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PENTECOSTE
El fuego que no se apaga
Hernandes Dias Lopes
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Datos de catalogación de publicaciones internacionales (CIP)
(Cámara Brasileña del Libro, SP, Brasil)
Lopes, Hernandes Dias
Pentecostés: el fuego que no se apaga / Hernandes Dias Lopes.
- São Paulo: Editora Candeia, 1999.
1. Espíritu Santo 2. Pentecostés
3. Avivamiento (religión) 4 Vida cristiana I. Título.
99-4617
CDD-248.4
Índices para catálogo sistemático:
1. Avivamiento espiritual y el Espíritu Santo: vida cristiana 248.4
2. Espíritu Santo y avivamiento espiritual: vida cristiana 248.4
ISBN 85-7352-085-X
Copyright © 1999 - Hernandes Dias Lopes
Coordinador de producción: Mauro W. Terrengui
Crítica: Andréa Filatro
Fotolitografía, impresión y acabado:
Asociación de Prensa Religiosa de la Fe
1
los
Edición: noviembre de 1999 - 3000 copias
Publicado en Brasil con autorización y todos los derechos reservados por Editora
e
Distribuidor Candeia
Rua Belarmino Cardoso de Andrade, 108
São Paulo, SP - 04809-270
Nos gustaría conocer tu opinión sobre este libro.
Escribe a Editora Candeia

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Dedicación
Dedico este libro a todos aquellos que, en este querido país,
han buscado con sinceridad, diligencia, ardor y fidelidad a
Escrituras un avivamiento genuino, sin dejarse intimidar por el
oposición de unos y sin perder de vista el desvío de otros.

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ÍNDICE
Prefacio
Introducción
Capítulo 1 - La necesidad de Pentecostés
Capítulo 2 - Las causas de Pentecostés
Capítulo 3 - El contenido de Pentecostés
Capítulo 4 - Resultados de Pentecostés
Conclusión
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Prefacio
¿Cuáles son las razones por las que una persona decide leer un
¿libro?
¡Ah! Amigo mío, hay tantos que, como dice el refrán,
algunos incluso la razón misma es inconsciente. Sin embargo, tengo mi
sospechas: algunos eligen la atractiva portada; otros, en
tema que aborda el libro; otros, más por el nombre del autor; Ahi esta
de aquellos que solo leen si hay una indicación de un amigo de
confianza.
Yo, como regla general, elijo lo que leeré por el autor y por
tema en cuestion.
Cuando recomiendo leer este libro, Pentecostés, Fuego
Eso no se apaga, estoy emocionado por eso. Quien no
¿Le gustaría ver su iglesia más cálida? Esa iglesia
ferviente, intercesor, evangelista, unido, misionero,
generoso? ... Cómo necesitamos iglesias así, ¿no?
Pentecostés, el fuego que no se apaga es un llamado a
despertar espiritual individual y en consecuencia
Nivel de la comunidad.
Vivimos días de muchas alegrías, dolores y tristezas en el
El envangelicalismo brasileño. El crecimiento es motivo de alegría
algunos sectores de la iglesia, pero dolorosamente
observamos la disminución numérica de otras ramas del mismo
Iglesia. Junto a todo esto, nos ha impactado un
creciente ola de escándalos: adulterio, divorcio y separación
se convirtió en una rutina incluso entre el liderazgo pastoral de la
Iglesia; reuniones de oración vacías; prósperas reuniones en busca de
prosperidad; mucho habla y verborrea y poca santificación;
ataques de muerte maligna a pastores y familias
pastoral; líderes más experimentados oprimidos y cerrando puertas
para líderes más jóvenes y apasionados; pastores y
líderes laicos desanimados y sin mucha esperanza de refrescarse y
la visitación de Espírito Santo; el oponente que desea robar,
matar y destruir, en paralelo con una cierta apatía e inmovilización de la
pueblo de Dios.
Pentecostés, el fuego que no se apaga, es, por tanto, un libro para
que tiene sed de Dios y se niega a ver su vida espiritual y su
Iglesia local envuelta en abatimiento y debilidad.
Cuando pienso en escritores, recuerdo aquellos cuyos libros
Soy un comprador habitual, independientemente del tema
que escriben. Me gusta el estilo y siempre trato de conocer el
carácter y vida del autor.
El rev. Hernandes Dias Lopes es una de esas personas que todos
que deseen crecer en cualquier área de la vida necesitan apuntar

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cerca ... ya sea como consejero, amigo, invitado, anfitrión,
compañero de viaje, escritor, conferenciante o pastor.
Cree en lo que escribe. Intenta vivir lo que escribe. Él es
creyente. Es en serio. Tiene buen corazón. ¡Es de Dios! Tu familia es
precioso, hermoso, es pura bendición!
Entonces, mi querido lector, estás en gran compañía.
¡Alegrarse!
Empieza en las siguientes páginas un hermoso paseo ... y
verás como los frutos hermosos aparecerán en tu vida.
Pr. Jeremias Pereira da Silva
Pastor Titular de la Octava Iglesia Presbiteriana de Belo Horizonte

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Introducción
Dos obstáculos se interponen en el camino de una auténtica
despertar espiritual: el primero es la experiencia mística,
parte de la Biblia, como estandarización de la vida; el segundo es el
erudición teológica sin la unción del Espíritu Santo y sin misericordia.
Muchos hoy persiguen experiencias, maravillas y señales.
Buscan un tranquilizante, un anestésico que alivie su
ahora. Comunidades enteras están sujetas a catarsis y
extroyecciones, en servicios de rapto emocional, en los que el
la gente despega en alas de la histeria colectiva y escapista y
viajar a través de continentes de ignorancia. Algunos incluso consultan el
Biblia, pero de manera incorrecta, ya que no contextualizan su
mensaje, no apliques exégesis ni lo estudies bajo las leyes de
hermenéutica sagrada. Lo abren al azar, lo consultan como si
era un libro mágico. Otros piensan que la Biblia tiene poder
exorcizante. Lo colocan abierto en el Salmo 91, a la cabeza del
cama, para alejar a los espíritus malignos y proteger el hogar de
peligros dañinos. Usan la Biblia, pero no retienen su mensaje.
Llevan la Biblia, pero no disciernen la voz de Dios. Escuchar a la
Sonido ruidoso que viene del corazón, pero no escucha la voz de Dios.
que emana de su Palabra.
Otros, sin embargo, escudriñan las Escrituras con los lentes del
racionalismo, a travs de la lente de la teologa liberal, y hacer un
lectura errónea de la Palabra de Dios. El liberalismo ha matado
muchas iglesias. Donde llega, la iglesia muere. Donde los hombres
tratar la Biblia con indiferencia, negando su infalibilidad y
infalibilidad, la iglesia se desmaya y pierde su vigor.
En este tiempo de confusión, apostasía y sincretismo, es necesario
trabaje duro para restaurar la centralidad de la Biblia. ES
Debo velar por la erudición bíblica, sin dejar de lado la piedad. Y
hay que repudiar el fanatismo y el emocionalismo histérico, sin
dejar de resistir la teología estéril de la misma manera. Estos dos
extremos, aunque hacen mucho ruido, no producen resultados
que dignifiquen el nombre de Dios. Es trueno sin lluvia, hojas
sin fruto, apariencia sin realidad, obstáculos al verdadero
despertar espiritual.
La iglesia cristiana necesita urgentemente una restauración.
No tiene impacto en la sociedad. La iglesia es
perdiendo su autoridad. ¿Que hacer? A finales del siglo XVII y
principios del siglo XVIII, la iglesia comenzó a sentir que estaba
perdiendo su autoridad. Entonces decidió inaugurar una nueva serie
conferencias, con el objetivo de defender la fe cristiana y producir una
sistema de argumentación y apologética en la defensa de la fe. Pero no
no fueron ni las conferencias de Boyle ni las obras de Butler lo que

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restauró la posición de la iglesia y restauró su antiguo
autoridad; fue a través del derramamiento del Espíritu Santo en la vida
George Whitefield y John Wesley en Inglaterra y Jonathan
Edwards en Nueva Inglaterra. Un poderoso avivamiento barrió el
Inglaterra, arrancando de los escombros una iglesia sin vida. Qué
las conferencias no podía hacer, el Espíritu Santo lo hizo, usando
hombres llenos de la Palabra y del Espíritu Santo.
A principios del siglo XIX, la iglesia volvió a sentir la pérdida
de poder. ¿Que hacer? Conferían más autoridad al predicador.
Lo alejaron de la gente. Lo investieron con un aura de
autoridad. El predicador debe vestirse de manera diferente.
Lo elevaron a un lugar más alto, el altar. Entonces la gente
escucharía. Pero el cambio se produjo solo cuando estalló el avivamiento
en América en 1857 y Gales en 1859. Fue Dios
interviniendo con su Espíritu, y no con los intentos de los hombres,
quien reconstruyó la iglesia. En ese momento, los predicadores no
cambiaron sus mensajes, pero los mensajes cambiaron el
mundo. Sus sermones eran los mismos, pero se filtraron
por la unción del Espíritu Santo y, por lo tanto, miles de vidas fueron
salvado. Entonces la iglesia fue sacudida, los creyentes se despertaron,
pecados ocultos han sido confesados y abandonados, vidas
se liberaron cautivos, se cerraron bares y lupanares, casinos
tenían sus puertas cerradas, mientras se abrían iglesias, el amor
porque Dios reavivó en los corazones, el anhelo por el estudio de la Biblia
Creyentes vigorizados, compañerismo dulce y profundo, lazos fortalecidos
entre los hijos de Dios, y la iglesia apática e impotente se convirtió
gigante, valiente e impactante.
No puedes hacer un avivamiento. El es obra del cielo. Es trabajo
del Espíritu Santo. En este libro vamos a estudiar sobre Pentecostés,
sobre el derramamiento del Espíritu, sus causas, su contenido,
tus resultados. Estoy seguro que Dios quiere quemar tu
corazón con el fuego del Espíritu. Espero que las paginas
los siguientes son combustible para encender y alimentar estos
llamas en tu vida!

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Capitulo 1
LA NECESIDAD DE UN PENTECOSTÉS
El Doctor. John Stott, considerado uno de los más grandes exegetas
bíblicos del siglo XX, dijo que "antes de enviar la iglesia a la
mundo, Cristo envió el Espíritu a la iglesia. El mismo orden
necesita ser observado hoy ". No hay misión sin formación.
hay predicación sin poder. No hay avivamiento sin derramar el
Espíritu.
Leonard Havenhill, en su libro Why it Takes the Full
¿Avivamiento ?, cuenta la experiencia de un pastor que predicó un
cartel en la puerta de su iglesia: "Esta iglesia pasará por un
avivamiento o entierro ". Visité en Europa, en los Estados Unidos
Estados Unidos y Canadá muchas iglesias históricas que habían
un pasado vigoroso y hoy se consideran iglesias muertas.
Tienen un templo, tienen un presupuesto, tienen una estructura, pero no tienen
vida.
Pero es posible que la iglesia de hoy experimente un nuevo
¿El espíritu santo? Necesitamos, al principio, entender que el
Pentecostés en todo su sentido es irrepetible. El Espiritu Santo fue
cobertizo para permanecer con la iglesia para siempre. Él es el
otro consolador que estará con nosotros para siempre. Ahora todo
otros avivamientos provienen de lo que sucedió en
Jerusalén en los primeros días. En este sentido, no hay más
Pentecostés. Sin embargo, la promesa de nuevos derrames de petróleo
El espíritu para despertar a la iglesia es una promesa viva a la que
debemos aferrarnos. Es en este sentido que usaremos el término
Pentecostés. El apóstol Pedro dijo en ese día memorable: "... y
recibirás el don del Espíritu Santo. Para ustedes otros es el
promesa, a tus hijos y a todos los que todavía están
lejos, es decir, para cuantos el Señor nuestro Dios llama "(Hechos 2.38-
39).
A lo largo de la historia, Dios ha visitado a su pueblo,
con gran poder y trayendo tiempos refrescantes a la iglesia, a través de
del derramamiento de tu Espíritu. Así era entre los valdenses,
en Francia, en el siglo XII. Fue así en la Reforma del siglo XVI,
cuando el Espíritu de Dios sopló con gran poder en Europa,
utilizando hombres como Lutero, Zwinglio, Knox y Calvin. Dios
volvió a visitar la iglesia con gran poder en el siglo XVII,
criando, sobre todo, en Inglaterra a los puritanos, uno de los
las generaciones más santas y cultas de la historia de la Iglesia. En el siglo
XVIII, las ventanas del cielo se abrieron en copioso derrame
of Spirit en Inglaterra, Gales y Nueva Inglaterra.
En el siglo XIX, Dios envió la lluvia torrencial de su Espíritu en

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grandes avivamientos en los Estados Unidos, en Escocia, en
Inglaterra e Irlanda del Norte. En el siglo XX, Dios ha hecho
maravillas desde el gran renacimiento de Gales en
1904, con Evan Roberts; el gran avivamiento en las islas nuevas
Hébridas, en 1946, con Duncan Campbell; el avivamiento entre los
zulus, en Sudáfrica, en 1966, con Erlo Stegen; y el grande
despertar en Corea del Sur, desde 1907, cuando el viento del
El espíritu comenzó a soplar con gran poder, tomando ese
crecimiento colosal hasta nuestros días.
Tenemos, por tanto, una base para buscar y esperar el Pentecostés,
es decir, un derramamiento del Espíritu en estos días.
¿Por qué es necesario Pentecostés hoy?
1. Debido al bajo nivel espiritual del pueblo de Dios
La iglesia como regla ha crecido de lado, pero no
hacia arriba o en profundidad. Ella ha sido a menudo
superficial, superficial, inmadura y mundana. Tiene extensión, pero no
profundidad. Tiene números, pero no vida. Es grande, pero no
hace un impacto. Crece pero no madura. Hay cantidad
pero no calidad. Es como la iglesia de Sardis: tiene un nombre
ella vive, pero está muerta (Ap 3.1). Hay un vacío, un vacío, un abismo
entre lo que los creyentes profesan y lo que viven, entre lo que dicen
y lo que hacen. La integridad y la santidad ya no han sido
característica de la vida de muchos creyentes. Están cayendo en
los mismos pecados viles que condenan a los malvados.
No es raro que la iglesia reciba comentarios
escándalos que por el impacto de su no conformidad con el
mundo. La mayoría de los cristianos adoptan un cristianismo desfigurado,
en el que se ultraja la verdad, se relativiza la Palabra y los valores
Los absolutos de Dios son pisoteados. El evangelio que muchos
predicar hoy es sincretismo semipagano. Estamos viendo el
comercialización indiscriminada y descarada de lo sagrado. Muchos
predicadores abrazaron un semi-evangelio, un evangelio sin
cruz, sin verdad, sin absolutos. Estos llorones no son
importa la verdad, están más interesados en las ganancias. No
buscan lo que es correcto, pero lo que funciona. No busques lo que es
ético, pero lo que funciona. Esta actitud intrascendente de predicar
un evangelio mezclado con herejías, para satisfacer la codicia
rentabilidad insaciable ha generado debilidad, enfermedad y
superficial, y causó más escándalo que impacto positivo en
sociedad. La iglesia perdió su turno y su voz. No se impone
por su fuerza espiritual, sino por su potencial de negociación. Ella
perdió la autoridad para hablar en el nombre de Dios, como el
evangelio que ella predica es otro evangelio. Estamos viviendo el

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período doloroso de una iglesia apóstata. Vibrante, sí; pero sin
la vida de Dios. Sí, rico, ante los hombres; pero frente a
Dios, pobre, ciego y desnudo.
Cuando se abandona la teología sana, la conducta entra en
colapso. La teología es la madre de la ética. La teología determina la ética. EL
el hombre es el resultado de su fe. Como cree en su corazon, asi
él es. Antes de la vida viene la doctrina. La doctrina determina el
calidad de vida. No hay santidad fuera de la verdad. No hay
cristianismo auténtico si la Palabra de Dios no está en su base.
Una iglesia apóstata no puede generar creyentes genuinos. Una iglesia
en crisis espiritual genera creyentes que tropiezan y enferman.
Vemos, por tanto, que todos los días el mundo se
entrando más en la iglesia. La iglesia se ha asimilado más
que influyó en el mundo. Se ajusta más al mundo de
que tiene un impacto en él. La gloria de Dios ya no está sobre el
carpa de la iglesia. La iglesia se retuerce de dolores de parto para
dar a luz a su hijo
Icabode. El brillo del rostro de Dios ya no ha
brilló en la vida de la iglesia, que perdió su sed de Dios para
busca ansiosamente las bendiciones de Dios. Dios se hizo para ella
solo un bendito, no el Señor. El hombre es el centro y
no Dios. Lo que se busca es que la voluntad del hombre se haga en
cielo, y no que la voluntad de Dios esté establecida en la tierra. EL
hoy el hombre no busca el rostro de Dios, sino el beneficio. El va a
iglesia no para adorar, para ofrecer algo a Dios, sino para
busca una bendición. Su ley es la de la sanguijuela: dame, dame.
El hombre invoca a Dios no porque tenga sed de Dios, sino porque
lo que puede obtener de él. No diezma porque tiene
placer en la fidelidad, sino por el retorno que esto puede representar.
Un hombre así no sirve a Dios, sino a Mammon.
También hay quienes, como los creyentes de Éfeso,
son ortodoxos, pero han perdido su calidez espiritual, abandonaron el
primer amor. Tienen ciertas doctrinas en sus cabezas, pero son
congelado en la vida espiritual. Son ortodoxos en sus cabezas y herejes de
conducta. Son celosos de observar los rituales, pero
condescendiente al pecado. Son observadores externos de
preceptos de Dios, pero lleno de podredumbre por dentro. Ir
iglesia, pero no entre en la presencia de Dios. Cantan himnos, pero
no adoran a Dios. Dicen largas oraciones, pero desconocen el
gloria de entrar en el Lugar Santísimo de la intimidad con el Señor.
Ayunan, pero no se humillan ante la presencia del Todopoderoso.
No temen a Dios en sus corazones. Se acostumbraron al
sagrado, ya no sienten deleite en la Palabra ni gozo en
vida de oración, perdieron de vista la obra de Dios, por lo que ya no
tener más pasión por las almas. Viven un cristianismo árido,

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estéril, única fachada y apariencia.
La consecuencia natural de esta fe inestable es una vida
mundano, entrometido con el pecado, junto con lo que es
vil. Los creyentes de hoy son a menudo un poco diferentes de las personas.
en el mundo: las citas son igualmente licenciosas y lujuriosas, negocios
también se enrollan. Los compromisos carecen de integridad y
verdad en palabras. Hay creyentes cautivos de las adicciones
degradante y, para mantener las apariencias, ponerse máscaras y
cometemos así un doble error: el de pecar y el de tratar de ocultar la
pecado. La calidad de la vida moral del pueblo evangélico de hoy es
muy por debajo de lo que Dios establece en su Palabra. No
ayuda a racionalizar, creando razones para justificar el pecado.
Dios pesa corazones. Busca a los hijos de los hombres. En contra
su luz y oscuridad son las mismas. Nadie escapa al
escrutinio de Dios. Sus ojos omniscientes buscan todo el
máscaras que usamos. Ante Dios no sirve de nada disfrazarse. Él
requiere la verdad interior. No está satisfecho con la apariencia.
No se contenta con las hojas; Busca los frutos.
Antes de hablar del derramamiento del espíritu, el profeta Joel
llamó a la nación de Israel a volverse a Dios. Antes de
Pentecostés, el pecado debe ser tratado. Ante los cielos
abierta, la gente necesita arreglar su vida con Dios. Antes de
el derramamiento del Espíritu, el camino hacia Dios debe ser
preparado. Y Joel (2.12-16, 28) dice que esta vuelta debe ser: a)
profundo , es decir, de todo corazón. No sirve de nada fingir. No
De nada sirve tocar la trompeta. Dios no se impresiona por la majestad
de nuestros gestos y con la elocuencia de nuestras palabras. Él
no acepta promesas vacías, votos tontos, compromisos para
medio; b) con quebrantamiento , es decir, con lágrimas y
llanto. Dios no desprecia un corazón quebrantado. Las lagrimas de
Dios no olvida el arrepentimiento. Los que lloran por
tus pecados son benditos. Es imposible llenarse de
Espíritu sin vaciar todos los escombros que obstruyen el
nuestra vida. Esta limpieza es dolorosa, pero debe hacerse, aún
que con lágrimas; c) con diligencia , es decir, con ayuno.
Necesitamos ayunar para que Dios doble nuestros corazones y los haga
sensible. Necesitamos ayunar para que Dios nos dé la percepción de
la malignidad de nuestro pecado y la pureza de la santidad divina.
Necesitamos ayunar para que todas las excusas que obtengamos
para que no nos volvamos a Dios, caigamos al suelo; d) con
sinceridad , es decir, desgarrar nuestros corazones. En el pasado,
la gente tenía la costumbre de rasgarse la ropa en momentos de desesperación.
Dios, sin embargo, no se contenta con los actos externos. El no
satisface con la teatralización. No tiene sentido enfrentarlo
voz, grito, gesto, ya que estos gestos no te impresionan. Él

