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Cualquier campaña de publicidad tiene como fin último hacer llegar un mensaje, de
manera entendible, al/los público/s objetivo. Por tanto, la campaña de publicidad
siempre tendrá su origen en la información previa elaborada por el anunciante; una
información sobre la base de la que, posteriormente, se elaborará la estrategia
publicitaria que mejor pueda satisfacer los objetivos de la campaña.
El primer (y más extenso) apartado de este capítulo pretende recoger todos los pasos
que, por norma general, requiere la elaboración de una campaña publicitaria: desde
que el anunciante detecta una necesidad de comunicación y la plasma en el briefing,
hasta que la agencia elabora la estrategia publicitaria y, finalmente, se difunde la
campaña. No obstante, conviene reiterar en este punto que los detalles de este
proceso podrán variar según las diferentes tipologías de anunciantes o agencias que
intervengan en el proceso y sus correspondientes rutinas profesionales.
1.1. El briefing
Independientemente de las dinámicas de trabajo de la empresa anunciante, el
proceso de comunicación publicitaria suele comenzar de la misma manera: a partir
de la necesidad manifiesta de una empresa u organización de comercializar o dar a
conocer un producto, idea o servicio.
Un buen briefing tiene que ser claro, sencillo y concreto para que pueda convertirse
en una herramienta útil y fácil de utilizar. La Advertising National Association de
Estados Unidos propone tener en cuenta los siguientes elementos a la hora de
elaborar un briefing:
1) Visión de conjunto
a) De la empresa. Incluye toda la información que ayude a conocer la empresa a
fondo:
• historia de la empresa y de sus productos;
• política de la compañía, que puede estar basada en el servicio, en la calidad
del producto, etc.;
• cultura empresarial;
• identidad corporativa.
b) Del mercado:
• análisis de la situación actual y valor del mercado;
• estructura de ventas y distribución, y ventas totales;
• canales de distribución e importancia de cada uno de ellos con respecto a las
ventas;
• zonas que cubre comercialmente y área de servicios;
• filosofía de mercado y antecedentes;
• resultados comerciales obtenidos en los últimos años;
• competencia;
• puntos fuertes y puntos débiles en comparación con la competencia;
• segmentación;
• tendencias para los próximos años;
• estacionalidad.
c) Del producto:
• marca y denominación de producto;
• participación de mercado;
• volumen de ventas;
• funcionamiento, usos, producción y garantía;
• características físicas;
• atributos diferenciadores del producto y valor añadido;
• necesidades que cubre;
• comparación con los productos de la competencia;
• plus point o ventajas diferenciales;
• posicionamiento mental;
• ciclo de vida;
• hábitos de compra;
• conexión del producto con unos estilos de vida determinados;
• notoriedad o conocimiento que el público objetivo tiene del producto, marca o
empresa;
• nivel de precio: precio real y precio psicológico a partir de la percepción del
consumidor;
• gama de productos;
• imagen de marca: valores derivados;
• distribución;
• campañas anteriores;
• marco legal;
• resultados de análisis e investigaciones previas a la campaña.
Todo producto está integrado por una realidad material o física, y por otra
emocional o psicológica. La primera obedece a los atributos físicos del
producto en cuestión, mientras que la segunda está vinculada a la percepción
que se tiene de él.
d) De la competencia:
• empresa y marcas derivadas;
• productos y características de cada uno de ellos;
• publicidad (estrategias, contenidos y características generales);
• inversiones publicitarias;
• estrategias de medios.
e) Del público objetivo:
• características sociodemográficas: edad, sexo, clase social, hábitat, etc.;
• características psicográficas: actitudes, hábitos, estilos de vida, momentos de
ocio, etc.;
• motivaciones de compra;
• frenos de compra;
• conocimiento de la marca;
• imagen de marca.
