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Facultad de Teología Profesora: ROJAS, Lorena

Asignatura: H. de la Filosofía Antigua Alumno: TASCON, Jhon


Carácter del trabajo: Informe El Marques, 07 de enero de 2021
EL SER INMÓVIL DE PARMÉNIDES
Parménides, escribe en su poema sobre la Naturaleza los conocimientos que le
fueron revelados por la Diosa sobre los dos caminos de búsqueda que llevan al
hombre, uno a la verdad y el otro a la nada. Estos dos caminos son un principio lógico
que Será denominado en años posteriores como el principio de identidad, el cual, nos
indica que el Ser es (porque existe) y el no Ser no es (porque es nada y la nada no
existe, incluso es absolutamente impensable que exista la nada). Claramente es una
obviedad este principio de identidad, pero Parménides considera que es necesario
rememorar dichos principios en sus escritos porque los hombres tendemos a olvidar
esos principios y en muchas ocasiones los confundimos creyendo que lo que existe es
la nada y lo que no existe es el Ser.

Es necesario conocer a profundidad el primer camino para poder saber e


interpretar cuales son los atributos que tiene el Ser, porque en definitiva el segundo
camino no nos conducirá a ningún lado. Los atributos del Ser nos indican que es
“inengendrado e indestructible, todo completo, único en su especie e inmóvil y sin
término”1. Lo verdaderamente difícil es saber porque estos atributos tan complejos son
las verdades auténticas de la realidad, pero al estudiar el pensamiento del filósofo de
Elea se comprende cómo llega a tales conclusiones.

Parménides llega a interpretar que el mundo que percibimos a través de los


sentidos es un mundo ilusorio, diseñado para confundirnos, porque cree únicamente
en el Ser como una unidad sin términos que se extiende infinitamente en ella misma,
porque si afirmáramos la existencia de dos Seres tendría que existir un espacio
intermedio entre ambos y ese espacio no tendría nada y la nada no existe por eso es
impensable que exista la multiplicidad de Seres porque no existe un espacio que los

1
MANDOLFO, RODOLFO. El pensamiento antiguo (Buenos Aires, Editorial Losada: 1959) 42.
divida, también nos indica que el movimiento no existe debido a que si existiera
violaría los atributos fundamentales del Ser.

El Ser no puede poseer movimiento, porque el movimiento implica que el Ser


cambie su posición trasladándose desde un punto A hasta un punto B, en dos
momentos distintos de tiempo, si esto sucediera estaríamos afirmando que en un
momento el Ser esta en el punto A pero en otro momento está en el punto B y al estar
en el punto B estaría dejando de estar en el punto A, pero es imposible que el Ser
este en un lugar pero no esté en otro lugar ya que el no estar implica no Ser y el no
Ser no existe.

Además, este cambio de posición generado por el movimiento también


implicaría que el Ser que era en el punto A ya no es el mismo que el que se encuentra
en el punto B, porque ocasionaría que pensáramos en dos momentos de tiempo,
donde en el pasado está en el punto A y ahora en el presente está en el punto B y en
un futuro inmediato se pasaría a estar en un punto C, cosa que es totalmente
imposible porque el tiempo no existe, ya que al afirmar su existencia estaríamos
creyendo en el devenir de las cosas, que atarían al Ser a un principio y un fin, donde
se deterioraría y se corroería, cosas que son imposibles porque implican un cambio y
el cambio no existe porque no se puede hablar de un Ser diferente en dos momentos,
y además el Ser es único, estático e idéntico.

Para que un Ser tenga movimiento, necesita también de un espacio físico para
poder trasladarse, pero esto es imposible porque el Ser lo es todo porque es único y
es imposible que se traslade por medio de un lugar físico ya que tales lugares no
existen porque lo único que existe es el Ser y no tiene mayor extensión que la de él
mismo.

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