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Capítulo III: Modelos terapéuticos que toma el coaching

El coaching, trabaja directamente con la personalidad del cliente. “La

personalidad es la organización dinámica, dentro del individuo, de los sistemas

psicofísicos que crean patrones característicos de conducta, pensamiento y

sentimientos.” (Carver, 1997).

Cada persona es diferente de las demás, posee un conjunto de procesos

internos, tiene mecanismos que la llevan a actuar de tal o cual manera. La

conducta de las personas es producto también de sus motivaciones.

Según Carver (1997), la Terapia enfocada a la solución o terapia breve, la

cual se centra en el problema, para desarrollar metas, considerando que las

respuestas residen en el individuo, quien es el poseedor de la capacidad de

cambiar para adaptarse.

De acuerdo a Moscoso (2005) los modelos terapéuticos más utilizados en el

coaching son los siguientes:

• Teoría Psicoanalítica

• Análisis transaccional de la conducta

• Programación Neurolingüística

• Terapia Racional emotiva


“Cada uno de estos modelos le da al coach las herramientas necesarias para

trabajar con los problemas del coacheado.” (Moscoso, 2005).

3.1.- Teoría Psicoanalítica

Creada por Freud (1856-1939), utilizando la interpretación, explora las

motivaciones inconscientes, buscando las causas profundas de problemas

actuales, que por lo general se encuentran en etapas pasadas del individuo.

“La personalidad es un conjunto de procesos que están en movimiento

permanente.” (Caver, 1997). Sin embargo existen ocasiones en que estos

procesos trabajan en armonía y otras en que no lo hacen.

Sigmund Freud (1856-1939) consideraba que detrás de los procesos

mentales existen procesos biológicos. Su idea de los instintos de vida y muerte

recuerda los procesos duales del funcionamiento metabólico, de construcción y

destrucción.

La conducta se determina en parte por las fuerzas internas que escapan a

nuestro control y nuestra consciencia.

Michael Scheier y Charles Carver (1997) consideran que la humanidad ha

sufrido tres grandes golpes en su desarrollo:


1. El descubrimiento de Copérnico, quien nos hizo saber que la tierra no era

el centro del universo.

2. Charles Darwin con su afirmación de que el hombre ha evolucionado del

mismo tronco que otros animales.

3. Sigmund Freud, con su afirmación de que la gente está a merced de las

fuerzas del inconsciente, y que escapan de su control. Sacudió al mundo

al proponer que la fuente principal de la motivación humana, incluso la de

la infancia se encuentran en las urgencias sexuales y agresivas.


Aparato Intrapsíquico (Modelo topográfico de la mente según Freud)

Desde su nacimiento en el ser humano prevalece el ello, (instancia

inconsciente) siempre en busca del placer, de la satisfacción inmediata, son

aquellos impulsos primarios, como el comer el dormir, respirar etc.

El Ello (id) es un componente original de la personalidad, el único que está

presente al momento del nacimiento, contiene los aspectos heredados, los

instintos primitivos de la personalidad.


“Opera por completo en el inconsciente y está muy vinculado a los procesos

instintivos biológicos de los que obtiene su energía. Freud lo considera la máquina

de la personalidad.” (Carver, 1997)

El Ello se rige por el principio del placer, esto quiere decir que la idea, es

que todas las necesidades deben de ser satisfechas de inmediato. Aquellas

necesidades que no encuentran la satisfacción inmediata, generan un estado de

tensión, el principio de placer no impone restricciones, a la manera en que las

necesidades deben de ser satisfechas.

La persona que está completamente regida por el principio del placer, se

verá envuelto en problemas. En este principio del placer cuando se genera alguna

tensión el Ello (id), va a tratar de descargarla, a esto se le conoce como proceso

primario.

El proceso primario es el principal mecanismo, que el Ello utiliza para

descargar las tensiones, Consiste en formar una imagen mental de un objeto o

situación, que satisfaga la necesidad y entregarse a ella.

El yo (instancia consciente) se va formando conforme el ser humano crece,

y tiene un sentido de la realidad y se da cuenta de que no todo lo que desea

puede ser satisfecho de inmediato y aprende a postergar el deseo de placer.


Freud consideraba que el Yo evoluciona a partir del Ello, el Yo tratar de que

los impulsos del Ello sean expresados de una manera efectiva, tomando en

cuenta, las exigencias del mundo exterior.

Gracias a las transacciones con el mundo exterior, el Yo opera

primordialmente, a nivel consciente y preconsciente, aunque también funciona en

el inconsciente debido a sus vínculos con el Ello. El Yo se rige por el principio de

la realidad, que es el que introduce en la conducta un sentido de racionalidad.

Como el Yo opera en el principio de la realidad, su finalidad consiste en

demorar la descarga de la energía del Ello, hasta que se encuentre un objeto, o

alguna actividad apropiada para la tensión, esto se logra gracias al proceso

secundario.

