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COLEGIO KENNEDY IED

PRUEBA DE SUFICIENCIA

JORNADA MAÑANA

Materia POLÌTICA

Docente HENRY CAICEDO

Ciclo/curso ONCE

Estudiante

Fecha de desarrollo

Competencias: profundiza sobre la problemática social en torno a la vulneración de los derechos humanos en
nuestro país.

Contenidos: Derechos Humanos

Instrucciones /procedimientos: Lee y contesta los puntos del taller.

Actividades

MECANISMOS PARA LA PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS CIUDADANOS:

Los Mecanismos de Protección Ciudadana son los instrumentos instituidos para proteger una
eventual o real pérdida, vulneración o amenaza de derechos fundamentales consagrados en la
Constitución Política, que se ejercen mediante acción judicial, y cuando fuere posible restituir
las cosas a su estado anterior. Peticiones, Quejas, Reclamos y Denuncias

Los ciudadanos pueden formular ante cualquier autoridad solicitudes respetuosas a través de
los diversos canales de atención, y las dependencias a donde va dirigido la solicitud las
clasificará de acuerdo al requerimiento presentado.
DERECHO DE PETICIÓN DE INTERÉS GENERAL Se fundamenta en la necesidad de
proteger el bien común y el interés general. Término de respuesta: 15 días hábiles
siguientes a la recepción.

DERECHO DE PETICIÓN DE INTERÉS PARTICULAR Busca el reconocimiento por parte


del Estado, de un derecho del cual es titular el peticionario. Término de respuesta: 15 días
hábiles siguientes a la recepción.

SOLICITUD DE INFORMACIÓN Derecho que tiene cualquier persona para solicitar el


suministro de cualquier información que posea la entidad, y que debe ser resuelta en un
término de 15 días siguientes a su recepción
PETICIÓN DE DOCUMENTOS Término de respuesta: Diez (10) días siguientes a su
recepción. Si en ese lapso no se ha dado respuesta al peticionario, se entenderá, que la
respectiva solicitud ha sido aceptada, y por consiguiente, la administración ya no podrá
negar la entrega de dichos
documentos al peticionario, y como consecuencia las copias se entregarán dentro de los
(3) días siguientes.

SUGERENCIA Es un consejo o propuesta que formula un usuario o institución


para el mejoramiento de los servicios de la Entidad. Término de respuesta: 15
días hábiles

QUEJA Es la manifestación verbal o escrita de insatisfacción hecha por una persona natural
o jurídica o su representante, con respecto a la conducta o actuar de un funcionario de
Entidad en desarrollo de sus funciones. Término de respuesta: 15 días hábiles siguientes a
la recepción.

RECLAMO Es la manifestación verbal o escrita de insatisfacción hecha por una persona


natural o jurídica, sobre el incumplimiento o irregularidad de alguna de las características de
los servicios ofrecidos por la Entidad. Término de respuesta: 15 días hábiles siguientes a la
recepción.

DENUNCIA Es la acción ciudadana en que se comunica, informa o da aviso sobre el


conocimiento de hechos o conductas irregulares que impliquen un eventual detrimento de
los bienes o recursos públicos. Término de respuesta: 15 días hábiles siguientes a la
recepción

Otros mecanismos constitucionales para la protección de los derechos ciudadanos son los
siguientes: ✓ Acción de Tutela ✓ Acciones Populares y de Grupo ✓ Manifestaciones ✓

Habeas Corpus ✓ Habeas Data ✓ Acción de Cumplimiento ( AVERIGUAR)

ACTIVIDADES:

1. COMPELTAR EL CUADRO CON LA SIGUIENTE INFORMACION (INVOLUCRE TODOS


LOS QUE APARECEN EN LOS CUADROS)
TIPO DE CARACTERISTICA TERMINO DE EN QUE
MECANISMO DE S RESPEUETAS CASOS SE
PROTECCION DE PUEDE
LOS DERECHOS APLICAR
CIUDADANOS