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quiere un corazón desgarrado, sincero, auténtico, decidido a
Vuélvete hacia él. Cuando sonó la trompeta, la gente fue convocada
volverse a Dios, del sacerdote al niño de pecho, y hubo
restauración y perdón. Como resultado, llegó la gloriosa promesa:
"... y sucederá después de que derrame mi Espíritu sobre todos
la carne "(Jl 2.28). Mira que venga el derramamiento del Espíritu
después y no antes del ajuste de la vida con Dios. Buscar
avivamiento sin primero tratar con el pecado es ligereza, porque es querer
que Dios pacte con el error. Es necesario preparar el camino
para que Dios se manifieste.
Hoy, lamentablemente, debemos admitir que la iglesia está
enfermo y débil a causa del pecado. Los cultos carecen de vida. Dónde
no hay sinceridad, no hay adoración digna de Dios. Donde no hay
santidad, no hay comunión con Dios. Dios estaba cansado de
adoración del pueblo de Judá, porque las manos del pueblo estaban llenas de
sangre. Multiplicaron sus oraciones en la misma medida que
sus transgresiones aumentaron (Is 1,15). Llegó el profeta Amós
decir que Dios estaba cansado de escuchar los cantos religiosos del
su pueblo y ya no podía soportar el tanger de sus instrumentos (Am
5.23), porque la gente tenía un culto, pero no tenía vida. El profeta
Malaquías va más allá al hablar en el nombre de Dios,
recomendando que se cierre la puerta de la iglesia para que
la gente no prendería fuego en el altar inútilmente (Mal 1.10). Eso
porque estaban deshonrando a Dios y poniéndolo en su altar
animales enfermos, ciegos, desgarrados, es decir, el resto, el excedente, no
los primeros frutos. Hoy existen muchos cultos fríos, cadavéricos, sin
pulsación, sin el latido de la vida. Hay otros cultos que, enamorándose
el extremo opuesto, son una representación teatral, un espectáculo, en el
que la gente adora de hombre a hombre. EL
lo que cuenta es el rendimiento y el poder de manipulación masiva del
líder. Hay momentos en que la adoración se convierte en un
negocios donde se comercializa lo sagrado, donde el cielo se mezcla y
vende la gracia de Dios por dinero, donde la gente habla en nombre de
Dios y las promesas se hacen en el nombre de Dios que él nunca hizo
en tu Palabra. Sí, todo muestra el bajo nivel espiritual del
Pueblo de Dios y nos impone la imperiosa necesidad de un
¡Pentecostés!
2. Porque la iglesia está encerrada entre cuatro paredes
En el Evangelio según Juan 20: 19,21,22 encontramos el
discípulos reunidos con las puertas cerradas, temerosos de
Judíos. Estaban atrapados, acobardados, paralizados y sin
sin atreverse a salir a la calle. Habian perdido el coraje
a declarar.
No querían correr los riesgos del discipulado. Ellos no

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tuvieron el valor de asumir que eran de Jesús. Intimidado
ante la presión y la persecución inminente. Armado el
armas entraron en la cueva; se enjaularon en el aposento alto. Ellos
encogido bajo el manto del miedo.
Esta es una imagen de la iglesia de hoy. Muchas iglesias tienen
contentos, pero les falta audacia. Son ortodoxos, pero no tienen
pasión por las almas. Tener conocimiento, pero no tener ardor
evangélico. Tienen un programa y una organización, pero
Cuatro paredes. Otras iglesias tienen contenido, buena teología y
excelente música, pero toda su actividad está volcada hacia adentro.
No transpiran, no reverberan su influencia al
mundo. Son verdaderos guetos. Es sal en el salero. No hacen nada y
poca o ninguna influencia que tienen en la sociedad en la que se encuentran
insertado.
El noventa por ciento de las actividades de la mayoría de las iglesias.
son para la iglesia misma. Son iglesias rizadas y ahogadas
por el propio cordón umbilical; iglesias narcisistas, iglesias con
Síndrome del Mar Muerto, que solo recibe, solo engorda; iglesias que
se iluminan y ocultan su luz al mundo,
dejándote en una densa oscuridad. Y, a diferencia de la mujer de
parábola de la moneda perdida, estas iglesias, en lugar de buscar la
Moneda perdida, pasan todo el tiempo puliendo las monedas
que tienen en sus manos. Realizan conferencias, congresos, reuniones,
conferencias y seminarios solo para pulir monedas. Creyentes
estas iglesias se reciclan en todos los congresos, participa en
conferencias misioneras a mil kilómetros de distancia. Son
poder salir de la casa mil veces para ir al templo, pero no tengo
coraje para cruzar la calle y hablar de Jesús al prójimo. Son
iglesias tímidas para invertir en la salvación de los perdidos. Pez
siempre en aguas poco profundas y nunca eches las redes en alta mar. los
pocos peces que capturan se convierten en peces luchadores que
Agota tus fuerzas luchando con otros peces en una pelea.
acuario de titanio.
Cuando miramos el texto de Juan 20: 19-22,
descubrimos cuatro razones por las que la iglesia estaba cerrada
dentro de cuatro paredes: 1. Miedo - Algunos creyentes tienen miedo de
crítica, miedo al prejuicio, miedo a la persecución, miedo a ser
se burlaron, temerosos de asumir que son de Jesús. Por eso,
se acobardan como Pedro. Aun así, están llenos de creyentes
una arrogante confianza en sí mismo. Tienen un alto concepto de sí mismos.
Juzgan a los demás y se sobrevaloran a sí mismos. Como Pedro
empezar a seguir a Jesús desde lejos. No tienen el coraje de
abandonando la fe o la voluntad de salir al mundo, pero
tampoco tienen fibra para caminar alrededor de Jesús. Caminar
escabulléndose en la penumbra. Sumérgete en caminos llenos de

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oscuridad. Son discípulos cobardes. Como Pedro, también se unen
a empresas que son un obstáculo para la fe. Empiece a unirse
la gente que se burla y se burla de Jesús. Finalmente, como Pedro,
niegan a Jesús. Juran que no lo conocen y hasta juran
hablando insultos y negando toda su implicación con el
Señor de la vida. Sí, hay muchos que por miedo eligieron quedarse
enmarcado dentro del templo de por vida, en la comodidad del
nido, viviendo un cristianismo de invernadero, simplemente tomando
biberón y engorde, haciendo de la iglesia un vivero y
orfanato, no un ejército equipado para salir al mundo
anunciando la salvación en Cristo. 2. Ausencia de centralidad
de Jesús en la vida - Tenían miedo porque Jesús estaba
ausente en esa reunión. Dado que Jesús no estaba presente, el
las puertas estaban cerradas. Eso fue una antítesis de todo
ministerio terrenal de Jesús. Jesús nunca estuvo encerrado dentro
del templo, encaramado en una silla. Su ministerio fue
itinerante, estaba en la calle, en las ciudades, en las casas, en las carreteras. Jesús
fue a encontrarse con la multitud. ¿Dónde estaba el pecador?
campo misionero de Jesús. Hoy queremos cambiar las cosas.
Solo queremos que los pecadores vengan a la iglesia, pero la iglesia
no quiere ir al mundo donde están los pecadores. La iglesia no quiere
dejar el nido. No quiere la incomodidad de bajar a los valles, donde
la gente sufre los tormentos de una vida sin Dios y sin
esperanza. Cuando Jesús, sin embargo, está presente en la iglesia, ella
lo hace audaz. Sale de las cuatro paredes. Deja de ser yo mismo
satisfecha como la iglesia de Laodicea, que se consideraba rica
y rica, pero ella era miserable, porque Jesús no estaba dentro de ella. 3.
Ausencia de comunión - Ese grupo se acurrucó en el aposento alto
estaba en un gran conflicto. Algunos ni siquiera se atreven a levantar
sus ojos por la vergüenza de haber huido cuando
Jesús fue arrestado en Getsemaní. Tal vez estaban masticando la hierba
amargado de tus debilidades y dolencias. Tal vez ellos estaban culpando
ellos mismos y entre ellos por no poder huir
escandalizado por Cristo en el momento de su terrible experiencia. Un
la iglesia sin comunión no tiene tiempo ni voz. No tiene autoridad
predicar. No tiene credibilidad para anunciar buenas noticias.
Una iglesia sin comunión está enferma, necesita curación, así que
no puede salir de las cuatro paredes. 4. Ausencia de respiración
del Espíritu - Aquellos discípulos estaban sin paz, sin gozo,
sin atrevimiento, sin unción. Estaban secos, marchitos, vacíos.
Estaban apiñados, pero no tenían compañerismo. Ellos eran
congregados, pero Jesús estaba ausente. Estaban juntos, pero
con miedo. Eran una comunidad cristiana, pero sin el aliento de
Espíritu, por lo que fueron encerrados por miedo a los judíos.
Cuando perdemos el aliento del Espíritu, nos convertimos en creyentes

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temeroso. Cuando la iglesia ya no sea regada por
Espíritu, se desvanece, se seca, se encoge. Cuando falta aceite
engranaje, la máquina golpea el pasador. Cuando la iglesia pierde
plenitud del Espíritu Santo, se intimida y se encierra entre cuatro
paredes No hay resurgimiento intramuros. Avivamiento que no lleva
la iglesia transpirar, dejar su comodidad, no es avivamiento
bíblico. El avivamiento que no saca a la iglesia del nido es
solo un movimiento superficial de consecuencias menores. EL
La Biblia dice que cuando Pablo llegó a Tesalónica, el mensaje
del Evangelio se filtró por los poros de la iglesia y alcanzó
mundo. Cuando Pablo llegó a Éfeso, de allí, el Evangelio
se extendió por Asia Menor. Siempre que Dios visitaba a su
pueblo en poderosas efusiones del Espíritu, la iglesia avanzó
para conquistar a los perdidos allá afuera, en el mundo, donde estaban.
Es por eso que necesitamos un Pentecostés en estos días, para tomar el
iglesia detrás de los muros de hormigón y llevarla a las calles, a la
cuadrados, en la multitud, para ser sal, luz y portador
buenas nuevas de salvación.
3. Porque un fuego extraño ha reemplazado al fuego del Espíritu
Hoy hay mucha herejía en el mercado de la fe. Los estantes
Los religiosos están llenos de muchos productos maravillosamente.
empaquetados para atraer los variados gustos de la parroquia. Hay mucho
religiosidad que, aunque parezca atractiva y convincente, no
fuego extraño pasa por el altar de Dios. El fuego extraño es el
que no viene del cielo, es obra del hombre. No viene como
respuesta y favor de Dios, pero es producido artificialmente por
hombre para impresionar, como si tuviera el sello divino. Fuego
extraño es uno creado a partir de los principios de las Escrituras. Él es
muy parecido al fuego real. Impresiona a la gente.
Atrae a muchos espectadores.
Nunca en la historia ha habido una explosión de fuego tan grande
extraño como en el tiempo en que vivimos. La humanidad es
ansioso por novedades. Todo lo que ofrece respuesta inmediata a tu
necesidad, el hombre está buscando. Caímos en la malla de un
pragmatismo demoníaco. La gente de hoy no está interesada
en realidad, pero en lo que funciona. No buscan lo que es
correcto, pero lo que funciona. No les interesa la integridad,
sino por resultados. No buscan carácter, sino carisma. No
quieren santidad, pero señales. No se sienten atraídos por la cruz, pero
por milagros. No buscan negarse a sí mismos y tomar
la cruz y siguen a Jesús, pero corren tras una falsa anestesia
para calmar el dolor del ahora. No busques con agonía del alma
arrepentimiento, pero consuelo. No estan interesados en cambiar
de la vida, buscan lucro. No buscan la ciudad cuyo arquitecto

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y el fundador es Dios, quieren imperios en este mismo mundo. No sé
asunto con el fuego del infierno, siempre que puedan apagar el
llamas de sufrimiento que les molesta ahora.
Estamos viendo, con tristeza y pesar, mucha gente dando
el pueblo un caldo venenoso en lugar del verdadero cereal del cielo. Ahi esta
muerte en la olla. Hay un fuego extraño en el altar. Muchos se sienten atraídos
por todo tipo de noticias que aparecen en nombre del fuego
adivinar. Algunos líderes religiosos se han convertido en verdaderos magos
en la fabricación de brizna. Puede hacer realidad
Malabarismos pirotécnicos para impresionar a los desprevenidos,
guiar a los ciegos por los caminos resbaladizos de un
subjetividad engañosa, sin la referencia segura de
Escrituras. Otros líderes negocian milagros, volviendo a la práctica
mediación de indulgencias, en la que la salvación se compró con
dinero. Hay líderes que se especializan en apelaciones
sentimentalistas, haciendo promesas engañosas a la gente en
en nombre de Dios, para extraer grandes sumas de dinero, para
engorda las hambrientas arcas de una variedad sin escrúpulos. existe
muchos mercenarios vestidos de pastores, encaramados en el
púlpito, con la Biblia abierta, alardeando de verborrea
seductora, predicando otro evangelio, haciendo milagros, echando fuera
demonios, profetizando, pero al mismo tiempo viviendo en el
iniquidad, dominada por la codicia insaciable, encendiendo
fuego extraño en el altar. Hay iglesias llamadas evangélicas que son
creando un verdadero sincretismo religioso, poniendo en primer plano un
evangelio mágico, entremezclado con prácticas pagadas, alentando
fiel a poner un vaso de agua en la radio, a comprar rosas
pañuelos ungidos y santificados, aceite de Israel y agua bendita de
Jordán. Todo esto es solo otro evangelio, un anti
Evangelio, fuego extraño en el altar.
Pero, ¿qué debemos hacer ante este triste hallazgo?
¿Solo lamento? Solo lanzando torpedos de condena a estos
prácticas reprobables? Solo alerta a la gente sobre los peligros de
falsos maestros? Mucho más que eso, necesitamos buscar el fuego
cierto. El fuego combate el fuego. La mejor forma de rodear el fuego
es con fuego. Sólo el fuego auténtico puede apagar el fuego falso. Solo fuego
del cielo puede hacer morir las llamas del extraño fuego. Dios
siempre manifestado a través del fuego. Cuando Dios se apareció a
Moisés en el Sinaí, se reveló a sí mismo a través del fuego. En el Monte
Carmelo,
Dios destronó la credibilidad del abominable Baal enviando
fuego del cielo. Cuando Salomón consagró el templo, el fuego de Dios
invadió el santuario. En Pentecostés, el Espíritu descendió sobre el
discípulos en llamas como fuego. Dios está consumiendo fuego. EL
El trono de Dios es fuego. La Palabra de Dios es fuego. Hace su
ministros llamas de fuego. Jesús bautiza con fuego. Siempre fue

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El deseo de Jesús de prender fuego a la tierra: "Vine a prender fuego
en la tierra y desearía que ya estuviera ardiendo ”(Lc 12,49).
Cuando la iglesia pierde el fuego del Espíritu, el mundo perece en
fuego del infierno. El Espíritu Santo es poder. El Espíritu Santo trae
poder. El poder es dinámica. Y la dinamita simplemente explota con
fuego. Cuando a
la dinamita explota, incluso las piedras se rompen. El fuego de Dios ilumina
sobre la oscuridad. El fuego de Dios calienta a los fríos. Fuego
de Dios quema los escombros del pecado y purifica a los que
almacenan basura en el sótano de la memoria y en el tabernáculo del alma. EL
El fuego de Dios no se puede contener; se extiende, salta obstáculos,
no conoce dificultades. El fuego de Dios no puede dejar de ser
lo tengo. Donde está, la gente lo nota. El fuego de Dios atrae.
Donde sus llamas se elevan, ahí es donde la gente
correr. El fuego de Dios no se puede fabricar ni producir
artificialmente. Y el resultado de una vida en el altar, de una búsqueda
sincera, verdadera consagración, entrega sin
reservas de almas que anhelan al Altísimo. Necesitamos una
Pentecostés que apagó el fuego extraño y la luz real
llamas del Espíritu en los corazones. Oh mi gran sollozo
alma, el gran grito de mi corazón, es que puedo ser un
palo seco al fuego, ya que estoy seguro de que si el fuego prende
en madera seca, ¡incluso la madera verde comenzará a arder!
Capitulo 2
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LAS CAUSAS DEL PENTECOSTÉS
Queremos enumerar algunas causas fundamentales que
fluyó en esta copiosa y torrencial efusión del Espíritu,
marcando de una vez por todas el comienzo de la iglesia cristiana y
sirviendo como referencia para otros derrames
proceder.
1. Cumplimiento de la promesa del Padre -Lucas 24,49
Pentecostés es el cumplimiento de profecías claras e incongruentes
fusionado. El Dios fiel, que no puede negarse a sí mismo y que vela por
para el cumplimiento de su Palabra, prometió derramar de su
Espíritu sobre toda carne (Jl 2.28). Obviamente uno no es
cuantitativamente hablando "toda la carne", pero
cualitativamente. Pentecostés cruzó la barrera sexual, como el
El Espíritu se derramó sobre hijos e hijas, hombres y mujeres.
Dios devolvió a las mujeres su dignidad original. Pentecostés
rompe la barrera del prejuicio de la edad: el Espíritu descendió sobre
joven y viejo. No existe una edad sagrada ni una edad problemática.
Todos pueden experimentar la vida abundante de Dios. El viejo
puede tener ideales y sueños, y el joven puede tener visiones y
discernimiento. Pentecostés rompe los prejuicios sociales, porque el
El espíritu se derramó sobre siervos y siervas. No hay aristocracia
espiritual. No existe una dinastía sagrada. No hay estratificación social en el
Reino de Dios. Incluso los más simples y humildes son
contemplada con la calidad superlativa de la vida plena del
Espíritu.
En Isaías 44.3 Dios prometió derramar agua sobre el
sedientos, torrentes en la tierra seca y el Espíritu en el
descendientes de Abraham. La promesa de Dios es segura, porque
en todas tus promesas tenemos sí y amén. La promesa es
abundante, porque no habla de gotas, ni de filetes, ni de
porciones, sino de verter torrentes. Dios no nos da su
Espíritu por medida. A todos los que tienen sed, a todos los que anhelan
ávidamente, como el corzo que vaga por las corrientes de agua, el
Pentecostés, el derramamiento del Espíritu, es una promesa
posible.
2. Resultado de una obediente espera - Lucas 24.49
"... permanecer en Jerusalén ...". La orden de Jesús fue dada y
no se podía cambiar, posponer ni desobedecer. Los discípulos
debían permanecer en Jerusalén. Quizás el último lugar
quisiera quedarse fuera la ciudad de Jerusalén, lo que significaba
fracaso y caída en sus vidas. Jerusalén representó la vergüenza

