Está en la página 1de 25

Título: Sí, Jesús: una introducción a las doctrinas de la gracia

Autor del documento: Roger L. Smalling

Referencia del documento: Sí, Jesús: una introducción a las doctrinas de la gracia, 1994,

Roger L. Smalling, Miami, Fl. Buena semilla.

Palabras claves: Soberanía, elección, predestinación, reprobación, preservación, pacto,

Cristo, salvación.

Palabras nuevas:

Encofrado: Revestimiento metálico o de madera que sirve para evitar el derrumbamiento

de las paredes en las galerías de las minas.

Inexhaustible: Que no puede agotarse o acabarse

Porcentaje de lectura: 100%

Tipo de trabajo: libro


Resumen
La Soberanía de Dios es la única base legítima para una fe sólida. Aunque algunos

dicen que tienen fe sin creer en la Soberanía de Dios, una investigación de lo que creen

revela que su fe está puesta en alguna capacidad humana. Pero la triste realidad es que, es

una de las doctrinas más descuidadas en la predicación de hoy. Ahora, La Soberanía de

Dios consiste en que toda la realidad es producto de los decretos divinos hechos antes de la

creación del mundo. Esto quiere decir que Dios está en control de todo lo que pasa, sea

bueno o malo. Esta doctrina se fundamenta en: Los atributos de Dios, su voluntad

inmutable, la realidad es producto de los decretos de Dios y Él es dueño de todo, y, por lo

tanto, lo controla todo.

En cuanto a la incapacidad humana, el hombre piensa que tiene una neutralidad moral,

lo cual llama libre albedrio. Con la capacidad de escoger lo bueno y lo malo, presuponiendo

que tiene la capacidad de arrepentirse y venir a Dios en cualquier momento. Pero la verdad

es que todos los aspectos del ser humano son dominados por el pecado y controlados por

Satanás, por lo cual no desea la salvación, ni aceptar a Cristo por su propia iniciativa. Así,

que el nuevo nacimiento es un acto de Dios y no de la voluntad humana.

La salvación no es una obra mutua entre Dios y el hombre. Llegar a entender la

incapacidad total humana ayuda a abatir el orgullo en el cristiano, ya que el hombre peca

porque es pecador, y no pecador porque peca. El hombre está condenado primeramente por

lo que es; segundo por lo que hace. Por lo tanto, la voluntad del hombre esta esclavizada a

su naturaleza caída.
Por otra parte, La justificación por la fe se basa en que el creyente es aceptado en Cristo

no por su propia justicia, sino sobre la justicia de Cristo, siendo una declaración legal hecha

por Dios, concedida a la persona por medio de la fe en Cristo. Ahora la justificación no se

refiere al proceso de crecimiento espiritual en la vida cristiana, ya que la justificación no

quiere decir es hecho justo, más bien significa que él es declarado justo.

Mientras que los judíos creen que la justicia de Dios se obtiene guardando la ley, los

creyentes por su parte declaran que la justicia de Dios se obtiene como un don gratuito. La

Justificación por la fe está reservada para los predestinados, a los que Dios escogió para la

salvación antes de la fundación del mundo. Ya que Jesucristo fue el sustituto frente a la ley,

Él cumplió la ley en lugar de todos aquellos que ponen su fe en Él.

Con respecto a la predestinación. Se refiere al arreglo divino de las circunstancias de la

realidad para cumplir con sus decretos hechos antes de la fundación del mundo. Por su

parte, la elección se refiere al decreto divino de crear, de entre la humanidad condenada, a

ciertos individuos para ser beneficiarios del don gratuito de la salvación. Dios hizo esto sin

referencia a los méritos o la fe prevista en los elegidos. Ahora la reprobación tiene que ver

con el decreto divino mediante el cual Dios deja a una parte de la humanidad pecadora que

siga su camino hacia la condenación eterna, siendo así objetos de la ira divina. Pero esto no

quiere decir que Dios los obligue a pecar o sea el autor del pecado.

Por su parte, La muerte de Jesús garantizó la salvación de todos los elegidos. Su muerte

cumplió todas las condiciones, (tales como la fe, la obediencia, el arrepentimiento y la

perseverancia), de manera que el hombre no contribuye en nada. La fe y la obediencia de

los elegidos provienen de la Cruz, no del libre albedrío de ellos.


