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De México
Facultad de Ingeniería
Ensayo I
El hombre en busca de sentido
Semestre 2021-1
Chilpancingo, Guerrero;
Martes 17 de noviembre de 2020
Introducción
El hombre en busca de sentido, escrito por el austriaco Viktor Frankl quien fue neurólogo y
psiquiatra. Viktor Frankl, en esta obra estremecedora relata la superación que él vivió en el
holocausto; esto influyo en su vida y en su estilo de terapia psicológica: la logoterapia. Con
este tipo de terapia lo que se busca es ayudar a las personas a encontrar su sentido de vida
a través de una causa, de dedicándose a una persona y/o vivir una experiencia de
sufrimiento. Frank es lo que vivió en los campos junto con otras personas y el observo o
experimento que a través de un sentido no se dejaron vencer aun en esas terribles escenas.
El hombre en busca de sentido es una obra cruda y real, sin embargo, destaca por buscar no
ser un relato más sobre la segunda guerra mundial, del cual menciona ya hay suficiente
literatura, sino que busca tener un enfoque psicológico en base a las vivencias de Frankl y
de todos que aquellos no tan famosos, aquellos que no tuvieron protagonismo y que fueron
olvidados entre las cenizas de aquellas cámaras de cremación. Viktor comenta que las
verdaderas atrocidades ocurrieron en los campos pequeños, y no en aquellos campos
famosos que todo el mundo conoce.
Por lo que se nos menciona en la historia, en el cine o en obras como el diario de Ana Frank,
sabemos una pequeña parte de las atrocidades que se vivió en los campos de concentración
antes y durante la segunda guerra mundial, en donde lamentablemente, los campos dejaron
un saldo de aproximadamente 11 millones de muertes; sin importar edad o sexo.
Al principio de mi lectura, lo admito, creí que seria un libro aburrido y tedioso, pero conforme
iba avanzando despertaba más interés, me fue envolviendo y me dejaba atónito en capítulos
que como lector sabíamos lo que pasaría, pero el autor debido a que desconocía en un
principio lo que pasaba dentro de los campos actuaba de forma inocente y eso fue lo que le
dio un poco más de peculiaridad al escrito, con esto hizo que me quedara muy atento a lo
que pasaría posteriormente y mas en las partes de selección de prisioneros, que jugaba con
nuestra imaginación y me enviciaba mas y más a la lectura.
Yo creo que esta obra fue muy digna para ser escrita, y eso que el autor en un principio tenia
la idea de que seria un fracaso, pero ahora creo yo que es un libro muy conocido en todas
partes del mundo.
Este ensayo lo desarrollare enfatizando los capítulos que mas llamativos se me hicieron,
todos tienen su esencia, pero optare a hacerlo más general.
Desarrollo
Desde el punto de vista del autor, describe la forma de como el y sus compañeros vivieron
las tres fases en el campo de concentración: la primera es el internamiento en el campo, la
segunda, que es la mas larga narra la vida en el campo y la tercera y última es después de la
liberación por parte de soldados norteamericanos.
El intento por expresar las vivencias de los horrores vividos en un campo de concentración,
relatados por un sobreviviente, cuestionándose por el sock psicológico que poseía cada uno
de los sobrevivientes. En las palabras de Frankl, en su relato busca hablar de aquellos seres
que fueron olvidados, y no centrarse en los personajes que no pasaron hambre, aquellos
llamados capos (prisioneros que llegaron a gozar de privilegios a cambio de manchar la
integridad de otros), sin embargo, yo pienso que aun así seguían siendo prisioneros y en
realidad, todos estaban inertes.
Para aquellos que no estuvimos en un campo de concentración, nos sería imposible
comprender el sentimiento de los que aquí pasaron parte de su vida o culmino ahí, nosotros
los veríamos, tal vez con cierto nivel de compasión, para ellos era una terrible sensación sin
fin el querer sobrevivir; yo que no lo viví (solo lo viví en la lectura) sentía demasiada
inquietud, ansiedad y/o angustia el nuevo amanecer, pues era una moneda al aire sobre si
se viviría un día más o no y a cada rato me ponía los nervios de punta por que el destino del
prisionero colgaba del más delgado hilo, que con una sola decisión errónea podías perder la
vida. Se seleccionaban a los más débiles para enviar a las cámaras de gas y a los
crematorios. Había manera, según relata Frankl, de eliminar el nombre de alguien de la lista
para enviarse a su condena, sin embargo, una vida solo se paga con otra vida. El número de
traslados no podía verse modificado, por lo que para salvarle la vida a un recluso se debía,
ya sea por error o a conciencia sustituir con otro.
