá
0 S
visto esplicadas en la página 188 . mo 1ida osha
n: d l
Causas predisponentes. Las principales son : una estremada sensibi
lidad nerviosa , un esceso de plétora ó de debilidad y estenuación ,
el habitar en lugares pantanosos, frios , húmedos ó que exhalan ema
naciones fétidas ; el vivir junto á tenerías ,' muladares y generalmente
cerca de todos los focos de exhalaciones fétidas y mal sanas ; olores
demasiado fuertes , cosméticos muy odoríferos ; trajes muy apretados,
ballenas muy recias ó el uso de corsés de ballena que constriñen el
pecho y el vientre ; el calzado con talonesmuy altos que hacen elequi
librio muy dificil y esponen á bamboneos y á caidas que pueden de
terminar el aborto ó pérdidas peligrosas; el abuso de los baños genera
les y locales, la intemperancia , un sustento exuberante y harto su
culento propio para producir la plétora sanguínea ; el uso habitual ó
inmoderado de los alimentos acres ó estimulantes , como salsas carga
das de especias, carnes negras, y sobre todo de los licores espirituosos,
estimulantes , de los vinos calientes , alcohólicos , de licores fuertes,
del café, etc ., y sobre todo de bebidas heladas ; la dieta severa , ayu
nos escesivos , una gran miseria ; la lactancia prolongada y escesiva
de las nodrizas embarazadas mercenarias ; vigilias prolongadas, el
constipado, la diarrea , la disenteria , los pujos , los tenesmos , la leu
coréa , las toses violentas rijosas y convulsivas; todo cuanto pueda
causar cólicos y dolores de tripas; finalmente las pasiones tristes y
depresivas, la inquietud habitual, el enfado , etc
Causas determinantes. La impresion viva y súbita de un aire frio ,
sobre todo si hay transicion brusca del calor al frio ; la inmersion del
cuerpo ó de los miembros en agua muy fria ; la caida y los golpes en -
cima del vientre , las lavativas irritantes , los purgantes violentos , los
preparados de aloes , los vómitos causados sobre todo por el emético
(tártaro estibiado) ; los estornudos violentos y repetidos , los remedios
llamados emenagogos ó propios para promover la menstruacion , las
sangrías del pié particularmente , las aplicaciones de sanguijuelas en
las partesinferiores , una marcha larga y precipitada , las sacudidas y
conmociones causadas por saltos , el montar á caballo y el traquetéo
de un carruaje mal suspendido , el bailar y sobre todo el vals , que es
el mas cansado y el peor en todos conceptos; los trabajos duros y pe
nosos , los esfuerzos, el movimiento de brazos necesario para sacar
agua de pozo , ellevantar un bulto pesado ó el querer alcanzar alguna
cosa que se halla en paraje elevado. Una mujer que quiso levantar al
236 TRATADO PRACTICO
gunos sacos de trigo , al momento se sintió lastimada ; da algunos pa
sos y'aborta ; sin pararse coge el feto y lo entierra en una ‘huerta in
mediata . « Las naciones mas salvajes , dice un médico aleman (Mezler),
dispensan á lasmujeres preñadas de los trabajos de faliga; solo el cam
pesino europeo ignora esa atención que parece indicada por la misma
naturaleza . Es difícil imaginar de cuantos abortos es causa ese solo
abuso , cuanto aumenta el número de criaturas que mueren al nacer,
y cuanto influye en la esterilidad conyugal en ciertos países. Conozco
un lugar donde es sumamente raro que una mujer para sin haber su
frido alguna hemorragia durante el embarazo. Hace pocos instantes
que he visto á una mujer casada solo ha seis meses , y que siempre está
enferma ; su vientre , entumecido, ni aumenta ni disminuye de vo
lúmen , y ella ignora si está ó no en cinta . Me ha dicho que levantando,
cosa de tres meses atrás, una gran carga de yerba sintió como que se
le rompia alguna cosa , y que desde entonces tiene la salud perdida.'
Aquello fué efectivamente la ruptura de las membranas del huevo;
deterioróse el gérmen , y en la actualidad lleva una mole . Otra mujer
me contó que mientras estaba un dia trillando sintió que se le rompia
algo en el vientre y le salia por las partes genitales. No sabiendo lo
que pudiese ser , y, temiendo las habladurías de los labradores que con
ella trabajaban , se puso de pies encima de aquella cosa para aplas
tarla , y esperimentando resistencia , advirtió que era un cuerpo sóli
do. ¿ No hace estremecer este relato ? Sin embargo , los homicidiosde
este género se repiten con harta frecuencia sin que haya quien pro
cure evitarlos , pues todos los dias estamos viendo á mujeres embara
zadas que se ocupan en trabajosmuy penosos . Si de resultas de los 'es
fuerzos que estos exigen , una mujer llega á esperimentar algun ac
cidente , el alcalde la compadece y el cura la riñe ; pero entretanto
nadie trata de instruir á los aldeanos acerca de sus deberes y de sus
verdaderos intereses.»
Hay en fin algunas causas morales capaces de determinar el aborto ,
tales son , por ejemplo , un súbito arranque de cólera ó de furor , gri
los violentos , voces estrepitosas, una alegría escesiva , risas inmode
radas , la cólera , la brutalidad , los malos tratamientos de un mari
do, etc. , etc. Resumo todas estas causas diciendo que son todos
aquellosmedios propios para aumentar considerablemente la acumula
cion de la sangre hacia la matriz , toda causa de perturbacion ó de
irritacion algo fuerte dirigida hacia el útero ó á sus partes inmediatas;
son finalmente todas las sustancias que aceleran notablemente la cir
culacion sanguínea , y propias sobre todo para producir congestiones
ó plétoras uterinas : entre esos últimos agentes es donde especialmente
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 237
se ban buscado y creido encontrar los abortivos propiamente dichos.
«No hay medicamento alguno , dice el doctor Marc , célebre médico
legista , que pueda determinar el aborto , y nada mas que el aborlo ,
de una manera directa y específica. Por el contrario la naturaleza ,
que á lo que parece, ha negado á propósito este poder , ha llenado de
obstáculos , de peligros y de incertitudes toda tentativa dirigida a des
truir y espulsar el ser , interesante por su debilidad , encerrado en el
seno maternal. Si bien es cierto que algunas veces se han cometido
esos atentados criminales con buen éxito , otros, y en mayor número ,
se han visto frustrados. En todos los casos de esta especie , nome can
saré de repetirlo , jay de la madre que haga semejantes tentativas! No
solamente espondrá su vida á un gran peligro , sino que, dado caso
que la salve, no dejará de resentirse su salud , y de tal suerte , que le
será imposible reparar el daño que sufra .»
Aquí me detengo , absteniéndome de entrar en detalles que el cri
men podria esplotar en favor suyo. Corramos pues un tupido velo so -
bre las acciones criminales de los antiguos romanos , sobre los satáni
cos inventos de Aspasia , y dejemos al infierno sus horribles secretos.
S . IV .
Embriogenia .
Segun los fisiólogos, los comadrones y los mas célebres médicos le.
gistas modernos , el producto de la concepcion a los primeros dias del
embarazo solo se presenta bajo la forma de un copo gelatinoso semi
Transparente , y casi imperceptible a simple vista . Haller y Baudeloque
aseguran que elfeto humano no puede distinguirse antes del dia déci
mo nono. Segun Chaussier nada puede percibirse hasta el dia décimo
quinto ni siquiera con el lente. A los treinta dias el embriones del la
maño de una hormiga grande , de un grano de cebada ó de una mosca
comun , y á lo mas tiene nueve milímetros de largo. A los cuarenta y
cinco distinguese ya muy bien la forma del feto , los lineamentos de los
órganos principales y la colocacion de los miembros; entonces el em
brion puede compararse á una abeja grande ó á una avispa , es decir ,
que liene la longitud de veinte y cinco milímetros ; el volúmen de su
cabeza por lo menos es igual a la mitad del cuerpo. A los sesenta dias
ó dos meses el feto tiene cincuenta y cinco milímetros de largo. Enton
ces puede -uno juzgar de su figura ; las diversas partes del rostro se
distinguen con mas perfeccion . El sitio de los ojos es indicado por dos
puntos negros, la boca está entreabierta y muy perceptible ; unos pe
238 TRATADO PRACTICO
queños agujeros indican el lugar de la nariz y de los oidos . En esta
misma época empiezan a distinguirse los rudimentos de los miembros.
A los tres meses todas las partes esteriores del feto son distinguibles y
bien marcadas'; tiene a la sazon cerca de ochenta milímetros de largo
y pesa cosa de noventa gramos. A los cuatro meses la longitud del feto
es de unos ciento sesenta milímetros. A los cinco meses tiene doscientos
cincuenta milímetros de largo. A los seis meses su longitud es de tres
cientos veinte y cinco milímetros . A los siete meses tiene de largo tres
cientos ochenta milímetros. A los ocho meses ha adquirido ya una lon
gitud de cuatrocientos cuarenta milímetros. A los nueve meses se halla
en estado de madurez perfecta ; tiene de largo cuatrocientos ochenta y
ocho milímetros. El peso ordinario del felo á término es de tres mil
gramos. Estos cálculos se han hecho con arreglo a los descubrimien
tos y á las observaciones de dos célebres médicos legistas modernos ,
Chaussier y Marc.

S. V .

Del bautizo de los embriones.


es . .
Segun la opinion mas segura y la única razonablemente admisible ,
siendo ya animado el feto en el instante mismo de la concepcion , claro
está que debe bautizársele en cualquiera época del embarazo en que
acaezca el aborto .
Si el aborto estuviese ya desarrollado, de suerte que presente forma
humana y démanifiestas señales de vida , se le bautiza absolutamente ,
es decir, sin condicion. Si solo se duda de su vida , se le bautiza bajo
condicion : Si tu vivis , ego te baptizo , etc.; si su vida y su forma son
igualmente dudosas , se dirá :: Si tu es homo et vivis , etc .; y siempre
se bautizará , bajo la fórmula condicional , todo lo que parezca ser em
brion , con cubierta ó sin ella , con tal que no se halle en estado de
putrefaccion , de descomposicion ó de desorganizacion manifiesta .
Si el embrion ó el feto está envuelto en su membrana , como á me
nudo acontece , se le bautiza sobre la envoltura diciendo : Si tu es ca
pac, etc . Ó si tu es homo et capax , etc ., por temor de que la impre
sion del aire no le mate antes de haber recibido el bautismo. Despues
se abre la membrana , y se le bautiza de nuevo bajo condicion dicien
do : Si tu non es baptizatus , etc. De suerte que se le bautiza dos veces,
porque no es cierto que el bautismo dado sobre las secundinas sea
válido , puesto que el agua no pudo tocar inmediatamente el cuerpo
del feto : tampoco es cierto que el bautizo sea nulo , porque en tal ca
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 239
so puede considerarse que las membranas fetales forman una espe
cie de todo aparente y temporal con el feto , aunque en realidad no
sea así,
Jamás debe tirarse lo que una mujer arroja , en el supuesto de que
sufre un aborto , sin haberlo examinado con atencion y sin haberse
cerciorado de que los cuajarones de sangre ú otra materia sólida no
encierran un embrion ya desprendido de su cubierta , bien que aun
con mas frecuencia bajo la forma de una membrana blanquizca oval,
blanda y elástica , como una membrana intestinal. Estos caracteres
distinguirán en todo caso el huevo ó la cubierta fetal de aquello que
se llama falso ' gérmen ó mola , que es una masa de carne infor
me, etc .
Tambien se tendrá cuidado de abrir las molas á fin de cerciorarse
si encierran ó no algun embrion . Así pues , repito , váyase con gran
cautela al tirar en los receptáculos de inmundicias lo que arrojan las
mujeres que abortan ; recuérdese lo que acerca de esto dice Roncaglia :
Quot fætus abortivos ex ignorantiâ obstetricum et matrum excipit la
trina, quorum anima , si baptismate non fraudaretur, Deum in æter
num videret , et corpus , licèt informe, esset decentiùs tumulandum ! sed
quibus potissimùm sub gravi culpa competit tunc expellere ignorantiam ?
nonne parochis !
Corresponde á los curas el dar á las comadres las instrucciones su
ficientes sobre este punto , y el recordar a los comadrones , cuando
venga el caso , lo que algunos,tal vez hoy en dia tienen harto olvida
do en la práctica : «Mientras estaba estudiando medicina, dice el doc
tor Rosiau , un catedrático de partos nos trajo un dia á su anfiteatro
un feto de cuatro meses y medio envuelto lodavía en sus membranas ,
que le habian entregado el dia antes. Me tomé la libertad de hacerle
observar que debieran haberle bautizado despues de desembarazarle
de las secundinas. Me cootestó que , no creyendo en la regeneracion
de la especie humana con las aguas del bautismo , no lo administraba
sino en caso de exigirlo los padres . Si hay profesores que se atreven á
enseñar semejantes doctrinas , ¿ será de admirar que comadrones y
comadres, que han adquirido sus conocimientos en la escuela de ta
les maestros , paren tan poco su atencion en los fetos en caso de abor
to ? Si se nota tanto descuido en los hombres del arte , menos celo
hay que esperar de aquellos que no poseen ningun conocimiento en
medicina . Así pues no es de estrañar que los enfermeros y los criados
tiren sin exámen alguno los cuajarones de sangre , entre los cuales
puede haber algun embrion susceptible de recibir el bautismo.)
Todo cuanto hasta aquí hemos dicho en órden al bautizo de los em - ,
32
240 TRATADO PRACTICO
briones está fundado en los testos signientes estractados de la Grande
Embriología sagrada de Cangiamila :
«Un feto de algunos dias debe bautizarse bajo la condicion : Si tu
es capax , ego te baptizo , etc . aunque esté envuelto en su membrana ,
á fin de no perder tiempo poniéndole en peligro de morir al momento
de quedar espuesto al aire . Esta condicion , si es capax , salva tanto
la duda en que se puede estar de si está vivo , como la que puede ori
ginarse acerca de la validez del bautismo , á causa de la membrana en
que se halla envuelto. Despues de esta primera operacion , es menes
ter abrir la membrana y bautizarle segunda vez bajo esta doble con
dicion : Si es capax , et si non es baptizatus, etc .; si ères capaz de re
cibir el bautismo y no estás bautizado , etc . Es preciso obrar así , tanto
si se nota como no algun movimiento en el feto , con tal, como ya he
dicho antes , que no haya alguna prueba evidente de estar muerto .
. » Se bautizan tales abortos por medio de inmersion en agua (1) puesta
en un plato o en un vaso . Un sacerdote no debe abrigar temor alguno
de incurrir en irregularidad , porque podria precipitar la muerte del
embrion así despojado de su membrana. El embrion que está en el se
no de la madre nada en él en cierto líquido de que está llena la pri
mera membrana , sin tener necesidad de respirar. No se ahogará pues
precisamente porque se le sumerja en un poco de agua ; pero si llega
se á suceder por casualidad , su vida es un soplo tan ligero , y es de
tal manera imposible el conservársela , que en tales circunstancias el
temor de acelerar su muerte algunos momentos no debe impedir admi
nistrarle el bautismo.»
„No repetiremos aquí toda la multitud de hechos en que se observa
ron embriones que vivieron largo rato aun despues de espelidos del
útero , que ya publicamos en nuestro Ensayo sobre la Teologia moral .
Ceñirémonos á citar dos casos solamente , que son de los mas recien
tes y mejor probados.
En el año último me comunicaron el hecho siguiente , en estos tér
minos : «En el aposento de un director de seminario se estaba leyen
do , hace algun tiempo , una de vuestras obras (era el Ensayo sobre la
Teologia moral , Embriologia sagrada) , en que se trata del proceder
que hay que observar con respecto a las mujeres que mueren en es
tado de preñez. Aquel dia mismo habia muerto una mujer embarazada
que iban ya á enterrar con el fruto de sus entrañas. Un eclesiástico ,
que estaba presente á la lectura de vuestro libro , quiso inmediata
mente hacer practicar lo que acababa de aprender ; empero no pudo
(1) En agua tibia si se encuentra a mano , o de no en agua fria en caso de
necesidad urgente .
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . . 241
abrirse el cadáver hasta eldia siguiente , y aun costó mucho conseguir
que un hombre del arte hiciese là operacion , porque pretendia que la
criatura habia muerto infaliblemente con su madre , ya difunta hacia
veinte y cuatro horas. Mas, jó Providencia admirable ! se encontró la
criatura viva , que fue bautizada y aun vivió algunas horas.» Este
acontecimiento , que hizo mucho ruido en el pais , es de aquellos que
hacen viva impresion en el ánimo de los médicos que suponen que la
criatura siempre muere con la madre , ó por lo menos , como dice el
profesor Velpeau , «no puede vivirmas que algunos cuartos de hora ó
aun algunos minutos .)
«Nadie ignora en París , dice el célebre Gardien , que la desgraciada
princesa Paulina de Schwartzenberg murió de resultas de un incendio
sobrevenido en una fiesta dada en casa del embajador de Austria , su
cuñado (4) : estaba en cinta , y se la encontró la criatura viva , sin
embargo de que no se hizo la operacion hasta el dia despues del ac
cidente. »
Debemos convenir en que los hechos de larga sobrevivencia no son
comunes ; pero aun cuando fuesen mil veces mas raros , y aun cuando
jamás hubiese habido mas que un solo caso , deberia bastar esto a los
ojos de los médicos cristianos para admitir y consagrar el principio de
abrir los cadáveres de las mujeres embarazadas, cualesquiera que
fuere el espacio de tiempo discurrido desde su muerte .
Sin trabajo se conciben esos hechos de larga sobrevivencia al re
cordar lo que la fisiología nos enseña en órden a la vida uterina del
feto en el seno de su madre.
La vida uterina del feto no depende inmediatamente de la vida de la
madre; tiene una vida y una circulacion que le son propias y que se
ejecutan sin respiracion , puesto que el feto no respira como su madre.
El lugar de comunicacion vital y nutritiva es la placenta , que parece
ser el órgano en que se elabora el alimento del feto , o si se quiere, es el
órgano que le sirve de pulmon para purificar y oxigenar la sangre que
le está destinada. La placenta es, pues, un órgano de nutricion, o mas
lugaSir dlae circulacion
bien de alimentacion o de oxigenacion. ocion del fet delquefeto o
, cuaesndin
dependiente de la circulacion de la madre , síguese de ahí que, cuando
esta muere , todavía puede subsistir la circulacion del feto durante al
gun tiempo . Esta circulacion tiene lugar de la placenta al feto y de
urar mientras la placenta suministre los
este á la placenta , y podrá ddurar
materiales que saca de la madre. En virtud de lo que precede es in -
útil hacer observar, cuan ilusoria es la precaucion de meter entre los
(1 ) Figurémonos los horrorosos sufrimientos de la madre , que sin embargo
no determinaron la muerte de la criatura .
242 TRATADO PRACTICO
dientes de la mujer, en el instante de morir , un tubo de caña abierto
en ambos estremos, ó simplemente una cuchara , como se suele hacer
hoy en dia . Esta práctica fué prescrita antiguamente por el sínodo de
Colonia , en 1528 , y por el de Cambrai, en 1550.
Luego que una criatura empieza a respirar , su circulacion sufre un
gran cambio ; vuélvese pulmonar , y por lo tanto es muy diferente de
la del feto. Pero este cambio no se verifica súbitamente despues del na
cimiento , porque como el agujero botal no se cierra de repente , aun
puede dejar pasar cierta cantidad de sangre como en el feto. Por esta
razon las criaturas recien nacidas no se ahogan tan fácilmente como
los adultos.
CAPÍTULO II.

PROCEDIMIENTO QUE HAY QUE OBSERVAR CON RESPECTO A LA


MUJER EMBARAZADA QUE ACABA DE MORIR , - SEÑALES DE LA
MUERTE REAL Y APARENTE . - OPERACION CESÁREA EN UNA
MUJER MUERTA. - OPERACION CESÁREA EN UNA MUJER VIVA .
- OBSTÁCULOS AL PARTO DEL LADO DE LA ·MADRE . - OBSTÁ
CULOS DEL LADO DEL FETO . -- ASFIXIA Y APOPLEJÍA DE LOS
RECIENNACIDOS. - - BAUTIZO DE LOS MONSTRUOS.