La muerte de Cristo es eficaz porque cumple su propósito, el cual era salvar a su

pueblo, y a no toda la humanidad en general. Su ministerio no fue un intento a medias

frustrado de salvar a los que pudiera. Cristo no ganó una salvación hipotética para creyentes

hipotéticos, una mera posibilidad de salvación para quien posiblemente crea, sino una

salvación real para su propio pueblo escogido.

La Iglesia de Cristo consiste en un organismo invisible, no una organización visible. Su

formación es espiritual, no material. Ser miembro de una Iglesia bíblica no es garantía de

ser miembro de la verdadera Iglesia de Cristo. Igualmente, es posible ser miembro de una

Iglesia local que no forma parte de la Iglesia de Cristo, siendo a la vez miembro de la

verdadera Iglesia de Cristo invisible.

La doctrina de la Preservación afirma que Dios tiene un pueblo que se preserva hasta la

gloria. Suficientes textos bíblicos muestran que esta doctrina se sostiene por sí misma, sin

necesidad de la ayuda de la lógica teológica. Sin embargo, los argumentos teológicos

basados en las otras doctrinas de la gracia serían suficientes para comprobarla, incluso si

tales textos claros estuvieran ausentes. La Preservación es, por lo tanto, un don de la gracia,

concedida por Dios a sus elegidos y aplicada por varios medios. Los Cristianos son

responsables para aplicar los medios de gracia que Dios ha provisto.


1. ¿Qué elementos abordados por el texto le parecieron interesantes? ¿Por qué

razón?

 Si Dios no fuera Soberano, sería imposible obtener lecciones espirituales de los

eventos de nuestras vidas. Sería imposible saber si Dios está enseñándonos algo

o si los eventos de la vida son meras casualidades. Daría igual tener fe en la

suerte que confiar en Dios. Nuestro futuro no depende de los azares del destino

cómo si nuestro Señor no tuviera el control de todo.

 Me llamó la atención el concepto de voluntad de mandamiento y voluntad de

propósito. Si no fuera por su voluntad de mandamientos, al hombre no le sería

permitido pecar. Si no fuera por Su voluntad de propósitos, no tendríamos

confianza de que Dios pueda cumplir con sus promesas.

 No sabía los motivos bíblicos para excomulgar a alguien de la iglesia y son los

siguientes: Provocar divisiones, Tito 3:10; herejía, Ro. 16:17; pecado grave y

persistente, 1ª Cor.5:9-13

2. ¿Qué falacias, contradicciones encontré en el texto?

 El autor del libro hace la siguiente afirmación: En lo que diferimos de los judíos es

en el método de obtener esta justicia. Ellos creen que se obtiene guardando la Ley.

Nosotros creemos que se obtiene como un don gratuito de Dios por la fe en Cristo.

Aquí se puede observar una falacia de generalización, ya que no todos los judíos

piensan de este modo, por la razón, de que algunos son judíos cristianos y no

comparten ese pensamiento con los judíos judaizantes.


3. ¿Qué aprendizaje le genera el texto a nivel personal?

 La doctrina de la preservación de Dios en vida, siempre me lleva a reconocer que

todo mi ser le pertenece a Él, que nada hay en mí para que Cristo me ame más de lo

que ya lo hace. Su salvación es tan segura e inmutable, nada ni nadie puede

arrebatarme de sus brazos.

 Nunca había visto las doctrinas de la gracias unidas con el pacto de gracia y

realmente fue algo que me edificó, ya que pude meditar en ello, analizando cómo

nuestra salvación es un acto sublime de nuestro Dios.

 El sacrificio de Jesús es la única causa eficaz de la salvación de los elegidos. La

crucifixión no sólo proveyó la salvación, sino que también la cumplió. Gloriosa

salvación la que Dios ha dado a su pueblo. Mi corazón ha sido cautivado por el

amor de Cristo, yo siendo un pecador merecía la muerte, pero Él en su gracia me ha

dado vida eterna.

4. ¿Qué preguntas le genera el texto?

 ¿A qué se refiere el autor cuando habla de una justicia poética?

