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UTESA
Escuela de Graduados
UNIDAD VI:
HISTORIA DE LA PROPIEDAD INMOBILIARIA DOMINICANA
CONTEMPORÁNEA
PRESENTADA POR:
Yunior Andrés Castillo Silverio 1-19-9269
FACILITADOR:
Licdo. Arístides Salcé, MDI
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HISTORIA DE LA PROPIEDAD INMOBILIARIA DOMINICANA
CONTEMPORÁNEA
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ÍNDICE:
Introducción……………………………...……………...………….......................4
Propósitos de la investigación…………..…………………................................5
Objetivo general………………………….…………...
………..............................5
Objetivos específicos……………………………….
……....................................5
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6.10.-ley 108-05, de fecha 23 de marzo del 2005 y sus reglamentos…….
…..19
Conclusión…………………………………………………………….……….…..21
Bibliografías………….…………………………………………………………....22
Introducción.
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Propósitos de la Investigación:
Cada uno de nosotros requiere para desenvolvernos en nuestra profesión,
adquirir conocimientos, los cuales nos ofrecen herramientas para realizar
determinada labor. Es, por tanto, que esta investigación sobre la historia de
la propiedad inmobiliaria dominicana contemporánea. Esta es de carácter
documental, por lo cual utilizamos varios libros citados en la bibliografía.
Objetivo General:
Conocer sobre la importancia sobre la historia de la propiedad inmobiliaria
dominicana contemporánea.
Objetivos Específicos:
Definir el Concepto de historia de la propiedad inmobiliaria dominicana
contemporánea,
Hablar del origen y fin del quinto periodo: 1920-2005,
Describir la Orden Ejecutiva No. 511, del lero. De julio de 1920,
Comparar la historia de las leyes inmobiliarias antiguas y modernas,
describir cada una de las leyes modernas complementarias del sistema
registral inmobiliario dominicano: Ley No.5038, 596, 51-07,13-07,344,18-
88, 2334, 637, 2914.189-01, 1421 524, 2569, 2254, 675, 491, 1024, 339,
317,
Hablar de la Historia de la creación de los Tribunales de Tierras,
Establecer el Primer Certificado de título,
Definir la Historia de la Litis de Derechos Registrados,
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Hablar de la Ley 1542 sobre registro de tierras de fecha 11 de octubre
de 1947,
Describir la ley 108-05, de fecha 23 de marzo del 2005 y sus
reglamentos,
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su Tratado de Derecho Inmobiliario, el concepto más aceptado de inmueble
se puede formular como el bien material no desplazable que está constituido
esencialmente por la tierra y todo lo que se adhiera a ella de manera
permanente, o que se repute como tal, o que recaiga sobre ella y sus
accesorios. En nuestra percepción entendemos que la propiedad inmobiliaria
se trata del derecho que posee el individuo sobre un inmueble determinado,
destinado a la garantizar los derechos de las personas sobre sus bienes
inmueble. Se puede tener propiedad sobre un mueble o un inmueble, en
ocasión a esto es conveniente señalar algunas de las diferencias entre
bienes muebles o bienes inmuebles. De ahí, entendernos que la propiedad
inmobiliaria dominicana contemporánea, se fundamenta en un conjunto de
legislaciones (normas, reglas y leyes que tienen por objeto un bien al que la
legislación civil considera inmueble), las cuales han ido evolucionando a
través del tiempo. se basa a través de normas positivas que rigen el
nacimiento, adquisición, modificación, transmisión y extinción de los
derechos de propiedad dominicana y sus desmembraciones y gravámenes
sobre bienes inmuebles, y en especial, la publicidad necesaria para
completar los negocios jurídicos erga omnes sobre los derechos anteriores.
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rescatar de la impotencia a aquellos ciudadanos que cada día ven
atropellados sus derechos, desprotegidos sus bienes y por vía de
consecuencia sumida en un subdesarrollo, una nación que necesita
urgentemente mecanismos que faciliten la custodia y seguridad del Sistema
Registral Dominicano.
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1822, y luego de la independencia nacional que se esperó hasta 1884 para
la traducción de los códigos napoleónicos. Al respecto, se ha sostenido que
el procedimiento de embargo inmobiliario contenido en el Código de
Procedimiento Civil adoptado en 1884 contenía la modificación francesa de
1841, manteniéndose vigente estas disposiciones hasta 1944, cuando
mediante la Ley No.764 se modifica nuevamente el embargo inmobiliario de
derecho común estableciéndose el procedimiento actualmente vigente.
Comparativo a estas, hay un gran número de leyes como son: 5038, 596,
51-07,13-07, 344,18-88, 2334, 637, 2914, 189-01, 1421 524, 2569, 2254,
675, 491, 1024, 339, 317. Las cuáles, serán tratada y definidas de manera,
completa en la siguiente pregunta.