El proceso secundario “es la equiparación entre la imagen de un objeto que

reduce la tensión (creada por el proceso primario del ello) y la percepción real de

tal objeto en el mundo” (Carver 1997). Es importante tomar en cuenta que el Yo no

pretende estar bloqueando permanentemente los deseos del Ello, por el contrario,

lo que quiere es que sus urgencias sean satisfechas, pero en el momento más

adecuado y de una manera realista.

El Yo parte del principio de la realidad, como ya se mencionó, utilizando el

proceso secundario, se considera el asiento de los procesos intelectuales y da

solución a los problemas, controla y demora la satisfacción.


El superyó (instancia inconsciente) se rige por el principio del deber, se

encarga de interiorizar las normas, las reglas, las leyes, los códigos impuestos por

la familia y luego por la sociedad.

El Superego es la última instancia en desarrollarse, incorpora los valores

paternos y sociales, el va a decidir, qué es lo correcto y lo que está mal, trata de

conseguir la perfección, más que el placer.

Aunque otras figuras de autoridad pueden influir en el desarrollo del

Superyó, como maestros, tíos, abuelos, primos etc., Freud consideraba que esta

estructura proviene principalmente de los padres, a esta acción de incorporar los

valores y normas de los padres Freud la llamó introyección.

Freud dividió el Superyo en dos subsistemas:

1 Ideal del Yo, son las reglas de buena conducta y normas de excelencia.

2 La conciencia son las reglas que indican cuáles son las malas conductas, y

contiene las prohibiciones contra las acciones que los padres desaprueban

o castigan.

De acuerdo a Sigmund Freud el Superyó realiza las siguientes tres funciones:

1. Trata de inhibir por completo cualquier impulso que venga del Ello, el

cual pueda ser reprobado por los padres o la sociedad.


2. Trata de obligar al Yo, para que se comporte no según las

consideraciones racionales sino las morales.

3. Trata de guiar a la persona hacia la perfección absoluta, tanto de

pensamiento, palabra y obra.

Freud consideraba que ninguno de los tres componentes de la

personalidad, fuera uno mejor que el otro, pensaba que debería de existir un

equilibrio entre los tres componentes, lo cual daría como resultado una

personalidad equilibrada.

La interacción de estas tres instancias son las que darán forma a la

personalidad, otra de las grandes aportaciones de la teoría psicoanalítica es la

catexia “cantidad de energía psíquica orientada o unida a la representación mental

de una persona o cosa”. (Grados, 2004).

De acuerdo a Sigmund Freud, los seres humanos atravesamos por varias

etapas de desarrollo desde el momento de nuestro nacimiento, las cuales las

podemos cursar sin ningún problema o al contrario, se pueden presentar traumas

asociados con estos estadios de desarrollo, los cuales tendrán un impacto en la

personalidad adulta.

“La teoría plantea que conforme crecen los niños su deseo se enfoca en

diferentes áreas del cuerpo, en los que se busca la satisfacción libidinal. Siguiendo

una secuencia de etapas psicosexuales en las que son importantes diferentes


zonas erógenas, los niños pasan del autoerotismo a la sexualidad reproductora y

desarrollan sus personalidades adultas.” (Wikipedia, 2006)

Si un adulto presenta algún tipo de dificultad en cualquiera de las tareas

asociadas a estas etapas, tenderá a presentar ciertos hábitos infantiles o

primitivos en su edad adulta, a esto Freud lo llama fijación. A continuación se

detallarán las etapas de desarrollo psicosexual que propone la Teoría

Psicoanalítica.

Etapas de Desarrollo Psicosexual

Etapa oral: abarca los primeros seis meses del lactante. La boca es la zona
erógena preeminente y procura al bebé no sólo la satisfacción de alimentarse,
sino sobre todo el placer de chupar. Es decir, de poner en movimiento los labios,
la lengua y el paladar en una alternancia rítmica.
Etapa anal: en esta época la fuente principal de placer y conflicto potencial son
las actividades en las que interviene el ano. Con frecuencia representa el primer
intento del niño por convertir una actividad involuntaria en voluntaria. Los niños
pueden experimentar dolor o placer ya sea al retener o al expulsar sus desechos
fisiológicos. Debemos de separar aquí el placer orgánico de defecar, aliviando
una necesidad corporal, del placer sexual consistente en retener las heces y los
gases para después expulsarlos bruscamente.
Etapa fálica: se extiende de los tres a los cinco años, el órgano sexual masculino
desempeña un papel dominante. En esta fase las caricias masturbatorias y los
tocamientos ritmados de las partes genitales proveen al niño un placer
autoerótico. Freud considera que el clítoris es considerado por la niña como una
forma de falo inferior. Al comienzo de la fase fálica los niños y las niñas creen que
todas las personas poseen falo y la diferencia entre tener o no falo se percibe
como una oposición por castración. Cada uno toma rumbo diferente al entrar en
lo que Freud denomina Edipo o Complejo de Edipo en el cual primero se da una
identificación con la madre en ambos casos. El niño siente deseos sexuales hacia
su madre, y al percibir a las niñas como castradas abandona sus deseos por
temor a que le ocurra lo mismo, creándose en el varón la angustia de castración
que lo lleva a identificarse con su padre. La niña abandona a la madre porque la
cree culpable de su castración y surge la envidia del pene. Sin embargo, se da
cuenta que si es como su madre puede acceder a un falo, a lo cual reacciona
identificándose con ella y aparece el deseo de engendrar un hijo de su padre.
Período de latencia: en este período se desarrollan fuerzas psíquicas que
inhiben el impulso sexual y reducen su dirección. Los impulsos sexuales
inaceptables son canalizados a niveles de actividad más aceptados por la cultura.
Freud le llamaba período de calma sexual. No lo consideraba una etapa, ya que
no surgía nada dramáticamente nuevo.
Etapa genital: surge en la adolescencia cuando maduran los órganos genitales.
Hay un surgimiento de los deseos sexuales y agresivos. El impulso sexual, el cual
antes era autoerótico, se busca satisfacer a partir de una interacción genuina con
los demás. Freud creía que los individuos maduros buscan satisfacer sus
impulsos sexuales sobre todo por la actividad genital reproductora con miembros
del sexo opuesto.
(Wikipedia, 2006)

