Está en la página 1de 35

UNIVERSIDAD CATOLICA ANDRES BELLO FECHA: 12/06/2020

CATEDRA: DERECHO DE FAMILIA


PROFESORA: ROSARIO GARCIA DE RODRIGUEZ
GUIA 6 SEMANA 6
TEMA 9 PARTE II CAPITULACIONES MATRIMONIALES REGIMEN
VENEZOLANO

1.- CONCEPTO: Las capitulaciones matrimoniales son pactos o contratos


que celebran un hombre y una mujer con ocasión del matrimonio para
determinar y reglamentar su régimen económico patrimonial matrimonial.

2.- LA LIBERTAD DE CONTRATACION Y SUS LIMITACIONES


El artículo 141 del Código Civil: El matrimonio en lo que se relaciona con
los bienes, se rige por la convenciones de las partes y por la ley.

Por lo tanto el hombre y la mujer que van a contraer matrimonio, si bien


es cierto que puede constituir un pacto de capitulaciones matrimoniales
antes de celebrarlo para determinar y reglamenta su régimen económico
patrimonial durante la vigencia de su matrimonio, no es menos cierto que
los contrayentes contratantes no pueden derogar normas de orden
público mediante las estipulaciones que establezcan en las
capitulaciones matrimoniales.

Lo antes expresado es ratificado por el artículo 142 del Código Civil, que
preceptúa: Serán nulos los pactos que los esposos hicieren contra las
leyes o las buenas costumbres o en detrimento de los derechos y
obligaciones que respectivamente tienen en la familia, y los contrarios a
las disposiciones prohibitivas de este Código y a las establecidas sobre
divorcio, separación de cuerpos, emancipación, tutela y sucesión
hereditaria.
De la norma transcrita, se evidencia que tampoco se puede alterar
mediante pactos o convenciones matrimoniales, las normas legales sobre
derechos conyugales, divorcio, separación de cuerpos, emancipación y

1
tutela, ya que todas esas instituciones familiares está regidas por normas
de orden público.
Tampoco las capitulaciones matrimoniales pueden derogar disposiciones
legales sobre sucesión hereditaria, aún y cuando tales normas no son
todas de orden público, pero los pactos sobre sucesión futura, son
objeto ilícito, contrarios a la ley en cualquier contrato y pudiera ocurrir
que las estipulaciones que contengan las capitulaciones matrimoniales se
convengan en ellas, pactos sobre sucesión futura prohibidos
expresamente en el artículo 142 antes transcrito.

En el tema anterior, ya les señalé que en nuestra legislación hay una


norma prohibitiva que en materia de capitulaciones matrimoniales tiene
una gran importancia, que es el artículo 1.650 del Código Civil, cuyo
contenido transcribo a continuación:
Se prohíbe toda sociedad a título universal, sea de bienes presentes y
venideros, o de unos y otros.
Se prohíbe asimismo toda sociedad de ganancias a título universal,
excepto entre cónyuges.
Puede, con todo, ponerse en sociedad cuantos bienes se quieran,
especificados.

De lo anterior debe deducirse que en Venezuela no puede establecerse


por convenciones matrimoniales, regímenes distintos de la comunidad
legal de bienes gananciales, salvo que los bienes que haya de
considerarse comunes sean determinados y especificados en forma
individual. Por lo tanto, en Venezuela no son lícitos:
1º. Los regímenes de comunidad universal;
2º.-Los regímenes de comunidad de bienes muebles;
3.-Los regímenes de comunidad de bienes futuros
4.-Los regímenes de comunidad de bienes muebles y gananciales
5.-Los regímenes de separación con participación
Debido a que todos los regímenes antes mencionados constituyen,
sociedades universales en el sentido establecido por el artículo 1.650 del
Código Civil.

2
Otra limitación que debe tenerse en cuenta al momento de constituir un
pacto o contrato de capitulaciones matrimoniales, es lo establecido por el
artículo 34 de la Ley Sobre Derechos de Autor, según el cual el derecho
de una persona sobre las obras de su ingenio o sobre las obras las obras
del ingenio de un tercero, de que dicha persona llegue a ser titular, se
considera de carácter personalísimo para su titular y por ello le pertenece
de manera exclusiva, no obstante cualquier cláusula en contrario que
contengan las capitulaciones matrimoniales que dicha persona celebre.
Excepción hecha de las restricciones antes mencionadas, los futuros
contrayentes, pueden celebrar un pacto o contrato de capitulaciones
matrimoniales antes de contraer el matrimonio para que rija durante él,
estipulando lo que estimen conveniente respecto de la determinación y
reglamentación del régimen económico de su patrimonio.

Por ejemplo, los futuros contrayentes en nuestro país, pueden elegir


como régimen patrimonial matrimonial un régimen previsto en un Código
Civil ya derogado o en una legislación extranjera, como por ejemplo un
régimen de separación total de bienes previsto en la legislación española,
en el vigente Código Civil de España en los artículos 1435 al 1444
CAPITULO VI “DEL REGIMEN DE SEPARACION DE BIENES, TITULO III
“DEL REGIMEN ECONOMICO MATRIMNONIAL DEL LIBRO CUARTO DE
LAS OBLIGACIONES, siempre y cuando los contrayentes estipulen de
manera concreta en las respectivas capitulaciones matrimoniales, el
contenido completo del sistema patrimonial escogido, e incluso puede
estipular un sistema que resulte de la combinación de varios regímenes
extranjeros, siempre que no sean contrarios a las limitaciones ya antes
indiadas.

En Venezuela, generalmente la mayoría de los contrayentes celebran un


pacto o contrato de capitulaciones matrimoniales con la finalidad de
acogerse a un régimen económico patrimonial matrimonial de separación
total de bienes, buscando una independencia económica respecto de su
patrimonio, los cónyuges una vez contraído el vínculo matrimonial.

3
De allí que es frecuente que en nuestro país, que se confunda la
expresión “capitulaciones matrimoniales” con régimen matrimonial
convencional de separación total de bienes, y esa confusión ocurre
porque como antes indiqué, generalmente los contrayentes otorgan las
capitulaciones matrimoniales con la finalidad de establecer un sistema de
separación total de bienes, y para ello no resulta suficiente que las partes
indiquen en su contenido que proyectan contraer matrimonio “bajo
régimen de capitulaciones matrimoniales”, sin más precisiones, pues este
tipo de pacto son ineficaces y así lo ha dicho nuestra jurisprudencia. Los
contrayentes que desean separase totalmente de bienes deben expresan
claramente en las estipulaciones de las capitulaciones matrimoniales,
cual es el régimen que escogen, identificarlo y plasmarlo en el contenido
del pacto o contrato que celebra, En nuestro país el único régimen que
está regulado en el Código Civil es el régimen supletorio de comunidad
conyugal limitada de bienes gananciales, cuya aplicación es forzosa
cuando los contrayentes no celebran un pacto de capitulaciones
matrimoniales.
También es frecuente en Venezuela, que los contrayentes celebren un
pacto de capitulaciones matrimoniales, piensen que al celebrarlas existe
entre ellos una vez que contraen el matrimonio, una separación total de
del patrimonio y al revisar el contenido, todas las estipulaciones
coinciden con el régimen supletorio de la comunidad conyugal limitada
de bienes gananciales previsto en la ley, es decir que copiaron y
escogieron dicho régimen. Tales capitulaciones matrimoniales son
eficaces. Muchas personas se preguntan si sería lícito que los
contrayentes escogieran como régimen patrimonial matrimonial a la
comunidad conyugal limitada de bienes gananciales, que es el sistema
legal supletorio venezolano, pero modificando parcialmente dicho
sistema supletorio.
Muchos autores como el profesor Francisco López Herrera, en su texto
Derecho de Familia Parte I, dicen que ello es lícito, pero siempre y
cuando las modificaciones estipuladas no afecten el orden público ni las
buenas costumbres:

4
A.- El artículo 156 del Código Civil, establece: Son bienes de la
comunidad:
1º Los bienes adquiridos por título oneroso durante el matrimonio, a costa
del caudal común, bien se haga la adquisición a nombre de la comunidad
o al de uno de los cónyuges.
2º Los obtenidos por la industria, profesión, oficio, sueldo o trabajo de
alguno de los cónyuges.
3º Los frutos, renta e intereses devengados durante el matrimonio,
procedentes de los bienes comunes o de los bienes peculiares de cada
uno de los cónyuges.

