Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
PROPUESTA TEMÁTICA:
La interconexión digital no siempre facilita el encuentro con otros. Más bien sirve para
encontrar personas que piensen igual que nosotros, de modo que nuestro horizonte de
experiencias se haga cada vez más estrecho, tendiendo a levantar una separación entre
ellos –los que opinan distinto- y nosotros –los que opinamos de otra forma. Sin embargo,
la experiencia se hace en función de lo que Byung-Chul- Han llama la negatividad de lo
distinto: “La proliferación de los iguales es lo que constituye las alteraciones patológicas
de las que esta aquejado el cuerpo social.” (Han, La expulsión de lo distinto)
1Agonística (adj) Proviene de agon: palabra de origen griego: contienda, desafío, disputa. Término que utliza
Chantal Mouffe para dar cuenta de que en la arena política de las democracias contemporáneas lo que hay es
principalmente antagonismos. Cft. En torno a lo político, Buenos Aires, FCE, 2011.
de una multinacional, un “cliente de”. Pero si no lo es, molesta. ¿Qué hacen las
democracias contemporáneas con el “outlander”, el anómalo, el que no tiene capacidad
de consumo o su capacidad de consumo no satisface las estadísticas de “profit and loss”
de los empresarios?
Es dudoso que alguna vez la democracia haya sido verdaderamente inclusiva, y menos
fraterna (Baggio). Quizás la trilogía de la Revolución Francesa –libertad, igualdad,
fraternidad- solo haya sido un proyecto utópico2 de la Modernidad y lo que se nos
presenta hoy como resultado de ese proyecto resulte en su opuesto: una distopia
(Ierardo). Sin embargo, hay un punto importante a destacar y que agradecer a la
Revolución Francesa: la aparición de una noción de fraternidad en la escena política a
partir de 1789 es una novedad radical en el sentido que reintroduce en la dimensión
pública – social lo que el pensamiento estoico y cristiano había dejado en la esfera de lo
privado.
Hubo que esperar a que comenzara la disolución de ese mundo liderado geográficamente
desde Atenas para que irrumpieran en escena los estoicos, cuya visión del mundo
excedia la polis. Ellos se pensaban como ciudadanos de una cosmopolis; propusieron la
fraternidad o philadelphía (o fraternidad estoica) como un valor tan importante como la
libertad. Pero esta fraternidad no estaba vinculada con la virtud sino que estaba basada
en la natural sociabilidad del hombre (oikeíosis). En esta natural sociabilidad basaba la
Stoa su esperanza de aproximar a los hombres en la cosmópolis.
2 Utopia: Thomas Moro, canciller del Rey Enrique VIII, escribió y publicó en 1516, Inglaterra, una novela
que llevaba por nombre una isla imaginaria en la que los hombres vivian sin dinero y regidos por una
República: Utopia . Esta palabra provine de la voz griega antigua y significa literalmente “el no-
lugar” (u-topos).
Pero ¿qué tanto se sostuvo esta pretensión de fraternidad de los estoicos? El éxito de la
revoución industrial en el siglo XVIII y las miserias que siguieron a la explotación en las
industrias, de la mano de la expansión del capitalismo llevó al filósofo Karl Marx en el
siglo XIX a la elaboración de su concepto de alienación y la explicación de este fenómeno
social por la categoria “luchas de clases”, luchas sociales que anclan sus motivos en que
cada clase tiene un interés que le es propio, por lo que no hay un interés común porque
la sociedad se caracteriza por su desigualdad radical. Menos hay lugar para la
fraternidad.
¿Cómo pensar un sistema de vida democrático sin libertad? ¿Cómo entender libertad?
¿Como ausencia de coacción (liberal o libertad negativa), como capacidad de
autodeterminarse (positiva), libertad práctica en sentido kantiano, libertad para
participar en la polis, aquella que nació en la Antigua Grecia pero asequible solo para
algunos?
Libertad, concepto que carga la historia sobre sus espaldas, o quizás solo debamos
comprender la historia como una lucha por la libertad (Hegel).¿Libertad de elección de
un sujeto? No, Hegel pensaba que esta libertad estaba cristalizada en el ámbito de lo
público, en el Estado. Esto es, en el individuo en su rol de ciudadano.
Ahora, si en estas democracias liberales, neoliberales o iliberales, pero sin lugar a dudas
invadidas por la esfera del capitalismo, el hombre es un “animal hackeable” (Harari) al
que el marketing publicitario, via distintos dispositivos tecnológicos tales como facebook,
twitter, instagram, la televisión (en suma un conjunto de elementos que hacen a la
penetración de la imagen), le vende un teléfono celular con la misma facilidad que un
candidato político, estamos completamente devaluados como para emprender cualquier
rol en el espacio de lo público, que es aquel en donde habita el sujeto en tanto ciudadano
y “animal”, sí, pero político.
El sujeto contemporáneo de Harari no se da cuenta que sus sentimientos son en
realidad, cálculo (Harari, 21 Lecciones para el siglo 21) y que el libre albedrio no existe. A
no preocuparse, porque en el futuro inmediato los algoritmos informáticos nos dirán qué
hacer y qué elegir.
3Distopía: en este contexto hacemos nuestro el uso del término que plantea el filósofo argentino
Esteban Ierardo en su libro Sociedad pantalla, Black Mirror y la tecnodependencia, Ediciones
Continente, Buenos Aires, 2018.
Finalmente sostendremos que solo un sujeto fraterno, libre y digno es la condición de
posibilidad para una democracia pluralista, agonista, capaz de lidiar con las inevitables
desigualdades sociales de nuestro mundo contemporáno, un sujeto que se presente
como condición de posibilidad para aceptar lo distinto y no que expulse lo distinto (Han)
porque la Alteridad se construye, no está dada de antemano.
Si esto parece una prolongación del proyecto utopista de la Modernidad, vale la pena
intentarlo ante un futuro que se presenta distancio y cada vez más lábil en la generación
de vínculos significativos, necesarios para construir un proyecto común a pesar de ó
quizás gracias a la desigualdad y el disenso.
Textos:
1) Aristóteles, Política. Libro III – Caps. 1 a 4. Págs. 116 a 125 y Libro VI – Caps. I a
IV págs. 244 a 253
2) Hegel, “El Estado” en Fundamentos de la filosofía del derecho. §257 a 259. Págs.
225-230
3) Marx, K y Engels, F.: La ideología alemana, Ed. Grijalbo, Barcelona, 1974. “Historia”
Págs. 28-38
4) Harari, Yuval Noah: “Trabajo”.” en 21 Lecciones para el siglo XXI. “Cuando te hagas
mayor, puede que no tengas un empleo” y “¿Nuevos empleos?”. Págs. 37-39 y
49-56
Textos:
1) Rawls, J.: Teoria de la justicia, FCE, México, 1997. “II. Los principios de la justicia
§ 13 y § 17. Págs. 80 a 85 y 103 a 110.
6) Honneth, Axel: “2. Una patología social de la razón” en Patologias de la razón, Katz
Ediciiones, Buenos Aires, 209. Págs. 42-51
8) Garcés, Marina: “Nosotros” en Las personas del verbo (filosófico), Herder, Barcelona,
2012.Págs. 76-91
Textos:
1) Ighina, Domingo: “Apuntes para una investigación sobre el concepto de fraternidad
en el pensamiento latinoamericano” en La fraternidad en perspectiva política, Baggio
(comp) Págs. 22-32