Ejemplos de Conducción de Calor

La conducción es uno de los tres procesos a través del cual se transfiere el calor de un cuerpo
con mayor temperatura a un cuerpo con menor temperatura. Este proceso se refiere a la
transmisión de energía calórica a través de las moléculas de cuerpo, la cual se puede presentar
en estado sólido, líquido o gaseoso.

En la conducción no existe un desplazamiento real de las partículas de energía calórica, sino

que estas se agitan y se propagan a través del cuerpo. La transferencia por conducción es
invisible: una herramienta de metal se calienta al entrar en contacto con el fuego sin que se
observen cambios en esta.

La conducción es una transferencia de calor que se da de un cuerpo con mayor temperatura a

un cuerpo con menor temperatura.

Cuando el hielo se derrite, se trata de conducción. Si calentamos nuestras manos sosteniendo

una taza de café, también es conducción. Cuando planchamos ropa, interviene la conducción
del calor. Incluso cuando nos quemamos con una llama, sucede debido a la transferencia de
calor por conducción.