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INSTITUTO TECNOLÓGICO URSULO GALVAN

NOMBRE DEL ALUMNO: ELSA ARROYO MENDOZA

ASIGNATURA: AGROQUIMICA

NOMBRE Y NUMERO DE LA ACTIVIDAD: ACTIVIDAD 5. QUIMICA

FECHA DE ENTREGA: 2020/09/28

NOMBRE DEL TITULAR: ALVARO DE YTA CASTILLO


Actividad 5. De los archivos: Cantidades químicas y Reacciones Químicas,
extrae los siguientes conceptos; Mol, Átomo-gramo, Número de Avogadro,
Clasificación de las reacciones químicas, Combustión, Combinación
(síntesis), Descomposición, Sustitución simple y Sustitución doble. Incluye
ejemplos con sus explicaciones.

MOL

El mol (símbolo: mol) es la unidad con que se mide la cantidad de sustancia, una
de las siete magnitudes físicas fundamentales del Sistema Internacional de
Unidades.

En cualquier sustancia (elemento o compuesto químico) y considerando a la vez


un cierto tipo de entidades elementales que la componen, el mol, símbolo mol, es
la unidad SI de cantidad de sustancia. Un mol contiene exactamente 6,022 140 76
× 10^23 entidades elementales. Esta cifra es el valor numérico fijo de la constante
de Avogadro, cuando se expresa en la unidad mol-1, y se denomina número de
Avogadro.

La cantidad de sustancia, símbolo n, de un sistema, es una medida del número de


entidades elementales especificadas. Una entidad elemental puede ser un átomo,
una molécula, un ion, un electrón, cualquier otra partícula o grupo especificado de
partículas. Como consecuencia de la definición del mol, la constante de Avogadro
y el número de Avogadro ya no tienen una incertidumbre experimental en el SI.

Antes del 2019, un mol se definía como la cantidad de esa sustancia que contiene
tantas entidades elementales del tipo considerado como átomos hay en doce
gramos de carbono-12. Esta definición no aclara a qué se refiere cantidad de
sustancia y su interpretación es motivo de debates,2 aunque normalmente se da
por hecho que se refiere al número de entidades, como parece confirmar la
propuesta de que a partir de 2011 la definición se basa directamente en el número
de Avogadro (de modo similar a como se define el metro a partir de la velocidad
de la luz).

El número de unidades elementales —átomos, moléculas, iones, fotones,


electrones, radicales u otras partículas o grupos específicos de estas— existentes
en un mol de sustancia es, por definición, una constante que no depende del
material ni del tipo de partícula considerado.

El concepto del mol es de vital importancia en la química, pues, entre otras cosas,
permite hacer infinidad de cálculos estequiométricos indicando la proporción
existente entre reactivos y productos en las reacciones químicas. Por ejemplo: la
ecuación que representa la reacción de formación del agua 2 H2 + O2 → 2 H2O
implica que dos moles de hidrógeno (H2) y un mol de oxígeno (O2) reaccionan
para formar dos moles de agua (H2O).
Otro uso que cabe mencionar es su utilización para expresar la concentración en
la llamada molaridad, que se define como los moles del compuesto disuelto por
litro de disolución y la masa molar, que se calcula gracias a su equivalencia con la
masa atómica; factor de vital importancia para pasar de moles a gramos.

El volumen de un gas depende de la presión, la temperatura y la cantidad de


moléculas del gas. Los gases distintos en condiciones iguales tienen la misma
energía cinética. Por consiguiente, dos gases distintos que estén a la misma
temperatura y presión ocuparan un mismo volumen. De lo cual se infiere que cada
uno de ellos debe contener la misma cantidad de moléculas. Y como un mol
contiene NA moléculas, un mol de cualquier gas tendrá el mismo volumen que un
mol de cualquier otro gas en la ya dicha igualdad de condiciones.

Experimentalmente se ha determinado que el volumen que ocupa un mol de


cualquier gas es de 22,4 l en condiciones normales. A este volumen se le llama
volumen molar del gas. El volumen molar es un cubo cuyas aristas miden, más o
menos, 28,2 cm.

