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TRANSFERENCIA EN EL INICIO DE LA PSICOTERAPIA

El descubrimiento de la transferencia es una de las mayores aportaciones de Freud.


Por todos es conocido, que Sigmund Freud es el padre del psicoanálisis. A él son
debidas contribuciones tan notables como la interpretación de los sueños, la libre
asociación y los actos fallidos como instrumentos imprescindibles para estudiar el
inconsciente. Sin embargo, es mucho menos conocido, al menos a nivel popular, su
aportación a la psicología al descubrir la transferencia y sus implicaciones en la terapia
psicoanalítica.

INTRODUCCIÓN.

La transferencia psicoanalítica es un fenómeno específico del dominio del inconsciente,


es diferente a la transferencia que surge en las relaciones interpersonales (vida familiar,
laboral, de pareja).
TRANSFERENCIA
Freud describió la transferencia como “desplazamiento de afecto de una representación
a otra” que podría convertirse en un impedimento para el trabajo terapéutico. Tiempo
después, descubre que en la transferencia el paciente está reviviendo su relación con
las figuras parentales y revive sentimientos ambiguos de amor y de odio que terminarán
por convertirse en una transferencia positiva o negativa hacia el analista.
En su artículo Recuerdo, Repetición y Elaboración (1914) determina que «el paciente
en el análisis no recuerda lo reprimido (recuerdos reprimidos), lo vive de nuevo. No lo
reproduce como recuerdo, lo reproduce como acto» y, de esta forma se entiende la
transferencia como ilusión de un presente que remite a un paso, pero no un pasado que
requiere ser recordado, sino ser esclarecido.
De esta manera, la transferencia se convierte en una herramienta imprescindible de la
terapia para poder alcanzar la cura psicoanalítica pues se llega a hablar de que «la cura
psicoanalítica es una cura por amor.
¿CÓMO SURGE LA TRANSFERENCIA?
Para entender cómo surge la transferencia tenemos que entender cómo es el diálogo
psicoanalítico que se mantiene durante las sesiones. Como antes señalábamos, la
relación entre analista y paciente se define por no ser simétrica ni complementaria, lo
que viene a ser que el paciente habla, pero el analista no siempre contesta, lo que no
significa que éste no se mantenga en escucha y atención flotante.
Esta situación genera un lugar vacío que pone en juego los fantasmas del paciente
(concepto psicoanalítico) y que promueve la transferencia de diferentes personajes
hacia la figura del analista.
TIPOS DE TRANSFERENCIA
A grandes rasgos, nos encontramos con dos tipos de transferencia: transferencia
positiva y transferencia negativa.

1. La transferencia positiva es aquella que permite que el trabajo terapéutico pueda


realizarse, se desplaza hacia el analista sentimientos afectuosos débiles.

2. La transferencia negativa puede hacer que sea imposible el trabajo psicoanalítico


con el paciente ya que se desplazan hacia el analista sentimientos hostiles o se
puede dar una transferencia erotizada, que es símbolo de resistencia hacia el
proceso e impide la asociación libre.

CONCLUSIONES
1. Surge en un espacio muy concreto, en el espacio psíquico del paciente y no en
el espacio en el que se produce la relación concreta.
2. El analista se convierte en una figura intercambiable que puede desempeñar
diferentes papeles en función de la situación en la que esté actuada la
transferencia. Puede transferirse a su figura la idea de una madre amorosa, una
madre juiciosa y punitiva, etc.
3. Se desarrolla en una relación que es asimétrica porque psicoanalista y paciente
tienen dos roles muy diferentes y es una relación en la que la comunicación no
es complementaria.

E-GRAFIA

DEPSICOLOGIA.COM

GÉNESIS MARÍA FERNANDA GARCÍA


CATALÁN.
3031-17-21408

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