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ENTREVISTA

1.- ¿Cuál es tu vinculación con el fenómeno OVNI?

Como todo interesado en el tema, empecé desde muy temprana edad como aficionado del
cine y la literatura de Ciencia Ficción. Esto me llevó a ver por televisión películas sobre
visitantes del espacio exterior y que para mí eran fascinantes. En aquel tiempo, durante la
década de 1970, había programas que también tocaban el tema, pero no como ciencia ficción,
sino como una realidad. Fue entonces que vi la serie "En Busca de…" (1978-1982), la serie
"Project U. F. O." (1978-1979), la película "The UFO Incident" (1975), las películas basadas
en los libros de Erich Von Däniken, "La Nave de los Dioses" (1970) y "En Busca de los
antiguos Astronautas" (1973), y la serie "COSMOS" (1980) de Carl Sagan.

Ese interés se amplió de una forma general a todo tipo de libros relacionados hasta que llegó
a mis manos un ejemplar de una revista mexicana titulada "Contactos Extraterrestres" (1976-
1982) que comencé a coleccionar con ciertas dificultades, pues aún era un niño y la revista
ya no se editaba, de hecho, hasta hace unos meses por fin completé la colección de 145
ejemplares. En esas revistas me di cuenta de que había muchos reportes sobre objetos
voladores no identificados y que además existían grupos que se dedicaban a investigarlos.
En uno de esos ejemplares se publicaron las direcciones postales de esos grupos, de inmediato
escribí cartas solicitando información sobre el tema. La desilusión fue grande cuando recibí
a vuelta de correo sólo formularios para inscribirme a sus boletines que no eran gratis. Así
que mi única fuente de información fueron las revistas y los pocos documentales que veía
por televisión.

No fue sino hasta que empecé a trabajar, en 1985, que adquirí libros de segunda mano en
locales de viejo. Claro que para ese tiempo ya había mucho más que cuando me empecé a
interesar, sin embargo, aún era un crédulo que pensaba que, si estaba en un libro o pasaba
por televisión, necesariamente debía ser cierto. Así que poco a poco fui adquiriendo más
libros de diversos autores que devoraba tan pronto llegaba a casa. Ya no me interesaban los
grupos a quienes les había escrito hacía casi una década, empecé a investigar por mi cuenta
más que nada por curiosidad que por querer ser investigador y aún ahora no me siento
investigador, pero si tuve una evolución que me llevó de la más pura credulidad al
escepticismo sano, no sólo negar por negar, pero si guardando ciertas reservas al hablar del
tema.

Por una casualidad fui a dar a una agrupación que empezaba a formarse en 1989. Era gente
de mi ciudad que tenían el mismo interés que yo en el tema, pero a diferencia de lo que pensé
en un principio, tampoco tenían la gran información. A la par que participaba en las
actividades del grupo, seguí leyendo todo lo que podía sobre el tema, no fue sino hasta 1996
que me empecé a plantear ciertas dudas sobre lo que realmente había detrás del fenómeno
ovni pues en mi recorrido sólo había visto testimonios, creencias, suposiciones, pero nada
que indicara que hubiera algo sólido. Fue así que poco a poco la balanza se fue inclinando
hasta que se me ocurrió hacer un cierto revisionismo a todo lo que había leído, internet tenía
poco de haberse popularizado y la veía como una fuente inagotable de conocimiento sobre el
tema, sin embargo, también vi que fuera de México todos estaban igual, buscando la prueba
irrefutable de la existencia extraterrestre.
Fue así que dejé de buscar respuestas en otros y empecé a buscarlas por mí mismo. Mis
actividades escolares me dieron las herramientas para ver el tema desde una óptica más
racional, aunque todavía era bastante crédulo. El revisionismo que había iniciado en 1997
me llevó a querer escribir un libro para demostrar que aunque no existiera una evidencia
palpable, el tema era real, entonces fui recopilando casos sobre los que había leído para
documentarlos, pero me fui dando cuenta que faltaba información, los relatos no eran
corroborables, las fotos carecían de estudios convincentes y la mayoría carecían de la más
mínima información, poco a poco me di cuenta de que el fenómeno ovni era real, pero de
ninguna forma como la mayoría pensaba. Era y es real desde el momento que alguien no
puede identificar algo en el cielo, pero de eso a que sean naves de otros mundos, había un
largo trecho por demostrar.

El intento fallido de escribir ese libro, lejos de alejarme del tema, me llevó a verlo desde otro
punto de vista, probar por mí mismo qué era lo que la gente fotografiaba. La balanza ya se
había inclinado al lado contrario, era 2006, fue así que inicié experimentos con mi cámara
tomando fotos sin ton ni son para ver qué salía. En 2004 había adquirido mi primera cámara
digital, una SONY Cyber- Shot DSC-W5 y con ella empecé a tomar fotos, pero poniendo
atención a lo que tomaba. Así nació un proyecto al que llamé "OVNIs Inadvertidos" del que
salieron fotos interesantes, pero no de muy buena calidad, sin embargo, me empecé a dar
cuenta que la mayoría de las fotografías eran malas interpretaciones de cosas naturales que
no habían sido vistas por quienes tomaban las fotos. De estos primeros experimentos salió
un artículo que publiqué en enero de 2009 y al que titulé "La Transrodización" y otro que
aún no publico sobre los orbes. Con tales actividades deduje que las cámaras eran un factor
importante en la mayoría de las fotos que se mostraban por internet y que cada cámara daba
un efecto distinto, sobre todo en los primeros modelos que tenían fallos en los sensores y que
daban fotos curiosas como por ejemplo "el Sol negro" o los "lens flares" producidos por el
rebote de la luz en el interior de la lente o el objetivo de la cámara. Así me di cuenta de fallos
en fotos viejas que eran interpretados como ovnis pero que en realidad eran efectos
producidos por la lente, por defectos de la cámara que dejaba entrar la luz a la caja del
negativo o fallos al momento del revelado que luego pude reconocer en mis propias
fotografías tomadas hace varios años con cámaras analógicas tales como manchas de luz, el
cordón de la cámara o un dedo atravesado en la lente y muchas otras cosas.

