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Título del Articulo: Dinero Electrónico y Política Monetaria.

Una primera
aproximación
Autor: Maximir Álvarez
Fecha de arbitraje: 13 de junio de 2002
Edición correspondiente (Publicación): Junio-diciembre 2002
Revista: Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura
Locación: Universidad Central de Venezuela. Caracas, Venezuela.
Síntesis Por: Estefany Marcano, Jesús Rojas

Dinero Electrónico y Política Monetaria. Una primera aproximación


Personalmente hablando, las innovaciones tecnológicas arrastran gran
cantidad de dudas y preocupaciones por la increíble facilidad que poseen para
automatizar y agilizar procesos, características por las cuales son reconocidas en
todas partes del mundo. Básicamente, esas inseguridades estarían representadas
por la típica desconfianza a lo desconocido y en un mundo que va evolucionando
constantemente es normal experimentar tal incertidumbre. Las nuevas tecnologías
se apoderan cada día más del mercado, de la vida de las personas, empresas e
inclusive del país, afectando positiva o negativamente procesos cotidianos, como;
por ejemplo; las operaciones comerciales y financieras. Para nadie es un secreto
que las innovaciones tecnológicas serían capaces de desarrollarse dentro del
ámbito económico, es decir, esa idea no estaba para nada alejada de la realidad,
puesto que con el auge que estaba tomando el dinero electrónico en diversos
países del mundo (Según una encuesta realizada por el Banco de Pagos
Internacionales) era de esperarse que para los años venideros se desenvolviera
con más regularidad, como actualmente ocurre, e inclusive llegando tener otra
variante parecida como lo es el Dinero Digital. Sin embargo, no todos los países
poseían los sistemas adecuados para la circulación del mismo, o poseían planes
piloto para su desenvolvimiento, pero aun así se estaba premeditando lo que
pudiese llegar a ocurrir si el dinero electrónico no estuviese regulado por alguna
entidad como un Banco Central.
El articulo expresa a lo largo de su desarrollo una visión preocupante, pero
no cerrada, con respecto a la llegada del dinero electrónico y su influencia sobre
las operaciones financieras. La idea que se tenía respecto a la introducción del
dinero electrónico de lleno en el mercado era que representaba un riesgo que
originaría consecuencias negativas para las políticas monetarias. Para el año 2000
la visión que se tenía en América Latina y el Caribe respecto al dinero digital no
estaba del todo clara, puesto que al ser un concepto nuevo e innovador acarreaba
muchas interrogantes en cuanto a su funcionalidad, englobando a gran cantidad
de operaciones financieras relacionadas a tarjetas de crédito, compras vía
internet, monederos electrónicos, PayPal y Citi2Pay e inclusive se vislumbraba la
creación de dinero que estuviese fuera de control de las jurisdicciones del estado y
donde este solo tendría un papel supervisor y ante dichas operaciones.
Según encuestas del BIS, muchos países, en su mayoría de América Latina
y el Caribe manifestaron el poco e incluso nulo desarrollo del dinero electrónico.
Esto se podría justificar por la poca profundidad en sus sistemas bancarios y el
poco uso de los medios electrónicos por parte de la población, es por eso que la
incertidumbre y preocupación existente ante esta ola innovadora radicaba en
causas como; la posibilidad de que el usurario desarrollara la capacidad para crear
dinero tal cual lo hace un banco central, si el uso, circulación y demanda del dinero
fiduciario se vería afectada por el dinero electrónico, el choque inminente por la
incompatibilidad entre los proveedores de bienes y servicios y las formas de pago
electrónicas, el posible descontrol y riesgo cambiario por divisas electrónicas
recibidas del extranjero y el lavado de dinero pero; a pesar de este panorama
turbulento, muchos países ante la inminente llegada de la ya mencionada
innovación económica, habían establecido políticas y medidas preventivas para la
aplicación, uso y distribución del dinero electrónico y la jurisdicción competente a
entidades gubernamentales.
Con el pasar de los años países de la mencionada región fueron
involucrando el dinero electrónico en su sistema financiero, con la inclusión de la
franquicia Mondex de Master Card, permite a los usuarios comprar en cualquier
establecimiento comercial, compras por internet e incluso el pago del pasaje de
transporte público. Los primeros países fueron Uruguay, Chile y Colombia. Cabe
destacar que Mondex era un plan piloto, basado en una tarjeta con un chip que
guarda en sí un monedero electrónico y ha sido tan grande su desarrollo que
actualmente le permite al usuario almacenar y utilizar 5 divisas distintas.
El panorama en Venezuela con el dinero electrónico para los años 2000,
presentaba cierto nivel de desconfianza por parte de los usuarios, una actitud
completamente valida en vista del poco conocimiento que se tenía del mismo,
aparte de eso, la dificultad del acceso a una computadora e internet bloquearían la
vía para su obtención, delimitándose así una muy pequeña porción de la población
la cual si podría gozar de dicho bien. Sin embargo, no se dejó de lado la
posibilidad de que este se pudiese convertir en parte de la vida del venezolano en
el futuro.
Y es por ello que posteriormente se hizo uso de sistemas basados en tarjetas
prepagadas asociadas a un proveedor de un servicio de telecomunicaciones, lo
cual representaba el mayor desarrollo del dinero electrónico en nuestro país. En
otros campos, están el P-Cash de la empresa Patagon, la eCard del Banco
Mercantil que están basados en redes. El dinero electrónico en internet posee la
característica de ser universal, por tal motivo los venezolanos tienen acceso a
sistemas como PayPal o Citi2Pay. Lo último de estos avances en nuestro país fue
el año pasado con el anuncio de la creación del petro, una criptomoneda
respaldada por el petróleo, oro, gas y diamante nacional. Su precio está aunado al
precio del barril de petróleo y tiene como principal función el financiamiento
internacional.
Si establecemos una comparación con la primera década de los años 2000,
actualmente el dinero electrónico comprende una de los pilares financieros de uso
cotidiano más importantes del país, al volverse accesibles las computadoras y el
Internet no se hicieron tardar las transferencias bancarias electrónicas, ventas y
compras por sitios web nacionales e internacionales; estos últimos con la dotación
de divisas extranjeras a través de la tarjeta de crédito. El venezolano se fue
adaptando a las innovaciones comerciales a tal punto que las volvió actividades
comunes, sin embargo, la interrogante que se forma hoy en día es en base a las
criptomonedas (Dinero Digital); si bien estas han tenido una connotación más
abierta y explorada en otras partes del mundo, en Venezuela no ha sido así, es
muy poco el conocimiento que se tienen acerca de ellas como para que las masas
la utilicen y les saquen provecho. como pasaba a inicios del de los 2000 con el
dinero electrónico, muy pocas personas poseen conocimientos bastos acerca de
la obtención e inversión en criptoactivos, pero solo es cuestión de tiempo para que
las personas se vayan familiarizando cada vez más con las innovaciones del
dinero y avanzar a una economía moderna y flexible a los cambios tecnológicos.

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