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ERS BD 13F2 Enrrorial.—Sobre el delito de In obedien cia, por Florentina—La mujer en el mi miento huelguistico francés, por Fann: La reforma escolar en Méjico, por Maria Luisa Castellanos —Bellera. y_maquillaje, ror Mercedes Comaposada.—Veinte afios de psicologia femenina a través de una pro- ' fesi6n, por Lucia Sénchez Saornil—La su- perpoblacién y Ia guerra, por Jeanne Hum- hert—Elogio del amor libre, por Amparo Poch y Gascén.—SANATORIO DE. OPTINISNO. Terrible fracaso, por Dra, Salud Alegre.— JoRNADAS DE LUCHA—Litnos ° e t ° b To 4 ENT SEIONS ° 1 Mujeres Libre? Después de la guerra, Ins mujeres, que hebfan sido brutalmente arrancadas al ritmo purament: ani- mal de su vide anterior, se encontraron en Ja linde del futuro aturdidas y desamparadas bajo la tor- menta social, sin otro bagaje que una abrumadora impedimenta de ideas y sentimientos eaducos. Todo lo que hasta ayer habia sido ou vida—femilia, hogar, religign—ee habia derrumbado al fra- gor de los cafiones, y au timidez de antiguas enclaustradae ve convirtié al entonces en una agorafobia infinita ante un porvenir ancho y deenudo que cra preciso cruzar con sus pies inexpertos. Esta engustfa era mundial, pero donde alcanzé proporciones ingentes, por motivos que no son di= ffciles de suponer, fué en Alemania. Cierto que aquf ya antes de la guerra una «élite» de mujeres auda- ces iban a la cabeza del movimiento femenino universal; pero no es menos cierto que el tipo medio de Ja mujer elemana era le perfecta cesada, 0 dicho de otro modo, Ia perfecta ama de casa; el cuidado y el mimo del hogar elcanzaba en aquel pats un rcfinamiento dificil de adquirir entre nosotros por di- Iegaba al paroxismo surgié Hitler predicando Ja vuelta al hogar, al calor de una proteccién vigorota y tibia; y Ia mujer no adaptada, no reeducada atin a las nuevas condiciones de vida, volvié los ojos desesperados hacia aquel deslizamiento ciego y estépide que ha- la sido eu vida anterior, ercyendo hallar en él le salvacién e ou angustia presente. TriunfS Hitler; de como cumplié su promesa nos habla el profesor Berneri en Ia revista «Tiempos Nuevos», de Barcelona. «No se puede hablar de fascismo—dice—sin ver correr rfos de Idgrimas fo- meninas.» No traemos esto’ a mencién para dolemos, dolernos seria cobarde: cuando pedimos para la mu- jer el maximo derecho, la libertad, aceptamos para ella el méximo deber: el sacrificio. Vamos a Ia conquista del porvenir con la més alta responsabilidad de nuestros actos: en Ia obra comtin es justo que el dolor ¥ la alegria se repartan por igual, que levemos a medias la cruz, y atin no queremos que nuestra parte sea la menos Ha sido una extrafia coincidencia que ha golpeado dolorosamente nuestro coraz6n, la que nos ha evado a evocar aquel dolor y nos ha empujado « meditar. Esta noticia inquietante nos lega de Moscti: Zen! Mubaam, Ia viuda de Eirich Muhsam, asesinado, vilmente por Jos unazisy en un campamento de concentracién y cuyo aniversario se ha conmemorado fen Ia segunda semana de julio, ha desaparecido sibitamente. Hace aproximadamente un afio que Zenl Ilegé a Rusia con objeto de ultimar los detalles de In publicacién de las obras de su compafiero. Parece que en los primeros momentos fué recibida con sim- patia e interés, Fruto de esta cordialidad ha sido la confianza con que Zen] Muhsam ha depositade low manuscritos de Eirich en manos de las autoridades soviéticas, Luego... ha desaparecido. Y noha sido una fuga, ni una desaparicién voluntaria, ni fortuita o casual. Alguien sabe donde esth y To que eb de ella. Zerl Muhsam ha sido secuestrada; quien sabe si a estas horas camina para Siberia, Un extremecimiento de horror sacude nuesiras entrafias, porgue es necesario apuntar someramente: el hecho ha tenido Tugar en Rasia. Hacia Rusia es hacia donde la inquietud de muchas mujeres «nuevas» vuelve los ojos esperenzada. Propagandistas verbosos y profusa literatura nos han dado a conocer una Rusia quimérica, paraiso de las mujeres; y ahora, de pronto, la noticia epuntada dejaré perplejo al Mundo femenino, eno ha de interrogarse de donde proviene esta extrafia coindiencia entre Ja Alemania fascista y la Rusia sovié- Num. 5.eMadrid, julio 1956 a . versas razones. Y cuando le angust Mujeres Libres ica? ¢Cémo pueden encontrarse el oriente v el poniente, lo que vuelve Ia cara al ayer y lo que mire hacia el mafiana? Sobre qué base comin se levanta este Hermes desconocido?. Sobre la sumisién—contestamos nosotras—, sobre la politica, que es la negacién suprema de la libertad. Por ley natural todo lo que esth establecido tiende siempre a conservarse, y Ia politica no es otra corm hacen los hombr: la-polftica las anguilosa y lac anuli jdad conservadora de las cosse estatuidas; y, ésto, aungue se disfrace de todos los coloree ,, no puede ser jamés, la politiea un instrumento revelucionario: Ine revoluciones Ise ‘sustituyendo le accién vital y progresiva de |i multitudes por rimeros de papel impreso, por «Gacetas» y Cédigos. En Rusia, como en Alemania, si alguien intenta ir més alld de la «Gacetay 0 del Cédigo—no im- porta que preconice una justicia ‘més amplia, un sentimiento mas humano—la politica, Ia actividad conservadora, le declara su enemigo y le anula en Rusia como en Alemania, La polftica es el grilete de lon pueblos y lor pueblos han de limazlo si quieren ser libres. Entre tanto, que los que levantaron eu vor por la liberacién de Ana Paulker, .cuestro de Zenl Muhear, én Rusis Ja unan a la nuestra para protestar del fueron sinceros, que —e Sobre el delito de la obediencia Claro esté que la Libertad no es un acsidente, Puode fl ar esclavo estar libre. Y dentro de una sociedad de esclavos lo fundamental es romper la corteza de os bres de espfrita para que mucvan tv Mberted externa y liberar 2 les sepultos en su quietud de bestia, a fn de que conquisien sa alegrfa de movimleatos. El ‘que no tiene libre el alma no sabe year la libertad de fuera y busca sometimiento irracional para que la vida tenga por lo menos el fin de obedecer. La primera virtud es 1a desobediencia, Pero quersla- moe que la desobediencia tuviera argamento de razén, © que no tuviera ninguno a fuerza de intuir todos os argumeatos del Universo. Ua eterno descontento es vua agitador, y tiene de bueno y de notable cus dex atasca a los rezagados, remisos, dinémicos en potencia, enthticos.., que al hallar ante ellos wna rebeldia sin fin, tornillo al viento trégice de la impaciencia sin ob- jeto, saltan sobre lo que se debe hacer y que no vié ol desobediente eepecifics. Fomentemos, puss, la descbediencia. En primer Ie- fear, porque se trata de formar el esplritu, 1a desobe- @lencla de tipo {atimo: contra Io que se llama destino, prodestinacién, ambiente y sentimiento, Libres del las fre que somos para nosotios mismos, ya andaremos en condiciones de desobedecer lo ajeno, Porque no se pue- Ae rebelar un sft contra un mecanismo eomplicedo si no sabe hacerlo contra el simple mecanismo de un {nstinto suyo, una pasiéa o un deseo. La libertad co- mienza en avestra propia conciencia. Y no habré miedo de que aos demos, voluntarlamente, a algo, si sabemos dejerlo cuando queramos. La fatalidad encubre In holgazaneria. El destino es, sin duda, 1a justficacion de un aér abilico, Hay, pues, que fomentar Ia pa Pues en 1a pasién, por cualesquiera cosa, hay siem- pre una fuente de recursos Ifcites aprovechables per‘e:- tamente. Con paciéa un espfritu puede captarss a «f mismo; la pasion derivard de objetivo, pero no se perdlerd, Y junidndola a la desobediencia obieadrenos ‘an arquotipo bien provechoro. EI problems no es ya de cumar, restar, ni eiquiora separar operaciones aritméticas. El problema es is- into para cada sér y el sér debe decidir en cada caso. Una conciencia equilibrada andarf cauta en adopter osicién firme, pues ab{ empezarfa 1a sumisia, 1a ob:- Hioncia. ¥ ua rebelde sempiterno no harfa sino sefalar rutas y alientor que no completarla jamés. Pero el afr conscionte, Wbre y duefio de rut sentidos y de su intelizencia, sabria emplear él valor inmenso de su desobedisncia en rezonarse dentro del