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y deshonra en su historia. Allí estaban sus expectativas y sueños
enterrado. Allí, un espectro de dolor se apoderó de sus almas.
Pero Jesús muestra que el escenario del fracaso debe ser el lugar de
restauracion.
Donde hay obediencia, hay bendición; donde la palabra de Jesús no
se toma en serio, hay una maldición. Obedecer es mejor que sacrificarse.
No era el momento de irse, era el momento de quedarse. Eso no fue
tiempo para hacer una misión, pero introspección. Hay ocasiones en las que
que lo que Dios espera de nosotros no es actividad, sino
evaluación. Dios está más interesado en quiénes somos que en qué
lo que hacemos. Nuestra vida es más importante que la nuestra
trabajo. Cuando Jesús llamó a los apóstoles, antes de enviarlos
predicando y echando fuera demonios, les asignó ser
con él. Ahora, antes de que derrame el Espíritu sobre ellos,
que les permite llevar a cabo la misión, les ordena quedarse
en Jerusalén.
Necesitamos depender más de los recursos de Dios que de
nuestras estrategias. Si pasamos el tiempo invertimos en oración
En reuniones y horarios continuos, la iglesia explotaría
en un crecimiento fenomenal. Para nosotros, estar callados en presencia de
Dios es más difícil que correr. Y más
más fácil ser Marta que María. Es más fácil salir al campo que
depender del Señor, obedecer su Palabra y descansar en su
promesas.
Leer uno de los manuales de crecimiento de la Iglesia
Evangelio completo en Seúl, pastorado por el dr. David Yong Cho,
Me impresionó lo gigantesco de su ministerio. La Iglesia,
que comenzó en 1958, ahora cuenta con 700 mil miembros. Y el
iglesia local más grande del mundo. Hay 700 pastores auxiliares, 30 mil
grupos familiares, 7 servicios cada domingo con 50 mil personas
cada. Además de la complejidad de una iglesia tan grande,
tiene varias estaciones de televisión, decenas de estaciones de radio
radio y un periódico con 700 empleados y una tirada diaria de 1
millones de copias. Me impresionó saber esto
Iglesia. Inmediatamente comencé a meditar en la agenda del pastor.
titular de esa iglesia. ¿Cómo maneja su tiempo? me quedé
emocionado y conmovido al leer que gasta solo el 30% de su
tiempo manejando toda esta máquina y 70% rezando, leyendo el
Palabra y preparación del sermón dominical. Estar con Jesús, estar
en la presencia de Dios, es la máxima prioridad de su ministerio.
Una vez, el presidente de Corea del Sur llamó a su
gabinete. La secretaria le dijo que el pastor no le podía atender
porque estaba rezando. El presidente insistió en hablar, diciendo al
secretario que era el presidente y el asunto requería prioridad.
Ella le comunicó gentilmente al presidente que el pastor no

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contestaría en ese momento, porque estaba rezando. Más tarde el
El presidente llamó al pastor y se quejó por no ser atendido
fácilmente como la máxima autoridad del país. El pastor
respondió que no podía servirle porque estaba en
audiencia con el soberano del universo, el Señor Jesucristo.
3. Resultado de una espera perseverante - Lucas 24.49
"... quédate ... hasta que seas empoderado desde arriba ...".
A menudo, no recibimos un derramamiento y un derramamiento del
Espíritu de Dios en nuestra vida, porque estamos demasiado apurados y
superficial en nuestra búsqueda. Nos dimos por vencidos demasiado
pronto. Nuestro amor
por Dios es como la niebla que pasa temprano. Vivimos en una época en la que
que predomina el desechable. Todo debe ser rápido. No
desarrollamos perseverancia. No podemos esperar.
Ese grupo de 120 discípulos perseveró en oración
durante 10 días. Ellos no se movieron. No miré atrás
con incredulidad. No dudaron de la promesa. Por eso,
recibió la bendición. Los cielos se abrieron y el fuego de Dios cayó
sobre ellos. Los torrentes del cielo inundaron sus corazones. La vida
de ellos ha sido tocado y transformado para siempre debido a este
expectativa perseverante.
Después de triunfar sobre los profetas de Baal en el Carmelo,
por ver caer el fuego de Dios sobre el holocausto y caer la gente
arrodillado, proclamando que sólo el Señor es Dios, después
testigo del triunfo de Dios sobre los abominables ídolos que
esclavizado Israel, Elías subió a la cima de la montaña. Allí puso el
cabeza entre las rodillas. Clamó a Dios por el derramamiento de
lluvias No había llovido sobre la tierra durante tres años y medio.
Reinaba el hambre. La calamidad fue generalizada. Elias, aunque es un
un hombre como nosotros, perseverante en la oración. El clamó a Dios
con empeño. La séptima vez, vio una pequeña señal, una nube
del tamaño de una palma y creía que Dios enviaría
lluvia torrencial. Cayó la lluvia. La tierra floreció y dio frutos,
porque Elías perseveró en la búsqueda de Dios.
Naamán, comandante del ejército sirio, solo se curó de
su lepra cuando dejó de lado su propia metodología y
decidió obedecer la orden del profeta Eliseo, sumergiéndose en el río
Jordan siete veces. Si se hubiera rendido la sexta vez, habría
frente al leproso Siria. Es importante perseverar. Perseverar es
obedecer.
A menudo comenzamos una reunión de oración con
entusiasmo, pero pronto nos desanimamos. Predicamos acerca del avivamiento,
pero pronto abandonamos el tema. Ponemos nuestra mano en el arado
pero pronto miramos atrás. Visité la Misión Kwa Sizabantu,
Sudáfrica en 1991 y también leí sobre la historia de los grandes

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avivamiento que Dios le dio al pueblo zulú en 1966 para
instrumentalidad del Pastor Erlo Stegen. Fueron 14 años de
buscar. A menudo estaban tentados a darse por vencidos. Hubo tiempos en que
de desánimo, pero continuaron. En los tres meses que
antes de que llegara el avivamiento, solo podían llorar
en sus reuniones de oración, tres veces al día. Pero como la tierra
estaba seco y los corazones estaban sedientos, permaneciendo en el
búsqueda, Dios envió torrentes del Espíritu
con resultados colosales que pudimos ver y escuchar.
4. Resultado de la expectativa de una vida llena de poder -
Lucas 24.49
"... hasta que tengas el poder de arriba". Lo que tú
¿Qué esperas de tu vida cristiana? Tienes anhelos? ¿Aspiras a algo más grande?
¿Buscas una vida abundante? Ella anhela con todas sus fuerzas
alma la plenitud del Espíritu? No hay nada mas peligroso para
Cristiano que vivir contento contigo mismo. Estancamiento y
la conformidad son peligros que amenazan una vida cristiana sana.
Mucha gente se contenta con las migajas, mientras
Los graneros de Dios están abarrotados. Las fuentes de Dios son
inagotable. Los recursos de Dios para nosotros son ilimitados. Él
tiene vida abundante para nosotros. Ríos de agua viva pueden fluir desde el
nuestro interior. Hay túnicas blancas y aceite fresco para nuestras cabezas.
Tenemos a tu disposición la suprema grandeza del poder de Dios, el
mismo poder que levantó a Jesús de entre los muertos. No hay
escasez por parte de Dios. Mientras tengamos contenedores vacíos, el
El aceite de Dios no dejará de fluir. Mientras nuestro corazon
sediento de Dios, ansioso por buscar su rostro y abrirse a
recibe su unción, no faltará el rocío del cielo sobre nosotros,
bálsamo de Galaad sobre nuestra cabeza. Dios no se despide de
con las manos vacías los que lo atienden. El no defrauda
los que lo buscan. Esos discípulos estaban esperando
no la perpetuación de la escasez, no la continuación de la crisis, no la
prolongación de la sequedad espiritual que los atormentaba. Ellos eran
derramando ávidamente el derramamiento del Espíritu, una cualidad
vida superior, una experiencia más profunda con el poder de
Dios.
¿Cómo te encuentras en la vida cristiana? ¿Acomodado? Usted está-
más de Dios? ¿Quieres más de tu Espíritu? Buscar con
sufriendo una vida de poder? No podemos hacer nuestro
experimenta el punto de referencia de lo que Dios puede darnos. Él
puede hacer infinitamente más. No podemos poner límites a la
poder de Dios. No podemos enlucir a Dios dentro de nuestro
límites estrechos. En el pasado muchos hombres de Dios
Experimenté cosas tremendas y extraordinarias porque

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se atrevieron a creer y buscar las insondables riquezas del Evangelio de
Cristo y la plenitud del poder del Espíritu. Fue esta búsqueda de poder
que convirtió a George Whitefield en el mejor predicador al aire libre del siglo
XVIII. Fue esta sed de vida plena lo que hizo que John
Wesley, el gran avivador que sacudió Inglaterra y tomó la
país de cenizas de una abrumadora crisis. Fue el poder del cielo lo que
hizo del joven David Brainerd el mayor punto de referencia de la vida piadosa en
el
siglo, hasta el punto que John Wesley consideró leer el diario
El personal de Brainerd es el trabajo más importante que debe leer un
predicador. Fue esta capa de poder lo que transform el
vendedor de zapatos Dwight Moody en el mayor evangelista de todos
los tiempos.
Hoy vemos muchas ramas religiosas predicando un poder
que viene del interior del hombre. Esto no es cristianismo, es budismo.
El poder que necesitamos no viene de adentro, sino de arriba, del cielo,
de Dios.
5. Resultado de la oración ferviente - Hechos 1.14
"... todos perseveraron, unánimemente en la oración". El grupo completo
de los 120 discípulos estaba hermanado en el mismo objetivo. Ninguno
se quedó fuera de esa reunión de oración. No hubo abandono
a mitad de camino. Todos perseveraron. Hoy, muchas veces, tenemos
valor para comenzar una reunión de oración, tenemos la valentía de
llama a la gente, pero no tenemos fibra para perseverar. ES
fácil de empezar. Es fácil entusiasmarse cuando la situación es
favorable. Pero Dios busca perseverancia en nosotros. Abraham insistió
con Dios para no destruir al justo junto con el malvado en
Sodoma. Dios escuchó su oración y sacó a Lot de allí. Elías insistió
con Dios en la cima del Carmelo y oró siete veces hasta que la lluvia
caída torrencial sobre la tierra seca de Israel. Los discípulos pasaron
diez días perseverando en la oración. Ellos no se rindieron. Incluso rezaron
que vino sobre ellos, con gran poder, el derramamiento de
Espíritu. Pero no solo estaban juntos. No fue mera
perseverancia que marcó ese extraordinario encuentro de
oración. Rezaron por unanimidad. Hubo acuerdo sobre el tema de
oración. Era como si fuera un alma ante Dios. Ellos
estaban en sintonía con el tono del cielo. Ellos tenian uno
corazón, un propósito. Todos rezaron en la misma dirección
esperaba la misma promesa, buscaba el mismo revestimiento
de poder.
Hoy tenemos gigantes del conocimiento en el púlpito y pigmeos en la vida
de oración. Los pastores indolentes no saben qué es la agonía del alma,
ni han experimentado nunca lo que es luchar con Dios en oración
como Jacob. EM Bounds dijo en su libro clásico The Power
a través de la oración para que "los muertos tomen sermones de sí mismos

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muertos, y los sermones muertos matan ". Lutero, el gran reformador
Alemán, ya dijo que "el sermón sin unción endurece el corazón". C.
H. Spurgeon dijo que toda su vasta biblioteca no era nada antes
desde el altar sagrado de tu sala de oración. Abraham Kuiper, genial
Teólogo, educador y político holandés, declaró que "si los pastores
no son hombres de oración y no honran al Espíritu Santo en
su vida y ministerio, darán a sus rebaños piedra en lugar de
pan ". El estribillo que citamos en nuestras iglesias es cierto:" Demasiado
oración, mucho poder; poca oración, poco poder; ninguna
oración, no hay poder ". De hecho, los bancos de oración vacíos
hacen púlpitos sin energía.
CH Spurgeon, al predicar sobre el texto de Hechos 1.14, dijo:
"¿Cómo podemos esperar Pentecostés si ni siquiera nos han despertado
¿orar? Primero, toda la iglesia viene, unánimemente, perseverando en
oración, sólo después de Pentecostés ".
En 1997, junto con 80 pastores brasileños, tuve la
oportunidad de visitar Corea del Sur. Visitamos 11 iglesias
en Seúl, 9 de ellos presbiterianos, uno metodista y
una Asamblea de Dios. Iglesias de 5,000, 10,000, 12,000, 18,000,
30 mil 55 mil 82 mil 700 mil socios. Me quedé impresionado
con el gran vigor espiritual de esas iglesias. En cada
ellos, recibimos una conferencia especial del pastor principal sobre el
principios de crecimiento de la iglesia. Quedamos impresionados por la
el hecho de que todos afirman categóricamente que la mayor razón
del gran crecimiento de la iglesia evangélica en Corea del Sur es el
el profundo compromiso de los creyentes con la vida de oración.
Ninguna iglesia se considera evangélica en Corea del Sur a menos que
tener una reunión de oración diaria al amanecer. Si un seminarista
faltar a dos reuniones de oración matutinas en el seminario,
excepto por razones imperiosas, no es pastor. ninguna
miembro, por regla general, reza menos de una hora al día. ninguna
El líder de la iglesia ora menos de dos horas al día. Sin pastor
salvo raras excepciones, ahora menos de tres horas al día. Visitamos el
iglesia metodista más grande del mundo, con 82.000 miembros. El pastor
El fundador sigue siendo el pastor titular de la iglesia. Nos dijo que el
El secreto del crecimiento de la iglesia es su abundante vida
oración y oración ferviente de su vasta congregación. EL
pastor David Yong Cho, cuya iglesia es la más grande del mundo, con 700
mil miembros, comenzó su pastorado en 1958, y ahora su iglesia
se extiende por varias naciones de la tierra. Documenta
abundantemente en sus libros que pasa el 70% de su tiempo en oración
y meditación en la Palabra. Además de las reuniones diarias de oración en el
templo, las iglesias invierten en la construcción de
oración y entrenamiento, donde hacen cuevas de oración y donde
el pueblo derramará su alma ante Dios. Visitamos la Iglesia

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Presbyterian Myong Song, la iglesia presbiteriana más grande de Seúl,
con 55 mil miembros. Esta iglesia tiene cuatro reuniones de oración
por la mañana: uno de cuatro a cinco; otro, de cinco a seis;
otro, de seis a siete; y finalmente, otro de siete a ocho de la mañana.
Me conmovió participar en una de estas reuniones, en el momento
de cinco a seis de la mañana. Al acercarnos al templo, vimos
gente corriendo con la Biblia en la mano hacia el templo.
Cuando llegamos al cementerio, cientos de automóviles y autobuses
estaban estacionados. Los diáconos, bien vestidos, se ocuparon de la
Buen orden de estacionamiento. Cuando entramos en el templo,
estaba abarrotado, coro ahogado, pastor en el púlpito, como si fuera
gran día de fiesta. Conté en la alfombra, frente al púlpito, 80
gente sentada, porque no había más lugar en el templo. Más
de 5.000 personas se reunieron allí. Esto cuatro veces al día. Cuando
esa multitud empezó a rezar, parecía el murmullo de muchos
aguas. No pude contener las lágrimas que corrían por mi
rostro cuando se dieron cuenta del fervor con que buscaban el rostro de Dios.
Cuando uno de los miembros de nuestra caravana interrogó a un
de los pastores sobre la oración matutina de los coreanos como un
factor cultural, respondió: "En todo el mundo la gente
levantarse temprano para ir a la escuela, al trabajo, a tratar
intereses y ganar dinero. Entendemos eso
Dios se merece lo mejor y las primicias. Si dios es el mas grande
prioridad de nuestra vida, por eso tratamos de mostrar que,
buscando tu rostro muy temprano en la mañana ".
Se le preguntó a David Yong Cho cuál sería la mejor
estrategia que un pastor debe usar para lograr que su iglesia
conviértase en una iglesia de oración. Él respondió: "La única manera
llevar a una iglesia a orar es que su pastor sea un hombre de
oración ". Por esa razón, cuando se le preguntó a Dwight Moody
que era, para él, el mayor obstáculo para el progreso de la obra,
respondió: "El mayor obstáculo para el trabajo son los trabajadores". Y dijo
más: "Moody es el mayor enemigo de Moody".
Si los pastores son palos secos que se incendian en el
Espíritu, todo el pueblo comenzará a arder. Si el púlpito es un
hoguera, la iglesia se llenará del ardor del Espíritu. Ellos preguntaron
Moody dijo una vez: "Sr. Moody, ¿cómo iniciar un avivamiento en
iglesia? "Él respondió:" Enciende un fuego en el púlpito ".
Martyn-Lloyd Jones declaró que "Pentecostés se derrama
sobre algo que está listo. La unción del Espíritu se derrama sobre
la preparación. Elías erigió un altar, luego cortó la madera y
lo dispuso sobre el altar. Así que mató al toro, lo cortó
piezas y colocarlas sobre la madera. Habiendo hecho todo esto, oró
para que baje el fuego; y el fuego se apagó. Este es el orden de
cosas".