A todos se les despojaba de sus pertenencias, por lo que muchos aprovecharon esta
situación para hacerse de otra identidad, en este punto cabe mencionar que muchos de los
reclusos pedían no ser despojados de sus pertenencias, como si aún no se dieran cuenta de
la situación real en la que estaban; por otra parte, Frankl intento suplicar por un manuscrito,
en el que había trabajado toda su vida y era de suma importancia para él, por ende no quería
ser despojado, ahí fue cuando se dio cuenta de que se había convertido en otra cosa sino en
solamente un cuerpo desnudo, sin ningún otro valor y sentido. A los guardias no les
interesaba si los prisioneros eran gente de bien, si eran doctores, carpinteros, funcionarios,
vaya, su posición dentro de la sociedad, a ellos solo les interesaba el número de prisionero
que poseían. El número que le asignaron a Frankl fue el 119,104, un dato interesante ya que
Frankl se había convencido a si mismo de publicar el libro bajo el anonimato de su número
de recluso, pero después sus amigos lo disuadieron de ello.
En la primera parte del libro narro los datos anteriores, además menciono otros aspectos que
no pueden pasar desapercibido ya que de esa manera podemos comprender, aunque sea
una mínima parte de la angustia que vivió el autor. Narro que fue llevado a Auschwitz, que
para llegar ahí fue una escena muy tensa pues menciona dice que a los prisioneros los
seleccionaban para ver cuales irían directo a las cámaras de gas o para ser incinerados y la
otra parte de la selección era para que los prisioneros entraran a grandes jornadas de trabajo
extremadamente pesada y en condiciones miserables. Otro aspecto que recuerda él, es que
los prisioneros por su desesperación decidían suicidarse, que el método mas popular era el
de lanzarse a la alambrada electrificada.
Después del impacto emocional de la primera fase, venía una segunda etapa (que se vivió
en el campo de concentración) de apatía generalizada donde llegaba una muerte emocional
ante el sufrimiento continuo que uno presenciaba todos los días. En pocos días, la
personalidad del interno se transformaba por completo y dejaba de experimentar
sentimientos como la repugnancia, la piedad, la indignación o el horror. El propio Frankl
cuenta cómo pasó algún tiempo en el barracón de los enfermos y vio cómo allí moría
demasiada gente y él sin sentir la menor conmoción interior, era como si se fuera
acostumbrando al nuevo ambiente en el que vivía. Y me parece sorprendente porque el
describe que escuchaba gritos, veía que los niños eran golpeados brutalmente, observaba
montones de cuerpos sin vida y él y sus compañeros ya eran indiferentes a esas escenas.
Aun no me imagino como habrá sentido Frankl, ya que era una persona sumamente
preparada, era medico neurólogo y psiquiatra y para llegar a tal grado de estudios me parece
que no fue nada fácil y no lo consiguió en poco tiempo, es por ello que me parece muy
condenante el hecho de que trabajara duras jornadas de trabajo todos los días cavando y
poniendo traviesas para la construcción de un ferrocarril. Al final, en forma de recompensa, si
se le puede llamar así, recibía cupones donde el autor explica que un cupón valía seis
cigarrillos, estos eran de gran utilidad dentro de la concentración para intercambiar por otros
productos, en general comida, ya que su dieta de día a día era paupérrima llegando a ser un
plato de sopa y un pan en un solo día. Un recluso no usaba los cigarrillos para fumarlos y el
que llegaba a fumarlos se tomaban como un mal presagio, Frankl como psicólogo, sabía que
simbolizaba la perdida de toda lucha para sobrevivir, representaba de que toda aquella
esperanza por liberarse de aquel infierno había terminado, el recluso disfrutaba lo último que
le quedaba a modo de aceptación de su muerte.
