FORMATO PARA EL ANÁLISIS DE LA PROBLEMÁTICA

TÉCNICA DE LOS SEIS SOMBREROS PARA PENSAR

Nombre del estudiante: Diana Yanira Encinosa moreno

Grupo al que pertenece: 40002_708

Problemática objeto del análisis:

La problemática expuesta consiste en la crisis que está pasando la ética en la sociedad

colombiana. Lo grave es que nos han puesto una venda que no nos deja ver la sociedad, expuesto

en la lectura como filtros que evitan que ingrese esta realidad a nuestra conciencia colectiva. Nos

han manipulado haciéndonos creer que no podemos reestructurar nuestro estado, porque podemos

desestabilizarnos, no han llevado a la mediocridad de pensar, hay países peores cuando no debe

ser así. Nos han hecho creer que la ley es ley y hay que acatarla pero ni siquiera han contado con

nosotros para construir esa ley. Nos han llevado a creer que no podemos ser mejores, que la

pobreza extrema siempre va a existir y la desigualdad no se puede eliminar. Han clasificado al

país en tres clases, media, baja y alta, la baja es aquella que vive prácticamente en pobreza

extrema, pero para el gobierno, viven bien, con necesidades pero tiene lo básico, la media es

aquella que está bien, incluso han realizado estadísticas con los “ingresos” de alguien de clase

media cuando no es así, son personas con necesidades también, y la alta que a la que solo pueden

pertenecer los gobernante y empresarios. Han querido apagar nuestros sueños, haciéndonos creer

que en nuestro país no podemos progresar, que ganar un mínimo y estar vivo está bien y es “vivir

bien”. Nos hablan de democracia pero no cuenta nuestra opinión, lo que vemos es demagogia y
hemos creído todo lo que nos han dicho. Nos hablan de libertad, de publicidad de información,

pero manipulan los medios de comunicación para que nos muestren la cara de la moneda que les

conviene, pero no la realidad de nuestro país. Han poco a poco construido con cada uno de

nosotros una sociedad envenenada, llena de odio, de envidia y hemos olvidado la ética, los

principios y los valores.

Para quitarnos esa venda o filtro, debemos hablar de la ética como una ciencia o cómo una ética,

la cual, termina siendo datos que son sentimientos y emociones que no se poseen, ya que el hecho

de poseerlas es un hecho científico. Podemos decir entonces, que el componente fundamental de

la ética es el deseo o sentimiento libre de cualquier imposición.

También debemos ver la concepción subjetiva de la razón, que básicamente se forma en la

capacidad de clasificar, inferir y deducir contenidos.

Para finalizar, vemos los rasgos de la ética que va configurando víctimas, la cual debe estar

fundada en el sentimiento, en el deseo de ser una humanidad más solidaria. Vemos consigo la

ética “anamnética” la cual se encuentra construida sobre imágenes, relatos, y recuerdos que

despiertan emociones y sentimientos y la ética solidaria desinteresada, la cual se relaciona con

esas personas que ya no están, los sentimientos de las que quedaron con el sin sabor ya que a

muchos de sus seres queridos no se les permitió siquiera vivir.

Este tema es de ámbito global, porque todo esto se ha perdido en todo el mundo. La corrupción

no existe en todo el mundo, sin embargo, hay que aclarar que en algunos lugares es más evidente.

No podemos comparar los países porque cada uno de ellos es diferente, sin embargo, todos están
compuestos por personas y aunque de igual manera somos diferentes, tenemos un mismo creador.

Somos personas conscientes de sus acciones, que razonan, saben de lo bueno y lo malo, y a mi

percepción cada uno puede tomar la decisión de aportar algo a la sociedad o simplemente ser uno

más dentro de ella.