 ¿En nuestro tiempo hay iglesias que practican la excomunión?

 ¿Qué pasa cuando una persona es excomulgada y no se quiere ir de la iglesia y

tampoco arrepentirse?

Principales conclusiones:

 Si para Dios no es difícil cambiar el curso de un río, entonces tampoco es difícil

cambiar el corazón de un rey. Y si puede cambiar hasta el corazón de un rey, cuanto

más a los hombres comunes y corrientes.


 Como pastor, te costará aclarar esto de la Incapacidad del hombre a tu

congregación. Pero vale la pena insistir. Dios usará tus enseñanzas para revelar a

algunos lo que es la gracia de Dios en verdad. Les darás así una preciosa joya que

les enriquecerá toda la vida.

 La Justificación es un acto absoluto e invariable. Por eso un gran Apóstol no es más

justificado que un recién nacido en Cristo. Claro, habrá una diferencia enorme entre

ellos en el grado de santificación. Pero no en Justificación. En el cielo no seremos

más justificados que ahora. Más santificados, sí. Pero no más justificados.

 Aunque los conceptos de predestinación y elección son semejantes, no son

exactamente iguales. La elección encierra la decisión divina de salvar a algunos; en

cambio la predestinación se refiere al poder de Dios para arreglar las circunstancias

a fin de cumplir con Sus decretos.

 Cuando prediques la Cruz, di que Jesús es un Salvador eficaz. Su Cruz garantiza

una salvación segura para todo creyente. Es la certeza de la perfección futura.

Explícales que las palabras finales de Cristo “Consumado es”, significan una

salvación completa a la cual no se puede contribuir nada. Todo es por gracia.

Referencias bibliográficas:

 C.S. Lewis, en Gathered Golden.

 The Bondage of The Will, Juan Calvino.

 Benjamin B. Warfield en “Gathered Gold”.

 Gathered Gold”, John Blanchaard.

 Johns, Kenneth “Election: Love Before Time”


 Packer, J.I.: Ensayo Introductorio a “Death of Death”

 Boettner, Loraine: The Reformed Doctrine of Presdestination.

Autor del rae: Andrés Felipe Mena Álvarez


Título: Institución de la religión cristiana

Autor del documento: Juan Calvino

Referencia del documento: Institución de la religión cristiana, 2012, Juan Calvino, Grand

Rapids, MI. Libros Desafíos.

Palabras claves: Piedad, aflicción, eternidad, Dios, Cristo, paciencia, prójimo, cristiano,

Espíritu Santo.

Palabras nuevas:

Prolijo: Que se lleva a cabo con detenimiento en los más pequeños detalles

Intemperancia: Falta de templanza o moderación

Magnánimo: Que tiene noble temperamento y grandeza de espíritu y se comporta con

generosidad.

Ufanos: Que presume de sí mismo o se muestra orgulloso de poseer cierta cosa o de ser

algo.

Inenarrable: Que es tan grande, intenso o extraordinario que no puede ser expresado o

descrito.

Molicie: Comodidad y regalo moralmente excesivos en la manera de vivir


Opípara: Que es copioso y espléndido.

Porcentaje de lectura: 100%

Tipo de trabajo: libro

Resumen
El propósito de la regeneración en la vida del creyente es que sea algo evidente, de este

modo teniendo la seguridad de que ha sido adoptado por Dios mediante la obra de Cristo.

La Escritura presenta numerosas y buenas razones para que el ser humano ame el bien,

ahora el creyente ama la santidad porque Dios es santo. Así como Dios no tiene ninguna

relación con la iniquidad y la impureza, el creyente debe parecerse a Dios, porque le

pertenece.

La Escritura conduce al cristiano a una fuente de exhortación, ya que ella no solo

manda a todo creyente a poner toda su vida en relación con Dios, que es su Autor, sino que,

después de advertir que ellos eran degenerados en relación con lo que eran en la creación,

añade que Cristo, al reconciliarlos con Dios su Padre, dio un ejemplo de integridad, cuya

imagen debe manifestarse en la vida de los creyentes. Ahora Pablo niega que nadie puede

de veras conocer a Cristo sin haber aprendido a despojarse del viejo hombre, que está

viciado a los deseos engañosos.

