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CUE NT O S

ECOLÓGICOS

SENSIBILIDAD – CONCIENCIA – ESPERANZA

NILTON ALEX CASTILLO PONCIANO


ELOISA MARUJA ALBERTO VILCA

¡El lugar donde vivimos lo cuidamos todos…!


“Sé el cambio que quieres ver en el mundo” (Mahatma Gandhi)
INDICE

1. REDONDETA
2. OZONO EN LAS ALTURAS
3. LOS LÍDERES DEL BOSQUE
4. ESPERANZA EN BUENO
5. PLASTIK EN LA BASURALEZA
6. TAURINO EN EL CIRCULAR
7. SAMUEL Y LA NINFA EN EL ARROYO
8. MISTERIOSO MAJAS
9. UN LARGO VIAJE
10. EL GIGANTE CLEMENTÍN
11. SORPRENDIDO CAZADOR
12. EL HOMBRE Y SU NATURALEZA
13. LA DONCELLA DEL RÍO
14. CABEZA SOBRE LA BOCA
15. CANGREJIN EL CUIDADOR AMBIENTAL
16. OZONITO EL ÁNGEL PROTECTOR
17. LA HUELLA MAL OLIENTE
18. LA MÁGICA DEL RIO
19. SÚPER DELFINCITO
20. LA SOBREVIVENCIA
21. CURANSEÑORA
22. ¿QUIÉN NOS HABLA?
PRÓLOGO

Es evidente que la época actual exige maneras distintas de pensar y actuar. Mucho se comenta sobre
los problemas socioambientales que aquejan a la humanidad y al planeta en general. Así fenómenos
como la contaminación del aire, el agua y la tierra han tomado dimensiones difíciles de controlar.
La pérdida de la biodiversidad, las especies en peligro de extinción, el calentamiento global y la tala
de los bosques son solo algunos de los muchos problemas ecológicos a los que nos enfrentamos.

Pues, estos problemas que aquejan al medio ambiente no pueden ser tratados por áreas curriculares
independientes, sino que es necesaria un enfoque interdisciplinar que permita reflexionar sobre
nuestra relación con el mundo natural, del cual nos hemos distanciado y adoptado una posición de
supremacía absoluta, considerando los problemas ajenos a nosotros, sin pensar que los causantes
directos somos nosotros.

La relación hombre – naturaleza en estos últimos tiempos ha entrado en crisis. Producto de la


pérdida del carácter ético ambiental, por lo que vivimos un mundo más riesgoso, con más consumo,
basura, población y pobreza; con menos biodiversidad, agua limpia, tierra fértil y capa de ozono.
Por lo que debemos alertarnos sobre el destino de nuestra especie, y crear conciencia al deterioro
ambiental que es irreversible. Que por cierto La cumbre de la Tierra de 1992, exhortó a la
humanidad a reducir su impacto sobre el planeta.

Entonces, la tarea más importante de la educación ambiental es educar en valores ambientales como
la solidaridad planetaria, la responsabilidad por el bien común y el respeto a toda forma de vida, a
las nuevas generaciones. Aristóteles consideraba las virtudes como disposiciones a actuar. Si
queremos sostener la vida en la tierra, debemos ser capaces de reconocer que una vida de calidad no
puede ignorar ni excluir a los demás habitantes del planeta. La educación ha de ser pues, la gran
impulsora al ejercicio de una ciudadanía ambiental responsable.

Por lo que es necesario contar con personas virtuosas: responsables, solidarias, dispuestas a sostener
la vida como bien básico. También tenemos con el ambiente una relación moral que implica educar
nuestros sentimientos de empatía, compasión, solidaridad y básicamente de la justicia.

Creo que no nos hemos dado bastante cuenta de los daños que causamos al ambiente y a sus
habitantes. Vivimos instalados en la posición de amos dominantes que disponen a voluntad de los
elementos naturales sin hacer nada para evitar su agotamiento.

Nos impulsa a la reflexión sobre la manera en que repercuten nuestras acciones en el medio
ambiente.

La responsabilidad y precaución devienen principios clave en nuestra relación hacia el medio


ambiente. Si no hay detrás una actitud de respeto, solidaridad, responsabilidad y un sentimiento de
humildad que nos permita aceptar que nuestros intereses cuentan y que nuestras pequeñas acciones
benefician a todos los seres vivos.
Más allá de los servicios que nos presta la naturaleza, tendríamos que atribuir valor ambiental, por
su contribución al bienestar psicológico, estético, y científico. Por lo que la tarea es preservar el
legado natural para futuras generaciones. Nuestro deber es pensar globalmente y actuar localmente.

Estamos convencidos que a través de los cuentos ecológicos podemos generalizar el conocimiento y
la acción ambiental. Naturalmente despertando la conciencia y el compromiso ecológico. Además
es imprescindible conspirar en la solución a los problemas socioambientales instaurando así una
nueva moral sociecológica que busca progresar con el principio de sostenibilidad.
INTRODUCCIÓN

La relación que tenemos con los cuentos es natural. Desde antes de nacer ya están ahí. Nuestros
oídos se desarrollan a los cinco meses de gestación y desde entonces empezamos a escuchar
historias; ahí comienza nuestro camino como lectores. Sin saber leer letras, leemos sonidos, ritmos
e imágenes.

Pues, por medio de la narración oral hemos contado y escuchado nuestras experiencias desde
tiempos inmemoriales. Por lo que son estrategias significativas que nos abren todo un abanico de
posibilidades creativas, pedagógicas y terapéuticas.

La creación literaria en torno a la vida cotidiana son verdaderas experiencias significativas, que
conlleva una serie de ventajas que potencia el crecimiento intelectual, emocional y social en las
personas. Unir el conocimiento con la creatividad, los procesos lógicos con los intuitivos, el
intelecto con el instinto y con las emociones, es el proceso de creación de la obra literaria y artística.

Los cuentos ecológicos crean contextos que permiten entender mejor su propio mundo. Además el
lector pueda confrontar con lo que ocurre a su alrededor. Y de esta manera va adquiriendo un nivel
favorable de conciencia ambiental, así como valores y actitudes positivas. Teniendo así un eco
directo en su vida.

Estos cuentos ecológicos son como espejos, ya que, a través de ellos, puede identificarse y
reconocerse los problemas socioambientales en las historias de los personajes que las pueblan,
viviendo sus alegrías y tristezas, y compartiendo la solución de sus problemas y conflictos.

Cada uno de estos cuentos ecológicos nos proporciona información que nutre determinados
aspectos del desarrollo potencial humano.

Es por ello que a través de los cuentos ecológicos, las personas alcanzan a comprender mejor el
mundo natural y a sí mismos, a través de fenómenos intrapsíquicos proyectivos y de identificación,
que les brindan apoyo y seguridad para desenvolverse luego en la vida real.

El propósito que busca esta obra es crear sensibilidad y una mayor conciencia en sí mismo a través
de un camino de autoconocimiento, de integración y de transformación; dejando de lado el
condicionamiento del falso ego; y de esta manera actuar con patrones de convivencia sólida, basado
en valores y principios ambientales que encierra la educación ambiental.
REDONDETA

Cuentan los científicos que un planeta “Theia” fue la génesis para la vida en el mundo. Todo
ocurrió por las deidades que rigen al cosmos. Millones de años “Theia” seguía sigilosamente detrás
de un protoplaneta insignificante llamada “Gea”, que hoy es nuestro globo terráqueo. Pues, por
voluntad de los dioses un día menos esperado “Theia” chocó oblicuamente, sin llegar a destruir al
pseudoplaneta “Gea”. Por lo que “Theia” se desbarata, su coraza salió disparada al espacio, dando
lugar a una fiel compañera, la luna; mientras que el resto de los elementos se mezcló y condensó en
el corazón de la joven “Gea”. Este choque originó una inclinación causante de las estaciones.
“Gea” al ensamblarse con el resto vivo de “Theia”, se constituyó en escudos de cratones, con rocas
verdes, que darían lugar luego a los continentes. “Gea” evolucionaba enormemente, hasta
convertirse en “Terra”.

Había transcurrido cuatro mil años, que “Terra” se convierte en una “sopa orgánica” con
ingredientes básicos como: CO2, CH4, O2 y NH3, reaccionando éstas entre sí con catalizadores de
plasmas solares. Formando moléculas altamente primigenias; aparecieron protobiones y eubiones,
esto puso feliz al corazón de “Terra” afirmando ella: -¡Soy fecunda! ¡Soy capaz de originar vidas!
¡Soy tan afortunada! Gracias dioses del olimpo. A ti padre “Zeus”, También para “Afrodita” que
nos bendice con su amor, e inolvidable “Chronos” que permite en el tiempo ocurran sorpresas.

Tan rápido evolucionó los primeros seres vivos sobre “Terra”, paradójicamente la protagonista
conocida como “oxigénica” responsable de purificar la atmósfera en “Terra”, originar la capa de
ozono protector de UV, y alfombrar a “Terra” de color verde. Todo un hogar espléndido que
albergaría después de las glaciaciones a la gran biodiversidad de flora y fauna.

Chronos anunció la colonización de la vida por el ancho mundo del actual “Redondeta”, algunos
prefirieron aventurarse por los océanos y mares; otros eligieron poblar ecosistemas terrestres. Así
venía ocurriendo el ciclo evolutivo de la vida en “Redondeta”, siempre éste último con poder en la
variación genética evolutiva de las especies. Por otro, las extinciones masivas por factores adversos,
como: la glaciación (enfriamiento global); evento volcánico; caída de meteorito (península de
Yucatán); la Pangea (Laurasia y Gondwana).

“Redondeta”, un planeta bendecido por los dioses, albergaba tanta vida. Un matiz colorido lleno de
gran biodiversidad.

“Redondeta” un planeta esperanzador sigue orbitando la planicie del cosmos. Hace referencia: -Ya
han transcurrido seis millones de años, que el chimpancé pigmeo formó su árbol familiar. Su
descendiente el popular primate “Bonobo”, uno de los ancestros más antiguos que dio vástagos; por
allá de las sábanas africanas la evolución de éstos originó el “Homos sapiens”, un grupo
diversificado y exitoso. El primer representante real en “Redondeta” por su gran cerebro y
habilidades. Admirable criatura por un lenguaje sofisticado a otros animales.

“Redondeta” se sentía orgullosa por albergar a un animal racional.


Este mundo lleno de esplendor; fue entregado a la raza distinta elocuente, para su administración
por el resto de sus días. Se consolidaba un vínculo de fraternidad entre “Redondeta” y el primate
sapiente. Así que siempre tenían que agradecerse el uno al otro, por depender ambos de una
simbiosis existencial.
El primate replica con libertad: -¡Oh plenitud! ¡Oh hermosura de la vida! ¡Oh esfera mágica! Tú
“Redondeta” hecha por la voluntad de los dioses. Siempre estarás conmigo por la voluntad de
Chronos.

“Redondeta” en aquel tiempo era grata, hermosa y perfecta; pues para entonces todo era paz y
armonía. Vivir aquí era dulce, el cielo azulino los cobija con amor, el dulzor de trinos alegran a los
inquilinos por habitar.

-¡Bien!, gritaba y reía el primate moviéndose por los continentes de “Redondeta”; se puebla el
mundo, se urden los destinos de éstos monos locos. No podían quejarse en absoluto de nada. Todo
lo tenían en sus manos. Ya alimentos frescos listos al paladar, agua pura lista para mitigar la sed.

Al cabo de algún tiempo, la especie racional tomó posesión de “Redondeta” en gran medida.

Ahora en “Redondeta” la naciente civilización tiene origen por los descendientes del Bonobo. Los
humanos, sediento de transformaciones del mundo natural. Atrapada en su lujuria codiciosa,
cargado de frustración, impuesto al negativismo, el cinismo y la desesperación.

La marea de la industrialización empezó a extenderse por el ancho verdor, transformando todo a su


paso, básicamente los ecosistemas. Período de cambios vertiginosos, desilusión y conflicto casi
fratricida en la “Redondeta”, era ya de sentir.

Hombres ciegos tratan de sofocarla a “Redondeta” con sus formas distintas de vivir, trabajar, actuar
y pensar; por explosivos tiempos. Decían algunos dioses en la lejanía del cielo.

Décadas venideras rebosen de agitación, turbulencia y quizá hasta de violencia generalizada a


nuestra “Redondeta”, ésta se precipita hacia el estremecimiento de su último cataclismo.
Continuaban comentando algunos dioses.

Sí, durante muchos años los representantes del sol, del viento, del agua y del suelo no hicieron
absolutamente nada; fue ahora cuando con enojo penetró rugiente al oído sordo de los monos locos.
¡La muerte viene! ¡La hambruna los matará! ¡Los dioses no tendrán piedad de ustedes animales sin
corazón! A viva voz continuaban: -Bastante tiempo sometieron a “Redondeta” a una
industrialización tecnológica abusiva de explotación irracional a los recursos naturales acuáticos y
terrestres otorgados.

“Redondeta” algo incomoda expresa: -El ritmo de la tecnología, las transacciones y la vida
cotidiana del consumismo generan el smog fotoquímico. La contaminación ambiental pone en
riesgo la supervivencia de la humanidad. Se pronostica un futuro indeterminado. Las sociedades de
animales irracionales reclaman sobre las actividades destructivas del hombre; sobre su habitad que
cuelga sobre un hilo al filo de la destrucción. La muerte viene, todo será polvo nuevamente.

Si el hombre había pensado en cuidar su naturaleza, pronto lo olvidó. Primó más el poder de su
ambición. Ya los dioses lo tenían a la vista al destructible sapiente. Solo “Redondeta” atinaba decir
con resentimiento: -¡Qué atrevimiento! ¡Cuán malo es! ¡Canalla! ¡Desgraciado de mí! ¡Me ha
puesto en destrucción! ¡Que no lo vea nunca más! ¡Oh, Dioses del olimpo dueños del universo!
Castigar a estos desleales que rompieron las reglas que rigen al ambiente.
Ante el sufrimiento de “Redondeta”, los dioses del olimpo planearon darles una lección de vida a
los “Homos sapiens”. El suelo invocó al Dios Vulcano, para azotar con fuego desde las inmensas
montañas; el Dios Apolo dejó caer radiaciones solares que dejaba en sequia todo a su paso; el
famoso Poseidón con la bravura de sus olas frustraba el ciclo del agua, sed y hambruna corría por
los continentes; por su cuenta el Dios Démeter hacia infértil al suelo, hambre y necedad se
escuchaba en sus estómagos de los monos locos; el Dios Hestia desintegraba los hogares, las
familias padecían el síndrome de separación y olvido a sus parientes; ya Zeus el Dios del cielo
permitía que se nublase de gases de efecto invernadero al compás de los truenos con lluvias
ausentes; más la sabia Diosa Atenea le iba quitando el poder de la razón hasta convertirse en la
criatura que fue antes de su evolución diferenciada.

Sin saber que hacer las masas humanas se lamentaban por las situaciones que atravesaban, las
tempestades amenazaban sus vidas.

Algunas segregaciones humanas invocaban piedad al Dios Viracocha, que calmara su ira. Voces se
escuchaba oír: -Dios Inti deja de abrasarnos con tus rayos solares, ya nuestra piel está dañada; Diosa
Mama Quilla danos sombra, ponte al centro entre el sol y la Tierra; Diosa Mama Cocha tenemos
sed, suelta el ciclo del agua, tus olas lo mantienen atrapadas; diosa Pacha Mama calma nuestra
hambre, has fértil nuestro suelo; Dios Apu ya no llores que tus lágrimas de fuego lastiman las faldas
de tu montaña; Dios Pariacaca sopla fuerte para que los gases de efecto invernadero disminuyan, y
deja caer tus lágrimas de lluvia; Diosa Coco Mama restablezca la felicidad en mi hogar y la salud de
todo lo que habita aquí.

Creo que ya aprendieron estos monos locos de la Tierra, se lograba escuchar en la junta de los
dioses del olimpo. La Diosa Afrodita se responsabilizó para dar orden al hombre: - ¡Puesto que han
dejado caer maldiciones al ambiente, irán a solucionarlo ahora! Y si no hacen nada los Dioses
dejaran caer su ira con consecuencias fatales.

Así, por el amor que los tengo deben de emplear la tecnología que tanto les gusta; pues éste será la
herramienta que soluciona los problemas ambientales. Además, promoverás la reforestación; el
principio del hogar será emplear las 3’Rs básicas; realizarás el ordenamiento territorial; deberán
practicar el uso ecoeficiente de los recursos naturales; en su corazón estará el amor a la naturaleza.

Por el contrario el Dios Viracocha mandó sembrar cinco plantas en cada uno de los hogares, estas
plantas debían tener su nombre. “Amor a la naturaleza”; “Cuidado de la naturaleza”; “Respeto a la
naturaleza” y “Paz y armonía en la naturaleza”.

Actualmente las descendencias de los Bonobos vienen realizando grandes esfuerzos para reducir los
problemas socioambientales que habéis generado por el poder de su codicia. Siempre con el
compromiso asignado: -“Te salvaré Redondeta, aunque me cueste la vida”.
CABEZA SOBRE LA BOCA

Cuentan hace más de dos décadas hacia atrás, en este mediano intervalo de tiempo, habían
aparecido sobre los suelos de este planeta, tantas bocas que venían provocando un fuerte deterioro
medioambiental.

Fueron señaladas y bautizadas como las “Bocas del Tercer Mundo”. Allí las responsables de la
pérdida de bosques y especies, la contaminación de lagos, ríos y océanos, la acumulación de gases
invernadero y destrucción de la capa de ozono, este último preservadora de la vida terrestre. Estas
“Bocas” insatisfechas hacían pesadas sus conciencias.

Véase, este mundo rodeado de detritos. Allí donde va una boca feroz con amor, con que diligencia y
entusiasmo. Donde florecen los plásticos, brotan los envoltorios, centellean los vidrios rotos cual
auténticas joyas, proliferan los envases descartables y los trapos. En suma engorda de gusto a las
codiciosas “Bocas”.

Pues estas “Bocas” con pasión honda, con mucho sacrificio y esfuerzo; yendo de puntillas, a mitad
de la noche, un retrete cargado a la espalda, hacían de este mundo mugres habituales. Toneladas de
escombros, ya una nevera rota, una lavadora vieja, la carcasa de un coche. Brotaban por las
mañanas en campos y cunetas de este ancho mundo.

Para ser exactos, en el Tercer Mundo se cultiva el quiste en abundancia. Algunas bocas vacilaban,
para que abunde, para que sea endémica, hay que mantener el ciclo de la basura.

Por ahí, una cabeza del Primer Mundo, expresa: ¡Ya, va siendo hora de que afronten sus verdades!

Por ahí no faltó una dulce “Boca”, atrevida y escupe. ¡Amigo mío, lo que sucede es que no la
vemos!

¿Qué, así?, ¡Como los daltónicos no perciben los colores del espectro! Lo enfrentaba la “Cabeza”.

La “Boca” nada quieta. Por suerte sufrimos de extraña ceguera selectiva, no vemos los desperdicios
que nos circunda.

Repicó la “Cabeza”. Puede ser, ¡Quizás milenios de acondicionamiento cultural, los han
acostumbrado a vivir como puercos!

Unas “Bocas” reunidas decían: -¡Pero, nuestros hogares están pulcros!

¡Oh! Claro, limpian hasta dejarlo sin mácula sus espacios y arrojando después toda la basura
acumulada por encima de la valla, sobre las calles. Sólo su espacio es importante para ustedes. El
resto, el ancho mundo, es un lugar ajeno y enemigo. Y así no parece que les quepa en la cabeza el
respeto el respeto al vecino, ni la conciencia de que pertenecemos a este planeta. Fuera de ustedes
mismos, nada existe. La cabeza indignada continúa…
No parece importarles vivir entre la inmundicia, con tal de que ese detritos no esté en el estricto
trocito del planeta del que son propietarios. ¡Tanta indiferencia asusta! Los amantes de las basuras,
¡Ay!, son feroces.
Las “Bocas” algo pasmadas murmuran… ¡Hummm! Creo que tiene mucha razón la “Cabeza” del
Primer Mundo.

Así transitaron varias décadas, sin las “Bocas” hacer absolutamente nada, por su Tercer Mundo.
Que se acumula de detritos arduamente y afectando considerablemente su capa terrestre.

Un día, cuando salía a calmar su hambre la deslenguada, la más señalada por las Bocas refinadas
con desprecio único. Se apoderó un pensamiento brillante que trabo su lengua al expresar. En eso,
se escuchó decir: “A río revuelto ganancia de pescadores”. Todo esto al ser observada en las calles,
grandes cantidades de descartables que las inundaban.
Era la indicada, la “Boca” deslenguada abatida por la pobreza, se atrevió poner freno a esta plaga.
Se compró unos magnetófonos de bolsillo y un casette. Se convirtió en recicladora.