Asimismo el artículo 151 del Código Civil establece: “Son bienes propios
de los cónyuges los que pertenecen al marido y a la mujer al tiempo de
contraer matrimonio y los que durante éste adquieran por donación,
herencia, legado o por cualquier otro título lucrativo…”

Y el articulo 142 del Código Civil, preceptúa: Serán nulos los pactos que
los esposos hicieren contra las leyes o las buenas costumbres, o en
detrimento de los derechos y obligaciones que respectivamente tienen en
la familia y los contrarios a las disposiciones prohibitivas de este Código
y a las establecidas sobre divorcio, separación de cuerpos,
emancipación, tutela y sucesión hereditaria”

De las normas antes transcritas, la primera de ellas, el artículo 156 C.C.


establece, que son bienes comunes las adquisiciones que los cónyuges
hagan por título oneroso durante el matrimonio a costa del caudal común
y que también pertenecen a la comunidad todos los bienes obtenidos por
la industria trabajo, profesión, oficio, sueldo o trabajo de alguno de los
cónyuges.
En las capitulaciones matrimoniales, los contrayentes pudiesen estipular
que algunas de esas adquisiciones que son patrimonio común, según el
artículo 156 C. C., pasen a ser patrimonio particular del cónyuge que las
perciba, por ejemplo, que establezcan en una estipulación de las
capitulaciones matrimoniales, que todo lo percibido por cada uno de los

5
cónyuges por su trabajo, profesión, oficio, salario o industria pase a
ingresar al patrimonio de cada cónyuge, es decir que dejan de ser bienes
comunes y pasan a formar parte como bienes propios del peculio de cada
cónyuge.
Pero no sería posible convenir mediante estipulación en un pacto de
capitulaciones matrimoniales, que las adquisiciones, que según la ley son
bienes propiedad exclusiva de cada cónyuge, por ejemplo todo lo
recibido por el cónyuge durante el matrimonio, a título gratuito, por
donación, herencia o legado, pasen a ser bienes comunes según lo
estipulado en un pacto de capitulaciones matrimoniales porque tal
disposición infringe el artículo 1650 del C. C. , porque tales bienes tienen
que ser especificados, determinarlos individualmente y transgrede el
artículo 142 del C.C. y 1.156 ejusdem porque se prohíben los pactos sobre
sucesión futura.

El artículo 1.650 del C. C. se limita a prohibir sociedades a título


universal, de bienes en general o ganancias en particular excepción
hecha de las sociedades de ganancias entre cónyuges y no existe norma
legal que prohíba modificar la partición igualitaria de los cónyuges en los
bienes comunes, es decir de por mitad y tampoco la modificación de la
participación en los gananciales no afecta al orden público ni a las
buenas costumbres. Por ello es posible en las capitulaciones
matrimoniales modificar la participación de los cónyuges en los bienes
comunes si se escogió el régimen patrimonial matrimonial de comunidad
conyugal de bienes gananciales con ciertas modificaciones.

También se consideran válidas en unas capitulaciones matrimoniales las


cláusulas que modifiquen las normas relativas a las cargas de la
comunidad.

Son absolutamente nulos:


a) Los acuerdos que atribuyan exclusivamente a uno de los cónyuges la
administración de los bienes propios del otro.

6
b) También son absolutamente nulos los acuerdos que impongan a
ambos cónyuges la administración conjunta de los bienes propios de
cada uno de ellos, porque ello significa un contrato de incapacidad y
éstas la impone la ley, tal conducta contractual atenta contra el orden
público
c) Tampoco pueden pactar los contrayentes, que la administración de los
bienes comunes corresponda a sólo uno de los cónyuges, sea el hombre
o la mujer;
d) Tampoco los contrayentes pueden pactar, que cada cónyuge por
separado tengan la administración de la totalidad de los bienes comunes,
tales acuerdos constituyen mandatos generales irrevocables.
e) No son válidas las estipulaciones según las cuales todo acto de
administración de los bienes comunes tenga que ser llevado a cabo en
forma conjunta por ambos cónyuges, porque pueden servir para dañar a
terceros.
3.-CARACTERITICAS DE LA CAPITULACIONES MATRIMONIAES.-
1.-Son contratos bilaterales: Le imponen a las partes contratantes,
derechos y obligaciones durante el matrimonio, respecto del régimen
económico patrimonial matrimonial determinado en sus estipulaciones.
2.- Son contratos accesorios al matrimonio, siguen la suerte de éste y
surten efectos a partir de la formación del vínculo matrimonial con la
celebración del matrimonio
3.- Si el matrimonio es declarado nulo de nulidad absoluta o relativa no
tiene y no tiene valor de putativo para ninguno de los esposos, las
capitulaciones matrimoniales deben ser consideradas como el
matrimonio declarado nulo, como si jamás se hubieren celebrado y
desaparecen de la vida jurídica, suele admitirse el reconocimiento de los
derechos de los terceros de buena fe.

Si el matrimonio declarado nulo se le da valor de putativo para los dos


esposos, el matrimonio tiene valor como putativo y las capitulaciones
matrimoniales se consideran válidamente celebradas para los esposos y
los terceros desde la fecha de la celebración del matrimonio hasta la
fecha de la sentencia definitiva y firme.

7
Si el matrimonio declarado nulo o anulado tiene valor como putativo para
uno sólo de los cónyuges, las capitulaciones matrimoniales valen para el
cónyuge que actuó de buena y no para el otro cónyuge, pero como se
trata de un contrato bilateral, si el cónyuge de buena fe trata de
aprovecharse en lo que lo benefician las capitulaciones, el cónyuge de
buena fe está obligado a reconocerle al cónyuge que actuó de mala fe, en
lo que lee favorezcan a éste.
4.- Sólo pueden celebrarse antes del matrimonio.
SI el matrimonio se celebra antes de celebrar el pacto de capitulaciones
matrimoniales, éstas ya no podrán celebrarse y se aplicará en forma
forzosa el régimen supletorio de comunidad conyugal limitada de bienes
gananciales.
5.-Son contratos inmutables: Porque una vez constituido el pacto o
contrato de capitulaciones matrimoniales no pueden modificarse después
de celebrado el matrimonio. Las capitulaciones matrimoniales pueden
modificarse antes de la celebración del matrimonio y para que sean
válidas tales modificaciones es menester que se registren ante el Registro
Inmobiliario de la Jurisdicción del lugar donde vaya a celebrarse el
matrimonio y que todas que han sido parte en las capitulaciones presten
su consentimiento a la modificación (artículo 144 C. C.), pero además para
que tenga validez toda modificación en las capitulaciones matrimoniales,
aunque estén revestidas de todas la formalidades exigidas en el artículo
144 del C. C. quedan sin efecto respecto a terceros, si al margen de los
protocolos del instrumento respectivo no se ha anotado la existencia de
la escritura que contenga la modificación (artículo 145 C. C.)

6.-Son contratos intuito personae: Debido a su naturaleza el pacto de


capitulaciones matrimoniales sólo existe entre los mismos contratante.
Los cónyuges no pueden contratar para sí y para sus herederos (Artículo
1.163 C. C.), no pueden ceder a terceros los derechos que resulten a su
favor, los herederos de los cónyuges no pueden aprovecharse de las
estipulaciones contenidas en las capitulaciones matrimoniales. Son actos
personalísimos y sólo existen entre cónyuges.

8
7,. Son contratos solemnes porque para su perfeccionamiento y validez,
deben cumplirse para constituirlas las formalidades previstas en la ley.
8.- Publicidad de las Capitulaciones Matrimoniales:
La publicidad de los convenios matrimoniales se logra a través de su
inscripción en el Registro Inmobiliario, que tenga jurisdicción en el lugar
donde se va a celebrar el matrimonio. En conformidad con el Decreto con
Rango y Fuerza de Ley del Registro Público y del Notariado, Decreto No.
1.422 de fecha 19 de noviembre de 2014, Publicado en la Gaceta Oficial de
la República Bolivariana de Venezuela No, 6156 Extraordinario de fecha
19 de noviembre de 2014, artículo 46 numeral 11, la protocolización de las
capitulaciones matrimoniales es competencia del Registro Público.

4.- CAPACIDAD REQUERIDA PARA CELEBRAR CAPITULACIONES


MATRIMONIALES.-
Quien es capaz para contraer matrimonio es capaz para celebrar
capitulaciones matrimoniales.
Por lo que concierne a la edad, debemos recordar que la sentencia 1353
TSJ de fecha 16 de octubre de 2014, dictada en Sala Constitucional,
declaró la nulidad parcial del artículo 46 del C. C. La edad requerida por el
hombre y la mujer para celebrar matrimonio es de 16 años.
La regla general respecto a la capacidad contractual, es que ésta
capacidad se adquiere a los 18 años. Los menores para constituir las
capitulaciones matrimoniales actúan por si mismos pero requiere de la
asistencia de las mismas personas que deben autorizar el matrimonio,
conforme con el régimen de autorizaciones previsto en el C. C.
El inhabilitado puede pactar capitulaciones matrimoniales, pero con la
asistencia del curador si lo tiene, al efecto el se le designe, pero
adicionalmente requiere de la autorización judicial (artículo 147 C.C.).
El entredicho por defecto mental, el loco no entredicho y la persona que
no se encuentre en su sano juicio, no pueden celebrar capitulaciones
matrimoniales, pues son incapaces para contraer matrimonio (Artículo 48
C. C.).