Partiendo del cuadro anterior, Freud nos propone los siguientes ejemplos

para entender cada una de las etapas. Tomemos el caso de un infante de 18

meses que se encuentra constantemente frustrado en su necesidad de chupar, ya

sea porque la madre es muy ruda o porque quiera destetarle demasiado rápido,

este individuo desarrollará un carácter oral-pasivo. Una personalidad de este tipo

tiende a depender mucho de los demás, por lo general busca gratificaciones


orales, tales como comer, beber, fumar constantemente; esto se puede traducir en

que está buscando los placeres perdidos en la infancia.

Entre los 5 y 8 meses de edad la etapa de la dentición comienza, una

acción que satisface mucho al infante durante este periodo es morder, incluso el

pezón de la madre. Si esta acción causa displacer o se corta demasiado rápido,

luego entonces el infante desarrollará una personalidad oral agresiva. Estas

personas en su vida adulta presentarán un deseo constante de morder cosas,

como lápices, chicles, dulces, así como a personas; verbalmente tienden a ser

agresivos, sarcásticos, irónicos, hirientes, etc.

Por otra parte en el estadio anal, el infante comienza a comprender que

puede tener control sobre sus esfínteres, y esto repercute en la manera en que va

a ser tratado por sus padres. Por ejemplo algunos padres se someten a merced

del niño en el entrenamiento del control de esfínteres, llegando a suplicarle que

haga sus evacuaciones en el W.C., y se alegran considerablemente cuando el

niño lo hace bien y se entristecen cuando lo hace incorrectamente. En este caso el

niño es el rey de la casa y maneja la situación, por lo tanto este tipo de infante con

este tipo de padres desarrollará una personalidad anal expulsiva (anal agresiva).

Las personas anal-expulsivas, en su edad adulta tienden a ser muy sensibles,

desorganizadas, generosas ante las faltas, permisivos, pero al mismo tiempo

suelen ser crueles, destructivos o dados al vandalismo.


En otro escenario de la etapa anal, tenemos otro tipo de padres, aquellos

que creen que si su niño tiene un control temprano de sus esfínteres es símbolo

de evolución e inteligencia. Y para lograrlo pueden usar la humillación o el castigo,

ante lo cual el niño puede sufrir de estreñimiento, ya que siempre estará tratando

de controlar sus esfínteres. La personalidad que esta persona desarrollará es

conocida como anal-retentiva, en la edad adulta estas personas son muy pulcras,

perfeccionistas, exigentes, dictatoriales y acaparan información, entre otras.

En la etapa fálica Freud describe dos tipos de personalidades, a los cuales

no les da nombre, limitándose solamente a mencionarlos. Si un niño es rechazado

en demasía por su madre y si a esto aunamos un padre amenazante y

excesivamente varonil, el niño tenderá a desarrollar una personalidad de baja

autoestima, de pobre valía en cuanto a su sexualidad. La consecuencia de esto

puede ser que el adulto decline cualquier actividad heterosexual (volcándose a la

actividad intelectual) o bien exacerbando su conducta sexual con múltiples

conquistas, sin llegar a tener una relación estable.

La otra variante de la etapa fálica es cuando el niño no es rechazado por su

madre y es sobreprotegido por ella, teniendo un padre pasivo. Esta persona

tenderá a desarrollar una opinión bastante grande de sí misma, teniendo una gran

autovalía, este adulto puede presentar conductas afeminadas. Y en el caso de las

niñas serían conductas masculinizadas, debido a su identificación con el padre.