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Cuando nuestra vida esté lista, el fuego de Dios
caerá sobre nosotros. Cuando el camino de Dios está preparado y el
los valles están enraizados, las colinas niveladas, los caminos torcidos
enderezado y aplanado costroso, entonces toda la carne verá el
salvación de Dios. Ahí es cuando la iglesia cae de rodillas en oración
perseverante y unánime, que el fuego del Espíritu caiga sobre la iglesia.
Es después de que la iglesia arregla su vida, que el cumplimiento de la
la promesa se hace realidad.
En 1996 fui invitado a predicar en la Iglesia Bautista de
Pavuna, en las tierras bajas de Río de Janeiro, en Río de Janeiro. El calor era
sofocante. El sol estaba caliente. Pensé para mí mismo que, en un
El jueves, con tanto calor, encontraría un pequeño
iglesia sin mucha motivación para adorar. Cuando llegué a
Vi un templo gigantesco. No había llegado nadie. Solo el
pastor estaba en la oficina. Con un caballero me recibió y se fue rápido
diciendo que el servicio sería maravilloso y que esperaba que
noche cerca de 3 mil personas. Mi corazón se conmovió. Tuvimos
en ese culto más de 3 mil personas, bajo un calor sofocante,
pero una multitud exultante llena del gozo del Espíritu.
Le pregunté a ese pastor cuál era el secreto para hacer crecer su
Iglesia. Él respondió: "Esta iglesia lleva su vida de oración a
Oh enserio. Estas personas ponen sus rostros en tierra y gritan, y Dios abre
ventanas del cielo y todos los días agrega gente que va
ser salvo ". De hecho, Dios nunca cambió los métodos. Si
queremos la poderosa visitación de Dios, el derramamiento de la
Espíritu, Pentecostés, necesitamos orar, orar y orar, hasta que el
Seamos empoderados con poder. Cuando la iglesia se incendia, el
fuego del Espíritu, la gente se siente atraída por él de una manera
irresistible.
Capítulo 3
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EL CONTENIDO DE PENTECOSTÉS
Pentecostés llegó porque una congregación de 120 personas
estaba unida, cohesionada, unánime, perseverante en la búsqueda de lo mismo
ideal (en 1,14; 2,1). Había unidad de propósito. Hoy hay
reunión, pero poca comunión; hay oraciones pero poco
acuerdo; mucha coreografía, pero poca rotura;
mucho movimiento, pero poca adoración; mucha emoción pero
pequeño elogio; mucha verborrea, pero poca unción; Muchos
buscan el derramamiento del Espíritu, pero otros se esfuerzan por
espalda.
Quiero abordar el contenido de Pentecostés en dos aspectos:
1. Experiencia personal de la llenura del Espíritu Santo
Esos discípulos ya fueron regenerados y salvos. Para tres
Jesús dejó esto muy claro (Juan 13.10; 15.3; 17.12).
Por tanto, ya poseían el Espíritu Santo, porque "si alguno no
tiene el Espíritu de Cristo, éste no es suyo "(Rom. 8.9). Jesús dijo
Nicodemo que el que no es nacido de agua y el Espíritu no
puede entrar en el Reino de Dios (Jn 3,5). Además, Jesús ya había
sopló sobre los once, diciéndoles: "Recibid el Espíritu Santo" (Jo
20,22). Pero, a pesar de ser salvo, tener el sello de
Espíritu y recibir el soplo del Espíritu, todavía no estaban
lleno del Espíritu. Una cosa es tener el Espíritu residente; otro es tener
tu presidente. Una cosa es vivir en el Espíritu; otro es ser
lleno del Espíritu. ¿Está usted, que tiene el Espíritu, ya lleno de él? Tu
vida controlada por él? El fruto del Espíritu se puede ver en su
¿vida? ¿Está la unción del Espíritu sobre tu cabeza? El poder de
¿El espíritu está sobre ti? Cuando abres los labios, la Palabra de
¿Es Dios veraz en tu boca? Cuando el misionero presbiteriano
John Hyde iba a la India, recibió un telegrama para
en el barco. La abrió con entusiasmo. Hubo una pregunta
lacónico y perturbador: "John Hyde, estás lleno del Espíritu
¿Santo? ". Estaba irritado por la petulancia y la audacia de
pregunta. Arrugó el telegrama, se lo guardó en el bolsillo y trató de
escapar de la intrigante pregunta. Buscó justificarse a sí mismo
que la pregunta no tenía por qué serlo, ya que iba a
a un campo misionero, renunciando a tantas ventajas para poder
para entrar en tierras lejanas y oscuras. Sin embargo, por
entra en tu habitación, el dedo de Dios te tocó y la pregunta
comenzó a arder en su corazón: "John Hyde, estás lleno de
Espíritu Santo? ". Fue entonces cuando cayó de rodillas, llorando, y
clamó a Dios pidiendo un derramamiento del Espíritu en su vida.
Fue profundamente influenciado por esta oración. Experimentado
algo especial de Dios. Al llegar a India, en solo tres

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años vieron a más de mil personas entregarse a Cristo a través de su
Ministerio.
La experiencia de llenar el Espíritu Santo es personal (en
2.3.4). El Espíritu Santo desciende sobre cada uno individualmente.
Cada persona tiene su propia experiencia. Nadie necesita preguntar
como vírgenes insensatas, tomé prestado aceite. Todo el mundo está lleno de
¡Espíritu!
El Espíritu vino en forma de viento para mostrar soberanía,
la libertad y la inescrutabilidad del Espíritu. El Espritu, as
como el viento, sopla donde quiere, como quiere, en quien quiere.
Nadie puede rodear o detener el viento. Es misterioso. Ninguno
sabe de dónde viene o adónde va. Tu curso es gratis y
soberano. Dios no se somete a la agenda de los hombres. El no
vamos a domesticar. No se puede presionar. El es Dios. es
en el trono y hace todas las cosas de acuerdo con el consejo de tu
será.
El Espíritu vino en forma de lenguas de fuego. El fuego ilumina
purifica, calienta y esparce. Jesús vino a prender fuego a
Tierra. Hoy la iglesia, por regla general, está fría. Parece un refrigerador
mantén tu religiosidad intacta, no un fuego en
encender corazones. Muchos creyentes se parecen más a barras de hielo
que las brasas.
A Benjamin Franklin le gustaba escuchar a George Whitefield
porque pude verlo arder ante tus ojos. Dios le dijo al
profeta Jeremías: "He aquí, haré mi
palabras en tu boca ".
Pero la tendencia del fuego es extinguirse. Donde no hay combustible
el fuego se apaga. Por eso, cinco veces, en el capítulo de Levítico
6, Dios instruyó que no se apagara el fuego sobre el altar.
Dios enciende el fuego, pero debemos mantenerlo encendido (II Cap. 7.11).
El apóstol Pablo, en esa misma dirección, exhorta a su hijo en la fe,
Timóteo, para revivir su don (II Tim 1.6). La palabra revivir
se refiere al uso de fuelles para hacer que la llama se encienda nuevamente.
fuego a punto de extinguirse. El general William Both, fundador de la
Ejército de Salvación, siempre insistió con su gente: "El
la tendencia al fuego es apagarse; mira el fuego en el altar de tu
corazón".
Necesitamos una iglesia ardiente. Cuando la iglesia pierde
fuego del Espíritu, los pecadores perecen en el fuego del infierno. Solamente
una iglesia calentada por el fuego de Dios puede arrebatar gente
del fuego de la condenación.
No basta con empacar la madera y la oferta en el holocausto. ES
se necesita fuego, y cuando el fuego cae, la gente cae de rodillas gritando:
el Señor es Dios, solo el Señor es Dios. Necesitamos lo glorioso
experiencia de llenar el Espíritu que nos hace arder de amor

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por Dios. Necesitamos la llenura del Espíritu para vivir
digno de Dios, con gratitud, alabanza y sumisión.
Cuando los discípulos fueron llenos del Espíritu, comenzaron
hablando de la grandeza de Dios (Hechos 2:11). Todos empezaron a
glorifica a Dios. No había lugar para palabras torpes y
malicioso. Se acabaron las intrigas. Han cesado las acusaciones.
Toda la visión pesimista ha terminado. Estaban llenos de
entusiasmo y entusiasmo, hablando de la grandeza de Dios.
Necesitamos un Pentecostés que elimine todas las murmuraciones de la iglesia,
cada palabra y actitud de derrota. Hay muchos en la iglesia que solo ven
cosas a través de lentes borrosos. Son personas que gastan
todo el tiempo quejándose de la vida, la familia que tienen, la iglesia que
asistir. Son personas que juegan contra el patrimonio, que
tire hacia abajo, esa fila en la dirección opuesta, que siempre son
en contra. Estas personas son heraldos del caos, profetas de
desastre, embajadores del pesimismo. Necesitamos una
Pentecostés que saca a la iglesia del pantano del desánimo, del
murmullos y el calabozo del negativismo. Necesitamos abrir el
boca para hablar de la grandeza de Dios. Necesitamos profetizar el
infinitas posibilidades de Dios. Necesitamos bendecir a la gente
y engrandece el nombre exaltado del Señor. Necesitamos ser un pueblo
¡Más audaz, más optimista y más entusiasta!
2. Experiencia personal de power cladding - Lucas
24,49; Hechos 1.5,8
No hay cristianismo sin poder. El evangelio que abrazamos
es el poder de Dios para todos los que creen (Rom. 1:16). El espíritu santo
que recibimos es el Espíritu de poder (II Tim 1.7). El Reino de Dios
que está dentro de nosotros, no consiste en palabras, sino en poder
(Rom. 4.20). La predicación de la Palabra debe hacerse con poder (I Ts
1,5; I Co 2.4).
Jesús mismo, aunque era el Hijo de Dios, no abrió
ese poder. Cuando fue bautizado en el río Jordán, el cielo
abierto, el Padre habló, y el Espíritu Santo descendió sobre él,
la del poder para el ministerio (Lc 3,21, 22). Desde allí, Jesús fue al
desierto, guiado por el Espíritu, lleno del Espíritu, donde ayunó y
oró durante 40 días. Allí en el desierto el diablo usó todos sus
arsenal para tentar a Jesús. Lanzó todo su
torpedos mortales. Pero fue derrotado salvajemente (Lc 4: 1-11).
Jesús salió victorioso del desierto y, lleno del Espíritu, volvió a
Galilea (Lc 4,14). Entró en la sinagoga de Nazaret y tomó el libro de
Isaías en sus manos, para revelar al pueblo que el Espíritu de Dios
estaba sobre él, ungiéndolo para predicar, sanar y liberar (Lc
4.17,18). Toda la vida y el ministerio de Jesús
sucedieron bajo la unción del Espíritu Santo (Hechos 10:38). El espíritu

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Santo estuvo presente incluso en su muerte (Heb 9,14) y en su
resurrección (Rom. 8:11).
Si Jesús, siendo Dios, no ha dispensado el poder del Espíritu,
tampoco podemos hacerlo. No basta con conocer el
Escrituras, debes experimentar el poder de Dios (Mt 22,29).
No es suficiente tener la cabeza llena de luz, necesitas tener corazón
lleno de fuego. No es suficiente tener una buena teología, es necesario tener
unción del Espíritu. No basta con tener una buena organización, es
Necesito aceite en el engranaje. La iglesia sin la unción y el poder del
El espíritu es como un valle de huesos secos.
Sin el poder del Espíritu, podemos tener iglesias grandes, pero
no iglesias vivientes. Sin el poder del Espíritu, podemos tener grandes
templos, pero no santas congregaciones. Sin el poder del Espíritu
podemos tener un servicio solemne y pomposo, pero no una convicción de
pecado y sed de Dios. Sin el poder del Espíritu, podemos
realizar grandes obras, pero no extender las apuestas del Reino de
Dios. Jesús fue categórico al determinar que los discípulos no
debe aventurarse en el ministerio antes de vestirse
con la fuerza del Espíritu (Lc 24,49). Ellos no serían capaces de
los desafíos de testificar sin el poder del Espíritu (Hechos 1.5: 8).
Pero ahora debemos preguntarnos: ¿Poder para qué? Hay mucho
personas que buscan el poder con motivaciones equivocadas. Quieren poder
autopromocionarse. Quieren que el poder se haga famoso.
Quieren poder para recibir el aplauso de los hombres. Querer
poder para volverse grande y rico, influyente y respetado.
No buscan la gloria de Dios, buscan prestigio y
recompensas.
Cuando miramos el libro de los Hechos, vemos las razones
a través del cual Jesús destaca la necesidad de la iglesia de
poder:
Poder para sacudir el yugo del temor (Juan 20:19; II Timoteo 1.7)
Hay muchos hoy que viven en el calabozo del miedo,
discípulos antes de Pentecostés, encerrados, encerrados,
paralizado. Son personas que tienen miedo de vivir, miedo de morir,
miedo a testificar, miedo a casarse y miedo a casarse. Miedo
enfermarse y tener miedo de ir al médico. Miedo a entrar en el
la universidad y el miedo a fallar en un trabajo. Miedo a quedarse
desempleados y miedo a jubilarse. Miedo a estar solo y
miedo de compartir la vida con alguien. Miedo a lo real y miedo a
irreal. Miedo a enfrentar la vida de frente y miedo a enfrentar
eternidad. Miedo a las agresiones y miedo a la policía. Miedo a viajar y
miedo a quedarse en casa. Miedo a perder popularidad y miedo a
se Auténtico. Sí, la gente vive hoy llena de fobias.
Necesitamos poder del cielo para superar nuestros miedos y traumas.

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Solo a través del poder del Espíritu podemos salir de detrás de nuestra
puertas cerradas. Solo al recibir el Espíritu de poder, desterraremos
cobardía y miedo que nos acechan.
Poder para apartar los ojos de la especulación para actuar
(Hechos 1.8)
Cuando Jesús habló a los discípulos sobre el bautismo con
Espíritu y la promesa del Padre de que deben esperar,
pronto empezaron a pensar en tiempos y tiempos, es decir, en el
kronos y kairos. Empezaron a entrar en el campo de la especulación.
relación escatológica. Pensaron que Jesús estaba hablando de un tiempo
en el que la dominación de Roma sería sometida por el poder político
de Jesus. Sin embargo, Jesús cambia el curso de estas expectativas y
demuestra claramente que recibirían poder para no
hacer profundos descubrimientos o incursiones en el campo de la
difícil situación teológica, sino actuar, poner la mano en el arado y
para hacer el trabajo. La iglesia se reúne a menudo para discutir
opiniones, pero no actúen. Hace todo tipo de entrenamientos, pero no
sale al campo. Hay creyentes que asisten a todos los congresos de
reciclar y aprender todos los métodos de evangelización, pero
nunca salió de casa para evangelizar. Son capaces de caminar mil
kilómetros para ir a una conferencia de evangelización,
salir de la casa hacia el templo mil veces, pero no pueden
cruzar la calle y hablar de Jesús con un vecino. Las personas
buscan poder para su propio deleite, para su propio
consuelo, para la exaltación de tu propio nombre. Por eso,
vemos mucha religiosidad, pero poca vida; mucha ortodoxia pero
poco poder; mucha discusión, pero poco trabajo; muy alto
pero poco resultado.
Con tristeza vemos a muchos en la iglesia con sus enormes cabezas y
el cuerpo desvencijado. Gente que estudia, investiga, bucea
en las aguas más profundas del conocimiento, se capacitan en el
conocimiento, pero no apto para el trabajo. Ellos lo saben, pero no lo hacen.
Se pasan la vida calentando, preparándose, pero nunca entran
en campo. Conocen la Biblia de cabo a rabo, pero nunca
comparte tu contenido con otros. Ellos son maestros
dispuesto a discutir todas las doctrinas, a diagnosticar todas
noticias emergentes en el mercado de la fe, para ver
guardianes de los depósitos sagrados; pero son verdaderos sarcófagos,
sellado herméticamente como una tumba; de ellos no rezuma
La vida de Dios, su voz no se escucha, no saben
conjugar el verbo trabajar, porque en la escuela de la vida sólo
conjeturas y especulaciones, y nunca actuó sobre la base del poder de
Dios.

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Poder para morir (Hechos 1.8)
Jesús dijo que necesitamos poder no solo para vivir,
pero también morir. La palabra "testigos" en Hechos 1.8
viene del griego martiria, de donde se origina nuestra palabra "mártir".
Necesitamos poder para morir, porque quien no esta preparado
para morir, no estás preparado para vivir. Ser cristiano a tiempo
de los apóstoles no era un símbolo de prestigio político, sino de
persecución, saqueo, encarcelamiento y muerte. Declararse cristiano era algo
arriesgado y peligroso. Podría significar abandono, cárcel y muerte.
Muchos cristianos fueron arrestados, torturados, saqueados y asesinados con
refinamientos de crueldad a causa de tu fe. Muchos soldados de
Cristo cayó en el campo de batalla y sufrió dolorosamente
martirio por su fidelidad a Cristo. Muchos han perdido
familia, propiedad y la vida misma, siendo arrojados a las arenas,
envuelto en pieles de animales, mordido y desgarrado por
Mordidas de perro; otros fueron pisoteados y destrozados por
toros enfurecidos. No pocos han sido destruidos por
leones hambrientos de Libia o atravesados por las espadas de
gladiadores. Miríadas de creyentes murieron quemados, otros
crucificados, otros ahogados, otros estrangulados y decapitados
por tu fe en Cristo. Desde Stephen, el proto-mártir de
Cristianismo, Tiago, Paulo, Policarpo, la viuda Felicidade, la joven
Perpétua, la esclava Blandina y miles más, como
John Huss, Jerônimo Savonarola, completan la galería de héroes
de fe que, por amor a Dios, fidelidad a Jesús y compromiso con
el Evangelio, selló el testimonio de la cruz con su propia sangre!
Sin el poder del Espíritu, nos convertimos en cobardes como Pedro
en la casa del sumo sacerdote Anás. Sin el poder del Espíritu
perdemos el valor de hablar del Evangelio ante las amenazas
del mundo. Pero cuando estamos vestidos con ese poder, fuerza
ninguno nos detiene, los azotes no nos intimidan, las cárceles no
amordazarnos o la muerte nos sacuda (Hechos 4: 18-21). Era que
poder que sostuvo a Pablo como heraldo en prisión hasta la muerte.
Fue este poder el que sostuvo
Esteban ante el martirio. Fue este poder el que permitió
John Huss frente al fuego con calma. Fue ese poder
quien animó a Lutero a ir a Worms y dar un firme testimonio de su
fe. Necesitamos poder para vivir con Jesús y morir para
Jesús.
Una de las cosas que marcó profundamente mi vida fue
visite el museo de los mártires en Seúl, Corea del Sur.
La mujer evangélica coreana creció en un suelo regado por la sangre de
mártires. Miles de creyentes fueron castigados a muerte, con
refinamientos de crueldad en la época de la ocupación japonesa. Cientos
de pastores fueron decapitados a orillas del río Ran. Más tarde,

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en la guerra fratricida contra Corea del Norte, cientos más
los creyentes murieron por su fidelidad a Cristo. En este museo, vimos
en una habitación enorme, cuadros simplemente enmarcados con el
fotografías de cientos de mártires. En cada cuadro había un
breve historia con el relato de vida, obras, ministerio y
especialmente en la forma cruel en que cada persona fue torturada y
asesinado por tu fe. Allí en esa habitación lloré cuando vi tantos
de esos mártires murieron sin ver el gran avivamiento que
Dios envió a Corea del Sur. Dios honra la sangre de
mártires. La sangre de los mártires, como decía Tertuliano, es el fertilizante
para la siembra del Evangelio. Después de observar cuidadosamente
todos esos cuadros, ya a la salida de la habitación, me acerqué al
último cuadro. El marco era el mismo, pero no había fotografía.
Cuando me paré frente a él, había una foto
espejo. Vi mi propio rostro y, debajo, una frase pulida:
"Puedes ser el próximo mártir". Las lágrimas rodaron por mi
cara. Reconocí que necesitaba vestirme con el poder de
¡Espíritu para ser mártir de Jesús!
Poder para vivir en santidad (Hechos 3.4)
Pedro y Juan dijeron al paralítico en Jerusalén: "Mira
para nosotros ... "(Hch 3.4). Esta es una declaración audaz y audaz.
que camina con Jesús, que está revestido de la fuerza del Espíritu,
puedes ser tan audaz. Hoy asistimos a una pausa, una
abismo, un divorcio entre lo que dice la gente y lo que dice
hacer. Vemos gente importante gritando hermosas palabras para el
iglesia y vivir en abominables prácticas pecaminosas en secreto.
Vemos pastores que exigen una vida santa de sus rebaños y
viven su intimidad con placer en el pecado. Vemos líderes
que tratan a la iglesia estricta y duramente, pero cultivan el libertinaje
moral en la vida privada. Vemos trabajadores celosos, atentos a
detalles minuciosos de la ley, pero condescendiente al pecado en
vida privada.
Es alarmante ver la gran oleada de decadencia moral
entre los líderes evangélicos en estos días. Cientos de pastores han
capituló y naufragó en el mar embravecido de la pasión sexual. EL
La juventud evangélica ha sido aplastada por la avalancha de nuevos
conceptos morales, que no conocen límites y odian toda suerte
de absolutos éticos. A menudo tratamos de eludir nuestra
propia conciencia diciendo a la gente: "No puedes mirar
para el pastor, ni para el anciano, ni para el diácono, ni
para las mujeres en la iglesia, mucho menos para los jóvenes. Tú
necesitamos mirar sólo a Jesús ". No queremos ser modelos a seguir.
queremos ser ligeros. No queremos pagar el precio de ser santos.
Pablo le dijo a la iglesia de Corinto: "Sed mis imitadores, como