La misión de todo creyente es ofrecer su cuerpo en sacrificio vivo, santo y agradable a

Dios. El cristiano está llamado a negarse a sí mismo y de esta manera servir al prójimo en

amor y humildad, recordando que todo ser humano fue hecho a la imagen de Dios y por lo

cual, tiene dignidad, no teniendo en menos a la persona que socorre o le pide su ayuda. El
creyente debe ponerse en las manos de Dios, para que Él domine y someta todos los afectos

de sus corazones, sería algo necio que los que profesan ser cristianos anhelen lo que los

hace más miserables. Por el este motivo, cada creyente debe tener su mirada puesta en

Dios.

Dios exhibe la fragilidad y debilidad del creyente, para que este aprenda a implorar la

virtud de la potencia que hay en Dios, la cual es capaz de mantenerlos firmes y hacer que

no sucumban bajo el peso de las aflicciones. Ahora las aflicciones son necesarias en la vida

del creyente, para que por medios de esta aprenda a confiar en Dios y fortalecer su

obediencia. La cruz de Cristo atestigua el inmutable amor de Dios, por tal motivo, la

aflicción del creyente no es para destrucción, sino para librarlo de la condenación de este

mundo.

Cada azote que recibe el fiel no lo lleva a un estado peor, sino que aprovecha esto para

enmendarse, ellos, los seguidores de Cristo tienen una mejor patria, un tesoro inmarcesible,

aunque en este mundo se les sea quitado todo, su herencia está en Cristo. Ellos no son como

los llamados estoicos que son insensible, el cristiano es una persona que siente y en sus

momentos de dolor recibe consuelo de su Padre Celestial. Por cual el creyente entiende que

esta vida está llena de inquietud, de perturbaciones, y de toda clase de tribulaciones y

calamidades; que todos los bienes de esta vida son inciertos, transitorios, vanos y

mezclados de muchos males y sin sabores.

Ahora, el creyente ha entendido que en esta tierra no debe buscar ni esperar más que

lucha. Él debe levantar sus ojos al cielo cuando se trata de conseguir la victoria y la corona,

meditando en la vida futura que le aguarda. Así que el cristiano se desprende de todo amor
que tenga por este mundo, porque sabe que solo es un peregrino, no teniendo miedo a la

muerte, sino deseando la resurrección y la gloria; transcendiendo a las perspectivas de todas

las cosas de esta vida.

Dios ha creado los dones para el bien de los creyentes y no para daño alguno. Todos los

bienes que creo Dios es con el fin de que el hombre reconozca que vienen de Él, dándole

gracias por su benignidad. Aquellas personas que tienen pocos recursos económicos deben

sobrellevar con paciencia su pobreza, para que no se vean atormentados por la evidencia.

Cada cristiano de anhelar apuntar hacia la perfección de Dios.

Cada creyente debe vivir de una manera piadosa, renunciado a todo deseo mundano,

alejándose de aquello que lo desvía de un verdadero temor hacia Dios. Todo cristiano debe

ser sobrio, teniendo domino propio, siendo equitativo en sus relaciones con el prójimo, para

dar a cada uno lo que le pertenece, por este motivo, la piedad cristiana llama a los hijos de

Dios a verdadera santidad.

Para conocer a Cristo se debe tener verdadera comunión con Él, por lo cual, la doctrina

para que sea útil y frutífera en la vida de los cristianos tiene que estar enteramente en sus

corazones y se manifiesta con poder en sus vidas para transformación de su naturaleza, el

Espíritu Santo los ha consagrado y hecho sus templos.


5. ¿Qué elementos abordados por el texto le parecieron interesantes? ¿Por qué

razón?

 Me llamó la atención la exhortación tan vehemente que hace Juan Calvino

respecto a amar al prójimo y cómo esto muestra nuestra vida de piedad, él

afirma lo siguiente: Las Escrituras nos advierte que todos nuestros bienes y

mercedes que hemos recibido de Dios nos han sido entregados con la condición

de que contribuyamos al bien común de la Iglesia; y, por tanto, que el uso

legítimo de todos estos bienes lleva consigo comunicarlos amistosa y

liberalmente con nuestro prójimo.