cosmos, en ‘niquecerse de dones, est4 la ralz de In decobediencia-fundamental : que una soci dad donde todo esclavo es eslabén del otro esclavo, 2 romperd cl dia ea que. cl primero sepa hfbilmente Cortar el bierro sin nerir lo came del compatero oponieads a fa éaldide Yo que ve sostiene por fuera am hombro donde ya esté-erguida la Norma que otees podsén superar y ninguno rebajer de pasién ni de perfeccién Porque lo que no hay que olvidar es esto: que no podemos tampoco obedecer ala masa cuando tao ‘tmpete en perderse y en perdemos. FLORENTINA Cartagena, junio 1936. Mujerer Libr LA MUJER EN EL MOVIMIENTO HUELGUISTICO FRANCES Al cabo do tros semanas do huslgas «sur place», vida en Francia va recobraade su aspecio™ habitual Padiera creerse que, aparte de 1a vicieria ebtenida por Jon obreree, que ish ganado el pleito, todo ba ‘use la trangulla normalided y que ba desaparecido pos ompleto toda emocién ¢ inquieivd. Paro ia cosa noes tan sencilla como pudiera pa recer al pascarse” por las ‘calles del. ruidoso Pata, donde “los escaparates de" los. almacenes.rebosan de bjetes atrayenterj donde Jor mores de cal, con Ia tinma,solittud d€ antes, segséa ln categoria del café J del barrio, atienden 105 exigenciss desu cientels; onde Lor edifios on censtraccién y las fdbricas—lease iste on cue una vs as Tes brags én que ividue desempeta su especial misia, Vis hiseneis dy Ine Mteiets ahslan de nuever Rumor daletéros y todo parece me alegre. ero los efector de la tempestad que acaba de pasar lian dejedo profundes hucllas, no slo sobre aquellos jue_en’la lucha por mejorar’ su situacién han conse. juide miavse conguistee materiales, sino también scbre ow que, de buen o mal grado, han tenido que cones. Genie, "EL movimiento huelgufaice ha ceterminaco la fcisiacion en la vibra. general de elementos gut th ahora se encontrar, at no alctargedon cn cuanto aig wea social, al menos on an extado-de somnoieata El movimiento huelguistico ha onglobedo ox eu ‘bila “a una. geen parte. de mujeres. franceses. que ‘staban alejadas de iodo interés socal, Utes de shrerasmejeres y muchachse_se han visto bligadas'a surarog's le "ecgnt rulldora de ta lps y « desempefiar ua papel igual al de los hom: bres cot los que, tratajabin en ta misma. Empress, uisd es 1a primera ver de su vida que elias han tendo due probar de manera tan efectiva’ su soldaridad en tina Ghvss comdn. sl majocamiento de witales, May recientemente todavia 1a mujer francesa no tenia tino tna vaga idea de lo qve sepresentaba 1a organ! Zacién sindicel: la, defense do sus intsreses por una Organizacien monolftica situada al margen de a1 abr. ea) de au taller o de ss ofcing y cusia de ins fuerza Stécieate por sf tiema para obligar al patrano + com esiones de orden econémico a Ia case explotada. No treo exagerar al decit que Ia exisiencia de lot Sind func, indeterminate, en. loscorebron illones de mujeres obreras. La’ vida ranscurrfa or sus. carriles habituales, sin variaciones seria, 7 Nélo la imaginacién de algunse les perma entrever como an suelio Ia realizacion de aatieles profundamente escondidos, el logro de riquezas ultraterrenas comer Risa saclarse, Gescanear plenamente y.., quién sabs “lan atvlesgado parecla ate deseo! coatemplar Ia verde y Tresca hictba cel campo. 'Y he agul que, de promt, alguien propone perma- recor en la sabrica, en el tales, yao sallt de alll mientras no to concedan algunot francos més para comer tn poce mejor, algunas horas menos de trabajo ara pode teposat ua poco mds, wna vacacion. anual peacera ae oe Si hasta equ la mayor parte de los hombres ae daban events, mds 0 menos vagamente, de To gue eta fl Sindicato obrero y quizd dela mecesidad de orga Missrie en. 8 sono, como no dejaban de deciles los Sbreros revolucioutrios mis conscientes ya. 0 fag la mujer continvaba slejads ce! tedat erat tonto. Y Bs SoU gue Boy aoa usreay todavia ncoracene quird, ha obligato "1a mujer ffancesa 2 cammar al Jago de vu camarada cl hombre, El primer destello de consciencla y de comprension era éitei el bombte, © Sea el amiga, el compaiero, el Yeeito, a0 es Ya sélo Sin ar perteneciente lotto sexo, sino’ que e+ alguien que sale deleader lop intereses de ella'y.luchat cou ei pnme teson. por su propio. mejoramiento y_ por el Go Ta mujer y que siente la precisa Ge acadic eh a Syuda en esta Techs. [Cudntas mujeres de obreros, cuyo mundo se timi= taby a la -cocinn y-a los aifon,'xe Ran visto obligadas dejar sus poqeeion esterbos’ y sumarse ala. lich 4 Vilar al mando, al pede,” al amigo, a levasle flimento y encontratse en las iamediaciones de ta fd trley cosvertica en prisién voluataria, con todas las dmds mujeres, ¥ Gonos hombres que venian a leven: {ar los dnimor'de Sus mujeres, hijat, aoviaa, para que 1Qué vida mas nueval Alguien que, al MK Boga heatuetiane tance next Pelertn clog Al ectgrs ty Pe conte vee ot ode) poe teas. Eltnemtre, gos ara ya de ou Goda n° moje ey ll tasbidn, ba acetate Bae oeraTesiaia aes aliacd tue py eerie atelist a arsten erecta epee Eieleusta erallenpden tiles Para las aes de cant que extn al margen, oll nat sid tn aceptacign, por impuleo insti @& sata Rescue come etn Neey es Rttige dem compat, Peroen ato gut aaicr permaneia ez case renegando snectado, sin, Bact Meu eeiea cesta crane vac ie eh tee iumrany ie sitacere faerie eres na dianenpeaen ve dees fete eet es ate eceuae are ares ¥ la mule det ometoy Ja obtera han coneztide eee ies eestor es eee ae eee ope iet ct tanrecc nice Testors‘a ia vida monotony unifrme cel ama de Pasa Edel ereetat entsstrans ested magterd ear cs orev cntieas Sitive ea ana. dats cena; Se no se eoctlertaben fontrs ef me. por at wewarulers que, deta fogar sin pas, Lojor de css 1a slvlanliad cates Gets nidpueastia srosneige ca eahc'e pe. is mujer ee ln amiga, de la herming: in aotisiead leche) acoqua totevel dncrguatcedey. de’ lag feroctixereevtoliai pcan nicer ety an er eee eee eee as Peete ite erent asta PRE er eepncs tor istoco eee alc dura jomadn Ge tabayor'a las reuménes de te Sind Sey et eee i oeacen at aes ate cer asrpess Pere Guten eas teuauas de hulta yo, gsc erecta oie vevatens te a Spee erence a total eted Sscustand, mientris res computer: extiban oluse eters toate titi rts) vrei a0 oe ae ieee gles eee ees fra Towtos,plematuremente arrugados, 20. lea a fripe eae taser pereoecreenm De esos Ue fatge iltada e algana » hendie wa cates ete fos aos, feo 10 6 Sefamete, to Decato pero sella ba acedidon,y exo #8 10 por Hente ila he rspiado wan stidtera que haste ae a desconocida. Ya no se ief.. Se ha colocado In primera piedra FANNY Parts, junio 1936. LA a a ete aa Querfa hablar de la enorme labor de a ensefianza er Se ee get ote aes ee ae elt ier ae oii ee ee REFORMA ESCOLAR MEJICO de Ja escuela, yendo a ensefiar a les pobres indies, opri= midot por Ja dictadura, que hay slge més que ol amo, Ja tierra ajena y el dolor de 10s latigazos, [La estucla de Tamaulipas tiene instituldas tres co: togorias de conferoncias: pedagégicas, sociales y pe- pulares. Les primeras, pare maestros y personas cul- fas, ton sustentadas por les inspectores, cobre matsrias puramente técnicas; las segundas son reuniones amis. ‘0506, tertulias fatimas celebradas por el personal docen- to, alae que asisten los eiudadanos de mayor aivel eslew- ral del lugar, y en donde se recita, se canta, se hace mé- sica y se sustitan amigablemente controversizs sobre te-~ ‘mas sociales, También en estas reumiones se organizan juegos y deportes y an sistema de extensién cultural en- tue las masas. Y en las dedlicadas al pueblo se celebran fiestas, so ponen en sccana cbras toatrales de alto valor literario y se llevan a cabo cuantos trabajos puedan ccontribuix a beneficlar material y espiriivalmente Jos indios, ton bien dotades pera desarrollar cval- quier clase de actividad fisica, artistica o in telectual. La escuela de Ciudad Victoria (Tamaslipas) lleva por bobfos y aldeas el arte vernfculo me- Jicano; se retinen los maestros y clumnos ea. calles y plasas y ante campesinos y obrerss 5 recitan poesias, cantan, preguatan al piblico para interesarle en las cuestiones intelectuales y do palpitante actualidad y hsblan