CASOS

A. VULNERACIÓN DE DERECHOS FUNDAMENTALES


B. VULNERACIÓN DE DERECHOS COLECTIVOS
C. VULNERACION A UN JUICIO JUSTO
D. VULNERACIÓN AL MANEJO DE LOS DATOS PERSONALES
E. APLICACIÓN DE UNA RESOLUCIÓN O NORMA JUDICIAL
F. QUEJA O RECLAMO
G. SOLICITUD DE UN DOCUMENTO DE INTERES PUBLICO
H. SOLUCIÓN A UN TRAMITE ´

2. HAGA UNA LISTA DE DERECHOS FUNDAMENTALES EN COLOMBIA

3. ESCOJA UN CASO Y EL MECANISMO DE PROTECCIÓN DE COMO SE APLICO A UNA


SITUACIÓN CONCRETA QUE SE HAYA PRESENTADO EN LA ACTUALIDAD EN EL PAÍS.

4. REALIZA LA LECTURA Y DA TU OPINIÓN ACERCA DEL ARTICULO ”CUANDO EL DIABLO


SE LES METIÓ A LOS PARAS” A PARTIR DE UN ENSAYO EN WORD, SOBRE LA
VULNERACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS EN EL CONTEXTO COLOMBIANO
UTILIZANDO LOS SIGUIENTES PARÁMETROS: (EL ENSAYO CONSTA DE TRES PARTES
FUNDAMENTALES)

a. La Introducción: enuncia una problemática acerca del tema tratado, se deberá abordar el tema a
tratar y entender de lo que se va hablar. Igualmente, es dónde presentarás la hipótesis como
idea que quieres desarrollar, verificar o desmentir. Casi siempre está formulada como pregunta
y se responderá a lo largo de las partes del ensayo.

b. Exposición o desarrollo: De las partes de un ensayo, es la más importante pues no sólo se trata
de la mayor extensión en cuanto a contenido se refiere sino también, es donde se expondrán
todas las razones o explicaciones para responder los cuestionamientos de la introducción.
Dentro del desarrollo deberás plasmar todos los datos, conceptos y/o referencias que
encuentres a partir de una investigación determinada. Es decir, es la sustentación de todo el
ensayo.

c. Conclusión: En definitiva, es la parte del ensayo que determinará toda la investigación que
realizaste y desarrollaste. Es el veredicto final del trabajo escrito y por lo general, debe ser muy
concisa y breve. DEBE SER CONTUNDENTE.

CUANDO EL DIABLO SE LES METIÓ A LOS PARAS


Por: LUZ MARÍA SIERRA 25 de noviembre 2007 Archivo el Tiempo

La insólita historia que se conoció esta semana de las almas en pena que espantaron a
curtidos paras de Risaralda, parece la versión light de un capítulo de la guerra en Colombia del
cual apenas se han dado tímidos brochazos: la furia de los espíritus que llevó hasta la locura a
varios grupos de combatientes de Meta y Casanare.

Y esta historia destapa una aún más desgarradora: la de los niños que Martín Llanos el único
jefes paramilitar que no desarmó a su ejército reclutaba. Ellos son hoy veteranos de guerra con
18, 19 o 22 años, y apenas ahora se atreven a empezar a contar los horrores que vivieron.
Guardadas las proporciones podría compararse con lo ocurrido a los niños de Sierra Leona
que han escandalizado al mundo: niños reclutados a la fuerza y entrenados en la barbarie para
perder el pudor y convertirse en asesinos eficientes, como diría la columnista Natalia Springer.

En una larga entrevista con un llanero que a los 17 años, en el 2004, ya era veterano de la
más cruenta pelea paraca que haya vivido el país la de los buitragueños de Martín Llanos
contra los urabeños de M. Arroyave él me contaba que a veces les dejaban los muertos a los
chulos y otras veces los picaban para echarlos a los ríos. Explicaba que tocaba chicotearlos y
sacarles las tripas, porque o si no flotaban. Las tripas las pincha uno, les abre hueco para que
se llenen de agua y al río las echa también.

