EClinicalMedicine 20 (2020) 100297

Listas de contenidos disponibles en ScienceDirect

EClinicalMedicine

revista Página de inicio: https://www.journals.elsevier.com/eclinicalmedicine

Trabajo de investigación

Discriminación de género y síntomas depresivos entre mujeres en edad fértil: estudio de

cohorte ELSPAC-CZ

Irena Stepanikova un , C , * , Sanjeev Acharya un , Safa Abdalla segundo , Elizabeth Baker un , Jana Klanova C ,
Gary L. Darmstadt segundo
un Departamento de Sociología, Universidad de Alabama en Birmingham, Birmingham, AL, EE. UU.
segundo Departamento de Pediatría, Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, Stanford, CA, EE. UU.

C RECETOX, Facultad de Ciencias, Universidad Masaryk, Brno, República Checa

ARTÍCULO INFO RESUMEN

Historial del artículo: Antecedentes: La depresión es aproximadamente dos veces más frecuente entre las mujeres que entre los hombres. Las teorías sociales sugieren que la
Recibido el 30 de octubre de 2019 Revisado el 10
discriminación es una vía a través de la cual las desigualdades de género afectan a las mujeres ' s vidas, pero faltan datos. Este estudio de cohorte evalúa si
de febrero de 2020 Aceptado el 13 de febrero de
la discriminación de género percibida está relacionada con síntomas depresivos entre las mujeres en edad fértil.
2020 Disponible en línea el 4 de marzo de 2020

Métodos: Se obtuvieron datos de 4.688 participantes inscritas en el embarazo en 199192 en el Estudio de cohorte longitudinal europeo del
embarazo y la infancia, República Checa. La discriminación de género percibida se evaluó en la mitad del embarazo, séptimo y undécimo año.
Palabras clave:
Los síntomas depresivos se evaluaron utilizando la Escala de Depresión Postnatal de Edimburgo en ocho puntos de tiempo entre la mitad del
Género
embarazo y el año once después del parto. Se estimaron modelos lineales mixtos de componentes de error de síntomas depresivos.
Sintomas depresivos
Salud mental
Recomendaciones: La discriminación de género percibida, reportada por el 10,7% de las mujeres, se relacionó con síntomas depresivos más altos, tanto en el
análisis no ajustado ( b = 0,15 [95% con fi intervalo de dependencia (CI): 0.12, 0.19], p < 0,001) y en el modelo totalmente ajustado ( b = 0,12 [IC del 95%: 0,09;
0,16], p < 0,001). Se incluyen las covariables relacionadas con síntomas depresivos superiores fi las dificultades económicas b = 0,12 [IC del 95%: 0,10; 0,14], p
< 0,001), negligencia emocional / física infantil ( b = 0,18 [IC del 95%: 0,14, 0,22], p < 0,001) y abuso sexual infantil ( b = 0,04 [IC del 95%: 0,03, 0,06],

p < 0,001); una relación inversa fue evidente para el apoyo social (0.05 [IC 95%: 0.07, 0.04], p < 0,001) y tener una pareja que realiza tareas
domésticas estereotipadas por mujeres ( b = 0,03 [IC del 95%: 0,05, 0,01],
p = 0,001).
Interpretación: los fi Los hallazgos proporcionan el fi Primera evidencia de que la discriminación de género percibida está asociado con
síntomas depresivos entre mujeres en edad fértil. Los programas de intervención social destinados a reducir la discriminación de género pueden contribuir
potencialmente a mejorar la salud mental de las mujeres.
Fondos: Fundación Bill y Melinda Gates.
© 2020 Publicado por Elsevier Ltd. Este es un artículo de acceso abierto bajo la licencia CC BY-NC-ND.
( http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/ )

1. Introducción
La depresión es una de las principales enfermedades crónicas y causas de discapacidad a nivel
mundial y afecta a más de 260 millones de personas en todo el mundo. [1] . En comparación con los
hombres, las mujeres tienen aproximadamente el doble de probabilidades de sufrir depresión. [2] . La
preponderancia femenina es evidente en los síntomas autoinformados y en los diagnósticos médicos de
episodios depresivos [ 3 , 4 ] y la carga de la discapacidad debido a un trastorno depresivo [1] . La brecha de
género en la depresión surge desde los once a fi quince años [5] y persiste por el
* Autor para correspondencia en: Departamento de Sociología, Universidad de Alabama en Birmingham, 1401
University Drive, Birmingham, Alabama, EE. UU.
duración de la edad reproductiva. Embarazo, posparto y peri - los períodos menopáusicos muestran
un mayor riesgo de morbilidad debido a la depresión [ 6 , 7 ].
Las razones de la brecha de género en la depresión siguen siendo poco conocidas, pero la
desigualdad de género probablemente juega un papel. Las teorías socioculturales enfatizan la
persistencia de la desventaja femenina en áreas económicas, políticas, sociales y relacionadas con la
salud. [8] . A nivel mundial, las mujeres tienen menos escolaridad, menores tasas de empleo [9] , menos
poder político [10] y mayores tasas de pobreza [11] y analfabetismo [9] Que los hombres. Las mujeres
trabajadoras están sobrerrepresentadas en ocupaciones con salarios más bajos y a las mujeres se les
paga menos que a los hombres por el mismo trabajo [12] . En las familias, las mujeres suelen cargar con
la carga del cuidado de los niños y las tareas del hogar; En consecuencia, muchas mujeres empleadas
experimentan estrés y tensión debido a las demandas competitivas de la vida laboral y familiar. " el
segundo

Dirección de correo electrónico: irena@uab.edu (I. Stepanikova). cambio " o " pobreza de tiempo " fenómeno [13] . En muchos países, la