Estos adultos buscan ser protegidos, constantemente quieren alabanzas,

escuchar que son los mejores y que los demás se alegren por sus logros.
Modelo Estructural de la Persona, según Freud.

1.- Consciente

2.- Preconsciente

3.- Inconsciente

1. Área de experiencia consciente: Pensamientos, sentimientos y conductas

que el individuo conoce.

2. Preconsciente: En este nivel los elementos están fuera de la consciencia,

pero pueden ser recuperados con facilidad.

3. Inconsciente: No es directamente accesible, en ella se almacenan los

sentimientos, conflictos o dolores. Y ejercen una influencia continua sobre

las acciones posteriores y la experiencia consciente.

Freud consideraba que en el inconsciente, tenían lugar las operaciones de la

personalidad que son verdaderamente importantes. Posteriormente Freud nos

presenta el modelo estructural, que complementa al modelo topográfico.


Modelo estructural de la mente; nos dice que tiene tres componentes, que al

interactuar nos dan la complejidad del comportamiento humano, éstos

componentes no son físico, son solo etiquetas para nombrarlos, y son: Ello (id), Yo

(ego) y Superyó (superego).

La relación del modelo Psicoanalítico con el coaching, es que este permite al

coach prestar atención a aquellas conductas que parecen ser inconscientes y

distinguir aquellas que dependen del pensamiento reflexivo. Las experiencias que

vamos acumulando a lo largo de la vida, contribuyen a formar la personalidad o

carácter como adulto. Freud consideraba que las experiencias traumáticas en la

infancia, tenían un efecto especialmente fuerte en el desarrollo de la personalidad

del adulto.

Durante el proceso del coaching, el conocer el modelo Psicoanalítico le permite

al coach detectar la personalidad de su coachee, para de esta forma llevarlo a

plano consciente y poder ayudarlo a mejorar conociéndose a sí mismo.

3.2.- Análisis Transaccional de la conducta.

Análisis Transaccional (unidad elemental de relación social, de estímulo-

respuesta) desarrollado por Eric Berne (1910-1970), ésta teoría ayuda al individuo

a identificar los estados de su ego (padre, adulto y niño) de tal forma que puede

evaluar cómo operan para lograr una mejor adaptación.


De acuerdo a Grados (2004), el análisis transaccional es una teoría Psicológica

Humanista, que nace en las décadas de los años 50 y 60 del siglo XX, la cual

estuvo conformada por psicólogos, psiquiatras y otros profesionales que

compartían una concepción sobre el ser humano.

Uno de los teóricos mas importantes de éste movimiento fue Abraham Maslow

(1908- 1970), junto con Carl Rogers (1902- 1987) y el propio Eric Berne (1910-

1970). Este enfoque humanista se extendió del campo clínico al educativo y al

organizacional.

Estos autores compartían una visión naturalista y positiva del ser humano. Las

raíces de ésta teoría humanista se pueden rastrear en los pensamientos europeos

como el Existencialismo, la fenomenología y el psicoanálisis.

De acuerdo a Grados (2004), el análisis transaccional se basa principalmente

en la teoría psicoanalítica y en el conductismo. Es considerada como análisis ya

que separa la conducta en unidades fáciles y simples de ser analizadas,

transaccional se refiere a los intercambios de estímulos y respuestas que se dan

durante una transacción entre las personas.

La aplicación de ésta teoría en el área organizacional casi fue inmediata, ya

que al mismo tiempo de postularla, es el mismo Eric Berne quien la aplica en

organizaciones hospitalarias.
Según Grados (2004), la finalidad del Análisis Transaccional en la organización

la podríamos definir como el cambio de comportamiento de las personas y grupos,

para construir un sistema de excelencia, y así poder mejorar la eficacia y la

eficiencia de la organización.

Las primeras aplicaciones en la organización fueron una técnica para mejorar

la comunicación y así resolver conflictos personales. El autoconocimiento favorece

el cambio individual y facilita por lo tanto el cambio organizacional.

De acuerdo a Grados (2004), con la aplicación del Análisis Transaccional en la

organización se tienen beneficios tales como:

1 El diseño de organizaciones de excelencia.

2 Logros considerables en el cambio de cultura organizacional.

3 La creación de equipos de trabajo.

4 Se mejora considerablemente la comunicación.

5 Se resuelven conflictos interpersonales e intergrupales.

6 Se reduce el estrés en el trabajo.

7 Mejora la toma de decisiones.

8 Facilita el desarrollo de competencias individuales, tales como, liderazgo y

creatividad.

Eric Berne (1978) nos explica que en toda persona existen tres entidades

distintas a las que llamó estados del yo, los cuales conforman un sistema de
emociones y pensamientos que van acompañados de patrones de conducta afines

al sistema. Los estados yoicos son: padre, adulto y niño.

Padre: éste estado se conforma por los recuerdos acerca de la manera de actuar

frente a la vida, de aquellas personas que nos educan de niños, pueden ser

nuestros padres o cualquiera que desempeñe esa labor.

