Está en la página 1de 168
fee Pauy Raymond Boudon av La desigualdad de oportunidades La movilidad social en las sociedades industriales ‘Traduccién de Miriam Aparicio de Santander 2 Fauve? editorial laia/barcelona 24 201.44/07568 Laedicin origi en 0B y reed Boudo: “£2 des ignata, 2.38963 801.44/8756d . Boudon, la desigualdad de sem Libr “Tesdu isetio realiracn de a cubierta: Hane Same men eins see BS de eta tn (eco amas ltd I Bebe einen Laas SA, Coos, 1800, Bares 16 Deptt legit Be32.76E~ 1983 (ISBN: ATER MES | : Inne en Roman/Vals, Verdaguer, 1, Caplias (Breton) Prtedin Span Prélogo a la segunda edicién La reedicion de este libro me permite precisar las inten- ciones y evacar brevemente los debates a los cuales ha dado ugar, ‘Ta acumulacién, desde hace dos decenios, de investiga- ciones sobre la desigualdad de oportunidades escolares y sociales ha acrecentado notablemente nuestros conocimientos | | en estos dominios. Pero todas estas investigaciones han pro- ducido igualmente cierto numero de resultados dificiimente | explicables en ef marco de las tearias disponibles, Asi, se observa que, on la mayor parte de las sociedades industriales, 1a desigualdad de oportunidades ante la ense- | fanza ha decrecido de manera lenta y regular en el de los ttimos decenios, En otros términos, ld probabilidad para un adolescente surgido de las clases inferiores de alean. zar por ejemplo el nivel universitario, ha aumentado en el tiempo més rapido que la misma probabilidad para un ado: lescente surgido de las clases superiores. Los érdenes de mag. nitud son todavia muy diferentes pero, la tendencia a la ate nuacién de las disparidades no es despreciable y, a la ver es © universal en el conjunto de las sociedades industriales occiden- tales, Este hecho no es en si mismo sorprendente. Se debe te ner en cuenta el aumento del nivel de vida que reduce la parte relativa a Ios gastos escolares en el presupuesto fanniliar. Se debe considerar igualmente un «efecto plafonds; * cuando una clase social envia el 10 9% de sus efectivos escolarizables a la universidad en cierto periodo, este porcentaje puede duplicar- | se en el perfodo siguiente; esto es aritméticamente imposible cuando el porcentaje inicial es del 80 8 1% det Ts Bfeeto tech, ae 6 Ravwoxp Bouvon La paradoja no estd, pues, situada a este nivel, sino més bien en el hecho de que fa igualdad progresiva de oport dades ante la enseianea no ha entrafiado las consecuencias aque tanto el sentido comin como las teorfas corrientemente desarvolladas esperaban observar. Asi, se admite generalmen- te que las sociedades industriales son meritocriticas, es dec aprecian las capacidades poco frecuentes y tienen conflanza fn el sistema escolar para determinar estas capacidades. Esta proposicion es una de las constantes de la sociologia de Ia educacién. Desde 1927, Sorokin afirmaba con una perfecta nitidez que Ia institucion escolar tenia por primera funcién li de seleccionar los individuos de manera que asegurase una correspondencia lo mas estrecha posible entre sus capacida- des y tas capacidades exigidas por los diferentes empleos y Posieiones que caracterizan la estructura socio-profesional Si se admite este modo de ver, se deduce inmediatamente que la desigualdad de oportunidades ante la ensefianza es fen gran parte [a responsable de la intensidad de la herencia Social que se observa en las sociedades industriales, En otros términos, esta forma de desigualdad seria un factor primor dial de 1a inmovilidad social y profesional de una generacion a la siguiente. Por tanto, una reduccién de la desigualdad de oportunidades escolares deberia acompaiiarse de una reduc én de la herencia sovial, 0 si se prefiere, de la inmovilidad social entre gencraciones Sin embargo se llega a que esta conclusion, que resulta de una serie de proposiciones aparentemente evidentes, e5 empiricamente falsa. Como fhe dicho, todas las sociedades industrales se carnctorizan desde have varios decenios por tuna disminucién ciertamente lenta, pero no despreciable. y regular de la desigualdad de oportunidades ante la. ense- fianza. No obstante, esta disminucién no ha tenido més que elecios modestos sobre el nivel de herencia social: todos los estudios de movilidad social, ya sean de origen sueco, inglés, © americano, muestran por el contrario que las probabilide