Sin proponérmelo, me fui especializando en fotografía, de tal forma que ingresé a varios
grupos como analista en Puerto Rico para OVNI-NET de la señora Lucy Guzmán y Brasil
para Revista UFO de Ademar Gevaerd, además de forma ocasional en varios otros países
como España, Costa Rica, Uruguay, Argentina, Venezuela, Italia y Estados Unidos entre
otros. Fue así que, sin proponérmelo, me fui haciendo de un lugar en el tema pero finalmente
me llevó a hacer un revisionismo de los orígenes del tema en la historia del fenómeno a través
de la recopilación de viejos boletines, libros e informes de organismos oficiales que se han
ido desclasificando con los años, lo que me ha llevado a deducir que el tema se sustenta en
su mayoría en la exageración, malas interpretaciones, el deseo de ser parte de algo
extraordinario y las más de las veces en el franco engaño creando una falsa conciencia de
existencia que no tiene sustento alguno más que en testimonios que no son corroborables ni
tienen el valor como evidencia contundente. También participo en el GEFAI de Milton W.
Hourcade desde 2008, una organización internacional de investigadores de distintas partes
del mundo y recientemente en la lista de intercambio Anomalis 2.0 por invitación de Ignacio
Cabria y Vicente-Juan Ballester Olmos, con investigadores, escritores y divulgadores del
tema ovni, en su mayoría de España.

2.- Cuando hablamos de OVNI, hablamos de eso, Objeto Volador No Identificado, por lo
general, manifestándose como hecho lumínico, en movimiento, bien sea de día o de noche,
sin ruidos ni rastros de combustión, realizando movimientos inusuales, y en ocasiones,
alcanzando velocidades impensables para cualquier artilugio que conocemos.
Inevitablemente son asociados a naves, y por lo general, de origen extraterrestre. ¿Que son
para ti los OVNIs?

Son simplemente eso, objetos voladores no identificados, pero como decía el Dr. Hynek ¿No
identificados para quién? No todas las personas conocen todo lo que los demás conocen, de
tal forma que lo que para unos puede ser un fenómeno natural como un aerolito, para otros
es un fenómeno extraño que nunca habían visto. Partiendo de esa apreciación, podemos
entender el gran cúmulo de reportes que se tienen, la mayoría sin evidencia palpable pero
que engrosan el índice de avistamientos año con año provocando todo tipo de hipótesis sin
tener los elementos de juicio necesarios para afirmar lo que se afirma sobre ellos. La mayoría
de quienes se dedican al estudio del tema tratan a los testigos de manera paternalista, primero
porque no quieren poner en duda el testimonio y en segundo porque si muestran cierto
escepticismo dejarán de recibir casos. Esto es bastante vistoso en quienes se dedican a la
divulgación del tema escudándose en el periodismo. Sólo recopilan, pero no resuelven los
casos, aunque eso no les impide publicarlos tan pronto los reciban. Por otro lado, se deducen
teorías al vuelo, como por ejemplo "La Teoría de la Distorsión", desarrollada por un español
que intenta resolver un misterio creando otro, pues esta teoría dice que la diversidad de seres
reportados en los casos de aterrizajes responde a una "entidad desconocida" que utiliza la
información del cerebro del testigo para manifestarse ante él, usando un disfraz tomado de
sus vivencias. De esta forma se quiere justificar esa diversidad, demostrando el paternalismo
del que hablaba antes al no querer llamar mentiroso a un testigo porque la descripción del ser
con el que contactó parece sacada de una película de ciencia ficción o simple y llanamente
se lo ha inventado.

Existen muchos casos bastante representativos de esto, pero hay dos que son tan descarados
que dan risa, uno es el del patrullero Herbert Schirmer ocurrido el 3 de diciembre de 1967,
abducido por seres que recuerdan a una película de ciencia ficción titulada "Mars Needs
Women" del mismo año, otro es el de Filiberto Cárdenas, caso ocurrido en 1979, un año
después que se exhibiera la película "Starship Invasions", o un caso muy clásico, el de
Narciso Genovese, cuyo libro, "Yo estuve en Marte", se editó en 1958, 3 año después de que
se exhibiera la película "This Island Earth" y de donde se obtuvo la imagen para Ashtar
Sheran. Ejemplos hay muchos y ellos nos dan la idea de que en realidad el fenómeno OVNI
es un fenómenos psicosocial más que un fenómeno físico real, sin embargo no todos los casos
son iguales y es ahí donde la labor de investigación objetiva se hace necesaria y es donde
quienes nos dedicamos al estudio de los OVNIs debemos buscar qué fue lo que el testigo
reportó en los casos que no son inventos o mentiras, porque también hay gente honesta que
los reporta, pero ahí regresamos a lo que comentaba antes, ¿no identificados para quién?
Aquí puedo citar el estudio llevado a cabo por el Proyecto Libro Azul cuyo análisis dio como
resultado que, de 12,608 casos revisados, 11,907 fueron explicados, dejando en no
identificados 701 casos, que representan el 5.56% del total. Sin embargo, que 701 no hayan
sido explicados no significa que hayan sido casos misteriosos o a favor de la hipótesis
extraterrestre, sino que no hubo suficiente información para identificar el objeto reportado.
Obviamente que esto no gustó a los múltiples entusiastas que el tema había ganado y tras el
anuncio del cierre del proyecto el 17 de diciembre de 1969, los grupos civiles se dieron a la
tarea de tomar la batuta de la investigación con resultados desastrosos que padecemos hasta
el día de hoy pues prevalece la creencia por sobre la investigación objetiva.

3.- El 2 de julio de 1947, algo se estrelló cerca de un rancho cerca de Roswell (Nuevo
México). En un principio se habló de un platillo volador, posteriormente, el ejército de EEUU
declaró que era un globo atmosférico convencional. El hecho tuvo una repercusión
importante en días y semanas posteriores, hasta que se desvaneció. En la década de los 70,
algunos “ufólogos” retomaron el incidente, y el misterio y diversas teorías son actualidad
hasta hoy día. Caso Roswell: ¿conspiración o realidad?

Ni una ni la otra desde el punto de vista ufológico, pero ambas desde el punto de vista militar.
Es importante situarse en el momento en que los acontecimientos sucedieron. Eran los
tiempos de la postguerra. Unos años antes 3 países libraban una carrera para obtener un arma
nuclear que al final de cuentas la ganó Estados Unidos dando fin a la Segunda Guerra
Mundial con el bombardeo a Japón. Obviamente que los alemanes se quedaron en el camino
siendo vencidos, invadidos, enjuiciados y encarcelados por los aliados, mientras Stalin
disfrutaba de haber sido parte de la gran conflagración pues, a pesar de haber sufrido ataques
en su territorio, los Nazis realmente no le hicieron mella. Así que el único posible enemigo
de Estados Unidos era Rusia pues quería difundir el Comunismo a todo el planeta, por su
parte, Rusia temía a Estados Unidos por la posesión de armas atómicas. Ese fue el inicio de
la Guerra Fría y el principio de la desconfianza entre ambas naciones. Aunque Estados
Unidos se sentía seguro con el armamento desarrollado durante la guerra, temía que Rusia
desarrollara un armamento similar y desplegara un ataque, eso hizo que se empezara a poner
en marcha la maquinaria del espionaje.