• El padre está constituido por la interiorización de ideas, formas de pensar,

sentir o actuar de las figuras parentales, que se han tenido durante la infancia,

al quedar interiorizados el estado de padre se convierte en normativo.

El estado del padre nos dice de manera rígida lo que está bien o lo que está

mal, contiene un código de comportamiento.

El estado yoico del padre se divide a su vez en tres estilos que podemos

desarrollar: El padre protector, el padre nutriente y el padre crítico o prejuicioso.

a) Padre protector: es aquella persona que siempre ayuda y protege a los

demás, busca que las demás personas se sientan bien,

sobreprotegiéndolas de cualquier riesgo. El no suele explicar las cosas,

mejor las hace por ti. “La postura corporal de este tipo de padre será

sonriente, amable, tranquilo, siempre en actitud de ayuda. Su tono de voz

es suave y permisivo .Sus frases favoritas son: <no te preocupes ahorita yo

lo hago<,<no te molestes, eso lo hago yo<.” (Grados, 2004).


b) Padre nutriente: a él le gusta enseñar, guiar, indica el camino más no lo

recorre por uno, motiva y corrige.

• El estado Adulto: se encarga de exteriorizar nuestros pensamientos

y emociones. Se comienza a desarrollar hasta los dos años. Observa

lo que le rodea, acumulando experiencias, valora opciones y sus

consecuencias. Es el estado analítico que utiliza nuestra capacidad

de razonamiento lógico.

• El estado del Niño, contiene aquellas emociones valoradas como

auténticas (alegría, miedo, tristeza, amor). Hace lo que le gusta, una

persona que suele actuar en el estado del Niño se le percibe sumisa

o exigente ante una situación.

Estas emociones que expresa el estado yoico del niño contienen los

sentimientos, pensamientos y comportamientos que cada persona tenía cuando

biológicamente era un niño o niña.

Jaime Grados (2004) hace una clasificación del estado del niño de la

siguiente manera.

• Niño libre: es aquel que es espontáneo, curioso, afectuoso, impulsivo, pero

también rebelde, egoísta y no calcula las consecuencias de sus actos. En sus


verbalizaciones se escucha con frecuencia: “ya tengo hambre, vamos a comer”

“que bonito”. Su expresión facial es de una gran sonrisa.

• Niño adaptado: se somete a determinado comportamiento con tal de agradar,

es amable, cortés, generoso sociable y considerado. En ocasiones esta

adaptación lo hace dependiente, limita su iniciativa y su creatividad. En sus

verbalizaciones se escucha:”estoy de acuerdo”, “como tu digas”. Su expresión

facial es de una sonrisa tímida, no habla si no se le solicita.

• Pequeño profesor. Es manipulador, creativo, e intuitivo, como no tiene

experiencia necesaria ni ha vivido lo suficiente, con frecuencia toma decisiones

equivocadas y obtiene conclusiones erróneas. Es inteligente, experimenta

genialidad, crea por el placer de hacerlo, o manipula para conseguir lo que

pretende. Toma el liderazgo con facilidad, sus expresiones suelen ser_”tengo

la corazonada de que si lo hacemos así, vamos a sorprenderlos””tú arriésgate,

al fin y al cabo nada perdemos”.

Cabe mencionar que todos los estados yoicos pueden ser positivos o

negativos.
3.2.1- Análisis Transaccional: Estados distintivos del Yo

Padre crítico Padre Adulto Niño libre Niño


protector adaptado
(sometido o
rebelde
Definición Conductas de Comportamientos Pensamiento Emociones Disciplinado y
firmeza, orden, afectivos, ayuda abstracto, auténticas, respetuoso o
prejuicios y a vivir, crecer y toma de egoísta, rebelde.
autoritarismo. disfrutar. decisiones. grosero.
Palabras Deberías de, Tú puedes, te Correcto, ¡Ah!, quiero, Por favor, lo
es ridículo. quiero, eres ¿por qué?, no quiero. intentaré, no
capaz. sustantivos puedo, debería
en general. hacerlo.
Tono de voz Crítico, tajante, Afectuoso, Uniforme, Fuerte, Lloroso, gime,
burlón. cordial, cálido. modulado. inocente, sometido y
enérgico. desafiante
(rebelde).
Expresión Cejas Sonriente, Serena, Expresiva, Atemorizada,
fruncidas, comprensiva, alerta, espontánea. huidiza o
facial comisuras comisuras hacia concentrada, rabiosa.
hacia abajo. arriba. labios
rectos.
Gestos Dedo Brazos abiertos, La mano
Desinhibidos, Se esconde, se
acusador, que envuelven. sostiene la
piernas retuerce las
brazos barbilla, separadas. manos o cierra
cruzados, dedo alzado. los puños con
manos en las fuerza.
caderas.
Postura Tronco Tronco en forma Natural, Libre, Contraído,
erguido. de arco. inclinado echado, encorvado o
corporal sobre los relajado, en sacando el
objetos. el suelo. pecho.
Actitud Moralista, Comprensiva, Atenta, Curiosa, Avergonzada,
autoritaria, solícita. activa. cambiante, retraída o
general mira desde emocional. exigente,
arriba. desafiante.
(Moscoso, 2005)
3.3.- Programación Neurolingüística