La Definición De Mol. Desde la XIV Conferencia General de Pesas y Medidas,


celebrada en 1971, se adoptó el mol como unidad de cantidad de sustancia,
considerándose esta una de las siete magnitudes fundamentales del Sistema
Internacional.

Se define mol (n) como la cantidad de sustancia de un sistema que contiene


tantas entidades elementales como átomos hay en 0’012 kilogramos carbono-12.
Cuando se emplea el mol, las entidades elementales deben especificarse y
pueden ser átomos, moléculas, iones, electrones, otras partículas o agrupaciones
específicas de tales partículas.

ÁTOMO-GRAMO

Pensemos de nuevo en el agua, formada por dos átomos de hidrógeno más uno
de oxígeno. Si tuviéramos cuatro átomos de hidrógeno y dos de oxígeno,
podríamos formar dos moléculas de agua; con seis hidrógenos y cuatro oxígenos,
obtendríamos tres de agua… Manteniendo la misma proporción, podríamos
escoger una cifra lo suficientemente grande como para obtener una cantidad de
átomos o moléculas tal que sea apreciable y manejable. Es por ello que
necesitamos definir una unidad de medida proporcional al número de átomos o
moléculas y que, a su vez, se pueda relacionar con alguna magnitud fácilmente
medible en el laboratorio.

Así, surgió la idea de emplear ciertas cantidades en gramos para cada átomo o
molécula, denominadas átomo-gramo o molécula-gramo, respectivamente:

Un átomo-gramo es la cantidad de un elemento, expresada en gramos, que


coincide numéricamente con su masa atómica relativa.
Una molécula-gramo es la cantidad de un compuesto, expresada en gramos, que
coincide numéricamente con su masa molecular.

Siguiendo con el ejemplo del agua: un átomo-gramo de oxígeno es igual a 15’999


g, dos átomos-gramos de hidrógeno equivalen a 2’016 g, y una molécula-gramo
de agua es, en consecuencia, 18’015 g, es decir, la suma de los anteriores
valores. Evidentemente, los valores de un átomo-gramo o molécula-gramo varían
para cada elemento o compuesto, pero tienen la enorme ventaja de representar
siempre el mismo número de átomos o moléculas, por lo que representan
cantidades que guardan entre sí las mismas relaciones que la de los elementos y
compuestos a los que hacen referencia (un átomo-gramo de oxígeno se combina
con dos átomos-gramos de hidrógeno en cada molécula-gramo de agua).

NUMERO AVOGADRO

Un átomo-gramo (o molécula-gramo) representa una masa N veces más grande


que la masa atómica (o molecular) del elemento (o compuesto) al que se refiere:
NA = 602214779(30). 10 23

Por lo que N no es otra cosa que el número de átomos o moléculas contenidos en


un átomo-gramo o en una molécula-gramo, respectivamente. Este número se
conoce en la actualidad como constante de Avogadro, quien, en 1811, propuso
por primera vez que el volumen de un gas (a una determinada presión y
temperatura) es proporcional al número de átomos o moléculas,
independientemente de la naturaleza del gas.

El valor del número o constante de Avogadro, NA, determinado


experimentalmente, es: número-Avogadro

Así, tanto un átomo-gramo como una molécula-gramo, de la sustancia que sea,


contienen siempre el número de Avogadro de átomos o moléculas. Estos términos
de átomo-gramo y molécula-gramo fueron reemplazados, con el tiempo, por una
nueva unidad de cantidad de sustancia.

¿QUÉ ES LA COMBUSTIÓN?

La combustión es un tipo de reacción química exotérmica. Puede involucrar


materia en estado gaseoso o en estado heterogéneo (líquido-gaseoso o
sólido-gaseoso). Genera luz y calor y se produce de manera más o menos rápida.

Tradicionalmente, la combustión se entiende como un proceso de oxidación rápida


de ciertos elementos combustibles, o sea, constituidos principalmente por
hidrógeno, carbono y a veces azufre. Además, necesariamente tiene lugar en
presencia de oxígeno.