AEDEMO
Así, algunos de los aspectos que hay que analizar con anterioridad a la creación de
una campaña con el fin de determinar la mejor estrategia de comunicación de un
producto o servicio son, entre otros: la evolución y la valoración de las diferentes
acciones publicitarias que ha realizado la compañía a lo largo del tiempo, las
acciones que lleva a cabo la competencia, la conveniencia o no de utilizar unos
medios de comunicación determinados como apoyo, la posibilidad de renunciar a los
medios que el anunciante había utilizado tradicionalmente para decantarse hacia
fórmulas de comunicación no convencionales, o las motivaciones y los frenos del
consumidor a la hora de comprar el producto.
3) Análisis DAFO
Una vez realizado con detalle el análisis de la situación de la empresa y de la
competencia, el siguiente paso sería entrar a valorar comparativamente la
información recopilada desde un punto de vista tanto externo como interno,
concretándolo en el denominado análisis DAFO, mediante el cual (como indica su
propia sigla) se analizan las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades de
una empresa.
Análisis SWOT
A partir de ello, el análisis que cada empresa pueda realizar de sus puntos fuertes y
débiles será tan intenso como se quiera, siempre que se lleve a cabo de una manera
objetiva, rigurosa y con un suficiente nivel de detalle y profundidad.
Para realizar una correcta definición del grupo objetivo hay que partir de un paso
previo: la segmentación de mercado.
Como su mismo nombre indica, la segmentación del mercado es el proceso de
división de un mercado en segmentos. Y un segmento de mercado es un conjunto
de consumidores con características o comportamientos comunes y que pueden
reaccionar de manera homogénea a los estímulos de marketing.
Como acabamos de avanzar, uno de los objetivos a los que responde la técnica de la
segmentación del mercado es llegar a conocer las características particulares que
identifican a cada público para que la agencia pueda ajustar la estrategia de
publicidad a las mismas.
2) Hábitos de información:
– Experiencias anteriores
– Relaciones personales
– Acceso a las actividades/soportes/medios de comunicación
– Uso de las actividades/soportes/medios de comunicación
– Actitud hacia las actividades/soportes/medios de comunicación
– Códigos y subcódigos
– Estrategias de obtención de información
– Estrategias de procesamiento de la información
3) Aspectos de la conducta:
– Nivel de conocimiento de la empresa / producto / servicio
– Creencias o actitudes hacia la empresa / producto / servicio
– Beneficios buscados
– Motivaciones y frenos hacia la empresa/producto/servicio
– Nivel de implicación con la empresa/producto/servicio
Art. 3 LGP
Hay que tener en cuenta que el nuevo redactado de la LGP considera ilícita
la publicidad en la que presente a menores persuadiendo de la compra a
padres o tutores.
1.1.4. El posicionamiento
El posicionamiento es la percepción que tiene el público objetivo de un producto o
de una marca en relación con sus competidores.
Jack Trout y Al Ries son dos estrategas de marketing que iniciaron su actividad
profesional en el ámbito de la publicidad y que en 1972 escribieron una serie de
artículos titulados “The Positioning Era Cometh” para la publicación Advertising
Age. Desde entonces el posicionamiento se ha convertido en un concepto de
referencia para los profesionales del marketing y la publicidad en todo el mundo.
Cita
En su obra Posicionamiento: el concepto que ha revolucionado la
comunicación publicitaria y el marketing, Trout y Ries abordan
ampliamente este concepto que Raúl Peralba, socio y promotor de los
conceptos de Trout en España, resume en la siguiente definición.
Ejemplo
1.1.6. El tono
El tono es el conjunto de características que definen la at mósfera, el estilo o el
ambiente de ejecución de un anuncio o de una campaña publicitaria.
Además, en este punto final del briefing, el anunciante debe relacionar cualquier otra
información de interés que pueda ser de utilidad a la agencia, por ejemplo:
• Definir si la campaña está dirigida sólo a medios, si incluye punto de venta,
elementos promocionales, marketing directo, materiales y eventos para la fuerza de
ventas, relaciones públicas, patrocinios, etc.
• ¿Va a implementarse la campaña en medios interactivos?
• Concretar el ámbito geográfico de la campaña. Cuando sea posible, aclarar aquí si
la campaña deberá tener en cuenta (por ejemplo, por razones de copyright) una
posible ampliación a otras áreas geográficas.