Roswell fue precisamente el sitio desde donde despegó el Enola Gay rumbo a Hiroshima para
dejar caer la primera bomba nuclear. Así que, aunque polvoriento y sin ningún atractivo,
Roswell era un punto estratégico. Como era de esperarse, comenzaron los sondeos para
detectar detonaciones nucleares en territorio ruso, y el vehículo para hacerlo fue un globo
estratosférico con un sistema de detección acústica de baja frecuencia lanzado desde
Alamogordo como parte del proyecto Mogul. Lo que sigue ya es del dominio público, hubo
una tormenta, el aparato cayó, fue encontrado por un ranchero y reportado a los medios. En
ese entonces acababa de suceder el encuentro de Kenneth Arnold, y Ray Palmer explotaba el
tema en su nueva revista FATE, así que los platillos voladores eran la moda, no es de extrañar
que ante el descubrimiento de un artilugio espía se quisiera desviar la atención con la historia
del platillo. De haber sabido lo que iba a provocar esa mentira, tal vez hubieran dicho otra
cosa. Como bien dices, el asunto pasó pronto al igual que las notas sensacionalistas de hoy,
pero quedó registrado en los archivos del Proyecto Libro Azul que, tras 1969 comenzaron a
acumular polvo hasta 1977 cuando fueron desclasificados y puestos a disposición pública.
Quien desenterró el caso fue Stanton T Friedman. Gracias a un encuentro fortuito con Jesse
Marcel, aquél que salió en las fotos del 47 mostrando los restos del globo a la prensa,
Friedman se enteró del caso y en 1978 solicitó acceso a los archivos, desde entonces nadie
pudo evitar que pregonara a los 4 vientos que un platillo volador se había estrellado en
Roswell.

En ese entonces aún había gente que recordaba el suceso y Friedman entrevistó a todos los
que supieran algo. Todo se material le sirvió para escribir varios libros y empezar a hablar de
una tapadera del gobierno para ocultar el tema del platillo estrellado. Fue tanta la alaraca, que
la Fuerza Aérea respondió con dos volúmenes detallados, uno en 1995 titulado "The Roswell
Report: Fact vs Fiction in the New Mexico Desert" y el otro en 1997 con el título "The
Roswell Report: Case Closed", con lo que la Fuerza Aérea daba por zanjado el asunto, pero
ya sabemos cómo son los entusiastas, se les da un dulce y quieren más, para ellos siempre
habrá algo que el gobierno oculta mientras no se les dé lo que ellos creen que se les esconde.

4.- Y a raíz de esta última cuestión, ¿crees que los gobiernos de las principales potencias
ocultan información relevante del fenómeno OVNI, o no informan para no hacer público una
hipotética vulnerabilidad militar ante un fenómeno del que todavía carecen de información?

No, no lo creo, pero de hacerlo, responde meramente a cuestiones sensibles de la propia


milicia, por ejemplo, cuando detalles estratégicos están en juego, como zonas ciegas al radar
que permitan la incursión de fuerzas enemigas en su territorio o cuando se prueban prototipos
o aviones experimentales.

Una de las zonas más conocidas y que no debería serlo es el Área 51, un aeródromo en el
desierto de Nevada localizado en Groom Lake. En ese sitio se trabajó en la ingeniería inversa,
pero no con platillos voladores, sino con aviones enemigos, como un MIG ruso que lograron
derribar. El Área 51 se creó precisamente durante el desarrollo de la Guerra Fría como un
lugar para probar los nuevos modelos de aviones espía. De ahí salió el mejor avión espía
hasta la fecha, el Lockheed U2, que hizo vuelos de reconocimiento sobre territorio soviético.
Otras linduras que hicieron vuelos de prueba ahí fueron el A-12 Oxcart, el SR-71 Black Bird
y el sigiloso F-117 Nighthawk del que se llegó a sospechar que hizo de las suyas sobre terreno
británico, siendo también parte de la gran oleada de 1989-1990 en Bélgica, pero la nota fue
desmentida.

Si yo sé todo esto, no hay política de ocultamiento y sobre eso hay un ejemplo muy palpable.
Inglaterra también está dentro de los países que supuestamente ocultan su información
gracias a los oficios de Nick Pope, a pesar de haberse desclasificado todo el material. Sin
embargo, en 1966, hubo un caso en el que varios platillos voladores habían "aterrizado" en
distintas zonas. La policía se movilizó, la prensa dio cuenta de cada movimiento que se
realizó durante el hallazgo y posterior traslado de los artefactos para ser estudiados, pero con
ciertas precauciones, pues del interior salía un sonido como de relojería. Al final de cuentas
resultó que los aparatos habían sido hechos por dos estudiantes como una broma, habían
fabricado 6 platillos que dejaron en diversas partes de la ciudad. El detalle aquí es que la
prensa y los medios televisivos hicieron una cobertura completa, publicando fotos,
grabaciones de audio, videos del momento del transporte de los platillos y hasta del momento
en que se abrían. En Roswell no hubo tal cosa, lo que indica que no fue algo verdaderamente
extraordinario de no haber sido por la declaración iniciar de la misma milicia para cubrir el
incidente del Proyecto Mogul del que era parte ese globo que había sido lanzado desde
Alamogordo. Ante esa comparativa, Roswell y el Área 51 no son más que la creación de los
entusiastas del tema. En España, el Ministerio del Aire tuvo a su cargo a investigadores
civiles dentro de sus archivos ovni, lo que llevó a su posterior desclasificación. Podemos citar
a Vicente-Juan Ballester Olmos en España y a David Clarke en Inglaterra por el Ministerio
de Defensa. Así que no, no creo que se oculte nada, a menos claro, que la información ovni
esté mezclada con algún punto sensible de la propia organización que lo clasificó como
secreto.

En realidad, el tema fue visto en algunos países como la tapadera perfecta para sus desarrollos
militares y de espionaje, los mismos pilotos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos tuvieron
avistamientos ovni, lo que no sabían es que se trataba del avión espía U2 y la CIA no se los
iba a decir. Entre los documentos que la CIA ha desclasificado se pueden leer memos donde
había una cierta disputa con la Fuerza Aérea por el tema ovni debido a la clasificación de alto
secreto de los proyectos de espionaje. Sabemos que un secreto compartido con un gran
número de personas deja de ser un secreto, así que dentro de las agencias de gobierno y la
milicia no todos sabían sobre todos los proyectos que se llevaban a cabo.

