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TEORÍA POLÍTICA II (2020)

Mgter. Prof. Enrique Rojas

PROPUESTA TEMÁTICA:

“DEMOCRACIA SOCIAL VS. DEMOCRACIA LIBERAL”

“La creencia en la libertad de la voluntad de repente se vuelve peligrosa. Si


los gobiernos y las empresas logran hackear al animal humano, la gente más
fácil para manipular será aquella que crea en una voluntad libre…” Yuval
Noah Harari

La interconexión digital no siempre facilita el encuentro con otros. Más bien sirve para
encontrar personas que piensen igual que nosotros, de modo que nuestro horizonte de
experiencias se haga cada vez más estrecho, tendiendo a levantar una separación entre
ellos –los que opinan distinto- y nosotros –los que opinamos de otra forma. Sin embargo,
la experiencia se hace en función de lo que Byung-Chul- Han llama la negatividad de lo
distinto: “La proliferación de los iguales es lo que constituye las alteraciones patológicas
de las que esta aquejado el cuerpo social.” (Han, La expulsión de lo distinto)

Esto se traduce también en la experiencia de la esfera de lo público, más específicamente


en lo político. Teniendo en cuenta que “lo político “ no es sinónimo de “la política”, y que
el diálogo –sin necesidad de llegar a un consenso- es condición de posibilidad para
cualquier ejercicio de la ciudadanía - el “me gusta” tampoco facilita una posición
argumentativa frente al disenso. Y de hecho, lo que hay es disenso, lo cual es sano para
un estilo de vida democrático. Sin embargo, la proliferación de lo igual, no permite una
democracia agonística1, ya que nuestro hábito a darle el click al “me gusta”, no solo nos
pone fuera de entrenamiento argumentativo frente al disenso y antagonismo, sino que
también nos dificulta comprender y aceptar lo que cae por fuera de lo igual; lo
absolutamente Otro. Lo Otro lo desechamos si no es fácilmente subsumible al mercado
del consumo. Si lo es, el anómalo queda cosificado como un producto más del mercado:
un usario de smartphone, un votante, un empleado medido en horas-hombre=eficiencia

1Agonística (adj) Proviene de agon: palabra de origen griego: contienda, desafío, disputa. Término que utliza
Chantal Mouffe para dar cuenta de que en la arena política de las democracias contemporáneas lo que hay es
principalmente antagonismos. Cft. En torno a lo político, Buenos Aires, FCE, 2011.
de una multinacional, un “cliente de”. Pero si no lo es, molesta. ¿Qué hacen las
democracias contemporáneas con el “outlander”, el anómalo, el que no tiene capacidad
de consumo o su capacidad de consumo no satisface las estadísticas de “profit and loss”
de los empresarios?

Es dudoso que alguna vez la democracia haya sido verdaderamente inclusiva, y menos
fraterna (Baggio). Quizás la trilogía de la Revolución Francesa –libertad, igualdad,
fraternidad- solo haya sido un proyecto utópico2 de la Modernidad y lo que se nos
presenta hoy como resultado de ese proyecto resulte en su opuesto: una distopia
(Ierardo). Sin embargo, hay un punto importante a destacar y que agradecer a la
Revolución Francesa: la aparición de una noción de fraternidad en la escena política a
partir de 1789 es una novedad radical en el sentido que reintroduce en la dimensión
pública – social lo que el pensamiento estoico y cristiano había dejado en la esfera de lo
privado.

El problema ya estaba incipiente en la Antigüedad, en esa categoría de ciudadano que


Aristóteles define en su Politeia, y cómo entendía la demos-krátos o democraica.
Después de todo, democracia alude al gobierno del pueblo (demos-pueblo y kratos-
gobierno). Pero para Aristóteles la democracia era una forma desviada de la república,
esto es, era una forma impura de gobierno, liderada por un demagogo. Igualdad y
libertad eran dos prerrogativas para el ciudadano de la polis pero solo válida entre
iguales. Y ya sabemos que la antigua sociedad griega era “por naturaleza” desigual; libres
solamente eran algunos.

Hubo que esperar a que comenzara la disolución de ese mundo liderado geográficamente
desde Atenas para que irrumpieran en escena los estoicos, cuya visión del mundo
excedia la polis. Ellos se pensaban como ciudadanos de una cosmopolis; propusieron la
fraternidad o philadelphía (o fraternidad estoica) como un valor tan importante como la
libertad. Pero esta fraternidad no estaba vinculada con la virtud sino que estaba basada
en la natural sociabilidad del hombre (oikeíosis). En esta natural sociabilidad basaba la
Stoa su esperanza de aproximar a los hombres en la cosmópolis.