sobre juz ticia, ahorro, trabajo, solidaridad nacional, “amor a le Naturaleza, etc La escuela do Ta aceiéa easefia al nifo ol concepto claro de su propio valer y la perstia- sign de que, queriendo, puede dominar os eleme: tot que tiene a su alrededor, y que la observaciéa, la experimentacion, la accién, munca excluyeron el 12- locinio. Eetes niiios de la escuela de la accién cantan y cele. bran sus danzas al aire y bajo el sol y todos los cono- Cimleutos humanos, rettotrafdos a la. vida desde 1a Na- turalera, de la Naturalera misma han de salir. La propia observacia geométrica en los tronces de los Arboles, en los alambses de las empalizadas, en las formas conicas 0 rectangulares de Tos tejadillos, son otros tantor medios naturales y de accién que desterrardn. aquellos manidos procedimientos de anta- fio, que tan lejos de nosotros yan en Jas revueltas diarias que le damos al vivir. Para la arltmética basta sélo con Hovar Ine cuentas do las aver del corral, de las crias y de [os hue- vos, de 10s libros de 1a biblioteca y de las tablas para construir la perrera ‘Los centros de interés se avivan cen la siembra: se mide el terreno, fe acota, s9 remueve la tierra, 10 bona, se selecciona 12 semilla y de todas estas labores se desprenden conocimientos importantes, « la par que se fomenta ol sentide educs- tivo, econémico y de autodisciplina. Las mismas con- troversias sobre las labores agricolas pulea su lenguaje, les hacen adquirir nuevos conocimieatos y las votacio. nes para llegar 2 una resolucion despiertan en ellos el espitita de cooperacién y de sujeciéa a las mayorfas; conocen Tas unidades linesles y de superficie y ejecutan algunos céleulos; estudian la semilla, determinan la Mujeres Libres époce de Ya siembra, ve dan cuenta del clima de 1a lecalidad, construyen planos y hacen dibujos. Ta escuela de Ia accién aplica un método que en Inglaterra fué muy popular, y que es de un gran sen- ‘ido préctico, humanitario y recreativo: 1a ensefianza mutua. Lop nifos que se agrupan a estudiar y que se trans miten sus conocimientos mutuamente tienen mucho an- ado para poder desarrollar una labor pedagégica eft cionte y de resultado sumamente beneicioso Lot niflos de afior superiores enselan a los analfa betos adultos las primeras letras; loz s{hados y_ los domingos se rednen para escuchar cuentos, narracio. ace de viajes expuestos por macstron, por alumaoa 0 per pertonas. simpatizantes con Ia obra; se exhiben. peliculas diddcticas, se representan obras adecuadas, Ta escuela de la accién es el hogar para los aitios. Bllos deben ser comsideradot en Ia excucls come en su propia casa. Ta salud y el desarrollo orgdnico se atieade prefe- fentements, La eecuela evs un registro minucioto del trecimiento fisico y mental del nifio, valorando sus resultados y procurandy que sean lo més exacios posibles. Y la escuela do la accién preconiza la cosdueacién, que tanto atemoriza a las gentes chapadas 2 la a tigua, Pero de tema taa sugestivo e importante trataré en otro articulo, Sélo me resta decir que Ia escuela do In acciga de Tamaulipas, ya extendida por toda la Re- piblice mejicana, es un centro de ensefanza mutua, de ccoperativismo, de disciplina y, aunque parezea pa: rad6gico, de litertad. Manta Luisa CASTELLANOS Madrid, julio 1956. ec 61 br oc nt se Mujere Libre BELLEZA Y MAQUILLAJE Si el concepto abstracto y universal de beileza lo concretamos a de la forma fernenina, vernos que, en este aspecto, existe en la actu reducir el contenido mujer. El exceso de germen animal que ain conservamos, la mala literatura, con us raquiticas imagenes de falsas seducciones y, sobre todo, el cine burgués, esencialmente comercial, han acelerado veriiginosamente a las mujeres en el caos del maguillaje. Entre las mujeres obrerae Jas hay que han pasado directamente de la més absoluta suciedad a los chafarrinones y tiz- najos mas estridentes. Y en las otras clases, desde el ya lograco aseo personal a los més disparatades coloretes y embadurnamientos. Pero, eso si: todas, todas ec sienten heroines de fatalidad, cfatales» siempre, en la oficina, en la calle, en el baile. Todas creen poser en los volupiuosos destellos lanzados a través del vrimmely y del rasgado de los ojos el resorte gue ha de mover ol destino de aquellos infelices hombres que las admiran y lee acosan, cuando, en realidad, son ellas las victimas de esas suptestas fascinaciones trascendentales. Es de esperar gue este also poder de arco iris facial, esta pobreionerfa del aparentar, pase pronto, como meda que e2, y podames llegar a un concepto de mis plena belleza expresién superficial jad una tendencia a Los salvajes también se pintan Los selvajes rellenan sus vacios cspinituales y sus limitaciones cetebrales con signos ex- ternoo, visibles: tatuajes y pinturas. Pero eo natural. Ellos e6lo viven en el mundo de wu exterior, para el que s6lo necesitan sentidos. En este mundo suyo, el ser rey depende de tres pluimas més; el estado de cesada, de unas rayas en la frente o cn Ja barbilla; la cate- goria de danzante, de la combinacién de unos colores. Es un mundo repretentative de lo Su realidad esta hueca y se desliza sobre la venerada e inconmovible cos- n se apoya en cl puro imaginar y no en lo sustantivo, De aht la In que existe enire el salvaje y la heroina fatal de nuestro tiempo: una relacién que obedece al mismo proceso imaginative, a la misma oquedad sustantiva. Las mujeres salvajes se cubren de pulseras, de collares, de pinturas. Son sus armas y en ellas radica eu poder de atraccién. A la salvaje ce la ectima segiin sus adornos, que marcen Ja categorfa a que pertenece en sa mundo decorativo. La expresién pintada del salvaje cons- tituye una potenciacién, un avance, comparada con el primitive estado natural. El salvaje, cuando se pinta, no imita del natural, que ello seria retroceder; lo hace arbitrariamente y con arreglo a su mundo representativo. La mujer primifive no se pintaba Primitivamente la mujer no se pintaba; no sentia la necesidad de adietivarse; ni siquiera tenfe, como tiene ya el salvaje, un mundo exterior. No «tenfax, «cra naturaleza, simple y sustantivamente naturalezs, Para In mujer primitiva, en lugar de belleza existia naturalidad, y nada mis que naturalidaé—Ia decoracién corresponde ya al salvaje—, y esta naturalidad ‘era azotada por la propia naturaleza, dentro de la cual estaba incluida, sin la mAs remota racionalidad que pudiera defenderla. Actualmente no podemos quedarnos ni en la ingenua naturalidad primitiva, por inde. fensa, ni en la complicada decoracién salvaje, por inttil y parcial. Hemos de llegar al acorde belleza en su auténtica expresin, y para ello nos es imprescindible derrocar antes el altar de lo postize con toda su imagineria de pomos falsamente milagrosos. 6 Mujer Libres Nadie puede desconocer la falta de gracia légicn que demuestran unos ojos cuyos mo- vimientos se suceden en todas direcciones. mientras el crimmel» mantiene rigidas y estéticas Jas pestafias, que dan asi a la cara un constante aire asustadizo de Bety estipida. Las pinturas provocan una vejez prematura, Paralizan la expresién—por algo fueron em- pleadas para disimular la muerte, para embellecer su quietud—. Estén completamente diso- ciadas de los movimientos de los misculos facciales. Surcan les facciones, las agudizan y les quitan su verdadera gradacién suave y sensible Unicamente a las muchachas muy jévenes, cuyos mesculos y cuya piel se oponen a las huellas, las pinturas no logran envejecerlas. Pero en este caso, oi no las estropean, tampoco las favorecen. Y esti perfectamente justificada Ia dolorida exclamacién de Sthendal: «Tenia la cara como una rosa y se ponia colorete.» 