Otro punto no muy conocido fue que gracias al espionaje se inició un proyecto espacial dentro
de la Fuerza Aérea independiente del de NASA y dirigido por el Pentágono, que llevaría
hombres al espacio durante la carrera por llegar a la Luna emprendida abiertamente entre
Rusia y Estados Unidos. Eso se debió a que los satélites espía que fotografiaban el territorio
ruso desde el espacio, perdían mucho metraje de película en densas capas de nubes que no
les permitían fotografiar los blancos establecidos. El proyecto se llamó MOL (Manned
Orbital Laboratory) o Laboratorio Orbital Tripulado, iniciado en 1964. El proyecto se
presentó al público como un programa de investigación sobre el hombre en el espacio. Los
rusos no se tragaron el anzuelo y respondieron con su propio proyecto espía secreto, el
ALMAZ, un laboratorio similar al MOL, pero mejorado, según los rusos. Al final, la
tecnología se adelantó a los norteamericanos y cancelaron el proyecto sin enviar hombres al
espacio. Los rusos los aventajaron con 5 hombres de los que sólo 2 llevaron a cabo misiones
exitosas.

Con todo esto, podemos darnos cuenta que la Guerra Fría no era contra platillos voladores,
sino contra Rusia, con lo que la investigación de los ovnis era en realidad un programa para
evitar posibles ataques rusos con nuevas armas. Obviamente que la población se dejó seducir
por los platillos voladores y eso representó un gran problema para la Fuerza Aérea y más
para el proyecto Libro Azul, pues estaban en medio de dos flancos, por un lado, atentos a los
movimientos rusos y por el otro atendiendo cientos de reportes de la gente que cada vez se
hacían más fantasiosos por la psicosis colectiva que se había creado, cosa que entorpecía las
actividades importantes de la Fuerza Aérea.

5.- Por lo general, los servicios de inteligencia ligados a los estamentos militares de países
como EEUU, Rusia, China, Inglaterra, Francia, por citar los de primer orden, son reacios a
desclasificar información en general. Ante un fenómeno de permanente actualidad como es
el que nos ocupa, crees que también está entre sus prioridades manipular y/o desinformar a
través de todos los medios a su alcance?
Sí, pero no para ocultar el tema ovni, el tema ovni es usado para seguir desviando la atención.
Estados Unidos manipula a las masas con los videos liberados del Pentágono que en realidad
no son nada extraordinario. La idea, supongo, es dar la imagen de apertura al tema para
desviar la atención de lo importante que, hasta el momento pueden ser varias cosas, como
por ejemplo las pruebas con los nuevos aviones hipersónicos, el desarrollo de armas
estratégicas de defensa y hasta hacerse ver distraídos con el tema para engañar a los
potenciales enemigos.

Rusia ha dejado de ser la amenaza que era antes, ahora son más disputas económicas que
ideológicas, pero el enemigo potencial ahora es China. Siento que pasamos por el mismo
camino que ya hemos recorrido durante la Guerra Fría y estamos asistiendo a la repetición
de la misma historia que vivimos entre 1948 y 1969 con el tema ovni. Mientras la milicia
libraba una guerra mediática con Rusia que desembocó en la crisis de los misiles, el público
se quedó con las noticias sobre ovnis que la milicia utilizaba para desviar la atención de sus
esfuerzos por rearmarse. Como ya lo comenté antes, las pruebas que realizaban con nuevos
prototipos eran enmascaradas como ovnis, a veces sin proponérselo y otras intencionalmente,
ya que ellos no podían exponer lo que en realidad estaban haciendo bajo la cortina de humo
creada con los ovnis.

Por su parte, la población tejía otra historia con lo que creía ver, además de que nunca faltaron
los engañadores que jugaban con el tema trucando fotos y creando historias fantásticas. Ray
Palmer y Kenneth Arnold se asociaron para fomentar la idea de los platillos voladores en la
revista FATE. Palmer reescribió la historia de Arnold para hacerla más "interesante", luego
el Mayor retirado Donald E. Keyhoe que dirigió el NICAP, introdujo en la mente de la gente
que los platillos voladores provenían del espacio exterior. Su libro "Platos Voladores de otros
Mundos" de 1953 (editado en español en 1955) iba encaminado a ello, pero, al leer unas
pocas páginas, uno se da cuenta que mentía en muchas cosas, como por ejemplo en los
ataques de ovnis a aviones comerciales, escribiendo que uno de los desastres aéreos en el que
un avión se hizo pedazos en el aire, había sido a causa del ataque de un platillo volador,
cuando en realidad se debía a una falla estructural provocada por una tormenta. El avión era
un de Havilland DH-106 Comet 1, operado por BOAC (British Overseas Airways
Corporation) que se precipitó al suelo el 2 de mayo de 1953 cerca de Calcuta. La causa fue,
según el informe de la investigación "Falla estructural del avión durante el vuelo a través de
una tormenta. En opinión de la Corte, la falla estructural se debió a un sobreesfuerzo que
resultó de: - (1) Ráfagas severas encontradas en la tormenta, o (2) Sobrecontrol o pérdida de
control por parte del piloto al volar a través de la tormenta".

Ante este tipo de mentiras contadas por quien luego sería el director de una agencia de
investigación ovni (NICAP), uno no puede menos que dudar de lo que se dice del tema, sobre
todo cuando quienes lo dicen son entusiastas que al mismo tiempo detentan cierto poder de
convocatoria, pero no se dan cuenta que con este tipo de engaños enajenan las mentes de
gente con muchas ganas de creer y que se centran tanto en los platillos que no ven nada más
alrededor. A veces actúan como aquel que, trepado en un árbol, corta la rama donde está
sentado, sospechando de las agencias del gobierno y hasta descubriendo bases que deberían
ser secretas por el bien de su propia seguridad nacional, como el Área 51, por ejemplo, a la
que ya se han tomado como un atractivo turístico.
Entonces, desde ese punto de vista, sí, creo que la milicia es reacia a desclasificar ciertas
cosas, no tanto por que tengan a un alienígena autopsiado en un hangar, sino porque muchos
de los reportes de ovni no tienen nada qué ver con objetos del espacio, sino con el quehacer
propio de la labor militar y eso lo deben entender esos entusiastas para los que por más que
el gobierno suelte información, siempre habrá algo más que falte mientras no se desclasifique
lo que ellos creen que ocultan. Llevamos 50 años de lo mismo y parece que seguiremos con
otros 50 mientras el gobierno siga usando el tema para tapar sus maniobras militares. Como
dato adicional, el libro de Keyhoe fue la inspiración para la película de ciencia ficción "Earth
vs. the Flying Saucers" de 1956.

6.- Podemos pensar que, para uno, lo REAL es aquello en lo que creemos. Si tú tienes una
convicción, para ti lo real es eso. Entonces podemos pensar que la REALIDAD es una
construcción de cada uno. ¿Crees que sucede eso cuando alguien ve algo que no sabe
interpretar? ¿Crees que ese movimiento del pensamiento sucede cuando alguien tiene un
avistamiento?