Es cierto que la ética es del sentir, pero también incluye el saber y el conocer, la cuál se encuentra

lamentablemente enmarcada por el dolor, la tristeza, debido a que hay situaciones que solo

pueden sentir u cosas que solo pueden ver los ojos que las han llorado. Solo a través del dolor de

los demás, podemos lograr ver la realidad. Cuando alguien perteneciente a nuestro núcleo social

es afectado, es cuando vemos la realizas en la que vivimos, sin embargo, podemos mejorar. Es

cuestión de que cada uno razone sobre qué acciones de mejora podríamos tomar, y aplicarlas

inicialmente en nuestro entorno, de esta manera, iremos poco a poco mejorando el país. No

debemos perder la esperanza de un mejor mañana, por algo dicen que “la esperanza es lo último

que se pierde”.
 SEIS SOMBREROS PARA PENSAR
(Eduard De Bono, 1985)

Antes de realizar el análisis de la problemática propuesta por su tutor(a), el

estudiante debe documentarse previamente de otras fuentes, con la finalidad de
profundizar sobre el tema y conocer aspectos como: origen del problema, a quiénes
afecta, cómo ha evolucionado el problema, cuáles han sido sus consecuencias e
impactos (ejemplo cifras, estadísticas), etc.

Los colombianos estamos en un momento caracterizado por pesimismo,

polarización, rabia, y muchos sentimientos encontrados por todo lo que sucede

en el país.

Los escándalos por corrupción son el pan de cada día. Surgen por noticias

cómo “capturan a un fiscal anticorrupción”, los carteles de los jueces, vínculos

de funcionario públicos con bandas criminales, el caso de Odebrecht, reficar,

los problemas en la ejecución del acuerdo con las Farc y un sin fin de

escándalos que evidencia la crisis en la que se encuentra la ética. Adicional a

esto, en redes sociales también existen batallas verbales que se caracterizan por

falta de información y agresividad entre las partes, lo que evidencia que

estamos en una crisis y está afectado el ánimo colectivo.

La crisis generada en la ética, no es de ahorita, es de mucho tiempo atrás.

Es evidente que en todo el mundo hay o existe corrupción, sin embargo, en

Colombia, no es sólo la corrupción, sino lo que la misma genera, violencia,

injusticia, y todo esto lleva a que cada ciudadano pierda su fé en su mismo

Estado. Por ello, día a día escuchamos, “así es la justicia en este país”, “la

justicia en este país nunca llega” e innumerables frases que parecen de cajón

pero esconden una dura realidad de fondo. Y es todo ese dolor causado a

muchos ciudadanos al ver sus derecho vulnerados incluso por el mismo Estado.

Desde 1960 la violencia ha sido justificada. Se volvió aceptable para los

revolucionarios, con frases como “si la sociedad es injusta, la violencia armada

de justifica”. Todo esto contribuyó a que desde 19788 en entidades como

Policía Nacional o Ejército Nacional se ejerciera tortura y asesinatos de

dirigentes populares. También es importante recordar la época en la que el

narcotráfico prácticamente mandaba en nuestro país.

La sociedad civil rural fue muy afectada, con los desplazamientos forzosos

incluso por agentes del mismo gobierno. El derecho de la autodefensa era

limitado y muchos no tenían ni voz ni voto.

Posteriormente, para la Constitución del 1991, la justicia dejó de ser efectiva.

Los medios de comunicación jugaban con la información manipulando la

mente de los colombianos. Salían primeras páginas de noticias sobre batallas

que “ganaba” la Fiscalía, en donde señalaban, juzgaban y judicializaban los

culpables, no obstante, 1 o 2 años después quedaban en libertad.

Todo esto ha contribuido a que nuestra ética entre en crisis y a que los

ciudadanos crean en todo menos en su mismo Gobierno. Debemos entender que

las leyes requieren una moral y las leyes globales exigen una ética compartida.

Existen cuatro valores, compartidos por las principales religiones mundiales: la

no-violencia y el respeto supremo de la vida; la justicia y un orden económico

justo; la veracidad y la tolerancia; así como la alianza y la equidad jurídica

entre hombres y mujeres.

Estos valores van a contribuir con la lucha por superar esta crisis, es cuestión

que cada uno de nosotros empecemos a hacer el cambio, dentro de nuestro

pequeño núcleo social, nuestras familias y nuestra sociedad. De esta manera,

veremos cómo poco a poco mejoraremos. Seremos mejores personas y haremos

mejores cosas pensando nos solo en el interés individual, sino en el general.