https://doi.org/10.1016/j.eclinm.2020.100297
2589-5370 / © 2020 Publicado por Elsevier Ltd. Este es un artículo de acceso abierto bajo la licencia CC BY-NC-ND. ( http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/ )
2 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297
Investigación en contexto
Evidencia antes de este estudio
La depresión es aproximadamente dos veces más frecuente entre las mujeres que entre los hombres.
La discriminación racial / étnica se ha relacionado con los trastornos depresivos entre las mujeres,
pero la evidencia sobre el vínculo entre la discriminación de género y los síntomas depresivos es
escasa. La revisión de la literatura se realizó utilizando la base de datos PubMed y los términos de
búsqueda.
' discriminación de género ',' los prejuicios de género ' y ' sexismo ' en combinación con ' depresión
' y ' sintomas depresivos. '
Valor agregado de este estudio
los fi Los hallazgos proporcionan el fi Primera evidencia de que la discriminación de género
percibida se asoció con síntomas depresivos entre las mujeres en edad fértil. Además, las
cohorte poblacional de mujeres checas que fueron seguidas durante aproximadamente once años,
mujeres que denunciaron discriminación por motivos de género tenían otros riesgos, como fi dificultades
comenzando a la mitad del embarazo. Los datos nos permitieron considerar las consecuencias a
económicas, menor apoyo social y exposición a la negligencia y el abuso durante su
largo plazo de la discriminación de género percibida para la salud mental de las mujeres en edad
infancia, lo que sugiere que la discriminación de género se cruza con otros ejes de
fértil, al tiempo que contabilizan una serie de covariables demográficas y relacionadas con la salud
desventaja. El apoyo social y tener una pareja que realiza tareas domésticas estereotipadas
que varían entre las mujeres. ' s vidas.
femeninas fueron protectores.
Implicaciones de toda la evidencia disponible
Los programas de intervención social destinados a reducir la discriminación de género
pueden contribuir potencialmente a mejorar la salud mental de las mujeres.
la mayoría de las mujeres ' El trabajo se realiza en el sector informal, donde faltan salvaguardias y la
remuneración es baja.
Un reciente Lanceta La serie sobre igualdad de género, normas y salud destacó las
implicaciones adversas de la desigualdad de género y las normas restrictivas para la salud de
mujeres, hombres, niños, niñas y minorías de género. [14] . La discriminación de género se avanzó
como una vía potencial a través de la cual la desigualdad de género " se mete debajo de la piel " y
daña a las mujeres ' s salud [15] . La discriminación se refiere al trato injusto basado en la pertenencia
a un grupo social subordinado que surge de patrones de dominación social y lucha por mantener el
poder y los privilegios. [dieciséis] . La mayoría de los estudios sobre discriminación se centran en
factores raciales / étnicos y documentan sus vínculos con la depresión, la ansiedad, el abuso de
alcohol, el tabaquismo y una salud general más deficiente. [17] . También se ha observado una peor
salud mental entre las personas que informan de discriminación basada en el idioma [18] , obesidad [19]
e identidad no heterosexual [20] . En particular, rara vez se ha estudiado la discriminación basada en
el género. Ningún estudio, que sepamos, tiene especi fi Considerada discriminación de género
percibida en relación con las consecuencias para la salud, como la sintomatología depresiva, en una
muestra poblacional, aunque los estudios con muestras de conveniencia más pequeñas sugieren
efectos nocivos de la discriminación de género. El sexismo percibido en una muestra de mujeres
universitarias se relacionó con el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo [21] . En otro estudio,
las mujeres universitarias que informaron sobre eventos más sexistas tuvieron un promedio más alto
de enojo, menor comodidad y menor autoestima [22] . En una muestra comunitaria de mujeres
afroamericanas en desventaja socioeconómica, obtener una puntuación más alta en una escala que
combina eventos racistas y sexistas se relacionó con un menor bienestar existencial y una mayor
ansiedad; este estudio, sin embargo, no distinguió entre discriminación racial y de género [23] . Otro
estudio de mujeres afroamericanas informó que los eventos sexistas, pero no los eventos racistas,
predijeron angustia psicológica [24] .
La discriminación de género se superpone con el sexismo, aunque este último es un concepto
más amplio que incluye creencias, actitudes y normas sociales además de prácticas y acciones
discriminatorias. La discriminación de género se manifiesta de diversas formas, como el
comportamiento interpersonal con prejuicios de género; políticas institucionales injustas; barreras
estructurales para
educación y oportunidades en profesionales, fi reinos financieros y políticos; trato desigual dentro de
la familia, en el trabajo y en las interacciones con las instituciones; así como microagresiones, objeto
sexual fi cación, lenguaje sexista y supuestos de inferioridad intelectual y física de la mujer [ 25 , 26 ]. Es
importante destacar que, al igual que otras formas de discriminación, la discriminación de género
percibida es estresante para la víctima. De hecho, se argumentó que la discriminación percibida
como un factor de estrés es más dañina en comparación con otros eventos y circunstancias
estresantes porque es incontrolable y " porque está ligado a identidades sociales valoradas e
inmutables. " [ 21] Partiendo de la idea de que el estrés es un aspecto inherente de la experiencia de
discriminación que tiene consecuencias adversas para la salud mental, planteamos la hipótesis de
que la discriminación de género percibida está relacionada con un mayor riesgo de síntomas
depresivos.
El objetivo de este estudio fue probar esta hipótesis utilizando datos longitudinales de una
2. Métodos
2.1. Declaración de datos
Los datos pueden solicitarse en www.elspac.cz .
2.2. Muestra
Los datos se obtuvieron de la parte checa del Estudio de cohorte longitudinal europeo del
embarazo y la infancia (ELSPAC-CZ). La Organización Mundial de la Salud inició una serie de
estudios ELSPAC para investigar la salud maternoinfantil en varios países europeos. Para incluir
poblaciones rurales y urbanas, ELSPAC-CZ seleccionó para los sitios de estudio Brno, una gran
metrópoli, y Znojmo, una pequeña ciudad cercana. Los nacimientos elegibles fueron toda la
población de nacimientos en Brno y Znojmo entre el 1 de marzo de 1991 y el 30 de junio de 1992.
Los registros de salud estaban disponibles para 7589 nacimientos, el 96% de todos los nacimientos
elegibles. [27] . Una submuestra de mujeres embarazadas ( n = 4811) fue contactado a las veinte
semanas (en adelante a mitad del embarazo) y completaron cuestionarios de referencia. 4688
mujeres (97%) respondieron a las mediciones de depresión en la encuesta de línea de base y fueron
incluidas en nuestra muestra analítica. Los cuestionarios de seguimiento se enviaron por correo a fi quince
puntos de tiempo entre el nacimiento y la edad del niño diecinueve años, en intervalos que van de
seis meses a cuatro años. De la muestra de referencia original, 4689 mujeres (97%) respondieron a
una o más preguntas a los seis meses, 3645 (76%) a los fi cinco años, 2609 (54%) a los once años y
1712 (36%) a los fi quince años. Debido a la alta deserción en la última edad, utilizamos los datos
recopilados durante el intervalo entre la mitad del embarazo y once años después del parto. Piler y
col. [27] . y
www.elspac.cz proporcionar información detallada sobre cohorte pro fi le y metodología ELSPAC-CZ.
2.3. Medidas
Los síntomas depresivos, el resultado principal, se midieron utilizando la Escala de depresión
posnatal de Edinburg (EPDS), diseñada originalmente para evaluar la depresión durante el embarazo
y la fi primer año posparto
[28] y posteriormente validado también en otras poblaciones [29] incluidos los adolescentes [30] ,
adultos jovenes [31] , mujeres de veinte años o más
[32] y peri - mujeres menopáusicas [33] . Los encuestados de EPDS califican sus experiencias en los
siete días anteriores utilizando diez elementos como " Me he sentido triste o miserable " y " Me he
sentido tan infeliz que he estado llorando "( 0 = " Nunca ", 3 = " La mayor parte del tiempo ”). Las
puntuaciones de 12 13 o más se interpretan como probables clínicamente significativas. fi depresión
del canto, aunque se recomiendan valores de corte de 10 11 para la detección
 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297
practicantes [29] . En el presente estudio, las puntuaciones de EPDS no se dicotomizaron, sino que
se trataron como continuas (rango 0 30) para tener en cuenta la gama completa de síntomas
depresivos en una población general de mujeres y mejorar el poder estadístico. EPDS se ha utilizado
para el seguimiento a largo plazo de mujeres embarazadas y la evaluación de trayectorias