9
El entredicho civil por condena penal no puede celebrar capitulaciones
matrimoniales, debido a la prohibición que contiene el artículo 23 del C. P.
pero puede celebrar matrimonio.

5.-INEFICACIA DE LAS CAPITULACIONES MATRIMONIALES.

A) CADUCIDAD: un acto o negocio jurídico caduca, cuando


circunstancias extrínsecas a él y posteriores a su celebración lo hace
ineficaz para producir efectos tanto frente a sus partes como frente a los
terceros.
La caducidad de los actos en derecho civil se plantea en tres casos:
1º) Las capitulaciones matrimoniales
2º) El legado
3º) donaciones
El negocio caduco no adolece de vicios, ni es ilegal, su ineficacia siempre
es posterior a su celebración
La caducidad de las capitulaciones matrimoniales resulta de dos
circunstancias:
1º) La no celebración del matrimonio
2º) La nulidad del vinculo conyugal

B. NULIDAD DE LAS CAPITULACIONES


Es la sanción civil que viene determinada por la violación, por la
transgresión de una disposición legal en el acto mismo de su celebración,
que trae como consecuencia eliminar de la vida jurídica las capitulaciones
matrimoniales totalmente como si jamás se hubiesen celebrado o la parte
afectada por el vicio, dejándolas sin efecto alguno, según se trate de
nulidad absoluta o relativa.

1º.-LA NULIDAD ABOSOLUTA: Las capitulaciones matrimoniales están


afectadas de nulidad absoluta cuando hay una transgresión en su
celebración de normas en cuya observancia está interesado el orden
público o las buenas costumbres.
CASOS:

10
a) Cuando en la celebración del pacto de capitulaciones matrimoniales no
se han observado las solemnidades impuestas por la ley.
b) Cuando en el pacto de capitulaciones matrimoniales se hayan violado
disposiciones legales de orden público: capitulaciones matrimoniales en
las cuales se acogen los contrayentes a un régimen de comunidad
universal, capitulaciones otorgadas por un entredicho con defecto mental
y las otorgadas por un entredicho civil por condena penal.
c) Las capitulaciones matrimoniales en las que el régimen económico
patrimonial matrimonial es indeterminado.
d), Las capitulaciones matrimoniales que contiene en su estipulaciones
pactos sobre sucesión futura, en detrimento de los derechos y deberes
que tienen los cónyuges en la familia o contrarias a las disposiciones
legales sobre divorcio, separación de cuerpos, tutela o emancipación.
e)- Las capitulaciones convenidas a término o condición después de la
celebración del matrimonio.
Características de esta acción de nulidad absoluta:
1º.- Puede ser ejercida por los cónyuges y por toda persona que tenga un
interés legítimo.
2º.-Las capitulaciones matrimoniales o la parte de ellas viciada no se
convalidan, no pueden ser confirmadas ni ratificadas.
3º.-Prescriben a los 10 años contados desde la fecha que queden sin
efecto.-
2º) NULIDAD RELATIVA DE LAS CAPITULACIONES MATRIMONIALES.-
Es la sanción que viene determinada por la violación, por la transgresión,
en el acto de la celebración de las capitulaciones matrimoniales de
normas jurídicas establecidas por el legislador en protección de una de
las partes o de ambas.
CASOS:
1º.-Las capitulaciones celebradas por un incapaz
2º.-Capitulaciones matrimoniales afectadas en su celebración con vicios
del consentimiento.
3.-Capitulaciones matrimoniales constituidas por un incapaz, autorizado
por la ley para celebrarlas sin la autorización de las personas exigidas por

11
la ley en el caso del inhabilitado, sin la presencia del curador, o del
menor de edad.
CARACATERISTICAS:
1º.-Las capitulaciones matrimoniales o la parte de ellas afectadas por la
transgresión, pueden ser ratificadas o confirmadas.
2º.-La acción de nulidad relativa de las capitulaciones matrimoniales
prescribe en un lapso de cinco años contado a partir de la fecha en que
ha cesado o se ha descubierto la irregularidad que afecta el convenio.
3.-La acción para demandar la nulidad relativa de las capitulaciones
matrimoniales o de la parte de ellas afectada, sólo puede ser ejercida por
la parte en cuya protección fue establecida la norma violada.

C.- CADUCIDAD DE LAS CAPITULACIONES MATRIMONIALES.-


La caducidad de un acto jurídico viene determinada por circunstancias
extrañas al acto mismo, y posteriores a él; que traen como consecuencia
su ineficacia. En el caso de las capitulaciones matrimoniales, caducan por
la no celebración del matrimonio en relación al cual fueron constituidas o
por la declaración judicial mediante sentencia definitiva y firme de la
nulidad del matrimonio en relación al cual fueron constituidas.

D.-LA INOPONIBILIDAD DE LAS CAPITULACIONES MATRIMONIALES.


Hemos vistos anteriormente que una de las características de las
capitulaciones matrimoniales es que son inmutables, es decir que una vez
celebradas no pueden ser modificadas. Se dice que éstas son inoponibles
cuando conservando su eficacia entre las dos partes que las
suscribieron, son ineficaces respecto de terceros y ello ocurre cuando,
habiendo constituido los contrayentes las capitulaciones matrimoniales
cumpliendo todas las formalidades previstas al respecto por la ley, los
contrayentes hicieron modificaciones a las capitulaciones matrimoniales
inicialmente otorgadas por ellos, antes de contraer matrimonio, y el
registrador no estampó en el protocolo que las contiene la nota marginal
en la cual se deja constancia de la modificación. (Artículo 145 C. C.)

4.-LAS DONACIONES CON OCASIÓN DEL MATRIMONIIO:

12
En las donaciones con ocasión el animus donadi está fundamentado al
hecho mismo de la celebración del mtrimonio. La donación puede ser
hecha por uno de os contrayentes del futuro matrimonio al otro; o puede
ser hecha por un tercero a alguno o a ambos novios.
Las donaciones matrimoniales entre los contrayentes, para que sean
tales, deben verificarse antes de la celebración del matrimonio, porque de
lo contrario se trataría de donaciones ordinarias entre cónyuges, que no
se gobiernan por las reglas especiales de las que se efectúan con ocasió
del matrimonio. Los terceros pueden hacer donaciones matrimoniales
tanto antes de la celebración del matrimonio como con posterioridad a él,
con motivo del cual se hacen.

5.-Características que diferencian a las donaciones hechas con ocasión


del matrimonio de las demás gratuidades entre vivos:
A.- CAPACIDAD: Dispone el artículo 1.435 del Código Civil, que sólo
puede donar quien tenga plena capacidad de disposición de sus bienes.
Por lo tanto aquella persona que no haya cumplido 18 años, excepción
hecha del emancipado y la que estuviere inhabilitada, no puede efectuar
donaciones ordinarias, dejando a salvo las disposiciones especiales que
se refieren a las donaciones hechas con ocasión del matrimonio,
previstas en los artículos 146 y 147 del C. C.
El artículo 146 del C. C., permite al menor que con arreglo a la ley puede
contraer matrimonio (El hombre y la mujer que hayan cumplido 16 años),
hacer donaciones hacer donaciones matrimoniales a la persona con
quien proyecta contraer nupcias(la excepción no abarca no abarca las
donaciones de terceros con ocasión del matrimonio). Estas donaciones
requieren la aprobación de las mismas personas que deben autorizar el
matrimonio, las cuales deben asistir al menor en el acto en que se lleva a
cabo la liberalidad.
El artículo 147 del c. C. permite al inhabilitado o a la persona a quien se
esté siguiendo juicio de inhabilitación efectuar donaciones con ocasión
del matrimonio con la asistencia de su curador, o de un curador ad hoc si
no tiene otro y previa autorización judicial.