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Yo también soy de Cristo ”(I Co 11.1).
La iglesia necesita predicar no solo a los oídos, sino también a
a los ojos. No solo debe pronunciar hermosos discursos, sino
también vive en santidad. No es suficiente que la gente escuche
nosotros hermosos sermones, necesitan ver la vida santa. Diácono Felipe,
Cuando llegó a la ciudad de Samaria, vio un gran avivamiento allí, y el
Las multitudes respondieron unánimemente a lo que dijo. Pero para
¿qué? ¿Cuál fue la razón de la eficacia del ministerio de Felipe? Es que
Felipe habló y lo hizo. Predicó y demostró. Predicó a
oídos y también los ojos (en 8.6). Cuando Juan el Bautista envió
sus emisarios para preguntar a Jesús si él era de hecho el
Mesías, el Maestro le dijo que dijera: "... Ve y anuncia a Juan el
que estás oyendo y viendo: los ciegos ven, los cojos andan, los
los leprosos son purificados, los sordos oyen, los muertos son
resucitó, y el evangelio se predica a los pobres "(Mt.
11.4.5). Cuando el paralítico se acercó a Pedro y a Juan en la entrada
del templo, no hicieron un discurso, pero dijeron: mira
nosotros (en 3.4). La vida de la iglesia necesita hablar más fuerte que la tuya
habla. Donde no hay vida, se desacredita la palabra, el discurso
está vacío e inocuo. Sin santidad no hay predicación eficaz. Sin
santidad no hay ministerio ungido. Sin santidad no
podemos ser la boca de Dios (Jr 15:19). Sin santidad el bastón
profético en nuestras manos no tiene valor, como sucedió
en el caso de Giezi (II Rs 4.31). La Palabra de Dios es verdadera en
nuestros labios cuando vivimos en la presencia de Dios y hacemos el
La obra de Dios en el poder de su Espíritu (I Rs 17.1,24).
La iglesia hoy, más que nunca, necesita vestiduras
blanco, con vida limpia, con manos purificadas, pies lavados,
corazón entero. El mundo ha influido en la iglesia más que el
iglesia al mundo. Porque la iglesia ha dejado de ser luz en el
mundo, el mundo ha entrado en la iglesia. En lugar de la iglesia
convocar al mundo al arrepentimiento, es el mundo que ha
proclamó los pecados de la iglesia. Los medios de difusión
escándalos eclesiásticos que sus virtudes. La iglesia ha amado el
mundo, ser amigos del mundo y adaptarse a él. Cristianos
se entrometen en las mismas prácticas reprobables que los
que no conocen a Dios. La ética de muchos cristianos es relativa y
situación, como gente que no sabe
de la Palabra de Dios. Estudiantes cristianos, no pocos
a veces usa el pegamento inmoral para sacar buenas notas
en las pruebas. Los empresarios cristianos no siempre son
familiares y ética en sus transacciones comerciales. Tus empresas
no sería capaz de soportar un libertinaje como el que ocurrió en el
profeta Daniel. Los jóvenes cristianos se están rindiendo al
sensualidad incontrolada en el cortejo, como los gentiles

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que no conocen a Dios (I Ts 4,3-8). La ropa indecorosa,
resumen, atractivo y sensual, dictado por la moda, no siempre es
rechazado por las mujeres y los jóvenes cristianos. La vida sexual de la gente de
Dios ha sido contaminado por la basura de películas pornográficas que
cuán abominables entran en los hogares cristianos (Deut 7.26). A
las familias evangélicas se hunden en las mismas crisis
cónyuges que los no cristianos. Los matrimonios se están rompiendo
en los tribunales de justicia por razones inútiles y no por razones
que justifican el divorcio y las segundas nupcias. Así,
estamos abriendo la puerta al verdadero adulterio
institucionalizado (Mt 19,9). La iglesia no puede estar bien si el
la vida privada de las personas está en crisis. No tiene sentido existir
reunión solemne si la vida privada de las personas que
conocer está en declive (Is 1,15). Dios no acepta la adoración de
iglesia, aunque viva y alegre, si estas mismas personas son
viviendo en pecado (Am 5,23). Es inútil encender el fuego del altar y
abrir las puertas de la iglesia si los adoradores no toman a Dios en serio
(MI 1,10). Cuando Dios rechaza al adorador, tampoco la ofrenda
puede aceptarse (Gn 4,3-7). Por otro lado, la calidad de la oferta es
un reflejo de la vida del adorador (Ml 1.9). Dios busca adoradores
que lo adoren en espíritu y en verdad (Jn 4, 24). Dios quiere
verdad interior (SI 51.6), espíritu y corazón quebrantados
afectado y contrito (SI 51.17). Necesitamos un
Pentecostés que despierta a la iglesia a la búsqueda de la santidad. A
la gente busca bendiciones. La consigna de hoy
es que el hombre merece ser feliz. Pero el diseño de Dios es que
seamos santos. Sin santidad nadie verá a Dios (Heb 12,14).
El fruto de los justos es árbol de vida (Pr 11.30), pero la paga del
el pecado es muerte (Rom. 6:23). El camino de la santidad conduce a
gloria, pero los caminos del pecado conducen al infierno.
Poder para perdonar (Hechos 1.8)
Hubo una rivalidad histórica entre judíos y samaritanos.
Enemigos irreconciliables, no se toleraban. Judíos
consideraban a los samaritanos como combustible para los fuegos del infierno.
Si una joven judía se casaba con un joven samaritano, el
familia ofició simbólicamente en su funeral. Un judío no podría
comer pan en la casa de un samaritano, porque el pan del samaritano
fue considerado inmundo. La hostilidad entre ellos fue profunda.
Debido a que Jesús no fue bien recibido en Samaria, Santiago y
Juan, los hijos del trueno, querían que el fuego del cielo cayera sobre el
ciudad para destruir a tus enemigos. La mujer samaritana lo hizo
cuestión de recordarle a Jesús que un judío no debe pedir un
favor de un samaritano, y mucho menos un samaritano que ayuda a un
Judío. Cuando Nehemías, después de 70 años de cautiverio en Babilonia,

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regresó a Jerusalén para reconstruir las murallas de la ciudad,
Los samaritanos intentaron de diversas formas prevenir su
reconstrucción. Fue el odio lo que surgió. Eran la rancidez de un
pasado mal resuelto. Las heridas abiertas aún no habían sido
sanado. Los resentimientos históricos hervían a fuego lento como lavas
de un volcán en erupción.
Los samaritanos eran judíos de raza mixta, parientes cercanos de los
misma sangre. Eran producto de un ganado reproductor,
llevado a cabo por el rey de Asiria, Sargón II, quien, al conquistar
Israel en el 722 a.C., llevó al pueblo de Israel al cautiverio, y el
otros que se quedaron en la tierra se mezclaron con otros pueblos
que el rey envió estratégicamente a la región con el fin de
debilitar el celo nacionalista del pueblo. De esta mezcla racial
se levantó el pueblo samaritano. Con eso, aprendimos que, en cuanto a
Cuanto más fuertes y estrechos son los lazos, más profunda es la herida
cuando se produce una crisis en la relación. La decepción se ha convertido
se vuelven más amargos cuando somos traicionados por alguien que una vez
nos dedicó la fidelidad.
Jesús ya había roto la barrera de la enemistad al pasar
por Samaria en la itinerancia de su ministerio. Rompió con
todos los prejuicios que separaban a estos dos pueblos por el muro
de enemistad. Ahora, al hacer la promesa de la efusión del
Espíritu, dice que la iglesia tendría el poder de testificar
también en Samaria. Quizás fue el último lugar donde un judío
me gustaria ir. Quizás fue la última opción para una empresa.
misionero. Pero, donde viene Pentecostés, las barreras del odio
están deshechos. Donde prevalece el Evangelio, las guerras terminan
frío, las heridas sanan, las relaciones rotas se restauran y
se establece la comunión. El mandamiento de Jesús es no prender fuego
Samaria, como Santiago y Juan querían antes, pero por
ser testigo de ella el mensaje supremo del amor de Dios y
salvación en Cristo. Solo al recibir poder del Espíritu podemos
perdonar. Necesitamos poder para amar como amó Jesús.
Necesitamos el poder del Espíritu para no dejar que el veneno
el veneno del resentimiento amarga nuestra vida. Necesitamos el
Pentecostés para amar a los que nos odian, para dar vida a
que desea nuestra muerte, para bendecir a los que
maldición. Necesitamos el recubrimiento de energía para
convertir a nuestros enemigos en amigos, para
conquistar a las personas que nos hieren con la fuerza irresistible de
amor incondicional.
Fue este poder el que permitió que los apóstoles fueran azotados y
cárceles y hasta martirio sin perder la dulzura de la vida.
Como flores, cuando las pisaron exhalaron el aroma de Jesús.
Como metales nobles, cuando se lanza al horno de

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persecución, salió más pura, más feliz y más eufórica.
Al igual que los diamantes, cuando se pulen, reflejan con más brillo la
resplandor de la gloria de Dios.
También fue este poder el que preparó a Stephen, el primer
mártir del cristianismo, morir apedreado sin dolor en el
corazón. Sus ojos no estaban nublados por la crueldad de
sus verdugos, pero vio a Jesús en su gloria. El no juró
invocando libelos condenatorios contra sus flagelantes, antes
intercedió por ellos. No había odio en el corazón de Stephen, pero
poder para amar y perdonar.
Hoy, la iglesia necesita poder para resolver muchos
Temas pendientes en el ámbito de las relaciones. Hay mucha gente
heridas en el campamento de Dios. Hay gente profundamente
herido y decepcionado en su relación con su
hermanos. Hay muchas heridas sin curar. Hay muchas heridas
abierto. Hay gente atascada por el resentimiento. Hay muchos lideres
evangélicos empapados de dolor, necesitados de curación. Ahi esta
muchas familias de pastores que llevan traumas y decepciones
profundo por la forma en que fueron tratados en la iglesia de Dios.
Hay muchos creyentes débiles y enfermos debido a fricciones, peleas y
disputas no resueltas. Hay personas en la iglesia que se comportan
como Caín, trayendo ofrendas al altar de Dios, pero con el corazón
lleno de ira contra sus hermanos. Hay creyentes en la iglesia que
compórtate como Esaú, alimentando la sed de venganza en el corazón. Ahi esta
otros que actúan como Absalón, atentando la vida de sus
hermanos mismos, porque nunca lograron perdonarlos. Y además
otros actúan como Saúl, disparando flechas a los ungidos de
Dios, pagando bien con mal, porque están dominados por un
espíritu perturbador. Donde no hay amor no hay vida
el que odia a su hermano está en tinieblas y nunca ha visto a Dios.
Quien no ama a su hermano, no puede amar a Dios. Por eso,
el que no perdona, no puede ser perdonado. Pero donde el
amor, reina el perdon. El amor es un remedio infalible para curar
heridas heridas. El amor cubre multitud de pecados. Nosotros necesitamos,
por tanto, de poder para amar. Necesitamos Pentecostés para
perdonar!
Poder para hablar de Cristo con valentía
En el libro de los Hechos, siempre que los apóstoles y otros creyentes
fueron llenos del Espíritu, predicaron el Evangelio con valentía.
Buscaban poder para no impresionar a la gente con
milagros, sino predicar la Palabra con unción. En Hechos 1.8, ellos
se les otorgaría poder para testificar. En Hechos 2.4, 11, cuando
llenos, comenzaron a hablar y hablar de la grandeza de Dios. En Hechos
2:14, cuando Pedro fue lleno del Espíritu, se levantó para predicar, y

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su poderoso sermón cristocéntrico tuvo tal impacto en
multitud que lo escuchaba, que casi 3 mil personas se convirtieron (En
2,41). En Hechos 4.8, Pedro es nuevamente lleno del Espíritu y abre el
boca para hablar de Jesús a las autoridades religiosas de Jerusalén.
En Hechos 4: 29-31, la iglesia está orando por valentía ante la
persecucion; el lugar de reunión se estremeció con el poder de Dios, y
todos fueron llenos del Espíritu y anunciaron con valentía la
Palabra del Señor. Hechos 6: 8-10 habla de Esteban, el diácono titular de la
(En 6.5), estar cubierto con tal entrenamiento de
gracia y poder, que sus oponentes no pudieron superar la
sabiduría y el Espíritu con el que hablaba. Improvisó
Predicó el sermón con la mayor cantidad de citas bíblicas.
registrado en las Escrituras. Tus enemigos, llenos de odio, los
apedreado, pero no pudo silenciar el poder de su
predicación, que hasta el día de hoy nos inspira y motiva. Hechos 9: 17-22 habla
de la curación y el bautismo de Saulo de Tarso que, tan pronto como estuvo
del Espíritu, comenzó a predicar a Jesucristo. Antes de Pentecostés,
los apóstoles estaban encerrados en el miedo, luego quedaron atrapados
por falta de miedo, porque no podían dejar de hablar de las cosas que
vieron y oyeron.
Sin poder no hay predicación. Este es el testimonio de
apóstol Pablo a la iglesia de Tesalónica: "Porque nuestro evangelio
no te alcanzo solo de palabra, sino sobre todo en
poder, en el Espíritu Santo y en plena convicción ... ”(I Ts 1.5).
Asimismo, el apóstol habla a la iglesia de Corinto: "Mi palabra y
mi predicación no consistía en un lenguaje persuasivo de
sabiduría, sino en demostración del Espíritu y poder, de modo que
su fe no se basó en la sabiduría humana; y si, en el poder
de Dios "(I Co 2.4-5). Cuando Jesús resucitó de entre los muertos,
Pasé 40 días con los discípulos hablando sobre el Reino de Dios, y
el Reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder (I Co
4.20). Fue este sentimiento lo que impulsó a Billy Graham, el mayor
evangelista de este siglo, diciendo: "Si Dios quita tu mano de
vida mía, estos labios se convertirán en labios de arcilla ".
Después de años de obra misional, John Wesley fue
solo un cristiano nominal. Se convirtió el 24 de mayo de 1738
en un culto moravo en Aldersgate Street de Londres. En eso
el mismo año, deseaba tener una experiencia más profunda con Dios.
El 1 de enero de 1738, él, su hermano Charles Wesley y
George Whitefield, 60 hermanos más, continuaron en oración hasta que
tres de la mañana. Cuando el Espíritu Santo fue derramado
poderosamente, se utilizaron para sacudir Inglaterra y
sacar la iglesia de las cenizas. John Wesley vivió 52 años después de eso.
recubrimiento de energía. A partir de ese día, predicó a grandes
multitudes, en minas de carbón, en plazas y en todas partes

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donde la gente se reunía para escucharlo. Murió el 2 de marzo
1791, pero su vida y su ejemplo inspiran al pueblo de Dios incluso
hoy.
Antes de su ordenación, George Whitefield ayunó y oró por
dos dias. En su primer sermón, 15 personas recibieron poder
convencido del pecado y convertido. Este gigante
predicación al aire libre predicó durante 35 años, de tres a cinco veces
por día para auditorios de 2.000 a 20.000 personas. Muchas veces,
cabalgando por los polvorientos caminos de Inglaterra, cabalgando
su caballo, fue tomado por grandes conmociones. Los torrentes del cielo
cayeron abundantemente sobre él. El rocío celestial moja el
tu alma con unción renovada. El poder del Espíritu lo inundó, y
la gente se agolpaba a escucharlo con gran ternura dondequiera que llegaba
gasse.
Dwight Moody ya se había utilizado mucho en Chicago.
Dos mujeres de la Iglesia Metodista Libre oraron fielmente por él.
Al final del servicio le dijeron: "Estamos orando por ti". Intriga-
él respondió: "¿Por qué no rezas por la gente?" Ellos
luego lo miraron y dijeron: "Porque necesitas poder".
Días después, el Espíritu Santo descendió sobre Moody con poder en
Wall Street, Nueva York. A estas alturas, Moody ya estaba pidiendo
Dios todos los días para llenarte de poder. Después que
Dios derramó su Espíritu y Moody experimentó este derramamiento de
poder, dijo, "No volvería al lugar donde estaba
cuatro años, por todo el dinero del mundo ".
Más que nunca, necesitamos un Pentecostés
Revitalizar la predicación en nuestros púlpitos. Hay púlpitos que
no están dando el pan del cielo a la gente, sino un caldo venenoso y
mortal. Hay pastores predicando otro evangelio, enseñando el
pueblo doctrinas de hombres, intercambiando la Palabra y evadiendo
almas el santo Evangelio de Cristo. Hay otros púlpitos que son
verdaderas becas de beca, pero anunciar a la gente solo
sabiduría humana. Algunos púlpitos se han transformado en balcones
asociaciones comerciales, donde predicadores inescrupulosos venden y venden
compartir las bendiciones de Dios y ocultar el Evangelio de la gente de
gracia. También hay púlpitos que predican la sana doctrina, la ortodoxia
bíblico, pero sin el aceite de la unción. Son púlpitos secos, cuyas
los mensajes son áridos. Los predicadores parecen puestos doctrinales,
de la savia de la vida.
Si no hay unción en el púlpito, habrá muerte en los bancos.
Sin la predicación ungida, los muertos espirituales no resucitarán.
Los sermones no ungidos alimentan la mente, pero no tocan el
corazón. Encienden la cabeza, pero no encienden el corazón.
No necesitamos grandes hombres en el púlpito, sino
necesitamos hombres de Dios. No estamos en necesidad de

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grandes sermones, pero con mensajes llenos del aceite del Espíritu.
No necesitamos erudición, sino unción. Cuando
El espíritu se derrama, incluso hombres rudos como esos
Los pescadores de Galilea trastornan al mundo y atraen multitudes
a los pies de Jesús.
Hoy pasamos más tiempo preocupados por preparar el mensaje
Investigar, leer comentarios y buscar exégesis para
los términos de los idiomas originales. Todo esto es muy
importante. Pero no puedes quedarte ahí. Dios no unge las estructuras
literario. Dios no simplemente unge el mensaje, sino
especialmente el predicador. Jonathan Edwards predicó una tremenda
sermón sobre el tema "Pecadores en manos de un Dios enojado".
Cerca de 500 personas sufrieron tal impacto con el mensaje de que
gemían, lloraban y gritaban, aferrados a los bancos y pilares de la
templo, tomado de una profunda convicción de pecado. Ese mismo
se imprime el sermón. Literalmente podríamos predicarlo, y el
los resultados serían bastante diferentes. La unción no estaba en el mensaje,
pero en el mensajero. El método de Dios es el hombre. Dios unge
hombres, no métodos. Por tanto, necesitamos el poder de
Espíritu Santo para predicar la Palabra con poder y valentía.
Poder para ir hasta los confines de la tierra (Hechos 1.8)
Sin el poder del Espíritu, la iglesia pierde su visión y pasión.
Sin el poder del Espíritu, la iglesia se encoge y pone fondo a su
armas. Sin el poder del Espíritu, la iglesia se intimida y se esconde
dentro de sus cuatro paredes, ya que es más fácil quedarse que irse,
es más cómodo quedarse en el nido que entrar al campo. Solamente
Pentecostés puede dar a la iglesia un sentido de urgencia con respecto a su
misión. Sólo el derramamiento del Espíritu puede apartar la vista del
iglesia misma y levantarlos para ver los campos blancos para el
siega. Solo el poder del Espíritu puede fortalecer la visión de la iglesia
en cuanto a la visión misionera.
Cuando se baña en el aceite del Espíritu, la iglesia comienza a dar
prioridad a las misiones como su tarea más urgente. Ver tres
verdades fundamentales sobre este aspecto:
Las misiones son una tarea imperativa. Cuando Oswald
Smith comenzó su ministerio en la People's Church de Toronto,
Canadá, la iglesia estaba endeudada y financieramente
agitado. Contrario a las expectativas del liderazgo de la iglesia, él
comenzó predicando una serie de mensajes sobre misiones y sobre
la necesidad de que la iglesia invierta principalmente en esta tarea de
consecuencias eternas. El último día de las conferencias,
planteó una gran oferta para las misiones e hizo un desafío a
que la gente se levante en la iglesia como misioneros. Dios hizo
una bendita revolución en la iglesia. Las finanzas se han enderezado. EL