longitudinales de depresión. [34] . En una población de mujeres británicas, mostró relativa estabilidad
entre el embarazo y los años ocho a once posparto y un ligero aumento entre los años once y
dieciocho. [35] . EPDS se ha utilizado en países de ingresos altos, medios y bajos, incluida la
República Checa [36-41] . El presente estudio utilizó puntuaciones de EPDS recopiladas al inicio del
embarazo (mitad del embarazo), después del parto, a la edad de seis meses, dieciocho meses, tres
años, fi cinco años, siete años y once años.
La discriminación de género percibida, el principal predictor, se evaluó en la mitad del embarazo
y en los años siete y once después del parto. Se preguntó a los encuestados, " ¿Dirías que durante los
últimos doce meses alguien te trató injustamente por tu género? " La medida captura a los
encuestados ' percepciones de si han experimentado alguna discriminación de género ( " si ") vs no
discriminación de género ( " No ”). Los autoinformes de discriminación percibida se utilizan
comúnmente para evaluar la discriminación en estudios observacionales. [17] . Se han aplicado
medidas similares a la discriminación por motivos de raza, etnia, idioma, religión, identidad sexual y
obesidad [ 17 , 19 , 42 ].
Las características de fondo consideradas como posibles factores de confusión incluyeron el
estado civil (soltero, casado, divorciado / separado, viuda) y la edad al momento del parto. Para
representar la paridad, usamos mujeres ' s informes de si ya tenían hijos, recopilados a mitad del
embarazo. Embarazo con el fi el primer hijo se codificó como 1; niño de segundo / alto orden como
0. Las características del parto se extrajeron de la documentación médica e incluyeron el sexo del
niño (masculino frente a femenino), bajo peso al nacer (<2500 g) y parto único frente a gemelo. El
estatus socioeconómico estuvo representado por años de educación al inicio y un fi escala de
dificultades económicas administrada en tres, fi cinco y siete años después del parto. Las mujeres
calificaron lo dif fi El culto era proveer para su familia comida, ropa, calefacción, pagos de alquiler /
hipoteca y cosas para su hijo. Cada uno de estos ítems fue calificado en una escala de cuatro puntos
de 0 = " No dif fi-
culto " a 3 = " Muy dif fi culto ”. Se utilizó una media para representar fi dificultades económicas. Coef alfa fi Los
clientes de confiabilidad variaron de 0,88 a 0,93 a lo largo de los puntos de tiempo, lo que indica una
confiabilidad de buena a excelente.
El apoyo social percibido (por lo tanto, el apoyo social) se midió al inicio del estudio utilizando
una escala que consta de fi cinco artículos, " ¿Con cuántas personas puedes hablar sobre tus
problemas personales? "" ¿Cuántas personas te hablan de sus sentimientos internos? "" Cuando
necesite tomar una decisión importante, ¿con cuántas personas puede discutirla? "" ¿Cuántas
personas de su familia le prestarían 1000 coronas checas si las necesitara? " y " ¿Cuántas personas
de tu familia te ayudarían en un momento de necesidad? " Las categorías de respuesta para cada
elemento fueron " nadie, "" una persona, "" dos o tres personas, " y " más de tres personas, " codificado
como 0, 1, 3 y 5, respectivamente, para representar el número de personas que brindan apoyo. Se
usó una media entre los elementos para indicar el número promedio de personas de apoyo en el
encuestado ' s vida. El coeficiente alfa fi El cliente de fiabilidad (0,78) indicó una fiabilidad aceptable.
La división por género del trabajo doméstico se evaluó a los dieciocho meses, tres años, fi cinco
años, siete años y once años utilizando preguntas sobre la participación en las tareas del hogar. Se
preguntó a los encuestados quién realizaba las compras, cocina, limpieza, cuidado de los niños y
reparaciones del hogar. Las categorías de respuesta fueron
" 1 = Siempre yo, "" 2 = " Mayormente yo, " 3 = " A veces yo, a veces mi pareja "
4 = " Mayormente mi socio ", y 5 = " Siempre mi socio. " Los valores más altos indican una mayor
participación del compañero en cada tarea. Las reparaciones del hogar se codificaron como tareas
estereotipadas masculinas. Las tareas restantes se codificaron como tareas estereotipadas femeninas.
La negligencia durante la infancia se evaluó mediante las siguientes preguntas: " ¿Te sentiste
emocionalmente desatendido cuando eras niño? " y " ¿Fue descuidado físicamente cuando era niño, por
ejemplo, no se le alimentó o vistió adecuadamente? "
3
La negligencia infantil se codificó como 1 para las mujeres que respondieron " si "
a cualquiera de las preguntas y 0 para las demás.
El abuso sexual durante la niñez se evaluó mediante nueve preguntas, tales como, " Durante su
niñez y adolescencia, ¿alguien intentó tener relaciones sexuales con usted sin que usted lo
entendiera y consintiera? "(" si " vs. " No ”). Un indicador de abuso sexual se calculó como un recuento
de " si " respuestas, lo que arroja una escala de 0 a 9 con puntuaciones más altas que indican una
mayor exposición al abuso sexual.
2.4. análisis estadístico
Los análisis se realizaron utilizando el software estadístico Stata, versión
15. Después de calcular estadísticas descriptivas y realizar pruebas bivariadas, estimamos una serie
de modelos lineales mixtos de componentes de error para tener en cuenta las tendencias temporales
y las mediciones repetidas. El resultado, la puntuación EPDS, indica sintomatología depresiva y se
transformó utilizando el logaritmo natural para aproximarse a una distribución normal. La principal
variable explicativa fue la discriminación de género percibida. Para los predictores que varían en el
tiempo que no se recopilaron en todas las oleadas de recopilación de datos, se asumió el valor más
cercano para esa variable en el tiempo. Por ejemplo, se asumió que la discriminación de género
percibida seis meses después del parto (no recopilada) era la misma que la discriminación de género
percibida en la mitad del embarazo (recopilada), y la discriminación de género percibida en fi Se
asumió que cinco años después del parto (no recopilado) era lo mismo que la discriminación de
género percibida a los siete años después del parto (recopilado). Esta técnica nos permitió usar
todos los datos posibles y hacer que las covariables que se evaluaron en ondas seleccionadas solo
variaran con el tiempo. Esto se hizo con todos los predictores para que todas las ondas en las que se
recopiló EPDS pudieran incluirse en los análisis. El modelo 1 investigó la relación entre los síntomas
depresivos y la discriminación de género percibida, controlando el indicador de tiempo codificado
como años desde la línea de base. El modelo 2 agregó características sociodemográficas
enumeradas en tabla 1 para controlar por confusión. El modelo 3 retuvo las covariables con signi fi efectos
de canto en p < 0.05, que incluía fi diferencia financiera fi cultos, apoyo social, maltrato infantil, paridad
y género infantil. Los análisis adicionales evaluaron si la relación entre la discriminación de género
percibida y los síntomas depresivos variaba según la significación clínica fi depresión de canto basal
(CSDB), de fi nido como SEPD 11 [28] . El propósito era comprobar si esta relación se limitaba a las
mujeres que ya estaban deprimidas al inicio del estudio, ya que pueden haber aumentado las
percepciones de discriminación de género. La interacción entre la discriminación de género percibida
y la CSDB se incluyó en los modelos completos y se estimó un modelo adicional con una submuestra
de mujeres sin CSDB. Para tener en cuenta las pérdidas durante el seguimiento y los datos faltantes,
todos los análisis utilizaron múltiples imputaciones con ecuaciones encadenadas [43] , también
conocida como imputación multivariante de regresión secuencial [44] . Las imputaciones se realizaron
en la versión amplia (una observación por individuo) de los datos. Siguiendo las mejores prácticas,
no imputamos valores perdidos para la variable dependiente [45] .
3. Resultados
Los participantes eran principalmente mujeres casadas (86,7%, 95% con fi-
intervalo de dependencia [IC]: 85,2, 88,3) con aproximadamente doce años de educación (media =
11,87 años, error estándar (std err): 0,04) ( tabla 1 ). Alrededor del cuarenta por ciento de los
participantes estaban esperando su fi primer hijo al inicio del estudio (IC del 95%: 38,5; 41,3). La
mayoría de los embarazos resultaron en un parto único (98,0%, IC del 95%: 97,5, 98,4) de niños con
peso normal (95,1%, IC del 95%: 94,5, 95,8). Más de una cuarta parte (28,2%, IC del 95%: 26,6, 29,9)
de las mujeres informaron negligencia emocional o física durante la infancia y la media en la escala de
abuso sexual fue de 0,50 (error estándar: 0,02).
El promedio de síntomas depresivos en la escala EPDS al inicio del estudio fue de 6.53 (error
estándar: 0.07) y fue similar varios días después del parto (media = 6.52, error estándar: 0.07).
Alcanzó un nadir al año (media = 6,03,
4 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297

