ENSAYO: ENSEÑANZAS DE ARQUITECTURA EN ESCUELAS DE ARQUITECTURA CUSQUEÑAS

ALUMNO: Neil Andrew Baca Hermoza CODIGO: 015300110K

INTRODUCCION

Después de escuchar la charla que se tuvo el pasado domingo, ya tengo una mejor idea de cómo se
trabaja los talleres de diseño en las otras escuelas como son las UNSAAC y la Católica, y con esto en
mente me toca redactar el siguiente trabajo con todo lo que pude llegar a entender de lo que se
trata enseñar y aprender arquitectura.

Empezare entonces mencionando que la arquitectura es universal, y los maestros no están para
enseñar cosas nuevas o sacarlas de la manga, sino que es la acumulación de cientos de años; miles
en el Perú, que tenemos que asimilar y analizar para desarrollar lo que es un pensamiento mucho
más crítico y reflexivo sobre lo que es la arquitectura y lo que no se debe hacer en nuestro entorno
actual o próximo, y también poder saber sobrellevar cualquier problema que se presente y otros
lugares que nos compete analizar y según eso trabajarlo. Como se sabe cada terreno es único y por
es que cada proyecto es diferente, aun con la obra que colinde con este, ya que existen demasiados
factores que influyen de muchas maneras, más o menos, y aquí es donde también tiene que ver
mucho el proyectista y su manera de pensar y resolver problemas haciendo uso de todo lo que
aprendiendo hasta el momento, esto claro se viene desarrollando desde su formación en su escuela
profesional y con los maestros de tuvo la suerte de conocer, porque de eso se trata, de como uno
entiende y se preocupa por aprender mucho más, esto llevado de la mano con el tutor asignado o
con los profesores que uno va desarrollando cierto nivel de afectividad. Después de todos los
profesores que uno ve al frente que se encarga de dictar, exigir y hasta se podría decir molestar,
también tuvieron su etapa de estudiante, también se amanecieron y también se deprimieron por
un trabajo mal ejecutado, y mucho mejor si este de formo en la misma ciudad que sus estudiantes
se están formando ahora.

Es obligado saber dónde se encuentra uno y lo que puede hacer y lo que no, aunque claro esto tiene
que pasar el filtro del maestro o tutor, los cuales no se caracterizan por tener un visión vaga de lo
que es arquitectura, y da gusto ver que hay muchos maestros que si les interesa que sus alumnos
pueden tener ese pensamiento crítico desde muy temprano en su formación, aunque existen
algunos que se sienten menos o que no aguantan una crítica destructiva; como es en mi caso que
se me hacía difícil continuar con un proyecto que pensabas que ya estaba bien encaminado, y resulta
que aún estaba lejos de conseguir eso. A estas alturas en la que me encuentro puedo decir con toda
seguridad que un proyecto no sale solo de una visita al terreno, con un boceto y el material más
común del mercado; es mucho más el proceso para conseguir el producto final, y es cierto que
importa mucho el entorno en el que uno se encuentra, el cusco en este caso, siendo una pena que
no exista una vasta gama de referentes que se pueda analizar, porque parece que aún se quiere
vivir en el pasado, y está bien sentir un gran respeto por lo que fue, pero no se trata de proyectar la
misma arquitectura, sino más bien analizar lo que se hizo bien, métodos de construcción y como se
relaciona esto con su entorno, por lo que hace el viajar importantísimo para el estudiante, analizar
otros entornos únicamente usando la cabeza y la mano. Esta más que decir que nos encontramos
en un estado de aprendizaje y aun no se cuenta con todos los conceptos que domina un egresado
de la escuela profesional o la de un profesor de diseño que ya tiene o debería tener experiencia en
el campo laboral al haber ejecutado una o varias obras. El estudiante tiene que tener la mentalidad
de querer saber más, de conocer mucho más de los que le ofrece la escuela profesional, exigir a sus
maestros, y no me cabe duda que estos con mucha alegría responderán a las exigencias de sus
estudiantes.

Como conclusión llegue que está en cada uno si ser competente o no en la carrera de arquitectura,
si es competitivo o no, y si tiene la devoción y el afán de llegar a ser grande en este mundo lleno de
muy buenos arquitectos que están o que están a punto de salir afuera, al mundo de verdad, y de
esta manera proyectar como es la escuela profesional de arquitectura de donde uno vino; tu alma
mater después de todo.