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CONTEXTUALIZACIÓN CENTRO DE PRÁCTICA

FUNDACIÓN CASA MUSEO PEDRO NEL GÓMEZ

JENSY NATALIA HOLGUIN RESTREPO


JUAN FELIPE ARANGO CASAS

ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS SOCIALES EN CONTEXTOS NO ESCOLARES


HADER DE JESUS CALDERON

UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
FACULTAD DE EDUCACION
LIC. ED. BASICA CON ENFASIS EN CIENCIAS SOCIALES

2020
CONTEXTUALIZACIÓN CENTRO DE PRÁCTICA
FUNDACIÓN CASA MUSEO PEDRO NEL GÓMEZ

Introducción
La contextualización es un ejercicio de fundamental importancia para cualquier propuesta
investigativa, porque proporciona las herramientas necesarias, tanto sociales, políticas,
económicas y culturales para entender el territorio en el que se quiere llevar a cabo el
ejercicio con el fin de “considerar de forma abierta y crítica cada aspecto de la realidad, así
como su relación con los demás aspectos que la integran; esto es observarla y describirla
sin pretender encuadrarla en un esquema teórico que supone relaciones a priori” (Ghiso,
s.f., p. 01). ya que cada contexto es único, por lo tanto, posee necesidades y fortalezas
particulares, que no deben ser encasilladas ni mucho menos equiparadas con las dinámicas
de otros espacios.
De esta manera, llevar a cabo ejercicios donde se evidencian la multiplicidad de
oportunidades culturales y se advierte sobre la inclusión de amplios grupos humanos,
conlleva a integrar experiencias formativas que se ubican fuera de la escuela como único
espacio educativo. Allí, aspectos como la apropiación cultural, la recreación de la
democracia, la solidaridad y la recuperación crítica de los lugares, promueve en las
comunidades la reflexión sobre la propia realidad como “fuente de conocimientos, como
punto de partida y de llegada permanente” (Núñez, 1986, p. 55) para la búsqueda constante
de prácticas transformadoras que guíen el sendero hacia la construcción de una “solidaridad
organizada de clase” (Núñez, 1986, p. 57).

En la presente contextualización trataremos de abordar aquellas dinámicas que se presentan


alrededor de la Casa Museo Pedro Nel Gómez, como también lo que ocurren en su interior,
con la pretensión de identificar, describir, reconocer y comunicar hechos y percepciones
que hacen parte del contexto y de la construcción de identidad presente en la comunidad.
Nombre: Fundación Casa Museo Pedro Nel Gómez

Tipo de institución: Fundación privada, cultural y sin ánimo de lucro, aunque al inscribirse
a participar en proyectos culturales, recibe ayudas estatales.

Ubicación: La fundación Casa Museo Pedro Nel Gómez pertenece a la Comuna cuatro de
Medellín; específicamente se encuentra ubicado en el barrio Aranjuez con dirección carrera
51 B # 85 – 24 y las rutas de transporte que permiten acercar a la población a este sitio son
por medio de transporte metro (estación hospital y/o universidad) y por parte de ruta de
buses se encuentra (Aranjuez 042 y 041 A, y Santa Cruz 023 y 022).

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75.5622794
Historia del barrio Aranjuez
Aranjuez, la cuarta comuna en número de habitantes y una de las más densamente pobladas
de Medellín, es también una de las más representativas, no solo por los referentes que
alberga sino por los diferentes procesos vividos en las últimas décadas. De Aranjuez hacen
parte sitios hoy tan protagónicos en el desarrollo cultural y educativo de la ciudad como la
Casa Museo Pedro Nel Gómez, el Parque Explora, la Universidad de Antioquia, el
Planetario, el Centro de Desarrollo Cultural Moravia, el Jardín Botánico, Ruta N, el Parque
de los Deseos y el Parque Norte. Son símbolos de un renacimiento que se ha dado
lentamente luego de haber sido sede de experiencias tan complejas como el basurero de
Moravia y los embates del narcoterrorismo.
Si bien ningún sector de la ciudad escapó al impacto negativo del narcotráfico en los años
80 y 90, Aranjuez fue, sin duda, una de las comunas más afectadas. En sus calles reinaban
“Los Priscos”, poderosa banda de sicarios al servicio del Cartel de Medellín, responsable de
reclutar a centenares de jóvenes para la comisión de magnicidios, secuestros, atentados,
amenazas y torturas. De allí que muchos jóvenes de la comuna 4 truncaran sus vidas con
esta influencia, la zona fuera estigmatizada y numerosas familias optaran por irse a otros
sectores. El Estado, mientras tanto, brillaba por su ausencia.
Sin embargo, Aranjuez ha sabido reponerse principalmente mediante el arte, la cultura y el
deporte. Las nuevas generaciones no solo han contado con más apoyo e inversión por parte
del Estado y otras instituciones, sino que hallaron en la música, en géneros como el hip
hop, otras maneras de expresarse y generar tejido social, al punto que hoy gozan de
reconocimiento internacional. Es el caso, por ejemplo, de Alcolirykoz y Crew Peligrosos,
grupos que, con trabajo constante y amor por su entorno, se han convertido en ejemplo para
otros jóvenes de la comuna, la ciudad y el mundo.

Los Priscos
A inicios de los ochenta, cuatro hermanos de Aranjuez, en el nororiente de Medellín, fueron
los creadores de una banda que signó la historia del conflicto local luego de firmar la
alianza de dinero y armas con el jefe mayor de la mafia colombiana, Pablo Escobar. La
revista Semana llegó a catalogarlos como la ‘Guardia pretoriana’ del capo.

Los Priscos –que Gilmer nombra en su libro Los Riscos– fueron responsables de asesinatos
tan mediáticos como los del ministro de Justicia Rodrigo Lara Bonilla (1984), el director de
El Espectador Guillermo Cano Isaza (1986), y el coronel Valdemar Franklin Quintero
(1989).
Por aquellos días, los soldados a sueldo que militaron para el narcotráfico en Medellín –
sólo con Los Priscos la cifra llegó a los 300–, eran en su mayoría habitantes de los barrios
populares; jóvenes que sin alcanzar la mayoría de edad robaban y asesinaban para figuras
de poder en el ecosistema truculento y pendenciero de la ilegalidad.

Sobre el primer encuentro que selló el vínculo macabro entre Los Priscos y Escobar,
escribe Gilmer Mesa en su libro: “De esa reunión salieron la cabeza y el brazo de las
incontables matanzas, secuestros y desmanes que sufriría esta ciudad durante algo más de
una larga y nefanda década y que dejaría como saldo oscuro de destrucción una ciudad
temerosa, desconfiada y en luto constante que dura hasta nuestros días”.

La carrera de Los Priscos tuvo golpe final cuando David Ricardo Prisco y su hermano
Armando cayeron muertos en operativos simultáneos de la Policía Nacional en enero de
1991. Ya en 1986 había fallecido Eneas Prisco, y en 1987 José Rodolfo. Un quinto
miembro del clan familiar, Conrado Antonio, estaba dedicado a la medicina, pero fue
también asesinado en febrero de 1991. Hoy queda, como emblema para la memoria, la
imagen de una virgen María Auxiliadora, puesta por Los Priscos en la esquina de su cuadra
en el barrio Aranjuez.

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