-¿Y a alguno le daban pesadillas?, pregunté.

Para responder, comenzó a contar unas historias hasta ahora desconocidas.

De todas esas muertes se formó un problema ni el verraco. ¡Como cosas del diablo! dijo con
sonrisa apenada. La gente se volvía loca, se les metía un espíritu y los ponía a que se
golpearan contra los árboles. Amanecían con morados por todo lado. Como metérseles el
demonio.

Y continuaba. Uno le pregunta al espíritu ¿a qué viene? ¿Qué quiere? y él le habla a uno en
el cuerpo de la otra persona y decía, por ejemplo, Yo vengo porque a mí me mocharon en tal
parte y no me tiraron completa donde me tenían que tirar y si no me regresan eso entonces
sigo golpeando la gente.
Ese espíritu soltaba al uno y agarraba al otro y así era casi todos los días esa recocha.

El cuento puede parecer absurdo para muchos, pero lo cierto es que en medio de esa
inmensa sabana, tan fértil para lo mítico y lo mágico, a los paracos les tocó vivir un verdadero
infierno con los fantasmas de sus víctimas descuartizadas. Y como esas historias del llanero,
otros siete protagonistas de la guerra, relatan episodios similares.

Dos muchachos que tratan de recuperarse en Bogotá de las lesiones mentales que les dejó
esa guerra a la cual los llevaron a la fuerza reclutadores que cobraban 200 mil pesos por cada
uno, recuerdan que en el Tropezón (la que era sede de los paramilitares de Martín Llanos a dos
horas de Puerto López),a un man se le metió un espíritu. Le pusieron una virgen y el
comandante le preguntó: ¿De dónde viene? De parte de Dios o de parte del diablo. Y el espíritu
le contestó: No es que a mí me confundieron. Yo no era guerrilla yo era un campesino.

Otros eran cruzados

Las mujeres, cuentan varios de los entrevistados, eran las más propensas a que se les metiera
el diablo.
Los hombres, por el contrario, preferían convertirse en cruzados a través de un rito satánico
para proteger la vida en los combates a cambio de entregar el alma, como lo explica en su tesis
de maestría de la Universidad Javeriana aún no publicada, Liliana Ramírez Arias. Según
la investigadora, el rito lo hace un brujo o rezandero hay dos en los Llanos en la mitad de la
selva. El rito tiene gato negro sin ojos incluido, que simboliza la presencia que se invoca del
diablo. El paso final es beber la sangre del gato y significa que está entrando al cuerpo del
cruzado la protección del diablo.

Cuando termina la ceremonia, el cruzado tiene que pintarse las uñas de negro , para que en
medio de los combates pueda ser identificado por el ser que lo protege.

Por eso, el 11 de abril del 2006, cuando se desmovilizaron cerca de 1.800 hombres de Héroes
del Llano y Bloque Guaviare(distintos a los de Llanos y Arroyave), en un corregimiento de
Puerto Lleras (Meta) se vieron muchos con uñas negras.

En un diario de un comandante del bloque de Miguel Arroyave, publicado por la revista


Semana, cuenta que cogieron a unos 15 de Martín Llanos y uno de los muchachos que estaba
en muy mal estado le pidió mejor que lo matara.

Déjeme morir. Me tengo que morir hoy. Hace un tiempo yo hice un pacto con el más allá
para obtener protección. A mí me rezaron en cruz y según la persona que lo hizo, para que no
me entrara
el plomo yo tenía que obedecer algunas cosas que las ánimas pedían que hiciera y hoy ya
me dijeron que me había llegado la hora, de habría dicho el joven. Vi las heridas escribe el
comandante en su diario que eran muy profundas, algunas le atravesaban el cuerpo y la verdad
es que eran muchas como para que todavía estuviera vivo.