14 Pore general. ponen fatige en la cara, porque afirman y realzan lov trazos producidos por Ja gesticulacién. {Cudndo es bella una mujer? Podemos definir Ja belleza como un equilibrio, como una concordancia. Una mujer sera. por tanto, bella cuando su expresién superficial corresponda a su contenido fntimo, y tanto mée bella cuanto més intenso ea ese eu yo. En la boca, en los ojos, en el conjunto expresivo de la cara, y en lugar de las pinturas, ha de encontrarse la bondad, i il + belleza Los pores limpios y Ja hella-buena—es lo mismo—. Todos los cuidados para que la piel pueda actuar como ta- miz sutil en la transmisi6n de cada ferinidad. El maquillaje no corresponde « nuestra civilizacién, que ha ido depurando, seleccionando formas hasta llegar a Ja naturalidad. A la naturalidad. pero va de vuelta. Es decir, sabiendo cevitar los efectos perjudiciales del aire, del sol, de la humedad. Maguillarse supone retroce- der. La mujer ei vilizada leva su SSS mundo, su fuer- za, dentro de si misma. Y la so- bran lee super posiciones. Toda ella es un adorno progresivo. Su halleza, como to- da belleza, es in- tangible. Se pue- de ver, sentir, ad- mirar, pero no tocar. Al tocarla se esfuma, se no se la puede apresar para guardarla en ca. jites de colorete Es iatngible arte mismo. Y nuestra supera- cin consiste, no en dibujarnos tuna belleza, no en_maquillarnos, sino en_ser_nos- otras mismas or- te: bella. MERCEDES COMAPOSADA! Veinte afios de psicologia femenina a través ide una profesion. 2 La calle estaba més cerca * Pero deide entonces, sin que nada bubiers cambiado, jareatemente, se notaba un no sé qué indedntble, como ese escalofrie quo nos produce la puerta que hemos ejado abierta no sabemos donde. EL tipico voceria do la Puerta del Sol estaba més corea; o la sala de Telé fonos habia cambiado de piso, o habfa ascendido unos cuantos mettos el asfalto de Ia calle, aMalestar? ; Qué sé yo! El caso era que aquel airé cuajado de antes se habia fandido, la perspectiva agoviadara de los fae igualos te habia quebrado. Un ro- sarie #7a, a veces, sustitaide por una viva discusiéa en :orno a lo que debio 0 no debi6 ‘haceree, Se notuba como un oscuro rencor contra mf, a la-ver que un odio, impreciso hacia ol jefo aquel gue las habia omado a su despacho y cntro lisonjas y. ame: naras las convenci6 pata que reclamasen «haber firmado coacciona¢as...» 1 tiempo ya no podia retreceder; le brecha obierta era imposible de cersar, Un elemento subver: Se sucedioron varias convocatoriae y los inevitables comentarios en tomo a lat Dié mucho que hablar una muchacha morena y desonvuelta que sella ponerse 1 velo mientras subla la escalera, cumpliendo asi con 10$ requisitos ospiorilesy. Era hija de wna lavanderal A le menos esto te etchicheabs a media vor de cadre a cuadro. Hablaba por los codes y fuerte—eostumbees de Ja calle y np se amilanebs por amonestaciOn o reprimenda mAs o menos, Malo, aqui habia un elemento subver- vo. ¥ el cage es que Ia endiablada erm tan simpaticn que no habia, medio de desentenderse de elle Aguella muchacha acabs de aligerar el aire ea Ja sala de Teléfonos. Solia butlarse con gracia de los papas wretirados» y de las viudas inconsolables; yal trabajo Ie amas el sport» de le pobrotenia pretenciona, Ea eu presencia. las cosas respetables se tornaban ridiculas, Cierto dia sostavo une larga discusién con un abonade, al fx de la cual, y antes de certar Ja llave, se Ia oyo decir amablemente: «Bien Jo sabe usted, con I suya hizo In carrera Liicgo se volvié a la encergada que In extaba obsorvando, Pues no me ha dicho este tio que mi madre es una, Ta encargada se Mews las manos a la cabeza. Poro crlatura, y usted que he contestado. La puede costar el destino. Se encogié le hombror y avant6 e) Iebio inferior con en mohin de butla y aesprecio, Bah! Dos pesetae ge encuontran on cualquier parte pura por es... mientras lleve agua el ‘A buena hora me voy Aires trasaildnticos Una mafiana de le primavera de} aio i924 Ia mampace que solfa dar paso al jefe tuvo aquel crajido: prolongado con que anunciaha la entrada de mis de na Acompanaban al jefe cuatro individuos altos de aire exético que comenzaron a observarlo todo con, euriosidad, con eta euriosided exctaivay minucioss con que 1 chalda examina la potranca antes de adquiritla 8 Des de ellos tenfan el tipo inconfundible del anglo sajén, les otros dos eran de ter oscura, aire gandul y hablaban un espafol pereros y dulrén, Loy cuatro prodectaa de Noreansrica; los dos Uhinos eran cubanos, Las telefonistas, tiesas ent sus altas sillas giratorias, segufan con el rabi Gel ojo, las evoluciones de los extraiios personajes y, con el off libre, el ‘sentido de la conversacién que sostenfan con al jefe Total. La Compania Madiilesa de ‘eléfonos consumala su concest6a, y la poderosa Telephone and ‘Telegraph Corporation, de Norteamérica, aspiraba a sustituirla, Aquel generalito jerezano y.jaranero que se Thallaba al frente de los destinos de Espiia se proponia dotar a éta el «mejor servicko teleiéaico del Mund. ‘Oiras Empresas exiranjeras les disputaran el bocado, pero la coxa cestuvo clara desde los primeros momentos. ; Menvdo aire de «ames» trafan los yankis! Tenian dinero y sabian emplearlo; claro «= / que al s00 port. Otro elemento subversive Aquello of que fot una revolucién. La scoferite telofo: nistay se convirti¢ en «operadoran ; el te sano de servicio, fn wmicroplastrén, Se reparticron reglsmentos de con dducta y se abrieron clases para aprender vn vocabulario ulevo, unos movimtentos sever, nas cocumbres ave. vas, Bra la racionalizaci6n, de’ un ped'r subversive superior al de cualquier bijn de lavander: imaginable. La encargada se multiplicé en varias jas, sub- {tas y vigilantes. Se cuidaba In cetéies del ssl6n. Bra capital que las sillas estuvieran tiles a Ia misma altura. No importabs au: ti furs: més alta ¢ mds baja. iQue te faltaban piemss para Hiegar al punto de apoyo? Pues las djoboe colgando tas ocho horas, con mucho euidaito eno balancearlos, 2Que te sobraban? 5: ra uesticn tura; vo buscarias el medio d= plegarlas como si fuoran el tr fede de ana camara oer Cuando dieran las écho do la maiana, las dos de 1a tarde 0 Tas diez de Te noche, sonarfa un timbre y saldrfas al salon en fila ordenads fon tas compafieras en el lugar que t correspondiera: et 8, el fo, ol 1g; ab Negara} cuadro 8, 10 6 15 te colocasfas a la i quierda de la weperadora» de srvicio yal sonar unt ale mada, j708!, ocuparias Ts Silla "que aguella dejaba vacante, aun eundo. a Sobre Ta eatafa 1 Qué precision en los detalloe |; Qué or ganizacion ¢2 mara. villa! La "boquilla de} «microplesixonn, x0 leherfa estar mas ds cinco centimetios—cinco _exactamen- to—separada de la boca. Apronderfais a modular 1a vor, a cantar tos miimeros, y {edo bajito sin que te oyera la eperadora a1 lado, como si rezaras, {Que pods ser sordo el abonaco? Ficfno entraha en los céleulos de la Te- lephone and Telegraph Corporation. 13} tesa ella que, ver con los anozmales! ‘TG no debias levantar le vor aunque tel] pidiera el moro Muza; pero si el moro Muza ¢ quejata de que intentabas burjte de cl cuchicheando cosas inteligibles fen el teléfono te ganabes dos hores de feargo, y en paz. El reglamento era el reglomenio. TAR! pero a cambio de estas minimas molestias no tendrfas que beber el agua calontita do los botijos, So habian instalado unos soberbios aparatos que te pro porcionatan un agua helada estupenda. jLdstima que no pudieras beberla més que darante aquellos quince minutos «de foposon que te dabsn a media tarde 0 a melia mafana, cuando te regalaban tambien con una tara de café caleatiwo ser- ‘ido por ana doncella con cof y delantal blanco! ‘Nos amusblaron una sala de adescanso» soberbla para aquellos quince m ‘aos, Hahfa un divin de respeto en el que, nattiralmente, no debias fecharte; unan mesitas coquetonas com periddicos y revistas, de Ts que no verias munca més que la cubjerta, y unos siliencitos ide mimbre que ccuparias «reposadamentey para injerit el café 0 el agua—habia que cecidirse ante la im- posibilidad de tomar las dos cosas a In ver, No podias repartir mejor los quince mi 3 nutes de wreposen, Lavarte las ma nos, que solian estar verdes del metal do les elavijas, da aun luger ex cusado, una miracita de turnura al divin, y lo que te quedaba para el agua o el café si antes no. sonaba el timbre que te sdvertia haberse agotado tu sreporen. lao que podias inve ir al orden descrito a tu posto, que ya era algo. Hipertensi Me olvidabs decir quo dol aio 1919 a la fecha se habian éle vade los sueldos gracias aa gestidn peisonal de un curta simpatico de exos que conocen Tos steretos de todas las sefioras de « dos los directores de tndas Ins Com. paiias del Mundo. A su Megads los americans los elevaron basta un cien por cien sobre el sucldo inicial, ex dr cir, hasta dos docenas de duros como Pero zcompensaha esto la tranquilidad perdids ?