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Uso de la halterofilia

en los deportes.
Una explicación fisiológica de su
aplicación

Resumen
La Halterofilia es un deporte de fuerza explosiva, mediante su dosificación en los programas de
fuerza para los practicantes de la mayoría de disciplinas se logra un elevado resultado en la velocidad
de ejecución de los gestos deportivos específicos de cada deporte, su incidencia se halla
primordialmente a nivel neurológico logrando un reclutamiento mayor de fibras musculares, esto es
relevante si las características de ejecución de los gestos deportivos deben ser de gran velocidad y eso
se produce en la gran mayoría de deportes.
La fuente energética de las fibras musculares activadas durante los gestos deportivos de las
disciplinas que requieren gran velocidad depende del sistema de ATP-PC y es el mismo sistema que se
emplea para generar potencia durante los levantamientos olímpicos, es por eso que se hace tan
recomendable este tipo de entrenamientos, pero debe tenerse especial cuidado en quien es el que
dosifica tales programas ya que se necesita de gran experiencia para aplicarlo a otros deportes.
Palabras clave: Halterofilia. Deportes. Fisiología aplicada.

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 8 - N° 48 - Mayo de 2002

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1. Introducción
Para comprender los beneficios que la Halterofilia produce en los deportistas, debemos revisar nuestros conocimientos
de la función Neurológica y Bioquímica del sistema muscular e integrarlos a nuestra metodología de entrenamiento.
Los músculos dependiendo del tipo y la función pueden ser estriados (ej: músculos esqueléticos y el músculo
cardiaco) y lisos (ej: musculatura de los vasos sanguíneos).

Como nos centraremos en el músculo estriado voluntario, dejaremos a los otros y su interacción con la Halterofilia
para otra ocasión.

Un músculo estriado está formado por un grupo de fibras musculares enervadas por una neurona, llamada neurona
motora. Cada neurona motora tiene acción excitadora solamente sobre un tipo de fibra. Estas fibras se diferencian
por su rapidez de reacción, por la facilidad de agotamiento, y la ruta metabólica que toman.

Los ejercicios de resistencia incrementan la circulación de la sangre y favorecen el desarrollo de las fibras no
fatigables que utilizan oxígeno. Los ejercicios de Halterofilia favorecen el desarrollo de las fibras de contracción
explosiva y son ellos quienes determinan la velocidad de ejecución de los gestos en los deportes, que actualmente
son cada vez más competitivos lo cual hace más recomendable a la Halterofilia como medio fundamental para el
desarrollo de la fuerza y potencia en la mayoría de disciplinas deportivas.

Los movimientos de la halterofilia


Actualmente los movimientos de la Halterofilia competitiva son dos (arranque y envión)

La técnica del ARRANQUE se realiza en un solo movimiento.

Este movimiento está dividido en cuatro fases:

1. Primera fase. El Halterófilo se ubica por atrás de la barra. Los pies deben colocarse paralelos y
ligeramente hacia afuera, la separación de los pies debe ser similar al ancho de la cadera. Las piernas
se sitúan entre los brazos, inclinadas hacia delante, tocando ligeramente la barra. La espalda recta o
ligeramente hiperextendida.
La cabeza continúa la línea de la espalda, con la mirada al frente. Los brazos están completamente
extendidos.

Una vez adoptada esta posición inicial comienza la salida, en la cual las rodillas se extienden hasta
quedar las tibias perpendiculares al piso, los hombros situados lo mas adelante posible, la cabeza
algo levantada, los brazos extendidos y la cadera elevada con respecto a la posición inicial.

2. Segunda fase. Una vez que la barra pasa la altura de las rodillas, éstas vuelven a flexionarse,
adelantándose y colocándose debajo de la barra, esto para lograr una ventaja biomecánica. La barra
se ve bruscamente integrada al centro de gravedad. Se produce una potente extensión conjunta de
rodillas, caderas y tobillos, los hombros se elevan y los brazos se flexionan con los codos apuntando
hacia arriba y las muñecas flexionadas ligeramente hacia adentro, la barra bruscamente acelerada
asciende lo más cercano al cuerpo del Halterófilo.