Las “Bocas” desubicadas, en el Tercer Mundo, promovían la vanidad, la moda, vivían para comprar
y luego desechar. Por lo que la basura se apoderaba del espacio urbano a un ritmo muy superior.

Esta abnegada del reciclaje, por las noches se echaba a las calles para recoger latas de refresco,
botellas vacías, bolsa de plástico, paquetes de cartón, con lo que puede obtener considerable soles.

Por el día, siempre perifoneaba lo que la “Cabeza” de Primer Mundo le sugirió. Así, sonaba las
calles mal humoradas. ¡Sí, no detienen el ritmo actual del consumo!, ¡Tercer Mundo se convertirá
en pocas décadas en el mayor basurero del mundo! ¡Cambié su hábito del usar y tirar!

Así, continuo su arduo proceder la “Boca” deslenguada, por una década posterior. En este periodo
de tiempo se sumaron muchas otras “Bocas” deslenguadas. Sumando esfuerzos para limpiar su
mundo.
OZONO EN LAS ALTURAS

Era substancial por cierto algo habitual, nada asombroso, ya por todos conocidos como oxígeno
(O2), indispensable para el respirar, que venía del vegetal para cubrir la tropósfera espacial.
En la Tierra nadie tenía ni la mínima sospecha de la existencia del hermano benéfico del oxígeno.
En sus orígenes éste hermano lucía una capa impermeable que rodeaba por doquier a nuestro
planeta, muy asombroso y extraordinario por proteger la vida territorial.
Los animales y el hombre vivían a una temperatura ambiental normal bajo una atmósfera celestial.
Sin saber de la existencia del hermano del oxígeno (O2), y más aún de su accionar.
Pues éste abrigo era prodigiosa al planeta por controlar las condiciones climáticas de la Tierra.
El oxígeno adoraba a su hermano de las alturas de rasgo físico disímil, pero con un corazón análogo
al oxígeno.

Estos se mantenían unidos con gran virtud de hermandad, giraban abrazados a la gran familia que
había constituido el hermano del oxígeno (O 2) allá en los cielos. Se sentían felices a tal
responsabilidad para la cual fueron creados. Ahí, la substancia gaseosa denso desodorizante azulado
el ozono (O3) obrero en el cielo, protector del mundo. Vacilaba algo jocoso su misión.

Habría trascurrido largos períodos de años, sin notar lo terrible que iba acontecer.

Algo alarmado el oxígeno sube hasta la estratósfera hogar de su hermano. Y con voz perdida llama,
¡Hermano! ¡Hermano “Ozono”!, ¿Qué estará pasando abajo en la Tierra?, mírame estoy percudido,
era incoloro e inodoro, pero huéleme, apesto a muerte. El ozono (O 3) asombrado responde. Aquí,
está pasando situaciones calamitosas, ya bastante tiempo nos ha inundado un gas insoportable que
está asfixiando a doquier y lo terrible es que la capa permeable ha sido perforada, y cada vez se
extiende este agujero que deja pasar elementos mortales para los que habitan en la Tierra.

Continua el ozono (O3), hermano oxígeno (O2) te invito a explorar tal agujero. Vamos entonces
respondió algo curioso. Al llegar al sitio observó un cráter abismal; gran lucha continua por reparar
y cerrar tal agujero. Se escucha ¡Vamos ya! purifica los oxígenos tanto atmosférico como
molecular y ensambla, luego cúbrelo con su manto electrizante, que formen cadenas para tapar tal
agujero, gritaba enérgico el capitán mayor, en una fábrica algo improvisada.

Voces venían a escuchar, no se puede tapar, tampoco recuperar, mi señor, ojala pudiéramos
reiniciar. Se está destruyendo, está creciendo, se está alterando el efecto invernadero. Cual soldados
en combate continúan. Muchos gases tóxicos nos invaden. ¡Alerta…! ¡Alerta!. Es el fin terrenal. El
ozono (O3) apenado sin saber qué hacer, despide a su hermano.

El oxígeno (O2) de regreso a tropósfera. ¿Qué tal sorpresa al llegar?, Toda la franja que limita su
hogar está cubierto de altas cantidades de gases de efecto invernadero enfadoso, las nubes negras,
relámpagos destellantes. Un descontrol en el equilibrio dinámico de la tropósfera, ya comenzó la
alteración del ciclo biogeoquímico, se sentía caer lluvia ácida, crecía alta concentración de
temperatura, invasión de emisiones infrarrojos y radiaciones ultravioletas. Todo esto origino el
cambio climático. El oxígeno (O2) aterrado fluía sin saber qué hacer.
En eso aparece Ozono (O3) su hermano con estupor ¡Oh, no! pregunto ¿Qué paso por aquí? es
calamitoso todo esto. Responde la substancia vital. Sí pues, toda la tropósfera está en reacción
exotérmica, sube la temperatura. Ha ambos les intriga lo que sucede más abajo.

Ya descienden con premura los hermanos a la Tierra para escudriñar las causas de la devastadora
situación en la tropósfera y estratósfera.
Conversando ellos dicen: ¡Todo lo que sube tiende a bajar! Pero antes de bajar realizan desastres a
su paso. Ya cerca de la Tierra, observan humanos alborotar.

Los humanos comentan: se acerca el fin, es la ira de Dios que se revela desde el cielo contra nuestro
mal proceder, por faltar a su creación.
Somos los responsables afirmaban de rodillas clamando piedad. ¡Detén tu ira Señor!
Nos abrasamos en este fuego infernal, nuestra piel manchada nos arde, el respirar nos asfixia, el
agua cáustica agobia nuestra sed, nuestras casas se sienten desboronar, el clima es cambiante y
consigo trae destrucción. Lamentos solo lamentos de humanos incrédulos por las calles muertas de
la gran ciudad.

Los hermanos oxígenos enrarecidos, logran comprender las causas y consecuencias que ocurrían en
los tres espacios del firmamento celeste. Básicamente la Tierra libera grandes emisiones de gases
altamente tóxicos producto de la combustión en todo rincón, como he de listar: dióxido de carbono
(CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), dióxido de azufre (SO2), sustancias como los freones y
sobre todo los Aerosoles que contiene clorofluorocarburos (CFC), este último altamente letal
cuando se juntan con los rayos ultravioletas, fulminando al ozono sin piedad.

El ozono (O3) triste comenta: son ellos los humanos que destruyen su propio hogar, causantes de su
propio sufrir. Las consecuencias son una devastación, especies por completo rumbo a su extinción.
Ahí, en instante logra contemplar a un Ursus maritinus conocido como oso polar, perdido entre la
población protestando está: ¡Mi hogar el Ártico se derrite! ¡Paren la desglaciación! ¡Basta ya de
destruir la capa de ozono! Nadie le brinda su atención.

Es el fin repica el oxígeno (O 2), no hay control es imparable las sequias, inundaciones,
desglaciaciones, sismos, etc. Se viene una absoluta desolación. Es la agonía final de una Tierra
lacerada. Los cielos funerales dejaban caer radiaciones sin parar. Caos y lamento en grandes
ciudades se oye escuchar.

Todavía en la Tierra con un aspecto miserable, invade una voz. “Soy el Alfa y el Omega”, el
principio y el fin, el que ha de venir. Allí en las bravuras del mar su voz se estremeció. ¡No supieron
reinar la tierra! Ahora empieza el Apocalipsis.

Ya el ozono y el oxígeno a punto de desplomarse por su gran densidad, al pasar por una mutación
molecular. Sostuvieron: Los humanos, que siempre quieren el poder a cuesta de la destrucción.
¡Bravo, lo lograste! ¡Era una diminuta substancia vital para tu vida y no pudiste protegerme!
¡Tampoco a mi hermano oxígeno propusiste cuidar! ¡Sólo quisiste contaminar! ¡Ahora termina así!
Predicción final.
LOS LÍDERES DEL BOSQUE

El rinconcito verde, un bosque maravilloso lleno de magia y fantasía, albergaba una gran
biodiversidad. Radiantes como el sol, frenéticos de amor, siempre pegados al bien común.

En dicho bosque se observaba lo imprescindible de su organización, siempre los líderes


eran las autoridades con supremacía que hacían cumplir los acuerdos dentro de las diferentes
organizaciones de los animales y vegetales. Éstas estaban conformadas por las agrupaciones de
insectos, aves, vegetales y mamíferos. Cada una de las agrupaciones selecciona de manera rigurosa
a su líder. Estos debían demostrar sus habilidades, destrezas, su ejemplo, y el dominio de decisión.
Además, en el bosque habitaba un ser con mucho poder mágico, que respondía al llamado de los
líderes. Por lo que brindaba las supremas órdenes para cuidar y mantener al ambiente lleno de
esplendor.

Ya la agrupación de los insectos estaba representado por el magnánimo líder “Spider


Bichín”, responsable junto a su comitiva sin prejuicio alguno al trabajo asqueroso del bosque.
Trabajaban con gran empeño en honor al reconocimiento de héroes de la limpieza. Estos súbditos
de gran olfato, muy proactivos, transformaban la materia orgánica en rico alimento para vegetales.
Sus esfuerzos saludables respondían siempre al principio “Tolerancia cero a los residuos sólidos”,
siempre se veía reflejar sus hábitos de higiene de manera disciplinar. Todo sucedía con tal
normalidad, hasta que un buen día el caos daría lugar, invasión sustancial aquí y a ya dañaba su
hogar. Amenaza mortal sucumbía el nidal, se puso en alerta total. Donde el líder carraspeó un
momento sin saber qué decir, hasta que una idea iluminó su mente y expresó: ¡Somos los guerreros
invencibles!, ¡Con la fuerza de nuestro amor y voluntad podemos cuidar el destino de nuestra
biodiversidad! Es nuestro deber de luchar contra estos residuos desechables que altera vidas. Somos
los responsables de exterminar, así que atacar o huir mis súbditos, que cada uno tenga en sus manos
la responsabilidad de su propia vida. Así terminada su voz con gran decisión el líder Bichín.

En eso aparece Amadriada con brillantes ojillos, nariz pronunciada y boca grande. Aunque de
apariencia extraña, tenía mente ágil y palabra elocuente con gran premonición. Y gritó: ¡Vendrán
días nefastos sino hacéis algo!, no rehúsen su misión, basta de miedos, mantengámonos unidos.
Ahora los nombro defensores del ambiente y por su lealtad cuidaré de ustedes por siempre. Bajo el
inmenso cielo dos águilas se abatieron en la muchedumbre, un arco iris pálido atravesó el sol. Señal
que advierte otro problema en alguna organización. Al pie de Amadriada las dos águilas distraen su
alocución.

Mientras que la agrupación de aves estaba comandado por la lideresa “Argonauta”, toda airosa y
vivaz ella. Hacia cumplir los deberes de guardianes del bosque. Sus súbditos surcar los cielos, desde
allí miran el más allá, vigilancia total. Eran los ojos del majestuoso bosque. Siempre con su trinar
melodiosa, ordenaba a su comarca entre ellas las mensajeras de la paz. En rondas decían en son de
advertencia ¡El mundo se entristece si de gases se llena!, ¡Sí, tiramos e incineramos los descartables
sin medida!, repetían una y otra, tras su ascenso y descenso. En contraparte otro grupo de aves
respondían, ¡El mundo está contento cuando lo cuidamos!, ¡Cuando reciclamos!, ¡Cuando
respetamos la vida! Así pasaban sus días esta organización de aves. Hasta que un triste cuervo en
moribundo vuelo repicó: ¡El hollín me asfixia!, se ha posesionado en mi cuerpo este gas inhalante,
soy maléfico para otras vidas, las aguas ya están magras. Frente a la lideresa puesta la queja en
agonía del frívolo animal se hacía escuchar, era una realidad. Pasmada ella a tal situación bajo el
cielo el mundo se enlutaba. En breve aterriza la Amadriada escoltada de las dos águilas en aquel
círculo funeral. Y expresó: un momento, no alarmar, debemos resistir, es temporal, deben de
comunicar, para salvaguardar el territorio natural. Prohibido migrar, es nuestro hogar, debemos
cuidar y ahora debemos trabajar. He ahí a las órdenes las aves con sus alas abanicaron con osadía
tantas veces para expulsar al gas mortal. Previo al poder otorgado en el ala del animal por
Amadriada. Así daban solución con gran decisión en aquel bosque.

Ya a lo lejos sentado e inmóvil en una altísima y solitaria montaña, bajo el cielo otoñal el líder
“Vegales” representaba a las plantas. He allí el robusto cedro sobre la hierba trémula, en compañía
de la Palmera, el Tornillo, la Topa, el Guayaquil, entre otros. Meciéndose sus ramas muy vivaces al
compás del viento. En eso una voz alarmaba.
¡Oh, no! Los labradores con el hierro al hombro están llegando algo fatigado, alertan pues los
Mirtales. Observan al labrador mirarlo con admiración y al instante ofrece al hacha para alimento
del hogar. Que en viva voz oír ¡Cortémosle bien!, hermanos.
¡Oh, inquietud vespertina! ¿Para qué sirve un árbol? ¡Me duele el corazón! Tiemblo en las manos
sangrientas del leñador. ¡Auxilio!, gritaba con pánico el álamo a punto de caer. En eso el líder
Vegales pensó amedrentarlos y gritó: ¡Detente! ¡Asesino! ¡Deténgalo! ¡Que no escape!, ahí los
demás arboles crujieron con sonido de pavor que inundo los oídos del labrador, se estremecieron las
hojarascas, las ramas cual látigos encriptaban en la superficie. Los labradores muy aterrados y
despavoridos huyeron de la escena. Continua la voz estrepitosa ¡Váyanse a otro sitio! En la colina
caerá una catástrofe que será terrible, si vuelven a talar los maderos. En eso se asoma la Amadriada
y ve a cinco álamos a punco de caer, coge algunas hojas secas del piso los amasa y unta en el
profundo corte, en breve están sanos los árboles. Antes de desaparecer dice “A los labradores le
falta la benevolencia como virtud”. Buen actuar líder “Vegales”, sigue así.

Días después, muy cerca de un rio de límpidas aguas un animal con discreción. Sus ojos relucían
con avidez, de tétrica faz con indómitos mechones en su ancha cabeza, un cuerpo con torso hercúleo
de fácil salto y de mirada bravía. Se mostraba el líder “Fiodor”. Decía: me basta oír el perennal
ruido en el bosque para con ágil desplazamiento a los cazadores vigilar. ¡Oh sol!, ¡Oh bosque!, ¡Oh
río!, ¡Oh humildes animalitos del campo! Pongo a todos por testigo de esta realidad. Esta Tierra es
muy suave, muy tibia, nada estéril, que la fecunda ríos de dolor. ¡Qué maravilla, vivir aquí!, ¡Paz en
mis entrañas!, ¡Silencio en mi redor! ¡Nada más la fatiga de un día! Así el líder Fiodor pasaba su
tiempo, de un lado a otra parte, cumpliendo con su misión, cuidar la vida del bosque. El tiempo
corría velozmente; los días y los meses pasaron como lanzadera. En eso bajo el dominio primaveral
algunos animales eran cazados con las redes por manos hechizantes. ¡Oh, no! Ya llegaron otra vez,
¡Sí, es cierto! ¡Están atrapados! Aterrorizados corría la noticia en el bosque por los Monos, Gallitos
de la roca, Sachavaca, Majas entre otros. Empieza el tráfico ilegal de especie animal. Vociferaban
con pavor.
En ese mismo momento, el líder Fiodor ante la inquietud frenética de los rehenes, su vigor doblega
una sombra pávida cautiva en su mudez y acoge a los cazadores con ferocidad. Al instante se lanzó
con decisión sobre los cazadores asfixiándoles sin esfuerzo por las fauces del protector. Luego con
solemnidad liberó a los animales cautivos. El escandalo se terminaba de apagar. Muy eufórico
Fiodor invoca al hada para entregar carne humana como trofeo. Al llamado, Amadriada aparece
algo aterrada. Ésta le recordó: los líderes tienen sabiduría para solucionar ¿Acaso no sabes razonar?
¿Qué no puedes tu instinto controlar? A pesar de estar molesta por tal brusquedad del animal, quedo
conmovida por su actuar. Pero explicó que en el bosque no matamos al animal racional. Ella cogió
uno por uno a los cazadores y les dio soplo de vida. Algo asustado despertaban simultáneamente
los cazadores. Un sol resplandeciente cambio el clima en pocos minutos, nubes bajas y pesadas
habían cubierto todo el cielo, relámpagos y truenos confirmaban lo peor, el rugido del viento y el
bramido de los árboles, aterrorizaban más a la raza humana, era el impredecible bosque. ¡Pido
piedad! Suplicaban los humanos.
Entonces la Amadriada dijo: expreso mi desazón suprema, son criaturas del mal, no deben atentar la
vida animal de manera irracional. La Tierra no es nuestra, nosotros somos de la Tierra, por eso
deber es cuidar. Sabias palabras suavizaba la mente extrahumana. No ignoren este hecho,
esfuércense para prosperar sin peligrar a futuras generaciones. Honren la capacidad donada del
pensamiento. Tienen una segunda oportunidad a la vida. Ya es la hora de aprender al áspero vivir y
volver a renacer con virtud. Debemos buscar la paz interior y no ser enemigo sanguinario, cual roca
aplastaría en sus entrañas. Por más amor y respeto al verdor edénico inicial. Regresen a su mundo
algo común. Esto sucedía ante los ojos ataviados del recinto poblacional, eran lecciones de hada
Amadriada.
Y así continuaba el bosque bajo la dirección del hada y los líderes de las organizaciones siempre en
armonía, frente a los problemas para actuar con gran devoción.
ESPERANZA EN BUENO

Cierto día Fermín el pastorcillo pastando por las riberas de un riachuelo, se tocó con un exhausto
joven de escaza apariencia que descansaba a pierna suelta a la sombra de un chamusquino quinual.
Lo despertó, preguntándole qué hacía allí y de dónde venía. Respondió entre sueños e irónico el
joven, ¡Que el nombre de mi amada tierra lo he olvidado!, y que escapo de ella para buscar un lugar
suntuoso, que se caracteriza por su limpieza, por un fresco rio, con apacibles calles y gente por
doquier benévolo. Espero encontrar pronto, terminaba de hablar algo medroso. Pues, el pastorcillo
al escuchar se sorprendió y atino a decir ¡No he visto tal lugar! Solo, éstas praderas frescas y
limpias, que largos años mis ojos han de conocer. Mis animales son únicos como la familia,
terminaba de hablar.

Ya más lúcido el joven de escaza talle, con aspecto educado, con profundo dolor y con gran pena de
olvido. Informa, veinte años llevando una vida hostil en mi pueblo “Mirones de Tusi”, donde su
gente perdió los valores de solidaridad planetaria, de responsabilidad por el bien común y del
respeto a toda forma de vida. Pues, la modernidad azotó sin piedad la conciencia de la gente,
idiotizados en el consumir sacian su placer el de existir, con arrogancia infinita pintan con
desperdicios sólidos para hacer asquerosa a “Mirones de Tusi”. Por todo esto, escapo de la peste
corrosible que busca mi entraña.

En eso las ovejas se acercan al riachuelo para saciar su sed en las mansas aguas que se ven
fotografiar. El pastorcillo dice, aquí todo está en orden no alteramos la Naturaleza. Por todo lo que
nos brinda se convierte en servicios ambientales para nosotros y debemos cuidar, sino tarde nos
costará asumir. Así pues, como observarás las aguas muy cristalinas, el cielo celeste con algodones
polimorfos, sus campos matizados de variada fauna y flora que hacen espléndida su acogida a
cualquier visitante. Por lo que mi hogar es parte de esta protegida Naturaleza.

Ya el rebaño había ascendido falda arriba, donde el pastorcillo se despide y sugiere no rehuir, sino
afrontar los problemas socioambientales convirtiéndose en el salvador de Mirones de Tusi. El joven
sosegado lo escuchó y después de un apretón de manos símbolo de respuesta al despido, se hecho a
los brazos de Morfeo.