 Debemos considerar en los hombres más que la imagen de Dios, a la cual

debemos toda honra y amor; y singularmente debemos considerarla en los de "la

familia de la fe" (Gal. 6:10), en cuanto es en ellos renovada y restaurada por el

Espíritu de Cristo. Esto me llamó la atención y fue realmente confrontador para

mí, ya que muchas veces he tratado a mi prójimo con desdén, hasta el punto de

humillarlos con mi palabra y hacerlos sentir mal.

 La meditación sobre la vida futura a veces es algo que despejamos de nuestra

mente y me quede absorto en la afirmación que hace Juan Calvino: Por tanto,

sea cual sea el género de tribulación que nos aflija, siempre debemos tener
presente este fin: acostumbrarnos a menospreciar esta vida presente, y de esta

manera incitarnos a meditar en la vida futura.

6. ¿Qué falacias, contradicciones encontré en el texto?

 Juan Calvino afirma que se debe tener esta vida como algo fútil, pero después

aboga afirmando que no se debe menospreciar. La objeción que quiero hacer

sobre esta idea de Calvino es que no hay una claridad sobre la vida que el

creyente debe menospreciar, ya que no se plantea una correcta definición de esta

palabra. La dificultad está en que la palabra vida tiene demasiados significados.

No creo que sea correcto afirmar que se debe menospreciar la vida desde el

ámbito biológico, más bien creo que lo que el cristiano debe hacer es apreciar

más la eternidad que la efimeridad. La vida es preciosa por cuanto ha sido

otorgada por Dios como un don y con un propósito especifico.

7. ¿Qué aprendizaje le genera el texto a nivel personal?

 Sería un necio despropósito apetecer lo que nos hará más miserables. Muchas veces

he anhelado cosas que me hacen daño, que me aparta de Dios, pero eso solo

demuestra la necedad de mi ser. Y al leer esa corta frase puede dar gracias a Dios,

porque a pesar de todo Él me ha sostenido.

 Si alguna cosa le sucediera felizmente, no la atribuirá a sí mismo, a su diligencia,

habilidad y buena fortuna, sino que reconocerá a Dios como autor y a Él se lo

agradecerá. Esto me lleva a meditar sobre lo Soberano que es Dios y que todo lo

que hago en mi vida debe ser para su gloria, no para saciar mi ego y demostrar que
soy mejor que alguien, sino simplemente para mostrar que ya no vivo para mí, sino

para aquel que me salvó

 Meditar sobre el poder que yace en la obra de Cristo, ya que Calvino afirma lo

siguiente: En una palabra: la cruz de Cristo triunfa de verdad en el corazón de los

fieles contra el Diablo, contra la carne, contra el pecado y contra los impíos. Esto es

algo maravillo ¿Quién puede litigar contra nuestro Rey y Señor? Nada puede igualar

el poder de Aquel que lo ha hecho todo.

8. ¿Qué preguntas le genera el texto?

 ¿Por qué algunos creyente son más afligidos que otros?

 ¿Por qué en este tiempo se ha perdido en cierta parte la piedad cristiana de amar

al prójimo y de ayudarlo, esto incluye al impío?

 ¿Por qué en este tiempo casi no se habla de piedad cristiana en el sentido que lo

plantea Juan Calvino?

Principales conclusiones:

 Cuando estábamos perdidos como ovejas descarriadas y dispersos en el laberinto de

este mundo, nos recogió y reunió junto a Él. Cuando se nos habla de comunión que

tenemos con debemos recordar que el vínculo para ella es la santidad.

 Debemos, pues, procurar, si deseamos ser discípulo de Cristo, que nuestro corazón

esté lleno de tal obediencia y reverencia de Dios, que sea suficiente para dominar y

subyugar todos los afectos contrarios a Él. Así, en cualquier tribulación en que nos

encontremos, aunque sea en la mayor angustia del mundo, no dejaremos a pesar de

todo de mantenernos dentro de la paciencia.


 En fin, si no tenemos presente nuestra vocación como una regla permanente, no

podrá existir concordia y correspondencia alguna entre las diversas partes de nuestra

vida. Por consiguiente, irá muy ordenada y dirigida la vida de aquel que no se aparta

de esta meta, porque nadie se atreverá, movido de su-temeridad, a intentar más de lo

que su vocación le permite, sabiendo perfectamente que no le es licito ir más allá·

de sus propios límites.