El problema fundamental de la crisis es la corrupción, la cual según lo expuesto

ha existido hace mucho tiempo, sin embargo, con el avance de la tecnología y

demás, hemos podido enterarnos de unos de los muchos casos que han existido

y existen en la actualidad.

Hay que recordar que somos uno de los países más desiguales del mundo, esto

generado por el interés individual y no general que ha tenido en Estado para

con nuestra sociedad. El Estado tiene como prioridad al sector privado, por lo

cual, muchos de los demás sectores se ven afectados pues es evidente el

“privilegio” que algunos obtienen y esto genera un entorno propicio a la

corrupción, además de dejar en mala imagen al Estado, pues lo muestra como

un ente débil, sin embargo, es quien gobierna y administra el país.

El capitalismo trasnacional con sus prácticas como soborno, cohecho, uso de

información privilegiada, tráfico de influencias, falsedades en financiación de

campañas electorales y demás, optan por aumentar en gran forma la corrupción

del país, generando así, reitero, la pérdida de la esperanza y confianza de los

ciudadanos en el estado, y es aceptable esta posición ya que durante años se han

vulnerados sus derechos y a muchos no les ha llegado “justicia” por ello, estas

cosas suceden y a la vez hacen que la problemática crezca aceleradamente

generando oportunidades para hacer más cosas indebidas, las cuales ya han sido

expuestas anteriormente.

Respecto al tema, considero pertinente hablar sobre la situación en la que

estamos, una pandemia que aunque a muchos los ha llenado de miedo y los ha
afectado en varios factores, considero personalmente ha cooperado mucho con

la ética.

El vernos en una situación tan fuerte cómo ha sido, estar en cuarentena durantes

los últimos meses, en algunos casos ha sacado lo mejor de nosotros como

personas, valorando y disfrutando por primera vez las pequeñas cosas, como un

amanecer, la familia, incluso el saludo de algún vecino o allegado. En medio de

la crisis, no solo en el área de la salud sino económica, vemos la afectación que

genera en las personas a nivel emocional, pero también vemos cómo ha sacado

a flote la generosidad y solidaridad de algunas personas. Considero que esto ha

aportado mucho a que mejoremos como sociedad, a que no pensemos solo en

nosotros mismos sino en el prójimo y todas estas acciones componen la ética

que debemos tener cada uno de nosotros como integrantes de un núcleo

llamado sociedad.

Quiero recalcar que es sumamente importante entender que debe primar

siempre el bien común, de esta manera prevalecerán los derechos de las

personas y se mejorará el ambiente y el entorno.

Por último, quería mencionar el uso de las redes sociales, si bien es cierto, en

ocasiones no se usa de la mejor manera, en otras sí. Hoy día es muy difícil que

los medios de comunicación manipulen la información (aún lo hacen) ya que

estamos continuando enterados por publicaciones de las mismas personas en

redes sociales. Vemos denuncias, fotos, videos de un gran número de

injusticias, delitos, omisiones y demás que se cometen a diario, por parte del

Estado, sus empresas o incluso sus funcionarios. Considero que algo positivo es

el uso adecuado de las redes, sí entre todos nos colaboramos podemos mejorar,

como personas, como ciudad, como departamento y como país.

El Pacto Mundial de la ONU, puesto en marcha por su secretario general Kofi

Annan en 1999, el cual ofrece un punto de partida de gran valor. Ha sido ya

suscrito por más de 5.200 participantes corporativos y stakeholders de más de

130 países. Plantea exigencias para el comportamiento corporativo en una

economía globalizada, sin embargo, son de gran relevancia respecto a la crisis.

Estas son:

1. respetar y apoyar los derechos humanos

2. aplicar normas del trabajo responsables

3. proteger el medioambiente de acuerdo a un principio preventivo

4. luchar contra la corrupción en todas sus formas.