tabla 1
Características de la muestra al inicio del estudio: Mujeres de la cohorte ELSPAC-CZ.

Discriminación de género Todas

Si ( n = 508) No ( n = 4180) ( n = 4688)

Variable (rango) SE media IC del 95% SE media IC del 95% SE media IC del 95%

Síntomas depresivos (0 30) 8.41 7,97 8,86 6,30 6.17 6.44 6.53 6,40 6,66
0,23 0,07 0,07
Síntomas depresivos, registrados (0 3,43) 2,07 2,00 2.13 1,77 1,75 1,79 1,80 1,78 1,82
0,03 0,01 0,01
Discriminación de género percibida% 10,7 9,8 11,6
Características sociodemográficas
Años de edad 26.09 25,63 26.55 25.10 24,95 25,24 25.20 25.06 25,34
0,23 0,07 0,07
Educación, años (8 18) 12.42 12.17 12,66 11,81 11,73 11,88 11,87 11.80 11,94
0,12 0,04 0,04
Dificultad financiera (0 3) un 0,62 0,53 0,71 0,51 0.48 0,53 0,52 0,50 0,54
0,04 0,01 0,01
Estado civil %
Casado 83,5 77,7 89,2 87,1 85,6 88,7 86,7 85,2 88,3
Soltero 8,6 6.0 11,2 9,6 8.7 10,5 9.5 8.7 10,4
Viudo 1.2 0,3 2.2 0,1 0,01 0,2 0,2 0,1 0.4
Divorciado / Separado 6,7 4.5 8,9 3.1 2.6 3,7 3,5 3,0 4.0
Apoyo social (0 5) 3,05 2,96 3,15 3,16 3.13 3,19 3,15 3.12 3,18
0,05 0,02 0,01
Compañero ' s Participación en las tareas del hogar

Tareas estereotipadas femeninas (1 5) segundo 1,88 1,81 1,94 1,96 1,92 1,99 1,95 1,92 1,98
0,03 0,02 0,01
Tareas estereotipadas masculinas (1 5) segundo 3,72 3,57 3,86 4.02 3,98 4.05 3,98 3,95 4.02
0,07 0,02 0,02
Maltrato durante la infancia
Abuso sexual (0 9) 0,84 0,72 0,98 0.46 0,42 0,50 0,50 0.47 0,54
0,07 0,02 0,02
Descuido emocional / físico% 41,4 36,2 46,7 26,7 25,0 28,4 28,2 26,6 29,9
Características del embarazo y el parto
Primer hijo % 36,1 31,8 40,4 40,3 38,8 41,8 39,9 38,5 41,3
Bajo peso al nacer% Niño 4.2 2.4 5.9 5,0 4.3 5.6 4.9 4.2 5.5
niño% 53,3 48,9 57,8 52,7 51,1 54,2 52,7 51,3 54,2
% De entrega singleton 98,5 97,3 99,6 97,9 97,5 98,4 98,0 97,5 98,4

Fuente de datos: ELSPAC-CZ. CI = con fi intervalo de dencia. SE = error estándar.

un Reloj medido durante 41 meses desde el inicio.
segundo Medido aproximadamente 11 meses desde el inicio.

std err: 0.07), luego aumentó ligeramente y alcanzó un nadir similar en
fi cinco años (media = 6,04, error estándar: 0,09).
Los síntomas depresivos fueron signi fi significativamente mayor entre las mujeres que informaron
discriminación de género percibida (media = 8,41, err std: 0,23) en comparación con las mujeres sin
discriminación de género percibida (media = 6,30, err std: 0,07, p <0,001).
Aproximadamente una de cada diez mujeres (10,7%, IC del 95%: 9,8, 11,6) informó haber
experimentado discriminación de género percibida al inicio del estudio. En comparación con las
mujeres que no informaron discriminación de género percibida, las mujeres que informaron
discriminación de género percibida tenían más educación en promedio (media = 12,42 años, err std:
0,12), estaban menos embarazadas con su fi primer hijo al inicio del estudio (36,1%, IC del 95%: 31,8,
40,4), tenía menos apoyo social (media = 3,05, err std: 0,05) y más fi diferencia financiera fi cultos
(media = 0,62, std err: 0,04) y negligencia informada con mayor frecuencia (41,4%, IC del 95%: 36,2,
46,7) y abuso sexual (media = 0,84, std err: 0,07) durante la niñez.
ajustando las covariables en el Modelo 3, la relación entre la discriminación de género percibida y las
puntuaciones de los síntomas depresivos fue similar, con solo una ligera reducción en la magnitud ( b
= 0,12 [IC del 95%: 0,09,
0,16], p < 0,001). Se incluyen las covariables relacionadas con síntomas depresivos superiores fi las
dificultades económicas b = 0,12 [IC del 95%: 0,10; 0,14], p < 0,001), negligencia infantil ( b = 0,18 [IC
del 95%: 0,14, 0,22], p < 0,001) y abuso sexual ( b = 0,04 [IC del 95%: 0,03, 0,06], p < 0,001). Tener
apoyo social ( b = 0,05 [IC del 95%: 0,07, 0,04], p < 0,001), y tener una pareja que participó en tareas
estereotipadas femeninas ( b = 0,03, [IC del 95%: 0,05,
0.01], p = 0,001) se relacionaron con síntomas depresivos más bajos. Para ilustrar estos
resultados, Figura 1 ofrece una comparación de las relaciones ajustadas y no ajustadas entre los
síntomas depresivos y cada predictor incluido en el Modelo 3. Demuestra que la atenuación de las
relaciones examinadas después del ajuste fue generalmente pequeña y las relaciones
permanecieron estadísticamente significativas fi hipocresía.

Tabla 2 muestra los resultados de pruebas bivariadas de síntomas depresivos al inicio del
estudio con medidas explicativas independientes. Todas las variables tuvieron un significado
estadístico fi No se puede asociar con síntomas depresivos excepto por la edad materna al momento
del parto, ser viuda, bajo peso al nacer y parto único, como lo muestran los valores t y p
correspondientes.
3.1. Modelos de síntomas depresivos
Los análisis adicionales limitados a mujeres sin CSDB (SEPD <11) arrojaron resultados que
fueron sustancialmente similares a toda la muestra, lo que indica que la discriminación de género
percibida se asoció con síntomas depresivos más altos ( b = 0,09 [IC del 95%: 0,05; 0,13], p < 0,001).
Las mujeres con vs sin CSDB no signi fi difieren significativamente en la magnitud de esta relación,
como lo demuestra el estadísticamente no significativo fi coef de interacción de cant fi cient b = 0,01 [IC
del 95%:
0.09, 0.07],
p = 0,852).