 En resumen, cada uno dentro de su modo de vivir, soportará las incomodidades, las

angustias, los pesares, si comprende que nadie lleva más carga que la que Dios pone

sobre sus espaldas.

Referencias bibliográficas:

 Cicerón, disputaciones tusculanas.

 Cicerón, los oficios.

 Séneca. cartas a Lucilio.

 Séneca, la providencia

 Catecismo de Heiderlberg.

 Agustín, la ciudad de Dios.

 Harmonie évangélique.

 Cartas a Lucilio.

Autor del rae: Andrés Felipe Mena Álvarez


Título: Historia del pensamiento cristiano

Autor del documento: Justo L. Gonzáles

Referencia del documento: Historia del pensamiento cristiano, 2010, Justo L. Gonzáles,

Viladecavalls, España. Clie.

Palabras claves: Agustín, Platón, doctrina neoplatónica, donatismo, predestinación,

maniqueísmo, teología, conversión, gracia.

Palabras nuevas:

Cimera: En heráldica, adorno que se pone sobre la cima del yelmo

Fragor: Ruido resonante y prolongado.

Gorjeaba: Hacer quiebros con la voz en la garganta

Contumeliosa: Afrentoso, ofensivo, injurioso

Subterfugio: Escapatoria o medio engañoso y hábil para solucionar una situación difícil
Indómito: Que es difícil de someter, guiar o controlar.

Incontrovertida: Que no puede ser controvertido o negado por ser muy evidente 

Efluvio: Cosa inmaterial que se considera que irradia de una cosa o una persona y que se

percibe alrededor de ella

Porcentaje de lectura: 100%

Tipo de trabajo: libro

Resumen
Agustín es el último de los padres de la antigüedad y el fundamento de toda la

teología de la edad media. En él convergen las principales corrientes del pensamiento

antiguo y de él fluye, no solo la escolástica medieval, sino buena parte de la teología

protestante del siglo XVI. Agustín, por lo tanto, es el fin de una era y el comienzo de otra.

Agustín nació en el año 354, en la ciudad de Tagaste. A sus diecisietes años se

dedicó solo al estudio de la retórica y también a una vida desordenada. Pero esto no fue un

obstáculo para que él continuara destacándose en el ejercicio de la retórica y pronto fue

tenido por uno de los más elocuentes de la ciudad. Aunque al leer el Hortensio de Cicerón

abandona la retórica pura y superficial y se lanza a la búsqueda de la verdad.

Agustín fue influenciado fuertemente por el maniqueísmo. La doctrina maniquea

sigue las enseñanzas del gnosticismo, intentando ofrecer una respuesta a la miseria de la

condición humana mediante una revelación que le da a conocer al ser humano su origen

divino y le libre de sus ataduras materiales. Él tuvo algunas razones para unirse a estos

maestros, ya que el maniqueísmo rechaza buena parte de Antiguo Testamento, y este le


había sido difícil de entender a San Agustín, pero con el paso del tiempo Agustín empezó a

tener dudas que sus maestros no pudieron resolver, cuando por fin llegó el día de conocer a

unos de los más famosos obispos maniqueos (Fausto de Mileva) la ocasión resulto en una

decepción tan grande que Agustín perdió su fe en el maniqueísmo.

La conversión de Agustín al cristianismo, que tuvo lugar poco después de su

descubrimiento del neoplatonicismo, combina elementos puramente racionales como otros

factores emocionales y, hasta podría decirse milagrosos. Fueron dos noticias de

conversiones semejantes a la que se requería de él las que llevaron a Agustín a la

vergüenza, la desesperación y, por último, la conversión. El primer caso fue el de Mario

Victorino, a quien Agustín admiraba por haber traducido al latín las obras de los

neoplatónicos. El otro caso le fue contado a Agustín por un oficial de la corte imperial, y se

trataba de la conversión de dos compañeros suyos. Pero esta historia conmovió de tal modo

a Agustín que huyó a un huerto y leyendo Romanos 13:13-14 se disiparon todas las

tinieblas de dudas que él poseía.