Duerme, que todo el tiempo que durmieres serás igual, no harías daño a nadie, indefenso animal,
replicaba Morfeo al cobijarlo en su seno. Acariciándolo su rostro replicaba, lo único preocupante es
tu débil actuar, muy cobarde que rápido quieres huir y de lejos mirar a tu pueblo como flama de
basural por no razonar. He allí entre contorneadas figuras de bostezo se despierta algo preocupado,
levanta el sombrero que cubría su cara, estando sentado aún, observa con asombro a algunos metros
del riachuelo sentada en una roca una figura de mujer, que resplandecía sus cabellos de oro que
cubría su dorso. El joven se levantó con gran admiración y se acercó con gran desesperación. En
eso su frente de plata bruñida, sus dientes de marfil, sus labios de coral, sus lágrimas líquidas perlas
caían al pedregal. Muy solloza se encontraba la bella angelical. Ahí el bizarro joven le preguntó,
¿Quién eres?, ella respondió, soy Esperanza de Mirones de Tusi, de aquellos maravillosos años,
donde todo florecía en mi tierra natal. Desde muy niña me gustaba respetar y cuidar con amor a la
diversidad. Hasta que un mal día haya por dos décadas, invadió la modernidad sin compasión y
contamino la razón del poblador y el corazón de verdor. Tanto me esforcé por salvar, que por ser
niña enferme y la peste me durmió. Desde ese entierro otoñal, mi alma llora al saber que a Mirones
de Tusi todos lo ven con depresión. Por ello no pierdo las esperanzas de que alguien con los mismos
principios que yo me ayude a cambiar el accionar de la gente. Muy admirado algo tristón el joven
dijo: soy Acadio Bueno y estaba huyendo del pueblo. Después de un lapso respirar siguió hablando
con gran intensidad, ¡Creo que llegó la hora de hacer mérito a mi apellido!, ¡Basta ya de huir como
rata traicionera! Por su puesto, soy Bueno, muy bueno para asumir tal compromiso. Además, Tú y
Yo lograremos salvar nuestro pueblo de la nauseante contaminación.

Por lo que la bella Esmeralda protectora de la Naturaleza con alegrías de contagio saco del bolso
que colgaba sobre su hombro, siete tablitas de forma rectangular de fondo blando donde estaba
grabado frases pintadas de verde que decían en cada uno: RECHAZA, lo que no necesitas;
REDUCE, tu consumo a lo necesario; REPARA, lo que ya tienes; REUTILIZA, evita los
desechables; RECICLA, lo que no pudiste reutilizar; REINCORPORA, a la tierra los residuos
orgánicos y RESISTE, todo esfuerzo cuenta. Entregándole a Arcadio, la hermosa mujer
desapareció.

Había corrido el tiempo, el joven con la misión en las manos cerca al riachuelo, escucha balar las
ovejas que están de regreso, en eso Fermín el pastorcillo tropieza y dice: ¿Qué aún aquí forastero?,
¡Tanto descansa usted!, ya la noche está cerca. Por ser hospitalario te doy posada esta noche, ya
temprano sigues tu camino. Así pues, el joven acepta la posada y en parte de la noche cuenta lo
sucedido. Ya muy temprano a la claridad de la luz y con la percepción de un buen día, don Arcadio
se dirige de regreso al pueblo.

He allí Mirones de Tusi, se ve a lo lejos algo triste como gritando sin poder ser escuchado, las
fuerzas son débiles para corregir los males, cada vez agranda la indiferencia de la gente, con
apariencia desaliñado se pierde al ángulo ocular en el largo caminar por el salvador don Bueno.
Abatido ya por el sol, cargado de harta sed, con un cansancio abismal, he ahí el hombre sin
desmallar sigue a paso vencedor. Se viste de coraje, grita a todo pulmón, ¡No dejare que te
contaminen más!, ¡Soy la esperanza viva para Mirones de Tusi!, resiste tierra mía, tu niña
Esperanza te limpiará. Se iba apagando su voz en la lejanía del abatido héroe.

Al ingresar al pueblo una cruz da bienvenida al loable Arcadio Bueno, el quien se inclina y
haciendo la cruz con su dedo pulgar, juró defender hasta con su vida por la tierra que vio al nacer,
beso repetidamente con fervor al gran sudario mecido por el aire. Así se energizaba con fe sagrada
por sus raíces.

Durante los siete días, por siete meses en siete años de arduo trabajo de don Arcadio Bueno logró
concientizar a la población con las siete frases en memoria de la bella Esperanza. Ahora Mirones de
Tusi viste diferente, bien ordenado y limpio, su gente recobró sus costumbres y valores, la
modernidad con buen principio de sustentabilidad, un pueblo pintoresco como salido de un
cuento, todos ahora quisieran ver.
PLASTIK EN LA BASURALEZA

Érase una vez en el génesis del quinto día que se dio vida a los seres vivos en gran medida, en un
maravilloso recinto acuoso azul cubierto por un manto de verdor, con todas las condiciones de
armonía, el cual fue bendecido con sabias palabras “sean fecundos, multiplíquense y llenen las
aguas del mar y los suelos, era esplendida la Tierra, clara y tranquila, nada bulliciosa, eran sus
orígenes. Nuestra bella Naturaleza reinaba sin ser escandalizada ni amenazada.

Hasta que un sexto día llego, creación humana, fue el iceberg que atentaría más tarde a éste mágico
Edén, el gran caos correría por sus venas, la codicia y el poder destructivo estaría grabado en su gen
estremecedor. Nadie presagió lo peligroso e inhumano que iba a ser.

Después de un largo tiempo bajo el dominio de los animales al formar verdaderos lugares de
esplendor, los de la raza sapiencia se reproducieron tanto que tomaban dominio sobre los bellos
ecosistemas para colonizar sus hogares, atentando especies por completo, las grandes industrias en
manos de los sapientes se dedicaban a fabricar elementos que lastimaban a la Naturaleza.

La Naturaleza muy agobiada en dolor pide al creador que termine con su agonía temporal, al no ver
cambio alguno en el humano accionar, su indiferencia y desamor es cada vez mayor, repica la
Naturaleza. ¡Señor mío! tienes el poder, pon en cuenta regresiva el reloj de la devastación y sin
compasión suplicaba ella con devoción.

En eso aparecía Plastik, un polímero de forma irregular, fabricado a base de PET,


polietilentereftalato y decía quejándose: -“Ustedes me dieron un propósito que yo no elegí, me usan,
me tiran, me olvidan pero yo sigo aquí”. Soy producto a su gran comodidad, le decía al sordo, ciego
e indiferente humano. Disculpa señora Naturaleza: -“yo no pedí existir, ellos me hicieron así y
ahora dicen que soy ilegal a aquí”.

Basuraleza era el actual mundo que iba tomando forma encima de la Naturaleza, siendo ésta
pisoteada, asfixiada y sepultada por el mal oliente endemoniado Plastik quien tendría el poder del
reinado actual, un enemigo natural, plaga ofensiva de los sembríos por más de 50 años, formando
grandes cerros de microplásticos, en muchos de los casos incinerados.

La simbiosis del humano con Plastik cada vez era necesaria por su obsesión, atracción e inocente;
por su fácil y barata producción, más aún por su versatilidad. El comienzo de una nueva era se
escuchaba decir por el defensor de los plásticos. Basuraleza tomaba posesión en todos los espacios
públicos y privados, siendo útiles como perjudiciales también. Viajamos sin fronteras y limites
susurraban los plásticos cual figuras creadas. Los plásticos tomaron protagonismo en la vida de los
humanos dependientes.

Por muchas décadas conquisto Plastik y sus seguidores los hogares del mundo, dañando y
agravando día a día a la Naturaleza en el seno de su ecosistema terrestre. Ahora nos toca invadir los
ecosistemas acuáticos, empezando por los ríos, lagos y terminando en los mares, decían a viva voz.
Basuraleza un mundo pestilente conformado por botellas y bolsas de plástico rumbo a inmolar sin
asombro la biodiversidad del mar, con gran fealdad y ferocidad, Plastik representante legal
construía inmensos islotes donde veían fenecer a peces, albatros, delfines entre muchos otros
desvalidos ante la avaricia y sañudo animal de rasgo racional.

La congregación no tardo, en el mar se venía reclamar con alteración, embravecía el mar cada día
más, limpiaba con encono sus aguas náuseas. Fauna marina en alerta total, era el inicio de un final,
las ballenas, los delfines y los pingüinos manifestaban su incomodidad, una lucha constante en su
suerte comer, no solo ellos eran víctima de esta rara Basuraleza. Los hipocampos, las tortugas,
moluscos y muchos peces eran asfixiadas por el indignante Plastik.

La Naturaleza gritaba con furor: -¡Al 2050 el océano reunirá más plástico que peces! ¡Los
microplásticos vestirán al mar como estrellas de nuestra galaxia! ¡Basta ya de inundar al planeta de
residuos plásticos nocivos! ¡Lucha para recobrar nuestro habitad limpio y verde! Busca alternativas
a los plásticos que tardan hasta 500 años en degradar. Actualmente ya están apareciendo bolsa no
plástica que se disuelve en agua elaborado con polivinil alcohol, pero su voz era poco escuchada y
su lucha con poco éxito alguna.

Humanos con escaza razón y sin corazón decían algunos peces frustrados de tal hecho: -¡Somos tu
alimento cuídanos! ¡No contamines nuestro hogar! ¡Extirpa de una vez por todo a Plastik! ¡No sean
dependiente de los plásticos no degradables! nos lastiman, mira que Dios nos creó para vivir juntos
en armonía. En eso Plastik susurra irónicamente con gran desavenencia -¡Yo no pedí existir, los
humanos me hicieron así y ahora dicen que soy letal!, no me responsabilicen de tal crueldad, señora
Naturaleza deja de culpar.

Así siguió largos años de discrepancia entre Plastik representante de Basuraleza, el humano
indolente y la Naturaleza alarmante. Al ver el caos agravante por la presencia de los plásticos. Es
ahora o nuca empezar el cambio, se logró escuchar desde el fondo del mar, ¡Decídanse ya! ¡Dejen
de culpar! sois el arrecife de coral.

En eso reaccionó Plastik el astroso en la ciudad de Basuraleza, a tal infamia hecha por la
Naturaleza, de culparle sobre la basura marina. Ante la situación decidió traicionar a su pueblo de
Basuraleza, Plastik lanza una campaña para conquistar la sensibilidad humana, desde las soleadas
playas a lo largo de los océanos en los cinco continentes, la estrategia empleada era muy sencilla,
las botellas vestían palabras como: Rechaza, Reemplaza, Reutiliza, Reduce y Recicla. El líder
Plastik trabajaba por un océano sin plásticos, siempre decía ¡Sin plástico está el buen vivir!, ¡El
lugar donde vivimos lo cuidamos todos!, mensajes que llegaron al corazón del humano, a tal gesto
que hacia Plastik, la moribunda Naturaleza se sintió agradecida. Entonces los humanos habrían
entendido que los plásticos no tuvieron la culpa de existir, sino que de hoy en adelante deben ponen
en práctica las 5R`s, enseñado por el popular Plastik.
La Naturaleza se sentía alegar al recobrar sus orígenes ante este funesto contaminar, años tras años
ya no se veía plástico tirar, era un nuevo amanecer, un aprendizaje que no dejo de olvidar, son
huellas que debo dejar, soy el responsable de cuidar por razonar.
TAURINO EN EL CIRCULAR

Era un indefenso becerril que nació en un campo de verdor, sus ancestros desde la tumba se
sentirían muy feliz por su color y gran utilidad. El bravo Taurino crecía libremente por los sagrados
campos del indómito inca cual legado histórico; el valioso animal se iba preparando para su futura
misión, hacer fecunda la tierra, su forma sin par y su fortaleza genética se iba notando en su
semblante con gran admiración.

La más dichosa la pacha mama, por la llegada de su criatura prodigiosa, responsable de labrar la
tierra y dar alimento a su pueblo, proseguía inmediatamente a seguir el ritual de sanación y
bendición, además debía realizar los conjuros para proteger al animal de todo aquel que atentara
contra su vida.

Pues, así manchin Taurino estaría seguro para hacer frente a su aventurera existencia, crecía
rápidamente con gran actitud, se identificaba por su coraje y su fuerza destructible al infértil
terreno, capaz de hacer florecer los campos con su sudor y pasión de joven al arrastrar el yermo
arado.

Taurino iba tomando protagonismo, querido por su gente por ser muy dócil, con voluntad atrevida
en el terreno, atraído por los niños, con gran temple para trabajar en bien de todos, cual costumbre
heredado de sus ancestros.

Transcurría de lo muy normal las actividades del bravo manchin alrededor de la aldea ecológica
muy lejano a la gran ciudad.

El codiciado animal veía con ansias llegar la festividad del rodeo, donde la población rendía tributo
y homenajeaba a los animales, una costumbre muy propia de los lugares enclavados en la cordillera
de los andes, al animal lo coronan con flores, con frutas; le colocan cintas coloridos en las orejas; un
gran tatuaje con iniciales de su nombre en el muslo; lo bautizan con un nombre propio en este caso
“Taurino”; le hacían beber la chicha del inca, licores como vino, guinda y cerveza; también
danzaban al compás de los lazos, música que anima la recreación entre el animal y el hombre,
costumbre heredado de generación en generación.

Estas costumbres siempre estaban en su mente de Taurino, una relación mágica e inolvidable que se
realizaba en el cotidiano vivir. Empoderaba en su ser esta festividad y el trabajo matinal.

Después de un arduo trabajar Taurino merece una estadía vacacional en el campo verdor donde la
luz vio al nacer, durante el invierno estacional. Sin presagiar el comienzo de una vía cruces infernal.

A la puesta del sol Taurino siente una corazonada que le pone temeroso, al inicio de una noche
fúnebre y opaca; se siente solo, no se percató del alejamiento de sus compañeros, caía la noche, más
el silbido del viento lo aterrorizaba, ya la niebla lo tupia por completo, se sentía acorralado,
escuchaba pasos y de pronto es cubierto por una inmensa red, logra ver con sus ojos llorosos un
grupo de humanos que dicen: -¡Cayo! ¡Cayo el animal! ¡Lo atrapamos! ¡Buena casería! En eso el
animal embravecido gritaba pidiendo ayuda pero nadie iba a su socorro, con voz lánguida que se
perdía en la lejanía y cual eco repicaba: -¡Pacha mama! ¡Pacha mama! ¡Me llevan, me llevan! , en
eso Taurino pierde noción de vida.

Los cazadores después de sedar al animal lo subieron a un camión y lo llevaron a conocer la gran
ciudad, para el deleite de grandes y chicos por un real.

El perdido animal de pronto abrió sus ojos sin fuerza alguna, una tenue imagen describía un circular
arenal, ya con fuerza recobrada, empieza a bramar, se levanta y correr por esta jaula circular, está
encerrado camino a la muerte, de pronto se encuentra con otros prisioneros que les dice: -Es nuestro
fin no saldremos sin vida de este lugar, estamos aquí como protagonistas de una festividad para
estos de la ciudad; que al escuchar con voz iracundo de los prisioneros, no podía creer lo que debía
ocurrir.

La muchedumbre gritaba ¡Ole! ¡Ole! Con gran algarabía, en eso Taurino siente una estocada en el
lomo con gran dolor en medio del circular frente a un manto rojo que sostenía un malévolo sujeto,
lamentándose su existencia al sentir que se bañaba en sangre al grito feroz de la gran masa humana
en el circular, en su conciencia el indefenso animal repetía ¡Qué costumbre! ¡Qué costumbre tan
cruel! no es como en la aldea donde vivía en paz.

Todos ya desfilaron y se apagaron en el circular; él ya era el último apunto de agonizar; en eso un


remolino se apoderó en el centro del circular, se levantó el arenal espolvoreando cual látigo a los
fanáticos de esta costumbre hiriente, donde despavoridos huyen con gran alboroto, desde lo alto se
acerca una voz crujiente y lastimada, -¡Con mi criatura nadie se mete! ¡Soy la pacha mama! la
sangre derramada de mi preferido Taurino lo llevarán impregnado cual lunar en la frente de sus
rostros con gran dolor. De un momento a otro, una luz brillante cubrió al sujeto y en su oído
sucumbió en mi tierra no puede ser costumbre aquel que goza con la sangre derramada de un
animal. Por el resto de tu vida serás perseguido por una animal feroz no encontrado paz.

La pacha mama con gran prodigio quita del lomo el dardo lacerante y lo cubre con una capa dorada
para cobijarlo en sus brazos, antes de retirarse como un rayo marca en el arenal “Ama a los
animales como tú lo eres” la diversión no se goza con la sangre, aprendamos a convivir juntos
respetando para lo cual fue creado, terminando de decir desapareció.

Taurino despierta en el campo de verdor, solo muy adolorido pensó que era un sueño pero era real
se salvó de una muerte súbita, bramó y se acercó a sus compañeros contándole lo sucedido y
comprometiéndose a nunca separarse y siempre estar juntos por el resto de sus vidas.

SAMUEL Y LA NINFA EN EL ARROYO.

El muchachin jocoso silbando despreocupado se acercó al arroyo de aguas puras, cristalinas


y bulliciosas que corría quebrada abajo meciéndose toda inocente, era un punto de encuentro de
muchas personas que los visitaba, esta vez el arroyo lucia sola en parte del día, bien pues el
jovenzuelo al acercarse sintió un fresco recibimiento, con sarpullidos de agua a su rostro que venía
desde la cascada, era una forma de agradecimiento por su compañía y la alegría que compartirían
juntos esa tarde poco soleado.
Ante el trinar de melodiosas aves y el silbido de vientos funestos que presagiaba lo trágico
que iba a suceder esa tarde, pues el incauto Samuel se acerca a la orilla del riachuelo para entrar en
contacto y en calidad de saludo, respira y pega un grito ¡Solo nosotros dos! ¿Qué coincidencia?, y
lanza con fuerza y crueldad una piedra que hizo temblar el corazón de la poza bajo la cascada, en
son de dominio. Luego se dirigió a una roca plana bajo la sombra triste de un árbol, y sin dejar de
silbar, depositó su mochila en el suelo, sacó unas golosinas y refrescos poniéndose a saborear con
gran deleite, inconscientemente o racionalmente los residuos iban a parar en el arroyo, no sin antes
arrugarla entre sus dedos, la misma suerte corrió con la cáscara de las frutas que alimento esa tarde
al pillo de Samuel.
Luego, al ponerse de pie y estudiar el lugar a través del correr de su mirar, impulsó con su
pie unas botellas y latas vacías que yacían al pie de la montañosa roca abandonadas por algún
visitador, y todo eso fue a dar al centro del arroyo.
Algo inspirado después de su travesura, reposa en la roca con una hoja de cartulina blanco y
un lápiz apoyado en la mano del joven presto a trazar líneas de copiosas imágenes del mustio
paisaje. Sus manos se deslizaban sobre el papel manchando de manera ágil y nerviosa. La hoja
blanca se llenaba lentamente de una silueta femenina con características propias del entorno donde
primaba la cascada como el velo de una novia, el óleo se terminó después de un buen tiempo.
Para bajar el estrés encendió un cigarrillo y arrojó nuevamente el desperdicio al agua,
estaba recostado contemplando su obra maestra, fue en ese instante que escuchó el grito estrepitoso
de pánico, por lo que el joven atino a levantar la cabeza, sobresaltado buscó la voz lánguida e
irónica, y contempló estupefacto con gran asombrado, cómo las aguas de la poza frente a él se
levantaban para sostener a la más bella niña que sus lápices jamás habían dibujado. Ésta replicó:
¡No me mires, desdichado!, pero el joven, en lugar de obedecer, lanzó los objetos que tenía a la
mano por los aires y, como un autómata, comenzó a caminar hacia el arroyo, encrespado y furioso.
La niña continuo ¡Detente!, pero, ¿cómo detenerse?, si la figura frente a sus ojos era una visión para
la cual no había explicación. La figura era una formación del rayo de luz entre las aguas del salpicar
de la cascada, penumbrosa distorsionada de imagen genuina de una niña, con sus ojos húmedos de
furia y su mano enérgica en el aire, indicaba los desperdicios que el joven iracundo había lanzado al
llegar.
Ensucias mi arroyo, como todos los hombres, y además has tenido la desgracia de mirarme
y desafiarme. ¡La dicha de mirarte!, susurró el colérico dibujante, algo embobado. Pagarás muy
caro esa dicha, respondió la figura de niña en el aire, el hombre que ensucia mi arroyo y ofende a
su ninfa, está condenado. ¡Dichosa condena si viene de ti!, insistió él. ¿Aunque sea la muerte?,
advirtió sarcástica la ninfa crisolada. Si viene de tu mano, mátame mil veces..., sólo déjame antes
tocarte, balbuceó el joven, como un alucinado. Y de un salto se lanzó al arroyo.
En ese mismo instante las encrespadas aguas volvieron a su remanso y la ninfa desvaneció
ante sus ojos hipnotizados.
Samuel nadó y nadó, enloquecido. Buscó en el fondo a la ninfa, reapareció para respirar,
dio vueltas alrededor de la poza lanzando agua con grandes manotazos, y así siguió hasta quedar
exhausto. Flotaba de espaldas sobre la superficie, cuando sobre él comenzaron a caer los
desperdicios, una lluvia de botellas, latas, cáscaras y plásticos.
Éstos sólidos golpeaban como látigo sin tregua al cuerpo del infortunado joven. Quiso nadar
a la orilla y ya no pudo, giraba en el torbellino de la embravecida fuente. Consciente aun trató
entonces de ponerse de pie, pero siguió de espaldas, era como si estuviese adherido a las aguas por
lazos invisibles. Empapado y aplastado de residuos inservibles... ¡Se ahogaba el muchachin!, ya con
pocas fuerzas luchaba por su vida, cuando al instante vino lo peor, desde la cascada descendían
verdaderos basurales que llenaba la poza. Pues, se inundaba un olor nauseabundo penetrante en sus
narices asfixiando cada vez más. Ya no podía soportar más, entre el espasmo de su memoria.
Expresa en su moribunda existencia ¿Dónde estás bella mujer? ¿Esta es la maldición pronosticada?
El sol ya se escondía, pues caía la tarde y un pesado sopor comenzó a cerrar sus párpados.
Sintió que se hundía junto a toda esa basura y perdió el conocimiento era el fin.
Cuando despertó, vio todo blanco con imágenes borrascosas. Además, escuchó, como en un
sueño, una voz que decía, pudo haber muerto, lo encontró un campesino del lugar. Dijo que flotaba
sobre el arroyo cubierto de basuras, y pensó que estaba ahogado. A través de la ventana que daba a
la cama del enfermo Samuel, la ninfa miró al moribundo hombre y decía muy seria, por lo menos,
desde hoy habrá un hombre más en la Tierra que no volverá a ensuciar un arroyo.
MISTERIOSO MAJAS