Un infierno que el país no vio Pero más allá de los espantos lo cierto es que la manera
cómo reclutaba y entrenaba Martín Llanos a sus combatientes (2002 y 2003) y luego la guerra
en la que se trenzó con los urabeños durante dos años (2004 y 2005) convirtió a gran parte del
Meta y el Casanare en un verdadero infierno.

En el 2001, Martín Llanos decidió hacer fuerte su ejército. En un solo curso, de los varios que
hizo en el 2002, entrenó a 220 muchachos. Se veían niños hasta de 13 años. A muchos los
recogían de los pueblos y fincas de la zona, a otros los sacaron de correccionales como la de
Villavicencio, se llevaron niños de la calle de Bogotá, muchachos en las esquinas de Ciudad
Bolívar, del Tolima y hasta algunos incautos que caían con avisos que invitaban a ir a un centro
de rehabilitación especial para la drogadicción.

A muchos les decían que iban a recoger arroz, y cuando llegaban y se daban cuenta, se veía
mucho hombre llorando, recuerda uno de ellos.

Y lloraban porque los cursos eran un campo de exterminio: muchos se quedaban a mitad de
camino destrozados por sus mismos compañeros. Era una macabra estrategia pedagógica: se
deshacían de los débiles o los que no parecían estar convencidos del todo y con sus crueles
asesinatos le daban al resto lecciones de barbarie.
Cada uno de los entrevistados tiene su propia historia de como, a los pocos días de llegados,
les tocaba participar del descuartizamiento de cualquier recluta por una falta ínfima. No
importaba la falta, era solo una excusa para convertir, en menos de dos meses, muchachos de
16 años en hombres dispuestos a matar.

Los cursos antes eran más difíciles, de 20 que entraban solo salían (vivos) 10 ó 5. Después,
de 180, solo se quedaban en el camino 10 ó 15.

Un tolimense, al que se llevaron de 16 años, cuenta su primera lección: Una pelada se acostó
con un man y quedó embarazada. La mataron y todos teníamos que pasar para partirle un
pedazo y entregárselo al comandante. A uno le tocó el feto de un mes.

En un momento dado perdían ya cualquier sentido de los valores humanos.


Hasta el punto de que tomaban como un pasatiempo de adolescentes comer carne humana. Lo
de la carne es curiosidad. En los cursos del 2002 o 2003 comía carne el que quisiera. En los de
antes si les tocaba obligados. En mi curso mataron a un ñero que con las drogas tenía pasado
el cerebro y se insubordinó. Mataron al chino y un comandante dijo: traigan un pedazo de carne
para que pruebe al que se le de la gana o si no todos jartan a las malas.

-¿A qué te supo la carne? Normal. Comí del lado de la nalga. Como usted comer carne de
marrano. Como usted fritar un pedazo de cuero con carne. Todo mundo como que sí comía,
como que no. Cada uno cogía su pedacito. Y ya si le gustó se lo comía Y agrega No es para
cogerlo y que si se le acabó la carne entonces mate al vecino.

Los ejemplos de los episodios macabros que ocurrieron allí abundan.

Duerme por ejemplo, en expedientes judiciales el testimonio Menudencias un muchacho como


de 23 años con cuerpo de niño dijo un día en la cárcel de Acacias que ya no podía con ese
cargo de conciencia. Contó que había un señor de apellido Polo con dos hijos en la guerrilla y
que el comandante Solín en Aguazul (Casanare), para que confesara donde estaban sus hijos
le inyectó un veneno de prueba en humanos, lo encerró en un cuarto y los demás miraban por
las rendijas. Se le salían los ojos al cucho y los demás juagados de la risa.

Contaba también como les hacían tomar la sangre de los compañeros que mataban
en entrenamiento para obtener la fuerza del muerto.

Los dos años de apocalipsis De todas esas historias nunca el país se enteró. Ni tampoco, a
pesar de todo el ruido que implicó, se dio mediana cuenta de la dimensión de la guerra de abril
del 2003 a octubre del 2005, en los Llanos.