La carrera de Agustín como escritor se puede dividir en tres periodos. En el

primero, se ocupó principalmente de atacar y refutar a los maniqueos. Durante el segundo,

su preocupación eran los cismáticos donatistas; mientras que en el tercero su interés estaba

en los pelagianos. En el primer periodo, Agustín para confutar las enseñanzas de los

donatista escribe su obra la unidad de la iglesia y el bautismo contra los donatistas y contra

Gaudencio. Pero la gran controversia que llevó a San Agustín a forjar su pensamiento fue la

que sostuvo con el pelagianismo, permitiéndole formular sus doctrinas de la gracia y la

predestinación.
Pelagio, quien dio nombre al pelagianismo se sentía violentamente indignado de

como Agustín hacia depender todo de la gracia de Dios y no parecía dejar sitio al esfuerzo

y a la participación humana. Al parecer, la teología de Pelagio es una reacción contra el

determinismo moral del maniqueísmo, por lo cual Agustín escribió su obra el libre albedrío.

La diferencia entre Agustín y Pelagio es que el primero no estaba dispuesto abandonar la

necesidad de la gracia, aun en defensa de la libertad, mientras que Pelagio veía en la

doctrina de la gracia de su contrincante una amenaza a la libertad y de la responsabilidad

humana.

Además de esto Agustín compuso cuatro obras que merecen mención especial: el

Enchiridión, el tratado sobre la santísima trinidad, la ciudad de Dios, y las Retractaciones.

Ahora su concepto de la verdad lo lleva a desembocar directamente en la existencia de

Dios. Aunque no deja de recurrir a otros argumentos cuando la ocasión se le presenta, el

santo de Hipona recalca especialmente la prueba de la existencia de Dios a partir de la

existencia de la verdad. Para él Dios Trino es el Creador de todo lo que existe. Afirmando

que Dios ha hecho el universo de la nada, y no de su propia sustancia ni de una materia

eterna.

Para San Agustín el mal no era una naturaleza; no es algo; no es una criatura. El mal

es una privación del bien. Siendo el mal una realidad incontrovertida, una pérdida de la

bondad. Para él el hombre fue creado en un estado donde poder de no pecar como el poder

de pecar, pero en la caída el hombre perdió su libertad para no pecar. La gracia no es una

oposición para la voluntad. No se trata de que la gracia obliga al ser humano a tomar una

decisión en contra de su voluntad. Se trata más bien de que Dios en su gracia, mueve la
voluntad, la fortalece y la estimula, para que ella misma, sin coerción alguna, opte por el

bien.

Para Agustín de Hipona la gracia de Dios llega por medio de Jesucristo, en la

comunión de la iglesia, mediante los sacramentos. En cuanto a la escatología de San

Agustín es bastante tradicional, aunque presentan problemas de interpretación. Su

pensamiento escatológica nunca pierde el sentido del misterio. Agustín muere a sus setenta

y seis años, en la ciudad de Hipona.

9. ¿Qué elementos abordados por el texto le parecieron interesantes? ¿Por qué

razón?

 Primeramente, conocer el pensamiento de la predestinación de San Agustín, porque

no había tenido la oportunidad de estudiarlo a profundidad, sino simplemente

escucharlo de manera simplista, pero ahora sé que, según Agustín, la predestinación

de algunos para la gloria es una verdad indudable, aunque sea al mismo tiempo un

misterio inexplicable. Esta predestinación es tal que el número de los elegidos es

fijo, de tal modo que, por mucho que la Iglesia crezca, el número de los que han de

entrar al Reino será siempre el mismo.

 Segundo, no sabía que Agustín tenía un concepto un poco diferente sobre la gracia

de Dios, pero a pesar de esto siempre mantuvo un balance con la voluntad humana,

declarando que mediante ella Dios mueve la voluntad no bajo coerción alguna, para

que el hombre opte por el bien.


 Tercero, me pareció interesante el concepto de las verdades inmutables y las cuales

la mente humana tiene el poder de percibirlas. Y como todas estas verdades nos dan

a conocer de manera absolutamente indubitable la existencia de una Verdad

perfecta, que no puede ser creación de nuestra mente ni de todas las mentes del

universo.

10. ¿Qué falacias, contradicciones encontré en el texto?