6.5 Leyes modernas complementarias del sistema registral inmobiliario
dominicano: Ley No.5038, 596, 51-07,13-07, 344,18-88, 2334, 637, 2914,
189-01, 1421 524, 2569, 2254, 675, 491, 1024, 339, 317.
Ley 5038-1958, sobre el Régimen de Condominio, modificada por la Ley
108-05; La Ley 5038 del 29 de noviembre del 1958, conocida como: “La
Ley de Condominio”, que estableció un régimen especial para la
propiedad por apartamentos complementada esta con la Ley 404 del 18
de octubre del 1972 que rigió la construcción de un sólo piso dividido por
paredes o tabiques divisorios.
Ley 596, del 31 de octubre de 1941, que establece un sistema para las
ventas condicionales de inmuebles. G.O. No. 5665 del 8 de noviembre del
1941; Se denomina venta condicional aquella en que se conviene que el
derecho de propiedad no es adquirido por el comprador mientras no se
haya pagado la totalidad o determinada porción del precio,
o cumplido alguna condición señalada en el contrato. Para ser objeto de
venta condicional, los inmuebles deben estar registrados de
conformidad con la Ley de Registro de tierras, y no tener gravámenes
convencionales. todo acto de disposición sobre inmuebles objeto
de venta condicional, ser nulo.
Ley 51-07, En el 2005 fue modificado por la Ley 108-05, que sustituyó la
figura por una comisión inmobiliaria. Sin embargo, esta parte de la ley fue
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derogada y la Ley 51-07 lo restablece. De acuerdo con el artículo 12 de la
Ley 51-07, el Abogado del Estado es el guardián del certificado de título,
es quien otorga la fuerza pública para ejecutar decisiones en los
tribunales de tierra como el desalojo de invasores de tierras, el
cercamiento de terrenos, la paralización de las construcciones, así como
la asignación de protección policial para ejecutar estas medidas.
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miembros de la Cámara de Cuentas, notarios, síndicos y tesorero de
Ayuntamiento. En cada oficina de registro se llevaran tres libros: uno para
el asiento de los actos civiles que comprenden lo que la ley denomina
bajo firma privada, los pasados por ante notarios, venduteros, intérpretes
y demás oficiales públicos sin carácter judicial; otro para asentar los actos
judiciales, ya emanen de los tribunales, jueces, fiscales, alcaldes; ya de
los secretarios de los mismos, ya de los alguaciles; y el tercero, para
asentar los actos a debe, que comprende todos aquellos que en materia
de simple policía, correccional, criminal ó de oficio pronuncien los
tribunales cuando los sentenciados sean insolventes.
Ley 637, que sustituye la Ley No. 314, del 26 de julio de 1940, sobre
transcripción obligatoria de actos entre vivos traslativos de propiedad
inmobiliaria, de 12 de diciembre de 1941. G. O. N°. 5680. Se declara de
utilidad pública la transcripción obligatoria de todos los actos entre vivos
traslativos de propiedad inmobiliaria. La formalidad de la transcripción no
será obligatoria para los siguientes actos: Para los actos registrados o que
sean relativos a terrenos o derechos reales inmobiliarios registrados
conforme a las disposiciones de la Ley de Registro de Tierras; Para los
actos que a la publicación de esta ley se hallen depositados en el Tribunal
de Tierras para fines de saneamiento, de acuerdo con las disposiciones
legales que los eximieron de la formalidad de la transcripción. Mediante
dicha Ley se declaró de utilidad pública la transcripción obligatoria de
todos los actos entre vivos que tenían relación con la propiedad
inmobiliaria (quedaron exceptuados los relativos a terrenos ya registrados
y a los que se encontraban en los archivos del Tribunal de Tierras para
los fines de saneamiento).
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algunas modificaciones. Realmente, entre una y otra ley las diferencias
son mínimas y prácticamente difieren en el valor a percibir por la
transcripción de los actos. Como hemos señalado anteriormente,
dichas leyes calcaron la ley francesa de 1885. Salvo que las mismas
hacían facultativas la transcripción. Se hizo obligatoria la transcripción
mediante la Ley No. 133 votada el 5 de junio de 1931. En cada una de las
ciudades cabeceras de Provincias o Distritos habrá una Oficina de
Hipotecas que estará a cargo del director del Registro Civil, y se
denominará Conservador de Hipotecas.
