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10 Maneras Efectivas para Cambiar

los Acordes Fácilmente

Para la mayoría de quienes tocan la guitarra y se encuentran en la etapa de ser

principiantes, el objetivo primordial es lograr tocar una canción de manera ágil.
Para ello solo necesitan algunas cosas además de su guitarra: Tres o cuatro
acordes, un patrón de rasgueo y una transición suave de acordes. Esta última sin
duda es la parte más difícil.
El cambio de acordes mientras se mantiene un patrón de ritmo constante es el
mayor desafío en el camino de cualquier guitarrista principiante. A menudo
requiere de una lucha y trabajo duro hacer la transición de manera imperceptible y
casi se siente como que es algo que no se puede hacer, pero nada podría estar
más lejos de la realidad. Una transición de cambio de acordes sin dificultades
toma tiempo y esfuerzo, pero con los consejos y trucos que vas a leer a
continuación, vas a llegar allí mucho más rápido de lo que piensas.
Aquí  te dejo 10 consejos eficaces para lograr una transición de acordes perfecta:

1. Trabajar en los acordes

Antes de comenzar a cambiar de acordes, hay que poner atención en el
perfeccionamiento de la presión sobre las cuerdas y el movimiento. Puedes
comenzar por aprender los 8 acordes que todos los principiantes deben conocer,
trabajar en cada acorde por separado, visualiza la forma del acorde en  las
cuerdas, coloca tus dedos, muevelos y colocalos en la misma posición
nuevamente al menos 10 veces. Prueba con un acorde diferente cada vez que
practiques.

 2. Visualiza
No levantes un dedo antes de saber dónde colocar los dedos en el siguiente

acorde, para  explicarme mejor, hay que

tener una idea clara en tu mente de cómo está posicionado cada dedo en el
siguiente acorde. Es un consejo de muchos guitarristas consumados que la
visualización es una de las claves para tener mejoras importantes en la guitarra.

3. Relájate
Asegúrate de relajar tus dedos  en el momento de pasar al siguiente acorde,
también relaja el cuello y los hombros (no levantes los hombros). Evita o libera
cualquier tensión en los brazos, muñecas, manos y dedos.

4. Realiza los movimientos lentamente

Mantén el  movimiento de los dedos a un mínimo de velocidad, colocados tan
cerca de las cuerdas como sea posible cuando estás cambiando los acordes.
Cuanto menos se tienen que mover los dedos, más rápido se puede hacer el
cambio.

5. Ve poco a poco
Practica cada cambio de acorde lentamente y no te precipites, en cada cambio
tienes que ser capaz de observar los dedos y ver a dónde van y cómo se está
moviendo al siguiente acorde, de esta manera puedes analizar tus movimientos y
aprender de lo que ves.

6. Haz uso de los dedos pivote

 Cuando desees cambiar entre dos
acordes a menudo hay un dedo que estos acordes tienen en común. Este dedo se
puede dejar en la misma cuerda y traste, no se necesita abandonar la cuerda
cuando se está moviendo al siguiente acorde. Esto es lo que llamamos el dedo de
pivote, pues servirá de apoyo mientras se mueven los otros dedos alrededor de él
y en la posición correcta del siguiente acorde. Por ejemplo, si se pasa de “C” a
“Am” se puede ver que hay dos dedos que no tendrán que salir de las cuerdas.
Sólo se tiene que mover un dedo.

7. Entrena tu memoria muscular

Este es un gran ejercicio. Toca un acorde y rasguea una vez, levanta los dedos de
las cuerdas mientras se mantiene la forma del acorde.. Ahora coloca los dedos de
nuevo en las cuerdas y rasguea otra vez, quitalos y vuelvelos a poner. Puedes
practicar esto por un par de minutos antes de probar con un acorde diferente.

8. Patrón de rasgueo básico

Una vez que hayas practicado los acordes a fondo y puedas colocar tus dedos
sobre las cuerdas casi al mismo tiempo, es el momento de añadir un patrón de
rasgueo básico.
Puedes comenzar con el siguiente patrón básico rasgueo y tocar con calma:
Acorde C: abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba
Am acorde: abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba
Acorde C : abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba
Acorde Am: abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba-abajo-arriba
Sigue el patrón de rasgueo descrito arriba como si fuera un ejercicio, en el último
rasgueo ascendente del acorde C, cambia de acorde a Am, después vuelve a C.
Intenta mantener el  patrón de rasgueo a un ritmo lento pero constante hasta el
final.
Una vez que te sientas cómodo tocando esta transición, puedes tratar con acordes
más desafiantes, como C a Em o D a G. Los mismos principios se aplican a todos
los cambios de acordes. La idea es que practiques el cambio de acordes durante
unos minutos y varias veces al día.
También puedes probar un patrón de rasgueo más complicado cuando sea el
momento, inicia lento y no te apresures, lo importante es mantener la observación
de los dedos mientras se está haciendo el cambio de un acorde a otro para que
puedas aprender y mejorar en lo que observes que es posible.

9.  Mantén el ritmo
Es necesario mantener el patrón de rasgueo a un ritmo lento y constante, además
de la fuerza de los dedos en la otra mano para hacer el cambio al  siguiente
acorde mientras se mantiene el ritmo constante. No te detengas en el rasgueo,

hay  que entrenarse para hacer  las dos

acciones (rasgueo y  conmutación) de forma simultánea. Una vez más, es
necesario tocar de manera lenta para tener tiempo de pensar en lo que estás
haciendo, la velocidad viene después.

10. Practica diariamente

La repetición es la clave para mejorar en cualquier ámbito. La práctica diaria y bien
enfocada es necesaria para lograr que la transición de acordes sea perfecta. Se
paciente, se necesita algún tiempo para conseguir que tus dedos estén listos para
llegar ahí. Y cuando esto suceda te sentirás mejor que nunca. ¡Disfruta el proceso!
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¡Que te diviertas!