La idea es que en todas las sociedades conformadas, incluyendo sus culturas y

religiones, es indispensable que cada persona que la conforme, reconozca y

acepte un pilar básico, que les permita vivir en armonía, pacíficamente sin

renunciar a sus intereses individuales. A este respecto, el contenido del Pacto

Mundial de la ONU tiene un alto grado de coincidencia con las ideas de la

declaración “Hacia una ética mundial” del Parlamento de las Religiones del

Mundo reunido en Chicago en 1993. Ha sido confirmado por la propuesta de

una “Declaración Universal de Responsabilidades Humanas” del Consejo

Interacción, y por el manifiesto “Puentes hacia el futuro. Diálogo de las

culturas”. Partiendo de la Declaración de Chicago, el nuevo manifiesto, “Para

una ética económica global Consecuencias para las empresas globales”,

pretende apoyar el Pacto Mundial desde el ángulo de la ética. Dicha ética, debe

basarse en los principios de humanidad, reciprocidad y en los valores de la no

violencia, equidad, veracidad y colaboración.

La declaración “Hacia una ética mundial” identificó dos principios básicos que

subyacen a todos los valores y normas éticos: la humanidad y la reciprocidad.

Cuando este se aplica el principio de la humanidad, cambia la situación en

cualquier escenario, puede ser trabajo, escuela, universidad, sociedad, etc. Lo

importante es que cada ser humano, sin importar si es hombre o mujer, blanco o

negro, rico o pobre, feo o bonito, se deberá tratar humanamente, con respeto y

el principio de la “reciprocidad”, se halla en las tradiciones religiosas, bíblicas

y demás, mejor conocido como: “Lo que no desees que te hagan a ti, no lo

hagas a otros”.

La aplicación de estos dos principios harán que cada persona mejora en el

ámbito personal y a su vez, aporte esa mejora a la sociedad, de esta manera

mejoramos como país. Debemos crear compromisos de respeto hacia las

culturas, hacia la no violencia, hacia la equidad, la tolerancia, la colaboración,

la igualdad de derechos y oportunidades y un orden económico justo.

Recordemos que somos un país con un estado social de derecho.

Partiendo de que a la sociedad la componemos nosotros como ciudadanos,

como personas, considero que lo mejor para superar esta crisis es el trabajo con

nosotros mismos como personas, como esposos, hijos, hermanos, amigos, y

ciudadanos. Si trabajamos desde nuestra casa, criando niños y niñas con ética,

valores y principios claros, tendremos personas que le aporten a la sociedad. De

esta manera, cuando estos niños sean grandes, podrán entender mejor todo,

comprenderán que no está bien vender un voto, elegirán un mejor gobernante,

ya sea alcalde, gobernador, presidente, y consigo mejorará todo. Necesitamos

un líder, alguien que nos guíe y nos haga valer nuestros derechos, necesitamos

a alguien que entienda que el estado debe trabajar para cada uno de los

colombianos y no estar en contra de ellos. Necesitamos a alguien que

comprenda que el país somos todos, no solo los gobernantes, y con ellos,

lograremos poco a poco cambiar nuestra sociedad y así, evitar los escándalos de

corrupción, las injusticias, la violencia ejercida incluso por el gobierno, y el sin

fin de actos que lo único que hacen es que poco a poco se pierda la ética, lo

valores, y los principios que debe tener claro cada integrante de una sociedad.
Referencias Bibliográficas (Normas APA)

Portada. (2017, Agosto 7). ¿En qué momento se acabó la ética en Colombia?.

Semana .https://www.semana.com/nacion/articulo/seis-academicos-reflexionan-sobre-la-crisis-

etica/531795

Küng, H., "La crisis económica global hace necesaria una ética global", en Valores y Ética para el

siglo XXI, Madrid, BBVA, 2011.

https://www.bbvaopenmind.com/articulos/la-crisis-economica-global-hace-necesaria-una-etica-

global/

United Nations Global Compact. Pacto Mundial de Naciones Unidas.

https://www.pactomundial.org/wp-content/uploads/2018/02/Flyer-New-Strategy-GC-

2018_20180126.pdf