De acuerdo a Moscoso (2005) los orígenes de la Programación

Neurolingüística (PNL) se remontan a la década de los setenta, en la Universidad

de California en Santa Cruz, EEUU. Ahí el matemático y psicólogo Richard

Bandler y el lingüista John Grinder, “…estudiaron los patrones de conducta de los

seres humanos para desarrollar modelos y técnicas que pudieran explicar la magia

y la ilusión del comportamiento y la comunicación humana.”

“La programación neurolingüística es el estudio de cómo el lenguaje, tanto

el verbal como el no verbal, afecta el sistema nervioso, es decir, que a través del

proceso de la comunicación se puede dirigir el cerebro para lograr resultados

óptimos.” (Robbins, 1991)

La Programación Neurolingüística nos describe la dinámica que existe entre

la mente (neuro) y el lenguaje (lingüístico) así mismo muestra como la relación

entre ambas afecta a nuestro cuerpo y nuestro comportamiento.

De acuerdo con la tesis de Moscos (2005): “…al encontrarse en un proceso

de coaching, se observa el idioma del coacheado, el movimiento de sus ojos, la

postura, la respiración y la gesticulación para detectar y luego ayudar a cambiar

patrones inconscientes que se encuentran ligados al estado emocional de la

persona.”
Según Moscoso (2005), la PNL es entonces un modelo que nos permite

abordar de manera práctica, útil y eficaz, la comprensión y modificación de la

conducta humana. Éste modelo es considerado de gran utilidad para el trabajo del

cambio, ya que se obtienen grandes resultados con su aplicación, para conseguir

cambios o mejoras personales y organizacionales.

• Programación Neurolingüística, considerada como una técnica, dedicada al

estudio del funcionamiento del pensamiento, lenguaje y el comportamiento,

contribuye a potenciar las capacidades de aprendizaje , establecimiento de

objetivos, mejora las relaciones, gestiones y las emociones

De acuerdo a Robbins (1991), la programación neurolingüística nos permite

establecer relaciones fecundas e influir responsablemente en otras personas, para

ayudarles si así lo desean a cambiar su personalidad.

La PNL nos permite ordenar los componentes de nuestro pensamiento y

organizar nuestra experiencia de tal forma, que, a través de los procesos

neurológicos, logremos producir los comportamientos adecuados a los objetivos

que se quieren alcanzar.

“La PNL parte de los fundamentos de la teoría constructivista, la cual define

la realidad como una invención y no como un descubrimiento. Es un constructo

psíquico de Grinder y Bandler (1980), basados en el hecho de que el ser humano

no opera directamente sobre el mundo real en que vive, sino que lo hace a través
de mapas, representaciones, modelos a partir de los cuales genera y guía su

conducta.” (Moscoso, 2005).

3.3.1 Técnicas de la PNL que se pueden aplicar al Coaching

Bandler y Grinder (1980) nos proponen una serie de estrategias verbales,

que se pueden aplicar para manejar el lenguaje verbal del coachee. Estas

estrategias consisten principalmente en evitar generalizaciones, omisiones y

distorsiones. A continuación describiremos cada una de estas manifestaciones.

• Generalizaciones: Proceso mediante el cual el coachee no representa algo

específico de una experiencia, esto se ejemplifica con expresiones como las

siguientes: “Nadie me quiere, todos están en mi contra, nunca me pasan la

información, siempre me pasa lo mismo”, etc. En esta situación el coach debe

preguntar quién es toda la gente, quién es todos, quién es nadie, para ayudarlo

a delimitar sus expresiones.

• Omisiones: Ocurre cuando el coachee solo presta atención a ciertas

dimensiones de la experiencia. Por ejemplo si el coachee dice “estoy nervioso”,

no identifica de qué o de quién, como solución se propone que se identifiquen

detalles de la situación.
• Distorsiones: Se da cuando el coachee atribuye a entes externos a él,

responsabilidades de sus emociones. Ante frases como “estoy triste porque

está nublado, la secretaria me pone de malas, etc.” se sugiere que el coach

ayude al coachee a darse cuenta de que sus sentimientos no provienen de

situaciones externas, sino de su interior.

Moscoso (2005) nos señala que existen diversos tipos de percepción entre las

personas, esto quiere decir los seres humanos tenemos diversas formas para

percibir el mundo y por lo general lo hacemos priorizando alguno de nuestros

canales sensoriales. Aquí es importante destacar que el priorizar un canal, no

significa percibir el mundo únicamente a través de este, sino que le damos mayor

importancia sobre los demás canales sensoriales.