• ¿Debe prever la campaña consideraciones legales o restricciones de
autorregulación?
• ¿Existen sensibilidades étnicas o sociales con este producto, o en un área de
distribución determinada?
• Si se considera de utilidad, incluir casos de éxitos o fracasos dentro de esa
categoría de productos, aportando las razones por las que se han producido.
1.2. El contrabriefing
Una vez estudiado y analizado el briefing por el equipo de cuentas y/o de
planificación estratégica de la agencia de publicidad, ésta puede elaborar
un contrabriefing.
El contrabriefing es el documento que una agencia de publicidad presenta a un
anunciante en respuesta a un briefing con el objetivo de resolver dudas, solicitar
información adicional, hacer aportaciones o contrapropuestas, presentar un esbozo
de la estrategia publicitaria, etc.
Tan pronto como anunciante y agencia dan por cerrada la fase de elaboración y
entrega del briefing, el departamento de cuentas o/y planificación estratégica de la
agencia de publicidad inicia un proceso estratégico mediante el cual desarrollará la
plataforma estratégica de comunicación de la que surgirá el briefing creativo y
el briefing de medios, que servirán para que los creativos y los planificadores de
medios diseñen sus respectivas estrategias.
Las plataformas estratégicas son métodos de ayuda sistematizados que tienen las
agencias de publicidad (y algunos anunciantes) para organizar su pensamiento
estratégico y creativo y que se concretan en documentos que les sirven de guía.
El contenido de las plataformas estratégicas está formado por una serie de apartados
organizados de forma lógica, que sirven de guía para elaborar la estrategia
publicitaria y orientar la creatividad, para facilitar la consecución de los objetivos de
publicidad, a la vez que ejercen una influencia sobre la elaboración del mensaje
publicitario (creatividad) y su difusión (planificación de medios).
Las funciones de las plataformas estratégicas son las siguientes (Rom; Sabaté,
2007):
• Definir el problema de comunicación del anunciante.
• Orientar la creatividad y los medios.
• Verificar los objetivos publicitarios del anunciante.
• Oficializar un método de pensamiento y de trabajo.
• Uniformar el método en una red de oficinas.
• Ofrecer un método único a los estrategas de la agencia.
• Facilitar el trabajo estratégico y la respuesta creativa.
A pesar de que, como hemos visto, la copy strategy es sólo una de las muchas
plataformas estratégicas que se utilizan en el ámbito publicitario, muchos autores la
han tomado como referencia hasta el punto de adoptarla como plataforma estratégica
por excelencia.
Según Marçal Moliné (1998), la copy strategy es un documento breve que identifica
las bases sobre las cuales esperamos que el consumidor prefiera comprar nuestros
productos, en vez de los de la competencia. Como veremos más adelante, se basa en
el concepto de USP (unique selling proposition o única proposición de venta) que
obliga a trabajar a fondo la plataforma estratégica para elegir un único, el mejor,
argumento de venta. Por tanto, definir el contenido de la copy strategy es definir los
detalles de una proposición de compra, la expresión formal, no creativa, del
beneficio argumentado del producto sobre el que se articulará la creatividad y los
medios de la campaña. Este beneficio argumentado del producto debe ser:
• Significativo: debe transmitir un contenido valioso e importante para el
consumidor, es decir, la capacidad que tiene el producto para satisfacer la
necesidad del consumidor; para convencer hay que basarse, pues, en la verdad del
producto desde el punto de vista del consumidor.
• Creíble: debe convencer al consumidor de que cuanto se le dice en la publicidad es
cierto; para ello, en la fase creativa se puede justificar el beneficio prometido
utilizando, por ejemplo, las demostraciones, los testimonios, los publirreportajes,
etc.
Ejemplos
Demostraciones
Un ejemplo del uso de las demostraciones para dar credibilidad son los anuncios
de detergentes, donde se simula una situación real en la cual se demuestran las
diferencias entre el producto anunciado y los de la competencia.