S. I.

Reflewiones preliminares.
La operacion cesárea ó la estraccion dél feto del seno de la madre es :
tá prescrita por las leyes civiles a las mujeres que mueren estando en
cinta : es indispensable sobre todo , en el orden civil , cuando la muer
te sobreviene despues delmes sesto , porque entonces la criatura ya
puedé vivir. Segun cuenta Cabanis , « Fortunio Liceti , sabio recomen
dable del siglo xvi, nació de cinco meses , y Brouzet , en su Educa
cion física de los niños , cita dos ó tres hechos de semejante naturaleza
y no menos admirables.» Los legisladores sagrados ordenan practicar
la operacion en cualquiera época del embarazo , á fin de poder admi
nistrar el bautismo al embrion ó al feto que no esté evidentemente
muerto . Si la mujer embarazada llega á morir , dice el Ritual romano,
esmenester abrirla lo mas antes posible á fin de estraerle el feto . Si bien
el feto suele sobrevivir poco tiempo a la madre , hay sin embargo una
multitud de hechos que prueban que puede sobrevivirla no solo algu
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 243
nas horas , sino tambien dias enteros. Jamás debe dejarse de hacer la
operacion , sea cual fuere el tiempo trascurrido desde la muerte de
una mujer preñada , aunque esté enterrada , ó que haya alguna oposi -
cion de parte de los médicos, de los cirujanos ó de las comadres, pues-a
to que nunca pueden tener una seguridad completa de la muerte del
feto , si bien la auscultacion ha mejorado notablemente nuestros me
dios de investigacion en este punto . Vemos segun esto cuan peligrosa
es la opinion de Sanchez, de Roderico de Castro y de Varendé, quie
nes creian que la criatura no podia sobrevivir ni un instante á su
madre ; así como la de Possevin y Rainaud , que sostenian que una
criatura no sobrevive mas de una hora á su madre. La esperiencia y la
fisiologia refutan suficientemente todas esas opiniones. -
S. II .
· De las señales de la muerte real y de la aparente .
Una multitud de bechos han probado la incertitud de las señales de
la muerte. La falta de respiracion , de circulacion , de calor y de sen
sacion ; el rostro cadavérico , la tez aplomada , lívida , amarillenta ; el
color amarillo de la palma de lasmanos y de la planta de los pies ; el
hedor de putrefaccion , la pesadez del cuerpo , etc.; las pruebas del
espejo y de la bujía y otras semejantes ; las tentativas quirúrgicas, las
incisiones en la planta de los pies , las picaduras , los cauterios , las
quemaduras , etc . ; todos estos caracteres y todas estas circunstancias
reunidas no bastan, para establecer infaliblemente la certeza de la
muerte : es preciso pues recurrir necesariamente á otras señales mas
seguras. Los autores proponen cuatro que consideran como infalibles,
á saber : 1 .° un principio de putrefaccion ; 2 . el envaramiento ca
davérico ; 3.° la flojedad , la blandura , el hundimiento de los ojos ó el
oscurecimiento de la córnea por una especie de nube , y la pelicula
viscosa de los ojos ; 4.° la falta de contractilidad muscular bajo la in
fluencia galvánica. Examinemos brevemente el valor respectivo de
todas estas señales.
1. No cabe duda que la putrefaccion es una señal cierta de la
muerte , y es la que generalmente se considera ser la única segura; pe
ro es una señal casi imposible de obtener en razon de que tarda á ma
nifestarse (de tres á seis dias), y sobre todo en la especie de nada
sirve, porque no es lícito aguardarla : luego es las mas de las veces
una señalmeramente teórica y casi siempre de pingun valor en la prác
tica ,
244 TRATADO PRACTICO
2.° El en varamiento cadavérico es una de las señales mas seguras
y mas características de la muerte ; mientras los miembros se man
tienen flexibles, con tal que no haya precedido el envaramiento ca
davérico , puede presumirse que aun existe un resto de vida. En el
Dictionnaire des Sciences médicales se hace mencion de un hecho bas
tante singular: A una muchacha de ocho años de edad , que habia
huido de la casa de sus padres, se la encontró al cabo de siete dias,
en un bosque , privada de sentido , de movimiento , de circulacion y
de respiracion ; sin embargo tenia losmiembros flexibles, y esta señal
dió a conocer que su muerte no era mas que aparente . El célebre Luis
miraba la rigidez cadavérica como un efecto constante de la muerte y
como su señal mas cierta . Este famoso médico dice , que habiendo he
cho durante algunos años investigaciones no interrumpidas sobre mas
de quinientas personas que acababan de espirar , siempre vió que en
elmomento de cesar completamente los movimientos las articulaciones
comienzan a ponerse tiesas , aun antes que disminuya el calor natu
ral. M . Orfila , decano de la Facultad de medicina de París, considera
el envaramiento cadavérico como á señal tan cierta como la misma
putrefaccion. Nysten probó esperimentalmente que la rigidez es cons
tante hasta en aquellos individuos que han sucumbido al rigor de las
enfermedades llamadas pűtridas. Mas es preciso hacer aquí una ob
servacion importante acerca de la rigidez ó de la inflexibilidad de los
miembros , á fin de distinguir el envaramiento cadavérico del envara
miento convulsivo ,,espasmódico , tetánico , etc . Segun las dos graves
autoridades , Luis y Nysten , los envaramientos enfermizos, nerviosos,
convulsivos , etc ., preceden siempre á la muerte ora sea aparente , ora
sea real , al paso que se observa lo contrario en el envaramiento cada
vérico , es decir, que este siempre se manifiesta algun tiempo despues
de la muerte real. Ademásde esto , cuando se ha forzado y logrado
vencer la rigidez convulsiva , el miembro recobra repentinamente su
posicion primera ; por el contrario , el miembro obedece a todos los
movimientos que se le imprimen cuando la rigidez vencida es el resul
tado de la muerte real. Si la muerte es verdadera , la tirantez convulsi
và cesa al cabo de una ó de dos horas, y el en varamiento cadavérico le
sucede infaliblemente. — Dicen que si se abaja la mandíbula , no vuelve
á su lugar cuando la muerte es real; pero que si no esmas que apa -
rente y producida por un estado nervioso ó espasmódico , vuelve á
juntarse con la mandíbula superior. Esta es una señal que en ciertas
circunstancias puede tener algun valor para confirmar o invalidar otras
señales.
3.° El ponerse los ojos blandos , aplastados y ajados , y el oscure
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 245
cimiento ó falta de brillantez de la córnea, de tal suerte que los que
miran los ojos de un cadáver no ven reflejada su imágen en ellos como
cuando miran los ojos de una persona viva. Luis da estas señales como
á infalibles. El doctor Vigné , inédico de Ruan , las vió confirmadas
en masde dos mil personas muertas en el hospital de Ruan . Esta señal,
acompañada de la pelicula viscosa , si bien tiene gran valor , puede
no obstante faltar en algunos casos de muertes repentinas, sobre todo
en las apoplejías fulminantes, en rupturas de aneurismas internos , en
los que mueren asfixiados por el gas ácido carbónico , ó en fin en los
que han sufrido ciertas enfermedades de los párpados.
4.° Finalmente la falta de contractilidad muscular bajo la influen
cia galvánica. He aquí el resultado de los esperimentos en órden á la
contraccion muscular hechos por Nysten sobre cosa de cuarenta ca
dáveres: la contractilidad muscular se manifestó en todos ellos bajo la
influencia de la pila de Volta , aunque en grados muy diversos. Ordi
nariamente no quedó estinguida sino de seis á quince horas despues de
la defuncion ; en uno solo al cabo de hora y media , y en otro á las
veinte y siete horas que estaba difunto . He ahí los dos estremos. Así
pues, en virtud de estos resultados y mientras no se pruebe lo contra
rio con nuevos esperimentos, tenemos que la contractilidad muscular
se presenta en todos los cadáveres puestos bajo la influencia de la pila
de Volta, y de consiguiente es una señal que no prueba realmente ni la
vida ni la muerte , porque semejante fenómeno lo mismo puede mani-
festarse en un muerto verdadero que en un muerto aparente. Empero
si bien no se puede decir que la vida existe mientras subsiste la con
tractilidad muscular , con todo puede asegurarse con toda certitud que
la vida está estinguida para siempre cuando el galvanismo no deter
mina pinguna contraccion muscular. Luego , en todos los casos posi.
bles , si despues de haber descubierto un músculo en uno de losmiem
bros, en un brazo por ejemplo , no se verifica en él pormedio de la
pila de Volta ninguna contraccion , ningun movimiento de fibras , es
una prueba indudable, infalible de que la contractilidad ó la irritabili
dad muscular está completamente estinguida , y que por consiguiente
la muerte es cierta ; y no tengo reparo en asegurar que la estincion
completa de la irritabilidad ó de la contractilidad muscular ensayada
por medio del galvanismo es una señal mas segura de la muerte que
un principio de putrefaccion ; porque esta puede llegar á ser tan apa
rente como la muerte misma. Por eso dijo muy bien el célebre Luis
que elmal olor y la putrefaccion no son siempre señales ciertas de es
tar muerta una persona.
De lo que acabamos de decir resulta que , en sentir de los autores
246 TRATADO PRACTICO
mas graves, hay dos señales ó dos órdenes de señales prácticos que
indican con certitud la realidad de la muerte : estas dos señales son el
envasamiento cadavérico , llamado así porque no se observa sino en
el cadáver ; y la blandura , la flojeđad y la marchitacion de los ojos ,
el oscurecimiento y la falta de transparencia , de brillantez y lustre de
la córnea. Como estas dos señales reunidas , la rigidez cadavérica y el
oscurecimiento de los ojos, son , en mi concepto , las señales seguras
y características de la muerte real, tendremos que las señales contra
rias igualmente reunidas serán los testimonios irrecusables de la muer
te aparente. Estas dos señales contrarias son la flexibilidad perma
nente de los miembros que no ha sido precedida de la rigidez cadavé
rica , y damos el nombre de rigidez cadavérica á la que sobreviene
constantemente despues de la muerte . Así pues , segun eso, una rigi
dez que se mostrase una ó dos horas despues de la muerte , pero que
hubiese principiado antes ó en el mismo instante de la defuncion , no
seria una rigidez cadavérica , sino un envaramiento puramente enfer
mizo , nervioso , convulsivo ó letánico (1), y que por otra parte se re
conoceria fácilmente por loscaracteres que indicamosmasarriba. La se
gunda señal contraria es el estado fisiológico permanente de los ojos ,
es decir, su firmeza y consistencia , y á mas la transparencia, la bri
llantez y el lustre de la córnea . Luego , si estas dos señales , esto es ,
la flexibilidad permanente de los miembros no precedida de la rigidez
cadavérica (?), y el estado fisiológico permanente de los ojos , se ha
lasen reunidas , afirmaríamos que muy probablemente la muerte no
es mas que aparente .
Sila galvanizacion , como acabamos de ver, es elmedio mas seguro
y aun el medio infalible de confirmar la realidad de la muerte , es
preciso no obstante convenir en que en la especie la prueba galvánica
es en el fondo mas cientifica que práctica ; así es que casi nunca se
recurre á ella , á causa de que la irritacion ó la contractilidad muscu
lar no se estingue con bastante prontitud en los cadáveres , puesto que
se han visto casos en que se ha conservado veinte y hasta veinte y sie
te horas despues de la defuncion , y entonces la prueba no llega á
probar nada ; únicamente la falta de contractilidad es lo que entonces
autoriza á deducir con certitud que la vida se halla absolutamente es

(1) La rigidez frigorífica , es decir, aquella que es efecto de la asfixia por


congelacion , es general y ocupa todas las partes del cuerpo ; hasta el abdomen
se mantiene tirante como todo lo demás , lo que no tiene lugar en los en vara .
mientus nerviosos.
(2) Nadie ignora que la flexibilidad que sobreviene despues de la rigidez ca.
davérica es el indicio de proxima putrefaccion .
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . 247
tinguidą. Para que el esperimento galvánico pudiese ser de gran va
lor, sobre todo para hacer la operacion cesárea á las mujeres muer
tas en estado de preñez , seria menester que la falta de contractilidad
pudiese ensayarse muy poco rato despues de la defuncion , como por
ejemplo á la una ó á las dos horas cuando mas , en vez de hacerlo al
..cabo de veinte y cuatro y aun de veinte y siete horas. Sin embargo ,
si ocurriese la duda bien fundada de la realidad de la muerte , po
dríase recurrir a la galvanizacion muscular, puesto que ya hemoshe
cho mencion de un caso en que la irritabilidad quedó estinguida á la
'hora y media despues de la muerte . .
Resumamos las señales principales de la muerte en un objeto de
aplicacion directa . La falta de la circulacion (del pulso), de la respi
racion y de la sensibilidad ; la rigidez é inflexibilidad de los miembros
sobrevenidas despues de la muerte ; la flojedad y el aplastamiento de
los ojos ; el oscurecimiento , la falta de brillo y de transparencia de la
córnea , acompañada de la película viscosa. Si todas estas señales se
encuentran reunidas , debe desde luego practicarse la operacion cesa
rea , sin recurrir 'siquiera á la prueba galvánica. Si en vez de hallar
reunidas todas esas señales , solo hubiese falta de circulacion , de res
piracion y de sensibilidad , con la flexibilidad permanente de los miem
bros no precedida de la rigidez cadavérica , subsistiendo el estado fi
siológico de los ojos arriba descrito , deberia aguardarse , porque en
este caso la muerte probablemente no es mas que aparente . Se em
plearán entonces sin perder momento todos los medios idóneos para
reanimar las propiedades vitales que se hallan profundamente embo
tadas y entorpecidas : se harán fricciones , con una franela caliente ,
en los miembros y en la region del corazon ; se aplicarán á las narices
frasquitos que contengan licores de olor fuerte y penetrante , como vi
nagre radical ó de mas fuerte si se tiene á mano , eter, ó amoníaco ; se
pondrán sinapismos muy irritantes en las estremidades , en los pies y
en las piernas. Se procurará que el cuerpo se mantenga caliente , á
cuyo fin se le aplicarán franelas ó servilletas calientes encima del
vientre. . ..
· Si despues de haber trascurrido algunas horasno se manifiestan nue
vas señales de la realidad de la muerte , entonces se recurrirá á la pila
de Volta para esperimentar si hay irritabilidad muscular, y entretanto
no se emprenderá nada mientras exista la contractilidad . Empero, si
por el contrario , quedase bien y debidamente confirmado por la prue
ba galvánica que la irritabilidad está del todo estinguida , entonces no
solo deberá hacerse la operacion en el instante mismo, sino que algu
nas horas despues del fallecimiento se podria proceder a la inhumacion
33
248 TRATADO PRACTICO
del cadáver, sin aguardar á que hubiese un principio de putrefaccion ,
á menos quemedie la circunstancia del embarazo ó de prohibicion le
gal. Un célebre médico legista , el doctor Marc , basta lega á decir
que «no deberian ser enterrados los cadáveres hasta haber esperimen
tado los efectos que en ellos produce la pila de Volta .) " .
'En general, todas esas precauciones son mucho mas necesarias en
los casos de muertes şúbitas ocasionadas por enfermedades cerebrales,
apopléticas , letárgicas,caróticas, sincopales, convulsivas, histéricas,
epilépticas , tetánicas , catalépticas, y por otras aberracionesnerviosas
de estraordinaria gravedad ; pues por lo que hace á las enfermedades
comunes , sean agudas ó crónicas, es decir , aquellas que conducen á
la muerte por todos los grados conocidos de pérdida, de debilidad , de
enflaquecimiento , de marasmo y de estenuacion sucesiva , que presen
tan todos los síntomas precursores y acompañantesde la agonía , y en
las que finalmente los enfermos van muriéndose poquito á poco , par
cialmenté, sucesivamente y por todas partes en cierto modo ; en todos
estos casos queda uno mas pronto convencido de la realidad indudable
de la muerte . En efecto , de cuantos enfermos sucumben bajo el inflojo
de las afecciones crónicas de pecho, de la tisis , de los aneurismas con
hinchazon de las estremidades , de las hidropesias, de las enfermeda
des cancerosas, escrofulosas , caquécticas, etc ., y aun de los que pe
recen de resultas de enfermedades agudas , tales como las calenturas
graves que terminan por un estado de marasmo completo ó dedescom
posicion putrida , ó las flegmasías agudas , las disenterias, las fluxio
nes de pecho , las pneumonias ó las pleuresiás llegadas á su último
período ; de todos esos enfermos, ó por mejor decir de todos esos muer
tos , ¿ acaso se ha visto uno , entre millares ó aun millones de indivi
duos , que haya recobrado la vida ? En tales casos se está seguro de
que la muerte es real; y esta conviccion práctica y esperimental és de
grandísima fuerza , ó mas bien equivale á la certitud . Luego , en se
mejantes casos , puede hacerse la operacion inmediatamente despues
de la defuncion . En estas circunstancias es cuando pueden hallar su
aplicacion los asertos del célebre Gardien , quien por cierto es gran
de autoridad en materia de partos. He aquí lo que él dice de una ma
nera que no dejará de parecer muy absoluta : « Debe operarse inme
diatamente despues de su defuncion a las mujeres que se presumemuer
tas antes de parir, sea cual fuese el término de su embarazo . Aunque
se presuma que la mujer sea difunta , debe practicarse la gastro -hys.
terotomia (operac. cesar.) con lasmismas precauciones que si estuviese
viva ... Comprométese su existencia (de la criatura ) si antes de recurrir
á la operacion se trata de asegurarse de la muerte de la madre por
DE EMBRIOLOGÍA "SAGRADA . 249
medio de varias pruebas.» (Dict. des Sciences med. art. Gastro -Hys
terotomie.) Lasmuertes aparentes no sobrevienen casimas que de re
sultas de afecciones cerebrales; letárgicàs, histéricas , convulsivas y
sincopales, y por lo tanto son "las únicas que necesitan el empleo de
Jas pruebas y la indispensable medida de la espectacion.
. , S. III. · .
De la operacion cesárea á una mujer difunta .
Regla general : antes de practicarla , si el embarazo esmuy adelan
tado , el comadron deberá asegurarse de si el cuello del;úlero es bas
tante dilatado para permitir la estracción de la criatura ó la aplicacion
del forceps, esto es, hacer el parto artificial, sobre todo si pudiese
caber duda tocante á la realidad de la muerte de la madre. Así lo hi
zo Rigaudeaux. Llamado este cirujano para asistir al parto de una
mujer de las cercanías de Douai (en 1740), no llegó hasta las ocho y
media , si bien fueron á buscarle á las cinco de la mañana. Al en -
trar en la casa dijéronle que hacia ya dos horas que la mujer ba
bia muerto , y que no se habia podido encontrar un cirujano para
hacerle la operacion cesárea.•Rigaudeaux se informa de los acciden
tes que sobrevinieron para causar una muerte tan pronta ; respón
denle que,desde las cuatro de la tarde anterior la difunta empezó, á
seniir dolores de parto ; que durante la noche la violencia de estos
dolores le habia causado desmayos y convulsiones , y que á las seis
de la mañana una nueva convulsion acabó con las pocas fuerzas que
quedaban á la infeliz. Estaba ya amortajada cuando Rigaudeaux quiso
verla ; levanta el sudario para examinar el rostro y el abdomen ; tien
ta el pulso en el brazo , en el corazon y sobre las clavículas , pero no
siente ningun latido ; aplícale un espejo á la boca , mas el cristal no
queda empañado ; teníala llena de espuma, y el vientre estaba escesi -
vamente hinchado... En una palabra , estrae un niño que no da ningu
na señal de vida..., pópelo en manos de las mujeres que están presen
tes , y si bien le parece muerto , exhortalas á que lo reanimen hacién
dole fricciones de vino caliente en el rostro y en todo el cuerpo. Al
cabo de tres horas, fatigadas de un trabajo en apariencia inútil , dis
poníanse á amortajarlo cuando una de ellas esclama que le ha visto
abrir la boca ; al momento reanimasé su celo ; empléanse con profu
sion el vigo , el vinagre y el agua de la reina de Hungría ; el niño da
manifiestas señales de vida , y luego llora tan recio como si hubiese
nacido felizmente . Rigaudeaux visita segunda vez á la madre , á la
250 TRATADO FRACTICO
que habian puesto de nuevo la mortaja . Manda quitar todo el apara- .
to fúnebre , y despues de examinarla muy atentamente , la crèe muer
ta , como despues de la primera inspeccion . Sin embargo queda admi
rado de que los miembros se mantengan flexibles habiendo ya trascur
rido siete horas desde su muerte ; hace algunas tentativas inútiles para
reanimarla , y regresa á Douai encargando antes que no entierren el
cadáver hasta que los miembros hayan perdido su flexibilidad , y or
dena que le golpeen las manos de tiempo en tiempo, que se las froten ,
así como la nariz , los ojos y las mejillas con vinagre y agua de la rei
na de Hungría , y que la dejen en su cama. Bastaron dos horas de es .
tos cuidados para resucitar á la difunta , y tanto el hijo como la madre ·
llegaron á cobrar tantas fuerzas, que ambos estaban llenos de vida
en 10 de agosto de 1748 ; sin embargo la madre quedó paralítica , sor
da y muda. (Journal des Savants , enero de 1749.) ,
Si la mujer embarazada muere , es menester abrirla lo mas pronto
posible , á fin de estraer el feto de su seno , dice el Ritual romano. ¿ Se
seguirá de ahí que sea necesario abrirla si muere en los primeros dias
del embarazo , cuando el embrion aun no tiene una forma humana dis
tinta ? «Cangiamila , el célebre autor de la Grande Embriología sagra
da , dice que la concepcion suele ser dudosa hasta el dia cuadragési
mo. Es muy dudoso , añade , que en esa primera época del preñado
la criatura sobreviva un instante,á su madre ; tambien parece cier
to *que aquella es la que perece primero , y por esta razon las mujeres
que mueren al principio del embarazo abortan casi todas antes de mo
rir...). Mas abajo añade que no puede obligarse á practicar la opera
cion cesárea antes del dia cuadragésimo despues de la concepcion .
Hácia esta época , å los cuarenta y cinco dias, como hemos visto mas
arriba , se reconoce muy bien la forma del feto , los lineamentos de los
órganos principales y la situacion de los miembros ; entonces el em
brion es del tamaño de una avispa ó de una grande abeja , es decir ,
que tiene veinte y cinco milimetros de largo (unas diez líneas) poco
mas o menos.
Todas las comadres, dice tambien Cangiamila', convienen en que
hay muchos abortos de cuarenta dias , y aun menos adelantados , que
parecen vivos. Elmismo autor añade que en Mont-Real se vieron va
rios fetos, y uno en Nápolės , que no tenian mas de cuarenta y cua
tro dias, y que por medio de la operacion cesárea fueron estraidos vi
vosdel seno de sus madres. Tambien cita el hecho de un embrion de
veinte dias , que fue sacado viyo y fué bautizado. Dice finalmente que
en todas las épocas del embarazo es preciso hacer la operacion cesa
rea .
DE EMBRIOLOGÍA SAGKÄDA . 251
Modo de practicar la operación cesárea .
No corresponde á questro objeto el entrar en detalles relativos al
método operatorio , porque suponemos que las personas que hagan esta
operacion poseen al efecto los conocimientos mas necesarios. Sin em
bargo , si no se pudiese recurrir á los hombres del arte , ni aun á 'una
comadre , y fuese preciso valerse del ministerio de la persona aun la
mas inhábil para este género de operacion , esto no seria obstáculo pa
ra dejar de practicarla sin la menor difacion ; porque debe saberse que
en caso de necesidad estrema, una persona cualquiera , sea hombre, sea
mujer, puede y hasta tiene obligacion de hacer la incision abdominal,
á fin de poder estraer el feto ; y dado caso que absolutamente faltase
quien quisiese ó pudiese hacer la operacion cesárca , lo que casi no es
creible, la caridad , un motivo poderosísimo ,.la salvación de un al
ma , impone al ministro de una religion toda de caridad el deber de
practicarla él mismo.
A lomenos así lo opinan Van -Espen, Dens, Cangiamila , Dinquart,
· d'Alasia , etc ., y tal era tambien el sentir de los antiguos teólogos.
Muchos son los obispos que con mandatos especiales imponen esta obli
gacion á los sacerdotes, Mons. Bouvier es de igual sentir , á lo menos
en las primeras ediciones de su obra , en que se espresa asi : a... .En
caso de estrema necesidad , una persona cualquiera , pero nunca un
sacerdote , sobre todo si es jóven , á menos que sea absolutamente im
posible hacerlo de otra manera : el respeto debido a su carácter y el
temor de las bąbladurías á que podria dar lugar le prescriben esta re
serva. Por iguales motivos no es necesario que él este presente á la
operacion ; deberá mantenerse apartado mientras la practiquen , y acil
dirá cuando sea ocasion de suministrar el bautismo á la criatura .» En
la 10. edícion , publicada en 1843 , se suprimen las palabras subra
yadas. .
En el estado actual de nuestras costumbres y de nuestras leyes , se
rá,preciso que los sacerdotes consulten á los obispos para saber si, vi
niendo el caso , están obligados ó no á hacer semejante operacion .
«Muchas veces , dice Mons. Bouvier ; es difícil adquirir la certitud
de que la mujer esté realmente muerta . Lo primero que hay que hacer
es asegurarse del hecho y confirmar la muerte (1).
» De algunos años a esta parte , el ministerio público varias veces
ha perseguido y hecho condenar á una multa á personas que habian
(1) Para desyanecer esta dificultad bastara leer con atencion las señales de
la muerte real y aparente , relatadas en la página 243.
252 TRATADO PRACTICO
hecho esta operacion con grandes precauciones , so pretesto de queha
bian practicado indebidamente un acto de cirugía... (Pág. 203; décima
edicion.):
Admitiendo esa obligacion ,,si en un caso de estrema necesidad , la
casualidad ó por mejor decir la Providencia quiere que el sacerdote
practique por sí mismo la operacion , ármese primero con la señal de
la cruz y luego haga la seccion con confianza y valor ; su caridad al
canzará de Dios doble recompensa , ya por haber sacado la criatura
de un estrecho calabozo ,en que necesariamente debia perecer, ya por
haberla administrado el bautismo. Vèndrá á sér su padre espiritual ,
puesto que la habrá regenerado en Jesucristo ; será en cierto modo su
madre , porque él verdaderamente la habrá dado à luz. Si la criatura
muere 'algun tiempo despues de haber recibido el bautismo , lo que es
bastante frecuente , tendrá desde luego en el cielo un poderoso protec
tor que iocesantemente rogará á Dios por él. ¡ Qué motivo de gozo , de
consuelo y de esperanza no será para vos, ó ministro y siervo fiel de
Dios , el haber sido el instrumento inmediato de la salvacion eterna
de un alma que , sin la sublime y animosa abnegacion que la caridad
os inspiró , jamás babria gozado de la inefable dicha de ver y poseer á
Dios eternamente !
Refiere Cangiamila que un cura amigo suyo hizo la operacion cesá
rea porque el cirujano no era bastante apto para practicarla , y tuvo
el consuelo de salvar la criatura . Cítase tambien un hecho mucho mas
reciente y mas cercano. Un vicario de la diócesis de Avranches se vió
igualmente obligado a hacer la misma operación , porque no hubo
quien quisiese practicarla , y tambien tuvo la dicha de encontrar la
crialura viva y de bautizarla .
He aquíde qué manera debe hacerse la operacion : con una navaja
ó con un cuchillo muy cortante , á falta de instrumento quirúrgico ,
se hace una incision en medio del vientre desde el ombligo abajo o
hacia el hueso pubis. Primeramente se corta la piel y luego el tejido
celular' subcutáneo. Llegando a lo que se llama la línea blanca , que
es un tejido membranoso , se hace en ella una pequeña abertura de
bajo del ombligo en la que se introduce el índice de la mano izquierda
que sirve de conductor al instrumento cortante , y así se va haciendo
la seccion de la línea blanca cortando de arriba abajo y de dentro há
cia fuera hasta topar con el hueso pubis : se toman estas precauciones
para no dañar los intestinos que se presentan en la abertura . Hecho
eso , se encuentra la matriz , que muchas veces se presenta por sí mis
ma cuando el preñado es adelantado ó á término; pero en los prime
ros períodos de la gestacion es preciso buscarla en lo más profundo de
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 253
la pequeña pelvis , detrás de la vejiga , y esta en tales casos muchas
, veces oculta el útero y estorba mas o menos al operador. Entonces se
vacia la vejiga comprimiéndola con la mano ; una vez descubierta la
matriz , se le hace una incision por delante y de arriba abajo , y lue
go: de estar rotas ó cortadas las membranas se encuentra el feto . Sá
casele del seno de la madre , y se le bautiza siⓇda señales de vida ; Ó
aun mejor se le bautiza antes de estraerlo del útero , y despues se le
vuelve á bautizar bajo condicion . Si fuese muy pequeño ó tuviese la
forma de embrion , se le bautizará como a los abortos , sobre las se
cundinas", por temor de que le mate el contacto del aire ; en seguida
se abren las membranas , y se le bautiza de nuevo bajo condicion":
Si non es baptizatus, etc . Si no dá ninguna señal de vida, si no se le no
ta movimiento , ni latido de corazon , ni ninguna pulsacion arterial,
y por otra parte no ofrece ninguna señal evidente de putrefaccion , se
le administra el bautismo condicionalmente . Al momento es preciso
averiguar si queda, algun otro feto en la matriz , y luego se corta el
cordon umbilical á siete ú ocho centímetros ó sea á tres pulgadas del
vientre , y se le ata á upos tres centimetros ó á cosa de una pulgada
de su insercion. En seguida se procura reanimarlo por los medios in
dicados en los articulos Asfixias y Apoplejías de los recien nacidos.
(Véase mas adelante .)
Si en el útero no se encontrase ni embrion ni feto , seria menester
examinar si se halla en los ovarios , en las trompas ó en la cavidad
abdominal , porque el embarazo podria ser estra -uterino , de que se
han visto muchísimos casos. Cangiamila refiere el de una mujer de
Tolosa que murió al noveno mes de su embarazo . El cirujano que le
. hizo la operacion halló la matriz del tamaño que suele teper en tal es
tado , pero de cuatro dedosde grueso , siendo su cavidad muy peque
ña y llena de una sangre grumosa y,negruzca , sin presentar ningun
vestigio de feto . Primeramente creyó que aquello era un preñado fal
So ; pero continuando sus'investigaciones en la cavidad abdominal, ha
lló' a la criatura al costado izquierdo debajo del epiplon .
Una criatura puede nacer durante la agonía de su madre ó despues
que esta ha muerto. No teniendo presente esta circunstancia podria ser
que en algunos casos se hiciese:una operacion inútil. Cangiamila cita
dos hechos de esta naturaleza observados en 1746 en una ciudad de
Sicilia : Alberta Cacioppe murió estaņdo en cinta de cinco meses, y fué
operada : causó grande asombro el no encontrarle nada en el útero ;
pero buscando por la cama, se halló en ella el feto muerto. Otro caso
semejante ocurrió en una aldea de la misma diócesis.
Cangiamila 'hace observar con mucha razon que muriendo una mu
254 TRATADO PRACTICO
jer de parto , si se ha bautizado á la criatura en la matriz por,'medio
de un sifon, es decir, por inyeccion o con ayuda de una esponja , etc.,
ó aunque sea sobre el pié ó sobre la mano que ha salido afuera , no
por esto debe dejarse de practicar la operacion cesárea y por varios
motivos. El primero es que la criatura , mientras sea posible , debe
recibir el agua del bautismo en la cabeza. La mayor parte de los teó
logos no creen que sea indiferente el que la reciba en la cabeza ó en
cualquiera otro miembro ? La segundå razon es que despues que a la
criatụra se le ha asegurado la vida espiritual es menester, procurarle
la temporal. La tercera en fin es que en la matriz puede haber mas de
un felo , y de ahí es que debe indispensablemente practicarse la ope- ,
racion .

