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Nombre y Apellido: Sandra Adriana Ordoñez.

D.N.I: 29.575.858

Comisión: 0026

Del texto de Fermín Chávez, La libreta de Rosas lo que me llamo la atención es el siguiente párrafo:

“La mejor cosa que podéis dar a nuestros enemigos es el perdón; a nuestra compañera, si es buena,
vuestro corazón, y lo que puedas, para que tenga con que vivir después de tu muerte; a un amigo
verdadero vuestra lealtad, estimación y consejo; a vuestros hijos, lo que fuese justo, buenos
consejos, buenos ejemplos, si es que ellos os aman y corresponden fiel, amorosa, y verdaderamente;
a vuestros Padres, vuestro verdadero amor, diferencia, y todo cuanto puedas hacer, y dejarles en su
favor, y consuelo, y una conducta que los haga orgullosos de vos; a todos los hombres, y a todas las
mujeres, compasión y caridad; y a vos mismo, todo cuanto pueda ser bueno para tu bien estar en
esta vida, y para tu descanso, y gloria eterna, en la otra”.

Opinión Personal:

Nos habla desde una perspectiva humana, valorando todo lo que tenemos a nuestro alrededor el
amor por la familia y por los amigos, el perdón hacia nuestros enemigos después de todo lo que
cuenta es estar bien con nuestra conciencia a la hora de morir para poder tener un buen descanso
final y encontrar la gloria eterna.

Nos deja una gran enseñanza ya que el perdonar a un enemigo es algo demasiado difícil de lograr ya
que uno nunca termina de olvidar el daño que nos pudieron haber ocasionado y el rencor siempre
queda en el interior de uno, perdonar no es una tarea tan sencilla y mucho menos si se trata de un
enemigo.

Habla también de velar por el futuro de la compañera de vida de cada hombre quien ante una
situación de estas características como lo es la muerte quedara en total desamparo tanto en su
economía como en sus sentimientos.

Nuestros amigos se llevan de uno los buenos momentos vividos, la lealtad, la estimación y los
consejos que pudimos brindar. Lo que valora son emociones y no materialismo en esos recuerdos.

Nuestros hijos los buenos consejos, buenos ejemplos, si es que ellos os aman y corresponden fiel,
amorosa, y verdaderamente;

A vuestros Padres, vuestro verdadero amor, diferencia, y todo cuanto puedas hacer, y dejarles en su
favor, y consuelo, y una conducta que los haga orgullosos de vos;

A todos los hombres, y a todas las mujeres, compasión y caridad;

A vos mismo, todo cuanto pueda ser bueno para tu bien estar en esta vida, y para tu descanso, y
gloria eterna, en la otra.