Érase una vez un pobre hombrecillo llamado Simeón que vivía con el amor de su vida
“Alondra” y sus pequeños vástagos, en un rincón inhóspito de un bosque. Ellos tenían una casa muy
humilde, una parcela de tierra para labrarla y cultivar los cereales y otra muy cerca de la finca un
hermoso huerto para las hortalizas y verduras, como ahí abundaba grandes praderas, la familia
contaba con algunos ganados que disfrutaban del buen pasto del lugar.
Ellos trabajaban desde que raya la aurora y al compás del astro “sol” cual fuere como un
verdadero capataz, pero todo era en orden, don Simeón dedicado a trabajar la tierra y su mujer
dedicado a la casa y el cuidado de los niños, esta familia buscaba salir adelante, querían tener un
destino diferente a sus ancestros, ellos querían labrar un porvenir para sus hijos.
Los hijos de esta familia, marchaban por la mañana todos los días a la escuelita que se
encontraba a unos kilómetros de su dulce hogar, era divertido trasladarse toda vez que se juntaban
en el camino con otros niños y niñas aledañas, todo esto se repetía los días camino a la escuela, del
mismo modo el regreso camino a casa.
Los pequeños en sus tiempos libres se dedicaban del huerto, en el cultivaban gran variedad
de hortalizas, hierbas aromáticas y las frescas verduras, que disponían para una buena alimentación
de la familia. Estos pequeños tenían mágicas manos y conocimientos para producir buenos
productos, el huerto era el espacio ideal para poner en práctica lo aprendido en la escuela. El orgullo
inicial para sus padres, aunque ellos soñaban ver a sus hijos contribuir a la sociedad con el bien
común, así como los maestros, los médicos, entre otros; al servicio de la humanidad.
Solo hacían un alto en sus labores los domingos para recrearse, visitar a sus vecinos que se
encuentran a ciertas horas de distancia de la finca, también asistían a la misa en la parroquia
celestial del pueblo para fortalecer su fe y limpiar sus pecados.
Pero un domingo, don Simeón, que era muy diestro y aficionado a la caza, cosa que le
gustaba la carne del monte, muy rico en proteínas por su puesto, se internó en el espeso bosque
dispuesto a coger una presa de alimento para su familia, motivo a celebrar el cumpleaños de su
primogénito; con esto gozaba la familia y no se tenía que sacrificar ninguno de los animales
domésticos de la granja, ya que el más pequeño de los hijos sufría al ver sacrificar a las gallinas y/o
a los patos, por el mucho cariño que le tenía a todos de la granja.
El hombrecillo concientizado en la cacería se dispuso a colocar la trampa cerca de los
matorrales donde se observaba rastros de majases, cuando con gran sorpresa vio a unos de estos
roedores del bosque entre las raíces bifurcadas entre tejidas de los árboles, don Simeón corrió
sigilosamente en un silencio único al intento de atrapar con sus propias manos, pero el animalito
estaba acobijado adormilado como queriendo buscar calor de su madre. Era tan pequeño, inofensivo
y hechizante que el hombre no dudo en cogerlo como un regalo de mascota para su hijo. Tenía un
hermoso pelaje, lucia con unos bigotes y dos dientes superiores brillosos cual conejo que dio
mordiscos al cazador con intentos de librarse de las fuerzas que el sujeto propinaba. Cuando pudo
dominarlo, lo examino recelosamente y vio que no era un majas corriente, tenía una apariencia
distinta que capturaba la impresión del cazador, como si tuviese en la mano a un peluche con un
pelaje suave y bonito, como si lo hubieran vestido con terciopelo, reitero una vez más en su mente
el cazador, un buen regalo, se va conmigo y coloco al animalito en su mochila, y siguió tras otra
presa.
Ya era de tarde y muy contento caminaba por el bosque, camino de regreso a casa, cuando
de pronto se le apareció un duendecillo que interrumpió el paso del cazador. Y le hablo ¿Dónde vas
con ese animalito tan tierno?, el hombre respondió, pues mira, lo he cogido a unos metros atrás,
estaba dormido y creo perdido y listo como presa para los animales salvajes, y es ideal como un
regalo para mi hijo. El duendecillo respondió, Sí, es muy hermoso, pero ese majás no se puede
coger como prisionero, es como un líder de los majases y el que lo atrapa para encerrarlo o
sacrificarlo tendrá graves problemas, azotará grandes desgracias y arruinará su vida, pues está
protegido por la madre naturaleza y otros genios del bosque y lo defenderán por todos los medios,
así que si quieres un consejo, suéltalo ahora mismo y retorna tranquilo a tu casa.
El hombre no tomo en serio tal consejo y siguió su camino tan ilusionado con el animalito,
al llegar a casa lo soltó a un rincón de la cocina junto a los cuyes y por la mañana construirlo una
jaula exclusivo para el animalito, conto parte de la historia a su mujer y ella también estaba tan
contenta, impacientes los dos esperaban que llegaran sus hijos para darles buena sorpresa. Pero el
animal lo miraba fijamente al hombre como queriendo expresar algo, que puso en preocupación a
él, el animálculo se acercaba, se erguía de forma extraña, como si quisiera desafiarlo, por lo que el
hombre empezó a tomar en serio el consejo del duendecillo. Cuando regresaron los hijos de la
granja vecina vieron el regalo que papa trajo se pusieron tan felices que querían cogerlo para
acariciarla, pero por más que intentaban no lograban cogerlo, el majas realizaba saltos acrobáticos y
desafiaba con sus dos dientes tan filudos. La niña intermedia de sus hijos estaba muy triste porque
no se podía coger al majas, por lo que la madre le dijo que cuando pasara algún tiempo se
acostumbraría y serian buenos amigos. Así lo creyó la niña y pensó en lo mucho que jugarían con el
animalito.
Pero el padre, a pesar de querer olvidar lo ocurrido con el duende, no dejaba de pensar, por
lo que, desconfiado, salió a fuera de la casa a dar un vistazo a todos los animales y el huerto, al no
ver nada anormal, se acostó algo más tranquilo, pero con algo en sí que le impedía conciliar el
sueño, mas pudo el cansancio por un día tan ajetreado que había llevado el hombre, consiguió
dormirse. Pero su sueño se tornó algo así como una escena de naturaleza agresiva que perturbaba su
descanso, alguien con voz estruendoso le decía libere al animal, el bosque lo necesita, sin la
presencia de él la madre naturaleza morirá y el bosque desaparecerá y todo este hermoso lugar se
quedara desolado. Asustado se despertó el hombre al tiempo que canto el gallo madrugador cual
alarma de todos los días apuntando la hora de ponerse de pie para las labores matutinas.
Pues, muy temprano ya de un nuevo día y antes de la salida del sol, escucho extraños
ruidos fuera del albergue, lo que hizo salir raudamente, abrió la puerta asustado y vio delante de él
muchos animales gigantes muy agresivos nunca vistos por él. Echo a correr por todos los
alrededores de la casa y vio destruido todo, la granja fue saboteada, en el huerto las hortalizas roídas
y devoradas. Lo mismo ocurrió con sus árboles frutales y sus sembríos. Asustado, volvió a correr
hacia dentro de la casa, y cerró la puerta tras él. Al momento que recordó la voz del sueño y más
aún las palabras del duendecillo que le cruzó en el bosque, y sin dudar más cogió apresuradamente
al majasito dentro de la cocina para liberarlo. Abrió la puerta y lo soltó rápidamente, el animalito
dio un salto mágico, se volvió hacia él y brindo una sonrisa. Salió corriendo hacia el bosque y tras
el fueron todos los animales salvajes que estaban dispersos en el lugar. A todo esto, el hombre lanzo
un grito que despertó a su mujer y los niños, fue lamentable observar tal ruina por los integrantes de
la familia. El padre en esos momentos se prometió que jamás mentiría y no cogería ningún animal
del bosque, ni vivo ni muerto. Parece que aprendió la lección y persevero de nuevo para levantar tal
desorden de la finca y vivieron el resto de sus vidas respetando al bosque y trabajando duro para
satisfacer sus necesidades vitales y darles un porvenir a sus hijos.
UN LARGO VIAJE

Cierto día un cóndor decidió realizar un viaje. Éste estaba muy entusiasmado en querer
conocer los climas que sus ancestros les habían contado, él sabía que el Perú tiene tres mundos bien
definidos: la costa, la selva y la sierra, aquel que conocía de memoria, porque nació y estaba
creciendo en ella. Así que llego el día inesperado para él, alisto su equipaje y corrió a despedirse de
sus padres, muy feliz y animado por la travesía que iba a dar, aunque para ellos era una locura que
su único hijo iba realizar, su madre estaba muy triste sabiendo que era un riesgo, nadie antes había
salido de ese mundo andino, decía. Del mismo modo sus amigos le decían que era una locura y que
los humanos lo matarían, más él los ignoro y empezó su largo viaje.
Primero se dirigió a la costa, al descender de las frígidas montañas, el cóndor avizoraba los
bellos paisajes, era sorprendente ver tantas cosas que nunca había visto, oía dulces melodías al trino
de las aves propias de la costa, después, de largo vuelo cual dueño señor de los cielos, estos tan
limpios y que ahora se tornaban grisáceas, negruzcas y olorosas que interrumpían el vuelo del ave
andina, por ratos le faltaba el aire para respirar, era muy denso el aire, que por su vida tenía que
aterrizar, y la sorpresa fue más y más al ir descendiendo, de un tiempo a otro logro tocar con sus
garras montañas estructuradas, lo cual llamo jaulas humanas que eran inmensas y en todas partes,
crujía en sus oídos ruidos insoportables que venían de bloques coloridos de formas variables que
corrían por líneas rectas liberando tiras de humo nauseabundo, que aflige al cóndor a sueño
profundo.
En un lecho no muy armonioso el ave andina despierta y todo está tenue y sombrío, es de
noche y tiene hambre; observa a lo lejos humanos inconscientes arrojar bolsas a las calles y al poco
rato cual hienas hambrientas, los perros salen al ataque a devorar las bolsas, todo es desagradable,
se acerca el cóndor para ver de más cerca y quizá encontrar algo para mitigar tal hambre que
devoraba su buche.
Días consecutivas por dos meses el ave andina surca los cielos tratando de recrearse con sus
acrobacias y avizorando todo a su paso y lo que los humanos hacen en ese mudo llamado costa.
Tras ver y oír en ese espacio de vida muy triste y frustrado prosigue su viaje. Ahora le toca llegar a
conocer el mundo de la selva, esperando que no sea igual o peor que en la costa.
Al ir ascendiendo a la cordillera de los andes se repitió lo ya observado, pero volaba algo
preocupado pensando sobre la variación de las condiciones climáticas tal como escucho de la gente
cuando estaba en la costa, ellos no estaban tan contento por el clima y más el nivel del calor sube
cada vez más, por lo que los humanos están tan temerosos. El ave saco su propia conclusión y digo:
ya sé porque nuestros hogares se están derritiendo, es por las acciones irresponsables de los que
habitan en el mundo de la costa, generando tanta contaminación y consumo de la superpoblación
que existe ahí.
Muy preocupado cruza los pocos glaciares de la imponente cordillera de los andes cual yace
todo misterioso, rumbo a la prodigiosa selva, ya empieza avizorar mantos verdes a lo infinito de la
planicie, por un momento se queda algo pasmado, pálido y muy tenebroso a la vez, que infringe con
su vuelo cual avión derribado y va cayendo, hasta que logra controlar tras una maniobra de su ala y
cola. Al ir introduciéndose en la espesa selva se maravilla de tales arboles con asombro, ve un sin
número de animales que nunca pensó que existieran tales especies exóticas.
De tanto sobrevolar por ese manto verde pretende aterrizar en un paraíso bello que se le
conoce como Yanachaga Chemillen, lo reciben los cálidos olores de las mágicas orquídeas
multiformes, imponentes árboles que cobijan a los dulces sin par gallitos de la roca, donde se
cuelgan los osos de anteojo, hermosas quebradas que destilan aguas cristalinas refugio de los peces
y donde refrescan sus cuerpos la sachavaca y sacian su sed los venados, todo un paraíso, creación
divina de nuestro padre altísimo. Tras bambalinas aterriza el ave y todos atónitos le quedan
observando porque nunca vieron algo igual por ahí. El cóndor todo sereno y amigable se presenta,
soy el ave rey de la nieve más conocido como el cóndor del ande, vivo en el mundo de la sierra, y
he venido a conocer la selva soy indefenso vengo en son de paz, así que me gustaría conocerlos.
Fue entonces que se asecho al ave el jefe de los gallitos de la roca, al ver eso los otros
animales, también se dispusieron cercar al ave andina para darle la bienvenida tal como se destila
hacer en la selva, el cóndor decidió quedarse tres meses, en lo que respecta cada día era una visita
maravillosa al corazón del majestuoso Yanachaga, el cóndor hizo tantos amigos que era increíble,
se pasa horas y horas practicando, de cómo los humanos están tratando de entrar a su casa para
sabotear sus maderas y su biodiversidad; también le cuentan que sus antepasados le heredaron el
doble de terreno que actualmente tienen, y con el correr de los años los humanos migrantes han
reducido y siguen reduciendo nuestro habitad por todos los flancos, son como fieras agresivas y
salvajes, que no reparan con tal de vivir a cuesta de tantos animales que fueron nuestros hermanos y
murieron de la peor manera quemados, mutilados en las trampas. Pero no por mucho tiempo
nosotros viviremos felices aquí en el Yanachaga, pero por ahora estamos bien aquí. El cóndor
también le conto lo que vio en el mundo de la costa y se pusieron muy triste al escuchar tal versión.
Por otro lado también le conto como era el mundo de la sierra y que el clima también está
cambiando por ahí, no existe mucha vegetación ni mucha fauna, narra el cóndor algo triste al
recordar a su familia. Llegado el tiempo muy por la mañana deja el clima cálido tropical de la selva,
se despide de sus amigos que de mencionar se haría una lista interminable, fue muy acogedor su
mundo replico el cóndor a sus amigos, ellos gritaron no nos olvides recuérdanos y vuelve cuando
quieras esta también es tu casa, lo se respondió el ave andina al coger el vuelo rumbo a su casa, un
eco por un instante cautivo el oído de sus amigos, los llevo en mi corazón, mil gracias por todo.
Al llegar a casa todos del barrio salieron a recibir al aventurero loco que sin temor voló por
la costa y la selva, sus padres no podían creerlo que su hijo regreso, ellos pensaron lo peor que
nunca más volverían a ver a su preferido, hicieron ese día un festín para celebrar el regreso del
atrevido joven. Era el centro de atención y atracción para las hembras de su especie, por tal valor
demostrado. El joven cóndor desde ese día viene contando a los pequeños, de que los humanos
están atentando nuestros climas, y se debe hacer algo unir esfuerzos con los animales de los tres
mundos, ya que ellos están dispuestos atacar, para frenar las malas acciones humanas. Por otro está
preparando y adiestrando a jóvenes cóndores para zarpar a tal cometido, en defensa de su habitad.
Pronto saldrá una expedición de cóndores para poner una voz de protesta al mundo de la costa. Por
ahora todavía tienen que soportar vivir en alerta.
EL GIGANTE CLEMENTÍN

Hace mucho, mucho, muchísimo tiempo, ¡ayer por la tarde!, cuando los gigantes y los niños
jugaban juntos en las plazas de los pueblos, ocurrió algo muy extraño… 
Un buen día unos niños que paseaban, se encontraron con CLEMENTÍN el gigante bailarín,
sentado junto a un contenedor, calladito, quietecito y con una cara muy triste, cuando los niños se
acercaron para jugar con él, se dieron cuenta que estaba llorando, entonces le preguntaron: 
Clementín ¿por qué lloras, qué te ha pasado?
Y el gigante contestó: mi mamá todos los días me da una bolsa de basura para que la tire en
el contenedor, pero… como somos una familia de gigantes, generamos una bolsa de basura tan
grande como un camión, y claro, no cabe en el contenedor, tengo que dejarla fuera y todos se
enfadan conmigo.
Los niños se miraron, y comenzaron a hablar entre sí muy bajito y pronto le dijeron a Clementín: 
No te preocupes, no estés triste que nosotros podemos ayudarte. En nuestro pueblo viven
tres sabios, los reconocerás por sus gafas y largo pelo blanco. Para encontrarlos tendrás que tomar la
primera vereda al salir del pueblo y dirigirte hasta la montaña del fondo. Pero, para que te ayuden
tendrás que ir cantando “Erre que erre, me encantan las 3 r”, pronto llegaras a su casa y si les llevas
tu bolsa de basura, ellos te darán la solución.
Gracias chicos, eso haré… dijo Clementín. Se limpió las lágrimas y salió corriendo cantando “erre
que erre, me encantan las 3 r” 
Y así, cantando, llegó hasta la casa del primer sabio… Clementín, llamo a la puerta, toc,
toc, toc y salió un hombre con gafas y una larga melena blanca, ¿será el sabio? Pensó… Y
Clementín, de forma atropellada, le contó lo que le pasaba, a lo que el sabio le dijo: 
No te preocupes Clementín, yo soy el sabio ENRICO y para mí todo está muy rico, por eso nunca
nada de comida tiro. A ver, a ver, déjame que vea tu bolsa, ¡umm!, un bocadillo a medio terminar y
un vasito de yogurt por la mitad. Clementín si menos basuras quieres tirar, solo lo necesario has de
usar, termina tu comida y si no tienes ganas de verdad, no se lo pidas a mamá y a papá.  Y con esto
que te acabo de decir, ya sabes Reducir. 
De pronto la bolsa de Clementín se hizo un poco más pequeña, y él se puso tan contento
que decidió seguir con su visita a los sabios, así que, muy agradecido se despidió de Enrico… y
siguió cantando “Erre que erre, me encantan las 3 r”, hasta llegar a la puerta del siguiente sabio…
“Toc, toc, toc”, llamó Clementín a la puerta y salió una mujer con una melena larga, larga, larga y
blanca, blanca, blanca… 
Buenos días Señora sabía, dijo Clementín. ¿Me podrías ayudar para hacer más pequeña mi
bolsa de basura? 
Entonces la sabia le contestó… Hola Clementín, soy la sabia ITZAR y me encanta Reutilizar.
Veamos que llevas ahí…. Umm una botella de plástico, llénala de agua y ya basura no será, y…
¡ohhh! una hoja de papel, dale la vuelta, pinta por detrás y así ya no la tendrás que tirar. 
Y justo cuando el gigante iba a decir Reutilizar, su bolsa encogió otro poquito más… 
Que feliz que se puso Clementín, gracias Itzar, me voy a visitar al tercer sabio… le dijo, y
se fue cantando… “Erre que erre, me encantan las 3 r”. 
Así llegó a la última casa, y como le habían contado que este sabio solo habla con niños que ponen
una cara muy rara. Así que, antes de llamar, puso una cara muy rara. y.. toc,Toc Toc, llamó
Clementín. 
Buenos días, señor sabio, ¿me podría ayudar?
Oh, dijo el sabio, ante la cara rara de Clementín. Por supuesto, yo soy el sabio CLAR, y me
encanta Reciclar y lo primero que tendrás que aprender, será a Separar. Así, en lugar de una bolsa
grande, ahora cuatro pequeñas usaras, una para papel y cartón, otra para vidrio, otra para envases de
plásticos y latas y otra para restos de comida. 
Y de pronto, la gran bolsa del gigante se transformó en cuatro bolsas pequeñas, y el sabio le dijo, ya
lo sabes Clementín, nunca te olvides de las tres r…  
REDUCIR, REUTILIZAR Y RECICLAR
Y… así solo bolsitas pequeñas tendrás que sacar… Clementín quedó tan contento, que hizo lo que
más le gustaba… bailar, y cantar y así se fue hasta su casa para contarles a sus padres lo aprendido. 
Y colorín, colorado, este problema Clementín ha solucionado.
SORPRENDIDO CAZADOR