Testimonios
Hay muchos anuncios que recurren al testimonio. Serían ejemplos las personas de
diferentes edades que explican los beneficios de ING Direct; Andie McDowell,
que explica los de L’Oréal; José Coronado, que explica los de Danone; Judith
Mascó asegura que los bombones Ferrero Rocher gustan a todas sus amistades;
Fernando Alonso alaba los productos financieros del Banco Santander; Rafa
Nadal afirma sentirse seguro con las pólizas de Mapfre, etc.
Publirreportajes
Los publirreportajes sobre determinados productos alimentarios o enológicos,
como por ejemplo embutidos o vinos, dan credibilidad al mensaje.
• Estimulante: debe ser capaz de provocar un deseo de acción en el consumidor y
una disposición positiva hacia la compra.
La copy strategy, por tanto, debe basarse en una propuesta rigurosa y clara en la que
se deja de lado la creatividad; tiene que argumentar de manera creíble el beneficio
del producto, de tal manera que sirva como base de la estrategia creativa y de la
estrategia de planificación de medios que se llevará a cabo en los pasos sucesivos de
la campaña publicitaria. Y nunca se tiene que confundir con el eslogan o con las
frases que se transmiten de manera literal en la fase creativa de la campaña
publicitaria.
4) Evidencia o reason-why
La reason-why es la justificación creativa que hace evidente y creíble el beneficio
que la publicidad comunica al consumidor.
Por tanto, la USP es una filosofía publicitaria que, por sus características, tiende a
potenciar mensajes simples, intensos, claros y sin afectaciones.
Sin embargo, conviene destacar en este punto que la USP ha suscitado algunas
controversias puesto que algunos teóricos y profesionales de la publicidad han
criticado su rigidez sobre la base de su carácter básicamente racional.
Algunas agencias dejan en manos del departamento creativo el tono o estilo que
tendría que seguir la campaña.
Para concluir este punto, tan solo cabe mencionar que algunos autores señalan que la
estrategia publicitaria, con carácter muy general, puede adoptar diferentes formas
según la estrategia previa que se decide por parte del departamento de marketing o
de publicidad del anunciante para ayudar a conseguir el objetivo de ventas o
posicionamiento. Desde este punto de vista, según García-Uceda (2008),
podríamos hablar de tres tipos de estrategias o campañas publicitarias:
En esta parte del proceso de creación, que en gran medida vendrá determinada por el
proceso de planificación estratégica previo, se selecciona el eje de comunicación y
el concepto que estructurarán creativamente el mensaje publicitario.
El eje de la campaña (también denominado eje de comunicación o eje publicitario)
es la idea principal que guiará todas las acciones de comunicación que se llevan a
cabo en una campaña publicitaria.
Por tanto, basándonos en los elementos que hemos visto anteriormente, el eje de
comunicación será la línea argumental que tiene que seguir la estrategia de
contenidos en el momento de definir el mensaje; será también uno de los elementos
que deben desencadenar los mecanismos de compra del público objetivo y el que
deberá promover sus motivaciones, reduciendo los frenos, etc. En la mayoría de
casos, el eje de comunicación coincidirá con el beneficio de la copy strategy, el cual
se transformará en un dato para la creación más que en una tarea para la misma.
Conocer qué motivará al consumidor, es decir, el eje de comunicación adecuada, es
la primera fase del proceso de creación, una fase de reflexión que conlleva:
a) Universalidad. El eje del mensaje tiene que llegar al mayor número posible de
personas que forman el público objetivo predefinido.
En función del eje de comunicación, podemos crear mensajes de diferentes tipos, tal
como especificamos a continuación:
• Eje centrado en la utilidad del producto. El mensaje gira en torno a las
características y la utilidad del producto anunciado. Es lo que se llama mensaje
producto.
Ejemplo
Los productos de moda que se venden por su apariencia son ejemplos de mensajes
producto.
• Eje centrado en los atributos intangibles del producto. El mensaje tiene que
mostrar la satisfacción que puede sentir el consumidor como consecuencia del uso
del producto. Es lo que se llama mensaje resultado.