Entre los entusiastas del tema se tiende a creer eso, lo has visto en los grupos de Facebook,
cada uno de los miembros vierte lo que cree del tema, otro que ha pensado algo similar, cree
ver confirmada su propia creencia y poco a poco esa creencia se va tomando como una certeza
dando pie a teorías al vuelo que no tienen sustento alguno más que la sola creencia de unos
cuantos, además que los saltos conceptuales en el tema están a la orden del día, pero no
significa que estén en lo correcto. Cantidad no hace calidad o verdades, sobre todo cuando
no conocen cómo es que se ha desarrollado el tema y menos todavía cuando basan su creencia
en relatos que pueden haber sido exagerados o fabricados desde su origen, además de que se
centran exclusivamente en el asunto ovni, no ven hacia fuera para buscar explicaciones, las
quieren encontrar dentro de lo mismo que intentan explicar, eso es razonamiento circular; es
como estar aislados sin necesitar de nadie más para sobrevivir, pero al mismo tiempo
privándose del avance que el mundo va experimentando.

En el periodismo existe una frase que reza "No dejes que la verdad arruine una buena
historia", es por eso que me he dado a la tarea de revisar las viejas publicaciones sobre el
tema y he visto que antes como hoy, se dejaba a la imaginación del público el conocimiento
sobre la naturaleza del fenómeno. Afirmar que lo que uno cree es lo real, parte del misticismo
del yo interior, pero el tema ovni no es un concepto místico como Dios, es algo tangible que
puede captarse en fotos y videos y, para algo tangible, se requiere conocimientos, pero de
donde no los hay no se puede sacar nada.

Ahora que toco el tema de fotos y videos, tampoco una imagen dice más que mil palabras,
caemos en lo mismo de que cada quien crea lo que quiera sobre lo que su cámara ha captado,
pero eso dependerá de lo que cada uno tenga en su cabeza, no será lo que realmente está en
la imagen. Así que, desde ese punto de vista, creo que los entusiastas del tema se crean su
propia realidad al margen de la real llegando a divinizar el tema. Esa es la razón por la que
tenemos dentro del fenómeno OVNI toda clase de manifestaciones que rayan en lo
paranormal como sanadores místicos que con ayuda de los "hermanos mayores" transmiten
mensajes a quienes los siguen, pero eso no dista mucho de lo que conocemos como una secta,
ganándose su propio lugar con el término de secta platillista. Quien practica así el tema, lo
hace por convicción, pero eso, como ya lo comenté, no significa que sea verdad para todos,
ni siquiera que sea una verdad, simplemente es su creencia. Uno puede tener muchas
convicciones, pero cuando se trata de sustentarlas, se debe ser objetivo y es cuando nuestras
convicciones pasan a ser sólo una creencia que no por defenderla a capa y espada será real.

Nuestro cerebro está diseñado para sobrevivir, no para decirnos qué es real o no a pesar de
interpretar la realidad, es entonces que nos damos cuenta que el cerebro a veces nos engaña
y eso tiene un trasfondo antropológico como parte de nuestro instinto de conservación, como
las pareidolias, que nos permiten ver cosas que no están ahí, como rostros en manchas o
figuras en las nubes. Muchas de ellas se encaminan al lado místico, como ver la figura de
Jesús en un pan tostado o a la Virgen de Guadalupe en una mancha de aceite o moho. De la
misma forma se ve el fenómeno OVNI, entre quienes lo ven como algo paranormal que, por
definición, están al margen de la interpretación científica. Es la razón por la que se ataca con
gran ferocidad a la ciencia, pues todo aquello que no tenga una base científica, también, por
definición es una pseudociencia, por más científico que pretenda ser su estudio, pues parte
de una base intangible que además no sigue los lineamientos del método científico. Por lo
general el material de trabajo es anecdótico, basado en creencia, testimonios, suposiciones o
hasta una que otra hipótesis susceptible al debate, pero nunca se tiene el objeto físico del que
parten esas ideas.

7.- La Vía Láctea alberga, aproximadamente, 200 mil millones de estrellas. De acuerdo a la
Ley Hubble, se estiman 150 mil millones de planetas, de los cuales, 1500 millones estarían
en la zona denominada “habitable”. Esto sólo en nuestra Vía Láctea. Se considera que el
universo tiene 100 mil millones de galaxias ¿consideras imposible que una civilización
avanzada haya podido llegar a la Tierra hace millones de años, y nos visita actualmente?

Bueno, la Ley de Hubble-Lemaître sólo habla de la expansión del universo a través de


mediciones del corrimiento al rojo de las galaxias, cosa que invalidó la idea de que el universo
es estático, tal vez quieras referirte a la Ecuación de Drake que, más que una ecuación exacta
era una ecuación probabilística. En ese entonces se desconocían muchas cosas sobre las
condiciones adecuadas para la sustentabilidad de vida como la nuestra, por lo tanto, se tomó
como modelo nuestro sistema solar y nuestra galaxia. Aún con los cálculos más
conservadores y honestos, el número no rebasa un puñado de civilizaciones técnicas que
existan en este momento, que eran lo que interesaba a Drake y Carl Sagan, pues la idea era
que pudieran contactarnos. Pero si no consideramos ese factor (fL), el número se elevaría
considerablemente al orden de las 1 x 109 (mil millones) de civilizaciones. No negaré que la
idea de mundos habitados es atrayente y bastante seductora, sin embargo, analizando los
términos de la ecuación habla del factor ne que se refiere simplemente al número de planetas
en un sistema dado que son ecológicamente adecuados para la vida, es decir, las condiciones
de vida están en un solo paquete, cuando en realidad esas condiciones también son variables.
Un planeta puede ser visualmente parecido a la Tierra, pero puede tener variaciones en la
composición del aire, la densidad de su atmósfera, variaciones en la gravedad como la hay
en nuestro propio sistema solar y demás variables que deben afinarse en ese término si
realmente es quiere obtener un número válido.

Teniendo esto en mente, los factores subsecuentes no pueden ser determinados más que como
probabilidades. Hoy podemos agradecer no estar en los tiempos de Giordano Bruno, la Iglesia
ya no quemaría a nadie por decir que hay mundos iguales al nuestro allá fuera, pero tampoco
podemos afirmar con certeza que los haya, hasta ahora, que existan planetas parecidos al
nuestro, no garantiza la existencia de una civilización avanzada, mucho menos que sea
técnica en la escala de Kardashov. Nosotros no hemos llegado aún a una civilización tipo 1,
estamos en el 0.7 de la escala, ¿Quién nos garantiza que existan civilizaciones más
avanzadas? Tal vez nosotros seamos la sobreviviente o la primera en tener conciencia de sí
misma.

