con el Director de la obra y con el escenógrafo, vestuarista y/o maquillador, además de la asistencia a los ensayos generales, el iluminador tendrá una idea acabada de lo que se pretende con respecto a los climas que debe tener la obra, así como de sus zonas puntuales de actuación, y realce del espacio escénico. Ahora podrá confeccionar la planta de luces. Para confeccionar la planta de luces, deberá contar con la planta y/o cortes del espacio escénico, dónde estarán graficados todos los elementos escénicos: -Panorama, bambalinas, patas, barrales para iluminación (frontales y laterales) y ubicación de la escenografía ( de ser necesario, por actos). Sobre estos croquis, se ubicarán tentativamente los proyectores de acuerdo a cada necesidad escénica y, en lo posible, dirección, ángulo y color de cada artefacto. Una vez completado este paso, se confeccionarán las planillas con toda la información necesaria para su operación, constando en la misma todos los datos referentes a: -Tipo de reflector y potencia. -Número de canal o dimer. -Número de rack. -Color. -Ángulo de trabajo (ubicación de la consola) -Ubicación artefacto. Luego de ésto, se comienza con el direccionamiento de las luminarias, así como la colocación de los filtros, junto con el armado de la escenografía, fondos, patas, etc. A medida que se vayan armando cada uno de los efectos unitarios y correlativos (plan) que forman la escena, se irán registrando en una consola de operación de luces (en caso de contar con una consola computarizada). En caso de contar con una consola analógica, ésta información se volcará en una planilla dónde constará: -Número de canal o dimer a programar manualmente, con su correspondiente graduación o porcentaje. -La operación manual a realizar (fusión-blackout- tiempos) Ahora sí, ya se puede comenzar con los ensayos técnicos generales y durante el transcurso de los mismos, se irán ajustando todos los detalles concernientes a la puesta de luces, hasta tener el visto bueno del Director de la obra.