El cristianismo recupera la philadelphía estoica como ágape. El amor agápico es el


núcleo de la fraternidad cristiana.

2 Utopia: Thomas Moro, canciller del Rey Enrique VIII, escribió y publicó en 1516, Inglaterra, una novela
que llevaba por nombre una isla imaginaria en la que los hombres vivian sin dinero y regidos por una
República: Utopia . Esta palabra provine de la voz griega antigua y significa literalmente “el no-
lugar” (u-topos).
Pero ¿qué tanto se sostuvo esta pretensión de fraternidad de los estoicos? El éxito de la
revoución industrial en el siglo XVIII y las miserias que siguieron a la explotación en las
industrias, de la mano de la expansión del capitalismo llevó al filósofo Karl Marx en el
siglo XIX a la elaboración de su concepto de alienación y la explicación de este fenómeno
social por la categoria “luchas de clases”, luchas sociales que anclan sus motivos en que
cada clase tiene un interés que le es propio, por lo que no hay un interés común porque
la sociedad se caracteriza por su desigualdad radical. Menos hay lugar para la
fraternidad.

¿Cómo pensar un sistema de vida democrático sin libertad? ¿Cómo entender libertad?
¿Como ausencia de coacción (liberal o libertad negativa), como capacidad de
autodeterminarse (positiva), libertad práctica en sentido kantiano, libertad para
participar en la polis, aquella que nació en la Antigua Grecia pero asequible solo para
algunos?

Libertad, concepto que carga la historia sobre sus espaldas, o quizás solo debamos
comprender la historia como una lucha por la libertad (Hegel).¿Libertad de elección de
un sujeto? No, Hegel pensaba que esta libertad estaba cristalizada en el ámbito de lo
público, en el Estado. Esto es, en el individuo en su rol de ciudadano.

Respecto del tercer ideal de la Revolución Francesa, la igualdad, en la


Contemporaneidad el filósofo John Rawls la trató de reinstalar en la arena del debate
como fraternidad y formuló su teoria de la democracia para los estados contemporaneos
de masas bajo la ficción del velo de la ignoriancia, qua noción regulativa del par
dicotómico estado de naturaleza – sociedad civil. Rawls se queda con la sociedad civil
pero establece una idea regulativa que tiene por función garantizar equidad social. Sin
embargo, Rawls no llega a garantizar ni equidad ni inclusión y menos fraternidad en un
estilo de vida democrático liberal que no está en discusión, como tampoco su asimilación
al concepto de capitalismo.

Ahora, si en estas democracias liberales, neoliberales o iliberales, pero sin lugar a dudas
invadidas por la esfera del capitalismo, el hombre es un “animal hackeable” (Harari) al
que el marketing publicitario, via distintos dispositivos tecnológicos tales como facebook,
twitter, instagram, la televisión (en suma un conjunto de elementos que hacen a la
penetración de la imagen), le vende un teléfono celular con la misma facilidad que un
candidato político, estamos completamente devaluados como para emprender cualquier
rol en el espacio de lo público, que es aquel en donde habita el sujeto en tanto ciudadano
y “animal”, sí, pero político.
El sujeto contemporáneo de Harari no se da cuenta que sus sentimientos son en
realidad, cálculo (Harari, 21 Lecciones para el siglo 21) y que el libre albedrio no existe. A
no preocuparse, porque en el futuro inmediato los algoritmos informáticos nos dirán qué
hacer y qué elegir.

El sujeto contemporáneo de Yuval Noah Harari ya ni siquiera es depresivo (Han),


simplemente no es. En el futuro distópico3 de Harari –que seguriá siendo capitalista y
liberal o neoliberal o iliberal, compartiremos un debate con un androide, el que estará
mejor preparado que nosotros para responder a las exigencias de una sociedad esclava
del miedo –ya no libre, sino segura-, inmersa en las redes sociales con un otro virtual –ya
no fraterna, sino conectada en red- y sumergidos en lo similar –ya no igual-.

En esta propuesta de asignatura Teoría política II, proponemos retomar el concepto de


libertad -a pesar de Yuval Noah Harari- no ya como un elemento distópico y ficcional de
un sujeto que no desea, ni elige, atrapado en las redes sociales y cosificado como
producto del mercado, sino desde la noción de reconocimiento que planteó Hegel a
principios del siglo XIX y que retoma el filósofo contemporáneo Axel Honneth.