. $ . IV .

Dela operacion cesáreà viviendo la mujer. Obstáculos al parto del lado


de la madre . . . . ;

Nuestro objeto no exige que espongamos aquílas razones físicas ó


anatómicas en que se funda esta triste necesidad : á los párrocos.les se
ria tan inútil como imposible el probar que las hay y el apreciar su
valor. Cuando venga el caso basta que sepan por personas compéten
tes , es decir, por los hombres del arte , que la mujer no puede parir
naturalmente , y que por consiguiente es inevitable el hacer la opera
cion . Esta circunstancia grave., estrema, no puede dejar de escitar po
derosamente el celo y la solicitud pastoral de todo cura , por poco que ,
esté penetrado de la importancia de sus deberes . Desde aquel momen
to debe el pastor invitar a la mujer á que se someta con resignacion
cristiana á una operacion que es menos dolorosa de lo que ordinaria
mente se cree ; podrá insinuárle que es el único medio de librarla de la
muerte y de los dolores que ya está sufriendo , y que por otra parte es
el mayor acto de caridad que podrá ejercer , puesto que la Providencia
permite que ella espónga su vida para alcanzar la salvacion eterna de
su hijo ; y valiéndose de otras razones “por ese estilo ; pero se requiere
mucha prudencia , y sobre todo no hablarla de su riguroso deber de
sufrir la operacion , por temor de que si su piedad no es bastante fir
me é ilustrada no se alarme en mal hora su buena fe.
Hay otra operacion que a veces puede reemplazar á la operacion ce
sárea , menos peligrosa que esta, y es la operacion ó la seccion del púbis
o de la sinfisis , esto es, la sinfiseotomia . No debo hablar de los casos
en que está indicada , por las razones que mas arriba he manifestado.
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 255
¿La mujer está real y positivamente obligada-á sufrir la operacion
cesárea ? La mayor parte de los teólogos se deciden por la afirmatiủa ,
dice Cangiamila . Teófilo Rainaud y otrosmuchos sostienen , en virtud
de los principios de Sto. Tomás , que la madre está obligada , para sal
var el alma de su hijo , no solo á sufrirla , sique tambien á exigirla ;
estiende esta obligacion hasta el caso en que sea dudoso el que el hijo
pueda salvarse ; puies pretende que la vida espiritualde la criatura , aun
que no sea mas que probable ,r debesobreponerse por parte de la madre
a , quedeesununsufrimiento
Saltoltemor i la yy aall rriesgo
biche prefercierto iesgo,ade una muerte probable.
La madre , pues , debe preferir la vida espiritualde su hijo á su propia
vida, que es un bien muy inferior a la salvación eterną., como dice
Sto . Tomás. Si debe uno arriesgar sú vida para procurar el bautismo á
una criatura que se halla en peligro de muerte , con mucha mas răzon
debe una madre esponerse al peligro de perder la vida temporal para
procurar á su hijo la vida del alma.
De otro lado Sanchez y otros varios autores creen que la madre .no
tiene obligacion de someterse á la operacion cesárea para salvar á su
hijo . He aquí como se espresa Mons. Bouvier acerca de este punto :
« Si un hábil cirujano , al ver la imposibilidad del parto natural, se
hallase dispuesto á hacer la operacion con esperanza de buen éxito , el
confesor deberia exhortar a la mujer á someterse á ella , valiéndose de
las razones que juzgasemas á propósito para persuadirla : con todo no
creo debiese obligarla so pena de negarle la absolucion en trance
· tan apurado ; porque no estamos obligados a hacer cosas estraordina
rias para conservar nuestra vida , y la mujer puede en tal caso espe
rar que su hijo le sobrevivirá , que despues que ella esté muerta po
drán estraerlo de su seno y bautizarlo . Por otra parte , aun en el su
puesto de que la ley natural la obligase á someterse á una operacion
tan cruel parà la salud corporal y espiritual de su hijo , puede supo
nerse que la buena fe la escusa , ó que por lo menos queda la duda , y
por lo tanto no debe permitirse que muera sin recibir los sacramentos.»
El mismo autor en otra parte dice con mucha razon ::« Si la mujer
se hallasę tan debilitada por los sufrimientos que fuese incapaz de so
portar una operacion tan cruel , no deberia permitirse hacerla por in
terés de la criatura , porque esto "seria matar a la madre , y jamás se
debe hacer un mal para conseguir un bien. Por la misma razon seria
un crimen el destrozar á la criatura y arrancarla á pedazos , como se
hace con barta frecuencia , á menos de haber la certitud de que ya
está muerta; porque ella tiene derecho á su vida como si hubiese na
cido , y la madre no puede consentir en semejante atrocidad para sal
var la suya.) ,
256 TRATADO PRACTICO.
En cuanto al estado de debilidad ó de estenuacion actual que auto
riza á renunciar á la operacion , añado que estos motivos ó estas cir
cunstancias prohibitivas deben estenderse á las enfermedades agudas ó
crónicas , mas o menos graves y mas o menos adelantadas , que acaso
está sufriendo la mujer en el momento del parto ;.porque estas graves
complicaciones disminuyen considerablemente las esperanzas de buen
éxito , ó mas bien contribuyen á que la muerte sea probable ó casi se
gura. A mas de que una vez esté muerta la madre , se la podrá operar
inmediatamente á fin de administrar el bautismo á la criatura que lleva
en su seno sin necesidad de aguardar á que se reunan todas las señales :
que indican una muerte cierta , porque como ya he demostrado maś
arriba , las enfermedades agudas ó crónicas , al pasar sucesivamente
por todos los períodos de gravedad y de peligro , generalmente esclu
yen las muertes aparentes, que por lo común son el resultado de sín
copes ó dě asfixias , ó de algunas otras afecciones nerviosas, graves,
convulsivas ó de otra especie. Empero , se dirá tal vez, si la mujer
sucumbe de resultas de alguna enfermedad aguda ó crónica , la cria
tura deberá morir inevitablemente con ella . A esto contestaré que
Cangiamila cita ciento veinte y tres criatuçaş estraidas del seno de
sus madres , todas las cuales fueron bautizadas á escepcion de nueve
que se encontraron muertas. No es de creer que todas aquellas mujeres
muriesen de parto y al fin de su embarazo ; antes por el contrario es
muy probable que muchas de ellas,debieron sucumbir de resultas de
enfermedades agudas ó crónicas , y hasta es de presumir que fuese su
mayor parte , si se calcula por lo que sucedió en Mont-Real, en donde
de veinte y una mujeres que murieron estando en cinta , tan solo tres
habian llegado á término . Luego las enfermedades agudas ó crónicas
pueden matar,å lasmadres sin ocasionar la muerte á sus frutos. .
He aquí ahora cuales son las circunstancias y los motivos que es
pecialmente imponen a la mujer la obligacion de sufrir la seccion ce
sárea : la imposibilidad física de parir, ya sea mediante los esfuerzos
de la naturaleza , yà por medio de los procedimientos del arte ; el no
sufrir ninguna enfermedad aguda ó crónica , y el conservar la fuerza
suficiente para soportar la operacion . La necesidad de practicarla es
impuesta , ya por el temormuy fundado de la próximamuerte de la
madre y de la criatura , ya por la certitud de los vidlentos esfuerzos
espulsivos y de las penosas tentativas que hará la mujer para parir ,
ya por la demora mas o menos larga que necesariamente deberá pre
ceder á la abertura del cuerpo despues de la muerte ; porque como en
tales casos es muy posible que esta no sea mas que aparente , la ope
· racion no podrá practicarse hasta que se vea confirmada la reunión de
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 257
todaslas señales que indican con certitud quela muerte es real. (Véa
se la observacion de Rigaudeaux , p. 249, y lo que dijimos acerca de
las señales de la',muerte .) Tenemos pues , segun eso , que la dilacion
necesaria para proceder á la operacion despues que la mujer hamuer
tó , y todos los esfuerzos inútiles que hizo para parir son causas muy
poderosas y sobre todoºmuy probables de la muerte de la criatura.
El conocimiento de estas circunstancias,es lo que debe obligar estric
tamente a la mujer á someterse á la operacion , á fin de procurar la
vida espiritual a su hijo , que es un bien muy superior a la vida tem
poral de la madre. Si la criatura , antes de nacer , pudiese recibir el
bautismo en la cabeza despues de rotas las membranas , este bautismo
seria válido , y la mujer en este caso no estaria obligada á sufrir, la
operacion cesárea , porque no tiene obligacion de sufrirla sino para
asegurar la vida del alma de su hijo , y no para procurarle la vida
temporal.
En fin , si la mujer se niega absolutamente á someterse á la opera
cion , y para salvar su vida quiere que se sacrifique su criatura , ó
que consienta en ello á propuesta de los facultativos , en tan triste y
deplorable coyuntura ,' el cura ó el confesor , trasportado por un mo
vimiento de célo y de caridad por la salvacion de dos almas que están
en sumo peligro al borde del abismo (1), le hará presentes las graves
y terribles consecuencias de una determinacion que es reprobada tanto
por el amor maternal como por el principio religioso y moral. Si el
ministro de la caridad nada consigue con sus exhortaciones y reiteradas
súplicas, debe retirarse gimiendo y rogandoa Dios quetrueque y ablan
de el corazon de la infeliz , pero bautizandoantes á la criatura del me
jor modo que pueda. He aquí lo que dice el Ritual romano tocante al
bautizo de una criatura que aun se halla retenida en la cavidad uteri
na : « No se bautizará á la criatura mientras permanezca en el seno de.
su madre ; pero si presenta la cabeza y está en peligro de morir, se
la bautizará sobre la cabeza , y dado caso que despues salga viva, no
se la volyerá á bautizar. Empero , si despues de haber recibido asi el
bautismo , se la 'estraemuerta del seno de la madre , se la enterrará
'en tierra sagrada.» « Nemo in utero .matris clausus baptizari debet. Si
infans caput emiserit , et periculum mortis immineat , baptizetur in
capite , nec póstėà , si vivus evaserit, erit iterùm baptizandus ; et si
aliud membrum emiserit quod vitalem motum indicet in illo , si peri
culum impendeat, baptizetur ; et tunc , si natus vixerit, erit sub con
ditione baptizandus: Si non es baptizatus, ego te baptizo , ete. Siverò ,
(1) En el sentido , por lo que hace al alma de la criatura , que necesariamen
te quedará escluida de la mansion del paraiso .
258 TRATADO PRACTICO
ita baptizatus , deindè mortuus prodierit ex utero , debet in loco sacro ·
sepeliri.» (Rituale romanum , de Baptismo.) (9)
Sin embargo , como hace observar Mons. Bouvier , Benedicto XIV
quiere que se procure bautizar á la criatura , aun cuando no se descu
bra ningun miembro en la parte esterior. Del mismo sentir es M .,
Tournely . Al efecto se introduce agua tibía pormedio de una jeringa
ó de un sifon , de manera que toque á la criatura ó por lo menos a las
secundinas, sea en el paraje que fuere , y al propio tiempo se pronun
cian las palabras de la fórmula . Si la criatura llega á salir viva., se la
bautiza otra vez condicionalmente: tal es la decision espresa de Bene
dicto XIV .
Cangiamila hace una larga disertacion para probar la validez del
bautismo administrado a la criatura retenida en la matriz . Las prue
bas que aduce parecen muy sólidas, y por otra parte su sentir acerca
de esta materia mereció la aprobacion de Benedicto XIV .Con todo es
preciso bacer observar que ese bautizo intra-uterino no es válido sino
cuando el agua ha tocado inmediatamente la cabeza desnuda ; porque ,
si el agua solamente ha tocado la cubierta delfeto ,ó solo seha puesto
en contacto con los miembros o cualquiera parte del cuerpo que no
sea la cabeza , como un pié ú otro miembro aunque no esté cubierto
con las membradas, el bautismo será muy dudoso , y deberá repetirse
si la criatura llega á nacer viva.
a Havel VIVa .

Ahora bien qué será de la madre y del hijo si no se practica opera


cion alguna para salvar al uno ó á la otra , ó quizá á ambos a la vez ?
(1) La Revue littéraire et critique, en su análisis de mi Ensayo sobre la Teolo .
gia roral, con mucha finura mehace observar que debiera haber examinado
a punto de vista cristiano la cuestion del embarazo estra -uterino.
Este escelente periódico pregunta si « despues de reconocido un preñado estra
uterino , podria impedirse su desarrollo , para evitar a la madre los peligros que
deben compronieter su existencia .»
Una sola palabra tengo que responder a esa pregunta : el feto estra- uterido
debe ser considerado á punto de vista cristiano como un feto intra -uterino , al
cual poa escesiva estrechez de la pelvis impide que nazca por las vias natura
les; con la diferencia , sin embargo , que la operacion cesárea puede llegar á
ser mas necesaria en el caso de embarazo estra -uterino que en el intra -uterino,
porque en este á lo menos se podria tal vez administrar el bautismo por la
abertura del cuello del útero .
En cuanto al peligró físico de la operacion cesárea , en la especie , he aquí lo
que dice el profesor Velpeau : « Con la operacion (cesárea) la muerte (de la ma
dre ),no es sino muy probable ; pero sin la operacion es casi segura:)). Traité
complet de l'Art des Accouchements, t. 1.° p. 235.) En la misma página el autor
añade: La razon y la humanidad exigen que se practique la gastrotomia (opera .
cion cesárea) despues de los siete meses de embarazo , porque entonces la cria
tura ya puede vivir. Fuera de esto es raro que el feto tenga mas de tres o cua
tro meses de vida .
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 259
Morirán ,el hijo sin dụda alguna y la madre muy probablemente.
Tenemos, pues , que para tratar de salvar a la madre será menester
esperar a quemuera el hijo . Empero ¿ qué señales nos darán a conocer
si ha muerto ? La falta de movimiento de la criatura no prueba.las mas
de las veces sino un estado de asfixia o de apoplejía , y la auscultacion
misma en tales casos no pone á cubierto de todo error. Luego, tan soło
la putrefaccion del feto podrá ser una señal generalmente cierta dela
muerte ; pero con esta conducta espectante se irán pasando algunos
dias antes que se pueda adquirir esa certitud física , único carácter
indispensable , y entretanto la madre tambien probablemente morirá .
Por otra parte la misma putrefacción puede hacer formar un concepto
equivocado. Fabricio de Hilden refiere en órden á esto .un hecho deci
sivo : «Una mujer estuvo seis dias con dolores de parto , y se presen
tạban indicios de que la criatura babia muerto ; la madre no se la sen
tia ya , y las comadres no advertian en ella movimiento alguno .
Habiendo presentado la coronilla , se la creyó muerta á causa del hedor
que exhalaba la parte comprimida ; declaré pues que estaba muerta ;
pero me engañé, pues logré sacarla viya , y murió tres dias despues.»
Aquello fué una putrefaccion local y enfermiza . -
Empero, en el supuesto de que quede perfectamente probada la muer
te de la criatura, no por esto ha terminado vuestra tarea ; os queda
que hacer una triste, una cruel y horrorosa operacion, la de estraer la
criatura á piezas y pedazos , pormedio de instrumentos á cuyo aspecto
uno se borripila. Pero sépase que esta operacion violenta , bárbara y
atroz presenta dificultades inmensas, y sobre todo sepa tambien lamu
jer , la infeliz , víctima de su obstinacion , que empieza ya á expiar
de una manera terriblé el asesinato de su hijo , pues esta es una ope
racion tan peligrosa para ella como la misma operacion cesárea . El
trinchamiento del feto , dicen los comadrones; casi siempre causa la
muerte à la madre si esta tiene la pelvis muy estrecha. He aquí lo que
dice Giraud acerca de esta materia.(Journal de Médecine, por Cor
visart, Leroux y Boyer): « Varias veces he visto practicar esta opera
cion por los hombres mas hábiles , y lasmujeres sucumbieron inme
diatamente despues de practicada , etc .» «El despedazar á la criatura
en el seno de su madre , dice el célebre Gardien , me parece una
maniobra mas terrible que la operacion cesárea , á la cual la mayor
parte de los modernos conceden la preferencia aun cuando la criatura
esté muerta .»
Aquí es preciso recordar la famosa máxima de un gran número de
médicos. Segun ellos , cuando dos existencias deben necesariamente
perecer , es preciso tratar de salvar á la mas preciosa de las dos. Así
260 TRATADO PRACTICO
pues debe procurarse conservar la vida de la madre , que es segura
y útil á la sociedad , antes que la vida muy precaria. é inútil del feto
que aun no ha salido á luz. Esta máxima, con harta frecuencia preco
nizada en las cátedras de partos, con harta frecưencia consignada en
los libros de medicina , y con harta frecuencia puesta en práctica
en perjuicio de la criatura inhumanamente sacrificada , se halla en
oposicion con esta otra que es infalible : Non sunt facienda mala ut eve- ,
niantbona. Ahora bien , el inſanticidio o aun , si se quiere , el fetici
dio es un mal intrínseco y esencial; por consiguiente en ningun caso
puede ser lícito . Nunca pueden dispensarse los“preceptos de la ley
natural ; en ningun caso puede permitirse el matar voluntariamente á
un ser inocente. Empero , tal vez se dirá que tanto la madre como el
hijo van á perecer necesariamente si no se sacrifica al segundo para
šalvar á la primera. No cabe duda que es una desgracia deplorable el
verles morir á ambos; pero no hay seguridad de evitarla inmolan
do al bijo , y aun es, probable que en este caso tampoco se evite la
muerte de la madre , como ya hemos visto mas arriba . El exámen de
esta cuestion mehace recordar una respuesta que, hace cosa de quin
ce á veinte años , dió con lamayor ingenuidad uno de mis discípulos no
iniciado todavía en los preceptos de la teologia médica : preguntado
sobre el proceder que observarià en el caso de que tratamos, contes
*tó , sin titubear y con una sangre fria imperturbable , que primero
bautizaria á la criatura del mejor modo que pudiese y en seguida la
, mataria para desembarazar a la madre lo''mas pronto posible. De este
modo , dijo , ambos serán salvados : se asegurará la vida eterna á la
criatura , y con la estraccion del feto sacrificado se conservará la vida
temporal de la madre. Esto es en efecto ,lo que en el dia se hace muy á
menudo , ó por mejor decir se hace menos muchas veces ; pues en los
mas de los casos no se piensa en el bautismo. Véase lo que hemos di
cho de aquel profesor de partos que en plena cátedra , en París , dijo
que él no bautizabą. las criaturas porque no creia en la regeneracion
del hombre por las aguas del bautismo.
Pero por fin & qué deberán hacer los hombres del arte , el médico ,
el cirujano , el comadron cristiano en vista de tan desoladora escena?
¿Será preciso, que abandone á la madre a una muerte cierta ? Yo digo
que no es el hombre delarte quien en tal caso la abandona , sino que
la mujer misma es la que se ha entregado á una muerte casi inevita
ble : ella ha encadenado el poder del arte , su obstinada negativa ha
paralizado los recursos conservadores de la medicina y la mano de su
ministro ; ella no hace mas que sufrir las consecuencias de una terri
ble posicion en que voluntariamente se ha colocado. Por consiguiente
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA . . 261
esta es una desgracia de que no pueden ser responsables ni elmé
dịco ni la medicina : únicamente debe ser imputada a la .voluptåd de
la paciente .
En la página 200 hemos dicho que en el dia .el arte posee un nuevo',
un inmenso recurso que , en muchos casos, podrá reemplazar á la
operacion cesárea ó la sinfiseotomia , ó por lo menos evitar la.pece
sidad de practicarla . Este precioso é inestimable descubrimiento , que
en 1831 tuvo por primera vez su feliz aplicacion en Francia , es el
parto artificial prematuro . M . Velpeau ;,profesor en la Facultad de
medicina de París , que fué el primero que lo practicó en Francia ,
asegura « que la madre no corre sensiblemente mas riesgo con el par
to provocado que con el parto á término ó espontáneo.» ( Traité com
pletde l'Art des Accouchements, t. 2, p . 406 . ) Elmismo autor pretende
que a la hemorragia , las convulsiones, la peritonitis, los escirros y
todas las alteraciones posibles del cuello del útero no se,observan con
mas frecuencia despues del parto provocado que á consecuencia del
parto á término.» 'Segun M . Velpeau , no.viene á perderse sino la mi
tad de las criaturas poco mas omenos. « Como está casi demostrado ,
añade mas abajo el mismo autor , que en tales casos solo se salvaria
el décimo pariendo á término , y que las operaciones por medio de las
cuales se puede provocar el parto esponen gravemente á la madre,
hasta el punto de causar la muerte á muchas , este inconveniente del
parto prematuro artificial de ninguna manera le priva de ser un recur
so precioso que seria inhumano el desecharlo ... En resúmen , conviene
provocar el parto prematuro cuando la pelvis tiene menos de tres pul
gadas y dos ó tres lipeas y mas de dos pulgadas y media . Siendo de
dos pulgadas y media y aun de dos pulgadas podria dar algunas es
peranzas de buen éxito . En ciertos casos tambien podria recurrirse á.
el aunque la estrechez tuvieše cerca de tres pulgadas y media ..... Le
jos de proscribirlo (el parto prematuro ) en las primíparas, como hacen
varios autores , deberia,adoptarse siempre que la pelvis tiene de dos
y media å tres pulgadas; á mas o menos de esa dimension conviene
aguardar á que un primer parto aclare el diagnóstico . En las otras
mujeres el obstáculo es infinitamente menor. Ninguno de sus partos
ha podido verificarse sin auxilio del arte. Cada vez ha sido necesario
valerse del forceps , de la version o. la cefalotomia ; y jamás se ha
estraido la criatura viva ... Por otra parte la cuestion es tan fácil de
resolver , bajo el doble punto de vista de la madre y del feto , que no
dejará de serlo en Francia como lo ha sido en los otros paises de Eu
ropa una vez se la haya considerado bajo su verdadero aspecto. Para
no'titubear acerca de este puòto , basta tan solo comparar los resulta
262 TRATADO PRACTICO
dos de la sinfiseotomia , de la operacion cesárea y de la cefalotomia con
los del parto prematuro . Esperamos que esa doctrina... 10uy pronto
quedará universalmente adoptada entre nosotros como lo está hace ya
algunos años en Inglaterra , en Alemania y en Italia. »
Veamos ahora lo que dice otro maestro del arte obstetricio , M . Ca
seaux, profesor de partos. « El parto provocado , dice, hoy en dia ha
conquistado su derecho de domicilio en la ciencia , y seria ocioso el
tratar de probar ó de defender la legalidad y la moralidad de una ope
racion cuyo doble objeto 'es salvar la vida de la madre ó de la criatu
ra . Es ciertamente estraño que durante tanto tiempo nos hayan arre
drado las consecuencias de semejante operacion : en doscientos once
casos recogidos en 1838 por M . Stolz , mas de la mitad de las criatu
ras vivieron , y de cada quince mujeres apenas murió una. Compá
rense. estos resultados con los que daria la sinfiseotomia ó la operacion
cesárea , que habrian sido necesarios si se hubiese dejado llegar el em -
barazo á su término , y fállese ... En resúmen , el, parto provocado ar
tificial se aplica esclusivamepte en los casos de viciosa conformacion
de las pelvis que tienen siete centímetros á lo menos y á lo mas ocho
centimetros y medio.» (Traité théorique et pratique de l'Art des Ac
couchements , p. 751.) . . .
Las leyes francesas fijan el fin del mes sesto como á época en la
cual la criatura puede ser considerada capaz de vivir ; pero , dejando
á parte algunas raras escepciones que no deben tomarse en considera
' cion , no es sipo al fin del séptimo mes que el feto es apto para gozar
de la vida estra -uterina ó para vivir con vida propia . Luego solo á los
siete meses cumplidos es posible practicar el parto prematuro .' . '
"De todo lo que acaba de leerse resalta una verdad incontestable :
que es muchísimo mejor practicar el parto prematuro en tiempo opor
tuno , es decir , después de cumplidos los siete meses , cuando desgra
ciadamente la esperiencia ha demostrado que la mujer no pudo pasir
,anteriormente sin grave riesgo de su vida , ya ,porque tuvieron que
estraérle la criatura por la cefalotomia , ya porque se vieron en la ne
cesidad de practicar la sinfiseotomia", sin hablar de la operacioni cesá
rea , que sin contradiccion es la mas peligrosa de todas las operacio
nes.
De otro lado es de temer que a veces , tomando dificultades por im
posibilidades , se resuelva con demasiada ligereza el practicar el parto
prematuro. Pero , prescindiendo del abuso que nada tiene que ver con
la cuestion /acaso hay algo de que no se abuse ? En mi concepto , el
nuevo principio puede adoplarse y consagrarse como á dogma feliz y
conservador del arte obstetricio . . .
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 263
Sin embargo , preciso es confesar que el parto artificial prematuro
ha encontrado terribles y célebres adversarios , tales como Baudeloc
que , Gardien y Capuron. Este último, al decir de M . Velpeau, ha lle
gado á calificarlo de atentado contra las leyes divinas y humanas. Pe
ro 'tambien es preciso convenir en que esta calificacion es cuando :
menos muy exagerada ; porque en fin 2 dónde está el mal? ¿dónde el
atentado , si teneis por objeto y muchas veces por resultado la salva
cion de la madre y del hijo , uno de los cuales probablemente y tal’vez
ambos habrian perecido sin el nuevo procedimiento ?
· Sobre todo ¿ qué hace' el arte ? imitar a la naturaleza . Esta es la
que ha dado las primeras lecciones sobre este punto , como dice
M . Velpeau. Si ciertas mujeres que , por estrechez de la pelvis , ja
más hubiesen pariđo sino criaturas puertas acaban por dar á luz es
pontaneamente una criatura viva , eso depende de que , esta vez , la
criatura nace antes de término ó que no está tan desarrollada como
se suele ; luego el parlo prematuro no esmas que una imitacion de la
naturaleza .