Frankl habla sobre el proceso de adaptación que los reclusos vivieron, el cambio de hábitos
de sueño, cuestionando la idea de que no se debía dormir como escribían los libros de
medicina, menciona la capacidad sorprendente que tiene el hombre para adaptarse
prácticamente a cualquier cosa; por ejemplo, la carencia vitamínica, la falta de higiene, el
mal tratamiento de sus enfermedades, la mala vestimenta (me sorprendió en este punto
porque cuenta que una camisa y un pantalón le duraba todo un año), la mala alimentación, la
sobreexplotación, entre otros factores; y es ahí que concluye de que el hombre puede
acostumbrarse a lo que sea, pero no hay que preguntar como lo hace.
Desde el punto de vista del psicoanálisis, la ausencia del deseo sexual manifestaba
totalmente la situación tan nefasta en la que se encontraban, no había pensamiento humano
más allá del deseo de sobrevivir. Aun así, había reclusos que se las ingeniaban para darse
un espacio para sus oraciones, en el campo era posible realizar una vida espiritual, cuando
todo queda perdido queda el amor. Estas personas se aferraban a la idea de su Dios, de su
esposa, sus hijos, a la persona que más amaban. La salvación del hombre estaba presente
en el amor. El amor trasciende la persona física, trasciende su significado en su propio
espíritu, en su yo íntimo, había vida interior dentro de los prisioneros, la situación en la que
estaban a algunos les hacía apreciar la belleza del arte o de la naturaleza como nunca antes
lo habían hecho. También en el campo había sentido del humor, aunque fuera por pequeños
momentos y fueran demasiado fugaces. Sentimientos aparecían, como el hecho de que
alguien te despiojara, se añoraba la intimidad, un sentimiento constante era la irritabilidad,
debido a las escenas que presenciaban a diario, el impulso hacia la violencia había
aumentado.
En el campo de concentración existía la psicoterapia, la cual consistía en evitar el mayor
número de suicidios, pero sucedía lo contrario en el campo de concentración, estaba
prohibido cortar la soga de un hombre que intentaba ahorcarse, el autor narra la historia de
dos hombres con una historia de suicidio frustrado: hace referencia sobre la decepción de la
vida; la terapia les daba a entender que todavía la vida esperaba algo de ellos. A uno de ellos
le esperaba un hijo en el extranjero y al otro, la vida lo esperaba a que terminara una obra, ya
que solo él la podía culminar, pues el personaje era un científico que había iniciado una
colección de libros por publicar. Viktor Frankl nos explica que lo que hicieron fue una
equivocación ya que el hombre consiente es capaz de entender que aún existe otra persona
esperando con todo su corazón a su semejante y que si una obra esta inconclusa, no puedes
rendirte y tirar todo a la basura. Si comprendes el porqué de tu existencia serás capaz de
soportar casi cualquier obstáculo con el solo propósito de ver realizado tu sueño y solo así
lograras vivir tu entorno de la manera más humanamente posible.
En la tercera fase, creo yo que Frankl se centra en analizar la psicología del prisionero que
se ha puesto en liberación. Al levantarse la bandera blanca, lo cual prosiguió inmediatamente
con la relajación de todos los reclusos. Para este punto los prisioneros no terminaban de
creerse aun lo que estaba sucediendo, era como si fuese un sueño y tuvieran miedo de
despertar solo para verse atrapados en ese infierno de nueva cuenta. La libertad fuera de los
campos no provocaba ninguna sensación de alegría, tal vez se decían a si mismos que eran
muy afortunados el haber salido con vida, pero no tenían ninguna garantía de volver a ver a
sus seres queridos. Tal vez ya no sentían algún daño físico, pero psicológicamente estaban
muy vulnerables y sentían que ya no podían superar los sucedidos, que ya no podrían
recuperar la vida que tenían. Aquí Frankl les explica sobre la despersonalización que los
prisioneros estaban pasando, todo parecía irreal, tenían miedo de que lo que les pasaba
fuera mentira. Considerando todas estas variables cabe mencionar que la mentalidad de
estos individuos, de manera clara, tenían un gran riesgo de querer reproducir la brutalidad
que habían experimentado, había cierta deformidad moral, el carácter se veía modificado por
la amargura y la desilusión que sentían al volver a su antigua vida, es por ello que se sentían
con el derecho de hacer daño o tener comportamientos violentos en su ambiente, pero Frankl
no tenia esa idea errónea, para él, nadie tenia derecho de comportarse con crueldad haya lo
haya vivido. Y es que si se desquitaban con el mundo no les devolvería la dignidad vivida en
los campos y solo ocasionarían aun mas daño a la sociedad.