Proponemos repensar el concepto de democracia desapegado de los dos otros dos


nociones de la que suele venir acompañada, a saber liberal –o neoliberal o iliberal-
(Marina Garcés) y capitalista, como si esta fuera un apéndice de ella. A tal efecto,
hacemos nuestra la noción de fraternidad del filósofo italiano Antonio María Baggio para
ver si partiendo desde este concepto y una recuperación de la noción husserliana de
Lebenswelt (mundo de la vida) (Husserl) resignificada por el filófoso Axel Honneth hay
lugar en estas sociedades democráticas contemporáneas para la igualdad, la pluralidad,
y la inclusión, ya que para Baggio la noción de fraternidad tiene que ver más con la
aceptación de lo diferente que con la asimilación de lo igual.

Con un pie en Latinoamérica veremos cómo el tratamiento de la noción de fraternidad


en su marco teórico ha sido relegado, aunque aparece una y otra vez en los discursos
latinomericanos como “una idea regulativa, una orientación, un mandato para la libertad
e independencia de los americanos” (Ighina). Por su parte, el filósofo argentino Enrique
Dussel reformula el principio democrático de igualdad cuestionando las cosificados
marcos teóricos instalados en las sociedades liberales, poniendo en duda la propuesta de
J. Rawls.

3Distopía: en este contexto hacemos nuestro el uso del término que plantea el filósofo argentino
Esteban Ierardo en su libro Sociedad pantalla, Black Mirror y la tecnodependencia, Ediciones
Continente, Buenos Aires, 2018.
Finalmente sostendremos que solo un sujeto fraterno, libre y digno es la condición de
posibilidad para una democracia pluralista, agonista, capaz de lidiar con las inevitables
desigualdades sociales de nuestro mundo contemporáno, un sujeto que se presente
como condición de posibilidad para aceptar lo distinto y no que expulse lo distinto (Han)
porque la Alteridad se construye, no está dada de antemano.

Si esto parece una prolongación del proyecto utopista de la Modernidad, vale la pena
intentarlo ante un futuro que se presenta distancio y cada vez más lábil en la generación
de vínculos significativos, necesarios para construir un proyecto común a pesar de ó
quizás gracias a la desigualdad y el disenso.

A. ANTIGÜEDAD: CIUDADANO EN LA POLIS VS. CIUDADANO DE LA COSMÓPOLIS

Preguntas para pensar los textos:


✓ ¿Era la democracia el mejor sistema de gobierno para Aristóteles? ¿Por qué?
✓ ¿Cuáles eran los valores que sostenía Aristóteles para que una polis sea bien
gobernada?
✓ ¿Cómo es posible la fraternidad en una comunidad por naturaleza desigual?
✓ ¿Cuáles eran los requisitos para ser ciudadano?
✓ ¿Cuál es la diferencia entre ser ciudadano en la polis de Aristóteles y ciudadano del
mundo en la propuesta estoica?
✓ ¿Planteaba Aristóteles un sistema democrático inclusivo o excluyente? ¿Por qué?

Textos:
1) Aristóteles, Política. Libro III – Caps. 1 a 4. Págs. 116 a 125 y Libro VI – Caps. I a
IV págs. 244 a 253

2) Marco Aurelio, Meditaciones – selección.

B. MODERNIDAD: LIBRES EN EL ESTADO VS. ATRAPADOS EN LA ALIENACIÓN

Preguntas para pensar los textos:


✓ ¿Cómo piensa Hegel la libertad?
✓ ¿Cuál es en Hegel la relación individuo-pueblo-libertad?
✓ ¿Cómo y dónde se plasma esa libertad según Hegel?
✓ ¿Cuál es el rasgo característico del sujeto que lo diferencia de ser meramente
naturaleza, según Hegel? 
✓ ¿Cómo lee Marx esa libertad que plantea Hegel?
✓ ¿En qué se diferencia el sujeto hegeliano del marxiano?
✓ ¿Cómo se insertaría la fraternidad en la propuesta social marxiana?
✓ ¿Cómo plantea Marx la cuestión del sujeto libre?
✓ ¿En qué consiste la alienación?
✓ ¿Cómo se pasa de la tensión libertad / alienación a la propuesta de Harari?
✓ ¿Cuál es la relación sujeto / trabajo en Marx y en Harari?
✓ ¿En qué consistiría la libertad del sujeto para Harari?