S. V. : . :.

Obstáculos al parto del lado del feto. . "


Hasta aquí los obstáculos que se oponen al parlo y hacen precisa la
operacion'cesárea , la sinfiseotomia ó la seccion de la sinfisis del pu
bis , ó finalmente el parto prematuro artificial , han venido del lado
de la mujer , y no son sino vicios de conformacion ó la estrechez de
la pelvis. El feto tambien puede ofrecer anormalidades , tales como
algunas deformidades monstruosas, la bidropesía abdominal, la hi
dropesía cerebral o la hidrocefalia , etc. En los casos de monstruosi
dades que imposibiliten el parto es -necesario recurrir igualmente á la
operation cesárea ó á la sinfiseotomia , segun las circunstancias ó la
posicion del feto en el útero . No es lícito sacrificar una criatura mons
truosa despedazándola sino en el caso en que los obstáculos procedan
del lado de la madre.
Por lo que hace á la hidropesía abdominal se puede hacer la pun
cion en el vientre para evacuar el líquido y facilitar el parto ; esto
no admite dificultad , á lo menos á punto de vista moral. La puncion
abdominal es para la criatura una especie de médicacion , puesto que
puede curarla .
En cuanto a la hidrocefalia , el caso es mucho mas grave: aqui sur
ge un obstáculo inmenso. En el dia , con nuestras ideas adquiridas ,
35
264 TRATADO PRACTICO
esta es la mayor dificultad del arte obstetricio, ya para el médico cris
tiáno , ya para el teólogo ; pero felizmente estos casos se presentan ra
rísimas veces (1) , y por otra parte la criatura hidrocéfala por lo co
mun muere antes de nacer, á lo menos en los casos en que la enfer
'medad está muy adelantada
Muchos ó por mejor decir la mayor parte de los prácticos ó de los
autores de tratados de partos aconsejan el sacrificar la criatura antes
que hacer. la operacion cesárea ó la seccion del pubis , porque , segun
ellos dicen , aun suponiendo que la criatura pueda‘nacer.viva por la
operacion cesárea , no podrá seguir. viviendo y perecerá muy poco
tiempo despues de haber nacido ; y que, de otro lado, esponeis.la vi
da de la madre á los mayores peligros; de manera que podeis perder
á una y otra , al paso que sacrificando la criatura salvais la madre ,
cuya'èxistencia está asegurada y es infinitamente mas preciosa que la
de una criatura incapaz de vivir. A esto puede responderse que no to - ' .
das las criaturas hidrocéfalasmueren necesariamente poco tiempodes
pues de haber nacido. He aquí lo que acerca de esta materia dice el
célebre autor Ant. Dugès: «Una hidrocefalia , poco considerable ó des
arrollada despues del nacimiento de la .criatura (*), puede tener un
curso muy lento , y no causar la muerte hasta despues, de algunos
años; tambien se la ha visto persistir , mientras iba progresando ,hasta
una edad muy adelantada, ya produciendo un idiotismo completo, ya
dejando las facultades intelectuales al sugeto. Entonces sobre todo es
cuando el cráneo habia adquirido enormes dimensiones , treinta y seis
pulgadas de circunferencia , por ejemplo , á la edad de nueve años
(Monro) ; algunos de estos sugetos vivieron hasta la edad de cuarenta
y cinco años (Ekmark ), de cincuenta y cinco años (Gall), de setenta
años (gabinete de Dupont). He ahí por cierto unos casos ,que prueban
mucho contra los que niegan á los hidrocéfalos la facultad de vivir.
El pronóstico todavía puede ser menos desventajoso , puesto que bay
ejemplos de curacion completa.» ( Dict. de Méd . et de Chirurg: prati
ques, Ant. Dugès.) .
Resulta , pues , de ese pasaje que una criatura hidrocéfala no sola
mente puede nacer sin ruptura (lo que sin embargo es raro) , sí que
tambien estar dotada de la facultad de vivir. Sin duda se objetará que ,
si la hidrocefalia está bastante poco desarrollada para no ser mortal
luego despues delnacimiento de la criatura , tampoco será un obstáculo
(1). Segun M . Lachapelle y.m . Dugès , entre 43,655 partos , no se encontrómas
que quince veces.
(2) Por consiguiente esla bidrocefalia poco coộsiderable se desarrolló antes
• 'del nacimiento.
DE EMBRIOLOGÍA Sagrada . 266
insuperable al parto . Convengo en que eso puede ser cierto ; pero en
tonces cómo sabremos exactamente , à priori , el grado de desarrollo
de la hidrocefalia compatible ó incompatible con la posibilidad del ac
to del parto ? ¿ cuál será su medida cierta ? A falta de datos precisos ,
sucederá , en la práctica , que fácilmente se tomarán dificultades por
imposibilidades de parir, y que , en todos los casos de disfochia (parto
difícil) se hará la puncion del cráneo siempre que la hidrocefalia sea
adelantada ó no, compatible ó no con el parto normal, y que por con
siguiente muy á menudo quedará sacrificada la criatura ; porque basta
la misma puncion estra -uterina de la cabeza es siempre mortal, y con
mayor razon lo es la que se hace en la matriz. Por otra parte esta
operacion no puede constituir un remedio , puesto que siempre mata ;
luego mas bien es dar una muerte que una medicación .
· He aquí una observacion juicioså de Cangiamila que viene aquí
muy al.caso , aunque no sea la hidrocefalia el objeto de ella : « En
un parto difícil , puede uno valerse de instrumentos mortiferos cuan
do está moralmente cierto de que la criatura se halla sin esperanza
de poder sobrevivir á la operacion que se le hace ? Algunos con Heis
ter creen que, si; otros , y con razon , piensan lo contrario . La opi
nion de Heister seria muy peligrosa en la práctica , pues abriria ca
mino al infanticidio ; las madres , las comadronas, los cirujanos des
esperarian con demasiada facilidad de la vida de la madre y de la
de la criatura: luego que hubiesen podido bautizar á ésta de una
madera cualquiera. Debe maš bien seguirse el parecer de S . Ambro
be hacer heter un verses perplejid,desistir.se pueda
sio , quien dice que, en el caso en que no se pueda socorrer á la
una sin dañar á la otrà , mejor será desistir . » .
Para evitar esas penosas' perplejidades , y sobre todo para no esc :
ponerse á cometer un verdadero feticidio , creo que en ningun caso
se debe hacer la puncion hidrocefálica . ¿ Quién es capaz de sondear
con certitud absoluta la inmensa estension de los recursos de la na
turaleza ? Pero , en mi concepto , bay un dicho decisivo "que corta
de raiz la dificultad . Ya lo hemos dicho , mas es necesario repetirlo :
non sunt facienda mala ut eveniant bona . Esta máxima, este prin
cipio ,- en moral", es inmutable e imprescriptible. Nunca puede ser
licito mạfar á un ser inocente , porque esto es un mal esencial , in
trínseco , contrario á la ley nalural , y que jamás admite escepcion .
Que no se diga que una criatura hidrocéfala , no siendo capaz de vi.
vir , es por consiguiente inútil y aun una carga para la sociedad ;
esto es falso : lodo ser humano , por el mero hecho de existir , es
útil á la sociedad , aun cuando no deba: vivir mas que un dia , que
una hora. Lo mismo es por lo que toca al agonizante á quien no que
266 TRATADO PRACTICO
da más que una hora de vida ; jamás puede ser lícito,abreviar de
un minuto su triste y dolorosa existencia . A los ojos de Dios, la
criatura que no ha podido vivir mas de una hora ha llenado su
destino como el centenario , que no viene å ser mas que un niño ,
segun estas palabras de la Escritura : Puer centum annorum morie
tur. Delante de Dios lo mismo es un dia que mil años. Mille anni...
sicut dies hesterna , etc. Por otra parte ese niño efímero, lo mismo
que el hombre moribundo ó ‘agonizante , da lugar al cumplimiento .-
de una multitud de debe res sociales ; y nótese sobre todo que su
nacimiento le ha procurado el mayor y mas precioso de todos los
bienes , el bautismo. . .
Por otra parte hay ciertos casos en que de nada serviria el hacer
la 'puncion del cráneo , como por ejemplo cuando al propio tiempo
existiese un vicio orgánico en la mujer , 'una estremada estrechez de
la pelvis ; entonces la operacion cesárea seria inevitable .
. . . S . VI.

De la asfixia y del estado apoplético de los recien nacidos.

Muchas veces , en los partos difíciles y prolongados , las criatu


ras nacen en un estado de muerte aparente , pues se hallan priva
das de sentido , de movimiento , de pulso y de respiracion ; por lo
comun se presentan débiles y pálidos: esto es lo que se llama la
asfixia de los recien nacidos. Despues de haber bautizado á la cria
' tura condicionalmente , se procurará reanimarla por todos los medios
que el arte y la razon puedan sugerir . Pónese á la criatura junto á
un brasero bien encendido : se ta sumerge en un baño tibio , que se
hará mas o menos escitante con un poco de vino , de aguardiente ó ..
de vinagre, fuerte ; se le hacen fricciones aromáticas y. tónicas,en
todo el cuerpo y sobre todo en la region del corazon y en el espi
nazo ' con vino ,aromático , aguardientė ú otro licor espirituoso , ó
tan solo con paños calientes y secoss friégansele las šienes , la frente
y las narices con agua de Colonia , alcohol , vinagre füerte ó un
poco de ' eter ; algunas veces se ha conseguido reanimar súbita
mente a las criaturas con aspersiones de agua fria , como sucede
con los adultos que se hallan en estado de síncope. Se les irrita el
interior de la boca ó de las narices con las barbas de una pluma á
fin de promover la espulsion de las flegmas ó mucosidades que
las obstruyen mas ó,menos. Por fin , comprimeseles suavemente el
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 267
pecho y el vientre , al objeto de provocar el movimiento respirato
rio y el juego del diafragma:
En los casos en que esos medios son insuficientes, hay que re
currir á la insuflacion del aire en los pulmones. A este fin puede
uno servirse del cañon de una pluma introduciéndoselo en la boca
ó mejor aun en una de las ventanasde la nariz ; sóplase el aire con
la boca , y se cierra al propio tiempo la otra ventana y la boca de
la criatura , á fio de que el aire insuflado no sålga por aquellas
aberturas ; aunque tambien se puede soplar directamente el aire
con la boca . Téngase cuidado de hacer apretar ligeramente la la
ringe hácia atrás contra la coluna vertebral, á fin de aplagar el
esófago y de impedir que el aire penetre en este conducto
Si para la insuflacion se quiere echar mano de un fuelle , es.pre
ciso valerse de uno que no sirva para encender la lumbre , porque
los que se usan para este fin podrian contener ceniza ó polvo. Al
principio no debe soplarse sino suave y lentamente , y al mismo
tiempo. ejercer ligeras presiones sobre el vientre y el torax para
imitar elmovimiento respiratorio'normal. Sin embargo, generalmen
te es preferible la insuflacion natural y directa de boca á boca , por
que el aire algo caliente y húmedo que sale del pecho de la perso
na que hace la ipsuflacion conviene mejor á los pulmones del recien
nacido que un aire frio y seco. Por otra parte está probado que el ai
re que uno espira no es mycho mas impuro que el aire comun , pues --
to que se afirma que aquel no contiene sino un centésimo de oxígeno
demenos que el aire atmosférico.
Es'preciso perseverar largo ralo en el empleo de todos esos medios ;
pues muchas veces no se logra reapimar una criatura asfixiada sino
al cabo de muchas horas. .
Por lo que hace al estado apoplético de los recien nacidos, se le
recopoce facilmente por las señales siguientes.: rostro muy colorado,
de color de violeta , azulado, hinchado , así como los párpados , el
cuello , el pecho , etc: ; la circulacion y la respiracion son nulas ó
imperceptibles. En tal estado se observa todo lo - contrario que en la
asfixia , por lo que toca á la causa próxima y al conjunto de los fe
nómenos. El primero y principalfluye bremedio
Si nono fluye pesemplear,
astante da quej ssei ádebe ave dese
la seccion umbilical. Si bastante sangre , se repite delacuan
do en cuando la seccion de una tijeretada , y si a pesar de esto la
sangre no fluyese suficientemente , se aplicará una sanguijuela de
trás de cada oreja , etc.
268 TRATADO PRACTICO

S. VII.
Del bautizo de los monstruos.

Los embriologistas y los naturalistas han hecho largas y' sabias


disertaciones sobre la cuestion de las monstruosidades. Esta mate
ria , a la verdad ', mueve la curiosidad 'del vulgo , que ordinaria
mente busca en los monstruos algo de estraordinario , de siniestrº y
espántoso ; pero lo que es realmente práctico y útil á nuestro objeto
se reduce á poca cosa. .
Las monstruosidades son unas conformaciones viciosas por esce
so ó por defecto. Hay seres humanos que presentan dos cabezas y
dos cuerpos distintos ; hállanse unidos por los lomos, por el vientre
ó por otras partes. No hay la menor dificultad por lo que toca al
bautismo de esa especie de pareja de fetos ; pues se administra el
sacramento á ambos individuos.
Se han visto muchísimos casos de’esa especie . Uno de los mas no
tables es el de aquellas muchachås húngaras de que habla Buffon ,
llamadas Elena y Judith . Estaban unidas por los lomos y vivieron
veinte y dos años. Tenian un solo ano , y por consiguiente la nece
sidad de defecar les era comun á una y otra ; përó como cada una
tebia su propio canal escretorio de la orina (la uretera ) , la escrecion
urinaria no les era comun , de manera que cada una orinaba por
separado , lo que , como puede pensarse , era para ellas un manan
tial de disputas. Por fin Judith murió á la edad de veinte y dos
años , é igual suerte cupo á Elena : tres minutos antes de la muer
te de su hermana entró en agonía y murió casi al mismo tiempo .
Cada una tenia su yo, su vida distinta ; lo único que tenian comun
era el ano. . .
En nuestros dias se presentó otro caso parecido , que sin contra
diccion es uno de los mas estraordinarios que hasta el presente se
han observado. Ķita y, Cristina ó'Rita -Cristina llegaron ó llegó á
París el dia 26 de octubre de 1829 , como refiere el doctor Julia
de. Fontenelle en su memoria sobre esta monstruosidad , y fué ó fue
ron presentadas sucesivamente a las Academias de ciencias y de me.
dicina. Esta niña bicéfala nació el dia 12 de marzo de 1829 , en Cer
deña . Cada una de las cabezas fue bautizada separadamente ; la una
recibió el nombre de Rita y á la otra se le puso el de Cristina. Este
ser monstruoso presenta dos cabezas, dos pechos y cuatro brazos;
pero solo tiene un abdomen , una pelvis , dos muslos y ,dos, piernas.
DE EMBRIOLOGIA SAGRADA. 269
Rita -Cristina murió en 24 de noviembre de 1829, de edad ocho me
ses y medio; apenas Rita hubo exhalado el último suspiro Cristina
dió un grito y espiró en el mismo instante. Al hacer la autopsia se
hallaron dos corazones en la misma envoltura ( pericardio) ; ambos
estaban unidos por sus puntas:
Si el monstruo tiene dos cabezas y un solo cuerpo , ó dos cuer
pos y una sola cabeza , es preciso administrar dos bautismos dicien
do : Si eres hombre y vives ; y luego : Si eres otro hombre y vives , etc .
Si es un acéfalo , debe bautizárselė diciendo : Si vives y eres hombre
yo té bautizo , etc .
No haré mencion de una multitud de hechos estraordinarios re
feridos por ciertos autores ,*varios de los cuales eran médicos, por
que hoy en dia todos los sabios y los naturalistas consideran tales
historias como á fabulosas y apócrifas. Liceti habla de un mopstruo
humano de siete cabezas y otros tantos brazos. Bartholin hace men
cion de otro de tres cabezas, que espiró despues de haber dado
unos gritos horrorosos. Borelli cita el hecho de un nuevo Cerbero ,
de un perro de tres cabezas. Háblase también de monstruos que te
nian una cabeza humana y el cuerpo ó los miembros de un animal ,
Ó la cabeza de un animal con un cuerpo humano , como si fuese el
resultado de un comercio de bestialidad . Empero , debo repetirlo ,
yo rechazo todos esos cuentos maravillosos, que nos han venido de
los tiempos.de credulidad y de ignorancia , y que nos son referidos
por autores sin competencia científica ó que carecen de garantía y
de crítica (')..
Creo sobre todo que puede bautizarse condicionalmente á cual
quier monstruo que sale del seno de la mujer , por deforme y estra
ño que sea , por mas que se parezca á un bruto. No es menéster
ateperse demasiado en el principio de Aristoteļes , que el hombre es
el verdadero principio del hombre. Esto probablemente no es mas
que uno de tantos errores que la edad media adquirió de aquel filó
sofo, porque entonces lo mismo en filosofía que en historia natural y
en física ; etc., no se juraba sino sobre la palabra de aquel gran
maestro : in verba magistri.
En el dia está demostrado que la mujer suministra el germen ó

( 1 ) Puedo afirmar que en 1843 , en mi convento de la Gran Trapa , ví á una


mujer triopse , es decir ,de tres ojos ; por lo menos los conservó perfectamente
hasta la edad de nueve años , y hasta entonces vio con todos ellos. En aquella
época , se le estirpó el ojo del medio que , segun ella dijo , era el mejor , y aun
en el dia se le ven los párpados guarnecidos de las correspondientes pestañas.
Por contra , el dia mismo, ví á un hombre que nació con una oreja menos.
2701 TRATADO PRACTICO
el óvulo. Con auxilio del microscopio se descubren en un huevo de
gallina no fecundado todos los lineamentos del ser que de él debe
salir ,
Del principio de Aristóteles se seguiria que es necesario bautizar
á cualquier monstruo dimanado del comercio de un hombre con la
hembra de bruto , lo que huele a absurdo y á ridículo . Lo que es
yo, niego formalmente la posibilidad de tales pròcreaciones bestia
les ; porque Dios jamás permitirá 'esas producciones abominables ,
ni que el hombre se confunda con las especies animales. Para mas
amplios detalles sobre esta materia , véase el Tratado de Embriolo
gia sagrada que se halla en mi Ensayo sobre la Teologia moral, 4.*
edicion . En él se encontrará la refutacion de la doctrina de los médi
cos que tiende å invalidar la enseñanza de la Iglesia relativamente
á la operación .cesárea y al bautizo de las criaturas despues de la
muerte de su madre. Tambien se verán en el mismo tratado otros
detalles interesantes y una multitud de hechos que pruebạn la lar
ga sobrevivencia de los fetos a la muerte de sus madres , etc .