Ejemplo
Los productos de belleza, los perfumes o los coches de gama alta son ejemplos de
mensajes universo. Habitualmente son productos relacionados con el lujo.
1) Evocación directa, clara, diciéndolo sin más, lo que facilitará la comprensión del
mensaje.
Ejemplo
Ejemplo
Lo ideal es que estos conceptos impulsen el producto durante largas temporadas, con
el objetivo de ir ganando fuerza y memorabilidad. Y que presenten la flexibilidad
necesaria para ser incorporados en todos los soportes seleccionados en la estrategia
de medios, que, como veremos, se desarrollará casi en paralelo a la estrategia
creativa.
Podríamos decir que, en esta fase, el reto del creativo es representar mentalmente,
estructurar y codificar de forma novedosa el contenido significativo y creíble del
mensaje, para llamar la atención y requerir la participación activa (mental) del
receptor; con el preciso equilibrio entre información y redundancia, para garantizar
su comprensión, sintonizando con la personalidad, las actitudes y el estado de ánimo
del target (García-Uceda, 2008).
Esta parte de la estrategia tiene como objetivo dar forma al mensaje en función de
los medios de comunicación que tienen que servir como soporte para su difusión.
Así, cuando la pieza que se tiene que anunciar es gráfica, se elabora en primer lugar
una composición o maqueta; en caso de que se acuerde hacer una difusión
radiofónica, se elaborará un guión, y en caso de que el destino final de la campaña
sea la televisión, se elaborará un guión ilustrado storyboard –representación en
dibujos de lo que tiene que ser el futuro anuncio– o un guión animado o animatic –
representación por ordenador de lo que será el anuncio televisivo.
Ejemplo
Ejemplo
Ejemplo
Ejemplo
Ejemplo
• El símbolo visual. En este tipo de anuncios se expresa una idea visualmente para
hacerla más duradera. Habrá distintos tipos de camino creativo “símbolo visual”,
según si estos están o no relacionados con la marca, y según resalten o no la
característica del producto. Está demostrado que el ser humano recuerda mejor lo
que entra por el nervio óptico que lo que entra por el auditivo y, además, recuerda
más lo concreto que lo abstracto.
Ejemplo
Las compañías de información telefónica han utilizado ampliamente durante los últimos
años este recurso, asociando personas o personajes a los números de información, de
forma que la retentiva visual del icono haga que sea más fácil recordar el número cuando
lo necesitemos.
• Presentador. Son anuncios en los que aparece un presentador, habitualmente en
formato de telediario, que explica las características del producto. En este caso, la
dosis de creatividad en la estrategia acostumbra a ser prácticamente nula, debido a
que es la figura del presentador la que toma protagonismo. Es conocido también
como busto o cabeza parlante. La fuerza del anuncio reside en esta figura, por lo
que es requisito imprescindible encontrar idea, texto y persona adecuados para
elegir este camino, que no goza de muy buena reputación entre los creativos
debido a su carencia de imaginación.
Ejemplo
• Testimonio. Son anuncios en los que salen personajes que cuentan cómo les ha
beneficiado el uso del producto. Pueden ser expertos en la materia, famosos o
personas anónimas, aunque suelen utilizarse líderes de opinión, pues dotan al
mensaje de credibilidad. El experto incrementa la confianza, destaca los beneficios
del producto y se dirige a la parte racional del consumidor. El famoso identifica la
imagen del producto con la suya y por tanto, arrastra la identificación de sus
seguidores. La persona corriente consigue llegar a un segmento objetivo, hace que
el público se vea reflejado en él y provoca una actitud racional en el espectador.
Ejemplo
Ejemplo
Existen tantos ejemplos de este tipo de anuncio que centrarnos en uno sería complicado,
pero podríamos decir que, por ejemplo, mostrar a los niños entrando en la cocina, de
vuelta del colegio y buscando en la nevera un zumo o un bombón, son claros ejemplos de
este tipo de camino creativo.