1) Hegel, “El contenido de la historia universal” en Lecciones sobre filosofía de la


historia universal págs. 67-72

2) Hegel, “El Estado” en Fundamentos de la filosofía del derecho. §257 a 259. Págs.
225-230

3) Marx, K y Engels, F.: La ideología alemana, Ed. Grijalbo, Barcelona, 1974. “Historia”
Págs. 28-38

4) Harari, Yuval Noah: “Trabajo”.” en 21 Lecciones para el siglo XXI. “Cuando te hagas
mayor, puede que no tengas un empleo” y “¿Nuevos empleos?”. Págs. 37-39 y
49-56

C. CONTEMPORÁNEA: LA DEMOCRACIA BAJO ACECHO VS. OTRA DEMOCRACIA


ES POSIBLE

Preguntas para pensar los textos:


✓ ¿En qué consiste el principio de igualdad o fraternidad de Rawls?
✓ ¿Cuáles son los supuestos que maneja Rawls para hacer operable ese principio de
igualdad?
✓ ¿Cuáles son los límites de la propuesta de Rawls?
✓ ¿ Es pensable la fraternidad como concepto político?
✓ ¿Es posible una democracia fraterna?
✓ ¿Cuál es el supuesto antropológico de Harari?
✓ ¿Qué tipo de ciudadano queremos? El de Harari, el de Hegel, el de Marx, el de
Rawls Cuál? Y por qué?
✓ ¿Qué nos cabe esperar de un sujeto que no desea, no es libre pero vota, le decimos
“ciudadano”?
✓ ¿Por qué la uniformidad del “me gusta” se presenta como un peligro según Han?
✓ ¿En qué medida Han se contrapone a Harari si ambos refieren a los síntomas del
mundo contemporáneo?
✓ ¿Cuál es el proyecto de persona que surge de las propuestas de Harari, Han,
Honneth?
✓ ¿Mundo de los big data o universo simbólico? ¿Qué tipo de humanidad queremos
ser?
✓ ¿Cuál es la consecuencia de la colonización del mundo de la vida (Lebenswelt)?
✓ ¿El Otro es a priori mi enemigo o mi amigo (frater)? Qué se desprende de la decisión
de una u otra actitud.

Textos:
1) Rawls, J.: Teoria de la justicia, FCE, México, 1997. “II. Los principios de la justicia
§ 13 y § 17. Págs. 80 a 85 y 103 a 110.

2) Baggio, A.: “Introducción y reflexión politológica contemporánea” en La fraternidad


en perspectiva política, comp. Antonio M. Baggio, Buenos Aires, 2009 . Págs. 5-19

3) Harari, Yuval Noah: “Libertad. Los macrodatos están observándote”, en 21


Lecciones para el siglo XXI. 68-75 y 90-98

4) Han, Byung-Chul, “El terror a lo igual” en La expulsión de lo distinto., Herder,


2017. Págs. 9-21

5) Han, Byung-Chul, “La crisis de la liberad” en Psicopolítica., Herder, 2014. págs..


7-15

6) Honneth, Axel: “2. Una patología social de la razón” en Patologias de la razón, Katz
Ediciiones, Buenos Aires, 209. Págs. 42-51

7) Husserl, Edmund: Crisis de las ciencias europeas y fenomenología trascendental,


Prometeo, Buenos Aires, 2008. §33 y §34. Pags. 163-165 y 169-177

8) Garcés, Marina: “Nosotros” en Las personas del verbo (filosófico), Herder, Barcelona,
2012.Págs. 76-91

D. LATINOAMÉRICA: FRATERNOS Y LIBRES VS. DOMINADOS

✓ Preguntas para pensar los textos:


✓ ¿Cómo se aplica la discusión sobre una democracia fraterna en Latinoamérica?
✓ ¿En qué sentido la fraternidad funcionó en Latinoamérica como una idea regulativa
de emancipación?
✓ ¿En qué consiste la intersubjetividad política a la que refiere Dussel?
✓ ¿Cómo se relaciona con el mundo de la vida, ese plano pre-reflexivo del que habla
Husserl?
✓ ¿Cómo es posible el reconocimiento?
✓ ¿Cómo debilita Dussel el principio de igualdad / fraternidad de Rawls?

Textos:
1) Ighina, Domingo: “Apuntes para una investigación sobre el concepto de fraternidad
en el pensamiento latinoamericano” en La fraternidad en perspectiva política, Baggio
(comp) Págs. 22-32

2) Dussel, E. (2015) El principio democrático igualdad. Págs. 4-11

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