• S. VII . ..
Conducta del confesor con respecto a una muchacha que se halla en pe
ligro demuerte y le declara que está embarazada.
¿ Qué deberá hacer un confesor con respecto a una joven que se
halla en peligro de morir y le declara en confesion que está en cin
ta ? Para contestar a esta pregunta lo mejor será copiar testualmente
la respuesta de Mons. Bouvier.
« 1.° No cabe duda que esa muchacha está obligada à adoptar to
dos cuantos medios estén ' en su mano para procurar la salvacion de
su hijo ; pero al propio tiempo le es lícito el tratar de conservar su
honor , Si sabe escribir , bastará que haga una carta y que la entre
gue cerrada á una persona de su confianza , con órden de abrirla lue
go despues de su muerte , y de devolvérsela cerrada si no llega á mo
rir. En la carta le declara su embarazo y pide que se le mande hacer
la operacion luego que haya muerto á fin de procurar el bautismo á
la criatura que lleva en el seno.
» 2 .° En caso de que no pudiese escribir este detalle , por hallar
se demasiado débil , podria hacer escribir la carta por su confesor ,
firmándola y entregándola ella misma á la persona de confianza . No
creo que fuese grande inconveniente el que la enferma no firmase
la carta , con tal que la entregase ella misma.
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA. 271
» 3.° Es los casos en que las circunstancias no permitiesen valerse
de ese medio', seria menester exigir de la muchacha que manifes
confesorco despuenresio
tase su estado á una persona digna de su confianza , otra que su
n
confesor , porque , si este tomase medidas para mandar hacer la
operacion despues de su muerte , podria sospecharse que obra en
virtud de la confesion. La muchacha enferma tampoco deberá va
lerse de su madre ó de su hermana , á menos que esté segura de sus
principios religiosos. ,
, » 4 .° Si no se halla en peligro de morir no està obligada á tomar
ninguna de esas precauciones , ni el confesor deberá exigirselor; bas
lará que prometa á este que no hará nada que pueda .comprometer
la vida espiritual y corporal de su hijo .»
EXAMEN · DE LAS ·DOS CUESTIONES SIGUIENTES,
COMO A NECESARIO COMPLEMENTO DEL ENSAYO. SOBRE LA TEOLOGÍA MORAL EN
SUS RELACIONES CON “LA FISIOLOGÍA Y LA MEDICINĂ, Y DE LA MOECHIALOGÍA :

· 1.° ¿ Debe el médico hacer la operacion cesárea á una mujer embarazada


que muere antes de parir ?
2.° En igual circunstancia y á falta de médico x el sacerdote debe ó puede
hacer practicar la misma operacion , ó practicarla élmismo si no en :
· cuentra absolutamente a nadie que pueda ó quiera hacerla ?
Este exámen va seguido de algunas reflexiones críticas sobre un opúsculo
intitulado: Del Bautizo intra-uterino sin hacer antes la operacion cesárea.
Como. este opúsculo se ha publicado á parte y despues de la
Mechialogia ; ha sido preciso repetir el relato de algunos hechos
indispensables á fin de no disminuir el valor intrínseco de las
pruebas., presentándolas mejor eu lạzadas , y de no distråer la
atencion del lector con frecuentes y molestas citas.
EXAMEN
DE LAS DOS CUESTIONES SIGUIENTES,
COMO A NECESARIO COMPLEMENTO DEL ÉNSAYO SOBRE LA TEOLOGÍA
MORAL CONSIDERADA EN SUS RELACIONES CON LA FISIOLOGÍA Y
· LA ,MEDICINA , Y DE LA MECHIALOGÍA : . . . .
1.° ¿ Debe elméđico hacer la operacion cesárea á unamujer embarazada que
muere antes de parir ? . .
2.° Ep igual circunstancia y á falta demédico , & debe y puede el sacerdote
hacer practicar la misma operacion , ó practicarla él mismo siabsoluta
. . mente no encuentra á nadie que pueda ó quiera hacerla ?

Desgraciadamente no es raro en el dia el encontrar médicos que


niegan el concurso de su ministerio en los casos de defunciones de
mujeres embarazadas , bajo el vano , ridículo y absurdo pretesto de
que la ley y la moral les prohiben esas especies de operaciones, que
por otra parte les parecen sin objeto , puesto que , segun ellos , la
criatura ordinariamente muere con la madre . De abí nacen un cú
mulo de perplejidades y de irresoluciones para el sacerdote , á quien se
amenaza con persecuciones judiciales si , á falta de un ministerio
bastante competente, croe deber hacer por sí mismo la seccion ab
- dominal para procurar el bautismo á la criatura , y para obedecer á
la ley de la caridad y de la conciencia. Estas consideracionesme han
determinado á examinar semejantes cuestiones bajo nuevos aspectos,
con el objeto de ofrecer á los médicos y á los curas unos principios
y unas reglas de conducta que puedan ayudarles á cumplir sus de -
beres mas graves y mas santos.
PRIMERA CUESTION .

¿ Debe el médico hacer la seccion cesárea á una mujer embarazada .


que muere antes de parir ?
En esta cuestion complexa están interesadas á la vez la ley , la
medicina , la teologia , la moral y la sociedad. Vamos pues à exami
276 EXAMEN DE LAS DOS CỨESTIONES.
narla bajo este quintuple aspecto . Despues considerareidos la cues
tion segunda bajo los mismos puntos de vista .,
QUESTION LEGAL.

« 4 .° El marido podrá desconocer a la criatura si prueba que, du


rante el tiempo transcurrido desde el 300° hasta el 180° dia antes
del nacimiento de esta criatura , él se hallaba , ora por causa de
ausencia , ora por efecto de algun accidente , en la imposibilidad fí
sica de cohabitar con su mujer.» (Código civil , art. 312.) Luego,
el código, çivil reconoce que la criatura puede nacer y vivir á los
seis meses ; porque ¿ á qué vendria el desconocer à la " criatura que
naciese sin vida y sin posibilidad de vivir ? Tenemos pues que'una cria
tura que nace á los seis meses es legalmente capaz de vivir , « El Có
digo civil, dice Tõulljer, al decidir (art. 312) que la criatura que
nace al dia 180º del matrimonio no puede ser desconocida por el
marido, da á entender claramente que debe mirarse como á capaz
de vivir la criatura que nace el dia 180° del de la concepcion .
Luego , la ley no reconoce la facultad de vivir sino hasta los seis
meses , aunque los hombres del arte pretendan que á los ojos de la
medicina la criatura se halla en posibilidad de vivir si nace á los cin - :
co meses : la ley ha escogido sabiamente un térmiņo-medio , al cual .
es preciso atenerse ... Si la criatura nace antes del dia 180º de la ce
lebracion del matrimonio , la ley no la reconoce como á capaz de
vivir : el honor de la madre y la moral pública exigen que se lå
declare incapaz de vivir antes quę ilegitima. » Tal es igualmente ,
acerca del art. 314 , la opinion de M . Collard de Martigny Ques
tions de Jurisprudence médicale ) , quien, distingue la posibilidad de
vivir civil ó legal de la posibilidad de vivir natural. .
« 2 .° La criatura nacida antes del dia 180° delmatrimonio no podrá
ser desconocida por el marido en los casos siguientes : 1 .° si antes de
casarse sabia ya que su mujer se hallaba en ciota ; 2:º si asistió al
acto del nacimiento , y si este acto füé firmado por él , ó contiene su
declaracion de que no sabe firmar; 3 .° si la criatura no es declarada
capaz de vivir.» (Art. 314.) Tenemos , pues , que la criatura puede
vivir , á lo menos algun tiempo , antes del término de seis meses.
Si es asi hay falta legal en privarla de la posibilidad de vivir que
en ella existe . . , . .. . . .
« 3 .° En nombre del pueblo francés, Bonaparte , primer consul ,
proclama Ley de la república el decreto siguiente , dado por el cuer
po legislativo el 18 germinal año X , conforme a la proposicion he
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 277
cha por el gobierno en 15 del mismo mes , comunicada al tribunado
el propio dia. Decreto . El convenio celebrado en París á 26 mesidor
año IX entre el Papa y el gobierno francés..... junto con los arti
calos orgánicos... del tenor siguiente , secán promulgados y ejecuta
dos como leyes de la república : ' '
« Concordato entre el gobierno francés y su Santidad Pio VII.....
«Artículo primero. La religion católica , apostólica y romana se ejer
cerá libremente 'en Francia .»
El concordato y los artículos orgánicos no pretendieron ni pudieron
pretender tocar en lo mas mínimo á los dogmas de una religion cuyo
libre ejercicio en Francia era reconocido como á ley del Estado. Ahora
bien , la necesidad del bautismo para la salvacion es el dogma mas
esencial de la religión católica. El rehusar á la aplicacion de este
dogma su ministerio competente (indispensable por otra parte siempre
que uno' se halle . en ’ estado de ejercerlo ) ¿ acaso no es oponerse, en
cuanto de uno depende , al libre ejercicio de la religion 'católica ,
apostólica y romana ? ¿ no es en cierto modo violar la ley del Estado ?
En todo caso , el contribuir a esta aplicacion po podria por cierto
constituir un acto contrario á la ley . .
En Sicilia hay reglamentos que prescriben á los comadrones la
obligacion de practicar, con el menor retardo posible , la seccion ce
sárea á toda mujer embarazada que muera antes de dar á luz la cria
tura que lleva en su seno. En 1740 ; en el mismo país , segun M . Vel
peau , el 'rev promulgó otra ley por la cual se imponia la pena de
muerte' á los médicos que omitiesen practicar la operacion cesárea à
las mujeres que muriesen á los últimos meses de su embarazo, Una
ley del senado de Venecia mandaba igualmente operar á toda mujer
preñada ó reputada como tal inmediatamente despues de acaecida su
muerte. (Capuron.) **
Lo mismo está prescrito por el derecho rómano : « Negat lex regia
mulierem quæ prægnans mortua 'sithamari antequàm partus ei exci
datur ; qui contrà fecerit spem animantis cum gravidâ peremisse vide
tur. » (L . Negat . D . D . de:Morte inferendâ.)
*Las leyes romanasmencionan con frecuencia esa operacion . La his
toria,nos enseña que muchas fueron las criaturas que de esta manera
se salvaron , y que algunas de ellas se hicieron célebres , ya en el es:
tado eclesiástico , ya en la vida civil. Tales fueron S . Lamberto , obis
po , Drogon , Raimond, Gregorio XIV y otros muchos de quienes hace
mencion Teófilo Rainaud ( Tract. de Ort. infant. per sect. cæsaream );
tal fué, segun dicen , entre los romanos, Escipion el.Africano , etc .
Esa órden ó esa ley real, lex regia , de que acabamos de hablar,
278 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
es del tiempo de los reyes de Roma, y algunos autores la atribuyen á
Numa Pompilio .
En vista de eso ¿ podrá admitirse que la legislacion francesa mo
derna haya pretendido derogar las bellas, y sabias disposiciones de
Digesto ?

· CUESTION MEDICA .
Aquí hay que examinar tres puntos:
1.0 ¿ En qué época del embarazo la criatura se halla en posibilidad
de vivir ?
2 .0 ¿ Cuánto tiempo puede continuar viviendo dentro del útero des
pues que su madre ha muerto ?
3.° ¿ En qué época del embarazo empieza la obligacion médico -legal
de proceder á la estraccion de la criatura del seno de su madre di
funta ?
1.4 cuestion : De la posibilidad de vivir. Todos los autores, desde
Hipócrates , están de acuerdo en que el feto de siete meses es capaz de
vivir. A menos de este término , hay diversidad de pareceres. El pa
dre de la medicina y despues de él Galeno negaban la facultad de vi
vir al feto que nace antes de los siete meses ;'pero es preciso observar
que , segun ellos, empezando elmes séptimo luego que espira el sesto ,
do hay lugar de denegar absolutamente la posibilidad de vivir al feto
nacido, por ejemplo , el dia 182° de la concepcion , es decir, á los seis
meses y dos dias. Muchos autores , graves, tanto antiguos como mo
dernos, han adelantado todavía mas la posibilidad de vivir . Veamos
los hechos en que se apoyan : .
Fetos nacidos entre el sesto y el séptimomes de su embarazo . Avice
na, citado por Cardan (contradicent.medicor. solut. tom . alter., libr. IV ,
tract. ii, contradict. vii) ; refiere el ejemplo de un niño que nació
de seis meses y vivió largo tiempo (pág. 64 ), ..
Cuenta el mismo Cardan , en virtud del testimonio de la mujer del
patricio Agustiņ Abdụa , que en Milan vivia el hijo de un tal Tomás
Suighi, que nació de seis meses . Al nacer tenia los párpados cerra
dos, y pasó los primeros dias sin querer mamar (pág. 66), : : i .
· Belloc ( Cours de Médecine.légale , pág . 62), despues de citar á Adr.
Spigel, cuenta el hecho siguiente, sacado de su propia práctica : Una '
señora de Agen dió á luz,una niña muy poco formada, que en la cabeza
en vez de cabellos , no tenia mas que una pelusiha ó .vello ; sus uñas . . '
solo estaban ,medio formadas. La criaturą pasó algunos dias sin po '
der ni querer mamàr. La señora aseguró que á lo mas estaba en cin
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 279
tà de seis meses, lo que es muy creible en razon de estar la niña tàn
poco desarrollada. Sin embargo , esta continuó,viviendo muy sana, vi
varacha y alegre hasta la edad de quince años , en que murió deuna
enfermedad aguda i
M . Capuron (Méd : lég . relat. à l' art des accouch:, pág . 168) refiere
un hecho análogo sacado tambien de su propia observacion.
M : Orfila (Méd. leg. tom . 1, pág. 374 ) dice,: & Existe un cortisimo
número de ejemplos de criaturas nacidas de seis meses a seis meses .y
medio y que siguieron viviendo. 1
· Fetos nacidos'entré él quinto y el sesto mes. Cardan (Op. cit. pág. 66)
vió en Milan á una joven de diez y ocho años , llamada Clara Sor
mandi, que su madre dið á luz 168 dias (cinco meses y 18 dias) des
pues de un aborto de cuatro meses. -- En aquel mismo tiempo vivia
en el convento de Santa Radegunda una religiosa llamada Eufrasia ,
nacida 170 dias (cinco meses y 20 dias) despues de un aborto de su
madre .- Finalmente cita 'á una joven idiota cụya cabeza era muy pe
queña y , como sabia toda la ciudad , su madre la dió á luz á cinco
meses. - Cardan advierte que no deben tomårse esos casos de naci
mientos precoces por ejemplos de superfetacion ; esto seria', dice ,
esplicar un hecho muy raro por un hecho todavía mas raro y mucho
mas maravilloso. . .
Valesio ( Philosophia sacra , cap . viii, p .101) habla de una niña
de doce años nacida á cinco meses. Este hecho , dice el autor, aseve
rado por todas las personas de la casa , está por otra parte apoyado
en pruebas muy fuertes. .
Schenchius ( Obs. med . rar. nov. mirab. et monstros, tom . alter ,
lib . iv , de Partu vitali «precoce , pág. 151) conoció a un copero de
Enrique II , rey de Francia , que habia nacido de cinco meses . En
Madrid , una señora muy virtuosa y de costumbres irreprensibles
pario tambien .en el mismo térmico. .
Belloc. (ouvr . cit. ) invoca à Pablo y Amman Montuus como para
dar aun ejemplos añálogos. . .
. . M . Caparon (ouvr : cit.) refiere segun Brouzet un becho de capaci
dad de vivir acaecido en aquella misma época , y recuerda además
una sentencia del Parlamento de París por la cual se reconoció la le
gitimidad del mariscal de· Richelieu , que nació igualmente de cinco
meses : sabido es que este señormurió, á la edad de noventa y dos
años. . . . . . .
Feto nacido á cuatro meses y medio. Todo el mundo conoce la his
loria de Fortunio Liceti ,médico célebre , que segun dicen , nació á
cuatro meses y medio , y llegó á la avanzada edad de ochenta años .
37
280 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIÓNES.
Podria, considerarse que varios de los hechos que acabamos de re
* férir fueron mal observados ; por lo que hace á otros parece que no
puede caber la menor «duda. Consientoʻ sin embargo en que se les con
sidere a todos como contestables.
Con todo , he aquí los principios generales sentados por los aufores
mas acreditados y mas competentes :
. * «Generalmente se está de acuerdo en que la época de seis meses es
la primera en que puede admitirse que el feto tiene la posibilidad de
vivir.» (Gardien , Dict. des Scienc, méd .; tom . xvii , pág: 422.)
«Es imposible fijar con exactitud la época de la gestacion en que
la criatura goza de la facultad de vivir , puesto que esta facultad de
pende enteramente del desarrollo y de la perfeccion de los órganos...
por consiguiente ès,un error el querer establecer el principio de que
deben considerarse como que nacen muertas las criaturas que se dan
á luz antes del fin del séptimo mes , siendo así que las disposiciones
legales no se hallan de ninguna manera de acuerdo con este aserto .»
(Orfila , ouvr . cit. pág. 372.) . .
«Una criatura que nace 180 dias despues de celebrado el matrimo
nio puede haber adquirido en este espåcio de tiempo la madurez-su
ficiente para continuar viviendo... si nace antes de ese término , su
facultad de vivir es si no una prueba, á lo menos una presuncion muy
fuerle contra su legitimidad , porque no es verosímil que se desarrolle
· ó adquiera bastante fuerza para vivir antes del dia 180mo. (Capuron',
ouvr. cit., pág. 208 .)
· Si no una prueba , es una presuncion muy fuerte... no es verosimil...
Ya se ve que estas palabras no escluyen absolutamente . Toda posibi
lidad . . .
Partiendo de estos sabjos prineipios, y aun , si se quiere., desaten
diendo los hechos citados por los autores antiguos y modernòs; llega
mos a la conclusion siguiente : " . "
Luego, en caso deduda es preciso obrar ;, porque el dejar' de ha
cerlo es entregar á una muerte cierta un ser que , en tigor , podia ha
ber adquirido el desarrollo y' la perfeccion de órganos que constítayen
la posibilidad de vivir : Occidit autem quisquis servare potest nec servat.
2.4. CUESTION . Cuánto tiempo podrá continuar viviendo el feto en el .
útero despues que haya muertoº su madre ? Vários autores han escrito
que el feto contenido en el útero sobrevivia muy poco tiempo á su
madre . Muchos redujeron este tiempo á algunos cuartos de hora ó
aup á algunos minutos. Este es un error grave y muy peligrosos, con
tra el cual protestan observaciones exactas y muy multiplicadas. Para
no ser molestos solo vamos á referir un corto número de ellas. " " ;
EXAMEN, DE LAS DOS CUESTIONES . 281
Pasaremos en silencio una inultitud de,hechos referidos por los au
tores antiguos , para llegar mas pronto a los nacimientos póstúmos
mas modernos y menos contestables. Los unos tuvieron lugar espon
táneamente y los otros por medio de la seccíon cesárea.
· Nacimientos póstumos espontáneos. Erf 1567 ahorcaron á una mujer;
dos horas despues parió dos gemelos llenos de vida. (Horstius.).
En Bruselas murió una señora á das diez de la noche del jueves ; el
sábado siguiente , á las diez de la mañana., dió á luz una criatura de
• siete meses viva . Una consulta , firmada por Riolan 'y por otros varios
célebres médicos de la facultad de Paris , decidió que muy probable
mente la muerte real no habia tenido lugar hasta la noche del viernes
en elmomento en que se le observaron movimientos del vientre y un
vagitus internus muy perceptible. .
- Admitamos ésta hipótesi: todavía restan " doce horas de sobreviven -
cia . Es preciso notar que la criatura era setimetra. (Joannis Riolani
Anthropographia , påg. 398.) ;
Una señora inglesa que murió estando en cinta, parió un niño el
dia siguiente . (Harvey .). " ; . ' : :**
Salmuthe refiere que una mujer embarazada murió sin que de na
da le sirviése el'auxilio de tres comadronás. Los individuos de la fami
lia olvidaron que estaba en cinta de siete meses ": "retardóse l'a inbu
macion , y al tercer dia la criatura salió con upa especie de violencia
y luego murió .” .
À principios del siglo diez y ocho , en una de las poblaciones princi
pales de Sicilia , una mujer embarazada, madre de siete hijos , llama á
estos al momento de morir , y Jes' ruega encarecidamente que le pro
metan dos cosas : la primera , no permitir que le hagan "la operacion
cesárea despues de muerta ; la segunda , que se la entierre adornada
con sus trajes mas preciosos. Esta mujer .muere , y sus hijos cumplen
sus promesas con harta, fidelidad. El archipreste del lugar se presen
ta con un cirujano para la operacion . Los hijos de la difunta , espada
en mano , rechazan con violència al cura y al cirujano. Algunos dias
despues del entierro de la madge , propálase el rumor de que los frai
les de la iglesia donde estaba enterrada la habian despojado de todos
sus ricos trajes. Los bijos exigen obstinadamente que se abra la sepul
tura para averiguar el becho : ; espantoso y deplorable espectáculo !
ballaron á su madre con sus vestidos", y junto á ella dos gemelos sa
lidos de su seno y muertos."La cólera de Dios,se descargó sobre aque
lla familia ilustre y opulenta : todos aquellos hijosmurieron pobres y
oprimidos bajo el peso del mas humillante infortunio.
En Sambuca , de Sicilia , murió una 'mujer que estaba en cinta :
282 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. ..
practicóse la operacion cesárea y no se encontró el feto. Este hecho
dejó asombrados á los asistentes , los cuales- repararon despues , que
la criatura bahia salido por las vias naturales, y quedó ahogada de
bájo los cobertores. D . Francisco de Arévalo; de Segovia , partió .para
un viaje. Su mujer , embarazada , cayó enferma y murió , Al regresar
elmarido ya la encontró enterrada. En el esoeso de su dolor , Arévalo
quiere verla por última vez, y consigue su.exbumacion. Al movimiento
que se manifiesta en el vientre y al oir ciertos gritos sordos (vagitus
uterinus) , advierten que está pariendo. La cabeza de la criatura habia •
ya salido. Aquel niño llegó á ser gobernador de provincia . - En Sajo
nia se balló en un campo á uņa mujer asesinada, que tenia la cabe
za casi separada del tronco , A poco rato,del hallazgo dos criaturas sa
lieron espontáneamente del cadáver. (Cangiamila , Embriología sagra
da , traducida y compendiada por el abate Dinouard .) (").
El Journal universel des Sciences médicales cita una memoria firma
da por varios testigos acerca de una mujer embarazada que habiendo
muerto de repente á las siete de la mañana , la que la velaba notó , el
dia siguiente por la noche, cierto movimiento en el vientre de la di
funta , del que al otro dia salió la criątura. . . . .
Nacimientos póstumós operados por la seccion cesárea .- La Gazette
de France de 14 marzo de 1765 cuenta que una mujer de las cerca
nías de Soissons, preñada de cuatro á cinco meses", fué estrangulada
y ,en parte devorada por un lobo. Se le hizo la operacion , y su hijo
pudo recibir el bautismo. - En 1743, una mujer de Sicilia quedó he
rida del ràyo y murió en el acto : dos horas despues de su muerte
sacaron de su seno una criatura que vivia . - Lo mismo sucedió con
una mujer qde murió envenenada. - Un cura de Montreal hizo exhu
mar una mujer que murió estando en cinta , y tambien logró salvar-la
criatura . Una muchacha napolitana , de edad catorce años , al mo
mento demorir., confesó estar embarazada de cuarenta y cuatro dias;.
se le hizo la operacions cesárea , y el embrion pudo ser baulizado.-- En
julio de 1732 murió eo Palermo una mujer embarazada Las comadro
nas y los médicos rehusaron obstinadamente el hacer la operacion ce
sárea pretestando que el vientre no conservaba ningun calor y que la
criatura no presentaba la menor señal de vida . Presentóşe casualmen
te'up, cirujano quien., no adhiriéndose á su opinion , procedió-á-la au -
(1). La obra delcélebre'eanónigo Cangiamila esmuy apreciada. La Academia
de cirugía , seguo dicén MM . Şue y Vermond , comadron -de la reina, tributa
grandes elogios à la traducción compendiada del abate Dinouart. (véase la :
aprobacion de ella en 20 . febrero de 1766 , firmada por Luis , secretario perpé
tuo .s Esta obra esmuy científica y muy recomendable a punto de vista médico .
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 283
topsia quince horas despues de haber muertolà mujer , y estrajo lạ
criatura vivå . -- Aug. Gervais, primer médico det virey de Sicilia ,
obtuvo iguales resultados al cabo de veinte y cuatro horas. — .Javier
Henri , cirujano del hospital de S. Bartolomé de Palermo , cita un he
cho semejante. Hizo la seccion cesárea al cabo de veinte y cuatro học
ras , y encontró una niña viva , que fue bautizada. - Una mujer, em
barazada fué asesinada por su marido con una puñalada en el vientre ;
las formalidades judiciales no permitieron bacer la autopsia hasta al
cabo de cuarenta y ocho horas. La 'criatura fué estraida viva aunque
con una herida en el pié hecha por el puñal del asesino , y vivió un
cuarto de hora. – En el año 1200 la madre de S. Ramon Nonato , es
tando en cinta de él , cayó en un desmayo mortal en el momento en
que se declaraban los dolores del parto . Durante veinte y cuatro ho
raš los médicos ordenaron una infinidad de remedios. Recobrando el
sentido por un instante , pidió,que despues de su muerte procurasen
salvar a su hijo . En efecto , murió. Los médicos rehusaron operarla ,
porque, segun decian ellos , la enfermedad de la madre debió comu
nicarse á la criatura , á mas de que los remedios violentos que aplica-,
ron á aquella babian infaliblemente causado la muerte á esta última.
Habiéndose retardado tres dias la celebracion de las exequias , llegó
por fin el pariente a quien aguardaban para celebrarlas , el cual que.
dó admirado de que no se hubiese accedido á la última voluntad de
la difunta ; entonces , sacando su daga , abrió él mjsmo el vientre de
su parienta . La criatura estaba llena de vida , y llegó con el tiempo
á ser up santo eminente. En Sambuca , reino de Sicilia ; de veinte y
dos operaciones cesáreas practicadas después de la muerte , se encon
traron tres criaturas que habian muerto hacia ya algunos dias ; otra
pasó por las vias naturales, y las diez y ocho restantes fueron halladas
vivas. (Dinouart , trad . de Cangiamila.) . "
Millot habla de una mujer que no fué operada hasta al cabo de cua
renta y ocho horas , y la criatura no estaba muerta . Flajani , Veslin
gius yotros varios refieren casos casi semejantes. (Cita del, profesor
Velpeau.) . : . : . ..
Nadie hay que no se acuerde de la terrible catástrofe del baile da
do en 1810 en París , por el embajador de Austria , con motivo del
matrimonio de la emperatriz María Luisa . La princesa Paulina de
Schwartzenberg , fué, una de las víctimas dele incendio . Entonces se
hallába en 'cinta , y á pesar de no haberse hecho la autopsia hasta el
dia despues de su ,muerte , se encontró á la criatura viva :
Un académico muy recomendable , el doctor de Kergaradec , cila
un hecho que le es personal. « En 1807 , dice , hallábame de discí-
284 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. .
pulo interno en el hospital de San Antonio , en París. Una mujer em
barazada murio ; el dia siguiente , despues de la visita , ipasamos at
anfiteatro , donde se le hizo la autopsia , y tuvimos la dicha de estraer
un niño con vida al cual se administró elbautismo.
« M . el abate Dubois , canónigo de la catedral de Mans, supo ,
mientras,aún no era mas que vicario de la parroquia de Pré , que
una mujer embarazada acababa de morir y su médico habia declarado
que la criatura tåmbien habia `muerto. No dando oidos mas que a la
voz de la caridad , este celoso eclesiástico, corrió al domicilio de la
difapta , é bizo al instante llamar al médico, el caal se negó á acce
der á su invitacion . Upa comadrona del barrio ; llamada á su vez ,
practicớ , despuesde alguna resistencia , la operacion cesárea , ý sacó
del seno de aquella mujer una criatura viva, que el abate Dubois bau
tizó en presencia de un gran número de personas. La criatura vivió
algunos instantes despues de bautizada.. .
. » El señor cura de Villaine - la -Carelle , departamento de la Sarthe ,
me contó que habiendo ido hace un año a visitar á su colega de Saona,
. supo al llegar que 'una mujer de esta última parroquia , que estaba
embarazada., acababa de morir ; ruega al cura de Saona que le acom
pañe al domicilio de dicha mujer : trasladarse allí , y luego mandad
llamar a la comadrona 'dėl lugar. Esta practicó la operacion cesárea ,
seis ó siete horas despues que la mujer habia muerto , y sacó del útero
una criatura que dió 'evidentes señales de vida , y falleció despues que
el cura de Villaine le hubo administrado el bautismo. » (Médecine
pratique populaire , etc . , por el doctor Rosiau. 1834 .) .
Solo ha un año , que en la diócesis de Seez murió una mujer pre
ñada de siete á,ocho meses. Elmédico que llamaroni se negó á hacer la
operacion .Mandaron por la comadrona , la cual practicó la operacion
cesárea , y estrajo una criatura viva , que recibió el baụtismo. .
He aquí tambien un hecho reciente y muy ‘notable , que se me co
municó en 1844 . Voy á copiar la carta que al efecto me escribieron :
« Hace algun tiempo que en el aposento de un director. de-seminario
leian , una de vuestras obras en que se trata de la conducta que hay
que observar con respecto a las mujeres embarazadas. Aquel dia mis
mo acababa demorir una, y hacian ya los preparativos para enterrar
la con su fruto . Un eclesiástico que estaba presente á la lectura de
vuestro libro quiso inmediatamente poner él en práctica lo que acaba
ba de aprender ; pero hasta el dia siguiente no pudo hacerse la ope
racion , y no costó poco trabajo el persuadir á un facultativo para que
la practicase , pues pretendia que la criatura habia sucumbido nece
sariamente con su madre, que hacia cosa de veinte. y cuatro horas que
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 285
era difunta . Mas , ó Providencia admirable ! encoptraron á la criatura
viva, que murió algunas horas despues de habérsele administrado el
bautismo.» Este suceso , que hizo mucho ruido en el país , es de
aquellos que impresionan vivamente á ciertos médicos que pretenden
que la criatura muere siempre con su madre, ó por lo menos que no
puede continuar viviendo,mas de algunos cuartos de hora ó aun de al
gunosminutos: :
Finalmente , en el periódico l'Univers del 9 de abril de 1846 se re
latą el hecho siguiente', copiado de la gacela de Metz : « Los resulta -,
dos del siniestro acaecido el dia 27 de marzo último sobre la Sarra ;
junto a Werden , en el bajo de Ensdorff , son todavía mas desgracia
dos de lo que se dijo al principio . Los pasajeros eran 'en número de
sesenta . En 34 de marzo se habian sacado del rio treinta y dos cadá
veres ; aun se reclamaban otros doce ; y habiả variosmuertos desco
nocidos. Entre las victimas se hallaron varias mujeres embarazadas ;
el dia 31 se hizo la operacion cesárea á una de ellas;,se le sacó la
criatura viva , y con esperanzas de poderla conservar . »
Aquí repetiré lo que,he dicho anteriormente. Entre los hechos refe
ridos , y que hubiera sido fácil multiplicar, hay algunos que se po
drian. controvertir ; pero otros muchos , por el contrario , son dema
siado bien aseverados para que pueda caber acerca de ellos la menor
duda legitima. Consiento , sin embargo, en que se les coloque a todos
indistintamente en la clase de los hechos contestables o inciertos, con
tal que al mismo tiempo se me conceda, 'que el beneficio de la duda , ,
para servirme de una espresion de los legistas, debe quedar á favor de
las infelices criaturas.
Todos los autores convienen en que las posibilidades de salvacion del
feto son tanto mayores cuanto la operacion se practica en una época
mas inmediata á la muerte de. la madre ; así es que Ambrosio Paré , .
Andrés de Laurens , James (Dict. de Méd . Traducido del inglés por Di
derot, etc .), Cangiamila , Dinouart, el célebre comadron Gardien y
otros muchos autores antiguos y modernos recomiendan que se prac
tique inmediatamente despues de la muerte de la madre. . ;
Con todo , si hubiése transcurrido un espacio de tiempo poco con
siderable , no por esto quedaria uno dispensado de llenar ese grave
deber de conciencia y de humanidad. Ahí tenemos hechos que prueban
la posibilidad de buen éxito despues de un intervalo de veinte y cua
tro horas , ý hasta de dos y tres dias. Esta es la regla trazada por un
gran médico, por´Fabricio de Hilden.
Empero , tal vez se dirá que esos hechos de larga sobrevivencia son
lan raros en el dia que no deben tomarse en consideracion en la prác
286 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
tica, A esto responderé que semejante rareza nada tiene que ver con
la cuestion . Aun cuando tales hechos fuesen cien veces mas raros ,
son muy,posibles. "Basta que se confiese esta posibilidad para hacer
consagrar el principio sentado por Fabricio de Hilden : « Que mas vale
abrir cien cadáveres de mujeres embarazadas , aun cuando deba ser
sin buen éxito , que dejar morir una sola criatura siquiera en el seno
de su madre. » (Respons. ad.Michael. Doring .) .. io .
Sin duda no yendrán á oponérsepos las leyes y los reglamentos de
policía, por lo tocante a las inhumaciones y las autopsias. Su objeto. es
protéger la vida de los ciudadanos ; ahora bien , el ganar tiempo en
talés casos , seria ocasionar la muerte de aquellas criaturas; seria por
otra parte detenerse 'vergonzosåmente en los absurdos escrúpulos del
vulgo , el cual temeria cortar la cuerda de uno que se ha aborcado ó
de dar auxilio á los ahogados antes de presentarse los ministros de la
justicia . Semejante conducta seria indigna de hombres inteligentes ,
indigna sobre todo de médicos advertidos y verdaderamente penetra
dos de los deberes de su santo ministerio.
· A mas de esto , es preciso no perder de vista que todos los autores
prescriben el asegurarse por todos los medios posibles de la realidad
de la muerte , y declaran además que la operacion debe hacerse exac
tamente de la misma manera que si la mujer estuviese con vida.
3 .8 CỦESTION : ¿ En qué:época del embarazo comienza para el médico
la obligacion de hacer la operacion cesárea á lasmujeres preñadas que
mueren antes de parir ? El Código civil .fija la posibilidad de vivir, al
dia 180.mg del embarazo . Gardien , Capuçon y Orfila parece que sus
criben á lo que fija la ley . Sin embargo , ya he dicho que estos auto
res están léjos de mirarla como á invariable,ʻy.de negar la posibili
dad absoluta de una facultad de vivir mas precoz. El término de seis
· meses no me satisface , și, lo considero médica y fisiológicamente ; la
época de cinco meses tampoco me dejaria sin algun temor de error
posible, aunque muy poco probable . Por consiguiente miro como un
deber rigurosamente impuesto al médico por la ley civil y por la cien
cia médica el -hacer la operacion de que se trata , á los cinco meses ,
lo mas tarde. .. .
Si en la especie solo tomamos en consideracion la letra muerta de
la ley , no deberá hacerse la operacion cesárea en rigör legal sino á
los seis meses del embarazo , puesto que la ley no admite la posibili
dad de vivir sino en el dia 180.mo ó á seis meses ; pero aquí, en la
aplicacion , la ley civil debe ser inseparable de la ley fisiológica ,,esto
es, de la ley natural , so pena de ser para siempre impotente y estéril
en'la práctica , ó, en otros términos, elmédico no puede ser separada
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 287
y abstractivamente médico segun la ley y médico segun la naturaleza;
debe serlo a la vez segun 'una y otra , porque, en la vuestion presente ,
la ley no puede ser contraria a la naturaleza : Ộ mas bien el médico
siempre debe ser médico,a la vez", segun' la ley, segun la naturaleza y
segun la religion. Pero no nos anticipeņos.
Acabamos de sentar una regla de medicina legal ; á punto de vista
religioso no admitiria tales límites ; luego diré las razones en que me
fundo.
CONCLUSIONES MÉDICO-LEGALES. 1.° Toda mujer embarazada de cinco
meses á lo mas, que muere antes de parir , debe ser sometida á ļa
operacion cesárea si el parto no puede efectuarse por las vias ordi
narias. :
2.° : Los cuidados del arte deben administrarse en elmismo momen
to de la muerte de la madre , ó por lo menos lo mas pronto que sea
posible . . . . .
3.° Un espacio de veinte y cuatro horas, de dos dias y aun de
tres dias , discurrido despues de lå múérte , y la circunstancia de la
inhumacion de la mujer no dispensan ,al médico del cumplimiento de
aquel deber. . . . . . :
4 .° El médico que se niega á practicar esa operacion necesaria
incurre en la mas severa censura ; porque el dejar de hacerla equiva
le á matar. « Est enim inhumanum post obitum matris fætui pereunti
et suffocari paráto manus auxiliares denegaré, et sæpè viventem adhùc,
cum matre mortuâ , eodem tumulo contegère et obruére. Idcircò juriscon
sulti EUM NECİS REUM DAMNANT qui gravidam sepelierit, non priùs esc-.
tracto fætu . » (Joan . Riolan . , Anthropographia , lib. vi , cap. vur.
pág . 589.)
CUÉSTION . TEOLÓGICA .