Era un amante de las mariposas, en el sentido que le apasionaba cazarlas. El día a día imaginaba
formas de capturarlas y colocarlas en el álbum o quizá en un cuadro para colocarlo a la pared de su
casa. Cada vez más era el esmero del extremista joven en cuestión a la colección de mariposas, toda
vez que ya superaba buen número de ellas. Su búsqueda era tan necesaria que el joven buscaba
lugares inhóspitos del bosque para encontrar mariposas de diversas formas y colores, que hacen de
ellas un camuflaje impresionante en el bosque. Un buen día de tenaz búsqueda por el campo ante la
interrogante de las flores y ante su negativa, ya de regreso a casa, se acostó en el pedestal de su
lecho siendo presa de profundo sueño. De pronto corría con su gran red en la mano a tras de una
gran mariposa de colores nunca antes visto, un espécimen de atracción inmediata y de buen valor,
entre sueño dio un salto y la capturó. Mientras caminaba de regreso orgulloso y con gran precaución
para que la mariposa no escapara, le pareció escuchar gritos desde su interior, acerco su oído a la
bolsa y que crees, escucho a alguien llamar por su nombre.
¡Efrén! ¡Efrén! Por favor…, Y nuevamente cual timbre el eco de una voz lánguida
suplicante ¡Efrén! ¡Efrén! Por favor suéltame. Muy asombrado el joven metió la mano dentro de la
red y cuidadosamente cogió a la mariposa, el cual se posó sobre la mano, sacudió sus coloridas alas
y se quedó muy quieta con su mirada puesta al cazador. Y este ataviado lo examinaba con sus ojos
con tal admiración de resplandeciente belleza, preciosos colores brillantes aterciopelados todo el
cuerpo del animálculo.
De pronto otra vez esa vocecita fina al oído del joven llamándole: ¡Efrén! ¡Efrén! Acercase
más, así me escucharás mejor….
El joven muy curioso por su puesto a tal admiración de la voz sacó una lupa del bolso sujeto en su
hombro y observó muy fijamente a la mariposa todo su cuerpo; pero grande fue la sorpresa que se
llevó el entrañable coleccionista al observar entre las alas a un diminuto hombrecillo que agitaba
sus minúsculas manos en son de saludo. Este hombrecillo de modales muy amables le dijo: mi
nombre es Clementin y vengo directo de la embajada del país de los suspiros, porque cada vez que
un humano suspira, nace una bella mariposa, pues dijo el pequeñín de suaves modales.
Y el joven pregunto ¿Por qué viniste hasta aquí? y ¿Cómo sabes mi nombre? Le respondió,
en el país de los suspiros es usted muy famoso entre muchos cazadores y coleccionistas, usted es el
destacado entre todos por la gran cantidad de mariposas que ha atrapado en tan poco tiempo,
lamentablemente eso está causando una gran preocupación allá en la ciudad, se están
desapareciendo las mariposas, por lo que tengo una misión contigo.
Entonces el hombrecillo le pidió que se acercara más y acariciando a la mariposa saco un poco de
polvo que tenía en las alas, soplo con mucha fuerza sobre el rostro del joven y de pronto estaba
convertido en Mariposa, caminó con sus patitas todo débiles hasta un pequeño espejo que tenía
sobre la mesa y se miraba sorprendido y con la cara de asombro se dirigió hacia Clementin, que él
con una gran sonrisa le dijo: ¡Vamos bella mariposa! No perdamos el tiempo. Salieron por la
ventana y casi sin darse cuenta… ¡ya estaba volando! El diminuto hombrecillo le llevo a recorrer
por todos los lugares donde las mariposas pasaban su tiempo. El extraño cazador se sentía feliz, ¡no
podía creer que estaba volando! jugaba en el aire dando volteretas, abría sus alas y planeaba, por
primera vez disfrutaba esa maravillosa sensación que todo ser humano desea sentir, la de volar con
alas propias. Al caer la tarde Clementin le condujo hasta un campo lleno de flores silvestres, Efrén
convertido en mariposa se detuvo sobre una flor de dulce aroma y casi por instinto comenzó a beber
el néctar. Estaba disfrutando tanto de esas sensaciones nuevas, de ser libre, jugar, comer y divertirse
sin horarios e ir a donde quisiera sin preocuparse por nada. Pero en el mejor momento, una sombra
le cubrió por completo, Clementin le grito, ¡Cuidado Efrén tienes una red!, el miro hacia arriba y
vio una gran bolsa que le cubría por completo. Todo se oscureció, luchaba por salir pero lo único
que lograba era cansarse demasiado y terminar lastimado. A los pocos minutos decidió no luchar
más, sentía que la bolsa se mecía y le mareaba. Mientras pensaba que sería de él y que habría
pasado con Clementin, se abre la bolsa y una mano le saca para meterlo en un lugar que le parecía
muy familiar, ¡era una jaula para mariposas, como la que él solía usar! Solo que esta era más grande
y horrible. Miro alrededor y vio a algunas mariposas que se golpeaban contra el alambre por querer
salir, a otras posadas sobre una planta con aspecto triste y unas que se dejaban caer al suelo, a estas
últimas, preguntó por qué volaban alto y luego caían como si algo las derribara, pues una mariposa
le respondió:
¿Es que no sabes? Nos derriba la tristeza de saber que aquí moriremos porque hemos sido
atrapadas por un coleccionista que primero nos cuenta y luego una por una nos pincha con un alfiler
y nos guarda en un cuadro que después cuelga en una pared. ¡Ah! ¡Qué terrible! ¿Y no hay forma de
huir? Pregunto todo desesperado. No, solo esperar que te llegue nuestro turno. En ese momento
recordó Efrén lo que hacía y lloro sin cesar porque pensaba en el daño que causaba a esas hermosas
criaturas del aire, tan bellas y con una libertad única, libertad que el como tantos otros les robaba.
Entonces subió hasta lo más alto de la planta y se posó sobre una rama, ahí recordaba a Clementin
ese extraño hombrecillo que le había enseñado lo hermoso que era ser mariposa.
En ese instante el cazador le toma muy cuidadosamente y le lleva hasta una mesa con una
gran lámpara, muy aterrado mira la mano del hombre que se acercaba lentamente con un espantoso
y gigante alfiler, comenzó a sentir como el metal perforaba su cuerpo, el dolor le invadía y
rápidamente todo alrededor oscureció. De pronto abrió sus ojos y atisbo raudamente los 360 grados
del entorno y exclamo ¡solo fue un sueño espantoso! El coleccionista se levantó del pedestal de un
salto, corrió hasta el espejo y se vio igual, ya no tenía aspecto de mariposa, comprendió que todo
había sido un sueño, un terrible sueño.
Se vistió y salió a disfrutar el bello día que recién comenzaba, meció las flores con sus
manos, corrió por el campo y abrió los brazos como si quisiera volar, corrió tanto hasta agotarse, se
sentó debajo de un árbol dejando caer sus manos sobre el suelo con sus palmas hacia arriba y
mientras tenía los ojos cerrados sintió un suave cosquilleo en su mano derecha, miro y vio que una
mariposa se había posado, entonces recordó el sueño y pensaba en Clementin, en la mariposa
gigante, pero sobre todo en el terrible sufrimiento que padecen las mariposas cuando son atrapadas.
Alzó su mano y soplo a la mariposa para que volara, allí mismo prometió que nunca más atraparía a
una mariposa más, en vez de eso se convertiría en un protector del ambiente.
Al pasar el tiempo llego a construir un lugar donde llevaba a aquellas especies que estaban
en peligro de extinción, sobre todo las mariposas; y las liberaba cuando lograba que su número se
duplicara. Comenzó a gustar tanto que cada vez que abría la puerta donde tenía las mariposas podía
llegar a ver como aquellos animalitos se iban felices, en ese momento hermoso cerraba sus ojos y se
imaginaba que iba volando con ellas disfrutando de lo maravilloso que era ser una mariposa, ya que
antes lo había podido disfrutar pero solo en un sueño, pero un sueño que le hizo ver la realidad de
un animalito, bueno pero que sentía en su interior, continuaba siendo una mariposa libre de todo.
“No capturemos a un animalito por pura diversión, ya que hoy en día se están acabando los
animalitos; no solo las mariposas sino todos los animalitos del mundo.” “No hay animal feroz, pero
hay personas quienes obligan a los animalitos a hacerlo pues, no saben cómo defenderse de nosotros
los humanos salvajes”.
EL HOMBRE Y SU NATURALEZA

Hermoso riachuelo de agua fresca y cristalina, que los peces silvestres surcaban libres sin
ningún temor, el aire silbaba independientemente con suaves melodías que eran un primor, en las
ramas de los frondosos árboles anidaban muchas clases de aves multicolores, además los rayos del
sol alumbraba muy radiante sus días con efusivo calor y la vital energía para una correcta simbiosis
en el ecosistema, así el hombre era muy feliz al lado de su querida familia y con una vida
campestre, pues el campesino disfrutaba con vivacidad de la madre naturaleza, eso le daba ánimo
para su labor, así trabajaba sin descansar, hizo sembríos de pan llevar, también hizo su ganadería y
todo en él era progreso, cortaba los tupidos árboles, también quemaba la valiosa madera que le
estorbaba para hacer sus sembríos y sus pastizales que necesitaba para su ganado, entonces
comenzó a salir la mala hierba en sus tierras, donde él campesino acudió a la fumigación para
ahorrar tiempo y trabajo al matar hierba mala.
Así fue, los años pasaron y un buen día el hombre se dio cuenta que el sol quemaba con
fuerza y casi no había sombras para descansar, también el paisaje ya no era hermoso como antes, le
parecía muy triste, sin alegría, tampoco escuchaba silbar el viento sus bellas melodías y las
hermosas aves no anidaban en los ya árboles escuálidos. Él miró el paisaje, notó que no había nada,
solamente pasto, eso le entristeció al campesino, más tarde quiso pescar en el riachuelo, pero
encontró sucio y sin peces, habían muerto por la contaminación, además el agua estaba caliente y
algo ácido. Lástima se dio cuenta que había malogrado la naturaleza, eso le entristeció al hombre, a
tal punto que brotó e inundó lágrimas sus ojos de piedad.
Entonces se fue a su casa y contó a sus hijos, el muchacho que estaba estudiando en la
universidad le contestó con comprensión por la ignorancia de su padre:
- Padre mío, un profesor dice que no debemos cortar y quemar muchos árboles, tampoco
fumigar tanto la tierra, es perjudicial para el ambiente y sobre todo a los seres vivos.
-Eso ya lo veo, pero ahora ¿Qué debo hacer para remediar el daño a la naturaleza? Pregunta
el padre.
El joven le respondió con voz calmada y muy afectuosa:
-Primeramente entender y tomar conciencia, que la naturaleza es viva. Como una madre
fecunda que requiere de cuidado.
-¿Por qué hijo mío? Preguntó el hombre intrigado. Y este le contestó
-Porque la naturaleza nos acepta con amor y encontramos en ella el oxígeno que con
esfuerzo producen las plantas; asimismo nos da su agua, ya sea en gotas de lluvia, riachuelos,
lagunas; también nos facilita sus tierras para producir nuestros alimentos y ciar nuestros animales.
-¡Que maravillosa es la naturaleza! Reclamo el campesino maravillado.
-Claro que si padre, por eso es nuestra madre naturaleza. Contesto el hijo.
-Si pues.
Aquí el joven añadió:
-Por eso debemos evitar la contaminación y la deforestación.
El hombre en su ignorancia preguntó:
-¿Qué es la contaminación?
Y el joven le contestó:
-Contaminación es impregnación del aire, el agua o el suelo con productos que afectan a la
salud del hombre, la calidad de vida o el funcionamiento natural de los ecosistemas…
Pronto el campesino preguntó interrumpiendo la explicación de su hijo:
-Hijo mío ¿Qué es ecosistema?
-Ecosistema es la comunidad de los seres vivos cuyos procesos vitales se relacionan entre sí
y se desarrollan en función de los factores físicos de un mismo ambiente.
¡Humm! ¡Humm!
El hombre se quedó pensativo, pero el joven prosiguió con su explicación de
contaminación.
-se da la contaminación de la atmósfera por emisiones industriales, incineradoras, motores
de combustión interna y otras fuentes.
Aquí el hombre un poco avergonzado preguntó:
-¿Qué es atmósfera?
El muchacho se dio cuenta que su padre sentía vergüenza, pero quería saber muchas cosas,
por eso le respondió con un tono suave y amable:
-Atmósfera es la capa de aire que rodea la Tierra o capa gaseosa que rodea un cuerpo
celeste u otro cuerpo cualquiera, también en la atmósfera hay otra capa que se llama la capa de
ozono.
El campesino le miró a su hijo, como diciéndole que es eso y el joven comprendió la mirada
de su progenitor, por eso continúo explicándole:
-Capa de ozono es una zona de la atmósfera que abarca entre los 20 y 40 km por encima de
la superficie de la Tierra, en la que se concentra casi todo el ozono atmosférico, en ella se producen
concentraciones de ozono de hasta 10 partes por millón. Papá ¿Quieres saber que es el ozono?
-Claro que si hijo mío.
Entonces el muchacho comenzó su explicación:
-El ozono se forma por acción de la luz solar sobre el oxígeno, esto lleva ocurriendo
muchos millones de años, pero los compuestos naturales de nitrógeno presentes en la atmósfera
parecen ser responsables de que la concentración de ozono haya permanecido a un nivel
razonablemente estable, a nivel del suelo, unas concentraciones tan elevadas son peligrosas para la
salud, pero dado que la capa de ozono protege a la vida del planeta de la radiación ultravioleta
cancerígena, su importancia es inestimable. Por ello, los científicos se preocuparon al descubrir, en
el año de 1970, que ciertos productos químicos llamados clorofluorcarbonos, o CFC. Compuestos
del flúor, usados durante largo tiempo como refrigerantes y como propelentes en los aerosoles,
representaban una posible amenaza para la capa de ozono, al ser liberados en la atmósfera, estos
productos químicos, que contienen cloro, ascienden y se descomponen por acción de la luz solar,
liberando átomos de cloro que reaccionan fuertemente con las moléculas de ozono; el monóxido de
cloro resultante puede, a su vez, reaccionar con un átomo de oxígeno, liberando otro átomo de cloro
que puede iniciar de nuevo el ciclo. Otros productos químicos, como los halocarbonos de bromo, y
los óxidos de nitrógeno de los fertilizantes, son también lesivos para la capa de ozono.
-Ahora comprendo que debemos cuidar la capa de ozono porque ella nos protege de la
radiación ultravioleta, que es muy cancerígena para el hombre, los animales y asimismo de las
plantas, replico el campesino.
-Mejor dicho protege a la vida del planeta.
Dijo el joven con tono afable y añadió:
-También tenemos que cuidar la contaminación del agua, los ríos, los lagos y los mares por
residuos domésticos, urbanos, nucleares e industriales.
-¿Qué? También el agua se contamina, manifestó el campesino.
-Si padre, respondió el joven, por eso debemos cuidar al elemento vital del mundo.
-Y ¿Cómo? Preguntó el campesino y su hijo le contestó.
- no arrojando los residuos sólidos, depurando las aguas magras o producto de la energía
nuclear, también conservando nuestros bosques para mantener la frescura y pureza del agua.
-Eso pues, hijo mío.
Dijo el aldeano moviendo su cabeza y el joven añadió:
-los efectos de la contaminación del agua incluyen los que afectan a la salud humana, por la
presencia de nitratos…
Aquí el campesino interrumpió preguntando:
-¿Qué es nitratos?
-Son unas sales del ácido nítrico, en el agua potable puede producir una enfermedad infantil
que en ocasiones es mortal, el cadmio presente en el agua y procedente de los vertidos industriales,
de tuberías galvanizadas deterioradas, o de los fertilizantes derivados del cieno o lodo puede ser
absorbido por las cosechas; de ser ingerido en cantidad suficiente, el metal puede producir un
trastorno diarreico agudo, así como lesiones en el hígado y los riñones. Hace tiempo que se conoce
o se sospecha de la peligrosidad de sustancias inorgánicas, como el mercurio, el arsénico y el
plomo.
-Entonces hijo mío, todos podemos cuidar a la maravillosa madre naturaleza.
-Si padre, todos podemos y debemos proteger a nuestro planeta para dejar a las
generaciones futuras un mundo limpio y sano, con todas sus maravillas…
Aquí interrumpió el campesino diciendo:
-La madre naturaleza es una maravilla del mundo.
-Claro papá, la naturaleza es la madre del mundo, por eso debemos respetar sus leyes y
convivir en armonía, no destruyendo los bosques, porque son hogares de muchos seres vivos que
dependemos nosotros para nuestra subsistencia, asimismo los ríos, los lagos y los mares tienen
animales que nos sirven para la vida.
-Si hijo, tienes razón, pero yo no sabía el daño que estuve haciendo con mi trabajo, tratando
de obtener mi propia riqueza, sin darme cuenta que era el causante del deterioro de la naturaleza que
nos brinda todo sin cambio alguno solo el respeto y cuidado, entonces ¿Qué debo hacer para
remediar mi error?
Preguntó con preocupación el aldeano a su hijo, y este le respondió con siguientes palabras:
-Por eso el hombre debe cuidar su ambiente para nuestro bienestar, conservar el aire puro y
limpio, nuestras aguas cristalinas y un cielo sin humo, también debemos respetar a la naturaleza
porque ella nos brinda su belleza, su energía y sus secretos para nuestra felicidad, vivamos y
disfrutemos en este hermoso mundo que Dios nos dio, valorando sus suelos, sus campos, sus ríos,
sus plantas y su gran biodiversidad.
LA DONCELLA DEL RÍO

En la lejanía de un bosque ya en una loma sentada esta una cabaña miserable, que en las
noches de lluvia parecía como si fuera a destruirse, coronada por un prominente rio bajo el humilde
hogar, ahí estaba el pescador Don Martin y su vil mujer, desde buen tiempo ya, intentaban
sobrevivir, a pesar de ello el pescador se sentía muy feliz ante las carencias y necesidades
insatisfechas, pero lo bonito era que siempre tenía expresiones cariñosas para con su mujer. Ella,
por el contrario, era muy ambiciosa y constantemente le respondía con enojos.

