La historia cuenta que la navidad llegó al país junto con los europeos coloniales, de hecho se

conoce que San Francisco de Asís, patrono de la orden franciscana, la primera orden que llegó
a la ciudad (como la historia detalla). Es reconocido es estas fechas por ser el promotor del
primer pesebre, y con el tiempo la costumbre del árbol también entró en la cultura
ecuatoriana poco a poco.

Conocido es también que la devoción al Niño Jesús en América es muy grande, tanto que se lo
relacionada con el proceso evangelizador del siglo XVI en las ordenes franciscana, jesuita y
agustina.

Por esa razón es que varios monasterios que se levantaron con el pasar de los años fueron
incluyendo en tus tradiciones la construcción de pesebres y árboles navideños, y justamente
en la ciudad de Quito se realizan anualmente recorridos y exposiciones de pesebres navideños
con temáticas diferentes. Justamente el Monasterio del Carmen Antiguo de San José,
conocido popularmente como El Carmen Alto, es cuna de aquellos pesebres coloniales e
importantes de la urbe y que se expone y mejora anualmente. Como sabemos antiguamente
estuvo cerrado, y no fue sino hasta el año 2013 que se reabrieron sus puertas y en sus
adentros se hizo luz nuevamente de uno de los pesebres más bellos que como temática
continua presenta los oficios coloniales que fueron realizados durante aquella época. De entre
los más importantes se encuentra un Niño Jesús (con ponencias doras en la cabeza), se
encuentra entre la Virgen María y San José. Piezas que son atribuidas al maestro Caspicara.

Dato: 1577 primer Pase del Niño en Machangarilla (La Magdalena) y actualmente se siguen
repitiendo en varias sectores y parroquias de la ciudad.