°A\ buon seguro auc no, Las tele fonistas se habian vuelto doscontentadizas y Aiscolac. Aawella agua Gresquita era umn ten facion del diablo; a veces so rogistraban ule vvantamientosn furtivos de Tr silla que reauerian la aplicacién reitorida de stnciones. E) eaté qué coans tenfa el café! imaginate que irritaba os nervios de las sefioritas, poco excitades, sin duda, por Ja ailla, Ta eed, Ia. distribucién auto mitica de Ios movimientos y las palabras, el ‘exceso do servicio pues amortizaban Ine vacan tes y cada una atendia a doscientos ochenta abo- nedos, y cuando menos lo pensabas, a las ox. quisitas “incolencias de cualquier mpertinente se lee ocursfa contestar en forma poco amable. ¥ Io terrible es que esto comenzaba a repetir- se oon frecuencia y los castigos a menudear. Eran variados: amonestaciones, horas extraordinarias de se jo, que podies cumplirlas prolongaado Ins oche de tu guar ia, 0 volviendo a media tarde o en las primeras horas de Ja noche—a voluntad. del jefe que te las habia impuesto—, multas, suspensiones de empleo y sueldo,. etcetera, ete. Menos mal que se usaba de [os castigos con moderacion. Por ejem: plo: dos minutos de zetraso en Ia toma de servicio equivalfa a dos horas de recat £0; y asf por el estilo, 2 Mujerer Librer A mediados del afin 26 se comenré a instruiraos para cl acoplamiento a los nuevos servicios. Después de Tas Jomadss agotadoras hahfamos de asistir a clase dos ¢ tres horas diarias, ;¥ may contentas de que los sefio es americanos no ‘prescindiesen de nosotras! Me asignaron el servicio de telefonemas, Me aisla ron del mundo citeundente dos auditives que conecta. than Ios movimientos de mis dedos sobre Ia mAquine de escribir con sina vor Iejana que cantaha telefonemas hora. tras hora, Tnauguramos el enusvo estadoy el dia 3x ée diciem: bre de 1936. ; Hasta en Ia hora de la mucrte me acer aré de aguella noche! Tres noches e:an clésieas y despeluznantes en el ser vicio de telefonemas:: la vispera de Ato Nuevo, Ia de San José y In de San Antonio; pero Ta primera gana. ba a les otras dos. Las felicitaciones de’ les Manucles ¥ del aio se contaban por decenas de millarss, Puve tal noche fué la elegida para que las «seitorigasy—antes estaba asistide por hombres inaugurarsn gue nuevas aptitudes. ier horas y media, Diez horas y media dolante de una méouina, oprimida la cabeza por el eserretey de dos auriculares. Hala, hela, an telofonema, otro, mil, diez mil. Una hora, dos, cuatro. Y para que te descan: saran lat manos, wna hora, dos, cuxtro, tranamitiondo, cantando telefonemas. Se te abracaba Iz ganganta, te dolfan los brazos, Tos costados, 1 pecho. Todavia eran las cuatro de 1a ma. Kana, las cinco; debjas estar asf hasta Jas ocho, ni ua. Nos sirvieron en Tas propiss «posieionesy nombre ‘que cesignaba 1a mess de trabajo—pasteles, café, agua frosea. | Quién tomaba mada! La imaginacién volaha hacia aquella sala alsa, donde se despe fico divén, Alguna muchacha hubo da retirarse enfer. mia, Este no era nada; bastaba con acclerar el ritmo dsl trabajo para cubrir la vacante, jHasta en la hora de Ja mucrie! isten Se funden lus re: El barémetro de a resistencia p: mareaba ou ‘maxima tension, Un dia sibitamente se anuncié un nue- yo examen de aptitad. El cuestionasio ora més amphio que otras veces—gramitica, geografia, mecanografia y fotrar aarandajas quo ao babian de vtilizarte para nad—. Las que no ebsuvieran el certificado ée aptitud ppasarian a une escuela especial equis meses, all cabo de los cuales serfan exammadas de auevo. ¥ no de- ‘clan lo que habian de hacer de ellat si ni aun af obte nian el famoso certficaco. Casi simultfneamente se publiceba un acuerdo del Comité Paritario facultando a la Compania para redu- ix las plantillas por necosidades de servicio. La xola Gién estaba clara. Aquella noche, antes del relevo, y frente al tablonci tio ce-anuncies, fas muchachas hablaban excitadas, Pen: Sf un momento on aquellas infelices que contaban mae de cincuenta aflos y que apenas poselan otra Instruccién que Ta primaria, diffell de ampliar ya on todas Tas es uelas especiales del mundo, Hay que oponerse este examen—dije en vor alta Se hito cl silencio; unas me miraron espantadas—ain feran las hijas del comand: do— Otras me raron con simpatta y decisién, “1 Qué debemas hscer ?—dija uma vor juvenil Mable sin cansarme de la relacién que podia tener quel anuncio con los acuerdos del Comité Paritario Cuando sons ef timbre Maméndonos a televo estébamos de acuerdo sobre To que debfa hacerse. Existio une antigua Asociacién mutualista do telefo: nistas interurbanos, que en vano habia pretendido 1s Compatia absorber o tutclar, ¥ que, frente a los acon. tecimientos, se habia convertido en una Sociedad de resistencia; tres dfas deapade m&a de clen muchachas fstaban asociadas, El anuncio del examen fué rctirado del tabloncillo pero uncs dias mds tarde se renartieron por las posi ones unos cuaatos sobres grisss, de los que Tas agra iadas debimes frmar recito, ‘A mf me mandaron a una dolicicas canital Joonntina Leth SANCHEZ SAORNIL Toda 1a tragedin del campo estaba en hondo dramatismo eon que sus gentes slzaben Jos ojos a la nube. La nube siempre smenazendo sus dias y sus noches, oscareciendo toda su vida; y ahora, de pronto, el més terrible de los nublados se con- vierte en Ie unica esperanza iCon qué nuevo gesto mira a los horizontes el campo! Miar de jibilo, que ha descubierto tras Ia nube la gestacién de una aurora infi- nita ee Mujeres Libres La superpoblacién la guerra Enrolados en la inmensa y ruda de lu char contra la guerra y de echar las bases sélidas de una paz duradera entro los pucblos, lo» paci- fistas integrales tenemos el deher de conocer bien las causas de los conilictos entre los hombres y de no omitir ninguna, ni eigquiera bajo pretextos nacionalistas, religiosos o sexuales. La guerra es de todos los tiempos, de todos los pueblos, de todas las latitudes. Del Norte al Sur, del Este al Oeste, pasando por el Centro, hoy como ayer—y quién sabe, jay!, si como un pr6- ximo mefiana—la locura asesina de los hombres ha ensangrentado el Mundo sin cesar. Por lejos que now re;montemos en la Historia, encontraxios trazes, pruebas irrecusables de que nuestros an- tepasados se han enfrentado en confictos arma- dos por la conquista del alimento, del sitio el sol y de las mujeres, por el dominio y hasta simple mente por satisfacer el instinto animal del ases ato, que muy bien pudiera no scr otra cosa. que una manifestacién subconsciente del miedo. Un hecho tan general, tan profundo, tan persistente «puede desaparecer al conjuro de una varita m gica, de una sencilla férmula cabalistica cualqui ra—iAméos los unos a los otros», por ejem- plo—? No lo creemos, a pesar del deseo de paz que nos acucia desde siempre. Si esto hubiera sido posible, ya desde hace mucho tiempo, antes de la incorporacién de formidables intereses particu- lares a las industrias de guerra, la paz habria rei- nado entre los hombres. E] mal es, pucs, més grave y mas complejo. Las de guerra, A mii juticio, se podrfan resumir todas de guerra en tres grandes categorias: Naturales © biolégicas. Sociales. Psicolégicas. En las causas naturales © biolSgicae figuran la superpoblacié i6n y el instinto de combatividad de los jévenes machos, impulso que muy bien podrfa ser de origen sex En las cansas sociales se podria incluir la reli- gi6n, el militarismo, el Estado y el capitalismo. En las cauisas peicolégicas entrarian la educa: ci6n particularista circunscrita al clan o a la na- cién, los prejuicios de raza, de color, de lengua y de costumbre, el espfritu de cuerpo 0 lo que se hha llamado «alma colectivap. Dejaré a otros camaradas la tarea de tratar las causss socicles y pricolégicas y los medion de combatirlas. Lo que aqui trataré de dilucidar ee el problema que constituye el