De acuerdo a Moscoso (2005), el coach debe de identificar cuál o cuáles son

los canales que el coachee prioriza. Para de esta forma utilizar el o los canales a

los cuales es más sensible su coachee, mejorando así la comunicación con este.

Los principales canales sensoriales, según el trabajo de Moscoso, se describen a

continuación.

• Visual: Se manifiesta en personas, cuya principal forma de percibir al

mundo es a través de la vista, ven al mundo en imágenes. Para ellos lo

importante es lo que ven y que los vean, de ahí que el contacto visual es

fundamental para ellos, necesitan ser mirados para sentirse queridos. Son

personas que al hablar utilizan expresiones como: “mira, me gusta tu


enfoque, no veo claro, se ve bien, etc.” Según Moscoso (2005) las

características corporales de estas personas son las siguientes:

o Postura algo rígida

o Movimientos hacia arriba

o Respiración superficial y rápida

o Voz aguda, ritmo rápido, entrecortado

o Palabras visuales (ve, mira, observa)

• Auditivos: Son aquellas personas que perciben al mundo primordialmente

a través del oído. No son tan rápidos como los visuales, pero tampoco son

tan lentos como los kinestésicos. Estas personas requieren de una

comprobación auditiva de que se les está prestando atención, necesitan

escuchar expresiones como: “Aja, mmm, hmmm, te oigo, escucha, etc,”. Su

frases más comunes por lo general son: “me suena bien, me estas oyendo,

quiero que me escuches, me hace ruido, etc.” Su pensamiento es más

secuencial y profundo, por eso ponen nerviosos a los visuales, que son muy

rápidos. De acuerdo a Moscoso (2005) los auditivos muestran las

siguientes posturas corporales:

o Postura distendida

o Posición de escucha telefónica

o Respiración bastante amplia

o Voz bien timbrada, ritmo mediano

o Palabras auditivas (oye, escucha)


• Kinestésicos: Son personas con una gran capacidad de concentración,

pero al mismo tiempo son las que requieren de un mayor contacto físico,

puesto que perciben al mundo a través del tacto. Son personas que al

saludar palmean la espalda, para demostrar solidaridad toman del hombro,

etc. Utilizan palabras como “no me siento a gusto, me huele mal ese

proyecto, siento que no es sincero, se me puso la piel de gallina, me da

escalofríos, etc.” De acuerdo a Moscoso (2005) las actitudes corporales de

los kinestésicos son:

o Postura muy distendida

o Movimientos que miman las palabras

o Respiración profunda y amplia

o Voz grave, ritmo lento con muchas pausas

o Referencia a las sensaciones en la elección de palabras (siente,

atiende, huele, saborea)

Como podemos observar la utilización de elementos de la PNL durante las

sesiones de coaching, pueden ser de gran ayuda. Puesto que nos permiten

analizar las reacciones del coachee durante el proceso, ya que “…la PNL consiste

en una serie de técnicas destinadas a analizar, codificar y modificar conductas.”

(Moscoso, 2005).

Otras técnicas de la PNL que pueden ser muy útiles aplicadas al coaching, de

acuerdo a Moscoso (2005), son las de anclaje y reencuadre. A continuación

describiremos en qué consiste cada una de ellas.


• Anclaje: Es el proceso mediante el cual un estímulo externo sensorial

se asocia con aquella conducta que se desea adquirir. “Se colocan las

anclas de manera deliberada o espontánea originando nuevos estados

mentales que disparan automáticamente procesos cerebrales. El ancla

puede ser una palabra, un gesto, un olor, un color, etc. que ejercitado en

forma consciente se convierte en un gran recurso potenciador de

estados mentales positivos y de éxito. Por ejemplo tocarse la oreja cada

vez que se desea sentir bien.” (Moscoso, 2005)

• Reencuadre: Se logra modificando el marco de referencia con el cual

una persona percibe los hechos para cambiar su significado. Si

variamos el significado, también cambia el estado emocional, así como

las respuestas y conductas de las personas. Moscoso (2005) nos dice

que las preguntas que puede utilizar el coach para aplicar el reencuadre

son: ¿qué otra cosa puede significar?, ¿qué debe aprender de esta

situación?, ¿qué mensaje le trae en su situación actual? Es a través del

reencuadre que el coach permite al coachee generar soluciones y al

mismo tiempo proponer comportamientos diferentes a los que venía

realizando, para de esta manera lograr un cambio positivo.

3.4 Terapia Racional Emotiva

La terapia racional emotiva fue desarrollada por el psicólogo

estadounidense Albert Ellis (1913- ). Ellis quien en 1953 rompe con el


psicoanálisis, encuentra en Adler, Fromm, Stack Sullivan y Korzybski sus

principales influencias para fundar una psicoterapia más activa y directiva, a la

cual nombró terapia racional emotiva.

