Materia Anatomía del sistema nervioso Facilitadora Lucy Cedano Matricula 2020-02218 Sección 205 .Elabora un ensayo sobre la corteza cerebral y las funciones intelectuales del cerebro. La corteza cerebral es la parte más nueva (evolutivamente) y la más grande del cerebro. Es aquí donde ocurre la percepción, la imaginación, el pensamiento, el juicio y la decisión. Es la región más grande del cerebro de los mamíferos y desempeña un papel clave en la memoria, la atención, la percepción, la cognición, la conciencia, el pensamiento, el lenguaje y la conciencia. Partes y funciones de la corteza cerebral Algunos surcos son bastante pronunciados y largos y se usan como límites convenidos entre las cuatro áreas del cerebro llamados lóbulos. La parte delantera más alejada se llama lóbulo frontal. Este parece ser especialmente importante: este lóbulo es el responsable de los movimientos voluntarios y la planificación y se piensa que es el lóbulo más importante para la personalidad y la inteligencia. En la parte posterior del lóbulo frontal, a lo largo del surco que lo separa del lóbulo parietal, existe un área llamada córtex motor. En estudios con pacientes que estaban recibiendo cirugía en el cerebro, la estimulación de áreas del córtex motor con pequeñas descargas eléctricas causaba movimientos. Ha sido posible para los investigadores realizar un mapa de nuestro córtex motor bastante preciso. Las partes más bajas del córtex motor, cercanas a las sienes, controlan los músculos de la boca y la cara. Las partes del córtex motor cercanas a la parte superior de la cabeza controlan las piernas y los pies. Bajo los lóbulos frontales está el lóbulo parietal (que en latín significa "pared"). Este incluye un área llamada córtex somatosensorial, justo debajo del surco que separa este lóbulo del lóbulo frontal. De nuevo, los médicos estimularon los puntos de esta área encontrando que sus pacientes describían sensaciones como si les tocasen en varias partes de su cuerpo. Al igual que con el córtex motor, se puede trazar un mapa del córtex somatosensorial, con la boca y la cara cercana a las sienes y las piernas y pies en la parte superior de la cabeza. Junto a la cabeza está el lóbulo temporal (es el término en latín para "sienes"). El área especial del lóbulo temporal es el córtex auditivo. Como su nombre indica, esta área está íntimamente conectada con los oídos y especializada en el oído. Se localiza cerca de las conexiones de lo lóbulo temporal con los lóbulos parietal y frontal. En la parte trasera de la cabeza está el lóbulo occipital. En la parte trasera del lóbulo occipital está el córtex visual, la cual recibe información desde los ojos y se especializa, por supuesto, en la visión. Las áreas de los lóbulos que no están especializadas se llaman córtex de asociación. Además de conectar las cortezas sensorial y motora, se piensa que esta es también el lugar donde nuestros procesos de pensamiento ocurren y muchas de nuestras memorias son finalmente almacenadas.
Las partes principales de la corteza cerebral
Capas de la corteza cerebral
Son 6 las capas de la corteza cerebral, seguidamente, vamos a explicar cada una ellas, ordenadas desde la superficie hacia el interior de la misma: 1. Capa molecular: también llamada capa plexiforme, es la capa más superficial de la corteza cerebral. Se trata de una capa sináptica compuesta por una densa red de fibras nerviosas, las cuales derivan de dendritas de células piramidales y fusiformes, los axones de las células de Martinotti y estrelladas. Al ser la capa más externa, en ella, se establecen muchas sinapsis entre neuronas. 2. Capa granular externa: se localiza por debajo de la capa molecular y, en ella, se encuentran muchas pequeñas células estrelladas y piramidales. Las dendritas de las células y los axones se infiltran hacia capas más profundas, por lo que esta capa está interconectada con las distintas partes del córtex. 3. Capa piramidal externa: está formada por células piramidales y tiene una forma irregular con un tamaño que va aumentando desde la superficie hasta la parte más profunda. Las células piramidales dirigen sus axones hacia otras partes de la corteza en forma de fibras de proyección, asociación o comisurales. 4. Capa granular interna: la componen las células estrelladas, las cuales se disponen de manera compacta. Posee la banda externa de Baillarger, que son unas fibras ordenadas de forma horizontal. 