Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Josep Puig
CEO at itbid (www.itbid.com)
La situación de confinamiento, ha obligado a todas las compañías a establecer, en caso que sea
posible, un modelo de trabajo en remoto (“home- office”) que permita seguir manteniendo una
actividad profesional que nos permita afrontar una recuperación con las máximas garantías.
Pero...¿Todas las compañías estaban preparadas para este nuevo escenario? ¿Qué madurez
digital tiene nuestra compañía? ¿Qué importancia tiene una eficiente gestión de nuestra cadena
de suministro, base de proveedores coordinada y función de compras robusta en estos
momentos?
Según varios estudios, noticias y artículos, y en especial el informe realizado por Deloitte
(Escenarios COVID19), después de un periodo de aislamiento y restricciones, las compañías
deberán afrontar una etapa de estabilización progresiva que permita conseguir la
recuperación ya entrados en 2021.
¿Qué prioridades y objetivos básicos serán críticos durante estas dos etapas post-crisis para
nuestra función de compras y cadena de suministro?
Reducir riesgos y cuestionar impacto: Aumento de los modelos de compra con menos
riesgo (y menos margen) e incorporando nuevas condiciones en el cumplimiento. Por
ejemplo, se activa el replanteamiento de nuestras base de proveedores globales vs
locales (“Supply Risk management”)
El modelo de compras de una compañía describe la lógica sobre cómo nuestra organización
crea y captura valor en compras a través de nuestro procesos, actividades, recursos humanos y
herramientas tecnológicas. Una clara definición de nuestro modelo de compras (que todas las
compañías lo poseen, “documentado o no”) permite reflexionar sobre nuestro funcionamiento e
identificar alternativas innovadoras para diferenciarnos de nuestros competidores.
En esta situación, y debido a esta crisis, muchas compañías ya han empezado a modificar su
forma de trabajar y han identificado la necesidad de arrancar un cambio progresivo y ordenado
lo antes posible que permita llevar a cabo la transformación digital de su modelo de compras.
Este proceso de transformación digital no significa únicamente la incorporación de
“tecnología” a nuestros procedimientos actuales, sino que requiere un cuestionamiento y
reflexión sobre todas nuestras actividades, promocionar nuevas habilidades que tenemos pero
que no estábamos utilizando en nuestros puestos de trabajo, formas diferentes y más ágiles de
trabajar en modelos colaborativos y flexibles.
Este proyecto de transformación digital e inversión tecnológica para compras, que en muchas
compañías se planteaba como un proyecto más y una alternativa de mejora con retornos de
largo plazo, es hoy una prioridad necesaria si se quiere seguir dando un servicio óptimo y de
calidad al resto de áreas de la Organización.
¿Cómo afrontamos nuestro proyecto de digitalización en compras? ¿Cuáles son los pilares de
dicha transformación?
Digitalizar nuestro modelo de compras no debe generarnos pánico, ni debe afrontarse como un
proyecto traumático que incorpore mayor preocupación a la situación de recuperación de
nuestra compañía. Este proceso de transformación digital debe afrontarse de forma progresiva,
priorizando las actividades más ineficientes y estableciendo un equipo flexible y colaborador
con objetivos asequibles de corto.
La formación es clave y debe ser “continua” para asegurar un buen encaje de todos los perfiles
de nuestra organización en nuestro nuevo modelo de compras. La buena noticia sobre la
formación es que actualmente (y la crisis del COVID-19 lo ha acelerado y potenciado) es
asequible a través de diferentes plataformas colaborativas (gratuitas o con costes muy
ajustados) y puede complementarse con los foros de discusión especializados donde
conseguiremos enriquecernos profesionalmente.
Modelo tecnológico: Uno de los pilares fundamentales que permitirá afrontar con éxito el
proceso de transformación digital en compras es sin duda, la implementación de tecnologías
eficaces y altamente usables que permitan garantizar una mejor colaboración entre nuestro
equipo de compras, el resto de departamentos de nuestra compañía, nuestros colaboradores y
toda nuestra base de proveedores.
Para una implantación con éxito, es imprescindible tener en cuenta ciertos aspectos para una
“optima” y “racional” selección de nuestra plataforma de compras:
Llegados a este punto, y después de este análisis, es evidente que la necesidad de digitalizar
nuestro modelo de compras ya no es una alternativa y debe aprovecharse el cambio en la forma
de trabajar que nos ha impuesto esta crisis para canalizar un proyecto progresivo de
transformación digital en gestión de proveedores y las actividades de compras.