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ADMINISTRACIÓN, FORMULACIÓN Y EVALUACIÓN DE PROYECTOS

Juliobgarcia@hotmail.com

(Ejercicio de comprensión)

Este ejercicio pretende fomentar la discusión en grupo en torno a las limitaciones


que presentan los cinco criterios de evaluación habitualmente considerados por
los evaluadores y las agencias de desarrollo: eficacia, eficiencia, pertinencia,
viabilidad e impacto. Tras una presentación de cada criterio, se ofrecen al final
preguntas para suscitar la reflexión.

La eficacia es el criterio más utilizado en las evaluaciones que van realizando los
organismos internacionales y las ONGs. Es el criterio más sencillo, al limitarse a
contrastar la situación antes del proyecto y después de concluida la intervención

La eficiencia, destaca que quizá sea, junto a los impactos, el criterio que aporte
mayor valor añadido a la evaluación y a la organización. Se trata de conocer la
cuantificación de la eficacia respecto a los costes de oportunidad de haber
invertido los recursos del proyecto.

La pertinencia. Análogamente a la eficacia, este criterio pesa más sobre la


evaluación ex ante o sobre la etapa de identificación y formulación de proyectos.
La pertinencia trata de responder a la cuestión de si la intervención realizada
respondió a una necesidad real de la población, que propició verdaderamente su
desarrollo humano.

En cuarto lugar está la viabilidad del proyecto ejecutado, esto es, su continuidad
o sostenibilidad una vez que cesa la ayuda, dirige de nuevo la atención a dos
momentos evaluativos. Así podríamos considerar la viabilidad ex ante realizada
durante la formulación de la intervención, y la sostenibilidad ex post o a posteriori,
ya terminada la acción programada. En el caso de la viabilidad a posteriori,
convendría analizar este criterio no sólo al poco tiempo de finalizado el proyecto, si
no en un plazo medio o largo.

El quinto y último criterio es el impacto. Se trata de describir y cuantificar todos los


efectos que la intervención ha provocado: directos e indirectos, deseados e
indeseados, previstos e imprevistos. Y sobre un conjunto tan amplio de variables
como el medio ambiente, los impactos políticos, culturales, económicos,
comunitarios, sociales o de género. La valoración de los impactos aparece como
lo más costoso, largo y complejo de todo el proceso evaluador, pero también lo
más útil. Aporta la información más relevante para tomar decisiones, para
acumular aprendizajes y buenas prácticas.
Texto Completo “Un ejercicio práctico en torno a los criterios de evaluación" un
caso específico a partir del cual se puede entrar a analizar la pertinencia,
aplicación e importancia de cada uno de los criterios de evaluación:

"Supongamos que se desea evaluar la eficiencia de tres proyectos que tienen


como objetivo la reconstrucción de viviendas tras un desastre natural. Cada
ONG es encargada de realizar la reconstrucción en una zona distinta; pero
supongamos que el proyecto es de iguales dimensiones y características: con la
misma cantidad de viviendas, materiales semejantes y plazos de ejecución
similares.

Y supongamos que los resultados tras la intervención de cada una de las ONGs
es el siguiente: la ONG “X” construyó las viviendas en el plazo indicado, con
materiales traídos de su país de origen y con personal técnico también
propio. Construyó los edificios, los entregó puntualmente y bajo las condiciones
pactadas en el proyecto. Es decir, fue eficaz. Pero su eficiencia se basó en una
concepción ‘’asistencial” del desarrollo. No tuvo en cuenta a los beneficiarios ni
en la formulación, ni en la ejecución del proyecto. Quizá hasta su presupuesto fue
menor. Pero las dudas sobre haber realizado una acción de desarrollo realmente
cooperativa son grandes. No contempla el mantenimiento de las viviendas.

En un segundo caso, la ONG “Y” realizó su intervención comprando los materiales


en las zonas locales y contratando a personal autóctono como mano de obra para
la construcción de las casas. También su plazo de entrega fue puntual y el coste
según lo presupuestado. Fue una acción eficaz, al igual que la primera, pero a
la hora de considerar la eficiencia, podemos asegurar que su intervención provocó
mayores eslabonamientos sobre los ciudadanos, con incrementos en sus puestos
de trabajo, autoestima y consideración propia de cada casa construida. Estimamos
que esta manera de actuar fue más eficiente que la anterior, por ser más
cooperativa entre las partes, aun cuando el presupuesto no incluyó su
mantenimiento.

Pero supongamos una tercera organización, la “Z”, que se puso a identificar y


diseñar con los propios afectados, las zonas, características, calidades, tamaños y
demás elementos de las viviendas a construir. Seguramente el plazo de
construcción y entrega se alargó sobremanera respecto a las otras dos ONG. La
compra de materiales fue autóctona, la mano de obra fue la que intervino en la
identificación y formulación del proyecto y a la ONG del Norte le interesaba
trabajar especialmente el fortalecimiento y desarrollo comunitario de las personas
involucradas. Durante la ejecución lenta, se pudieron detectar líderes
comunitarios, establecer proyectos de formación y capacitación y demás
actividades. Incluso podríamos suponer que la calidad final de las viviendas fue
algo inferior a las anteriores debido a la menor cualificación de la mano de obra
local, pero se garantiza el nivel de mantenimiento con las autoridades locales y los
grupos comunitarios.
NUESTRA INTERROGANTE ES:

¿Cuáles proyectos fueron eficaces y porque?

¿Cuáles proyectos fueron eficientes y porque?

¿Cuáles proyectos fueron pertinentes y porque?

¿Cuáles proyectos generaron impacto y porque?

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