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iglesia ha crecido extraordinariamente y desde entonces cientos de
misioneros fueron apoyados por esa iglesia, que comenzó a
Invertir el 60% de su presupuesto en obra misional. he estado
visitando esta iglesia en Canadá en agosto de 1998 y encontré que
este énfasis permanece hoy. La Biblia dice que quien gane
las almas son sabias (Pr 11.30). Quién invierte en misiones de tesoros
para la eternidad. Quien ama las misiones, ora por las misiones, contribuye
con misiones y hace misiones está en sintonía con el latido del corazón
de Dios.
Las misiones deben ser la prioridad no solo de nuestro
inversiones, sino también de nuestra propia vida. Cuando
preguntó Carlos Studd, quien se fue de Inglaterra y se rindió
de su fama y riqueza para ser misionero en China, India y
África, por qué tanto sacrificio, respondió: "Si Jesús
Cristo es Dios y dio su vida por mí, así que no hay sacrificio.
tan grande que no puedo hacerlo por amor a él ". Cuando el
joven presbiteriana Ashbel Green Simonton, recién graduada de
Seminario de Princeton, Nueva Jersey, hijo de médico y diputado
gobierno federal por dos legislaturas, sintió el llamado de Dios por venir
a Brasil, sus amigos le aconsejaron que abandonara el riesgo
esfuerzo. Muchas iglesias grandes en los Estados Unidos lo querían
como pastor. Estaba acostumbrado a una vida de beneficios. EL
Brasil es un país pobre y muy afectado por enfermedades endémicas.
Pero, a pesar de todos estos factores, respondió: "El lugar
más peligroso para un hombre es totalmente seguro cuando
está en el centro de la voluntad de Dios ". Vino, llegó a Brasil en
12 de agosto de 1859. Durante ocho años ocupó un
ministerio glorioso; plantó la Iglesia Presbiteriana de Brasil y
alcanzó la gloria a la edad de 34 años, pero su vida sigue siendo una fuente de
inspiración para muchos trabajadores. Su vida ardió en el altar de Dios.
Debido a que su ideal era más grande que la vida, dio su vida por su
ideal.
En el último siglo, Alexandre Duff dejó Escocia y fue
a la India. Allí pasó su vida. Allí derramó su corazón. Ahí
hizo arder su alma por Dios en una profunda devoción por la salvación
de los perdidos. Después de estar viejo y cansado, enfermo y con fuerzas
estioladas, regresó a su país para recibir tratamiento médico. también
celebró conferencias misioneras para despertar otras vocaciones
para continuar su trabajo. Una vez, en un
gran auditorio, se dirigió a cientos de jóvenes. Predicó con gran
ardiente. Derramó su corazón en un vehemente llamamiento a los jóvenes,
pidiéndoles que dejen Escocia y se vayan a la India. Para su
sorprendido, ningún joven respondió a la llamada. Estaba tan sorprendido
con la respuesta negativa de la audiencia que tuvo un infarto
en el púlpito y se desmayó. Lo llevaron a una habitación contigua al

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púlpito, le masajearon el pecho y recobró la conciencia. Pidió,
luego, para llevarte de regreso al púlpito para que pudieras
terminar la llamada. Los médicos respondieron que no podía
volver al púlpito. Pero él respondió: "No puedo evitar
Vuelve. Necesito terminar la apelación ". Lo llevaron al púlpito, y el
auditorio lo escuchó con atención. Incluso con una voz temblorosa,
se dirigió a la selecta audiencia con estas palabras: "Jóvenes, si la reina
desde Escocia para convocarlo a cualquier misión diplomática,
en cualquier parte del mundo, irías con orgullo y sin
detención. El Rey de Reyes, el Señor de Señores, el que amaba
usted y murió por usted en la cruz, lo convoca a ir a la India como
embajadores del cielo y no quieres ir. Entonces me iré. Ya
Estoy viejo, cansado y enfermo. Poco puedo hacer, pero al menos
por lo menos morí a orillas del Ganges, y el pueblo indio sabrá que
alguien los amaba y estaba dispuesto a ir con ellos, trayendo las buenas nuevas
de
salvación ". Cuando Alexandre Duff terminó su apelación, el auditorio
estaba llorando. El Espíritu de Dios produjo grandes
quebrantamiento en esa conspicua asamblea, y docenas de
los jóvenes se levantaron para afrontar el reto de ir a la India.
Las misiones también son una tarea intransferible. Solo la iglesia
puede realizar misiones. Esta tarea, Dios no confió a los ángeles
ni a los poderosos de este mundo. Sin organización mundial
por rico y opulento que sea, puedes hacerlo. La iglesia es la
El método de Dios para llegar a todas las naciones hasta los confines de la tierra
Tierra. Debemos hacer misiones por varias razones. Primero a
librarnos de nuestra propia piel. Si nos callamos, seremos vistos como
culpable. Si los impíos mueren en su maldad, sin haber sido
advertido por nosotros, perecerá, pero su sangre será quitada del
Nuestras manos. En segundo lugar, arrebatar a los perdidos del fuego. EL
la ignorancia no es una puerta secundaria para entrar al cielo. OMS
sin ley el pecado, sin ley perecerá. No hay salvación fuera de Cristo.
Dios resolvió salvar al pecador con la locura de la predicación. Pero
¿Cómo van a escuchar sin que alguien les predique? La fe viene al escuchar el
Palabra, pero ¿cómo creerán si no escuchan? Los hombres se van
por la perdición eterna. Necesitamos advertirles de la enorme y seria
peligro en el que se encuentran. Tercero, porque hacer misiones hasta el final
de la tierra es el orden expreso de Jesucristo. No hacer misiones es
desobediencia. No obedecer el mandato de Jesús es rebelión.
Cuarto, debemos cumplir misiones para la gloria de Dios. Cuando
el pecador se arrepiente y cree en el Señor Jesús, recibe la vida eterna,
La gracia de Dios es exaltada y el Dios de toda gracia es glorificado.
Se dice que cuando Jesús terminó su obra de redención
en el mundo, muriendo en la cruz y resucitando de entre los muertos,
regresó a la gloria, siendo recibido apóticamente por los ángeles.
Un ángel se acercó a Jesús y le preguntó: "Señor, tú
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moriste en la cruz por la salvación de los pecadores. Pero quien lo hara
llevar ese mensaje a todo el mundo? "Jesús respondió:" Yo
Dejé a doce hombres en la tierra listos para esta misión ”.
ángel entonces se arriesgó a una segunda pregunta: "Pero, Señor, ¿y si
ellos fallan? "Jesús prontamente respondió:" Si fallan, yo
No tengo otro método ”. Esta misión es nuestra. No es transferible.
Entonces necesitamos el poder del Espíritu para hacerlo.
Las misiones son una tarea imposible. No podemos
omítanos en esta tarea, ya que sería una actitud criminal. No
podemos posponer lo que debe ser nuestra misión más urgente. EL
con cada día que pasa, las puertas se cierran y aparecen otros atajos
para desviar a la gente. Aparecen todos los días, en cada esquina,
nuevas sectas predicando un falso evangelio, otro evangelio,
haciendo que los incautos tomen el camino del error. Doctrinas
satánicos están ganando espacio, ganando terreno,
invadir universidades, entrar en los medios de comunicación frente a
Iglesia. Asistimos en este siglo a la orientalización de
Occidental. El espiritismo con sus múltiples caras es
penetrando en la cultura subyacente de nuestra gente. Los terreiros de
Umbanda crece como hongos en todos los rincones del
nuestra patria. Las sectas herejes ganan terreno cada día. Y
lo peor es que la iglesia duerme mientras el enemigo siembra su
cizaña maldita en medio del campo de trigo de Dios. Necesitamos despertar.
Necesitamos mirar hacia arriba. Necesitamos ver los campos que son
blanco para cosechar. Necesitamos entender que nuestra comida y
nuestra bebida es hacer la voluntad de Dios, y la voluntad de Dios es
que llevemos todo el Evangelio a toda criatura, a todas las naciones,
Hasta el final de la Tierra.
La Primera Iglesia Presbiteriana de Vitória, una comunidad que
pastoreo durante 14 años, tiene el privilegio de participar en el apoyo de
uno de los más grandes misioneros brasileños. El esta en Ghana
África. Es un joven culto, inteligente, fluido, de mente peregrina y
alma sincera. Dejó todas las comodidades de su tierra natal y se fue a
interior de África, se internó en los bosques, cruzó ríos y plantó
tus pies en la aldea de Coni, entre la tribu de los Konkombas,
hechiceros y fetichistas históricos. Allí, en compañía de su
esposa, derramó su alma en ferviente oración por aquellos
almas perdidas. En cinco años de trabajo, visitó lugares
nunca antes logrado, organizó 10 iglesias con alrededor de 2 mil
personas, sacándolas de la más densa oscuridad del pecado. Mismo
sufriendo el impacto de la malaria, no ha perdido su pasión ni su visión.
Al ser hospitalizado por intoxicación por agua, la misión
quien lo envió consideró traerlo de regreso a Brasil,
en definitiva, argumentando que ya había dado su ex-
contribución extraordinaria. Pero a eso respondió: "Yo no

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Estoy pensando en volver, pero quiero seguir, una más
poco, para llegar a otras tribus no alcanzadas ".
Brasil para tratar la tuberculosis ósea, aspira a consagrar
tu vida para llegar a otros pueblos no alcanzados.
En una tribu indígena, un joven se estaba preparando para ser el
qué. Era inteligente, ágil y con un fuerte espíritu de liderazgo.
Su cuerpo atlético y hercúleo lo convertía en la esperanza de todo el mundo.
tribu. Sin embargo, una enfermedad indomable y abrumadora
su fuerza, socavó su vigor y se quitó el brillo de los ojos.
Toda la tribu, en apuros, buscó los recursos disponibles para salvar al
vida del futuro jefe. Pero todo fue en vano. La enfermedad no
se retiró. El joven, entonces, con el cuerpo golpeado por la enfermedad,
ojos perdidos en el infinito y la certeza de la muerte inminente,
se acercó a su anciana madre y le preguntó: "Mami, por
¿A dónde iré cuando muera? ¿Qué será de mi alma? ". La madre
angustiado respondió: "Hijo mío, no lo sé". Pasaron los días y el
joven, ahora con un cuerpo delgado y mirada apagada, ya en el regazo del
mamá, con voz débil, le preguntó: "Mami, me estoy muriendo.
¿A dónde va mi alma? ¿Qué será de mí cuando
morir? ". La madre, llorando, lo apretó contra su pecho y dijo:
"Hijo mío, no lo sé, no lo sé". Los jóvenes, sin resistirse al
enfermedad, murió sin saber a dónde se dirigía. Meses después,
un misionero vino a esa tribu predicando el evangelio,
hablando del cielo, la vida eterna y la seguridad de la salvación.
Mientras el misionero predicaba estas buenas nuevas de salvación,
una anciana salió de una choza, su rostro surcado por
dolor y ojos hinchados por el llanto; ella corrió hacia el
misionero, lo agarró por los brazos, lo sacudió violentamente y
gritó, "¿Por qué no viniste antes? ¿Por qué no viniste?
¿antes? ”. Fue la madre del joven quien murió sin saber a dónde se dirigía.
Es muy frustrante llegar tarde. Es doloroso llegar tarde
demasiado. O llegamos a nuestra generación para Jesús, o bien
habremos fracasado en nuestra misión. Es por eso que necesitamos
del poder, del poder del Espíritu, para salir de nuestro consuelo,
orar por misiones, contribuir misiones y hacer
misiones aquí y al otro lado de la frontera, antes de que sea demasiado tarde.
Poder para experimentar lo extraordinario en la vida diaria (Hechos 3.6)
Los apóstoles no programaron milagros. No marcó
servicios de liberación y curación. No hubo previsibilidad anticipada.
No actuaron como secretarios del Espíritu Santo, tratando de controlar
y manipule su horario. Ellos no anunciaron
señales. No pusieron pancartas anunciando la presencia de hombres
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poderoso. No revelaron sus dones espirituales. A
las cosas sucedieron dentro de la libertad y soberanía del Espíritu.
No volvieron sus ojos de la gente a la iglesia, ni tampoco
pregonando sus propias virtudes. Ponen todo el
foco en Jesús.
Los apóstoles no comercializaron el poder. Ellos no vivieron
fundido en torres de marfil, encaramado en la cima de la fama.
No negociaron ni comercializaron la Palabra. No explorado
que la gente en nombre de la fe. No extorsionaron a los neófitos usando
dispositivos para vender sus productos religiosos. Ellos no forjaron
milagros. Ellos no hicieron trampa. No hicieron ningún escándalo por
llamar la atención sobre sí mismos.
Los apóstoles no usaron dispositivos sombríos para crecer.
No prometieron riqueza, prosperidad y salud. No lo hice
promesas a la gente de beneficios terrenales y temporales, con miras a
atrayendo multitudes. No predicaron un evangelio fácil. Trajeron
en el cuerpo las varas de azotes, la historia de las cárceles y las privaciones
financiero. Su poder no era la opulencia financiera. EL
Su influencia no fue la movilización política. Eran hombres
revestido del poder del Espíritu. Así que Peter pudo decirle al
paralizado: "No tengo ni plata ni oro, pero lo que tengo,
esto les doy: en el nombre de Jesucristo, el Nazareno, ¡anden! ”(Hch 3,6).
El primer milagro fue levantar lo postrado. El espíritu
Santo bajó para levantar al hombre caído.
Necesitamos poder para normalmente tener una vida
extraordinario. Quien vive en el reino de la fe pisa el
milagros. No tenemos que arrastrarnos con los pies en el barro;
podemos tomar vuelos imponentes y vivir en la intimidad de Dios. No
necesitamos vivir de manera mediocre; podemos experimentar el
riquezas insondables del evangelio de Cristo. No necesitamos
vive una vida árida; podemos tener sobre nosotros el rocío del cielo, el
torrentes del Espíritu. No necesitamos vivir una vida vacía;
podemos ser llenos del Espíritu. No necesitamos vivir debilitados y
débiles; tenemos a nuestra disposición la suprema grandeza del poder de
Dios. Es hora de perseguir esa calidad de vida superlativa. ES
tiempo para apropiarse de la vida abundante que Cristo ofrece. ES
tiempo de beber de esa fuente que nunca se seca. Ha llegado el momento de
experimentar el flujo de ríos de agua viva que brotan de nuestro
interior. Podemos entrar en las aguas profundas de ese río. sí el
que Dios tiene para nosotros aquí es lo extraordinario en la vida cotidiana y más
allá
del río, que ningún ojo ha visto, ningún oído ha oído ni jamás
subió al corazón del hombre.

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Capítulo 4
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RESULTADOS DE PENTECOSTE
Ya hemos demostrado que Pentecostés es el resultado de un
promesa del Padre y espera obediente, perseverante y plena
expectativa de una vida poderosa. Pentecostés vino como
resultado de una vida de oración, empoderando a la iglesia con poder
vivir, morir y predicar el Evangelio.
Ahora, mire Pentecostés desde la perspectiva de su
resultados:
1. Pentecostés fue un fenómeno celestial
Pentecostés no fue algo producido, probado, fabricado,
teatralizado. Algo del cielo realmente ha sucedido. Pentecostés
era indiscutible, nadie podía negar su existencia. Estaba
irresistible, nadie pudo detenerlo. Era soberano, nadie podía
producirlo. Fue eficaz, nadie pudo deshacer sus resultados.
Fue único, el Espíritu Santo vino para quedarse para siempre
con la iglesia, como el otro Consolador.
El fenómeno del derramamiento del Espíritu incluyó: 1. Sonido -
No era ruido, ruido, desorden, histeria, sino un sonido
del cielo. Pentecostés fue audible, verificable, público, transpirante
del aposento alto, reverberando su influencia en la sociedad.
Este evento inusual atrajo a la gran multitud que estaba
en Jerusalén para escuchar la Palabra de Dios (Hch 2: 6,6). 2. Viento -
El viento es un símbolo del Espíritu Santo. Hebreo tiene un solo
palabra para viento y aliento. El hombre se convirtió en alma viviente
cuando Dios sopló en tu nariz. Fue el aliento de Dios lo que
te dio la vida. Dios renueva la faz de la tierra, enviando su Espíritu
(SI 104,30). El Espíritu sopló en el valle de los huesos secos y el valle
la vida brotó. Jesús dijo que "el viento sopla por donde quieras, oyes
su voz, pero no sabes de dónde viene ni hacia dónde va ... "(Jo 3.8).
El viento es libre, nadie puede domarlo; sopla donde
Te gustaría. Suele soplar donde nunca soplaríamos y se detiene
soplar donde soplemos con todas nuestras fuerzas. El viento es
soberano, nadie puede resistirle. El viento es misterioso;
nadie sabe de dónde viene ni adónde va. El viento tiene un
voz, nos preocupamos por escucharla y obedecer. 3. Fuego - El Espíritu entró
lenguas como fuego. El fuego también es un símbolo del Espíritu. Fuego
ilumina, porque el que nace del Espíritu no anda en tinieblas. EL
el fuego purifica, quemando todos los escombros que obstruyen las fuentes de
nuestra vida. El fuego se calienta sacándonos de la frialdad espiritual y se infla
Envío nuestro corazón. El fuego se esparce, porque cuando estamos llenos
es imposible que esto se oculte. Cuando estamos
llenos del Espíritu, las personas que nos rodean notan esto
y sufrir el impacto de ese hecho. 4. El fenómeno de las lenguas : la