13
B. ACEPTACION: A los efectos de que surta efectos la donación es
necesario que exista la voluntad el donante de hacer la donación y
también la aceptación del donatario. (Artículos 1.141 y 1.431 C. C.)
C.-SANEAMIENTO.-
El donante en una donación ordinaria no está obligado a saneamiento por
evicción de la cosa donada sino cuando lo promete expresamente o
cuando la evicción proviene de su dolo o de un hecho personal suyo y
tampoco esta obligado al saneamiento por vicios ocultos de la cosa
donada aunque si debe resarcir los daños que tales vicios le ocasionaron
al donatario. (Artículo 1.456 C. C. )
En las donaciones hechas con ocasión del matrimonio el donante
siempre está obligado a sanear por evicción y también por vicios ocultos
de la cosa donada, a menos que hayan estipulado expresamente en la
donación hecha, lo contrario (Artículos 162 y ordinal 3º del artículo 1.458
del C. C. 1.458)
C. CADUCIDAD: La caducidad de las donaciones matrimoniales puede
resultar de dos causas: la no celebración del matrimonio proyectado y de
la declaración de su nulidad o anulabilidad mediante sentencia defibnitiva
y firme dictada por el Tribunal competente.
A) La donación de un futuro matrimonio queda sin efecto si el matrimonio
no es celebrado (Artículo 1.450 C.C.)
B.- En cuanto a las donaciones hechas con ocasión el matrimonio,
cuando éste es declarado nulo de nulidad absoluto o por nulidad relativa,
trae las siguientes consecuencias:
1º) Cuando el matrimonio declarado nulo o anulado no tiene valor de
putativo para ninguno de los aparentes esposos, lo donado con ocasión
del matrimonio a favor de la comunidad de gananciales, pasa al
patrimonio de los hijos (Artículo 173 C. C.), sin no existen hijos la
donación queda sin efecto ( Primer aparte del artículo 1.450 C. C.). Si la
donación fue hecha a uno sólo de los cónyuges, la nulidad del vínculo
trae como consecuencia su caducidad (1er aparte del artículo 1.450 C. C.).

Si el matrimonio declarado nulo o anulado, tiene valor de putativo a favor


de ambos cónyuges, la donación nupcial hecha a la comunidad conserva

14
su eficacia y corresponde de por mitad a los esposos (Art. 173 del C. C.).
Si la donación se hace sólo a uno de los cónyuges exclusivamente, este
la conserva (Art. 127 C. C.)
Si el matrimonio declarado nulo o anulado valor de putativo para uno sólo
de los cónyuges, lo donado con ocasión del matrimonio a la comunidad
conyuga, lo conserva íntegramente la parte que actuó de buena fe (Art.
173 C. C.), ésta, retiene lo que recibió para su patrimonio propio como
donación matrimonial (Art. 127 C. C.). Y lo recibido como donación
matrimonial y para su propio patrimonio por el cónyuge que actuó de
mala fe, debe ser restituido por él o ella al donante (Art. 1,450 C. C.)
Las donaciones con ocasión del matrimonio, hechas a los hijos por nacer
de un futuro matrimonio determinado, que luego es declarado nulo,
conservan su eficacia (Segundo aparte del artículo 127 y segundo aparte
del artículo 1.450 C. C.)
La caducidad no afecta los derechos adquiridos posterceros de buena fe
antes de la declaración de nulidad (Art. 1450 del C. C.)

REGIMEN PATRIMONIAL MATRIMONIAL SUPLETORIO VENEZOLANO:


LA COMUNIDAD CONYUGAL DE GANANCIALES.

El articulo 141 del Código Civil, establece: El matrimonio en lo que se


relaciona con los bienes, se rige por las convenciones de las partes y por
la Ley. Esto quiere decir, como ya antes lo he señalado, que nuestra
legislación, como lo dice la precitada norma, acoge como régimen
patrimonial matrimonial, el sistema contractual de libertad absoluta, en
virtud del cual le da a los futuros contrayentes, una amplia facultad de
estipular el régimen que desean, para determinar y reglamentar el
régimen económico patrimonial durante la vigencia del matrimonio que
pretenden contraer.
Pero, conforme con otras legislaciones que adoptan el sistema
contractual, establece un régimen legal supletorio, que es el que se aplica
ante la ausencia de un pacto de capitulaciones matrimoniales, que es el
de la comunidad conyugal limitada de gananciales, el cual es de
aplicación forzosa cuando los futuros contrayentes no ejercen la facultad

15
que le da la Ley de escoger su régimen patrimonial matrimonial, y
celebren el matrimonio sin celebrar un pacto de capitulaciones
matrimoniales.
En Venezuela el régimen supletorio es el de la comunidad conyugal
limitada de gananciales:
Artículo 148 Código Civil:
Entre marido y mujer, si no hubiere convención en contrario, son
comunes, de por mitad, las ganancias o beneficios que obtengan durante
el matrimonio.

1.-CONCEPTO:
La comunidad limitada de gananciales, es el régimen supletorio que la
Ley declara existente forzosamente entre los cónyuges, ante la falta de un
pacto convencional de capitulaciones matrimoniales constituido por los
contrayentes antes de celebrar el matrimonio, en virtud de la cual todos
los bienes adquiridos durante el matrimonio por los cónyuges a t´titulo
oneroso son comunes de por mitad, los bienes donados o prometidos a
uno de los cónyuges, por razón del matrimonio, aun antes de su
celebración, a menos que el donante manifieste lo contrario (artículo 161
c. C.), conservando cada uno de los cónyuges los bienes que fueran de
su propiedad al tiempo de celebrar el matrimonio y los que adquiera
durante él, a título gratuito o a título oneroso, pero por subrogación de
bienes propios, los derechos personalísimos y los vestidos, joyas u otros
enseres de uso personal (Artículos 151 y 152 del Código Civil.-

2.- CARACTERISTICAS DE LA COMUNIDAD LIMITADA DE BIENES


GANANCIALES.-
a).- La comunidad limitada de gananciales sólo puede existir entre los
cónyuges. Así lo dispone el artículo 1.650 del Código Civil, que en su
primera parte, prohíbe la sociedad de ganancias a título universal
excepto, entre cónyuges.
b) La comunidad limitada de gananciales, sólo se extingue por alguna de
las causas taxativamente establecidas en la Ley (Artículo 173 del C. C.)

16
c) La comunidad limitada de gananciales está reglamentada por la Ley y
persigue facilitar el cumplimiento de los deberes que derivan del
matrimonio.
d) La comunidad limitada de bienes gananciales comienza el día de la
celebración del matrimonio; cualquier estipulación contraria a ello es nula
(Artículo 149 C. C.)
e) Las ganancias obtenidas durante el matrimonio, en la comunidad
limitada de bienes gananciales son comunes de por mitad (Artículo 148 C.
C.) Las cuotas de copropiedad entre los cónyuges son fijas e invariables.

3.- BIENES COMUNES Y BIENES PROPIOS DE LOS CONYUGES.-

Las legislaciones que adoptan el sistema de comunidad limitada de


bienes gananciales, se inspiran para la determinación de los bienes que
forman la masa común y de los bienes que forman el patrimonio propio
de cada uno de los cónyuges, en los siguientes principios:

1º.- El principio derivado de la comunidad de gananciales., consideran


que siendo una comunidad de adquisiciones a título oneroso, se
consideran bienes comunes los provenientes de la industria, profesión u
oficio de los cónyuges y las rentas de sus bienes propios como comunes
y por contrario son bienes propios los aportados al matrimonio y los
adquiridos a título gratuito durante la vigencia del matrimonio.
2º) El Principio de la subrogación real.-Todos los bienes adquiridos
durante el matrimonio en sustitución de otros bienes, toman o adquieren
la misma condición del bien constituido. Si el bien pertenecía al
patrimonio de uno de los cónyuges, el bien adquirido tendrá la misma
condición es decir es un bien propio del patrimonio d ese cónyuge.
3º) La presunción favorable a la comunidad de gananciales.
Los bienes de los cónyuges se tienen por comunes, mientras no se
pruebe lo contrario. (Artículo 164 C. C.)

