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CONCEPTOS

GÉNERO:

Según Butler, el género no es una categoría fija, sino algo que fluye y se muestra
más en lo que hacen las personas que en lo que son. Si, tal y como sostiene
Butler (1990), el género es algo que se «hace», se trataría entonces de luchar por
«deshacerlo» cuando es utilizado por un grupo para ejercer poder sobre otro.

Butler, Judith. (1990): Gender Trouble: Feminism and the Subversion of Identity,
Londres, Routledge.
Desde la antropología, el género ha sido definido como la interpretación cultural e
histórica que cada sociedad elabora en torno a la diferenciación sexual. Tal
interpretación da lugar a un conjunto de representaciones sociales, prácticas,
discursos, normas, valores y relaciones –en otras palabras, un sistema de
sexo/género, según plantea Rubin (1975)– que dan significado a la conducta de
las personas en función de su sexo. En consecuencia, el género estructura tanto
la percepción como la organización concreta y simbólica de toda la vida social.
Rubin, Gayle. (1975), "El tráfico de mujeres: notas sobre la 'economía política' del
sexo", en Lamas, M. (comp.), El género: la construcción cultural de la diferencia
sexual, UNAM, México, 1996.
FAMILIA:
la familia es un grupo humano preformado, que funciona como un tipo particular
de grupo centrado alrededor de diferentes funciones, como demanda social, que le
impone sus tareas de procreación, afectivas, sexuales, educativas, de
supervivencia, económicas y sociales, determinadas por la estructura edípica y la
estructura social, organizadas familia para el cumplimiento de esas funciones
sobre la base de los diferentes sexos, edades y roles; roles prescritos (madre,
padre, hijo, hermano, esposo, esposa) y roles funcionales, sometidos a una
interacción dinámica interna y a un intercambio con el exogrupo (Scherzer, 1994).
La familia, grupo familiar e instituciones. Desde la práctica hacia la salud –
Alejandro Scherzer 1994 Mexico
“La familia es la institución social que regula, canaliza y confiere significado social
y cultural a estas dos necesidades” (Jelin: 1989), haciendo referencia a la
sexualidad y la procreación, y continúa… “incluye también la convivencia
cotidiana, expresada en la idea del hogar y del techo: una economía compartida,
una domesticidad colectiva, el sustento cotidiano, que van unidos a la sexualidad
`legítima` y la procreación” (Jelin: 1989).
Trabajo y familia en el ciclo de vida femenino (3ª edición). Hvmanitas. 1989.
Argentina Elizabeth Jelin
VIOLENCIA DOMÉSTICA O INTRAFAMILIAR:
Según Claramunt (2006), la violencia doméstica o intrafamiliar se puede definir
como: toda acción u omisión que tenga como resultado el daño a la integridad
física, sexual emocional o social de un ser humano, en el que debe mediar un
vínculo familiar o íntimo entre el agresor y el agredido.
Claramunt, M.C. (2006). Casitas quebradas: El problema de la violencia doméstica
en Costa Rica. Costa Rica. Editorial Universidad Estatal a Distancia San José
Maria Cecilia Claramunt
La violencia intrafamiliar de acuerdo con Anabel Carreras (4), puede ser abordada
desde algunos aspectos tales como: la violencia como expresión de una crisis en
el ciclo vital de la familia. La violencia como mitología familiar: La violencia hace
parte de las “visiones del mundo” o sistemas de creencias con las que funcionan
las familias. Se distinguen tres ideologías o sistemas de creencias (4).
Conferencia Familias Maltratantes. Escuela Vasco Navarra de Terapia Familiar.
Bogotá, Octubre 12 y 13 de 2006
VIOLENCIA DE GÉNERO:
Susana Velázquez (2003) amplía la definición de violencia de género: Abarca
todos los actos mediante los cuales se discrimina, ignora, somete y subordina a
las mujeres en los diferentes aspectos de su existencia. Es todo ataque material y
simbólico que afecta su libertad, dignidad, seguridad, intimidad e integridad moral
y/o física

Violencias cotidianas, violencia de género: escuchar, comprender, ayudar (2003)

La violencia de género que ocurre en el entorno familiar, entendida como un


acto que supone la negación del ejercicio de los derechos de la mujer, tiene
consecuencias sociales, económicas y políticas para toda la sociedad, puesto
que reproduce y perpetúa un sistema de discriminación y subordinación de
más de la mitad de la población, y constituye una violación de los derechos
humanos. Además, refleja la inexistencia de una estructura sociopolítica
caracterizada por una mayor simetría en las relaciones sociales que permita
sustantivizar las democracias, a la vez que constituye un elemento que por vía
directa o indirecta frena el desarrollo armónico de los países (Rico, 1992)
Rico, María Nieves (1992), "Violencia doméstica contra la mujer en América
Latina y el Caribe: propuestas para la discusión", serie Mujer y desarrollo, Nº
10 (LC/L.690), Santiago de Chile, Comisión Económica para América Latina y
el Caribe (CEPAL).
MACHISMO:
Me interesa la distinción entre machismo y sexismo que se lee entre líneas en el
Diccionario Ideológico Feminista de Victoria Sau. Para ella, “el machismo lo
constituyen aquellos actos, físicos o verbales, por medio de los cuales se
manifiesta de forma vulgar y poco apropiada el sexismo subyacente en la
estructura social (...). El machista generalmente actúa como tal sin que, en
cambio, sea capaz de <<explicar>> o dar cuenta de la razón interna de sus actos.
Se limita a poner en práctica de un modo grosero (grosso modo) aquello que el
sexismo de la cultura a la que pertenece por nacionalidad y condición social le
brinda” (Sau, 2000: 171).
Sau, V. (2000). Diccionario Ideológico feminista. Barcelona: Icaria.
El machismo, como construcción cultural, es un modo particular de concebir el rol
masculino, modo que surge de la rigidez de la mayor parte de las sociedades del
mundo contemporáneo, para establecer y agudizar las diferencias de género entre
sus miembros. Es así como se generan expectativas de comportamiento en torno
del varón que incluyen valores y actitudes, conformando de este modo una
concepción ideológica asentada en la superioridad del macho en relación con la
hembra, superioridad que se ha pretendido fundamentar desde distintas
perspectivas ideológicas a lo largo de la historia del pensamiento
Ángel Rodríguez Kauth, «El machismo en el imaginario social», revista
Latinoamericana de Psicología 2, Vol. 25 (1993): 275-284.

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