Toda alma humana, desde el primer momento de su creacion , par


ticipa de la falta del primer hombre. Solo el bautismo puede borrar la
mancha original ; he ahí la doctrina de la Iglesia universal. ".
Luego, la criatura contenida en el senomaterno está sujeta a la ley.
de la regeneracion por las aguas sagradas del bautismo desde el insa
tante en que es animada , es decir , en el acto de unirse sus sustan
cias espiritual y corporal. .
¿ A qué, edad queda animado el feto ? Platon,suponia que el alma
no se unia con el cuerpo sino en el instante de nacer. Aristóteles fijó
el término de esta union á cuarenta dias para los niños y á ochenta ó
. . noventa dias para las niñas. Conócese á primera vista cuan fútil y sia
38
-288 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES
fundamento es una distincion semejante. Zacchias cree que la,anima
cion sé opera en el mismo instante de la concepcion. Este parecer es
el mas probable , por po decir que es una verdad ; incontestablemente
es el mas seguro , y casi universalmente admitido en la actualidad .
Cangiamila no considera necesario bautizar á là criatura sino cuan .
do el embarazo es de cuarenta dias. Florentini , que en 1668 escribió
una disertacion sobre el bautizo de los abortos , enseña que se debe ,
so pena de pecado mortal , bautizar al gérmen o al embrion , aun
cuando no sea de mayor tamaño que un grano de cebada. Ahora bien ,
á los treinta dias, segun los célebres médicos-legistas Chaussier y
Marc , tiene ya dicho volúmen , ó el de yna grande hormiga . La doc
trina de Florentini nereció la aprobacion de las facultades de medi
cina de Viena y de Praga , de varios obispos , de las universidades de
Reims y de Salamanca , de las facultades dě teologia de Viena,de Pra
gà y de París. Esta última la calificó de indubitata doctrina. El céle
breGardien dice igualmente que la mas leve señal de vida de los em
briones o de los fetos , sèan cuales fueren , su imperfeccion ó su falta
de posibilidad de vivir , es suficiente para procurarles la gracia del
·bautismo. .
La obligacion de recurrir a la incision cesárea post obitum matris ,
en cualquiera época del embarazo , no se halla por otra parte en el es .
tado de simple teoría . Vémosla claramente formulada en Sto. Tomas,
en la instrucción de S . Carlos Borromeo sobre el bautismo', en el.Ri
tual romano , que no distingue época alguna , y en los concilios de
Colonia (1280), de Långres (1.404), de Sens (1514), de Cambrai (1550 )
y de París (1557). En Sicilia los curas están obligados a hacerla prac
ticar so pena de escomunion ipso facto.
CONCLUSION MÉDICO - TEOLÓGICA . El médico católico está obligado á
practicar la operacion cesá rea en todas las épocas del embarazo , en
pezando por lo menos en aquella en que el embrion es distinguible y
presenta la forma fetal. Estos caracterés se observap , segun Chaussier
y Marc, á los cuarenta y cinco dias, lo que concuerda bastante con la
época señalada por el célebre Cangiamila. Mas arriba bemos visto que
á los treinta dias va se distingue el embrion, el cualofrece entonces el
tamaño de un grano de cebada. (Véase mi Ensayo sobre la Teologia
moral, 4 .a edic .) Así pues, repito , el médico cristiano está obligado
á estraer el embrion del seno de una mujer difunta , a fin de bautizara
le , desde la época en que se distinguen los lineamentos humanos ó la
forma fetal.
En apoyo de esta conclusion , he aquí las palabras notables , no de
un teólogo, de un Padre de la Iglesia ó de án severo casuista , sipo de
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 289
un célebre médico y de un grande comadron : « Debe operarse iome
diatamente despues de la defuncion de las mujeres que se presumen
muertas antes de parir , cualquiera que sea el término de su embarazo ..
Gardien , Dict. des, Sc. med. , t. 17 ; p . 422.)
CUESTION .MORAL. .
Solo tengo que decir dos palabras acerca de este punto . Là moral ,
si no me engaño, es la doctrina ó la ciencia práctica de los deberes , ó
la regla de las costumbres. No comprendo , pues , ,de qué manera el
cumplimiento de un deber religioso , civil y médico a la vez puede ser
contrario a la moral. Dar un alma al cielo , dar tal vez un ciudadano
á la tierra , he ahi lo que puede resultar , he abi lo que muchas veces
ha resultado de la operacion cesárea practicada inmediatamente des
pues de la muerte de la madre. El negarse á tan bella tarea ; el'entre
gar por lo mismo uộ pobre ser, sæpè viventem adhùc , como dice Rio -
lan , á una muerte que no le estaba necesariamente , destinada ;. be
abí lo que , en mi conceplo , es deplorablemente contrario a la moral.
No quiero insistir ,acerca de eslo .
Termjoaré esta cuestion por este pasaje notable ide Gardien : «...Ya
que las inujeres (que se presume han muerto) nò'corren riesgo alguno,
vale mas operar infructuosamente á muchas que dejar perecer una so
la criatura por no hacer la operacion , ó por no haberla practicadoen
• tiempo oportudo ; porque , si åun vivia , podria imputarse su muerte
á ,aquel que omitió hower la, dgastro
omitió hacer , p. 4200 de mi
um pat-hysterotomia.(operacion cesárea)
cuando era ocasion : Quem , dum potuisti servare, non servasti, illum
occidisti.» (Dict. des Sc . med. , t . 17 , p . 421" ) .
. . Los principios que acabo de formular no son de'mi invencion ; son
los de todos los médicos cristianos, y particularmente del doctor de
Kergaradec , miembro honorario de la Academia de medicina , quien
los habia .ya espuesto en gran parte en un artículo inserto en la Revue
de l'Armorique de l Ouest. Los he reproducido aquí en cuanto al fon
do, y me felicito de ser participante de las miras é ideas de ese piado
so y sabio académico . Ruégole que admita la espresion de toda mi
simpatia. Prosigamos.

CUESTION SOCIAL Y CIVIL. :


· Tampoco tengo que decir sido dos palabras en orden a esta cues
tion ; porque bastante se conoce que no es cosa indiferente al órden so
cial y á las familias el que upă criatura nažca con posibilidad de vivir
290 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
ó no. La ley , á la verdad , fija á los seis meses,l'a posibilidad de vi
vir ; mas esta posibilidad legal está ciertamente lejos de ser invariable,
como lo prueban los hechos'arriba citados. « Al adoptar una regla to
mada en el curso mas ordinario de la naturaleza ,,los legisladores no
entendieron enunciar una verdad absoluta , nidecidir fisiológicamente
una cuestion sobre la cual están discordes losmédicos mas distingui –
dos. Ellos hicieron lo que era propio de la legislacion : secaron' él ma
nantial de aquellos,pleitos difíciles y escandalosos á que daban lugar
los nacimientós tardios y .prematuros , trazando á los jueces una regla
positiva para fijar su incertidumbre y evitar en adelante las decisiones
arbitrarias y los juicios contradictorios.» (Toullier.) Así , pues, la
criatura nacida despues del dia 180.0 del matrimonio es legitima.
Pero la ley mira como nacida á la criatura que está concebida ,'á la
criatura que aun está encerrada en el seno 'de su madre : Qui in
utero est pro nato habetur , quoties de eo agitur. Ella 'la asimilă á un
menor de edad ; ella quiere que , en cåso que muera el padre, se pro
ceda á nombrar un curador'al pientre. i :
Empero , para ejercer sus derechos, no basta que la criatura ' esté
concebida; es preciso tambien quenazca; es decir, que salga viva del
seno de su madre , y que tenga posibilidad de vivir ó sea apta para
continuar viviendo. e i
« Para heredar , es necesariamente preciso existir en el instante en
que se establece la sucesión á la herencia . Así , pues, son incapaces
de heredar : 4 :9 aquel que aun no está concebido ; 2.º la criatura que
no tiene posibilidad de vivir.» (Código civil ; art. 725.) .
« Para ser capaz de recibir entre vivos, basta estar concebido en el
momento de la donacion ; para ser capaz de recibir por testamento bás
ta el estar concebido en la épocă dela defuncion del testador ; sin em - .
bargo , la donación ó el testamento no tendrán su efecto , sino en cuan
to la criatura nazca con posibilidad de vivir .» (Art. 906 .) i
La aplicacion de estos principios por lo que toca al proceder,del fa
cultativo se deduce de sí misma. Por ejemplo , muere una mujer que
está en cinta de cinco meses y medio o aun de cinco meses . La criatura
que lleva en su seno no es legalmente capaz de vivir ; y hasta puede
decirse que no lo es fisiológicamente , es decir, naturalmente ; mas por
esto mismo no es absolutamente cierto que la tal criatura no sea apta
para continuar viviendo. Luego , en caso de duda , es preciso obrar y
aplicar á la criatura el beneficio de la duda. Si esta criatura nace vi
va por la seccion .cesárea, y continua viviendo ¿acaso no será apta para
ejercer susderechos, contra los términos de la ley ? Es pues preciso
que elmédico legisla opere ä toda mujer quemuere embarazada de cin
co meses cuando menos,
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES . 291

SEGUNDA CUESTION .
El sacerdote, á falta de médico z debe ó,puede hacer practicar ó
practicar por sí mismo la seccion cesárea en una mujer embarazada que
muere antes de parir , si no encuentra absolutamente á nadie que
pueda ó quiera hacerla ?
: ; . ' CUESTION LEGAL
CUESTION LEGAL ...,