objeto de este tra- bajo: la superpoblacién y la guerra Definames Ia guerra. Para los malthusianos Ja guerra no ex més que un fenémeno natural traducido a lo social: la lu- cha por la existencia, lo que Darwin ha llamado «competencia vitals, el aniquilamiento de los ppor los fuertes: Se podria atin definiela a tuna disputa por la fuerza con amenazas de mise te gue surge entre dos grupos politicos bajo la ccién imperioan de la concurrencia vital. Como consecuencia de la evolucién de las sociedades humanas 2c deberfa aadir a estas dos definicio- nes Ia profesién mil ejército permanente y matanza colectiva, cuya legitimacién de existencia no puede ser otra que la guerra, de la cual son, por tanto, razén y causa. La lucha por la vida proviene de la facultad gue tienen todos los seres oxganizados de multi- plicarse en proporcién tan elevada que. a no ser por Ja constante destruccién, la ticrra entera que: darfa muy pronto cubierta por la posteridad de tuna sola pareja. Hasta e! hombre que procrea len- tamente verfa a su descendencia duplicarse en el espacio de veinticinco afios. La destruccién se ‘opera sobre todas las especies y, con frecuencia, hasta entre ellas mismas; el hombre, @ quien el genio y Ia ciencia han puesto al abrigo de los ani- males feroces y que por la potencia de sus armas sa, el més no perecer ahogado, de proceder mismo a sm propia destruccién. Malthus habia dado valor a este hecho y habia deducido de él una ley formulada asf: «La poblacién, oi ningtin obstéculo interviene, tiende a crecer sein una proporcién geométrica: 1, 2, 4, 8 16, etc., mien= tras que Ine subsistencias, en las mejores condicio- nes, no aumentan sino en progresion aritmética: 1, 2, 3, 4, 5, 6, etc.» En otros términos: Siendo Timitada la tierra y no siéndolo Ja reproduecién de la especie, tiene que haber forzosamente un desequilibrio entre los dos factores, y de alif la lucha por la vids. (Continuaré.) Jeanne HUMBERT Plegaria del Amor Libre Dice ast: 1, Toma 41 pétalo fresco y jugoso; toma la pulps dulce devia frata en sarén chin fa senda blangueciaa bajo el sol paniente, Ta colina de 070, el roble, 1a fuente a Tx sombra, oma mis labios 7 iis dientes on de juegan las risus como hiles de agua, y 1es hilos de Fir, “Yo no tengo Cass. Tengo, «6, un techo amable are. xesguerdarte ds. In. lluvie yun Iecho para que Hescaases y me lables de amor. Pero no seago Cara, {.No quieco! No quiero la intaciable ventora que abila 41 Peatamiente, absorde la Volustad, mats el Eneusdo, Tompe le duce tinea de la Par y el Amor, Yo, tea: fo Cast. Quiero amar en sl anchyroin «mde allay que fe cierra ningin muro ni Limite aingua egoloma, TIT. Mi corazéa e6 una rosa de carne. En cada ho jatiene una temuray uga ansiedad. [No le mutiles| ‘Tengo alas para asconder por lae regrones de la im vestigaciga y #1 trabajo. | No las cores | “Tego 12s manos como palmas ablertas para, reco- ger menedae incontabler de carieis, | No incitacién al Buen Amor Mujer, ama sobre tedas-las cosas, Pero antes apren- devel Bien Amor. Ea el Buen Amor paca tanto To alto, como lo bajo; el Peasamiento come Ja Came, 1a Dal. tura como cl’ Deseo; y es incompleto si le falta cual. quiera de estas cosas. Aprende el Buen Amor. Para, €1 se necesita plena libertad, pero también ca- pacitad plena, pues sin ésta la primera es una flecién. No se ¢3 libre més. quo cuands se puede tomar una Gecisidn de entre todas las que la ocasién ofrece; cuam- o se puede elegir un camino tras haber reconocido to. Ace aquilatando sus valores y geaptando aus coneecuen clas, Pere dso es obra de ta Tuteligenca, del Corasdn y de Ia Veluntad, yes preciso perfeccionar los tres si ueremes aleanzar el rango do eeree libroe. Si no es act, Seguiremos ahogando auestra Inguletud entre simula 12 Mujeres Libres ELOGIO DEL AMOR LIBRE A fe eeetoteer tet este feces eterna tay el aseeer ae ent cee eee toate fat) migne'y per ihlama ablida” Sno tecapactas pe ee ae a Sean Re tiatelccoa raeentan ne ames thio perce de oS astnalesy las plantas dls, etss Horstnten Co nesteas pore ab logtrds a eva fCuulya Tecligasathert @uctear i emeyaa Bob peel eenach aiden tees eeeeeipar serous Teoisioy sldaaiin Seabildad y ie alee pate fovrer comp tm masa arroyo, Tecogleade todos Toto. fone taunt alagsie ci deren aca ogee ta catiat eae con feat aatyalauaeees fe pf ue pare moular to catch, pero ‘P Teego extiente Ie Sontiss como una suave coxpen- via Guten Coane eat am ome ea yao ito del tapaa iosiuolg ative Eat ened wore aa are: Techerta ate Wi leado ‘ros, pam llegar | Been ‘Amor, ha tesido que descefir su'venda. © Tiler fama sobre mal Matrimonio y amor Cuando ol hombre perdié la frosca gracia do sve amoies sia’ tabas, ingonuos y-primitivs ; cuando ‘se agosté la inocente aaturalidad de sus pasiones $e yg6 on roplse morales Ia fronca, Ia cordial sendiller del goce cu pleua marcha sobre 1a’ Naturelezaj cuando tl nalito pertumado y voluptucso de las «Canciones de Bliss 20. olvicé. pot enters. cescendié el amor a la categorfa de pecado. Pero como la Vids, sin €l, se ci fancaba con daa eonigoja inexplicable, ee bombies, con tum insane deseo de. vaaganz4, slzaron los pur con: ia Eros y le escapictoa eavel rstio, [Le condenaron feromente, sin pensar que desgraciadon, Por una pasiSe toda una vide de tortar Por la atraccién de ua cla, incontables aos de reDue- aancia, Eros fué despojado de sus alas. Por ng Sule muita cpontgacs sete obliga 6 cx tar mitande siempre el mismo objeto! por tn genera Seana te faked te atuneee tea crete fnisma persona. El Alma humena, tumévily y ia Ver Tuntad, Solidifeata en hielo ‘Del gesto amaraso a» hiso im maimicioso eédigo, muer- toy flo, del més grato y ardiente regalo, sna. com= Draventa bn veces, con su feglemento y tedo} o de una {fez con sa conteato en regia, y 8 ua precio mucho més slevodo, orgue adcnde dl tinea, gue cela pa ‘auy Pose, eaten ea, comoromiso el Coratea y la Lie Seriad, que Jo son tedo para al Amor. ‘Cuando, robeda Ja noblesa, de. toda mantestacion smorota, ya hecha deber, Tes hombres se avergonzsron Teuirds! de tedo lo que babfan mancillads, no hicieron {ino inteatar justitcar su profanacion cou otra més grande, tomada como exeasa el hijo. Y de ato, fa Slaro y ten sencilla, tan divinemente brutal y ta’ pro” fundaibente human, hideron ua nuevo eslatsn y sol- daron Ia cadena para siempre, entre los cobardes. Hix Sleroa tapadujo para su hipserita timides, del bijoy que ‘Bp €3 sino ul punto donde convergen dos culdados dos deberes, pero nunca una justificacién moral de Is que solo el Buen Amor, sobre nosotres, justifen, *Y cegaios los hombres y las mujeres por sf mismos, iguen cayendo en la tramps; y cuando les falta ae. Dieta para encontrar salida, se atraucin el Corazéa y To ponea para puntal del Natrimouio. Uu fruto espléndido: el adulterio Preciaamente porque Ia Vida es Vida, no ex quictud. Somos todos los seres wna doble corraite, que no ctsa tun momento, de entradas y salidas. Bajo esta perma. Aencia aparente de las forsnas, Ia materia y Te cuergta “ios taddalidades de la misma cosa—estan en perpstuo Gait, en un ie y venir sin descanco, Yast el Alma, Por t0,"al seatirse ecida en 10 mds honde, al seat de feradado lo mas noble de su taturaleza, crujio de ¢o- Ibry de espenta, Atin inteatd contenerse en Ia fra unk did’ de s0 tondena pero la Vida cn oa fluir eterno, 20 Jmpuso eon razén, Ast, Ue Ia envilececora aceptacion del matrimonio—contrato y reglamentacien de To. ina- enable surgid coe frato rojo y redondo, replete io. steate,estapendo y promeledbr: ef adulteno. Es Ie protesia natural y humana contra Ta taba pesida a le Undo » impondofabloy y rewvindict, como una earcaja da ffesea, entre burlona y bonrada, el pleno derecho 2 Ta libertad ide amar, #1 deshordamiento! sobre todos lot cauces artifcielss, do In evolucién de le. personalidad, He aqut, come uha coxsecutnca del olvido del verea: dero 461 de Eros y el Hombre, esie doble crimen de Ja misora vida diaria: 1a conviveacia frfa 0 Ia cariia shstintiva y aslada sobre Le Came mide; y ol abandons cclpable micdoto del Soatimionts, valor vaivereel En'suma, amor que a0 es Amoi. La mujer en defensa Cuando