Está en la página 1de 3

3.

La luz y la perspectiva

 La perspectiva atmosférica (surge en sustitución del tenebrismo)


2. Segunda etapa: Pronto (a partir del segundo tercio del siglo) se inicia una evolución
hacia la representación del elemento más inmaterial de la escena, esto es, la
atmósfera, que hace que las formas pierdan precisión y los colores intensidad y
brillantez con la distancia debido al aire interpuesto entre el ojo y los objetos.

Tratan así de representar la atmósfera y la luz ambiental, que envuelve a los objetos
para producir una impresión más real de distancia. Es lo que Leonardo llamó
“perspectiva aérea” (también atmosférica), que mantiene de la perspectiva lineal la
reducción del tamaño con la distancia, a la que suma las alteraciones producidas por el
aire.

Recurso muy típico de Velazquez. Ej: La fragua de Vulcano, 1630.


Velázquez tuvo la posibilidad de conocer mucha pintura italiana y asi se dio cuenta que
el tenebrismo ya no era la moda, sin que introduce la técnica de la perspectiva
atmosférica. A la pintura veneciana nunc agusto el tenebrismo sino la luz. En esta obra
ya se aprecia algo de la perspectiva atmosférica. A través de la obra, demuestra que ha
estado en Italia y que sabe pintar con las técnicas italianas. Por tanto, esta pintura es
un manifiesto.

Su obra cumbre, y el mejor ejemplo de toda la pintura occidental en relación con la


perspectiva atmosférica son Las Meninas, 1656.Velazquez ha ce de tal manera que
distancia y luz están los propios personajes. Es como si se tratara de una fotografía
capatada con tan gran realismo que la consecuicon de la tridimensionalidad esta en la
pintura. Esto es posiblemente lo mas cercano de un escenario de tipo teatral. La
infanta incluso mira al público. No hay nada mas barroco y teatral que esta pintura.
El propio espectador incluso se ve inmerso en la obra. Si los reyes se ven reflejados en
el espejo y por tanto el espectador podría estar sentado en un teatro junto a los reyes
viendo como representación la propia obra.
4. El color/ pincelada
Evolución en el modo de aplicar el color:
 Hasta aproximadamente la década de los años 40 del siglo XVII la pincelada es de
frosor uniforme, depurada y relamida (lisa, como una fotografía, sin empastes) y se
aplica seguida...
 …para pasar a ser, avanzado el siglo, de factura suelta, casi de manchas, y rápida y
espontánea (a golpe de pincel). Es una pintura de sensaciones; en ocasiones, la falta de
una elaboración previa origina numerosos “arrepentimientos”, que el tiempo dejan al
descubierto (Velázquez). Esto ocurre porque algunos pintores trabajan sin boceto
previo. Es una técnica que se acerca más al impresionismo.
Comparación:
Maino, Adoraicon de los pastores (1612), Las meninas
En relación con el uso que se hace de la pincelada, es muy propio del barroco para
conseguir efectos de realismo utilizar la pasta en forma de empastes para conseguir
sensación de cabellos, modelar arrugas y esto se hace con el propio pincel.
El afán realista que domina en las artes figurativas del siglo XVII lleva a algunos
pintores (Ribera, por ejemplo) a utilizar una pncelada de gran empaste (conseguida
mediante una capa abundante y rugosa de pasta de color) para acentuar la
expresividad, los relieves de la piel, las arrugas y la calidad y textura de los paños, etc.
(valores táctiles). El empaste consiste en dejar densas y gruesas capas de pintura sbre
la superficie para crear sensaciones de reliebe en la piel (arrugas, cabellos, etc.).

Tendencias (el tratamiento de los temas y de la luz son los elementos que mejor
explican los cambios de una tendencia a otra):
1. Primer tercio de siglo: domina el naturalismo tenebrista
 Tendencia que mayor auge y difusión alcanza entre los pintores, dada la
inclinación española por la representación de lo real (Ribera y Zurbarán
2. Tercio central: el realismo idealizado (tendencia clasicista)
 De concepción más intelectual (Velázquez)
3. Último tercio: el barroco decorativo o escenográfico
 Estilo más efectista y aparatoso, y más dinámico y colorista (Murillo y
otros).
1. Naturalismo tenebrista:
 Luz dirigida: produce en los cuerpos acentuados contraste s de luz y
sombra.
 Al igual que la escultura, la pintura de esta etapa se caracteriza por su
profundo naturalismo. Los modelos se toman directamente del natural y
se representan tal como son, sin corregir o idealiza los posibles defectos,
que a veces, incluso, se subrayan con precisión. Toda la gama de tipos
humanos hasta llegar a los más vulgares, feos, rudos o deformes, atraen la
atención de los pintores (personajes harapientos o lastimosos e incluso
contrahechos, representados en toda su crudeza), y que incluso se utilizan
(Ribera) para representar a santos y mártires.
 Se trata muchas veces en una mirada crítica y aguda sobre la sociedad de
la época.
 El italiano Caravaggio fue el creador de este naturalismo tenebrista (llamado también
caravaggismo). La temprana llegada a España de obras del pintor contribuyó a difundir
y a consolidar su estilo en nuestro país.
En esta tendencia, y a diferencia de la visión optimista de héroes que los artistas del
renacimiento representaban, los del barroco los convierten en humanos.

José Ribera, La mujer barbuda


Representa a Magdalenta Ventura con aspecto masculino por sufrir hirsutismo. En la
obra aflora el drama psicológico de la mujer transformada en hombre y la resignación
del marido. No tiene intención de representar un fenómeno de la naturaleza, sino de
dejar constancia de un caso extraordinario.
José Ribera, El patizambo.
Tampoco aquí hay intención de representar un personaje exótico, sino de representar
la caridad. Asi lo refleja en el papel que aparece en la obra.
El bufón don Sebastián de Morra, de Velázquez.
Murillo. Niño espurgándose: crítica social.

También podría gustarte