Parece que de algunos años á esta parte el ministerio público varias
veces ha perseguido y hecho condenar al pago de una multa á perso
nas que habian hecho la seccion cesárea con las precauciones conve
nientes ó tambien segun las reglas indicadas en los tratados de embrio
logia sagrada (") , so pretesto de que esas personas habian practicado
indebidamente una operacion quirúrgica . . .
Esmuy probable , por no decir que es cierto , que esa clase de ope
raciones , hechas por personas incompetentes , po fueron practicadas
sino en los casosde suma urgencia y en la imposibilidad reconocida de
recurrir al ministerio dę uị hombre del arte. Entonces ¿donde está la
ilegalidad o la culpabilidad legal de un acto ordenado por la imperio
sa ley de la necesidad ?'En un caso de necesidad estrema no solamente
hay derecho natural , sino tàmbién deber riguroso de socorrer á Jos
ciudadanos ; y á falta absoluta de un ministerio competente , toda per
sona, sea cual fuere, está obligada á prestar ayuda y socorro conforme
sepa y pueda :" esto , repito , es la ley natural , y la ley civil no puede
contrariarla . Véase sino lo que todos los dias se practica en los acci
dentes tan comunes de la vida, tales como los casos de síncopes , de as
fixias , de caidas graves, de hemorragias fulminantes, etc., etc . Todas
las asistencias , posibles en la circunstancia , son siempre espontáneas,
prontas é inmediatas. Es seguro que en una necesidad estrema los pre
ceptos sagrados de la ley natural se sobrepondrán siempre á las frias
exigencias de la ley civil. .. . ..
No cabe duda , que en ciertas ocurrencias funestas é inevitables ,
los socorros admiöistrados por una mano caritativa , pero inhábil ó
inesperta , pueden ser impotentes ó aun dañosos y funestos : como ,
por ejemplo , unos labradores descubren en medio de las nieves á una
1) Todo sacerdote esiá obligado a tener un conocimiento suficiente de estas
reglas , á fin de que en casa.necesario se balle en estado de aplicarlas Este
conocimiento debe ser el objeto de una enseñanza particular dada en los cur
sos de teología de los grandes seminarios.
292 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.'
persona belada y en un estado de muerte aparente : en la imposibili -
dad de aplicar a este enfermo el beneficio de un ministerio competente ,
se apresurarán naturalmente á ponerle junto á un gran fạego , y por
lo tanto le matarán infaliblemente: ¿ Por ventura tales personas serán
culpables á los ojos de la ley ? no por cierto . En una caida grave una
persona se disloca la cabeza ; á falta de facultativo uno de los asisten
tes trata luego instintivamente de reducir la luxacion , y he ahí que
de resultas de esta operacion intempestiva aquella persona muere ias
tantánea é inmediatamente. Semejante operador será reo de un homi
cidio formal ? digo tambien que no .
Luego entonces , en un caso de estrema necesidad , y á falta de toda
persona competente ¿ por quéha de ser mas reprensible un eclesiás
tico que haga practicar ó practique por símismo, segun.las reglas del
arte , una incision abdominal en una mujer difunta , con el objeto de
ganar'un alma para el cielo y tal vez un ciudadano para la patria ?
¿ Dónde está la ilegalidad de ese ministerio de abnegacion y de cari
dad ? Que se'nos demuestre si es posible. Porque en fin si nuestra le
gislacion no es ya vivificada , como en otro tiempo , por el espíritu
cristiano , no tiene, sin embargo , la brutalidad salvaje de las leyes de
los antiguos paganos ni sų infanticidio legal, Digo pues que el dejar pe
recer cuando se puede salvar , equivale á matar . ¿ Por: ventura- es li
cito jamás el privar:legalmente´á un ser humano de una posibilidad de
salvacion que quizá le resta , aunque sea muy débil por otra parte ?
Bajo el imperio de esa:dụda', de ese terrible quizá no será menester
obrar y aplicar á la desdichada criatura , segun la máxima del dere
cho, el bepeficio de esa duda horrorosa ? Si por cierto, y mil veces sí.
En caso de estrema necesidad es preciso ensayarlo todo, hasta los re
medios mas dudosos . En el ejereicio de lå medicina ¿ acaso no venios
todos los dias que se aplican medicaciones dudosas , precarias é incier
tas', en virtud de este axioma médico : Melius est anceps quàm nullum ?
¿ Y por ventura la misma operacion cesárea no se halla en ese caso ?
¿ qué cirujano se negará á practicarla-cuando tenga una conviccion in
tima de que está absolutamente indicada , y que es la última ancora
de salvacion que resta a la madre ? Però volvamos a nuestra criatura
intra-uterina . ; .. .
Quién es capaz de saber con entera certitud si esa criatura , crei
da ó pretendida muerta con su madre , no se halla en estado de asfixia
ó demuerte aparente ? Muchos son los médicos que , falsamente per
suádidos de antemano que las criaturas mueren antes ó con sus ma
dres , no cuidan de abrir los cadáveres de estás•(1);.y cuando por ca -
(1) Entre un gran número de hechos de este género que me han sido co -
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 293
sualidad lo hacen y encuentran una criatura que no da señal a'lguna
de vida y acaso se apresuran siempre a tratar de reanimarlå ? Aquí po
quiero acusar á eşos prácticos de improbidad médica , ni sospechar de
la rectitud de sus intenciones; creo que proceden de buena fe , es de
cir, que están en una falsa persuasion dimanada de su ignorancia de
los verdaderos principios del arte obstetricio . ¿ Cómo podria ser de
otra manera cuando vemos en el dia a tantos médicos que prefieren a la
doctrina irrefragable de los hechoslas peligrosasteorías que han apren
dido en las cátedras y en los libros de partos, cuyo espíritu escéptico
es con tanta frecuencia hostil á todo sentimiento religioso ? De ahí
viene muchas veces esa falta de respeto,, por no decir esa profunda ,
esa deplorable indiferencia en órden á 'la cosa mas necesaria al hom
bre en este mundo, quiero decir, el sacramento del bautismo. «Mien
tras estudiaba' medicina , dice el doctor Rosiau , un catedrático de
partos nos trajo ' un dia , á su 'anfiteatro ,' un feto de cuatro meses y
medio todavía envuelto en sus membranas, que habia recibido el dia
antes.Me tomé la libertad de hacerle observar que se le debia bauti
zardespues de desprenderle de su cubierta. Respondióme que , no čre
yendo en la regeneracion de la especie humana.por las aguas del bau
tismo ,,no lo administraba sino cuando los padres lo exigian . • He ahi
la alta moralidad de ciertos cursos de partos!!! . .. "
El inmenso embarazo en que puede hallarse un sacerdote deberia
sermucho más raro de lo que es realmente , puesto que , hoy dia , en
Francia , hay suficiente número de médicos, para que en las aldeas mas
pequeñas y mas lejanas puedan sus habitantes recurrir á- los auxilios
municados no referirémas que dos , de que me dió policia , hace algunos dias,
vo respetable cura de Bélgica. Copiaré lestualmente su escrito :
* « Una mujer embarazada , llegada á término , murió de resullas de una hemur.
Dragia uterina .No solamente la criatura no pudo ser bautizada , sí que tam
» poco llegó á ver la luz ; sin embargo el médico llegó á poco rato de haber
vmuerto la mujer..... Un cura se encontró junto con un médico y un comadron
» al lado de una mujer preñada de cinco á seis meses y muerta algunos minu
» tos hacía. No solamente los hombres del arte ou hacen la operacion cesárea ,
» sino que disuaden al cura del designio de practicarla él mismo , amenazán
» dole de denunciarle á la justicia » En ambos casos hubu falta legal grave ,
imputable á los facultativos. El doctor Kergaradec habia ya publicado , en el
mes de febrero último, el relato de un periódico , en que se decia que, habien
do fallecido uoa mujer embarazada de cinco meses , el cura rogó á un médico
que la biciese la operacion á fin de estraer la criatura de su seno , para bauli
zarla si aun vivia , o .enlerrarla en tierra profana ó no sagrada en el caso con
trario . El médico desecho con indignacion su demanda , diciendo que la ley y
la moral e prohibian el hacer semejante tentativa . Es preciso notar que la
mujer habia declarado al sacerdote que ella estaba en cinta ,. 00 de cinco , sino
de seis o siele meses. Aquí- tambien el médico esmuy reprensible y merece la
censura mas severa .
294 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
del arte. Mas por desgracia el mal no viene de abí. Este mal, preciso
es decirlo',' consiste menos en la falta de socorros materiales que en la
carencia del sentimiento religioso ep - harto, gran número de médicos.
Indė mali labes !"Que todos los médicos conozcan y llenen sus mas sa
grados deberes , y muy rara vez los sacerdotes encontrarán , en el
ejercicio de su santo ministerio, lasdificultades que son ahora el objeto
de nuestro exáméo . ' .
Háblase de persecuciones judiciales dirigidas contra el clero. Que
elministerio público , antes de perseguir a los sacerdotes que cumplen
sus deberes , obligue a los médicos a que llenen los suyos , y se halla
rán menos pretestos para molestar á los pacíficos eclesiásticos. Con
esto el ministerio público cumplirá también su propio deber. ...
Luego es cierto que , cuando un eclesiástico presta sus cúidados en
el cumplimiento de un deber tanto mas sagrado por cuánto se trala de
la salud de las almas, bace' un acto propio de su ministerio espiritual
y de ninguna manera una accion civil. ¿ Por ventura no seria abuso
el exigir que para ello pidiese permiso á la autoridad civil , autoridad
incompétente en materia espiritual ? Y si el maire , perplejo , cree de
ber consultarlo á sus superiores; si, por un motivo cualquiera ,'niega
rédondamente su consentimiento ¿ cuáles serán entretanto : las conse
cuencias de esas deplorables dilaciones ? fáciles son de adivinar. . .
De otro lado todo el n .° 3.° del punto légal de la primera cuestion
concerniente al médico debe aplicarse igualmente á la condicion del
sacerdote. (Véase pág. 277.)
Luego en fin , bajo ningun concepto ,'el ministerio público no puede
atacar justamente al sacerdote , ni paralizarle en el ejercicio de su mi
nisterio espiritual, porque , en la cuestion , este ministerio espiritual
es la consecuencia necesaria tanto del principio de la ley como del
principio de la libertad religiosa. . . . . . . .
cuestION MÉDICA. .
Si un sacerdote no se halla provisto de un diploma de médico para
hacer practicar, o para practicar por sí mismo la seccion cesárea en
los casos previstos más arriba , posee por lo menos, como todo el mun
do , el de la naturaleza , que autoriza å obrar en el caso de necesidad
estrema. Pero ¿es acaso bien cierto que el sacerdote se halla absolu
tamente desprovisto de conocimientos médicos , como se supone siem
pre y como con frecuencia se dice ? Yo creo lo contrario , y afirmo
positivamente que en el dia la mayor parte de los curas están bastan - ,
te iniciados en los conocimientos prácticos indispensables en la espe
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 295
cie ; y que por otra parte todo sacerdote posee un tratado de embriolo
gía sagrada ó teológica al cual puede siempre recurrir con prontitud
en caso necesario . Bastante sabido es que un tratado de embriologia
sagrada ordinariamente es una obra muy científica , aun cuando se la
considere á punto de vista médico ; que los médicos mas instruidos y
que están más al corriente de la ciencia son consultados antes de re
dactarla ; que para ella se ponen a contribucion los tratados mas
apreciables de medicina legal y del arte de partos ; que en ella se ha
llan descritos todos los medios de distinguir la muerte real de las en
fermedades que pueden simularla ; que recomienda que se proceda
exactamente con las mismas precauciones que uno toma cuando opera
á una mujer viva , y detalla minuciosamente el procedimiento opera
torio ; que en una palabra , los prácticos , que están poco al corriente
de una operacion afortunadamente muy rara , encontrarian en ella en
caso necesario todas las enseñanzas necesarias para practicarla con en
tera seguridad .
¿ Acaso. el sacerdote seria mucho mas incapaz de hacer la seccion
cesarea á una mujer difunta que una multitud demédicos de nuestras
aldeas, que en este género de operaciones son muchas veces tan no
vicios como el ? porque un grandísimo número de médicos, sin escep
tuar a algunos de las ciudades, jamás han hecho la operacion cesárea,
nisiquiera á una difunta . Pongamos pues al sacerdote , sobre el punto
que nos ocupa , en esta última categoria . .
Empero , tal vez se dirá tambien ¿ de qué manerà el sacerdote po- -
drá distinguir la muerte real de la muerte aparente si ignora las se
ñales de una y otra ? A esto respondere que el sacerdote . está tanto y
tal vez mas habituado a ver muertes que los médicos mismos. Sabido
es que el sacerdote se detiene a la cabecera de los moribundos cuando
acaba y cesa del todo el ministerio delmédico . Los dolores supremos
resisten al poder de la terapéutica material. Desde aquella hora nece
sitan una medicina más elevada ; es decir, la palabra del sacerdote ,
del confesor, que es la palabra mas alta de la humanidad , ó mas bien
es una palabra sobrehumana que ordena al alma que suba al cielo .
Proficiscere , anima christiana . .
Tenemos , pues , que el sacerdote aun permanece en el puesto de la
muerte cuando elmédico lo ha abandonado ya. Él la contempla , la
estudia y la confirma, mientras que el médico ordinariamente , harto
á menudo tal vez, evita esta especie de estudio y se retira á tiempo y
tranquilamente .
Luego es cierto que pocas son las personas que tienen mas conoci
mientos prácticos sobre la semeyótica de la muerte que los sacerdotes.
39
296 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
A esto añádase que ellos tienen entre manos,a la par que los médicos,
obras muy científicas que esponen muy detalladamente todo cuanto
puede desearse tocante á estas materias. No es menos cierto que en
nuestras aldeas hay muchos médicos que no están provistos de tales
libros , y que acerca de este punto poseen menos conocimientos prác
ticos y aun teóricos que muchos curas inteligentes é instruidos.
Vamos ahora á su aplicacion. Siento el caso siguiente : en una es
trema necesidad y á falta absoluta de todo ministerio competente , un
eclesiástico hace , con todas las precauciones indicadas en su tratado
de embriología , una simple incision cutánea á una mujer embarazada
muerta o que se la cree tal ; admito pues aquí la posibilidad de un es
tado de muerte aparente , determinada por un letargo ó un síncope
seguido de hemorragia uterina . Esto supuesto , me atrevo á afirmar
que la incision cutánea practicada del modo que acabo de decir , ade
más de que no puede ir seguida de ningun accidente grave , nide nin
guna hemorragia seria , puesto que hay falta de circulacion , es , á
no dudarlo , uno de los mejores y mas poderosos medios de escitacion .
Esto es de tal manera cierto quemuchas veces se ha recurrido a las
incisiones cutáneas , haciéndolas sobre todo en las plantas de los pies,
para confirmar la muerte en los casos dudosos. Por consiguiente ¿qué
es lo que impediria empezar la operacion por algunas in cisiones en las
plantas de los pies ? Esas simples incisiones cutáneas superficiales ,
repito , po solamente no irán seguidas,de ningun accidente, en caso
de muerte aparente , sino que tambien podrán producir un feliz re
sultado reanimando la antorcha de la vida que estaba á punto de apa
garse . Todos los comadrones saben que un célebre práctico de Paris ,
Felipe Peu , no reconoció que aun existia la vida sino en el momento
de hacer la incision abdominal.
Mas supongamos que esas incisiones no producen el menor efecto :
¿ qué se hará entonces ? Nada mas que acabar la operacion segun el
proçedimiento indicado en todos los tratados de embriologia . Si bien
es muy peligroso el hacer la operacion cesárea á una mujer viva , por
lo regular es facilísimo el hacerla á una difunta ó reputada .como tal.
Todo pues se reduce á hacer , con las precauciones indicadas , una
simple incision abdominal immediatamente seguida de la incision de
la matriz y de la estraccion del feto . ¿ Acaso hace mas el cirujano
por hábil que sea ? Cangiamila dice que un cura amigo suyo bizo la
operacioni cesárea en lugar y á presencia de un cirujano que no podia
ejecutarla : tuvo la fortuna de salvar la criatura. Una mujer cualquie
ra en caso de necesidad podria hacer esas especies de incisiones . (Aquí
no hablo de las comadronas , que están instruidas en esta materia v
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 297
que hacen por oficio esa clase de incisiones en un caso de grave nece
sidad .) Hace ya mucho tiempo que un cura de Sesson , cerca de Ren
nes , despues de haber administrado los sacramentos á una mujer em
barazada que murió poco rato despues , á falta de un ministerio mas
competente, mandó á una mujer que hiciese la operacion . Esta obe
deció , y tuvo la dicha de sacar dos criaturas vivas del seno de su
madre , que fueron bautizadas en la iglesia . Sin duda aquel cura ayu
dó un poco á esa cirujana improvisada , indicándole el procedimiento
operatorio. Un vicario de Avranches , al ver que nadie se prestaba, se
vió obligado á hacer por sí mismo la operacion cesárea á una difunta
embarazada , y tuvo el consuelo de estraer la criatura viva y de bau
tizarla .
Pero se objetará finalmente : « Si por casualidad la mujer solo estu
viese aletargada ó en estado de síncope , en una palabra en estado de
muerte aparente , una mano incompetente ¿ acaso no determinaria la
muerte real é inmediata ?» No cabe duda que la cosa es posible , aun
bajo la manomas competente y ejercitada. Esta es una de aquellas fa
talidades desgraciadas , de aquellas eventualidades nefastas , inheren
tes á la dificultad de la materia , como dicen los teólogos , y que por
fortuna son sumamente raras. No se cita ejemplo de semejante desgra
cia ocurrida ya sea á los sacerdotes , ya a las personas de quienes han
tomado el ministerio mas o menos incompetente. En los fastos de la
medicina no se encuentra mas que un solo caso demuerte determinada
por la operacion cesárea hecha a una mujer que creyeron muerta . No
recobró la vida sino para estinguirse en el mismo instante y para
siempre . Trinchinetti es quien refiere este hecho. ( Journal géné
ral, t. 69.) .
Antes de terminar esta cuestion , ,vamos á contar un hecho muy uo
table de una doblemuerte aparente de una mujer y su criatura . Esta
curiosa é interesante observacion ofrece , desde hace mas de un siglo ,
una regla de conducta á todos los hombres del arte, y será igualmente
muy útil á los eclesiásticos por cuanto manifiesta los medios de esci
tacion que hay que mandar emplear en trance semejante . .
Segun un sabio pripcipio del arte de partos , el comadron, antes de
hacer la operacion cesárea á una mujer difunta , debe asegurarse , en
los casos en que el embarazo esmuy adelantado, si el cuello del útero
permite operar la version de la criatura o de aplicarle el forceps , es
decir, de hacer el parto artificial , sobre todo si pudiese caber alguna
duda acerca de la certitud de la muerte . Así lo hizo Rigaudeaux. Lla
maron á este cirujano para partear una mujer de las inmediaciones de
Douai (en 1740 ) ; fueron á buscarle a las cinco, de la mañana , pero
298 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES .
hasta las ocho y media no pudo llegar a casa de la enferma. Dijeron
le , al entrar , que la mujer hacia ya dos horas que habia muerto , y
que no pudieron encontrar á un cirujano para bacerle la operacion
cesárea. Rigaudeaux se informa de los accidentes que habian podido
causar una muerte tan pronta ; dicenle que desde las cuatro de la
tarde del dia anterior la difunta empezó a sentir los dolores del parto ;
que , durante la noche , la violencia de estos dolores le babia causado
desmayos y convulsiones, y que á las seis de la mañana sobrevinole
una nueva convulsion que aniquiló las pocas fuerzas que le quedaban
á la infeliz. Estaba ya amortajada cuando Rigaudeaux quiso verla :
hace quitar el sudario para examinar el rostro y el abdomen'; tienta
el pulso en el brazo , sobre el corazon y encima de las clavículas, mas
en ninguna parte advierte latidos; presenta un espejo a la boca , pero
la luna no se empaña ; teníala muy llena de espuma, y el abdomen
estaba prodigiosamente hinchado... En uga palabra , partea á la mujer
de una criatura que no da la menor señal de vida... ponela en manos
de lasmujeres que están presentes , y si bien parece muerta , exhór
talas á que la reanimen echándole vino caliente sobre el rostro y sobre
todo el cuerpo. Las mujeres, fatigadas de un trabajo de tres horas al
parecer inútil, disponíanse á amortajarla , cuando una de ellas esclama
que la ha visto abrir la boca; al instante reanimase su celo , y em
plean con profusion el vino , el vinagre y el agua de la reina de Hun
gria ; la criatura da señales manifiestas de vida , y luego se pone á
llorar con tanta fuerza como si hubiese nacido felizmente . Rigaudeaux
quiere visitar a la madre segunda vez ; la habian vuelto á poner la
mortaja . Manda quitar todo el aparato fúnebre , y despues de exami
narla atentamente , la cree muerta , como a la primera inspeccion . Sin
embargo, queda admirado de que los miembros se mantengan flexi
bles despues de siete horas de estar 'muerta ; hace algunas tentativas
inútiles para reanimar la vida, y regresa á Douai encargando antes de
partir que no entierren el cadáver hasta que losmiembros de la difun
ta hayan perdido sú flexibilidad , y al mismo tiempo prescribe que de
cuando en cuando le golpeen las manos , que se las froten , así como
la nariz, los ojos y la cara con vinagre y agua de la reina de Hun
gría , y que la dejen en su cama. Dos horas de estos cuidados resuci
taron a la difunta , y tanto la criatura como la madre cobraron tantas
fuerzas que ambas estaban llenas de vida en 10 de agosto de 1748 ;
sin embargo , la madre quedó paralítica , sorda y muda. (Journal des
Savants , enero 1749.)
De todo lo que precede debemos concluir que el sacerdote que , á
falta absoluta de un ministerio mas competente , y en caso de estrema
EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES. 299
y deplorable necesidad , manda hacer ó hace él mismo la seccion ce
sárea á una mujer muerta , segun las reglas que encuentra trazadas
en su tratado de embriologia sagrada , no puede incurrir en ninguna
censura de la ciencia médica , de la que ha sido , en una necesidad
estrema, el representante y ministro menos incompetente ; y yo aña
do que, bajo este concepto , su conducta caritativa , su abnegacion y
su celo ilustrado , no pueden menos que ser dignos de elogio y no
de censura .

CUESTION TEOLÓGICA .

Lo que hemos dicho en órden å la cuestion teológica de la cuestion


primera , relativa á los médicos , puede en gran parte tener aquí su
aplicacion . Yo añadiré que no solamente el cura , conforme á una
multitud de concilios y al Ritual romano , debe provocar la seccion
cesárea , sino que tambien debe velar para que realmente se prac
tique. Le está espresamente prohibido el fiarse de promesas que se po
drian eludir. . .
En caso de pecesidad absoluta , cualquier individuo de uno ú otro
sexo , como ya he insinuado , puede y basta debe hacer la seccion ab
dominal; y aun cuando, repito , se hallase en el caso de que nadie
absolutamente pudiese ó quisiese practicarla , la caridad , un motivo
poderoso cual es la salvacion de un alma, impone al ministro de una
religion que es toda de caridad , el deber de hacerla él mismo. Un cu
ra en Sicilia y un vicario de Avranches mostraron un animoso celo ,
y ambos tuvieron la dicha de bautizar á pequeños seres que á no ha
ber sido por ellos habrian estado eternamente privados de la vista de
Dios. Acerca de este punto pienso como- Van - Espen , Dens , Cangia
mila , Dinouart , Alasia , etc. Tal era igualmente la opinion de los an
liguos teólogos . Un gran número de obispos impusieron semejante
obligacion á su clero con mandamientos especiales . Un célebre teólogo
francés , Mons. Bouvier , obispo deMans, es del mismo sentir , por
lo menos en las primeras ediciones de su Compendio de Embriologia ,
en que se espresa así : « ..... en caso necesario , una persona cualquie
ra , bien que jamás un sacerdote , sobre todo si es jóven , á menos
que sea imposible de otra manera : el respeto debido á su carácter y
el temor de las habladorías que esto podria promover le imponen esta
reserva. Por. iguales motivos no debe presenciar la operacion , sino
quedarse en un aposento separado , y acudir cuando sea ocasionparan
administrar el bautismo á la criatura.» En la 10 .a edicion , publicada
en 1843 , están suprimidas las palabras sabrayadas.
DcieB.l
300 EXAMEN DE LAS DOS CUESTIONES.
En el estado actual de nuestras leyes, de nuestras costumbres y aun
de nuestras preocupaciones , bueno será que los sacerdotes consulten
á sus obispos para saber de antemano la regla de conducta que ten
drán que observar en todas las eventualidades posibles.
Por lo tocante a las cuestiones moral y social , véase lo que queda
dicho sobre este punto en el examen de la primera cuestion . Aquí no
añadiré más que una palabra ; es que nada me parece mas moral y
mas socialque el asegurar la salvacion eterna de las criaturas intra
uterioas , y el procurar ciudadanos a la patria. Pues bien , con los
principios que acabamos de establecer, á menudo se obtiene la prime
ra ventaja y algunas veces la segunda.
ALGUNAS REFLEXIONES CRITICAS

SOBRE EL OPÚSCULO INTITULADO , DEL BAUTIZO INTRA-UTERINO SIN PREVIA


OPERACION CESÁREA , POR EL DOCTOR THIRION , EN NAMUR , 1846 .
(BÉLGICA.)