BIENES COMUNES:

17
1º) Los bienes adquiridos por título oneroso durante el matrimonio, a
costa del caudal común, bien que se haga la adquisición a nombre de la
comunidad o al de uno de los cónyuges (Ordinal 1º artículo 156 C. C.).-
El título oneroso: El origen etimológico de las dos palabras que le dan
forma es:
Título, viene del latín “TITULUS” que puede traducirse como “rótulo” o
“cartel”. Oneroso, también deriva del latín. En su caso concreto deriva de
“onus, oneris” que significa abundancia o algo pasado.
Un título, dentro del contracto de las finanzas, es un documento que
posibilita la representación de deuda pública o de un valor. Oneroso es
un adjetivo que hace referencia a aquello que es gravoso.
Título oneroso, alude a un contrato que implica obligaciones recíprocas
para dos partes.
Entendemos por adquisiciones a título oneroso, aquéllas en que se
obtiene la propiedad de una cosa a cambio de una contraprestación o
equivalencia económica jurídica.
Respecto a éste ordinal, incurre el legislador e una impropiedad, cuando
dice que: “Los bienes adquiridos por título oneroso durante el
matrimonio, a costa del caudal común, bien que se haga la adquisición a
nombre de la comunidad o al de uno de los cónyuges. La comunidad
limitada de ganancias no tiene personalidad jurídica, por lo tanto los
bienes a título oneroso pueden ser adquiridos por un solo cónyuges o por
ambos cónyuges y son comunes.
Debe tenerse en cuenta que también son bienes comunes y no del
cónyuge adquirente, las ganancias obtenidas en los juegos, apuesta,
loterías, con dinero común, se trata de contratos onerosos, aunque
aleatorios.
2º También son bienes de la comunidad, los bienes obtenidos por la
industria, profesión, oficio, sueldo o trabajo de alguno de los cónyuges
(Ordinal 2º del artículo 156 C.C.)
En este caso la contraprestación del cónyuge adquirente, consiste en un
hacer, representado en su actividad o trabajo. Son incluidos en esta
especie de bienes comunes, no sólo las remuneraciones que cada esposo
reciba con ocasión de su industria, profesión un oficio, sino que también

18
los bienes adquiridos con tales remuneraciones son comunes. Se aplica
aquí el principio de la subrogación real. Igualmente son bienes comunes,
todo ingreso que reciba alguno de los cónyuges por su trabajo como
sueldo o salario, así como las prestaciones sociales e indemnizaciones
que reciba por su actividad laboral.
3º) Son bienes comunes, los frutos, rentas o intereses devengados
durante el matrimonio, procedentes de los bienes comunes o de los
peculiares de cada uno de los cónyuges.
Se trata de adquisiciones hechas, a título oneroso, habidas durante el
matrimonio, producidas por los bienes comunes y por los privativos de
los esposos, logradas mediante la actividad de los cónyuges y bienes
comunes derivados del principio de la naturaleza de la comunidad de
gananciales.
4º) Son bienes comunes, los frutos y pensiones derivados del derecho de
usufructo o de pensión propios de un cónyuge, en sus cuatro quintas
partes, durante los primeros veinte años de matrimonio, e íntegramente,
después.

Artículo 158 C. C. El derecho de usufructo o de pensión, forma parte de


los bienes propios del cónyuge a quien pertenece; pero las pensiones y
frutos correspondientes a los primeros veinte años del matrimonio,
corresponden a la comunidad en los cuatro quintos. De los veinte años en
adelante todos los frutos y pensiones corresponden a la comunidad.

Esta norma hace referencia al derecho de usufructo y distingue en la


titularidad del mismo y sus frutos y además alude al derecho de pensión,
que no es más que una renta, sea vitalicia o temporal, y diferencia el
derecho de usufructo desnudo en sí, de las rentas o productos que
derivan de él.
Esta norma deriva de principios relacionados con el régimen dotal.

Al respecto dice el exprofesor Francisco López Herrera en su texto


Derecho de Familia, Tomo I “ El texto del artículo 158 del C. C. que de su
lectura da la impresión de que los derechos de usufructo y de pensión, a

19
pesar de no ser de carácter personalísimo ni tampoco indivisible como si
lo son los derechos de uso y habitación, deben considerarse siempre
bienes propios del respectivo cónyuge, independientemente de la causa,
sea gratuita u onerosa, o del tiempo de su adquisición, antes o durante el
matrimonio.

El derecho de usufructo y de pensión habidos por uno de los esposos


antes del matrimonio, le pertenecen en propiedad exclusiva lo mismo que
si los adquiere durante el matrimonio por causa lucrativa (artículo 151 del
C. C.) o por acto a título oneroso pero mediante subrogación de otros
bienes propios (artículo 152 del C. C.). En cambio, si tales derechos son
obtenidos durante el matrimonio con dinero o bienes comunes, ingresan
en el caudal común por mandato del artículo 152 C. C.
De manera que en cuanto concierne a la titularidad del usufructo o del
derecho de pensión no existe peculiaridad diferencial alguna respecto de
cualquier otro tipo de derechos que puedan llegar a adquirir los esposos
durante el matrimonio.
La especialidad del artículo 156 del C. C. estriba en otra cosa: conforme
señala la regla general contenida en el ordinal 3º del artículo 156 C. C., los
frutos, rentas e intereses devengados durante el matrimonio por los
bienes propios de los cónyuges, corresponden a la comunidad. Cuando el
derecho productor de los frutos, rentas o intereses es un usufructo o una
pensión propiedad exclusiva (bien propio o particular de unote los
cónyuges, tales proventos no ingresan totalmente en la comunidad, sino
sólo en el equivalente a sus cuatro quintas partes, durante los veinte
primeros años del matrimonio, el quinto restante pertenece
exclusivamente al titular del usufructo o de la pensión. Sólo después de
los veinte años, tales proventos corresponden a la comunidad”

5.-Las donaciones hechas a alguno de los cónyuges, por razón del


matrimonio, aún antes de su celebración, son de la comunidad, a menos
que el donante manifieste lo contrario (Artículo 161 C. C.)

20
Ya antes hemos señalado que en la comunidad limitada de bienes
gananciales, son bienes comunes las ganancias o beneficios obtenidos
por uno de los cónyuges o por ambos, durante el matrimonio y que son
bienes propios los adquiridos por cada uno de los cónyuges antes del
matrimonio y los obtenidos durante el matrimonio a título gratuito o a
título oneroso por subrogación de los bienes propios.
La regla general que indica que son bienes propios de cada cónyuge,
aquellos que adquiera a título gratuito, durante el matrimonio, tiene su
excepción, en la donaciones hechas a alguno de los cónyuges con
ocasión del matrimonio y aún antes de su celebración, a menos, las
cuales se consideran bienes comunes, en conformidad con lo
establecido por el artículo 161 del C. C., a menos que el donante
manifieste lo contrario, diciendo que la donación la hace sólo a un
determinado cónyuge.
6.- Son bienes de la comunidad limitada de gananciales, el aumento de
valor por mejoras hechas en los bienes propios de los cónyuges, con
dinero de la comunidad, o por industria de los cónyuges (Artículo 163 del
C. C.)
Si el dinero empleado en las mejoras del bien propio de uno de los
cónyuges es propiedad exclusiva de él, el aumento del valor del bien
propio por la mejora corresponderá al cónyuge que es propietario del
bien y de la mejora.
En conformidad con lo dispuesto en los ordinales 1º y 2º del artículo 156
del Código Civil, las mejoras hechas en un bien propio de unos de los
cónyuges con dinero común, deberían ser un bien común las mejoras
hechas en el bien propio y no el aumento de valor del bien con motivo de
la mejora con lo establece la norma.

BIENES PROPIOS DE CADA UNO DE LOS CONYUGES.-

1.- Son bienes propios de cada cónyuge, los que pertenezcan al marido o
al tiempo de contraer matrimonio (artículo 151 C. C.)
Cada uno de los cónyuges conserva la propiedad exclusiva de todos su
bienes muebles e inmuebles, adquiridos a título gratuito u oneroso, que le

21
pertenezcan al momento en que contrae el matrimonio, excepto las
donaciones hechas con ocasión del matrimonio, aún antes de su
celebración, que según la ley son bienes comunes, a menos que el
donante manifieste que la donación la hace exclusivamente a uno de los
cónyuge, en consecuencia la donación se considera que es un bien
propio del cónyuge a quien exclusivamente se le hace.
2.- Son bienes propios de los cónyuges los que adquiera cada uno
durante el matrimonio por donación, herencia o legado o por cualquier
otro titulo lucrativo (artículo 151 C. C.)
Pertenecen en forma exclusiva a cada uno de los cónyuges los bienes
que obtenga durante el matrimonio por donación, herencia, legado o por
cualquier otro título gratuito, es decir sin dar contraprestación alguna.

En relación a la palabra “titulo lucrativo” contenida en el artículo 151 del


C. C. objeto de la reforma del C. C. 1942, se ha sostenido en opinión de
algunos que los mencionados bienes que se adquieran por donación
herencia o legado, son adquiridos a título gratuito o no lucrativo, sin
embargo se ha sostenido que a expresión a título gratuito o lucrativo el
adquirente adquiere algo sin dar contraprestación.
En relación con los bienes propios, adquiridos por donación, herencia o
legado debemos tener en cuenta el artículo 153 del Código Civil, el cual
establece:

Artículo 153 del C. C. Los bienes donados o dejados en testamento


conjuntamente a los cónyuges con designación de partes determinadas,
les pertenecen como bienes propios en la proporción determinada por el
donante o por el testamento y a falta de designación, por la mitad.

3.- Son también bienes propios los derivados de las accesiones naturales
y la plusvalía de dichos bienes, los tesoros y bienes muebles
abandonados que hallare alguno de los cónyuges.