Cierto día, Don Martin echó su red a las mansas aguas del rio Comparachimas, en busca del
sustento diario, pero extraña sorpresa encontró el pescador al sacar sus redes varias veces siempre
vacía. No era normal, aunque si estaba escaseando. Muy preocupado, decidió seguir canoa rio
abajo, echó nuevamente la red y pronto sintió que la red se movía, se puso algo contento porque
regresaría con alimento a casa, pero pesaba demasiado se esforzaba para recoger la red, al instante
vio un enorme pez, siguió entre asombro y felicidad jalando la red, ya en la canoa distinguió una
doncella enorme (Pseudoplatystoma fasciatum). Este saltaba desesperadamente, de pronto grande
fue su sorpresa cuando escucho una voz salir del pez “Buen pescador, acaso no sabes que nosotros
somos una especie en vía de extinción, déjame vivir. ¡Déjame vivir! ¡Devuélvame a mi hogar! Era
tan la escena que conmovió al pescador y éste sintió compasión por el animal.
Realmente, de nada has de servirme, ¿Qué haría con un pez que habla? Respondió el
pescador, mientras liberaba la presa. ¡Vuelve al río y sigue viviendo! Por último exclamó. La
doncella, con gran aleteo desapareció en el acto en las profundidades del caudaloso
Comparachimas.
De retorno a casa sin nada entre las manos, conto lo sucedido a su mujer. Como de
costumbre éste, gruñó, sentía rabia por lo de su marido. Siempre serás el mismo tonto, le dijo
furiosa. Hubiéramos sacado buen provecho del gordo animal. ¿Cómo no te paso por la cabeza
solicitar una recompensa?; ante el cuestionamiento de Rosaura, el hombre contestó: ¿Qué habría de
solicitar? Ella dijo, mira ¿Sí, ésta es casa? yo deseo una casa muy hermosa ¡Pídeselo! Insistió la
mujer.
Él decidió complacerle, busco rio abajo al misterioso pez, pero notó algo raro en las orillas
del río, flotaban algunos residuos sólidos, él no atino tomar importancia, ante el olor desagradable,
se acercó a la orilla y llamó: Doncella mágica, acércate a mí, mi esposa reclama una gracia de ti.
Entonces raudamente apareció el pez y le preguntó qué deseaba. Martin el pescador explica en
anhelo lujurioso de la mujer, y la Doncella respondió: “Deseo cumplido, vuelve a tu casa, pero no
abuses”.
En la loma ahora una hermosa casa espera al pescador, la mujer lo recibe alegre y no
rabiando como solía hacer. Pasaron unos días y su ambición creció. Ahora quería ser dueña del
bosque y de los animales. Don Martin, vacilo tal idea, poco razonable. Ella insistió, el pobre
hombre volvió al río. Esta vez las aguas tenían un color muy oscuro y mal oliente. Algo paso por su
pensamiento del hombre, no será un castigo por los deseos concedidos a mi esposa, que el río se
esté contaminando. Lleno de temor, el pescador avanzo a la orilla y llamó: Bella doncella,
¡Doncella mágica! Acércate a mí, Rosaura solicita una gracia de ti. ¿Qué es lo que desea tu mujer
ahora? Dijo la doncella algo apenada. Solicita ser dueña del bosque y de los animales, respondió
don Martin. La doncella dijo: Vuélvete en seguida, que ya lo tiene, y se hundió velozmente en el río
como si huyera de tal desgracia. Muy incómodo llego a casa el pescador, ahora estas contenta, ¡Ya
tienes lo que deseabas! ¡Espero que estés satisfecha! ¡Quién puede con tu avaricia! Algo terrible
está pasando con el rio, repicó algo culpable el pescador.
Siguió pasando los días, de pronto en la mujer despertó otro interés, ¿Quisiera poseer los
ríos y todos los que viven en él? Al oír esto Don Martin, exclamo: ¡Por Dios, Rosaura! ¡Cómo se te
ocurre semejante cosa! Más ella insistió. Por lo que el hombre tuvo que dirigirse a orillas del río
para solicitar tal deseo, caminó con gran temor y avergonzado. Notó que las aguas estaban inundado
por basura, aguas espumosas mal oliente oleaban con bravura a las orillas, con voz tenue algo
asustado llamo: Doncella mágica, acércate a mí, mi mujer solicita una gracia de ti. Ser dueña de
los ríos y las vidas de él. Vuélvete, que tu esposa ya lo tiene, y en remolinos turbios desapareció. El
pobre hombre con cargo de conciencia y dolor en el pecho, divago por el río. Era culpable por no
poner control a la situación, por él las vidas de los animales corren en peligro. Muy consciente y
con valentía retorna a casa para poner orden, pero ve a su mujer muy feliz por tal poder, lo que hizo
su ambición más aún poseer todo del cielo, el sol, la luna y las estrellas. Ve pídeselo de inmediato
ordenó la lujuriosa mujer. Por lo que el pescador contesto: ¡Te volviste loca acaso! ¡Has ido muy
lejos! ¡Abusaste demasiado por la gracia del pez! ¡No puedo hacerlo! ¡El río me devorará! Ella
insistió, por lo que el aterrado pescador, nuevamente se volvió al rio, presencio que era el fin de su
vida, con voz enérgica y valiente llamó: ¡Doncella mágica! ¿Dónde estás?, mi esposa solicita una
gracia de ti. Ella se asomó entre el terror de las aguas y pregunto ¿Qué quiere ahora tu mujer? Él,
contesta todo furioso, ser dueña del cielo y de todos los que habitan en él. Pues, la Doncella muy
enojada replicó: llego demasiado lejos tu mujer, ahora pagará las consecuencias por su avaricia
desmedida, acaso no sabe que la naturaleza es de todos y nadie puede solicitar ser su dueño, por lo
que tu mujer vivirá desolada de la naturaleza, volverá a vivir en su realidad, así que vuélvete y
hallarás donde corresponde. Y nuevamente el río volverá a estar muy limpio. Terminaba algo alegre
la doncella mágica. Al llegar a casa el pescador, encontró a su mujer lamentándose, muy triste y
llorosa. Lo que el hombre dijo, la ambición no trae a nada bueno, uno debe ser feliz con lo que
tiene. Y no podemos ir codiciando nuestra naturaleza, más bien es deber cuidarla y protegerla.
CANGREJIN EL CUIDADOR AMBIENTAL

En la hermosa Tierra en donde reinan las brisas, las olas y un incesante sol que al contacto con la
arena de las orillas de un majestuoso mar producen un calor a todos los bañistas que lo visitan. En
ésta habita una familia de cangrejitos, los padres muy preocupados por la seguridad de sus hijos no
dejaban salir, son ellos que siempre llevan todo lo necesario para que subsistan; pero un día
Cangrejin muy curioso se puso a pensar ¿Qué podría pasar si solo salgo unos metritos de mi casa?
de seguro que no pasa nada. Son mis padres muy exagerados.

Sin presagiar lo que le ocurriría, este atrevido cangrejin asomó la cabeza sin temor alguno y dijo: -
¡No pasa nada! luego continúo con sus patitas endebles, exclamando: -¡No pasa nada! Ya al notarse
con el cuerpo completo frente a casa, repico: -¡No pasa nada! En un lapso de tiempo ¡Magnífico!
¡Magnifico no pasa nada! En ese momento decide realizar su aventura, conocer todo lo que rodea su
morada, ve que todo es tan hermoso, se pregunta ¿quién podría dañarme en este ambiente?

En su travesía conversa con las olas del mar agradeciéndole por refrescar sus patitas, observa salir
unos pequeños animalitos que se mueven tan rápido perdiéndose en su mirar. Recuerda que siempre
sus padres traía como alimentos a estos diminutos seres, coge con gran delicia, cuando está a punto
de devorarlo por su boca hambrienta, el pequeño le dice: -¡Por favor no me comas! Cangrejin
responde: somos parte de ésta cadena alimenticia “Te como y me comen” es la ley de la vida; pues,
todos lo que estamos en esta majestuosa naturaleza cumple el principio del equilibrio ecológico.

Luego de saciar su buche el pequeño Cangrejin decide tomar una siesta, entre sueños sin
desconcertarse de su realidad escucha a lo lejos bullicios venir, siente que alguien lo acaricia y de
inmediato es despertado, sorpresa al abrir sus ojos, observa animales gigantes de rasgos terroríficos,
que se mueven de forma extraña. Él se pregunta: ¿Quiénes serán estos animales tan grandes?
Continúa vociferando, han venido a invadir mi territorio y a ensuciar mi hogar con sus malos
hábitos.

Ya unos pequeños vástagos de estos grandes animales extraños corren y corren persiguiendo a los
miembros de mi especie, al atraparlo juegan con ellos a tal hecho de asesinarlos, es ahí que
Cangrejin salta por defender a sus amigos al ver tal escena criminal, sin darse cuenta que fue
atrapado por el animal grande, en su ganas por escapar, grita, patalea, pero es inútil solo llora de
impotencia.

En ese cuadro de abuso desde lo profundo atisba un mar en calma. Al no ver liberado al sollozo
Cangrejin, respondió con sus olas, diciendo: no te preocupes Cangrejin que iré a tu rescate ya que
soy la guardiana de las playas. Por lo que Cangrejin se pregunta: ¿cómo podrás ayudarme si no
tienes patas ni manos?

Calma, tranquilo verás mi majestuosidad, en eso las olas comenzaron a embravecerse, alzó su
tamaño tan grande capaz de cubrir por completo al extraño animal. Al instante cae la ola y es
liberado Cangrejin, éste gritando: ¡Me arrastra las aguas! ¡Me arrastra me ahogaré! ¡Auxilio
guardiana! se desvanece. El mar al oír su desesperar lo envuelve como una esponja de ajares bien
suave que lo hace flotar.

Después de unas horas despierta, se da cuenta que no está en su casa ¡waoo! ¿Dónde estoy? La ola
le responde estas en mi casa siéntate cómodo aquí nadie te dañará. Cangrejin le pregunta ¿Qué les
aconteció a los animales grandes? La guardiana responde no te preocupes sólo les di un susto, de
ahora en adelante serás mi colaborador para proteger los balnearios del litoral. Agradece a la ola del
mar por su interesante propuesta. Retirándose a casa.

La guardiana le dice a Cangrejin antes que se retirase: Es necesario que los animales grandes
comprendan que los espacios marinos deben ser cuidados y que todo lo que dejan en las arenas del
mar contaminan nuestro hogar dañando así nuestro ecosistema.

Al llegar a casa Cangrejin le comentó a su familia todo lo que había acontecido en su aventura,
entendiendo que afuera de nuestra casa existen muchas amenazas, además hay quienes nos ayudan
sin tener ningún vínculo familiar.

Cangrejin dijo: -Queridos padres y hermanos es ahora que debemos de actuar como familia para
defender nuestro hogar de los intrusos. Todos dijeron: -Tenemos que concientizar a los animales
grandes, que sus acciones están dañando a nuestro balneario litoral al dejar votados restos de
productos contaminantes.

Entonces Cangrejin dijo: -Ya que nuestro creador nos bendijo con patitas bien definidas; recojamos
todo lo que los animales grandes dejan; como sus patitas también cortan, cuando encontraron
botellas armaron lindos materiales que los animales grandes deberían utilizar, en cada manualidad
como trabajo plasmaban palabras como: Recicla, Reduce y Reutiliza; con las tapas de las botellas
escribió un mensaje “Así como eres limpio en tu casa, deja limpio mi hogar, te dice Cangrejin”.

La familia de Cangrejin terminó bien exhausto con la actividad que realizaron, el papá cangrejo
dijo: -Ahora a descansar porque mañana será un nuevo día. Ya por la mañana Cangrejin asoma su
mirada desde su casa a la playa, ve llegar a los primeros bañistas.

Los bañistas quedan azorados con lo que encontraron preguntándose ¿Quiénes han hecho este
magnífico arte? Por allí perdido Cangrejin contesta ¿Quién será pues? Por supuesto somos nosotros
la familia de cangrejos.

En un acto de bizarría Cangrejin da un saltó de retorno a su casa de entre los bañistas, pero antes de
desaparecer con gran sonrisa dice: -Entiendan ya no saturen de basura este hermoso balneario.
¡Hasta la vista bañistas! soy Cangrejin cuidador ambiental.
OZONITO EL ÁNGEL PROTECTOR

En el infinito universo varios planetas habitan, pero una ellas sobresale entre todas, albergando
seres vivos con su gran esplendor. Este planeta fue bendecido como Tierra, que viene atravesando
por muchos cambios desde su origen.

Dentro de los seres vivos hubo uno que resplandeció por el poder de razonar. Era Humanin, muy
intrépido e indisciplinado; convivía con su familia y éste era insoportable por ellos, siempre lidiaba
por sus intrigas y actitudes mostradas, así como: - Sus preguntas curiosas, Sus malos hábitos de
higiene, no respetar las reglas del ambiente; siempre era caótico su convivir, queja sobre queja
pasaba sus días.

Ya Humanin se decía entre sí: -¿Por qué en estos últimos tiempos la temperatura se incrementó?
¿Por qué la piel se broncea estando bajo el sol? Camino a la playa. Pero este inconsciente racional
puso en práctica su actitud al llegar a la playa. Saco de su mochila alimentos chatarra y lo consumió
con total exquisitez, desechando con libertad todos los envoltorios que decoraban la bella playa.
Por ahí, un pelicano perdido cayó como visitante, al observar el mal accionar del joven éste lo
increpa: -¡Eres un mugriento animal! ¿Por qué has de tirar? No debes de contaminar. ¡Así, que
recoja ya! Se retiraba.

Algo incómodo Humanin a tal sermón responde: -¡Para que dejar limpio! ¡Sí, hay personas que
deben de trabajar cumpliendo su deber! Ya aléjate no más no hagas hígado señor picón decían sus
amigos de Humanin. Ya solos ellos continuaron con su diversión todo el día, sorpresa ya por la
tarde la piel de Humanin estaba rosácea, por la exposición excesiva al sol; sus amigos se burlaban
diciéndole ¡Camarón colorado! ¡Camarón colorado! Ya no saldrás hasta la próxima. Él avergonzado
entre si dice: -¡Mugre sol, tanto me has quemado! ¿Cuándo será que te apagues y no perjudiques
más? Ya en la casa continua furioso con su familia por lo sucedido.

Cierto día Humanin cómo retando otra vez al sol, fue a la playa gritando: -¡Ahora quémame! ¡Estoy
aquí! ¡Debajo de ti! En ese instante cayo un resplandor que dejo ciego a Humanin, en vez de pedir
ayuda seguía con su altanería. Cansados de su tiranía los guardines de la bahía ingresaron a escena,
estaba el Cangrejin, los astutos bivalvos, el líder ozonito, todos al pie de las olas del mar, eligieron
al líder ozonito para que manifieste sus verdades del muchacho iluso.

Por arte de magia Humanin recobra la vista, además sus oídos pudieron escuchar a extraños hablar,
sé asombra y dice: ¿Quién está ahí? Hablen ¿Quiénes son?

Ozonito sacó un pergamino mesuradamente de su bolsillo, posterior leyó a Humanin. Lo que estaba
escrito. En el pergamino decía: -No enfuriar al sol; dejar de ensuciar la bahía; cuida los recursos
otorgados; preserva tu hogar para futuras generaciones; ser sensible con la naturaleza.

Al término de la lectura Ozonito continuo: -Antes que hables te voy hacer un recuento general de lo
que tus acciones están ocasionando a este bendito planeta. Humanin es transportado por varios
lugares. Empezando por los andes peruanos, allí los seres vivos que habitan dicen: -¡Humanin! No
saben acaso que ustedes al contaminar están haciendo que nuestro hogar se caliente tanto que mi
nevado se cae a pedazos.

Luego es transportado a la desembocadura de un río; ahí los peces y demás animálculos se lamentan
por su situación y le dicen: -¡Hasta cuando soportaremos Humanin! que tu especie nos llene de
basura; que contaminan nuestras aguas; llegará el día que se alimenten con peces contaminados y
calmen su sed con agua contaminada, haga algo Humanin para que no suceda esto.

Luego aparecen en la selva peruana; donde hay talas indiscriminadas de árboles aquí las aves
realizan ruidos tristes y dicen frases: -¿Porque destruyen nuestro hogar? Sí, no le hacemos daño a
los demás; los árboles también hablan ¡Hay! ¡Hay! ¿Por qué cortan mi vida, si maduro no soy? si
llegado la hora me iré, así es la ley de la vida, uno cumple su labor para la cual fue enviada a la
tierra y ¡Sé, va! ¡Sé, va! Sí aún les brindo oxígeno puro para respirar ¿Por qué me pagan de ésta
manera?

Luego ozonito con exclamación de dice: -¡Te llevaré! ¡Te llevaré! al lugar donde se encuentra mi
hogar es la Estratósfera, seguro has escuchado hablar de mí en tus clases en el colegio, todos me
conocen por ser un gordito que está al lado con su amigo tres y ahora te voy hacer la pregunta de
rigor ¿Sabes cuál es mi función? Humanin asustado por lo que le va responder, solo atina a mover
la cabeza, porque piensa que ozonito es un ser supremo que todo lo sabe. De chispazo ozonito sabe
lo que Humanin está pensando y dice: -Sí, no podrás engañarme, ya que el todo poderoso me
concedió por estos momentos el privilegio de conocer todo lo que tú piensas. ¡Jajajajaja! Suelta tu
respuesta, pero no con señales, sino con palabras jovencito Humanin. Titubeando dice he sido muy
pero muy desobediente solo pensaba en mí y vivía quejándome e ensuciando por todos los lugares
en el que andaba.

Te voy a ilustrar Humanin ¡Escucha! soy una capa que impide el paso de las radiaciones
ultravioletas del sol, te recuerdas del día que fuiste a la playa con tus compañeros, ¿Cómo quedo tu
rostro y cuerpo al estar expuesto al sol? ¿Sabes por qué te sucedió eso? Ozonito continuaba
respondiendo: la contaminación está deteriorando esta capa, pronto llegará el día que ya no los
protegeré, vendrán muchas enfermedades a la piel, ahora ¿Qué harás Humanin?

Seguía Ozonito: -Pero no es tarde para que cambies Humanin, ahora tienes una labor bien grande de
decirles a todos de tu especie que has hablado conmigo y es necesario que pongan su granito de
arena para que sus hogares no sean destruidas por sus malas acciones.

Bueno, ahora le pediré al creador todo poderoso que te devuelva a tu realidad y que de ahora en
adelante no escucharás lo que nosotros hablamos. Humanin le dice: -Pero no me creerán mis padres
sobre lo acontecido con usted, menos la labor que me has encargado, porque ellos saben cómo es mi
comportamiento y que con gran facilidad miento; Ozonito le dice: -No estarás sólo, tranquilo solo
mira al cielo y te llenarás de mucha fuerza. Soy ¡Ozonito! el ángel protector.

Si tus padres no te creen, habrá otras que sí y tú con el ejemplo empezarás el cambio, así ellos te
verán y te seguirán.
Humanin crea diversas actividades para que el mensaje de no contaminar llegue a todas las
personas, realizó trípticos, afiches, gigantografías, carteles, que fueron colocados en zonas
estratégicas. Al ver su trabajo destruido por las calles se desanimó momentáneamente. Se llenaba
de coraje al decir: -No me voy a dar por vencido, mirando al cielo.

Así Humanin continua su misión recordando lo pactado con Ozonito: -¡sí, no cumples, no desearás
que baje porque no tendré contemplación por todos de tu especie, estas advertido! Repicaba en su
memoria una y otra vez. Por lo que debía continuar Humanin con sus actividades de
concientización.

Pasado unos años ya el joven Humanin era adulto y formó su propia familia, pero ya no solo daba
mensajes a sus vecinos de no contaminar; sino ahora lo realiza a nivel mundial y es solicitado para
brindar conferencias sobre ¿Cómo educar a nuestros semejantes para no contaminar nuestro
planeta?

Es así que el encuentro que tuvo Humanin con Ozonito le sirvió para que conozca su talento de
conferencista en temas de contaminación, sus hijos también siguieron sus pasos; ahora la familia de
Humanin tienen como lema en su puerta ¡Somos ambientalistas!
LA HUELLA MAL OLIENTE

En el caminar de la vida hay muchas vías que uno puede escoger, hay un Acechín que en su hogar
llena y llena con basuras las inmensas bolsas negras que lo guarda amontonado al costado de su
casa, sale en la oscuridad como cual asesino mirando que nadie de sus vecinos lo vean llenar en su
coche las bolas negras, este escenario se repite cada tres días.

Acechín cuadra su coche en el borde de la pista, ágilmente saca las bosas y los arroja al costado de
la pista, el piensa que nadie le observa que nadie lo verá jamás.

Por la mañana “Acechín” sale en su coche con su familia, sus integrantes tienen sus actividades
diarias, sus dos hijos van al colegio en el camino perciben éstos un olor mal oliente, y entre ellos
dicen: ¿Quiénes serán esos cochinos que botan sus basuras al borde de las pistas? También hacen
referencia que años anteriores la vista panorámica era limpia.

En esta conversación intervine su padre, de manera álgida dice: -Quienes serán esos cochinos que
dejan una huella mal oliente, seguros que le gusta vivir con la inmundicia. Además, serán unos
pobres que no tiene educación.

En el interior de la pista vive un personaje luchador que emergió con la ayuda del dador de la vida
ya que lo formó en aspecto de humano pequeño y lo bautizó como “Norvialito” que tiene una tarea
clave, estar pendiente de todo lo que sucede en las vías de la panamericana.

Cuando Norvialito escucha lo que Acechín habla sin vergüenza alguna al acusar a otras personas de
la huella mal oliente y el descaro de no admitir su mal accionar.

Pasado las horas los hijos de Acechín bajan a realizar sus actividades cotidianas y él se dirige a su
centro de labores. Durante el retorno ve como la pista se abría y se cerraba, se preguntó ¿Qué está
pasando? ¿Creo es mi imaginación? ¿Me estaré volviendo loco? Por fin llego a su casa.

Algo desconcertante por lo que le pasó, Norvialito dice: -Esto no ha terminado Acechín recién
empieza mi plan de acción denomina: “limpiándonos de las huellas mal oliente” llegado el tercer
día de la semana sale como siempre en plena oscuridad Acechín llevando las bolsas magras y
dejándolos sin escrúpulo al borde de la pista.

En la rutina diaria el sale como siempre y se da con la extraña sorpresa que todas las bolsas de
basura que arrojo a la pista a la noche anterior, ahora están en su casa devuelta; como nadie en su
casa sabe lo que él hace con esas bolsas; todos los miembros de su familia piensan que Acechín
saca la basura para que el recolector se los lleve; por lo que sus hijos mencionan ¡que paso hoy, no
vino el recolector!

Acechín está pensativo y se pregunta ¿Por qué esta las bosas aquí? Sí, estoy seguro que ayer los
arroje en el lugar de siempre.
Así transcurre el tiempo y continua pasando lo mismo cada vez que Acechín arroja las bosas con
basura en el borde de la pista, sucede que las bolsas se regresan. Tanto, que ya no soporta con lo
que está pasando, lo cuenta a su esposa e hijos lo que le sucede, pero ellos se sorprenden ¡Waoo!
con admiración ¡Padre tú! ¿Por qué has hecho eso? Y todavía acusaste a otros de tus acciones.