ides de ascenso, descenso 0 estabilidad social de una genera Gidn a otra no eambian sino débilmente en el tempo. Tin un zegistro paralelo, se ha observado igualmente que Ja movilidad social pareefa det mismo nivel en paises cara terizados por grados muy variables de desigualdad de opor tunidades ante la ensefianza, Las estadisticas muestran que Jos Estados Unidos, Suecia, Norucga o Inglaterra se carac- terizan por una desigualdad de oportunidades escolares sen siblemente més débil (me refiero agut a Jos datos relativos al decenio 1960-1970) que Alemania, Francia o Suiza. Sin em LA DESIGUALDAD DE OPORTUNIDADES a “hargo, no se observa que la herencia social sea mas débil en jos primeros paises, Alli también se trata de un hecho a la vez “jnaegable y dificilmente explicable a la luz de Ins teorias sponibles, ~Consideremos ahora las desigualdades de ingreso, Los eco- snomistas do In educacién, los teéricos del capital humano én particular, han mosirado que la educacién podia ser asi | jnilada a una inversién, cuya remuneracion es directamente | proporcional a la cantidad que se invierte. En términos mis | prosaicos, el ingreso normalmente depende del nivel escolar. | Pe donde se concluye, aparentemente con todo derecho, que ‘quando los individuos son menos desiguales entre si desde el, “punto de vista del nivel de instruccion, las desigualdades de ea deben atenuarse, En otros términos, una reduecion “de las desigualdades escolores deberia tener un efecto de feuccion sobre las desigualdades de ingreso. Pero aun asf $m evidentes aparece como mal confirmada "por los hechos. Esta serie de paradojas puede ser completada por otras | gue varios estudios han puesto en evidencia en distintos con: “fextos nacionales: Blau y Duncan than mostrado que, en 5 Unidos, la relacién estadistica entre nivel de’ ins | truccion y status social es moderada: la primera variable ex pplica alrededor del 30% dv In variamza de la segunda. Ast, | [as oportunidades escolares son fuertemente variables segtin “Ws clases sociales, pero el nivel de instruccién no esta sino | Goinpaie con ls vison soyin a coal la osiguatandce ce ‘eplares serian Ia determinante principal y casi exclusiva de otras formas de desigualdad. Otro hecho mas desconcer- tante todavia: cuando se ha aplicado a datos enropeos, suizos “g alemanes particularmente, métodos de anilisis ansiogos a | Tos que Blau y Duncan hablan empleado a propésito de Fstadlos Unidos, se observaton resultados siniares, Wma dim dominion de lo glen de la even alo. tenga necesariamente efectos reactors Sabie la T . siliaida de los ingress? Asiismo, es dudoso que las des iider cscolares sean él facior determinate de las otras Ofinas “de"deSigualdad social: los ciudadanos de toda. socie- Fie industrial son desiguales enive sf desde cl puvio de a Ravacoxo Bovoon vista del status social y del ingreso, pero estas desigualda- des no estén sino débilmente determinadas por las desigual dades escolaresPor paradojicos que estos resultados puedan parecer, éstos son comnprobados on todas las sociedades in- dustriales, << gCémo explicarlos? Segiin una teoria simple, el capital ctitural transmitido al hijo por su familia predetermina en gran medida cl capital escolar, es decir el nivel de instruc: Sidn que sera capar de adquivi, el cual predetermina a su vez el status socioprofesional. Esta teoria explica ciertos, hrechos de observacién: por’ejemplo que los alumnos surg dios de prestigiosos establecimientos de ensefanza superior provienen, en general, de farnilias acomodadas y «triunlans rails en la vida que el término medio de sus compaticros. Pero esta teoria resulla ineficaz para rendir cuentas de las pparadojas que acaban de ser mencionadas. En Estados. Uni dios, el espiritu dominante, desde 1a publicacién de los trat bajos de Jencks,.es de escepticismo: puesto que el nivel de instruecion aparece como debilmente ligado al status social, al ingreso, @ la movilidad, no sera porque el status social depende de un gran ntmero de variables de las cuales slo algunas son consideradas en las encuestas? Bowles sugeria que se demostrarian mejor —estadisticamente— las” posicio res alcanzadas por los individuos en Ia sociedad si se fuese apaz de medir su conformismo en relacion a Tas normas Soviales. Naturalmente tales variables son mucho més diff cies de observar