Está en la página 1de 1

Libro: Casa Collage

Autor: Xavier Monteys / Pere Fuertes

Este libro sobre la vivienda ha llevado a plantearnos algunas cuestiones y diversas


dudas en torno a la manera de pensar la casa, que, como proyecto de
arquitectura, va más allá y alcanza a la forma de habitar.
Se podrá decir que la gente “ya vive” en una casa y, por tanto, no necesita saber
nada más. Por el contrario, nosotros pensamos, razonando por la vía del ejemplo,
que la gente come, pero no necesariamente todo el mundo guisa ni se alimenta
bien, aun teniendo los medios para ello. Si no qué sentido tienen las campañas de
alimentación que buscan ayudar a mejorar la calidad de vida. Vivir en una casa es
igual que comer, es también algo que se puede enseñar.
Esta nueva mirada se reclama, ante todo, para los factores externos a la
arquitectura, cómo los medios de comunicación, programas de televisión, los
hábitos cambiantes de ocio, la peatonalización de la ciudad que son factores
suficientes para alterar la manera de concebir la vivienda.
En principio habla de los enseres, y de cómo estos nos dan información de estilos
de vida, formas de circular y relaciones de las personas, dando testimonio de
generaciones. Invitando a pensar en el significado que tienen, hasta el punto de
que si una casa desocupada pierde la condición de casa. Desde pequeños, a
cierta edad buscamos hacer ingenuas representaciones del espacio domestico
simulando las relaciones de los distintos ámbitos intentando comprender el
espacio de la casa.
Por otra parte, el uso que le adjudicamos a los objetos y espacios de la vivienda
muchas veces nos es el correcto, haciendo otras actividades, por ejemplo,
preparar alimentos en un corredor o jugar en el mesón de la cocina. Los niños son
maestros en usar mal las cosas, pero viéndolo desde otra perspectiva crean una
incitación a darle un uso distinto de los espacios y nos pueden servir para
cuestionar seriamente la especialización de las partes de esta.
La reunión de estos factores aparentemente extraños a la arquitectura no tiene por
qué ser ajena a la vivienda. Es evidente que no se puede separar la función de
una mayor y más efectiva flexibilidad.
Los autores pretenden educar más allá de los que diseñan; a las personas que
habitan la vivienda. Me parece muy positivo el mensaje que imparten, ya que
contribuye a formar en los usuarios una cultura crítica y reflexiva sobre la casa.

Guillermo Orozco Ocampo – Teoría IV

También podría gustarte