No hay que dejar de lado que la habitabilidad del espacio empezó llenando los cielos con la
antropomorfización de los elementos y los cuerpos celestes, es así que tenemos, por ejemplo,
a Ra en Egipto para el Sol, Tláloc para la lluvia en México o Thor para el trueno en
Escandinavia, todos con símiles en distintas culturas. Los griegos fueron un poco más
modestos y los colocaron en la cima del Monte Olimpo, donde se erigían moradas de cristal
desde donde los dioses regían el destino de los hombres. Con el tiempo los viejos dioses se
fueron olvidando, pero poblamos los cielos nuevamente, ahora con seres venidos de más
lejos. A medida que adquiríamos conocimientos sobre el cielo y el espacio, los alienígenas
llenaban primero los planetas de nuestro sistema solar. Tenemos al norteamericano George
Adamski que decía contactar con venusinos a las afueras de la ciudad, Narciso Genovese, un
italiano radicado en México, aseguraba haber estado en Marte; Salvador Villanueva,
mexicano, aseguraba haber estado en Venus; el peruano Sixto Paz dice haber viajado a
Ganímedes, una luna de Júpiter; algunos aseguran que plagió la historia de Yosip Ibrahim,
también de nacionalidad peruana y así podría citar a más. A medida que nos adentrábamos
en el estudio del espacio, nos dimos cuenta que los planetas cercanos no podrían albergar
vida. Mercurio es un caldero desértico, Venus es una sauna extrema cuya atmósfera es
irrespirable llena de anhídrido carbónico y con presiones tremendas, Marte es un desierto con
temperaturas extremas, aunque más tolerables, pero no hay oxígeno y la Luna es
prácticamente un mundo muerto, aunque al parecer alberga agua al igual que Marte. Los
demás son cuerpos gaseosos que difícilmente podrían sostener la vida, al menos como la que
estos contactados decían haber visto y contactado. Así que los alienígenas "migraron" a otras
partes del espacio; unos fueron a habitar Las Pléyades, otros fueron a parar a Z-Reticuli y
demás sistemas estelares, pero hasta ahora los nuevos adelantos tecnológicos no han logrado
detectar señales de vida, así que parecen haberse mudado a los confines del universo
utilizando para viajar los conocimientos de la física relativista.

Resulta curioso que los alienígenas siempre estén un paso adelante de nosotros de acuerdo a
nuestro avance y no al de ellos, de quienes se dice que son mucho más avanzados que
nosotros. Alguna vez un contactado ya fallecido (Rolando Quiroga) me decía que existían
184 razas que visitaban la Tierra, de ellas, sólo 6 eran afines a nosotros, sin embargo, nos
llevan 5000 años de evolución. Otro punto interesante es la manera en que cada uno los
describe, que resulta aún más interesante cuando vienen del mismo sitio, las diferencias son
tan notables como las que existen en cada monigote que se presenta como un cadáver del
estrellamiento de Roswell. Eso debería de hacer pensar a los entusiastas del tema en que no
existe en realidad una referencia auténtica de tal hecho. Y si nos ponemos a analizar un poco
más, nos daremos cuenta que los seres adjudicados al estrellamiento surgieron durante el
último cuarto del siglo XX, empezando a tomar su forma actual a partir de 1980 con los libros
de Budd Hopkins. Debemos recordar que las pesquisas se hicieron después de 1978. A esto
me refiero cuando en los foros o grupos recomiendo estudiar la historia de fenómeno OVNI,
de lo contrario caerán en las garras de los charlatanes o abrazarán historias falsas como el
más reciente fraude de las Falsas Momias Tridáctilas de Nazca o las falsas piedras de Ojuelos
que pretenden vender como auténticas piezas arqueológicas, aunque las figuras que contienen
incluyen al moderno ser gris de las historias actuales. Bueno, ya me estoy desviando, pasemos
a la siguiente.

8.- Como suele suceder, el incremento de información puede aumentar a la vez el número de
avistamientos. Un hecho notable es que cuando Magallanes llego a Tierra del Fuego, cuentan
que los habitantes no vieron llegar los barcos. Esto se explicaría porque nunca habían visto
uno y no tenían el concepto asimilado. Los avistamientos de Ovnis son casos similares. ¿Es
preciso que conozcas antes el concepto? ¿Depende el mundo de las expectativas que
tengamos de él?

Esta afirmación del incremento de avistamientos puede tener dos lecturas, ¿Han aumentado
los avistamientos y por eso fluye más información o, fluye más información por el avance
tecnológico y por eso parecen aumentar los avistamientos? En la supuesta oleada de 1954 en
Francia, se pretendió hacer un estudio del que se desprendió, según Aimé Michel, la teoría
de la ortotenia, una suerte de líneas imaginarias que formaban una red electromagnética que
era usada por los tripulantes de las VEDs (Vehículos espaciales Dirigidos) o MOCs
(Misteriosos Objetos Celestes) para viajar por el territorio francés. En ese entonces no existía
el internet y el único material con el que se contaba eran las notas de prensa o los reportes
que aparecían en los boletines que cada grupo interesado publicaba. Así que no había forma
de saber si la muestra que usaba para tales estudios era representativa como para deducir una
teoría como esa. ¿Cuántos casos quedarían fuera de esa estadística por no haber sido
reportados o por no tener los medios para hacerlo? Hace un tiempo me preguntaban sobre la
validez de tal teoría a lo que respondí que no la tenía en lo absoluto, pues la mayoría de los
reportes, como sigue ocurriendo hoy día, no se investigan adecuadamente además de que
hablamos de una época en la que aún se desconocían una gran cantidad de fenómenos
naturales, ya sean atmosféricos, meteorológicos o espaciales.

Hoy la gente sigue confundiendo estelas de avión y cohetes espaciales o caídas de meteoritos
con algo extraño. En el caso de la supuesta oleada francesa sólo fue cuestión de leer unos
cuantos casos para saber que muchos de ellos hoy tendrían explicación. Es cuando te das
cuenta que sólo se contabilizan avistamientos reportados, independientemente de que sean o
no auténticos casos de algo fuera de nuestro planeta o de naturaleza ajena a la normal. Aquí
es donde toma sentido aquella frase que mencionaba antes, dicha por el Dr. Hynek,
¿desconocidos para quién? En nuestros días, el acceso instantáneo a las redes nos ha dado la
capacidad de reportar de una manera inmediata cualquier cosa extraña que se vea en los
cielos, además de acompañar el reporte con alguna imagen o video, sin embargo, eso no
significa que el avistamiento sea un fenómeno anómalo no identificado auténtico, mote que
se la ha dado hoy a los ovnis para desligarlo del sensacionalismo que lo ha invadido, tal como
se hizo en 1952 al crear el acrónimo ovni para desligarlo de la carga entusiasta que tenía la
etiqueta de Platillos Voladores, hasta en eso estamos repitiendo la historia.

