Universidad Distrital Francisco José de Caldas

Diego Alejandro Millán Riveros

Cod: 20172015043

Lo pequeño es hermoso

En la sociedad moderna en la que vivimos hoy en día se ha pensado que el problema de

producción está resuelto debido a la cantidad de nueva tecnología y ciencia que ha llegado a
nuestras vidas, pero realmente está resuelto? La respuesta es que no, puesto que cada día
dependemos más de los bienes que le pertenecen a la naturaleza. Cada creación necesita de más
materiales naturales, nos creemos superiores, dueños y amos del medio cuando realmente somos
intrusos e incluso compañeros de este, pero ese aire de altivez que se ha creado con el paso del
tiempo nos lleva a cada día hacer menos a la naturaleza en una pelea que se pierde ganándola,
pues si vencemos al medio nos vencemos a nosotros mismos que pertenecemos a él, a lo que
vamos es que esta economía progresista cree que los problemas no existen debido a los nuevos
inventos pero nos está llevando más cerca del fin creyendo que somos superiores a la naturaleza
que tanto nos ha dado y que todos esos inventos le pertenecen a ella, así mismo lo hacemos con
nuestros compañeros, con nuestra gente y eso ha desencadenado la necesidad de tener a alguien
a la cabeza de todo, pero la discusión es por qué alguien tiene tanto y otros tan poco?, es justo
este mundo?, es justa esta gente?. La sociedad enceguecida por las riquezas y el poder llevan su
consumismo a otro límite, donde una pequeña parte del mundo consume mucho más que le resto
de este. Es en este punto donde existe el problema, puesto que el dinero se ha convertido en el
oxígeno a respirar, el que tiene dinero, lo tiene todo, el dinero nunca se va a acabar, los recursos
si, y sin recursos no hay dinero, es en este momento donde la paz es la solución indicada, donde
todos tengan lo necesario para vivir y vivir bien, aunque lo “necesario” sea un término tan amplio
y tan relativo para todos, pues alguien que vive entre lujos cómo podrá definir su saciedad si está
bien con lo que tiene, por otro lado alguien con muy poco tan solo con algo más sienta que ya es
suficiente.

Es en este momento donde debemos pensar en nosotros y en el medio ambiente, ver al de al lado
como parte nuestra, ver al medio ambiente parte de nuestro ser igualmente, sólo de esta manera
podremos llegar más lejos y frenar ese final acelerado que cada vez está más cerca, empezar a
pensar en lo que pueda necesitar el otro y lo que ya es suficiente para mí, dándole un respiro a
este planeta en vía de extinción a manos de un ser sin alma y poseído por un demonio llamado
poder y avaricia, que seguramente no parará hasta que no quede nada.