En realidad, las combustiones son formas de reacción redox (reducción-oxidación)


que se pueden producir tanto de manera controlada, como en los motores de
combustión interna, o descontrolada, como en las explosiones. Implican
intercambio de electrones entre los átomos de la materia durante la reacción. Por
eso, generan energía térmica y lumínica.

Además, dan como resultado otras sustancias gaseosas y sólidas, como el dióxido
de carbono (CO2) y el vapor de agua, o los residuos sólidos del combustible (la
sustancia consumida en la reacción) y del comburente (la sustancia que propicia la
reacción), de acuerdo siempre a su naturaleza química.

De este modo, aunque en la imagen tradicional de la combustión haya siempre


fuego involucrado, es posible que este no se genere, dado que no es más que una
forma de plasma (gas ionizado) fruto de la liberación de calor de la reacción
química.

Las combustiones son un tipo de reacción redox, es decir, reducción-oxidación.


Esto significa que en ellas un material se oxida (pierde electrones), mientras que el
otro se reduce (gana electrones).

En el caso de la combustión, el agente oxidante (oxígeno) obtiene electrones del


agente reductor (combustible), o lo que es lo mismo, entre el comburente y el
combustible. Esto se da generalmente según la siguiente fórmula:

Compuesto + O2 = Otro compuesto + CO2 + H2O + Energía

Los compuestos pueden variar, según sea su naturaleza, así como pueden variar
los niveles de energía. Pero el dióxido de carbono y el vapor de agua son
constantes en todo tipo de combustión.

TIPOS DE COMBUSTIÓN

Existen tres tipos de combustión, que son los siguientes:

Combustión completa o perfecta. Aquellas reacciones en las que se oxida


(consume) totalmente el material combustible, y se subproducen otros compuestos
oxigenados, como son el dióxido de carbono, dióxido de azufre o vapor de agua.

Combustión estequiométrica o neutra. Se denomina así a las combustiones


completas ideales, que emplean las cantidades justas de oxígeno para su reacción
y que ocurren, por lo general, únicamente en el ambiente controlado de un
laboratorio.

Combustión incompleta. Aquellas en que aparecen compuestos a medio oxidar


(llamados también inquemados) de los gases de combustión, tales como el
monóxido de carbono (CO), hidrógeno, partículas de carbono, etcétera.

Reacción de combustión. Los procesos de combustión comprenden en realidad un


conjunto de reacciones químicas veloces y simultáneas, que bien pueden
considerarse como una sola, que atraviesa las siguientes fases o etapas:

Pre-reacción o primera etapa. Los hidrocarburos presentes en el material


combustible se descomponen y comienzan su reacción con el oxígeno del aire,
formando así radicales, que son compuestos inestables molecularmente. Ello
inicia una reacción en cadena de aparición y desaparición de compuestos
químicos, tendiendo a crear siempre más de los que destruye.

Oxidación o segunda etapa. En esta etapa se genera la mayor parte de la energía


calórica de la reacción, a medida que el oxígeno reacciona con los radicales de la
etapa anterior, dándose así un proceso de desplazamiento violento de electrones.
Un número elevado de radicales conduce a una reacción masiva y violenta,
conocida como explosión.

Fin de la reacción o tercera etapa. Ocurre cuando se completa la oxidación de los


radicales y se conforman las moléculas de los gases liberados. El material
combustible se habrá agotado a su totalidad. Dentro de los motores ocurre la
combustión que libera la energía para el movimiento.

Algunos ejemplos simples de combustión en la vida cotidiana son:

• El encendido de un fósforo/cerilla. Es el caso más emblemático de


combustión. Cuando la cabeza del fósforo (cubierta de fósforo y azufre) se
raspa contra una superficie rugosa, se calienta por la fricción y
desencadena una combustión rápida, que a su vez produce una llama
breve.
• El encendido de una cocina a gas. Las cocinas domésticas funcionan
mediante la combustión de un gas hidrocarburo, generalmente mezcla de
propano (C3H8) y butano (C4H10), que el artefacto extrae de una cañería o
de un recipiente. Puesto en contacto con el aire, y provista una carga inicial
de energía calórica (como la llama del piloto, o la de un fósforo), el gas
inicia su reacción; pero para mantener la llama andando, debe
suministrarse combustible continuamente.
• Las bases fuertes y la materia orgánica. La mayoría de las bases fuertes
(hidróxidos) como la soda cáustica, la potasa cáustica y otras sustancias de
pH extremo, generan reacciones de oxidación violenta al entrar en contacto
con la materia orgánica. Esto significa que podemos quemarnos por
contacto e incluso iniciar incendios con ellas, dado que este tipo de
reacciones suelen ser muy exotérmicas.
• Los motores de combustión interna. Presentes en automóviles, lanchas y
otros vehículos que operan con combustible fósil como gasoil, gasolina o
keroseno, estos artefactos son un ejemplo de combustiones controladas.
En ellas se consumen los hidrocarburos del combustible y se generan
pequeñas explosiones que, dentro del sistema de pistones, se transforman
en movimiento, subproduciendo también gases contaminantes, que son
liberados a la atmósfera.
COMBINACIÓN DE SÍNTESIS

En los casos más simples, la reacción de síntesis tiene lugar cuando dos átomos o
moléculas diferentes interactúan para formar una molécula o compuesto distinto.

La mayoría de las veces, cuando se produce una reacción de síntesis, se libera


energía y la reacción es exotérmica. Sin embargo, también se puede obtener un
resultado endotérmico. Las reacciones de síntesis son una de las clases
principales de reacciones químicas, entre las que se incluyen las reacciones de
desplazamiento simple, las de desplazamiento doble y las de combustión, entre
otras. Una reacción de síntesis o reacción de combinación es un proceso
elemental en el que dos o más sustancias químicas reaccionan para generar un
solo producto. Elementos o compuestos sencillos que se unen para formar un
compuesto más complejo. La siguiente es la forma general que presentan este
tipo de reacciones:

A+B→C

Donde A y B representan cualquier sustancia química y C el compuesto resultante.


Algunas reacciones de síntesis se dan al combinar un óxido básico con agua, para
formar un hidróxido, o al combinar el óxido de un no metal con agua para producir
un oxi-ácido.

Ejemplos:

• Na2O(s) + H2O(l) → 2Na (OH)(ac)


• SO3(g) + H2O(l) → H2SO4(ac)
• CaO(s) + H2O(l) → Ca (OH)2(ac)

Otras reacciones de síntesis se dan al combinar un no metal con hidrógeno, para


obtener un hidrácido.

Ejemplo:

• Cl2(g)+ H2(g) → 2HCl(g)

La oxidación de un metal, también es una reacción de síntesis o de combinación.

Ejemplo:

• 4Na(s) + O2(g) → 2Na2O(s)

DESCOMPOSICIÓN

La descomposición química es un proceso que experimentan algunos compuestos


químicos en el que, de modo espontáneo o provocado por algún agente externo, a
partir de una sustancia compuesta se originan dos o más sustancias de estructura
química más simple. Es el proceso opuesto a la síntesis química.
La ecuación química de una descomposición es:

AB → A + B, o bien, Reactivo → A + B + ...

Ejemplo:

• 2KClO(s) → 2KCl(s) + O2(g)

Un ejemplo específico es la electrólisis de agua que origina hidrógeno y oxígeno,


ambos en estado gaseoso:

• 2 H2O (l) → 2 H2 (g) + O2 (g)

La descomposición química es, con, una reacción química no deseada, pues la


estabilidad de un compuesto es siempre limitada cuando se les expone a
condiciones ambientales extremas como el calor, la electricidad, las radiaciones, la
humedad o ciertos compuestos químicos (ácidos, oxidantes, etc.). Los casos más
frecuentes de descomposición son la descomposición térmica o termólisis, la
electrólisis y la hidrólisis. La descomposición química total de un compuesto
origina los elementos que lo constituyen.

Una definición más amplia del término descomposición también incluye la


separación de una fase en dos o más fases.