Ley 189-01, del 29 de marzo del 2001, que modifica el código civil en
relación a los regímenes matrimoniales. Se modifican los artículos 1388,
1409, 1412, 1414, 1416, 1419, 1421, 1422, 1423, 1424, 1449, y 1469 del
capítulo II, título V, del Código Civil de la República Dominicana. modificó
varios artículos del Código Civil Dominicano para, entre otros propósitos,
incluir a la mujer de manera igualitaria en la administración de los bienes
comunes con su cónyuge. Después de la promulgación de la ley 189, lo
legalmente correcto es lo siguiente: “el marido y la mujer son los
administradores de los bienes de la comunidad. Pueden venderlos,
enajenarlos o hipotecarlos con el consentimiento de ambos”. Que los
artículos 1388 y 1421 del Código Civil eliminarían el carácter de común a
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este régimen, convirtiéndose así en la pesadilla de las esposas
engañadas muchas veces, y otras, víctimas del abuso legal a que son
sometidas.
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Ley 2254, del año 1950, sobre impuestos sobre documentos. Cada vez
que el Director de Registro Civil prepara, redacta, legaliza, expide, visa o
registra un documento, debe cancelar impuestos.
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prerrogativas de la presente ley sino después de haber sido autorizados,
conforme al artículo 13 del Código Civil, a establecer su domicilio en
la República Dominicana.
Ley 317, del 14 de junio del 1968, sobre el Catastro Nacional. G.O. No.
9086 del 9 de junio del 1968. EL CONGRESO NACIONAL En Nombre de
la República numero 317, que todo el desarrollo material de un país tiene
por base necesariamente los bienes inmobiliarios, cuyo derecho de
propiedad constituye "el derecho real por excelencia''; que para el
desarrollo y progreso del país, es absolutamente necesario que el estado
cuente con un catastro bien organizado de los bienes inmobiliarios que
permita en forma rápida la obtención de datos económicos, descriptivos y
estadísticos relativos a los mismos; que la ley sobre el catastro nacional,
es un instrumento legal esencialmente de procedimiento y que en tal
virtud regula las funciones de la dirección general del catastro nacional;
considerando: que la vigente ley sobre el catastro nacional marcada con
el núm. 4344, de fecha 3 de diciembre de 1955, resulta anacrónica, y no
permite a la dirección general del catastro nacional actuar con la rapidez
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necesaria, para armonizar sus actividades con el ritmo acelerado de
progreso que el superior gobierno ha imprimido a todas las actividades
socio-económicas propiciatorias al desarrollo nacional; Que la Dirección
General del Catastro Nacional tiene funciones como oficina auxiliar, para
la recaudación en materia impositiva a cargo de otros departamentos
gubernamentales, las cuales se basan en las tasaciones de bienes
inmobiliarios. Ley No. 150-14 sobre el Catastro Nacional. Deroga la Ley
No. 317 del 14 de junio de 1968. G. O. No. 10752 del 11 de abril de 2014.
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derechos sobre el mismo. El certificado de título estará revestido de las
mayores seguridades y garantías legales, hasta el estado se constituye en
garante de este documento, que hará prueba absoluta de su contenido y se
impondrá en todos los Tribunales de la República Dominicana. El certificado
título de la propiedad inmobiliaria es el documente auténtico más importante
que tiene todo nuestro régimen legal de la propiedad inmobiliaria. La
importancia del certificado de título es tan obvia que se interpreta conocida.
Esta es una presunción social que ha calado hasta en los juristas y
doctrinarios especializados en la materia catastral. Para comprender la vital
importancia del certificado de título, basta con saber que la propiedad
inmobiliaria en la República Dominicana, como en cualquier país, constituye
la fuente primera de las riquezas personales y nacionales. Ningún proyecto
económico de envergadura se puede desarrollar si primero no cuentan con
el certificado de títulos. El certificado de título es la transcripción íntegra del
Decreto de Registro en el Libro de la Oficina del Registrador de títulos
correspondiente, y, posteriormente, puede resultar también de las que se
hagan en el Libro de Registro de los documentos, actos sentencias
resoluciones que tengan por finalidad transferir modificar el derecho
registrado. Es conveniente diferenciar lo que es certificado de título original,
el duplicado y constancia propiamente dicha. A todo derecho inmobiliario
registrado conforme a la ley le corresponde un certificado. No hay hipotecas
ni derechos ni intereses ocultos, en el derecho que este complementado en
el certificado de título, se considera inexistente y no oponible a los terceros.
El original es el que está vaciado en el libro registro, que, aunque es público,
todo el que tenga interés puede consultarlo, permanece bajo la custodia del
Registrador de Títulos. La constancia resulta de una anotación en ese
Certificado de título original y su duplicado que se lleva a cabo para
garantizar un derecho, privilegio o interés que afecten o grave el terreno, y
que otra persona, física o moral, distinta al propietario, tiene sobre el
inmueble, así tenemos la constancia del acreedor hipotecario o privilegiado,
o del arrendador o del dueño de la servidumbre o del dueño de la mejora, en
fin, de cualquier otro derecho que sea registrable. Lo que diferencia un
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certificado de título es el sello diagonal que tendrá sobre su texto indicando a
quien corresponde. El legislador ha sido tan celoso en el cuidado de que el
Registrador de Títulos ejecute la transcripción del Decreto de registro que en
las disposiciones del artículo 155 de la ley 15-42 afirma que” el Decreto de
Registro se redactará de una forma tal que sea fácil su transcripción en el
libro de registro de los certificados de títulos”. El legislador otorgó plenas
facultades al Tribunal Superior de Tierras para tomar todas las medias que
fueren de pertinentes para dotar el certificado de título de la forma y
contenido que sean necesarios. Esta disposición está consagrada en el
artículo 19 de la ley de la mataría.