 El autor Justo Gonzales afirma lo siguiente: Agustín es el último de los padres

de la antigüedad y el fundamento de toda la teología latina de la Edad Media.

Sinceramente esta es una afirmación muy exagerada, y dejaría de lado los

muchos pensadores cristianos que surgieron durante la edad media (la cual

cubre un periodo de tiempo bastante largo) Agustín juega un papel prominente

debido a

sus aportes y sus profundas reflexiones sobre temas teológicos, pero por esto no

se debería dejar a un lado el aporte de los teólogos medievales que habrían de

surgir luego.

 El autor Justo Gonzales también afirma que toda persona culta debería de leer

las confesiones de San Agustín. Pero ciertamente el leer este libro no hace

menos culta a una persona, ahora la palabra culta significa una persona que tiene

cultura y ciertamente esta palabra se utiliza en referencias de varias disciplinas

como historia, la geografía o la literatura. Por lo cual, no solo se debe utilizar

esta palabra plenamente para la literatura. Por otra parte, también excluye a

ciertas personas a leer la obra de Agustín.


11. ¿Qué aprendizaje le genera el texto a nivel personal?

 El pecador no se salva a sí mismo; pero tampoco es salvado contra su voluntad.

Ni la gracia de Dios sola, ni él solo, sino la gracia de Dios con él. Esto

ciertamente, me llevó a meditar sobre la soberanía de Dios en mi vida y la

responsabilidad que tengo delante de Él, ya que muchas veces empezamos a

hacer a un lado nuestra responsabilidad.

 Los elegidos son arrancados de la «masa de perdición» que es la humanidad por

un acto del Dios soberano, que les predestinó para ello. Es hermoso poder

reflexionar en el acto sublime de la salvación, porque del mismo modo que Dios

ha decido salvarme, también ha decido preservarme y esto me lleva a gozarme

en las palabra de nuestro Señor Jesucristo cuando dice: Mis ovejas oyen mi voz,

y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás,

ni nadie las arrebatará de mi mano (Jn 10:27-28).

12. ¿Qué preguntas le genera el texto?

 ¿Podemos decir que el concepto de predestinación de San Agustín estuvo

influenciado por la doctrina neoplatónica?

 ¿Algunas iglesia todavía conservan ciertas prácticas del donatismo?

 ¿En qué consiste el concepto de la gracia de Agustín el cual difiere con el del

Nuevo Testamento, ya que el autor del libro no explica el asunto con claridad?

Principales conclusiones:
 Agustín acepta la doctrina del mundo inteligible en el cual están las realidades

eternas, solo que esas realidades no están como en Platón, por encima del Creador,

sino que son las ideas que existen eternamente en la mente divina.

 Este Dios es eterno, trascendente, infinito y perfecto. Como luz suprema, es la razón

de todo conocimiento. Como bien supremo, es la meta hacia la que debe dirigirse la

voluntad humana.

 Es necesario afirmar que todo cuanto existe procede de Dios.

 Además, la doctrina de la predestinación que Agustín propone es infralapsaria, y es

además la de una predestinación «sencilla», es decir, solo para salvación, a

diferencia de la predestinación según Calvino, que es supralapsaria y «doble».

 Roma y todos los demás imperios, como expresión de la ciudad terrena, tenían que

sucumbir. Si llegaron a ser grandes y poderosos, fue porque así le plugo a Dios. En

el caso de Roma, Dios le dio su señorío para que hubiese la paz necesaria para la

propagación del Evangelio, pero una vez que esa misión histórica se realizó Roma

cayó víctima de su propio pecado e idolatría. Tal ha sido y será siempre el destino

de los imperios humanos, hasta que se cumplan los tiempos.

Referencias bibliográficas:

 A guide to the Thought of Saint Augustine.

 Las Confesiones de Agustín.

 Augustine of Hippo: A Biography.

 The Gnostic Manichaean Tradition in Roman Africa.

 Christianisme et Néoplatonisme dans la formation de Saint Augustin.


 E. Hendrik, Augustins Vcrhiütnis zur Mystik: Eine patristischc Untersuchung.

 The Donatist Church: A Movcment of Protest in Roman North Africa.

Autor del rae: Andrés Felipe Mena Álvarez

También podría gustarte