3. Entrada. Mientras que la inercia de la fase anterior hace alcanzar a la barra su altura máxima, el
atleta debe descender rápidamente debajo de esta produciéndose así la inversión del movimiento.
Sus pies se separan simétricamente hasta aproximadamente la altura de los hombros, la cadera
desciende y se adelanta hasta sentarse casi sobre los talones, la espalda fuertemente contraída e
hiperextendida, la barra queda sobre y ligeramente detrás de la cabeza, y los brazos firmemente
extendidos sobre la cabeza.

4. Recuperación. Esta fase comprende la extensión de las rodillas y la cadera. Al terminar la acción el
individuo queda de pie con la barra firmemente colocada sobre la cabeza, con los brazos extendidos.

Envión

Este ejercicio se compone de dos partes diferenciadas:

Primera parte
El Clean: Comprende las cuatro fases

1. Primera fase. La separación entre las manos es menor. La posición es similar a la del arranque, sin
embargo la cadera queda algo mas alta, debido a que el ángulo en las rodillas y tobillos es mayor.

Luego para el despegue se realizan las mismas indicaciones apuntadas en el arranque.

2. Segunda fase. Aquí se da el tirón, el cual se realiza de la misma forma que en el arranque.

3. Entrada. Una vez terminado el tirón, y siguiendo los mismos principios que en el arranque, el atleta
desplaza lateralmente los pies y flexiona las piernas hasta que se coloca debajo de la barra y ésta
queda apoyada sobre los hombros, la clavícula y las manos.

4. Recuperación. Consiste en hacer la extensión total de las piernas hasta llegar a la posición
adecuada para realizar el Jerk.

Segunda parte

Comprende las cuatro fases

1. Primera fase. Los pies se colocan a la anchura de las caderas o algo más cerrados. El tronco está
vertical con el pecho elevado. La barra se apoya sobre los hombros y las clavículas, las manos solo
sostienen la barra. Los codos hacia adelante, con la altura suficiente que permita sostener
cómodamente la barra.
2. Segunda fase. Se realiza una flexión-frenado-extensión de las piernas. La flexión de las piernas se
realiza manteniendo el tronco vertical. El peso de la barra deben soportarlo el tronco y las piernas, no
las manos. El peso recae sobre las plantas de los pies. El descenso se hace progresivamente más
rápido, pero sin brusquedad en su iniciación. No debe ser demasiado profundo, porque se perdería
fuerza para el empuje.

El frenado ha de ser una interrupción brusca de la flexión de las piernas. El final de esta fase se lleva
a cabo elevándose sobre las puntas de los pies.

Las tres fases: flexión, frenado y extensión, tienen lugar en menos de un segundo.

3. Entrada. Aquí se comenzaría con el split. Consiste en colocarse debajo de la barra (en general
separando los pies en forma de tijera). Este movimiento debe hacerse lo más rápido posible, antes de
que la barra pierda demasiada velocidad
o La vertical de la barra debe pasar por la parte posterior de la cabeza, que debe quedar con la
mirada al frente.

4. Recuperación. Por ultimo vendrá la recuperación del split que sería la última fase del dos tiempos y
es colocar nuevamente los pies paralelos a la línea, manteniendo a la barra con los brazos
completamente extendidos.

Estructura cinemática de la halterofilia


Para analizar los beneficios del uso de la Halterofilia, debemos analizar la estructura cinemática de los levantamientos
olímpicos. Primero que nada se sabe que el arranque y el clean se realizan en un solo tiempo, pero se pueden
diferenciar claramente a cuatro faces donde en ellas se generan dos tracciones por el atleta (ver Gráfico 1), las cuales
tienen velocidades y aceleraciones distintas.

