TEORÍA LITERARIA III

Grupo 12 
Ana Nuñez
Gabriela Revainera
Carolina Obaya
Yamila Subia
Silvina Verón 

A continuación se analizará el cuento El otro pie del escritor estadounidense Ray

Bradbury, utilizándose algunos de los conceptos de los autores Roland Barthes,
Algirdas Julius Greimas y Tzvetan Todorov propuestos en la cátedra. 

Análisis del relato

El otro pie es un cuento perteneciente al libro El hombre ilustrado de Ray Bradbury
publicado en 1951. En la introducción de la obra, el autor manifiesta la dificultad que tuvo
al querer publicar el relato ya que eran años anteriores al movimiento en defensa de los
Derechos Civiles y en un panorama donde la Guerra Fría estaba creciendo. El cuento es
una crítica a la sociedad norteamericana de los años cincuenta con un desenlace
conmovedor y a la vez esperanzador. 
A través del estilo indirecto, el narrador nos introduce en la historia con la noticia de que
un hombre blanco llegará por primera vez, después de veinte años, al planeta Marte; lugar
habitado solamente por gente de color, luego de ser obligados a abandonar la tierra. Con
el tiempo, estas personas desterradas logran establecer sus ciudades allí.
Roland Barthes en Introducción al análisis estructural del relato menciona los tres niveles
de descripción del relato: Nivel de las Funciones, Nivel de las Acciones y Nivel de la
Narración. Las Funciones son unidades de contenido que fecundan el relato con un
elemento que madurará más tarde al mismo nivel o en otra parte, en otro nivel.
Encontramos por un lado las funciones Distribucionales, que refieren a la relación de
una unidad con su correlato; y las funciones Integradoras, aquellas que comprenden los
Indicios. 
La primera función que nos encontramos es la del primer segmento del relato en donde
podemos visualizar al narrador omnisciente describiendo una gran noticia, (que no nos
revela aún cual es) y a la vez cómo esta recorre la tierra marciana sembrando a su paso
curiosidad y desconcierto ante los sujetos que habitan Marte. Esta pequeña porción inicial
de la obra literaria se la podemos otorgar a las funciones distribucionales, por este motivo
concluimos que la llegada de un nuevo ser es inevitable y por lo tanto, el autor del cuento
nos revela dos cosas que va a utilizar en la construcción del correlato. Por una parte
desde la inocencia de los niños, la curiosidad por el hombre blanco que no conocen, ya
que ellos fueron quienes desterraron a la gente de color del planeta Tierra, y, en segundo
lugar cómo el sentimiento de destierro despierta en los marcianos diferentes tipos de
sentimientos. 
Partiendo desde tales emociones, nos anticipa el narrador que los personajes van a
reaccionar de forma violenta cuando aterrice el cohete, siendo este parte de las funciones
integradoras. 
A su vez la pieza literaria se puede segmentar según, a lo que Barthes llama funciones
cardinales y catálisis. Dentro de las funciones cardinales encontramos las situaciones más
relevantes para la continuidad de la historia, tal característica genera que los hechos en
esta categoría sean muy pocos a comparación de la catálisis, que son situaciones de
relleno que ayuda a describir las situaciones y la psicología de los personajes. Dentro de
las funciones cardinales encontramos: el recorrido de la noticia; la sublevación de los
habitantes de Marte; la llegada del hombre blanco; la historia del hombre que viene de la
Tierra; y la comunión de ambas sociedades. Por otro lado, un ejemplo de catálisis  son
cada uno de  los recuerdos de la gente de color en la tierra o los sujetos enojados
pintando los sectores publicos abalando la segregacion racial.     
La Historia evoca una cierta realidad, acontecimientos que habrían sucedido, personajes
que, desde este punto de vista, se confunden con los de la vida real y el Discurso, donde
existe un narrador que relata la historia y frente a él un lector que la recibe, siendo de gran
importancia los modos en que el narrador nos hace conocer esos hechos. Aquí se
presenta lo que Todorov menciona acerca de la Historia y el Discurso. El narrador
dispone de ciertas descripciones antes que otras y también, es quien nos hace ver la
acción por los ojos de tal o cual personaje. 
Este narrador es exterior a sus personajes ya que no se identifica con uno más que con
otro y, a la vez, interior a ellos ya que conoce lo que ellos sienten y piensan. Aquí se
presentaría el Nivel de las Acciones (que en realidad es de los personajes), concepto
que Barthes retoma de Greimas quien propone "describir y clasificar a los personajes del
relato, no según lo que son sino lo que hacen". Así, se define al personaje por su
participación en una esfera de acciones del relato. 
Hattie Johnson y su esposo Willie son dos de los personajes más relevantes del cuento. A
lo largo de la trama se percibe cómo Hattie siente cierta incomodidad y preocupación por
el hecho de que un hombre blanco pise el suelo marciano debido a las respuestas de los
demás habitantes que iban desde la curiosidad y el asombro hasta el más profundo odio y
rechazo, como se mencionó anteriormente. 
Entre ellos, su marido Willie, quien venía organizando entre los vecinos una desagradable
bienvenida para el hombre blanco, planeando implementar medidas segregacionistas
como por ejemplo mandarlos a vivir a los barrios bajos, hacer que lustren sus zapatos y
sentarse en la última fila de las butacas. Situaciones que ellos mismos tuvieron que vivir
cuando aún habitaban la Tierra.
A través del estilo directo, Willie comienza a describir lo que le produce este
acontecimiento; sentimientos atravesados y cargados de odio, rencor y resentimiento, con