bube perdido su losanta gracioss de lio on isto, 1 uty cacingeate mondgasi por inpoiién ino al hombre esancialmente poligamp or aaturalers iiceridad cadacouemanin marteniag, so is cuenta fe'un hecho: In Propiedad, Ea Casa s¢ ceriabe. come ia boce ansiesa y habia ent ella mucho que hacer. La Telia ccc nies Ta mujer, completamente Ignorants ya. del ingeaso. placer ce la vide primitiva, 6 que la Casa 1a excluia de iouss las tareas Ce pro: vedibn, de todes los trabajos piblicns que can derecho ala eubsietoncia. Esta lo vonia por mecto del hombre @ len rendia sus servicios privados, imcluso los sexu. sy se defendié en su nueva position, preocupancose de sfaasas les Iasos que la unis al hombre, ste bombie eo mia y yo soy sty, dije. La Prope ad encogié se pica hatin de sure, gull fos ze ugaantes ojor y todee los rogimence do opresisn. as Hentaron la eitia de sus victinas. e eeiela nts de Ia Concenca, de tn Liberia, dla spontancisad, por la feresponcabiidad y la nagativa a products. Ss Hacia ef Buen Amor Mujer si quieres recobrar Ia cignidad perdi si quieres hallar"un sol nuevo en exe se, saa aig; Sigaires sentir el remmenlo de twalha'y a ioc Siapelar de encontrate a Gales, ascende por In Galera amorone merced to supetacién, Malgtica % Gpicicad de amor, maser, perc onan. qe al teatro wie da derecho sobre nadie ssi te hace cbjeto de propiedad. 13 a rr tl Mujeres Libres Piensa que por muy grande que sean Is pasidn del placer y 41 placer de In pasiSny no deben_ arrastrarte fas Gotente ya al und toca ltiea puedes jar el extravio tas sentides, jamas. debes perder to syoluntad, : Us Piensa que cl hombre amado tiene su alma, sus ideas, sus intereses, a personalidad, en fin, qve solo en algu: os puntos coiadidind ean la tuyay’ pero que Ta mda perfecta colicdencia no supene absoreion del zo por Bote. Pisnea quo os inmoral permanccer en vide comin fatima cuando ro existe una floreceate llusiéa, una ppalpitante Asticiad, un dulee y screno Baca Amor, ua cuando se hayak hecho mil promesas y mil prope: Situs y se hayan ereado mil ligaduras Diodes que el hije mo ex tampoco, mi debe ser, aad de comuniiad amorose cuando ys 0 hay amor; que se le pusde, amar, cuidar, ‘mstruir, protexer, educa, fin sorurae de dl como pretexto pars la mis repagnante de las mentiras. Piensa que por él no se debe montir; que. procs mente por @ 40 debe ser noble, sincero, valeron, {in alm y una accion pavalslas, cos. und fe ¥ uns’ ac ua acordess ‘quo. hay que seitir y haces, 1a verdad a poder enecAdricis Pipledsa que para Uegerul Buen Amor hay que eprene deta trabajar, 4 sentir dolar y testamente, toner ‘spiracioncay a mioyer Ja inceligensse, profuudamonte fnguteta, batia ot Bite tAmor Libre! cae pal trimer pigs und fortes Gray come a dy tone Hip, cous lou lrdotio, clas ol cals CAR se aMen Manet ct canes Rang geen eerie aes aa raise, antes de oes antes de evantant. pidek ee cere ean aes s erin prostis ay Besant cia oder at Aeyeeloseatse Georar nus (aon, el'agua mpetowa, ha de abogat Rar eeeeets aa partes ent eas taent Pee pen alae ence teats eal bs brates te srvan ce aia, sin de bra Rp (ereet api gvmssity: a are nar fesiep nose euseletiite atic? Genus ences Sisnpre, gerey sentinenta, dfie'y sedectay 4 dal alvido, del despresc, dela critics. Esfuerea Peers iutlen ne Vanes a Sadat eee taumstlén de ta teter La vies eft arta yu de it Mijercopoay pecada’ detains tera, soc hn per Ren ciaiate ete tanneries omen es cee Y'por to nabitmente grande; ead hora de is Mujer Webien ta gus se xe aiode van ia ne crease ane eepaaoe er red ay ac Hitnen istlds, eda Grea el nev6 vipo; pon la sal en 1a Vida; el color PaLtea a ee Re pees Ace) Sette aa Enaprende, ayo, couvels Aprende a Gesaparecer y a descargar de tu presen. eg teeta alee heres eat fi sna Bee G elect (keer Lie Envio Yo no tengo Ie Cats, que tira de ti como uns in. comprensiva ‘e implacable garra; ni el Derecho, que te limita y te niega. Pero tengo, Amado, un cario de flores y Rerizonte, donde el Sol te pone por rueda cuando si me mires, Cuando ti me desis... Aurazo POCH Y GASCON — Ee “Mujery Librey SANATORIO DE OPTIMISMO FRACASO TERRIBLE. Ustedes no sabian que mi Sanaterio tiene ws teléjone marovilloso. Puss sh. All-esid al teldfone con su cable velorcido como sn bras amexasador, 0 como un ‘tentdculo que chupara todos fos ruidos de fuera fara trasrios montados en las ondes iswisibles como une cusérilia de viejas chismosas, Si. El teléjone de mi Sanstorio nos cwenta at aldo todas tas cosas que suce- den, todas las que no suceden perque no pueden suceder y las que acontecen y no debieran acontecer nunca ‘Si vieran ustedes a la telefenisa.. Tiene we viva ‘cabexs inteligente, con una rebelde eabellera encres. pata. Cuante habla, porece que todos tos cascabetes del munde se rlen ¥ que todas las campanitas so ba lancean. Sus ojos son dos tuces encendidas de risa; ¥ ‘std constantemente pronta a Wenar et Sunatorio de ‘piruetas y carcajadss, Todo el personal la adore y no poiria pasar sin ella. Su nombre es Imaginacién. He aged to sucedido... Me causa ruber ta confesion, pero debo hacerla. Hemos fracasade exteepitocament Por wt momento pensamos cerrar el Sanatorie..., bere, despude de cambiar imprevioner con ol Médice-director, hemos modificado murstro parecer. Hay entermos ents ramente incurables y esto no debe devanimarnos. Era wn domingo Wuvioso cuando ol timbre det tlt Jono Wend de chillides toto et etificio. Y 1a senorita Inaginacién, nuevo timbre palpitante, nes dijo la ne ticia a través do Ine dependoncias: tres, y ast hasta todas las que haw de hacer al pridtico hondas revetaciones, Desputs a fa j Eguin 14 pubtico mire Los dordaditos balgaros y tos estampades de los vests de las Feministes mimero une, minere dos, wimere tes, tie., j ellas v0 siewlan. Luego te Levanta la grimere, despues le segunda Cuande empesaron las revelacioner, ol terror det eanipo de urgencia ful tan grande, que les camilleres Sujrieron wn sincepe cada eno y Aube que Uevarles 4 una Farmacia, Silo ol doctor Buen Humor, ya templedo tn la lucha, fudo resist. Se tratahe de lamentarse porque las mujeres no fucken ser fscates 2 porgue. cnarile contratan ou amor no 0 hace 1m previo andlisis quimico de las cenisas de fa farte con- traria. Luego, de meter a les mites en grandes eajas Ze cartin evendo se declare Le. guarre, 7 marcharse as madres al frente hasta que tos ninos cretcan mucho, mucho, dentro de sus cejitas, Desfuti, de hacer com prowder a lar gentes lo molisima gue es ol Amor Libre, ues por su culpa nzcen ninos sin permiso det Jes; ¥ de proponer contre estos téxicos de Amor y Libertad to tico romeo, el Matrimonio, que acaba. con la Libertad, 9 como hace otro tanto con el Amor, te ‘malan dos pijaros de vn tira, gue siempre es 1a reonomta. Fub en ono que el doctor Buen Humor intentera snasyar remsdios horoices, A dos ¢ tes inyecsiones que puso, por sorprera, de ou breporado expecial, wm alcatvide exiraido de ta “Sonrisas Eternus”, planta perenne de las bilabiades, se le respondis com obror lantor estacanos. Y se vid precisato a atandonar ta reunion. Liagh cabislajo, arrasrande por los fies a lor cami- eros y dejando tobe el instrumental on al lugar de la derrota, Cuendo me refirié ou pena, diatoganies merlaneblice- mente Deja que se entretingan tas “mujeres de su cosa” com ests bromas ds lee quince aft, gue mo tom tin tina manitesiacion de Le crisis hormonal do to tw dertad.. (Los muros. det Sanatorio abrierom ta. boca de siombro) Ti y 30 sonoremos com suprimir fiscales y nota- ios pare que las mujeres no lengan ene apetecer casas Iimedes, sombriar y esliticas, Tit 9 yo s0Raremos Que no hey gue esconder a los nines porque tk amor ha lerminado las guerras; y que los Mijas pueden acer tn pas 9 sosiego sin que los hombres tangan que asustarse or s4 venida; y que los Jucces se dedicen « der permiso pore que las encinas dew beliotes... Tembibn soflare mos que no hay Jusces... Lr puse las manos sobre les hombres y nos miremos. EL Mélico-director ma preguat: ‘Majeres Libre: Stole dije. EL Lector Buen Humor sonris; 24 ilumind mds al cielo, y en todas las farmacias del mundo bajd la cijra de ventas del bicarbonate sditco, Entonces tecidimes contar el jrécaso para que tas gentes de buena voluntad temen ejemplo DRA, SALUD ALEGRE —sHas pasado te noche con ei docter Suche Felis? JORNADAS DE LUCHA Las mujeres de Andalucia siguen en vanguardia DOS HEAMANAS.