5. Capa piramidal interna: llamada capa ganglionar, posee células piramidales de tamaño mediano y grande. Posee una gran cantidad también de fibras ordenadas de manera horizontal, las cuales componen la llamada banda interna de Baillarger. 6. Capa multiforme o polimórfica: está formada por células fusiformes y también posee células piramidales modificadas, las cuales cuentas con un cuerpo triangular u ovoide. Las fibras nerviosas de esta capa de la corteza cerebral ingresan en la sustancia blanca subyacente conectando con las regiones intermedias. Las células fusiformes derivan la información hacia la corteza, el tálamo y los núcleos estriados. Las funciones intelectuales del cerebro. El cerebro procesa la información sensorial, tanto la visual como la táctil, auditiva y olfatoria. Las áreas motoras controlan y coordinan el movimiento, mientras que las áreas de asociación son las responsables de funciones complejas como la memoria y el razonamiento. Los ganglios basales actúan en la coordinación del movimiento, mientras que el sistema límbico es responsable de las respuestas emocionales. Aunque ciertas zonas del cerebro se encargan de determinadas funciones, se trata de un sistema con alto grado de integración que se relaciona además con otras partes del encéfalo como el cerebelo encargado de coordinar secuencias complejas de movimientos iniciados por las áreas motoras y el tronco del encéfalo. Función motora La función motora del cerebro se lleva a cabo principalmente a través de la vía piramidal o corticoespinal, un grupo de fibras nerviosas que parten de neuronas situadas en la corteza motora primaria situada en la parte posterior del lóbulo frontal y terminan en el asta anterior de la médula espinal, donde enlazan con una segunda neurona de la que parten axones que confluyen en los diferentes nervios motores que hacen posible el control voluntario de la musculatura de todo el cuerpo. La vía piramidal se cruza en la base del tronco del cerebro, en la llamada decusación de las pirámides, de tal forma que las fibras provenientes del hemisferio cerebral derecho controlan los músculos de la mitad izquierda y las del hemisferio cerebral izquierdo la mitad derecha. Esta vía es de gran importancia pues es la que permite realizar los movimientos necesarios para la mayor parte de las funciones vitales, entre ellas desplazarse, hablar, masticar, etc. Si se lesiona la vía piramidal se produce parálisis de los músculos correspondientes. Percepción del dolor El dolor se define como una experiencia sensorial y emocional desagradable relacionada con un daño tisular real o potencial. Tiene la función de aviso o advertencia para informar de un peligro que se debe evitar, previniendo de esta forma lesiones más graves. La sensación de dolor se inicia en determinados receptores situados en los tejidos que reciben el nombre de nociceptores y son sensibles al daño tisular. Los impulsos nerviosos generados por estos receptores llegan a través de los nervios sensitivos hasta la posterior de la médula espinal, desde donde suben a través de un haz de fibras nerviosas llamado espino talámico hasta alcanzar el encéfalo. Llegan primero a la región del tálamo, desde donde alcanzan la corteza sensitiva del lóbulo temporal que es donde la señal se procesa y la sensación de dolor se hace consciente. Existen diferentes enfermedades de origen congénito en las que las personas afectadas son incapaces de percibir el dolor. Este grupo de trastornos se conoce genéricamente como insensibilidad congénita al dolor, suele acompañarse de falta de sensibilidad a la temperatura y provoca importantes problemas de salud, entre ellos lesiones ósea o en la piel que pasan desapercibidas pues la persona no siente dolor alguno tras traumatismos graves y continua su actividad habitual sin percatarse de que ha sufrido una fractura ósea o una herida. Capacidades cognitivas en los lóbulos parietales se desarrolla el sistema emocional y el sistema valorativo. El sistema emocional – aunque compromete a todo el cerebro, y en retroalimentación, a todo el cuerpo del individuo– se ubica principalmente en el área bastante arcaica llamada sistema límbico, dentro del sistema límbico las dos amígdalas cerebrales, se focalizan las emociones básicas (temor, agresión, placer) que tenemos y que damos cuando algo o alguien interfiere en la actividad que esté haciendo en el exterior. Por otra parte está el sistema valorativo, este es la