Procesos de descomposición

Salvo en los casos de moléculas muy pequeñas, el proceso de descomposición


es, en general, muy complejo y no está bien definido. Es muy frecuente que una
molécula pueda dividirse en un conjunto de fragmentos más pequeños, con
diferentes modos de separación. Esta característica es utilizada en ciertas
técnicas analíticas, sobre todo la espectrometría de masas, el análisis gravimétrico
tradicional y el análisis termogravimétrico. Se somete a un compuesto a un
proceso de descomposición y se analizan los fragmentos resultantes; tras su
reconocimiento se puede inferir la estructura de la molécula inicial.

Dentro de este tipo de complicados procesos de descomposición se encuentran


los procesos de formación del suelo en los que se va disgregando y transformando
la roca madre; la descomposición de restos biológicos (residuos de animales y
plantas...) que convierten las complejas moléculas orgánicas en unidades más
sencillas que pueden ser de nuevo asimiladas por los organismos vivos (véase
ciclo del carbono); o los procesos que intervienen en la digestión en la cual los
nutrientes se destruyen en sustancias más simples capaces de ser asimiladas por
las células.
La descomposición química es, con, una reacción química no deseada, pues la
estabilidad de un compuesto es siempre limitada cuando se les expone a
condiciones ambientales extremas como el calor, la electricidad, las radiaciones, la
humedad o ciertos compuestos químicos (ácidos, oxidantes, etc.). Los casos más
frecuentes de descomposición son la descomposición térmica o termólisis, la
electrólisis y la hidrólisis. La descomposición química total de un compuesto
origina los elementos que lo constituyen.

Una definición más amplia del término descomposición también incluye la


separación de una fase en dos o más fases.

SUSTITUCIÓN SIMPLE

Una reacción química es el contacto entre dos o más sustancias químicas que
reaccionan entre sí para formar sustancias diferentes. Un tipo de reacción que se
produce es la de simple sustitución. 10 ejemplos de reacciones de simple
sustitución son: 2HCl+ Zn = ZnCl₂ + H₂

Ejemplos de reacciones de simple sustitución:

Una reacción es de simple sustitución cuando un elemento de un compuesto es


sustituido por otro.

1) HCl + Na → NaCl + H₂
2) H₂SO₄ + Li →Li₂SO₄ + H₂
3) HBr + K → KBr + H₂
4) H₂S + Ag → Ag₂S + H₂
5) H₃PO₄ + Al → AlPO₄ + H₂
6) HI + Ca (OH)₂ → CaI₂ + H₂O
7) H₂Te + LiOH → Li₂Te + H₂O
8) HF + Pt → PtF₂ + H₂
9) HNO₃ + Cu → CuNO₃ + H₂
10) H₂CO₃ + Cs →Cs₂CO₃ + H₂
SUSTITUCIÓN DOBLE

Ejemplos de Reacción de Doble Sustitución

Química General → Reacciones Químicas → Doble Sustitución

Las Reacciones de Doble Sustitución de Doble Desplazamiento o de Metástasis,


son aquellas en las que dos elementos que se encuentran en compuestos
diferentes intercambian sus posiciones formando dos nuevos compuestos según
la siguiente fórmula:

AB + CD → CB + AD

donde los elementos A y C intercambian posiciones.

Nota: estas reacciones no experimentan cambios en los números de oxidación de


los elementos por lo que no son Reacciones Redox.

Ejemplos de Reacciones de Doble Sustitución:

Reacciones de Ácido-Base:

• HCl + NaOH → NaCl + H2O

Reacciones de Precipitación:

• AgNO3 + NaCl → AgCl + NaNO3


• Pb (NO3)2 + 2KI → PbI2 + 2KNO3

Otros ejemplos:

1) Pb (NO3)2 + K2CrO4→ PbCrO4 + 2KNO3


2) KCl + AgNO3 → KNO3 + AgCl
3) K2S + MgSO4 → K2SO4 + MgS
4) CaF2 + H2SO4 → CaSO4 + 2HF
5) CaCO3 + 2HCI → H2CO3 + CaCI2
6) KOH + CINH4 → KCI + NH3 + H2O

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