contagio, los velatorios y sepelios en Guatemala se celebran con pocas personas y no se admiten ni menores, ni adultos mayores.
La cremación es casi inaccesible para la
mayoría de las familias por su alto costo. La recomendación de distanciamiento social para evitar el contagio del COVID- 19 también se aplica a los velatorios y sepelios en Guatemala.
Ante el hecho, la Asociación de
propietarios de funerarias ha emitido medidas sanitarias, como las restricciones al número máximo de asistentes a los velorios. Aunque otros países aplican la cremación a los fallecidos por el nuevo coronavirus, en Guatemala solo existen dos crematorios privados y cada procedimiento tiene un costo aproximado de 2.000 dólares, por lo cual se convierte en una opción casi inaccesible para el público. Factor religioso
La población guatemalteca es altamente
creyente y practica alguna religión. La población guatemalteca, además de ser muy religiosa, es una sociedad con grandes desigualdades, desempleada, desnutrida, pobre, y ello se debe, entre otros factores, a la debilidad de sus instituciones públicas, a la corrupción, a la impunidad, a la falta de un Estado que atienda las necesidades fundamentales de su población. La fe de los creyentes es importante tanto como claridad en que deben demandar a sus gobernantes aquello que es obligatorio, necesario y urgente para el país. Solo así se podrá decir que Guatemala además de ser un país, religioso, es sano, escolarizado y que garantiza el respeto pleno de los derechos de sus ciudadanos. La religión se convierte en un alivio, en un consuelo ante situaciones de pobreza y ayuda espiritual.