Tanto los bienes propios derivados de las accesiones naturales y la


plusvalía de dichos bienes, como los tesoros y bienes muebles

22
abandonados que hallare alguno de los cónyuges, son adquisiciones,
constituyen bienes adquiridos a título gratuito, porque fueron adquiridos
por el cónyuge sin dar contraprestación alguna. En el caso de las
accesiones naturales, el cónyuge se hace propietario exclusivo de una
cosa que se une o incorpora a un bien de su propiedad por acción de la
naturaleza, en el caso de la plusvalía de los bienes propios de uno de los
cónyuges éste se hace propietario del aumento del valor del bien en
virtud de circunstancias ajenas a su esencia y cuando uno de los
cónyuges encuentra un tesoro o bien mueble abandonado, si lo toma lo
hace suyo sin entregar nada a cambio.
4.- son bienes propios de cada uno de los cónyuges, los vestidos, joyas y
otros enseres y objetos de uso personal o exclusivo de la mujer o del
marido (artículo 151 C. C.)

5.-Se hacen propios del respectivo cónyuge los bienes adquiridos durante
el matrimonio a título oneroso, pero por subrogación de bienes propios
(artículo 152 C. C.) . Este artículo contiene siete ordinales donde expresa
cuales son los bienes propios de cada uno de los cónyuges que fueron
adquiridos durante el matrimonio y a título onerosos, fueron adquiridos
por subrogación de otro bienes propios y en consecuencia son de su
exclusiva propiedad:
1.- Por permuta con otros bienes propios del cónyuge (ordinal 1º del
artículo 152 del C. C.
2.- Por derecho de retracto ejercido sobre los bienes propios por el
respectivo cónyuge y con dinero de su patrimonio (ordinal 2º artículo 152
C. C.
3.-Por dación en pago hecha al respectivo cónyuge por obligaciones
provenientes de bienes propios (ordinal 3º artículo 152 C. C.)
4.-Los que adquiera durante el matrimonio a título oneroso cuando la
causa de adquisición ha precedido al casamiento (ordinal 4º artículo 152
C. C.)
5.- Por compra hecha con dinero proveniente de la enajenación de otros
bienes propios del cónyuge adquirente (ordinal 6º artículo 152 C. C.)

23
6.-Por compra hecha con dinero propio del cónyuge adquirente, siempre
que haga constar la procedencia del dinero y que la adquisición la hace
para sí (Ordinal 7º artículo 152 del C. C.).
En cuanto a los ordinales 1º,2º y 3º del Código Civil se aplica el principio
de subrogación real, porque se trata de bienes obtenidos por uno de los
cónyuge, durante el matrimonio a título oneroso y que se hacen propios
del cónyuge adquirente porque sustituyen otros bienes de exclusiva
propiedad de dicho cónyuge. Si uno de los cónyuges entrega un bien
propio para recibir otro (permuta) éste viene a sustituir el bien permutado
y por eso adquiere su misma condición.
Lo establecido por el ordinal 4º del artículo 152 del C. C. se aclara con lo
establecido por el mismo Código Civil en el artículo 157:
“Cuando pertenezca a uno de los cónyuges una cantidad pagadera en
cierto número de años, no corresponde a la comunidad las cantidades
cobradas en plazos vencidos durante el matrimonio, sino se estimarán
como parte de los bienes propios, deducidos los gastos de cobranza.-
En relación con lo previsto por los ordinales 6º y 7º del artículo 152
Código Civil, acerca de que son bienes propios de cada uno del
respectivo cónyuge los bienes adquiridos durante el matrimonio mediante
compre hecha con dinero proveniente de la enajenación de bienes
propios del cónyuge adquirente y también son bienes propios del
cónyuge adquirente, siempre que haga constar en el documento de
compra venta, que el bien lo adquirió para sí y con dinero de su propio
peculio, hay una repetición pues el caso del ordinal 6º está comprendido
en el otro ordinal 7º.

6.-Bienes o derechos personalísimos adquiridos a título oneroso durante


el matrimonio.
He señalado anteriormente que son bienes propios de cada uno de los
cónyuges, ls que tienen al momento de la celebración del matrimonio,
también son bienes propios de cada cónyuge los que obtenga durante el
matrimonio a título gratuito o a título oneroso por subrogación de otros
bienes de su exclusiva propiedad y son también bienes propios del

24
respectivo cónyuge los derechos personalísimos, aun y cuando los haya
adquirido durante el matrimonio y con caudal común:
1.-Indemnización por accidente: En conformidad con lo establecido por el
ordinal 5º del artículo 152 del C. C. se hacen propios del respectivo
cónyuge los bienes adquiridos durante el matrimonio por indemnización
por accidente. En este caso la ley se refiere a los accidentes sufrido por
un trabajador con motivo de los infortunios del trabajo bien se trate de
accidentes sufridos por el trabajador con ocasión del trabajo que realiza o
de enfermedades ocupacionales causadas por la labor que realiza el
trabajador en una empresa que no cumple con las obligaciones de
higiene y seguridad laboral, motivo por el cual el patrono le tiene que
indemnizar al trabajador los daños sufridos, el resarcimiento de tales
daños, las cantidades de dinero recibidas por el cónyuge afectado, le
corresponden a él como bien propio.
2.-Indemnizaciones recibidas por hecho ilícito, artículo 167 del C. C.: Si
uno de los cónyuges es perjudicado en sus bienes y su persona y es
indemnizado por la reparación de los daños que le causaron, que reciba
el cónyuge afectado por ella, le corresponde exclusivamente a él.
3.-Indemnización por seguros de vida, de daños personales o
enfermedades, conforme con el ordinal 5º del artículo 152 del C.C.
Se hacen propios del respectivo cónyuge los bienes adquiridos durante el
matrimonio como indemnización de seguros de vida, de daños
personales o por enfermedades. Como se trata de indemnizaciones
provenientes de contratos de seguros, son bienes adquiridos a título
oneroso y se consideran que son bienes propios porque son riesgos que
afectan solamente al cónyuge titular de la póliza y en consecuencia de la
indemnización en ella prevista. Si la póliza de seguro contratada fue
pagada con dinero común el otro cónyuge tiene derecho a que a que se
reintegre a la comunidad la totalidad del dinero pagado,
4.-Derechos de autor.- El derecho de autor que uno de los cónyuges tenga
sobre las obras de su ingenio o sobre obras de un tercero es un derecho
personalísimo así lo establece el artículo 34 de la Ley Sobre el derecho de
Autor, y le pertenece en exclusiva propiedad al cónyuge propietario de la
autoría.

25
4.- CARGAS COMUNES.-
Concepto: Se entiende por cargas comunes, todas aquellas obligaciones
o deudas contraídas por ambos cónyuges o por uno sólo de ellos, que
por su condición, no deben ser imputadas a la responsabilidad de cada
uno de los cónyuges, sino que deben ser imputadas de por mitad a
ambos cónyuges.
Al respecto el artículo 165 del Código Civil, establece:
Son cargas de la comunidad:
1.- Todas las deudas y obligaciones contraídas por cualquiera de los
cónyuges en los casos en que pueda obligar a la comunidad (Ordinal 1º
del artículo 165 del C. C.)
En qué casos los cónyuges puede obligar a la comunidad?
El artículo 168 del Código Civil dispone: “ que cada uno de los cónyuges
podrá administrar por sí solo los bienes de la comunidad que hubiere
adquirido con su trabajo personal o por cualquier otro título legítimo” y
además el artículo 169 del C. C. establece que: “Los bienes provenientes
de las donaciones hechas a los cónyuges por motivo del matrimonio son
administrados por el cónyuge a cuyo nombre se hizo la donación; si la
donación se ha hecho a nombre de ambos, la administración corresponde
al marido y a la mujer en los términos previstos en el artículo 168 del C. C.

El marido y la mujer, durante el matrimonio pueden contraer deudas y


obligaciones, pero obligan a la comunidad cuando actúan como
administradores por expresa disposición de la ley, de los bienes comunes
cuya gestión le corresponde.
2.-Los réditos caídos y los intereses vencidos durante el matrimonio, a
que estuvieren afectos, así los bienes propios de los cónyuges como los
bienes comunes (ordinal 2º del artículo 165 del Código Civil).
Estas cargas es una consecuencia del ordinar 3º del artículo 156 del C. C.
que establece que son bienes comunes los frutos, rentas o intereses
devengados durante el matrimonio, procedentes de los bienes comunes
o de los peculiares de cada uno de los cónyuges.