Se encontraron puntuaciones más altas de síntomas depresivos entre las mujeres que 4. Discusión
informaron discriminación de género percibida en modelos mixtos de componentes de error que
explicaron observaciones repetidas y tiempo ( Tabla 3 , Modelo 1: b = 0,15 [IC del 95%: 0,12; 0,19], p La investigación anterior consideró la discriminación percibida de manera más general, pero las
< 0,001). Después implicaciones para la salud de la discriminación de género percibida
 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297 5

Tabla 2 niño índice. En general, aproximadamente una de cada diez mujeres en la cohorte ELSPAC-CZ
Relaciones bivariadas entre síntomas depresivos y variables predictoras para mujeres en la cohorte
informó una percepción de discriminación de género, lo que puede ser una subestimación dado que
ELSPAC-CZ ( n = 4688).
la discriminación a menudo es sutil y ambigua y denunciar la discriminación puede ser

Vaticinador valor t valor p psicológicamente costoso [46] . No se dispone de datos precisos sobre la prevalencia, pero la
evidencia sugiere que la discriminación de género es común. En un estudio, las mujeres
Discriminación de género percibida (RC = no percibida 8.70 < 0,001
discriminación de género)
universitarias estadounidenses informaron que una o dos veces a la semana, en promedio,
Características sociodemográficas experimentaron un evento sexista, como estereotipos de roles de género, prejuicios, objetivos
Años de edad 0,6 0,55 sexuales. fi cation y comentarios degradantes [22] . El mecanismo a través del cual la discriminación
Educación, años 4,71 < 0,001
de género percibida está vinculada a la salud mental no está claro, pero puede estar mediado por
Dificultad financiera un 10,78 < 0,001
respuestas al estrés; sin embargo, esto requiere más investigación. Por otro lado, el impacto de
Estado civil
Casado abordar la discriminación de género como un medio para mitigar la morbilidad de la salud mental en
Soltero 4,95 < 0,001 las mujeres está inexplorado y merece una mayor exploración.
Viudo 0,92 0.358
Divorciado / Separado 4.61 < 0,001
Apoyo social 8.03 < 0,001
Compañero ' s Participación en las tareas del hogar

Tareas estereotipadas femeninas segundo 3,44 0,001 Además de mostrar síntomas depresivos más altos, las mujeres que reportaron discriminación
Tareas estereotipadas masculinas segundo 3,57 0,001 de género percibida en nuestro estudio tenían otros riesgos, incluyendo fi dificultades económicas,
Maltrato durante la infancia
menor apoyo social y exposición a la negligencia y el abuso durante su niñez. Esto sugiere un patrón
Abuso sexual C 7,68 < 0,001
de desventaja agrupada entre las víctimas de discriminación de género. Múltiples ejes de desventaja
Descuido emocional / físico (RC = No emocional / 9,83 < 0,001
negligencia física) social han demostrado ser útiles para comprender la discriminación entre las mujeres
Características del embarazo y el parto afroamericanas, los hombres afroamericanos homosexuales VIH positivos y las lesbianas latinas de
Primer embarazo (RC = segundo embarazo / embarazo de orden superior) Bajo 3,27 0,001 bajos ingresos.
peso al nacer (RC = peso normal al nacer) Niño niño (RC = niña) 0,34 0,733
2,36 0,019
Parto único (RC = parto gemelar) 0,71 0.477
[46] . La evidencia previa, por ejemplo, muestra correlaciones entre el sexismo / racismo percibido y
los eventos de vida negativos entre las mujeres afroamericanas. [23] . Así, los efectos de la
Fuente de datos: ELSPAC-CZ. RC = Categoría de referencia.
un Escala 0 3. discriminación de género percibida pueden agravarse e interactuar con otros ejes de desventaja,
segundo Escala 0 5.
aunque esto también está inexplorado. Curiosamente, la educación representa una excepción al
C Escala 0 9. Los valores t se obtienen de modelos lineales mixtos de componentes de error utilizando
patrón de desventaja agrupada. Las mujeres que reportaron discriminación de género percibida en
múltiples imputaciones, con cada predictor ingresado por separado. Los síntomas depresivos se miden en una
nuestra muestra tenían una educación significativamente mayor, no menor, en comparación con sus
escala de 0 a 30 y se transforman utilizando el logaritmo natural.
contrapartes. La evidencia anterior indicaba una mayor prevalencia de discriminación racial percibida
entre las mujeres afroamericanas con mayor nivel de educación que con menos educación [47] y una
asociación más fuerte entre la discriminación diaria y la angustia psicológica entre los
estadounidenses de origen asiático con educación universitaria en comparación con sus contrapartes
especi fi cally no se han estudiado sistemáticamente. Aquí ofrecemos evidencia inicial de signi fi asociaciones
de hipocresía entre mujeres ' s percepciones de discriminación de género y síntomas depresivos con menos educación [48] . Especulamos mucho
durante el seguimiento longitudinal desde la mitad del embarazo hasta once años después del parto
del

Tabla 3
Modelos lineales mixtos de componentes de error para síntomas depresivos, mujeres de la cohorte ELSPAC-CZ ( n = 4688).

Modelo 1 Modelo 2 Modelo 3

segundo valor p IC del 95% segundo valor p IC del 95% segundo valor p IC del 95%

Discriminación de género percibida 0,15 < 0,001 0,12 0,19 0,12 < 0,001 0,09 0,16 0,12 < 0,001 0,09 0,16
(RC = sin discriminación de género percibida) Tiempo, años

desde la línea de base 0,004 0,001 0,007 0,002 0,004 0,003 0,006 0,001 0,004 0,004 0,006 0,001
Características sociodemográficas
Edad al parto, años 0,00 0.392 0,00 0,01
Educación, años 0,00 0.341 0,01 0,00
Dificultad financiera un 0,12 < 0,001 0,09 0,14 0,12 < 0,001 0,10 0,14
Estado civil (RC = casado)
Soltero 0,05 0,074 - 0.01 0,11
Viudo 0,00 0,984 0,33 0,32
Divorciado / Separado 0,08 0,095 0,01 0,17
Apoyo social segundo 0,05 < 0,001 0,06 0,03 0,05 < 0,001 0,07 0,04
Compañero ' s Participación en las tareas del hogar

Tareas estereotipadas femeninas segundo 0,03 0,004 0,05 0,01 0,03 0,001 0,05 0,01
Tareas estereotipadas masculinas segundo 0,01 0,159 0,02 0,00
Maltrato durante la infancia
Abuso sexual C 0,04 < 0,001 0,03 0,06 0,04 < 0,001 0,03 0,06
Negligencia emocional / física 0,17 < 0,001 0,14 0,21 0,18 < 0,001 0,14 0,22
(RC = Sin negligencia emocional / física
Características del embarazo y el parto
Primer embarazo (RC = segundo embarazo / embarazo de orden superior) Bajo 0,02 0,225 0,06 0,01
peso al nacer (RC = peso normal al nacer) Niño niño (RC = niña) 0,03 0,445 0,11 0,05
0,03 0,086 0,06 0,00
Parto único (RC = parto gemelar) 0,02 0,751 0,14 0,10

Fuente de datos: ELSPAC-CZ. CI = con fi intervalos de dencia. RC = Categoría de referencia.

un Escala 0 3.
segundo Escala 0 5.