Con tanto remordimiento Acechín se sube en su coche y maneja sin rumbo tratando de calmar su
cólera, en eso la pista de abre y el coche sigue avanzando Acechín trata y trata de frenar pero no
responden sus frenos y se deja llevar. Preguntándose ¿Por qué me está pasando esto a mí? ¿Qué
situación tan desesperante? Enojado porque nadie le responde, dice: -¡Me voy! ¡Ojo me voy! En ese
instante hace su majestuosa aparición Norvialito con un traje muy especial que en su pecho tiene un
símbolo “N”.

Acechín queda atónito ante esta aparición y al escuchar su voz mira por todos los alrededores y no
logra percibirlo. Norvialito le dice: -¡Estoy aquí abajo! Dirige su mirada bajo la pista, al observar su
cabello se eriza y boca abierta hipnotizada queda unos segundos; luego grita: -¡Un duende! ¡Un
duende! ¡Auxilio! Sálvenme por favor soy una persona indefensa. Norvialito le dice: -¡Ya basta, de
actuaciones! y pregunta: -¿Qué pasaban con las bolas que arrojabas al borde de la pista? Se
regresaba verdad, por cierto yo los regresaba a tu casa.

Es ahí que Acechín habla: -¿Quién eres tú para hacerme esto? Insignificante enano. ¿Cómo me
llamaste? Atrevido cochino. Responde el diminuto hombrecillo. Continua Acechín: -¡Quiero irme
de este mugroso lugar! El duende responde: -Por más que quieras salir no vas a poder, no saldrás de
aquí hasta que admitas que estas actuando mal y hasta que te comprometas de no seguir dejando la
huella mal oliente por las vías que has de pasar.

Acechín se enterca y no quiere admitir lo que ha hecho y con tal descaro niega a tal acusación por
Norvialito. Por arte de magia en la pared se proyecta las imágenes de cuando Acechín arrojaba las
bolsas con basura. Norvialito levanta su voz vas a seguir negando, si te empecinas seguir negando
no te dejare salir y te quedarás aquí conmigo, pero dormirás en un cuarto que está formado con las
bolsas de basura que tu arrojaste. El duende todo sarcástico terminó: -¿Cómo te quedo el ojo señor
mugroso? Es así que Acechín admite y hace como símbolo de reverencia a Norvialito para que lo
perdone y se compromete a no continuar con tales acciones.

Norvialito le dice “Yo estaré vigilándote todo lo que hagáis” así que no intentes engañarme porque
si lo haces volverás a este lugar y no retornarás nunca a estar con tus familiares.

Es así que Norvialito abre sus dos brazos al instante las pistas se abren como ordenado por el,
Acechín sale y encuentra a su coche como si le estuviera esperando; al voltear revisa la pista
asombrado ve que la pista no tiene ninguna rajadura.

Se sube a su coche, ya en casa sus familiares le preguntan ¿Dónde has estado? Mira que han
trascurrido dos meses que saliste y no regrésate. Él dice: ¡Sí, sólo he estado tres días con Norvialito!
y aquí ya paso mucho tiempo. Pues, saltando dice: -Que se ha comprometido a cambiar y que nunca
más arrojará bolsas de basura a los bordes de la pista. Sus familiares se alegraron de tal decisión.
Acechín desde entonces viene crea actividades para poner en práctica a lo que se comprometió.

Norvialito desde las profundidades observa todo lo que Acechín está realizando y se alegra porque
dentro de sus actividades ha logrado trabajar de forma coordinada con sus vecinos e ir a limpiar
todos los bordes de la pista por donde él ha transcurrido además realiza videos sobre huellas mal
oliente.

Desde entonces viene recobrando la panamericana con una vista panorámica hermosa con olores a
flores. Así nace un nuevo obrero del ambiente; todo es maravilloso desde ese momento, cuando se
realiza acciones positivas en bien de nosotros mismos.

Chau amigos se despide Norvialito, solo recuerda yo estoy atento.


LA MÁGICA DEL RIO

En las alturas de la sierra vive Toño y su mujer Dominga que son bien humildes; su casa está hecha
de barro con paja de trigo que el siembra. En esos tiempos la pesca era escaza pero los alcanzaba
para vivir; esto no le impedía que sea feliz, siempre en sus labores, cantaba y cuando llegaba a casa
tenía palabras de cariño hacia Dominga. Ella por el contrario tenia palabras y gestos de enojo y
siempre pidiéndole más, se caracterizaba por ser ambiciosa nunca estaba conforme.

Cierto día Toño salió a pescar empleando como siempre un palo con cuerda y en la punta colocaba
la carnada que eran lombrices sacados de su campo de cultivo; realizo la primera vez y no salió
nada y así sucesivamente hasta la quinta vez, es ahí que siente que al levantar el palo con cuerdas
pesaba y se alegró mucho por encontrar su sustento diario. Al sacar se ve con la sorpresa que era
una trucha grande que nunca había pescado de tal magnitud que se movía y saltaba de manera
desesperada.

A la vista él pensó y dijo ¡Oh! ¡Qué grande presa! Al fin conseguí algo para mi diario, pero grande
fue su sorpresa cuando la trucha le hablo diciendo: “amigo pescador, es que tú no sabes que por este
cambio climático nuestra reproducción está bien reducida, déjame vivir ¡déjame vivir por favor!
Soy muy joven, devuélveme al rio que ahí soy muy feliz. El pescador sintió mucha compasión.

Luego de dijo: -Así mismo claro que te dejare allí de nada me vas a servir, sí sólo eres uno y para
colmo hablas, sí cuando te lleve a mi casa seguro que en el camino no dejarás de parlotear y las
personas que se nos cruzan pensarán que estoy loco. La trucha le dijo a Toño en recompensa por tu
buen acto te concederé tres deseos pídeme lo que quieras.

Es así que Toño se despide diciendo tengo lo necesario gracias por tu ofrecimiento, al llegar en su
casa le cuenta a su mujer lo acontecido. Dominga vocifera claro tu como siempre conformista,
teniendo esa oportunidad; pero no es tarde ve ahora mismo pide mi primer deseo “que nuestra casa
sea hermosa y con todas la comodidades” es así que Toño obedece a su mujer, sale corriendo al rio,
al llegar al rio se sorprende porque ve que esta con restos de botellas de insecticidas que sus vecinos
emplean en sus sembríos, llama “mágica del rio” “mágica del rio, ven” ¡Te necesito! En ese instante
que sale mágica y le dice que deseas Toño; le dice todo lo que su mujer le indico pedir, al terminar
la última palabra mágica le dice ve ya está hecho tu pedido.

Al llegar Toño observa la nueva casa y su mujer muy contenta así transcurre una semana, luego de
nuevo comienza a quejarse Dominga que le falta mucho más para que sea más feliz, instruye a
Toño, vas a ir de nuevo y le solicitarás que sea dueña de una mina de oro, y así como niño
obediente Toño va y al llegar siente un mal olor que emerge de rio porque hay animales muertos;
sale mágica y le dice has venido por tu segundo deseo, solo recuerda que te falta nada más que uno.
Toño le dice: -Quiero ser dueño de una mina de oro; mágica dice ve ya está hecho, encuentra a su
mujer saltando alegremente de lo que ha obtenido.

Dominga le dice a Toño que debe de contratar personal para poner en funcionamiento su nueva
adquisición, es así que Toño tiene que tomar un largo viaje hasta llegar a la comunidad más
próxima; al llegar los pobladores de la zona se sorprenden sobre su búsqueda, si él antes solicitaba
trabajo y ahora el viene desde la altura para llevar trabajadores para su mina.

Se inscribieron para el trabajo varias personas todos varones, durante la travesía hasta llegar a la
mina comienzan a conversar ellos, les preguntan a Toño ¿Cómo conseguiste tener una mina de oro?
Si ustedes no tenían nada y sobrevivían solo con la pesca y con lo que sembraban.

Al llegar a la mina, Dominga con aires de señora y con mirada altanera les dice a los trabajadores:
“soy la dueña y señora de esta mina, solo a mí me deben obedecer, está claro” ellos contestaron así
será señora. Ella ordena los lugares donde van a trabajar y Toño siempre está a su lado, en ese
caminar de enseñar a cada trabajador su labor, Toño accidentalmente empuja a su mujer y al voltear
le dice “como siempre inepto solo sabes pescar”

Trascurrió dos semanas de labores en la mina, Dominga de nuevo empieza a vociferar y quejarse
¡No es suficiente! ¡No es suficiente! Toño de dice: -Mujer porque estas así, si ya lo tienes todo ya
para con esta situación no encuentro calma con tu actitud, antes cuando solo tenía lo necesario mi
vida era feliz y su mujer le contesta tú habrás sido feliz más yo no.

Toño le dice dime que puedo hacer para que cambies de actitud, ella hipócritamente sonríe y le dice
ve al rio pide “quiero ser la dueña de toda la naturaleza” Toño al escuchar el pedido de su mujer se
sorprende pero ¿Cómo vas a pedir ser dueña de la naturaleza? ¡Estás loca mujer! Mágica no querrá
concederme este deseo.

La mujer se pone a gritar y ordenar, sólo has lo que te mando, acaso no quieres verme feliz;
entonces Toño solo atina agachar la mirada y corre presuroso al rio y al llegar se da cuenta que hay
peces, aves y plantas que están flotando muertas en el rio, él se entristece por lo que ocurre, pero
con voz fuerte llama a mágica y al salir mágica le dice: -Eres tú, vienes por tu último deseo, espera
piensas que no sabía que todos los pedidos no eran tuyo, sino de tu mujer Dominga que es una
codiciosa y ambiciosa que siempre mira sólo para ella. Toño le dice ¿cómo es que sabes? Si nunca
te dije nada, mágica le responde “Sé todo lo que piensas”.

Mágica continua hablando a Toño, ¿Cómo te llegaste a enamorar de tal mujer? Sí, tú eres
compasivo y das a los demás lo poco que logras obtener; bueno no te sigo cansando dime cuál es su
último pedido “Ella quiere ser dueña de la naturaleza” mágica le dice ¡Que! Vas a ir y le dirás a tu
mujer que nadie es dueño de la naturaleza, ésta es de todos y debemos cuidarla y no contaminarla
ya que nos brinda la vida”

Regrésate le dice mágica que tu mujer recibirá como le corresponde.

Toño volvió a su casa y encontró a Dominga en lágrimas y maldiciendo su desdicha ya que su casa
regreso a su estado natural.

Es así que Dominga termina su vida hasta lo último de sus días en la miseria por su codicia
desmedida.
SÚPER DELFINCITO

En los inmensos océanos hay innumerables especies de vida, pero hay uno que va sobresalir del
resto, se trata de delfincito. Él alegre con su familia pasea y pasea todo juguetón con las olas
inmensas que le hacen caricias a su inmensa masa corporal; pero esto no le va impedir que desde lo
más profundo emerge su gran valentía.

Un día delfincito se separa de su familia y se va con sus amigos a realizar diversas aventuras, como
salir dando volatines en el aire, fue tanta alegría que no se cansaba de realizar esas acrobacias. Su
madre se dio cuenta que no estaba con los demás miembros de la familia y pregunta ¿Dónde está
delfincito? Sigue preguntado, nadie le da respuesta; se impacienta y pide a sus familiares que le
ayuden a buscarlo.

Todos llaman ¡Delfincito! ¡Delfincito! Ven, vuelve a tu casa. Pronto realiza el sonido de llamado su
madre que alerta a Delfincito. El cual se despide de sus amigos diciendo: -Esto debe repetirse en
otra oportunidad, pero esta vez será con el permiso de mi madre.

Delfincito de manera presurosa aletea velozmente al encuentro de su madre y al llegar delfincito se


saluda con su madre haciendo chocar sus aletas caudales ya que ellos han creado esa manera de
saludo.

Cierto día sus amigos de delfincito fueron a su casa a decirle para que salgan a jugar, al tocar la
puerta sale la mamá e invita a que ingresen; estos amigos en voz baja al oído de delfincito le dice: -
¡Vamos a jugar como ese día!; pero la mamá como tiene un oído bien agudo se da cuenta de lo que
están planeando y ella interviene diciendo no saldrá delfincito con ustedes, pueden retirarse.

Los amigos le dicen a la mamá de delfincito: -No se preocupe señora que no va pasar nada,
descuida; tanto fue la súplica de ellos que logran convencerla y ella otorga el permiso
correspondiente.

Ellos salen alegremente y se alejan mucho de la casa de delfincito, no haciendo caso de la


advertencia que les hizo la mamá de delfincito; transcurrido dos horas la mamá se preocupa, entre sí
dice: ¿Por qué tuve que dejar que me convenzan? Sale en busca otra vez, llama y nadie le responde,
con voz alta dice: -¡Será el último día que le doy permiso!

Al poco rato llega Delfincito todo contento y al mismo tiempo nervioso, la mamá de interroga: ¿Por
qué te has demorado? ¿Por qué no me has obedecido? Les dije que solo jueguen alrededor de la
casa ¿Hasta qué lugar fueron? Delfincito dice: -Mamá sí no me dejas hablar como te explico, bueno
hijo dime que paso. En eso delfincito narra sus aventuras que realiza con sus amigos. Posterior
pregunta: Mamá -¿Por qué existe mantos negros en ciertas partes del océano? Casi ingresamos a ese
manto, uno de mis amigos choco su aleta caudal con la mancha pegajosa que por un instante era
difícil de quitar, ¿Por qué sucede esto?, mamá.
Su madre se exaspera y se preocupa, diciéndole: ¡Nunca! ¡Pero nunca! vas acercarte a ese lugar,
prométemelo hijo mío. Al ver su semblante de su madre, Delfincito le dice tranquila mamá te lo
prometo. Pero no me has dicho porque existe ese manto negro; la mamá le dice “Ese manto son
derrames de petróleo”, los humanos por su descuido lo han hecho; él con voz álgida menciona
“Pero eso nos perjudica gravemente no solo a nosotros, sino a todos los que habitan estas aguas”.

Delfincito le dice: -Esto no puede quedar así mamá, debemos darle un escarmiento a esas personas,
para que sepan que nosotros defendemos el lugar que Dios nos prestó.

Al otro día Delfincito con sus amigos realizan una citación, donde todos llegan puntualmente a la
invitación; Delfincito toma al mando la reunión y dice: -“Señores y señoras hay un inmenso
problema que no debe ser ajeno a nosotros ya que si no tomamos cartas en el asunto va
perjudicarnos grandemente”. Los reunidos preguntan: ¿De qué estás hablando delfincito?
Explícanos, Delfincito continúa: -¿Qué, no se han dado cuenta del manto negro? Poco a poco se va
acercando a nuestra casa.

Entonces, ellos coordinaron y se distribuyeron las labores para poner en alto al problema.

Al fijar la fecha de la actividad todos fueron y rodearon al barco realizando sonidos, como diciendo:
-“Ya basta, porque nos contaminan, acaso no saben los efectos que provocaron con este manto
negro, a los que vivimos aquí”

Delfincito en compañía de todos en forma de sonido les decían: -Ahí, están los efectos que nos
provocan. ¡Vamos a morir por asfixia! ¡Van a morir los animales jóvenes y los recién nacidos!
¡Aparecerán malformaciones en la reproducción de todas las especies! ¡Contaminan las fuentes de
alimentos que ustedes mismos necesitan!

Los tripulantes del barco se asombraron de esa acción coordinada por los delfines y se dijeron a sí
mismos: -“Nosotros que supuestamente somos la especie racional no actuamos así”

Uno de los tripulantes se puso de pie y dijo: si saben descifrar mi lenguaje permítanme decirles lo
que tengo atravesada en mi garganta: ¡Discúlpanos, por tal negligencia de las compañías petroleras!
Pues, esta acción presenciada no va quedar en el vacío, vamos a llevar el mensaje que ustedes nos
han dicho claramente hoy.

Llegado a Tierra los tripulantes manifestaron todo lo que aconteció y las empresas petroleras se
comprometieron a menguar el derrame de petróleo.

Es así que transcurrió los tiempos, Delfincito se dio cuenta que su océano estaba libre de mantos
negros y exclamó ¡Waoo! Tomaron conciencia las personas; sí trabajamos todos en bien del
ambiente, nuestros hogares tendrán más vida.

Cada cierto tiempo Delfincito se acerca al muelle donde está el tripulante que hablo con ellos y que
también incentivo a los demás a no contaminar con manto negro los océanos. Como signo de
cordialidad y amistad.
Así amigos si todos pusiéramos un granito de arena, grande sería nuestro planeta. ¡Cuídalo!
Atentamente Delfincito.
CURANSEÑORA

En lo alto de un cerro llamado Pullao, allí se ubica una lagua que encierra un encanto mágico.

Los ganados llegan a esta laguna para saciar su sed, en compañía del joven Mateo que siempre
visita esos lugares, que al pasar por la laguna siempre escucha el canto de una mujer, entre si dice:
“Quien será esa mujer, me molesta el ruido que realiza”. Al retornar a su casa después de sus
deberes sus padres lo esperan con mucha alegría.

Por la mañana posterior al desayuno su padre le pregunta: ¿Has observado algo diferente cuando
pasas por la laguna? Mateo les responde: No, nada, que tenía que observar; en ese instante su mamá
y su papá hablan diciendo quién le va a contar lo que sucedió hace dos años en esa laguna. Mateo
les dice: -Ya es hora que me entere, ¡Verdad!, su papá se aproxima a su lado y comienza a relatar lo
que ha sucedido; hijo ya hace dos años ha pasado, y no recordábamos lo que les sucedían a las
personas que pasaban por esa zona, todas ellas no retornaban.

Mateo le reclama a sus padres: -¿Por qué no me dijeron? Ellos les responden: Como ya no hay más
desaparecidos, pensábamos que ya no volverá a suceder; pero hace tres días un joven que fue a
recoger sus ganados no volvió más. Mateo les dice: -Seguro que algún animal salvaje lo habrá
atacado o se ha caído en algún abismo; no creo en lo que ustedes dicen ¿Cómo una laguna puede
matar personas? Tienen mucha imaginación. Mateo salió riendo y diciendo ¡Es imposible! ¡No es
cuerdo pensar así!

Al estar sentado en la plaza, se encuentra con una persona de edad avanzada, ya no tenía buena
audición, pero como Mateo habla con voz fuerte. Diciendo: -¡No creeré lo que me han contado mis
padres!; la abuelita al escuchar, le dice: haber hijo narra lo que tus padres te han contado, en eso
Mateo relátala sin ganas; la abuelita le habla: -No seas incrédulo hijo, porque en este pueblo pasan
cosas inimaginables al entendimiento de la razón humana.

Llegado el día en que Mateo tenía que ir al cerro a recoger su ganado para cercarlos, sus padres le
dicen vaya con cuidado hijo mío, Mateo les responde: -¡Cuidado de qué!

Durante la travesía hasta llegar a sus ganados la mente de Mateo comienza a recordar lo que la
abuelita le había dicho y sintió miedo, es por eso que de vez en cuando miraba ambos lados si había
alguien que le seguía.

Cuando estaba mirando a su derecha, se cae de repente porque no se fijó de una pequeña acequia
que había en su caminar, él rechina y dice: -¡Caramba! ¡Caramba! que estoy pensando.

Faltando poco para pasar por la laguna Mateo comienza a oír la misma canción que escuchaba antes
¡De nuevo esta mujer! No se cansa y al llegar a la misma laguna observa que sus aguas están
formando olas; éste se asombra más.
Luego con mucha prisa pasa, al llegar a sus ganados ya no es más el joven calmado y tranquilo; su
mente comienza a imaginarse muchas cosas sin sentido y por momentos regresa a ser coherente y
decide buscar otro camino de retorno para llegar a su casa porque ya no quiere pasar por la laguna.

Pero por más que busca otro camino no encuentra, resulta imposible, tiene que tomar mucho valor y
decide volver por su camino de siempre, al ir pasando por la laguna una joven bien hermosa sentada
al borde se encuentra.

La joven saluda hola Mateo, él prendado con la hermosura le responde ¿Cuál es tu nombre
hermosura? Ella responde: Curanseñora. Es ahí que Mateo dice: -No es un nombre común ¡Que
interesante! Como ya estaba terminando el atardecer. Él le invita irónicamente: podremos
encontrarnos mañana para continuar charlando. Ella sostiene: claro por qué no.

Camino a su casa Mateo se pregunta ¿Quién le habrá dicho mi nombre a Curanseñora?

Durante la noche Mateo no puede dormir bien; se levante muy temprano; es por eso, que sus padres
notan su cambio y le pregunta: ¿Estás bien hijo? Él responde, mejor que nunca.

Al terminar el almuerzo Mateo se alista, y sus padres le preguntan ¿Para dónde vas hijo? Él
responde: me voy a encontrar con una amiga que conocí ayer en la laguna.