Martín Llanos, que dominaba gran parte del Meta y Casanare, en un ánimo de expansión desde
el 2001 se empezó a extender hasta Caño Jabón y Mapiripán hacia el Guaviare (ruta
importante de la coca) y hasta Boyacá. Mientras que Miguel Arroyave, que recién había
comprado el bloque Centauros a Vicente Castaño, empezó a tratar de recortarle terreno.
Al principio, cuenta un investigador que vivió de cerca esa guerra, era una pelea entre criollos
(los de Llanos) y paisas (los de Arroyave). Luego, a Arroyave bajaron a ayudarle tropas de
Carlos Castaño, de Macaco, de Don Berna, entre otras. Y lograron sacar a los buitragueños del
Meta para diciembre del 2003.

Y para la puntada final tuvo que ver el proceso de Ralito. Como Llanos se rebeló y a pesar
del ultimátum que le dio el presidente Álvaro Uribe en agosto del 2004 no quiso ser parte de
las autodefensas que negociaron con el Gobierno, la artillería del Ejército acabó con sus tropas.
Era triste ver como esos niños (los de Martín Llanos) al ver esos tipos grandes y los
helicópteros, botaban el fusil y salían corriendo, cuenta la autoridad ya citada.

Cuando matan a Arroyave, en noviembre del 2004, en plena negociación con el Gobierno, este
ya tenía territorios de Meta, Casanare, Guaviare, de Boyacá y Cundinamarca.

Martín Llanos y su papá, Héctor Buitrago, lograron huir y hoy siguen reclutando.

En la zona, los cuchillos (herederos de Arroyave) y los macacos se han ensartado en una
guerra que entre el 10 y el 14 de agosto de este año dejó, según Policía, 250 muertos de lado y
lado.

Cuchillo, señalado de asesinar a su jefe Arroyave, a última hora no se quiso desmovilizar y


hoy manda nuevos paras desde el Guaviare.

Y en Bogotá, en un barrio popular, hay un muchacho de 19 años, que tres años después de
vivir ese infierno me dice: Por la noche me despierto con miedo.

''La última vez que miré eso fue a tres viejas que les dio de 6 de la tarde hasta las 12 de la
noche. Esas mujeres les ganaban a 2 o 3 tipos teniéndolas y corrían más que un carro. Tocó
amarrarlas y echarlas a una quebrada de agua fría. Se desmayaban y se levantaban y corrían
como un espanto. Y otra vez caían y volvían en sí y decían ¿qué pasó?. No se mató ninguna
pero sí se estropean mucho.

Un llanero de 22 años que estuvo en la guerra del 2003 al 2005.

''El comandante le preguntó: ¿De dónde viene? De parte de Dios o de parte del diablo. Y el
espíritu le contestó: Es que a mí uds. me confundieron. Yo no era guerrilla, yo era un
campesino

''Había gente que bendecía el agua y les echaban agua bendita y eso parecía como si se les
echara ácido, se tiraba a volver más loco. No tiene uno ni como explicarlo.
Joven de Bogotá que reclutado con engaños estuvo en guerra de Llanos.

Un joven de Villavicencio al que reclutaron a la fuerza contaba que $200 mil le pagaban al
reclutador que recogía muchachos de 15 y 16 años de barrios pobres de Bogotá y los llevaba
engañados a la guerra diciéndoles que si había trabajo como recolectores de arroz . Los
jóvenes cansados de no conseguir trabajo y andar de arriba para abajo, pasando el día en las
esquinas , alistaban la maleta
y subían al camión , siendo ya muy tarde cuando se daban cuenta al infierno donde habían
llegado a punta de engaños.

5. CON LAS SIGUIENTES IMÁGENES ESCRIBIR UNA CRÓNICA DONDE SE EVIDENCIEN LOS
CONCEPTOS TRABAJADOS ANTERIORMENTE EN CLASE Y LAS GUÍAS.

6. MIRAR EL VIDEO EN LA SIGUIENTE ENLACE https://youtu.be/Dl_EWDCshfI .


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