C Escala 0 9. Los síntomas depresivos se miden en una escala de 0 a 30 y se transforman utilizando el logaritmo natural. Se utilizan múltiples imputaciones para dar cuenta de los datos faltantes.
6 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297
Figura 1. B-coef no ajustado y no estandarizado fi clientes (incluyendo 95% con fi intervalos de dependencia) para predictores de mujeres ' s síntomas depresivos.
Las mujeres educadas, especialmente aquellas que trabajan en profesiones dominadas por hombres,
están más expuestas a la discriminación y, al mismo tiempo, son más conscientes y menos tolerantes
de la discriminación. También pueden estar más dispuestos a denunciar la discriminación en las
encuestas.
De interés también es el fi encontrando que la trayectoria promedio de los síntomas depresivos
entre las mujeres checas fue relativamente estable durante el período de observación de once años.
Conocemos pocos estudios de depresión que siguieron a mujeres en edad fértil durante un período
de tiempo tan prolongado. Entre las cohortes más largas, el estudio EDEN madre-hijo identi fi ed fi cinco
tipos de trayectorias entre las mujeres francesas sobre
fi cinco años después del parto [49] . El grupo más grande de mujeres (60%) estuvo constantemente
libre de síntomas. Las mujeres con síntomas intermedios que persistieron durante el período de
observación representaron el segundo grupo más grande (25%). Síntomas depresivos altos solo
durante el embarazo o durante el embarazo ' Los años preescolares fueron mucho menos comunes
(5% y 5%, respectivamente). En una cohorte de Pelotas brasileñas, el 81% de las participantes
mostró trayectorias de síntomas depresivos estables bajos, estables moderados o estables altos
durante el período de seis años que comenzó a mediados del embarazo. [50] . En contraste, estudios
de cohortes más cortos que van desde uno a 3.5 años han sugerido que los síntomas disminuyen
con el tiempo entre las mujeres con depresión posparto, aunque esta disminución no siempre es
estadísticamente significativa. fi hipocresía [51] .
Nuestro estudio tuvo varias limitaciones. La muestra se limitó a mujeres que estaban
embarazadas al inicio del estudio. Por lo tanto, los resultados no pueden generalizarse a mujeres que
nunca han estado embarazadas y mujeres cuyos embarazos terminaron antes del cuarto mes,
cuando tuvo lugar el reclutamiento. Se sugiere una buena generalización a la población de la que se
extrajo la muestra comparando la composición sociodemográfica de la muestra de referencia con la
población total de nacimientos en las regiones de Brno y Znojmo [27] , aunque existen algunas
pequeñas diferencias (por ejemplo, educación universitaria 16,3% vs 13,7%, respectivamente; edad
materna <20 9,9% vs 13,3%, respectivamente). Sin embargo, se desconoce la generalización a otras
sociedades. El estudio se realizó durante la transición poscomunista, cuando el estado de salud de la
población checa difería del de las naciones de Europa occidental. [52] . En consecuencia, esperamos
que las estimaciones de la prevalencia de características relacionadas con la salud tengan una
generalización limitada a las sociedades occidentales; La generalización a otras naciones
poscomunistas de Europa central y oriental puede ser mejor, dadas las similitudes en el contexto
socio-histórico, pero faltan datos. Al mismo tiempo, argumentamos que la relación entre
discriminación de género percibida y depresión
Es probable que los síntomas existan en diferentes naciones y sociedades. Estudios previos,
principalmente en contextos occidentales, documentan ampliamente los resultados adversos para la
salud de varias formas de discriminación, por ejemplo, basadas en raza / etnia, idioma, orientación
sexual y estado de peso. [17-20] . Es importante destacar que el trabajo teórico sostiene que la
discriminación percibida actúa como un factor de estrés prominente y, como tal, puede dañar la salud
mental al igual que otras fuentes de estrés. [17] .
Tanto la discriminación de género percibida como los síntomas depresivos se midieron mediante
el autoinforme. La evaluación de la sintomatología depresiva en grandes muestras poblacionales rara
vez es factible con métodos distintos a los autoinformes de encuestas (p. Ej., Entrevista clínica). La
EPDS, que se utilizó para evaluar los síntomas depresivos, es confiable, válida y está bien
establecida en contextos no occidentales. Del mismo modo, los autoinformes están bien establecidos
para la discriminación percibida [17] ; La evaluación de la discriminación utilizando otros métodos,
como experimentos o auditorías, es dif fi culto o imposible en estudios poblacionales. No obstante,
persiste la posibilidad de sesgo de percepción, incluido el sesgo de minimización y el sesgo de
vigilancia, es decir, percibir menos o más discriminación de la que realmente existe, respectivamente. [46]
.
Se necesita cautela en la interpretación de los efectos estadísticos observados, ya que el
estudio se basa en datos de observación. La aleatorización de la discriminación de género no es
práctica ni ética. Los datos fueron longitudinales y se aplicaron métodos estadísticos para controlar
múltiples factores de confusión; sin embargo, no se justifica la interpretación causal. El trabajo teórico
sugiere que la discriminación de género conduce a síntomas depresivos, pero también es posible
que los síntomas depresivos conduzcan a percepciones más negativas, aumentando la probabilidad
de percibir discriminación de género. Incluimos análisis que verificaban si el vínculo entre la
discriminación de género percibida y los síntomas depresivos se limitaba a las mujeres que ya
estaban deprimidas al inicio del estudio. Los resultados no apoyaron esta hipótesis; en lugar,
sugirieron que la discriminación de género estaba relacionada con síntomas depresivos más altos
tanto en mujeres inicialmente deprimidas como no deprimidas. Esta evidencia es consistente con
trabajos anteriores que sugieren que la discriminación percibida contribuye causalmente a la
depresión y otros problemas de salud. [46] ; sin embargo, no se puede descartar la causalidad inversa
en ausencia de manipulación experimental.
Las implicaciones políticas deben considerar estas limitaciones. Si bien la dirección de la
causalidad sigue sin estar clara, las asociaciones observadas indican que las mujeres que
experimentan discriminación de género tienen un mayor riesgo de depresión. Programas de apoyo a
la salud mental de
 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297
se necesitan víctimas de discriminación de género. Las disparidades en numerosos resultados de
salud que afectan de manera desproporcionada a las mujeres persisten en todo el mundo a pesar de
años de esfuerzos para reducir las desigualdades de género en la salud mundial. Objetivos a largo
plazo de programas integrales a nivel de población para mejorar a la mujer ' La salud debe enfocarse
en la salud mental como un aspecto importante de las disparidades por género. A nivel de las
comunidades y la sociedad, se deben realizar esfuerzos para desmantelar las normas de género
restrictivas y eliminar las injusticias de género en los sistemas de salud, los lugares de trabajo y la