He recordado un caso en el que me involucré en 2009, sucedió en Costa Rica,


específicamente en playa Punta Leona. Un médico tomó una fotografía y en ella se podía ver
"un extraño objeto" que pronto entusiasmó a los ufólogos, tanto que hasta se publicó casi de
inmediato por todos lados, hasta en una revista española cuyo título la catalogaba como "La
mejor foto ovni del año". A mí me pareció una mariposa y un amigo siguió mi comentario y
localizó el espécimen. El ovni voló y la mariposa tomó su justo lugar, fue como desbaratar
una ilusión óptica.

Entonces no es que los avistamientos estén aumentando, sólo se trata de que hoy todo mundo
tiene acceso a un medio de reportar algo extraño para ellos, pero no es garantía de que en
realidad lo sea para todos. Existen muchas ideas erróneas; que no conozcamos algo, no lo
hace invisible para luego materializarse cuando conocemos tal concepto. En esa afirmación
soy bastante escéptico desde que la escuché por primera vez hace poco más de 3 décadas.

Nosotros usamos conceptos y nombres dados a objetos y no nos parecen extraños porque ya
nos hemos acostumbrado a ellos, pero ¿quién nos dice que el concepto silla es el nombre
correcto para lo que conocemos como silla, o para una mesa? Los propios nombres científicos
son una descripción de las características de cada cosa, pero no su verdadero nombre, sin
embargo no nos parece extraño porque nos hemos acostumbrado. El concepto de cálculo que
se utiliza en matemáticas y medicina tiene el mismo origen, utilizar piedras para contar.
¿Cómo se llama en realidad hacer matemáticas cuando el concepto de matemática significa
conocimiento? El hecho de no conocer el nombre de las cosas o ver por primera vez algo
nuevo, no lo hace invisible a nuestros ojos, sólo lo hace desconocido, moviendo la mente
para ponerle un nombre adecuado y poder manejar el concepto. Así que esa visión de que los
indígenas no podían ver las carabelas porque no las conocían, es falsa.

Con los ovnis sucedería lo mismo, si no se pudiera ver algo que nunca se ha visto, no existiría
el término ovni o cualquier otro con el que se designen artilugios voladores desconocidos.
En ese sentido, el mundo es lo que es, lo que sea para cada uno de nosotros es independiente
de su propia existencia. Ya lo decía Carl Sagan en la introducción del primer episodio de la
serie Cosmos, "El Cosmos es todo lo que es, todo lo que fue, todo lo que será",
independientemente de lo que nosotros sepamos o no de él.

9.- Últimamente los medios de comunicación tradicionales están dando un nuevo


tratamiento, más serio, a las noticias sobre la posibilidad de vida inteligente en otros planetas.
Antes, solo las publicaciones especializadas recogían este tipo de noticias, y ahora ya son
parte de interés general. ¿Por qué crees que sucede esto y que efectos tiene?

Lo que sucede es que hemos tenido un gran cúmulo de notas sensacionalistas que han hecho
perder la credibilidad en muchos medios de comunicación, ahí tenemos a History Channel
que, gracias a Alienígenas Ancestrales, ha perdido toda credibilidad cuando toca temas
relacionados al fenómeno ovni. Sin embargo, el gran interés que hay entre la gente, los ha
llevado a crear el H2 para no perder al público cautivo que gusta de esos temas. Sin embargo,
y a pesar de los esfuerzos que ha hecho por recuperar su estatus de canal documental, no ha
podido quitarse de encima el dogma de la charlatanería pues ya no se sabe si se puede confiar
en la otra información. Discovery cayó en el mismo error a pesar de haber sido el mejor
exponente de temas científicos. El único que parece mantenerse en su línea original es
"National Geographic" a pesar de haber tomado el tema de los no identificados, aunque con
una mirada racional o imparcial. Ejemplos tenemos varios, como cuando abordó el tema de
los círculos en los campos, el fenómeno de abducción o el tema de las supuestas
manifestaciones fantasmales.

El enfoque lo es todo y depende de si se quiere aportar explicaciones o sólo aprovecharse de


los crédulos. El creciente número de noticias falsas ha hecho que la gente no sepa en qué
creer y eso ha provocado una gran desconfianza en los medios. Por su parte, los medios se
han dado cuenta de ese efecto y hacen lo posible por alejarse del descrédito a pesar de tocar
el tema. Lo mismo sucede con algunos periodistas que toda su vida la han dedicado a
fomentar la idea de los no identificados como procedentes del espacio exterior, pero rechazan
ser llamados ufólogos por el gran descrédito que ya tiene esa actividad aunque la sigan
practicando, esos son los verdaderos charlatanes, lo mismo aquellos que se hacen llamar
escépticos, pero fomentan la pseudociencia escribiendo para revistas vende humos.

Así que no podríamos pensar en que el tema se está tomando en serio, más bien quienes
manejan esos temas quieren guardar cierta distancia de él pero sin dejarlo, después de todo
es un tema que vende y quieren tener rating para que la venta de espacios publicitarios sea
redituable. El tema por sí mismo llama mucho la atención, y la gente quiere saber, al menos
quienes lo toman en serio, porque la mayoría prefiere simplemente creer y lo llevan a su
sistema de creencias. Esta tendencia de aparente seriedad en los medios ha llegado incluso a
las dependencias de algunos gobiernos, aunque no está del todo clara la intención, sobre todo
cuando el Pentágono aceptó la paternidad de tres videos que claramente no son lo que los
entusiastas creen; los pilotos parecen estar jugando Play Station.

Mick West, creador del sitio "Contrail Science and Metabunk" los descifró de inmediato. Así
que esa aparente seriedad más parece un lavado de cara del fenómeno para seguir explotando
el asunto, incluso cambiaron el acrónimo OVNI-UFO (Objeto Volador No Identificado-
Unidentified Flying Object) por FANI-UAP (Fenómeno Aéreo No identificado-Unidentified
Aerial Phenomenon) que, como ya lo comenté, lo mismo hizo en su tiempo el capitán Edward
J. Ruppelt al tomar el control del proyecto Libro Azul creando el término OVNI, cuando se
deshabilitó el proyecto Grudge, apartando así a la investigación oficial del folclor que había
adquirido el mote de Platillos Volantes.

Estamos dos generaciones delante de aquella época y hay mucha gente nueva que nació y
creció con la desinformación que se ha creado desde 1970 y parece que 50 años dejando en
las manos del público el tema ya ha sido suficiente y aparentemente los estamentos militares
tomarán de nuevo la batuta, pero ¿qué hacemos con las conclusiones del proyecto Libro
Azul?