Al existir aceleraciones distintas, en la primera y en la segunda fase, el atleta aprovecha mejor sus posibilidades de
fuerza. Entre estas dos aceleraciones existe un descenso de la velocidad de la barra, inevitable pero necesaria para
que el atleta adopte una posición adecuada, entendiéndose con esto que el atleta buscará que las articulaciones
involucradas estén en un ángulo óptimo para poder realizar la segunda fase, ya sea de la arrancada o el clean.
Gráfico 1
Diagrama de las fases del arranque

En las dos primeras fases del movimiento de arranque se da una tracción sobre la barra, esta oscila entre 140-160 %
del peso de la barra en la primera fase y 150-180 % en la segunda fase (González 1991).

Las velocidades de la barra siempre deberán ser máximas en las dos fases, estas pueden alcanzar velocidades de 1-
1.6 m/seg. en la primera fase y 1.6-2.5 m/seg. en la segunda fase. Estas velocidades son importantes ya que
dependiendo de las velocidades alcanzadas al final de cada fase mejorará la altura de la barra según la siguiente
formula:

h = altura de la barra
V2o = Velocidad Inicial al cuadrado
g = gravedad

Para poder tener una idea mas clara de la potencia que se ejerce durante un arranque, analizaremos una
investigación relacionada sobre la velocidad de la barra, trayectoria de la misma y el tiempo de ejecución.

En 1978 González Badillo realizó un análisis fotográfico en el cual determino el tiempo, la velocidad y la altura de la
barra alcanzada durante un arranque con 95 Kg que representaba el 90% del máximo peso realizado por un atleta
(ver tabla 1).

TABLA 1. Tiempo, Velocidad y altura de la barra durante la ejecución de un arranque con el 90% de intensidad.

Si analizamos estos datos vemos que el atleta incrementa su velocidad hasta alcanzar el máximo punto de esta en la
segunda fase, llegando acelerar la barra a 3.6 m/seg.2 en la primera fase y a 7.3 m/seg.2 en la segunda fase.
Conociendo esto se puede encontrar la tracción ejercida sobre la barra en cada fase:
Donde: FT = Fuerza de tracción FT1 = Fuerza de tracción de la primera fase
Kp = Kilogramos Fuerza FT2 = Fuerza de tracción de la segunda fase

Gráfico 2

En el Gráfico 2 podemos apreciar como se incrementa la velocidad en los primeros instantes, luego disminuye ya que
el atleta se "acomoda" para ejecutar la segunda fase, y luego se incrementa al máximo a los 0,63 segundos de
iniciarse el levantamiento y luego vuelve a caer la velocidad debido a que el atleta deja de ejercer tracción sobre la
barra y se desliza debajo de ella, la barra debido a la caída libre incrementa su velocidad hasta que el atleta fija al
implemento en la posición mas baja, en cuyo caso el valor de la velocidad es cero debido a esto, y luego sube otra
vez debido a la recuperación.

Gráfico 3

En este Gráfico observamos que la altura de la barra se incrementa siempre hasta llegar a la fase 2 donde alcanza su
máxima altura a los 0,9 seg de iniciado el levantamiento y luego cae hasta alcanzar la altura óptima de fijación del
atleta a los 1,23 segundos.

La fuerza en los deportes


Esta fuerza, sin importar el deporte, será útil si podemos aplicarla a la misma velocidad de los gestos que el deporte
elegido requiera. Si el deportista tiene una gran producción de fuerza en un tiempo superior a la ejecución del gesto
deportivo, este último no será beneficiado con el aumento de fuerza esperado, por citar un ejemplo: si un deportista
de combate destina un gran volumen de su preparación a ejercicios cuya velocidad de ejecución es lenta como el
press de banca, la sentadilla, el peso muerto o la mayoría de ejercicios del físico culturismo que se adapten a la ley de
Hill a la hora del combate no podrá mostrar rapidez ni contundencia en sus golpes o ataques.
Dadas las necesidades de aplicación de la fuerza en los deportes no sólo interesa la velocidad de ejecución del
movimiento sino lo más importante que es la cantidad de fuerza que se puede emplear en ese gesto.