“La terapia racional requería que el terapeuta ayudase al cliente a entender

que su filosofía personal contenía creencias que crean dolores emocionales. Su

nueva aproximación enfatiza el trabajo de cambiar activamente creencias y

comportamientos contraproducentes del cliente demostrando su irracionalidad y

rigidez. Ellis relaciona todo a estas creencias irracionales tales como que yo crea

que debo ser perfecto y amado por todo el mundo. Ellis creía que a través del

análisis racional, la gente entendiendo sus creencias irracionales podría

cambiarlas por una posición más racional.” (Wikipedia, 2006)

Cabe destacar que dentro de la terapia racional emotiva, se manejan

técnicas cognitivas, emotivas y conductuales; “…estas técnicas son muy útiles

para que el coach pueda trabajar con los pensamientos irracionales del

coacheado.” (Moscoso, 2005). A continuación se describirán las técnicas de la

terapia racional emotiva.


Técnicas Cognitivas de la Terapia Racional Emotiva

1.- Detección: Consiste en buscar las creencias irracionales que llevan a las
emociones y conductas perturbadoras. Una forma de descartarlas es el pedirle al
coacheado que haga un autorregistro con los pensamientos que usualmente
tenga, y le provoquen ansiedad o perturbación.
2.- Refutación: Consiste en una serie de preguntas que el coach emplea para
contrastar las creencias irracionales, y que posteriormente puede emplear el
coacheado. Por ejemplo: ¿qué evidencia tiene para mantener que?, ¿dónde está
escrito que eso es así?, ¿por qué sería eso el fin del mundo?
3.- Discriminación: El coach enseña al coacheado, mediante ejemplos, la
diferencia entre las creencias racionales o irracionales. Por ejemplo, al
preguntarle por qué tendría que sucederle específicamente a él que toda la
empresa estuviera en su contra.
4.- Definición: Se enseña a utilizar el lenguaje al coacheado de manera más
racional y correcta. Por ejemplo, en vez de decir “no puedo” a decir “todavía no he
tenido la oportunidad”.
5.- Técnicas referenciales: Se anima al coacheado a hacer un listado de
aspectos positivos de una característica o conducta, para evitar generalizaciones
polarizantes como puede ser: “soy el mejor jefe de toda la empresa”.
6.- Técnicas de imaginación: Se utilizan sobre todo dos modalidades
a)Imaginación racional emotiva: Consta de tres elementos A, B y C. Siendo A la
situación aversiva, B los pensamientos irracionales y C las conductas. El cambio
se logra trabajando con B al realizar un cambio en los pensamientos irracionales,
a través de que el sujeto se de cuenta de que son estos los que causan la
conducta y no la situación A por sí misma.
b)Proyección en el tiempo: El coacheado se ve afrontando con éxito eventos
pasados o esperados negativamente a pesar de su valoración catastrófica.
(Moscoso, 2005)
Técnicas Emotivas de la Terapia Racional Emotiva

1.- Uso de la aceptación incondicional con el coacheado: Se acepta al


coacheado a pesar de lo negativa que sea su conducta. En este caso, el coach
actúa como base o modelo de su propia autoaceptación.
2.- Métodos humorísticos: Con ellos se anima a los pacientes a descentrarse de
su visión extremadamente dramática de los hechos.
3.- Autodescubrimiento: El coach puede mostrar que también es humano y ha
tenido problemas similares a los del paciente, para así fomentar un acercamiento
y modelado superador, pero imperfecto.
4.- Uso de modelado vicario: Se emplean historias, leyendas, parábolas, etc.,
para mostrar las creencias irracionales y su modificación.
5.- Inversión del rol racional: Se pide al coacheado que adopte el papel de
representar el uso de la creencia racional en una situación simulada y comprobar
así sus nuevos efectos.
6.- Ejercicio de ataque a la vergüenza: Se anima al coacheado a comportarse
en público de forma voluntariamente vergonzosa, para tolerar así los efectos de
ello, por ejemplo, al entrar al servicio sanitario del sexo contrario.
7.- Ejercicio de riesgo: Se anima al coacheado a asumir riesgos calculados, por
ejemplo, hacer que sea él quien de la presentación a su equipo de trabajo para
ayudarlo a disminuir su ansiedad cuando hace presentaciones a los directivos.
8.- Repetición de frases racionales a modo de autoinstrucciones
9.- Construcción de canciones, redacciones, ensayos o poesías: Se anima
ala paciente a construir textos racionales y de distanciamiento humorístico de los
irracionales.
(Moscoso, 2005)
Técnicas Conductuales de la Terapia Racional Emotiva

1.- Tareas para casa del tipo exposición a situaciones evitadas

2.- Técnica de quedarse allí: Se anima al coacheado a recordar hechos

incómodos, como manera de tolerarlos.

3.- Ejercicios de no demorar tareas: Se anima al coacheado a no dejar tareas

para mañana para no evitar la incomodidad.

4.- Uso de recompensas y castigos: Se anima la coacheado a reforzarse en

sus afrontamientos racionales y a castigarse sus conductas irracionales.

(Moscoso, 2005)

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