me ha parecido un libro muy orginal y en general bastante
interesante, pero a pesar de esto, me ha costado bastante leerlo, no ya por el vocabulario o porque la historia fuese complicada o por la cantidad de nombres que había, sino porque al contar la historia de una familia,los Buendía, sus desgracias y tristes finales se iban repitiendo de generación en generación hasta el punto de llegar a ser pesado. Aún así he de decir que en su conjunto me ha gustado, no podría negarse que es un buen libro, pero no lo recomendaría. La mejor parte del libro es el principio, cuando los Buendía comienzan a cursar su historia creando un pueblo, Macondo, y algunos de miembros de la familia empiezan a interesarse por la ciencia descubriendo maravillas y desarrollando oficios como el de la plateria, al que se aficionaron casi todos los Aurelianos de la familia aunque cada uno en su generación. Hay personajes que traspasan generaciones y que son los que les dan vida y autenticidad el libro porque son personajes que intentan encauzar la vida de los descendientes manteniendo el espíritu de familia. Un ejemplo de este hecho sería Úrsula quien vive más de cien años conociendo así a casi todas las generaciones de su familia.