relación que existe entre los lóbulos prefrontales (que como su nombre lo indica está atrás de la frente) y las amígdalas cerebrales, esa relación "física" se llama hipocampo. Cerebro y lenguaje La gran mayoría de los procesos que permiten el lenguaje se llevan a cabo en diferentes áreas de asociación. Existen dos áreas bien identificadas, las cuales son consideradas vitales para la comunicación humana: el área de Wernicke y el área de Broca. Estas áreas están localizadas en el hemisferio dominante (que es el izquierdo en el 97% de las personas) y son consideradas las más importantes en cuanto a procesamiento de lenguaje. Esta es la razón por la cual el lenguaje es considerado como una función lateralizada, Sin embargo, el hemisferio no dominante también participa en el lenguaje, aunque existen cuestionamientos acerca del nivel de participación de las áreas localizadas en dicho hemisferio. El área de Wernicke, se conoce así en honor al neurólogo que la describió por primera vez. Está especialmente desarrollada en el hemisferio dominante para el lenguaje, que, generalmente suele ser el lado izquierdo. El desarrollo de esta área permite alcanzar niveles altos de comprensión y procesar la mayor parte de las funciones intelectuales del cerebro. Se encarga de la decodificación de lo oído y de la preparación de posibles respuestas. Es importante para la comprensión de palabras y en los discursos significativos. Da paso después al área de Broca, también conocida como el área motora de las palabras, que se conecta con el área de Wernicke mediante el fascículo longitudinal superior. Se ubica en la corteza prefrontal, en la parte anterior de la porción inferior de la corteza motora primaria, cercana a la fisura lateral (FL). En la mayoría de los casos, es dominante en el lado izquierdo del cerebro. Su función es permitir la realización de los patrones motores para la expresión de las palabras, articulando el lenguaje hablado y también el escrito. Es la responsable de la formación de las palabras en la que se activa el accionamiento de los músculos fonadores, es decir laríngeos, respiratorios y de la boca, para asegurar la producción de sonidos articulados, lo que tiene lugar en el área motora primaria, de donde parten las órdenes a los músculos fonadores. Además, se conecta con el área motora suplementaria, que tiene relación con la iniciación del habla. Diferencias funcionales entre hemisferios Aun cuando ambos hemisferios humanos son opuestos, no son la imagen geométrica invertida uno del otro. Desde un punto de vista puramente morfológico son asimétricos. Esta asimetría depende de una pauta de expresión génica también asimétrica durante el desarrollo embrionario del individuo y se ha comprobado que no es exclusiva de la especia humana, pues está presente, aunque en menor grado, en parientes cercanos en la filogenia al humano como puede ser el chimpancé. El estudio de impresiones craneales de antepasados del género Homo tiene entre sus objetivos determinar la presencia o no de asimetría en el telencéfalo, puesto que es un rasgo de aumento de la especialización, de una capacidad cognitiva más compleja. Las diferencias funcionales entre hemisferios son mínimas y solo en algunas pocas áreas se han podido encontrar diferencias en cuanto a funcionamiento, existiendo excepciones en personas que no se observaron diferencias. Se ha dicho que el lenguaje y la lógica (las áreas actualmente más conocidas especializadas en el lenguaje son la Broca y la de Wernicke, aunque al hacer un proceso lingüístico es probable que todo el cerebro esté involucrado —casi indudablemente las áreas de la memoria participan en el proceso del lenguaje—, las áreas de Broca y de Wernicke se encuentran en la mayoría de los individuos en el hemisferio izquierdo; por su parte las áreas más involucradas en la lógica y actividades intelectuales se ubican principalmente en el córtex prefrontal, teniendo quizás las áreas temporales izquierdas gran importancia para procesos de análisis y síntesis como los que permiten hacer cálculos (matemáticos) estas áreas dotan al individuo de mayor capacidad de adaptación al medio, pero con procesos de aprendizaje mucho más dilatados, y como tal más dependientes de sus progenitores durante la etapa de cría.
2.Realiza un dibujo de la corteza cerebral en el que señale
las diversas áreas de asociación. Debes de escanearlo o tomarle una foto subir a plataforma. Bibliografía