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personas que estaban llenas del Espíritu comenzaron a hablar en
otros idiomas. No hubo necesidad de interpretación (en
2.8,11), que representa la universalidad del Evangelio.
2. Pentecostés fue un fenómeno que trajo plenitud al
Espíritu Santo para todos
Todos estaban reunidos en el mismo lugar cuando el Espíritu
El Santo fue derramado sobre ellos y todos fueron llenos del Espíritu.
(En 2,4). A partir de ahí, empezaron a tener una calidad de vida.
superlativos y fueron guiados por el Espíritu: 1) El Espíritu llenó el
Pedro, quien predicó consternado ante el Sanedrín (en 4.8). 2)
El Espíritu movió a Felipe, quien dejó el avivamiento en Samaria y
fue al desierto para predicarle al eunuco (Hechos 8.29). 3) El Espíritu
preparó a Pedro para la llegada de los emisarios de Cornélio (En
10.19). 4) El Espíritu ordenó a Pedro que fuera sin dudarlo con
estos emisarios para abrir la puerta del Evangelio a los gentiles (en
11.12). 5) El Espíritu ordenó a la iglesia de Antioquía que se separara
Bernabé y Saulo para la obra misional (Hch 13.1,2). 6) El Espíritu
guió las decisiones del concilio de Jerusalén (Hch 15,28). 7) El
El Espíritu guió a Pablo a hacer misiones en Europa (Hechos 16.6).
Debido a que experimentan continuas efusiones de
Espíritu, los apóstoles enfrentaron con valentía y poder todo el
oposición de las autoridades judías. Ellos aguantaron heroicamente
pestañas No se sintieron intimidados por las amenazas. Ellos no temieron
cárceles ni se retiraron bajo presión. Se enfrentaron con
Constermo a la muerte misma. En todas estas circunstancias
condiciones adversas, salió rebosante de gozo y del Espíritu Santo (En
13,52).
3. Pentecostés provocó diversas reacciones
Cuando el Espíritu de Dios se derrame sobre la iglesia,
produce efectos gloriosos, y las personas que miran el hecho han
diferentes reacciones.
Resumen sin marketing
Hechos 2.5.6 narra el hecho inusual de la multitud presente en
Jerusalén se siente irresistiblemente atraída hacia el lugar donde el
los discípulos estaban reunidos. Esta es una marca indiscutible de
avivamiento genuino: la gente se mueve por su propia
Espíritu de Dios para buscar refugio entre los cristianos. A
la gente es arrastrada con hilos de amor y atraída a un
fuerza irresistible. Todas las barreras están rotas. Todo el
el prejuicio se desmorona. Toda resistencia se desvanece y
multitudes sedientas y necesitadas, con angustia de alma, buscan la
Iglesia. Sin propaganda, sin artificio humano o
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promesas locas para atraer a las masas. Los pecadores corren
vaya a la iglesia y apresuradamente arregle la vida con Dios.
La historia de los avivamientos es prueba de esto. Estaba
así que en el gran despertar espiritual de Inglaterra en el siglo
XVIII. Cuando George Whitefield se levantó para predicar en el
la multitud se empujaba ansiosa por escucharla
mensaje. Cuando John Wesley fue a las minas de carbón, aquellos
los hombres, una vez groseros, lloraron quebrantados por su
predicación. En Gales, en el siglo XVIII, Dios salvó a un
Howell Harris, usando no un sermón, sino la advertencia
Domingo de la Sagrada Comunión. Cuando se convirtió, Howell Harris
no sabía predicar. Meses después de su conversión, recibió
poderosa visitación del Espíritu y desde entonces comenzó a tener
gran pasión por las almas. Aun sin saber predicar, empezó
leyendo libros del evangelio para la gente. La unción de dios cayó
sobre él de tal manera que la gente sufrió un gran impacto
con tus lecturas. Más tarde, este hombre recibió de Dios el
entrenándose para predicar y se convirtió en uno de los más grandes avivadores
ese siglo en tu país. Se hizo elocuente y ungido
predicador. La multitud escuchaba con profundo interés su
predicación, y cientos de personas fueron salvas a través de su
Ministerio.
En el siglo pasado, en el gran avivamiento que arrasó con todos
Estados Unidos, Dios usó tremendamente al abogado
Charles Grandisson Finney. ¿A dónde fue a predicar, Dios?
operado maravillosamente. Corazones derretidos y rodillas
se doblaron ante el Salvador Jesús por su predicación. Cuánto cuesta
a Dwight Moody, ya que estaba revestido con el poder del Espíritu
en Wall Street, Nueva York, cada vez que se levantaba para predicar,
la gente se reunió ansiosa por escucharlo. La Biblia dice de Juan
Bautista que, lleno del Espíritu, era una voz y no un eco, y
que las multitudes salieron de Jerusalén con todo su aparato
religiosos, el sumo sacerdote y los maestros de la ley y se dirigieron a la
desierto para escucharlo. Lo que más importa no es si estamos en un
púlpito de erudito, en una catedral o en un templo con piso de arcilla o
incluso en el desierto. Lo que importa es si nuestro ministerio es
regado por el aceite del Espíritu. Lo que importa es si hay unción en
nuestra vida. No tiene sentido aprender sin poder. No sirve de nada
conocimiento sin unción. No tiene sentido tener cursos y más cursos si
El rocío de Dios no cae sobre nosotros. Nuestros diplomas no pueden
atrae multitudes para escuchar la Palabra. Nuestros títulos no
acreditar tener un ministerio fructífero.
En el año 1904, Dios derramó uno de los más avivamientos
experiencias extraordinarias en la tierra, en el pequeño pueblo de Lagour,
de Gales. Todo empezó cuando el joven Evan Roberts empezó
 Página 51
una reunión de oración en su iglesia. El impetuoso viento del
Espíritu sopló con tal poder sobre esa iglesia que, dentro de
en una semana, toda la ciudad había sido tocada por el poder de Dios.
Las llamas de ese avivamiento se extendieron por todo el país y se extendieron
a otras paradas.
En seis meses, unas 100.000 personas fueron
salvado por Cristo. Las multitudes se apresuraban hacia el
reuniones de oración, alabanza y testimonio. Dios limpió el
sociedad. Las guaridas del pecado se han roto. Los burdeles
cerrado. Los casinos cerraron sus puertas. Los teatros tuvieron que
cancelar sus programas. Los estadios de fútbol estaban vacíos
porque la gente tenía prisa por ir a la iglesia a arreglar sus vidas
con Dios.
Al visitar la Misión Kwa Sizabantu en Sudáfrica y leer el
libros que narran el gran avivamiento que tuvo lugar allí en 1966,
darse cuenta de que tan pronto como Dios derramó el Espíritu sobre la gente
Zulú, que rezaba entre lágrimas pidiendo los torrentes del cielo,
hechiceros de la región comenzaron a venir a la misión, con
profundos sollozos en el alma, en agonía por el peso de su
pecados. Las caravanas venían de todos lados a pie, en coche y en
carrocerías de camiones, porque se sentían irresistiblemente atraídas
por el Espíritu de Dios.
El poder del Espíritu sobre la iglesia tiene el mayor impacto en
las masas que el exterior, que los medios de comunicación, que la mayoría
Propaganda bien elaborada y agresiva. A menudo, la gente
cruzar las calles a diario frente a nuestros templos y ni siquiera
se dan cuenta de que allí adoramos al Dios vivo. Ellos no son tocados
ni atraído. Donde sopla el viento de Dios, donde el fuego de Dios
desciende, la gente cae de rodillas y reconoce que sólo el Señor
y Dios.
Discriminación
"... ¡Mira! ¿No son todos los que están allí, galileos?
hablando? "(Hch 2.7). Esta observación es filtrada por un
magnífica actitud de profunda discriminación. Galilea fue
considerada por los judíos ortodoxos como una tierra pagada. Fue llamado
Galilea de los gentiles, tierra de tinieblas, tierra de malvados,
atrasados, pobres, enfermos y marginados. Por eso Natanael
le dijo a Felipe acerca de Jesús: "Quizás de Nazaret (que está en el
Galilea) ¿puede salir algo bueno? ". Dios llama a las cosas
débiles en este mundo para avergonzar a los fuertes. Llena tu
Espíritu galileo, para revolucionar el mundo con ellos.
Sin embargo, a pesar del prejuicio sobre el origen, lugar de nacimiento,
formación y estatus de quienes hablaban de la grandeza
en
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Dios, no era posible negar la abrumadora realidad de que
algo extraordinario estaba sucediendo. En Pentecostés,
al contrario de lo que sucedió en la Torre de Babel. Allí la gente habló
y hubo confusión de idiomas. En Pentecostés, los creyentes hablaron y
había entendimiento, cada uno en su lengua materna (Hch 2,8,11).
Donde reina el Espíritu de Dios, hay entendimiento y no
confusión.
Escepticismo
"Todos, asombrados y perplejos, se preguntaban unos a otros:
¿Qué significa esto? "(Hechos 2.12). Había dos grupos en Pentecostés:
los que preguntaron (vv. 7,12) y los que afirmaron (v. 13). Había
un grupo escéptico, lleno de dudas, preguntas. Ellos sabían que
algo extraordinario estaba sucediendo, pero no entendieron
no era. Estaban asombrados, perplejos. Formaron un grupo
que no podía creer lo que veía. Hoy también hay muchos escépticos.
Gente que sabe que Dios tiene poder, que nunca cambió, que
hace maravillas hoy como siempre lo ha hecho en el pasado, pero
personas que prefieren asombrarse y perplejo que creer con
sencillez. Personas que hacen todas las preguntas, pero no abren el
corazón por las respuestas de Dios. Gente que cuestiona todo
pero no está dispuesto a obedecer.
Mofa
"Otros, sin embargo, en tono burlón, dijeron: ¡Están borrachos!" (A
2.13). Estos son rápidos para sacar una conclusión,
temerario. Ellos son los que siempre tienen una explicación, aunque
falso. Son los que forman jueces y se posan en el
trono del juicio, solo para criticar acusaciones contundentes
contra sus hermanos. Este grupo subió a la colina del monte Sion,
se acercó al aposento alto, escuchó a los 120 que hablaban de
grandeza de Dios e inmediatamente concluyeron su conclusión: están borrachos,
embriagado.
Para los burladores, los discípulos eran gente atrasada,
descerebrados, discapacitados emocionales, gente sin sabiduría, sin
Materia gris. Dijeron que esas personas que estaban llenas de
El espíritu estaba experimentando catarsis, histeria colectiva,
una paranoia religiosa. Pedro dice (Hechos 2.15) que ese era el
tercera hora del día (nueve de la mañana), pero para los que quieran
calumnia, la inconsistencia no es un problema. La lógica de
la calumnia es siempre la generalidad del mal.
4. Pentecostés abrió el camino a la predicación
confrontativo y poderoso
Uno de los sellos distintivos del avivamiento genuino es la predicación fiel

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de las Escrituras. Pedro, cuando estaba lleno del Espíritu, se levantó para
predicar. No tronó palabras de sabiduría humana. No
habló, enseñando a la multitud solo principios religiosos. Tu
mensaje fue poderoso no por su elocuencia, sino por su
por su contenido, ungido con el aceite del Espíritu.
Una predicación cristocéntrica en su esencia (Hechos 2: 22-36)
El sermón de Pedro sobre Pentecostés tenía cuatro argumentos: 1)
La muerte de Cristo : la cruz no fue un accidente, sino parte del
El plan eterno de Dios (Hechos 2.23; 3.18; 4.28 y 13.29). La cruz no fue
una derrota para Jesús, pero su exaltación. Marchó a
cruza como un rey por tu corazón. Fue en la cruz donde El
Conquistó para nosotros la redención eterna y triunfó sobre el diablo y
sus anfitriones, exponiéndolos al desprecio. Fue en la cruz que Dios
demostró de la manera más elocuente su amor por nosotros y su repudio
pecar. En la cruz, la paz y la justicia se besaron. Cristo no
murió en la cruz como mártir. Él se rindió espontáneamente
para nosotros. La cruz no fue un recurso de última hora, sino un
plan eterno que nos revela la santidad de Dios y su amor
inconmensurable. 2) La resurrección de Cristo (Hechos 2: 24,32) -No
adoramos a un Cristo muerto, vencido, apegado a la cruz, indefenso, pero
el Jesús victorioso, que triunfó sobre la muerte, venció al pecado,
deshizo las obras del diablo, cumplió la ley, satisfizo la justicia de Dios
y nos dio eterna redención. 3) La exaltación de Cristo (Hch 2:33) - Por
consumado su obra aquí en el mundo, Jesús resucitó en gloria y
comisionó a sus discípulos a predicar el Evangelio a lo largo del
mundo, a toda criatura. Luego volvió al cielo, entró en el
gloria, fue recibido apoteóticamente por los ángeles y se sentó a la
diestra del Padre, para gobernar la iglesia, interceder por ella y vestirla
con el poder de tu Espíritu. 4) El señorío de Cristo (Hch 2:36) -
Jesús es dueño, señor y rey de todo y de todos. El ejercita
autoridad suprema sobre nuestra vida. El contenido del mensaje
El de Pedro era Jesús, y solo Jesús. Cuando el Espíritu venga
nosotros con poder, no tenemos otro tema que predicar. El Ministro de
El Espíritu Santo debe exaltar a Jesús (Jn 16:13, 14). Una vida llena de
El Espíritu Santo es una vida centrada en Cristo. El ministerio del Espiritu
es el ministerio de los reflectores. No arroja luz sobre sí mismo. Él
no habla de sí mismo. No se exalta a sí mismo. Proyecta luz
hacia alguien. El Espíritu Santo señala a Jesús y al
exalta.
Predicación eficaz en cuanto al propósito
"Cuando oyeron estas cosas, sus corazones se conmovieron y
preguntaron a Pedro y a los demás apóstoles: ¿Qué haremos?

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hermanos? "(Hch 2:37). La predicación de Pedro explotó como dinamita
de Dios en el corazón de la multitud. Produjo una compulsión a
alma. Fue un sermón desgarrador, ya que los puritanos del
Inglaterra en el siglo XVII. Pedro no esquivó el asunto,
no trató de complacer a la audiencia, no predicó un mensaje
azucarado solo para estimularlos. Puso su dedo sobre la herida,
tocó el punto de tensión. Fue directamente al nervio expuesto de la situación,
diciéndoles que aunque la cruz había sido planeada desde el
por la eternidad, fueron responsables de la muerte de Cristo. "... tú
mataste, crucificándolo con las manos de los impíos "(Hechos 2.23; 3.13; 4.10
y 5.30). Esta predicación directa, valiente y confrontativa generó
en ellos una profunda convicción de pecado. Hoy vemos poca convicción
del pecado en la iglesia de Dios. Ya no sabemos lo que es la agonía
arrepentimiento. Ya no lloramos por el pecado. Guau
El alma ya no se lamenta de ver a la gente correr hacia el fuego de
infierno. Somos demasiado insensibles, con los ojos secos
demasiado, con un corazón demasiado duro. Necesitamos de
quebrantamiento. Necesitamos la predicación cristocéntrica.
Una predicación clara en tus requerimientos
Pedro les respondió: Arrepiéntanse, y cada uno de ustedes
ser bautizado en el nombre de Jesucristo ... "(Hechos 2:38).
estaba destinado a entretener a la audiencia o consolarla. antes de
hablando de curación, reveló su enfermedad a la multitud. Antes de
hablando de la salvación, mostró que estaban perdidos. Antes de
predicar el Evangelio, anunció la ley. No hay salvación sin
arrepentimiento. Nadie entra al cielo sin saber primero que es
pecador. Pedro mostró que la mayor urgencia para el pecador es
cambio de opinión, cambio de corazón y cambio de vida.
Habló con un grupo extremadamente religioso. Jerusalén fue el
capital mundial de la religión. Toda esa gente había ido a
Jerusalén para una fiesta religiosa. Pedro demuestra, por tanto, que
solo sé religioso. Pero también demuestra que no es suficiente
cambia tu religión, tienes que cambiar tu vida. El grito de Dios que
ecos del cielo para todos es: ¡Arrepentíos!
Hoy hemos visto un cambio preocupante en la predicación.
Se ha predicado mucho sobre la liberación y casi nada sobre
arrepentimiento. Los predicadores gritan desde los púlpitos diciendo que
la gente sufre porque tiene la espalda, el ojo mal,
con espíritus malignos. Dicen que lo que necesitan es ser
publicado. Pero esta es solo la mitad de la predicación. Aunque el
persona está realmente poseída y liberada, su problema
no se resuelve. Todos han pecado. Todo el mundo carece de la gloria de
Dios. Todos deben arrepentirse. El hombre es culpable, no es
sólo una víctima. Necesita poner su boca en el polvo. Necesitar

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depongan sus armas. Debes inclinarte ante Dios. Sin
arrepentimiento, el más virtuoso de los hombres no puede ser salvo.
El pecado no es solo una cuestión de lo que hacemos, sino de quién
son. No somos pecadores porque pecamos, pero pecamos
porque somos pecadores. Nuestra naturaleza es pecadora. La savia
que corre por nuestras venas está contaminado por el veneno del
pecado. Nuestro corazón no es bueno como pensaba Jean-Jacques
Rousseau, pero engañoso y desesperadamente corrupto. No
somos neutrales como enseñó John Locke; somos seres caídos y
tendiendo al mal. Necesitamos el viento impetuoso del Espíritu y el
fuego del cielo para predicar con poder el mensaje urgente de
arrepentimiento.
Una predicación específica sobre la promesa
Hechos 2.38 habla de dos promesas para aquellos que se arrepientan:
uno está vinculado al pasado y el otro al futuro: "... para la remisión
de tus pecados, y recibirás el don del Espíritu Santo ".
del arrepentimiento hay "remisión de pecados", perdón y salvación.
Pedro está mostrando que, sin perdón, sin purificación,
hay una plenitud del Espíritu para nosotros. Pero, despues de que estemos
perdonados, estamos preparados para recibir "el don del Espíritu
"Después del derecho a vivir con Dios, hay una efusión de
Espíritu. Primero, preparamos el camino del Señor, aterrizamos
los valles, nivelar las colinas, enderezar los caminos tortuosos y
aplanamos la sarna; entonces Dios se manifiesta en todos sus
brillantez, trayendo salvación. Primero, la gente se vuelve a Dios en
todo el corazón, con llanto, ayuno, desgarro del corazón; entonces el
El espíritu se derrama (Jl 2.12,13,28). Primero, restauramos el
altar del Señor que está en ruinas, colocamos sobre el altar el
nuestra ofrenda, entonces el fuego de Dios desciende (I Rs 18: 30-39).
Predicación victoriosa en cuanto a los resultados.
"Entonces los que aceptaron la palabra fueron bautizados,
con un aumento ese día de casi tres mil personas "(En
2,41). Cuando la predicación es bañada por el rocío del Espíritu,
produce abundantes frutos. Donde el Espíritu se derrama, hay
abundantes conversiones. Gente muerta en crímenes y pecados
renacen de por vida como sauces por las corrientes de
aguas (Is 44,4). Una de las cosas que marcó profundamente
mi vida fue contemplar el vigor y la exuberancia de la Iglesia
Presbiteriano de Corea del Sur. Esa iglesia es 28 años más joven
que la Iglesia Presbiteriana de Brasil, a la que pertenezco. Hoy el
La Iglesia Presbiteriana de Corea del Sur tiene 10 millones de miembros,
y aún no hemos llegado a 500 mil. Representan el 23% de la
Población coreana, y nosotros sólo el 0,3% de la población brasileña.