que el nivel de instruccién o el status social del padre. “ del sistema socioecondmico sea marcada en Y. Esta diferencia puede en efecto generar ha movilidad compensada y mas alld los efectos de herencia b etyendrados por un mas alto grado de desigualdad escolar:> | Ticluso suponiendo que la desigualdad de oportunidades es E golares sea la inica variable capaz de lnfluir sobre el grado Berecia sci, no, se puede concur que a herencia al deba ser necesariamente mayor o mds pegueia segin [ae [as desigualdades excolares sean mis o nienos intenens foro Ia relacidn entre desigualdades escolares y herencia Les todavia complicada por el hecho de que Ia ultima Fisble estd afectada por otros factores,>Asf, imaginemos = la tasa media de fecundidad de la Gase superior sea 8 mas débil que Ia de la clase inferior en la sociedad X fe estas tasas scan iguales en la sociedad Y. Esta circuns- fancla entrafiaré que, aun si las desigualdades escolares son pinparables en las dos sociedades, los estudiantes de ori \ social bajo serdn més numerosos en proporcién en la Siedad X. Por otra parte aun en lat mismss circanstancis, Ha Rerencia social serd pues menos pronunciada en X si la siialdad de oportunidades ante Ia enschanza es similar 10 La DEsicUALAD De OPORTUNIDADES n en tas dos sociedadtes. Si se introduce ademés a hipdtesis dle que la diferencia entre la distribucién de Tas capacidades ts dstinta en las dos sociedades, el anlisis se complica més. 0 bien, consideremos dos sociedades X e Y similares en todos tos aspeotos (igual nivel de desigualdad escolar, igual | distribueion de capacidades producidas por el sistema de | ensenanza, igual distribucién de empleos y posiciones socia- fos, igual tasa de fectndidad de las clases, ete), pero diferen tes por el hecho de que X ha recurrido en gran medida tina politica de inmigracién para cubrir clertas categor de empleos, Esta circunstancia basta para cambiar Ia es: tructura de la herencia social de-una sociedad a otra. Estos pocos ejemplos son suficientes para hacer surgir§ os puntos importantes, EL primero, de naturalera metod Toga, es gue el nivel de-herencia social que-se-observa cn | tuna séciedud es una conseeuencia.compleja de, un conjunto, de Variables. que se-integran enun.sistema. Supongamoy, {Gue, por una politica efiesz, un gobiemo lega a atenuar en fran parte In desigualdad de oportunidades escolares; si se {rata de una sociedad liberal, esl atenuacién no podré ser ob | tenida mis que elevando cl nivel escolar medio de las clases inferiores en rwlacion al de las clases superiores. Es ef ttecto Inconcebible que Ia equiparacién se haga por abajo in consecuencia, ya que, dada la forma piramidal de Ia et [> {ructura social, lat clases inferiores son mds numerosas 41 Jas clases superiores, la disminucién de las desigualdades e&) colares entre las clases se acompafiara necesariamente de un) Sumento de los electives que alcanzardin los niveles escolt res elevados (para fijar las ideas, el nivel universitario). posible que tal aumento disminuya la sdifereacian entre la Uistribucion de las capacidades y la distribucton de tas posi tiones sociales, Supongamos por ejemplo que en el period precedente el ndmero de estudiantes haya sido muy inferit \2i de las posiciones vacantes en el nivel de la elase superior y Que la reduccién de la desigualdad de oportunidades 323 Scompafiada de un aumento del nimero de estudiantes st ficlente para que éste sea igual a las vacantes que se dail periddicamente en la clase superior. Tn este caso, la dist ucidn de la desigualdad de oportunidades escolares ends Ha hacer disminuir la herencia social (porque una propor ‘ion relativamente mayor de los adolescentes de origen soci inferior legata a la universidad). Pero, por otro lado, el hed de que el ntimero de estudiantes-sea'en To sucesivo igual al devas vacantes enla clase superior (endra un efecto invers fiientras el primer ndmero era inferior al segundo, [poser de. sdolescentes que no bation sleanzado el nivel Ft Gcstario, posta sin energy “toda iar imuficscis oe Ghudianter tectvoe preter ocupae ompless, sue con igen im status soll Soperior. Despuas de he tekttna be _fiendo sumentado hipotcamence a mamoro-de etedlantes, Ende tell_ue aqellon que no how alesse el vel G itinatis S05 son nunetsees sient lop eles oe Heise inferons (a pear dln eduoatnde