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jurisdicción inmobiliaria. El art. 10 de la Ley de Registro Inmobiliario, así
como también el art. 23 del Reglamento de los Tribunales de Tierras,
establecen la competencia territorial de los tribunales de la jurisdicción
inmobiliaria, tomando como base la ubicación física del o de los inmuebles
en discusión. El artículo 29 de la misma ley, prevé una competencia
exclusiva a los tribunales de jurisdicción original para conocer de las Litis
Sobre Derechos Registrados.
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la cosa) y Erga omnes (para todo el mundo), o sea que tiene un carácter
oponible a terceros, por lo que la sentencia que dicte el Tribunal de Tierras
afectará directamente a dichos terrenos, mejoras y acciones de terrenos,
estableciendo el derecho de propiedad a quien sea declarado como dueño.
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517-2007 Reglamento Control y Reducción CA.
Resol No.9-2009, Tasas impuestas.
Resol No.43-2007, medidas anticipadas.
Resol No.622-2007, Formatos Certificados de Títulos.
Resol No.623-2007, Jueces Liquidadores.
Resolución No. 1738-2007, Reglamento de Mensuras Catastrales.
Conclusión:
YUNIOR ANDRÉS CASTILLO SILVERIO:
En la siguiente investigación tratamos de manera sucinta sobre el tema de la
unidad VI: Historia de la propiedad inmobiliaria dominicana contemporánea.
En donde desglosamos cada uno de los siguientes, temas como son:
Concepto de historia de la propiedad inmobiliaria dominicana
contemporánea; Quinto periodo: 1920-2005; La Orden Ejecutiva No. 511, del
lero. De julio de 1920; comparación histórica de las leyes inmobiliarias
antiguas y modernas; Leyes modernas complementarias del sistema
registral inmobiliario dominicano: Ley No.5038, 596, 51-07,13-07, 344,18-88,
2334, 637, 2914.189-01, 1421 524, 2569, 2254, 675, 491, 1024, 339, 317;
Historia de la creación de los Tribunales de Tierras; Primer Certificado de
título; Historia de la Litis de Derechos Registrados; Ley 1542 sobre registro
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de tierras de fecha 11 de octubre de 1947 y al final veremos la ley 108-05,
de fecha 23 de marzo del 2005 y sus reglamentos. Antes de la promulgación
de la Ley No.1542, sobre Registros de Tierras, podemos decir que el
problema de la clasificación del derecho de propiedad inmobiliar en la
República Dominicana, comenzó a resolverse con la aplicación de los
principios del Sistema Torrens, contenidos en la referida Ley de Tierras. La
Ley No.1542, se estableció en la República Dominicana a través de la Orden
Ejecutiva No.511, del 1º de Julio del 1920, dictada por el gobierno de turno,
el cual para ese momento lo era el Gobierno Norteamericano de Ocupación,
que dirigió la Rep. Dom; desde 1916 al 1924. Dicha Orden Ejecutiva fue
contenida inextensa, salvo algunas modificaciones en la Ley de Registro de
Tierras. Ley 108-05 de Registro Inmobiliario, facilitando la incorporación de
modernas tecnologías y procedimientos, tales como: la técnica del folio real
(por medio del Registro Complementario), el uso del GPS para la ubicación
de las parcelas, implementación de sistemas informáticos para el control y
organización de archivos, publicidad de la información y manejo de
operaciones en los distintos órganos de la Jurisdicción. El objeto de la Ley
108-05 es regular todo lo concerniente al registro de derechos inmobiliarios.
Se fundamente en la publicidad de los procedimientos antes los tribunales
de la jurisdicción inmobiliaria.
Bibliografías.
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Ruiz Tejada, Manuel Ramón. (1952). Estudio sobre la propiedad
Inmobiliaria en República Dominicana. Santo Domingo, República
Dominicana: Editora del Caribe, C. Por A.
Vega B. Wenceslao. (1981). Historia del Derecho Colonial Dominicano.
Santo Domingo, República Dominicana: Editora Taller
Vega B. Wenceslao. (2005). Historia del Derecho Dominicano (5ta. ed).
Santo Domingo, República Dominicana: Editora Amigo del Hogar.
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