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Representan el 75% de los evangélicos del país, y nosotros, un
rebanada pequeña. No podemos explicar la razón de este poderoso
crecimiento si no es por la acción poderosa y soberana del Espíritu Santo.
derramado sobre esa iglesia.
La predicación de Pedro no solo produjo abundantes conversiones
antes, pero también frutos permanentes. Aquellos creyentes que
fueron bautizados hicieron una alianza con la iglesia. Ellos no eran
creyentes flotantes, colibríes, sin raíces y sin compromiso.
Se comprometieron, permanecieron en comunión con un
calidad de vida superlativa (Hechos 2.42-46). Hoy estamos viviendo
la era de la desinstitucionalización. La gente no apoya
estructuras. No quieren compromiso. No hagas alianzas
perdurable. No plantan raíces. Hoy es difícil mantenerse al día con el rol
de los miembros de la iglesia. La gente entra por la puerta principal y,
ante el signo de la más mínima crisis, buscan un escape por la puerta trasera.
Beben de diversas fuentes, buscan alimentos de diversas fuentes.
pastos, se colocan bajo el personal de varios pastores.
Se convierten en ovejas errantes, sin redil, sin referencia, sin
denominación, sin raíces. Y, por no estar establecidos, se juegan
de lado a lado, con los vientos de la doctrina. Son
creyentes que viven buscando experiencias, van tras la última
novedad religiosa y terminan decepcionados. La marca de
Pentecostés fue otra muy distinta. Aquellos nuevos creyentes permanecieron en
doctrina de los apóstoles. Se unieron a la iglesia de verdad. Algunos
hoy dicen que la iglesia no es importante. Eso no es verdad. EL
la iglesia importa mucho. Ella es la novia del Cordero. Es el esclavo
rescatados. No hay ningún miembro fuera del cuerpo. Una brasa fuera del
el brasero se apaga. Estar fuera de la iglesia es ser considerado gentil y
publicano. El verdadero avivamiento no disminuye el valor de la iglesia,
pero lleva a nuevos conversos a comprometerse con él.
5. Pentecostés produjo profundos cambios en la sociedad
El avivamiento genuino reverbera su influencia más allá
límites de la iglesia. El avivamiento bíblico rezuma y transpira
fuera de las puertas de la iglesia y produce impacto y cambios
profundo en la sociedad. Stanley Jones, reconocido misionero y
escritor ilustrado, enumera en su libro El Cristo de todos
Camina varios cambios que Pentecostés produjo en la iglesia y
en sociedad. Brevemente, quiero comentar algunos de estos
cambios:
En Pentecostés, la religión se separó de lugares especialmente
dedicado al culto y centrado en un lugar universal de vida, el hogar (Hechos
2,42-46)

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Después de Pentecostés, la religión ya no estaba vinculada a
lugares sagrados para penetrar en el tejido de la vida. El hogar, el lugar
más común, más universal, debe ser el lugar más sagrado, un
Betel real, casa de Dios. Nuestro hogar debe ser un templo del
Dios vivo, donde se encuentra una iglesia santa, amorosa y plena
de poder.
A menudo ponemos la religión en un día sagrado: el
Domingo; o, en un lugar sagrado: la iglesia; y ahí la dejamos
embalsamado. Pentecostés puso la religión en los hogares. La vida
todos deben elevarse al nivel de lo sagrado. La religión de los templos no es
nos salvará si los hogares están lejos de Dios. Todo en nuestro
la vida debe ser derramada por lo sagrado.
La iglesia primitiva se reunía en los hogares. La iglesia creció y
dominó todos los rincones del imperio romano, reuniéndose desde casa
en casa. La vida familiar fue litúrgica. No hubo dicotomía entre el
templo y hogar, entre iglesia y familia. En casa, la iglesia disfrutó
mayor comunión. En casa, la iglesia estaba más cerca de la gente.
para evangelizarlos y ayudarlos. La casa era la sede de
iglesia, la cabeza de puente para que ella alcance el mundo para Jesús.
Cuando la iglesia se reúne en los hogares, las familias se vuelven
no sólo el mayor objetivo de la evangelización, sino también su
instrumento eficaz.
Es triste observar hoy la gran brecha entre lo que
la gente está en la iglesia y lo que está dentro de la casa. Una vez,
dando un seminario a parejas, leí una nota anónima de un
esposa: "Mi esposo ora en la iglesia una hora al día, pero cuando
llega a casa es un caballo ”. Hay gente que es como Naamán;
tienen fama y prestigio, pero cuando llegan a casa y se llevan
ropa, revelan su lepra. Hay gente que es
bendición en la iglesia y maldición en casa. Levantan la mano en
alabanza de la iglesia, y en casa la mano desciende sobre la esposa y los hijos.
Pentecostés vino a construir un puente entre el templo y el
hogar, entre la iglesia y la familia, haciendo del hogar el centro de la religión
Cristiano.
El Espíritu Santo liberó a la religión de la idea de una clase.
sagrado (Hechos 1.14 y 2.4)
El Espíritu Santo no solo vino a los 12 apóstoles,
sino por los 120 discípulos que estaban reunidos. No hay
estratificación del poder en el Reino de Dios. No hay aristocracia
espiritual en la iglesia. No hay casta sagrada superior,
beatificado, encaramado sobre privilegios especiales. No hay
jerarquía espiritual en la iglesia. No hay clero ni laicado. EL
El poder espiritual no es posesión de una casta sagrada. Todos los
Los cristianos fueron constituidos como un sacerdocio real. Pedro y María no son

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mejor que los otros miembros. No recibieron más de
Espíritu que otros. No hay lugar para el estrellato en el Reino de
Dios. No hay lugar para afirmaciones orgullosas. Todos en la iglesia
están nivelados al mismo nivel: todos son siervos de Cristo. EL
quien quiera ser el más grande debe ser el servidor de todos. Los apóstoles, lejos
para buscar el aplauso del mundo, se consideraban los
mundo, la escoria de todos (I Cor 4: 12-16). Jesús mismo no vino
para ser servido, pero para servir. Él, siendo Dios, se hizo hombre;
siendo rico, se hizo pobre; siendo santo, se hizo pecado; siendo
bendito, hubo una maldición; siendo trascendente, se vació; siendo
Padre de la eternidad, entró en la historia; siendo todopoderoso, acostado
en un manje-doura; siendo el autor de la vida, murió en una cruz
para salvarnos.
En Pentecostés, las mujeres reciben el Espíritu Santo en
las mismas condiciones que los hombres (Hechos 1.14; 2.1.4.17)
En Pentecostés, el Lugar Santísimo estaba abierto a
mujeres, y la religión se ha liberado de la idea de la superioridad de
sexo. Llegó la promesa del Padre del derramamiento del Espíritu
hijos e hijas, sobre sirvientes y sirvientes (Jl 2.28-30). No más
prejuicios. Los grilletes de la tiranía han sido rotos por el poder
del Espíritu, porque donde está el Espíritu del Señor, hay libertad.
Cuando se derramó el Espíritu, había varios entre el grupo
mujer. También fueron llenos del Espíritu. Ellos también
recibió el don del Espíritu. No han sido discriminados
excluido. También fueron empoderados. Pentecostés
enfatiza la dignidad que Dios siempre ha dado a la mujer. Durante el
siglos, las mujeres han sido despojadas de sus derechos, degradadas en su
honor y despojado de tu dignidad como persona. Un sistema
opresor aplastaba a la mujer. Ella perdió su identidad, su
valor, tu voz. Simplemente se convirtió en propiedad del padre,
cuando está soltero y marido, cuando está casado. No tenia derecho a
herencia familiar. No tenía derecho a la ciudadanía plena. Hasta
incluso sus sentimientos fueron degradados. Entonces la mujer estaba
víctima de prejuicios abrumadores en todas las civilizaciones mientras
a través de la historia.
Pero ese nunca fue el propósito de Dios, quien siempre honró
la mujer. Estaba hecho de una obra maestra mejorada. no Dios
puso su mano sobre la arcilla para formarlo, pero lo hizo con la costilla de
Adán. Dios no lo hizo superior ni inferior al hombre, porque
no lo tomó de la cabeza o los pies de Adam, sino de su costilla,
para que sea compañera co-igual, amada, apoyada,
el centro de tus afectos. Cuando formó al hombre a su imagen
y semejanza, Dios los hizo hombre y mujer. La mujer fue entregada a
hombre como carne de su carne y hueso de sus huesos, por lo tanto

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de ninguna manera inferior. La mujer le fue entregada al hombre como
compañera
adecuado, es decir, como el que mira a los ojos, que está en el
mismo nivel. La diferencia de roles y funciones en el matrimonio.
hace al hombre superior o inferior a la mujer. El hombre no
tiene más derechos que las mujeres. Fidelidad conyugal que
mujer le debe a su marido en matrimonio, el marido tambin le debe
mujer. No existe un código de conducta para la mujer y otro
para el hombre. Los principios de Dios ya no son suaves para el
más rígido para las mujeres. En Cristo, hombre y mujer
son uno, tienen los mismos derechos y las mismas responsabilidades.
Pentecostés vino a puntuar esta verdad de una manera gloriosa. A
iglesia de Dios la mujer tiene espacio, tiene tiempo y tiene voz. Incluso en
Antiguo Testamento, vemos a Dios usando en una posición prominente
en el liderazgo mujeres como Débora y Ester. Las mujeres
siguió y apoyó el ministerio de Jesús. Participo en el
ministerio de los apóstoles. En la iglesia primitiva hubo profetisas. A
Las mujeres siempre han sido un brazo fuerte y un pilar en la iglesia de
Dios. Las mujeres siempre han brindado apoyo en la familia.
Siempre hicieron que las cosas sucedieran, basadas en la gracia de Dios.
Pentecostés vino de nuevo para decir alto y claro que
las mujeres pueden y deben ser llenas del Espíritu para ejercer una
obra gloriosa en el Reino de Dios.
En Pentecostés, la religión se liberó de la dependencia de
familias privilegiadas (Hechos 1.14)
El hecho de que María fuera la madre de Jesús no la distingue del grupo.
No hay aristocracia espiritual, jerarquía, beatificación o
canonización en el Reino de Dios. Todos somos iguales a los ojos de
Creador. Todos somos sacerdotes reales. Todos tenemos acceso gratuito a
su presencia, porque el velo se rasgó y ahora podemos entrar con
denuedo, por Jesús, en el Santísimo.
María no honra a quienes la colocan en un pedestal que
ni ella ni las Escrituras lo revelan. María era una sirvienta del
Señor que estuvo dispuesto a hacer e hizo la voluntad de Dios. Ella era la madre
de nuestro Salvador. Pero no estaba inmaculado, es decir, sin
pecado, porque todos los que nacieron de la simiente de Adán han pecado
y les falta la gloria de Dios. Ella no es madre de Dios, porque Jesús,
como Dios, nunca comenzó. Como Dios, no fue creado,
pero es el Creador. Como Dios, no nació a tiempo, pero es el
Padre de la eternidad. María fue la madre de la naturaleza humana de Cristo,
porque Jesucristo tuvo una doble naturaleza, una divina, otra
humano. María no es mediadora, porque Jesucristo es el único
mediador entre Dios y los hombres (I Tim 2.5). María no es
coredendora, porque solo hay salvación en el nombre de Jesús (Hechos 4:12). EL
Pentecostés vino a mostrarnos la verdad de que María, aunque

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bendecido y digno de ser imitado por tu fe, humildad y
conducta impecable, no es superior a ninguno de los discípulos de
Cristo, porque recibió del mismo Espíritu, en la misma proporción que
los demás en el día de Pentecostés.
Pentecostés liberó a la religión de la idea de una era sagrada
(Hechos 2.17)
"Tus jóvenes tendrán visiones y tus viejos soñarán" (En
2.17). En la mayoría de las religiones, especialmente en las religiones.
Los orientales, los ancianos siempre han sido una clase sagrada. Pero,
en Pentecostés, todas las edades están al mismo nivel. No hay
conflicto generacional. No hay conservadurismo ni renovacionismo
inconsecuente. El Espíritu de Dios no tiene prejuicios de edad.
Los ancianos pueden ser llenos del Espíritu y soñar grandes sueños
Dios. El joven puede tener grandes visiones de la obra de Dios. El viejo
pueden tener vigor, y los jóvenes pueden tener sabiduría, cuando están llenos
del Espíritu. El anciano puede tener dulzura y el joven puede tener dulzura
discernimiento bajo la unción del Espíritu. Donde el Espíritu de Dios
opera, viejos y jóvenes tienen el mismo lenguaje, el mismo ideal, el
misma pasión y el mismo propósito.
Al dejar de lado los principios de Dios, el mundo occidental
está presenciando uno de los mayores desastres de la historia, como un
terremoto abrumador, rompiendo con la familia: el conflicto de
generaciones. Es la guerra entre padres e hijos. Es la falta de dialogo,
comprensión y comunicación eficaz. Los padres no tienen tiempo para
niños, y los niños no entienden a los padres. Los padres persiguen
dinero, y los niños quedan huérfanos por sus padres. En muchos países,
las iglesias están vacías de jóvenes. Por este abismo de
comunicación entre padres e hijos, las iglesias buscan
tu. Pero Pentecostés vino a mostrar que el lugar del joven
disfrutar de la plenitud de la vida no está en el mundo, sino en la casa de
Dios, en el altar de Dios, porque puede ser lleno del Espíritu y ser usado
con gran poder en la obra de Dios.
Pentecostés desenreda la religión de las posturas sagradas
(Hechos 2.2)
En Pentecostés, los 120 se reunieron esperando la promesa de
Pai estaba en la posición más universal: sentada. Ni
incluso arrodillados estaban. Muchas religiones, como el hinduismo,
predican posiciones sagradas como el yoga. Pero el espiritu de dios
llegó a decir que todas las posturas son sagradas. Dios mira
corazón. No le impresionan nuestros gestos ni
nuestras pomposas formas de culto. Entonces Jesús rompió algunos
Protocolos. Oró con los ojos abiertos. Comí sin lavarme las manos.
Habló con personas marginadas. Se curó el sábado. Él no

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estaba preocupado por la forma, porque lo que le importa a Dios es la
motivación, corazón, sinceridad. En la religión de Pentecostés
está desvinculado del ritualismo y el ceremonialismo. Dios busca
adoradores que lo adoran en espíritu y en verdad. Dios quiere es el
verdad en el interior.
Pentecostés vino a mostrar que el poder que el hombre
la necesidad no viene de adentro, sino de arriba (Hechos 2.2-4)
¿Qué pasó allí en el Cenáculo, el viento impetuoso, las líneas
aguas ardientes, el derramamiento del Espíritu, no fueron experiencias
subjetivo. Esas cosas extraordinarias no vinieron de adentro
de la gente que estaba reunida pero que venía de lo alto. A
Las religiones orientales, la Nueva Era, la Confesión Positiva dicen que el
el hombre tiene poder, y su necesidad es despertar ese poder
latente dentro de ella. El humanismo predica que el hombre es suyo
Dios mismo. Budismo, auge en Brasil
(Revista Isto É, marzo / 97), predica que el poder de ese hombre
la necesidad viene de adentro. Pero Pentecostés muestra que el poder de
lo que necesitamos viene de arriba, del cielo, del trono de Dios.
Pentecostés vino a liberarnos del trauma del fracaso
pasado (Hechos 1.4,5)
Jerusalén sería el último lugar donde los apóstoles quisieran
quedarse. Allí cayeron. Allí fallaron. Pero es de ahi
que Jesús quiere restaurarlos. Donde caíste es lo que Jesús quiere
ponerte de pie por el poder del Espíritu Santo. Pentecostés
da fuerza no para escapar de los problemas, sino para afrontarlos y
vencelos en la fuerza del Espíritu. Sin Pentecostés nuestra tendencia
es huir, no quedarse. Pentecostés dice que necesitas poder
para cambiar, no cobardía para huir.
Es más fácil escapar que enfrentarse. Es más cómodo de apilar
armas y dejar de luchar. Es más seguro estar encerrado dentro
con cuatro paredes, aunque tenga miedo, que salir a la
trincheras de lucha. Sin energía, nos acobardamos. Sin el
unción de Dios, somos un montón de cobardes. Sin revestimiento
del poder, la iglesia se retira como el ejército de Saúl ante Goliat.
Sin el poder del cielo, nos estremecemos ante el infierno y
no nos preocupamos por el diablo. Sin Pentecostés, el
la ultima palabra de nuestra vida es fracaso, es la caída, es vergüenza
derrota. Pero, cuando el Espíritu se derrama sobre nosotros,
nos volvimos valientes como David ante Goliat. Cuando dios
nos sopla el soplo de su Espíritu, reaccionamos con optimismo
ante circunstancias adversas, como el mismo David en
Ziclague (I Sm 30.6), y salimos a luchar, aferrándonos a las promesas de
Dios para triunfar sobre nuestros enemigos y recuperar todo

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lo que Dios nos ha dado. Cuando el aceite de Dios fluya sobre el
nuestras cabezas, ni látigos, ni cadenas, ni cárceles, ni
la muerte misma puede detenernos. La iglesia de hoy necesita urgentemente
esta visitación del Espíritu Santo, este derramamiento de los torrentes del
cielo, esta cubierta de poder, este Pentecostés cuyo fuego
nunca se apaga, para salir de su estancamiento, para levantarse de su
desaliento, para curar su esterilidad y para ir a la
confines de la tierra, haciendo discípulos de todas las naciones.
CONCLUSIÓN
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En Juan 7:39, después de que Jesús dice que los ríos de agua viva
fluyen del interior de todo aquel que cree en él, según
Escritura, deja en claro que el Espritu todava no haba sido
dado, porque Jesús aún no había sido glorificado, es decir,
aún no estaba en el trono de su gloria. Una cosa
impide recibir la plenitud del Espíritu Santo: es Jesús no siendo
en el trono de nuestra vida. Cuando Jesús asciende al trono de nuestro
vida, el Espíritu desciende sobre nosotros abundante, poderosamente.
Pero, muchas veces, otras cosas están tomando este lugar.
Pedimos la plenitud y la llenura del Espíritu, pero estamos
obstruido por el pecado. A menudo somos como los pozos que
Isaac cavó en la tierra de los filisteos. Allí había agua limpia y buena,
pero los filisteos cavaron sus pozos en la tierra, y el agua se detuvo
efusivo. Si queremos ver una fuente que
Saltará a la vida eterna si queremos experimentar los ríos de
agua viva que fluye desde el interior, tenemos que sacarla del interior
de nosotros todos los escombros del pecado y toda la basura de la
impureza. antes de
Elías subió a la cima del monte Carmelo, tenía la
camino de Israel los profetas de Baal y los profetas del post-ídolo.
Antes de que caiga la lluvia, Baal debe ser removido. Antes de dejar caer el
fuego, el altar necesita ser restaurado. Antes de que Jacob subiera a
Bethi, Dios te ordenó que arrojes los ídolos, laves
manos y purificar las prendas. El agua solo cae sobre los sedientos. A
los torrentes solo descienden en tierra firme. El Espíritu solo se derrama
sobre aquellos que se atreven a enderezar su vida con Dios.
Veo en el profeta Elías un modelo inspirador para guiarnos hacia
esta búsqueda incesante, incansable, vigilante e intrusiva del poder
del cielo. Vivió en una época de crisis y apostasía. Pero la marca
El rasgo distintivo de su vida fue vivir en la presencia de Dios, experimentar
el cuidado de Dios y ser usado por el poder de lo alto. En la cima de
monte Carmelo desafió a los profetas de Baal, se burló de ellos y
de tu dios indefenso. Llamó a la multitud apóstata a sí mismo,
restauró el altar e invocó a Dios. El fuego de Dios cayó del cielo y
el pueblo cayó de rodillas ante el Señor. Pero Elias no es
estaba contento con mostrarle a la gente el poder de Dios. Elías quería
buscamos tiempos de restauración para el pueblo. La tierra tenía hambre.
La sequía de tres años y medio había devastado todo en Israel y
dejó un rastro de muerte. Elijah, entonces, aunque era un hombre
similar a nosotros, bombardeó el cielo de modo que torrentes de
Dios descienda e inunde la tierra de vida. En esta subida, él
tomó seis pasos decisivos antes de que llegara la bendición. Primero,
escuchó el sonido de una lluvia abundante: el cielo estaba despejado, no
no había rastro de lluvia, pero por fe previó la
proximidad a la lluvia. No fue guiado por
circunstancias. Vivió por fe. Creía incondicionalmente en

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La promesa de Dios de enviar lluvia sobre la tierra. Según él
subió a la cumbre del Monte Carmelo - Subir requiere esfuerzo. Subir,
no se puede llevar peso inútil. Elías estaba decidido a subir
a la presencia de Dios. Caminaba en dirección a la bendición. Tercero,
se inclinó y puso la cara entre las rodillas; Elías no lo hizo.
subí a mirar a los demás de arriba a abajo, para saltar
alto cerca de los demás. No subió a tirar piedras a los demás allí
arriba. Subió para agacharse, para humillarse, para
derrama tu alma delante de Dios. El camino de la victoria pasa
por la puerta de la humillación. Cuarto, oró: Elías no subió a
trompeta sus cualidades y las miserias del pueblo. Subió a
busca el rostro de Dios. Dios no busca críticos, sino
intercesores, personas que se ponen en la brecha a favor de su
personas. Dios no solo busca a quienes señalan los errores de la gente,
pero quien llora y se lamenta por esta gente. Quinto, Elías perseveró
en la oración - no dejó de orar, porque su petición no fue
diferido de la primera a la sexta vez. Continu orando hasta
que la séptima vez sucedió algo. Si queremos un avivamiento
para nuestra vida, nuestra iglesia y nuestra nación, necesitamos
persevera en la oración. Necesitamos tener fe para no rendirnos en el medio
del camino, para no enjaezar las armas en el umbral de la bendición. En
sexto y último lugar, Elías vio una pequeña señal y creyó - Porque
que vive en la presencia de Dios y tiene un corazón alimentado por
fe, una pequeña señal representa una gran respuesta y
termina en una abundante bendición. Elías creyó, y la lluvia
ha llegado. Elías creyó y los torrentes cayeron. Elías creyó e Israel
Sabía que solo Dios puede abrir las compuertas del cielo.
Oh, necesitamos confrontar el pecado y restaurar el altar de
nuestras vidas para que el fuego purificador de Dios encienda nuestra
¡corazón! Necesitamos subir a la presencia de Dios con humildad y
ora hasta que vengan tiempos de recobro del Señor
¡sobre nosotros!