26
3.- Las reparaciones menores o de conservación, ejecutadas durante el
matrimonio en los bienes propios de cada uno de los cónyuges (ordinal 3º
del artículo 165 del C. C.)
En conformidad con el ordinal 3º del artículo 156 del Código Civil, ya
antes transcrito, los frutos rentas en intereses devengados durante el
matrimonio, que produzcan tanto los bienes propios como los bienes
comunes, son comunes, en consecuencia resulta justo que los gastos
que deban hacerse durante la vigencia del matrimonio por concepto del
mantenimiento y conservación de los bienes propiedad exclusiva de cada
uno de los cónyuges se consideren cargas comunes y en consecuencia
soportadas por los cónyuges de por mitad.
4,. Todos los gastos que acarree la administración de la comunidad
(Ordinal 4º del artículo 165 del Código Civil)
Los gastos ocasionados con la administración de los bienes comunes,
como reparaciones de dichos bienes, sean estas mayores o menores,
mejoras, gastos de cobranzas, pagos de impuestos estadales o
municipales, son cargas de la comunidad.
5.- El mantenimiento de la familia y la educación de los hijos comunes y
también de los de uno sólo de los cónyuges en los casos en que tienen
derecho a alimentos (Ordinal 5º del artículo 165 de C. C.)
Esta carga incluye todos los gastos que se hagan durante el matrimonio,
orientados al sostenimiento de la familia, que se convierte en un deber,
más que legal es moral, en consecuencia son cargas comunes y deben
ser soportadas por los cónyuges de por mitad.
6.-Los alimentos que cualquiera de los cónyuges esté obligado por la ley
a dar a sus ascendientes, siempre que no puedan hacerlo con el producto
de sus bienes propios (ordinal 6º del artículo 165 del C. C)
Cuando uno de los cónyuges debe cumplir en conformidad con la ley
como deudor de alimentos frente a sus ascendientes con la obligación de
suministrarles alimentos y no tenga capacidad económica para ello con el
producto de lo obtenido por sus bienes propios, ya sea por que carezca
de bienes propios o porque el producto obtenido de ellos resulta
insuficiente para cumplir con la obligación alimentaria, ésta obligación de
suministrar alimentos a los ascendientes se considera carga de la

27
comunidad, es decir que debe ser soportada por los cónyuges de por
mitad.

5.- ADMINISTRACION Y DISPOSICION DE LOS BIENES.-


Ya antes se señaló que en los sistemas de comunidad limitada de
ganancias, vamos a encontrar bienes comunes propiedad de ambos
cónyuges y bienes propios de cada uno de ellos. Por ello vamos a
distinguir lo relativo a la administración y disposición de los bienes que
pertenecen en propiedad exclusiva de cada cónyuge y luego la
administración y disposición de los bienes comunes.-
A) ADMINSTRACION DE LOS BIENES PROPIOS:
Artículo 154 del Código Civil:
Cada cónyuge tiene la libre administración y disposición de los bienes
propios; pero no podrá disponer de ellos a título gratuito ni renunciar a
herencias o legados, sin el consentimiento del otro
Y el artículo 155 del Código Civil:
Los actos de administración que uno de los cónyuges ejecute por el otro,
con la tolerancia de éste son válidos.
De los artículo antes transcritos, se desprende que cada uno de los
cónyuges puede disponer libremente de los bienes propios a título
oneroso, pero para disponer de los bienes propios a título gratuito
requiere el consentimiento del otro cónyuge. Ello viene determinado, es
una consecuencia de lo dispuesto en el ordinal 3º del artículo 156 del C.
C. que preceptúa que son bienes comunes, los frutos, rentas e intereses
producidos durante el matrimonio, por los bienes propios de cada uno de
los cónyuges y al disponer gratuitamente de un bien de su exclusiva
propiedad va en detrimento del patrimonio del otro cónyuge, por cuanto
en los actos gratuitos como las donaciones no hay contraprestación
alguna.
Por similar razón a la anterior, ninguno de los cónyuges pueden,
renunciar a herencias o legados, por ello el cónyuge que pretende
renunciar a una herencia o legado requiere del consentimiento del otro.
Es de resaltar, que si bien es cierto que un cónyuge no puede disponer de
sus bienes propios a título, sin el consentimiento del otro, si puede

28
venderlos y por otra parte un cónyuge puede disponer por acto entre
vivos aún a título gratuito un bien de su exclusiva propiedad sin requerir
el consentimiento del otro, que es el caso de los derechos de autor que
uno de los cónyuges sobre una obra de su ingenio o sobre la obra de
ingenio, de un tercero.
B) ADMINISTRACION DE LOS BIENES COMUNES:
El artículo 168 del Código Civil establece: Cada uno de los cónyuges
podrá administrar por sí sólo los bienes de la comunidad que hubiere
adquirido por su trabajo personal o por cual cualquier otro título legítimo;
la legitimación en juicio para los actos relativos a la misma corresponden
a el que los haya realizado. Se requerirá del consentimiento de ambos
para enajenar a título gratuito u oneroso o para gravar los bienes
gananciales, cuando se trata de inmuebles, derechos o bienes muebles
sometidos a régimen de publicidad, acciones, obligaciones y cuotas de
compañías, fondos de comercio, así como aportes de dichos bienes a
sociedades. En estos casos la legitimación en juicio para las respectivas
acciones corresponderá a los dos en forma conjunta. (Subrayado mío)

El juez podrá autorizar a uno de los cónyuges para que realice por sí solo,
sobre los bienes de la comunidad, alguno de los actos para cuya validez
se requiere el consentimiento del otro cuanto éste se encuentre
imposibilitado para manifestar su voluntad y los intereses del matrimonio
y de la familia así lo impongan. Igualmente el Juez podrá acordar que el
acto lo realice uno de los cónyuges cuando la negativa del otro fuere
injustificada y los mismos intereses matrimoniales y familiares así lo
exijan. En estos casos el Juez decidirá con conocimiento de causa y
previa audiencia del otro cónyuge, si éste no estuviere imposibilitado,
tomando en consideración la inversión que haya de darse a los fondos
provenientes de dichos bienes.

En el derecho comparado encontramos varios sistemas de administración


de los bienes comunes en la comunidad de gananciales:

29
1.- El sistema de unidad de administración o gestión individual. En este
sistema se atribuye la administración de los bienes comunes, a un
cónyuge determinado. Este sistema puede ser:
a) Centralizado: cuando uno sólo de los cónyuges administra la totalidad
de los bienes comunes
b) Descentralizado, cuando cada uno de los cónyuges administra cierta
categoría de bienes comunes, pero ningún cónyuge administra la
totalidad de los bienes comunes.
2.- Sistema de administración DIÁRQUICA: este sistema de
administración se caracteriza se caracteriza porque le atribuye a ambos
cónyuges la administración de los bienes comunes. Se divide en dos
modalidades, según que la administración haya de ejercerse en forma
conjunta o separada por cualquiera de los cónyuges:
a) Sistema de Administración conjunta: exige el consentimiento
voluntario de ambos cónyuges para que el acto de administración
realizado sobre los bienes comunes se considere regular.
b) Sistema de Administración concurrente: Cada uno de los cónyuges
puede administrar todos los bienes comunes.

El Código Civil Venezolano, respecto de la administración ordinaria de los


bienes comunes, el sistema de unidad de administración o de gestión
individual descentralizado.
El artículo 168 del C. C., antes transcrito, establece que “cada uno de los
cónyuges podrá administrar por sí sólo los bienes de la comunidad que
hubiere adquirido por su trabajo personal o por cual cualquier otro título
legítimo; la legitimación en juicio para los actos relativos a la misma
corresponden a el que los haya realizado.
Y el artículo 169 ejusdem establece que: “Los bienes provenientes de las
donaciones hechas por los cónyuges por motivo del matrimonio son
administrados por el cónyuge a cuyo nombre se hizo la donación; si la
donación se ha hecho a nombre de ambos, la administración corresponde
al marido y a la mujer en los términos previstos en el artículo 168”
De acuerdo a los artículos 168 y 169 del Código Civil, ambos ya antes
transcrito, cada uno de los cónyuges administra por sí sólo, cierta

30
categoría de bienes: El marido y la mujer, administran por sí solo los
bienes comunes adquiridos por su trabajo personal o por cualquier otro
título legítimo y los bienes donados a los cónyuges en razón del
matrimonio, cuando la donación cuando la donación se hizo a su nombre.
Cada uno de los cónyuges, cuando realizan actos de administración
sobre los bienes comunes cuya gestión le atribuye la ley y contrae
obligaciones, compromete todos los bienes comunes y subsidiariamente
los bienes propios:
Artículo 180 del Código Civil: “De las obligaciones de la comunidad se
responderá con los bienes de la misma y si estos no fueren suficientes,
el cónyuge que haya contraído la obligación responderá subsidiariamente
con sus bienes propios a menos que el otro cónyuge haya consentido el
acto, caso en el cual ambos responderán de por mitad con sus bienes
propios.
De las obligaciones contraídas por los cónyuges en la administración
de los bienes propios responden con éstos y subsidiariamente con los
bienes que le corresponden en la comunidad.
Es de destacar que la mujer comerciante que está casada, sólo obliga con
sus actos de comercio los bienes comunes que ella administra, pero si
tiene el consentimiento del marido para realizar los actos de comercio,
obliga la totalidad de los bienes comunes conforme a los establecido por
el artículo 16 del Código de comercio.