En las artes marciales la velocidad a la que se realiza una patada puede llegar a 0,5 seg. y producir un fuerte impacto
en el contrincante. Pero ahora imaginen que a ese mismo tiempo la magnitud de la fuerza ejercida sea mayor, el
resultado sería totalmente contundente. ¿Será esto posible? En respuesta a esto si el deporte elegido le permite al
deportista sólo disponer de 200 a 300 ms, para expresar su fuerza la Halterofilia es el método más idóneo para
desarrollarla, ya que produce adaptaciones especificas en el organismo de aquellos que la practican.

El sistema nervioso y la halterofilia


Todos los deportistas manifiestan adaptaciones en respuesta al entrenamiento. Pero cuando estos entrenamientos
contienen programas de Halterofilia la respuesta es más rápida, coordinada y de mayor complejidad que al utilizar
otros entrenamientos de fuerza.

Los estímulos de un entrenamiento de Halterofilia son captados inmediatamente por los receptores, los cuales
envían la información a través de las vías de conducción (nervios) hacia los centros nerviosos (medula, cerebro) en
donde se elabora una respuesta a estos potentes estímulos.

El sistema nervioso y la contracción muscular

El Sistema nervioso controla todas nuestras actividades, conscientes o no, esto lo logra mediante:

Contracción de los músculos esqueléticos de todo el cuerpo.


Contracción de la musculatura lisa.
Secreción de glándulas endocrinas y exocrinas.

Desde el punto de vista anatómico se distinguen dos partes fundamentales del sistema nervioso:

A) EL Sistema Nervioso Central (SNC), también denominado sistema nervioso de la vida de relación o sistema
nervioso cerebro - espinal. Está constituido por los siguientes órganos:

La médula espinal, que está alojada en el conducto raquídeo.


El encéfalo, que se encuentra alojado en la cavidad craneana y está constituido por el bulbo raquídeo
o médula oblonga, el istmo del encéfalo (formado por la protuberancia anular, los pedúnculos
cerebrales, los pedúnculos cerebelosos, los tubérculos cuadrigéminos).
El cerebelo.
El cerebro.

B) EL Sistema Nervioso Periférico (SNP ), que comprende:

El sistema nervioso periférico (SNP) de la vida de relación, constituido por los nervios craneanos y los
nervios raquídeos.
El sistema nervioso periférico de la vida vegetativa o autónomo (SNA), constituido por el sistema
nervioso simpático y el sistema nervioso parasimpático.
Los órganos sensoriales, que son los receptores sensitivos o exteroceptivos (la vista, el tacto, el oído,
el gusto y el olfato) y los receptores interoceptivos, que están situados en los órganos que inerva el
SNA y en los músculos, articulaciones.

La médula espinal

La médula espinal es un cordón nervioso, blanco y cilíndrico encerrada dentro de la columna vertebral. Su función
más importante es conducir, mediante los nervios que la conforman, la corriente nerviosa que conduce las
sensaciones hasta el cerebro y los impulsos nerviosos que lleva las respuestas del cerebro a los músculos. Pero la
medula espinal no sólo es un conducto de la información sensorial hasta el cerebro ni de señales motoras procedentes
del cerebro hacia la periferia.
En la médula espinal se encuentran circuitos neuronales especiales, sin estos, ni siquiera los sistemas de control
más fundamentales podrían llevar a cabo movimiento intencionado alguno. El cerebro solo envía señales de mando
para actividades motrices, señales que son instrucciones escalonadas para realizar adecuadamente las actividades
motrices.