eteeinaded Sportunkiades) pretendan ut caploy deaeel eee fy eforma entlaarh dos ‘farina sighos conterion de estos efectos tiende a reducir Ja “herencia social, el Be suoentars Us caida cy eed ae nee oat Lesion exe sss promunciado™ gine casos rete ‘gion de las desigualdades escolares podes pues acompafarse, || ssponen todos os otros factres constantoe de | Sr ge eee : Sade oe cope ee ‘fadas y Ia estructura de empleas. disponibles vaya atenudn- «| eo el tiempo. Introduciendo la hipétesis inversa de una cn crecente, se leg Igualimene a la conclusion de Da reauccion las desigeadadeseseoleecs ne pica | Giviovente usa diominuetn dela hone coca " s-plantea naturalmenie un problema pnsiderable. La opinion publica admite en general que una duccion de la desigualdad de oportunidades ante 1a ense- nia debe entrafar un debilitamiento de la herencia social precamentc, cierto socdlogos han defenido tn en de importancia y cl estancamiento del nivel de herencia Geelal dependin esencialmente dela persistenela de la des: aldad de oportunidades escolares. Ahora bien, como se ta de ver Ins dos proposiciones son erfdneas. La Segunda es etoria con el hecho Indisutibte de que la desigua- oportunidades eseolares sc ha reducido considerable Gh fot las socedadesUndstriates en el curso de ios decenios. La primera es errénea, puesto. que el fll de moveas-sanples masta su ui stentacion is desigualdades escolares no entrafa. necesarlamente Migminucion de ta hereacia social. La mejor prueba de a Hgwwon no ex neceuaia gno reside en el hecho de o se In observa, precisamente, cuando s¢ analiza Ia evo Fees de as baciedades Hindustan? - modelos simples. expican también que_ pass. muy les unos de otros. desde el punto. de-ssta de a, de de opertunidades ante a enseancay no. aparesean 2 RayMonp Bouvon La DesiuaLpan DE OPORTUNIDADES B ferentes desde el punto de vista del nivel de la herencia alt Suecia, Nonaega, Estados. Unidos, Gran Bretafia apa- Feeen, como hemos. dicho, mucho mis igualitarios desde el _pumio_de.sista-escolar,-que-Francia, Suiza o Alemania. Sin Embargo, la inmovilidad social aparece de la misma magnitud Gh todos estos. paises, Hsia constatacidn, que escandaliz6 ‘Cuando la expusieron por primera vez Bendix y Lipset, pero que todas las investigaciones ulteriores han confirmado, es fleilnente explicable a partir de los modelos que hemos esbo- zado mas arriba, Sobre el problema de las desigualdades de sreso, el «sentido comin» nos dice que el nivel-de instruc cién mide una inversion que deberia ser normalmente pagada fn su valor, cuanto més largos han sido los estudios, el ingreso obtenido de esta inversién deberia ser mis elevado, de donde se coneluye que una atenuacién de la desigualdad | de distribucidn del capital escolar debe Ilevar, por otra parte, bajo las mismas cireunstancias, a una disminuciOn de la \ desigualdad de distribucién de ingresos. Tal es la tesis de | Jos tedricos del capital humano, asi como también la de nth merosos.socidlogoss(Coméeit'el caso precedente, Ja propo- Sieion que concluye en el necesario paralelismo entre Ta des- jgualdad de las oportunidades escolares y la distribucion de los ingresos, a pesar de su cardcier «evidentes, reposa sin ‘embargo sobre un analisis insuficiente. Tmaginemos por ejert plo un sistema de ensefianza que comporte dos niveles esco- fares principales, un nivel elevado y un nivel bajo. Supor- gamos ahora que en un momento determinado Ia produccién de diplomas de nivel clevado sea insuficiente en relacién a las wnecesidadess de Ia estructura socio-profesional y que, ea el periodo siguiente, esta insuficiencia aparczca como ampliamente cubierta, Supongamos por otra parte que, en el mismo tiempo, la desigualdad de oportunidades escotares haya decrecido de manera sensible, Qué resultaré de esta evolucién desde el punto de vista de Tas desigualdades. de wereso? Lin el primer perfodo, dado que los diplomas de fiivel elevado son insuficientes en ndmero, algunas de tas: posiciones sociales de nivel elevado son necesariamente oc padas. por personas de nivel escolar «bajo». En el perfodo Siguiente, no ocurre lo mismo: los diplomas de nivel esco- lar elevado son suficientemente numerosos, de forma que las vacantes en el nivel socio-profesional superior son ocupadas, més a mentido por personas que poscen un nivel escolar ele: yado. En total, de un periodo al otro, el nivel me traccidn de las personas que ocupan posiciones «superiores» fen la sociedad crece pues mucho mas rapido que el de las pn an es ie: pone in “Los modelos-que son utilizados permite! asi dar cuenta le de erent ee ered ‘mania, Estados Unidos y otros lugares son siempre. mo- ; derados, _ a . <¢ su aparicidn en francés en 1973 y en inglés en 1974 : ‘nite comprobar cierto numero de datos. Debe, ciertamente, a 4 RavMonp BOUDON LA DESIGUALDAD DE oPoRTUNIDADES 15 nar uma Sev fume ga emi se nan Gece dee pe Son de dehy cla ura ont) puns mena Se nein Este arcu a an Grate jemple de ex orn (oR, Baum, tepid Sotlogan VI ney en wn lenguale més fuerte pert depurar conser inca ds ohare gent eostar gue oe dell exe amenas ot onan Ua rund pate et modelo es desgra- 1A) 195, 95.10), He ey ae clarion dion as descldaba |] adomente més dificil de, retraducir en raxén de a forma gir quent J aes jn cntoneotaas cn cl.anair Gs al proesto de fae de sapere que simula cl paso del sa dimension de 1 erlenaciOn escolar. Se ha objetado que |jsvel ecoar al status socinprofesiona ss de os prendre era He oueniado =f eran geal ds ans consid en inte nmin i mare de rst encla de fs unos, por pear tos datos obsrvador a ne exis (aacroset mostrar gus l iso grlerae oleae sidepenconte pc) parr de un modelo duc describe a ie decom [encanto maser refed in praia in paride portamlulo de les agency clementales sundos ch uh com ' 3 | Ta. scion soit 8 LES ition dene sh.poote ig Aen instiuclone] y social dado (nest acrooipico). Bata ' {strategia es inhabliual en sociologia de la educacténSiguien- fe vista del nivel escola ae han tomado ¥ doa Brau y DUNCAN (The American Occupational Siructure), ‘muchos investigadores en América y en otras partes prefic: ren quedarse en el nivel agregado y someter los datos de que disponen a anilisis estadisticos clésicos (andlisis de regre ‘Giras autores, por el contrario, i tos aspectos decisivos del analisis, proponiendo depuration : 10s eerie (ef Jon EvsteR, Bouton on Education and se Serie (ney Social Science information, 15 (4/5). Styne Thea oe, pets and Sirretes fo Research | in) aga Inter de ex radii, igo pesuadido Fe a cil Science Information. qUD <3 siempre mis fecundo intent sobrepasr este 28 {11 7131). La competencia por los diplomas, para =| {el descriptive y procurar interpretar (aunque sea de mancra 13 U0, T9D a areteefpeI etactra del dcr ge-|_ pcr) ls dfos macroseépen apart de hpoteis micros neralizado del risioncra, EO cio mda clevado en trminos fends sacle sin esforarke por, comprender el comport je inversion escola to de los agentes sin los cuales estos sistemas no exis a ion esco UNE Robert M. Hai, Review Fey On Bouon’s Mo. fico o no desde el punto de vis il of Social Mobility, «The’ American Journal of Sociology», tment aly, lrtos Peston ae composon cagearadoe) Hauser’ Revlew of Eduction, Oprortuty ond Socal Ine eo eo Ta tsis de 1a) quality, «The American Journal of Sociology, vol. 81, n° i mec kre THT Rae Rea uur On Edun Oo desiguatad de opornidee perepresemaria on cet, ly and Socal Inequaiy, «Socal Science Informations Ge a iy ge microdecisiones (tomadas de un marco social [6], 107-113), Las estrategias de andlisis utilizadas en La no, aero de iret an pjeto de cmon Gs Hay deialdad de oporumiades we ditnguen iqalente de € intone mal Theses abou he Repé | aiclive de Petre Dordeu y JeanClaue Patron (cf Ph Nard AA enon ieee Sence Tnformation) Hs Beso, acu: sr ta gos ds Inglis da es cation of, So ces oecdertales contemporaines, «Revue. francaise de 1, 346 cad en esto libro es aalzado por xin Seneepoigucy, vol XXV, nim. febrero 181, 106122 J Bleed on ry en Rast A Maes Oe contributes, es eines xt alae lan nriietin, Thomas FAM Yodel wSosal Scie Tp cntradas sore el problema de [a apcatn de a etm matic Anatts of Budo pcan un aan ing SE de andi y de Is rnltndos de Ea desta de formation, 15 (25) 431475 Es node (aqua que taal gPernidaes 9 soiodadee particulars ef, Mica a, tematico de Ja Pe gener saaes a vel eco ML MUne, Priege and, Domination: te, Roe of the on Nada garantiza que este precio 10 Sea i determinar si el juego es be ta colectivo, Lo es probable- demasiado clevado. ¥ es dif del process de, pao de o> Srsiguar ol grado de goncralidad PP Class in American Higher Education, Social Science

También podría gustarte