—En la Cesa consorvera de aceltunas Lisén, quinfentos operarios faensros fonoleros se habfan doclarado en helga, ante la negativa del pattona & concedorioa Ia simena. de ‘vacaciones que fife la ley. Ba trance do perder el mevitnionto, iros sil mujeres que trabajan cn 1a mcustia "se deciararon espontiaeaenta ‘en ucloa de braves caldos. Ast permenetleror, dos dias con jos toncloces.pertonccian a Ta U. G, T., Ia tén -aillldas a Ia C. N. Tn (De los diarios de estos dins,) Hemos recogidd coe tclegrama con énimo de comentarlo; luego hemos mirado nuestra phima con un poco de:decepeién. ¢Comentario? ¢Para qué? Entre un férrago de palabras altisonantes no logra rlemtos. més que emborronar él hecho. Asi, lacénico y escueto, el telegrama conserva el sentido puro, Ja grandeza toda de'la accién. Nunca como hoy hemos pensado en la pobreza de nuestro oficio, eseribin, hilvanar palabras, mientras otros exculpen hechos, realidades, en la materia candante que es la vida Acombra y aturde, emociona, ver el paco firme con gue la mujer e ha echado al camino. Selida apenas del no ser, afirma su personalidad, su concepto recién adauirido, y-va sunerado, de las cosas Concepto que no es ya concepto, sino realizaci6n total: solidaridad por-encima de todo, absolutamente de todo Io que separa. La mujer purificaré los tépicos, dard cuerpo. volumen, sentido valorable « las palabras: no serin ya étas nunca més materia de evasidn, puente Ievedizo, sino términos, ideas en acoién, hschos redondos y lisos que ixemos empujando delante de nosotros como nuestra justifieacion mas plena. Pero basta. Esté trazado el camino: a seguir. Una sugerencia de las obreras del hogar Nos legan unas cartas de mujeres, en Ias que Ia cspesuira de faltas de ortografin no impide ver In injusticia que acusan y la justicia que reclaman. Estes cartas proceden de muchachas de servicio aue nos piden ayuda para su nueva orientacion Como ereemos que entre todas las cl: triste situaci6n, acozemos con el mayor Urge le sustitucién de la clésica sirvienta—ein pereonalidad, sin derechos, sin consideraciones, sin dad de pertona libre—por Ie obrera del hogar, mujer de earne y hueso, con unas obligaciones definidas y remuneradas y duefia de una parte de sus horas, de gu vida, Es decir, con su jornada de trabajo como otra obrere cualquiera, con un sueldo que le permita pagarse su habitacién—porque Ia obrera del hogar no ha de tener Ia obligacién de respirar hasta en el suefio el ambiente de Ins horas de tarea, que es como sj el albafill durmfera en el andamio o el fogonero junto a la mAquina—y con tun trato que no trascienda a distancia de castas. Para llegar a esto tienen que perfeccionar suis organizaciones—a las que no deben ir solamente a cotizar y a cambiarse unos cuantos t6picos— y hacer de ellas no sélo un drgano de lucha, sino también tuna eactela profesional del hogar tan eficaz y bien organizada como las gue ya existon’en Inglaterra, ten Estados Unidos, en cualauier pais civilizado. Sélo asf desaparecera Ia situaci6n de tremenda infe- rioridad de Ja muchacha gue al leger del pueblo tiene que entregarse a Ja «caridad» de Ia sefiora que la acoge, Ia etisefia... y Ia explota, por todo lo cual ha de quedarle eternamente agradecida, Slo con ‘Al periodo de aprendizaje que tiene todo oficio Ia sirviente se transformara en obrera, de mujeres mhs o menos esclavizadas éstas son Ins de mée 18 Mujery Librer 1An, las mujeres de] Quijote... No sélo Iss edaliccas mie 9 menot vela- as, sino también as otras, las cam- 108 GENERACIONES SIN QUI- fracassroa, 9; cllor estaban en ol JOTE ppesinas, las pastoras, las eefioras. To. das tevelan una vision de eparvenu» el Mundo femenino, Se gelva la mi jer entelequia—Dulcinea—como crea cia poétieas pero en euanta Ta can vierte en realidad ya no es sino wa secreto; en el Secreto de Ia salvacién dol pals. En dot genersciones de abstencién _Y elloeLoe politicos —no rectifican mora rollisa, Y es que Cervantes nine absoluta del Quijote y todos sus deri- ni siquieca cuando les Wega la hora ca pudo pasar de las mozas rollizas, vados, los espaoles se purificarian de de la muerte; ex decir, de entcegar Tenfa en este aspecto el catetismo to muchas taras atdvicas que parecen 1a- la cartera, {Si los hubleran dejado!... dayia hoy caracteristico de muchos ciales. Y Ia estimacién de los espa intelectuales espafioles deslumbrados oles ascenderia en el Mundo, Lov a wate la sola presencia carnal de la extranjetos nos ven desfavorablemen- te—exactaments, en muchas cosa— porque not vena través del Quijote, Nuestras cualidades negativas son en ‘gran parte las que el Quijote nos de- fine, nos sugiere y nos cultiva, A sa- ber! La locura de una diseiplina ética Nevada a. un rigor que imposibilita toda accién eficaz, Tmaginar que los libros de caba- Ilerla. se puoden realizar, y eustraer te por tanto a la tealizacisa de lo po- ible y necesario, ‘Los niios espatiotes vienea al mun ™W&T do con hereneias terribles tubere * losis, siflis, mesiaaismo—es deci, is: Sin embargo, e) Quijote tiene al- drismo: que aren Ios Angeles Y gars seesusnies, ne dems, y tal vex como sintesis, qui- "Por ejemplo, un gran prélogo. Un jotismo, “Cuatro siglos de hetencia marevillose’ pedlegor Un prdlego Acumulada de Quijote, de lecturas es diante de Inteligeacia pura, colares del Quijote, de refranero del “Yuna innegatle utilidad para os Quijote, de comentarios flolégicos del extranjeros, a quienes beneicia tanto Quijote, de exaltaciones pedagdgicrs como a lor espafoles parjadica, As del Quijote, de imitacionos literarias racjonalided perfecta no le va mal Ia el Quijote, constituyen un obstdculo exaliaciéndesenfocada, del. Quijote demasiado serio para el desarrollo de A su hiblio del ordenado pensar, el Me y necesatos ina) qe yo UB® esbonaneided facona, reine gts tl desiado fa ee ahr ae eee cae * Daca log extranietos ai etd bien et Heer ee eta sausrte purn La guerra ex Hempre y on todo ca: Qulfole. Que alemés; come hs dicho ‘eae? el burro, co tn aia setae, Lapante te fue ™ ngtista espafol, gana traducido, "Todo crto es, para el buen jaicio fatal a Cervantes. Le cercens ol bra. _ Pe? en Espaila, doo. gencraciones exact de los extranjer quijotiemo, Expafa: Inu: * yuijote, 20 y Tas alas de la imaginaciéa. Le Pot Jo menos de abstenciéa rigurose aad,” agiié wn exotiime tamplon que not Quijote y de sus derivados, Jog16 pasar de Argel: aquellos la Bea mentables cuenteritos moriseas con Aunque pareren mentina, hasta quellas pobreciias odaliscas, veladas +E sia Secciéa daremos. nota: de uestros politicos evan dentro Quijote, {Sia ellos Tes dejaran! jSi # ollos ies hubleran dejado! Ellos no ods, inctadora de'un sersuasme cuanto! bres se. nos remit. dos eecanececad Gemplanes, yes “senparemos sme a Pliameate de aquellos que, a nuestro * Juicioy Ib meresean, A nuestros corresponsales y suscriptores En nuestro miimero anterior anunci&bamos el envio del presente a re- embolso para aquellos suscriptores que afin no hubieran hecho efectivo el importe de su aboro: sin embargo, y teniendo en cuenta que esto supondria un gravamen sobre Ia suscripcién y para muchos de ellos supone ya un sacrificio el pago de ésta, s6lo lo hemos hecho a aquellos que nos dieron ‘sa conformidad, anunciando a los restantes que no recibirén el mimero 4 de In Revista si antes no han efectuado el giro correspondiente. Igualmente advertimos a nuestros corresponsales que atin no han girado el importe de los dos paquetes enviados, Io hagan antes del dia 10 de agosto préximo: de lo contrario, suspenderemos los envios. 16 COMITE DE BEDACCION: Mercedes Comaposada Guillén Amparo Poch y Gascon Lucia Sénchez Saor Hadrid:-Pasvo do Sesta Maria Ue la Cabera, 26 Precio de suscripcisn: Lepatia, Portugaly Amézice, Semenre, 2140. AZo, 489 Pare el extanjero aladir importe del feanqueo 40 céntimos,

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