Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
MOISÉS EN EL DESIERTO
Una forma de responder por qué Dios requiere fe es porque Él es nuestro Padre Celestial.
Nuestra relación con él es similar a otras relaciones en el sentido de que incluye la
confianza en la otra persona, el tiempo juntos, el amor y el respeto. Debido a que no
podemos conocer plenamente a otra persona, y mucho menos a un Dios infinito, todas las
relaciones requieren de un cierto grado de fe (confianza). Dios es nuestro Padre y se
necesita fe para creer que Dios nos ama y que Él provee para nuestras necesidades.
La fe es importante para que los creyentes obedezcan al Señor. Por ejemplo, a Adán y
Eva se les había dado una orden a no comer de una fruta en particular (Génesis 2:15-17).
Debido a que su fe vaciló con respecto a este mandato, se comieron el fruto prohibido y
pecaron. En contraste, Santiago 2:23 comparte, “Le creyó Abraham a Dios, y esto se le
tomó en cuenta como justicia”.
Dios requiere la fe, ya que permite a los humanos la capacidad de elegirlo o rechazarlo.
Sin la capacidad de elegir, la humanidad dejaría de ser humana tal como la conocemos.
Porque la gente puede optar por tener fe o no tener fe, hay una manera de que Dios pueda
saber quienes son los que han creído en Él y quienes no.
La fe en Dios no es "fe ciega", como algunos sostienen. Sino es una elección basada en la
información disponible. La Biblia, el mundo creado, las vidas cambiadas de los creyentes,
Jesucristo, y otras maneras en que Dios actúa en nuestro mundo constituye una prueba
suficiente para que la gente elija la fe en Dios. Como Jesús enseñó en Lucas 16:31: “Si no
les hacen caso a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán aunque alguien se
levante de entre los muertos.”
SALMO 90 – LA ORACIÓN DE
MOISÉS EN EL DESIERTO
Este Salmo tiene por título, Oración de Moisés, varón de Dios. Algunos comentaristas
piensan que este no era el mismo Moisés famoso y familiar, pero la evidencia es mucho
más fuerte para creer que este era en verdad el gran líder de Israel. Este es el único
canto de Moisés en los Salmos, pero hay otros dos en el Pentateuco (Éxodo 15 y
Deuteronomio 32-33).
Si lo conectamos con algún momento en particular en la vida de Moisés, la mejor
sugerencia es Números 20. “El escenario histórico es probablemente entendido de una
mejor manera por los incidentes registrados en Números 20: (1) la muerte de Miriam,
la hermana de Moisés; (2) el pecado de Moisés al golpear la peña en el desierto, el
cual le impidió entrar hacia la Tierra Prometida; y (3) la muerte de Aarón, el hermano
de Moisés.” (James Montgomery Boice)
Charles Spurgeon escribió sobre la frase, Varón de Dios: “Moisés fue peculiarmente
un varón de Dios y el hombre de Dios; escogido por Dios, inspirado por Dios, honrado
por Dios, y fiel a Dios en toda su casa, él bien merecía el nombre el cual se le da
aquí.”
iii. “La palabra Hebrea para ‘morada’ pudiera ser traducido a ‘refugio,’ que es
como aparece en Deuteronomio 33:27, uno de los otros cantos de Moisés.”
(Boice)
b. Tú nos has sido refugio de generación en generación: Moisés entendió que la
ayuda de Yahvéh para con Su pueblo no comenzó con el éxodo de Egipto.
Desde los comienzos de su peregrinaje bajo el patriarcado de Abraham hasta
los días de Moisés, Dios ha sido su refugio, su habitación y protección.
i. No es cosa buena decir de cualquiera, sin hogar. Espiritualmente hablando
eso no necesita jamás ser el estado del creyente. Nosotros tenemos nuestro
SALMO 90 – LA ORACIÓN DE
MOISÉS EN EL DESIERTO
hogar en Él, y el hogar debe de ser un lugar donde descansamos, donde
podemos ser nosotros mismos, donde el amor y la felicidad dominan. Todo
esto debe de marcar nuestra relación con Dios.
ii. “En este Eterno hay una morada segura para las generaciones sucesivas de
los hombres. Si Dios mismo no fuera el mismo de ayer, él no sería un refugio
apto para los hombres mortales; si él pudiera cambiar y cesar de ser Dios él no
sería más que una incierta morada para su pueblo.” (Spurgeon)
iii. “Aquel que mora en Dios no puede ser desarzonado ya que Dios es más
fuerte que todos; tampoco nadie puede tomar a otro fuera de sus manos,Juan
10:29. Aquí entonces es mejor para nosotros el ocupar nuestra mansión, y el
buscar provisión para todas nuestras necesidades solamente en Dios.” (Trapp)
ii. “El Salmista, a punto de describir el estado transitorio y fugaz del hombre,
primero nos dirige a contemplar la inmutable naturaleza y atributos de Dios.”
