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No hay dos palabras que sean más dañinas en nuestro idioma que "bien hecho” buen

trabajo" “encaraste”
Nos deseamos suerte
nos habíamos divertido
hasta el hartazgo
Cruzamos veredas
y seguíamos de largo
Hay un nítido vicio
en el vacío de los espacios...
Ahora lo entiendo
a dos metros de distancia
de cada persona
todo el tiempo
Siento el pecho caliente
y es el intento en vano de reencontrarnos en el
hotel Esplendor
Caminando de la mano
por el pasillo sencillo y silencioso
No creo que te
equivoques de nuevo
No hay que regresar aquí nunca, porque nunca sería tan divertido
como hoy
Y no volvimos y no hicimos
lo que quisimos nunca más
Ahora hablás en francés en Montpellier a 10km
del mar mediterráneo
Flasheando bucear
con los corales más brillantes
Y eso que vi tus ojos brillar al partir
pero que nunca miraron para atrás
en medio de ese AirPort
La mejor jugada del diablo fue convencer al mundo
de que no existía
Y ahora toda mi táctica y estrategia es reconocer que no visto de santo
y estoy acumulando
cartas rotas
Que para qué
Para que vengan
de nuevo las olas del verano
y me emparche de
vermouth barato
Y convoque a una reunión de todos los deshuasaderos de mi corazón
Y empiece a reconstruir lo que nunca se pudo reparar
Y despertarme al otro día diciendo nuevamente
Buenos días… y por si no
volvemos a vernos:
buenos días,
buenas tardes
y buenas noches
Por debajo de las pestañas me pregunto
Donde pusiste los zapatos
donde pusiste los pies
Donde pusiste la costumbre
Donde pusiste la miel

Como en un álbum de
diapositivas instantáneas

ritual de irse a la cama


a la ducha
al sillón
a la compu
al teatro
a la máquina expendedora
El eau de toilette barato que me echan
en la barbería
las canciones que vienen del
segundo piso
el descubrimiento de las sexualidades
la enfermedad del padre
las imágenes de
la infancia
todas
dejan paso al hastío
pero bajo un velo de
pudor
en el pasto seco
la flor
de esas violetas y chiquititas
que se arrancan porque si
en las que se adivina
ternura no confesada
traicionada
por la indiferencia
la crueldad de
las palabras
son los afectos
Los Street Writers
llegan temprano
temprano es a tiempo
a tiempo es tarde
y tarde inaceptable
Pobre y sexy Neruda y otros más...
obvio que vinieron versos más tristes esa y la otra y la otra y la otra noche
Y el hedor del amor
a las seis de la mañana
y disparos de cerveza helada
en medio del corazón
No hay miradas para ‘el público en general’ y es obvio que ya escribimos versos más
tristes que esta noche y aquella y la otra, avisale a Neruda por favor, que ya no se
complique por eso. Recibimos una linterna en la mano e hicimos una lámpara para
adornar nuestro cuarto. La vida puede convertirse de una manera estúpida en un gran
infierno con tanta competencia sorda, con tanto silencio suelto. ¿Vos pagás el café? El
mundo no es un lugar mucho mejor pero hay que intentarlo me decías y yo te veía con un
cisne entre tus brazos caminando por los teatros de Saturno ? mientras te olvidás de toda
pero de toda la literatura orquestal de la A a la Z. No hay música para este momento.
¿Cómo hacen el amor los que no bailan? ¿Tocan el pasto por lo menos? Se quedan en un
capricho melancólico, criaturas extraordinarias con dependencia emocional y gustos
adquiridos. Nuestro San Sebastián tiene incrustadas flechas de juguete con las puntas de
goma. Solo después del 900 surgen las formas más bohemias y rebeldes en los cafés del
centro y su expresión son susurros a los papeles. Muchos autores casuales. “El emputo
mundo” en el que vivimos, siempre es lunes de noche. Por favor no me dejes se dicen los
que se dicen cualquier cosa en cualquier caso con el sabor del té todavía en los labios. --

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