educación. Desde la perspectiva de la justicia social y los derechos humanos, la discriminación y las
normas de género restrictivas son poco éticas e injustas. Siguen siendo poco reconocidos y mal
abordados como un problema de salud pública en las sociedades industrializadas y en desarrollo por
igual. Los esfuerzos constantes para eliminar las jerarquías de género valen la pena, ya que
representan un beneficio. fi t no solo niñas y mujeres, sino también niños, hombres y minorías sexuales
/ de género, cuya salud también se ve perjudicada cuando los sistemas sociales que las rodean
perpetúan las injusticias basadas en el género [14] .
Declaración de intereses en competencia
La Dra. Stepanikova no tiene nada que revelar. El Sr. Acharya no tiene nada que revelar. El Dr.
Abdalla no tiene nada que revelar. El Dr. Baker no tiene nada que revelar. El Dr. Klanova no tiene
nada que revelar. El Dr. Darmstadt no tiene nada que revelar.
Agradecimientos
El estudio ELSPAC-CZ está financiado por el Ministerio de Educación, Juventud y Deportes de
la República Checa y los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (proyecto CETOCOEN
PLUS: CZ.02.1.01 / 0.0 / 0.0 / 15_003 / 0000469 y las Infraestructuras de Investigación RECETOX:
LM2018121 y CZ.02.1.01 / 0.0 / 0.0 / 16_013 / 0001761). Este análisis fue financiado en parte por la
Fundación Bill y Melinda Gates a través de los Equipos de Estrategia del Programa de Igualdad de
Género, Entrega Integrada, VIH, Nutrición, Planificación Familiar y Saneamiento e Higiene del Agua
a través de una subvención a la Universidad de Stanford. Los patrocinadores del estudio no tuvieron
ningún papel en el diseño del estudio, la recopilación de datos, el análisis de datos, la interpretación
de datos o la redacción del informe. El autor correspondiente tenía pleno acceso a todos los datos y
había fi responsabilidad nal de enviar el trabajo para su publicación. Los puntos de vista y opiniones
expresados en este documento son los de los autores y no fl ect el de fi cargo oficial de cualquiera de
las organizaciones para las que trabajan los autores.
Los autores de este estudio desean agradecer a las familias participantes, así como a los
ginecólogos, pediatras, directores de escuela y docentes que participaron en el proyecto. Nuestro
agradecimiento también va para el Dr. Lubomír Kukla, Ph.D., coordinador nacional de ELSPAC 1990
2012, y todo el equipo de ELSPAC. Los autores de este estudio (es decir, no ELSPAC Scienti fi c
Council) son responsables del contenido de esta publicación.
Aprobación ética
ELSPAC-CZ fue aprobado por el Scienti fi c Comité de la Universidad de Masaryk. Todos los
participantes proporcionaron su consentimiento informado por escrito. El estudio también fue aprobado
por el protocolo # 42971 de la Junta de Revisión Institucional de la Universidad de Stanford.
Papel de la fuente de financiación
Los patrocinadores del estudio no tuvieron ningún papel en el diseño del estudio, la recopilación de datos, el
análisis de datos, la interpretación de datos o la redacción del informe.
Contribuciones de autor
Irena Stepanikova participó en todos los aspectos del estudio, incluida la conceptualización y el
diseño, la revisión de la literatura, el análisis de datos,
7
interpretación y redacción de todas las secciones. Elizabeth Baker participó en el diseño, supervisión
de los análisis estadísticos, interpretación de resultados y redacción de las secciones de métodos y
resultados. Sanjeev Acharya preparó los datos para el análisis y realizó los análisis estadísticos.
Participó en la interpretación y ayudó a escribir los resultados y métodos. Safa Abdalla participó en el
desarrollo de la idea, revisión de la literatura y los datos, estrategia de análisis estadístico y revisión
crítica del manuscrito. Jana Klanova participó en la adquisición y preparación de los datos. Gary
Darmstadt participó en la conceptualización y el diseño del estudio, interpretando los resultados y
escribiendo. Todos los autores leyeron y aprobaron el fi versión nal del manuscrito.
Fuente de datos: ELSPAC-CZ. Se utilizan modelos lineales mixtos de componentes de error con
múltiples imputaciones. Los síntomas depresivos se transforman utilizando el logaritmo natural. Los
modelos ajustados incluyen discriminación de género, años desde la línea de base, fi diferencia financiera fi
El culto, el apoyo social, el abuso sexual, la negligencia y la pareja realizan tareas estereotipadas
femeninas.
Materiales complementarios
El material complementario asociado con este artículo se puede encontrar en la versión en línea
en doi: 10.1016 / j.eclinm.2020.100297 .
Referencias
[1] James SL y col. Incidencia, prevalencia y años globales, regionales y nacionales
vivido con discapacidad por 354 enfermedades y lesiones en 195 países y territorios, 1990-2017: un análisis
sistemático para el estudio de la carga mundial de morbilidad 2017. Lancet 2018; 392: 1789 - 858.
[2] Whiteford HA, Degenhardt L, Rehm J, Baxter AJ, Ferrari AJ, Erskine HE, et al. Global
Carga de enfermedad atribuible a trastornos mentales y por uso de sustancias: fi Hallazgos del estudio de la carga
mundial de morbilidad 2010. Lancet 2013; 382: 1575 - 86.
[3] Salk RH, Hyde JS, Abramson LY. Diferencias de género en la depresión en representación
tivas muestras nacionales: metaanálisis de diagnósticos y síntomas. Psychol Bull 2017; 143: 783.
[4] Salk RH, Petersen JL, Abramson LY, Hyde JS. El rostro contemporáneo de la diferencia de género
diferencias y semejanzas en la depresión a lo largo de la adolescencia: desarrollo y cronicidad. J Affect Disord
2016; 205: 28 - 35.
[5] Cyranowski JM, Frank E, Young E, Shear MK. Inicio en la adolescencia de la diferencia de género
Diferencia en las tasas de depresión mayor de por vida: un modelo teórico. Arch Gen Psychiatry 2000; 57: 21 - 7.
[6] Cohen LS, Soares CN, Vitonis AF, Otto MW, Harlow BL. Riesgo de nueva aparición de
depresión durante la transición menopáusica: el estudio de Harvard sobre estados de ánimo y ciclos. Arch Gen
Psychiatry 2006; 63: 385 - 90.
[7] Brummelte S, Galea LA. Depresión posparto: etiología, tratamiento y consecuencias
consultas para el cuidado materno. Horm Behav 2016; 77: 153 - 66.
[8] Davies SE, Harman S, Manjoo R, Tanyag M, Wenham C.Punto de vista por qué debe ser
una agenda feminista de salud global. Lancet 2019; 393: 3.
[9] Dorius SF, Firebaugh G. Tendencias en la desigualdad global de género. Fuerzas Soc 2010; 88:
1941 - 68.
[10] Paxton P, Hughes MM, Pintor II MA. Crecimiento de la representación política de las mujeres:
una exploración longitudinal de la democracia, el sistema electoral y las cuotas de género. Eur J Polit Res 2010;
49:25 - 52.
[11] Fodor E. Un tipo diferente de brecha de género: cómo mujeres y hombres experimentan la pobreza
erty. East Eur Polit Soc 2006; 20: 14 - 39.
[12] Blau FDGénero, desigualdad y salarios 2016. Catálogo Oup, número
9780198779971 editado por Gielen AC, Zimmermann, KF. Prensa de la Universidad de Oxford. [13] Arlie H, Anne
M. El segundo turno. Nueva York, NY: Viking; 1989.
[14] Darmstadt GL, Heise L, Gupta GR, Henry S, Cislaghi B, Greene ME, et al. Porqué ahora