(Horne)
i. “Él se eleva por encima del Tiempo, y que ningún término de la cual los
hombres describen la duración tienen algún significado sobre Él. Mil años, a los
cuales delante del hombre le parece muy largo, son para Él disminuidos en
nada, en comparación con la eternidad de Su ser. Así como lo mencionó
Pedro, lo opuesto también debe de ser cierto, y ‘el estar un día con el Señor
son como mil años.’” (Maclaren)
b. Los días de nuestra edad son setenta años: Moisés vivió hasta los 120 años de
acuerdo con Deuteronomio 31:2y 34:7. Él no dijo esto ya sea como una
promesa o un límite, sino como una estimación poética de lo largo de la vida. El
énfasis está en la futilidad de la vida; aun cuando alguno dure más de la norma
de los setenta años, el final de todo esto es molestia y trabajo.
i. Setenta años: “Cuyo tiempo los antiguos escritores paganos también fijaron
como el espacio usual de la vida de los hombres.” (Poole)
c. Porque pronto pasan, y volamos: Moisés describió lo corto y a menudo fútil del
sentido de esta vida. El profundo clamor de Moisés parece anticipar temas
importantes en Eclesiastés.
d. ¿Quién conoce el poder de tu ira? Moisés conectó la idea de una vida
relativamente corta y frustrante al hecho del justo juicio de Dios. Él
especialmente vio y vivió esto en el desierto.
ii. “De todas las disciplinas matemáticas esta es la más difícil: el contar
nuestros días. Contamos todo lo demás, pero al parecer no somos capaces de
usar nuestros días correctamente y con sabiduría.” (Boice)
SALMO 90 – LA ORACIÓN DE
MOISÉS EN EL DESIERTO
iii. “De todas las reglas de la aritmética esta es la más difícil —el contar nuestros
días.Los hombres pueden numerar sus rebaños de bueyes y ovejas, pueden
estimar las ganancias de sus fincas y granjas, pueden con un poco de dolor
numerar y contar sus monedas, y aún están persuadidos que sus días son
infinitos e innumerables y, por lo tanto, jamás comienzan a enumerarlos.”
(Tymme, citado en Spurgeon)
iv. “El vivir con pensamientos de muerte es la manera de morir con consuelos
vivientes.” (Trapp)
i. “Cuando los hombres están bajo el castigo se les permite protestar y decir
¿hasta cuándo?’ Nuestra culpa en estos tiempos no es una gran audacia con
Dios, pero mucha timidez en rogarle a él.” (Spurgeon)
i. “Alexander Maclaren dijo, ‘La única cosa que asegurará una alegría de por
vida es un corazón satisfecho con la experiencia del amor de Dios.” Esto
significa que nada podrá satisfacer finalmente el corazón humano excepto
Dios.” (Boice)
ii. Esta misericordia debe de ser buscada de mañana. “No hay ninguna otra hora
como aquella de la mañana para tener compañerismo con Dios. Si nos
atrevemos a esperar delante de Él para tener satisfacción, entonces el ser
llenado en esa hora sobre fluirá en las otras horas.” (Meyer)
iii. “La renovación de su amor está asociado con “la mañana” (cf. 30:5; 49:14;
143:8;lamentaciones 3:23), así como la luz del día es contrastante con la
oscuridad (penumbra) de la noche. Así el salmista ora por un nuevo comienzo,
el cual solamente el Señor puede abrir para con Su pueblo.” (VanGemeren)
d. Alégranos conforme a los días que nos afligiste: Muchos fueron los días de su
aflicción Moisés pidió que los días de su alegría también fueran muchos. Él
esperaba que los días de alegría fueran tan largos que la gloria de Dios sería
evidente aun sobre sus hijos.
ii. “El tiempo de nuestro peregrinaje sobre la tierra es un tiempo de tristeza; nos
dolemos por nuestro amigo que partió, y pronto es afligirán por nosotros; estos
son días en los cuales Dios nos aflige.” (Horne)
iv. Conforme a los días: “El buen Señor mide la oscuridad y la luz en una debida
proporción, y el resultado es una vida con la suficiente tristeza para estar
segura, y con la suficiente alegría para ser deseable.” (Spurgeon)
SALMO 90 – LA ORACIÓN DE
MOISÉS EN EL DESIERTO
e. Sea la luz de Jehová nuestro Dios sobre nosotros: Anteriormente en el Salmo
90 Moisés habló del pueblo de Dios como en ser consumidos y turbados. Él oró
para que la gracia de Dios intercambiara esa miseria por Su propia luz.
i. La luz de Jehová nuestro Dios es gran belleza. Es imposible el pensar de un
nivel mayor de belleza o bondad.
ii. La luz de Jehová: “Su rostro de favor, su influencia de gracia, y su gloriosa
presencia.” (Poole)
iii. “El ruego fiel de pedirle a Dios que deje que su ‘belleza,’ su esplendor, la luz
de su rostro, su gracia y favor, esté sobre ellos.” (Horne)
ii. “Los buenos hombres están ansiosos en no trabajar en vano. Ellos saben
que sin el Señor no pueden hacer nada, y, por lo tanto, estos claman a él por
ayuda en el trabajo, por aceptación de sus esfuerzos, y por el establecimiento
de sus diseños.” (Spurgeon)