• Fragmentos de cine. Son anuncios que recrean fragmentos de una película,
añadiendo el producto como eje central de la acción. Del mismo modo que los
trozos o fragmentos de vida son como partes de la vida misma, los trozos de cine
son como partes de una película larga, convertidos en anuncio. Evidentemente
pueden ser de acción, suspense, de humor, de miedo y de todos aquellos temas que
habitualmente tocan los largometrajes.
• Música. Es especialmente indicada cuando un producto ofrece beneficios
emocionales, y queda representada claramente en la creación de in jingle. Decía
Ogylvy, a propósito de la música en la publicidad: “Cuando no tenga nada que
decir, cántelo” lo que le ha dado a los jingles una reputación negativa entre los
creativos, sin embargo, es un recurso que se sigue utilizando y, además, la música
ha cobrado especial importancia en la publicidad actual, en muchos casos, siendo
el eje a través del cual se desarrolla el anuncio.
• Dibujos animados. Son anuncios muy utilizados en estrategias creativas de
campañas dirigidas a niños. Pueden ser anuncios completamente realizados en
dibujos animados, o contar con mascotas que representan al producto en entornos
reales. Aunque son ampliamente utilizados para el público infantil, no son
exclusivos de este target.
Ejemplo
Nesquik utiliza el dibujo de un conejo (la mascota del producto) en toda la comunicación
que realiza, situándolo en entornos fantásticos y realizando proezas para conseguir un
vaso de leche con chocolate.
Ejemplo
Los anuncios de automóviles utilizan ampliamente este camino creativo, así como los
anuncios de artículos electrodomésticos, en especial televisiones.
El material que se usa para el pretest puede ser el mismo que se utiliza para la
presentación de la propuesta de campaña al cliente. El material en borrador puede
alcanzar tres niveles:
• El script o guión literario es una descripción verbal de las imágenes que contendrá
el futuro anuncio y del texto que las acompañará.
• El storyboard es un conjunto de imágenes que, a la manera de un comic,
representan sucesivas escenas del anuncio; estas imágenes, muchas veces
simplemente dibujadas, aunque a menudo fotografiadas, van acompañadas del
correspondiente texto.
• Por último, el animatic es un storyboard filmado.
A pesar de su importancia, cabe señalar que este sistema no lo utilizan todos los
anunciantes ni todas las agencias publicitarias, bien por cuestiones de presupuesto,
bien porque hay creativos que consideran que los pretests condicionarían en exceso
su trabajo. A pesar de su clara utilidad desde el punto de vista de la eficacia
publicitaria, el pretest encarece sustancialmente el presupuesto destinado a la
campaña; y, además, sus detractores manifiestan que la campaña no se valora en
condiciones reales, motivo que puede contribuir a sesgar el resultado del impacto.
Según el grado de acabado del mensaje publicitario se pueden llevar a cabo, entre
otros, los siguientes tipos de pretest: el pretest de conceptos (estudia si el concepto o
idea creativa es suficientemente válida y aceptada por el público), el pretest de
expresiones creativas (comprueban si las ideas o códigos utilizados son capaces de
transmitir con claridad y fuerza el concepto deseado), el pretest de alternativas
creativas y el pretest de elementos creativos del mensaje.
f) de las limitaciones legales de los medios de comunicación (como por ejemplo, la
prohibición de anunciar tabaco y bebidas alcohólicas de una graduación determinada
en televisión).
Por tanto, como ya hemos apuntado, todo plan de medios debe responder a
un briefing de medios, que recoja qué es lo que el anunciante quiere conseguir con la
inversión publicitaria, a qué público objetivo y en qué zonas geográficas se quiere
impactar, cómo se desea alcanzar al público objetivo seleccionado, en qué periodo
se pretende concentrar esta acción publicitaria y cuál es el presupuesto de que se
dispone para desarrollar la campaña de publicidad.
