Está en la página 1de 2

Formación Religiosa

Reflexión: Quinto dolor y gozo de San José

a) ¿Comprendo que Dios me ha hecho el gran regalo de la libertad para


poder amarle, y que le amo precisamente cuando le obedezco? ¿Me doy
cuenta de la delicadeza de Dios con los hombres que no nos obliga, sino
que nos propone sus planes?

En el quinto dolor y gozo de San José se ve claramente que todo lo que Dios
va poniendo en nuestro camino, todas las puertas que abre o aquellas que
cierra es para nuestro bien, Él es luz en nuestro camino. Somos libres en un
mundo de determinaciones, pero la ley natural siempre va a velar por mi bien,
por el fin al que se nos llama.

Dios nos creó por amor y en ese amor tan grande que nos tiene nos dio la
libertad de elegir, Él me acompaña porque quiere lo mejor para nosotros, sus
hijos, quiere que lleguemos a Él.

b) ¿Procuro llevar a la oración las cosas que Dios me sugiere, sabiendo


que, a veces, la cuestión no está en entender sino en amar?

Nuestra fe es una cuestión de amor, creemos en un Dios que siempre estuvo,


que hizo miles de cosas pero que se escapa a los ojos y a la inteligencia
humana. En el amor esta Él. Aprendí que no solo debo pedir en la oración, sino
que también agradecer, cada cosa que pasa, cada piedra que está en mi
camino o cada puente es por algo, soy agradecido, pongo todo lo bueno y lo no
tan bueno en oración porque sé que allí encontraré la guía.

c) ¿Sé que los santos han entendido más porque han procurado cumplir la
voluntad de Dios, es decir, porque han amado más?

Han amado más porque confiaron ciegamente y realizaron acciones que


condijeron al padre. Capaz nosotras amamos igual pero cosas obnubilan
nuestro camino.

d) ¿Me doy cuenta de que mi vida -mi trabajo, mi descanso, mis amores-
es tan importante que Dios cuenta con ella?

Mac Lean, Agustín


Formación Religiosa

Perfectamente vemos en el Génesis, cuando se habla de la creación que Dios


en el séptimo día se sentó a descansar y contemplar su creación, es necesario
trabajar para dignificarnos, amar a mi familia y hermanos cristianos, pero
sobretodo respetar, en la medida de lo posible, los domingos, que son los días
del señor. Todo en su justo medio es necesario, somos con el otro y en un
mundo de determinaciones

e) ¿Está sirviendo mi vida a los planes de Dios o prefiero realizar el plan


que yo me he forjado para mí?

Estoy seguro que Dios es artífice de cada pensamiento que hay en mi mente,
nunca un plan va a ser absolutamente mío, Él es guía y luz. Yo soy libre pero
bajo su manto.

Mac Lean, Agustín

También podría gustarte