El fenómeno no ha cambiado en lo absoluto, lo único diferente es que las nuevas


generaciones no conocen cómo se desarrolló el fenómeno o si los casos que aún hoy se siguen
publicando fueron resueltos, porque si algo tienen los entusiastas es que reciclan el tema
tomando lo que les conviene dejando de lado el trabajo que se hizo en el pasado por resolver
los casos. Esta siempre ha sido la constante. Tampoco debemos dejar de lado que los medios
no son los indicados para resolver casos, ellos sólo están para informar. Ese ha sido un gran
error que siempre ha acompañado al tema desde el inicio, pues la parte científica no lo toma
en serio. Por tal motivo el tema ovni ha seguido en la mesa de trabajo con una aparente
inexpugnabilidad.
10.- Por último, imagínate por un momento que en la habitación de al lado, te espera un ser
que no es de la Tierra. No sabes exactamente como es su aspecto, y la única certeza que tienes
es que no va a ocasionarte ningún daño. ¿Qué harías? y en el caso de que vayas a su
encuentro, ¿qué le preguntarías?

Tras mis respuestas anteriores, esta no es una respuesta fácil porque no es tan simple.
Responderla sin dejar clara mi postura, sería como, además de creer que existe La Isla de la
Fantasía, creer que podría hablar con el Sr. Roarke y persuadirle de revelar los secretos con
los que cumple las fantasías de sus huéspedes sin tener en mente que tanto la isla como el
mismo Sr. Roarke han salido de la imaginación de un escritor.

Desgraciadamente me he hecho muy realista y pragmático y ante la falta de evidencia


contundente de la presencia alienígena en nuestro planeta, este ejercicio mental no dejará de
ser sólo eso, pero hay que considerar muchas otras cosas, pues hablar con un alienígena para
que me responda interrogantes tal vez trascendentes o tal vez tontas, sería estar en la posición
de que la vida en el universo es estandarizada, es decir, que toda está basada en la
conformación antropoide y eso no lo sabemos. Todo lo que creemos saber sobre "ellos" ha
sido inventado primero por la ciencia ficción y después por los entusiastas de los ovnis,
porque el cine así se los mostró, deben ser antropoides para poder entablar una verdadera
comunicación.

La serie Viaje a las Estrellas fue la primera en emitir varios episodios con formas de vida
distinta a la nuestra. En la mayoría, la única manera de comunicarse con ellas era por medio
de una "fusión mental", procedimiento vulcano en el que la mente del uno se une a la del
otro, permitiendo a quien la practica escudriñar en la mente del otro. Obviamente que el
vulcano es otro alienígena del tipo humanoide, es decir que, para comunicarnos con una
forma de vida completamente distinta a la nuestra, se requiere de una forma de vida similar
a la humana como puente, pero con dotes que el humano no tiene; conclusión: los alienígenas
humanoides tienen cualidades mentales que el humano no posee, cosa que en la vida real
creen verdaderamente los entusiastas de los platillos voladores tripulados.

Claro que Viaje a las Estrellas no inventó el concepto ni siquiera cuando presentó otras
formas de vida nada similares a las humanas, como seres de energía, amorfos, gelatinosos,
miméticos y hasta reptiloides, pero ni siquiera el concepto de los habitantes del planeta
Vulcano, con su sangre verde y personalidad carente de emociones, otro atributo que los
creyentes en platillos voladores han dado en la vida real a los grises, fue original de la serie,
todo eso viene de la Cultura Pulp, de las revistas de ciencia ficción que llenaron los quioscos
desde mediados de la década de los 20 del siglo pasado y a su vez de un poco antes con la
literatura clásica como las novelas La Guerra de los Mundos, Las Aventuras de John Carter,
Viaje al Centro de la Tierra, De la Tierra a la Luna y de la literatura de terror cuyo máximo
exponente fue Howard Phillips Lovecraft. Todas las piezas estaban ahí, sólo había que unirlas
y darles forma, cosa que el cine de los 50 empezó a hacer con las películas de serie B a las
que se le agregaron algunos toques de supuesta ciencia, en lo que Viaje a las Estrellas
parecían estar más cercanos a la realidad, aunque también se tomaban ciertas licencias.
Así que responder esa pregunta sería como entrar en ese juego inventado por nosotros en el
que seríamos nosotros mismos quienes responderíamos en caso de poderlo hacer, puesto que
no estamos en posición de saber nada sobre alguna civilización alienígena, ni siquiera si
existen en realidad, aunque la posibilidad de vida en el universo es real, hoy ya ni siquiera
los científicos dudan de ella y se han dado a la tarea de buscarla sin resultado alguno durante
los últimos 60 años. Creo que va siendo hora de resignarnos a pensar que somos los únicos,
por lo menos en este sector del cosmos.

Por otra parte, se intenta poner como evidencia a los contactados, sin embargo, esos contactos
son similares al de los profetas del pasado que decían comunicarse con Dios, ¿Qué pasó con
ellos hoy día? ¿Acaso Dios dejó de hablarles? ¿Cómo veríamos hoy a los profetas si alguno
dijera lo que se decía en el pasado? Y no, no creo que los dioses del pasado sean los
alienígenas de hoy, sin embargo, la gente cree eso, pero de entonces y de ahora no existe una
sola evidencia palpable, además que los mensajes son superfluos, obvios, muy mundanos y
tan vacíos que no dejan lugar a dudas de que vienen de nosotros mismos, de nuestras ganas
de creer, por eso siempre digo que quienes se unen a esta búsqueda no intentan encontrar la
verdad, sólo buscan evidencias para sustentar su propia fe. Alguna vez entrevisté a
contactados y como ya lo mencioné, uno de ellos decía que existen 184 razas de las cuales
sólo 6 son afines a nosotros, aunque nos llevan muchos años de evolución. En esta idea prima
una cierta discriminación racial que siempre ha estado presente en los entusiastas de los
antiguos astronautas, hoy alienígenas ancestrales, pues el crédito de los más grandes
adelantos de nuestra civilización se lo damos a "ellos". Ese menosprecio del ser humano por
el mismo ser humano habla del primitivismo que aún nos caracteriza y me dice que no
estamos preparados para manejar un verdadero contacto, por lo menos entre la masa de
crédulos que abrazan estas ideas.

Ahora, suponiendo que exista alguna forma de vida en el espacio, que llegue a contactar con
nosotros y que yo esté en posición de hablar con ellos, sólo haría 3 preguntas: 1. ¿Cómo
lograron conquistar el viaje interestelar?, 2. ¿Cuál es su organización social que les permite
explorar el espacio? y 3. ¿Ahora qué sigue?

Leopoldo Zambrano Enríquez.


Informe U. F. O.
Monterrey, Nuevo León. México.
5 de febrero de 2021

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