Las fibras musculares y la fuerza


El músculo esta compuesto por fibras musculares o miocitos, estos se agrupan en facias y se insertan en los
huesos, para poder ser activados estos se encuentran enervados con una neurona motora, a todo esto se le
denomina unidad motora, Cada unidad motora tendrá características definidas por el tipo de fibras por las cuales esta
compuesto el músculo. Las fibras están divididas en sarcomeras compuestas por los miofilamentos de actina, miosina,
tropononina y tropomiosina. Habitualmente se entiende como fuerza la capacidad de un músculo para contraerse
según la cantidad de puentes cruzados de miosina que pueden interactuar con los filamentos de actina (Goldspink,
1992 citado por Badillo y Gorostiaga 1995, 1997) . Estas fibras pueden ser de mas de tres tipos según diversos
autores, pero la clasificación más usada es:

Fibras Tipo I. de contracción lenta y resistentes a la fatiga. Son ricas en enzimas oxidativas, pobres en glucógeno y
en actividad de fosforilasa. Se denominan también fibras de contracción lenta, de metabolismo oxidativo, o fibras FS
(Fiber Slow).

Fibras Tipo IIA. de características intermedias entre las fibras tipo I y las tipo IIB, las fibras IIA son de contracción
relativamente rápida y resistentes a la fatiga.Tienen alta actividad oxidativa y glucolítica y alta actividad ATPasa.
También se denominan fibras de contracción rápida, de metabolismo oxidativo-glucolítico, o fibras FR (Fiber Rapid)

Fibras Tipo IIB. de contracción rápida y fácil fatiga. Tienen alta actividad de fosforilasa, pobres en actividad
oxidativa y con fuerte actividad ATPasa. También se denominan fibras de contracción rápida, o fibras FF (Fast Fiber)

Las fibras de tipo I y IIA son llamadas rojas, mientras que las tipo IIB son llamadas blancas. Ultraestructuralmente,
las fibras musculares tienen características particulares: las fibras de tipo I tiene abundantes mitocondrias y las de
tipo IIA menos abundantes mitocondrias y una banda Z (componente estructural de la sarcómera que es la unidad
contráctil del músculo) gruesa, mientras que las de tipo IIb tienen un número aun mucho menor de mitocondrias y
una banda Z más delgada. Pero recientemente se sabe que las motoneuronas son las que determinan las propiedades
del músculo, y es por eso que es de especial interés saber como se excitan estas según el tipo de entrenamiento.
Estas motoneuronas se clasifican en tres tipos:

MOTONEURONAS FF (Inervan fibras IIB)


MOTONEURONAS FR (Inervan fibras IIA)
MOTONEURONAS S (Inervan fibras I )

La producción de fuerza depende de cuáles y cuántas unidades motoras sean activadas al momento del esfuerzo
del deportista.

Las motoneuronas generan en el músculo una fuerza de contracción según sea la frecuencia de su estímulo.

Cuando el sistema nervioso central (SNC) activa una UM puede enviar diferentes frecuencias (número de impulsos
nerviosos exitatorios por segundo a cada UM) (Sale, 1992 citado por Gonzales y Gorostiaga 1997). El aumento de la
frecuencia de impulsos nerviosos se acompaña de un aumento de la fuerza producida por la contracción de las fibras
inervadas por la UM, esto tiene un límite ya que en un punto máximo no se genera más fuerza a pesar de seguir
incrementándose la frecuencia de estímulo.

Pero, aunque se alcance la máxima producción de fuerza máxima con frecuencias cercanas a 50 Hz reviste de gran
importancia utilizar frecuencias de impulso muy elevadas (100 120 Hz ) ya que una gran producción de fuerza se
alcanza en menor tiempo, y esto es lo que importa en todos los deportes y estas frecuencias de impulso son las que
se generan al realizar los ejercicios de Halterofilia.

Orden de reclutamiento
La mayoría de los investigadores están de acuerdo que el reclutamiento o estimulación de un UM obedece al
principio del tamaño (Burke, 1981 citado por Badillo y Gorostiaga)

Durante una producción de fuerza submáxima de baja intensidad se reclutan las UM de tipo S, luego al
incrementarse la fuerza se activan las UM tipo FR y por último las FF.

Las UM tipo S se activan con frecuencias de 10Hz cuando se emplean cargas de hasta 15% de la fuerza isométrica
máxima (FIM), pero al aumentar la fuerza a 30% de FIM las UM siguen actuando pero con frecuencias de 10 a 15 Hz.