Creo yo, que una de las frases inmortales de su libro es mencionada en la tercera fase y
dice: “No importa realmente lo que esperamos de la vida, sino lo que la vida espera de
nosotros”; nos quiere decir que es mejor pensar en que podemos aportar a la vida, que es lo
que puedo ofrecer y no tener la idea errónea de pensar que es lo que tiene la vida para
nosotros.
En la lectura de la ultima fase hay una parte dolorosa en la que el autor le menciona a su
amigo su ultima voluntad que consiste en que se lo aprendiera de memoria si en dado caso
no llegara vivo a su hogar; fueron las siguientes palabras conmovedoras hacia su mujer
“Otto, escucha, en caso de que yo no regrese a casa junto a mi mujer y en caso de que la
vuelvas a ver, dile que yo hablaba de ella a diario, continuamente. Recuérdalo. En segundo
lugar, que la he amado más que a nadie. En tercer lugar, que el breve tiempo que estuve
casado con ella tiene más valor que nada, que pesa en mí más incluso que todo lo que
hemos pasado aquí” este sentimiento que el autor compartió me angustio y me conmovió,
nunca he estado en esa situación, pero me imagino que se ha de sentir horroroso pensar en
tu muerte y ya nunca volver a tus seres queridos.
Frankl se cuestionaba como era posible que los soldados del SS tenían tanta crueldad y
amargura en su ser, no comprendía el porque de sus actitudes, aunque tal vez existe, según
él, esas personas se encuentran en todas partes, en cualquier grupo social o en cualquier
lugar del mundo, y se trataban de individuos que eran despiadados por el placer de ver el
mundo arder, y para ellos ese era su sentido de la vida.
Después de la liberación, los prisioneros no concebían como fue y como vivieron la
experiencia en el campo de concentración y eran incapaces de comprender como habían
soportado todo lo que habían vivido; al final, concluye Viktor Frankl que el prisionero que
llego a su hogar tenía la magnífica sensación de que, después de todo lo que había sufrido,
ya no había nada más a que temerle.
Conclusión
El hombre en busca de sentido es un libro que contiene diversas enseñanzas y creo que el
principal objetivo del autor no era describir a detalle como era la vida en un campo de
concentración; si no un análisis mas profundo en donde nos demuestra que aun en las
peores condiciones vitales era posible tener un sentido a la vida seguir firme por nuestro
honor humano, es tal vez de ahí donde surge la idea de : “ el quien tiene un porque para vivir,
puede soportar cualquier como”, y esto se puede ver en el relato, donde se mencionan a
presos que tiene mas posibilidad de vivir en los campos de exterminio con solo tener una
chispa de volverá ver a algún ser querido, o también un propósito por el cual seguir adelante
como ejemplo tenemos al científico que aun no terminaba sus patentes.
Con este libro puedo decir que para Frankl lo que distingue al hombre de otros seres es la
voluntad del sentido, ósea la meta por encontrar un sentido a la vida, que funciona como un
motor humano para sobrevivir aun sea en las peores condiciones; y a diferencia de otros
psicólogos Frankl nos da a entender que lo que nos mantiene motivados es el sentido que le
demos a la vida y no la voluntad de placer. Este sentido es, además, como dice el autor
diferente de cada persona, del tiempo o de lugar
Otra parte importante que puedo rescatar del libro es que, en la mayoría de las ocasiones
nos sentimos decaídos por diferentes circunstancias, y en esos momentos lo que debemos
hacer es no olvidar nuestro sentido de la vida, preguntarnos el por qué estamos aquí y que
tenemos para ofrecer a la vida y no que tiene la vida para nosotros. También considero que
es muy importante valorar todas las cosas que poseemos actualmente las personas que
vivieron el holocausto o personas que en estos momentos están sufriendo, no hay duda de
que darían lo que fuera por estar en nuestros zapatos. Además, creo yo no debemos de
renegar los problemas que tenemos, pues tal vez nuestros problemas no se comparan a los
que vivió Frankl en el campo.
Considero que este libro no se escribió en vano, es historia de la humanidad y la historia se
escribe para aprender de ella.