En relación con la frecuencia, hay que tener en cuenta otro concepto, que es el de la
medida de los impactos y que se puede conseguir mediante la combinación de
diferentes medios y soportes. Este valor se obtiene por medio de los
denominados puntos de rating brutos o gross ratingpoints, que se calculan a partir
de la suma de la cobertura bruta (en porcentaje) o total de impactos conseguidos
sobre el público objetivo, multiplicada por la frecuencia media de cada uno de estos
medios o soportes. La cantidad óptima para impactar sobre la audiencia son unos
250 GRP.
b) El coste relativo es el coste real de un medio determinado en función del número
de impactos que obtenga sobre el público objetivo. Se mide en términos de coste por
mil o CPM, y es el resultado de la operación siguiente:
Coste relativo
Como apunta la profesora Sílvia Sivera (2009), a esta reunión, liderada por el
director de cuentas de la agencia, es habitual que también asista el equipo creativo
con el fin de explicar y justificar la adecuación de la creatividad a la pauta inicial del
cliente reflejada en el briefing. En esta misma reunión, la agencia propone al cliente
los profesionales que, en caso necesario, deberá contratar para materializar la
campaña (realizadores, fotógrafos, modelos, etc.).
En este punto, es habitual que el anunciante se tome unos días para valorar la
campaña o, incluso, para llevar a cabo un pretest (si es que no tenía esta opción
contemplada). En caso de que el anunciante solicite a la agencia llevar a cabo ajustes
en las piezas publicitarias, la agencia deberá valorarlo e implementarlos antes de
proceder a ejecutar la campaña.
En la fase de ejecución de la campaña, la agencia deberá llevar a cabo todas las
actividades, creativas y de medios, planificadas anteriormente. Entre las tareas
propias de la fase de ejecución destacan:
• La producción de las piezas publicitarias propuestas. En función de la
naturaleza de las piezas presentadas, la agencia deberá seleccionar, contratar y
supervisar el trabajo de los colaboradores externos encargados de la producción de
las mismas; de este modo, el equipo creativo trabajará codo a codo con ellos con el
objetivo de conseguir un anuncio bien rodado, la mejor fotografía de producto o
bodegón, una gran pieza interactiva, etc.
• Compra de espacios en los medios. Otra de las tareas que recae en la agencia es
la compra de los espacios en los diversos medios elegidos durante la planificación
de medios, aunque también puede ser labor de la central de medios.
• Inserción de los anuncios en los medios. La agencia deberá controlar la aparición
de los anuncios en los espacios seleccionados, así como de solicitar su corrección
en el caso de que éstos no hayan sido editados correctamente.
Este tipo de análisis sirve para evaluar de forma global los efectos de la campaña en
el público objetivo y el impacto de cada uno de los medios y soportes utilizados.
Según García-Uceda (2008), el grado de eficacia de una campaña de publicidad
viene definido por:
– El grado de penetración del mensaje publicitario en el público objetivo elegido;
ello se mide a través del porcentaje de personas del público objetivo que declara
acordarse de lo que a publicidad ha dicho y mostrado.
– Los comportamientos de compra; esto es, la intención de compra y el impacto en
las ventas, analizados a través de los datos aportados por los paneles de
consumidores y de detallistas con los que se valora el poder de comunicación de la
campaña.
– El consumo que la campaña ha provocado; para ello es necesaria la evaluación de
los mismos criterios antes y después del lanzamiento de la campaña.
Al igual que sucede con la mayor parte de los estudios, no existe una única forma de
realizar un postest y para ello se pueden utilizar técnicas cualitativas y también
cuantitativas (González-Lobo; Prieto del Pino, 2008):
• Técnicas cualitativas. Se utilizan, principalmente, entrevistas de grupo: a las
personas seleccionadas (integrantes del público objetivo) se les presenta nuestro
anuncio junto con otros anuncios de la competencia y se les pide su opinión.
• Técnicas cuantitativas. Son la forma más usual de realizar postest, aunque una
combinación de ambas técnicas (cualitativa y cuantitativa) sería la solución
óptima; consiste en diseñar una muestra representativa del universo y aplicar a sus
componentes un cuestionario que debe contener interrogantes acerca de tres puntos
fundamentales: el recuerdo de la publicidad, el conocimiento de las marcas y el
recuerdo de las características del producto.