firmes deseos de venganza. 
“No me siento como un cristiano - dijo Willie furiosamente, asiendo con fuerza el volante -
Me siento malvado. Después de hacernos, durante tantos años, todo lo que nos
hicieron… A mis padres y a los tuyos… ¿Recuerdas cómo colgaron a mi padre en Knock
Wood Hill y cómo mataron a mamá? ¿Recuerdas? ¿O tienes tan poca memoria como los
otros? 
“... todo ha cambiado. El zapato aprieta ahora en el otro pie. Veremos quien dicta leyes
contra quien.”
Una vez que aterriza el cohete y aparece el hombre blanco llevando en el rostro las
huellas de un profundo cansancio, se produce aquí una de las partes más emotivas del
cuento. El hombre cuenta lo que sucedió durante esos veinte años en la Tierra, cómo
estalló la guerra atómica y cómo fueron destruyendo las grandes y pequeñas ciudades. A
través de lo que va contando, la multitud oyente comienza a murmurar y suspirar y el
narrador demuestra aquí su superioridad respecto al conocimiento que posee del pasado
y así poder brindar al lector datos retrospectivos para que pueda comprender los
antecedentes de la historia. 
“Una ola los llevaba al pasado. Veinte años, los pueblos y las plazas, los árboles y los
edificios de ladrillo, los carteles y las iglesias y las tiendas familiares. Todo volvía a la
superficie entre las gentes del aeródromo. Cada nombre despertaba un recuerdo, y todos
pensaban en algún otro día.”
El hombre blanco continúa su discurso y pide ayuda a los habitantes de Marte, aceptando
cualquier tipo de trabajo y humillación ante las faltas que tenían ante Dios, ante ellos
mismos y sobre todo ante la multitud a la cual se dirigía. 
Después de que se produce un profundo silencio, la primera en hablar es Hattie, al
comprender que su esposo es “la piedra angular” y que sin él toda la venganza hacia el
hombre blanco caería en pedazos. Empieza a preguntar por los sitios y las personas que
han estado en la Tierra comenzando por Knock Wood Hill. El hombre le revela que nada
había quedado, mostrándole un mapa fotográfico. Luego el mismo Willie comienza a
interrogarlo, quedando inmóvil ante las respuestas. 
“Estaba recordando la Tierra, la Tierra verde y el pueblo verde donde había nacido y
crecido, y pensaba en ese pueblo, hecho pedazos, destruido, arruinado, y en todos esos
lugares, en todos aquellos lugares relacionados con algún mal (...) Ya no estaban allí, ya
nunca volverían (...) Nada, nada que él, Willie, pudiese odiar. “
De esta manera se aprecia en Willie una evolución psicológica y este personaje redondo
pasa del odio y el rencor a la compasión y a la redención, transmitiendo este sentimiento
a todos los demás. Abandona sus deseos de venganza y manifiesta su deseo de poder
empezar otra vez, reconociendo la igualdad de todas las personas al ver, por primera vez,
al hombre blanco. Podríamos analizar en este relato lo que propone Todorov en su texto
Las categorías del relato literario, cuando nos habla sobre los personajes y sus relaciones
y cómo la historia se construye con lo que van haciendo los personajes entre sí. Las
relaciones entre los personajes pueden reducirse a tres: el primer tipo de relación es el
deseo que se da en casi todos los personajes del relato, el de respetar el reglamento al
enterarse de la llegada del hombre blanco a Marte. Para ello, Willie había decidido buscar
sus armas y un trozo de cuerda en su casa en la que hizo un nudo corredizo mientras
miraba el cielo, y al ver que sus hijos se acercaban a hablarle, los empujó al interior de la
casa y, junto a su mujer, partieron a lo largo de la carretera. Esto puede verse como un
acto de amor hacía su familia ya que pensó en que podría ser peligroso y por lo tanto, sus
hijos debían permanecer encerrados. El segundo eje, es el de la comunicación que se
realiza en confidencia entre las personas de la ciudad. Willie se había encargado de pasar
por las casas y les había dicho qué debían hacer, además de estar preparados para darle
el comité de bienvenida al hombre blanco. Por medio de este acto, abierto, la multitud fue
aumentando y se sumaron personas del pueblo cercano con coches y ómnibus. Acá,
puede destacarse el tercer tipo de relación que ocurre por medio de la participación. Esto
es posible a través de la ayuda para que el objetivo que habían planeado desde el
comienzo se realice. Habían frenado a los ómnibus y pintado de blanco los últimos
asientos, algunos hombres invadieron los teatros y tendieron cuerdas, mientras que las
mujeres los observaban de lejos; en cuanto a sus niños, se encontraban encerrados en
sus casas para apartarlos del peligro. Con relación a los tres predicados mencionados,
estos poseen un predicado opuesto. En primer lugar, cuando aparece Willie, furioso por la
llegada del hombre blanco, tenía pensado que vivieran en Marte pero antes, debían
trabajar para ellos y luego de unas semanas, serían colgados. Como segundo predicado
opuesto, la llegada del hombre blanco causó conmoción a la multitud que lo estaba
esperando, despertando recuerdos al nombrar ciudades, lugares y calles de la Tierra.
Esto les generó intriga y mediante esta acción, Hattie tuvo el valor de preguntarle si
conocía el sitio donde habían baleado y colgado al padre de Willie, y además, si
permanecían con vida otras personas. El hombre blanco le responde que en la Tierra todo
había desaparecido. Al escuchar esto, Willie recordó cuando habitaba en la Tierra. Por lo
tanto, decide impedir que se realice la acción llena de odio que venían planeando y hacer
que la poca civilización que quedaba, se instale en su planeta. Este último acto hace que
los hombres guarden sus armas y las cuerdas.
Cuadro actancial según la teoría de Greimas