He aquí la proposicion de la memoria (destinada al clero) que el


autor trata de demostrar.
«La operacion cesárea , que el sacerdote aislado está obligado á ha
ncer inmediatamente despues de la muerte de la mujer, á fin de bau
vtizar la criatura , debe ser abolida y reemplazada esclusivamente
» por el procedimiento vagino -uterino , esplicado por varios teólogos,
»pero perfeccionado.)
Aplaudo la cristiana intencion del doctor Thirion. Debo estar sa -
tisfecho de su buen deseo y de su celo para asegurar á las criaturas
la administracion del bautismo. Todo esto en un médico es por cierto
muy laudable ; sin embargo , debo tambien decirlo , creo que ese ho
norable médico se įlusiona acerca del valor práctico de su modo de
bautizar como lo llama él. He aquí el medio que propone á-los ecle
siásticos ; « Mi procedimiento , sencillo y fácil , que el sacerdote po
» drá estudiar sobre un maniquí. . , consiste en introducir en la ma
» lriz , por el canal de su cuello , una sonda de plata ,, hueca y
» abierta en sus estremos, por la cual se inyectará el agua que dirigi
» rá sobre ļa criatura ó sobre las secundinas , cuando no estén pre
» viamente,desgarradas . Este procedimiento .podrá simplificarse cuan
» do una parte de feto haya descendido á la escavacion de la pel
» vis.» (P . 16 .)
Este procedimiento , que no es nuevo , según confiesa el mismo au
lor, puede en algunos casos bastante raros, tener una justa y feliz
aplicacion . Empero esos casos , son únicamente aquellos en que los
partos son muy laboriosos o imposibles , y los de algunos abortos en
época adelantada del embarazo. Sin embargo ¿qué podrá esperarse del
empleo de la sonda cuando el orificio del útero'está mas o menos exac
302 ALGUNAS REFLEXIONES CRÍTICAS .
tamente cerrado , como sucede durante toda la duracion del preñado ,
á escepcion de los momentos en que sobreviene el trabajo preparatorio
del parto ó del aborto ? Quæ in utero gerunt, harum os uteri clausum
est. (Hipp. , apb . 51.) Fácilmente se comprende que esta oclusion ote .
rina todavía debe ser mas exacta y completa hasta el sesto ó séptimo
mes del embarazo.
Segun eso será igualmente fácil de comprender cuan dificultoso ha
de ser el poner en ejecucion el método propuesto por M . Thirion , no
solamente para el sacerdote , sino tambien quizás para muchos facul
tativos. Aquí no bablo de otro grave inconveniente que va unido al
empleo de aquel medio , es decir, la invencible repugnancia que inspi
rará á los eclesiásticos , y el evidente carácter de indecencia y de in
conveniencia que necesariamente lleva consigo el mecanismo de seme
japles operaciones hechas á mujeres vivas (1).
Pero supongamos que queden vencidas todas las dificultades y le
vantados todos los obstáculos tanto físicos como morales , en una pa
labra que se ha bautizado al feto intra -uterino , de la manera que se
ha podido ; si la mujer muere , no será menos necesario el bacer la
operacion cesárea , puesto que el bautismo administrado por medio de
la sonda debe ser considerado en tal caso como dudoso ; porque será
imposible saber si el agua fué puesta en contacto con la cabeza del fe
to . Mientras no se tenga esta certitud , el bautismo deberá reputarse
dudoso , aun cuando haya sido aplicado á uno de los miembros de la
criatura. Sabido es que en este último caso se debe bautizar otra vez
á la criatura condicionalmente , si llega á pacer: tal es la decision es
presa de Benedicto XIV . Elmismo Cangiamila , a pesar de ser muy
partidario del bautismo conferido pormedio de la sonda , reconoce es
la estremada dificultad de saber si la criatura intra- uterina quedará
realmente bautizada , porque , dice , nunca se podrá conocer con se
guridad si el agua ha tocado á la cabeza , á la mano ó al pié ; lo que,
en el último caso , añade , haria el bautismo dudoso , segun el Ritual
romano. (Véase el-testo latino del Ritual romano , á la pág. 257.) Por
otra parte el célebre y sabio autor hace observar con mucha razon que
una mujer que muere de parto , si se le ha bautizado la criatura en la
(1 ) Paréceme que convendria dejar este ministerio á las comadropas, pues
las hay en todas partes. Estas mujeres serán mas aptas para semejantes opera
ciones y sobre todo les repugnaráu menos que el hacer la seccion abdominal.
Benedicto XIV dispone alguna cosa análoga en su sípodo diocesano . He aquí sus
palabras: «Ad parochos verò pertinebit obstetrices instruere , et cùm casus
» evenerit in quo infantein , nulla adhuc sui parte editum , mox decessurum
»prudenter timeant, illum baptizent sub conditione ; sub quà pariter erit ile
» rùm baptizandus si periculum evadat et foras prodeat »
ALGUNAS REFLEXIONES CRÍTICAS. 363
matriz por medio de un siføp , es decir , por inyeccion , ó de otra ma
nera , aun cuando haya sido sobre el pie ó sobre la mano que hubiese
aparecido afuera (es decir, no sobre las secundinas) no por esto se está.
dispensado de hacer la operacion cesárea , y por muchas razones. En
primer lugar , porque la criatura , mientras sea posible , debe recibir
el agua del bautismo en la cabeza : la mayor parte de los teólogos no
creen "que sea judiferente el que la reciba sobre la cabeza ó sobre al
gun miembro . Despues de practicada la operacion , conforme a lo que
prescribe el Ritual romano , es preciso reiterar el baulisano condicio
nalmente , á inenos que se esté seguro de que el agua locó inmediata
mente la cabeza."La segunda razon es que despues de haber asegura
do la vida espiritual de la criatura , es menéster procurarle la vida
corporal. La tercera finalmente es que puede suceder que haya mas
de un feto en la matrizi, y de ahí viene , como es sabido , la necesi-
dad indispensable de hacer la operacion .
Preguntaré por fin ¿ qué vendrá á ser el bautismo de los enibriones
con el principio de M . Toirion ? ¿ Cómo se les bautizará válidamente
con la sonda al principio del embarazo , esto es , hasta á los cinco ó
seis meses, y mucho antes de este término ? Aquí hay evidente im
posibilidad moral y aun física , á lo meños por lo que loca á los pe
queños embriopes. Y como puede creerse que en tales casos serán
muchos los médicos que rehusarán prestar el concurso de su ministe
rio ¿ qué þará el sacerdote para procurar el bautismo á los fetos ó á
los embriones , si se le prohibe el·bạcer la operacion cesárea ?
El doctor Thirion , en la pág: 28 de su opúsculo , dice lo siguiente :
Formando las secundinas parte de la criatura , desde el momento que
ellas reciben là ablucion , es la criatura misma quien la recibe , como
si tocase á cualquiera otra parte del cuerpo. ' .
Nome detendré á discutir la opinión de algunos teólogos citados por
el autor , por mas que estos digan que las secundinas parezcan (viden
tur) ser una parte de la criatura . Concederé esto, y aun, si se quiere ,
concederé lanto á los teólogos como á M . Thirion , aunque la ciencia
clame contra mi concesion , les concederé , digo , que las secundïnas
forman parte de la criatura a la par que los miembros. A la verdad
esto es mucho, es evidentemente demasiado ;,pero que ganarán con
esta concesion , ya que el bautisino aplicado solamente a los miem
bros es dudoso , y declarado tal por una c!evadisima autoridad , el
Ritual romano ? Con más,motivo será dudoso cuando la ablucion no
toque'mas que las secundinas. La razon de esto es que los miembros
nó son esenciales al hombre , pues no constituyen la individualidad ó
la personalidad humana , sino que vienen a ser unas partes acciden
40
304 ALGUNAS REFLEXIONES CRÍTICAS.
tales , amisibles en cierto modo , cuya pérdida no acarrea necesaria
mente la del individuo. Solo la cabeza es lo que constituye esencial
mente la personalidad humana ó el ser humano; pero es la cabeza uni
da al tronco : he ahí el hombre , verdadero y único objeto del bautis
mo., por.mas que se halle privado de todos los miembros á la vez.
Aun admitiendo que el método del doctor Thirion sea de fácil y
conveniepte aplicacion , siempre adoleceria , como ya he demostrado,
del inmenso é inconmensurabie inconveniente de establecer como prin
cipio el poderse bautizar, válidamente a las criaturas intra -uterinas
sobre parles cualesquiera , aunque sea sobre las secundinas. Tendre
mos pues , como consecuencia de este principio peligroso , un bautis
mo casi siempre dudoso , escepto'algunos casos raros en que la cabeza
se presenta de una manera conveniente. Inútil és el hacer observar que
un método semejante , dado como regla , seria un mal evidente y'de
plorable . :
Todo lo que anteriormente hemos dicho al examinar las dos cues
tiones concernientes al médico y al sacerdote , nos dispensa de entrar
ahora en mas amplios detalles.
Para concluir , no necesitaré hacer mas que invertir la proposi -
cion del doctor Thirion (véasela al principio de este apéndice ) , por
que cabalmente es el reverso de la siguiente que es la pura verdad .
Digo pues :
La operacion cesárea que el sacerdote aislado está obligado a hacer
inmediatamente despues de la muerté de la mujer , á fin de bautizar
la criatura , no debe ni puede ser abolida , ni esclusivamente rèem
plazada por el procedimiento vagino-uterino . "
· Tenia ya escritas estas breves reflexiones cuando vino á mis manos
un suplemento de la Gazette médicale belge , que traja copia del boletin
de la Academia de la sesion de junio de 1846. He aquí en qué térmi.
nos se espresó , acerca del opúsculo del doctor Thirion , un distiuguido
miembro de la Academia , M . Martens : « El interés de la humanidad
exige lo contrario de lo que pretende M . Thirion. Es menester que la
operacion cesárea pueda ser practicada por el sacerdote á ſalta absoluta
de facultativos. -- Se dirá , tal vez , que no es con el objeto de salvar
la criatura , sino mas bien para bautizarla el practicar la operacion
el sacerdote. Poco importa el fin , con tal que la criatura se salve! - No
puede decidirse que la placenta y las secundioas sean una parte inte
grante del feto. La ciencia no puede resolverlo. Tanto valdria decir
que la madre y la criatura forman un solo ser. --Un caso de defuncion
ordinaria puede de igual suerte ser confirmado por el sacerdote. » " ,
Mas abajo , elmismo académico' añade lo siguiente : « ¿ Es preciso
ALGUNAS REFLEXIONES CRITICAS .
ALO 305
sacrificar la criatura , sí o no ? he ahíá lo que se reduce toda la cues
tion. - Pues bien , el único medio de salvarla es la operacion cesárea.
À mas de que , en caso de embarazo estra -uterino' 'de qué servirian
para el bautismo las inyecciones vagiņales?» (Gazelte medicale belge ,
n.° 23 , 8 junio 1845.) ·
ALGUNAS PALABRAS
SOBRE UN PEQUEÑO OPÚSCULO DEL DOCTOR MEURICE , QUIEN DEFIENDE LA
DOCTRINA DE M . THIRION CONTRA LA ACADEMIA DE MEDICINA DE BÉLGICA.

El honorable M . Meurice , defensor oficioso, ú oficial, esto poco ini


porta , del apreciable M . Thirion , en mi concepto antes ha hecho
traicion que defendido la causa de su cliente , el médico de Namur.
En efecto , todo cuanto él dice para animar al sacerdote a echar mano
del método de bautizar de M . Thirion no puede menos que inspirarle
la mas invencible repugnancia. No se contenta como M . Thirion , con
aconsejarle que se ejercite con el maniquí; quiere tambien que el sa -,
cerdote , hacia el fin del embarazo , vaya á romper. la bolsa de las
aguas , para bautizar la criatura (p . 11) (“).
Pero antes de ir mas lejos , digo que M . Meurice se declara mi
antagonista , y que con esta ocasion me hace saber una cosa que ig
noraba completamente , y á la cual no habia pensado elevar mis mo
destas pretensiones : dice que mi Ensayo sobre la Teologia moral, que
contiene como se sabe un Tratado de embriologia sagrada , sirve de
regla en Bélgica , á juicio del académico M . Cunier.(p . 7); y que otro
académico , el doctor Varlez , dice haber leido. y vuelto á leer con fru
to la misına obra (p . 5 ). Doy las mas sinceras gracias á mi amable y
cortés adversario , sea cual fuere el motivo que le haga usar este len
guaje. '
Hecho eso , en la idea de M . Meurice era desde luego muy natural
y hasta necesario el tratar de derribar , de echar por tierra esa auto
ridad (p. 9), de destruir esa regla del pais (p . 7) y de romper los escu
dos de que se sirven los académicos. Mas no pudiendo atacar la doc
trina de mi Ensayo sobre la Teologia moral, admitido como regla y
como autoridad, M . Meurice se afana ingeniosamente, acumulando mu
chísimos testos en orden á las señales de la muerte real, para hacer
resaltar pretendidas contradicciones , de que ningun crítico, ni aun
los académicos de Bruselas se habian apercibido antes que él. Pero
(1) Esta operacion solo puede hacerse con el dedo.
ALGUNAS PALABRAS ETC . 307
nuestro autor, po juzgando al parecer fácil de hacer ver lo que no es,
recurre al medio que con harta frecuencia emplean los criticos , es
decir, que no respeta bastante la pureza é integridad de los testos, ya
suprimiendo los contestos, ya separando lo que estaba unido , etc .
Por lo demás , no queriendo perder el tiempo en censurar las singu
lares observaciones del critico , que por otra parte no he podido com -
prender, dejo para el lector su exámen y apreciacion , rogándole que
lea , en mi Ensayo sobre la Teologia moral, el párrafo que trata de
las señales de la muerte real , en que se hallan las pretendidas con
tradicciones . Pasemos pues á un punto (mas importante.
Acerca del bautismo de los monstruos , digo : « Si la criatura mons
truosa es un acéfalo , debe bautizársele condicionalmente , diciendo :
Si vives y eres hombre, yo te bautizo , etc .» ( Ensayo sobre la Teolo
gia moral.). A este testo , que es la doctrina de todos los teólogos y
de toda la Iglesia universal, M . Meurice responde : « Yo abandono
» esas anomalías al juicio de los sacerdotes y de los hombres sensatos ,
» y me limito á preguntarles si un feto sin cabeza es un hombre . Si ,
»cuando falta el órgano de la inteligencia y del alma, & debe acaso
» bautizarse el producto de la concepcion ? » (p. 10 .)
El sabio crítico no debe ignorar que hay acéfalos completos y acé
falos incompletos ; que los últimos, que son los mas comunes , con
servan la base del cráneo con todos los nervios sensoriales y los órga
nos de los sentidos. De estos se citan una multitud de casos; yo mismo
vi á un acéfalo , ó por mejor decir un anencéfalo , esto es , sin cerebro
ó lóbulos cerebrales; y sin embargo , aquella criatura , falta del ór
gano de la inteligencia (los hemisferios cerebrales ), vivió veinte y
cuatro horas. Probablemente se vió privada de su cerebro de resultas
de una hidrocefalia , o quizá jamás lo tuvo. En ambos casos, algun sa
bio se preguntará tal vez : ¿ es ó no on ser humano ? La Iglesia , mas
sabia que la ciencia , no aguardará que esta le responda ; bautizará
condicionalmente , y hará bien . Entonces ¿ dónde está la anomalía que
M . Meurice pretende indicar ?
Si la acefalia es completa , es decir , si hay falta total de la cabeza ,
tambien deberá bautizarse condicionalmente , porque el objeto presen
ta un cuerpo humano , y por consiguiente un tronco humano , que se
juzga contener el corazon , el primum vivens y el ultimum moriens.
Luego tambien se juzga que la vida puede existir á lo menos por al
gunos momentos ó el tiempo suficiente para la administracion del bau
tismo. A la verdad , en la acefalia completa el corazon puede faltar, y
aun con frecuencia falta . Pero la grande raridad de su existencia no
la escluye absolutamente , y autoriza la duda en grado suficiente para
308 ALGUNAS PALABRAS ETC .
obrar. Por otra parte á ese tronco acéfalo puede hallarse reunido un
centro nervioso en estado latente y rudimentario ó en estado de desecho
ó de rụina , lo que entonces tal vez constituiria una especie de per
sonalidad humana. Luego hay cuando menos , repito , alguna duda ;
y'bajo el imperio de esta duda , se obra y se deberá siempre obrar
mientras quede que decir lanesúltima palabra de la ciencia . ¿ Dónde es
caso ?
lará tambien la anomalia en esttee cas o? .
Trátense con menos ligereza esta clase de cuestiones . El chiste siem -
preres demal gusto en las materias graves y serias. Estas son de aque
Jlas cosas médico-teológicas que pingun médico puede ignorar , ni si
quiera un médico de aldea (1) : si no las sabe , que no hable de ellas ,
y por lo menos tenga la prudencia de escuchar y callar .
No me detendré en censurar otras varias observaciones del crítico ,
porque á mas de no tener fundamento alguno , esta inútil controversia
careceria de interés y de provecho para el lector.
(1) En la portada de su opúsculo M .Meurice se califica de médioo de aldea . '

FIN .
ÍNDICE
DE LAS MATERIAS CONTENIDAS EN ESTA OBRA .

: Pág.
Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Reflexiones preliminares sobre elpecado de lujuria en general. . . 1.
PARTE PRIMERA.
DE LA LUJURIA CONSUMADA Y NO CONSUMADA .
CAPITULO I. De la lujuria consumada. · · · · · · · · · · 4
Articulo I. Del pecado de lujuria contra la naturaleza.. .. .. .. id
SI. De la polucion en general. . . . . . . . .
Seccion 1. Del onanismo solitario, ó masturbacion ,ó polucion volun
taria en sí ó querida directamente (mollities). . . . . . . .
Secc. II. De la polucion voluntaria en su causa ó querida directa
mente . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Secc. I . De la polucion nocturna . . . . . . . . . . . . 13
Secc. IV . De la polucion diurna.. . . . . . . . . . . . 25
Secc. V . De los movimientos desordenados. . . . . . . .
Secc. Vi. De la conducta que hay que observar para con losmas
turbadores ú onanistas. . . . . . . . . . . . . . .
Secc. VII. De la polucion voluntaria ó de la masturbacion conside
rada en el sexo femenino .. . . . . . .
Secc. VIII. De la polucion diurna y nocturna en el sexo femenino. .
$ 11. De la sodomia .. · · · · · · · · · · · · · · ·
S III. De la bestialidad .. . . . . . . . . . . . . . .
ART. II . De los pecados de lujuria ó de impureza segun la natura
leza . . . . . . . . . . . . .' . . . . . .
S I. De la fornicacion simple .. . . . . . · · · · · :
S II. Del estupro y de la violacion. . .
De la restitucion por causa de seduccion ó de estupro y de vio
lencia . . . . . . . . . . . .
$ III. Del rapto ó del robo por violencia ó por seduccion irresistible.
§ IV . Deladulterio. · · · · · · · · · · · · · · · ·
§ V . Del incesto . . . . . . . . . . . . . . . . . .
S VI. Del, sacrilegio . . . . . . . . . . . . . . . . 86
CAP. II. De la lujuria do consumada. . . . . . . . . . . .
Art. I. De los pensamientos , de los deseos , del gozo ó de la com
placencia y de la delectacion morosa en materia de lujuria.. . .
S I. De los pensamientos. . . . . . . . . . . . . . .
310 INDICE.
§ II. De los deseos y del gozo ó de la complacencia . . . . . 90
$ III. De la delectacion morosa. . . . . . . . . . . . .
Ś IV. De losmedios quehay que oponer a los pensamientos desho
nestos. . . . . . . . . . . . . . . . . . .
ART. II. De los tocamientos y de los besos y abrazos . . . . . 100
$ I. De los tocamientos. . . . . . . . . . . . . . .
$ 11. De los besos y de los abrazos.. · · · · · · · 104
Art. III. De las miradas. . . . . . . . . . . . . . . 106
Art. IV . Del adorno y de la compostura de lasmujeres. . . . . 109
Art. V. De las palabras y de las conversaciones deshonestas, de las
canciones y de los libros obscenos. . . . . . . . . .
§ I. De las palabras, delas conversaciones y de las canciones des
honestas ú obscenas.. . . . . . . . . . . . . . . . 10 .
S II De los libros obscenos . . . . . . . . . . . . . 114
ART. VI. De las danzas y de los bailes.. . . . . . . . . . 117
ART. VII. De los espectáculos ó de las representaciones escénicas.. 122
ART. VIII. De las prácticasmagnéticas. . . . . . . . . .
Art. IX. Algunas palabras sobre la manera de interrogar á los peni
tentes acerca del sesto mandamiento . . . . . . . . . . . 155
PARTE SEGUNDA .
DE LOS DEBERES DE LOS ESPOSOS.
CAP. I. Del impedimento delmatrimonio por impotencia.. . . . . 159
§ 1.. . . . . . . . . . . . . . id .
Impotencia peipétua y temporal, natural y accidental en elbom
bre . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 161
Impotencia perpétua y temporal,natural y accidentalen lamu
jer. . . . . . . . . . . . . . . . . . 164
De los hermafroditas. . . . . . . . . . . . . . . 167
§ II. Consecuencia y aplicacion de lo que precede.. 169
CAP.sosII.relativas
De los deberes conyugales óde las obligaciones delos espo
á nuestro objeto . . . . . . . . . . . 182
Art. I. De la peticion y del pago del débito conyugal. . id .
§ I. De la peticion del débito ilícita ó delos que pecan mortalmente
exigiéndolo . . . . . . . . . . . . . . . . . 183
S II. De los que pecan venialmente exigiendo eldébito conyugal.. . 186
$ III. legí
Del tima
pagoment
del débito conyugal y de las razones que lo dispen - '
san e.. · · · · i n nocanddao elidebi
n to con
i 191
$ IV . De losesposos que pecan mortalmente pagando el débito con.
an d :
yugal. . . . . . . . . . . . . . . . . . 197
S V. De los que pecan venialmente pagando el débito .. . . . . 199
Art. II. Del uso del matrimonio de las circunstancias del acto con
yugal y de los pecados que en él cometen los esposos. . . . . 201
$ I. Del uso del matrimonio y de los pecados veniales que en él co
meten los esposos , en cuanto a los motivos.. . . . . . . . id .
§ II. De las circunstancias en que el uso delmatrimonio es general
mente pecado mortal en cuanto alacto , conforme á la opinion de
todos los teólogos. . . . . . . . . . . . . . . 205
ÍNDICE . 311
$ III. De los tocamientos entre esposos. . . . . . . . 209
IV. Del pecado de Onan ó del onanismo conyugal. . . . . . 214
Arr. III. De la conducta del confesor con respecto a las personas
casadas y á las que se disponen ó entrar en elestado de matrimo
nio . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

TRATADO PRÁCTICO
DE EMBRIOLOGÍA SAGRADA Ó TEOLÓGICA.
CAP. I. De la animacion delembrion ó del feto.-- Embriogenia. - Bau
tizo de los embriones. . . . . . . . . . . . . . . 231
& I. De la animacion del embrion ó del feto. . . . . . . . . id .
$ U . De las causas del aborto . . . . . . . . . . . . . 231
S III. De la embriogenia . . . . . . . . . . . . . . . 237
$ IV. Delbautizo de los embriones.. 238
CAP. II. Conducta que se ha de observar respecto de una mujer emba
razada que acaba de morir , etc. . . . . . . . . . . 242
& I. Reflexiones preliminares.. . . . . . . . . . . . . id .
$ II. De las señales de la muerte real y aparente.. . . . . . . 243
S. NI. De la operacion cesárea a una mujer muerta. . . . . . 249
Modo de practicar la operacion mucesárea
S IV . De la operacion cesárea á unamujer jer viva. bst. á.ciialpar
vi.va. . --. OObstáculos . . 251
to del lado de la madre . . . . . . . . . . . . . . 254
S V . Obstáculos al parto
ario del lado del
dei lado leo.... .. . . . . . . .
del feto 263
S VI. De la asfixia y del estado apoplético de los recien nacidos . 266
S VII. Del bautizo de los monstruos. . . . . . . . . . . 268
$ VIII Conducta del confesor para con una muchacha en peligrode
muerte , que le declara entar en cinta . . . . . . . . . . .
Examen de las dos cuestiones . . . . . . . . . . . 273
Primera cuestion .-- Debe el médico hacer la seccion cesárea á una
mujer embarazada , que muere antes de parir ?. . . . . . . 275
Cuestion legal. . . . . . . . . . . . . . . . . . 276
Cuestion médica . . . . . . . . . . . . . . . . . . 278
Cuestion 1 . De la posibilidad de vivir. . . . . . . . . . . id
Cuestion 11. « Cuanto tiempo el feto puede continuar viviendo en el
útero después de la muerte de su madre ?. . . . . . . . . 280
Cuestion lli. En qué época del embarazo comienza para el médico
la obligacion de hacer la seccion cesárea á las mujeres preñadas
que mueren antes de parir ?. . . . . . . . . . . . 286
Cuestion teologica . · · · · · · · · · · · · · · · · · 2879
Cuestion moral. . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
Cuestion social y civil. . . . . . . . . . . . . . . . Id .
Segunda cuestion. - El sacerdote , á falta de médico , debe ó puede
hacer practicar, o hacer por símismo la seccion cesárea á unamu
jer embarazada quemuere antes de parir, sino encuentra absolu
tamente a nadie que pueda ó quiera hacerla ? . . . . . . . 291
Cuestion legal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . id .
Cuestion médica . . . . . . . . . . . . . . . . . . 294
312 INDICE .
Cuestion teológica . . . . . . . . . . . . . .. .. .. .. .. 2013 299
Algunas reflexiones críticas sobre el opúsculo intitulado : Del bautizo
intra -uterino sin previa operacion cesárea , por el doctor Thirion ,
en Namur 1846 . (Bélgica .) . . . . . . . . . . . . . 301
Algunas palabras sobre un pequeño opúsculo del doctorMeurice, quien
defiende la doctrina del doctor Thirion contra la Academia de
medicina de Bélgica . . . . . . . . . . . . . . . . 306

FIN DEL INDICE.


BIBLIOTEC : EPISCOPAL
BARCELONA
Biblioteca Episcopalde Barcelona
g. 36 .763
13030000007894 sig. 241. 64
Deb
.

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