Al llegar al encuentro Curanseñora ya está sentada; Mateo se aproxima a saludarla, diciéndole:


¡Hola hermosura! y le pregunta: ¿Recién has llegado? ¿Has escuchado alguna canción por aquí?
Ella le responde: No, ninguna.

Para lo cual Mateo dice: -Bien raro, cuando paso por aquí siempre escucho una canción que
molesta; al escuchar Curanseñora lo que manifiesta Mateo; se pone triste y le sale unas lágrimas;
ante esta situación Mateo se acerca le abraza diciéndole tranquila eres muy sensible. Curanseñora,
repica: tengo algo que decirte Mateo la canción que siempre has escuchado yo la canto con mucho
amor para ti.

Curanseñora menciona: siempre te he visto cuando pasabas por aquí; quiero pedirte que nademos un
rato en la laguna; sin presagiar que era el plan perfecto para ella, estando en el agua Mateo no
pudiera salir y quedándose allí para siempre, como las demás personas que desaparecieron.

Tanto era la insistencia de Curanseñora de que ingresará Mateo al agua; que él respondió: como tú
lo digas hermosura; cuando estaban nadando, ella se acerca, lo toma de la mano y le dice ya nunca
regresarás a tu casa amado mío, ahora este será tu hogar. Él quiere soltarse pero no puede, es tanto
el encanto que ella tiene. Él quiere darse por vencido, pero saca fuerzas, que grita al instante:
¡Auxilio! ¡Por favor alguien ayúdenme! En ese momento las ramas de un árbol bien antiguo
comienzan a moverse y del centro de su tallo se forman los ojos, la nariz y la boca; ante esto Mateo
se recuerda lo que la abuelita le dijo era cierto.
El árbol le dice: Mateo toma mis ramas sostente que yo te jalaré y Curanseñora le grita al árbol no
intervengas en mis asuntos, el árbol viejo al instante responde: -Todos los años te he visto lo que
has hecho y he estado callado pero es ahora que alguien te ponga en tu lugar.

No intervendría si las personas decidieran voluntariamente irse contigo y quedarse a tu lado; pero tú
le impones con tu magia, así no puede ser; la Madre Naturaleza ordenó ayudar a este joven. Ella en
su enojo le dice: cómo puedes ayudar a estas personas, sí sólo causan daño a la Naturaleza, y a tu
misma especie, siempre paran talando y tú que nunca dejas de brindarle el oxígeno limpio para que
ellos respiren, yo que tú no los ayudaría por tales acciones que la raza humana realiza. El árbol
expresa su incomodidad: si todos pensáramos como tú, ya no existiría humanos en este planeta.

Entiende Curanseñora, tú no decides quien vive o quien muere, te puedo asegurar que con esta
acción que voy a realizar, Mateo se convertirá en un activista que luchará a favor del ambiente.

Mientras discuten Curanseñora con el árbol, a Mateo se le debilita sus fuerzas, es en ese momento
que con ímpetu el árbol jala presurosamente y saca de las aguas a Mateo.

Curanseñora enojada al ver que fue vencida, le encara al árbol ya vendrán más jóvenes y a ellos no
podrás ayudarle; el árbol le contesta: la Madre Naturaleza a determinado que nuca más podrás
emerger de las aguas con tus encantos, porque ha visto que en tu vida rige la venganza y la ira por la
especie humana.

Mateo recobrado sus fuerzas manifiesta: “señor árbol gracias por su ayuda y le pido que me
disculpe a mí y a todos de mi especie, que con nuestras acciones no cuidamos el ambiente, ya que
siempre estamos contaminado”.

Terminado de hablar Mateo, el árbol le exhorta: -Todos formamos parte de este bendito planeta no
lo hagamos más daño, porque es como si nos hiciéramos a nosotros mismos.

Estimados amigos siempre habrá alguien que te preste la mano en situaciones que más lo necesitas,
es ahí que se ve quien te ayuda sin mirar tu pasado. Toma conciencia, está en tus manos decidir por
una naturaleza libre de contaminación.

¿Quién nos habla?


Los largos valles se conforman por diversos seres vivos que se alimentan de lo que la naturaleza les
brinda, unas inmensas acumulaciones de agua que crecen su caudal conforme las lluvias se van
incrementando.

Las corrientes acarician todos los bordes de los valles como cual enamorado realiza a su amada,
estas aguas desde que se originan van trayendo todo lo que está en su regazo, tanto es fuerza que a
las piedras que están en ella, presentan formas que han sido definidas por este líquido vital.

Los seres vivos que habitan en las abundantes aguas que por temporadas están rebosando con
movimientos que alegran a todos a la que alberga y en ausencia de este líquido los seres vivos
están ¡tan tristes! Que se dicen unos con otros “cuando veremos de nuevo tus movimientos que
alegran nuestro corazón” las aguas de pronto comienzan a aumentar su volumen y todos en coro
dicen ¡viva! ¡Viva, naturaleza aquí vive tu hijo!

Cuando los seres vivos de la zona alto andina observan que los agricultores arrojan botellas, bolsas
de fertilizantes a la corriente del rio sin remordimiento, ellos enojados mencionan ¡hasta cuando,
aguantaremos esta afrenta! ¡Porque te tratan así amigo rio! Y le contesta que puedo hacer, queridos
amigos.

Los seres vivos que pertenecen a la costa también ven que las personas arrojan todo tipo de basuras,
indignados mencionan ¡también ustedes! Continuando con el recorrido de los seres vivos de la selva
quedan atónitos, porque las personas arrojan todo tipo de basuras matando a otros seres sin
importarles que estos forman parte de una cadena alimenticia que hacen posible que el ecosistema
este en equilibrio.

Cierto día todos los seres vivos de las tres regiones que habitan en las riberas de los ríos realizan
una reunión extraordinaria, en esta reunión tenían como agenda principal “la contaminación que
generan las personas” antes que empiece la reunión invitan al señor rio para que presida dicha
reunión, el señor rio no quería asistir pero todos le insistieron hasta lograron convencerlo que esté
presente.

Los seres vivos para convencer al señor rio le dijeron: “tienes que hacer algo para que nadie más te
siga tomando el pelo, ahí el señor rio sonríe ¡jajaja! Es cierto lo que me dicen; continúan hablando
no estrás solo todos te apoyaremos, al instante responde ¡como lo realizaremos! Ellos respondieron
tenemos un plan, pero antes tenemos que ir a visitar a la madre naturaleza para que abra tu boca.

El señor río pregunta ¿Cómo va ser esto? Si no se han dado cuenta no tengo vida, ellos le responden
¡perdón! Das vida eso vale más que cualquier dinero que la personas acumulan pensado que le
hacen felices, la madre naturaleza tiene ese poder y tengo por seguro que ella no se negara.

Ya el señor río motivado por los seres vivos dice ¡hagámoslo! Tengo mucha fe.

Es entonces que los seres vivos todos en una sola vos dice ¡madre naturaleza! ¡Madre naturaleza, te
necesitamos! Y contesta ¡Quien! ¡Pero quien, perturba mi dulce descansar! De inmediato los seres
vivos se aproximan con miedo creyendo que ella está enojada, todos le en una sola voz le dicen
¡está enojada! Ella responde; Para nada queridos.

La madre naturaleza dice para que me han llamado, ellos responden para que con tu poder hagas
que nuestro amigo el señor río tenga vida y así el enseñe a las personas sobre el impacto ambiental
que está causando la contaminación que realizan.

Pero la madre naturaleza les dice claro que les ayudare cuantas generaciones he estado esperando
¡ya me cansaba de esperar! Pero no es tarde queridos amigos es en ese momento la madre
naturaleza le dice ¿dónde está el señor rìo? ellos atinan a contestar esta afuera no quería entrar
porque dice que no se atreve a mirarte ya que se siente responsable del estado en el que se encuentra
su entorno.

Pero eso no es su responsabilidad, ¿Qué venga? Es así que se hace presente el señor rio baja la
mirada y hace reverencia.

La madre naturaleza le dice ¡alto! ¡Alto, no es necesario! ¡Ponte de pie! Querido amigo. Es
entonces que la madre naturaleza extiende sus manos sobre el señor rio diciendo “que se haga
conforme a los deseos de tu corazón” de inmediato sus amigos del señor rio le dice haber hay que
probar el poder de la madre naturaleza.

Ellos dicen ¡poder! ¡Poder! Señor rio habla algo, el responde tengo miedo y si no resulta; de
inmediato una voz de lo profundo de la tierra dice “tan solo cree y ten fe” es entonces que el
balbucea una palabra “natureza” y sus amigos le dicen pero no te entendemos lo que estas
intentando de hablar es naturaleza, verdad señor río; el le dice ¡sí! Los seres vivos se ponen de
acuerdo para que en tan solo tres días ya el señor río de hablar de manera fluida para que exhorte a
las personas cada vez que ellos intenten arrojar basuras a su habita.

Cuando ya el señor río había aprendido hablar ellos le dicen bueno amigo es la hora que enfrentes a
los humanos, ¡ojo, no estás solo en este trabajo! Para lo cual el responde ¡gracias! ¡Muchas gracias,
queridos amigos!

Lápiz en mano el señor río escribe los mensajes que los seres vivos expresan, ya teniendo todos los
mensajes el señor río está listo para actuar.

Un día como todos los días las corrientes del señor rio transcurre calmadamente y de lo lejos puede
ver a una señora con su menor hijo trayendo una bolsa de basura, cuando se disponía a arrojar de
pronto el rio abre su boca y le dice ¡señora! soy el rio por favor, no me tire su basura en mis aguas
viven plantas y aves deténgase no me ensucien; la señora asombrada retrocede con su basura.

Cuando dos jóvenes estaban llevando un colchón viejo para arrojarlo, el rio le dice ¡deténganse!
¡No me ensucien! Asustados miran para todos los lados y se regresan con lo que llevaban.
Al día siguiente pasa un escolar que saliendo de su colegio viene comiendo una galleta y cuando iba
arrojarlo, el rio le dice niño, a ti te hablo, ¿quién te ha enseñado botar basura sobre mí? mirando de
donde sale la voz guarda su envoltura y corre sigilosamente hacia su casa.

Ya por el atardecer un señor con un triciclo lleno de desperdicios y cuando pretendía arrojar la
basura, el rio le dice: no tiene vergüenza, gracias a mi usted tiene agua todos los días.

Así el señor rio continúo con su hablar hasta que todas las personas se dieron cuenta que estaban
actuando mal. Un día todas las personas que vivían cerca al rio salieron a escuchar la voz del rio,
porque no creían en lo que le habían contado, ellos se depusieron a comprobarlo; es ahí que el rio
dice ahora me conocerán, su voz era como el estruendo de un relámpago todos se asustaron y
quedaron atónitos. El rio les decía “Soy el Río y tengo el orgullo de haber nacido en los altos del
Perú de acompañar caminos y ciudades en mi travesía de conocer el mar .sin embargo hoy tengo
vergüenza por el actuar de mis compatriotas con su basura toneladas de insultos en forma de
desperdicios ya no hay respeto.

Desde ese momento todos se comprometieron a no continuar con sus malas acciones.

Los seres vivos y el señor Rio se reunieron y evaluaron, si su plan había salido como ellos lo
esperaban el señor Rio, tomo la palabra diciendo he puesto todo de mí, está en ellos el cambio.

Los seres vivos le dijeron si eso nos consta tu arduo trabajo será recompensado solo queda esperar.
La madre naturaleza felicita al señor Rio diciéndole quisiera que todos tuvieran ese corazón que no
mira que hace el otro sino que primero realizas tu para ser ejemplo de los demás.

Es por eso amigo no esperes que la naturaleza te, hable para que recién cambies que el cambio salga
de tu corazón y así ser ejemplo vivo a tus semejantes.

Tu casa debe estar limpio así como la naturaleza, el trabajo es de todos no te olvides.
La sobrevivencia

En un futuro lejano en donde las acciones de las personas sobre la naturaleza llego a lo más alto,
con los avances tecnológicos crearon teléfonos móviles, artefactos y demás enseres que durante
su funcionamiento contaminaron el espacio aéreo con sus gases tóxicos, la minería en su afán de
extraer todo el oro negro contamino a los mares, ríos y dejo infértil las áreas que fueron afectadas
con su derrame.

Ante toda esta situación ya no soporto más la naturaleza la cual dio vida a todos los residuos y
enseres que fueron desechados por las personas.

En una reunión todos los residuos dijeron hay que dar un escarmiento ¡revelémonos! somos más
que las personas, ganaremos en esta batalla.

A partir de ese momento los residuos se iban incrementando como si estuvieran reproduciéndose
ganando espacio ya las personas estaban tan abotinadas por cerros de basuras.

Las personas al ver eso se preguntaron ¿Qué está pasando? ¿Quiénes son esos inescrupulosos que
botan basuras cerca de mi casa? ¡Tanto, ya es un basural!

En su lucha las residuos cada día ganaban más espacio, todas las botellas formaban pirámides que
impedía el libre tránsito, todas las latas con la ayuda del aire realizaban sonidos tan fuertes que las
personas llegaron a utilizar tampones, todas la botellas de vidrio cada vez que una persona o familia
salía de su casa para algún lugar ellos se quebraban haciéndose picadillos con el propósito de
reventar los neumáticos, todos los artefactos de hogar comenzaron a moverse incomodando a las
personas, al ver esta situación todas las personas le preguntaban ¿ cómo puedes moverte, si no
tienes vida? Los artefactos le respondían ¡error! No tenía vida pero la naturaleza me lo concedió no
solo a mí sino a todos los residuos que ustedes desecharon en vez de reutilizar.

Tanto fue el asombró de las personas al ver que todos se movían y también hablaban se decían
¡tenemos que hacer algo! ¡Esto no debe de continuar! al saber la naturaleza el pensamiento de las
personas, ella dio el mensaje a todos los residuo.

Al día siguiente los residuos empleando los neumáticos desinflados escribieron una frase ¡estamos
en guerra! ¡Prepárense humanos ustedes mismos se lo buscaron! Al leer el mensaje dentro de las
personas hubo un líder llamado humanin que levantando la vos decía este es nuestro hogar tenemos
que defenderla de la invasión de estos residuos.

Al escuchar esto los residuos le respondieron ¡ustedes si no tienen memoria! ¡Si ustedes nos han
creado! Por ustedes existimos.
Entonces humanin entro en un profundo sueño en el que se le presento imágenes de todos las
personas cuando están dañando a lo que el con gran voz quiere defender de los residuos ¡hogar! Y
se preguntaba ¿Por qué hemos llegado a tanto? Si somos la especie más evoluciona.

Humanin se despertó con el ruido de los estallidos de las botellas de vidrio y se dio cuenta que su
sueño le había revelado los daños que están causando a su propio hogar.

En este futuro solo ya quedaban unas diez familias incluidas la de humanin que pretendieron luchar
contra el gigante que ellos mismos crearon.

Todos las familias empleando sus propias manos y pies empujaban a los residuos, porque todos los
enseres se volvieron en contra de ellos cuando pretendían coger una lampa para botar los desechos
que estaban ya ingresando sus casas ellos cobraban vida y se escapan, cuando querían emplear sus
vehículos para que se trasladasen a sus labores no funcionaban, tenían que caminar largos espacios
hasta llegar, al estar ahí las máquinas y todos los equipos de oficina se ponían de acuerdo para que
no sean empleados por las personas.

Así trascurrió mes y mes las personas lidera por humanin vociferaban diciendo ¡no, nos van a
vencer! Seguimos en lucha, aunque todos se pongan a su favor nosotros resistiremos. Al escuchar
los residuos este mensaje les dijo ¡está bien! ¡Nosotros también seguiremos en la batalla! Hasta
ganar la guerra, todos los residuos en una vos decían ¡hacia la victoria! Humanin al escuchar, se
enojó más y su orgullo nublo su mente y menciono por ahora están ganado la batalla, pero nosotros
ganaremos la guerra.

Los residuos se reunieron nuevamente y planearon un ataque que sería devastador para las personas
algo que nunca habían visto.

El plan consistía en dejar en tinieblas a las personas con la ayuda del aire que estaba tan
contaminado que dijo no es necesario hacer esto pero le voy a echar la mano.

Humanin como es de costumbre se despierta muy de temprano y se da cuenta que si ya es de día


porque esta oscuro, las demás familias hacen lo mismo y entran en pánico gritando ¿Qué es esto?
De pronto piden a humanin que vaya a hablar con los residuos y que les diga ¡nos rendimos! ¡Ya no
podemos resistir más! Al escuchar esto humanin les dijo ¿Cómo pueden decirme esto? Están locos
acaso, de nuevo empleando su labia convenció a las personas a continuar con la batalla diciéndoles
¿no somos acaso la mente más desarrollada? Sus vecinos te daremos otra oportunidad para que seas
nuestro líder si no funciona, tienes que comprometerte que serás tú, quien iras a decir que ellos
ganaron.

La naturaleza va y les comunica el acuerdo a lo que han llegado las personas, lideradas por
humanin. Los residuos le dicen, bueno al parecer nuestro plan de debilitarlos está funcionando.

Los residuos se reúnen y quedan en hacer algo que no le va quedar de otra a las personas en darse
por vencidos y abandonar sus casas para que nosotros tomemos posesión de lo que nos pertenece.
Todos reunidos las botellas, neumáticos, artefactos y demás enseres, brindan sus ideas para llevarlo
a cabo y por unanimidad quedan en que todos absolutamente todos se moverán y hablaran durante
un mes. A ver si resistirán esto las personas.

Al amanecer las familias salen a la calle y se impactan por lo que sus ojos perciben y que si van al
mercado no se puede caminar porque todo está lleno de residuos chocan con ellos y no logran
escuchar lo que le están hablando porque los artefactos hacen mucho ruido.

Entonces en su desesperación las personas cogen a los artefactos y lo arrojan contra el muro,
quedando roto pero como la naturaleza les dio vida, de un momento a otro las partes rotas se van
uniendo hasta quedar nuevamente formada, al ver esta maravilla las personas se enfurecen y de
dicen ¡esto fue lo último! Llaman con fuerte vos a Humanin, y le dicen tú te comprometiste que si
continuaba así, iras a decir que nos rendimos.

Humanin les dice ¡bueno estimados amigos, así será! Pero como él es orgulloso trata nuevamente de
persuadir a las familias pero esta vez le dicen es tu orgullo que nos ha traído hasta estas alturas,
cuando nos pasó el primer incidente hubiéramos hablado muy cordialmente con los residuos, para
llegar a un acuerdo pero tu orgullo fue más, que viéndonos sufrir, te empecinabas más y más.

Las personas le decían ¡ya basta! ¡Hasta aquí llego tu orgullo! Es entonces que Humanin al no tener
el apoyo de las demás familias decidió ir a buscar a los residuos. Llamo con vos de desesperación y
llevando en su mano una bandera blanca decía ¡residuos, vengan por favor! ¡Soy humanin! ¡Vengo
a darme por vencido! ¡Ustedes ganaron! Al escuchar esto la naturaleza le dijo a los residuos que se
acercara al llamado.

Al llegar los residuos vieron a humanin con una bandera blanca, ¡oh! Sorpresa para humanin los
residuos llevaban una bandera verde; al ver esto humanin les pregunto ¿Por qué ustedes traen una
bandera verde? Ellos le contestaron porque nosotros no generamos la contaminación y así de verde
queremos ver algún día nuestros hogares.

Humanin al ver ese gesto de los residuos entro en llanto y todo orgullo quedo quebrantado, al notar
los residuos que su arrepentimiento era sincero, le dijeron que nos quieres decir, entonces humanin
dio el mensaje que las demás familias le habían dado “enviamos a nuestro líder humanin para que
sea nuestro portavoz ante ustedes, no podemos más con sus ataques ustedes ganan” permítanos tan
solo unos días para abandonar nuestras casas.

Al escuchar los residuos dieron gritos de júbilo y agradecieron a la naturaleza por el poder que les
dio para ganar la guerra.

Terminado la reunión humanin agachando la mirada gira para continuar su camino a casa, los
residuos le dicen ¡alto, no des un paso más! Ya sabemos que esto iba a suceder, que ganaríamos;
sabes todo esto puede llegar a su fin, todo está en las manos de ustedes mismos, míranos humanin
somos residuos generados por ustedes mismos, ve diles la buenas nuevas a las familias.
Al llegar a casa todas las familias estaban reunidos ahí y le preguntaron ¿aceptaron nuestro
rendimiento? Humanin les dice “si” es mas mando un mensaje que debemos tomar en cuenta, ellos
dicen que nosotros somo lo que hemos propiciado que ellos aumenten en tal medida que la
naturaleza no cartas en el asunto para que las personas se dieran cuenta del peligro que están
cometiendo al contaminar a lo que llamamos hogar.

Desde ese momento todas las familias que sobrevivieron a este cataclismo de contaminación,
empezaron de cero a crear un ambiente verde y así lograron con la ayuda de los árboles en purificar
todo el aire contaminado.

A ahora en adelante todas las familias respetan la naturaleza.

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