La administración ordinaria de los bienes comunes puede ser conferida a


un solo cónyuge excepcionalmente en los siguientes casos, conforme
con el artículo 172 del código Civil:
1º) Si uno de los cónyuges esta sometido a tutela o curatela, dejará de
ejercer la administración de los bienes comunes cuya administración le
corresponde de acuerdo con el artículo 168 y el otro cónyuge
administrará por sí sólo.
2º) Cuando ambos cónyuges están sometidos a curatela, según lo
dispuesto en el primer aparte del artículo 172 del C. C., los esposos
administrarán los bienes comunes en la forma prevista en los artículo 168

31
y 169 del C. C., pero acorde con el régimen de curatela, al cual están
sometidos ambos cónyuges.
Hay que recordar que en conformidad con la legislación venezolana,
conforme con lo previsto por el artículo 383 del C. C. La emancipación
confiere al menor la capacidad de realizar por sí solo actos de simple
administración. Para cualquier acto que exceda de la simple
administración requerirá autorización del Juez competente.
c) Cuando un cónyuge está sometido a tutela y el otro a curatela, el
cónyuge que está sometido a curatela administra todos los bienes
comunes, conforme con el artículo 172 del C. C.
d) Si ambos cónyuges están sometidos a tutela. El Juez designará un
curador especial, quien administrará los bienes comunes (Artículo 172 del
C. C.)
Administración irregular de los bienes comunes.
El artículo 171 del Código Civil establece: “En el caso de que de que
alguno de los cónyuges se exceda de los límites de una administración
regular o arriesgue con imprudencia los bienes comunes que está
administrando, el Juez podrá a solicitud del otro cónyuge, dictar las
providencias que estime conducentes a evitar aquel peligro, previo
conocimiento de causa. De lo decidido se oirá apelación en un solo
efecto, si se acordaren las medidas y libremente en caso contrario
De conformidad con la norma transcrita, cuando un cónyuge advierte que
los bienes comunes corren peligro de pérdida o disminución de los
bienes comunes a causa de una administración imprudente, o irregular,
puede ocurrir al Juez cometerte que tenga jurisdicción en el lugar del
domicilio conyugal y solicitarle que dicte las medidas cautelares
conducentes para evitar el peligro

6.-DISOLUCION DE LA COMUNIDAD DE GANANCIALES


a) Concepto.- La disolución de la comunidad limitada de ganancias es la
extinción del régimen matrimonial patrimonial; previsto en la ley como
régimen supletorio de aplicación forzosa en ausencia de la celebración de
un pacto de capitulaciones matrimonial, por alguna las causas
establecidas taxativamente en el artículo 173 del Código Civil.

32
b) Causas:
El Código Civil establece en su artículo 173, las causas de disolución de
la comunidad limitada de gananciales:
1.- Disolución del Matrimonio: Una vez disuelto el vínculo matrimonial con
ocasión de la muerte de uno de los cónyuges, o mediante sentencia
definitiva y firme dictada en juicio de divorcio, la comunidad limitada de
gananciales se disuelve, como régimen patrimonial se disuelve porque
como ya hemos dicho ésta sigue la suerte del matrimonio por ser
accesoria a éste aún y cuando la sentencia no lo declare expresamente
en su contenido.
2.- Nulidad del matrimonio.- La nulidad del matrimonio declarada
mediante sentencia definitiva y firme, trae como consecuencia la
disolución de la comunidad limitada de gananciales, sea absoluta o
relativa trae como consecuencia hacer desaparecer de la vida jurídica
como si jamás se hubiese celebrado, excepción de que en la sentencia se
le de valor de putativo, cuyos efectos ya antes han sido señalados,
atendiendo a la actuación de buena o mala fe de los cónyuges.
3.-La quiebra de uno de los cónyuges.-
Una vez iniciado el Juicio de Declaración de Quiebra de una persona, en
este caso la quiebra de uno de los cónyuges, ello determina que el
patrimonio del cónyuge fallido, que incluye los derechos sobre los bienes
comunes, sean administrados por la Junta de Acreedores, designada en
el Juicio, quienes aprenden el patrimonio y se comportan como si fueran
propietarios del mismo. Una vez dictada la sentencia definitiva y firme que
declara la quiebra, automáticamente se disuelve la comunidad limitada de
bienes gananciales.
4.-Separación judicial de bienes.-
En nuestra legislación la separación de bienes entre los cónyuges puede
derivar de:
a) Una sentencia definitiva y firme dictada por un tribunal competente,
que declara la separación de bienes, dictada en juicio donde uno de los
cónyuges interpone solicitud la separación de bienes mediante demanda
ante la administración irregular de los bienes comunes por parte del otro
cónyuge, en conformidad con lo establecido por el artículo 171 del C. C.,

33
b) De una sentencia definitiva y firme dictada por el tribunal competente
en Juicio contencioso con motivo de la demanda de separación de bienes
en juicio contencioso con fundamento en alguna de las causales de
divorcio previstas en el artículo 185 del C.C.
c) Mediante sentencia que decreta la separación de cuerpos y de bienes
solicitada por los cónyuges voluntariamente en conformidad con lo
establecido por el artículo 185 del C. C. en su primer y segundo aparte en
concordancia con el artículo 190 del C.C., Este último caso, representa la
única forma de disolver voluntariamente la comunidad limitada de
gananciales. Ello trae como consecuencia la disolución de la comunidad
limitada de bienes gananciales.
5.- La Ausencia de declarada de uno de los cónyuges.- Para que se
disuelva la comunidad limitada de ganancias en este caso se requiere que
un tribunal competente declare mediante sentencia definitiva y firme, con
motivo de la demanda de una demanda interpuesta, la declaración de
ausencia.
El efecto fundamental de la disolución de la disolución de la comunidad
conyugal limitada de bienes gananciales es que esta se extingue y se
forma respecto a los bienes una comunidad ordinaria que se rige por los
artículo 759 al 770 del Código Civil.

6.- LIQUIDACION DE LA EXTINGUIDA COMUNIDAD LIMITADA DE


GANANCIALES.-
A todo acto de liquidación le precede un acto de disolución.
La liquidación es el conjunto de operaciones que se realizan, bien en
forma contenciosa o voluntaria,, para separar los bienes comunes de los
privativos de cada cónyuge a los fines de su distribución entre los
cónyuges.
Etapas de la Liquidación.
1.- Levantamiento del inventario:
a) Determinación y avaluó de los bienes que forman el activo común.
Comprende la determinación e identificación de los bienes comunes,
muebles e inmuebles, créditos contra terceros, los frutos de los bienes
propios de los cónyuges que se hayan devengado durante el matrimoni y

34
que existan para el momento de la partición al igual que los frutos de los
bienes comunes. Luego se procede al avalúo de dichos bienes
estableciendo el justiprecio para el momento de la liquidación
b) Determinación del pasivo común. Hay que determinar cuales son las
obligaciones y deudas comunes que no hayan sido satisfechas para el
momento de la liquidación y determinar las compensaciones que se
deban los ex cónyuges.
c) Determinación del haber líquido: Consiste en deducir el pasivo común
al activo común, para obtener el activo líquido partible.
2.- Formación de los lotes. Una vez obtenido el haber partible de bienes
comunes se procede a formar los lotes que contiene los bienes que han
de ser adjudicados en propiedad exclusiva cada cónyuge, tomando en
consideración que a cada ex cónyuge le corresponden los gananciales de
por mitad.
3,. Adjudicación de lotes: Es la adjudicación en exclusiva propiedad a
cada uno de los ex cónyuges de los bienes que integran los lotes.
4.- Efectos de la liquidación:
a) Cesación del estado de indivisión de los bienes comunes: Cada
cónyuge se hace propietario exclusivo de los bienes que integran su lote.
b) Efectos declarativos de la partición: Cada ex cónyuge se hace
propietario exclusivo de los bienes que integran su lote de partición
desde la fecha de la disolución de la comunidad y que desde allí no tuvo
derecho alguno sobre los bienes que integran el lote del otro.
c) Garantía del Lote: Los ex cónyuges se deben saneamiento por las
evicciones y perturbaciones procedentes de causa anterior a la partición
a menos que la evicción sea por culpa del ex cónyuge que la sufre.

TEMA 9 CLASE 12 DE JUNIO DE 2020

SEMANA 6 UNIDAD 2 DERECHO DE FAMILIA

35

También podría gustarte