Cuando la carga es de 50% - 60% de la FIM, se activan las UM a frecuencias de 15 Hz y a medida que se aumente
la carga la frecuencia de estos será incrementada.

Cuando se llegan a intensidades de 70% a 90% de la FIM las UM tipo FR se estimulan de 20 a 50 Hz y al llegar al
100% de la FIM todas las UM están activadas a frecuencias de impulsos elevados, 25 Hz para UM que inervan fibras
tipo I, 30 Hz para UM al inervar fibras tipo IIA y 40 - 60 Hz para inervar las fibras tipo IIB.

Con estas frecuencias de activación se puede generar la fuerza isométrica máxima pero esto no es igual ante un
movimiento explosivo como el que se da en la mayoría de los deportes.

Gráfico 4

Orden de reclutamiento en la halterofilia

Como hemos visto, los mecanismos de reclutamiento de las UM siguen el principio del tamaño cuando se realizan
contracciones submáximas en forma progresiva, pero esto no se cumple en los movimientos explosivos (Sale,1992
citado por González y Gorostiaga 1997)

Las unidades motoras activadas serian solo las del tipo IIB sin necesidad de activar primero a las mas lentas, esto
se comprueba mediante una electromiografía a los grupos musculares implicados donde se observa una mayor
actividad eléctrica debido al número de UM activadas y la mayor frecuencia de estímulo.

La velocidad de ejecución de la fuerza


Al momento de diseñar un programa de entrenamiento es vital ser específico respecto a la velocidad de ejecución
de los ejercicios elegidos ya que de esto dependerá el resultado en las competencias. Es muy importante que el
entrenador se asegure que la velocidad de ejecución de los ejercicios sea igual al de los gestos en la competencia, ya
que entre más se acerque a la velocidad máxima de ejecución mayor es la intensidad y el efecto neuromuscular del
entrenamiento.

En la Halterofilia lo importante es producir la mayor fuerza en el menor tiempo posible, aunque esta fuerza es
menor a la FIM.
Las fibras IIB son directamente reclutadas ya que los impulsos nerviosos de las UM que las inervan son de más de
100 Hz.

Una gran velocidad como la de arranque 2m/seg. unida a una considerable carga producirá mejoras en la actividad
Neurológica como:

Frecuencia de estímulo
Cambios en el modelo de reclutamiento (principalmente fibras IIB)

Hacer cargas óptimas a una velocidad más lenta de lo máximo posible sólo tiene incidencia en las fibras tipo I lo
que dará una disminución de la velocidad de contracción rápida del músculo.

Se sabe, según el principio de especialidad que la fuerza lograda de una forma determinada (con ejercicios que se
adaptan a la ley de Hill) no puede transferirse a otras formas de manifestación de la fuerza que son rápidas y
explosivas como la mayoría de los deportes. (De la Torre1999).

Como ejemplo de la utilización de la Halterofilia en otros deportes podemos mencionar los siguientes
casos:

Steve Bedrosian, jugador profesional de béisbol, se retiró a los 39 años, él sufrió un serio revés 5 años antes
cuando perdió la sensibilidad de 2 dedos de su mano de lanzamiento, esto afecto su rendimiento y eficacia, los que
cayeron estrepitosamente.

El director Atlético de White Oak Athletic Center puso a Bedrosian bajo un programa de Halterofilia por un año, al
término del cual Bedrosian volvió triunfante y aumentó 8 millas por hora a su velocidad de lanzamiento.

Cindy Schreyer, jugadora profesional de golf, fue puesta bajo programa de Halterofilia por 8 meses con los que ella
aumentó su impulsión en 40 yardas, ella ganó sus primeros torneos de PGA gracias a esto.