para una serie sobre igualdad de género, normas y salud? Lancet 2019; 393: 2374 - 7.
[15] Heise L, Greene ME, Opper N, Stavropoulou M, Harper C, Nascimento M, et al.
Desigualdad de género y normas de género restrictivas: enmarcando los desafíos a la salud. Lancet 2019.
[dieciséis] Krieger N. Un glosario de epidemiología social. J Epidemiol Community Health
2001; 55: 693 - 700.
[17] Pascoe EA, Smart Richman L.Discriminación percibida y salud: una meta-
revisión analítica. Psychol Bul 2009; 135: 531.
[18] Wei M, Wang KT, Ku TY. Un desarrollo y validación del lenguaje percibido
escala de discriminación de calibres. Cultur Divers Ethnic Minor Psychol 2012; 18: 340.
[19] Puhl RM, King KM. Discriminación por peso y acoso. Best Pract Res Clin Endo-
crinol Metab 2013; 27: 117 - 27.
[20] Feinstein BA, Goldfried MR, Davila J. La relación entre experiencias de dis-
Criminación y salud mental entre lesbianas y gays: un examen de la homonegatividad internalizada y la
sensibilidad al rechazo como mecanismos potenciales. J Consultar Clin Psychol 2012; 80: 917.
[21] Zucker AN, Landry LJ. Discriminación personificada: la relación entre sexismo y dis-
tress a las mujeres ' s comportamientos de beber y fumar. Roles sexuales 2007; 56: 193 - 203.
8 I. Stepanikova y col. / EClinicalMedicine 20 (2020) 100297
[22] Swim JK, Hyers LL, Cohen LL, Ferguson MJ. Sexismo cotidiano: evidencia de su inci-
dencia, naturaleza e impacto psicológico de tres estudios diarios. J Soc Issues 2001; 57: 31 - 53.
[23] Perry BL, Harp KL, Oser CB. Discriminación racial y de género en el proceso de estrés:
implicaciones para la salud y el bienestar de las mujeres afroamericanas. Sociol Perspect 2013; 56: 25 - 48.
[24] Szymanski DM, Stewart DN. Racismo y sexismo como correlatos de afroamericanos
mujer ' s angustia psicológica. Roles sexuales 2010; 63: 226 - 38.
[25] Sue DW. Microagresiones en la vida cotidiana: raza, género y orientación sexual.
JohnWiley & Sons; 2010.
[26] Capodilupo CM, Nadal KL, Corman L, Hamit S, Lyons OB, Weinberg A.
festación de microagresiones de género. Microagresiones y marginalidad: manifestación, dinámica e impacto
2010. p. 193 216.
[27] Piler P, Kandrnal V, Kukla L, Andryskova L, Svancara J, Jarkovsky J, et al. Grupo
Pro fi le: el estudio longitudinal europeo del embarazo y la infancia (ELSPAC) en la República Checa. Int J
Epidemiol 2017; 46: 1379 -f.
[28] Cox JL, Holden JM, Sagovsky R. Detección de depresión posparto. desarrollo de
la Escala de Depresión Postnatal de Edimburgo de 10 ítems. Br J Psychiatry 1987; 150: 782 - 6.
[29] Cox JL, Chapman G, Murray D, Jones P. Validación del Postnatal de Edimburgo
Escala de depresión (EPDS) en mujeres no posparto. J Affect Disord 1996; 39: 185 - 9.
[30] Logsdon MC, Usui WM, Nering M. Validación de la depresión posparto de Edimburgo
escala para madres adolescentes. ArchWomens Ment Health 2009; 12: 433 - 40.
[31] Azar D, Ball K, Salmon J, Cleland V.La asociación entre actividad física y
síntomas depresivos en mujeres jóvenes: una revisión. Ment Health Phys Act 2008; 1:82 - 8.
[32] Matijasevich A, Munhoz TN, Tavares BF, Barbosa APPN, da Silva DM, Abitante MS,
et al. Validación de la Escala de Depresión Postnatal de Edimburgo (EPDS) para el cribado de episodios
depresivos mayores en adultos de la población general. BMC Psychiatry 2014; 14: 284.
[33] Becht MC, Van Erp CF, Teeuwisse TM, Van Heck GL, Van Son MJ, Pop VJ. Medición
depresión en mujeres alrededor de la edad menopáusica: hacia una validación de la Escala de Depresión de
Edimburgo. J Affect Disord 2001; 63: 209 - 13.
[34] Reay R, Matthey S, Ellwood D, Scott M. Resultados a largo plazo de los participantes en un
programa de detección precoz de la depresión perinatal. J Affect Disord 2011; 129: 94 - 103.
[35] Chua YW, Lewis G, Easter A, Lewis G, Solmi F. Trayectorias de dieciocho años de
síntomas depresivos en madres con un trastorno alimentario de por vida: fi hallazgos de la cohorte Alspac. Br J
Psiquiatría 2019: 1 7.
[36] Stepanikova I, Kukla L. Se percibe discriminación en el embarazo de forma prospectiva
vinculado a la depresión posparto? Explorando el papel de la educación. Salud infantil de Matern J 2017; 21:
1669 - 77.
[37] Takacs L, Seidlerova JM, Sterbova Z, Cepicky P, Havlícek J. Los efectos de intrapar-
tum oxitocina sintética en el estado de ánimo materno posparto: fi resultados de un estudio observacional
prospectivo. ArchWomens Ment Health 2019; 22: 485 - 91.
[38] Takacs L, Smolík F, Mlíkova JS, Cepicky P, Hoskovcova S. Postpartum blues-a Czech
adaptación del cuestionario maternity blues. Ceska gynekologie 2016; 81: 355 - 68.
[39] Fiala A, Svancara J, Klanova J, Kasparek T. Factor de riesgo sociodemográfico y del parto
factores para desarrollar depresión posparto en una muestra de 3233 madres del estudio checo Elspac. BMC
Psychiatry 2017; 17: 104.
[40] Records K, Rice M, Apugan Z. Explorando grupos de síntomas de depresión perinatal como
predictores de los resultados de la maternidad. Eur Psychiatry 2017; 41: S539 - S40.
[41] Hassert S, Sharon SR, Payakkakom A, Kodysova E. Síntomas depresivos posparto
toms: riesgos para las madres checas y tailandesas. J Perinat Educ 2018; 27: 38 - 49.
[42] Andreyeva T, Puhl RM, Brownell KD. Cambios en la discriminación de peso percibida
entre los estadounidenses, 1995 1996 a 2004 2006. Obesidad 2008; 16: 1129 - 34.
[43] Van Buuren S, Boshuizen HC, Knook DL. Imputación múltiple de sangre faltante
covariables de presión en el análisis de supervivencia. Stat Med 1999; 18: 681 - 94.
[44] Raghunathan TE, Lepkowski JM, Van Hoewyk J, Solenberger P. A multivariante
técnica para multiplicar la imputación de valores perdidos mediante una secuencia de modelos de regresión. Surv
Methodol 2001; 27: 85 - 96.
[45] Allison PD. Datos perdidos. CA: Sage Thousand Oaks; 2010.
[46] Lewis TT, Cogburn CD, Williams DR. Experiencias de discriminación autoinformadas
y salud: scienti fi c avances, controversias en curso y problemas emergentes. Annu Rev Clin Psychol 2015; 11:
407 - 40.
[47] Dailey AB, Kasl SV, Holford TR, Lewis TT, Jones BA. Vecindario e individual
Nivel de variación socioeconómica en las percepciones de discriminación racial. Ethn Health 2010; 15: 145 - 63.
[48] Zhang W, Hong S. Discriminación percibida y angustia psicológica entre
Americanos asiáticos: ¿importa la educación? J Immigr Minor Health 2013; 15: 932 - 43.
[49] Van der Waerden J, Galera C, Saurel-Cubizolles MJ, Sutter-Dallay AL, Melchior
M, Grupo EMCCS. Predictores de trayectorias persistentes de depresión materna en la primera infancia:
resultados del estudio de cohorte de madres e hijos de Eden en Francia. Psychol Med 2015; 45: 1999 - 2012.
[50] Matijasevich A, Murray J, Cooper PJ, Anselmi L, Barros AJ, Barros FC, et al. Trajecto-
Riesgos de depresión materna y psicopatología de la descendencia a los 6 años: Estudio de cohorte Pelotas 2004.
J Affect Disord 2015; 174: 424 - 31.
[51] Vliegen N, Casalin S, Luyten P. El curso de la depresión posparto: una revisión de
estudios longitudinales. Psiquiatría Harv Rev 2014; 22: 1 - 22.
[52] Bobak M, Marmot M. División de mortalidad entre Oriente y Occidente y sus posibles explicaciones:
agenda de investigación propuesta. BMJ 1996; 312: 421 - 5.