Cuando un deportista desarrolla con éxito un nivel alto de fuerza explosiva, se puede atribuir a los medios
empleados en su entrenamiento (Siff. Verhoshansky, 2000 )

Especificidad energética

Los cambios y adaptaciones bioquímicas del músculo están bajo la influencia de los medios y los sistemas de
entrenamiento elegidos, si analizamos el carácter energético de los deportes veremos que la mayoría depende del
sistema ATP_PC en mayor grado excepto los deportes de resistencia y los puestos dentro de algunos deportes
colectivos que demandan más energía proveniente de los procesos aeróbicos. Una razón más para elegir a la
Halterofilia como base principal del entrenamiento de fuerza para los deportes.

Tabla 2
Recomendaciones
Antes de aplicar este tipo de programas de entrenamiento a los deportistas deberemos respetar los siguientes
parametros:

Edad de Deportista: Obviamente que esta contraindicado usar altos grados de intensidad en edades tempranas.

Tiempo de entrenamiento: Un atleta de mas experiencia se adaptara mejor a las cargas que uno sin mucha
experiencia.

Nivel deportivo: Si tenemos atletas noveles será primordial consolidar primero la técnica para no perjudicarla.

Etapa de entrenamiento: No se deberán programar grandes porcentajes de volumen en los entrenamientos


próximos a las competencias fundamentales.

Pero sin duda lo mas importante es el dejar la planificación de este programa a un entrenador de Halterofilia con
mucha y sólida experiencia ya que el entusiasmo desmedido por parte de entrenadores de fuerza inexpertos que no
tiene una adecuada metodología puede llevarnos al fracaso deportivo si no existe una adecuada planificación de cada
uno de los medios utilizados así como sus variantes tanto para el arranque como el envión.
Todos las formas de entrenamiento para desarrollar la fuerza son diferentes, no es tan sencillo como escoger unos
ejercicios de los fisicoculturistas o pensar que programando algunos ejercicios de Levantamiento de Potencia o
Halterofilia nos llevara a crear unos atletas mas fuertes en los diversos deportes.

Si el objetivo es que el atleta de competencia tenga una mayor fuerza especifica en su deporte debe atenderse con
especial cuidado no solo al tipo de ejercicio que realiza, también debe verse como lo realiza ya que estos dos factores
producen alteraciones a nivel neuromuscular.

Existen dos corrientes a raíz de la necesidad de incrementar la fuerza en los deportes:

Musculación Clásica.Esta corriente nos propone que es suficiente entrenar los músculos implicados en la ejecución
de los movimientos del deporte elegido y luego hacer la llamada “ transferencia” al plano deportivo, si bien el
incremento del segmento muscular puede aumentar la fuerza, gran parte de esta fuerza jamas será utilizada
efectivamente.

Preparacion especifica de la fuerza. Esta corriente nos propone que los medios elegidos deben reproducir:

El tipo de contracción muscular


La velocidad de movimiento
Sistema de reclutamiento
Metabolismo

Esta ultima corriente, la que nosotros proponemos, a demostrado su superioridad científica basada en los
resultados deportivos en todo el mundo.

Algo que como entrenadores debemos recordar y jamas olvidar son los factores de producción de la fuerza en los
deportes.

a. Numero de fibras musculares reclutadas.


b. Velocidad de conducción de la información nerviosa
c. Eficacia de la sincronización de los impulsos de las fibras musculares.
d. Umbral de exitación de las fibras nerviosas que abastecen a los músculos
e. Dimensiones del corte transversal del músculo
f. Densidad de las fibras musculares por unidad de corte transversal.

Conclusiones
1. Los programas de fuerza basados en la Halterofilia son superiores en cuanto al incremento de la
velocidad y por eso son los más idóneos para el entrenamiento de la fuerza en los deportes.
2. La práctica en la Halterofilia enseña a un atleta a activar un número máximo de unidades motoras.
3. La práctica de la Halterofilia enseña al atleta a utilizar sincronizadamente los principales grupos
musculares implicados en el deporte.
4. El sistema energético desarrollado en la Halterofilia es especifico para la gran mayoría de deportes.
5. Se precisa de un alto grado de conocimiento en base a la Halterofilia y sus medios para poder
utilizarla con efectividad

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